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chust anticolonialismo cortes de cadiz

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Universidad Nacional Autónoma de México
University of California Institute for Mexico and the United States
De esclavos, encomenderos y mitayos. El anticolonialismo en las Cortes de Cádiz
Author(s): Manuel Chust Calero
Source: Mexican Studies/Estudios Mexicanos, Vol. 11, No. 2 (Summer, 1995), pp. 179-202
Published by: University of California Press on behalf of the University of California Institute for Mexico
and the United States and the Universidad Nacional Autónoma de México
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De esclavos, encomenderos y mitayos.
El anticolonialismo en las Cortes de Cadiz*
Manuel Chust Calero
UniversidadJaume I de Castell6n. Espafla
This article analyzes three of the most important anticolonial proposals
discussed in the Cortes of Cadiz. Backed by the American deputies, former
colonials, participating for the first time in a liberal parliament in the former metropolis, the anticolonial proposals and decrees would not only
have a revolutionary impact in America, but also in Spain during this historic period of change, 1808-1814.
Es conocido. Si bien escasamente estudiado y valorado. Nos
referimos a las Cortes de Cadiz y la trascendencia que tuvo para
Espana y America la interrelaci6n de sus diputados, es mas, de sus
procesos revolucionarios burgueses. Hasta el momento se ha estudiado el periodo y su significaci6n y trascendencia para Espaiia.
Tambien hay monografias de los diputados mas sobresalientes, estudios de los decretos mas trascendentes, analisis locales, etcetera.
Respecto a America sucede tambien. A menudo es interpretada la
participaci6n de los diputados americanos en Cadiz como los precedentes de la revoluci6n de independencia. Incluso ignorados por la
historia oficial que hace tabla rasa del pasado espaiol.
Sin embargo, durante casi cuatro anos las Cortes espanolas integraron a representantes de todos sus territorios en calidad de
igualdad. Era la primera vez en la historia que un Estado llevaba tal
mixima liberal a la practica. En ellas se sancionara un texto constitucional promulgado en Espaia y en varias partes significativas e
importantes de America. Carta magna condicionada, elaborada y
*Quisieraagradecerla inestimableayudaque he tenido en los profesoresJaime
E. Rodriguezy VirginiaGuedeaa la horade elaborareste texto con sus sugerenciasy
comentarios.A ellos mi agradecimiento.
Mexican Studies/Estudios
Mexicanos
11(2), Summer 1995. ? 1995 Regents of the University of California.
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MexicanStudies/ EstudiosMexicanos
discutida por espaioles y tambien por americanos. Y Constituci6n
condicionada, influida y mixtificada por las realidades espanolas y
americanas que se querian transformar asi como aquellas que se
querian conservar mixtificadamente. Sin embargo, nuestro prop6sito
en este articulo no es entrar en los pormenores del texto constitucional sino en los decretos, autenticamente anticoloniales, que se
elaboraron y sancionaron, o propusieron y desaparecieron en alguin
caso, y que actuaron como precedentes y antecedentes de la Carta
Magna doceaiista. Aspecto fundamental que quiza se ha estudiado
con menor profundidad, reiteremoslo una vez mas: la autentica interrelaci6n dialectica entre ambos mundos en el cosmos legislativo y
revolucionario gaditano. Paraello nos centraremos en las propuestas
abolicionistas de cuatro grandes aspectos coloniales americanos,
como fueron la encomienda, el reparto, la esclavitud y la mita.
La encomienda,
iy los encomendadores?
El 12 de marzo de 1811 se leia un dictamen de la Comisi6n
Ultramarina en el que se explicaba la puesta en vigor por parte del
virrey de Nueva Espana, Francisco Javier Venegas, de un antiguo
decreto de la Regencia para suprimir el tributo personal de los indios.
Decreto virreinal que contemplaba, ademas, extenderlo a mulatos y
castas. Medidas que estaban inscritas dentro de la estrategia politica
de Venegas para contrarrestar, no s6lo con las armas, la insurgencia
de Hidalgo.
Entre ellas, la proposici6n quinta contemplaba una indemnizaci6n a encomenderos y altos funcionarios de la administraci6n, para
tratar de resarcirles de las perdidas que suponia la abolici6n del
tributo en las encomiendas, medios reales y ministros.
La propuesta del virrey novohispano fue totalmente reconducida
y transformada por un astuto, como veremos, Manuel Garcia
Herreros. Procurador general del reino, este diputado castellano se
mostraba como un consumado especialista en cuestiones antiseioriales. No era gratuito su doctorado en ambos derechos. Tampoco lo era
su participaci6n en esta ocasi6n.
Garcia Herreros exigi6 a los encomendadores americanos lo que
anos mas tarde la camara gaditana pedira a la nobleza espaiola: que
presentaran, para poder ser indemnizados, los titulos de su encomienda.1 Resaltemoslo. Era un diputado por Soria quien apelaba
contra los titulares de una instituci6n que, aunque con origenes
castellanos, estaba tremendamente extendida en America.
1. Como es conocido, los posterioresdecretos aclaratoriosdel 6 de agosto de
1811 exigiranlos titulos a la nobleza espafiolaparapoder ser indemnizadoso para
poder quedarsecon sus tierras.
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Aun mas. Los diputados americanos no participaron en la cuesti6n. No hubo ningun parlamento. eQue es lo que pasaba? La
cuesti6n colonial desde el aspecto encomendero estaba planteada.
Vertiente antiencomendera que planteaba jun diputado espafiol!
Tras Garcia Herreros, fue Vicente Pascual, can6nigo penitenciario
y diputado por la ciudad de Teruel, quien no tard6 en reclamar un
trato similar para los comendadores en la peninsula. Magnifica estrategia parlamentaria la de este grupo liberal.
Es conocido. A partir del siglo XVIII la encomienda ira proAsi en 1701 se decreta la ingresivamente
desapareciendo.
a
la
de
todas
las encomiendas que estuvieran
corporaci6n
monarquia
concedidas a personas que no residian en America. Por uiltimo, se
derog6 definitivamente en los reales decretos de 12 de julio de 1720
y 11 de agosto de 1721. Derogaci6n que a menudo es explicada por
motivos demogrificos.
No obstante, el historiador del derecho Bartolome Clavero2 inlas razones de su desaparicion
dag6, trascendentalmente,
y
sustituci6n. Autor que ve en la presion centralizadora de la corona su
de rentas sobre tributos o cajas de la
respuesta: la consignacion
corona. Nosotros vemos ain otra: el papel de asunci6n del dominio
util, cedido a los encomenderos por la corona, y que ahora revierte
de nuevo a esta. Asumido por funcionarios reales, los corregidores.
eCual es la explicaci6n para Clavero?
En Castilla, por tanto, las casas poseian con caracter perpetuo, en sus
mayorazgos, rentas indianas, teniendo en ellas, ademaisde la perpetuidad que
no cabia juridicamente en la titularidaddirecta de encomiendas, la seguridad
que supone que la renta no se encuentre afectada a unos tributarios determinados, sino que se reciba de una caja real con independencia de sus ingresos
efectivos.
...En Indias, el estado feudal acab6 asumiendo directamente la relaci6n
de producci6n feudal entre propietario y trabajador;las dificultades presentadas en la explotaci6n indiana impusieron dicha situaci6n; para los
mayorazgos, entonces, las rentas feudales no se reali7abandirectamente (caso
de los derechos sefioriales castellanos-con o sin jurisdiccion-), sino que se
realizaban como derecho de participaci6n en las rentas de la corona o del
estado feudal castellano, derecho reconocido por este en la concesi6n o
consignaci6n del mismo.
S6lo de este modo, ademas, pudo realizarse la inclusi6n en los mayorazgos castellanos de las rentas de encomiendas (...) como rentas de
encomiendas hemos visto que aparece la consignaci6n de renta del marquesado de la Conquista en la Caja de Lima; como renta de una encomienda
determinada no podia incluirse en un mayorazgo, dada la ley de sucesi6n
limitada de aquella; como tal tampoco podia interesarle al mayorazgo caste2. Bartolome Clavero, Mayorazgo (Madrid: Siglo XXI, 1989).
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llano, dada la ocupaci6n y el riesgo de la gesti6n de una encomienda; esta
quedaba como funcion propia del estado feudal imperialista.3
Asi, pues, a la altura de 1811, tras casi noventa anos desde la
desaparici6n, al menos legal, de la encomienda, la nobleza castellana
especialmente, seguin Clavero, seguia obteniendo excedentes indianos a traves de la consignacion de rentas. Importante y revelador
este aspecto. Siguiendo la tesis de Clavero, se puede explicar el
desmedido interes de Garcia Herreros, castellano el, por exigir los
titulos a los encomenderos jamericanos! Con ello, el ataque aqui se
revela contra la propia nobleza espaflola, que era quien fundamentalmente recibia estas rentas indianas.4
La intervenci6n de Garcia Herreros no nos parece gratuita. No lo
son ninguna de ellas a lo largo de la intensa legislatura gaditana.
Suponia que desde la vertiente americana se estaba desmontando el
sistema colonial y, al mismo tiempo, jaspectos del regimen senorial
espaiol! Reiteremoslo. Garcia Herreros era conocedor, magnifico
conocedor, de la realidad sefiorial espanola, pero tambien de la
americana. Lucas Alaman sefiala que Garcia Herreros estuvo catorce
anos en la ciudad de Mexico, estudiando y trabajandoal lado de su tio
el conde de Agreda.5Tiempo suficiente para conocer pormenores de
la realidad social novohispana y ademas desde una perspectiva
nobiliaria.
iPero'y los diputados americanos? eCuales fueron sus posturas?
Estos contemplaban la encomienda como una instituci6n de explotaci6n del trabajo indigena en declive desde el siglo XVIII. Era la
abolici6n de otras instituciones coloniales, como veremos, lo que les
preocupaba mas: la mita, el reparto, el tributo indigena, incluso la
abolici6n del trnfico de esclavos. Reclamaciones anticoloniales que
recogeran los movimientos independentistas en sus proclamas para
atraerse a las clases populares indigenas a la revoluci6n de
independencia.
3. Ibid., 203-04.
4. Entreellos se encuentranel mayorazgodel marquesde la Conquistacon mas
de 20.000 indios en el Peri y que renunci6 a cambio de 9.000 pesos anuales. El
marquesadode Valverdey Caracena,descendientesde PedroPizarro,con 9.000 pesos
anuales,el marquesadodel Vallede Oaxaca,fundadopor Hernin Cortes,con mas de
80.000 pesos anuales,PedroAlvaradocon 6.000 pesos anuales,Franciscode Altamirano, con rentas de 30.000 pesos anuales,el ducado de Atlixco con mis de 4.000
pesos anuales,el ducadode Buornonvillecon 6.000 pesos anuales,el conde de Gages
con 4.000 pesos anuales, Sim6n de Anda y Salazarcon 3.000 pesos anuales, son
algunos de los nobles citados por Bartolom6Claveroque transformaronsus encomiendasen rentasindianasperpetuas.
5. Lucas Alaman,Historia de Mejico desde los primeros movimientos que
prepararon su tndependencia en el ano de 1808 hasta la 6pocapresente, 5 vols.
(Mexico:Fondo de CulturaEcon6mica,1985), 1:124.
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ChustCalero:Anticolonialismoen las Cortesde Cadiz
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La jugada de los diputados liberales era maestra. Se exigia la
presentaci6n de titulos a los encomenderos para que el Estado pudiera indemnizar a sus propietarios. Un Estado que se prefiguraba
nacional, y no real. Pero los encomenderos, nobles o particulares, no
podian presentarlos por carecer de ellos, o porque al no conseguir de
la corona mas que la vinculaci6n fuera por "dos vidas sucesorias"
habian perdido este derecho. Y lo que es mas importante, el dominio
util que suponia la instituci6n encomendera volvia a revertir a la
corona. Dominio util que comportaba tambien los indios vacos que
permanecian sin encomendador. Es decir, tierras e indios que se
reincorporaban al patrimonio real.
Este aspecto, con todo importante, cobraraiuna transcendencia
insospechada tras el decreto de 6 de agosto de este mismo aiio sobre
la abolici6n de los sefiorios, al decretar las Cortes la nacionalizaci6n
de los derechos jurisdiccionales. Por lo que este famoso decreto
peninsular se revela aun mas trascendental si pensamos que los
"senorios jurisdiccionales" no solo eran los mixtificados derechos
jurisdiccionales espaiioles sino toda la jurisdicci6n y posesi6n, en
cuanto a patrimonio real, que la corona tenia en sus territorios
americanos. Las Cortes nacionalizaban, expropiaban, a la corona
TODO UN CONTINENTEAMERICANO.Si este decreto suponia la
abrogaci6n del regimen seniorial en la peninsula, aun con mixtificaci6n incluida, se revelaba tambien como una apropiaci6n de la
corona en sus posesiones americanas.
Tesis que nos conduce a otro aspecto del problema. Aquel que
explicaria el afin conspirativo de Fernando VII por defender sus
intereses absolutos como monarca, lo que conllevaria el recuperar
una America que se habia declarado independiente y que, ademas, las
Cortes gaditanas trataban en terminos de igualdad politica. Su reincorporaci6n se presentaba como vital para la monarquia. No nos
extraiia pues el hincapie fernandino por reconquistar America ademis de derribar el regimen constitucional. Tanto la insurgencia como
el autonomismo gaditano iban en contra de sus intereses. Fernando
VII no solo estaba defendiendo la viabilidad de su reinado, por las
remesas que llegaban de ultramar,defendia sus propiedades tambien
en America, claro.
De esta forma la camara aprob6 la proposici6n de Garcia Herreros, agregando la siguiente adici6n:
Que deberanremitirlos encomenderoslos titulosoriginalesde la adquisicion de las encomiendas6 testimoniosde ellas.6
Una reflexion mais.Si la nobleza recibia por esta via de consigna6. Diarto de sesiones de Cortesgeneralesy extraordinarias,8 vols. (Madrid:J.
A. Garcia, 1870), 13 de marzo de 1811, 2:675.
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cion de rentas sobre tributos rentas indianas, la suerte de America
volvia a cobrar otra dimensi6n para la propia explicacion de la revoluci6n burguesa espaiiola. El mantenimiento colonial de America seria
trascendental, no solo para la burguesia espaiola, como se ha venido
manteniendo fundamentalmente hasta ahora, sino tambien para la
nobleza porque era una fuente de rentas complementarias de sus
excedentes seiioriales espaiioles. Ello contribuye a explicar la tenaz
resistencia de la nobleza espanola para hacer frente a la consumaci6n
de la revoluci6n.
La abolicion del reparto.
La actividad anticolonial gaditana prosegufa. La mayor parte de
los diputados espaiioles seguia manifestando, sin ningun tipo de
reparos, su desconocimiento de la realidad americana. Se present6 la
proposici6n de abolici6n del reparto o repartimiento. Los diputados
espafioles pidieron, antes de proceder a su abolici6n porque "seguramente es una cosa escandalosa",7 una explicaci6n de su
funcionamiento.
Como es sabido, en el reparto el corregidor tenia la facultad,
legal desde 1756, de distribuir productos importados y coloniales
entre los indios a precios que multiplicaban por cuatro o cinco el
valor de los fijados en los mercados regionales. Su objetivo era diverso:8 por un lado servia para equilibrar la caida de precios en
algunos articulos especfficos, por otro conseguia un sistema de endeudamiento de los indios que implicaba pagos a largo plazo. Con
ello se lograba, por una parte, fijar la mano de obra india a la tierra y,
por otra, apoderarse de tierras que eran propiedad de los indios o del
municipio.
Los pagos se podian cobrar enfuerza de trabajo o en especie.
Por la primera el corregidor garantizabamano de obra a las haciendas
y a los obrajes para su funcionamiento. Es aqui donde el reparto se
mostraba como un sustituto de la encomienda y de la mita. Cuando
los pagos se realizaban en especie su funci6n consistia en proveer de
productos textiles y agricolas a ciudades y minas.
Una vez mas, jc6mo no!, Manuel Garcia Herreros intervino pidiendo que se "ratificase la proposici6n con decreto solemne,
solemnisimo, para que en ninguin tiempo se introdujese semejante
abuso".9 No obstante, el peso de la discusi6n lo llevaron esta vez los
representantes americanos. Diputados como los novohispanos Jose
7. Ibid. La intervenci6n fue de Jose Zorraquin.
8. El sistema de reparto esta extraordinariamente bien explicado por Scarlett
O'Phelan Godoy, Un siglo de rebeliones anticoloniales: Pertay Bolivia 1700-1783
(Cusco, Peru: Centro de Estudios Rurales Andinos "Bartolome de las Casas", 1988).
9. Diarto de sesiones de Cortes, 13 de marzo de 1811, 2:675.
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Miguel Guridi y Alcocer y Mariano Mendiola, los peruanos Vicente
Morales Duarez y Ram6n Olaguer Feliuiy el neogranadino Jose Mejia
Lequerica intervinieron ante la aquiescencia de los espanioles. Ausentes los americanos, como vimos en el tema de las encomiendas,
en esta ocasi6n se mostraban fervientemente interesados en explicar
todos los aspectos que podia comportar el reparto, los daiios causados por el y la ratificaci6n inmediata de su supresi6n. iPor que esa
diferencia?
Para los diputados americanos las leyes sobre el reparto suponia
un aspecto crucial del regimen colonial espaiiol. Y no solo por la
importancia anteriormente descrita sino porque era un elemento que
gravaba la vida cotidiana de los indios. Diputados americanos que
temian que su restituci6n, para compensar a los corregidores por la
supresion del tributo indigena, provocara nuevas revueltas indigenas
y mestizas.10 En un contexto revolucionario burgues como el presente, una movilizaci6n mas amplia provocaria una radicalizaci6n de
las revoluciones burguesas americanas. Tengase presente lo sucedido
en Nueva Espaiia.
Intervino Guridi y Alcocer, quien empezaba a cobrar protagonismo. Explic6 que suponia dicho reparto en su virreinato:
Sefior,el repartimientoque en NuevaEspafiahacianlos justiciasera de
toros, mulas y caballos, y consistia en que nadie podia vender alli estos
animales.Les costaban 15 6 16 pesos, y los vendiana los indios en 40 6 50.
Lasemanaque no pagabanlos ponian en la carcel;les sacabanuna prenda,
vendiendolao malbaratandola,
y a veces, por no haber pagado el total, les
quitabanel toro 6 la mula, y perdiantodo lo que habianpagado. De esta
manerase cometiangrandesextorsiones;por tanto,convieneque las justicias
no tengan parte en los repartimientos: que sean justicias y no
comerciantes.1
No estuvo solo Guridi y Alcocer. Mejia Lequerica, representante
de otra zona esencialmente indigena como Quito, subi6 a la tribuna.
Su atenci6n se centr6 en otro de los aspectos claves del reparto.
Mejia insistia en que no se restableciera el reparto porque le conferia
a los jueces tareas "impropias" de estos, especialmente comerciales.
Su discurso conllevaba la defensa de una de las premisas fundamentales del Estado liberal como es la division de poderes, en este aspecto,
la independencia del poder judicial. Lo que sucedia en America, al
igual que en Espaiia, era que las justicias, alcaldes mayores o corregidores eran nombrados por los seiores o por la corona, y junto con
la capacidad judicial tenian tambien facultades extraecon6micas para
exigir derechos jurisdiccionales. El reparto seria un ejemplo de ello.
10. O'Phelan Godoy, Un siglo de rebeliones. Joseph Perez, La emanclpact6n en
Hispanoamerica (Madrid: Sarpe, 1986).
11. Diarlo de sestones de Cortes, 13 de marzo de 1811, 2:675.
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Se trataba en estos momentos de suprimir los aspectos privativos
y coercitivos del derecho consuetudinario e integrarlos en la Naci6n.
Mejia estaba abogando por un aspecto del decreto del 6 de agosto de
1811 por el que se abolian los seniorios. No obstante, el diputado
pensaba en una realidad americana. 1Elresto de la diputacion tambien? Eran representantes americanos los que clamarian porque la
jurisdicci6n, tambien en America, residiera en la Naci6n y no en la
corona.
Y por filtimo otro aspecto importante. El reparto aparecia como
una de las vertientes coercitivas del pacto colonial. Como hemos
visto, el control de la fuerza de trabajo representaba un serio problema para las autoridades coloniales. Las f6rmulas arbitradas,
encomienda, mita y reducci6n, se encontraban en declive en el siglo
XVIII.En parte por el empuje llevado a cabo por la propia monarquia
absoluta.
El reparto era, pues, una de las vertientes de este pacto colonial
sistematizada y racionalizada en la figura del corregidor. Su funci6n,
ademas de judicial, era eminentemente econ6mica: extraer los excedentes necesarios de las colonias. Ante tales coacciones los indios
se resistian de diferentes formas. O bien sustrayendose al aspecto
colonizador y de aculturaci6n de la metropoli escapando a zonas
deshabitadas, es el ejemplo de los cimarrones y de las diversas tribus
que nunca fueron colonizadas. O resistiendo, luchando dentro del
colonialismo, mostrandose incapaces para determinados trabajos,
desinterasados, indolentes, etcetera. Pero ecual era el incentivo para
trabajar?La explotacion era combatida, con rebeliones o con pasividad. La lucha de la clase campesina india se mostraba con esta
pasividad ante un entramado de impuestos de la corona, laicos y
eclesiasticos, que gravaban,al igual que al campesino espaiiol, su vida
cotidiana. Asi lo explicaba Feliui, diputado por el Peru, a la camara
gaditana desde una optica clara de la teoria del individualismo
posesivo:
Laociosidad e indolenciade los indios fueron,pues, los pretestos para
establecerel comercio exclusivode los jueces;pero no puedo dejarde decir
sobre esto dos palabras.Convengoen que los indiosno son muyaplicadosen
el trabajo;pero de aquf no se infiere que no se aplican por ociosos. No
trabajan,porque cuanto mas ganen, mas les roban;hacen bien. Yo creo que
la indolencianaturala todos no se excita 6 se despiertasino por el deseo de
adquirirlos bienes 6 de evitarlos males. Maslos indios saben que por mas
que hagan,no pueden tener bien alguno,ni evitaralgunode los males que
sufren.Estaespecie de indolenciaseriacomuna todos los que se hallasenen
sus circunstancias.ePorque, pues, se culpa de esto a los indios?Por tanto,
apoyo el dictamende la comisi6n.12
12. Ibid.
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La proposici6n se someti6 a votaci6n, aprobandose en los terminos siguientes:
Se ratificany mandancumplircon el mayorrigorlas Reales6rdenes y
disposiciones que prohibense hagael repartimientopor las justicias.13
Hasta aqui hemos explicado la actuacion de los diputados gaditanos, tanto espaiioles como americanos, en cuanto a la abolici6n del
regimen colonial en America. La supresi6n de los tributos, la exigencia de titulos a los encomenderos para indemnizarlos, la ratificaci6n
de la abolici6n del reparto, etcetera. Y la propuesta de Guridi y
Alcocer sobre la esclavitud el dia 25 de marzo que a continuaci6n
veremos. Sin embargo, hay una relaci6n que, aunque ya la hemos
aludido, conviene insistir en ella. Se puede observar c6mo la mayoria
de las propuestas van encaminadas a desmontar aspectos coloniales
americanos relacionados con los derechos jurisdiccionales de la corona, en especial las encomiendas y los repartos. Derechos
jurisdiccionales de la monarquia, lease tras la revoluci6n de la Naci6n,
que seran reclamados dos semanas despues, el 30 de marzo, por el
valenciano Antonio Lloret. iEs una casualidad? Buena parte de los
discursos pronunciados en el debate sobre la abolici6n del regimen
seiorial espaiol nos recordaran las palabras de muchos diputados en
sus discursos anticoloniales. Queda la pregunta jestas propuestas
anticoloniales americanas provocaron la intervenci6n de Antonio
Lloret en contra del regimen seiorial? jo este tenia pensada, con
anterioridad, ya su intervencion? Es mas que posible que asi fuera. No
obstante, y aunque seguro que tenia en mente su intervenci6n14
sobre la cuesti6n seiorial, las discusiones sobre la problematica
americana, sin duda alguna, le estimularon a presentarla con mayor
anticipacion.
Varias razones nos lo indican. En primer lugar el plazo transcurrido entre las propuestas americanas y la de Lloret, poco mas de dos
semanas, es el tiempo justo que el diputado pudo tener para pensarla, redactarla, pedir su presencia en la camara y presentarla por
escrito.
Es mais,Joaquin Lorenzo Villanueva, el otro diputado valenciano
que presentaria tambien por escrito su proposici6n el 30 de marzo de
1811, en su libro de Memorias15 relata que el dia 14 de marzo se
reuni6 en la alameda gaditana con los diputados Lloret,Jose Martinez,
13. Ibid., 677.
14. Antonio Lloretpertenecia a una familiade abogados que se destac6 por
mantenerun pleito desde el siglo XVIIIcon el prop6sitode incorporarel pueblo de
Alberica la Corona.
15. Joaquin LorenzoVillanueva,Mi viaje a las Cortes (Madrid:Bibliotecade
AutoresEspafioles,1958), 162.
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Manuel Albelda, Juan Quintano y "otros amigos". Es decir, un dia
despues del debate sobre la encomienda y el reparto. En sus Memorias no refleja la tematica de sus conversaciones, pero ecomentarian
la similitud del regimen senorial que querian desmontar con algunos
de los aspectos del regimen colonial americano? Es mas que probable. O incluso, jno seria esta similitud colonial con la sefiorial, asi
como su abrogaci6n, lo que les incitaria a reunirse con el objeto de
plantear ellos tambien su abolici6n?
Asi, el propio Antonio Lloret, unas semanas despues, al relatar los
gravosos impuestos senoriales que la valenciana villa de Alberique
tenia que pagar, hacia alusi6n a la realidad colonial americana relatada
hacia escasamente pocas fechas. Diputado que al tiempo que describia el paisaje contributivo senorial valenciano retaba a sus colegas
americanos sobre el grado de dureza contributiva en comparaci6n a
la descrita para America:
El terrateniente de seiorio,..., paga anualmente al duefio maisde la mitad
de lo que le queda; paga desde luego la obligaci6n de pedirle establecimiento
del terreno que se promete cultivar, y por ello los censos enfiteuticos del
canon anual, y el luismo, que en dicho reino asciende a la decima del valor 6
precio de la finca que se vende; paga amargamente una gran parte de los
frutos, desde la tercera parte hasta la octava de ellos..., paga la afrentosa y
ruinosa precisi6n de haber de moler el grano en el molino, y la aceituna en
la almazara del dueio, en la que se le quedan una mitad de la cuarta parte
con los desperdicios y cierta cantidad en dinero; no puede vender sus
cosechas por menor, como es el vino, arroz, etcetera; paga el llamado derecho de pil6n... con cuyos antecedentes pregunto a los seiiores americanos si
hay en el Peru alguna mina que de tanto producto como Alberique.16
Aspectos coloniales americanos que estaban mas presentes en los
discursos de los diputados gaditanos que en los estudios de algunos
historiadores especialistas en el periodo.
Hay mas. Garcia Herreros, en un tono sumamente radical que
luego moderara, en su intervenci6n del dia 1 de junio reclamaba sin
vacilaci6n la abrogaci6n del regimen senorial espaiol. Y lo hacia
solicitando para aquellos nobles que se vieran perjudicados el mismo
requisito indemnizador que semanas anteriores habia pedido para los
encomenderos americanos: la presentacion de titulospara poder ser
indemnizados. El aspecto de la abolici6n de la encomienda le habia
servido de experiencia para acciones de mas envergadura como era
la presente. La tactica liberal se mostraba id6ntica que la empleada en
America respecto a la encomienda. ^Podiapresentar titulos la nobleza
que habia usurpado amplias tierras de realengo?, asimismo, ipodian
presentarlos los encomenderos americanos que habian obrado de
manera similar?Ambos estaban en el mismo problema.
16. Dtario de sesiones de Cortes, 14 de junio de 1811, 2:1258.
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Otra cuesti6n: La abolici6n del trifico de esclavos.
iQue cuestion! "jQue propuesta?"
Abolici6n del tributo de los indios, de las encomiendas, del
reparto, inicios de la abolici6n del regimen senorial, etcetera. La
primavera de 1811 estaba, ciertamente, impactando en la sociedad
espafiola de ambos lados del Atlantico. En esta dinamica revolucionaria, otra propuesta similar: la abolici6n de la esclavitud.
Asi es. Uno de los diputados que mas habia luchado por la
cuesti6n nacional americana en los famosos debates de enero del aiio
once, Guridi y Alcocer, presentaba el 25 de marzo, ante la at6nita
camara gaditana, un documento con ocho proposiciones para suprimir la esclavitud ademas de varios de los aspectos relacionados
con ella, especialmente su trifico.
La capacidad de sorpresa de la camara se vio, una vez mas,
puesta a prueba. El impacto que produjo esta propuesta en las Cortes
fue enorme. Da fe de ello el denodado esfuerzo de la secretaria
parlamentaria por silenciar la proposici6n puiblicamente. Asi ni el
Diario de Sesiones de las Cortes ni las Actas de las Sesiones Secretas
ni la prensa gaditana recogieron dicha propuesta. Tan solo, el dia 2 de
abril, cuando Agustin Arguelles present6 su, despues conocida y
famosa, propuesta sobre el trafico de esclavos, se permiti6 su publicaci6n. Propuesta que vino a significar una alternativa mas
moderada y menos explicita que la de Guridi y Alcocer.
Es mas, dada la tremenda importancia de la cuesti6n, la propuesta fue rapidamente trasladada a la comisi6n de la Constituci6n
para su discusi6n en una habil maniobra del grupo liberal, tanto
espafiol como americano, por demorar su discusi6n puiblica en la
camara.
Sin duda el tema demandaba la buisquedade una soluci6n rapida.
Sin dilaci6n, el 2 de abril, una semana mas tarde, Agustin Argiielles
presentaba dos propuestas. Una nueva propuesta de abolici6n del
trifico de esclavos, que esta vez iba acompafiada con otra propuesta
sobre abolici6n de la tortura. La habilidad de los diputados liberales,
mayoritarios dentro de la comisi6n de la Constituci6n, para presentar
una propuesta sobre la abolici6n del trifico de esclavos en vez de la
propia esclavitud, es mas que meritoria. En especial porque, recalquemoslo, nunca mas se abordari el tema de la abolici6n de la esclavitud
en las Cortes de 1810-1813, ni en la siguiente legislatura de
1813-1814. Es mas, las propuestas de Guridi y Alcocer fueron postergadas hasta la discusi6n del texto constitucional y, una vez elaborada
este, olvidadas.
Esta era la importante propuesta del diputado por Tlaxcala:
la esclavitudal derechonatural,estandoya proscritaaun
Contrariaindose
por las leyes civiles de las nacionescultas,pugnandocon las maximaslibera-
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les de nuestro actual Gobierno, siendo impolitica y desastrosa, de que
tenemos funestos y recientes ejemplares, y no pasando de preocupaci6n su
decantada utilidad al servicio de las fincas de algunos hacendados, debe
abolirse enteramente. Pero para no perjudicar en sus intereses a los actuales
duenos de esclavos, se hara la abolicion conforme a las proposiciones
siguientes:
Primera. Se prohibe el comercio de esclavos, y nadie en adelante podra
vender ni comprar esclavo alguno, bajo la pena de nulidad del acto y perdida
del precio exhibido por el esclavo, el que quedara libre.
Segunda. Los esclavos actuales, para no defraudar a sus dueiios del
dinero que les costaron, permaneceran en su condici6n servil, bien que
aliviada en la forma que se expresa adelante, hasta que consigan su
libertad.
Tercera. Los hijos de los esclavos no naceran esclavos, lo que se introduce en favor de la libertad, que es preferente al derecho que hasta ahora
han tenido para los amos.
Cuarta. Los esclavos seran tratados del mismo modo que los criados
libres, sin mas diferencia entre estos y aquellos que la precisi6n que tendrain
los primeros de servir a sus duenos durante su esclavitud, esto es, que no
podran variar de amo.
Quinta. Los esclavos ganaran salario proporcionado a su trabajo y aptitud, bien que menor del que ganarian siendo libres, y cuya tasa se deja al
juicio prudente de la justicia territorial.
Sexta. Siempre que el esclavo, 6 ya porque ahorre de sus salarios, 6 bien
porque haya quien le de dinero, exhiba a su amo lo que le cost6, no podra
este resistirse a su libertad.
Septima. Si el esclavo vale menos de lo que cost6, porque se haya
inutilizado 6 envejecido, esto sera lo que exhiba para adquirir su libertad;
pero si vale mas de lo que cost6, por haberse perfeccionado, no exhibiri sino
lo que cost6, lo cual se introduce tambien en favor de la libertad.
Octava. Si el esclavo se inutiliza por enfermedad avanzada, dejara de
ganar salario; pero el amo estara en obligaci6n de mantenerlo durante la
inhabilidad, ora sea perpetua, ora temporal.17
Guridi y Alcocer reclamaba la libertad de vientres, ademas de la
abolicion del trafico esclavo. Aun asi el fantasma de Haiti estaba
presente, tanto o mas como los intereses de los esclavistas espaiioles
y americanos. Intereses que tendran la capacidad suficiente para
anular dicha propuesta.
Asimismo, hemos intentado averiguar que subyacia tras el desmedido interes del diputado de Nueva Espafia por mejorar las
condiciones de vida de los indios y de las castas, asi como de sus
derechos politicos.18 eFilantropismo? iO tras su discurso se esconden
17. Ibid., 2 de abrilde 1811, 813.
18. Guridiy Alcocerfue, en el debatesobrela representaci6namericana,uno de
los diputadosamericanosque mis se distingui6por la tenacidadde sus discursosen
pos de lograruna representatividad
paralos indiosy las castas.Asimismolo veremos
en la defensa de estas castas en la famosa discusi6n sobre el articulo 22 de la
Constituci6n.Ibid.,810.
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otras causas econ6micas? jTransmitia los intereses comerciales u
obrajeros novohispanos que podian entrar en contradiccion con los
esclavistas antillanos o caraqueiios? tO tan solo le movian sentimientos de tactica politica al querer atraerse a esclavos que habian
sido movilizados en las revueltas de Hidalgo? Tan solo hemos descubierto a un diputado de excepci6n.
Quedaba evidente. La propuesta de Guridi y Alcocer fue combatida desde la propia camara. Agustin Arguelles proponia:
Que sin detenerse VM. en las reclamacionesde los que puedan estar
interesadosen que se continue en Americala introducci6nde esclavos en
Africa,decrete el Congresoabolido parasiempre tan infame trafico;y que
desde el dia en que se publique el decreto no puedan comprarse ni introducirse en ninguna de las posesiones que componen la Monarquiaen
amboshemisferiosbajode ninguinpretestoesclavosde Africa,aun cuandose
adquierandirectamentede algunapotencia de Europa6 de America.19
No era todo. La proposici6n del diputado asturiano conllevaba
una segunda parte, sumamente reveladora, y de la que haremos
menci6n con posterioridad. Esta era:
Que el Consejo de Regencia comunique sin perdida de momento al
Gobierno de S.M.B.el decreto, a fin de que procediendo de acuerdo en
medida tan filantropica,pueda conseguirseen toda la extensi6n el grande
objeto que se ha propuestola Nacioninglesaen el celebrebill de la abolicion
del comercio de esclavos.20
Con rapidez tomaron la palabra Mejia y Argiielles para defenderla. Mejia fue rotundo. Dos razones explicaban la supresi6n del
trifico de esclavos. La primera, poco desarrollada por el diputado
quiteiio, se mostraba como un mero pretexto. Por ella Mejia explicaba la precariedad econ6mica de algunas "provincias
americanas"21 en las que nuevas introducciones de esclavos agravarian la subsistencia y las condiciones de vida, ya de por si malas, de
los residentes.
La segunda era el motivo principal. Mejia no tuvo inconveniente
en reafirmarlo. El 5 de febrero de 1807 Gran Bretaiia habia aprobado
la abolici6n del trifico de esclavos. Decreto britanico que no se ceiiia
a sus propios subditos sino que alentaba, lease obligaba, su cumplimiento a los restantes paises dedicados a dicho trifico. El gobierno
britanico de William Wyndham Grenville era consciente que esta
medida se mostraria ineficaz si no era adoptaba tambien por los
demas paises europeos y Estados Unidos.
19. Ibid.
20. Ibid.
21. Destacamosc6mo los diputadosamericanoshacfanhincapieen denominara
las regiones americanasprovincias, en funci6n al decreto de 15 de octubre de 1810
y a las propuestasaprobadasen enero y febrerode 1811.
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De esta manera el gobierno britanico se mostro como el adalid
abolicionista del trifico de esclavos. El Foreign Office exigia que en
todos los tratados bilaterales que Gran Bretaia firmara con otros
estados se especificaran clauisulasrestrictivas acerca del comercio de
esclavos. De esta forma consiguio una presi6n efectiva sobre Suecia
(1813), Holanda (1814) y Francia (1818). Previamente Dinamarca y
Portugal (1802).22
Ahora era el gobierno espaiol quien tenia la necesidad urgente
de firmar un tratado defensivo con el britanico, dada la critica situaci6n belica contra los franceses en que se hallaba, incluso la propia
ciudad de Cadiz protegida por la marina real britanica.
La proposici6n sobre la abolici6n de la trata se halla dentro de
este contexto. En los iltimos dias de marzo, el embajador de Gran
Bretafia present6 un oficio a la Regencia en el que se informaba de la
retirada de los tropas del duque de Massena de las posiciones de
Santander frente al ejercito de duque de Wellington. Al lado de estas
buenas noticias, el embajador ingles reclamaba que el gobierno espafiol cediera el mando al militar britanico en las provincias de Galicia
y Asturias. El problema se planteo a las Cortes en la sesi6n secreta del
dia 26 de marzo de 1811. En un polemico debate que dur6 hasta el
dia 4 de abril, las Cortes, en sus sesiones secretas, pidieron la comparecencia del regente Joaquin Blake y el secretario de estado Euschio
Bardaji, los cuales no s6lo mostraron su parecer negativo sino que
Blake pidi6 "que se le contestase al embajador secamente que la
naci6n no consentira que se entregue provincia ninguna al dominio
de ninguin extranjero".23
Por su parte la Comisi6n de Comercio, en la sesi6n secreta del
dia 29, dio cuenta sobre el informe de las bases sobre las que debia
establecerse el tratado de comercio con los ingleses que sirviera de
preliminar a otro acuerdo mas amplio de subsidios. El ministro de
exteriores britanico era en estos momentos el hermano del propio
Wellington. Tratado al que se oponia Bardaji.En este contexto doble
de oposici6n a las peticiones militares y comerciales britanicas se
inserta la proposici6n de Arguelles. Proposici6n provocada por las de
Guridi y Alcocer, pero tambien por la critica situacion de politica
exterior en que en estos momentos se hallaba el Estado espaiol con
respecto a sus aliados britanicos.
22. Lamedidaseraperseguidacon denuedopor el propioministeriode Asuntos
Exterioresbritanicoy en posterioresaiios conseguirala concesion de derechos de
registrode naviosen altamarpor partede Espafiay Portugal(1817), Holanda(1818),
Suecia(1824) y Francia(1831). Cf. DanielP.Mannixy MalcolmCowley,Historta de
la trata de negros (Madrid:AlianzaEditorial,1970), 188 y 196.
23. LorenzoVillanueva,Ml viaje, 169-77. En esta obra esta magnfficamente
narradotodo el debateacontecidoal respectoen la sesi6n secreta,ya que en lasActas
de las sesiones secretas de las Cortes, 1810-1840,
vol. 1 (Madrid: Imprenta de J. A.
Garcia,1874) esti recogido muy someramente.
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El dia 4, tambien en sesi6n secreta y ante los rumores que
estaban circulando por la ciudad que acusaban a los diputados americanos de oponerse a la firma del tratado con los britanicos, Mejia
pidi6 que se tratara de este asunto en publico o que se permitiera a
estos diputados salir de la camara. Lapropuesta caus6 una"discusi6n
molesta", en palabras del diputado valenciano Joaquin Lorenzo
Villanueva. Los americanos permanecieron en su asiento con el
apoyo de los demais diputados.
Perfectamente disefiada la estrategia parlamentaria por parte de
dos lideres carismaticos de las diputaciones liberales, tanto peninsular
como americana, el argumento enunciado por Mejia fue retomado
por el propio Arguelles sin esperar a que otros diputados pudieran
intervenir en el debate.
El diputado asturiano, que habia estado presente en la Camarade
los Lores en el debate y aprobaci6n del trifico de esclavos, mostr6
una consumada experiencia en el tema. En primer lugar invoc6
razones de indole religiosa, en segundo lugar razones econ6micas,
por uiltimo razones de Estado. En este iltimo argumento subyace la
perentoria necesidad de ganar la guerra, condicion sine qua non para
consumar la revoluci6n. Para lo cual, obviamente, era mas que indispensable la ayuda de Gran Bretaia.
Con una tactica similar a la empleada por Thomas Clarkson y
William Wilberforce en el parlamento londinense,24 en la cual rehusaron enfrentarse directamente en sus propuestas con los plantadores
esclavistas, al no plantear la abolici6n de la esclavitud, Arguelles
esgrimia razones economicas que hacian de la abolici6n del trifico de
esclavos una medida deseable, incluso para los plantadores:
... la prohibici6nseriaun medio de inclinarlosaimejorarel cultivo por
otro metodo mas anilogo al que reclamala agricultura.
Las mejoras de los cultivos que reclamaba Arguelles eran de tipo
capitalista, en base al empleo de mano de obra asalariada en vez de
esclava.
No todo eran principios filantropicos en la medida, ni mucho
menos. El objetivo, al igual que el britanico, consistia en no herir las
susceptibilidades de los plantadores e inquietarles con medidas abolicionistas que les privaran de "sus propiedades", a la saz6n la fuerza de
trabajo forzada que empleaban. Medidas de este cariz podian afectar
severamente los ingresos que estaban revirtiendo a la peninsula de
virreinatos tremendamente leales, como Peru, y capitanias generales
"muy leales", como Cuba, la Siempre Fiel Isla de Cuba.
Arguelles, por primera vez en todos su extenso discurso, mostro
sus cartas. Revelaba la verdadera necesidad por parte de Gran Bretaia
24. Sobrela luchaabolicionistade Clarksony Wilberforcever Mannixy Cowley,
Historia de la trata, 169-86.
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para que esta medida fuera adoptada tambien por los demas estados
europeos y americanos. Estados Unidos, bajo la presidencia de Jefferson, elabor6 un proyecto de ley para abolir el trafico de esclavos
justamente tres semanas antes que Gran Bretafia lo promulgase,
aunque su ejecuci6n no entro en vigor antes del 1 de enero de
1808.25 Estas eran las palabras de Agustin Arguelles:
Convencidoel gobiernode Inglaterrade que el objeto del bill no podia
conseguirse mientraslas nacionesde Europay Americapudiesen hacer por
si este trifico, 6 prestar su nombre a los comerciantesingleses, resolvio
interponer su mediacion para con las potencias amigas, a fin de que se
adoptase la abolici6n por sus gobiernos.26
La raz6n por la cual la diputaci6n liberal presenta el proyecto a
las Cortes espaiiolas sobre la abolici6n del trifico de esclavos parece
clara. Lo hemos anticipado. La necesidad de firmar un tratado con
Gran Bretaiia para que esta prosiguiera su firme ayuda para ganar la
guerra.27
La oposici6n de los diputados americanos representantes de las
zonas plantadoras fue inmediata, pero comedida. Tan s6lo Andres
Jauregui, representante por La Habana, teniente regidor y alguacil de
su cabildo, expresaba, como portavoz de los hacendados cubanos
insertos en el Cabildo, su oposici6n en la caimara.El diputado cubano
recordaba la abolici6n por parte de la Asamblea Nacional francesa del
trafico de esclavos y las repercusiones que esta medida tuvo en las
revueltas de Santo Domingo y en la revoluci6n de Haiti. Sucesos
reiteradamente aludidos que se mostraban como paradigmas de los
desastres que podian acarrear medidas similares en las colonias espaiiolas. Por ultimo pidi6 que, al igual que las propuestas de Guridi y
Alcocer, la presente de Agustin Arguelles se tratara en la sesi6n
secreta "para evitar las consecuencias que de otro modo son de
temer".28
El temor era verosimil. Su ultima peticion asi lo atestigua. El
diputado cubano incluso reclamaba ique no se reflejaraen las paginas
del Diario de Sesiones de Cortes! La proposici6n de Jauregui no
prospero.
El otro diputado cubano, Juan Bernardo O'Gavan, no se hallaba
presente en el debate. Llegaria a la camara gaditana en marzo de
1812. Sin embargo, es conocida su adversi6n a la abolicion de la trata.
25. Ibid., 186.
26. Diario de sesiones de Cortes, 2 de abril de 1811, 2:812.
27. Jose Antonio Piqueras y Enric Sebastia, Agiotistas, negreros y partisanos,
(Valencia: IVEI, 1991). En especial la explicaci6n desarrollada en el texto esta contenida en las paginas 287-99.
28. Diarto de sesiones de Cortes, 2 de abril de 1811, 2:812.
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En 1821 redact6 un alegato29 como reacci6n a la ratificaci6n de las
Cortes del tratado entre Gran Bretaiia y Espaiia de 1817.
Juan Nicasio Gallego, suplente por Zamora, racionero de la Santa
Catedral de Cartagenay diputado de conocida adscripcion liberal, fue
quien evidenci6 las trabas argumentales de cariz ideologico que la
doctrina liberal presentaba para abolir la esclavitud. No era ajeno Juan
Nicasio Gallego al problema. Se mostraba sumamente contrario a la
abolici6n de la esclavitud "porque al cabo es una propiedad agena,
que esta autorizada por las leyes, y que sin una indemnizaci6n seria
injusto despojar de ella a su dueiio".30Aunque manifestaba su conformidad con la abolici6n de la trata.
Admitida a discusi6n la propuesta de Agustin Argiielles, se pas6
a una comisi6n, al igual que las propuestas de Guridi y Alcocer, para
que se propusiese su dictamen. Como hemos manifestado, las Cortes
silenciaron en las dos legislaturas este importante problema. Las
presiones por parte de los plantadores esclavistas surtieron efecto. El
presente documento, que se firm6 conjuntamente por el Ayuntamiento, el Consulado y la Sociedad Patriotica de La Habana, es una
muestra de ello:
Creemos haber fundado los (males) que en el modo, en el tiempo y la
substancia presentan las resoluciones propuestas a V.M.(sobre la esclavitud)
en las sesiones de 26 de Marzo y 2 de Abril (1811). Pedimos encarecidamente, y no dudamos conseguir, que se desechen por tanto; mas no sonamos
siquiera que de tan importante negocio separe VM. su activa consideraci6n.
A ella, al contrario, lo recomendamos con el mayor empeiio; pero que sea por
el orden que sefiala la prudencia y la raz6n moderada.31
Asimismo, el 7 de julio de este mismo aiio, se leyo en la sesi6n
secreta32 de ese dia, una representaci6n del capitan general de Cuba,
el marques de Someruelos, por la que se informaba a la camara de los
"desagradablesefectos" que la proposici6n de Agustin Argiielles habia
29. JuanBernardoO'Gavan,Observacionessobre la suerte de los esclavos del
Africa considerados en su propla patria y trasplantadosa las Antllas espalolasy
reclamaci6n contra el tratado celebrado con los tngleses el afo de 1817 (Madrid,
1821).
Estemanifiestodenunciabael tratopreferenteque GranBretafiadabaa su aliado
Portugal,y el cinismocon que exigiaa Espafiamantenerposicionesabolicionistascon
respecto a sus colonias.
30. Ibid.
31. Representaci6ndelAyuntamtento,Consuladoy SociedadPatri6tca de La
Habana, 20 dejulio de 1811. Elpresente documentolo Incluy6Jos BlancoWhite
en su peri6dico El Espaftol,mayo 1813. Por lo cual habraque tomarlocon ciertas
reservas al no ser un documento original.Lo cierto es que ante la inexistencia de
otros semejantesnos hemos inclinadopor reproducirlo,aun teniendo presente su
origen.
32. Actas de las sesiones secretas,7 de julio de 1811, 337.
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producido en la isla. La petici6n del marques de Someruelos incluia
que esta se discutiera en sesi6n secreta. Convenientemente, en la
misma carta el marques introducia dos copias del Plan General de
Suscripci6n Patri6tica. Los fondos de Cuba, los fondos de los "patriotas", aunque esclavistas, eran necesarios para que la propia
metropoli subsistiera en esta dificil coyuntura.
La mita: La abolici6n de la coercion colonial.
Tras la sanci6n de la Constituci6n, previamente y durante sus
debates, los diputados americanos se dedicaron a profundizar las
conquistas autonomistas americanas dentro del c6digo constitucional
y ademas emprendieron una tarea, en ocasiones sumamente fructifera, claramente anticolonial. De nuevo volvemos a insistir. Mientras
los diputados liberales espaiioles elaboraban y decretaban en las
Cortes gaditanas toda una reglamentaci6n abolicionista del feudalismo, los diputados americanos, paralelamente e imbricados en la
realidad peninsular, hacian lo propio con los aspectos mas relevantes
del regimen colonial americano.
Quedaba, pues, la derogaci6n de aquellos aspectos que impedian
el crecimiento de las fuerzas productivas. En este sentido se encamino la propuesta abolicionista de los mayorazgos en America, la
abolici6n de la matricula de mar, las peticiones de desestanco y
libertad de cultivo, la libertad comercial, etcetera. La tarea legislativa
revolucionaria de las Cortes proseguia en Espania y en America.
Muchos aspectos feudales peninsulares recordaban, seguian recordando o estaban presentes bajo otra denominaci6n en America. Por
tanto, la realidad colonial americana no era una excepci6n en este
alborear revolucionario burgues, sus representantes liberales tampoco ni sus aspiraciones burguesas. iPor que iban a serlo?
El 4 de abril de 1812 el costarricense Florencio del Castillo
planteaba a la camara seis proposiciones. Todas ellas estaban relacionadas con la servidumbre que mantenian los indios mitayos en
particular y en general todos los indigenas colonizados con respecto
al tributo personal que aun mantenia la Iglesia americana en algunas
regiones.
La mita era dada a conocer a las Cortes gaditanas. Castillo proponia su abolici6n, la camara escuchaba atenta. Ademas, reclamaba la
exencion del servicio personal de los indios a curas y funcionarios
reales, un reparto proporcional de las cargas puiblicasentre todos los
vecinos, y en especial, un reparto de tierras a los indios de la mitad
de las tierras de comunidad, realengas y baldias.
Las seis proposiciones quedaron admitidas a discusi6n y pasaron
a la Comisi6n Ultramarina. Esta tardo mas de cuatro meses en emitir
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su dictamen a las Cortes. Por fin, la camara escuchaba el dictamen el
12 de agosto. Este se centr6 en exclusiva sobre la primera, esto es, la
abolici6n de la mita.
La Comisi6n se pronunci6 a favor de su abolicion porque mantenia a "los indios en un estado de servidumbre", estado el cual se
mostraba contrario a la libertad civil de los indios. Maxima liberal que
las Cortes habian sancionado a traves del propio texto
constitucional.
La argumentaci6n de la Comisi6n no s61o se basaba en uno de los
principios universales de la ideologia liberal, como era el concepto de
libertad-especialmente
por la tremenda ambigiiedad que
proporcionaba-, sino tambien apelando a otra de las maximas "francesas" como era la igualdad. Sancionada la Constituci6n, la Comisi6n
tenia que obedecer un marco juridico comun. De esta forma el
articulo 8? del codigo gaditano establecia una igualdad,"sin distincion
alguna", que obligaba a contribuir a todos los espafioles a los gastos
del Estado. Articulo constitucional, independientemente del aspecto
servil que la mita conllevaba, que hacia contradictorio su mantenimiento parcial en un sector de la poblaci6n espafiola, dado que los
indios habian sido nacionalizados como espaioles.
De esta forma la Comisi6n se encontraba ante un dificil dilema.
Si se derogaba una legislaci6n privilegiada en la peninsula y se mantenia en America podia ser, cuanto menos contradictorio, cuanto mas
peligroso. Aspecto mitayo que era y aparecia como una forma de
servidumbre en tierras americanas. Aspecto que los diputados liberales espaioles, con la colaboraci6n de los liberales americanos, habian
abolido tras el decreto de 6 de agosto de 1811. Derogadas las jurisdicciones particulares, los diputados liberales espaiioles epodian
permitirse el mantenimiento de estos aspectos seiioriales en
America?
La Comisi6n, mediante argumentos ideologicos que escondian
razones econ6micas,33 mostraba su conformidad para que fuera
abolida.
La mita tambien fue explicada, con bastantes pormenores, en las
Cortes gaditanas. Los encargados de ello fueron el autor de la proposici6n, el costarricense Castillo, y el diputado por Guayaquil, Jose
Joaquin de Olmedo. Observemos. Ninguno era un representante de
las zonas mitayas. Ni Costa Rica, o por extensi6n Centroamerica, ni
Guayaquil, ciudad cercana a Quito, eran centros de mitayos.
33. Como veremos, estas razonesecon6micaseranla libertadde mano de obra
y la creencia en las teoriasliberalessobre la autorregulaci6ndel mercadoen base a la
ofertay la demanda.Aspectosque seranreseiiadostantoporJoseJoaquinde Olmedo
como por Castillo.
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Reflexionemos sobre este aspecto particular. Estableciendo algunos paralelismos, la abolici6n del trafico de esclavos fue planteada
por Argiielles y cuando se profundiz6, incluso en la abolici6n de la
propia esclavitud, la propuesta parti6 de un novohispano como
Guridi y Alcocer. Tanto en la peninsula como en Nueva Espaia la
esclavitud era residual. Por el contrario, recordemos c6mo fueron los
propios diputados-O'Gavan, Esteban Palacios-de las zonas esclavistas antillanas y venezolanas los primeros en oponerse a la medida
abolicionista.
En el caso de la mita, este modo de proceder presenta algunos
paralelismos. La propuesta abolicionista de la mita no parti6 de los
diputados peruanos, en teoria la regi6n mas afectada por este sistema
impositivo. Si bien es cierto que un diputado peruano como Jose
Antonio Navarrete, una vez que la propuesta de Castillo fue aprobada
por la camara el 24 de octubre de 1812, present6 una adici6n solicitando la abolici6n de una modalidad particular de la mita-la
faltriquera-. Pero tambien no es menos cierto que la unica voz en la
camara que discrep6 por su abolici6n era la de otro diputado peruano: Bias Ostolaza.
Con ello resulta interesante valorar c6mo a la hora de abolir
importantes aspectos coloniales que afectaban a determinadas regiones y que eran ineditos en otras, no fueron siempre los
representantes de las regiones afectadas los que presentaron las
propuestas para su abolici6n. El ejemplo esta tanto en el aspecto
esclavista mencionado como en la mita.
iA que es debido? Algunas fracciones del criollismo se incrustaban en aquellos aspectos productivos que los resortes coloniales les
dejaban. Criollismo que en ocasiones no necesitaba de la independencia para seguir acumulando originariamente capital, por lo que
adoptaba una posici6n reformista o incluso reaccionaria frente a
aspiraciones independentistas, leaise estas como partidariasde consumar una revoluci6n burguesa que adoptariaformas anticoloniales. Asi
se desarrollaba un criollismo que habia adecuado los mecanismos de
extracci6n de renta colonial a sus medios de producci6n de una
forma que no era antag6nica a la metropoli. Por lo que estos intereses
econ6micos criollos eran conocidos, contenidos y defendidos por
algunos de los representantes americanos en las Cortes de Cadiz.
En segundo lugar, aparecian formas de explotaci6n fundamentales para garantizar la viabilidad econ6mica del sistema. Sistema
econ6mico del cual fracciones del criollismo tambien participaban y
por lo tanto no dudaban coyunturalmente en unirse a los espaioles.
En especial si eran amenazadas sus propiedades o su preeminencia de
clase, sobre todo frente a las protestas y reivindicaciones y revueltas
indias, mulatas o esclavas. Finalmente, no es de extraiar como Cuba
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permanecera hasta finales de siglo como colonia y como Peru tendra
que ser liberado para alcanzar su emancipaci6n.
Las propuestas de Castillo fueron apoyadas ese mismo dia por el
diputado por Guayaquil, Olmedo. Ambos diputados tenian en comun
la raiz de sus argumentos. Estos estaban fundamentados en los principios mas doctrinales de la ideologia liberal. De esta forma
defendieron la abolici6n de la mita "y de toda servidumbre personal"
desde los principios de la libertad civil, de los derechos de propiedad
y de la seguridad individual de los ciudadanos. Premisas que nos
recuerdan indefectiblemente a uno de los textos mas clasicos del
liberalismo como era la Declaracion de los Derechos del Hombre y
del Ciudadano. Premisas que incluso estaban contenidas en los
primeros articulos de la Constituci6n espafiola, en especial el articulo 4?.
Castillo reivindicaba, desde la libertad civil, la necesidad de separar al productor de sus medios de producci6n, no solo la
expropiaci6n sino, sobre todo, la libertad de mano de obra, la libertad del indio, en cuanto a fuerza productiva para ser empleado
como asalariado libremente.
No era una particularidad de la burguesia europea. Es una ley
hist6rica. La burguesia americana entraba a formar parte, con sus
peculiaridades, como no, de leyes universales. Se necesitaba, tambien
en America, de un mercado y de la concurrencia en el, observese que
utilizamos las propias palabras de Castillo, de "mano de obra libre".
Premisas sine qua non de la economia capitalista. Al respecto,
Castillo:
La mita destruye la elecci6n que debe tener todo hombre libre para
ejercitarseen la profesi6n,arte,6 cualquierotro generode industriaque mias
le acomode, paraviviren la ciudad6 en el campo, y parahacer todo lo que
no se opone a la razony leyes, supuesto que sujetaa los mitayosa marchar
a los parajesadondese les llama,a ocuparseen el trabajoa que se les destina,
y a permaneceren el todo el tiempo que se les prescribe.34
Presente las premisas fundamentales del liberalismo clasico, no lo
eran menos las del liberalismo econ6mico smitiano.
Expuestos los principios de la libertad civil, y sobre todo sus
consecuencias econ6micas, restaban los otros dos argumentos abolicionistas: los derechos de propiedad y la seguridad.
Pero, lo que es mas importante, ambos diputados abordaron la
critica de uno de los t6picos mas extendidos desde la colonizaci6n:
la apatia innata de los indios hacia el trabajo. Actitud indigena que
explicaban por la resistencia de estos a ser explotados, pero sobre
todo por la falta de incentivos que los indios tenian para trabajar.
34. Actas de las sesiones secretas,7 de julio de 1811, 337.
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Resistencia, lucha-cuestion que se entrelazaba con la tercera proposici6n de Castillo, el acceso a la tierra como propietarios por medio
de repartos. La cuesti6n a evaluar era que tierra era la que se iba a
repartir-realengos, comunales. Tan s6lo su reparto aludia a desamortizaci6n, y esta a transformaci6n de las relaciones de
produccion. Nuevamente hablamos de revoluci6n. Observese que
seguimos en America, desde las Cortes de Cadiz.
Pero esta critica lascasiana se extendia mas alla de la propia
defensa de la mano de obra indigena, apuntaba al centro de la colonizaci6n, de sus formas de explotacion, de sus privilegios. El discurso
se habia convertido en algo mas que en una defensa de la abolici6n
de la mita. Era un discurso anticolonial. Pocos diputados americanos
se habian atrevido a cuestionar la politica del Consejo de Indiascomo por otra parte ambos coincidirin en su critica-hacia los indios
americanos. Por lo general los representantes americanos no cuestionaban las leyes de Indias, al contrario muchos de ellos, incluso los
mas radicales como los novohispanos, se habian apoyado en ellas
para defender prerrogativas politicas o sociales autonomistas. Diputados americanos que no tenian inconveniente en hablar de los
parametros benefactores de la legislaci6n de Indias y la proteccion
que la corona, a traves de su Consejo de Indias, habia tenido hacia
ellos. Olmedo y Castillo no se contuvieron. Esto era lo que decia el
primero:
Si, Seiior,de las leyes mitales;de esa porci6n,bajode otro respecto,muy
recomendablede las leyes de Indias.Pues a pesar de que todos los sabios
sabiasa esas leyes, yo, ignorante,yo tengo la audaciade no reconocer
lHaman
su sabiduria.iPorventuraesas leyes han lenado tres siglosel beneficofin que
se propusieronde hacerindustriososy aplicadosa los indigenasde America,
de instruirlos,de civilizarlos,de hacerlosfelices?Pues parami no son sabias
las leyes que no llenanel beneficofin que se proponen;parami no son sabias
sino las leyes que hacen felices a los pueblos.35
Fue el diputado de Guayaquil quien lleg6 mas lejos. Olmedo,
llevado por este afan anticolonial, bordeaba la frontera independentista, cuestionaba leyes coloniales, monarcas preteritos y dejaba que
se vislumbrara su republicanismo.36Olmedo no sera, no lo fue, como
hemos manifestado con anterioridad, el uinico diputado doceaiiista
que culminara su carrerapolitica en una caimaraindependiente ameri35. Ibid., 12 de agosto de 1811, 1:353.
36. Olmedo al respecto:
Es admirable, Sefior, que haya habido en algun tiempo razones que aconsejen esta practica
de servidumbre y de muerte; pero es mas admirable, que haya habido leyes que la manden, Reyes
que la protejan y pueblos que la sufran.
Diario de sesiones de Cortes, 12 de agosto de 1811, 3:3532.
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cana. En 1830 la vicepresidencia del Congreso de la Repuiblica de
Ecuador le reclamaba. Ciertamente, no eran diputados corrientes la
mayor parte de los representantes americanos de las Cortes de
Cadiz.
Pero, ique habia ocurrido? ^Por que desde un aspecto importante, pero sectorial como era la mita, se habia pasado a una critica
abierta y general del sistema colonial? eObedece su explicaci6n a una
tactica politica? Es mas que probable. eHabia algo mas? Sucedia, al
igual que en el regimen seiorial, que la critica de uno de sus aspectos
de extracci6n de renta significaba cuestionar todo el sistema, su
funcionamiento, su legitimidad, porque como aquel-el seiiorialeste-el colonial feudal en terminos de Pablo Macera37-tambien se
apoyaba, para su funcionamiento, en un aparato coercitivo que garantizaba un aspecto fundamental como era la extracci6n
extraecon6mica. Al cuestionar un aspecto de la extracci6n de la
renta, se cuestionaba asimismo el entramado econ6mico que iba
indisolublemente ligado al politico, ideologico, etcetera.
Dig_amoslo.Hacemos notar que los discursos de ambos diputados
no relacionan solamente ambos aspectos, mita y servidumbre, van
mas alla. Ambos diputados los identifican, los confunden, o claramente califican a la mita como servidumbre.
En la defensa que hacen en sus discursos de la abolici6n esta la
clave. Consideran a la mita como un aspecto mas de la servidumbre.
Y cabe la pregunta ja que servidumbre se refieren? Eala colonial, en
cuanto a seniorial?Es mas Enolo era? to era pura ret6rica el discurso
de estos diputados americanos para exagerar este aspecto de la renta
americana y conseguir su abolici6n?
Tanto Olmedo como Castillo identificaban a la mita como un
aspecto de la servidumbre personal, incluso aquel se atrevia a relatar
su origen. Olmedo no tenia dudas acerca -del origen feudal de las
instituciones de trabajo americanas:
De alli vinieron (de la conquista)esos nombresominosos y de indigna
barbarasreliquias
recordacion,de encomiendas,de mitas,de repartimientos;
de la conquistay gobiernofeudal;fomento de la perezay del orgullode los
nobles y de los ennoblecidos, y esclavitudde los naturales,paliadacon el
nombre de protecci6n.38
Y en otro fragmento, tremendamente critico hacia los origenes
de la incultura de los indios, Olmedo tiene un "desliz", denomina
"senores" a los posedores de indios mitayos:
37. PabloMacera,Feudalismo colonial americano: El caso de las haciendas
peruanas (Lima,1974).
38. Diarto de sesiones de Cortes,12 de agosto de 1811, 3:3532.
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Mas en honor de la verdad, debe decirse que aquellos seffores de mitaen
una sola cosa han mirado siempre a sus siervos con mucha piedad y
yos,
compasi6n, y es, en no haberles enseiado nada.39
Insistimos. Parrafos que json pura tactica parlamentaria? Lo son
en cuanto a la alusi6n e identificaci6n con el esclavismo. Pero eacaso
no representaba la servidumbre para estos mitayos una suerte de
esclavitud? iEs pura ret6rica de los representantes americanos, o en
esta ocasi6n la realidad social que estan relatando coincide con la
propia realidad hist6rica?
Estamos ante uno de los aspectos mas controvertidos de la historiografia americanista, es decir, jcual es el modo de produccion
dominante en America Latina antes de la independencia?40 Aspecto
controvertido, cuestionado, debatido, y que necesitaria nuevos estimulos cientificos para un nuevo debate, amplio, plural, enriquecedor,
fuera de dogmas preestablecidos.
Parece claro que la mita si que responde a contenidos senioriales,
si bien tambien es cierto que esta, a la altura de principios del XIX,
no estaba extendida como relaciones de producci6n predominantes
mas alla de la regi6n andina.
Tras estos dos discursos intervinieron el conde de Toreno y
Gallego. Ambos pedian que se aboliesen sin ninguin reparo.
Por ultimo se procedi6 el dia 21 de octubre a la votaci6n de la
proposici6n de Castillo. Habian pasado mas de seis meses desde su
primera propuesta del dia 4 de abril. La abolici6n de la mita se
transform6 en decreto el 9 de noviembre de 1812.41 En esencia, el
texto de este decreto respondia, salvo pequeias modificaciones y
adiciones, al contenido propuesto por Castillo el 4 de abril. Con ello
los diputados americanos conseguian que las Cortes gaditanas abolieran uno de los aspectos fundamentales del regimen colonial
americano. Quedaban otros aspectos, quedaban otras medidas, quedaba tambien la reacci6n absolutista que terminara con la esperanza
de la via autonomista en las Cortes de Cadiz. Quedaba, asimismo,
tambien el triunfo por frustraci6n de esta de la insurgencia americana
durante los anos veinte.
39. Ibid., 3531. El subrayadoes nuestro.
40. Unade las mejoresrecopilacionessobrela polemicase puede encontraren
Modos de producci6n en America Latina, Cuadernosde pasadoy presente, n? 40,
SigloXXI, 1975, 5aedici6n.
41. Diario de sesiones de Cortes,4 de abrilde 1812, 4:3954.
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