1 Protocolo de actuación para quienes imparten justicia en asuntos que involucren hechos constitutivos de tortura y malos tratos Universidad Autónoma De Nuevo León Facultad de Derecho y Criminología Materia: Técnicas de entrevista Docente: Nancy Judith García Valle Alumno: Ernesto Pérez Cuevas Matricula: 1743270 Fecha: 07 de Marzo del 2019 2 Índice Portada 1 Índice 2 Capítulo 1 sobre protocolo 3 Capítulo 2 Juzgar y sancionar la tortura y otros delitos 6 Capítulo 3 Detonar la persecución de la tortura y de otros delitos 7 Capítulo 4 Prevenir la tortura, así como otros delitos y malos tratos relacionados 8 Referencias bibliográficas 9 3 Capítulo 1 Sobre protocolo Nuestro país es uno de los países que prohibió la tortura y los malos tratos, y que ha reconocido la competencia de diferentes organismos internacionales para supervisar el cumplimiento de sus obligaciones, en México la tortura ocurre de manera muy frecuente y ha sido calificada como una violación sistemática de los derechos humanos por el Comité contra la Tortura de las Naciones Unidas. A pesar de todos los avances que ha tenido México respecto para mejorar la situación de los derechos humanos, el poder judicial tiene la obligación de respetar, garantizar, de promover y proteger los derechos humanos. La tortura se percibe como un acto de los países muy alejados y con gobiernos antidemocráticos o como incidente en la trama de películas o historias. También se argumenta que es un acto desprovisto de razón, o barbárico. La integridad personal como un derecho humano deriva su contenido de la dignidad humana, y unos de los principios cardinales que determina el alcance al derecho a la integridad es la prohibición de infligir tortura y malos tratos a las personas. La prohibición de infligir tortura y malos tratos se encuentra consagrada en la declaración universal de los derechos humanos en el artículo 5 y en el artículo 7 del pacto internacional de derechos civiles y políticos, y esta prohibición no solo se le da a los actos que le causan a la víctima dolor físico, sino también los que pueden causar sufrimiento psíquico y moral. 4 Para el CCT, la obligación de prevenir la tortura y los malos tratos implica el reconocimiento de que una y otros están interrelacionados por lo que el comité señalo que de esta manera deriva dos conclusiones jurídicas. Uno es el carácter absoluto de la prohibición de los malos tratos, y la otra que son las obligaciones del estado en la prevención, investigación, y la sanción de la tortura y malos tratos. La corte interamericana ha desarrollado su jurisprudencia llegando a la conclusión que la manera de identificar la tortura de los malos tratos es dependiendo la intensidad del sufrimiento. Y esto requiere de un análisis de caso por caso y que contemple todas las circunstancias, incluyendo la duración del trato, las secuelas físicas y psicológicas, el sexo, edad y estado de salud de la víctima. En el caso de menores la corte Interamericana de los Derechos Humanos ha señalado que cuando se analiza si un determinado acto es consecutivo de tortura, este se debe someter a un nivel de escrutinio más riguroso. Ciertos tratos que no alcancen el nivel de intensidad para ser calificados como tortura en los adultos en condiciones mentales plenas, estos pueden ser calificados como tales si las víctimas son niñas/os o personas con discapacidades mentales. A pesar del que el Comité de Derechos Humano en muy pocas ocasiones distingue entre tortura y malos tratos, para determinar si se ha violado el artículo 7 del PIDCP, aquel si tiene en cuenta componentes subjetivos y objetivos, de manera que tal determinación depende de las circunstancias del caso. 5 Teniendo en consideración que el estado tiene el monopolio legítimo de la fuerza, este debe hacerlo con un uso razonable, excepcional y proporcional de la fuerza con el fin de respetar el derecho a la integridad personal. Dentro de las obligaciones de prevención a cargo del Estado están: la tipificación del delito de tortura, las medidas educativas, la supervisión permanente, la tortura cometida por particulares entre otras medidas de prevención. El estado tiene la obligación de investigar violaciones del derecho a la integridad personal, y como bien dice este es un deber estatal que deriva del derecho internacional y no puede verse atenuado por actos o disposiciones normativas internas de ninguna índole. De esto podemos decir que el estado tiene la obligación de garantizar el derecho de acceso a la justicia conforme a las obligaciones que le imponen los tratados internacionales de los derechos humanos en materia de prevención y sanción de la tortura y de la violencia contra la mujer. Así mismo la falta de investigación contra hechos que atenten gravemente contra la integridad personal como la tortura y la violencia sexual constituyen un incumplimiento de las obligaciones del Estado. Otras obligaciones que tiene el estado respecto del derecho humano a la integridad personal es el uso de la fuerza y dice que esta debe ser tanto necesaria como proporcional con respecto a la situación que serán usada, y esto con el fin de hacer cumplir una ley o mantener el orden público. La protección de la integridad personal incluye la prohibición de 6 los castigos corporales estos impuestos por la comisión de un delito o como medida educativa o disciplinaria. Tampoco se puede hacer que las personas declaren en su contra, ni que por sí mismas se declaren culpables. La incomunicación, el confinamiento solitario el hacinamiento, la separación entre personas procesadas o sentenciadas como trato humano, condiciones de vida digna y segura en reclusión, la detención ilegal, la integridad personal de las mujeres, afectación de la integridad personal de los familiares de las víctimas de violaciones a los derechos humanos, la desaparición forzada de personas, las ejecuciones extrajudiciales, miembros de comunidades indígenas y la salud e integridad personal también pasan a formar parte de las obligaciones que tiene el Estado respecto la integridad personal. Capítulo 2 Juzgar y sancionar la tortura y otros delitos En este capítulo se parte de los elementos del tipo para examinar diversas expresiones del delito de tortura tanto por acción como por omisión impropia; por parte de sus superiores jerárquicos o de sus subordinados y auxiliares; en instituciones de seguridad pública, salud y en las de procuración e impartición de justicia. El artículo 3 de la Ley Federal para Prevenir y Sancionar la Tortura establece que se comete el delito de tortura como un servidor público somete a personas a sufrimientos graves con el fin de obtener algo. El Ministerio Publico tiene la responsabilidad de realizar la clasificación jurídica e identificar con precisión el tipo penal de que se trate. 7 Los delitos contextos a la tortura y su encubrimiento son: los delitos contra la vida e integridad personal, abortos, abuso de autoridad por parte de servidores públicos, privación ilegal de la libertad fuera del procedimiento, detención ilegal durante la averiguación previa fuera de los casos señalador por la ley, falsedad en declaraciones judiciales y en informes dados a una autoridad y la falsificación de indicios o medidas de prueba. La tortura y algunos de los delitos asociados a la misma, generalmente son de ejecución oculta. La ausencia de medidas preventivas contra la tortura y de medidas para aprobar la misma no puede ser compensada con un debilitamiento de las garantías procesales de las personas acusadas por los delitos de tortura y conexos. Capítulo 3 Detonar la persecución de la tortura y de otros delitos No es tarea del poder judicial de la federación la investigación de los delitos pero sin embargo existen obligaciones y responsabilidades como lo es el denunciar y formular quejas por actos de tortura o delitos relacionados para hacer que se investiguen los mismos. En el artículo 222 de código nacional de procedimientos penales dice que a la persona que le conste que se ha cometido un hecho probablemente constituido de un delito esta obligada a denunciarlo ante el ministerio público o cualquier agente de policía. Las y los jueces de ejecución de amparo no tienen la atribución de supervisar las condiciones de internamiento como corresponde a las y los visitadores del sistema nacional no jurisdiccional de protección a los derechos humanos, y en otros países, a los jueces de vigilancia penitenciaria. 8 El Consejo de la Judicatura federal tiene como obligación la vigilancia y la disciplina en el Poder judicial Federal y con esto cuenta con la Visitaduría como órgano auxiliar que es competente para inspeccionar el funcionamiento de los Tribunales de Circuito y de los Juzgados de Distrito para así supervisar las conductas de los integrantes de estos órganos. Esto fundamentado en el artículo 99. Capítulo 4 Prevenir la tortura, así como otros delitos y malos tratos relacionados El tener el control de la legalidad e la detención constituye una oportunidad valiosa para evitar la tortura y las conductas asociadas a las que se ha hecho referencia. En temporalidad de la detención podemos entender que habla acerca de la flagrancia que cuando una persona es detenida, inmediatamente debe ser puesta sin demora a disposición del Ministerio Publico. Puede ocurrir un delito cuando en el caso de que un civil sea detenido por elementos del ejército sin justificación en el procedimiento penal y retención indebida en instalaciones militares. El practicarle tortura a una persona durante la detención inicial no solo constituye no solo constituye una afectación a la integridad personal sino también constituye una violación autónoma al derecho a la libertad personal. Cuando a la persona alegue que la confesión ha sido obtenida mediante coacción, los estados tienen la obligación de verificar la veracidad de dicha denuncia a través de una investigación llevada a cabo con la debida diligencia. 9 La exhibición de las víctimas de delitos en los medios de comunicación forma parte de las violaciones de los derechos humanos. La incomunicación también es una violación a los derechos humanos puesto que las victimas deben tener derecho a hablar con sus familiares y abogados. Referencias bibliográficas López Pacheco, R. (2014). Protocolo de actuación para quienes imparten justicia en asuntos que involucren hechos constitutivos de tortura y malos tratos. México: Suprema Corte de Justicia de la Nación.