ALMA, HIJO SE ARREPIENTE. Escena: (Se escode una silla tras la cortina izquierda) Se abre el telón y se ve a Alma Padre apartando a una persona y otros están alrededor de el en posición de oración. Narrador: El rey Mosìah nombro a Alma líder de la iglesia en Zarahemla. Luego, Alma escogió a otros hombres para que le ayudaran a enseñar a los nefitas. Escena: Termina Alma de apartar y todos se ponen a platicar. Entra otro grupo de personas y se quedan en medio platicando. Narrador: Alma y el rey Mosìah estaban preocupados porque los incrédulos estaban haciendo sufrir a los miembros de la iglesia debido a sus creencias. Escena: Entra Alma, hijo platicando con sus amigos y se encuentran con el segundo grupo de personas; Alma hijo y su grupo hacen ademanes indicándoles al segundo grupo de que no vayan a la iglesia y que los sigan a ellos y salen de escena con el segundo grupo como si los hubieran convencido de seguirlos. Narrador: Alma tenía un hijo que se llamaba Alma. Este no creía en las enseñanzas de Su padre y se convirtió en un hombre malvado. Alma, hijo y los cuatro hijos del rey Mosìah lucharon en contra de la Iglesia. Ellos convencieron a muchas personas de que dejaran la Iglesia y se volvieran malas. Escena: Cuando sale el segundo grupo con Alma hijo, el primer grupo se esconde tras La cortina izquierda excepto Alma Padre quien se queda en posición de oración Al terminar de hablar el narrador se levanta y se esconde tras la cortina izquierda. Narrador: Alma Padre oro para que su hijo aceptara la verdad y se arrepintiera. Escena: Entran caminando Alma hijo y sus amigos platicando. Narrador: Alma hijo y los 4 hijos del rey Mosìah continuaron tratando de destruir la Iglesia. Escena: Uno de los niños que están escondidos tras la cortina izquierda previamente se viste de blanco y sale con la silla al escenario y se sube a ella en el momento que el narrador inicia con esta parte. El ángel hace ademanes para indicar que les esta hablando. Los cinco niños caen al suelo quedando semi-sentados y con expresión de susto y continúan escuchando. Cuando el narrador mencione “cayeron otra vez” se acuestan todos en el suelo como cayendo desmayados. Narrador: Un día se les apareció un ángel que les hablo con voz fuerte que hizo temblar la tierra. Los 5 jóvenes se asustaron tanto que cayeron a tierra. El ángel le pregunto a Alma, hijo, la razón por la que luchaba en contra de la Iglesia. La tierra tembló cuando el ángel le dijo a Alma, hijo que dejara de tratar de destruir la Iglesia. Todos cayeron otra vez, sabían que el poder de Dios había sacudido la tierra. Escena: El ángel se esconde tras la cortina izquierda llevándose la silla. Se levantan todos menos Alma, hijo intentan despertarlo pero el sigue desmayado entonces lo levantan y lo llevan al lado derecho del escenario donde ya se encuentra Alma, Padre y lo acuestan frente a el y el los recibe. Entonces ellos hacen como que le platican lo sucedido. Narrador: Alma, hijo estaba tan asombrado que no podía hablar; y se había debilitado tanto que ni siquiera podía mover las manos. Los hijos de Mosìah llevaron a Alma, hijo, a su padre y le contaron todo lo que había sucedido. Escena: Alma, Padre se inclina en posición sin cerrar los ojos sino levantando la vista al cielo como agradeciendo por su hijo. Narrador: Alma, Padre estaba feliz porque sabía que Dios había contestado sus oraciones. Escena: Se levanta Alma, Padre y hace señas a los que están detrás de la cortina izquierda junto con el ángel (pero sin ropa de ángel) de que se acerquen y todos se inclinan en posición de oración. Narrador: Alma, Padre junto con otros líderes de la Iglesia, ayunaron y oraron pidiéndole a Dios que ayudara a Alma, hijo a recuperar sus fuerzas. Escena: Se levanta Alma, hijo y los lideres y se ponen alrededor de el y les empieza a hablar. Entran el resto de los niños y sigue hablándoles. Narrador: Después de dos días y dos noches, Alma, hijo pudo hablar y moverse. Dijo a la gente que había padecido mucho por los pecados que había cometido, que estaba arrepentido y que Dios lo había perdonado. El estaba feliz porque sabía que Dios lo amaba. Escena: Los cuatro hijos de Mosìah se separan del grupo y se unen a Alma, hijo y se alejan despidiéndose mientras que el resto de los niños salen. Ellos dan una vuelta por todo el escenario y salen. (Se cierra el telón cuando el narrador deja de hablar). Narrador: Alma, hijo y los hijos de Mosìah comenzaron a enseñar la verdad por toda la tierra, diciendo a todos lo que habían visto y oído. Se esforzaron por reparar el daño que habían causado. Muchas personas les escucharon y les creyeron. Dios bendijo a Alma, hijo y los hijos de Mosìah mientras enseñaban el evangelio. AMMON, UN GRAN SIERVO Escena: Entra Ammon a escena saliendo detrás de la cortina izquierda y se encuentran con 3 niños (lamanitas) y le amarran las manos de manera sencilla y caminan al lado derecho del escenario donde ya estarán tres niños (el rey sentado y dos guardia parados a su costado) recibiéndolos. Narrador: Ammon uno de los hijos del rey Mosìah fue a predicar a la tierra de Ismael. Al entrar en ella, los lamanitas lo ataron y lo llevaron ante su rey, Lamoni. Escena: Ammon hace como que le habla al rey y al terminar de hablar el narrador, un guardia desata a Ammon. Y salen todos de escena. Narrador: Ammon le dijo al rey que quería vivir entre los lamanitas y servirle. Entonces el rey ordeno que lo desataran. Escena: Entran Ammon y otros niños con el rebaño. Después entran otros niños (ladrones lamanitas) y espantan a los animales que salen corriendo para todos lados. Y los ladrones también se van; entonces los siervos se acercan a Ammon y hacen señas de hablarle y estar preocupados. Después Ammon les habla. Narrador: El rey envío a Ammon a cuidar a sus rebaños. Un día, cuando Ammon y otros de los siervos llevaba los rebaños al abrevadero, unos ladrones lamanitas dispersaron los animales con el fin de robarlos. Los siervos tuvieron miedo porque el rey mataba a los que perdían animales. Ammon sabía que esa era su oportunidad para que ellos escucharan sus enseñanzas. Escena: Ammon les esta hablando y después ellos van a juntar a los animales y los llevan del lado izquierdo del escenario. Enseguida entran los ladrones nuevamente acercándose lentamente y como escondiéndose. Ammon sale solo a hacerles frente y con una sonda (sin piedra) hace como que les lanza piedras y se van saliendo unos ladrones y luego lucha con el resto con espadas y se van yendo hasta que salen todos los ladrones. Narrador: Les dijo a los siervos que juntaran nuevamente a los animales y así lo hicieron. Los ladrones lamanitas regresaron. Ammon dijo a los siervos que cuidaran el rebaño mientras el peleaba con los ladrones. El poder de Dios estaba con Ammon; el les pego con piedras, ellos trataron de matarlo con sus mazas, pero cada vez que lo intentaban el les cortaba el brazo. Atemorizados los ladrones huyeron. Escena: Uno de los siervos recoge una manta escondida tras cortina izquierda y se une a otros 3 para que cada uno tome una esquina de la manta y simulan recoger los brazos del suelo y los llevan al rey que ya esta del lado derecho sentado con un guardia esperándolos. Los siervos llegan, dejan la manta y le cuentan lo que paso. Después se retiran, y el rey queda en actitud pensativa. Los guardias se quedan con El. Narrador: Los siervos llevaron los brazos cortados ante el rey Lamoni y le contaron lo que Ammon había hecho. El rey quedo asombrado por el poder de Ammon y tenia miedo ya que pensaba que Ammon era el gran Espíritu. Escena: Entra Ammon y el rey sigue pensativo. Ammon se queda esperando un breve tiempo y comienza a hablarle al rey haciendo ademanes y continúan conversando; después saca un rollo de papel (pergamino/escrituras) y sigue hablando con el rey. Narrador: El Espíritu Santo le hizo saber a Ammon lo que pensaba el rey. Ammon explico que el no era el Gran Espíritu, sino un hombre. El rey le ofreció a Ammon lo que el quisiera si le decía con cual poder había derrotado a los ladrones y como conoció sus pensamientos. Ammon le dijo que solo deseaba que creyera sus palabras. El rey le dijo que creería todo lo que el le dijera. Ammon le pregunto al rey Lamoni si creía en Dios. El rey le dijo que creía en un Gran Espíritu. Ammon dijo que el Gran Espíritu es Dios que creo los cielos y la tierra, que conoce los pensamientos de las personas y que las personas fueron creadas a la imagen de Dios. Ammon con las Escrituras enseña al rey acerca de la Creación, de Adán y de Jesucristo. Escena: Ammon se levanta y se retira del lado izquierdo y se esconde tras la cortina. El rey se inclina en posición de oración, enseguida se tira al suelo fingiendo que esta muerto, entrando en ese momento la esposa y los siervos quienes acuestan al rey y lo cubren con una manta a medio cuerpo mientras que la esposa se inclina a orar junto a el. Los siervos se quedan parados detrás de ella y el rey. Un niño pasa por el frente del escenario de lado a lado mostrando un cartel que dice “Después de dos días” y sale. Se acercan los siervos y le hablan a la esposa del rey. Narrador: El rey creyó las palabras de Ammon y oro para que se le perdonaran sus pecados. Luego cayó al suelo como si estuviera muerto. Los siervos y la esposa del rey lo acostaron y lo cubrieron. Después de dos días, los siervos pensaron que estaba muerto y decidieron enterrarlo. Escena: La esposa se levanta y se va al lado izquierdo del escenario y encontrándose con Ammon quien sale detrás de la cortina, platica con el, se regresa la esposa con el rey y se queda junto a el. Narrador: La reina no creía que su esposo estuviera muerto. Habiendo oído acerca del gran poder de Ammon, le pidió que ayudara al rey. Ammon sabia que el rey Lamoni se hallaba bajo el poder de Dios; dijo a la reina que Lamoni despertaría al día siguiente. Ella permaneció al lado de Lamoni toda la noche. Escena: Pasa un niño por el frente del escenario de lado a lado con un cartel que dice “Al día siguiente” y sale. Se despierta el rey y se sienta a platicar con ella. Después se levanta, entran todos y se dirige a ellos hablándoles con ademanes y ellos asientan con la cabeza aceptando lo que el les dice. Se cierra el telón. Narrador: Al día siguiente, Lamoni se levanto y dijo que había visto a Jesucristo. El rey y la reina fueron llenos del Espíritu Santo. Lamoni enseño al pueblo acerca de Dios y de Jesucristo; todos los que creyeron, se arrepintieron de sus pecados y fueron bautizados. COMO OBTUVIMOS EL LIBRO DE MORMON Escena: Entra Moroni caminando con las planchas bajo el brazo y un costal o morral donde lleva sus cosas porque anda errante, y camina dando vuelta alrededor del escenario; para esto previamente se pondrá una silla pequeña en el centro del escenario casi pegado a la pared, pero esta silla estará forrada de manera que parezca una piedra. También se pondrá otra piedra a un lado. Cuando el narrador mencione “escondiéndose de los lamanitas” Moroni deberá esconderse detrás de la silla y entraran rápidamente unos niños vestidos de lamanitas con arcos y flechas, harán como que lo buscan y no lo encuentran y salen rápidamente de escena Narrador: Moroni fue el último de los profetas que escribieron en el libro de Mormòn. Moroni se quedo solo ya que los lamanitas inicuos mataban a todo nefita que no negaba a Jesucristo. Anduvo errante, y escondiéndose de los lamanitas. (pausa) Escena: Moroni se sale del escondite y se sienta en la piedra deja sus cosas y se pone a escribir sobre las planchas. Narrador: Moroni antes de enterrar las planchas por última vez, escribió una promesa para los lamanitas y para todos los que leyeran esos registros. Dijo a la gente que leyeran los registros, que pensaran bien en lo que habían leído y que luego le preguntaran al Padre Celestial si son verdaderos. Moroni prometió que si las personas pedían con sinceridad, con fe en Cristo, el Espíritu Santo les ayudaría a saber que los registros son verdaderos. Escena: Se levanta y guarda las planchas dentro de la misma piedra sobre la que estaba sentado y con la piedra que tiene a un lado la pone encima de la otra piedra como tapándola. Se esconde la piedra tras la cortina izquierda. Narrador: Cuando Moroni termino de escribir sobre las planchas de oro, las escondió en una caja de piedra en el cerro de Cumorah y cubrió la caja con una gran piedra. Su obra terrenal había acabado. Escena: Entra a escena el niño José caminando hasta en medio del escenario, leyendo la Biblia. Cuando el narrador mencione que decidió preguntarle a Dios, el cierra su biblia se regresa por donde entro, deja su biblia y vuelve a entrar. Narrador: Cuando José Smith tenia 14 años de edad, muchas iglesias afirmaban ser verdaderas, y el no sabia a cual debía unirse. Un día, al leer la Biblia, José leyó en Santiago 1:5: “Y si alguno tiene falta de sabiduría, pídala a Dios”. José deseaba saber cual iglesia era la verdadera, de modo que decidió preguntarle a Dios. Escena: Previamente deberán estar escondidos 2 árboles, una silla y una persona con una lámpara. Cuando José sale de escena, deberán colocarse los árboles del lado izquierdo y la persona deberá pararse sobre la silla y esperar. Entra José y se arrodilla frente a los árboles y luego sacude su cabeza levemente para indicar que lucha con Satanás y continúa orando. Cuando el narrador diga “Nuestro Padre Celestial y Jesucristo se le aparecieron a José en un pilar de luz” entonces José levanta la vista hacia los dos árboles y la luz que la persona escondida encenderá y sostendrá con la lámpara arriba en medio de los dos árboles. Después José hace como que habla con ellos y luego se levanta y sale de escena. Se esconden nuevamente los árboles, la silla, la persona y la lámpara detrás de la cortina izquierda. Narrador: Una mañana de primavera, José fue a orar a una arboleda que estaba cerca de su casa. Cuando se arrodillo y empezó a orar, Satanás trato de impedírselo. José oro con más fervor y pidió a nuestro Padre Celestial que le ayudara. Nuestro Padre Celestial y Jesucristo se le aparecieron a José en un pilar de luz. Nuestro Padre Celestial señalo a Jesús y dijo: “Este es mi hijo Amado: ¡Escúchalo!” José pregunto a cual iglesia debía unirse. Jesús le dijo que no se uniera a ninguna de ellas. Escena: Entra un niño caminando de lado alado del escenario con un letrero que dirá “pasaron 3 años”. Al mismo tiempo José entra y coloca en el suelo una cobija doblada a lo largo y una almohada para simular su cama y se arrodilla del lado izquierdo. Entra un niño vestido de blanco (Moroni) y hace ademanes para indicar que esta hablando con José. Después sale Moroni de escena. Sale José llevándose la cobija y la almohada. Narrador: Pasaron 3 años. Una noche, José oro para que le fueran perdonados sus pecados y para saber lo que debía hacer. A José se le apareció un ángel llamado Moroni, quien le hablo acerca de un libro que estaba escrito sobre planchas de oro. José habría de traducir al ingles lo que estaba escrito en esas planchas. Después que Moroni se fue, José pensó en lo que este le había dicho. Moroni volvió dos veces mas esa misma noche. Escena: La persona escondida tras la cortina izquierda saca la piedra que uso Moroni y la coloca en el mismo lugar, también deja un palo. Entra José caminando por el escenario dando vueltas hasta llegar a la piedra. Se acerca, toma el palo y como que hace mucha fuerza, retira la piedra y se asoma para ver dentro de ella. Entonces José hace como que va a sacar las planchas pero en ese momento entra Moroni y con la mano le indica que no. José se queda escuchándolo y Moroni hablándole. Salen los dos de escena y después entra José y agarra las planchas y se las lleva. Narrador: Al día siguiente,(pausa) José fue hasta lo alto del cerro de Cumorah que había visto en una visión. Ahí encontró una piedra grande, la cual pudo levantar con un palo. Debajo de la roca había una caja de piedra; al mirar dentro de la caja, José vio las planchas de oro. Moroni se le apareció a José y le dijo que no sacara las planchas sino que regresara en esa misma fecha cada año durante cuatro años. Cada vez que José iba, Moroni, le daba instrucción. Al cabo de cuatro años, por fin se le permitió a José llevarse las planchas de oro. Escena: Se colocan dos mesas enfrente del escenario pero un poco hacia el lado derecho con dos sillas detrás en una se sienta José con las planchas y en la otra mesa otro niño con un block de hojas blancas recicladas. José simula estar leyendo en voz alta y el otro niño simula estar escribiendo. Narrador: José uso el Urim y Tumim para traducir algunas de ellas. Los escribientes le ayudaban a José a escribir las palabras a medida que el las traducía de las planchas de oro. Escena: Se levantan los dos y el niño le entrega el block de hojas a José y este se lo da otro niño quien saldrá y regresara con el libro de Mormon y se lo entregara a José. José hojea el libro y se cierra el telón. Narrador: José llevo las palabras traducidas a un impresor para que con ellas formara un libro. El libro se llama El libro de Mormòn; habla de las personas que vivieron en America hace muchos años; habla también de Jesucristo, el hijo de Dios. HELAMAN Y LOS 2000 JOVENES GUERREROS Escena: Están todos los niños reunidos y sentados del lado izquierdo del escenario, escuchando a Ammon quien les esta hablando. Se levantan unos cuantos niños, se enojan y salen de escena. Los del pueblo de Ammon se levanta y arrojan sus armas frente a ellos formando una pila de armas (escudos, espadas, arcos sondas, etc.) después se mueven todos hacia el lado izquierdo (excepto Ammon quien se retira hacia el lado derecho) al mismo tiempo que se cierra la cortina izquierda; Ammon se inclina en posición de oración mientras que los niños que están detrás de la cortina izquierda recogen las armas y las esconden en una caja escondida tras la cortina izquierda. Entonces se levanta Ammon mientras se abre la cortina izquierda se une al grupo y les hace señas de que lo sigan y salen todos de escena. Narrador: Los hijos de Mosìah enseñaron el Evangelio a los lamanitas; miles de ellos se arrepintieron y se unieron a la Iglesia. Pero los que no se arrepintieron, se enojaron con los de la Iglesia y querían pelear con ellos. Pero el pueblo de Ammon no quería pelear así que enterraron sus armas profundamente en la tierra y prometieron a Dios que nunca volverían a matar. Estos lamanitas se pusieron el nombre de anti-nefi-lehitas o el pueblo de Ammon. Ammon amaba a su pueblo y oro al Señor para que los ayudara. El Señor le dijo que tomara a su pueblo y saliera de esa tierra. Escena: Entra Helamàn y unos lideres con el y detrás de el entran todos los que Representan el pueblo de Ammon hablándole a Helamàn y los líderes y estos a Su vez diciendo que no, entonces se separan del grupo los que representan a los dos mil jóvenes indicando que ellos si pueden ir además señalan a Helamàn como su líder. Helamàn dice que si con la cabeza. Narrador: El pueblo de Ammon se fue a vivir con los nefitas, y estos los protegían. Cuando los enemigos del pueblo de Ammon atacaron a los nefitas, El pueblo de Ammon sintió el deseo de romper su promesa y ayudar a defender a los nefitas. Helamàn y otros líderes nefitas no querían que quebrantaran su promesa. Pero los jóvenes hijos del pueblo de Ammon no habían hecho esa promesa y ellos deseaban ayudar al ejercito nefita a luchar por la libertad. Dos mil de estos jóvenes decidieron defender su país; le pidieron a Helamàn que fuera su líder. Escena: Salen del escenario el resto de los del pueblo de Ammon y los dos mil jóvenes junto con Helamàn se van hacia el lado izquierdo del escenario a tomar las armas y escudos que quedaron en la caja tras la cortina izquierda; Comienzan a caminar con Helamàn al frente y dan una vuelta por todo el escenario quedando en el centro viendo hacia la salida. Narrador: Estos jóvenes eran valientes, intrépidos y fuertes; también eran honrados y dignos de confianza, y guardaban los mandamientos de Dios. Helamàn marcho frente a sus dos mil soldados jóvenes; los llama sus hijos, y ellos lo llamaban su padre. Aunque los hijos de Helamàn jamás habían estado en el campo de batalla, no tenían miedo. Sus madres les habían enseñado a tener fe en Dios y a saber que El es ayudaría. Escena: Levantan y bajan a medio cuerpo sus armas al mismo tiempo indicando que se preparan a luchar y salen del escenario. Narrador: Helamàn y su ejército lucharon en contra de los lamanitas. Estos jóvenes obedecían todas las órdenes que les daba Helamàn. Lucharon valientemente y ayudaron a retroceder al enemigo. Escena: Entran a escena todos heridos y cansados. Helamàn revisa a todos rápidamente con la vista y haciendo un recorrido entre ellos. Helamàn se pone feliz y los abraza y felicita, entonces se cierra el telón. Narrador: Después de la batalla, Helamàn descubrió que todos sus hijos habían sido heridos, pero que ninguno había perdido la vida. Fue un milagro. Helamàn se sentía muy feliz; sabia que esos jóvenes habían sido protegidos por la gran fe que tenían en Dios. LEHI Y SU FAMILIA Escena: Se abre el telón y se encuentran en el escenario un grupo platicando muy alegres, Lehi entra caminando lentamente y se dirige al frente del escenario donde se encuentra una manta extendida con la que se tapa y se acuesta como si fuera su cama. En la pausa del narrador se levanta y se dirige al grupo de gente. El narrador comienza a hablar mientras que Lehi hace ademanes hablándole a la gente. La gente se enoja, lo persigue y el huye; saliendo todos de escena. Se cierra el telón y se pone una manta en la pared con el dibujo de un valle y un río. Narrador: La mayoría de la gente que vivía en Jerusalén 600 años antes del nacimiento de Cristo era inicua. Dios envío profetas para llamarlos al arrepentimiento, pero no quisieron escuchar. Lehi era profeta; el oró para que la gente se arrepintiera. Lehi regreso a casa y tuvo una visión en la que vio a Dios rodeado de muchos ángeles que cantaban y le adoraban. En la visión, a Lehi se le dio un libro que decía lo que iba a suceder en el futuro en el leyó que Jerusalén seria destruida porque la gente era inicua. (Pausa) Lehi dijo a la gente que Jerusalén iba a ser destruida; también hablo de la venida de Jesús. La gente se enojo con Lehi y trato de matarlo, pero el señor lo protegió. Escena: Se abre el telón. Entran Lehi y su familia cargando cosas, caminan hacia el frente del escenario dando una vuelta y terminan frente a la pared con el dibujo. Lehi se para frente al dibujo y les habla señalando a Laman y Lemuel, estos le escuchan un momento y luego dicen que no con la cabeza. Nefi se levanta, se aparta y se inclina en posición de oración frente al escenario. Narrador: El Señor estaba complacido con Lehi y una noche le hablo en un sueño. Le dijo que reuniera a su familia y salieran de Jerusalén y así lo hizo. La familia de Lehi empaco y partieron para el desierto después de viajar 3 días acamparon en un valle cerca de un río. Lehi dio al río el nombre Laman y al valle el nombre de Lemuel. Lehi deseaba que sus hijos fuesen como el río y el valle, fluyendo continuamente hacia Dios y siendo constantes en guardar los mandamientos. Pero ellos no creían en su padre. Nefi deseaba comprender las cosas de su padre así que oro y Jesucristo visito a Nefi y le dijo que las palabras de Lehi eran verdaderas. El Señor le prometió a Nefi que por su fe seria bendecido y que seria líder de sus hermanos.(pausa) Escena: En la pausa del narrador, Nefi se levanta al mismo tiempo que Lehi se le acerca y platica con el. Narrador: Lehi le dijo a Nefi que el señor deseaba que el y sus hermanos regresaran a Jerusalén a buscar las planchas de bronce que estaban en poder de un hombre llamado Laban. Las planchas de bronce eran registros importantes acerca de los antepasados de Lehi, y contenían las palabras de Dios reveladas por medio de los profetas. Escena: Se acercan Lehi y Nefi a la familia, toman sus cosas y salen despidiéndose Sam, Nefi, Laman y Lemuel. Se cierra el telón. Se quita la manta del valle y se pone otra con la ciudad de Jerusalén. . Narrador: Laman y Lemuel no deseaban regresar porque no tenían fe pero nefi deseaba obedecer al Señor así que volvieron a Jerusalén. Escena: Se abre el telón. Se encuentra del lado izquierdo del escenario Laban en su trono con dos o cuatro guardias a sus costados. Laman estaba frente a Laban hablándole. Laban levanta el brazo enojado amenazándolo, Laban sale corriendo asustado y los guardias salen tras el. Los guardias regresan y se quedan con Laban. Narrador: Laman fue a ver a Laban para pedirle las planchas. Laban se enojo y no le dio a laman las planchas de bronce. Laban intento matar a laman, pero este escapo. Escena: Entran Nefi y sus hermanos con las joyas. Nefi les habla un momento y luego caminan hacia Laban les muestran las joyas, poniéndolas en el suelo y Nefi habla con Laban. Nuevamente Laban los amenaza levantando el brazo, Nefi y sus hermanos salen corriendo dejando las joyas y los guardias salen tras ellos. Laban se esconde tras la cortina izquierda junto con el trono. Narrador: Laman le contó a sus hermanos y quería regresar con su padre. Nefi dijo que tuvieran mas fe en el Señor. Nefi y sus hermanos fueron a la casa que habían abandonado en Jerusalén y recogieron el oro y la plata que habían dejado para cambiarlas por las planchas. Le mostraron a Laban las riquezas que poseían y se las ofrecieron a cambio de las planchas. Laban mando a sus siervos a que mataran a los hijos de Lehi pero ellos escaparon y Laban se quedo con todo. Escena: Entran Laman y Lemuel enojados con Sam y Nefi. Laman y Lemuel recogen una vara cada quien previamente dejadas allí junto a la pared, se dan media vuelta y hacen como que golpean a Sam y a Nefi. Entra un niño vestido de ángel y se sube sobre una silla y hace como que les habla, ellos escuchan al Nagel. Cuando termina el narrador de hablar se baja el ángel de la silla y sale de escena. Narrador: Laman y Lemuel se enojaron con Nefi y golpearon a Nefi y a Sam con una vara. Entonces se les apareció un ángel y les dijo que dejaran de hacer eso y que el señor les ayudaría a obtener las planchas y que Nefi seria gobernante sobre ellos. Escena: Salen Nefi y sus hermanos y se colocan en la entrada del escenario tras la pared pero asomándose, al mismo tiempo, entra Laban como borracho y se deja caer en el suelo en del lado izquierdo del escenario junto a la pared. Entra Nefi caminando lentamente y volteando hacia todos lados, llega hasta Laban y lo observa. Narrador: Esa noche los hermanos de Nefi se escondieron fuera del muro de la ciudad mientras Nefi entraba ocultamente a la ciudad al llegar a la casa de Laban, Nefi vio a un hombre borracho tendido en el suelo: era Laban. Escena: Nefi le quita la ropa y la armadura que trae encima y se la pone. Se da media vuelta y se va hacia el lado derecho del escenario donde se encuentra con Zoram. Al mismo tiempo se cierra el telón izquierdo solo lo necesario para que salga Laban y se esconda tras la cortina. Zoram tiene una mesa tras el con las planchas de bronce. Zoram toma las planchas y se las entrega a Nefi y le hace señas a Zoram de que lo siga. Caminan juntos hacia el lado izquierdo y entran los hermanos de Nefi poniéndose enfrente de la mesa para que alguien más la quite. Narrador: Nefi obedeció al espíritu santo y enseguida se puso la ropa de Laban y su armadura. Se dirigió a la casa de Laban en donde lo recibió Zoram, el siervo de Laban. Le dijo a Zoram que le entregara las planchas de bronce. Zoram creyendo que Nefi era Laban se las dio. Nefi le dijo a Zoram que lo siguiera. Escena: En el momento en que Nefi y Zoram regresan los hermanos de Nefi se asustan y hacen como que se van pero Nefi les habla haciendo una señal con la mano y en ese momento Zoram se da la media vuelta para irse pero nefi lo detiene tomándole del brazo y habla con el. Se dan la vuelta y se juntan con los hermanos de Nefi y comienzan a caminar por todo el escenario dando 1 vuelta y media conforme a las manecillas del reloj y al terminar se detienen en el centro del escenario encontrándose con Lehi y Sariah quienes entran casi cuando terminan de caminar Nefi y sus acompañantes .Le entrega Nefi a Lehi las planchas. Lehi abraza las planchas, levanta la vista y la mano al cielo en agradecimiento y después Lehi y Sariah abrazan a sus hijos y se inclinan a orar un breve momento. Narrador: Laman, Lemuel y Sam se asustaron al ver venir a Nefi ya que pensaban que era Laban. Empezaron a huir, pero se detuvieron cuando Nefi los llamo. Al ver esto Zoram trata de escapar pero Nefi lo detiene y le promete no hacerle daño si lo acompañaba.(pausa) Así Zoram y los hijos de Lehi regresan al desierto con Lehi y le entregan las planchas de bronce que contenían el relato de Adán y Eva, la creación del mundo y las palabras de muchos profetas. Escena: Se levantan y salen los hijos de Lehi y Zoram del escenario y regresan inmediatamente con Ismael y sus hijas (en pareja). Se encuentran con Lehi y Sariah. Lehi les muestra la Liahona y todos lo rodean tras el viendo y admirando la Liahona mientras que Lehi la sostiene en alto. Se cierra el telón. Narrador: Nuevamente los hijos de Lehi regresaron a Jerusalén por Ismael y su familia para que ellos pudieran casarse con sus hijas y así tener familia y así lo hicieron. A la mañana siguiente Lehi encontró afuera de su tienda una esfera de bronce a la que llamaron Liahona; esta les indicaba el camino que debían seguir en el desierto. Después de ocho años, la familia llego a la orilla del mar en donde encontraron fruta y miel, llamaron al lugar Abundancia. SAMUEL EL LAMANITA PROFETIZA EN CUANTO A JESUCRISTO Escena: Se abre el telon y se encuentra Samuel hablando con dos nefitas. Narrador: Los lamanitas obedecieron los mandamientos de Dios y llegaron a ser más justos que los nefitas. Samuel un profeta lamanita fue a Zarahemla a predicar a los nefitas inicuos, les dijo que se arrepintieran. Escena: Los nefitas hacen señas de que se vaya y al mismo tiempo ellos se van saliendo, mientras que Samuel camina hacia la izquierda y se inclina a orar. Mientras el esta orando alguna persona acomoda una muralla de cartón previamente elaborada a la altura de 20 cms. más que una mesita ya que tras la muralla se pondrá una silla y una mesita para que Samuel se suba y parezca estar encima de la muralla. Samuel se levanta y se va tras la muralla a subirse a la mesa, en ese momento entran la gente del pueblo nefita y le ponen atención. Samuel hará movimientos con sus brazos como si les predicara. Narrador: Los nefitas echaron a Samuel de la ciudad y el se puso en camino a su propia tierra pero el señor le dijo a Samuel que regresara a Zarahemla y dijera a la gente las cosas que el señor pusiera en su corazón. Los nefitas no le permitieron a Samuel entrar en la ciudad, de manera que el subió a la muralla y predico desde allí. El profetizo que en 400 años los nefitas serian destruidos a menos que se arrepintieran y tuvieran fe en Jesucristo. Samuel dijo a los nefitas que Jesucristo nacería en cinco años mas y salvaría a todos los que creyeran en El. Samuel le hablo en cuanto a las señales del nacimiento de Jesús; que aparecería una estrella nueva y que durante la noche antes de que naciera Jesús no habría obscuridad. Luego Samuel le hablo de las señales de la muerte de Jesús que habría tres días de absoluta obscuridad que el sol, la luna y las estrellas no brillarían. Habría truenos, relámpagos y terremotos se derrumbarían montañas y muchas ciudades serian destruidas. Escena: Se retiran unos cuantos niños del grupo y se ponen a platicar con Nefi. Los demas comienzan a lanzarle bolitas de papel pegadas con tape y pintadas de café o gris para simular las piedras solo unas cuantas para detenerse un momento y ver que a Samuel no le pasa nada entonces otros cuantos niños se retiran del grupo y se unen al grupo de nefi que se encuentra del lado derecho del escenario. El resto del grupo vuelve a lanzar bolitas de papel y se acercan lentamente a la muralla como queriendo atraparlo pero en ese momento Samuel se baja de la mesa y se esconde tras la cortina izq. Narrador: Algunos nefitas creyeron las palabras de Samuel y se arrepintieron de sus pecados fueron a buscar a Nefi un nefita justo para que los bautizara. El resto de los nefitas no creyó las palabras de Samuel le arrojaron piedras y le lanzaron flechas pero el señor lo protegió y ninguna de las piedras ni de las flechas lo hirió. Cuando vieron que no podían herirlo muchos más creyeron y fueron a ver a Nefi para que los bautizara. Nefi también enseño a la gente en cuanto a Jesús deseaba que creyeran en Jesús que se arrepintieran y que se bautizaran. Sin embargo, la mayoría de los nefitas no creyeron en las palabras de Samuel y trataron de capturarlo. Samuel salto de la muralla y huyo a su propio país. Samuel empezó a predicar entre los lamanitas nunca mas se volvió a saber de el entre los nefitas. Escena: Entran todos excepto Samuel divididos en dos grupos uno mas grande y el otro mas pequeño entonces el grupo grande se burla del pequeño y estos se ponen tristes. Narrador: Pasaron cinco años y las señales que Samuel profetizo aun no se cumplían. Los nefitas obedientes se pusieron tristes ya que los nefitas inicuos se burlaron de aquellos que si creían y además fijaron un día en el que mataría a los creyentes si la señal no se cumplía. Escena: Entre el grupo pequeño se encuentra nefi quien se aparta y se hinca al frente del escenario y se queda orando un tiempo; después levanta la vista al cielo, se pone contento y regresa al grupo pequeño platicándoles lo que sucederá y todos se ponen contentos. Narrador: Nefi oro todo el día por las personas que iban a perder la vida (pausa larga). El Señor consoló a Nefi y le dijo que esa noche no habría obscuridad; Jesús nacería al día siguiente en Belén. Escena: Todos voltean al cielo y se asombran. Los del grupo grande se dejan caer al suelo en el momento que el narrador dice “cuando el sol salio a la mañana siguiente” los del grupo pequeño ayudan al los desmayados a levantarse y unos cuantos salen del escenario enojados y diciendo que no, mientras que los demás se quedan. Narrador: Esa noche el sol se puso, pero no obscureció. La señal del nacimiento de Jesucristo había llegado; la gente se asombro. Aquellos que tenían pensado matar a los creyentes cayeron a tierra como si estuvieran muertos. Tuvieron miedo porque sabían que las palabras de los profetas eran verdaderas. No hubo obscuridad durante la noche; cuando el sol salio a la mañana siguiente. La gente sabia que Jesucristo nacería ese día. En el cielo apareció una estrella nueva, tal como lo habían predicho los profetas. Escena: Unos cuantos salen enojados y diciendo que no con la cabeza, mientras que los demás se quedan muy contentos. (Se cierra el telón) Narrador: Satanás aun trato de hacer que las personas no creyeran las señales que habían visto, pero la mayoría creyó. Hubo alegres nuevas en la tierra por motivo de que las palabras de lo profetas se habían cumplido. VIAJE A LA TIERRA PROMETIDA Escena: Se abre el telón y se encuentra la familia de Nefi sentados enfrente del escenario del lado izquierdo mientras que Nefi esta del otro del escenario como orando al Señor. Detrás de ellos deberán estar paradas unas tiras de cartón con la figura de las ondas del mar y pintadas. Narrador: Después de que la familia de Lehi hubo acampado a la orilla del mar durante muchos días, el Señor le hablo a Nefi y le dijo que construyera un barco para llevar a su familia a la tierra prometida. Nefi no sabía como construir un barco pero el Señor le dijo que El le mostraría la manera de hacerlo. Escena: Se levanta Nefi y se dirige a su familia y les habla entonces se levantan Laman y Lemuel, se ríen y lo señalan. También le dicen que no con la cabeza y mano pero ya molestos con cara de enojados. Nefi se dirige a ellos como reprendiéndoles. Narrador: Laman y Lemuel se burlaron de Nefi por querer construir un barco. Ellos no creían que el Señor le hubiera mostrado a Nefi como hacerlo y se negaron a ayudar. Nefi dijo a Laman y Lemuel que se arrepintieran y no fuesen rebeldes. Les recordó que habían visto un ángel y también les dijo que Dios tiene poder para hacer todas las cosas. Escena: Laman y Lemuel caminan hacia Nefi como que lo quieren agarrar pero cuando se acercan Nefi les indica con la mano que se detengan. Y ellos se alejan con miedo y se unen a la familia pero sin sentarse. Nefi se da media vuelta da unos pasos queda pensativo, cuando el narrador hace la pausa Nefi se da la vuelta y se acerca a Laman y Lemuel y los toca al mismo tiempo, estos se sacuden y caen al suelo. Laman y Lemuel se hincan a orar, se levantan y salen con Nefi y su familia de escena. Narrador: Laman y Lemuel se enojaron con Nefi y quisieron arrojarlo al mar. Cuando ello se acercaron a Nefi el les mando que no, lo tocaran porque estaba lleno del poder de Dios. Laman y Lemuel tuvieron miedo durante muchos días. Entonces el Señor le dijo a Nefi que tocara a Laman y Lemuel. Cuando lo hizo, el Señor los sacudió. Laman y Lemuel supieron que el poder de Dios estaba con Nefi. Laman y Lemuel se arrepintieron y le ayudaron a Nefi a construir el barco. Escena: Entran Nefi y su familia con el barco sosteniéndolo por atrás el primero y el ultimo en la fila y suben y bajan el barco como si estuvieran sobre el mar, caminando lentamente todos juntos.( El barco se puede dibujar en cartón y se recorta se le ponen unos mecates en cada lado para que puedan sostenerlo). Narrador: Nefi iba muchas veces al monte a pedir ayuda en oración. El Señor le enseño como construir el barco. Una vez que terminaron el barco se prepararon a viajar por el mar. Los fuertes vientos empujaron el barco hacia la tierra prometida. Escena: Se detienen en el centro del escenario. Laman y Lemuel y otros se ponen a bailar y traen botellas como que si estuvieran embriagándose. Nefi se para frente a ellos y les indica que no, pero Laman y Lemuel lo agarran y lo amarran con una cuerda haciendo un nudo sencillo. Lehi mira la liahona y les dice con señas que no funciona. Narrador: Laman y Lemuel y otros empezaron a actuar inicuamente. Cuando Nefi les dijo que no lo hicieran más, se enojaron y lo ataron con cuerdas. La liahona dejo de funcionar debido a la maldad de ellos; no sabían como dirigir el barco. Escena: Todos empiezan a moverse agitadamente junto con el barco. Al mismo tiempo caminan lentamente hacia atrás. Se detienen de caminar pero siguen agitándose, Lehi se acerca a Laman y Lemuel y les habla pero ellos con los brazos cruzados y enojados le dicen que no. Lehi se retira. La esposa de Nefi se acerca y les habla pero ellos igual le dicen que no. Narrador: Una terrible tormenta impulso el barco hacia atrás durante tres días. Lehi les dijo a Laman y Lemuel que lo desataran pero no le hicieron caso. La esposa de Nefi y sus hijos les suplicaron pero se negaron. Escena: Comienzan a agitarse todos aun mas junto con el barco. Entonces Laman y Lemuel se acercan a Nefi y le quitan la cuerda. Lehi le da la liahona a Nefi y este comienza a orar. En ese momento todos se calman y el barco sigue moviéndose pero lentamente y caminando hacia el lado izquierdo del escenario. Narrador: Al cuarto día, la tempestad empeoro entonces Laman y Lemuel tuvieron miedo porque sabían que dios había enviado la tormenta. Desataron a Nefi y el tomo la liahona y esta empezó a funcionar otra vez. Nefi oro, el viento ceso y el mar se calmo. Escena: Al llegar al lado izquierdo se salen todos por el lado izquierdo del escenario y dejan el barco recargado en la pared. Se van al frente izquierdo del escenario y se sientan todos juntos, (Excepto Lehi quien se esconde tras la cortina izquierda) Nefi a un lado de ellos se pone a escribir. Narrador El barco que llevaba la familia de Lehi cruzo el océano y llego a la tierra prometida; allí plantaron sus tiendas. El señor le dijo a Nefi que hiciera planchas de metal para grabar sobre ellas. Nefi escribió acerca de su familia y de los viajes que hacían; también escribió las palabras de Dios. Escena: Se apagan las luces del escenario 3 segundos.(Mientras están apagadas las luces se sacan las tiras de mar y Lehi sale del escenario con el barco) Cuando se encienden las luces se levantan todos y la mitad de los niños (lamanitas) se esconden tras la cortina y la otra mitad (nefitas) se va caminando del lado derecho. Narrador Después de que Lehi murió, Laman y Lemuel se enojaron con Nefi y quisieron matarlo porque no querían que fuera su gobernante. El señor le dijo a Nefi que guiara a las personas justas hacia el desierto. Escena: Regresan los nefitas y se sientan en el centro del escenario. Ahí se quedan hasta que el narrador termina de hablar. Se cierra el telón. Narrador: Viajaron y se detuvieron en un sitio al que llamaron Nefi. Las personas que siguieron a Nefi obedecían a Dios; trabajaron mucho y fueron bendecidas. Los que siguieron a Nefi se hicieron llamar nefitas. Los seguidores de Laman y Lemuel se llamaron a si mismos lamanitas. Se convirtieron en personas de piel obscura; Dios los maldijo a causa de su iniquidad. EL SUEÑO DE LEHI Escena: Se abre el telón y se encuentran en el centro del escenario Lehi hablándole a su familia. Entra un niño vestido de blanco caminando por el frente del escenario y al llegar al lado izquierdo del escenario le indica a Lehi que lo siga. Entonces Lehi se aparta de su familia para seguirlo mientras que su familia sale del escenario. Caminan alrededor del escenario dando una vuelta y quedando Lehi en el centro del escenario y el niño vestido de blanco sale de escena. Lehi se inclina a orar. Narrador: Lehi le dijo a su familia que había tenido una importante visión en un sueño. A causa del sueño, Lehi se sentía feliz por Nefi y Sam, pero triste por laman y Lemuel. En la visión Lehi vio a un hombre vestido con un manto blanco que le dijo que lo siguiera. Lehi lo siguió a un desierto obscuro y triste. Después de haber caminado en la obscuridad por muchas horas, Lehi oro para pedir ayuda. Escena: Previamente detrás de la cortina izquierda se esconde el árbol. Mientras Lehi esta orando alguien coloca el árbol en el centro izquierdo. Al mismo tiempo se coloca la manta con el edificio y la barra de hierro en el centro atravesando todo el escenario. Al iniciar la barra se encuentran Sariah, Nefi y Sam. Se levanta Lehi y mira el árbol y camina hacia el y hace como que come y lo disfruta. Da dos pasos hacia el frente del escenario y agacha la cabeza como mirando un río profundo y lentamente ve el río hasta el otro lado del escenario y mira a su familia a quienes les hace señas de que vengan, entonces ellos guiándose por la barra se caminaron hasta Lehi y comen del fruto muy felices. Narrador: Entonces vio un árbol, cuyo fruto era blanco y dulce, y hacia felices a los que lo comían. Lehi comió del fruto y se lleno de gozo. Entonces deseo que su familia comiera del fruto porque sabía que también los haría felices. Lehi vio un río que corría cerca del árbol. En el manantial del río vio a Sariah, Sam y a Nefi. Lehi llamo a su esposa y a sus hijos para que comieran del fruto. Sariah, Sam y Nefi fueron y participaron del fruto, pero laman y Lemuel no lo hicieron. Escena: Lehi voltea su mirada hacia la barra y por ella vienen algunos niños como que no pueden ver bien por las tinieblas unos se sueltan y empiezan a caminar por todos lados como perdidos hasta que llegan al edificio (Este edificio puede elaborarse con cartón haciendo cortes grandes en las ventanas para que los niños se asomen) y se colocan detrás de el. Otros se siguen en la barra hasta llegar al árbol y comen del fruto. Narrador: Lehi también vio una barra de hierro y un sendero estrecho y angosto que conducía hacia el árbol. Vio a mucha gente que caminaba por el sendero o que se dirigía hacia el. Debido a un vapor de tinieblas, algunos se desviaron del sendero y se perdieron. Otros se aferraron firmemente de la barra de hierro y pudieron llegar hasta el árbol en medio de las tinieblas. Ellos comieron del fruto del árbol. Escena: Siguen caminando niños por la barra, unos se siguen alejando y caminan perdidos hasta que salen o se van al edificio y se asoman por las ventanas junto con los que ya están ahí y se burlan y señalan a los que van por la barra. Narrador: Al otro lado del río había un edificio grande en donde había gente que se burlaba de los que habían comido del fruto. Algunos de los que comieron del fruto se avergonzaron y se alejaron del árbol. Lehi vio a mucha gente en el sueño que tuvo; algunos se aferraban firmemente a la barra de hierro al caminar en las tinieblas para llegar hasta el árbol, en donde comían del fruto. Otros se dirigían al edificio espacioso, o se ahogaban en el río o se perdían. Escena: Lehi les hace señas a Laman y Lemuel para que se acerquen pero ellos hacen señas de que no quieren ir. (Se cierra el telon) Narrador: Laman y Lemuel no comieron del fruto. Lehi se preocupaba por ellos, les exhortaba a que escucharan sus consejos y después de haberles predicado muchas cosas, les mando que guardaran los mandamientos de Dios.