TA E URA NO T A U RO El descubrimiento de nuestros “súper-poderes” personales es algo que debemos agradecer al reciente tránsito de Urano en Aries (2011 – 2018), ya que ese planeta regente de la Nueva Era, atravesó el signo del “yo” ayudándonos a liberarnos de viejas etiquetas, renovando nuestra identidad como sociedad y como individuos. Por supuesto que para cada persona esa etapa de Urano se manifestó de forma única, según su propio mapa natal, pero siendo parte de una civilización también nos aplica el aspecto colectivo del tránsito de un modo u otro. El pasado tránsito de Urano en Aries fue especial además porque coincidió con el tránsito de Plutón en Capricornio, y entre los dos “colaboraron” a través de siete encuentros conflictivos (cuadraturas) entre el 2013 y el 2015 cambiando aspectos fundamentales de nuestra sociedad y preparándonos de ese modo, para el recorrer el primer grado de la Era de Acuario. Digo que colaboraron pues era necesaria la fuerza explosiva de esos dos astros en conflicto para resquebrajar las estructuras de poder, las jerarquías de valores y el estilo de vida no sustentable que nos mantienen en E UR A NO TAURO decadencia y bloquean la evolución sana de nuestra civilización. Cada quién puede recordar ese periodo y darse cuenta de los “terremotos” o “tornados” personales que le sacudieron en esos momentos, además de constatar cómo esas circunstancias cambiaron su vida para traerlos a donde están ahora. Pues bien, esa etapa de cambios abruptos y liberaciones personales ha puesto en marcha muchos mecanismos y movimientos que mostrarán sus frutos aún de aquí a 30 o 50 años, cuando las generaciones nacidas bajo esas influencias estén a cargo de la dirección de los asuntos planetarios. Pero es hora de iniciar un nuevo ciclo y ese es el tema que trataremos en el presente artículo, la llegada de Urano a Tauro implica una nueva “rEvolución”, y nos paramos ahora mismo delante de otra década de cambios en un área de la vida diferente para cada quien. En las páginas que siguen analizaremos los significados esenciales de la presencia de Urano en el signo del Toro, además de revisar el pasado para pronosticar el futuro y dar sugerencias acerca de cómo lidiar con estas energías. Verás además en una línea de tiempo los pasos de Urano hasta el año 2026 con un resumen de fechas claves para que le puedas llevar la pista a Urano en tu propia vida. Guerra Mundial en 1942, época en la que la moneda corriente fue reemplazada por el racionamiento en muchos países. El tiempo es circular – como lo es absolutamente todo en el Universo – es por eso que para entender lo que viene tenemos que detenernos a mirar lo que ya fue. La última vez que Urano estuvo en Tauro (1934 – 1942) fue hace casi 80 años, podemos mirar a esa época para apreciar ejemplos tangibles del tipo de energías que mueve ese planeta. Es curioso que en ese ciclo de 8 años también Júpiter transitó por Escorpio – como sucede ahora mismo – y fue precisamente en ese año, 1935, que nació el juego de mesa “Monopolio” cuyo tema es precisamente la propiedad, las finanzas y el comercio. Quizá algunos de ustedes hayan visto que hace un año los jugadores de Monopolio votaron para decidir sobre una modernización en las piezas del juego, la nueva versión saldrá a finales de este 2018, y estaremos jugando entonces una versión mejorada, con el mismo tránsito planetario que marcó su nacimiento (Urano en Tauro y Júpiter en Escorpio). No es coincidencia, es astrología. En los albores de aquel tránsito hubo un hecho fundamental que transformó la economía global, se trató de la caída de la bolsa de valores en 1929 con la subsiguiente depresión económica, conocida históricamente como la “Gran Depresión” que duró hasta 1939 y finalizó con el estallido de la Segunda Hay que recordar que Tauro es el signo que regula nuestras relaciones con el mundo material, eso incluye el cuerpo físico, el planeta Tierra, los animales, el alimento, los recursos, el dinero y el valor que le asignamos a tales cosas. Lo que pagamos para obtener la satisfacción de nuestras necesidades básicas Hay que mirar al pasado para poder entender el futuro. E UR A NO TAURO E UR A NO TAURO es asunto de Tauro y de la casa 2. Por eso los hechos más significativos de la década descrita anteriormente giran en torno a ese tema, pues aún cuando hablemos de la Segunda Guerra Mundial, en el fondo también estamos hablando de economía. Actualmente nos paramos en un borde muy peligroso de nuestra economía planetaria y no quiero ahondar en tecnicismos, para eso existen muchos artículos especializados, así que solamente voy a mencionar dos conceptos claves que tendremos que recordar sí o sí: El dinero es ficción. El verdadero valor proviene del fruto de la Tierra. Para el 2026 todos tendremos esos dos principios tatuados en la mente y el paradigma económico será muy distinto a como lo conocemos. El alimento, la vivienda y el agua son cosas básicas que obtenemos de la Tierra y en ese sentido somos dependientes de las fuerzas que nos dan la vida, de los recursos que cultivamos y quedamos completamente vulnerables cuando no los protegemos. Es por eso que la ecología y el ambientalismo se tornarán también temas protagonistas en la década por venir. Es más, esos conceptos quedarán como la base que sustentará el nuevo modelo económico. No me pidas certezas, pídeme posibilidades Ahora, miremos a Urano en Tauro como un tránsito individual. Cada ser humano tiene en su Mapa Natal una zona de la vida que se expresa con la energía de Tauro, para unos es su relación con la familia, para otros su carrera profesional, otros más identifican la energía de Tauro con su vida romántica o amorosa, etc. El caso es que Tauro está en algún lugar de tu mapa natal y es en ese “escenario” de tu vida donde te preparas para vivir una nueva rEvolución. En la astrología contemporánea, las energías no son ni negativas ni positivas, es decir, no se emiten pronósticos “condenatorios”, simplemente se explican las posibilidades y depende del estado de consciencia de cada persona, la forma como vive esos eventos y los resultados que obtiene de los mismos. Para dos personas con Tauro en la zona del dinero y la productividad, este tránsito puede representar la ruina inesperada para uno y el enriquecimiento súbito para el otro, lo único que cambia es el estado de consciencia de cada uno y la forma cómo reaccione a las pruebas que la energía de Urano le presente. Por eso en este nuevo modo de comprender la astrología no hablamos de “predicciones” sino de POSIBILIDADES, la certeza no viene nunca de afuera, la tienes que construir tu mismo. E UR A N O TAURO E UR A NO TAURO Espiritualizar la Materia Todo es Vibración ¿De qué forma trabajamos con la energía potencialmente disruptiva de Urano en Tauro? Para responder esa pregunta primero vamos a comprender por qué se presenta como disruptiva tal situación cósmica. Imagina que Urano es una poderosa energía electromagnética o atómica, que genera cambios radicales e inesperados a toda velocidad, Urano es como un rayo. Mientras que Tauro es la Tierra, lo más estable que puedes imaginar, aquello con lo que siempre podemos contar… Es un signo que no responde bien a los cambios bruscos y cualquiera que tenga un Tauro en su vida sabe que los planes sorpresa no son precisamente de su agrado – frente a cualquier novedad, un Tauro necesita procesarla por sus “cuatro estómagos” antes de animarse a probar. Otra forma de entender este asunto es pensar en la electricidad, este fluido energético necesita elementos “conductores” como los cables metálicos por ejemplo, mientras que hay elementos que son “resistentes” y no permiten el paso del flujo eléctrico como el plástico o la madera, por eso se usan como aislantes. Urano es una energía muy poderosa y en Tauro se encuentra con una enorme resistencia y muy poca conductancia, por eso no funciona bien allí y se expresa a través de estallidos que se suceden a medida que va venciendo la resistencia que encuentra a su paso. Esta es la razón por la cual en Astrología se dice que Urano se “cae” en Tauro, es decir, en ese signo no puede expresarse de manera óptima, como si lo hace en Escorpio – signo opuesto a Tauro – donde encuentra su “exaltación”. He ahí la prueba que enfrentaremos durante los próximos 8 años, encontrar la manera de generar la “conducción” adecuada para la energía de Urano (cambio y transformación radical) en nuestra zona Tauro y evitar así su expresión potencialmente destructiva en nuestras vidas. Colectivamente será también un desafío lograr el estado de consciencia necesario, como sociedad, para E UR A NO TAURO E UR A NO TAURO que el uso de los recursos responda más a ideales humanistas (Urano) que a intereses personales. Ahora, volviendo a nuestra pregunta inicial: ¿De qué forma trabajamos con la energía potencialmente disruptiva de Urano en Tauro? Actualizando nuestros paradigmas, esforzándonos en comprender que todo es vibración y que la materia es en realidad 99,9% espacio vacío. Puede que hayamos leído ese dato otras veces y quizá nos dio qué pensar durante un rato, pero en realidad cuesta más que un momento de reflexión poder descargar el nuevo paradigma en nuestro sistema de creencias, ya que está fuertemente arraigado en TODO lo que hemos aprendido desde que nacimos, o incluso desde antes. Salir del modelo de pensamiento mecanomaterialista y REALIZAR que somos más que la suma de nuestros órganos, implica desaprender, cuestionar los conceptos previos que le dan forma a nuestro mundo – con todas las implicaciones que eso conlleva – y sustituirlos por el nuevo conocimiento. Urano nos va a ayudar en ese proceso. Espiritualizar la Materia es precisamente una de las misiones de Urano al pasar por este signo, no solo para cada uno como persona, sino en colectivo. Como civilización necesitamos con urgencia esta “actualización” del sistema y aquí es donde volver a ver la trilogía de “Matrix”, poe ejemplo, se pone interesante. No se trata de un cambio literal en las condiciones de la materia, se trata de poder llegar a comprender cómo funciona a nivel molecular y entender que las leyes que rigen esa dimensión, también aplican en el plano mental del ser humano. Tan solo comprender eso cambiaría por completo la manera como nos relacionamos con la naturaleza entera. Espiritualizar la materia es aprender la Ciencia del Vivir conforme ese nuevo paradigma. ¿Estamos listos? Son los hechos los que cuentan No las palabras E UR A N O TAURO Materializar el Espíritu Pero las cosas van en ambos sentidos, de modo que así como hay que penetrar en el entendimiento profundo de la teoría cuántica, las leyes sistémicas y el pensamiento complejo, para poder acceder a esa “actualización” de consciencia que nos permitirá fluir con Urano en Tauro – y con la energía de la Nueva Era en general – también hay que esforzarse en llevar todas esas ideas, conceptos o insights a la vida diaria. Tauro es un signo concreto y tangible, si algo no tiene utilidad no le interesa. Tenemos que aprender a vivir conforme esa nueva forma de pensar y eso implica hacer cambios reales, así que sin más preámbulos aquí algunas “Tareas para el Alma” que te ayudarán en ese proceso: Revisa tus apegos y hazte cargo de ellos. Una de las diversiones favoritas de Urano durante los próximos años será quitarte tus mayores apegos, sacarte de tu zona cómoda (no hay E UR A NO TAURO signo más cómodo que Tauro), para ver cómo reaccionas al respecto. Si desde ahora te esfuerzas en conocer tus apegos y pasar sin ellos, tendrás ventaja. Aprende a fluir con la incertidumbre. Cómo les dije antes, Tauro es aquello con lo que siempre se puede contar, cosas que generalmente damos por sentadas. Pero esas cómodas certezas están por dar un giro inesperado y saber adaptarse rápidamente a los cambios será un punto a favor para ti. Reduce tus necesidades. Entre más necesitas, más preocupaciones tienes y más apegos generas. La austeridad es una práctica maravillosa que no cuenta con muy buena publicidad en una civilización altamente consumista como la nuestra. Si lo piensas bien, hacerle propaganda a la austeridad sería como meter un auto-gol en términos de mercado. Urano nos va a enseñar a valorar al máximo cada uno de nuestros recursos, si aprendemos a necesitar menos, estaremos más ligeros cuando las pruebas vayan apareciendo. Adopta cualquier disciplina que te ayude a desarrollar tu fuerza de voluntad. Bien sea hacer yoga a diario, o simplemente tomar un vaso de agua en ayunas, si se convierte en una disciplina generará un punto focal que te servirá de sostén en las demás áreas de tu vida. La disciplina es la mejor amiga del ser humano, no el perro como se pensaba anteriormente (ese es el segundo bff). Sirve. El servicio es la mejor forma de “materializar el espíritu”, ya que pone de manifiesto tus mejores cualidades de forma desinteresada. Busca voluntariados que sean afines a tus capacidades o preferencias. Se puede servir siempre, en cualquier lugar, es cuestión de “Querer” – precisamente la palabra clave de Tauro. El servicio es una práctica que te saca del centro formado por el “ego” y te lleva más allá. Urano además rige a Acuario, el signo del “Aguador”, aquel que vierte el agua sobre la humanidad, ¿qué mayor servicio que ese? E UR A N O TAUR O E UR A NO TAURO Volver al a Tierra, a la sabiduría ancestral, a lo femenino sagrado. Urano = Eternidad Veamos entonces cómo se desenvolverá este tránsito año por año. Cómo sabemos, el momento en que más se siente un tránsito de esta categoría es cuando el planeta va de entrada o de salida, sobretodo colectivamente hablando. Este año 2018 tenemos las dos cosas: la salida de Aries y la entrada en Tauro, así que el 2018 ciertamente es un año muy uraniano. Una manifestación muy concreta y temprana de todas estas influencias cósmicas es el movimiento internacional que se ha suscitado tras los escándalos de abuso de poder en empresas tan influyentes como la del entretenimiento, “Time´s Up” representa la rebeldía propia de la salida de Urano de Aries, y el cambio fundamental hacia la esencia femenina que caracteriza su llegada a Tauro. Los aspectos o alineaciones más resaltantes durante este año, en relación a Urano, son los siguientes: Marte en Acuario (que se encuentra a disposición de Urano), no solamente pasará más tiempo de lo usual en ese signo debido a su retrogradación, sino que desde allí le hará un ángulo tenso a Urano recién llegado a Tauro, cosa que se repetirá tres veces. Esto indica que no tardará en mostrarse la “grieta”, es decir, aquella cosa en nuestras vidas o en la sociedad que necesita la actualización de Urano con más urgencia. Será un “crack” geológico, social, financiero y personal. Pero nosotros estaremos preparados y debemos ayudar en nuestro entorno cuando sea necesario. Marte en Acuario representa la lucha de las ideas o por las ideas, el hacer tecnológico y las comunidades virtuales. Urano en Tauro toca nuestros recursos reales y primarios (suelos, agua, alimentos, etc.), es la naturaleza misma y es también el sistema monetario internacional. Consejo: no reprimas nada, la represión trae como consecuencia la explosión sin control de la fuerza. Es mejor tener sanas válvulas de escape y cada quien debe conocer las suyas o empezar a explorarlas desde ahora. “Todo aquello que no queremos aprender de buen grado, nos es impuesto por el orden bienhechor de las cosas” Serge Raynaud de la Ferriere La cuadratura entre Marte y Urano alerta sobre el momento crucial que vive la humanidad debido al cambio de la Era de Piscis (del año 0 a 1948) a la Era de Acuario (próximos 2500 años). El cambio en la forma como nos relacionamos con la naturaleza y con nuestros propios valores es inaplazable, de manera que los que no estén haciendo algo en sus propias vidas por acompasarse a este nuevo paradigma, tendrán que enfrentar ese “orden bienhechor” del cosmos. Hay que tener en cuenta además que Marte es un planeta cercano al Sol y su tránsito dura relativamente poco (unos meses en el 2018), pero nos anuncia las tensiones que tendrá Urano con Saturno cuando ese planeta ingrese en Acuario durante todo el 2021, así que esto “pica y se extiende”, como dicen en Venezuela, quiere decir que la grieta que aparezca ahorita es más profunda de lo que pensamos y será un trabajo que tomará tiempo – pues además todo esto ocurrirá en signos fijos. Acuario también representa las relaciones sociales, la manera como las comunidades se organizan y aunque es Capricornio quien determina el orden de las jerarquías y el poder, esos son temas que ya se han venido preparando (Plutón desde el 2008 está que no para en esa zona) para que sea la gente – el común de las personas – quien asuma ahora la toma de decisiones. Es correcto que el ambientalismo y la ecología son temas protagonistas en Acuario, pero no podemos pasar por alto que la Naturaleza es el aspecto Femenino de Dios. Mientras no haya un cambio social importante en la manera como las mujeres (representantes de esa fuerza femenina) son respetadas y valoradas, no podrá haber un cambio importante en la manera como nos relacionamos con el planeta y sur recursos: no desde la explotación sino desde el respeto. El otro factor importante en relación a Urano este año es Saturno en Capricornio, planeta que recorrerá durante este año los primeros 9 grados de ese signo, y en ese recorrido estará formando un ángulo muy armónico con Urano recién ingresado en Tauro. Se trata de un trígono que si bien no llegará a ser partil (es decir que no se ajustará matemáticamente), se sentirá con fuerza. Recordemos aquí que Capricornio es también un signo femenino, al contrario de lo que se puede pensar por su aparente frialdad. Capricornio representa la sabiduría ancestral de las abuelas y este trino entre Saturno y Urano, en signos femeninos, nos habla de la necesidad de apoyarnos en esos conocimientos antiguos para resolver las crisis actuales, en especial para el aprovechamiento consciente de los recursos naturales. Saturno llega a su domicilio después de 30 años para realizar una gran limpieza, luego de que en la última década Plutón haya expuesto toda la corrupción y “suciedad” acumulada en esa zona del zodiaco. Saturno es la hoz que viene a segar y su tránsito coincide con el ingreso del Nodo Sur de la Luna (y los consecuentes eclipses) en ese mismo signo a fines del 2018. Es decir que la zona Capricornio – el orden social establecido, las jerarquías de poder económico, político y social, el “estatus quo” en general – se prepara desde ahora para una gran limpieza kármica. Los trinos de Tierra entre esos dos signos, facilitarán y agilizarán tanto la materialización de grandes proyectos (que estén en consonancia con el nuevo orden) o la caída definitiva de lo que ya no funciona. La clave más importante para aprovechar estos tránsitos en lo personal es trabajar internamente en la realización de la integridad y la austeridad. Si te esfuerzas desde ahora por ser cada vez más integro en tu forma de pensar, hablar y actuar, Saturno te ayudará a limpiar sin sufrimiento ni drama tu zona Capricornio, y te otorgará la sabiduría para ayudar a los demás en tu entorno familiar y social a hacer lo mismo. 2019 Durante este año experimentaremos el segundo ingreso de Urano en Tauro, ya que en el 2018 el planeta regresará a los últimos grados de Aries, dónde se unirá por última vez a Marte en ese signo hasta dentro de 80 años, y se despedirá definitivamente del Cordero el 6 de marzo del 2019. A partir de ahí, durante el 2019 Urano recorrerá los primeros 6° de Tauro y en ese recorrido realizará una preciosa conjunción a Vesta en el mes de junio – habrá un entusiasmo colectivo muy grande por el regreso a lo natural, a lo básico y sustentable –además de un trino a Júpiter quién estará recién ingresado en Capricornio, lo cual nos llevará a hablar de la “reconstrucción” necesaria de las estructuras sociales básicas, pero desde los nuevos paradigmas. Además tendremos eventos importantes en Cáncer: eclipses de Nodo Norte y el tránsito de Juno y de Marte, que se alinearán armónicamente con Urano en ángulos de 60°. Tales contactos nos ayudarán en este periodo a valorar el compromiso, la tradición, la familia, la naturaleza, lo local y lo hand/home made (hecho a mano/hecho en casa). Será muy importante honrar el arquetipo de la “Madre” – aquello de donde tomamos la vida – así como los conceptos del clan, lo comunitario y lo cooperativo, por encima de los intereses personales o egoístas. Un tema fundamental en el ámbito planetario será sin duda el agua, la madre por excelencia, y el uso de tecnologías (Urano) más limpias y amigables para su cuidado y el aprovechamiento humano. 2020 Durante este año Urano caminará entre los grados 2° al 10° de Tauro, desde donde realizará un trino a Marte y al Nodo Sur de la Luna, ambos en Capricornio durante febrero y Marzo respectivamente, luego contactará nuevamente con Marte en Piscis, en un ángulo armónico de 60° (sextil) en Mayo. Recordemos que estos son los ángulos más relevantes de Urano, pero durante el recorrido del Sol y los planteas personales (Luna, Mercurio y Venus) tendrá muchos más contactos, que se pueden clasificar como armónicos mientras esos planetas recorren signos afines a Tauro como Cáncer, Virgo, Capricornio, Piscis y el propio Tauro, y desafiantes cuando los planetas transiten por signos antagonistas a Tauro como Leo, Escorpio, Acuario y en algunas oportunidades Sagitario y Libra. Los contactos armónicos con Urano nos invitan a innovar y renovar nuestra relación con lo femenino, natural y colectivo, mientras que los desafíos planteados por los signos antagonistas indican que debemos salir de la zona cómoda y revisar o rebelarnos contra los mandatos del ego, el personalismo y las herencias negativas del sistema patriarcal. Los trinos de Tierra al comienzo del año (con Marte y el Nodo Sur, además de mantenerse el trino con Júpiter que sucederá a finales del 2019), ayudarán a remover estructuras sociales o personales que estén débiles, para dar paso a la transformación de las jerarquías de todo orden. Tanto colectivamente como en la vida de cada persona. Solamente prevalecerá lo que sea íntegro y responda a propósitos superiores, dignos y acordes con la Nueva Era que comienza. Aquí es preciso mencionar que por su lado, Saturno y Plutón estarán en tremenda conjunción en Capricornio, algo que no se ve sino una vez cada 30 años pero cada vez en signos diferentes, por lo tanto una como esta no sucede sino cada 360 años. Es un evento que de algún modo marcará el clímax del tránsito Plutoniano y terminará de remover lo más profundo para poder transformar desde cero esa zona de nuestra vida. 2021 “yo ejerzo un poco el papel de rompemuletas…” – Serge Raynaud de la Ferriére Durante este año Urano recorrerá desde el grado 6° hasta el grado 14° y los Nodos Lunares – con los eclipses como consecuencia – se habrán mudado a Géminis (Norte) y Sagitario (Sur). El énfasis evolutivo estará puesto en las relaciones sociales, la comunicación y la libertad de expresión, veremos así mismo el cambio de legislaciones importantes en materia de ambiente y comercio internacional o globalidad. Algo muy interesante con los eclipses de Nodo Sur en Sagitario, es que quizá se discuta en serio la abolición de fronteras geopolíticas y se consoliden comunidades nacionales más grandes al estilo de la Unión Europea. Será un año con un comienzo difícil, quizá consecuencia de los eventos acaecidos en el 2020 y la conjunción Saturno/Plutón, lo cierto es que en enero Marte llega a Tauro y tendrá su primera conjunción con Urano en este signo, que además será triple pues contará con la presencia de Lilith. Esta es una energía muy poderosa pero contenida en un signo de Tierra que tiene poca “conducción”, por eso se elevarán las alertas tanto geopolíticas como naturales y personales, el planeta se estará expresando con toda su fuerza y en nuestras vidas habrá un impulso muy grande para romper con los mayores apegos y acostumbramientos, será mejor estar “flexibles” tanto física, como emocional y mentalmente cuando llegue ese momento. 2022 Además mientras todo eso sucede en enero, Júpiter habrá ingresado en Acuario y hará conjunción con Saturno, entre ambos forman un ángulo de tensión a Urano y Marte en Tauro que bien se puede calificar como un choque de Titanes. Este será el momento en que tendremos el eco más poderoso desde la entrada de Urano a Tauro en el 2018, cuando su cuadratura a Marte Retrógrado en Acuario nos advirtió sobre una grieta que se empezaba a mostrar. Llegado el 2021 será imposible no lidiar con esa “grieta” y avocarnos a explorar sus abismos. “En la Era de Acuario el verdadero valor proviene del fruto de la Tierra” – A. Gil. C. Júpiter y Saturno hablarán de humanismo, fraternidad, globalidad, ideas como el pasaporte planetario, la neutralidad de la web, el poder de las ONG cada vez más fuerte. Mientras que Urano y Marte desde Tauro se encargan de demoler el sistema económico obsoleto, y arrasar con los apegos e intereses personalistas enquistados en el poder. Urano avanzará ese año recorriendo los grados del 11° al 18° del Toro, y tendrá varias citas interesantes. En febrero se comunicará muy bien con Júpiter que ya para entonces estará transitando en el signo de Piscis, su antiguo domicilio. Es un año que se verá marcado por un renacimiento espiritual planetario de gran importancia. Así mismo los Nodos Lunares cambiarán de posición y empezaremos a tener eclipses en Tauro (Nodo Norte) y Escorpio (Nodo Sur). En los meses de Julio y Agosto tendrá lugar una triple conjunción entre Urano, Marte en Tauro (por segunda vez en este ciclo de Urano) y el Nodo Norte, lo cual indica que este será un año para REALIZAR, construir, trabajar y hacer. Ciertamente será un año de enormes esfuerzos, pero también contaremos con la potencia para romper y desapegarnos de situaciones, sistemas y estructuras demasiado petrificadas en nuestra vida y en la sociedad, así como para superar los intereses personales que tanto han devastado la naturaleza con el uso desmedido de sus recursos. Nos veremos inclinados a atesorar otro tipo de riquezas y valorar otro tipo de recursos, hay que regresar a un modo más natural de vivir. Estaremos hablando de poner en práctica nuevos modos de producir y usar los recursos naturales, así como nuevos modos de relacionarnos financieramente hablando. Recordemos que los eclipses de Nodo Sur en Escorpio apuntarán a una reestructuración de los sistemas financieros y las bolsas de valores, así como eliminar la economía basada en la “deuda”, para pasar a una economía basada en los recursos. En Octubre de ese año Saturno y Urano repetirán su cuadratura desde Acuario y Tauro respectivamente, aunque no llegará a ser exacta matemáticamente hablando, será la continuación del proceso que comenzó el año anterior en pugna por una reestructuración social más humanitaria y libre. Todo apunta pues a una reestructuración de nuestros valores como civilización. Desde hace siglos y hasta el presente hemos puesto los valores materiales por encima de los valores espirituales, estos tránsitos nos enseñarán que la cosa es al revés y ese cambio no será fácil para todo el mundo, pero ciertamente será inevitable. 2023 Será un año marcado por un importantísimo cambio energético, se trata del cambio de signo de Plutón, el planeta más lento del sistema solar. La llegada de Plutón al signo de Acuario será el evento principal, pero la zona Tauro no estará menos concurrida, pues continuaremos teniendo algunos eclipses por allí y además llegará Júpiter después de 12 años, para limpiar y hacer crecer todo lo que Urano se ha encargado de rEvolucionar desde el 2018. Urano estará recorriendo los grados del 14° al 23°, aunque no tendremos alineaciones mayores con otros planetas lentos en ese periodo. 2024 Urano avanzará entre los grados 19° y 27° durante este año, donde tendrá su conjunción a Júpiter en el mes de abril, será un año de grandes cosechas mientras que seguiremos trabajando por aprovechar al máximo todos los recursos naturales, evitando a toda costa el desperdicio y los residuos. Esta es una forma de verlo para quienes hayamos hecho las tareas del Nodo Norte durante el 2023 (VALORAR, reciclar, vivir al natural, compartir…), pero por otro lado Júpiter puede sacar de proporción todo aquello que no se haya puesto al día con los nuevos parámetros de producción y veremos que esos asuntos serán sacudidos por “terremotos” metafóricos para que logren actualizarse. La Luna Nueva del Toro, el 8 de mayo del 2024, será sumamente especial pues ocurrirá en conjunción a Júpiter y Urano, y estará apoyada por Saturno en Piscis. Este es un evento cósmico que tiene implicaciones espirituales muy importantes para la humanidad entera, los eventos lunares en Tauro se han relacionado siempre con las enseñanzas de Buda, son momentos en que la Iluminación se hace presente en el planeta para asistir a todos los que están aprovechando su tiempo en este plano para realizarse espiritualmente. Así mismo en el ámbito de lo personal, será un portal de siembra inusualmente grande que todos y cada uno de nosotros podremos aprovechar si nos sintonizamos con su frecuencia. Finalmente este año en el mes de julio, tendremos la tercera conjunción entre Marte y Urano en Tauro, esas uniones que suceden cada 18 meses aproximadamente, marcan un nuevo impulso para avanzar y profundizar en la transformación o renovación de esta zona zodiacal. Las conjunciones anteriores (2021 y 2022) estuvieron marcadas por el conflicto y la fuerza desmedida de la naturaleza, pero en esta tercera oportunidad contará por el contrario con el apoyo de Juno en Virgo (el compromiso con lo natural y el planeta), el Sol en Cáncer (la sensibilidad) y Ceres en Capricornio (el poder restituido de lo femenino y la sabiduría ancestral). Será una conjunción muy fértil y productiva. 2025 Durante este año Urano recorrerá los últimos grados de Tauro, llegando a incursionar en Géminis durante unos meses, para retrogradar de nuevo hasta el grado 26 de Tauro en el tercer trimestre. Es un año de transición, el proceso o la rEvolución de nuestros recursos y la relación con la Tierra está casi listo y Urano se prepara para comenzar una nueva tarea. Será un año de cambios importantes también a causa de Neptuno (el segundo más lento del cielo) quien deja Piscis e ingresa en Aries, será una época de renacimiento espiritual muy hermosa. Por esta época los Nodos lunares estarán entre Piscis (Norte) y Virgo (Sur), muy bien alineados con Urano en los últimos grados del Toro y nos llevarán más allá de lo literal, a procurar una limpieza profunda de la intelectualidad estéril, el análisis y el razonamiento ecxesivo, gracias a la experimentación y vivencia directa de las experiencias en una dimensión más consciente. Podemos disertar infinitamente sobre asuntos espirituales y filosóficos, pero estas alineaciones nos empujarán a dejar de hablar (razonar) y empezar a SER. La gran despedida de Urano del signo de Tauro, será la Luna Nueva de Capricornio el 18 de enero del 2026, cuando en un hermoso stellium se reunirán la Luna, el Sol, Marte y Mercurio a 26° de Capricornio en trino a Urano a 27° de Tauro y en sextil a Saturno y Neptuno que estarán en conjunción en Piscis. Esta Luna Nueva representará el nacimiento de un nuevo orden mundial y personal en el que las viejas estructuras se disuelven (Saturno en Piscis en conjunción a Neptuno, es el SOLVE alquímico) mientras que un nuevo mundo se fragua: los signos de Tierra en perfecta sintonía (stellium en Capricornio apoyado por Urano en Tauro, es el COAGULA alquímico), además Saturno y Neptuno ingresarán juntos en Aries poco después de la Luna Nueva antes mencionada, marcando así un nuevo comienzo para todos. “La bóveda celeste contiene todo el destino de la Humanidad. Basta con poder leer ese poema maravilloso. (…) ¿Hay alguna enseñanza más bella que la del Zodiaco, el único libro que el ser humano no ha podido destruir?” – Dr. Serge Raynaud de la Ferriere