Hospitecnia Revista de Arquitectura, Ingeniería, Gestión hospitalaria y sanitaria. ISSN: 2462-7348 Boletín 23 10/06/2019 Bloque quirúrgico y bloque obstétrico QUIRÓFANOS PLEGABLES CON FLUJO LAMINAR: UN LUJO RENTABLE María Andreu Fenoll, Unidad de Mácula del Hospital Universitario y Politécnico La Fe, Valencia OBJETIVO El objetivo de este estudio es evaluar la seguridad y rentabilidad económica de la cabina quirúrgica de ambiente controlado (ArcSterile®) para la realización de dichos procesos. MATERIAL Y MÉTODOS Estudio retrospectivo y observacional en el que comparamos las variables de gestión hospitalaria entre los pacientes intervenidos en ArcSterile® y los pacientes intervenidos en el quirófano convencional durante un periodo de 12 meses. Las variables estudiadas fueron: el número total de pacientes tratados, la demora asistencial y el coste por proceso. RESULTADOS Se realizaron 2011 procedimientos quirúrgicos en la cabina de ambiente controlado ArcSterile® y 1736 en el quirófano convencional durante un periodo de 12 meses. Se incluyeron cirugías menores como chalación, pterigión, inyecciones intravítreas y otras. No se incluyeron cirugías de cataratas ni vitrectomías. La utilización del ArcSterile® supuso un aumento del 14 % en el número de pacientes intervenidos durante 12 meses. El coste por hora de la utilización de la cabina quirúrgica ArcSterile® fue de 30.75 euros frente a los 142.78 euros del quirófano convencional. CONCLUSIONES La incorporación del ArcSterile® ha permitido tratar a un número mayor de pacientes que antes se trataban en el quirófano convencional, lo que optimiza el uso del mismo para pacientes que requieren una cirugía más compleja y genera un ahorro económico de 134 121.39 euros durante los 12 meses evaluados. La aplicación de esta cabina quirúrgica a la cirugía ambulatoria oftalmológica y también a otras especialidades médicas podría suponer una alternativa eficaz y eficiente al quirófano convencional, con grandes beneficios tanto clínicos como económicos. Hospitecnia Revista de Arquitectura, Ingeniería, Gestión hospitalaria y sanitaria. ISSN: 2462-7348 Boletín 23 10/06/2019 Bloque quirúrgico y bloque obstétrico INTRODUCCIÓN En los últimos años la asistencia sanitaria ha pasado de ser fundamentalmente hospitalaria a ser eminentemente ambulatoria. Los beneficios del trato ambulatorio son tanto médicos (mejora en el tiempo de recuperación, reducción del estrés por hospitalización, disminución de infecciones nosocomiales) como económicos, con una optimización de los recursos económicos y de personal [1]. La oftalmología es una de las especialidades que más pronto se unió a la cirugía ambulatoria, la cual se realiza en un 99 % de los casos a través de la Unidad de Cirugía Sin Ingreso (UCSI) manteniendo la seguridad y los beneficios en los procedimientos. La cirugía ambulatoria se ha realizado como hemos comentado, en la UCSI, pero puede efectuarse en «salas blancas», también llamadas «salas limpias». Estas se caracterizan por un control estricto de las partículas en el aire, temperatura, humedad, flujo de aire y presión interior del aire [2]. La principal desventaja es el alto coste tanto de la implementación como del mantenimiento de las instalaciones. Otra forma de conseguir un flujo laminar de aire y, por lo tanto, un área con control de aire ambiente semejante al de las salas limpias, son las cabinas o pantallas de flujo laminar [3]. El ArcSterile® (Imex Clinic, Paterna, Valencia) es una cabina de control de aire ambiente plegable. Presenta una estructura de aluminio con paredes plegables y apertura frontal para la entrada del paciente, que llevan adheridas unas columnas de flujo laminar horizontal estéril para la impulsión de aire con filtración en dos etapas: PREFiltros G3 y HEPA. Con ello se consigue la recirculación de aire de la sala, aspirando, filtrando, introduciendo aire estéril ril en la zona crítica y devolviéndolo a la sala repetidamente. Además cuenta con un control electrónico de la velocidad del aire, así como con la activación de alarmas por saturación de filtros [4, 5]. Además, disponer del ArcSterile® en el propio Servicio de Oftalmología ha supuesto un aumento de la actividad asistencial, dado que actividades antes asumidas por los servicios de Quirófano han pasado a serlo por la consulta externa. Esto ha precisado una reestructuración del circuito del paciente en la consulta, con la denominación de «consulta única». En esta consulta única, las pruebas diagnósticas y el tratamiento se realizan en el Hospitecnia Revista de Arquitectura, Ingeniería, Gestión hospitalaria y sanitaria. ISSN: 2462-7348 Boletín 23 10/06/2019 Bloque quirúrgico y bloque obstétrico mismo momento, lo que aumenta, por consiguiente, la calidad asistencial, ya que disminuyen las visitas y se mejora la comodidad del paciente y sus familiares. Los beneficios de la consulta única son máximos en aquellos pacientes con enfermedades crónicas como son, entre otras, la degeneración macular asociada a la edad o la retinopatía diabética. Si bien en algunos casos pueden padecerla personas de mediana edad, en otros muchos se trata de pacientes de edad avanzada, que necesitan la ayuda de algún familiar. Está establecida, sobre todo, en la sección de retina médica, para lo cual se han habilitado dos salas contiguas, una para llevar a cabo las exploraciones precisas y otra donde está situado el ArcSterile® para la aplicación del tratamiento, en este caso, las inyecciones intravítreas. En esta sala la responsabilidad recae en gran medida en los profesionales de enfermería, que se encargan, entre otras funciones, de tranquilizar al paciente que va a someterse a dicho procedimiento, resolviendo sus dudas y miedos, así como su participación en el mismo, realizando los cuidados pertinentes, antes, durante y después de la intervención. De esta manera, el tiempo de permanencia del paciente en el hospital no supera los 15 minutos, durante los cuales se llevan a cabo tanto todas las exploraciones requeridas como el tratamiento preciso. Otro beneficio añadido en esta consulta única es evitar la ansiedad que se generaba anteriormente, por el miedo a la progresión de la enfermedad cuando dicho tratamiento debía aplicarse en un quirófano convencional, a causa de la demora que esto suponía, así como del trastorno que implicaba acudir de nuevo al hospital para recibir tan solo el tratamiento. Del mismo modo, los pacientes que se someten a intervenciones menores (retirada de puntos de trasplante corneal, pterigión, chalazión, etc.) experimentan un menor grado de ansiedad al realizarse estas en una sala adaptada en las consultas externas y no en el quirófano convencional. Según los datos obtenidos en nuestro estudio, las complicaciones que se dieron durante el primer periodo fueron un total de 9 frente a las 5 que se produjeron en el periodo de uso del ArcSterile®, las cuales consistieron en reacciones inflamatorias tras el tratamiento intravítreo. Ninguna de ellas tuvo consecuencias graves, con lo cual se puede afirmar que no existen diferencias estadísticamente significativas y que, por lo tanto, su seguridad está más que justificada. El objetivo de este artículo es analizar la seguridad y eficiencia de la utilización de la cabina quirúrgica de ambiente controlado (ArcSterile®) ubicada en las Consultas Externas de Oftalmología para la realización de procedimientos oftalmológicos quirúrgicos (inyecciones intravítreas y cirugía menor). Hospitecnia Revista de Arquitectura, Ingeniería, Gestión hospitalaria y sanitaria. ISSN: 2462-7348 Boletín 23 10/06/2019 Bloque quirúrgico y bloque obstétrico MÉTODOS Este estudio observacional retrospectivo comparó los procedimientos oftalmológicos realizados durante 12 meses en el antiguo Hospital La Fe de Campanar de Valencia con los procedimientos realizados durante el mismo periodo de tiempo en el nuevo Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia. Se analizaron los procedimientos quirúrgicos oftalmológicos menores y las inyecciones intravítreas del periodo comprendido entre abril de 2009 y abril de 2010 en los quirófanos convencionales del antiguo hospital. En el nuevo hospital, dotado con un ArcSterile® en las Consultas Externas de Oftalmología, se evaluaron entre abril de 2011 y abril de 2012 los procedimientos realizados tanto en los quirófanos convencionales como en la sala de Consultas Externas adaptada con el ArcSterile®. Los parámetros estudiados fueron: número total de procedimientos por periodo; número total de inyecciones intravítreas y cirugía menor; tipo de procedimiento (inyección intravítrea o cirugía menor, incluyendo: exéresis de chalazión, exéresis de pterigión, exéresis de papiloma conjuntival o palpebral, retirada de sutura corneal y biopsia de la arteria temporal); gasto por hora de funcionamiento de la sala utilizada (quirófano convencional o sala adaptada de consultas con ArcSterile®). NOTA: El tiempo dedicado a los tratamientos es menor que el tiempo dedicado al mismo tipo de asistencia sin ArcSterile, ya que actualmente pasan visita y también realizan el tratamiento en el mismo momento. Se aplica por lo tanto un factor de corrección (FC) teniendo en cuenta que se ha confirmado en os últimos años, con la realización de la Tomografía de Coherencia Óptica de los pacientes citados, que un 5% de los pacientes citados no requiere tratamiento. En el periodo 2009-2010 no se contaba con esta herramienta con la que sí se contó en el periodo 2011-2012. Factor de corrección =0.95 NOTA: El cálculo de coste por hora del ArcSterile asume una amortización y uso a 15 años estimado el gasto eléctrico de la sala. El gasto del personal no computa ya que es el mismo personal el encargado de las consultas externas, debido a que el tratamiento se realiza en el mismo momento del diagnóstico. El cálculo por hora del quirófano convencional incluye el gasto de personal auxiliar, celador compartido con otros servicios, enfermería y facultativos encargados, así como el gasto eléctrico. Hospitecnia Revista de Arquitectura, Ingeniería, Gestión hospitalaria y sanitaria. ISSN: 2462-7348 Boletín 23 10/06/2019 Bloque quirúrgico y bloque obstétrico NOTA: En los costes se contempla el coste ahorrado al optimizar el personal que al mismo tiempo realiza la visita, diagnostica el tratamiento (incluyendo auxiliares, enfermería y facultativos). RESULTADOS Durante el primer periodo evaluado, el total de cirugías del servicio fue de 3577, de las cuales 1483 fueron administración de inyecciones intravítreas y 253 consistieron en procedimientos de cirugía menor. Durante el segundo periodo, el total de cirugías del servicio fue de 4090, de las cuales 1721 fueron administraciones de inyecciones intravítreas y 290 intervenciones de cirugía menor (tabla 1). Teniendo en cuenta que el ArcSterile® funciona una media de 8 horas al día y aproximadamente 210 días al año, que tiene una vida útil de 15 años y que su coste anual de funcionamiento es de 51 656.61 euros, deducimos que el coste por hora es de 30.75 euros. Por el contrario, el quirófano convencional, con un funcionamiento medio de 8 horas al día, 210 días al año, una vida útil de 15 años y con un coste anual de funcionamiento de 239 864.59 euros, tiene un coste por hora de 142.78 euros (tabla 2). Por todo ello podemos afirmar que, con la disponibilidad del ArcSterile® el aumento de asistencias con respecto al periodo 2009-2010 fue del 14 %, lo que hizo disminuir la actividad del quirófano convencional en un 37 % y generar un ahorro de 134 121.39 euros. Durante el periodo 2009-2010 se realizaron 3577 procedimientos quirúrgicos sin disponer del ArcSterile®, lo que supuso un coste económico de 510 724.06 euros. Por el contrario, en el periodo 2011-2012, en el cual ya había un ArcSterile® disponible, y si se tiene en cuenta que se realizaron procedimientos quirúrgicos tanto en el quirófano convencional (2239) como en una sala habilitada en la consulta (1851), el coste global del servicio de Oftalmología para el hospital fue de 376 602.67 euros, siendo el ahorro con respecto al periodo 2009-2010 de 134 121.39 euros (tabla 3). Hospitecnia Revista de Arquitectura, Ingeniería, Gestión hospitalaria y sanitaria. ISSN: 2462-7348 Boletín 23 10/06/2019 Bloque quirúrgico y bloque obstétrico DISCUSIÓN En estos tiempos en los que palabras como «crisis», «recortes» o «austeridad» parecen que prevalecen por encima de todo y de todos, la máxima optimización y rentabilidad de los recursos en los que se invierte es más que necesaria, sobre todo en medicina, y concretamente en oftalmología, una especialidad que evoluciona y se renueva día a día. Prueba de ello es que, en los últimos años la sanidad pública ha apostado por un trato ambulatorio del paciente y destinado el proceso de hospitalización solo a aquellos casos en los que es por completo necesario, lo que ha causado un aumento de la actividad asistencial en servicios como la UCSI, el Hospital de Día, la Unidad de Atención Domiciliaria o la telemedicina, servicios cuya puesta en marcha ha supuesto una inversión importante que, a la larga, está resultando muy rentable, tanto médica como económicamente. Hasta la implantación del ArcSterile® en el servicio, la consulta de oftalmología no era del todo tan efectiva: si el paciente debía recibir tratamiento intravítreo, o simplemente había que retirarle los puntos tras un trasplante de córnea, tenía que ser citado unos días después porque dicho procedimiento debía realizarse en un quirófano convencional. De esta forma, se aumentaba la carga asistencial y la lista de espera del de quirófano, puesto que, aunque efectuarlo en dichas condiciones era lo más seguro para el paciente, por otro lado también causaba un mayor trastorno tanto al paciente como a sus familiares, pues la demora media de estos procedimientos era de 6 días. La llegada del ArcSterile® ha conseguido que cuando un paciente acude a una consulta, ya en la primera visita, ya en una sucesiva, tenga la opción de que se lo trate en el momento. De este modo, la demora ha pasado de 6 días a tan solo minutos, algo que ha repercutido en un beneficio económico para el hospital, puesto que el coste por procedimiento en el ArcSterile® es de 30.75 euros, mientras que el mismo procedimiento en un quirófano convencional ascendería a 142.78 euros. Además, se reduce la carga asistencial en la actividad de quirófano, de tal manera que en la actualidad en esos quirófanos se pueden atender pacientes con patologías que sí necesitan una asistencia en quirófano convencional debido a la complejidad de su afección, lo que reduce la lista de espera y optimiza al máximo la actividad asistencial en quirófano. Además hay que tener en cuenta el beneficio para el propio paciente, que ha reducido su estancia y desplazamientos al hospital, dado que en un menos de una hora se lo valora, se lo estudia y se lo trata, siendo dichas actuaciones igual de seguras que cuando se llevaban a cabo en el quirófano convencional. A grandes rasgos, podemos decir que el ArcSterile® ha convertido el servicio de Oftalmología en rápido, eficaz, seguro y rentable: • Rápido, porque, gracias a su implantación, hemos reducido la demora en la aplicación de tratamientos, de 6 días a 0 días. • Eficaz, porque, gracias a su implantación en el servicio el circuito de la consulta, sobre todo en lo que respecta a la patología macular, se ha modificado y convertido en una consulta única. En su primera visita o en las de seguimiento, el paciente realiza todas las pruebas diagnósticas necesarias para alcanzar un diagnóstico y, si este lo requiere, es posible tratar al paciente en el momento adecuado, lo que mejora la capacidad asistencial del Servicio, evita la duplicidad de visitas y reduce los costes, y eso sin que se pierda en ningún momento la calidad asistencial, pues más bien aumenta. Hospitecnia Revista de Arquitectura, Ingeniería, Gestión hospitalaria y sanitaria. ISSN: 2462-7348 Boletín 23 10/06/2019 Bloque quirúrgico y bloque obstétrico • Seguro, porque, con los datos contrastados, podemos afirmar que su uso no ha reportado diferencias estadísticamente significativas entre ambos periodos en lo que se refiere a acontecimientos adversos, lo que demuestra que la seguridad que aporta está más que justificada. • Rentable, porque, con este estudio realizado en nuestro Servicio hemos podido demostrar que la adquisición del ArcSterile®, que supuso un coste inicial apreciable, ha permitido reducir una cantidad significativa de los costes del Servicio y, por consiguiente, del Hospital. En conclusión, nuestros resultados muestran que, a pesar de que la adquisición de ArcSterile® supone un gasto inicial, este se amortiza en tan solo un año y permite la consecución de objetivos como la optimización de los recursos, la reducción de los costes y el aumento de la calidad asistencial del paciente que, al fin y al cabo, es el objetivo principal. BIBLIOGRAFIA [1] Porrero JL. Cirugía Mayor Ambulatoria. Manual Práctico. 2.ª ed. Barcelona: Masson; 2002. [2] Norma ISO 14698-1:2003. Salas limpias y ambientes controlados asociados. Control de la biocontaminación. Parte 1: Principios y métodos generales. [3] Sossai D, Dagnino G, Sanguineti F, Franchin F. Mobile laminar air flow screen for additional operating room ventilation: reduction of intraoperative cintamination during total knee arthroplasty. J Orthop Traumatol. 2011, 12(4): 207-11. [4] Catálogo de producto ArcSterile® [Acceso 30 May 2014]. Disponible en: http:// www.imex.es/productos/ingenieria-hospitalaria/ArcSterilee.html [5] Informe de idoneidad de producto ArcSterile® emitido por SEGLA.