Protocolo CDS-115 (Actualizado Enero 2014) El protocolo CDS-115 consiste en tomar un (1) ml de CDS (solución de dióxido de cloro) cada 15 minutos durante una (1) hora (45) minutos, es decir, en ocho tomas. Se reduce el tratamiento a sólo menos de dos horas diarias, ya que el CDS no permanece tanto tiempo en el cuerpo como el MMS y al ingerirlo de esta manera se incrementa su efectividad. Se puede agregar 10 ml de CDS en una botella de medio litro de agua (destilada, de mar o mineral), dividir la botella en ocho partes iguales y marcarla con una fibra indeleble e ir bebiendo una marca cada quince (15) minutos, por si salimos de casa, llevamos el tratamiento con nosotros. Es prescindible y muy importante no tomar medicamentos en la hora previa y la hora posterior a estas casi dos horas de tomas del CDS. Y no ingerir alimentos en la media hora previa y posterior. Recordar que el CDS debe mantenerse refrigerado (en la heladera) por debajo de los 11º grados centígrados Celsius, sino va perdiendo sus propiedades. La botella de miedio litro puede llevarse consigo si salimos de casa pues aguanta perfectamente más de dos horas en temperatura ambiente. Comienzo y adaptación del protocolo: Día 1 al 21: Agregar a la mañana (o en el horario que esté tranquilo y disponga de casi 2 horas sagradas para hacer el protocolo) 8ml en 500cc y vas a dividir la botella en ocho (8) partes similares y beber una parte cada quince 15 minutos (es 1 hora y cuarenta cinco minutos de tomas) así hasta completar los 21 días. Recordar que en el transcurso de esas casi tres horas (una hora antes, una hora después y una hora de tratamiento) no se debe comer alimentos ni tomar medicamento alguno, solo infusiones si siente hambre. También se puede agregar 1 ml en un vaso limpio, seco y vacío y completar con agua mineral, o agua de mar cada quince minutos, si es que no puede preparar la botella. Lo que afecta al CDS: En principio los derivados de los tioles y los fenoles se contrarestan con el ClO2 (precisamente este se usa para destruir dichos compuestos). Ejemplos de compuestos inhibidores de dióxido de cloro son: N-acetil-L-cisteína, glutatión, ácido alfa-lipoico, ácido ascórbico, polifenoles, tocoferoles, bioflavonoides, antocianidinas, benzaldehído, cinamaldehído, concentrados de zumo y muchos remedios a base de hierbas. La mayoría de las frutas especialmente las uvas y las bayas son ricas fuentes de antioxidantes polifenólicos. Ejemplos de hierbas ricas en polifenoles antioxidantes son: el chocolate, el té, el café, la cúrcuma, la silimarina, regaliz, ginkgo, oliva. Los alimentos ricos en azufre también eliminan dióxido de cloro si está presente en el estómago en el momento del tratamiento. Algunos ejemplos son: el ajo, la cebolla, el puerro, espárrago, judías, guisantes, huevo, leche, e incluso papa blanca (debido al ácido alfa-lipoico). La proteína no debe estar presente en el estómago en el momento del tratamiento. Las proteínas están compuestas de aminoácidos que presentan una gran cantidad de fenoles, sulfuros orgánicos, tioles y aminas secundarias, que reaccionan y eliminan dióxido de cloro al entrar en contacto. L-tirosina tiene un grupo fenol. L-metionina es un sulfuro. L-cisteína es un tiol. L-triptófano, L-prolina y L-histidina tiene grupos aminos secundarios. Ciertas vitaminas del complejo B son igualmente reactivos tales como: tiamina, riboflavina, ácido fólico, pantotenato. Por último, muchos medicamentos contienen aminas secundarias, aminas terciarias, tioles, sulfuros o fenoles. Tendrían que ser identificados y no tomados en el momento del tratamiento. Mientras que los antioxidantes y los suplementos vitamínicos son generalmente saludables para fines preventivos y la longevidad, y mientras que estos son beneficiosos en el tratamiento de muchas enfermedades crónicas, estos son incompatibles en el momento del tratamiento, por lo tanto, la fruta, los zumos de fruta, concentrados de frutas, vinos, bebidas verdes, hierbas, proteínas, la mayoría de las vitaminas y la mayoría de los medicamentos no debe tomarse coincidiendo con el tratamiento. Si no se tiene en cuenta las incompatibilidades, menos oxidante sobrevivirá para matar patógenos y menor beneficio debe ser esperado. Ejemplos de alimentos ricos en almidones que no contrarrestan el ClO2 aunque coincida con la ingesta: el pan blanco, yuca, granos, pasta de trigo blanco, arroz blanco, galletas saladas. En resumen se puede concluir que si no hay interacción con la comida y antioxidantes con dosis más bajas se puede conseguir un efecto similar, o dicho de otro modo según lo que se coma se puede pasar de estar sobre-dosificado a infra-dosificado.