Batalla de Cancha Rayada (1818) La Batalla de Cancha Rayada, también conocida como Sorpresa o Desastre de Cancha Rayada (19 de marzo de 1818) fue una batalla de la Independencia de Chile, desarrollada en el marco del periodo independiente de la Patria Nueva, en la cual fueron derrotadas las fuerzas patriotas mandadas por José de San Martín en el encuentro sostenido con las fuerzas realistas cerca de Talca. Antecedentes Tras la invasión del ejército de José de San Martín, derrotando a la fuerza de Rafael Maroto que se le opuso en la Batalla de Chacabuco en febrero de 1817, los restos de las fuerzas leales al monarca tuvieron que replegarse hasta recibir los refuerzos que el virrey Joaquín de la Pezuela pudo reunir en base a tropas americanas y un batallón y escuadrón expedicionarios, que atravesaron por el cabo de Hornos, y por tanto no habían sido retenidos por Pablo Morillo en la Costa Firme. El grueso del refuerzo debía arribar en la expedición española ése año, y que acudiría en 11 transportes, pero cuyas tropas se sublevaron en el trayecto marítimo, pasándose además al bando independiente y entregando planos, rutas, puntos de desembarco, y todo lo que permitió finalmente la captura de la nave escolta, fragata "Reina María Isabel", y del resto de la expedición casi al completo. Los realistas de Chile, sin embargo, no había dejado de trabajar para reagrupar sus fuerzas en el sur, formando un total de 4.612 hombres con 14 cañones, y que al mando de Mariano Osorio avanzarían en dirección norte para enfrentar a los ejércitos independientes. Campaña de Cancha Rayada Después del juramento de independencia el 12 de febrero de 1818, el ejército unido argentino-chileno conformado por 8.000 hombres, seguía observando a los realistas que avanzaron situándose en la ciudad de Talca. Al caer la noche del 18 de marzo de 1818, el ejército aliado acampó en dos líneas paralelas dispuesto a pasar la noche. El general y libertador argentino José de San Martín viendo su posición muy comprometida, decidió cambiar de posición antes del amanecer, pero a iniciativa del general José Ordóñez, los realistas decidieron atacar cuanto antes. Sorpresivamente, San Martín fue avisado de que el enemigo salía de la ciudad, y sin tiempo para organizar la defensa, fue atacado por las tropas realistas. La confusión y el pánico desorganizaron las filas patriotas. Pero el general Juan Gregorio de Las Heras, que conocía la táctica realista de tomar por sorpresa al enemigo, pudo salvar íntegra la división de 3.000 hombres, escapando a menos de 200 metros de la retaguardia realista en un acto brillante. Cabe aclarar que Ordóñez era un viejo conocido de Las Heras, que lo había enfrentado varias veces antes y durante el Sitio y asalto de Talcahuano. San Martín logró movilizar a sus hombres hacia una posición donde sus tropas comenzaron a responder el fuego. Una vez realizada la maniobra las tropas patriotas se retiraron dejando 120 muertos, 300 heridos, 2.000 dispersos y 21 cañones. Los realistas tuvieron cerca de 200 muertos y heridos. 200 muertos y heridos(aprox.) Ejército Realista 4.612 soldados 14 cañones 120 muertos 300 heridos 2.000 dispersos 22 cañones Ejército de los Andes 8.011 soldados 33 cañones Orden de Batalla Comandante en Jefe Mariano Osorio Oficialidad José Ordóñez Lorenzo López de Morla Joaquín Primo de Rivera. Isidro Alaix Fábregas Unidades y Comandantes División de la Izquierda Batallón Concepción; Jefe, Juan José Campillo Batallón real infante D.Carlos; Jefe, teniente coronel Bernardo de la Torre Escuadrón -expedicionario- Lanceros del Rey.; jefe, José Rodriguez Escuadrón Dragones de Arequipa batería de artillería de a 4 División del Centro Batallón de Arequipa; Jefe, José Ramón Rodil Batallón -expedicionario- 1º del Burgos; Jefe, coronel José Maria Baeza. División de la derecha (mixto) Batallón -mixto- de Cazadores Batallón -mixto- de Granaderos Escuadrón de Dragones de Chillán, Jefe Cipriano Palma Dos escuadrones de Dragones de la Frontera; Jefe Antonio Morgado.