GOBIERNO DEL ESTADO DE JALISCO SECRETARÍA DE EDUCACIÓN DEL ESTADO DE JALISCO MAESTRÍA EN EDUCACIÓN CON INTERVENCIÓN EN LA PRÁCTICA EDUCATIVA ENSAYO ORIZONTE METODOLOGICO Y MARCO TEORICO QUE PRESENTA ROSALIA CONTRERAS MENDOZA ESTUDI ANTE DE L A M AES TRÍ A EN EDUC ACIÓN CON INTERVENCIÓN EN LA PRÁCTICA EDUCATIVA IXTLAHUACAN DE LOS MEMBRILLO JALISCO 12 DE OCTUBRE DEL 2913 INTRODUCCION La educación constituye un proceso de gran importancia para la vida y la formación integral de los alumnos, ya que está tiene el compromiso de crear las condiciones necesarias que le permitan vivir eficazmente en una sociedad compleja, en la que los lazos culturales se forjan acorde al momento histórico en el que viven nuestros alumnos y es la educación basada en competencias la que aporta las herramientas necesarias para vivir eficazmente. La educación primaria es la base para un aprendizaje y desarrollo permanente los cuales son fundamentales para que se puedan construir nuevos conocimientos, para favorecer o alcanzar la formación de competencias en nuestros niños y niñas. De ahí la importancia de fortalecer dicha educación con ejemplos que hagan que los niños y niñas estén motivados por dicha educación En términos generales la etapa de Educación Primaria supone un primer e importantísimo paso en la educación obligatoria, que empezará a sentar las bases formativas del alumnado, y que luego tendrá continuidad en una etapa de mayor especificidad curricular como la Educación Secundaria. A tal respecto, no hay que olvidar la importancia previa del kinder, el cual supone para el niño una experiencia educativa y de socialización que puede sentar las bases de una escolarización eficaz. Aunque por un lado la Educación Primaria (6-12 años, en tres ciclos de dos años cada uno), suele suponer la continuidad en el desarrollo formativo del alumnado, también puede ser un período de cambio con respecto a la etapa educativa anterior (Educación Infantil), dado que en el período de las primeras edades se suelen producir lazos afectivos y sentimientos de pertenencia entre maestra y alumnos (pudiendo compartir los tres cursos del segundo ciclo de Educación Infantil), mientras que en la Educación Primaria empieza a existir mayor diversificación en cuanto al número de maestros que dan clases a los niños, dificultando así la existencia de dichos lazos afectivos. Así pues, esta etapa educativa ha de sentar las bases de una educación integral del alumnado, en la que cada vez deben tener más peso las nuevas tecnologías (aplicadas a la educación), ya que si uno de los objetivos ha de ser el formar futuros ciudadanos, no cabe duda que tales tecnologías han de estar en cierta medida presentes en la cotidianidad del aula. Pero además de los aspectos curriculares en sí mismos, hay cuestiones que han de estar presentes en el día a día de esta etapa educativa, como la necesidad de crear un clima de confianza y de cooperación en el aula, favorecer la comunicación familia-escuela, una mayor implicación de los padres en las cuestiones escolares y extraescolares o la propia comunicación entre profesionales del centro escolar que dan horas lectivas al alumnado (favoreciendo la identificación de problemas de aprendizaje o de disciplina en los alumnos y a su vez, establecer estrategias conjuntas para poder resolverlos) La educación en México ha pasado por grandes cambios durante el transcurso de los años un autor lo menciona de esta manera: En los primeros años de vida independiente se distinguen por sus inquietudes educativas Lorenzo de Zavala, José María Luis Mora, Valentín Gómez Farías y el conservador Lucas Alamán. Estos pensadores a pesar de sus divergencias ideológicas y concepción de la forma de gobierno que debería adoptar nuestro país, coincidían en que la instrucción “era uno de los más poderosos medios de prosperidad” por tanto, la educación no debería concretarse a enseñar a leer y escribir, sino que se hacía necesario dotar a las ciudadanos de una formación moral y política acorde al sistema de gobierno que adoptara nuestra nación. “Así pues, es inconcluso que el sistema de gobierno debe estar en absoluta conformidad con los principios de la educación”. (Vázquez 1979: 30) En la etapa de la escuela tradicional en esta se le concede el valor de ser la institución social para todas las clases sociales y adquiere el carácter de pedagogía; aquí el maestro exige memorización, que el alumno narre y exponga al pie de la letra lo que se le pide un ejemplo son las tablas de multiplicar. Otra característica es que los temas son aislados y no representan algo significativo para el alumno, la educación del aprendizaje es expositivo y está enfocado al resultado sin análisis ni razonamiento, además no existe una relación alumno-profesor ya que en este caso el profesor es autoritario y el alumno pasivo El conductismo entra en esta educación tradicional en la cual tenia el objetivo de haya una buena conducta dicho paradigma centra su atención en el ambiente entiende por conducta el comportamiento observable, medible y cuantificable que muestra la persona ante los estímulos del medio aplica el principio del reforzamiento en la educación. Otro punto es que la evaluación se basa en el comprobar, se ve al alumno cuyo aprendizaje y desempeño escolar pueden ser arreglados desde el exterior basta con programar adecuadamente los insumos educativos para que este logre el aprendizaje de conductas académicas deseables el paradigma cognitivo sustituyo las perspectivas conductistas y aporta algo importante como el hecho de existe la atención, memoria y razonamiento reconoce la importancia de cómo las personas llevan un proceso para acceder e interpretar la realidad, se basa en el logro del aprendizaje significativo. Dentro del paradigma histórico se basa en el desarrollo próximo, el alumno es concebido como un ser social y el maestro enseña en un contexto de prácticas y medios socioculturales determinados. Posterior a esto surge el paradigma constructivista en el cual dicha teoría trata de explicar cuál es la naturaleza del conocimiento humano, sostiene que el aprendizaje es esencialmente activo en este el alumno asume su papel altamente activo ya que él es el responsable de su propio aprendizaje. DESARROLLO Hablar de práctica docente y práctica educativa es referir dos conceptos diferentes pero que guardan entre sí una relación estrecha, si bien es cierto que se involucran en la actividad escolar y educativa, es importante establecer las diferencias para esclarecer el significado de cada uno de ellos y distinguir los aspectos que les hacen distintos, con el propósito de puntualizar el uso de los mismos y las referencias a las que nos llevan. El concepto Práctica Docente, se define como la demostración de capacidades para dirigir las actividades docentes en el aula. Que implica que el docente debe demostrar en su hacer ciertas habilidades de acción al realizar sus actividades en el entorno de su trabajo cotidiano, lo cual limita el concepto. También se da este significante a la ejecución de clases prácticas como requisito para prepararse como profesor y demostrar las habilidades requeridas para tal efecto. Que hace pensar en el término como parte de un proceso de preparación, adiestramiento y desarrollo, marcando una diferencia que se debe hacer de este concepto. Por tanto, la Práctica Docente se podría concebir como el conjunto de acciones que un profesor ejecuta en el entorno de la actividad educativa o las que realiza en el proceso de preparación o comprobación de éste proceder propio del educador en y durante el proceso de la actividad educativa, con lo que él mismo se identificará ante sus alumnos, padres de familia y sociedad con una cierta categorización de su persona y su trabajo. A partir de esta noción de práctica educativa y de las derivaciones epistemológicas. En algunos casos se utiliza reiterativamente un conjunto de rutinas derivadas de la tradición escolar, y ante las situaciones problemáticas e inciertas que ocurren en cada grupo y situación educativas, se responde creativamente a esos desafíos y transforman continuamente la tradición. De ahí que planteara como primera característica de la práctica educativa la capacidad para articular reiteración y creación simultáneamente. En segundo lugar, y para comprender los valores que orientan las acciones tanto reiterativas la práctica educativa como una actividad orientada no sólo por una ética, sino también por una estética. Por último, al reconocer que la función del maestro no es inocente: que no hay neutralidad cuando articula la experiencia del estudiante, y que su práctica educativa la construye siempre con un sentido y significación política, consideré como tercera característica la de constituirse en una actividad política en la que no sólo se reflexiona en torno a la lógica del poder que la estructura, sino que también detona una voluntad de resistencia en los estudiantes. CONCLUSION Mi práctica docente ha ido cambiando con el paso del tiempo y como resultado de las experiencias en diferentes grupos creo que lo importante es aceptar cuando algo no esta bien y cambiarlo ya que es parte del proceso.