Uso y Manejo de las Micorrizas: Investigación en Cultivos Publicado el: 16/9/2015 Autor/es: Jairo Barrera López, Ingeniero Agrónomo de la Universidad Nacional de Palmira. Gerente de Agrotecnia Ltda. y Guillermo Arango Sereno, Biólogo de la Universidad del Valle. Director de Laboratorio Agrotecnia Ltda. Colombia Introducción La calidad y la productividad de los diferentes cultivos del trópico es posible mejorarla mediante cambios en características físicoquímicas y biológicas del suelo. Debido a los altos costos de producción y al deterioro que está ocasionando la aplicación constante e irracional de fertilizantes químicos, se hace necesario buscar alternativas productivas y económicas que beneficien la Microflora y Micro fauna del suelo. Los fertilizantes aplicados en la mayoría de los cultivos comerciales (Semestrales, Anuales, Bianuales, Semiperennes, y Perennes) son tomados en pequeñas cantidades perdiéndose por diferentes causas como: Lixiviación, Fijación y Erosión. Una alternativa para solucionar este problema es aumentar la eficiencia de las plantas para tomar los nutrientes del suelo de tal manera que con menores cantidades de fertilizantes se obtengan cosechas satisfactorias. Una de las formas de aumentar dicha eficiencia es a través de la Micorriza. La incorporación de hongos micorrizógenos ayuda a la planta a mejorar el área radicular para tomar nutrientes del suelo y traslocarlos hacia la planta. Estos elementos son: Calcio (Ca), Boro (B), Zinc (Zn), Nitrógeno (N), Potasio (K), Magnesio y especialmente Fósforo (elemento de muy poca movilidad en el suelo). La simbiosis entre el hongo y la planta es de tipo mutualista y es de forma obligada para el hongo sobrevivir. En la asociación el hongo recibe de la planta productos fotosintéticos en cantidades de 1-12% de la asimilación fotosintética, los cuales son intercambiados. El agricultor debe buscar alternativas de producción a bajos costos conservando un equilibrio en la naturaleza. Se han realizado numerosas investigaciones tendientes a observar el comportamiento de las Micorrizas en el trópico. Cultivos semestrales Introducción Son cultivos que se desarrollan en forma tradicional y tecnificada siendo fuente de ingreso en todas las zonas donde se cultivan. Ejemplo de estas explotaciones son: Maíz, Fríjol, Soya, Arroz, Trigo, Cebada, Algodón, Maní, etc. Dentro de las corrientes modernas de la agricultura se abre campo cada vez con más fuerza el concepto de agricultura biológica y dentro de ella la "Fertilización Biológica" que consiste en la utilización de recursos bióticos como componentes del sistema suelo-planta que ayudan a la nutrición bien por mecanismos de fijación de elementos, por solubilización de minerales del suelo o por transferencia de la solución nutritiva al sistema vascular de las plantas. Resultados de ensayos realizados con M.V.A. en cultivos semestrales Leguminosas Se han obtenido los siguientes resultados: Mayor germinación 85-90% Mayor desarrollo en un período más corto. Mayor capacidad radicular (número mayor de raíces, raicillas de mayor longitud y diámetro más amplio). Mayor número de vainas por planta (con aumentos hasta del 150%) El número de granos por vaina fue igual. Mayor acumulación de materia seca. Prolongación del ciclo vegetativo debido al incremento en fases de formación de vainas y llenado de granos. El ataque de enfermedades fungosas (Fusarium, Rhizoctonia etc.) y de Nemátodos fue muy bajo. Existe una interacción bien interesante en cultivos de leguminosas para la fijación de N y además proporciona Fósforo a la planta. La coexistencia de esa simbiosis (Rhizobium M.V.A.) conviene a la ecología y nutrición de las mismas. El Fósforo presente en la solución del suelo es determinante para la nodulación (Rhizobium) y actividad de la M.V.A. La nodulación de las leguminosas por Rhizobium es bastante dependiente de una adecuada micorrización de la planta. Hoy en día se acepta tanto la amplia distribución de las micorrizas en leguminosas noduladas, como el importante papel que esta simbiosis juega en la nodulación y en el funcionamiento de Rhizobium (Barea & Azcón Aguilar 1983; Hayman 1986). En condiciones naturales, los hongos M.V.A. y Rhizobium colonizan el sistema radical casi simultáneamente y no parece haber competición entre ambos tipos de endófitos por sitios de infección (Smith & Bowew 1979). Los inóculos utilizados en estos cultivos fueron básicamente Glomus, Acaulospora, Gigaspora, y Entrophospora. Gramíneas Estos cultivos responden a la inoculación con "'Micorrizas"' en suelos con niveles de poca y mediana fertilidad. La rotación de cultivos y la fertilización fosfórica pueden afectar la nutrición de P y el crecimiento en etapas de desarrollo tempranas a través de sus efectos en el desarrollo y funcionamiento de las Micorrizas (Evan y Miller 1988). La fertilización fosfórica reduce la colonización en gramíneas, pero la reducción no tiene efecto sobre la toma de fósforo y la producción. El desarrollo temprano de las micorrizas y su efecto nutricional en la planta puede modificar la proporción de materia seca distribuida en las estructuras subterráneas. Investigaciones realizadas por Agrotecnia Ltda. (1997-2000) han demostrado que aplicaciones que oscilan entre 500 y 800 Kg. / Ha de Micorrizas, mejoran: altura de planta, mayor producción, mejor desarrollo radicular (anclaje), mayor toma de nutrientes y mayor tolerancia al ataque de plagas y enfermedades con respecto a aquellas donde no se realizaron aplicaciones. Las mayores producciones se obtuvieron donde se realizaron mezcla de Micorriza – Materia Orgánica y Fertilizante Químico obteniéndose producciones hasta del 25% más. (Agrotecnia Ltda.). Los hongos micorrizogenos mejoran la resistencia de las plantas al estrés hídrico. Café En el año 1.897 en la Isla de Java, Janse observó la ocurrencia de Micorrizas Arbusculares en Café. Posteriormente se demostró experimentalmente su importancia para el crecimiento de los retoños (zocas) del cafeto. Souza y Powell en Raleigh Carolina del Norte E.U.A (1.975 - 1.977) demostraron que plantas de café inoculadas con hongos micorrizogenos presentan un mejor crecimiento y una mejor nutrición, sufriendo menos el ataque de Meloidogyne. Recientemente en ensayos realizados en Sevilla (Valle) por la Cooperativa de Caficultores y Agrotecnia Ltda., se demostró que si se manejan micorrizas desde el germinador pasando por almácigos hasta sitio definitivo los ataques de Nemátodos (Meloidogyne exigua) y de Mancha de Hierro (Cercospora coffeicola) se disminuyen en más del 70%. Se consiguieron plántulas más sanas con mayor zona radicular. Mayor altura y sin problemas fitosanitarios. La colonización con M.V.A. de las raíces del cafeto posee aspectos anatómicos muy pocos conocidos. Las primeras investigaciones confirmaron la formación de protuberancias, posteriormente se confirmó la formación de otras estructuras como arbúsculos y vesículas y así mismo la presencia de esporas intraradiculares (Fernández 1.987). Factores como edad del cultivo, condiciones edafoclimáticas, de suelo y de aplicación de correctivos (cal) influencian la colonización. Los géneros de M.V.A. encontrados en mayor cantidad en cultivos de café han sido Acaulospora Glomus y Entrophospora. Otros géneros han sido encontrados en menor cantidad. Se han identificado 45 especies de Glomales en la rizosfera del cafeto siendo: 12 especies de Acaulospora 17 de Glomus 6 de Scutellospora 4 de Gigaspora 4 de Sclerocystis 2 de Entophospora Además de varias especies no descritas las modificaciones edáficas y el uso de pesticidas que alteren la población microbiana del suelo, pueden interferir indirectamente sobre los hongos micorrizogenos. Las especies presentes en la rizosfera del cafeto presentan una densidad creciente a partir de Marzo y Abril obteniendo la densidad máxima en Septiembre y Octubre. El efecto de la inoculación de Acaulospora tuberculata Glomus manihothis, Glomus mosseae y Scutellospora heterogama sobre el crecimiento y desarrollo de plantas de café de las variedades Caturra, Colombia y Típica fue estudiado en condiciones de invernadero. Glomus manihothis fue la especie más efectiva en el crecimiento de las plantas. En suelos contrastantes por su condiciones físico - químicas y microbiológicas (suelo Naranjal, suelo de Convención y suelo de Gigante) Glomus manihothis y el inoculo comercial "MICORRIZAR" mostraron ser efectivos en la colonización radical, pero derivar de la simbiosis respuestas diferentes en el crecimiento y desarrollo de las plantas depende del tipo de suelo. (Rivillas O.C.A. 2.000. Cenicafe). Los hongos micorrizógenos ejercen efectos nutricionales sobre el crecimiento de las plantas destacándose las alteraciones benéficas en las relaciones agua - planta y patógeno. Existen diversas evidencias que indican que la presencia de hongos micorrícicos puede contribuir a reducir los daños causados por patógenos o plagas del sistema radicular (Souza, Powell y NT). En numerosos ensayos realizados en zonas cafeteras del Valle del Cauca se encontraron que plantas inoculadas (géneros: Glomus, Acaulospora y Entrophospora) muestran una tendencia a incrementar producción (5- 15%) y absorción en más del 100% de P, Ca, K y Mg. (Agrotecnia Ltda. 1995-2001). Para la utilización de M.V.A. es necesaria la selección de especies o agentes aislados eficientes y adaptados a las condiciones edafoclimáticas y de manejo del cultivo en que se pretende inocular. Caña de azúcar 0 panelera La asociación simbiótica entre algunos hongos del suelo y las raíces de caña de azúcar y/o panelera favorecen la absorción de nutrientes de bajo coeficiente de difusión, la extracción de agua y aumentan la resistencia a determinados estrés (CENIAP, AP 4653 Maracay 2101 Venezuela). Los géneros de mayor importancia encontrados en cultivos de caña han sido Acaulospora y Glomus hasta con un 51% de "infección radicular" en suelos con ph de 7.6 y con contenido de Fósforo de 5.1 hasta 10.2 Kg. / Ha y Potasio desde 180 hasta 463 Kg. / Ha. notándose una mayor producción en aquellos que fueron inoculados (A. MAHADEVAN, N RAMAN & K NATARAJAN). Se ha encontrado que la abundancia y diversidad de hongos micorrizógenos es alta en suelos con poco manejo, mientras que en condiciones de riego y uso de insumos disminuye la diversidad y tamaño de las poblaciones independiente del Fósforo (P) disponible. Por consiguiente suelos dedicados a la explotación de caña panelera (Zona de ladera) son menos disturbados que los de caña de azúcar razón por la cual se encontró un mayor número de propágulos. Cultivos como caña, maíz y sorgo exploran más eficientemente el volumen del suelo a su disposición cuando hay presencia de hongos micorrizógenos. A pesar de que alrededor del cultivo de la caña de azúcar hay estudios sobre abundancia y diversidad de M.V.A. en lotes con diferentes características físico - químicas (Amora y Varela 1.988, Toro 1.984) no se posee información sobre efectividad de estas especies ligada a diferentes condiciones de suelo. Los porcentajes de "infección" de hongos micorrizógenos no mostraron diferencias significativas entre suelos. Toro (1984) reporta que en el Valle del Cauca, la caña de azúcar forma M.V.A. con especies de los géneros Glomus, Acaulospora, Entrophospora y Gigaspora. Algunos resultados En el Ingenio La Cabaña se escogieron para dicho trabajo diferentes series de suelo con su correspondiente variedad de caña. La cosecha del experimento inicial, establecido sobre un Inceptisol serie Puerto Tejada y con la variedad V7151 con una edad de 14.5 meses cosechada en Diciembre de 1.993 presento diferencias estadísticamente significativas entre tratamientos para los parámetros de tonelaje y rendimiento de azúcar. Tratamientos A: Testigo absoluto. B: Micorriza (500 Kg. / Ha) + 18 - 46 - 0 (156.5 Kg. / Ha) C: Micorriza (500 Kg. / Ha) + 18 - 46 – 0 (39.125. Kg. / Ha) D: Micorriza (500 Kg. / Ha) E: 18 - 46 - 0 (156 Kg. / Ha) + Urea (312.5 Kg. / Ha) F: Testigo Comercial. VARIEDAD V 7151 Siembra Octubre 3 92. Cosecha Diciembre 20 / 93. Resultados Tabla 3: algunos resultados en caña de azúcar En suelos de zonas cafeteras y planas del Valle del Cauca, utilizando el producto comercial "Micorrizar" (Mezcla de Glomus, Acaulospora, Gigaspora y Entrophospora) se logró: 1. Incrementar la producción de panela entre un 25 y 30 % realizando aplicaciones de 500 hasta 800 Kilogramos Hectárea al momento de la siembra y / o después de la cosecha (zocas) en mezcla con Roca Fosfórica al 10 %. 2. En 6 tratamientos de Micorrizar + Materia Orgánica se obtuvieron: Porcentajes de colonización del hongo que va desde 65.5 hasta 76.5 % mayor altura de planta, mejor desarrollo foliar, mayor diámetro, mejor macollamiento y mejor aspecto general donde se aplicaron 3 toneladas de Gallinaza y 750 Kilos de Micorrizar / Ha.) (Agrotecnia Ltda. 19992000 - 2001, Toro (1984) reporta la no existencia de una correlación directa entre las características físico - químicas de los suelos y la distribución de las especies micorricicas en los mismos. La variedad de caña la fertilidad del suelo así como el estado de desarrollo de la planta fueron factores que modificaron la presencia de los hongos micorrícicos V.A. en la planta de caña. Un mayor contenido de fósforo del suelo independientemente de sus características físicas, determino una menor infección por los hongos M.V.A. tanto en la variedad POJ 2878 como CP 57603 (Toro 1984). Frutales semestrales Al realizar manejos agronómicos de agricultura sostenible estas especies vegetales tendrán un amplio futuro en mercados nacionales e internacionales por consiguiente se han iniciado investigaciones en municipios del Norte del Valle para observar las respuestas de ellos al manejo biológico en cuanto a fertilización control de plagas y enfermedades. Durante los primeros estados de los cultivos se observó un mayor crecimiento en plántulas manejadas con productos importados (Turbas) pero las diferencias desaparecen paulatinamente después del trasplante en aquellas plántulas donde se aplicaron bioinsumos (Materias Orgánicas -Micorrizas) (Agrotecnia Ltda. 1999-2000). Mientras los testigos (turba) demuestran excelente germinación y homogeneidad los tratamientos con Bioinsumos muestran muy buena germinación pero una alta heterogeneidad en el tamaño y vigor de las plántulas. Al momento del trasplante las plantas presentaron fuerte amarillamiento (deficiencias nutricionales). Al adicionar Materia Orgánica este desaparece. A medida que transcurre el periodo vegetativo de estas especies se nota un mayor vigor en plantas manejadas con insumos biológicos y su producción aunque muy similar a la de los manejos tradicionales tiene un mayor valor agregado en conservación del medio ambiente y salud humana. Se recomienda continuar con estos trabajos en todas las zonas del país donde se manejan estas explotaciones agrícolas. Flores – Ornamentales Las micorrizas (M.V.A.) tienen marcada importancia en el cultivo de las flores y en los diferentes tipos de explotación ya sea en forma doméstica o a manera comercial a gran escala. Se conoce por varias décadas que en los cultivos de flores el uso elevado de fertilizantes es un factor limitante en esta explotación agrícola. Por eso bioinsumos como las micorrizas prestan una gran ayuda, mejorando notoriamente la toma de nutrientes y dando un mayor desarrollo. En rosas se han logrado incrementos hasta en un 30% en la producción (Arango 1994). Utilizando una mezcla comercial de micorrizas y materia orgánica (compost) en Crisantemos Gerbera entre otras se han logrado excelentes resultados en cuanto a floración (32 a 80%) y (17 a 26%) respectivamente (Lanzón 1.988). También se ha logrado disminuir gradualmente la aplicación excesiva de fertilizantes hasta en un 40% en cultivos como rosas crisantemos y gerbera (información personal floricultura de la Sabana de Bogota 1.994). La sanidad fitosanitaria mejoro notoriamente en materiales manejados desde un inicio con micorrizas. La presencia de Fusarium bajo hasta en un 35% y la de Nemátodos en un 48% especialmente en cultivos manejados en campo. Fruticultura La fruticultura en Colombia se desarrolla desde el nivel del mar hasta alturas superiores a los 2.500 metros, encontrándose diversidad de cultivos en climas cálidos, medios y fríos. La estacionalidad de la producción ha ocasionado problemas en cuanto a oferta y demanda. Bajo buenos manejos agronómicos son cultivos rentables en zonas donde los monocultivos han dejado de serlo. Se hace necesario entregar paquetes tecnológicos a los productores donde la utilización de productos biológicos sea parte importante en la producción limpia. Dentro de estos bioinsumos tenemos la Micorriza Vesículo Arbuscular cuyo aprovechamiento práctico forma parte de las tecnologías actualmente en desarrollo vinculadas a los conceptos de agricultura y silvicultura biológicas, gestión racional de los suelos y desarrollo sostenible. Los hongos micorrizógenos se utilizan como biofertilizantes es decir insumos biológicos que favorecen el desarrollo de cultivos y plantaciones sin los problemas de contaminación que ocasionan los insumos químicos (Guerrero E.). Según Sieverding y Barea (1.991) los objetivos que persigue el uso práctico de hongos M.V.A. en sistemas de producción vegetal son: a) Hacer un uso más eficiente del fósforo del suelo y de los fertilizantes fosfóricos. b) Optimizar la productividad de los suelos y cultivos con niveles bajos de insumos. c) Hacer posible y rentable la producción vegetal en condiciones adversas. d) Ayudar a establecer cultivos en suelos erosionados o degradados. El uso de inoculantes biológicos no puede seguir las mismas reglas que se aplican en el caso de los insumos químicos (fertilizantes, plaguicidas, herbicidas entre otros)... Por tratarse de un insumo biológico tiene especificaciones de aplicación distintas a los productos químicos. La M.V.A. es un mediador biológico de la nutrición vegetal capaz de aprovechar eficientemente elementos poco móviles en el suelo básicos para la planta. Es complementario de los fertilizantes químicos. Las plantas inoculadas con micorrizas tienen mayor tolerancia a patógenos y un mejor balance hídrico. Los efectos de la inoculación no se manifiestan en los mismos tiempos que en el caso de la fertilización química, aunque al final el resultado esperado en cuanto a productividad sea similar. Trabajos realizados en frutales Introducción La asociación simbiótica permite que los frutales de los diferentes pisos térmicos absorban los nutrientes del suelo haciéndolos disponibles para la alimentación de la planta en forma rápida y por períodos prolongados. Hay prevención con respecto a plagas y enfermedades. Raíz se incrementaron notablemente con la mezcla E. colombiana. y G. manihothis especialmente en suelo natural. Los cítricos (Cítrus spp) el aguacate (Persea americana) y el mango (Mangífera indica) se consideran micorrizógenos obligados y otros como la papaya (Carica papaya) micorrizógenos facultativos. El crecimiento de los cítricos puede incrementarse hasta en un 100% (Villaquiran 1988). En cultivos comerciales aplicando de 1-2 Kg. por planta se han obtenido producciones mayores entre 15-20% y se ha reducido el daño ocasionado por Phytophtora parasítica. Algunos resultados en cítricos. Tabla 3: algunos resultados en cítricos. Utilizando el producto comercial "Micorrizar" (Mezcla de Glomus, Acaulospora - Gigaspora y Entrophospora) se realizó un ensayo en la Granja Venecia del Comité Departamental de Cafeteros del Valle bajo los siguientes parámetros: REFERENCIA: DE FECHA DE INSTALACIÓN: PATRONES: NUMERO DE TRATAMIENTO: ÁRBOLES: ENSAYO DE MICORRIZA VIVERO CITRICOS MARZO 07 DE 1.999 SUNKY x ENGLISH CITRUMELO VOLKAMERIANO 10 POR PATRON 30 POR TRATAMIENTO 1.- 50 Gramos 2.- 75 Gramos 3.- 100 Gramos 4.- TESTIGO “Micorrizar” PRODUCTO UTILIZADO: Toma de datos – Patrones: Tabla 4: Ensayo de Micorriza vivero de citricos Nº 1. junio 10/99 Tabla 5: Ensayo de Micorriza viviero de cítricos Nº2. Agosto 10/99 Tabla 6: Ensayo de Micorriza vivero de cçitricos Nº3. Octubre 10/99ç Observaciones: Se presentó un buen desarrollo en todos los tratamientos, resaltando en los tratamientos con Micorrizas una mejor apariencia, con relación al testigo. Mayor tolerancia a los ataques de plagas en los tratamientos de Micorrizas. La variedad Sunki x English, presentaron los mejores resultados en cuanto a desarrollo, con el tratamiento No. 2 (75 gramos de Micorriza por bolsa). Los patrones Citrumelo CPB- 4475 y Volkameriano, presentaron los mejores resultados en cuanto a desarrollo, con el tratamiento No. 2 (75 Gramos de Micorriza por bolsa). Aguacate El desarrollo del aguacate (Persea americana) micorrizado puede elevarse en un 83% en peso 123 % en crecimiento y 258% en altura (Mengue 1.978). En un estudio realizado en la Universidad del Tolima se observaron resultados benéficos de los microorganismos del suelo para el crecimiento del aguacate. Cuando no se agregaron microorganismos al suelo la planta utilizo más reservas del cotiledón, concluyéndose con esta observación que los microorganismos están aportando cantidades considerables de nutrientes en el desarrollo inicial del aguacate. Se confirmó que las raíces de aguacate están asociadas con Micorriza Vesículo Arbuscular (Morante D. Rafael U. Del Tolima.). En ensayos realizados por AGROTECNIA LTDA en la Granja Venecia del Comité Departamental de Cafeteros del Valle, utilizando el producto comercial "Micorrizar" (mezcla de Glomus, Acaulospora, Gígaspora, y Entrophospora) se obtuvieron los siguientes resultados a nivel de vivero: Referencia: Ensayo de micorriza vivero de aguacate Fecha de instalación: marzo 07 de 1.999 Patrón: nativo antillano 30 por tratamiento Número de árboles: 120 total Tratamiento: 1.- 50 gramos - 30 árboles 2.- 75 gramos - 30 árboles 3.- 100 gramos - 30 árboles 4.- testigo - 30 árboles Toma de datos – Patrones Tabla 7: Ensayo de Micorriza vivero de aguacate Nº 1. Mayo 10/99 Tabla 8: Ensayo de Micorriza vivero de aguacate Nº 2. Junio 10 / 99 Tabla 9: Ensayo de Micorriza vivero de aguacate Nº 3. Noviembre 01/99 Observaciones: El tratamiento No 3, (100 gramos de Micorriza por bolsa), presentó el mejor desarrollo y precocidad en Viveros, acortando el ciclo de producción de injertos en 1 mes, al pasar de 9 meses a 8. Los tratamientos 1 y 2 presentaron un desarrollo similar al testigo. El prendimiento fue muy similar en todos los tratamientos, (80%). Frutales de clima frio Los frutales de clima frió (Lulo, Tomate de Árbol, Granadilla, Mora, Fresa etc.) son de gran futuro debido a su exquisito sabor y a su valor nutritivo. Los suelos que se aprovechan para su cultivo son los recién desmontados, ricos en materia orgánica, con buen drenaje y textura franca. Generalmente son bajos en P asimilable. Wolf (1.976) encontró que la deficiencia de P en lulo detiene el desarrollo de las plantas retrasa la maduración del fruto y malforma la semilla. Los cultivos de clima frío presentan diversos problemas de plagas y enfermedades siendo algunos de los más graves e importantes: Pasador del fruto, Antracosis y los Nemátodos de la raíz. Tomate de árbol Los efectos del hongo Micorriza Vesículo Arbuscular (M.V.A.) en la infección de tomate de árbol sobre nemátodos del cuello de la raíz Meloidogyne incógnita, fueron estudiados en suelos fumigados sin suplemento de fertilizante fosfórico. Los nemátodos redujeron severamente el crecimiento de la planta. En las plantas inoculadas doblemente, la infección por Micorriza mejoro el crecimiento de la planta, suprimió la reproducción de los nemátodos y su desarrollo en las raíces. La infección por nemátodos y su desarrollo fue menor en plantas preinfectadas con hongos micorrizógenos que en plantas inoculadas simultáneamente con ambos organismos. El beneficio atribuido a la inoculación micorrízica no lo replico la añadidura de fertilizante fosfórico y por lo tanto no se debió simplemente a la nutrición mejorada por fósforo en el hospedero. KAREN M COOPER. División de Horticultura y Procesamiento y GORDON, S. GRANDISON. División de Entomología Departamento de Investigación Científica e Industrial, Auckland Nueva Zelanda. Lulo (Solanum quitoense) El cultivo de lulo presenta marcados síntomas de presumibles deficiencias de nutrientes evidenciados en diferentes patrones de clorosis foliar, caída prematura y generalizada de flores y frutos entre otros, una de las más frecuentes la del Boro. Al observar el gran potencial productivo del lulo en suelos extremadamente pobres en fósforo Patiño (1.983) comprobó la estrecha relación micorrícica del lulo con hongos M.V.A. Baylis (1.970) y Cooper (1.975) compararon el efecto de inoculación con M.V.A. en dos solanáceas S nígrum y S laciniatum, de sistema radical similar al del lulo con otras dos especies entre ellas Leptospermun scoparium, las cuales exhiben raíces gruesas y pocos pelos radicales en el primer caso, en suelos con 8 p.p.m. de P disponible, respondió a la inoculación L scoparium y no S nigrum. En el segundo caso, en suelos con menor contenido de P, las cuatro especies respondieron. Hall (1.975) encontró resultados similares en tomate. Según algunos investigadores plantas provistas de raíces finas y de pelos radicales numerosos, tienden a ser menos dependientes de la M.V.A. que aquellas con raíces gruesas y cortas. Teniendo en cuenta lo anterior y que el lulo presenta un sistema radical fibroso y con abundantes pelos radicales, se podrá concluir que hay un posible micotrofismo facultativo en el lulo; (esto quiere decir que con adecuados niveles de P asimilable puede desarrollarse normalmente pero con bajos niveles de P su desarrollo depende de la asociación micorrícica.). La efectividad de los hongos M.V.A. en lulo y cultivos de clima frió depende de la especie, de la procedencia de la cepa y de las condiciones del suelo (especialmente P asimilable). El efecto de la M.V.A. sobre la resistencia a la sequía podría llegar a tener en el lulo resultados extraordinarios por la aparentemente elevada exigencia de agua que muestra este cultivo, Pasifloras (Maracuyá- Granadilla Curuba) La desinfectación del suelo es una práctica común de manejo en lo que respecta al control de enfermedades radicales en etapa de semillero, esta eliminación de microorganismos que incluye los hongos micorrizógenos desfavorece la presencia de la simbiosis e influye negativamente sobre el desarrollo de la planta y la eficiencia de los fertilizantes fosforados. Trabajos de campo Materiales y métodos Se utilizó semilla regional seleccionada de las plantas más productivas y que presentaban las mejores características de adaptación a la región. El producto comercial utilizado como bioinsumo fue "Micorrizar" (AGROTECNIA LTDA.) Materia Orgánica: Cereza de Café. Se realizaron dos inoculaciones de la siguiente manera: 1. Al momento del transplante a bolsa (30 grs.) por sitio; comparándola con la aplicación de un nematicida comercial (5 grs.) para observar el comportamiento de la planta con respecto al ataque de nemátodos. 2. Al momento de la siembra definitiva (80 grs. /sitio) para determinar a través del tiempo la colonización del hongo en la zona radicular, evaluándose además la aplicación y no aplicación de nematicidas comerciales (10 – 100 grs. / planta). Las labores efectuadas fueron las siguientes: 1. Aplicación de Materia orgánica (1Kg), Micorriza (100 grs.) y Roca Fosfórica (10 grs.) al momento de la siembra. 2. Aplicación de Materia Orgánica (1.000 grs.) y Roca Fosfórica (100 grs.). 3. Aplicación de Fertilizantes Químicos (15 - 15 -15) en dosis de 20 - 40 - 50 grs. Resultados y discusión Los resultados obtenidos muestran un mayor desarrollo en plantas donde se aplicó la mezcla Micorrizar + Materia Orgánica + Roca Fosfórica (15% en altura y desarrollo foliar). El ataque de nemátodos no es significativo en ninguno de los tratamientos encontrándose las raíces de las plantas sanas. El desarrollo radicular es mayor y de mejor formación donde se inoculó con Micorrizar (40%) teniendo en cuenta que la diferenciación empieza a marcarse después de 45 días aproximadamente (época en la cual ocurren las etapas 3 y 4 en el desarrollo del inoculo (efectividad de la simbiosis y reproducción del hongo). Se aumentó notablemente la eficiencia en toma de nutrientes ya que no hubo diferenciación significativa en cuanto al aprovechamiento de la planta en relación con las dosis aplicadas. (La buena formación de área radical es fundamental para la toma de nutrientes). Los costos de producción se disminuyen (30-40%) notablemente debido al estado fitosanitario que presentan las plantas que han sido inoculadas; la aplicación de insecticidas y fungicidas químicos es mucho menor. UVA (Vitis vinífera) En Vitis sp se registran diferentes géneros de hongos asociados con M.A. En campos del estado de Nueva York (USA) se ha encontrado Endogone sp; en Turín (Italia) se han detectado la presencia de G. fasciculatum y G. mosseae (Deal, Boothroyd y Mai 1972; Schubert, Bonfante, Fasolo y Fontana 1980/1981 y Nappi, Jodice y Kofler 1.981). En la zona de Santa Helena (Valle del Cauca) las especies de HMA encontradas fueron: Sclerocystis rubiformis (259 esp. /50g de suelo seco), Scutellospora heterogama (5 esp. /50 grs. suelo seco) Glomus fasciculatum y G geosporum. Estas identificaciones fueron efectuadas por el doctor E Síeverding. En estos suelos predomina la textura arcillosa. Se encontraron diferencias altamente significativas entre los suelos con contenidos menores de 15 p.p.m. de fósforo que presentan el mayor número de esporas (Sánchez de P 1.990) Chontaduro La evaluación del chontaduro se realizó de 5 meses en vivero y se presentaron diferencias significativas por efecto de la interacción micorrícica por fertilización y los mayores valores de peso seco (22.8 grs. /planta) se obtuvieron con el tratamiento de Micorriza introducida y fertilización completa diferente a los tratamientos con Micorriza nativa y el testigo con suelo natural. En el volumen de raíz la Micorriza nativa con 103 cm. /planta, supero a los demás tratamientos y en diámetro del tallo la Micorriza introducida con 2.8 cm. /planta, fue diferente con respecto a la Micorriza nativa con fertilización completa y sin fertilización y al suelo natural. Al analizar el contenido de nutrimentos en el tejido vegetal se encontraron diferencias significativas por efecto de las micorrizas en la absorción de N, K, Ca, Mn, Fe y B. Los mayores contenidos de N y K se obtuvieron con Micorriza introducida (244 mg. / planta y 263 mg. / planta respectivamente) sin diferencia con respecto a la nativa y diferente al suelo natural. En cuanto a la absorción de Ca, Mn, Fe y B, los mayores valores se encontraron con la Micorriza introducida y diferente con respecto a la Micorriza nativa y al suelo natural. El efecto de la fertilización en la absorción de nutrientes fue significativo en los elementos K, B, Mn y los mayores contenidos se obtuvieron con fertilización completa sin diferencia con respecto a –La mitad de la fertilización y diferente al testigo sin fertilizar. En el tratamiento con fertilización completa se presentó mayor absorción de Mn (1.2 mg. /planta) con respecto a la mitad y sin fertilización. El Araza La evaluación se realizó después de siete meses en vivero y los resultados indican que no hubo diferencias significativas por efecto de los tratamientos con micorrizas y fertilización en las variables altura de planta, volumen de raíz, área foliar y peso seco. El mayor número de esporas (6g/ suelo) se encontró con la Micorriza introducida y fertilización completa y la mayor colonización de raíces se presentó con la Micorriza nativa sin fertilización (21%) y diferente a los demás tratamientos. Se presentó efecto significativo en la absorción de B y Mn, donde los tratamientos con Micorriza introducida y nativa presentaron los mayores contenidos y diferentes con respecto al suelo natural. Se presentaron diferencias significativas, por efecto de la fertilización en el contenido de los nutrientes K, Mn, y B con los tratamientos de fertilización completa y la mitad de la fertilización con respecto al suelo sin fertilización. Borojo La evaluación se realizó a los ocho meses en vivero y no se presentaron diferencias significativas por efecto de los tratamientos con micorrizas y fertilización en las variables altura, numero de hojas, área foliar, peso seco y diámetro del tallo por planta. En cuanto al volumen de raíz, el mayor valor se presentó al inocular con la Micorriza introducida sin fertilización (6.3 cm3) sin diferencia con respecto a la Micorriza nativa sin fertilización y con fertilización completa. Los tratamientos que presentaron el mayor número de esporas (11-12 esporas/g. suelo) fueron Micorriza introducida con la mitad de la fertilización y Micorriza nativa con fertilización completa. La mayor colonización de raíces se presentó con la Micorriza nativa (36.7%) e introducida sin fertilización (32%). Al analizar el tejido vegetal de Borojó se presentaron diferencias significativas en el contenido de N, K, Zn y Mn y los mayores contenidos se obtuvieron con la Micorriza nativa y diferente al suelo natural. En cuanto a la fertilización se presentó efecto por la aplicación de Zn y el mayor valor se obtuvo con la Micorriza introducida sin fertilización y diferente con respecto a la Micorriza nativa sin fertilización y el suelo natural. Recomendaciones Para lograr restaurar los ecosistemas degradados es necesario introducir alternativas sostenibles como la agricultura biológica y orgánica que permitan estimular la actividad de los microorganismos benéficos del suelo y especialmente las micorrizas, las cuales desempeñan un papel fundamental al incrementar la disponibilidad de los nutrientes en suelos pobres y degradados. (I.A. Carmen Rosa Salamanca Solís - Corpoica - Noviembre de 1999). MANGO (Mangífera indica L.) Simbiosis Endomicorriza - Mango en el lodo de Armero en condiciones de vivero. (Amparo Maria Villaquiran de Paz. Tesis de grado. Universidad del Tolima 1987). Resultados y conclusiones La germinación fue favorecida por la Micorriza, presentando a los 17 días promedios de 37 brotes de 14 cm. de longitud por tratamiento (30 semillas) y el testigo 6 brotes de 6 cm. Después del trasplante las plantas micorrizadas, a los 30 días, sobrevivieron entre 80-97%, el testigo 37%; a los 290 días sobrevivieron entre 77-93% frente a un 23% del testigo que mostró esporulación dermal radical típica del género Glomus. La producción de materia seca fue superior con Glomus occultum, G. maníhothis y el testigo. Todos los tratamientos presentaron niveles semejantes de micorrizacion y altura de planta. El lodo presentó descensos en el contenido de Ca, Mg y K, posiblemente por lavado debido al riego frecuente. La adición de 20. T/ha de gallinaza es insuficiente para elevar el contenido de N a valores normales ya que la nitrificación y amonificación son casi nulos, afectando también la absorción del P. Análisis foliar de plantas en suelo normal usadas como referencia, presenta relaciones NIS) y P/S normales; mientras que en las desarrolladas en el lodo son bastante reducidas, además el N y el Ca son bajos y S, Fe y Mn excesivos, como respuesta al desequilibrio en el sustrato. Se comprobó que la infectividad de las cepas micorrizales necesariamente no está relacionada con su eficiencia y que no siempre existe relación entre el grado de infección y los parámetros de desarrollo que se estudian. Conocidos los beneficios de la M.V.A. y careciendo de referencias de plántulas en lodo sin ella, debido a la mortalidad, se deduce que el mango micorrizado es apto para soportar las condiciones críticas del lodo de Armero y que la inoculación previa al trasplante con cepas efectivas garantiza su crecimiento y establecimiento inicial. Papaya (Carica papaya) Guzmán (1983) al macerar raíces de plantas adultas de papaya (Carica papaya) e inocularlas sobre plántulas de la misma especie en suelo esterilizado y sin esterilizar, encontró que no había diferencia significativa a favor de suelo esterilizado para las variables diámetro de tallo, altura de plántulas y peso de materia verde. Al añadir fósforo en suelo esterilizado se presentan los mayores contenidos en Nitrógeno, Fósforo, Potasio, Azufre, Magnesio y Zinc. Janos (1981) citado por Dommeques y Diemm (1982) encontró que plántulas de Carica papaya murieron después de una etapa de sequía, mientras que las plantas inoculadas con M.V.A. sobrevivieron. Ferrato - Cerrato (1988) en trabajos realizados en México concluye que los componentes más afectados por la inoculación con micorrizas son: área foliar, número de hojas y peso seco total, además el porcentaje de incremento en altura calculado sobre el testigo fue de 360% para la variedad Cera y de 329% para variedad solo. Todo lo anterior se corrobó utilizando el inóculo comercial "Micorrizar" (Mezcla de Glomus, Acualospora, Gigaspora, Entrosphospora) en ensayos realizados en viveros. Gallego, A.(19992000) Tesis de Grado Ing. Agr. Sevilla Valle Pitaya Estudio de la interacción entre Glomus manihothis y Meloidogyne incógnita Chitwood en PITAYA AMARILLA (Selenícereus megalanthus Britt y Rose) y pitaya roja (Hylocereus sp. Britty Rose) bajo condiciones de vivero (Jorge Hernán Palacino - Universidad de Caldas tesis de grado Ing. Agr. 1.990). Conclusiones Los materiales de pitaya amarilla y pitaya roja se comportaron como especies micotróficas, beneficiándose de la infección ocasionada por el hongo formador de Micorriza Glomus manihothis. El hongo formador de Micorriza Glomus maníhothis, disminuyó la reproducción calculada en número de huevos por gramo de raíz de M. incógnita Chitwood en pitaya amarilla y roja, bajo condiciones de vivero. Se determinó la presencia de estructuras micorricicas colonizando tejido radical en pitaya, luego de llevar a cabo técnicas de laboratorio lavado y tinción de raíces (SIEVERDING, E. 1983 CIAT). La infección de la Micorriza se afectó por la inoculación simultánea del nemátodo, pero no por su inoculación 4 semanas más tarde. La aplicación preventiva de la Micorriza tiene un mejor efecto sobre el control de la reproducción de M. incógnita Chitwood que la aplicación curativa, para pitaya amarilla y roja en condiciones de vivero. El ataque de M. incógnita Chitwood afecto la altura y el peso fresco y seco de la parte aérea en pitaya amarilla, reportándose valores promedios más bajos que el testigo no inoculado; no así en pitaya roja, donde la tolerancia se vio manifestada por incrementos en el peso seco de la parte aérea y ninguna en la altura, comparado con el testigo no inoculado. En pitaya roja, no se presentó resistencia al ataque de M. incógnita Chitwood al efectuar inoculaciones de huevos del nemátodo en vivero. El comportamiento de la pitaya roja, pese a ser susceptible a M. incógnita Chitwood, fue satisfactorio en peso y crecimiento. La interacción Glomus maníhothis - Meloidogyne incógnita Chitwood en pitaya, parece estar gobernada por mecanismos de competencia por el sitio de penetración de estos microorganismos en la raíz. Hortalizas Introducción En Colombia las hortalizas tienen una gran demanda, tanto para consumo directo como para transformación industrial. En el país se siembran más de cuarenta especies de hortalizas en todos los pisos térmicos (Caicedo, 1993). De acuerdo con registros del Ministerio de Agricultura, en 1990 se produjeron 1.663.300 toneladas de ellas, sembradas en 166.700 hectáreas (ICA, 1981, 1991). Es de reconocer que su cultivo se realiza en su mayor parte en fincas pequeñas, por lo cual desempeña un papel muy importante en la economía campesina. El cultivo de las hortalizas tiene como característica común un alto uso de insumos químicos (fertilizantes, insecticidas, fungicidas, etc.), lo cual, además de elevar los costos de producción, incide negativamente en el manejo del ambiente en general, y en salud humana en particular. Un gran número de cultivos hortícolas forman asociaciones con hongos micorrizógenos. Los trabajos de investigación sobre Micorriza Arbuscular que se han realizado sobre el tema han pretendido varios objetivos, de acuerdo con la situación que se ha considerado importante abordar; sin embargo, todos están dirigidos a profundizar el conocimiento de este recurso microbiológico (Kugler, M., 1986). Los trabajos adelantados en la Universidad Nacional - sede Palmira en cebolla cabezona, pimentón, tomate y lechuga han seguido estos lineamientos, con la pretensión de buscar alternativas que consideren y propicien el manejo de los HMA (M.V.A.) de una manera eficiente. (Tomado de: Sánchez M. De P. Endomicorrizas Agroecosistemas Colombianos). Antecedentes La cebolla Allium cepa es una especie intensamente investigada en relación con MA. A partir de ella se han logrado establecer bases conceptuales y prácticas que han generado avances en torno al conocimiento de esta simbiosis; por ejemplo: la comprensión de la absorción del P vía MA, del S, del N; la influencia de factores que afectan el desarrollo, reproducción y establecimiento de la simbiosis; la incidencia de sustratos y componentes del inóculo; el comportamiento diferencial de las especies de hongos micorrizógenos. Igualmente en cebolla se han adelantado estudios citoquímicos que permitieron entender los mecanismos de translocación de los nutrimentos y las modificaciones que se presentan en los asociados cuando ocurre la simbiosis (Hatting, Gray Gerdemann, 1973; Hayman, 1974; Cox v Sanders, 1974; Powell, 1975; Furlan y Fortin, 1977; Sanders et al, 1977; MacDonald y Lewis, 1978; Rhodes y Gerdemann, 1978; Gianazzi y Gíanazzi-Pearson, 1979; Ocampo Martín y Hayman, 1980; Khan, 1981; Manjunath y Bagyraj, 1981; Carling y Brown, 1982; Hepper, Sen y Maskall, 1986; Smith et al, 1985, 1986, Rejón, García y Ocampo, 1996; y Toro et al, 1996). Algunos de los avances logrados en investigaciones con esta planta se presentan en la primera parte de este escrito. Con relación al pimentón Capsicum annuum, diversos estudios demuestran que en suelos con bajos niveles de P la inoculación con cepas efectivas de HMA (M.V.A.) mejora su crecimiento, floración, absorción de P, Zn, Mn, y Cu; reduce el tiempo de antesis e incrementa la producción de materia seca total, el rendimiento y el nivel de ácido ascórbico (Bagyaraj y Sreeramulu, 1982; Yocom, 1985; Sreeramulu y Bagyaraj, 1985; Young y Jarrel, 1985; Waterer y Coltman, 1988, 1989) Con respecto a la efectividad de cepas de HMA se ha establecido que la respuesta está influenciada por factores fisicoquímicos del suelo. En suelos arcillosos se ha obtenido mejor respuesta a la inoculación del pimentón con Glomus fasciculatum, mientras que en suelos francolimosos rojos la mayor eficiencia se obtuvo con G. albidum, entre otras. Se ha sugerido igualmente que la aplicación de fertilizantes fosforados puede disminuirse mediante la inoculación con una cepa eficiente de HMA (M.V.A.), reduciendo los costos sin detrimento del rendimiento. Con relación a los agroquímicos, se encontró que el uso indiscriminado de ellos disminuye los porcentajes de infección y el efecto positivo de la simbiosis; igualmente se han determinado su importancia en condiciones de salinidad y la influencia de la materia orgánica sobre la eficiencia de la asociación (Hirrel y Gerdemann, 1980; Diederichs, 1982; Young y Jarrel, 1985; Yocom, 1985; Sreeramulu y Bagyaraj, 1985; Waterer y Coltman, 1988, 1989; Brechel, 1989; Afek et al, 1990; Davies y Linderman, 1991; Screenivasa, 1992). Con respecto al tomate Lycopersicum esculentum Miller, la investigación ha girado en dos sentidos: Se ha mostrado, al igual que en cebolla y pimentón, la influencia de la Micorriza en la absorción de nutrimentos, en especial P, y por otro lado se ha demostrado que las plantas micorrizadas son capaces de resistir la presencia de patógenos como Fusarium oxysporum f.s.p. lycopersic Pseudomonas solanacearum y Meloidogyne incógnita, microorganismos que causan algunas de las más severas enfermedades que se registran en tomate. Los resultados aunados sugieren que el establecimiento efectivo de la simbiosis puede traducirse en plantas más sanas y mejor nutridas, con uso más eficiente, racional y económico de insumos (Uexkull, 1978; Dehne y Schonbeck, 1979; Schonbeck y Spengler, 1979; Halos y Zorrilla, 1979; Pond, Menge y Jarrel, 1984; Sanni, 1983; Caron, Fortín y Richard, 1985; García y Ocampo, 1988; Sánchez de P., 1995). En ensayos realizados por AGROTECNIA LTDA y ABIOS en ají en el Departamento del Huila se obtuvieron los mejores resultados en los lotes donde se realizó la mezcla Materia Orgánica + Micorrizar empleando dosis que fueron desde 30 hasta 70 grs. por sitio de M.V.A. Las producciones se aumentaron hasta en un 40% más (50 grs.) en relación con lotes donde se aplicaron únicamente 150 grs. de Materia Orgánica por sitio. No se presentaron problemas de hongos limitantes del suelo ni de nemátodos. Forestales nativos Por sus interacciones directas con plantas superiores, en este caso las arbóreas, son estos hongos de un singular interés. Sus actividades y funciones se asemejan a las de otros hongos del suelo y se pueden asumir como indicadores de su significado, puesto que enfatizan el balance sutil y delicado que se presenta entre el suelo y las plantas, lo cual determina su considerable importancia en la producción de todo tipo de especies vegetales. Como casi todas las plantas, en las especies forestales funcionan de forma similar, incrementando la concentración de sustancias nutrientes solubles en las extremas proximidades de sus sistemas radiculares. El caso del Nitrógeno, por ejemplo, que el hongo transforma en aprovechable partiendo de Materia Orgánica bruta, las convierte en indispensable para el normal crecimiento y completo desarrollo de los árboles. En algunos árboles se ha observado que las Micorrizas son más prolíficas y funcionales en suelos pobres y con bajos contenidos de Nitrógeno, Fósforo, Potasio, y Calcio, pareciendo en algunos casos que no toma parte el Nitrógeno y que las Micorrizas solamente potencian la absorción de Potasio y Fósforo. Estas son muy sensibles a la luz solar y a la resequedad, por lo que los árboles cultivados deben ser transplantados con una porción de tierra que cubra sus sistemas radiculares, o envolverlas en algún tipo apropiado de material para el caso de plantación a raíz desnuda. Por otra parte, la investigación de la influencia Micorrizas sobre especies forestales ha obedecido a la necesidad a mediano y largo plazo de encontrar mejores y más amplias alternativas, seguras y además económicas, para la producción de material vegetal confiable; todo lo cual justifica el fundamental interés en su investigación básica y aplicada. Existe información al respecto sobre algunas especies nativas, coníferas y eucaliptos, en las que se han seguido entre otros factores: Porcentajes de germinación, Altura, Diámetro, Producción de Materia Verde Total y de Raíces, Producción de Materia Seca Total y Porcentajes de Infestación Micorrizal. Entre las especies nativas ensayadas se encuentran el Guayacán rosado (Tabebuía rosea, familia bignoniaceae), el Gualanday (Jacarana caucana, familia bignoniaceae), el aliso (Alnus jorullensis, familia betulaceae), Jagua (Genipa americana, familia rubiaceae), Urapan (Fraxinus chinnensis, familia oleaceae), Sauce (Salís humboldtiana, familia salicaceae), Nogal (Cordía alliodora, familiaborraginaceae) y Cedro rosado (Cedrela odorata, familia meliaceae), entre otras. Las respuestas arrojadas han sido diversas según la especie tratada, registrándose, sin embargo, y para todo caso, un notable mejor desarrollo y crecimiento en ellas que en las no inoculadas (Testigos). Se ha observado la resistencia a plagas y enfermedades, resistencia a las sequías y altas temperaturas, así como notable disminución del estrés al efectuar su transplante a sitios definitivos. La aplicación de la Micorriza Vesículo Arbuscular (M.V.A.) en condiciones de vivero ha demostrado reducción en costos y en tiempo de permanencia en ellos, en cuanto a la producción elevada de material vegetativo; al incrementar considerablemente su ciclo vegetativo. En algunos países europeos se ha constatado el efecto protector de las Micorrizas contra los nocivos efectos de las llamadas lluvias ácidas, sobre especies forestales. La M.V.A. es de gran relevancia en los suelos en lo concerniente a su fertilidad y productividad, especialmente en las zonas tropicales, como la nuestra y aunque su manejo es relativamente económico, como práctica complementaria que no suprime ninguna técnica silvicultural, es decir debe integrarse en un manejo completo Los bajos resultados que se puedan encontrar al respecto pueden igualmente ser atribuibles a circunstancias como: Deficiente infraestructura técnica de investigación, así como escasez de personal capacitado y poca difusión y sistematización de las experiencias realizadas y de la información ya existente. Por lo anterior es necesario considerar que las técnicas de uso actual posiblemente no sean las mejores, sin que por ello el uso de la M.V.A. deje de ser una biotecnología tanto factible como accesible. Recomendaciones para su uso Uno de los factores para el aprovechamiento de los nutrientes existente en el suelo es una buena aplicación de MICORRIZAS debido a que mezclas desbalanceadas con fertilizantes conllevan a resultados no esperados. Dosificación y método de aplicación En especies forestales se recomienda la aplicación de 200 grs. / bolsa con el fin de que ocurra rápidamente la simbiosis; la cual tiene cuatro (4) etapas que son: Infección Distribución Efectividad para la planta Reproducción del hongo Este proceso de estabilización de una relación simbiótica Micorriza Vesículo Arbuscular puede durar entre 10 días hasta varias semanas (34). Se realiza mezcla con el suelo a utilizar. Al momento del transplante se recomienda la aplicación de 400 - 500 grs. /planta; debido a que se realiza 1 o máximo 2 en todo su periodo vegetativo. Árboles Jóvenes : (1-2 años) 1 Kg. / planta Árboles Adultos : (3-4 años) 3-4 kg. / Planta En cultivos establecidos se hacen de 5 - 6 huecos en la gotera del árbol y teniendo la precaución de que el Bioinsumo quede en contacto con la raíz para que haya efectividad en la aplicación. La M.V.A. es compatible con cualquier Materia Orgánica (bien descompuesta) que se desea aplicar. Palmeras Se considera que las palmeras están entre las plantas que más dependen de las cualidades que tiene la simbiosis M.V.A. para mejorar su nutrición (St John, en prensa). Janos (1977) demostró experimentalmente que el crecimiento de la palma Bactrís gasipaes puede ser incrementado sustancialmente cuando se la inocula con un hongo micorrizógeno. Cuando las palmas se crían en un vivero antes de sembrarlas, existe la posibilidad de que falten los hongos simbiontes. Las palmeras aquí producidas están sujetas a padecer decrecimiento lento durante su etapa de plántula, por lo tanto se encuentra en considerable desventaja al ser transplantada a campo. En ensayos realizados con el género Glomus se obtuvieron los siguientes resultados: El número de hojas tendía a ser mayor en plantas micorrizadas en el día 161, pero no en forma significativa. Al llegar el día 353, la diferencia era significativa la hoja más larga era significativamente más larga en las plantas micorrizadas tanto en el día 16 como en el 353. Las porciones aéreas y subterráneas de las cuatro plantas micorrizadas pesaron significativamente más que sus equivalentes en las plantas no micorrizadas. La longitud total de las raíces también fue significativamente mayor en las micorrizadas; la relación raíz/tallo novario en forma significativa. Se examinó el diez por ciento de las raíces en busca de M.V.A. en base al peso fresco. Tres de las cuatro plantas inoculadas resultaron micorrizadas (dos de ellas con un 16% de su longitud radicular colonizado. Y una con el 10%). La cuarta no mostró colonización en la muestra de raíces que se examinó pero las hifas y esporas presentes en la preparación indicaban que otra porción no representada en submuestra se encontraba micorrizada. Ninguna de las cuatro plantas testigo exhibió indicación alguna de M.V.A. Discusión A pesar de la pequeña cantidad de semilla que había disponible cuando se estableció el experimento, la patente respuesta de Jessenía batana a la micorrización fue estadísticamente significativa. Este tipo de respuesta es especialmente notable en las especies que son intrínsecamente de crecimiento lento. Estas especies de plantas de lento desarrollo son usualmente nativas de suelos de baja fertilidad, y por lo tanto ejercen poca demanda sobre los elementos del suelo (Chapín 1.980). Las diferencias entre la cantidad de hojas y las de longitud de la hoja más larga se volvieron más amplías durante el transcurso del experimento; estas diferencias se evidenciaron a una edad algo más temprana que en las plantas de Bactris gasipaes que Jano (1977) investigó. Aunque B. gasipaes es normalmente de crecimiento más rápido que J. batana sin embargo la mortalidad de las plántulas no inoculadas en la prueba de B gasipaes fue muy alta; lo cual complica la comparación directa de los resultados. Al acabar la prueba y ser "cosechadas" las plántulas casi un año después de la inoculación, el peso seco total de las plantas micorrizadas era de casi el doble del peso de las testigos. Esta importante ventaja de las plantas micorrizadas indica que las plántulas de palma en viveros, que a menudo quedan sin Micorrizas hasta que se las trasplante en el campo, necesitarían pasar menos tiempo en el vivero, estarían más grandes al trasplante, o ambas cosas, si se les hace la inoculación apropiada a edad muy temprana. Se están llevando a cabo más experimentos para obtener información más completa sobre influencia de las micorrizas sobre el crecimiento de estas palmeras. Pastos y forrajes El manejo de las asociaciones con las micorrizas para una extensión más eficiente del P por las especies forrajeras tropicales pueden hacerse principalmente por dos métodos: El primero aprovechando que una gran mayoría de ellos son micotróficos obligados y que las micorrizas se encuentran en todos los suelos tropicales por lo cual podrían utilizarse micorrizas nativas, el segundo método consistiría en inocular en el campo Micorrizas seleccionadas altamente efectivas y adaptadas a la planta. Efecto de la M.V.A. en especies forrajeras tropicales Dado que la investigación del efecto de la M.V.A. en especies forrajeras tropicales se ha orientado principalmente a las leguminosas, en menor proporción a las gramíneas, y entre estas últimas más a las de pastoreo que a las de corte; se hace necesario remitirnos a esta información para interpretar los resultados. En los estudios que se han venido realizando acerca de la influencia de la M.V.A. sobre la producción de materia seca y la composición química en especies forrajeras, se ha venido resaltando la acción de una serie de factores tales como: la especificidad, el porcentaje de infección, época del año (lluviosa o seca), tipo de suelo, fertilización y fuentes, y la dependencia. GENE, W. 1980, plantea la necesidad de seleccionar endomicorrizas que sean específicas a diferentes hospedantes, suelos y fuentes de fósforo, para optimizar las respuestas de crecimiento sostenido y hacer posible la utilización de nichos particulares. Sola la inoculación no garantiza una simbiosis efectiva. ALMEIDA, et al, 1.985, estudiaron la frecuencia e intensidad de infección de M.V.A. en gramíneas y leguminosas herbáceas y arbustivas en dos suelos del estado de Ceara. Dentro de las 43 gramíneas relacionadas, además de otras que exhibieron elevada infección en solo uno de los suelos, se destacaron con los mayores porcentajes de infección micorrícica las gramíneas Brachiaria ruziziensis, B. brizantha y Digitaria decumbens. HOWLER y otros, 1987, evaluando varias especies de hongos de M.V.A. en Andropongon gayanus, Brachiaria spp., Panícum maximum, entre otras gramíneas y leguminosas, en un oxisol deficiente, encontraron que las especies Glomus manihothis y Entrophospora colombiana eran las más efectivas para una gama de cultivos y pastos y a una amplia variedad de niveles de N. P. y K. A niveles bajos de P casi todas las especies de cultivos y pastos dependieron mucho de las micorrizas. Pero a niveles superiores de P en el suelo, varias leguminosas forrajeras dependieron más que las especies de gramíneas. MIRANDA, J, 1981, en un trabajo realizado con Brachiaria decumbens, encontró que el porcentaje de infección y el número de esporas de los géneros Gigaspora y Glomus se ven afectados por la estación, siendo mayores en la estación lluviosa; en Cerrado (Brasil). Iguales resultados encontró Saif, 1986, en los Llanos Orientales de Colombia en varias especies forrajeras. El mismo autor encontró que niveles altos en la aplicación de P tendieron a reducir la infección por Micorriza en tanto que niveles bajos la estimularon. En el informe anual del CIAT, 1984 se reportan trabajos sobre dependencia de Micorriza en 24 especies forrajeras tropicales, observando gran variación; pero Brachiaria decumbens y B. brizantha fueron las más dependientes (1.400%). La menos dependiente fue el Panicum maximun (150%). Los resultados indican que las gramíneas tropicales son iguales o hasta más dependientes de las Micorrizas que las leguminosas cuando crecen en suelos de baja fertilidad. Efecto de la M.V.A. sobre la producción de materia seca y la composición química de especies forrajeras tropicales. La producción de materia seca y la composición química han sido los parámetros más evaluados. En cuanto a la composición química, se enfatiza en la absorción de minerales, principalmente de P. Acerca de la materia seca, se puede ver que se le referencia como producción de la misma o como crecimiento. En una investigación desarrollada en un suelo oxisol de Carimagua, en pruebas de invernadero y campo para determinar si la inoculación con Micorriza en suelos no esterilizados estimularía el crecimiento y absorción de minerales, se observaron diferencias acentuadas entre especies y ecotipos de la misma especie Stylosanthes, Centrosema, Zornia y Brachiaria en cuanto a la capacidad para establecer buenas asociaciones con micorrizas y buena nodulación con cepas nativas. En otro estudio realizado en invernadero por Saif, 1984, con los siguientes tratamientos: SM (sin inoculación de Micorriza ni fertilización con fósforo) M (inoculación con Micorriza), PS (P soluble), RF (roca fosfórica del Huila); RF + M. La inoculación de Micorriza aumentó considerablemente el porcentaje de cobertura, la producción de materia fresca, materia seca y la absorción de minerales en las leguminosas tratadas. El mismo autor reporta, en otro ensayo de invernadero se sembraron Centrosema macrocarpum, Pueraria phaseoloides y Brachiaria decumbens, en un oxisol sin esterilizar, con dosis de 0, 10, 20, y 40 Kg de P por hectárea como roca fosfórica y calfos. La inoculación con Micorriza se efectuó utilizando una mezcla de tres hongos: Entrophospora sp. , Glomus sp. , Acaulospora sp. La inoculación de Micorriza aumentó significativamente el crecimiento y la absorción de fósforo de todas las plantas y a todas las tasas de fertilización. Ambas fuentes de P aumentaron el crecimiento y la disponibilidad de P de las plantas inoculadas en proporción similar. MIRANDA, (1981) en un experimento de invernadero con Brachiaria decumbens cultivada en un ultisol aumentó la producción de materia seca y la absorción de P en la planta cosechada después de 60 días, fue tres (3) veces mayor en el suelo sin tratar que contenía micorrizas que en suelo esterilizado. CALDEIRA y otros, 1983, inoculando con diferentes hongos, evaluaron en condiciones de invernadero en relación con el peso húmedo y seco de la parte aérea, peso seco del sistema radical y contenidos de P, K, Ca, Mg de las plantas hospedantes, por lo menos un tratamiento una diferencia significativa en el aumento del peso húmedo y seco de la parte aérea Glomus fasciculatum aumentó en 80% el peso húmedo y en 65% el peso seco del Melinis minutiflora. G. fasciculatum también aumentó en 100% la absorción de P y K y en 80% la absorción de Mg., pero no aumentó la de Ca., en la gramínea. SALINAS, Sans y Sieverding, 1985, adicionaron inóculo del hongo micorrizógeno V.A. Glomus manihothis a un oxisol que contenía únicamente un potencial moderado de inóculo de los hongos M.V.A. nativos. En experimento con maceta se investigó su efecto en el crecimiento y en la absorción de P de dos especies forrajeras (Andropogon gayanus y Pueraria phaseoloides) utilizando un rango de aplicaciones de P (0, 9, 18, 35, 70 y 140 Kg /ha). La cosecha tuvo lugar a los 70, 100, 130 y 160 días de la siembra. En la primera cosecha, la primera respuesta notoria a la aplicación de P en los tratamientos no inoculados fue con las aplicaciones de 35 y 70 Kg de P por ha. La adición del inóculo ocasionó una respuesta en el crecimiento, incluso con la aplicación mínima de P, con ambas especies forrajeras. Con las cosechas sucesivas desapareció rápidamente la respuesta a la aplicación de P y a la inoculación. Sin embargo, la inoculación causó un desarrollo precoz y extenso de la Micorriza, en una absorción más larga y continuada de P por las plantas y en una utilización dos a cuatro veces mayor del P añadido por parte de ambas especies forrajeras. En el caso en el que no se añadió inóculo, se encontró un efecto negativo de aplicaciones medias y altas de P en la gramínea, más no en la leguminosa. En ambas especies, la frecuencia de las micorrizas aumentó con el tiempo. La leve respuesta del crecimiento de ambas plantas, a las menores aplicaciones de P (9 Kg /ha) cuando no se aplicó el inóculo, podría relacionarse con el alto nivel de esporulación de los hongos micorrizógenos nativos. NEWMAN, 1985, observó que el crecimiento de los pastos se incrementa mediante la infección con micorrizas únicamente en suelos con deficiencia extrema de P. En un estudio publicado por Saif, 1987, con 24 leguminosas y gramíneas forrajeras y tropicales, en condiciones de invernadero en un oxisol estéril de bajo contenido de P las plantas no micorrizógenas siempre contenían cantidad de elementos minerales en menor proporción que las plantas micorrizógenas. La absorción total de todos los elementos por leguminosas no micorrizógenas y la absorción de P, N y K por gramíneas no micorrizógenas tuvo una correlación inversa con la dependencia de micorrizas. Plantas inoculadas usaron cantidades de P del suelo significativamente mayores. La utilización de P del suelo por plantas no micorrizógenas se correlacionó inversamente con la dependencia de micorrizas. Musaceas Plátano – Banano Los cultivos de plátano y banano precisan para su buen desarrollo y producción entre otros factores importantes de una nutrición balanceada que le sea suministrada por el suelo y mediante aplicaciones complementarias a sus requerimientos que responden a través de un manejo racional de la fertilidad en la plantación se lograra mejorar y conservar la productividad. Para la producción de 30 Ton/Ha los cultivos de plátano y banano extraen del suelo las siguientes cantidades de nutrientes expresadas en Kg. / Ha. N 50 – 75 p 15 - 20 K 175 - 225 Ca 10 - 20 Mg 25 – 30 Los factores a considerar cuando se aplican insumos son: Tipo de nutrientes y/o insumos Cantidad de insumos Época y método de aplicación Relación costo - beneficio. En ensayos realizados en Sevilla Valle utilizando "Micorrizar" Fosforita Huila Triple 15 y Materia orgánica bajo los siguientes tratamientos por sitio: Tabla 10: Ensayos realizados en Sevilla valle utilizando "micorrizar". Se obtuvieron los siguientes resultados: Mayor producción promedio en los tratamientos donde se aplicó "Micorrizar" + Fosforita Huila + Materia Orgánica presentándose diferencias significativas con lotes donde se aplicó Materia Orgánica y el lote testigo. Mejor desarrollo radicular donde se aplicó Micorrizar. Mayor peso, mayor número de manos y mayor número de dedos se obtuvieron en lotes inoculados con Micorrizar en mezcla con Roca Fosfórica y Materia Orgánica seguido por el tratamiento donde se aplicó 15 - 15 - 15. La desinfección se realizó con Beauvería bassiana y no se presentaron ataques de picudo ni nemátodos. El desarrollo foliar y el crecimiento fue bueno en la mayoría de tratamientos exceptuando 5 y 6. Tubérculos Cultivos de alto interés económico ya que de ellos dependen gran número de familias del trópico. Ocupan los primeros lugares en cuanto a consumo de insumos. Los fertilizantes representan entre 30 y 40 % de los costos de producción, siendo en la gran mayoría de los casos los fertilizantes con grado alto de Fósforo los que se utilizan. La aplicación de M.V.A. reduce notablemente, los costos de producción debido a la menor aplicación de fertilizantes químicos y ayuda al control preventivo de enfermedades radicales. Se aumenta el área foliar lo que ayuda a que se presente mayor fotosíntesis. Los suelos donde se cultivan tubérculos son de pH bajo por lo que la mayor parte del Fósforo se fija formando compuestos insolubles y por lo tanto se pierden grandes cantidades de los fertilizantes aplicados; sumándose a esto el hecho de que estos cultivos consumen pequeñas cantidades de este elemento lo que aumenta paulatinamente la ineficiencia de la fertilización fosfórica. Estos cultivos son altamente dependientes de una asociación efectiva con micorrizas ya que ayudan a la planta a la absorción de P y otros elementos básicos para su desarrollo y producción. La población nativa de micorrizas no es suficientemente alta o efectiva para producir una asociación eficiente. En Colombia se consumen al año más de 400.000 toneladas de fertilizantes con alto grado de Fósforo (10-30-10; 13-26-6 y 15-15 - 15). En las zonas donde se siembran tubérculos el Fósforo es el principal elemento limitante por consiguiente estos cultivos no producen buenos rendimientos si las aplicaciones de estos elementos no son altas. Las aplicaciones de Fósforo son las más altas ya que de las dosis aplicadas de este elemento solo se logra aprovechar un 10% debido a la alta capacidad de fijación de fosfatos que tienen los suelos donde se establecen estos cultivos. Entre los elementos mayores, el Fósforo es el que menos extrae la planta para obtener buenas producciones. Se conoce ampliamente la capacidad de estos cultivos para crecer en suelos muy ácidos pero frecuentemente la planta no responde a la fertilización. Las micorrizas desempeñan un papel importante en la traslocación de los iones fosfatos hacia la planta, de modo que en los suelos pobres en Fósforo asimilable, como ocurre en los suelos de zonas de tubérculos las micorrizas pueden representar una contribución fundamental en la nutrición de las plantas (Azcón y Barea 1.980). Además de los fosfatos la asociación micorrizal permite a la planta una mejor absorción de otros nutrientes poco móviles como el Zinc y otros elementos menores (Mosse 1.973) Debido a la importancia que se deriva de las afirmaciones anteriores, a la necesidad imperante de ahorrar insumos aumentando la productividad en los cultivos y a que la mayoría de las plantas forman este tipo de asociación, el interés por investigar los efectos de las practicas que conlleven a aumentar los rendimientos basándose en la posibilidad de utilizar esta alternativa, viene aumentando año tras año llegando a obtener muy buenos resultados en diferentes cultivos (Castillo. V, C. 1.986) Resultados en Yuca Burbano (1.984) considera que las plantas sin Micorriza toman mucho menos fosfato de los suelos deficientes en Fósforo soluble, que las plantas con Micorriza. Howeler (1.984) anota que la yuca (Maníhot esculenta), es una planta obligatoriamente micorrizada ya que no se desarrolla sin la asociación de M.V.A. Sin embargo hay conciencia también de que no todos los suelos cuentan con una buena población, suficiente como para mejorar la aprovechabilidad de los nutrientes; es por eso que se han realizado ensayos midiendo la posibilidad de cambiar esta situación mediante inoculaciones de cepas de micorrizas al suelo. (Agrotecnia Ltda. 1.999). Burchhart y Howeler (1.984) han encontrado en ensayos de este tipo que inoculando al suelo cepas de Glomus maníhothís y Entrophospora colombiana en el cultivo de la yuca, se han obtenido buenos resultados, llegando a poder disminuir la dosis a 100 Kg. / Ha de P, observándose buenas respuestas a la fertilización. Estudios realizados durante varios años en el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT) demostraron como la inoculación de la yuca tuvo los siguientes efectos: Aumento de siete veces la absorción de Fósforo (esencial para la división celular y para el desarrollo de los tejidos vegetales que constituyen los puntos vegetativos de las plantas, la deficiencia de este elemento retarda la maduración de la planta). Aumento del 50 % de la absorción total de Ca, Mg, K y Zn. Aumento del 50 % de materia seca. Efectividad de las especies de hongos M.V.A. en el cultivo de yuca tabla no 11 efectividad de las especies de hongos M.V.A. en el cultivo de yuca Resultados en Papa Bhattarai y Mishra (1.984) realizaron un estudio sobre la Micorriza Vesículo Arbuscular en tres variedades de papa en la India; las variedades utilizadas tenían diferentes grados de susceptibilidad al "Tizón Tardío" de la papa (Phytophtora infestans) Entre los resultados obtenidos por estos científicos en este estudio, se observa que la variedad altamente resistente y la resistente fueron infectadas más rápidamente por las micorrizas que la variedad susceptible, además de que a medida que avanza la edad de las plantas va aumentando la población de estos hongos y que los arbúsculos fueron observados antes que las vesículas en las raíces del hospedero. Por otra parte afirman en este trabajo que la humedad y el contenido de Materia Orgánica influyen positivamente en la infección micorrizal, mientras que el contenido de Nitrógeno total y el del Fósforo aprovechable son inversamente proporcionales a dicha infección. De esto dicen Azcón y Barea (1.980) que el porcentaje de infección y el número de esporas se reducen, por lo general, cuando se aplican fertilizantes nitrogenados y fosforados y que las diferencias en el grado de infección asociadas con la fertilidad del suelo están relacionadas con el ritmo de crecimiento de la raíz. Algunos autores opinan que las raíces vigorosas en crecimiento activo son difícilmente infectadas y concluyen que cualquier factor que cause un crecimiento lento, de la raíz o que reduzca la proporción de tejido radical en crecimiento activo, tiende a incrementar la infección micorrizal; esto puede justificar en parte la respuesta de las plantas micorrizadas a la adicción de formas poco solubles de Fósforo como la Roca Fosfórica. Otros autores citados por Bhattarai y Mishra (1.984) han reportado una supresión de la infección M.V.A. con la fertilización de P en papa, lo que podría dar pie a una disminución de la dosis de fertilizantes fosforados en este cultivo, combinando esto con inoculaciones de micorrizas. El rendimiento del desarrollo vegetativo y la calidad de la cosecha en cultivos de papa son mejores cuando se inocula con cepas de Micorrizas Vesículo Arbuscular Glomus manihothis y Entrophospora colombiana. Se mejora aprovechabilidad del Fósforo aplicado en la fertilización y se disminuyen las dosis a aplicar. La eficiencia de las fuentes de Fósforo poco solubles, como la Roca Fosfórica, aumenta cuando se inocula con M.V.A. Las aplicaciones de dosis bajas de Fósforo y con fuentes poco solubles de P como la Roca Fosfórica aumentan las poblaciones de M.V.A. Glomus manihotis resulto ser más efectiva que Entrophospora colombiana. (Tomado de evaluación de dos cepas de M.V.A. en el cultivo de papa. Castillo V. C. M., U de Caldas, Tesis Ing. Agr.1986). En ensayos realizados en los Departamentos de Antioquia, Cauca y Valle en cultivos de papa se disminuye en más del 50 % el ataque del hongo Spongospora subterránea (Sarna polvosa) al aplicar micorrizas V.A. al momento de las siembra. Los inóculos utilizados fueron: Glomus manihotis y Entrophospora colombiana (Agrotecnia Ltda. 2.000).