Subido por MICHEL VELDERRAIN VALENZUELA

Resumen actores educativos

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Alumno—
Michel Velderrain Valenzuela
ID—
172565
Asignación—
Los académicos en los noventa: ¿actores, sujetos,
espectadores o rehenes? (Resumen)
Fecha—
2 de septiembre de 2020
Materia—
Fundamentos de la educación
Profesor—
Dra. Lorena Serna
En el siguiente documento se encuentra un resumen del documento “Los académicos en los
noventa: ¿actores, sujetos, espectadores o rehenes?”, en donde se da respuesta a varios
cuestionamientos presentes en dicha lectura, acentuándose principalmente a destacar a los
actores educativos.
A manera de introducción se presentan los siguientes cuestionamientos, que son
importantes considerar, ya que, marcan la pauta de seguimiento del documento: ¿Qué ha
pasado con los académicos mexicanos en la década de los noventa? ¿Han sido actores de
los procesos académicos y políticos ocurridos en sus instituciones a lo largo de la década?
¿Han podido jugar el papel de sujetos activos en la transformación de los referentes
dominantes para reconocer su propia actividad o, más bien, han quedado sujetos –atorados–
en redes novedosas de relación generadas por otros, cuestión que los reduce, en ocasiones,
a meros espectadores del cambio en las universidades o, en el extremo, a rehenes de un
sistema ajeno y poderoso, avasallante?
Una mirada general al contexto
Han ocurrido decenas de cambios en casi todas las dimensiones de la vida social y
universitaria mexicana y es por ello que, un gran cambio de gran magnitud siempre implica
una tensión muy fuerte entre la estabilidad de antes y la incertidumbre que se presenta en el
presente y futuro, esto genera gran estrés y muchas veces ocurre esta resistencia al cambio,
más que nada porque los cambios no presentan frutos rápidamente como se esperaría.
Entonces, recaer la siguiente afirmación: el camino es largo y no está asegurado, ya
que, es un cambio a fondo de las maneras en las que se ha aprendido a vivir.
La magnitud del cambio
En los años ochenta las políticas económicas y sociales diseñadas para enfrentar la crisis
del proyecto general del país podían ser vistas como arreglos y en ello se incluía a la
educación superior, en el que se pensaba trabajar con la hipótesis de un cambio de época a
nivel mundial y un redefinición del modelo de desarrollo en el nivel nacional, en el que se
veían implicados las estructuras y relaciones sociales.
Es importante señalar que no se trata de una nueva época ya definida, es preciso verla más
bien como en proceso de construcción y no un modelo de desarrollo acabado, sino, en
proceso, considerando siempre que tenga rasgos distintivos.
El hecho de un cambio profundo en el contexto, influye significativamente en el
comportamiento del sistema de la educación superior en los últimos tres lustros.
Lo que está en juego
Principalmente se detecta ausencia en la capacidad reflexiva y orgánica de los académicos
(docentes) y otros actores de la vida universitaria, es por ello, que se intenta modificar el
comportamiento dependiente de antes y así, generar estructuras de relación basadas en la
cultura autónoma. En la actualidad, es necesaria la reconstitución de la identidad de las
instituciones y de los sujetos.
Existe una necesidad latente de fortalecer el uso de la crítica, la indagación fundada
y la capacidad de comprender los procesos en los que estamos sumergidos, y así.
Comprender la profundidad de los cambios que están en curso y generar distintas
modalidades de procesos de adaptación.
El cambio es inevitable, en embargo, el sentido del cambio, coordinación y rumbo
no están definidos necesariamente, de tal manera que, resulta necesario preguntarnos y
atender mediante la labor de la investigación, si los académicos han sido actores, sujetos, o
más bien espectadores o rehenes de transformaciones y comprender porque ha sido así.
¿De quién estamos hablando?
Antes de 1982 y hasta la fecha, han transitado un grupo de académicos que vivió y
construyó la fase de expansión de las instituciones, en donde hubo un incremento de plazas
laborales y menos personas interesadas en ocuparlas, con buenas condiciones salariales y
estabilidad laboral, visto esto, de la manera más positiva.
En un determinado momento entre 1982-83, las condiciones salariales e
institucionales cambiaron, estas se desplomaron para este conjunto de académicos. Al
llegar a los 90’s cambian los sistemas de diferenciación de ingreso a través de evaluaciones
periódicas y llegó el momento de cambiar, para no quedar fuera del nuevo escenario
económico y de distribución de estatus.
Este grupo de académicos ha pasado por tres distintas fases generales de trabajo en
su trayectoria laboral; primero, un contexto con abundancia salarial y estabilidad en los
bajos índices de regulación academia en su acceso; después, ocurre el desplome de las
condiciones salariales, con una regulación fuerte de la permanencia y, por último, la
necesidad de reconversión de sus actividades y perfiles.
Existe otro grupo de académicos, más actual, que tuvo que competir de manera
fuete para obtener sus puestos, ya que las plazas cada vez eran menos y había más demanda
de ellas. El ingreso y la permanencia en las instituciones aumentan las expectativas ya que
estas se vuelven más competitivas.
Los temas cruciales
Se ha visto un incremento notable en los procedimientos de evaluación institucional e
interinstitucional, ya sean internas o externas, así como, se generó modalidades de
crecimiento y diversificación institucional a nivel de sistema nacional.
Se generan nuevas consideraciones sobre aspectos antiguos, y es aquí donde se
hacen presente otros actores educativos que son importantes mencionar, los estudiantes, sus
familias y la corresponsabilidad de estos en materia económica con las instituciones
públicas.
También están los vínculos con otros actores de la vida social que implican
relaciones con empresas o entidades para las cuales la universidad es proveedora de
servicios.
Dos líneas generales de respuesta
Existen dos supuestos en cuanto a lo anteriormente mencionado, la primera, es pesimista,
en el que, existe un debilitamiento en la acción de los académicos, teniendo una reducción
de sus respuestas y viendo a estos mismos como espectadores simples de las
transformaciones institucionales.
Por otro lado, la opción ideal, en el que, los cambios se perciben como fuertes pero
necesarios y bien encaminados, se generan condiciones mejores para el trabajo académicos,
coordinadas, argumentadas por los mismos académicos.
La institución educativa también es percibida desde dos puntos de vista, la
universidad con preocupaciones y responsabilidad social y, por otro lado, la universidad
académica, la primera preocupada por la transición y la otra se orienta a resolver los
problemas del modelo anterior.
Una propuesta para avanzar
La investigación sobre los académicos aun no alcanza para llegar a comprender sus
procesos de incorporación, pero se cuenta con avances que conducen a proponer, en base a
lo ya construido, nuevas preguntas y partir de ellas.
Entonces, se presentan tres cuestiones relevantes:
1.- se necesita desarrollar una agenda de investigación en el campo de los académicos
mexicanos, con diversos enfoques y aproximaciones teóricas, hacen falta censos y
encuestas nacionales que permitan caracterizar mejor a los académicos y su dinámica.
2.- profundizar en la caracterización fundada de la naturaleza de los cambios que han
ocurrido en el sistema de la educación superior mexicana, reconocer el crecimiento de
espacios sociales donde se presentan las disputas de poder de los proyectos de nación,
nuevos canales de movilidad social y diversas de crítica social.
3.- constitución del académico, como un actor social e institucional especifico.
Se concluye entonces que, de acuerdo a la pregunta planteada en un inicio “¿Actores,
sujetos, espectadores o rehenes?”, los académicos han sido todos, en distintos momentos y
en relación con los distintos problemas, la cuestión es, reconstruir el cómo e intentar
comprender el porqué, es aquí, donde la investigación se hace presente para ayudar a dar
respuesta a ello.
Referencias:
Gil, M. (2000). Los académicos en los noventa: ¿actores, sujetos, espectadores o rehenes?
Revista Electrónica de Investigación Educativa, 2(1). Consultado el día de mes de
año en: http://redie.uabc.mx/vol2no1/contenido-gil.html
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