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Sinopsis de Altazor de Vicente Huidobro

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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE SANTO DOMINGO
Facultad de Humanidades
Escuela de Letras
Autores Hispanoamericanos
Prof. Altagracia Pou Suazo
Tema:
Análisis del poema Poema del otoño
Nombre:
Ángel Niwton Reyes Feliz
Matrícula:
1003118662
Fecha:
05 de noviembre del 2020
Biografía de Vicente Huidobro
Vicente García-Huidobro Fernández es el nombre del aclamado creador del
Creacionismo, una de las corrientes de las Vanguardias aparecidas la primera mitad del
siglo XX. Nació en una familia aristocrática Chile el 10 de enero del año 1893. Nacer en
una familia de tal envergadura permitió que su primera formación educativa la recibiera
de instituciones inglesas y francesas.
A los 17 años empezó a estudiar literatura en el Instituto Pedagógico de la
Universidad de Chile, estudios que no llegó a terminar. Su formación literaria la obtuvo
en las tertulias que dirigía su madre, la señora María Luisa Fernández Bascuñán.
La carrera literaria de Huidobro iniciaría un año más tarde con la publicación de
Ecos del alma, la misma continuó con la publicación de cuatro libros: Canciones en la
noche, La gruta del silencio, Las pagodas ocultas y Pasando y pasando. Los tres primeros
fueron publicados en 1913 y el último en 1914. Algunos críticos consideran que esta fue
una etapa de aprendizaje poético, la cual terminó con la publicación del libro Adán en el
año 1916. En esta primera etapa la poesía de Huidobro posee ciertos rasgos del
Modernismo.
En el año 1916 Huidobro parte hacia Europa con su familia. Este viaje le hace
entrar en contacto con las Vanguardias europeas, corrriente que tienen un gran impacto
en su visión acerca del mundo y, sobre todo, de la poesía. Con esto inicia una segunda
etapa en la evolución poética del autor, la cual comienza con la publicación del libro El
espejo de agua (1916). Este lapso que duraría hasta el año 1929, Huidobro publicó libros
como Horizón Carré (1917), Ecuatorial, Poermas artícos, Hallali y Torre Eiffel.con
El contacto que Huidobro tiene con las vanguardias poéticas de Europa lo lleva a
romper con los atisbos del modernismo y empezar un proceso de abstracción en el que
autor empieza a perfilar un estilo totalmente diferente al que había tenido en su primera
etapa. Y es que Huidobro no solo compartía con vanguardistas, sino que también escribió
para algunas revistas de estas corrientes.
Esta influencia se empieza a ver en sus poemas a través de una voz poética rebelde
que no se queda simplemente con lo que adquiere de estos contactos, sino que también
trasciende de una u otra manera hacia un estilo que rompe totalmente con los cánones de
la poesía de ese entonces.
La tercera etapa de la evolución poética de Huidobro concierne a la creación de
una corriente estética a la cual el mismo denomina Creacionismo, la cual rompe con los
paradigmas impuestos en la poesía hasta el momento. El poema cumbre de esta etapa es
Altazor (1931). Otro poemario que pertenece a etapa es Temblor del cielo (1931). Además
de este poemario publica el libro de ensayos Manifiestos en el año 1925.
Huidobro no solo se desarrolló en la literatura, sino que también incursionó en el
teatro, la moda y en el arte plástico. Además de esto, elaboró el guion de la película
Cagliostro en el 1923.
Este autor también se desenvuelve el ámbito político, carrera que toma auge en la
década del 1930. Durante esta época de su vida Huidobro se afilia al Partido Comunista
de Chile. Pero no solo se desenvuelve en su país natal en el ámbito político, sino que
también apoya las causas republicana española y anti-fascista.
Vicente Huidobro muere el 2 de enero de 1948.
Sinopsis del poema Altazor
El poema Altazor fue publicado en el año 1931. La composición de esta obra
catapultó a Huidobro a considerársele uno de los poetas más importantes de
Hispanoamérica y es el poema que le adhiere la labor de iniciar un movimiento de
vanguardias llamado Creacionismo.
En este poema el poeta rompe con ciertos esquemas referentes tanto a la forma
como al fondo de la poesía hispanoamericana. En él se puede apreciar una ruptura en la
métrica de los versos, rasgo que le ha llevado a considerársele un innovador de la poesía.
El poema está compuesto por un prefacio cuya esencia es totalmente poética y
siete cantos. En cada uno de los cantos se puede percibir a un Huidobro sentimental,
emotivo, preso de una conmoción a la que probablemente lo han llevado cada una de sus
experiencias en la vida.
El primer canto está dedicado a Altazor. Al principio del mismo se observa como
el yo poético se refiere a un interlocutor que está pasando por una crisis existencial que
lo lleva a abandonarse a una caída profunda. Pero luego, en una confesión tal vez
inesperada para el lector, el yo poético expresa que él mismo es Altazor. En este poema
Huidobro trata una las temáticas que se empezó a desarrollar en la literatura del siglo XX:
la otredad. Esto el poeta lo expresa explícitamente en el siguiente verso: <<Yo sol Altazor
el doble de mí mismo>>.
Algo que cabe destacar de este primer canto es que Huidobro no habla desde una
voz poética desligada de su esencia. El poeta simplemente utiliza el contenido del poema
para expresar algo que corroe sus pensamientos. Esto puede apreciarse cuando más
adelante el poeta hace la siguiente interrogante: <<Justicia ¿Qué has hecho de mí Vicente
Huidobro?>>. Al leer este verso se puede inferir que el poeta crea un otro –Altazor- que
no es más que la víctima de sus desvaríos.
En los versos del primer canto encontramos a un poeta hundido en el dolor, la
soledad, la angustia, la agonía, una agonía que le lleva a pensar constantemente en la
muerte al límite de decir: <<Desafiaré al vacío // sacudiré la nada con blasfemias y gritos
// hasta que caiga un rayo de castigo ansiado>>. En estos versos se puede apreciar una
imprecación que deja ver unas ansias por descansar del dolor mediante la muerte. Este
será el constante fondo de este primer canto.
El segundo canto es dedicado a una mujer. Este es menos extenso que el primero
y en el mismo se puede percibir a un yo poético romántico, un yo poético que ha dejado
de lado la melancolía del canto anterior para centrarse en la admiración de la amada. El
poeta en estos versos recurre constantemente a las metáforas en un afán por describir a la
dueña de su afecto a través de los elementos de la naturaleza.
Los elementos de la naturaleza no solo son usados para el poeta como referentes
de los rasgos de la mujer amada, sino que también la voz poética le expresa que la misma
naturaleza expresa lo que él siente por ella, como si este yo poético se alienara con la
naturaleza con el fin de verter todos sus sentimientos y emociones en ella.
Algo que también es notable en este segundo canto es cómo el yo poético recorre
cada rincón del cuerpo de la amada, pero no lo hace de forma lujuriosa, sino que se queda
extasiado ante el hecho de que cada una de las partes del cuerpo de su amor es
simplemente bello y perfecto. El poeta expresa un amor tierno, puro y sincero, a tal punto
que expresa <<Si tú murieras // las estrellas a pesar de su lámpara encendida // perderían
el camino>>.
El tercer canto tiene cierta particularidad y es que la primera lectura resulta algo
ambigua y el lector tal vez se queda buscando la significación del poema. Pero luego de
una segunda lectura se puede percibir a un yo poético que utiliza frases y enunciados para
expresar su perspectiva acerca de cómo el poeta utiliza las palabras, palabras cuyo
significado es muy cargado.
En estos versos percibimos a un Huidobro que quiere hacer morir a la poesía. Pero,
¿cómo hacer morir a la poesía mientras son versos que se utilizan para expresar estas
ansias? A lo que el poeta pueda referirse es a la muerte del estilo creado hasta el momento.
Recordemos que con Altazor el poeta incursiona en la creación de un nuevo movimiento
vanguardista y este tercer canto es la viva imagen de la ruptura de la forma de la poesía.
No tan solo en lo que concierne a la forma, sino también en referencia al vocabulario, la
sintaxis y otros elementos formales.
En un extenso juego de palabras el poeta deja ver que la poesía necesita tomar un
curso diferente al que había tomado hasta el momento, escapando de las formas impuestas
por los movimientos anteriores a las Vanguardias. Este es un canto a la muerte de las
tradiciones europeas en la poesía de Hispanoamérica y una invitación a los demás poetas
a dejar de lado las formas y el fondo de todo lo conocido hasta el momento.
El cuarto canto también conlleva una lectura profunda, no solo por el fondo del
mismo, sino también porque su forma es bastante abrupta en el sentido de que el poeta
cambia bruscamente de versos menores a versos mayores. Este cambio no solo se da en
cuanto a la forma; también puede percibirse en cuanto al fondo del mismo.
El poeta cambia de centrarse en la percepción de los sentidos frente al mundo a
un estado de letargo en donde otra vez se enuncian sentimientos de dolor, angustia y
agonía. Pareciera como si después de un leve resurgir en el segundo y tercer canto, el
poeta simplemente se dejara caer una vez más. Esto se aprecia notablemente en los
siguientes
versos:
<<Aquí
yace
Altazor
azor
fulminado
por
la
altura//
Aquí yace Vicente antipoeta y mago>>.
Si los primeros cuatro cantos resultan algo ambiguos, los tres cantos restantes son
la viva imagen percibirse una ruptura total con lo anterior. La misma lectura resulta tan
compleja que no solo necesitaremos de dos lecturas para intentar entender lo que se
esconde detrás de estos versos, sino que aun cuando se hayan agotado las lecturas de estos
versos nos encontraremos con el hecho de que simplemente es muy difícil de entender.
Sin embargo, hay algo que sí queda claro con la lectura de estos cantos: la creación
de una nueva corriente en donde se le da suma importancia tanto al fondo como a la
forma. A través de estos cantos Vicente Huidobro inicia una de las vertientes literarias
más complejas y controversiales de principios del siglo XX. Y, una vez, en estas
composiciones queda eclipsada la función del poeta, una función que va de la mano con
esa hermosa capacidad de verter los sentimientos y la visión del poeta en un envase tan
sutil como lo es la poesía.
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