PROBLEMA: LA INSEGURIDAD DESTRUYE RELACIONES. U n a p e r s o n a i n s e g u r a no tiene confianza en sí misma, ni en su valía, ni en sus capacidades, y carece de confianza en los demás. Puede pensar que los demás les defraudarán, y, asimismo, teme defraudar a los demás. La inseguridad puede promover estados de timidez, paranoia o aislamiento social. P a r a n o i a . - Enfermedad mental que se caracteriza por la aparición de ideas fijas, obsesivas y absurdas, basadas en hechos falsos o infundados, sin pérdida de la conciencia ni alucinaciones. La Biblia habla sobre esto en Proverbios 29:25 cuando dice, “Temer a los hombres resulta una trampa.” Cuando soy tan inseguro que lo único que importa es la opinión de los hombres y lo que piensen de mí, perjudico mi vida. ¿Cuál es el problema con el temor a la opinión de la gente? ¿Por qué el miedo provoca problemas en las relaciones? Aveces deseamos estar cerca, pero también tememos estar cerca. Queremos, pero no queremos. Deseamos tener intimidad o amistad con otros, pero estamos muertos del miedo de intimar con otros. Escribe lo siguiente por favor: La inseguridad detiene la intimidad. La inseguridad detiene la intimidad y detruye el plan de Dios para tu vida y los de los demás, Tú no te puedes acercar a alguien si tienes algún tipo de temor. Todo el mundo quiere intimar porqué sino te sientes solo en este universo, sin un amigo, sin un amante, sin nadie en quien confiar, sin nadie con quien puedas mostrar tus heridas. Y las heridas no sanan hasta que no se abren. Cuanto más las ocultas más peligrosas se convierten. Pueden volverse cancerígenas. Por un lado intimar es una necesidad esencial, así que todo el mundo la anhela. Tú debes tomar la iniciativa, debes aceparte a ti mismo en tu totalidad, si no eres capaz de aceptarte cómo puedes esperar que otro te acepte. Una de tus necesidades básicas es ser necesitado. Pero nadie lo quiere aceptar, el que “mi necesidad básica es que me necesiten, que me quieran, que me acepten. ¿A qué le tememos en las relaciones? Primero, tememos estar expuestos. Tenemos miedo de que alguien vaya a descubrir cómo somos en realidad. Tenemos miedo de descubrirnos como somos ante un extraño, aunque también nostros somos extrañamos para nosotros mismo, Eso nos asusta. Por ello nos escondemos, no nos relacionamos con los demas, porque no queremos que la gente sepa cómo somos en realidad, tenemos miedo a que nos pregunten o cuestionen sobre nuestra vida(pasada y actual). No queremos testificar lo que el evangelio ha hecho en nuestra vida, queremos testificar lo que Dios ha hecho en nuestras vidas y estamos quitando la bendición de oir esos milagros Cuando tenemos miedo, nos escondemos, nos cubrimos, usamos máscaras o fingimos . Como resultado, nadie te llega a conocer y tú fracasas en entender una de las cosas que Dios quiere que hagas en la Tierra: darte a conocer a otros. Todo el mundo merece conocer(testimonio o experiencias) a otros y que otros lo conozcan; esto tiene que ver con la intimidad de un alma a otra, y no me refiero solamente a los matrimonios. Dios diseñó la familia y la iglesia para hacer esto. ¡Tememos estar expuestos! Segundo, Pero hay un miedo más profundo aún, y es el miedo al rechazo. Este, posiblemente sea el miedo más grande en los seres humanos: El temor a ser rechazados. Todos hemos sido rechazados en algún momento y sabemos cuánto duele. Por eso, le tenemos miedo y nos cerramos y decimos: “Nunca dejaré que nadie me lastime otra vez”, y construimos murallas. No dejes que tu corazón se endurezca. No construyas murallas, no te pongas una coraza, no te metas en una burbuja. Esa es una prisión auto-impuesta en la que tú no quieres estar; y cuando no dejas que nadie se acerque debido a que no quieres que te vuelvan a lastimar, estás cometiendo una terrible equivocación. No estás viviendo. Solo estás existiendo. Es mi trabajo, como pastor, ayudarte, alentarte, y decirte que te arriesgues; que tengas el valor de arriesgarte a amar de nuevo, que tengas la valentía de hacerlo; porque si tú abres tu vida, destruyes las barreras y permites que alguno tenga la posibilidad de lastimarte, tú volverás a vivir de una manera que nunca has experimentado”. Pídele a Dios el valor para arriesgarte de nuevo, para abrirte, para ser vulnerable. Juan 15:15 ya llamare siervos No dejamos que nuestros sentimientos salgan a la luz. No dejamos que la gente sepa lo que realmente pensamos y sentimos. Quiero desafiarte a hacer algo muy valiente: a ser completamente honesto sobre lo que sientes. No tienes que hacerlo con todo el mundo, solo necesitas hacerlo con una persona. Consigue un grupo y comparte con ese grupo quién eres tú. Si eso es muy difícil, consigue una persona. Encuentra una persona con la que te sientas a gusto, a la que puedas alentar, a la que puedas ayudar a crecer, a la que puedas apoyar, con quien puedas compartir; alguno al que le puedas decir quién realmente eres tú. Cuando tienes una comunicación de dos vías, tú tienes un compañero espiritual. En la película White Squall (Tormenta Blanca), había un marinero oscuro secreto de su vida. Él no sabía leer., “¿Cuál es el problema? Te ayudaremos; trabajaremos juntos en esto”. ¡Eso es el amor y esas son las relaciones!. Tercero, Tememos al compromiso Pro 18:24 El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; ………. De toda relación personal o de amistad surge un compromiso ya sea pequeño o grande Es por ello que vivir juntos sin el compromiso del matrimonio, no funciona a largo plazo, porque uno nunca sabe cuándo se va a ir el otro, debido a que no hay un compromiso de por vida. Las relaciones solamente pueden subsistir si usted está dispuesto a decir: “Estoy dispuesto a comprometerme sin importar que nos llevemos mal o bien. Vamos a hacer que esto funcione”. Entonces el miedo se desvanece y la intimidad –la verdadera intimidad- florece. La inseguridad destruye las relaciones. ¿Qué las construye? Todos sabemos la respuesta a esto: el amor ANTIDOTO SOLUCIÓN: EL AMOR CONSTRUYE RELACIONES. La Biblia dice en 1 Juan 4:18, “el amor perfecto echa fuera el …..” (NVI). ¿Cómo funciona esto? ¿De qué manera el amor echa fuera el temor? Así es como lo hace: El amor hace que no te focalices en ti mismo, sino en los demás. Esa es la diferencia. [DESCRIBE TU PROPIA EXPERIENCIA PARA HABLAR EN PÚBLICO, ¿DE DÓNDE OBTIENES TU VALENTÍA? – La gente me pregunta, “¿Alguna vez te pones nervioso cuando vas a hablar ante tanta gente en Saddleback?” Y la respuesta es “por supuesto”. ¿Saben qué marca la diferencia? Que no me focalizo en mí mismo, sino en ustedes. Si me paro aquí a pensar qué es lo que piensan de mi corte de cabello, seguro tendría por qué preocuparme ¿verdad? El momento en que empiezo a pensar cuánto les amo y cuánto queremos nosotros amar al Señor juntos, todo el miedo sencillamente sale por la puerta de atrás. En cualquier relación, en cualquier circunstancia en la que te sientas nervioso en inseguro, focalízate en la otra persona. Esto tiene el poder de echar fuera de tu vida al miedo. ¿Cómo obtener el poder para enfocarnos en otras personas? Ustedes lo encuentran cuando se dan cuenta cuánto les ama Dios. Cuando se dan cuenta que Él les ama más de lo que ustedes se pueden imaginar. El momento en que ustedes se dan cuenta de cuánto les ama Dios, ustedes dicen, “No tengo que probarme nada a mí mismo. No tengo que pasar mi vida tratando de impresionar a otros, porque sé que Dios me ama. ¿Sabes cuán liberador es esto? ¿Sabes tú cuánto se disfruta viviendo de esa manera? De repente, mi identidad, mi valor, no depende de lo que tú pienses de mí ese día. Es posible que tú estés teniendo un mal día. Mi valor y mi estima dependen de mi relación con Cristo. Ya no estoy presionado por las expectativas de los demás. ¿De dónde se consigue esa clase de confianza? La Biblia nos dice en 1 Juan 4: 15-17 “Si alguien reconoce que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios. Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor”. Nosotros sabemos cuánto nos ama Dios y depositamos nuestra confianza en Él. Dios es amor. ¿Podrías leer la siguiente parte conmigo? “El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él. Ese amor se manifiesta plenamente entre nosotros para que en el día del juicio comparezcamos con toda confianza, porque en este mundo hemos vivido como vivió Jesús. En el amor no hay temor”. Por favor, subraya las siguientes palabras: “se manifiesta plenamente”. Manifestarse plenamente es un proceso que toma toda la vida. Es una jornada. Si tratamos de obtener la confianza que nos da ese amor de un solo golpe, nos vamos a engañar y no va a ser real. Esa sería la única forma en la que podrías hacerlo rápidamente. El amor es un proceso que toma un poco cada día. Si tú esperas completa confianza y amor el día de mañana, vas a sentirse plenamente desilusionado. Tú debes crecer en el amor paso a paso. No se puede vencer a la inseguridad de la noche a la mañana. No sucede de esa forma para nadie, pero tú puedes dar el primer paso en este momento, y eso se hace empezando una relación con Jesucristo o fortaleciendo la relación que ya tienes con Él. Cuando tú le dices sí a Jesucristo, estás diciendo sí a una clase de amor que puede derrotar el miedo en tu vida.