Subido por Pablo Repond

Fallo Actividad N° 1

Anuncio
N° 1016
Rosario, 01 Noviembre 2002
Y VISTOS: Los presentes autos caratulados "Banco Bisel S.A. s/Concurso Preventivo"
Expte. N' 1255/02, venidos a despacho para dictar resolución acerca del pedido de apertura
de concurso preventivo, que formulara el Banco Bisel SA., representado por el Presidente
de su directorio, Sr. Guillermo Harteneck, con patrocinio letrado, en base a la decisión
adoptada por su directorio, en fecha 18 de septiembre de 2002, acta No. 305, que acompaña
y mediante escrito cargo N* 10440 del 20/09/02, y de los que resulta:
Que el Banco Bisel S.A., denuncia como domicilio
social, calle Córdoba No. 1437, piso 5to. oficina 7 de Rosario, y constituye domicilio legal
en el estudio de calle Corrientes No. 832 - 1er. piso - Rosario.
Que según manifiesta en su presentación, el día 4 de
abril de 2002, mediante resolución No. 215, el B.C.R.A. encuadró al Banco Bisel en el
articulo 34 de la Ley de Entidades Financieras y le solicitó la presentación de un plan de
regularización y saneamiento que contemplara las medidas necesarias para recomponer la
posición de liquidez de la entidad. Que en fecha 6 de mayo de 2002 la sociedad presentó
dicho plan.
Que posteriormente, el día 17 de mayo de 2002, el
Banco Bisel SA. informó a la Superintendencia de Entidades Financieras y Cambiarias, que
se encontraba en situación de iliquidez, debido al continuo retiro de depósitos por parte de
los ahorristas. Que el día 19 de mayo de 2002, el B.C.R.A. decidió, por resolución No. 94,
suspender las operaciones del Banco, en los términos del artículo 49 de la Carta Orgánica
del B.C.R.A.
Que mediante resolución N° 305 del 19 de Mayo de
2002 el B.C.R.A. dispuso la designación de veedores con facultad de veto en los términos
del art. 34 de la Ley de Entidades Financieras. Que el 20 de Mayo de 2002, mediante
resolución No. 308, el B.C.R.A. dispuso rechazar el plan de regularización y saneamiento
presentado por el Banco Bisel SA., y dispuso la reestructuración de la entidad bancaria,
conforme al artículo 35 bis de la ley de Entidades Financieras. Que en la misma fecha, el
B.C.R.A. dispuso la suspensión total de las actividades regladas por la ley de entidades
financieras del Banco Bisel, por un plazo de treinta días, sucesivamente prorrogado.
Que en fecha 21 de mayo de 2002, ante la oferta
presentada por el Banco de la Nación Argentina, dentro del marco del art. 35 bis, se celebró
entre el Banco Bisel SA. y el Banco de la Nación Argentina, un contrato de fideicomiso
financiero, mediante el cual el Banco Bisel SA. transfirió al Banco de la Nación, en su
calidad de fiduciario, los activos de valor económico y el Banco de la Nación asumió los
pasivos privilegiados del Banco Bisel SA. ad referendum del Banco Central. Que bajo los
términos y condiciones del contrato de fideicomiso, el Banco de la Nación procedió a
emitir dos certificados de participación en beneficio del Banco Bisel SA. y el Banco Nación
se obligó a administrar y realizar los bienes fideicomitidos.
Que en la misma fecha, es decir el 21 de Mayo de
2002, el B.C.R.A. dictó la Resolución No. 314 por la cual autorizó, en los términos del art.
7° de la L.E.F.,
a "Nuevo Banco Bisel SA" a funcionar como Banco comercial minorista,
autorizando la transferencia de los activos y pasivos excluidos anteriormente a favor del
Nuevo Banco Bisel SA. Que el B.C.R.A. mediante resolución No. 379 del día 13 de junio
de 2002 resolvió prorrogar hasta el 2 de agosto de 2002, el plazo de suspensión total de las
operaciones regladas por la Ley de Entidades Financieras de Banco Bisel SA. ordenadas
por resolución No. 94/2002 del Superintendente de Entidades Financieras y Cambiarías en
los términos del art. 49 de la Carta Orgánica del BCRA. Que, finalmente, con fecha 16 de
septiembre de 2002. el Banco Central de la República Argentina, dictó la resolución No.
584, por la cual revocó la autorización para funcionar del Banco Bisel SA.
Y CONSIDERANDO: Que en su presentación
inicial, de fecha 20 de septiembre de 2002, el Banco Bisel SA. peticiona el plazo de diez
días, previsto en el artículo 11, último párrafo de la ley 24.522, a fin de cumplir
integralmente los requisitos exigidos por la ley, y otorgado dicho plazo, se presenta en 8 de
octubre de 2002, cumplimentando los mismos.
Que en fecha de 24 septiembre de 2002, en autos:
"Banco Central de la República Argentina. Solicita Intervención Judicial del Banco Bisel
SA." Expte. No. 596102, que tramitan ante este Juzgado, el Banco Central de la República
Argentina, a través de su apoderado para juicios, solicita la liquidación judicial del Banco
Bisel SA, acompañando la respectiva resolución del directorio de la entidad.
Que más tarde, en los mismos autos, interpone
revocatoria y apelación en subsidio, contra el decreto que ordenó correr traslado de dicha
petición al Banco Bisel SA. manifestando, además, que en su juicio, las entidades
financieras no son susceptibles de ser declaradas en concurso preventivo. Que en esta
última presentación el Banco Central sustenta la postura que ha sido analizada en
profundidad, en el fallo del Dr. Guillermo Mósso, ex titular del 3er. Juzgado de Procesos
Concursales de Mendoza, en el caso.- "Banco de Mendoza SA" (El Derecho, t. 190. pág.
23, con comentario de E. Daniel Truffat).
Que corresponde, en consecuencia, en primer
término, considerar si, como lo entiende la peticionante, una ex entidad financiera, cuya
autorización para funcionar ha sido revocada por resolución del Banco Central, se
encuentra habilitada para presentarse en concurso preventivo.
Que el texto específico que regla la materia,
conforme lo afirma el propio Banco Central en el análisis vertido en el escrito antes
enunciado, es el artículo 50 de la Ley de Entidades Financieras, que luego de la reforma de
la ley 24.627, textualmente dice: "Las entidades financieras no podrán solicitar la
formación de concurso preventivo ni su propia quiebra, ni ser declaradas en quiebra a
pedido de terceros, hasta la revocación de su autorización para funcionar, salvo lo dispuesto
en el artículo 52 de la presente ley".
Que la interpretación de la norma debe comenzar
por su sentido literal. Que en mi juicio la ley de entidades financieras es clara a partir de su
reforma introducida por el artículo 1 de la ley No. 24.627 en el sentido que la prohibición
de solicitar el concurso preventivo, su propia quiebra ni ser declaradas en quiebra a pedido
de terceros rige sólo hasta la revocación de su autorización para funcionar, siendo por ello
procedente - desde el punto de vista legal - lo peticionado, ya que no puede entenderse que
el legislador al dictar la ley No. 24.627 haya agregado "hasta la revocación de la
autorización para funcionar” para darle al nuevo texto el mismo sentido que tenía el
anterior.
Que pese a su claridad, no escapa a este tribunal
que dicha interpretación ha sido cuestionada (ver, entre otros, Maffia, 0. "Aspectos de la
nueva ley de concursos (IV)" en La Ley 1996 - D, pag. 997) por lo cual corresponde
analizar los argumentos vertidos en contrario, realizando una interpretación sistemática de
la norma.
Que la interpretación sistemática que se
propone debe abarcar tanto la ley especial de Entidades Financieras No. 21.526 y sus
reformas como el régimen general sobre Concursos y Quiebras (Ley 24.522). Que respecto
a la ley No. 21.526 (año 1977) cabe destacar que ha sido sucesivamente reformada por la
ley 24.144, 24.485 y finalmente por la ley 24.627. (Ver la evolución legislativa en "Ley de
entidades financieras" con nota de Marcos E. Moiseeff, Jorge C. Vivían¡ y Luis A. Estoup,
pag. XIII y ss. ed. La Ley).
Que a partir de la sanción de la ley 24.485 se introduce en la legislación argentina, el
instituto de la "exclusión de activos y pasivos", (art. 35 bis) que si bien reconoce como
antecedente la ley 22.529, presenta particularidades propias.
Que en este caso, como consecuencia de la
situación de iliquidez que presentaba el Banco Bisel SA., el B.C.R.A. decidió por
resolución No. 94 del 19 de mayo de 2002, suspender las operaciones del Banco, en los
términos del art. 49 de la Carta Orgánica.
Que posteriormente, mediante resolución No.
308 del 20 de mayo de 2002, el Banco, rechazó el plan de regularización saneamiento
presentado por el Banco Bisel SA. disponiendo la reestructuración de la entidad bancaria
conforme el ya citado artículo 35 bis de la ley de Entidades Financieras y solicitó a este
Tribunal la designación de interventores judiciales.
Que en la misma fecha, el BCRA. dispuso la
suspensión total de las actividades regladas por la ley de entidades financieras del Banco
Bisel, por un plazo de treinta días, sucesivamente prorrogado.
Que en fecha 21 de mayo de 2002, ante la oferta presentada por el Banco de la Nación
Argentina, dentro del marco del art. 35 bis, se celebró entre el Banco Bisel SA. y el Banco
de la Nación Argentina, un contrato de fideicomiso financiero, mediante el cual el Banco
Bisel SA. transfirió al Banco de la Nación, en su calidad de fiduciario, los activos de valor
económico y el Banco de la Nación asumió los pasivos privilegiados del Banco Bisel SA.
ad referendum del Banco Central.
Que bajo los términos y condiciones del
contrato de fideicomiso, el Banco de la Nación procedió a emitir dos certificados de
participación en beneficio del Banco Bisel SA. y el Banco Nación se obligó a administrar y
realizar los bienes fideicomitidos. Que el Banco Central, mediante resolución No. 314 del
21 de mayo de 2002 autorizó a "Nuevo Banco Bisel SA", a funcionar como Banco
comercial minorista, autorizando la transferencia de los activos y pasivos excluidos
anteriormente a favor del Nuevo Banco Bisel SA.
Que este proceso, realizado en base a lo
dispuesto en el Capítulo IV ("Reestructuración de la entidad en resguardo del crédito y los
depósitos bancarios, art. 35 Bis, en especial párrafos ll , lll, IV y V de la Ley de Entidades
Financieras, luego de la reforma de la ley 24.485"), ha sido fundamentalmente orientado a
la "defensa de los depositantes" -. Que no cabe duda, atento los resultados que hoy están a
la vista, que esta solución ha sido exitosa, tanto para los depositantes, interesados
fundamentales, como para el personal del Banco, que ha salvado su fuente de trabajo, como
para la región en general, adonde el Banco Bisel SA. tenía una fuerte inserción.
Que como consecuencia de la mentada
reestructuración, los activos y pasivos excluidos han pasado a integrar el patrimonio de un
nuevo sujeto de derecho "Nuevo Banco Bisel SA", que ha sido autorizado a operar como
entidad financiera, y que de hecho, está operando en plaza. Que el Banco Bisel SA. a partir
de la citada reestructuración, no tiene en su patrimonio ni los pasivos de los depositantes ni
los activos a valores equivalentes que lo respaldaban. Que, por lo tanto, a partir de ese
momento el Banco está imposibilitado de cumplir su objeto social. Que más tarde, el
B.C.R.A. ha revocado
la autorización para funcionar como entidad financiera conforme
resolución de fecha 16 de septiembre de 2002, cesando en consecuencia a partir de ese
momento el carácter de entidad financiera del Banco Bisel SA. Que, además, ello configura
una causa¡ de disolución en los términos de la ley de Sociedades Comerciales. (art. 94
inciso 10, ley No. 19.550 y sus reformas).
Que estando acreditado estos extremos en los
presentes autos, así como en la documentación agregada en autos: "B.C.R.A. s/ Solicita
intervención judicial del Banco Bisel SA" no cabe duda que el Banco Bisel SA. ex entidad
financiera, es titular sólo de un patrimonio residual, integrado por bienes que en forma
alguna permiten el ejercicio de la actividad financiera.
Que la ex entidad financiera ha solicitado la
apertura del concurso preventivo, denunciando como patrimonio el mencionado "residual"
ya que los pasivos adeudados a los depositantes y su valor equivalente de activos, han sido
transferidos a una nueva entidad, que es quien hoy está desarrollando la actividad financiera
que antes cumplía el Banco Bisel SA. Que esa reestructuración de la entidad, admitida
ahora por la ley específica, (art. 35 bis) impone una nueva interpretación del sistema de
liquidación de entidades financieras. Que en este sentido se ha dicho, que si bien la
doctrina, hasta la sanción de la ley 21.526 desechaba la posibilidad del concurso preventivo
de una persona que hubiera actuado como entidad financiera, ya que su quiebra estaba
prohibida, a partir del año 1977, tal doctrina como fuera formulada, ha perdido consistencia
(conforme "Ley de Entidades Financieras", pag, XLIV, ed. La Ley).
Que en mi criterio, corresponde agregar que
modificado el régimen de liquidación por la incorporación del art. 35 bis, exitoso como
antes se ha dicho en este caso, también cabe una nueva interpretación del citado sistema, ya
que, en virtud de ese proceso de reorganización, la actividad financiera antes desarrollada
por el Banco Bisel SA. es cumplida hoy, por otro sujeto de derecho autorizado a funcionar
como tal, mientras que claramente el Banco Bisel SA. ha pasado a ser, irrevocablemente,
una ex entidad financiera. Que siendo así, existiendo una norma permisiva en el régimen
especial a favor de las ex entidades financieras, y habiendo sido modificado tan
profundamente el régimen de liquidación de entidades financieras por sucesivas reformas,
que no han mantenido un sistema homogéneo, corresponde, derivar la solución de esta
petición al régimen general sobre Concursos y Quiebras de la ley No. 24.522.
Que como se ha señalado con acierto en el
escrito inicial el derecho concursal argentino afirma una tendencia muy nítida a favor de la
mayor amplitud de los sujetos concursables (últimamente la ley No. 25.374). Que el
régimen concursal general no incluye expresamente entre los sujetos no susceptibles de ser
declarados en concurso a las ex - entidades financieras (artículo 2, ley . No. 24.522). Que
en doctrina se ha defendido la posibilidad de presentación en concurso preventivo de una ex
entidad financiera (Lorente, Javier, Revista Prudentia Juris, No. 52 UCA. pag. 43, y ss) y
más recientemente, el señor Juez titular del Juzgado N°13. Civil y Comercial, Concursos y
Sociedades No. 1, de la ciudad de Córdoba, Dr. Carlos Tale, ha resuelto en el mismo
sentido, en fundada sentencia que lleva el No. 660 del 23 de octubre de 2002, en autos:
"Banco Suquia SA, s/ Concurso preventivo".
Que, por lo demás el proceso concursal
preventivo de una ex - entidad financiera, es el que posee mayores garantías para los
acreedores y terceros, lo que resulta acentuado aún más cuando ha sido aplicado en forma
exitosa la reestructuración en resguardo del crédito y los depósitos bancarios (art. 35 bis).
Que en consecuencia, en base a las
consideraciones que anteceden, haré lugar a la petición de concursamiento de la ex entidad
financiera Banco Bisel SA. Que el tribunal entiende que, con los elementos acompañados
en el escrito inicial, más los agregados posteriormente se ha dado cumplimiento a las
prescripciones del art. 11, en concordancia con el artículo 289, norma ésta de aplicación al
presente en virtud de lo dispuesto por el art. 288, inciso 3 de la ley 24.522. Que, atento la
complejidad y magnitud del presente concurso, corresponde designar una sindicatura
categoría A (estudio) (art. 253, inciso 5, ley 24.522).
FALLO: 1) Declarar la apertura del
concurso preventivo de la ex entidad financiera BANCO BISEL SA, con domicilio social
en calle Córdoba No. 1437, piso 5, of. 7 de la ciudad de Rosario, y legal en calle Corrientes
No. 832 - ler. piso - Rosario. 2) Designar la fecha del 6 de noviembre de 2002, a las 10
horas, para sorteo de un síndico categoría A. 3) Diferir las fechas hasta las cuales podrán
presentarse las solicitudes de verificación de créditos ante el Síndico y para la presentación
de los informes individuales y general respectivamente, las que se fijarán por auto
ampliatorio, aceptado que fuere el cargo por el Síndico a designarse. Fijase audiencia
informativa la cual se llevará a cabo cinco días antes del vencimiento del período de
exclusividad que se determinará oportunamente. 4) Ordenar la publicación de edictos de
conformidad a lo dispuesto en los arts. 27 y 28 de la norma legal vigente en el Boletín
Oficial y diario La Capital. 5) Ordenar a la concursada para que en el plazo de dos días
presente los libros que posee, para su intervención por Secretaria, bajo las prevenciones de
ley. 6) Disponer su anote la presente apertura en el Registro de Procesos Concursales y en
los demás que correspondan, oficiándose. 7) Ordenar se anote la inhibición general de la
concursada, oficiándose al Registro General de Rosario, Registro Nacional de la Propiedad
Automotor y demás reparticiones que correspondan. 8) Intimar a la concursada a depositar
la suma de cinco mil pesos ($ 5.000), dentro del término de tres días, los que se estiman
para gastos de correspondencia, bajo los apercibimientos de ley. 9) Ordenar se comunique
la presente a la Dirección General Impositiva, Registro Público de Comercio,
Municipalidad de Rosario y a quien correspondiera, oficiándose. 10) Ordenar á los
administradores de la sociedad concursada dar estricto cumplimiento al art. 25 de la ley
24.522. 11) Oficiar a los Juzgados que correspondan en virtud de lo dispuesto por el art.
21de la norma legal precedentemente mencionada.
Hágase saber, insértese y expídase copia.
Dr. Ricardo Walter Heitz
Juez
Juzgado de 1° Inst. de Distrito Civil y
Comerc. 9° Nomin.
Descargar