UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LOS LLANOS OCCIDENTALES “EZEQUIEL ZAMORA” VICERRECTORADO DE PLANIFICACIÓN Y DESARROLLO SOCIAL BARINAS PROGRAMA DE CIENCIAS SOCIALES Y JURÍDICAS SUB-PROGRAMA DERECHO DEFENSAS O RECURSOS ADMINISTRATIVOS DE LOS PARTICULARES ANTE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA BARINAS, OCTUBRE DE 2.016 UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LOS LLANOS OCCIDENTALES “EZEQUIEL ZAMORA” VICERRECTORADO DE PLANIFICACIÓN Y DESARROLLO SOCIAL BARINAS PROGRAMA DE CIENCIAS SOCIALES Y JURIDICAS SUB-PROGRAMA DERECHO DEFENSAS O RECURSOS ADMINISTRATIVOS DE LOS PARTICULARES ANTE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA Profesora: Abg. Leidymar Montoya DERECHO ADMINISTRATIVO 1er Año Sección FS-01 Bachilleres: Acevedo Jesús C.I Nº 16.127.113 Arteaga Javier C.I Nº 12.553.643 Balza Pedro C.I Nº 19.025.502 Bastidas Mignolia C.I Nº 17.767.244 Berrocal Annelys C.I Nº 18.839.969 Castillo Lisbeth C.I Nº 20.599.479 Demeo Franca C.I Nº 13.591.406 Espitia Dariela C.I Nº 18.838.092 García Randy C.I Nº 24.321.386 Rovere Neffertitti C.I Nº 23.558.785 Trinidad Álvaro C.I Nº 26.074.944 BARINAS, OCTUBRE DE 2.016 1.- ACTOS ADMINISTRATIVOS Se define como Acto Administrativo la decisión general o especial que, en ejercicio de sus funciones, toma la autoridad administrativa, y que afecta a derechos, deberes e intereses de particulares o de entidades públicas. La Ley del Procedimiento Administrativo del Distrito Federal que dice así: Artículo 2º.- Para los efectos de la presente Ley, se entenderá por: Acto Administrativo: Declaración unilateral de voluntad, externa, concreta y ejecutiva, emanada de la Administración Pública, en el ejercicio de las facultades que le son conferidas por los ordenamientos jurídicos, que tiene por objeto crear, transmitir, modificar, reconocer o extinguir una situación jurídica concreta, cuya finalidad es la satisfacción del interés general. Dentro de la división tripartita de los Poderes públicos, es el que procede del ejecutivo, a diferencia del acto legislativo (o ley) y del judicial (resolución, providencia, auto o sentencia). Además, la autoridad o el agente ha de obrar como representante de la Administración pública en tanto que persona de Derecho Público; ya que, de proceder como persona jurídica privada, las relaciones encuadran dentro de las civiles o comunes, con los privilegios que en todo caso se atribuyen al Estado y a otras entidades aun en su aspecto "particular". Prácticamente integran actos administrativos todas las resoluciones y disposiciones, verbales o escritas (singularmente éstas, debido a su constancia); sean acuerdos, órdenes, decretos, reglamentos, instrucciones, circulares u ordenanzas que dictan desde los ministros a los alcaldes; y también las corporaciones, como las diputaciones provinciales, los ayuntamientos; pero no los organismos legislativos de las provincias o Estados de una federación. Por tanto, de lo anterior resulta que en las definiciones tradicionales del acto administrativo que lo precisan, pura y sistemáticamente, como una declaración de voluntad realizada por la Administración, con el propósito de producir un efecto jurídico, el problema se reduce a determinar qué debe entenderse por Administración: o dicho término se define con un criterio orgánico, identificándose con los órganos de la Administración Pública como incorrectamente lo ha hecho el Articulo 7 de la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos; o dicho término se define con un criterio material, identificándolo con el ejercicio de la función administrativa, lo que también produciría una definición incompleta del acto administrativo; o dicho término se define con criterios combinados de orden material, formal y orgánico. Las características del acto administrativo son las siguientes: Es un acto jurídico. Es de derecho público. Lo emite la administración público, o algún otro órgano estatal en ejercicio de la función administrativa. 2.- IRREGULARIDADES DE LOS ACTOS ADMINISTRATIVOS. Se habla de irregularidad de un acto administrativo, cuando ese acto no sea perfecto o que algunos de los elementos del acto por algún motivo sea irregular. Dicho de otra manera, que el acto administrativo no reúna los requisitos y modalidades necesarios para que opere con plenitud. Podríamos decir que se entiende por esta, toda manifestación de la administración pública, de carácter general o particular, emitido por los órganos de la administración pública, sin el cumplimiento de las disposiciones constitucionales y legales establecidas en los instrumentos jurídicos, lo cual traerá como consecuencia su nulidad absoluta o relativa, según sea el caso. La irregularidad de los actos administrativos puede manifestarse por todo tipo de violaciones a las disposiciones legales que norman su creación, desde intrascendentes desviaciones en el procedimiento administrativo, hasta ausencia absoluta de los elementos que deben integrarlo, lo cual no impide que provisionalmente produzcan sus efectos. De esta manera encontramos que a falta de disposición expresa en la ley administrativa, se aplica supletoriamente la teoría tripartita de las nulidades consignada en los artículos del 2224 al 2242 del Código Civil, de donde se deriva la posibilidad de que los actos administrativos puedan presentar vicios que produzcan su inexistencia, nulidad absoluta o nulidad relativa. Todas las irregularidades del acto administrativo se encargan de propiciar su ilegalidad en ese sentido, los vicios de un acto administrativo pueden darse por la inobservancia de las normas que lo rigen. La nulidad de los actos administrativos considerando que la inexistencia del acto es resultado de la falta de voluntad o de objeto, está sólo puede producirse cuando el sujeto que actúa no represente la voluntad del órgano, por no tratarse de un sujeto de la administración, o que el objeto del acto sea manifiestamente ilícito o imposible. Las formas de extinción del acto administrativo son: Caducidad, y Revocación. El primero se refiere a que su existencia está sujeta al cumplimiento de ciertas obligaciones a cargo de su destinatario y éste no cumple con ellas. La segunda se refiere a que procede por motivos de oportunidad que se generan después que el acto nació: su naturaleza es constitutiva y los efectos se producen hacia el futuro. 3.- IMPUGNACIÓN DE LOS ACTOS ADMINISTRATIVOS. Vía Administrativa. Cuando hablamos de la inexistencia de un Acto Administrativo nos referimos fundamentalmente a que éste no tiene vida dentro de la esfera jurídica determinada por la norma, es así que él mismo nació, pero por su forma o contenido es atentatorio con la base legal que lo regula. El acto administrativo en su calidad de acto productor de efectos jurídicos directos, puede ser impuesto por la interposición de recursos legales, se demuestra la invalidez del acto. Las Clases de impugnación puede ser en: Sede administrativa: procede por razones de legitimidad, oportunidad, merito o conveniencia, a través de recursos, reclamos y denuncias. Sede judicial: procede únicamente por legitimidad, a través de acciones y recursos, amparos, entre otros. Es así como la propia Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos (L.O.P.A.), determina cuando los actos son absolutamente nulos: Artículo 19. Los actos de la administración serán absolutamente nulos en los siguientes casos: 1. Cuando así este expresamente determinado por una norma constitucional o legal. 2. Cuando resuelvan un caso precedentemente decidido con carácter definitivo y que haya creado derechos particulares, salvo autorización expresa de la ley. 3. Cuando su contenido sea de imposible o ilegal ejecución. 4. Cuando hubieren sido dictados por autoridades manifiestamente incompetentes, o con prescindencia total y absoluta del procedimiento legalmente establecido. 4.- PRINICIPIO DE AUTO TUTELA DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA La Potestad de Auto tutela Administrativa, fundamentalmente, es el poder de actuar que posee la administración sin la necesaria intervención de un tercero imparcial que le dé certeza y valor jurídico de título ejecutivo y ejecutorio a las manifestaciones de su voluntad (Actos Administrativos), por encima y en detrimento de los derechos e intereses de los terceros particulares que se ven obligados jurídicamente a soportar esta actividad administrativa, y que sólo les queda la posibilidad de recurrir a ese tercero imparcial, o juez, una vez cumplida la voluntad administrativa, para restablecer la situación jurídica que pudiera infringir sus derechos o para reparar las lesiones patrimoniales o morales que este actuar pudiera ocasionarle. Es el privilegio de las Administraciones públicas según el cual sus actos se presumen válidos y pueden ser impuestos a los ciudadanos, incluso coactivamente, sin necesidad del concurso de los tribunales, y al margen del consentimiento de aquéllos. Una comparación entre la posición que ocupan los administrados y la administración frente a los tribunales muestra claramente el alcance de este privilegio. Doctrinal y jurisprudencialmente se considera al auto tutela administrativa como el poder jurídico que le permite a la Administración Pública revisar sus propios actos. La Auto tutela administrativa como poder jurídico que le permite a la Administración satisfacer directamente sus intereses y pretensiones, sin necesidad de acudir ante el órgano jurisdiccional. La administración pública tiene la posibilidad de auto tutelarse, en el sentido de que cuando vea que un acto que es emanado de ella revista vicios de inconstitucionalidad y de ilegalidad, podrá convalidarlos, revocarlos e incluso corregir errores materiales o de cálculo, siendo que a instancia de parte o de oficio podrá reconocer la nulidad absoluta de un acto administrativo, así las cosas, señala la LOPA lo siguiente: TITULO IV De la Revisión de los Actos en Vía Administrativa Capítulo I De la Revisión de Oficio Artículo 81. La administración podrá convalidar en cualquier momento los actos anulables, subsanando los vicios de que adolezcan. Artículo 82. Los actos administrativos que no originen derechos subjetivos o intereses legítimos, personales y directos para un particular, podrán ser revocados en cualquier momento, en todo o en parte, por la misma autoridad que los dictó, o por el respectivo superior jerárquico. Artículo 83. La administración podrá en cualquier momento, de oficio o a solicitud de particulares, reconocer la nulidad absoluta de los actos dictados por ella. Artículo 84. La administración podrá en cualquier tiempo corregir errores materiales o de cálculo en que hubiere incurrido en la configuración de los actos administrativos. Todo actuar de la Administración Pública, en el ejercicio de los poderes públicos concedidos para la consecución de intereses públicos, debe estar regulado en una Ley, en consecuencia el principio de la Auto tutela Administrativa, como una manifestación de ese ejercicio del poder público debe, con más razón, estar prevista, previa y claramente, en una ley formal. El reconocimiento de la potestad de auto tutela, en sus manifestaciones ejecutiva y ejecutoria, no impide el establecimiento de límites para su ejercicio. Tales límites principalmente son: Acto administrativo expreso: La Administración debe adoptar un acto administrativo que represente el título jurídico concreto que le permite actuar en protección del interés general. Ese acto administrativo debe cumplir con todos los elementos formales y materiales exigidos por la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos, con el propósito de evitar la arbitrariedad. No podrá la Administración realizar actuaciones materiales que menoscaben el ejercicio de los derechos de los particulares, sin la existencia del acto administrativo que le sirve de fundamento, pues tales actuaciones constituirían una vía de hecho. Procedimiento administrativo previo al acto administrativo. En garantía del derecho a la defensa y al debido proceso (artículo 49 de la CRBV) el acto administrativo que necesariamente debe adoptar la Administración en ejercicio de la potestad de auto tutela debe ser el resultado de un procedimiento administrativo. Las inspecciones realizadas por la Administración no constituyen un “procedimiento administrativo previo”, por lo que las sanciones que usualmente se imponen luego de tales actuaciones vulneran el derecho al debido proceso y a la defensa. La inspección constituye una fase previa al procedimiento administrativo, dirigida a dejar constancia de hechos relevantes que podrían llegar a justificar el inicio posterior de un procedimiento. Notificación de los actos administrativos. Los actos administrativos deben ser notificados a los administrados, bien sea a través de la publicación o de la notificación personal, conforme a las disposiciones al respecto contenidas en la LOPA. Interpretación jurisprudencial en un caso particular. Actos emanados de CADIVI. Según la CSCA, los mensajes de datos producidos por el Sistema Automatizado de CADIVI no deben cumplir con las formalidades de notificación establecidas en la LOPA. Así, “…no existe obligación legal alguna para que en dicho mensaje se transcriba y transmita íntegramente en su forma original el texto de la decisión administrativa”. (Sentencia Nº 2011-0930, de 6 de junio de 2011) Imposibilidad de revocatoria de los actos que han creado derechos. Los actos administrativos favorables a los administrados gozan del principio de estabilidad, es decir, no puede ser revocado por la Administración (SPA-TSJ, sentencia Nº 1.033, caso: Aldo Ferro García). La revocatoria de un previo acto administrativo definitivo y favorable, es contrario además a la confianza legítima de los ciudadanos. Los actos que hayan creado derechos sólo pueden ser revisados por la Administración en los casos en que estén afectados por los vicios de nulidad absoluta señalados en el artículo 19 de la LOPA. Para ello, se requerirá de un procedimiento con audiencia del interesado (Sala Constitucional, sentencia N° 2.001, de 16 de Agosto de 2002). 5.- INEFICACIA DE LOS ACTOS ADMINISTRATIVOS Las irregularidades e ineficiencias del acto administrativo, los actos administrativos son válidas cuando han sido emitidos de conformidad con las normas jurídicas que lo rigen, cuando su estructura consta de todos los elementos de existencia. Estos son el consentimiento y el objeto, y los de validez que son: la capacidad, la ausencia de vicios de voluntad, la licitud y la forma. Por lo tanto, cuando no cumplen con las mismas, podemos hablar de la nulidad absoluta y de la nulidad relativa. Los casos en que se actualiza la falta de acto; de los elementos del acto administrativo o de su mala conformación, generando ineficacia del mismo son los siguientes: a) Falta de sujeto. b) Falta de voluntad o voluntad viciada por error, dolo o violencia. c) Falta de objeto. d) Falta de forma. e) Falta de motivo. f) Falta de oportunidad. g) Falta de finalidad. h) Cuando la fuente del derecho, que vendría siendo la voluntad del legislador, no se expresa de manera clara. 6.- CONCEPTO DE REVOCACIÓN La revocación de los actos administrativos es la facultad que compete a las Administraciones Pública para sustituir un acto inválido, dejándolo sin efecto, por otro conforme a derecho. La Administración Pública puede al declarar la nulidad, establecer la revisión del acto. Es una facultad que posee la Administración Pública para sustituir, invalidar o dejar sin efecto un acto administrativo, dándole paso a uno nuevo que debe estar conforme a derecho y ser dictado de manera legal. Dicha revocación tiene un efecto ex-nunc, es decir, produce efectos para el futuro, a partir del momento en que emana el nuevo acto administrativo. Las Administraciones Públicas podrán revocar en cualquier momento sus actos, expresos o presuntos, no declarativos de derechos y los de gravamen, siempre que tal revocación no sea contraria al ordenamiento jurídico. Únicamente no se podrá ejecutar la revisión cuando sea por prescripción de acciones, por el tiempo transcurrido o por otra circunstancia que su ejercicio sea contrario a la equidad, buena fe, derecho de los particulares o a las leyes. El órgano que dictó el acto podrá revocarlo o modificarlo cuando desaparecieren las circunstancias que lo motivaron o sobrevinieren otras que, de haber existido a la razón, el acto no habría sido dictado. También podrá revocarlo o modificarlo cuando no fuere oportuno o conveniente a los fines del servicio para el cual se dicta, debido a esto, la revocación hace: 1. Actos Administrativos que producen efectos favorables al interesado. 2. Actos dictados en sustitución de Actos anulados. Aquellos casos en los que se dicta Acto ilegal posteriormente la Administración lo anula (por los Tribunales) en estos supuestos a continuación se dictará un Acto concreto y correcto. En principio, su eficacia sería hacia el futuro pero el Artículo 57.3 le da a efectos retroactivos hasta el punto del Acto anulado por la sola necesidad de que exista el supuesto de hecho, cuando el Acto ilegal fue dictado (se retrotrae a este supuesto de hecho del Acto anulado) aquí se ve el principio de conservación del Acto Administrativo y serán tanto en los Actos gravosos como en los favorables al particular. 3. Ejecución forzosa y efectividad de los Actos Administrativos. 4. Obligación inmediata. ¿Qué ocurre si se niega el particular? La Administración dispone de mecanismos para imponer la ejecución forzosa de los Actos Administrativos. 7.- CONCEPTO DE ANULACIÓN La anulabilidad es, en derecho, una causa de invalidez de un acto jurídico, que deriva de un vicio de la voluntad. La nulidad es consecuencia de un vicio en los elementos constitutivos del acto. En el derecho administrativo el particular o administrado sólo puede pedir la nulidad si está legitimado, es decir solamente en los casos en que el acto afecte sus derechos subjetivos o intereses legítimos. Los actos administrativos son regulares o irregulares. Los regulares son anulables, es decir que si tienen vicios, éstos son subsanables. Los irregulares son los que están gravemente viciados y su nulidad es absoluta e insanable. Por lo tanto tendremos: Nulidad absoluta: Los actos nulos de nulidad absoluta no pueden sanearse. Los vicios que tornan nulo de nulidad absoluta un acto administrativo pueden ser de dos tipos: Vicios generales de los actos jurídicos: Error esencial: Cuando se excluye la voluntad de la Administración (error en la persona, error en el objeto). Dolo: El dolo es toda aseción de lo que es falso o disimulación de lo que es verdadero. El dolo difiere del error en que es intencional. Para que el dolo ocasione la invalidez del acto administrativo debe ser grave y determinante de la acción del agente. Sea que el dolo fuera propio del agente o del administrado o de ambos, el acto administrativo resultará nulo de nulidad absoluta. Anulabilidad: Son anulables los actos administrativos regulares con vicios leves, que no impiden la existencia de los elementos esenciales. Si el acto ya ha sido notificado, dicha anulabilidad debe ser solicitada en sede judicial por la Administración. Sin embargo puede ser revocado, modificado o sustituido de oficio en sede administrativa si el interesado: hubiere conocido el vicio, Si la revocación, modificación o sustitución lo favorece sin perjudicar a terceros, y; Si el derecho hubiera sido otorgado a título precario. Un acto administrativo es anulable, y por tanto saneable, por ejemplo, cuando: El vicio fuera del objeto, en razón de no resolverse todas las peticiones formuladas. El vicio fuera de la causa en razón de haber realizado la Administración una errónea apreciación de los hechos que forman la causa del acto, siempre que tal errónea apreciación no impida la existencia de este elemento. Se tratare de un vicio leve de procedimiento. Supuestos de la nulidad absoluta o de pleno derecho (Artículo 62 de la Ley). 1. Actos que lesionan los derechos y libertades susceptibles de amparo constitucional: derechos fundamentales. Cualquier lesión. 2. Incompetencia del órgano (territorial o material). 3. Actos con un contenido imposible. No se dan las circunstancias del hecho. Supuesto de hecho inexistente. 4. Actos constitutivos de infracción penal o que traigan en causa o son consecuencia de una infracción penal. Actos que ordenan un delito o falta. 5. Otro supuesto: los supuestos prescindiendo total y absolutamente del Procedimiento establecido. La infracción ha de ser total. Nulidad de pleno derecho. Junto a este supuesto, la jurisprudencia consideró también la infracción de trámites esenciales o uno solo. Por ejemplo, la audiencia del interesado, reposición de las actuaciones. Da lugar a nulidad relativa. Todas aquellas infracciones de Procedimiento que no sean de pleno derecho, se mandan a anulabilidad relativa, y a su vez a las irregularidades. 6. Último supuesto (Artículo 62) Actos expresos o presuntos contrarios al ordenamiento jurídico, por lo que se adquieren facultades o derechos si se carece de requisitos para su prestación (muy cercana a los Actos de contenido imposible) la Ley, aquí está refiriéndose al silencio positivo, si en ese supuesto, el particular carecía de los requisitos esenciales para su adquisición, no se produce el silencio positivo. 7. También las disposiciones Administrativas pueden incurrir en nulidad de pleno derecho. Reglamento contra Ley será nulo de pleno derecho. Artículo 63.1 los supuestos son cualquier otra infracción del ordenamiento jurídico no contemplada en el Artículo 62. Son anulables los Actos de la Administración que incurran en infracciones del ordenamiento jurídico incluso la "desviación de poder". La desviación de poder (Ley contencioso Administrativa) es el uso de facultades Administrativas para fines distintos de los previstos en el ordenamiento jurídico. Resolución de una norma formalmente correcta pero no para esa finalidad sino distinta (fraude de Ley). En la jurisprudencia no es fácil encontrarlos; porque siempre hay ilegalidad. Por tanto, son anulables: Infracciones distintas del ordenamiento jurídico (de nulidad absoluta) y desviaciones de poder. La doctrina diferencia entre nulidad y anulabilidad: Cuando un acto es nulo de pleno derecho, no tiene ningún efecto jurídico, y cualquier juez debería aplicar la nulidad de oficio. También se le conoce como nulidad absoluta o insaneable. Por ejemplo, un Reglamento ilegal, será siempre declarado nulo. Cuando un acto es anulable, existen unos interesados que pueden pedir la anulación del mismo. Mientras tanto, el acto es válido. También se le conoce como nulidad relativa o saneable. Por ejemplo, un Acto Administrativo, será siempre declarado anulable. En el caso que nos ocupa, el motivo principal de anulabilidad de un acto procede de la ausencia de capacidad de la persona que lo firmó. En este caso, cuando la persona adquiere capacidad necesaria, puede optar por anular el acto si así lo desea, o mantenerlo como está (subsanarlo). Por ello, en el caso de un contrato, la persona que contrató con un menor de edad puede encontrarse con la anulación del mismo (si el menor cuando alcanza la mayoría de edad, o su representante antes de eso, así lo estiman), pero no podría solicitarlo él a un juez. Con ello, se busca la protección de la parte más débil. La invalidación, abolición o abrogación de algún tratado, privilegio, testamento o contrato, que queda sin ningún valor o fuerza, siempre que tenga competencia para hacerlo quien así lo declare; pues, en caso contrario, la disposición anuladora carecería de efecto. En la técnica legislativa, anulación se ha empleado para expresar la derogación más tajante, la declaración de inexistencia de un texto, al menos en el futuro, y en cuanto a todos sus efectos. 8.- EXTINCIÓN DE LOS ACTOS ADMINISTRATIVOS Los actos administrativos se extinguen cuando se han cumplido con todos los elementos, requisitos y modalidades que señala la ley cuando han producido sus efectos jurídicos conforme a su objeto y finalidad perseguidos, así las cosas podemos decir que hay efectos administrativos que se extinguen por determinación lisa y llanamente, de haber cumplido su objeto, el plazo de su vigencia y generalmente se les conoce como terminación normal, sin embargo hay algunos que se extinguen por determinación judicial o por determinación de los tribunales administrativos o de las propias autoridades administrativas y es así como han surgido la revocación, la rescisión, la prescripción, la caducidad, el termino y la condición y la nulidad absoluta o relativa. Los actos administrativos pueden extinguirse por diferentes medios que se han clasificado por razones metodológicas en Normales y Anormales. Medios Normales: La realización fáctica jurídica del acto administrativo se lleva a cabo en forma normal mediante el cumplimiento voluntario y la realización de todas aquellas operaciones materiales necesarias para cumplir el objeto o contenido del propio acto. Esta realización voluntaria puede ser de los órganos internos de la administración y también por parte de los particulares en este caso, el acto administrativo se cumple y se extingue por la realización de su objeto, a saber: Cumplimiento voluntario por órganos internos de la administración, la realización de todos los actos necesarios: Cumplimiento voluntario por parte de los particulares; Cumplimiento de efectos inmediatos cuando el acto en si mismo entraña ejecución que podríamos llamar automática o cuando de trata de actos declarativos; Cumplimiento de plazos, en aquellos actos que tengan plazo. Licencias, permisos temporales, concesiones, entre otros. Medios Anormales: El acto administrativo puede extinguirse por una serie de procedimientos o medios que llamamos anormales porque no culminan con el cumplimiento del contenido del acto, sino que lo modifican, impiden su realización o hacen ineficaz. Estos procedimientos o medios son los siguientes: Revocación administrativa. La revocación administrativa es un instrumento legal del órgano administrativo para dejar sin efectos en forma parcial o total un acto administrativo por razones técnicas, de interés público, o de legalidad es frecuente verlo en las instancias administrativas de aclaración o en la tramitación de recursos administrativos a favor del gobernado. El acto que se revoca puede tener vicios de forma o de fondo y por tal motivo es ilegal. En las concesiones puede verse la revocación de ese acto por razón de interés social cuando el estado ya no pretende concesionar la prestación de un servicio público o la explotación de bienes de propiedad pública simplemente cuando el concesionario no ha cumplido con la ley que regula la concesión. Rescisión. La rescisión administrativa como forma de extinción de los actos administrativos, es oportuno verla en contratos o convenios administrativos y consiste en la facultad que tienen las partes en ese acto jurídico bilateral en resolver o dar por terminadas sus obligaciones, en caso de incumplimiento de una de ellas, esta medida debe quedar plenamente señalada en una de las cláusulas que se contienen en el citado documento jurídico. Prescripción. La prescripción es la extinción de las obligaciones y los derechos o la adquisición de estos últimos por el simple transcurso del tiempo previsto en la ley. En el ámbito administrativo los actos jurídicos prescriben de acuerdo con lo que para cada caso en particular dispongan las leyes respectivas. Caducidad. La caducidad es la extinción de los actos administrativos por falta de cumplimiento de los requisitos establecidos en la ley o en el propio acto administrativo para que se genere o preserve un derecho, generalmente por negligencia descuido o inactividad de un particular que no cumple con los requisitos o deberes de una concesión, es frecuente verla en las de aguas, minas, comunicaciones y transportes etc. Al no explotarse la concesión o no realizarse ciertas obras o servicios en el plazo que marca la ley opera automáticamente esta figura llamada caducidad, con lo cual se extingue el comentado acto jurídico. La distinción entre prescripción y caducidad estriba en que la primera extingue el cumplimiento de obligaciones o el ejercicio de derechos de un particular o por el gobernante, liberándose de las mismas o los pierde por el transcurso del tiempo y la segunda extingue el ejercicio de facultades de una autoridad la pérdida de derechos del gobernado por negligencia. Término y condición. El termino es un acontecimiento futuro de realización cierta del que depende de que se realicen o se extingan los efectos de un acto jurídico. Puede ser suspensivo o extintivo; el primero suspende el primero suspende los efectos del acto administrativo. La condición es un acontecimiento futuro de realización incierta del que se hace depender el nacimiento o extinción de una obligación o de un derecho. Renuncia de Derechos. La renuncia de derechos es otra forma de terminar los actos administrativos, sobre todo es notable en los rubros de licencias, permisos, o concesiones, y aun en el caso de la nacionalidad, la parte interesada manifiesta su voluntad en forma unilateral de ya no seguir ejercitando ese derecho, por conveniencia personal, material, financiera o técnica y ante ello la autoridad competente debe de resolver lo conducente. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Brewer-Carías, Allan R, El Derecho Administrativo y la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos, Colección de Estudios Jurídicos N° 16, Editorial Jurídica Venezolana, Caracas, 1999 Chávez, H. (31 de Julio de 2008). Ley de Simplificación de Trámites Administrativos. Ley Habilitante (5891), Extraordinaria. Caracas, Distrito Metropolitano, Venezuela: Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela. Chávez, H. (31 de Julio de 2008). Ley Orgánica de la Administración Pública. Ley Habilitante (38146), Extraordinaria. Caracas, Distrito Metropolitano, Venezuela: Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela. Congreso de la República de Venezuela. (01 de Julio de 1981). Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos. (2818), Extraordinaria, 38. Caracas, Distrito Federal, Venezuela: Ediciones Dabosan, C.A. De Pedro, A. (1992). Temas de Derecho Administrativo Especial (Quinta edición ed.). Caracas, Distrito Federal, Venezuela: Italgráfica, SRL. Garay, J. (24 de Marzo de 2000). Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Gaceta Oficial Nº 5453. Caracas, Venezuela: Jurisprudencia Venezolana Ramirez & Garay. Lárez, E. (2001). Derecho Administrativo (Décima Segunda Edición ed.). Caracas: Universpidad Central de Venezuela.