UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN ANDRÉS FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y FINANCIERAS CARRRERA DE ADMINISTRACION DE EMPRESAS CARRERA ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS COMERCIO EXTERIOR I GRUPO N°5 Docente: Lic. Oscar Callisaya Valencia Integrantes: Aruquipa Vargas Miriam Ayllon Poblete Eva Guadalupe Balboa Aguilar Micaela Yamile La Paz – Bolivia Trabajo de Investigación 1¿Cuáles fueron las principales ventajas de la primera revolución industrial en relación al comercio internacional? ● A mediados del siglo XVIII, la industria británica tenía sólidas bases y con una doble expansión: las industrias de bienes de producción y de bienes de consumo. ● La ampliación de y diversificación del comercio externo, presionado por la demanda de materias primas (algodón) y la exportación de productos industriales (tejidos). ● La ayuda de una potente marina, tanto mercante como militar. ● La posesión de un imperio colonial dónde adquirir materias primas baratas y exportar la producción de sus fábricas. 2.- ¿Cuáles fueron las principales medidas proteccionistas posteriores a la revolución industrial? R.- Estas son las medidas que se han utilizado para lograr objetivos proteccionistas éstas incluyen: Protección de tecnologías, patentes, conocimiento técnico y científico. Evitar que los inversores extranjeros tomen el control de las empresas nacionales. Aranceles: por lo general, los aranceles (o impuestos) se aplican a los bienes importados. Cuotas de importación: para reducir la cantidad y, por lo tanto, aumentaron el precio de mercado de los bienes importados. Barreras administrativas: a veces se acusa a los países de utilizar sus diversas reglas administrativas (por ejemplo, en relación con la seguridad alimentaria, las normas medioambientales, la seguridad eléctrica, etc. Como una forma de introducir barreras a las importaciones. Legislación antidumping: el "dumping" es la práctica de las empresas que venden a los mercados de exportación a precios inferiores a los que se cobran en los mercados nacionales. Subvenciones directas: a veces se otorgan subsidios gubernamentales (en forma de pagos a tanto alzado o préstamos baratos) a las empresas locales que no pueden competir bien contra las importaciones. Subvenciones a la exportación: los gobiernos suelen utilizar las subvenciones a la exportación para aumentar las exportaciones. Control de tasa de cambio: Un gobierno puede intervenir en el mercado de divisas para reducir el valor de su moneda mediante la venta de su moneda en el mercado de divisas. Sistemas internacionales de patentes: existe un argumento para considerar los sistemas nacionales de patentes como un manto para las políticas comerciales proteccionistas a nivel nacional. Campañas políticas que abogan por el consumo interno (por ejemplo, la campaña "Compre estadounidense" en los Estados Unidos, que podría verse como una promoción extralegal del proteccionismo). Gasto gubernamental preferencial, como Buy American Act, legislación federal que insta al gobierno de los Estados Unidos a preferir los productos fabricados en los Estados Unidos en sus compras. 3. ¿Explicar y desarrollar el proceso de desarrollo económico de Alemania y Japón? Economía de Alemania La política socio-económica de Alemania se basa en el concepto de economía social de mercado. Alemania es el tercer mayor exportador del mundo con 1.511.000 millones de dólares exportados en 2014. Las exportaciones representan el 41% de la producción nacional. El sector servicios contribuye alrededor del 70% del total del PIB, la industria 29,1%, y la agricultura 0,9%. Los principales bienes exportados de Alemania son vehículos, maquinarias, productos químicos, productos electrónicos, productos farmacéuticos, equipos de transporte, metales básicos, productos alimenticios, caucho y plásticos. Alemania es un miembro fundador de la UE, el G-8 y el G-20, y fue el mayor exportador del mundo de 2003 a 2008. En 2011 se mantuvo como el tercer exportador y el tercer mayor importador. La mayor parte de las exportaciones del país son en ingeniería, especialmente maquinaria, automóviles, bienes químicos y metales. Alemania es un importante productor de turbinas eólicas y tecnología de energía solar. Numerosas ferias anuales y congresos se celebran en ciudades en toda Alemania. El 2011 fue un año récord para la economía alemana. Las empresas alemanas exportaron bienes por valor de más de 1 billón de €, la cifra más alta en la historia y el número de ocupados ha aumentado a 41,6 millones, la cifra más alta jamás registrada Los principales rasgos del modelo alemán se remontan al primer Gobierno elegido después de la segunda guerra mundial, en 1948, y se inspiran en la economía social de mercado (ESM) y se basaba en el libre mercado interior (ausencia de regulaciones) y exterior (economía abierta), pero también incluía el reconocimiento de un papel activo para el Estado como guardián del sistema (por ejemplo, mediante una activa política de competencia), como responsable de las infraestructuras y, sobre todo, en la vertiente social, como corrector de los posibles fallos del mercado, principalmente en la distribución de la renta y en el sistema de seguridad social.) Características del modelo económico de Alemania: Alemania es una economía abierta. La exportación actúa como motor, también por su capacidad de innovación y de arrastre de otros sectores. La clave del crecimiento no está en el consumo, sino en la exportación (y en la inversión). La capacidad exportadora se basa en la calidad y la tecnología, no en los costes bajos. No obstante, los costes crecen poco gracias al crecimiento de la productividad y a la inflación baja y estable. El nivel de vida de su población es alto, porque la productividad por empleado lo es también. Un determinante importante de la calidad, el progreso tecnológico y la eficiencia es un sistema educativo de calidad, en sus diversas etapas, sobre todo en la formación profesional (modelo de aprendizaje). La industria manufacturera ocupa un lugar central, tanto en el producto interior bruto (PIB) como en el empleo, especialmente la industria de bienes de capital. La política industrial, gestionada a menudo por los Estados federales (los länder), ha tendido a favorecer el desarrollo tecnológico y la gran empresa, para fomentar sus economías de escala. Las empresas medianas y pequeñas, por su parte, también son muy sólidas y prósperas, gracias al aprovechamiento de la tecnología, la formación del personal y la segmentación del proceso productivo en subprocesos, en los que esas empresas colaboran con las grandes. Una característica del modelo alemán es la codeterminación (mitbestimmung), introducida en 1952. Esta consiste en la participación de los trabajadores en los procesos de decisión de las empresas mediante comités elegidos por aquellos, con derecho de información y consulta en las decisiones sobre las condiciones de trabajo y su organización, y mediante la representación de los trabajadores en los consejos de supervisión. El modelo no se basa en la confrontación, sino en la acción concertada (konzertierte aktion), para hacer frente a los problemas, moderar las exigencias sociales, conseguir un reparto de las cargas y beneficios que sea aceptable para todos y generar confianza entre todos los actores sociales. La política fiscal trata de no ser expansiva. El modelo no funciona a base de estímulos fiscales en las fases de recesión; el aumento del gasto en los años noventa fue una necesidad política, casi patriótica, impuesta por la unificación Economía de China Los sectores estratégicos de la economía japonesa son los productos manufacturados y tecnología, sobre todo los vehículos, artículos electrónicos e industria del acero. Características notables de la economía japonesa incluyen una fuerte unidad entre productores, manufactureros y distribuidores, reunidos en grupos conocidos como keiretsu; los fuertes gremios empresariales y shuntō y la garantía del empleo vitalicio para la mayoría de los trabajadores. Para entender la evolución de la economía japonesa en el siglo veinte es necesario conocer cómo transcurrió el Japón en los tres siglos anteriores. El período desde el año 1600 y el inicio del siglo XX comprende dos siglos y medio de profundos cambios políticos, económicos y sociales que modificarían el pensamiento en Japón, su escala de valores, su comportamiento social y sus instituciones El periodo Edo o Tokugawa (1603-1868) y el periodo de la Restauración Meiji (1868-1914). Las condiciones necesarias para el despegue del desarrollo económico japonés están soportadas en los cambios que se dieron durante estas dos hegemonías gubernamentales. Entre el siglo V y el siglo XII Asia oriental era la región más dinámica de la economía mundial. En especial, entre el siglo V y el XII mientras Europa vivía un fuerte feudalismo y un estancamiento social, económico y tecnológico, las civilizaciones asiáticas como india y la china presentaban economías más dinámicas y con mayor avance tecnológico. Por tanto, Osaka se convirtió en una ciudad comercial y un centro financiero que, además, fue la primera ciudad del Japón donde se originó un mercado de futuros de arroz; en tanto que Edo era el centro político y un gran mercado interno para el consumo. La evolución de la economía entre 1918 y el estallido de la segunda guerra mundial Japón participó en la primera guerra mundial como uno de los países aliados. En la Conferencia de París de 1918 obtuvo, como compensación, los territorios en posesión que tenía Alemania, China y las pequeñas islas Marianas y Carolinas del océano pacífico suroccidental Ahora bien, esta guerra genero impactos positivos y negativos para el país. Primero, hubo importantes limitaciones para la importación de bienes finales y de capital requeridos para consolidar el proceso de industrialización iniciado varias décadas antes. Lo anterior se debió a que sus proveedores europeos estaban en guerra lo cual imposibilito las exportaciones de tales bienes hacia Japón. Sin embargo, la misma situación de guerra de estos países genero una alta demanda de los productos japoneses que, a pesar de su inferior calidad, sustituían a los productos europeos. De esta manera, Japón paso de tener déficit en balanza de pagos durante la era Meiji a tener un superávit en dicha balanza lo cual llevo a que el PIB creciera a tasas del 10% anual aunque igualmente el nivel de precios se duplicó. Así, el débil crecimiento de la inversión nacional fue compensado con los altos niveles de crecimiento de las exportaciones netas A sustitución de importaciones y, por supuesto, el alto crecimiento de las exportaciones causo un desplazamiento de la agricultura como sector primordial de la economía japonesa para dar paso al sector industrial. desplazamiento de la agricultura como sector primordial de la economía japonesa para dar paso al sector industrial. Este crecimiento en la industria movilizo grandes cantidades de población desde el campo hacia las ciudades incentivando un aumento importante del tamaño del mercado interno. La segunda guerra mundial La industrialización moderna comenzó a impulsar a la economía japonesa a partir de la última década del siglo XIX y, desde ese periodo hasta el surgimiento de la II Guerra Mundial, Japón se aproximó a las economías más desarrolladas del mundo, Así, disminuyó el empleo agrícola; se presentaron altas tasas de migración desde el campo a la ciudad, las cuales habían impulsado el aumento de la tasa de urbanización La segunda guerra mundial le produjo a Japón pérdidas muy importantes del territorio apropiado militarmente en el pasado. Su capacidad productiva sufrió un descenso muy importante en todas sus industrias. Para 1945 la producción de la industria no se acercaba al 30% de la producción del año 1935 p. 145). Con respecto a la población, Japón perdió cerca de tres millones de personas y tuvo que repatriar aproximadamente a 6 millones de soldados a pesar de que dos terceras partes del stock de maquinaria del país sobrevivió a los bombardeos de los aliados, las fábricas y los ferrocarriles no operaban por falta de energía y materias primas por lo que se afirma que la fuerte disminución en la producción no se debió tanto a la falta de capacidad como si a la falta de recursos energéticos y materias primas Ahora bien, después de la derrota en la II guerra mundial todo el proceso de reconstrucción de la economía tuvo el acompañamiento del Mando Supremo de las Fuerzas Aliadas, en este sentido, el principal propósito de las fuerzas norteamericanas fue democratizar el sistema político y descentralizar la economía con tres grandes reformas: Abolición de los grupos empresariales Zaibatsu: Para Estados Unidos tanto los grandes grupos empresariales como las grandes empresas comerciales eran los culpables del militarismo por su influencia y, por lo tanto, los veía como un obstáculo a la democratización del país. Así, los Zaibatsu fueron desarticulados y se establecieron empresas independientes lo cual condujo a una mayor competencia en la economía. Luego del retiro de Estados Unidos del territorio japonés en 1952, los antiguos Zaibatsu empezaron a asociarse de nuevo pero bajo una forma menos rígida denominada Keiretsu, la cual, sin embargo, no llego a tener el poder alcanzado antes de la guerra . Reformas laborales: las nuevas leyes sindicales determinaban el derecho de organización sindical, el derecho de huelga y la participación en la negociación colectiva, así como condiciones laborales mínimas. Reforma de la tierra cultivable: se prohibió la tenencia de tierras si el propietario no estaba presente en ellas utilizándolas. De este modo, se expropiaron grandes extensiones de tierra que luego fueron vendidas a sus arrendatarios por precios bajos, lo que llevó a un aumento de la población de agricultores propietarios de tierras. Este aumento del número de minifundios condujo a que la productividad de las explotaciones agrícolas disminuyera. Ahora, para atacar la inflación y estabilizar a la economía japonesa, el gobierno de Estados Unidos envió a Tokio al presidente del Banco de Detroit, J. Dodge, quien llevo a cabo una serie de políticas económicas estabilizadoras. Tres fueron las medidas más importantes: i) la anulación de los subsidios y préstamos concedidos por el gobierno a las empresas; ii) la unificación del tipo de cambio del yen con respecto al dólar y, iii) un nuevo sistema impositivo basado, principalmente, en los impuestos directos (renta y sociedades). El modelo de capitalismo y la gestión empresarial en Japón El modelo económico japonés desarrollado a lo largo del siglo veinte tiene cuatro componentes: El protagonismo de grandes conglomerados empresariales de carácter multisectorial La integración organizativa de la mano de obra que trabaja para tales conglomerados El dualismo en la estructura empresarial y los mercados laborales Un estado intervencionista que estaba a la búsqueda de externalidades para proporcionar a la economía privada Se privilegiaba una toma de decisiones colectiva en el día a día de la empresa, de tal modo que no sólo los directivos o los gestores, sino también los trabajadores manuales, estaban integrados en una estrategia de identificación común de problemas y soluciones. El objetivo central de dicha regulación fue garantizar que los grandes grupos empresariales tuvieran el acceso a grandes cantidades recursos de capital con costos bajos, para lograr las inversiones productivas necesarias en diversos sectores de penetración en mercados internacionales Se plantea que el entorno mundial que se da entre 1945 y 1970, le da un impulso a la economía japonesa sin precedentes en país alguno en el mundo lo cual, unido a los factores endógenos madurados a lo largo de más de trescientos años, lograron llevar a la economía del Japón a la cumbre, en lo que en la literatura se ha conocido como el milagro económico japonés.