HIPÓTESIS Los criminalistas de campo, policías primeros respondientes, policías de investigación así como agentes del ministerio público cuentan con la suficiente capacitación y experiencia en torno al manejo de indicios, evidencias y pruebas de origen balístico. Así como la aplicación del sistema de gestión de calidad y la norma ISO/IEC/17020 mismos que se encargan de prevenir la producción de errores y omisiones anteriores a la recepción del material balístico en el laboratorio de balística forense. En su mayoría los errores y omisiones son cometidos por causa de la falta o la insuficiente capacitación en el área de criminalística de campo en relación a la recolección, embalaje, documentación y entrega/traslado al laboratorio por parte de peritos criminalistas, policías primeros respondientes y policías de investigación. En cuanto a la relación de los ministerios públicos estos pueden proporcionar un oficio de petición con datos erróneos. Los criminalistas de campo, policías primeros respondientes y de investigación, según sea el caso no cuentan con los materiales adecuados para realizar el embalaje de los indicios balísticos como lo son: armas de fuego en todos sus tipos, cargadores, cartuchos en todas sus formas y calibres, casquillos y balas. Por lo que se ven obligados a realizar el procedimiento de embalaje en contenedores no aptos, mismos que pueden conducir a la pérdida o daño del material probatorio y por lo tanto perderán su calidad de prueba. La técnica utilizada por peritos criminalistas, policías primeros respondientes o policías de investigación no es la adecuada o se encuentra anticuada, ya que cada agente maneja una metodología distinta al momento de localizar, recolectar, embalar, fijar y documentar un indicio, por lo que lo anterior complicaría el trabajo del siguiente eslabón de la cadena de custodia, esto como consecuencia conducirá a errores que pueden provocar malos entendidos o resultados distintos a los esperados. Los agentes del ministerio público a cargo de la investigación que se realiza y donde posiblemente se llevó a cabo el uso de elementos balísticos para la comisión de un hecho probablemente delictuoso, mismos que al disponer de los indicios anteriormente mencionados desconocen o plantean objetos erróneos al laboratorio de balística para su posterior análisis. Siendo esto consecuencia de la falta de capacitación o desconocimiento acerca de la balística forense que los mismos poseen. Con el paso de los años, el mercado de las armas de fuego y demás elementos balísticos (cargadores, cartuchos, balas y casquillos) se encuentran en constante cambio y actualización, mismos que pueden dificultar la tarea de los encargados de procesar un indicio de esta naturaleza ya que son desconocidos por un agente no especializado en balística forense más precisamente en la asignatura de la mecánica de armas de fuego. En relación al punto anterior existen ciertos modelos de armas de fuego que cuentan completamente con las mismas características exteriores, pero mecánica e internamente son completamente distintas en cuanto a funcionamiento. Esto puede provocar que el personal encargado de recolectar dicho indicio confunda piezas y mecanismos vitales de arma de fuego, como lo son: disparador, seguros, selector de disparo, liberador del carro corredera, seguro del carro corredera, martillo y liberador del cargador. Por lo consecuente la posibilidad de que se cometa un accidente se eleva considerablemente. Las condiciones geográficas, de seguridad y meteorológicas que predominan dentro de un lugar de intervención en los casos aplicables según sea el caso, tanto peritos, policías primeros respondientes y policías de investigación provocaran que los anteriormente nombrados realicen una recolección, embalaje y/o documentación de los indicios de origen balístico de forma incorrecta. Luego de la comisión de un hecho violento algunas armas de fuego (principalmente) son dañadas y a raíz de esto se eleva considerablemente la posibilidad de un accidente, por lo que el perito, policía primer respondiente o de investigación se ven tozados a omitir pasos importantes de la metodología de la investigación criminalística y debido a esto cometerá errores y omisiones a consecuencia de riesgo que puede representar el manejo de indicios de esta índole. En el momento en que se reciben los indicios en las instalaciones del laboratorio de balística forense para su análisis e identificación, estos pueden presentar desde un mal embalaje, descripción errónea hasta un oficio de petición que presenta errores de redacción. Todo esto puede llevar a retrasos por parte de los peritos especialistas en balística forense, datos que son vitales para el desarrollo de una investigación en las instalaciones del laboratorio. La aplicación de la norma ISO/IEC/17020 así como del sistema de gestión de calidad, el cual consiste en aplicar políticas, procedimientos y/o procesos operativos que se plasmaran en hojas de trabajo la suficiente evidencia para que se plasme de manera similar la información dentro de un dictamen e informe. Estas acciones tienen como fin asegurar la calidad y la satisfacción del cliente. Al aplicar lo establecido en la norma ISO/IEC/17025 el dictamen pericial o informe tendrán la calidad al momento de la emisión de los mismos. Como resultado de estas acciones contara con el suficiente sustento al momento de ser expuesto como prueba durante el desarrollo de una audiencia de juicio oral. La aplicación del nuevo sistema de justicia penal en junio de 2008 y de la misma forma la creación e integración de nuestro país en la iniciativa Mérida, tratado de cooperación que consiste en un tratado de colaboración entre México y Estados Unidos De América con el propósito de combatir tanto al narcotráfico como al crimen organizado. Principalmente en el pilar dos de la iniciativa Mérida (mencionada anteriormente) el cual consiste en “institucionalizar la capacidad para mantener el estado de derecho” se encuentra como principal objetivo aumentar la capacidad de los órganos mexicanos encargados de la seguridad pública para mantener el estado de derecho. Dentro del mismo se fortalecerá la capacidad operativa con la aplicación de controles internos. Así como continuar con la capacitación de policía, reformar las penitenciarías e implementar la reforma al nuevo sistema de justicia penal. La reforma penal del 18 de junio de 2008 trajo consigo un nuevo sistema de justicia penal adeversarial con el fin de sustituir el antiguo sistema inquisitivo utilizado en México. A raíz de esto se busca aplicar la gestión de calidad en las fiscalías de la república y por consiguiente en los departamentos forenses, mismos donde se encuentra incluida la balística forense. El proceso penal requiere estudios técnicos y científicos, especialmente en las situaciones donde se involucran armas de fuego. Mismos que requieren la participación de un perito en balística forense por la necesidad de estudiar todos los fenómenos que intervienen en la comisión de los delitos de esta índole para que posteriormente se revele el valor de estas como prueba. La norma ISO/IEC/17025 proporciona los requisitos necesarios que deben cumplir los laboratorios de ensayo y calibración facilitando la armonización de criterios de calidad. El objetivo principal de esta norma es garantizar la competencia técnica y la fiabilidad de los resultados analítico. La aplicación de esta norma favorece la creación de requisitos, mismos que son empleados como herramientas de difusión de un conocimiento colectivo, que facilitaran la integración del personal, proporciona flexibilidad de adaptación a cambios del entorno. Estos requisitos permiten detectar problemas para su solución anticipada.