e. g. v. LA RADIODIFUSIÓN SUMARIO ¿QUÉ ES LA RADIO? LA RADIO TIENE SU LENGUAJE LA RADIODIFUSIÓN: CONCEPTO DE “RADIO” LA RADIODIFUSIÓN HOY LA RADIO EN ESPAÑA 1 e. g. v. ¿QUÉ ES LA RADIO? La radio es el medio de comunicación y expresión plural (público, colectivo o de masas) más importante en situaciones de emergencia. En caso de catástrofes, como terremotos e inundaciones, en tesituras tan dispares como una guerra o un apagón generalizado de una ciudad, la radio sirve para informar de la situación, mantener la alerta y difundir normas e instrucciones necesarias para la población. Aunque sólo fuera por este motivo, valdría la penar tomar en consideración la radio. Se ha dicho que la radio es un medio que utiliza elementos expresivos ya existentes en otros medios y que sus contenidos no revisten especificidad: que la noticia, por ejemplo, puede ser escrita o hablada, pero no deja de ser información lineal y periodística; que el concierto radiado no es más que la multiplicación de la audiencia potencial de una orquesta merced a la radiofonía; que el radiograma es fruto de la adaptación de un género propio de la literatura … Se concede en suma, a la radio la consideración de medio de expresión vicario. Esta calificación es injusta. La radio no es ni más ni menos vicaria que cualquier otro sistema colectivo de comunicación y expresión. Todos y cada uno de ellos toman de lo anterior los contenidos y fórmulas expresivas, los transforma o enriquece y origina a su vez técnicas, códigos, fórmulas y géneros nuevos o distintos. Los avances tecnológicos han motivado que los medios no equivalgan ya a sus nombres originales. Prensa, Radio y Televisión son ya nombres simbólicos. Cualquiera de los medios de comunicación social es el resultado de un cúmulo de elementos técnicos y creativos heterogéneos, heterocrónicos y en su mayor parte inespecíficos: no han sido creados para ser prensa o para ser radio o televisión. El descubrimiento científico de la posibilidad de transmitir sonidos a través de ondas electromagnéticas, la posibilidad de captarlas a gran distancia en buenas condiciones acústicas, no fue motivado con el propósito de inventar la radio. El medio radio se fue conformado a partir del aprovechamiento de ese sistema de transmisión, canalizando a través del mismo mensajes sonoros progresivamente complejos, dotándolo de medios complementarios o potenciadores que a su vez daban pistas para nuevas utilizaciones, aportando métodos más o menos originales de captación y reproducción del sonido, e incorporando paulatinamente contenidos creativos. 2 e. g. v. LA RADIO TIENE SU LENGUAJE La radio tiene su propio lenguaje. Al menos, tiene un sistema de códigos compartido (códigos conceptuales y códigos físicos –sonoros-), pero moldeado y presentado de modo peculiar hasta el punto de constituir un sistema distinto de los ya existentes. Comparte, por ejemplo, la utilización de la palabra hablada con el teléfono o el cine sonoro, difunde la música como el tocadiscos o el hilo musical, cuenta una historia dramatizada como el teatro, relata los detalles de un suceso como el periódico, llega simultáneamente a lugares muy dispersos y distantes como la televisión …, pero es diferente del tocadiscos, el teléfono, el teatro, el periódico o la televisión. Su lenguaje puede coincidir o no con el de los demás canales, sistemas o medios, pero no pierde por ello su identidad. El lenguaje de la radio es el conjunto de elementos sonoros que se difunden para producir estímulos sensoriales estéticos o intelectuales o, “para crear imágenes”. Otro tópico al uso sobre la radio es que su instantaneidad tiene como contrapartida la fugacidad. La instantaneidad no es patrimonio exclusivo de este medio. En cuanto a la fugacidad, el mensaje radiofónico –en el momento de la recepción- es tan fugaz como la imagen del cine o de la televisión. En todos estos casos –y con mayor facilidad y economía en la radio- se puede repetir el mensaje a lo largo del tiempo, registrar y conservar y, por lo tanto, reproducir cuantas veces se desee. La información de la radio tiene, por otra parte, el valor añadido de la palabra como se produce, la prueba real de la voz de los protagonistas o los testigos. Rechazamos también enérgicamente la opinión de quienes acusan a la radio de ser culturalmente pobre, cuando no de entontecer a las masas. En primer lugar: la radio no tiene la misión de culturizar a la humanidad. Esa es una de sus posibilidades o de sus funciones más ricas, pero que comparte (subsidiariamente o no) con otras instituciones sociales. En segundo lugar, la radio ha desempeñado, y desempeña todavía hoy, una labor pedagógica y divulgativa de proporciones gigantescas. Si no cualitativa al menos cuantitativamente mayor que ningún otro medio de difusión masivo. 3 e. g. v. LA RADIODIFUSIÓN: CONCEPTO DE “RADIO” La palabra RADIODIFUSIÓN. RADIO es apócope de dos términos parónimos: RADIOFONÍA y Radiofonía es la parte de la Física que estudia los fenómenos de producción del sonido por la energía radiante. Es, pues, un concepto de carácter científico que se refiere más a la realidad física del sonido y las ondas que a la comunicación. No obstante, algunos derivados de este término (tales como radiofónico, radiofonismo y radiofonista) se aplican a aspectos de la comunicación radiada. Radiodifusión es el sistema de transmisión y comunicación por medio de la radiofonía. La radiodifusión se refiere, por tanto, a la difusión pública de mensajes sonoros mediante ondas electromagnéticas y es un concepto más amplio que el de radiofonía. Cuando se habla de radio se hace referencia a una parte o al total de la radiodifusión. Desde la perspectiva de la Teoría de la comunicación, la radio es uno de los medios de difusión pública (corrientemente conocidos por la expresión inglesa “mass media” o “medio de masas”). Emisor, receptor y canal (medio, vehículo o instrumento) son los elementos comunes a toda definición del concepto de comunicación. Para que la comunicación sea de masas (o colectiva, por utilizar un término que nos parece más preciso), requiere una condición: la difusión múltiple. Atendiendo a dos factores, la radio puede definirse como un medio de comunicación ambivalente (unidireccional y bidireccional –en el sentido de la posibilidad de respuesta-), instrumental (requiere elementos técnicos), a distancia (a diferencia de la comunicación personal cara a cara), o colectiva (múltiples emisores y receptores simultáneos, a diferencia, por ejemplo del teléfono), directa (de recepción inmediata: no confundir aquí el término “directo” como contrapuesto a “diferido” en el momento de la emisión, sino de su captación por la audiencia), reciente (a diferencia de los mensajes grabado en la piedra, o de los libros), que utiliza como vehículo físico primario exclusivamente el sonido (a diferencia de la televisión), y efímera (raramente se vuelve al mensaje). 4 e. g. v. LA RADIODIFUSIÓN HOY Hoy está al alcance de muchos la autoproducción de contenidos comunicables, tanto gráficos como audiovisuales. Simultáneamente se multiplican los canales y las fuentes de emisión, particulares y colectivas. En vez de que unos pocos mensajes vayan destinados a gran número de receptores, infinitos mensajes se distribuyen ahora a través de los nuevos medios de comunicación a grupos más reducidos y notablemente diferenciados. Por otra parte, ya no está tan clara la división entre emisores y receptores. Existe no sólo un intercambio en la comunicación, sino también una interacción creciente y de modo más claro en los medios audiovisuales. Mediada la década de los ochenta, la radio era el medio de comunicación social más extendido del mundo. Consideremos que casi dos terceras partes de los habitantes del planeta, lo que se ha dado en llamar Tercer Mundo, tienen muy difícil el acceso a la prensa y a la televisión. A la primera, por el analfabetismo; a ambas, por razones técnicas y económicas: los canales de distribución son escasos e incompletos. La radio, en cambio, es un medio tecnológicamente barato. Y la incorporación de los transistores a los aparatos de recepción los hizo más simples, cómodos, versátiles y económicos. La industria radiofónica está marcada por el desarrollo tecnológico, en la actualidad la radio está en el umbral de su segunda gran revolución después de que la aparición de los transistores y de la FM sea ya historia pasada. La llegada de los sistemas multimedia, el avance de la informática y la adaptación de los nuevos mercados publicitarios a los hábitos de los oyentes nos abren un nuevo panorama para ese viejo medio que en sus inicios fue denominado Telefonía Sin Hilos (TSH). La radio necesita hoy en día un revulsivo que le va a venir dado por la digitalización; digitalización que ya se ha convertido en realidad en los procesos radiofónicos no relacionados con la recepción del sonido, es decir en el campo de la producción radiofónica. Y es esa digitalización la que irá transformando el medio radio en un medio multimedia, haciéndose más visual y gráfico, y quedándose cada vez más conformado en los campos de la música y de la información. Hasta ahora la radio ha sido sólo audio, con la digitalización, nos aparece con valores añadidos, que nos trae imágenes, mapas y otros gráficos sobre pequeñas pantallas. 5 e. g. v. LA RADIO EN ESPAÑA El factor específico de nuestro país que ha contribuido al gran impulso radiofónico, es la sucesión de acontecimientos socio-políticos que han creado situaciones de tensión, de expectación y de incertidumbre. Y está claro que el único antídoto contra las incertidumbres y el temor a lo desconocido es una información veraz. Con yerros de mayor o menor envergadura, la radio ha venido siendo en esta cadena de acontecimientos el eslabón que se necesita en los momentos vitales para evitar los rumores infundados, los ríos revueltos y las histerias colectivas. Porque han tenido al tanto a la opinión pública de las cosas sorprendentes que han ocurrido en España (trágicas unas, grotescas otras), desde el lugar en que estaban ocurriendo y de manera inmediata. 6