100 HISTORIAS DE LINAJE DE GRANICEROS DEL POPOCATÉPETL E IZI'ACCtHUATL Moisés Vega Mendoza •)ed:cator:as: 0.s, -le+ ./,./ .f.!:¿hnaJgJ'. c/e; ~ ;?.ac~w . .. /.i"'~I"'.P/ //o??/ ;ncl/c . . . . ,. #o.f'.r/ _) . u~-.t 2:Z . 03 _l)6 ~....... p.,_, c.-o~poJ...,..; ·~ . . . . ~ ~ -+'-V -4 .- ~ ..., .:Jc...:~-~ .. ~~ ¿. &-:,.1"",:n....;"' J '-.,J:"T--b,..,._ ~ \o:a.....r~· .............., ~· "l)';....., lwo.v¡ : ... .,~..o...J1o<-:, ~.J-- . .:-.~ ....J...4. ~ GZI\/.4¡...( ((->~'-'~_;) .A~ _.l .. :..~ "\A. S • ~.._.,., .L...d.. J..,_ e.- V\. eo.. V'" v-ve. 'K.o..-~~~ 4~"""- -- ....,.-o_ .. Q -lo""'-"" \.{...v-o_..,, llo ~o #t:iu. ~ - ~"'" ~;v,-; &rn·d _..¿ T-' ..,-;:u ,¿__ _.¿.,r ~ ~~ ~~~~~a--_;: --;7;',4 ::t_ooG: . dt ~ ' ~~-/:.:;:::;:-ft-·?ffL~~r / ./? b-odvc-lor; Va a~¿:. CCl$fro . G7ve Á.:z - ~¡//errnt> ,4/dana /ol"rtU ZJ)J-cove-rc:¡ <::;han,-;~ y ·IJ G<A~ o -~ ~ v-"tb ~a 4? rn e-r-ece-v, vi dr;::::._ ~....::. - -t'o r;ve -/ie-ue gve e/ ~~ - ./4-.t e¡ l"c:v<Y~ por f7t¡_ ,JcfaA""no..s c::z ré/vc:;/ac/&?na> -e<Jr~ ¿16/ la.d'a.s- I'V> <./ "7 ,/o ~ ~a/r;rnonro c;-6 ~ / ./?t:7S éO•'TSOV var hv~a-vj~. ;z~ on~ hace ~;c-i·ercf"--; 100 HISTORIAS DE LINAJE DE GRANICEROS DEL POPOCATÉPETL E IZI'ACC!HUATL Moisés Vega Mendoza Amecameca MMIX 100 historias de linaje de graniceros del Popocatépetl e Iztaccíhuatl DR © Moisés Vega Mendoza ISBN: 978-607-00-1125-2 Diseño de portada e interiores Ismael Arturo Montero García Fotografía de portada y cuarta de forros Ismael Arturo Montero García Corrección Osear R. Lara R. Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño de tapa, puede ser reproducida, almacenada, transmitida o utilizada de manera alguna ni por ningún medio, ya sea electrónico, químico, óptico de grabación o electrográfico sin el previo permiso por escrito de su autor. Impreso en México / Printed in Mexico Escudo de Armas del Casicasgo de Panoaya Amecameca 1534 PAEZ DE MENDOZA t A los tlautlazquiz* Aniceto Córdoba Páez, y Juan Macario Mendoza, hijos de esta tierra con linaje * Tlautlazquiz, dícese del que modifica el clima ÍNDICE Presentación XI Prólogo XIII Estudio introductorio XV l. El poder de la transmutación 3 2:¿ Qué es un nagual? 3 3. El tlamatini 3 4. Naualli 4 5. Tlacatecolotl 4 6. Tlalhuelpochi 5 7. Tecotzquani 5 8. Teiyolloquani 5 9. Moctezuma Xocoyotzin 6 10. Ticitl 7 11. El tetla cuicuilique o tetlacuicuiliani 7 12. Teciuhtlazqui, tlauhtlazqui 8 13. Geografia Sagrada 12 14. La familia de don Cheto y don Juan Muñeco __ 13 15. Cédula real 15 16. Don Cheto, granicero de Amecameca 18 17. Cómo se inició don Cheto como tiempero 19 18. Don Cheto y las brujas 20 19. Don Cheto se ha enfrentado a dos sequías 22 20. Cómo espanta a las culebras (de agua) 23 23 21. Los templos a los que va don Cheto 23 22. El rayo de luz ilumina a don Cheto 23. El espíritu del balconcillo 24 24. Don Cheto, La Luna, El Sol, El Comportamiento de Animales, El Tiempo y Utensilios de que depende el Granicero. 25 25. ¿A cuántos ha iniciado don Cheto? 28 26. Cómo se recibió don Moy 29 30 27. A Gumersindo sí le pegó la centella 28. Virginia nomás es cocinera 30 29 . Doña Olivia 31 30. En Alcalica, el guajolote 31 31. Las cruces son niñas y les gusta el baile 32 32. Doña Cleotilde 32 33. Pilar Evangelista, la tomaba el remolino 33 34. El templo de Tezahua 33 34 35. El templo de Tlalquitelulco 36. Guadalupe Guzmán 34 3 7. Rezando y can tando 36 38. Virginia Castillo, hija de don Cheto 38 41 39. Cada templo tiene su gusto de comer 40. Vamos el día primero 43 41. El tiempero don Lucio de Nepopoalco 45 42. Alcalica es un templo castigador 46 48 43 . La gente de doña Cleotilde, la tiempera 44. Xochihuacihuatl 50 45. Levantar la sombra 50 46 . Felipe Parrilla Ramos, le pegó el rayo 51 4 7. Las biólogas están equivocadas 51 48. El triángulo amoroso 52 53 49. Don Cheto era boyero 50. Presentación de Juan Galicia 54 55 51. Juan dice que él encontró Tepequiztemia 56 52. Pedro, hijo de don Cheto 53. Los nombres de la Iztaccíhuatl y el Popocatépetl 58 54. Pedro, como curandero 58 55. Pedro, como exorcista 59 56. Pedro y sus viajes en sueños 60 57. Pedro habla sobre sus mayores 62 58. Cada cueva puntos cardinales 63 59. Tlaquechpa 64 60. Tlalpanzinco 65 61. El Provincial 66 62. La menstruación dentro de la cueva 67 63. Juan Muñeco, de Nexapa 68 64. Yo soy el que los tengo que mandar 71 65. Tengo mi rezandero 72 66. Yo les hablo a los de arriba 72 67. Cada quien le van dando su cargo 73 68. Las gallinas y aves empleadas en curaciones __ 73 74 69. Cómo curar con huevo agüerado 70. Cómo limpiar con huevo de pato 75 76 71. Un templo olvidado, Pepe Cruz 76 72: De cómo doña Silvestra se hizo tiempera 73. Los nuevos rayados 77 79 74. De cómo le pasó el poder a Juan Muñeco 80 75. El Popocatépetl 75. La Iztaccíhuatl 81 82 76. Las curaciones y los sueños 77. El pueblo y los tiemperos 82 78. Algunos tiemperos cobran 83 84 79. De cómo es el regimiento de los volcanes 80. Algunos de mis sentimientos como tiempero __ 85 81. La historia de cómo se recibió Juan Muñeco 85 86 82. El que mandaba en Alcalica 83. Benito Velásquez Martínez _ _ _ _ _ _ _ _ 86 84. Ella adivinaba comiendo hongos 88 85. Templos tlatatonis 88 86. San Pedro Nexapa reconoce a Juan Muñeco __ 91 87. Otros lugares piden lluvia 92 88. Ángela López Remigios, la Chomi _ _ _ _ _ 94 89. Melecio Palacios Castro 96 90. La Chomi informa la muerte de su esposo 99 91. La Chomi dice a quién le va a dejar su cargo__ 99 92. La Chomi dice... 99 93. Leyenda de Juan Muñeco _ _ _ _ _ _ _ _ 10 1 94. ¿Quién soltó a los burros? 102 95. Lo vio volar y sin gorro 102 103 96. El bueno y el malo 97. El arcoíris me curo mi enfermedad 103 98. Cuando me dio un mal aire 104 99. Le pidió de comer 105 100. Bomberos sorprendidos 106 PRESENTACIÓN Cuando un antropólogo escribe sobre los contenidos culturales de un pueblo, trata de reproducir esos contenidos realizando una descripción de los hechos observables, su interpretación es la de un agente externo que intenta explicar una realidad. Pero, ¿qué sucede cuando es el propio protagonista de esa cultura el que publica sobre sus tradiciones y costumbres? Sucede que tenemos que leer a ese protagonista, porque resulta relevante entender la tradición tal y como esa comunidad se explica a sí misma. Es por eso que esta entrega de Moisés Vega Mendoza nos interesa, porque lejos de las teorías e interpretaciones de las ciencias sociales, encontramos un texto que apunta a la identidad, la tradición, y sobre todo a la salvaguarda de una tradición amenazada por la modernidad. Por otra parte, resulta notable el hecho, de que este libro ha sido sufragado por el autor, quien se esfuerza y arriesga para ser escuchado. Este es el mérito de quien tiene la necesidad de manifestarse y logra construir sus propios espacios. En esta intención cuenta con el apoyo de las autoridades municipales de Amecameca, con quienes comparte su entusiasmo por la cultura, proveyéndolo el municipio de sello editorial para este libro, de igual manera ciudadanos altruistas como Ernesto Maurer Barbier, ha prestado atención a sus iniciativas incluyéndolo dentro del Museo Internacional de los Volcanes en la Hacienda de Panoaya. Con estos ejemplos de solidaridad, sólo nos resta, a los que dedicamos nuestra profesión al estudio de las manifestaciones culturales en las montañas, expresar nuestro reconocimiento por los XI esfuerzos colectivos por conservar el patrimonio cultural y natural de nuestros emblemáticos volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl. Dr. Ismael Arturo Montero García !pan tepeme ihuan oztome XII PRÓLOGO Cuando fue mi iniciación como granicero, en el ritual me coronaron con mi escoba, mi cruz, jícara roja, sahumadores. Después de la ceremonia me dijeron que era un tlatatoni. Yo les pregunté qué significaba ese nombre y me dijeron que se refiere a un levantador de sombra. Si fue verdad o fue mentira ... , pero a partir de ese momento todo se abrió en doble puerta para la cultura de los abuelos de la región de los volcanes (tlautlazquiz) graniceros. Mi tío Juan Muñeco t me dijo que yo iba a ser su voz a la tradición de los pedidores de la lluvia, de la tradición cultural. Así cuenta Moisés Vega Mendoza el inicio de un interminable esfuerzo por compilar primero y difundir, después y hasta la fecha, la legendaria tradición cultural de los pedidores de la lluvia, a quienes él mismo pertenece. Preguntando y platicando, dando conferencias y escribiendo, llevando a los medios de comunicación y a las instituciones culturales a la región de los volcanes, Moisés se ha dedicado a ser un levantador de sombras, un tlatatoni, a ser la voz de aquellos quienes durante siglos han permanecido silenciosos, pero no callados, conservando una riqueza cultural enorme que vincula a los seres humanos con la naturaleza misma a través de los volcanes sagrados del Valle de México. Este libro es muestra de la inquietud del autor por soplar hacia los cuatro puntos cardinales el conocimiento ancestral transmitido oralmente de generación en generación. A manera de tlacualera el libro es un itacate de historias sobre los hombres y las mujeres cuyas almas están unidas con la energía de las montañas, de sus volcanes y de sus meves, y XIII especialmente con el agua, con la centella, con la lluvia. El lector encontrará en estas páginas un aguacero de sorpresas, de historias contadas por el autor y por sus protagonistas con sus propias voces, con sus propias almas, itacate de alimento espiritual para satisfacer a quien curioso se quiera acercar a las entrañas mismas de las montañas, del origen de nuestra gente. Osear R. Lara R. XIV ESTUDIO INTRODUCTORIO ... el relato se burla de la buena y de la mala literatura: internacional, trans histórico, transcultural, el relato está allí, como la vida. [Barthes, 1966:3] El lector encontrara en este libro una serie de relatos que en diferentes épocas y por diferentes personas han sido narrados a nuestro compilador Moisés Vega Mendoza, granicero y descendiente directo de un antiguo linaje de Amecameca, como él asegura. Las 100 historias que se recopilan en estas páginas, son la puerta de entrada a un mundo de conocimiento y sabiduría ancestral, que en pleno siglo XXI resiste y se adapta a las carencias, pero también a las necesidades de una sociedad cambiante, por ello, nos encontramos ante un documento trascendental ya no sólo para un linaje de graniceros, sino para la historia cultural y social de toda una comunidad. Este libro expresa el interés por difundir y conservar la tradición que surge desde una comunidad. El trabajo, que ha tenido a bien compartir Moisés Vega Mendoza, y que ahora presentamos, narra las historias de un par de linajes de graniceros, pero sabemos que existen más historias de otras congregaciones de graniceros por todo el Altiplano central, esperando a ser contadas por las misma personas que bajan de la montaña y que invocan a la lluvia. Historias, que gustosos esperaremos. XV Efectivamente, en esta ocasión, son las propias voces de los temporaleros, de los tlautlazquiz las que son plasmadas en letras por uno de ellos: don Moy. Son ellos los que nos explican por qué "Las biólogas están equivocadas", "Cómo curar con huevo agüerado" o que "Las cruces son niñas y les gusta mucho el baile". En otras palabras, al provenir de los mismos actores, este singular trabajo, nos demuestra, de primera mano, la vigencia que tiene el culto a la montaña en diferentes regiones del estado de México y Amecameca en particular, nos recorre un poco la cortina de los secretos escondidos en la montaña, sus categorías, simbolismos y anécdotas que sólo podrían ser contadas por los mismos especialistas rituales, quienes nos explican con una narrativa amena y particular, su forma de entender el mundo. Ejemplar es el apartado titulado "Moctezuma Xocoyotzin" donde lejos de hacer un análisis de las fuentes, el autor nos muestra el impacto que cierto tipo de documentos históricos han tenido en el imaginario colectivo y cómo es que estos se interpretan y difunden a través de la historia oral de la colectividad. Otro ejemplo que da cuenta del manejo de los textos, y del interés que han despertado cierto tipo de investigaciones, ya sea porque el individuo identifique conceptos que maneja en su comunidad o bien por un interés intelectual, queda plasmado en las historias identificadas con los números 3 a 12, en donde el autor hace citas, en repetidas ocasiones, el estupendo trabajo que realiza Mercedes de la Garza en su libro titulado "Sueño y alucinación en el mundo náhuatl y maya". Queda por demás mencionar que los relatos que halláremos en estas páginas, sobrepasan la lógica de las "historias de vida", pues encontráremos, en la mayoría de los casos, sucesos mágicos y relatos · extraordinarios que parecieran haber salido de una novela fantástica, y que sin embargo, suceden en la cotidianidad de la vida de los pueblos circundantes a XVI los grandes colosos volcánicos del Altiplano central mexicano, es lo "real maravilloso" que encontramos cuando leemos que a "Pilar Evangelista de Gómez, la tomaba el remolino", es el pensamiento mágico y la cosmov1s1on característica de las sociedades mesoamericanas que se hace presente en cada línea de estas 100 historias de graniceros. Siguiendo esta misma lógica en la lectura, encontraremos que existe entre los temporaleros una forma de conocimiento que ha logrado, durante siglos, entender y conocer los fenómenos naturales a los que este tipo de sociedades agrícolas están expuestas, y de los que en gran medida, depende su subsistencia, lo que explica, de manera muy general la pervivencia de estas prácticas y el recelo con que cuidan y manejan las formas rituales tal como se muestra en el apartado titulado "Cómo espanta a. las culebras" que es el granizo, o en el que se titula "En Alcalica, el guajolote" donde don Cheto (Aniceto Córdova Páez), nos explica que lo primero es "la obligación", la ofrenda, estos son sólo dos de los muchos pasajes que hacen alusión a la importancia de mantener la tradición, de hacer el trabajo. Moisés Vega Mendoza, toca temas tan importantes en este libro como los deberes de los graniceros, los parteros o curanderos, habla de las obligaciones y de los mayores, de los rezanderos, de los que han sido tocados por la centella y de los que llevan por herencia la tradición. Así es, los graniceros, o trabajadores del tiempo, no son simples curanderos ni brujos. Son personas que guardan un conocimiento ancestral y que se saben dueños de esta tradición. Son intelectuales en su entorno y ofrecen sus servicios a favor de la comunidad. Como podrá notar el lector a lo largo de estas páginas, ellos integran y organizan a partir de su cosmovisión un todo ritual, es decir, manejan magistralmente los elementos necesarios para que, XVII desde su estructura simbólica, la lluvia venga, maneJan como nadie más podría hacerlo, las herramientas para alejar el granizo, saben perfectamente cuando usar un huevo de gallina o cuando uno de pato, saben hablarle a la montaña, leer la Luna y bailar a "los toritos", tienen el conocimiento pleno de qué ofrendar en cada cueva y del carácter de los que las habitan, se manejan en un mundo onírico y en un Tiempo sagrado donde por defmición pueden entrar en contacto con los "viejos" es decir, con los antiguos graniceros ya fallecidos, así como con el resto de seres espirituales que habitan la montaña. Todo ello articula y estructura una forma de pensamiento y de aproximación a los fenómenos de la naturaleza e incluso sociales que quedan plasmados, un poco de manera aislada, en cada una de las hojas de este libro. El lector debe saber que el trabajo que prescribe Moisés Vega Mendoza no cuenta con una metodología, ni secuencia que parezca clara a primera vista: en algunos casos, el titulo impuesto por el autor a diversos pasajes parece no guarda relación con su contenido, las historias corren de un narrador pasivo a uno activo y muchas veces nos hallaremos perdidos entre las voces de los actores. Sin embargo, lo que es verdaderamente transcendental en esta obra es su contenido, independiente de su forma, pues los relatos aquí compilados, guardan en sí mismos una riqueza y una importancia cultural que puede interesar al estudioso de lo social como a los lectores no especializados. No obstante, el lector requerirá de cierta perspicacia a la hora de hacer la lectura de estas voces, pues a lo largo del texto nos encontraremos con la palabra florida, con la palabra de la tierra, nos encontraremos inmersos en "decires" y metáforas, nos enfrentaremos a un lenguaje y escritura coloquial a la que quizá el lector no este acostumbrado. Sin embargo, le puedo garantizar que cada línea de estas ((1 00 historias de graniceros" XVIII esconde en su estructura la magia y los secretos de todo un linaje y de toda una forma de pensamiento mítico que es revelado ante nuestros ojos tras cada página. Para concluir, me parece necesario apuntar, que desde el 21 de diciembre de 1994, día en que quedo registrada una erupción volcánica de baja intensidad en el Popocatépetl, este ha venido sorprendiéndonos con su actividad. Desde ese día, los medios masivos de comunicación y la sociedad en general, voltearon su mirada a los volcanes, que han enmarcado, desde siempre, el paisaje del valle de México. Este fenómeno, para la antropología, ha traído beneficios: la producción académica y el interés por el culto a la montaña se ha incrementado, realizándose innumerables estudios etnográficos, investigaciones, documentales, y libros. El tema, es vasto, por fortuna, y gracias en parte, al fenómeno expuesto, contamos con una amplia bibliografia que se agrega al final de este apartado. No sin antes mencionar que los títulos que enunciaré son sólo una guía y muestra de la extensa producción que a lo largo de los años, los estudiosos del tema, han venido desarrollando. Karla Campos Escuela Nacional de Antropología e Historia, 2009. Bibliografia: Bonfil Batalla, G. 1968 «Los que trabajan con el tiempo)), en Anales de Antropología, Vol. 5, pp. 99-131. XIX Broda, J. y B. Albores (coord.). 1997 Graniceros, Cosmovisión y meteorología indígenas en Mesoamérica, editado por la UNAM y el Colegio Mexiquense, México, D. F. Broda, J., S. Iwaniszewski y A. Montero (coords.) 2007 La Montaña en el Paisaje Ritual, Editado por la UNAM, BUAP, CONACULTA, INAH . México, D. F. ·Chimalpain Cuauhtlehuanitzin, F. de San Antón Muñón. 1961 Relaciones originales de Chalco-Amaquemecan, editado por el FCE, México, D. F. Garza, Mercedes de la. 1990 Sueño y alucinación en el mundo náhuatl y maya, editado por el Centro de Estudios Mayas de la UNAM , México, D. F. Glockner, Julio. 1996 Los volcanes sagrados. Mitos y rituales en el Popocatépetl y la Iztaccíhuatl, Editorial Grijalbo, México, D. F. López Austin, Alfredo. 1967 «Cuarenta clases de magos del mundo náhuath, en Estudios de cultura náhuatl, Vol. 7, pp. 87-117. Loera, Margarita y Ramsés Hernández. 2008 El Hongo Sagrado del Popocatépetl, Editado por ENAH, INAH, CONACULTA. México, D. F. Montero García, I. Arturo. 2004 Atlas Arqueológico de la Alta Montaña Mexicana Editado por la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales. México, D. F. Séjumé, Laurette. 1983 Arqueología e historia en el valle de México. De Xochimilco a Amecameca, Editado por Siglo XXI Editores. México, D. F. XX l. El poder de la transmutación La transmutación es parte de un conocimiento que se guarda con celo y del cual aún se generan interesantes relatos en esta región de los volcanes. Desde que los pueblos aprendieron a expresar acontecimientos, se hicieron registros de seres humanos transformados en animales o protegidos por éstos. En casi todas las regiones de nuestro México existen leyendas o mitos que hablan de estos seres capaces de transformar su cuerpo o de establecer una relación vitalicia con protectores que adoptan forma de animal. 2:¿Qué es un nagual? Algunos grupos sacerdotales en la mayoría de las culturas prehispánicas mesoamericanas, se dedicaban a dar la más esmerada atención a los recintos y templos sagrados como en los que se encontraban suministros de agua. Estos sacerdotes realizaban prácticas de magia; existen referencias históricas que hablan de hechos inexplicables que , misioneros y religiosos por parte de la Iglesia católica, asociaron a lo profano. A pesar de la represión a que fueron sometidas estas prácticas, aún en la actualidad se pueden escuchar relatos que afirman la existencia de naguales. Existen diferentes especialistas en las capacidades de la transmutación y de la magia ancestral. 3. El tlamatini El tlamatini es el hombre sabio, ejemplar, posee los libros y es instructor y maestro, él conoce la región de los muertos, él es digno. Los poderes sobrenaturales de este hombre religioso consisten en su capacidad de penetrar el reino de los muertos, y se llama también así al divino tonalpouhque quien como dice el Códice Florentino, era un sabio dueño de los Libros de Agüeros. Por otra parte existía el tlamatini bueno y el malo. El bueno leía el signo, lo examinaba y daba el significado. El malo era engañador, burlador, falso profeta, hipócrita, escandaloso, confundía y engañaba a todos. 4. Naualli Naualli, así se llama al brujo que de noche espanta a los hombres y chupa a los niños. Es agudo y astuto, aprovecha y no daña. El que es maléfico y pestífero hace daño a los cuerpos con hechizos y saca de juicio y ahoga. Nagual era un término que se aplicaba a todo hombre sabio, protector de los demás y con poderes sobrenaturales, gracias los cuales se transformaba en diferentes animales o en fenómenos atmosféricos, a semejanza de las brujas europeas. Sin embargo, también existían el bueno y el mal naguales. Es posible que, gracias a esta identificación con los brujos, a los naguales se les haya llamado así hasta nuestros días, a la equiparación del nagual con el ser maligno del mundo europeo. Ellos quizá se hacían salir en un pavo, quizá en una comadreja, quizá en un perro, cualquier animal era resultado de su transfiguración. 5. Tlacatecolotl Tlacatecolotl significa Hombre búho, brujo malo, tiene pacto con el demonio, destruye a la gente, provoca enfermedades, se convierte en perro, pájaro, búho, lechuza. Cuando desea matar a alguien se sangra sobre él y cuando desea destruir bienes, los mira con fijeza, los toca con la mano y se sangra sobre ellos. 4 6. Tlalhuelpochi Las tlalhuelpochi son mujeres con poderes maléficos, tenían la facultad de desprenderse de sus piernas para causar daño y ponerse patas de guajolote y alas de petate para deambular por los aires y dedicarse a robar borregos o todo animal chico que pudiesen cargar volando y también se dedicaban a chupar de la mollera a niños recién nacidos. 7. Tecotzquani El tecotzquani es el Come pantorrillas, hechizaba a la gente por odio y se comían las pantorrillas. 8. Teiyolloquani El teiyolloquani es el Come corazones, también hechizaba por odio y se comía el corazón de la persona indicada. A todos estos sabios los describe Torquemada con una enorme capacidad de transformación en animales, así como la capacidad de transmutación del nagual en bola de fuego. Los otomíes, o mejor dicho los Ñañus, les llamaban tlaciuhque o semejantes a su dios Tláloc, porque sabían lo que él determinaba; así, era adivino que pronosticaba si llovería, si padecerían hambre e incluso cuándo ir a guerrear. Este ser para nacer, desaparecía cuatro veces del interior del vientre de su madre y volvía. Además, se decía conocedor del lugar donde van los espíritus para llevar "sabiduría y bien a la gente", por eso se decía nahualli adivino. 5 Cueva de Tepenquistemia. La gente se prepara para el inicio del ritual, durante el cual se pedirá la abundancia para que los espíritus estén tranquilos. 9. Moctezuma Xocoyotzin Moctezuma Xocoyotzin, era considet:ado nagual, se decía que no todos podían mirarle a los ojos ya que la osadía podía terminar con la vida del curioso. Existe una referencia, en la Segunda Carta de Relación de Hernán Cortes al rey español, en donde se menciona que cuando Moctezuma salió a recibirle, se presentó acompañado de dos señores, uno a cada lado de él, y ambos de alta estatura. De pronto, conforme se fueron aproximando, uno de ellos comenzó a hacerse más pequeño hasta tener la talla propia de un mediano reptil. Luego iniciaría una serie de 6 metamorfosis, hasta convertirse en una especie de dragón con plumas coloridas. Por el horror y espanto que esta transformación causó en los españoles, como un gesto de cortesía, el emperador ordenó a este extraño personaje cesar sus transmutaciones. Los españoles quedarían sorprendidos de las capacidades mágicas de los naturales de estos lugares. 10. Ticitl Se le dice Ticitl a quien practica el ticiotl o medicina, curandero con experiencia en hierbas, piedras, árboles y raíces. Dicen los informantes de Sahagún que da emético, pociones y hace incisiones. Pero, si es malo, enferma a la gente con sus medicinas, es un seductor de mujeres, adivino y arrojador de suertes. El ticitl era médico, brujo y agorero, además de nagual. 11. El tetla cuicuilique o tetlacuicuiliani El tetla cuicuilique o tetlacuicuiliani, podía ser hombre o mujer. Sahagún menciona una curandera a quien llamaban la chupadora secadora de cosas, quien usaba el iztauhyatl que es el estafiate, una de las plantas sagradas empleadas por las nahuas. Ella, primero masticaba ajenjo (estafiate) y con éste rociaba y restregaba al paciente; en seguida lo frotaba con la mano y sacaba cosas, ya un pedernal, un pedazo de obsidiana, ya un papel, un fragmento de pino (acote). Cuando ya ha sacado todo esto, algunos sanan, otros no sanan. No hay región mexicana en donde no se hable o crea en el nagualismo, incluso en las ciudades y grandes poblaciones. 7 12. Teciuhtlazqui, tlauhtlazqui El teciuhtlazqui o tlauhtlazqui es lo que hoy en día se les conoce como graniceros o tiemperos. Tienen la facultad para hacer llover granizo o para ver males fisicos y del espíritu; pueden percibir su mal a través de los sueños y las curaciones para su remedio, así como también lo que se debe traer como ofrenda para convidar a ese mal aire o espíritu y así alejarlo de la persona a quien se le estaba dañando. Ofrendas en la cueva del Granizo para que éste no destruya la siembra en los campos de cultivo y se tenga alimento en abundancia. A través de este tipo de funcionario, hemos podido · empezar a conocer como ellos pertenecen a distintas agrupaciones religiosas que se dedican, no precisamente a propiciar el desenvolvimiento del ciclo agrícola, sino que su función está orientada hacia los ciclos cósmicos. Ellos están relacionados con el devenir del tiempo cósmico y el ciclo de la vida. Existe una interrelación entre distintos ciclos, como ocurre con el mítico [sic], el cual comienza a partir (entre términos mesoamericanos) de la ultima era que, de 8 acuerdo a esa tradición, todavía rige los ciclos astronómicos y calendáricos. Por ejemplo, nada menos que el movimiento solar que marca las distintas estaciones anuales; también está el ciclo lunar y ciclos de varios astros, entre los que destaca Venus. Son sacerdotes del dios de la lluvia, Tláloc, son adivinos y pronostican si lloverá o si vendrá hambre y enfermedades. Ellos son los conocedores del tiempo, los sabios del clima, los señores de las cuevas y del rayo, los adoradores de la cruz, y del agua, los dueños de la magia y el ritual. Representan la herencia auténtica de los abuelos mexicanos y son elegidos por medio del rayo o centella, por herencia de padre a hijo, por enfermedad, son curados por graniceros, por sueños en donde son llamados para servir a su pueblo. También, cuando llora una o más veces en el vientre de la madre, la persona trae el don de ser curandero para su pueblo. La señora Juana es una auténtica mujer de pueblo con sus orígenes autóctonos de la región del Popocatépetl. Ella está haciendo tortillas a la orilla del tlecuilt. Cada uno tiene su lugar sagrado para ir a ofrendar, puede ser una cueva, una cañada, un paraje, la cima de un cerro, un río o alguna piedra sagrada (como la 9 solsticial o del conejo, en el paraje de Tomacoco en Amecameca). Un buen granicero o tiempero, desde antes del amanecer, observa el cielo y empieza a pronosticar, y cuando amanece observa en las nubes si va a llover o va a hacer mucho calor. Por las tardes hace lo mismo, si ve muy negras las nubes, es aviso de que va a granizar y empieza a preparar su tlecuilt con brazas de carbón, sahumerio y copal; y así, antes de empezar a granizar, él con cantos y gritos y en procesión con sus familiares sea de su casa o en el rancho o en el campo, hace su trabajo de alejar al granizo de las milpas, porque destruye el alimento del pueblo. Rodar la jícara cuesta abajo, empezando desde el altar hacia los cuatro puntos cardinales, representa a las nubes tirando sus recipientes con agua. Sobre los tiemperos o graniceros existen muchas historias. Dicen que cuando dos tiemperos se enojan entre sí, son capaces de mandarse granizos, rayos y lluvias. Lo cierto es que un tiempero tradicionalmente habla mal de otro tiempero: no es raro que se lancen entre ellos lluvias de agresiones y tormentos de injurias. Pero el día en que los tiemperos se junten para trabajar cada quien con su magia ese día va a llover y recio. Ellos trabajan en congregaciones y los distintos cargos u oficios de sus miembros también 10 suelen recibirse en forma hereditaria. Es decir, por la pertenencia a un 'linaje o familia de graniceros. Además del manejo de los temporales y la regulación de la lluvia, estos seres de conocimiento, también curan las enfermedades del alma y del cuerpo. Para lograrlo tienen un amplio conocimiento de las plantas medicinales sagradas y suelen hacerlo también por vía de los sueños. Se trata así de un acervo cultural que se recibe de generación en generación. De esta forma representan a los antiguos sacerdotes prehispánicos, y han sobrevivido conjuntamente con los linajes dirigentes de aquellos tiempos, a los que en el virreinato se les dio el nombre de caciques. Estos últimos, contrariamente a lo que el común de la historiografia ha conocido, en Amecameca sobrevivieron por mucho tiempo, por lo menos hasta el fm de la Colonia, y sus descendientes mantienen una estrecha relación con los linajes antiguos de los graniceros. También la naranja es significativa en el Ritual del agua, se rueda hacia los cuatro puntos cardinales, en ella se representa el mundo lleno de agua y se dej a correr cuesta abajo desde el altar. 11 En este lugar llamado Chiconquia que significa coronilla, a los espíritus les gustan que les pongan palanquetas, dulces, refrescos y unas tortas. 13. Geografía Sagrada Son cuatro los sitios importantes en la región de los volcanes que, desde el punto de vista cósmico, cubren una amplia geografia sagrada: la cueva de Alcalica, el cerro del Sacromonte, el cerro de. La Coronilla y Almulancingo. Están ubicados en territorios del municipio de Amecameca, en el estado de México, de donde son oriundos don Aniceto Córdoba Páez (don Cheto) y Juan Macario Mendoza (don Juan Muñeco). Sus familias son depositarias de las llaves simbólicas de las cuevas y cerros sagrados como los mencionados. Estas cuatro partes sagradas forman cuatro puntos en forma de cruz y, para la creencia de los graniceros, son los lugares más fuertes en energía. Aquí vienen los graniceros de toda la región a realizar sus rituales y en sus oraciones, aunque las realicen en otros puntos sagrados, jamás dejan de evocar la fuerza de la cueva de Alcalica y la del Sacromonte. Amecameca es puerta de entrada y salida de los volcanes, es en definitiva un eje sacro de las ancestrales prácticas citadas. 12 14. La familia de don Cheto y don Juan Muñeco Descienden de los cacicazgos de Panoaya y Totolimpanecas, dos de los cinco asentados en Amecameca. El título de cacicazgo lo recibió Pedro Páez Ysitlalpopala del emperador Carlos V en 1534. Su apellido castellano fue tomado de Fray Juan Páez, administrador del convento dominico de Amecameca, a quien el cacique ayudó a construir la capilla del cerro del Sacromonte en 1582. Tiempo después, los Páez emparentaron con otro linaje indígena local, Felipe Páez de Mendoza (1564), Santiago Mendoza (1838) , de donde provienen Andrés Mendoza (1859), José Mendoza (Chomina) (1898), Juan Macario Mendoza (Juan Muñeco) (1920) Bruna Mendoza (1929) y Moisés Vega Mendoza. Este linaje de los Mendoza que tomó su apellido del primer virrey de la nueva España, don Antonio de Mendoza. Una mujer de la familia Páez Mendoza se casó con Diego Ruiz Lozano, el mozo, medio hermano de Sor Juana Inés de la Cruz, hecho que puede explicar por qué el cacicazgo Páez donó también al convento del lugar los terrenos de la Hacienda Panoaya, en donde la Décima Musa y su familia vivieron en la segunda mitad del siglo XVII. Sor Juana, estuvo allegada al indigenismo a esta región de los volcanes, donde ella desde niña aprende el náhuatl con los niños indígenas de la hacienda panoaya y le sirve de inspiración para escribir muchos poemas en náhuatl y entre ellos diciendo ¡ah mis indios sabios de Amecameca, conocedores de todas las plantas mágicas que con ellas hacen miles de magias!. El cacicazgo de los Páez era dueño de una gran fortuna y tenía el control de las cuevas y las nieves en las faldas del Iztaccíhuatl. Durante toda la colonia ocuparon cargos importantes en los cabildos de las 13 repúblicas de los indios de Amecameca, la familia fue depositaria de la ancestral religión que tenía por eje el culto al agua y a la montaña. Aquí se presentan dos poderes: don Cheto y don Juan Muñeco, con sus herederas: Virginia y Maura, quienes tendrán que seguir con la tradición. Hoy, como se hacía en tiempos prehispánicos y coloniales, don Cheto y don Juan Muñeco, son los únicos que guardaron los secretos rituales con los cuales, en voz náhuatl, se dialoga con las montañas sagradas. Estas lineas son un reconocimiento a la incansable labor de estos hombres quienes han consagrado su vida a salvaguardar una tradición cultural que en mucho puede ayudar al cuidado del entorno natural al cual pertenecemos los seres humanos. 14 15. Cédula real Esta es una reproducción de la cédula que otorgó el titulo de cacique de Panoaya en 1534 a Pedro Páez Ysitalpopala, de donde proviene don Cheto. Don Carlos por la divina clemencia emperador Semper augusto, rey de Alemania, Doña Juana, su madre y el mismo Don Carlos por la gracia de Dios, Rey de Castilla de León, de Aragón, de las dos Sicilias, de Jerusalén de Navarra, de Granada, de Toledo, de Valencia, de Galicia, de Mallorca, de Sevilla, de Cardeña, de Córcega, de Murcia, de Jaén, de los Al garbes, de Algeciras, de Gibraltar, de las islas de Canarias, de las indias, islas y tierra firme del mar y océano. Conde de Barcelona, Señor de Vizcaya y de Malina, Duque de Atenas y de neo patria, conde de Sevilla y de Cerdeña, Marqués de 6restan, Duque de borgoña y de brabante y de Tirol etc. Por cuanto vos. Don Pedro Páez y Sitlalpopala. Don Tomás Silva Eshaultute, caciques y principales que estáis y residís en ese pueblo de Amecameca. En esa tierra de la Nueva España me hicisteis relación diciendo que vos servisteis en la conquista y pacificación de ella y de esa comarca con toda nuestra gente, vuestras armas, ayudando en todo posible, trayendo y reduciendo. A toda la gente bárbara que andaban desparramadas en los montes, cerros quebradas de dicha tierra a la vez que vuestra santa fe católica y pasasteis muchas necesidades, hambres y trabajos, poniendo en graves riesgos y peligros vuestras vidas y la de vuestra gente. Como fue notorio a los de nuestros consejos de indias por cierta probanza y diligencias que por ellos fue vista expresamente cuando con ella están, que después, fue vuestro padrino en el bautismo Gaspar de Sandoval. Estando tan vencido en los de Cunaguacatepeque. En las guarniciones mexicanas, con los principales de ella que habían puesto cerco para matar a Hemán Cortes, 15 eran más de 1O, 000 guerreros y gente bárbara que venían sobre la gente española que andaban desparramados por esas poblaciones y según estaban sin concierto, hicieron muchísimo daño y sobre de ellas estabais y vuestra gente con ayuda de nuestro señor les tiraron con muchas saetas, con las anacas y lanzas y partesanas y unas con las cuales cayeron muertos los capitanes que con ellos venían y los principales cayeron en tierra y de toda estas gentes, que con dichos y principales venían, se festejaron a causa de haber visto los suyos muertos, por lo cual cesó. El día que hiciste por la lealtad y recibimiento en Tlalmanalco a los españoles y no los dejasteis hasta poner mi real corona a la gente mexicana hicisteis por bien de dejar vuestro centro y pueblo en donde mantenías de inmemorial tiempo y pasasteis a los españoles. Y me pedisteis y suplicasteis os diera por merced que en remuneración de los dichos vuestros servicios y trabajos y por de ellos quedase memoria vos mandásemos dar merced de un sitio de ganado mayor en la falda de la sierra en los pueblos para que os tributen como vuestros Terrasgueros son San Esteban Panoaya Pagualan y de todos aquellos que poseen vuestras tierras varias o pueblos y de tres caballerías y de tierras en el camino que sube de Tlasco y entra en dicho vuestro pueblo que presente tenéis. Y vuestros indios que vos tributen y del dicho vuestro pueblo os tenga y reconozca portales caciques y que os diésemos por vuestras almas conocidas y os declaremos portales caciques del dicho pueblo de Amecameca y en todos los demás pueblos y dados por armas un escudo hecho en cuatro partes, en el cuarto superior dos tigres empinados en campo de oro y en el otro cuarto superior un león de oro empinado rodeado de negro en (ilegible) matasteis. Del va vertida como un plumaje verde y oro en la cabeza y las saetas de oro en las manos del campo colorado y en el cuarto un puñal y encima de él una águila rampante puesta en vuelo en campo 16 colorado y en otro cuarto tres flores de lis blanca y doradas en campo verde y por alrededor con unas letras de oro que diga ero fidelis hacer fuego y encima del dicho escudo con un llano cerrados con unos follajes de negro y otro que salgan encima de unos plumajes de colores con sus tras colores y dependencias con follajes de negro y oro, · o como la vuestra merced fuésemos acatada los dichos vuestros servicios porque vos y ellos quedase memoria vos y vuestros indios y vuestros descendientes seáis mas honrados, por la presente os declaramos portales caciques y señores naturales y vos hacemos merced para que nuestros indios hayan, y tengan por de los propios y de sus comunidades y el dicho sitio de estancia de ganado mayor y las caballerías de tierra y de los demás Terrasguerías de sus declaradas y abasto, podéis traer y poner dichas armas de uso declaradas que así vos concedemos un escudo tal como este según y como aquí va pintado y figurado los cuales vos hacemos por nuestra arma y queremos así es vuestra voluntad que vos lo hagáis y tengáis y vuestros hijos y descendientes de ellos las hayáis y tengáis y podáis traer y poner en vuestros reposteros y casas, capillas y sepulturas en las de cada uno de vuestros hijos y descendientes y en las otras partes y lugares que vos y ellos Quisieredes y por bien Tuvieredes y por dicho sitio y las caballerías de tierras y las de más que por la presente tenéis y vuestros indios terrazgueros que os tributan para sucesores y herederos y para siempre jamás que sea vuestra para nuestra para grandeza de vuestras casas las que hoy son y adelante fueren y que no pueden ser vendidos en caso mandamos no valga. Y por esta vuestra carta o signado de escribano público por su traslado mandamos a nuestro ilustrísimo príncipe Don Felipe nuestro muy caro y mando a mi nieto e hijo y los infantes nuestros y mis caros hijos y hermanos los prelados, duques o condes y o mis maestros de las órdenes, consejos, alcaldes, alguaciles en nuestra casa, 17 cortes y chancillerías y a todos los conse;os, corregidores y asistentes, gobernadores, alcaldes, merinos, driotes (sic) y veinticuatro regidores jurados, caballeros, oficiales e hombres buenos de todas las ciudades, villas y lugares de todos vuestros reinos y señoríos de la dicha Nueva España, indias y tierra firme del mar océano, así los que ahora son como los que serán de aquí adelante y a cada uno y a cualesquiera de ellos en sus lugares, jurisdicciones que vos guarden y cumplan y hagan guardar y cumplir a vos y a los dichos vuestros hijos y descendientes y a vuestros indios del dicho pueblo la dicha merced que a vos hacemos de las dichas armas y tierra, montes terrazgos hayan y tengan que os los dejen gozar y a vuestros hijos y descendientes y a los dichos vuestros indios pobladores del dicho pueblo dichas tierras y de ellas y de cada una de ellas y que de ello en partes de ello y sin embargo alguno vos mando pongan ni consientan poner ni en tiempo alguno so pena de la nuestra merced y de dos mil maravedíes para nuestra cámara a cada uno que lo contrario hiciere. Dada en Zaragoza a seis días del mes de enero año del nacimiento de nuestro salvador Jesucristo de mil e quinientos y treinta y cuatro años. Yo el rey. Fray García Cardenal Seventíno. El doctor Beltrán. Licenciado Juan Fernández Carvajal. Licenciado Juan Fernando. Yo francisco de las Cuevas. Comendador Mayor de León y Secretario de las secretarias católicas majestades los hice escribir por mandato de su majestad registrado abajo tomé razón de canciller y otra de donde se toma razón de la cédula real que por haberles escrito en pergaminos, "se han hecho imperceptibles de la cual doy fe". 16. Don Cheto, granicero de Amecameca La madre de don Cheto se llamaba Camila Páez, así lo dice don Cheto, pero su papá la acompañaba a rezar a 18 las cuevas y de allí heredó su tradición con su esposa que ella era la mayora de la cueva Alcalica porque allí fue coronada con toda su familia por ser el lugar sagrado junto con la cueva del cerro del Sacromonte. [La esposa de don Cheto] se llamaba Alberta Castillo Evangelista. La madre de don Cheto era una señora gordota que se dedicaba a labrar madera de troncos redondos, que de esos árboles sacaba palos cuadrados, cuando tenía suficientes palos los bajaba en un carretón con ruedas y ejes de fierro. La cueva de Tlalpanzinco es signo de poder ya que está cerca del Templo de las Parteras y ellas son signo de abundancia humana. 17. Cómo se inició don Cheto como tiempero [Don Cheto]- No le sé bien decir cuántos años tenía yo, estaba joven, pero ya era casado, tenía como unos treinta años. Entonces iba yo a ofrendar con mi 19 suegra ... Creo que sí. .. no me acuerdo, pues como ya tiene un montón de tiempo. Don Cheto se recibió por enfermedad y por linaje. [Don Cheto]- Cuando enfermé ni parado podía estar y le dije que me vengan a curar y sí fueron a la carrera, porque yo estaba asustado, y casi me iba yo a reventar. Y pronto llegó una señora y me pregunta - ¿Qué te pasa? -¿Qué es lo que me pasa? Ya me quiero morir. - A ver, dice , con calma, a ver tráeme un blanquillo y sea paciente -y me dio la primera limpia y luego las demás' - Ahorita te limpias -y luego que me da la otra [limpia]. [Don Cheto]- Entonces juramento, fui a hacer a Alcalica, y me dice la señora por eso estás así, porque ya tenía tiempo que andaba yo con mi papá en los templos o sea desde chico. Mi papá andaba rezando, lo ocupaban, pero no trabajaba como yo ahorita. Él nada más iba a rezar y ya, y así iba yo con él y ya me fijaba cómo rezaba. Pues tenía yo memoria y se me quedaban muchas cosas, o sea íbamos hasta el lugar llamado el Número ocho y después cuando falleció mi papá, me agarró por derecho. Luego después como le daba muhina a mi señora, como que se encelaba, después le tocó a ella... y ya tuve que ir a ver a un señor de San Pedro Nexapa, que allí vivía, para que curara a mi esposa. Y también vino uno de Tecalco pero no la alivió, la alivió uno de San Pedro Nexapa. 18. Don Cheto y las brujas Y usted, cuando estuvo de boyero, ¿veía usted las brujas? [Don Cheto]-Pasaban, pero hartas. Le puse el sombrero acá arriba con espejo, clavé el machete: era 20 una muchacha (la que quedó atrapada en el encantamiento). ¿Pa qué me quieres?, ¿a dónde vas? -cómo era yo grosero- ¿a dónde vas? A traer mi encargo. Me voy a cazar. Y allí la estuve haciendo desatinar como un cuarto de hora. Ya déjame, déjame ir. Tanto que me estuvo rogando. Lárgate -saqué el machete, lo volteé. Levanta tus cosas. Don Cheto presenta las flores a los cuatro puntos sagrados (Tlalquitilulco, Coronilla, Alcalica y Almulancingo), al Popocatépetl e Iztaccíhuatl. El espejo se levanta y ya (la bruja, porque se rompe el encantamiento). Era yo canijo también. Esa fue la única vez; yo creo que después le dijo a su compañeros y ya no pasaba (por esos rumbos la mujer). Pasaba (la bruja), pero ya más pa' abajo o más pa' arriba. Ese día pasó ella derecho de mí. 21 19. Don Cheto se ha enfrentado a dos sequías [Don Cheto]- Como tiempero me he enfrentado con dos sequías, porque yo oí decir a mi abuelita y a mi tía y a mi tía Pilar. La otra, quién sabe quién. La otra quién sabe en qué tiempo (ocurrió) ... las autoridades de acá no los llamaron, para que vieran eso. Como es la generación. Dice el dicho: "para comerse un elote, sea que siembre uno, o sea que lo compre uno", para eso se pide la lluvia. Para que llene. Esas sequías o sea fueron muy duras, según tengo entendido. Sí, porque una vez. Ese año fueron dos veces a Alcalica a enflorar, ¿verdad? Fueron el día primero y desde el día primero como a medio mes... entonces, uno de sus compañeros dijo que tomar viaje el día. A uno de ellos se le presentó que tenían que ir a otra vuelta allá arriba. Y sí fueron allá arriba. Y esa tradición se perdió aquí, venir a pedirle ayuda a los tiemperos. Y ora sí como quien dice, cada quien se arregle como pueda. Ora sí que cada quien como pueda. 22 Alcalica también conocida como Cueva de las Brujos. Se preparan las cruces y se revisten con sus colores al agua y a la tierra para así tener buenas cosechas. El día primero de mayo es cuando se abren místicamente las puertas. 20. Cómo espanta a las culebras (de agua) Sale usted afuera, don Cheto no espanta a las culebras, sino que las aleja con la palma y con el sahumador. Ésas son las armas que tenemos; el machete es arma para la tempestad, para el granizo es bueno el machete' o la hoz. Cuando no obedecen con la vara bendita, entonces con la hoz o el machete. La vara debe de ser de una planta que se llama trueno, de la de trueno verde. Me encontré una vara que solamente así. .. y se detenía la tempestad. En Semana Santa va la palma y la vara, a escuchar misa y ser bendecida (para detener la tempestad). Me corté una vara que tenga espinas como la rosa o de membrillo. 21. Los templos a los que va don Cheto [Don Cheto]- Yo iba aquí a Alcalica, Almula, Coronilla y el Amacuilécatl (pero eso ya después). Pero más antes, andaba allí. Pero más antes se le rendía a cada uno .. . cuando se le revela algo, lo consulto en mi altar, con mis hijos. Como tiempero, siempre desde las mañanas salgo a ver cómo está el tiempo, en la tarde igual (sigo observando las nubes). Hay veces salgo en las noches y está raso (el cielo; no hay nubes). Hay veces en tiempo de aguas salgo, esta pesada la nube; nomás espero que caiga. 22. El rayo de luz ilumina a don Cheto Cuando vino Azucena Mendoza de Televisa, fuimos a Alcalica, a dar gracias por el buen tiempo, porque ya había terminado la Canícula y el tiempo estaba muy cerrado de neblina, y todos fuimos testigos de cuando 23 don Cheto nos dijo que esperáramos debajo de la cueva. Y cuando él subía, de pronto se filtró un rayo de luz entre la neblina, ha iluminando directamente a don Cheto de cómo iba subiendo directamente a la cueva, sorprendiendo a todos los que estábamos. Y lo mismo sucedió el 4 de septiembre de 2004, en la Piedra el Conejo. Esa vez vino Televisión Azteca, con Nacho Núñez. Cuando estábamos a medio ritual, entre la niebla, de pronto se filtra un rayo de luz, iluminando a don Cheto y a don Juan Muñeco, cuando estaban haciendo la procesión alrededor de la piedra y cantando el Ave María y el Padre Nuestro, y hablándole fuerte a la piedra en náhuatl. Y todos los presentes nos quedamos admirados con la naturaleza tan significativa con estos personajes que son trabajadores del tiempo, y todos dijeron que estos tiemperos ¡sí que saben trabajar a la naturaleza! 23. El espíritu del balconcillo Muchos comentarios de la gente de fuera dicen que cuando don Cheto sale al monte para visitar sus cuevas, siempre aparece en el cielo un halconcillo como acompañando el camino del señor y en buena señal de que un buen trabajador del tiempo tiene un buen espíritu guía que surca los cielos porque un buen hombre se preocupa por el temporal para su pueblo y el mundo. 24 Se dice que cuando don Cheto sale a la montaña para hacer sus peticiones, por el aire le acompaña, surcando el cielo, un halconcillo. 24. Don Cheto, La Luna, El Sol, El Comportamiento de Animales, El Tiempo y Utensilios de que depende el Granicero. La Luna, cuando está canteada, trae agua; cuando está derecha, no trae nada. Cuando está muy roja es porque tiene mucho calor. Sí, (la Luna) tiene su contenido. Cuando vemos que está canteada la Luna para Ozumba y que está blanca, es que tiene agua. Pero cuando está cambiada, que está amarilla, es mucho calor. Nos basamos en el tiempo, como viene. Ejemplos: LUNA: •Canteada o Colgado=Agua •Amarilla O Rojiza=Calor •Llena con Halo de Colores=Calor, Enfermedades. Tiembla y 25 •Nueva (4°Creciente, Naciente) o Tierna= Pronostica clima, cuando se puede sembrar, y un niño cuando nace puede ser enfermizo. •Con Eclipse=Afecta todo tipo de embriones •Llena o (Recia)=Cuando nace un niño es fuerte y no enfermizo. EL SOL: A este astro que cumple sus ciclos diarios en nuestro universo, es tan importante como la Luna. Por eso los graniceros en los rituales lo representan en: flores color amarillo y rojo, papel, figurillas y muchos listones alusivos al sol y arcoíris dadores de vida. NUBES: •Aborregas= Avisan nevadas, granizo y temblores. •Grandes y Negras: Avisan granizadas, tormentas formando culebras o torbellinos. •Muy altas y grisáceas= Avisan heladas •Que se forman a un costado del volcán= Avisan heladas con fuertes vientos. •En forma de carrera o fragmentados: Avisan temblores. ANIMALES: Las alteraciones de estos y el comportamiento sirven como indicadores meteorológicos y predicciones del tiempo en esta región de los volcanes. AVES: • Parvada de pajaritos aguadores Junio=Anucia lluvia. •Paloma San Juan=Anuncia Lluvia 26 en Mayo y •Gallo que canta a deshoras=Avisan Cambio de Tiempo. •Gallo que canta a las 12 de la noche= Puede temblar o eclipsar. •Gallo que se comporta como gallina= Mal Agüero •Zeceto juguetón en el aire al medio día=Anuncia Lluvia •Danza de Golondrinas mañana y tarde= Anuncia lluvias cercanas de temporal •Grillos que cantan en la noche= Anuncia lluvia. ANIMALES DOMESTICOS: •Caballo que resopla, inquieto y para las orejas=Avisa Lluvia. •Burro que se rasca en la estaca o palo en el que esta amarrado= Avisa Lluvia. TIEMPO: Aire=cuando el aire se siente húmedo y fresco: Pronto va a llover. Calor=Cuando al medio día se siente un calor infernal: Al día siguiente va a llover. ARMAS PARA CAMBIAR EL TIEMPO: •Quemar palma bendita del domingo de ramos y sahumar en dirección de la tormenta o granizo. •Colocar "ceniza" en cruz en medio del patio en dirección de la tormenta. •Formar la cruz en el aire con la palma bendita. •Cortar el aire con machete a una vara de membrillo, rosa o trueno. 27 •Arrojar el tejolote del molcajete al patio con coraje y gritándole al mal tiempo que se aleje, ya sea con oraciones o hablándole en nahuatl. 25. ¿A cuántos ha iniciado don Cheto? [Don Cheto] -Nomás he iniciado a uno de Ateneo, se llamaba Esteban. Don Esteban, eso sí no le sé dar razón (de sus apellidos) ... Don Esteban, me vinieron a traer a que lo fuera yo a curar. Me vinieron a traer como a esta hora... quién sabe quién le dijo que sabía yo curar. Vino como esta hora a traerme un muchacho. -Vaya usted a curar (lo) que está aquí abajo; a ver si se viene asomar - Digo- es noche y está lejos - Lo venimos a usted a dejar -me dijeron sus parientesPues tanto que me estuvieron rogando (que decidí ir). "Bueno, pues vamos". Ya vamos. Ya el señor estaba así tirado. Llegamos allá, ya estaba oscuridad. Llegando allá, ya no quiero meter mano, porque ya está en cammo. No, cúrelo usted, apúrele usted. Tráigame dos blanquillos, uno de gallina y otro de guajolote. Esta vez me los fueron a conseguir rápido. Le eché con el cigarro. Ya cuando vi, el señor ya se movió. Tengo hambre- (dijo el señor). -Le digo- Denle de comer, sea su camino. Denle de comer. Entonces dijo, tengo sed. Denle agua, ahorita le doy otra cucharada. Ya que le traen ... ya está curado. Ya desde las dos curadas. 28 Según como amanezca, mañana me va a avisar, pero temprano, antes que me salga ya pa arriba, voy a trabajar con mi yunta. Todavía no me levantaba yo cuando ya estaba. -Vaya a usted a curarlo que ya está mejor. Se me revela una imagen en la mente que me tenía que recibir en Alcalica. Le digo: -Entonces se va usted a recibir en Alcalina. Y se lo dije, aunque ya estaba él recibido. Porque ya lo habían ido a recibir, vio un señor de Tecalco y lo fue a recibir aquí en Sultepec. Me acuerdo, porque fui a rezar cuando se. recibió, allá en Sultepec se fue a recibir, pero otra vez se puso grave, fue cuando lo curé y se fue a recibir a Alcalica ¡y santo remedio! (El señor) ya estaba grande, ya debe haber fallecido. Don Cheto que ha iniciado a uno, pero de mucho tiempo atrás, porque en sí él ya perdió la cuenta de cuántos ha iniciado. Porque muchos ni le son agradecidos porque dicen saber más que él, y esto marca una lucha de poder. 26. Cómo se recibió don Moy [Don Cheto] -Supe que usted iba a ser tiempero porque lo vi en mis sueños. Lo curaba. A mí se me revela en la mente, la solución: "es la cueva de Zicicasco", pensé, porque no es Tlapalcingo. Tlapalcingo es de este lado, y Zicicasco es de este otro lado ... Lo vi en mis sueños que iba usted para arriba, iba usted con su cruz para arriba. Por eso, dije yo: "Este señor se va a recibir en Zicicasco", por eso es de que también se vienen a curar. Ayer trabajamos todo el día con eso de la Canícula. En mi mente venía así caminando, caminando así en espíritu. Mediante mi mente fui a Alcalica, fui a su templo de usted, fui a Almula, fui a Coronilla, fui a Santiago. Mi espíritu 29 andaba volando. Ahora en el sueño que tuve, le dije a mi hijo en la mañana: "allí en Almula hay algo, las señoras están tristes, su ropa está abandonada". Soñé que iba yo para allá. Y allá en la esquina de allá de la Victoria, en esa calle pa' arriba, así donde está Silvestre López y Xicoténcatl, allá adelantito estaba una tapia atravesada. Vamos a traer la leña. Ahí subí pa' que pase del otro lado. Así, más adelante, en un rinconcito así quebrado estaba una muchacha desgranando maíz. Toda chorreada, espinita, con su ropa chorreada. Y me decía: "No pase· usted para allá porque ahí está el perro, lo va a morder". En la mañana le digo a mi hija: "soñé esto, ¿tú ya te imaginas a donde es?". Le digo: "es en Almula" [Moisés] -0 sea que cuando mueven allá las cruces en los templos a ustedes les molestan, los enferman, si no, no van cuando mueven en las cruces. [Don Cheto] -No le digo a usted que veo en el día caminando por donde ande yo, parece que estoy mirando que estoy en frente de las cosas. Le digo a usted que yo no me drogo, es natural. Como horita que estoy acostado, nomás las estoy mirando a las cruces; bien que estoy viendo la Santa Cruz. Porque así es mi destino y el de mis hijos. 27. A Gumersindo sí le pegó la centella A Gume si le pegó la centella, el rayo. Él está marcado de su pie; está quemado. A Pedro también. Los dos están lastimados. 28. Virginia nomás es cocinera [Don Cheto] -A Virginia no le pegó la centella, esa nomás es cocinera, pero de cocinera tienen más poder que yo, porque esa ve también las cosas como son. Ésa es canija. Las ve así haciendo su quehacer, tiene mucha fuerza ella. Yo me di cuenta cuando esa vez 30 vino a curar a la maestra. A mí me platicó el maestro que quedó bien, que no le volvió a suceder, que no le volvió a dar la chiripiorca. Como andan conmigo, luego lo van a agarrar, se va a aletargar. Le digo: "ponte abusada, porque va a haber algo". Desde allí comenzó a agarrar la costumbre de ver visiones, les llega la visión. 29. Doña Olivia [Gume] -Doña Olivia no ve alguna cosa. Ésas, doña Olivia y sus compañeras, nada más son porque quisieron entrar. Dese usted cuenta ya usted ya anduvo con nosotros y con ellas ... 30. En Alcalica, el guajolote [Don Cheto] -Cuando era fiesta mataban los animales allá: guajolote grande. Allá se iban a matar a los animales. Y no como ahora de un día para otro. Donde vamos los tiemperos, abajo, allá se iban de un día para otro: allá iban a matar los animales, y como ahora que dicen que la gente llega "ya a medio día". No como ahora que ya queremos llegar a medio día. Y si queremos llegamos bien; si no, llegamos con nuestros alcoholes en la cabeza. Sí, llegaban a tomar, pero lo primero es lo primero; la ofrenda, la vestida. Luego ya se bajaban ellos a comer abajo, porque también no comían arriba. Lo del palo del baile , eso era después de que merecían. Ya vamos a echar una copa. Pero ya libremente cada quien se toma su copa. Toman de gusto que ya había cumplido con su obligación. A mí me han contado muchos que cuando iban a hacer el ritual del baile, hacía su ofrenda y ya nomás está un cacho de palo de baile. Si ya ve usted que nosotros, con tanto lo vamos haciendo, porque ya somos poquititos. 31 31. Las cruces son niñas y les gusta el baile [Virginia] -Porque es bien aguado. Luego se le ha querido a usted sacar a bailar y no quiere usted. [Moisés] -Yo quería bailar, pero sentí una presencia muy pesada con esas señoras, las de México. Te juro Virginia, que no era por nada que no bailé. Con ustedes es otro rollo, porque me siento con más familiaridad. Pero con esas gentes, nomás veía yo, sentía que traían su sombra muy pesada. [Don Cheto] -Porque hora sí que es compromiso de uno. Para que las cruces, queden con gusto que ·fuimos a verlas; las cruces son unas niñas que están allí esperándonos. Pero no todos ven esas niñas; usted no las ve porque no se concentra usted en ellas. [Moisés) -Yo creo que sí, algo. Cuando fuimos a Tlalpacingo, a mi templo, sentí la primera vez algo, luego la segunda vez también sentí algo, porque me picaban la espalda. [Don Cheto] -Le picaban la espalda, para que bailara usted, por eso le picaban a usted las costillas. Porque hay lugares que les gusta harto el baile. Como aquí en la cascada, les gusta mucho el baile. Así están acostumbradas las cruces, les gusta harto el baile. 32. Doña Cleotilde Doña Cleotilde, ella nomás fue "cargo", eso fue lo que le dejaron. Ella no tiene juramento. La cruz que viste de ella, es de don Ciriaco, de su papá. Y ese señor don Ciriaco, a él si le pegó el rayo. Entre tiemperos se conocen, porque se debe de preguntar. Su época de ese señor en la época de mi abuelita, fue su hermano, el que era el mayor de allí. Y ahora sus hijas nomás son arrimadas. Sus hermanas de doña Cleotilde que viven por ahí, en casa de la tia. Esas son hijas de don Pedro. No, ésa es otra familia. También recibió, pero 32 por su papá. No son recibidas de relámpago, de enfermedad: son recibidas de herencia, de cargo, de responsabilidades. 33. Pilar Evangelista, la tomaba el remolino [Gume] -Muchos dicen que a Pilar Evangelista la tomaba el enemigo, pero no es cierto. Es que en cada lugar hay espíritus diferentes. Entonces por eso a ella la agarraba y no era otra cosa que la agarraba más que el espíritu del remolino. Nada más que ella para que no diera muchas vueltas se ponía a bailar. Pilar Evangelista era la que bailaba descalza. Era lo que me comentaron no más gentes de ustedes y de otras gentes que llegaron a verla. Pilar Evangelista ya está enferma, está grave. Ella, como están sus facultades, ya no conoce. Ya está grave. Ya ni para decirle a usted ... y como su familia ... y con su versión es más que suficiente. [V ginia] -Ella se llama Pilar Castillo Evangelista de Gómez. Y su familia ya no siguió la tradición, porque su papá es muy ... no sé cómo explicarlo, muy egoísta. Ya no quiso dejar a Evangelista que fuera. ¿Quién la va llevar hasta allá arriba a Alcalica? ¿Yo?, si con lo que nos dejaron no puedo. Las animaba yo a que fueran, pero su papá no quiso, su papá del señor, ya no las dejó ir. 34. El templo de Tezahua Y por ejemplo, ahí en Tezahua, los que van a enflorar ahí son los de Ateneo. Ellos nomás van a Tezahua; ellos no iban a Alcalica. Porque allí se hacían las curaciones más fuertes ya que el río y la calle se forman en cruz marcando los cuatro puntos cardinales que sostienen el mundo. 33 35. El templo de Tlalquitelulco [Gume, Virginia o Pedro] -Su mamá de doña Antonia, ella también es tiempera. Ella nomás le pegó el relámpago, pero ella no quiso agarrar nada de templo. O sea que a ella no le llamó la atención. Librada Castillo, son hermanas. Es hermana de mi mamá. Ella es de González. Por eso ve usted que llamaba yo a mi parienta ... se le reveló, no van a agarrar mayoría en Alcalica. Tú vas a mandar allá. Que vas a mandar allá. En Tlalquitelulco. En También mi mamá. Tlalquitelulco iban mucho los de Chalma a enflorar. El que era mayor allá era de Chalma. Era don Marciano Nolasco. Era el dueño y el tiempero de allí. Su esposa era Prisca, pero su apellido ya no me acuerdo. Como cada año que vamos nosotros ya nadie va, nada más esta vez fuimos ya encontramos desorden. Qué gente, qué gentes, no tienen respeto. Eso lo hace un juego. Y como lo hace un juego ya por eso vienen las sequías. Pues a la mejor sí van, pero ellas no saben llevar lo que es un ritual. Ellas sólo van a cargarse de energía para llegar a sus casas, a sus altares y curar. Todas ésas personas es muy aparte el tipo de ritual que ellas realizan. Nosotros lo seguimos manteniendo. 36. Guadalupe Guzmán No, Guadalupe Guzmán vive aquí. El de mi tío Amado que se iba a juntar con su hija de Guadalu pe Guzmán. Ése hasta allá en el corral de toros. También iban allá se juntaban con Guadalupe Cisneros. Ése es más arriba del Número 8. Ellos dicen que se iban días. Nomás oía yo. Había hasta jaripeo y ahí estaban. Que se quedaban hasta tres días. Y sí, vimos que sí... Ese Simón Córdova lo molestaron, que ya una vez que fuimos a ver. No voy a ir, creo que se ·quiere usted robar del jaripeo. No la chingues. Como ya no hay. Ya está abandonado. Hay dos ... a lo mejor 34 agarró usted a alguien. Hay dos cruces; la de madera que está afuera, y la de piedra, que está afuera de puras cazuelitas. Como de aquí para allá están las cruces, como dos o tres metros para adentro. Porque allá a esas cruces sí me fui a meter. Pasaba yo por allí abajo y pasaba por abajo, iba yo con el ganado. Por donde estaba el rancho del que se iban a llevar al agua para San Rafael, por donde está la otra vereda. Sí está la cruz como aquélla. Y la otra también es casi de este tamaño. Don Guadalupe Cisneros también pedía el agua. Él sería pegado con el rayo. Ayer precisamente platiqué con un familiar de él. Como le digo ahora, las criaturas no oían las pláticas. Él, un señor que tienen como ... yo sí sé que mi pariente, mi tío, se iba para allá y sí hacían sus despapayes [sic]. No creo que nomás por gusto iban para allá. No creo. Es como le digo a usted, antes la gente mayor a los niños nunca ... No decían que platicara uno lo que hacía uno en el monte. Hora sí. Como le digo a usted, uno lo hace, pero sólo uno sabe lo que va a hacer. Es callada la cosa, no platica uno ... Antes hacia las ... Le dejamos aquí, don Cheto, mejor después con calma porque sí cansa. Nomás tendrá otro tequilita. Entonces estaba la sierra y el volcán en piedra. Párale ya, José. 35 Tlaquechpa fue la cueva de don Guadalupe Cisneros, también conocido como El Rodeos. Don Cheto y compañía se hacen cargo ahora de ella. 37. Rezando y cantando [Don Cheto]-Porque no ha de llover, pasé a encomendarme a la cruz. Vamos a hacer esto. Yo bajo a pedirle ... Y ya para acá nos encontramos el altar grande, de allí sacamos el agua pa' abajo. Trabajamos. Luego llegando aquí a la puerta de la casa, pega la lluvia. Le respondió. Cuando sentimos, ya le está dando agua. Le digo: "Y a ves, ya ves cómo sí hizo efecto". Está uno pensando cómo va uno a trabajar ... hace las cosas bien. Ave María Santísima, se necesita mucho pensar. Y cómo pedirla (el agua). Sí, nosotros para entrar con gusto, con fe, comenzamos a rezar desde aquí, desde Chipanco cuando iba acercarse don Cheto. Vamos a pasar el río, comenzar a rezar. Ahí iba yo, reza, reza y reza, sin descansar. Ya que nos tardamos, llegamos allá al palo del baile; otra vez comenzar a rezar. Rezando y cantando, rezando y cantando. Así era la costumbre antes. Ora ya no, ya 36 no quieren que vaya uno rezando. Cuando uno va en carros no hace efecto el pedir la lluvia. Hay que hacer penitencia, mejor caminar, mejor la caminada. Porque es como una peregrinación que lleva uno. Caminando. Por eso le digo a usted que llegando al Calvario, que de ahí para arriba va uno rezando, porque va uno en peregrinación. De ahí para arriba, ¿qué saca uno? Llega uno sudado, cargando, claro que llega uno sudado, las cruces también sienten con gusto, reciben a uno con gusto. Ya, ésa es la devoción, si va uno en carro ya es un día de campo, ya no es una devoción. Hay que ir cargando y rezando. Haciendo penitencia. Y así era antes, caminando y rezando. También cuando va uno a la.. . Tlalquitilulco, va uno caminando. Y llegando allá a la puerta, comienza uno , va uno a enflorar la piedra abajo, sube uno a la carretera. Hasta que llega uno. Es mi devoción y es el compromiso para pedir el agua, porque ya todos los que van como invitados sólo van como día de campo. No toman en cuenta lo que hace uno, esos nomás van "de sierra". Este día ya iríamos caminando, yo me comprometo a caminar, con mi bastón y voy caminando y cargando mi morral. ¿Por qué no voy a caminar? El primero de mayo hora sí nos vamos a confesar. Para que lo vaya a dejar, pero nosotros tenemos que ir caminando. Nos vamos a organizar bien, porque como dice, mandar el carro y de acá irnos caminando. La gente que no quiera caminar, los que no son trabajadores. Uno de nosotros, los más interesados, vámonos; tempranito salimos. Ya sabemos que se va para arriba. Caminamos para no durar. Bueno, ésa es nuestra devoción. 37 La cruz, vestida se esta manera, y colocada en medio del corazón del árbol, representa la fuerza de la naturaleza. 38. Virginia Castillo, hija de don Cheto [Virginia] -La responsabilidad que tengo sí es un cargo para hacer la comida para la ofrenda. El mes de mayo, el día primero, siempre se invita un taco, cuando puede mi hermana, Norberta. Ella era la que vive en Santiago Cuauhtenco. Ella es la que tenía el cargo. La que es mayora es Guillermina. Y ella es la que tenía que mandar, quien era la designada: Para ella tenía que buscar quién tenía que hacer la comida o ella misma hacerla. Por ejemplo, tu papá, tu mamá. Mi mamá era la mayora de ahí, la que mandaba a que barrieran, a que hicieran limpieza. Porque por eso mi mamá era mayora y los demás eran ayudantes. Y mi papá es rezandero; el nomás se dedica a rezar. Mi 38 hermana Guille, no sé por qué agarró ese cargo. Ella sí había agarrado el cargo, pero mi hermano el más grande la descontroló mucho. Se casó y ya menos. El marido no cree en eso. Es de otra religión. No sabría decirle, la verdad no sabría decirle con seguridad de qué religión es. Siempre el marido ha intervenido en sus decisiones de ella ¿A dónde no quiere entrar el marido? Dice don Cheto que a pesar de ser la cocinera, Virginia tiene mucha fuerza espiritual hasta para ver las cosas. ¿Cómo presiente las cosas? [Virginia] -Esas cosas llegan cuando se trata de que viene el agua fuerte, de que luego no hay quien ayude, yo lo veo más adelantado de ... Es porque estoy .. . Lo acabo de decir, yo no tengo ningún cargo, porque simplemente ... porque ni los ojos se cierran. Despierta, veo todo lo que va a pasar. Sé curar; nosotros estamos acostumbrados a curar, nosotros estamos acostumbrados a curar, así que nos dediquemos a que ese sea nuestro trabajo. Nomás a familiares curamos. Si tengo fuerza espiritual, eso lo dirán los que los curo. Porque yo no sé si la tengo o no. Yo antes de que lleguen, les veo todo. Antes de que las cure, veo cual es su enfermedad. Antes de que llegue yo a tocarla, ya sé cómo van y qué enfermedad tienen. A mí nadie me ha enseñado nada. Con el transcurso del tiempo, vengo viendo las cosas. Las crucecitas me imagino que son las que luego ayudan. La energía de las crucecitas es lo que ayuda. [Gume] -Tú Virginia eres la que arregla, tú eres la que pone las ofrendas cuando no está mi hermano Pedro. [Virginia] -Por lo regular, mi templo doméstico tiene que estar con luz. La luz es la veladora. Cuando no tengo dinero, casi por lo regular siempre tengo o pido a la persona que está más llegada a mí para la veladora, pero nunca falta. ¿Qué si me siento bien haciendo 39 esto? Vamos a decir que me siento bien estar como mi papá como cocinera; no me siento obligada porque esto ya viene de herencia y también me tengo que preparar y no me agarren las carreras cuando se acerca el día 8 de Septiembre día de Nuestra Virgen de Loreto y Santo de la Virgen María. Este día despedimos a la Canícula y ahuyentamos el hambre con un ritual secreto y familiar y ponemos como ofrenda, elotes, habas, frijol, calabacitas y el mole y convivimos con mucha alegria ya hay alimento verde y ya no sufrimos de escases de comida. Hace mucho años antes de que yo naciera en este día las familias subían al cerro del sacromonte para escuchar misa y dar gracias de que ya paso el ciclo más dificil que es la Canícula y también se ahuyentaba el hambre y ese día era conocido como como el "Día de los Columpios", tradición y costumbre que desapareció. Con esta ofrenda, el 8 de septiembre, día de la Virgen de Loreto, se le da gracias a la canícula, como despedida, por no haber traído enfermedades, y también sirve para despedir al hambre y así poder consumir el alimento verde (calabaza, frijol, elote). 40 39. Cada templo tiene su gusto de comer Cada templo de los volcanes tiene su gusto de comer. Por ejemplo, en Alcalica, se le hace su mole con arroz y su frijolitos y su pollito. Aquí en Almula nomás se lleva un taquito placero. En Coronilla les gusta mucho el dulce, la palanqueta, la alegría, el camote, el calabazate y unas tortas para comer nosotros. Aquí en Tlalquitilulco es puro mole ranchero, porque hasta donde yo sé, allá son Zapatistas. Si lleva uno mole picosito, hay veces que se enojan y nos ponen malos del estómago. Donde hemos llevado carne de puerco y hemos tenido consecuencias. También en el templo de don Moy también se lleva mole, mole verde o mole rojo, también se llevan moles. Se dan galletas. Es una costumbre de las santas cruces dar galletas; no nada más son las galletas, es la fruta que se lleva también, que se llega a poner en la mesa y luego se reparte. De todas las frutas se pueden poner en la ofrenda. De todas las frutas, menos capulín ni tejocote, porque el capulín y el tejocote son granizo, son representación del granizo. La naranja yo no sé por qué. Ellos saben por qué. [Moisés] -Me he dado cuenta que en el altar ponen unas galletas nevadas. Al ponerse las galletas nevadas en el altar estamos pidiendo que se cubran las galletas de nieve, el volcán y la sierra, para que no falte. Pero ésa nieve de las galletas nevadas es agua en el suelo. Se invoca a los espíritus. Por eso te lo estoy diciendo, así se pide la nevada. Y las galletas Marias son comunes y corrientes no tienen ninguna significación [Moisés] -¿Los mamones?l Los mamones son panes que se ponen como ofrenda a la culebra y para que no se perjudiquen las cosechas. Estos 1 41 Eso le vuelvo a decir otra vuelta, esa es cuestión de mi papá, porque eso ... En la ofrenda no se debe poner cecina, carne de puerco, carne de res, carne de conejo debe ser forzosamente el mole. Sí se puede poner todo eso, pero las consecuencias son muy dolorosas. Hay veces que se llega uno a enfermar. Hay veces que hasta en la tumba vamos a dar. Nosotros ya sabemos las obligaciones de cada lugar. Los tamales son permitidos en todos los templos, pero solamente en los que llevan el mole. El pulque y el alcohol son permitidos en todos los templos. De diferente alcohol (para diferentes templos). Esta ofrenda representa el alimento del humano para compartirlo con los espíritus de la montaña. El mole debe ser con pollo o guajolote. En Alcalica se lleva jerez. En Almula se lleva el pulquito y la copa casera, la que se hace en casa. En Coronilla, el pulque; llevamos las copas, el tequilita. panes se encuentran a la venta en el centro de Amecameca los domingos. 42 En Tlalquitelulco llevamos tequilita. También se puede el pulque. A donde no le gusta mucho es aquí abajo, en Tlalpancingo, ahí no le gusta el señor llevar pulque ni copa porque dice que nada más se toma uno ... En todos los templos está permitido las chirimías en todos los templos. Ya sé quién en San Pedro ya sé quién toca la chirimía... en San Pedro hay una señora. Se llevaba música de cuerda es la que sí acostumbrábamos, ¿por qué? Porque iba mi abuelito a tocar. En Alcalica alguna vez lo acompañaron los concheros. Desde más antes no. Todo esto ya vino a dar desde que nos corrieron. Desde ahí comenzaron ya según estos señores. Desde más antes siempre que hemos ido nosotros. Lo colorido de esta ofrenda es muy representativo, sirve para otorgar alegria al ritual, así como las luces y la comida llenan de alegria a los espíritus. 40. Vamos el día primero Vamos el día primero porque somos trabajadores, trabajadores del tiempo. Pero don Lucio era el que traíba toda esa gente. Siempre en primero de mayo 43 vamos nosotros aparte, desde que mi mamá, mis abuelitas. El día que caiga, caiga domingo, caiga entre semana. Nada que cayó mi día entre semana, nada de que, lo dejo para el domingo. No se cambia el día: el día que caiga ese día vamos. No como hay otras personas que les toca el tres ... nunca se cambia. Por eso siempre hay la rivalidad. Ahora realmente las cosas cambian .. Y ya ahorita, ya nomás mi papá es el que ... nosotros esa enseñanza tenemos que seguirlo haciendo el día que corresponde, porque nunca se va a cambiar el día. Ese día, como es el día del trabajo, es por eso que nunca cambiamos el día. Desde más antes ya se normalizó como un día de trabajo. En todo el mundo se festeja el día del trabajo. Como tiemperos, como trabajadores temporaleros. Había conocedores del temporal, ya los que suben el día tres, para nosotros son curanderos los que suben el día tres. Ésos ya se nombran realmente brujos porque saben curar. Templo El Número 8. Se prepara la comida para la ofrenda y así iniciar la petición de las lluvias y recargar la energía para tener más poder. 44 ¿Los parteros? ¿qué día suben los parteros? Antes se acostumbraba que los parteros iban a ayudar ... como los parteros ayudaban a las mujeres a dar a luz, tuvieran fuerza. Hora los doctores son los que hacen esas actividades. Pero antes todos nada más se dirigían a un yerbero, a un partero y a un temporalero, pedidores de la lluvia, temporaleros. Había conocedores del temporal y los que conocían la astronomía. El día primero suben los pedidores de la lluvia. El día tres ya no, va el mero día, sino que va hasta después. El día 4 ya no sé sabe. El que venía el día cinco era este señor Lucio, pero después de que acabamos mal, ya nomás vino cuatro o cinco veces, pero ya no volvió, de ahí, sí va gente, pero nomás va a curiosear. Es muy importante pedir permiso para entrar y empezar a limpiar el lugar y las peticiones surtan efecto. 41. El tiempero don Lucio de Nepopoalco Este señor Lucio es de Nepopoalco. Este señor quiso cambiar el culto, pero como le decía yo: "cada quien manda donde pertenece". Dialogaron con él, se 45 disgustaron y ya el señor dejó de venir para que ya no tuviera ningún problema con nosotros. Ahora como ya está muy grande ya don Lucio ya no viene. Ese señor, dicen, que veía las cosas, que lo que iba a pasar lo veía anticipadamente. ¡Quién sabe! Hora sí, como dicen "cada quien su trabajo". Porque son designados en sus lugares. Después de venir de toda la República o a recibir. Porque realmente para mandar no pueden vemr. Ese señor don Lucio, cuando subía, venía a pedirles permiso a don Cheto y sus hijos. O pasaba a dejar avisado, antes sí avisaban. Por ejemplo, el año pasado, si hubiera venido hubiera pasado a pedir permiso. Cuando sabe uno qué van a venir yJ no sale uno, ya está uno esperando. Incluso yo conocí a varias personas, danzantes, aquí en el Templo mayor, en México, ellos me platicaron de ustedes, que para poder visitar esos lugares, antes de subir tenían que venirlos a ver a ustedes. Son muy respetuosos, antes de subir tenían que venir a pedirles a ustedes. A hacer velación. Lo único que hacen, se ponen a cantar. Y según que van desvistiendo unas cruces que llevan y según esas cruces las desvisten, pero les van cantando, les van cantando hasta que las terminan de desvestir, luego les vuelven a cantar hasta que las vuelven a acabar de vestir. Esos subían hasta el último día de mayo. Pero ahora quién sabe. Como ya no se acercan ellos y como ya no me da a mí pues bien y bien, pues ya no sé si sigan yendo, pero es lo único que iba a hacer. 42. Alcalica es un templo castigador [Moises] -Recuerdo también a uno de mis hermanos, José Espiridión Vega Mendoza. Decía "yo no creo en esto". Y todos decían "guarda respeto, no vociferes, porque éste es un lugar sagrado". Y que empieza a patear los candeleros. Pues cuando· bajaron por el 46 camino voltearon y vieron a mi hermano, ya venía con su boca chueca y todos dijeron "ya lo castigaron, luego". Y llegando a Ame ca lo tuvieron que estar limpiando, curando. Entonces, después de ese hecho, mi hermano ya creía en las limpias; porque lo tuvieron que limpiar. [Gume] -Antes ese lugar era castigador, ahora ya está perdiendo la magia. Un animal que se subía a Alcalica y, nomás con que se comiera las flores, luego luego quedaba abajo muerto. Caballos, burros se morían. No me lo pregunten, pero una vez de mi tío Amador Velásquez, ¿no se fue porque se soltó la burra? ¿No se fue a meter la burra, se subió en la veredita que está y se fue a comer las flores? Nomás bajo y se murió. Hasta los animales, entonces hasta los castiga la cueva de Alcalica. Y luego otra vez llevó mi mamá un muchacho que tenía una camioneta, pero aquí de este lado de la calle Libertad, por la calle de Atenógenes Santa Maria. Pues este muchacho después se atrevió a regresar a la cueva de Alcalica y fue y quemó las escobas. Si no lo curan, sí se muere. -¿Y cómo fueron sus síntomas de este hombre? Según dice que nomás le agarró como dolor de cuerpo, sin ganas de hacer nada, como fueron sus síntomas así, lo descubrieron. Como mi papá trabajaba ahí, ya les dijo que se fue a meter a Alcalica. El muchacho no había dicho nada, pero mi papá lo adivinó, porque mi papá lo curó y soñó. Y salió con lo que le curó y le dice "tú te fuiste a meter a Alcalica". Y sí fue cierto, porque después fuimos. Si se ha fijado más, sí se muere. Entonces, es muy castigador ese lugar Alcalica. Pero le digo a usted ·antes sí, pero ahora con el deterioro que ha habido ya está perdiendo la magm. 47 43. La gente de doña Cleotilde, la tiempera Que esa señora nos va a venir a adorar un ser. Pero en vez de ir a adorar así con una florecita, a cubrir con aquel corazón grande, grande que nos da para adorarlo a un ser que estima uno , que quiere uno, que se encomiende, las gentes de doña Cleotilde va a chupar allá en la pinche cocina. ¡Ira, harto alcohol! Llevan sus cobijas, llega el agua, el aguardiente. Los encuentras (a la gente de ese grupo) encimándose, haciéndose cosas que no deben hacer. Ésa es de su gente de doña Cleotilde. El padre que venía de aquí de Tlayacapan, Morelos, los iba a sacar de Alcalica. Hubo una ocasión que, con perdón suyo había una mujer encuerada, ¡con todo el asunto de fuera! Y el hombre también estaba encuerado. Eso es una burla, por eso digo yo no sé por qué es que mi compadre crea en esa gente. Si de veras pensaba cuidar las cosas, quedaron en pendejadas en vez de hacer lo que era adecuado. Alcalica es como si fuera una mujer, en vez de ir a adorarla, abrazarla o quererla, lo que hacen en Alcalica las gentes de doña Cleotilde es como si fuera una violación. Así pasó. Hubo una ocasión en que también se enojaron por lo que pasó. Porque luego mi mamá iba con ellos, ¿verdad? Y los encontraba a uno. Y ahí tiene que para trabajar, esa señora no sabe ni cómo trabaja. Agarra y viene el granizal, si hasta rezumba, y nomás agarran un cachito de palma y lo prenden así y le echan lumbre. - Bueno ¿usted qué?, ¿es espiritista o qué?, están cerrando los ojos, usted cierra los ojos. Sí aquí se trabaja con los ojos abiertos, porque vamos a darle la cara a Dios y a enfrentar el temporal que viene. No, sí aquí vamos a defender la cementera de todo el mundo, 48 pero con los ojos abiertos, frente a Dios, no cerrando los ojos. El padre de Tlayacapan dijo eso cuando estaba por acá, pero ahora creo que ese padre se fue para el otro lado, cerca de Estados Unidos, hacia el norte ... Es el padre Salvador, Chava, así le decían. Ese padre era de la diócesis de Cuernavaca. Doña Cleotilde es del grupo de Juan, hora sí, como quiera decirse, porque ella tenía su grupo. Hora sí te voy a decir la realidad, nosotros somos trabajadores del temporal, somos ... , ahorita ustedes dicen tiemperos, "... pero somos temporaleros", decía mi madre. "Somos temporales", mis abuelos decían así. Nosotros tenemos una capacidad de detener un rayo, detener una centella, detener un granizo, una culebra de agua, que hora les dicen tomados, la Canícula pasarla. Pero necesita uno saber trabajar todas esas cosas, porque no nomás los que dicen "lo sé trabajar", y no lo saben. Yo me doy cuenta quiénes son tiemperos y temporaleros. He visto que andan viendo cómo anda la tarde, cómo amanece, cómo oscurece, cómo vienen las nubes. Simplemente en el hecho de ver se sabe quién es tiempero. Como dices tú, se para uno en la mañana y lo primerito que luego luego se siente al pararte, sientes la energía del mundo. Porque hay veces que uno dice, ¿cómo qué día?, creo fue antier, ¿no sintieron el aire que subió en Ozumba, muy helado?: "Esto como que llama a hielo". Ya comenzó. ¡Ay, Dios mío, señor no me vaya a dejar sin maíz. Luego luego la energía que llega del hielo, se siente. Que no me vaya. Mira nomás el hielo se siente. Al venir en el campo, mira nomás luego se siente ... se sentía ... a ver qué Dios dice ... Pues mira, si te platico, Gume y Virginia, que vinieron algunos antropólogos, y ya registramos a tu papá, de una vez te lo digo, tu papá y Pedro ya están 49 registrados. Ya mandé a traer a los antropólogos, ya están registrados. 44. Xochihuacihuatl Sobre aquella mujer llamada Xochihuacihuatl, yo lo único que sabía era que ella "trabajaba". Creo que era curandera. De ahí más que supiera yo que hiciera más pues no ... Hora, según dicen que hacía temas cal. Pero ella compró un ranchito por ahí, Tepeyehuatemas. Esa señora Xochihuacihuatl era muy asidua a Alcalica. Es como le digo a usted, todas esas personas que curan se cargan de muchos malos espíritus y después allá los va a desalojar, como a dejarlos a ésos que salen a curar, ésos que son curanderos. A mi hermano Pedro le pegó la centella. Él trabajaba el tiempo, también cura. Es que según como le vayan dado el permiso para ir y se le va dando trabajo. O sea, todos esos, ustedes como tiemperos, tienen la autorización de curar lo relacionado al temporal, algún aire. Por ejemplo, donde pega la centella, sea vieja o sea nueva, llega la persona oliendo a cosas olorosas. Pero de otras cosas de curar .. . allí lo levanta, allí lo entrega. Pues ya allí uno lo puede curar. Pero de otras cosas de curar, les hacen maldades. 45. Levantar la sombra [Gume] -En el lugar donde nació uno allí levantaban la sombra, en un rincón, donde nacía un niño, levantaban la sombra. La matrona o partera es la que se encarga de levantar la cama. El día que se bautiza, puede ser más o menos o un mes. Ponen ofrenda. Le ponen su taquito a la cama, aunque esta costumbre desapareció. Pero ese taquito ya se lo lleva la matrona y también comparte con los invitados y es así como da resultado este ritual de levantamiento de sombra. 50 46. Felipe Parrilla Ramos, le pegó el rayo En Calalpa, entre Xicoténcatl y Madero, allí le cayó un rayo, o sea el segundo, llevaba su yunta con mulas y lo aventó a varios metros donde estaba. Sus mulas quedaron muertas, tuvo bastante tiempo las marcas de la quemadura, ése fue el segundo. Pero del primer rayo que le pegó dice que a partir de allí se le empezó a caer el pelo, y allí el rayo le mató a dos perros y lo aventó a varios metros, y allí no le quemó nada. Nada más el cabello, se le empezó a caer el cabello, no se vio enfermo, andaba normal. Pero al día siguiente nomás tenía el susto. Del primer rayo no lo llevaron a curar porque se sentía bien, pero en el segundo sí lo llevaron a curar con un especialista de limpias y le dijeron que él ya podía curar. Y un tiempo limpió y dejó de curar porque decía que en la noche se le subía el muerto y hasta lo golpeaba y amanecía golpeado con muchos moretones en su cuerpo y le entró temor. Mucha gente lo conoció de aquí de Ameca, que él estaba destinado para curandero y él, por miedo, ya no quiso curar. Y cuando está platicando en la esquina de su casa y empieza a lloviznar o a nublarse, rápidamente se mete a su casa; y le da miedo escuchar el goteo, los relámpagos y los truenos de los rayos. 47. Las biólogas están equivocadas Ellas, las biólogas, dicen que la sierra es más vieja que el volcán, que la sierra puede ser su mamá del volcán, pero cómo va ser verdad eso. La mayoría de la gente sabe que el volcán y la sierra se llevan los mismos años porque son pareja, ¿sí o no? Y no, ellas dicen que no, que la sierra es más vieja que el volcán. 51 48. El triángulo amoroso Fue cuando el Nevado de Toluca le quería quitar la Sierra (Iztaccíhuatl) al Popocatépetl, entonces el volcán Popocatépetl, le aventó un trancazo y le tumbó la cabeza al Nevado de Toluca. -Mi papá lo vio bien, y ya era boyero. Tendría como unos quince años. El volcán de Toluca. Eso sí es cierto. Mi papá lo vio. Ya era boyero. Tendría como unos quince años. Y de eso, le pegó a la Sierra. Paso grande, vamos, pasamos Paso grande, la milpa, estaba yo descargando el arado y que me truena, truena la Sierra en el volcán, truena. ¿Pa' qué corren? Ahí va la lumbre, ahí va. Salió de piedra del volcán, iba ardiendo. Iba cayendo a los pies de la Sierra. El volcán de acá del de Toluca le quería quitar la Sierra. Se dio cuenta el Popo, primero le pegó al volcán y luego le aventó una piedra y le pegó a la Sierra, eso sí lo vimos. La corona que tiene la Piedra del Conejo, es signo de poder espiritual. En ella se marca con sus grabados sagrados parte del futuro de nuestro México. 52 Alrededor de la Piedra del Conejo, se pone la flor de nube como signo de mucha agua. Es lugar donde se pide permiso (la puerta) para poder entrar a las cuevas de la montaña. 49. Don Cheto era boyero Don Cheto estuvo cuatro años de boyero en el Iztaccíhualtl. [Don Cheto] -Estaba yo en la cueva de Acoyoco, cuidaba yo hasta aquel lado Huejotal; cuidaba yo para acá para la Venta, para en frente de la Televisión (repetidora de Altzomoni), que ése le decimos el Llano Grande. Luego me iba yo para el volcán, Barranca Seca, Paso del Guajolote, allá iba yo a dar cuenta. Luego regresaban los animales pa' acá. Allá iba yo a dar vuelta y luego regresaba yo los animales para acá. Se comía de a tiro allá a los animales en la Joya, había harto huesamento. Fíjate. Luego regresaba yo para acá. Para acá donde está la Televisión. Lo malo es que cuando me regresaba luego se regresaba y se iba para allá. 53 50. Presentación de Juan Galicia Presentación de Juan Galicia, Tecamachal, en el templo de Tepequiztemia. Don Cheto pide permiso para iniciar la iniciación del nuevo granicero y grita a las montañas diciéndoles "Acalicanzingo". Madre Santísima, aunque ya no trabajas por ahorita, Madre de Dios , Madre Santísima, válgame Dios Padre, Dios Hijo, Espíritu Santo. Almulanzingo, Uheyotitla, Calaveras , Tlalchaloni, Santo Domingo, Dios Padre, Dios Hijo, Dios Espíritu Santo, Coronilla, Madre Santísima de Dios, estás aposentada Madre Mía, tenga nuestro alimento Madre Santísima. Atlaquitilulco, Tlalcamale, Santa Madre, dónde estás aposentada, Madre mía, tengas nuestro alimento de esta visita, Dios Padre , y que das nuestro alimento. Todos los compañeros trabajadores del tiempo que vengan aquí en este día que se va a recibir el mayor Juan, granicero, y conózcalo bien para que ya cuando lleguen a sus casas lo esperen, Dios Padre y Dios Hijo. Don Cheto le dice a Juan: "póngase al pie de la Cruz para presentarlo" y vamos a cantarle un medio rosario Don Cheto les dice a todos los presentes que se acerquen y empieza a rezar. "Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor y Dios nuestro , en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. Desde el cielo, una hermosa mañana/ desde el cielo, una hermosa mañana/ la Guadalupana ¡ la Guadalupana/ la Guadalupana bajó al Tepeyac. Padre Nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Corazón Santo tú reinarás, tú nuestro encanto siempre serás / Corazón Santo tú reinarás/ tu nuestro encanto siempre serás. Vine a tus plantas, mi Dios querido , soy revivido Dios de bondad. Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre , venga a tu reino, hágase Señor tu voluntad así en la tierra como en el cielo. 54 Todo este recibimiento llevó más de una hora, con un fuerte aguacero afuera de la cueva, y fuertes truenos de los rayos, haciendo este ritual más místico, como si la naturaleza estuviera esperando a un nuevo trabajador del tiempo. Terminando el evento no pudimos bajar hasta que el agua parara. Tepequiztemia está rodeado por otros parajes llamados Cuaquiahua, Yzyntytla, Tecahuyzco. Dice Juan y Gume (hijo de don Cheto) , que don Cheto es el único que pide el agua hablándole a las montañas en náhuatl, y no como otros que nomás tienen la costumbre de enflorar y ponerse a chupar el alcohol que llevan. Y también la comida debe de servirse en hoja de tamal y no en plato de plástico, así era la costumbre de antes. En esta cueva de Tepequiztemia, se le debe traer sus tlacoyitos, tamales de anís y frijol, igual que en Amacuilecatl. Y también dicen que para ofrendar al Cuatepochtle es en Alcalica y en Tlalpancinco, o como lo vaya pidiendo en sueños o apar1c10nes. 51. Juan dice que él encontró Tepequiztemia Juan dice que él encontró el templo de Tepequiztemia. Desde años atrás, Juan anduvo cortando trozo de madera y frente a la cueva cortó un árbol que tenía muchas cosas de alguna ofrenda, como listones rojos , amarillos y muchas otras cosas de una ofrenda. Y dice que a partir de que tiró el árbol le empezaron a suceder desgracias, se mató uno de sus trabajadores en el carro que traía, murió una hija y económicamente andaba muy mal. Esto le comentó a don Cheto y el señor le dijo que ese templo es muy castigador porque don Cheto desde chico asistía a Tepequiztemia con su papá, y por lo tanto Juan tiene que cumplir un mandato, pedir perdón y recibirse allí para que le cambie su vida. 55 52. Pedro, hijo de don Cheto ¿Cómo juegan los toritos en las ofrendas cuando no llueve? [Pedro] -Se tiene que poner una olla de barro con agua, una cubeta, jícara, una cera, tepocoxcomitl, sahumerio, la música, mole, frijolitos, tamales, tortillas, como si fuera una fiesta; y comienzas a trabajar y también sahúmas el altar, comienzas a hablarles a los viejos como a doña Hermelinda Conde, a don Félix Castillo, a Camila Evangelista, a doña Alberta Castillo, a don Marcial, a Juventino, a doña Sabina y también el que ya murió, mi compadre Lucio de Nepopualco, Morelos. Todos se nombran, Luis Rayo, la culebra, Santa Magdalena de Macazehua, Manuel de Popocatépetl, Rosita del Iztaccíhuatl, San Miguel Arcángel. Bueno, ésa es una historia grandísima. Todos esos seres espirituales se nombran para que se reúnan y merezcan esta ofrenda y luego que ya merecieron se ponen los refrescos y sus copitas; pulquito, lo que gusten y si están acostumbrados a sus cigarritos, ya que acabó lo que da uno de comer, se ponen en el altar y darles de comer a los reyes, y ya se pone la música y a bailar los toritos; se baila como gentes como si estuviera bailando con una persona. Los cargas vestidos con sus flores y los bailas, y te ponen una corrida y uno que sea el hombre y la mujer con un manto rojo como si estuvieras toreando un toro y, así el tiempo se trabaja, también hay personas que saben florear la riata como los charros que la saben florear. En esos momentos se forman las nubes y así pronto se caiga el agua. La riata es la que forman las nubes y con el viento de ésta las formas, cuando ya los bailaron y se acabó de hacer el trabajo. Antes de poner los toritos en el camino de flores, tiene que salir la jícara con la naranja rociándola hacia los cuatro puntos cardinales en forma de cruz para sacar el agua de allí, Donde se está 56 haciendo el ritual; y ya ve uno cómo se forman las nubes a punto de soltar su agua; es cuando ya se le abre camino a los toritos para que salgan y es también cuando sale la olla de granizo y la olla del agua; y luego tú ves el cambio en el cielo, ya va a ser diferente. Todo esto es como si fuera juego de niños, a pesar de que ya somos adultos. Tepequistemia, lugar es muy importante para este nuevo trabajador del tiempo, porque aquí fue donde empezaron sus penares muchos años atrás. Anteriormente tuve los toritos pero se me quebraron y ya no los pude obtener, aunque yo los trabajo muy diferente a mi papá; yo trabajo con mis niños dioses la fuerza máxima y les hablo a los serenos y les digo lo que les corresponde y nombro y nombro a los que te acabo de decir; a doña Hermelinda Conde, a todos los seres que me escuchan y junto a los doctores brujos y al ejército de cuando hubo la revolución, a todos ésos los llamo como a la Iztaccíhuatl y al volcán, y nombro al Señor del Sacromon te y me pongo a bailar, pero en mi baile es como te digo comienzo hablar lengua 57 náhuatl, pero como estoy en mi trabajo ¡no te distingo! Porque no estoy ahí, mi espíritu es el que está con los seres y mi cuerpo con ustedes donde estoy trabajando. 53. Los nombres de la lztaccíhuatl y el Popocatépetl Al Iztaccíhuatl: Santa Magdalena de Macazehua, por eso es de origen santo, y Manuel de Popocatépetl, porque cuando esto surgió fue por Dios, ellos eran seres humanos y por Dios los encantó. Las personas viejas saben que fue un encanto y para nosotros los graniceros, esos seres mágicos que fueron humanos trabajan con nosotros. Las vírgenes que también trabajan con nosotros son Santa Magdalena, protectora del temporal; Santa Bárbara, protectora del granizo y también a Sor Juana Inés de la Cruz por su riqueza espiritual que dejó en esta región, y son consideradas vírgenes del tiempo. 54. Pedro, como curandero Cuando ciertas personas venían a curarse conmigo ya me dejaban doscientos pesos y les arreglé su problema. Y a todos les digo que se van a componer. Pero de este amigo que los curé les dije: -Jamás se van a acordar de mí; ahorita lo que me traen es una regalía para que viva y coma, pero ¡jamás se van a acordar de mí! -¡No, don Pedro, sí nos vamos a acordar de usted! -Bueno bendito sea Dios que sea así. Últimamente tuvieron un problema que no le pagaban un dinero de su trabajo, le quedaron a deber doscientos o doscientos cincuenta mil pesos y no le pagaban y no le pagaban y los otros ya se ponían caprichitos de no pagarle y entonces me dice: 58 -¡Don Pedro!, le voy a regalar unos diez mil pesos si usted hace que me paguen. Y yo le dije: -Y o no puedo hacer nada, nada más yo puedo pedir y Dios es el que dispone, pero no me prometas nada de dinero. Y me vuelve a decir: -¡Verdad de Dios, si usted hace que me paguen m1 dinero, yo le regalo diez mil pesos! -Y a no me prometan nada. Y me puse a hacer mi trabajo como Dios manda, ya después al poco tiempo le dieron su dinero con todo lo que se le había juntado, le dieron trescientos cincuenta mil pesos. ¿Y ustedes creen que se acordó de mí?, hasta la fecha ni regresaron, pero yo les he hablado y me contestan y cuando le digo que soy Pedro, hijo de don Cheto, luego luego me cuelgan; y le digo a mi señora, nosotros no estamos para exigir, esto ya no es cosa mía ya es cosa de Dios, si le pagaron su dinero y se fue a embriagar y embriagar, y su mamá se le va en puro llorar y llorar y ya sin dinero y si él prometió algo al Niño Dios y al Señor, hubiera cumplido. Más vale no prometer si no vas a cumplir, ¡cumple y todo será para ti! Y luego le digo a mi señora que el gusto que me queda que ayude desinteresadamente y de la gente que he curado las voy invitando para que se integren al grupo de trabajo del tiempo. 55. Pedro, como exorcista Vino a dar un muchacho de aquí de Chalco, pero ese traiba [sic] la posesión del demonio, ya venía hablando cosas y tonterías, y vino y me dice: -Compadre Pedro, vengo bien mal, siento unos sustos y veo cosas que no son de aquí. 59 -¡Ah, qué muchacho, qué cosas habrás hecho! Y luego me dice: -Y o veo aquél, lo veo que me sigue y anda detrás de mí. -¡Ése cabrón no te hace nada -le digo- de la mano de Dios éste no te hace nada! -Entonces, ¿me ayuda usted. Si has de cuenta que por ratos era un ser humano y después cambiaba y se volvía malo y comencé a trabajar en la casa y empecé a hacer exorcismo y salí adelante con mis oraciones y rezos y gané, y hacía feo, que se entiende, como el demonio y todo lo malo no es de aquí es de allá, todos pueden queriendo y este muchacho quedó bien. 56. Pedro y sus viajes en sueños [Pedro] -Cuando está retirando el tiempo y no quiere llover por estos lugares y por otros si llueve me llevan a caminar lejos, que ni qué calles son y luego les platico a mis hijos, fíjense que fui a lugares que ni conozco y hay muchas cosas que comer pero ese lugar no lo conozco, y me dicen mis hijos ¡ay papá si aquí estás! Eso es como levitación vieja, uno sale a ver el campo, a conocer los lugares donde hace uno falta. Pedro cuando cura no sueña. [Pedro] -Yo no tengo permitido, soy diferente a mi papá porque él tiene el don, y es rezandero y nosotros no porque somos mayores y somos de grado, no tenemos permitido soñar el problema del enfermo, lo captamos aquí cuando lo estamos curando, a la visión; yo puedo decir que tú tienes problemas en tu casa o que vas a tener problemas así, llegas y si los tienes yo así le hago. Y cuando llega una persona y me dice, quiero que me ayude, y le digo ya sé a qué viene usted, su marido le hizo esto o tuvo usted un problema con un vecino, y me dice ¿cómo lo sabe usted? Pues 60 nomás empezando a curarla, empiezo a visualizar el problema al momento y le puedo decir su mal, ése es mi trabajo para ayudar a mi gente como Dios manda, para eso fui elegido por la centella y el rayo, por el mandato de Dios. La cruz principal es adornada por los trabajadores del tiempo. La otra, dicen ellos, la pusieron al revés como signo de poder o maldad y se le viste muy poco. 61 57. Pedro habla sobre sus mayores Los mayores son los que mandan en todos los lugares como Alcalica, Almulancingo, Coronilla, Tlalquitilulico, la Macuilecatl, todo eso es lo que significa mandar el mayor; mayor quiere decir que él es el responsable de todos los lugares y gobierna esos templos para que puedan entrar o puedan acudir y puedes llevar a las personas a visitar. Y tú sabes que dan el don para lo que quieras y deben saber que en qué lugar, cuáles son los comestibles que les gustan, porque cada templo es muy diferente: Alcalica, le gusta mucho el jerez pero toma muy poquito ya que no le gusta tomar más. Almulancingo, le gusta el pulque y la copita, puede tomar hasta donde quiera. Coronilla, aquí son muy distintas para comer, aquí no creas que te comen el mole y frijoles con arroz, sino que comen la alegría, puro dulce, calabazate de colores, palanqueta, camotitos blancos, allí los espíritus son a todo dar, también se toma pulque y copa. Tlalquitilulco, allí llevas tu copa y tienes que tomar con ellos (espíritus), porque si no tomas con ellos te juegan y te hacen hacer cosas que ni cuenta te das y la gente que te rodea se divierte de ti. Primero agarra la botella y le das a cada crucecita; cuando terminas de darle a las cruces, ahora sí puedes brindar con tus compañeros y te las hechas enfrente de todos y a repartir toda la copa que te queda, y aquél que dice no quiero es el que baja bien tomado, los espíritus le hacen la maldad, no uno. En El Número 8, se trabaja el mole, tamal de frijol, frijolitos, arroz y tortillas azules. 62 Tepequistemia. Después de una suculenta ofrenda puesta en la cueva y de la ceremonia de un nuevo granicero, todos se preparan para comer acompañando a los celestes de la montaña. Tepesquistemia, también se trabaja el mole, tamal de maíz, frijolitos, arroz, tortillas y galletas nevadas con su pulque y copa. La Amacuilecatl, también es como Alcalica, se come mole, frijolitos, arroz, tortilla, su copa y fruta. 58. Cada cueva puntos cardinales Es un sistema que uno como granicero tiene uno que llevar. El primero que se tiene que enflorar es Alcalica, es simbólicamente la matriz espiritual. Segundo, Almulancingo, y formas una mano. Tercero, Tlalquitilulco, se forma la otra mano. Cuarto, Coronilla, formas los pies, y de esta forma se complementa la cruz de nuestro Señor crucificado, y los cuatro puntos cardinales que nuestros antiguos ofrendan a la naturaleza. 63 Tepequistemia. La cruz mayor y las menores, revestidas con flores y papel, simbolizan a la naturaleza y da n renombre a la palabra Amaquemecan. 59. Tlaquechpa Conocido como El Corral donde don Guadalupe Cisneros iba a ofrendar con muchas personas, y en este lugar piden un poco de dulce, mole, frijoles, 64 tortillas blancas, tlacoyos de haba; y antes llevaban un toro para que lo jugaran en forma de jaripeo, hacían baile, tomaban mucho alcohol y pulque, donde se quedaban varios días conviviendo con la naturaleza y pidiendo buenas lluvias para los campos de siembra. En esa cueva siguen grabados el nombre de don Guadalupe Cisneros, y un pez también, una cruz remarcada en la pared de piedra en la entrada de la cueva. Tlalquitilulco. La presencia de fruta y comida significa alimento para los espíritus y para que nos ayuden a tener agua suficiente para nuestras tierras de siembra y huertos. 60. Tlalpanzinco Ese lugar es bueno por una cosa y malo porque está cerca el templo de las parteras que queda hacia debajo de la cueva de Tlalpanzinco, y le llega mucha energía de las curanderas que traen muchas fuerzas 65 negativas. Allí les gusta comer bien a los espíritus. Igual como Alcalica, su pulquito, hasta su copa y su cerveza, mole, tamales, frijolitos, arroz, pollo y guajolote. Tlalpanzinco. Don Cheto y su hijo sahúman a las cruces y ofrendas para purificarlas y así estar limpias de malos aires y sean del agrado de los espíritus de la montaña. 61. El Provincial Anteriormente lo visitaban mucha gente de San Pedro Nexapa, hacían mucho baile, mole con pollo, arroz, tortillas, allí iban todas las mujeres de chincuete, lo usaban anteriormente las antigüitas, usaban su falda hasta abajo con una cinta amarrada y una blusa de chaquira, ése es el chincuete, ésas son palabras nativas de esta región y el hombre vestía de calzón blanco y su camisa bordada con una águila o algo representado a la naturaleza o un nopal, todo eso se usaba pero ya se perdió esa costumbre. Como en las cuevas, las viejitas entraban descalzas; todas las viejitas de esta región que iban a enflorar las cuevas, llegaban con sus naguas hasta abajo y entraban descalzas porque son lugares santos y 66 respetados, y ya en estos tiempos ya se va perdiendo la devoción, las generaciones van cambiando y ahora ya entramos como burritos con zapatos; y el entrar descalzo es símbolo de pureza y el zapato viene sucio de muchos lugares donde ha sido usado. Y descalzo, pisar la tierra de la cueva, es como si fuera tierra santa, y estar en contacto con la naturaleza y los espíritus. Tlalpanzinco. Las velas de codal y cebo representan la luz de la vida de quienes vivieron y ofrendaron estos lugares. 62. La menstruación dentro de la cueva Es malo que una mujer esté en su costumbre y dentro de la cueva, los rituales no surten efecto. Por esta situación, anteriormente había una encargada de preguntarles a todas las mujeres que si iban en su menstruación; ella les decía que podían observar desde lejos el ritual más no podían entrar ni ayudar en la cocina, costumbre que se está perdiendo porque la sangre es mal, los espíritus no bajan y también un borracho dentro del ritual no surte efecto, en lugar de hacer las cosas bien va agraviando a los demás ya que 67 nosotros vamos a hacer un trabajo limpio y puro, ya no podemos realizar o no surte efecto. También nosotros reprobamos a esa gente que también se hace pasar por granicera y van a hacer esas cosas sexuales ya que nosotros cuando vamos a limpiar la cueva encontramos muchas de esas cosas en nuestros lugares sagrados. Cierta vez, unas personas encontramos dentro de la cueva de Alcalica haciendo sus cosas en una cobija y habiendo unas personas ese día subieron los padres, que cree que tuvieron temor que el padre les llamó la atención, pues no, y les dijeron a los padres que ellos eran unos charlatanes y que ellos podían hacer lo que quisieran, y luego después cuando ya vieron que empezaron a vestir las cruces y poner la ofrenda y entonces comprendieron que sí eran sacerdotes y se bajaron de bolada. Fíjate lo que es la mano de Dios que ese día se bajaron a la carrera y su mayora, granicera, de ellos se quedó con nosotros y empezó a insultar a la gente, ¡ah, un fuerte granizal! Y engruesó como medio metro de altura y esas cosas no son permitidas porque mueven el tiempo y perjudica a la naturaleza. Y como dijo Dios, hay que multiplicarse pero no en lugares sagrados por eso pasa lo que pasa. Esto pasó por el año de 1977, en ese tiempo estaba la congregación de Cuautla y venían indios de Estados Unidos y me dejaban canastas de pan, dieciséis cajas de refrescos, trece cartones de cerveza, dos costales de piñas, todo eso lo repartía a la gente que nos acompañaba, para mí era mucha y mejor que lo aprovechen. 63. Juan Muñeco, de Nexapa A Juan Macario Mendoza, lo conocemos como don Juan Muñeco, su mamá fue hija de Andrés Mendoza, fue Tomasa Mendoza. Mi papá Maximino Macario, entonces mi abuelo fue Andrés Mendoza, tatarabuelito 68 de Moisés Vega Mendoza. Este es el parentesco de Juan Muñeco y Moisés Vega Mendoza. [Juan Muñeco] -Como unos ocho o nueve años, o diez, estaba escuincle, apenas empezaba yo a salir, estaba yo chiquito. Juan Macario Mendozat (don Juan Muñeco), granicero de San Pedro Nexapa, Amecameca. Uno de los mayores en poder y magia de su pueblo y heredero de la medicina tradicional como curandero. 69 Me dice: -éste , ése es tu agüelito, es tu agüelito, Don Andrés Mendoza. Dijo él: -Mire, mire , usted, mire usted, ésta es su familia de usted, ahí está mi hijo gordo, Alfonso, toda es su familia, y allí empezamos a reconocer. Ya después ya estaba yo más grande, me dice la difunta Bernardina Sales Simón: -Tu papá ya está grande, está enfermo, fijate que a nosotros nos falta maíz, no tenemos nada, ve con tu papá. Voy a rebuscarles, ¡eh!, entonces el chico fuimos y ya estaba, cuando lo conocí al difunto Gordo. Ya él me fue enseñando de los demás. Entonces, tu mamá y mi abuelito fueron medios hermanos. Ora eso se reconocen. ¡Ah, eso!, tú llevas Mendoza, mi abuelito era tu tío y tu abuelito era don Andrés Mendoza, ése es el mero, ése es el mero mero. Y se veía como cualquier hombrito, pero mi abuelita se llamaba ... ora verás , ¿cómo?, ya no me acuerdo pero me dijeron .. . estaba yo escuincle, un día me dijeron, pero como ya ves que decía que era mi tía, pero no era de acá, pero eso, nada más que mi tía. Sí, pero no me acuerdo bien cómo se llamaba ésa, pues como estaba yo escuincle, no toma uno todavía mucho cuidado, mi tatarabuelito Andrés Mendoza los reconoció ... y de ahí se expandió la familia. Antolín Mendoza, también es pariente. Su mamá de Antolín también era mamá de Camerino, ésa es la que no me acuerdo, de todos los dejamos así, y ahorita entre parientes. Entonces la familia se extendió, sí, y ahorita de parientes pues ya nomás yo y Camerino y ustedes, que están también en San Pedro (los parientes de Moisés Vega Mendoza). Sí, porque su papá de usted (de Moisés Vega Mendoza) lo conocí bien, y él nos platicó todo, porque fuimos a pizcar, y allá andaba él. Entonces, fue cuando ya me empezó a 70 platicar de ora de Marcelino, qué cargo tiene. Yo no me daba cuenta de nada. Mi mamá Bruna Mendoza Jardines. Ya después, ya como yo era más grande, ya me empezó a platicar, fue cuando ya empecé a agarrar la onda más. Sí, más antes nos platicaba, pero como y era escuincle, no tomaba yo en cuenta. No, ése si no, al Toto, no, ése sí no conocí, el que mataron los Santamaría, ése sí no lo conocí, en tiempo de la Revolución. No, ése no. 64. Yo soy el que los tengo que mandar Ella, doña Silvestra, sí se coronó, sí lo recibió, pero ella es por herencia. Porque cada quien, cada trabajador tiene a su cargo. Entonces, ella, doña Silvestra, ella no, nomás es herencia de su abuelita. Es decir, porque algunos graniceros nomás son herederos; y hay unos granicemos que no, hay unos que les pega el rayo. Como hora o no, yo soy granicero por derecho: es mi destino, de allá arriba. Y me manda a hacer mis trabajos el de allá arriba. Así es que yo soy el tiempero. Porque yo me dijo el mayor de acá que mandaba·más antes, que yo quedaba en ese cargo como mayor. Yo por eso cuando me voy a los templos, allá en Provincial y lo vio doña Silvestra y le dije a su marido que se llama Vicente: mira, Vicente, yo voy a trabajar, a lo que vine, vine. Entonces allí estábamos hartitos, y yo empecé a trabajar lo que es mi trabajo y luego tan pronto como empecé a trabajar que se suelta el agua. Luego luego, cuando yo acababa de trabajar, ¡pegan al hilo dos, dos relámpagos! ¡Luego luego, se siguieron! Y ése es mi trabajo, así es que yo soy el que los tengo que mandar a ellos, a los otros graniceros. Ese cargo me dieron los de allá arriba. 71 65. Tengo mi rezandero Sí, yo tengo mi rezandero, es su marido de doña Silvestra, pues éste también me ayuda y le ayudo. Y entonces yo, casi cuando y voy a trabajar, le digo a mi rezandero: ayúdame, que vamos a cumplir, ¡eh!, ¿tú qué quieres?, ¿así nomás o pedimos de lo alto?, porque yo cumpliré lo que es mi mando. Ahí terminó. El sahumerio es muy importante en esta ofrenda ya que de él depende que le guste a los espíritus para que se acerquen. 66. Yo les hablo a los de arriba Sí, yo les hablo a los espíritus, a los de arriba, los meros jefes ... Bueno, yo les pido permiso, es decir, y mi compañera la Isabel, nomás los dos los que pedimos permiso. Doña Silvestra, a un lado, eso ya cada quien pida, que pida lo suyo. Sí, porque Isabel le 72 pegó el relámpago, ella tiene más cargo. Entonces ella la tengo como mi segunda, ¿me entiendes? Esta colorida ofrenda de frutas y flores es una invitación a Jos espíritus de graniceros y trabajadores del tiempo para que se acerquen a convivir y así las peticiones resulten favorables. 67. Cada quien le van dando su cargo Cada quien le van dando su cargo los de arriba. Como hora yo soy el mayor. Como hora Chabela es mi secretaria, mi segunda, vamos. Entonces ella me acompaña a pedir el agua, las lluvias, ¿sí? Y, este, pues como ora Silvestra, esa nomás es ayudanta, ¿ajá? Esa ya nomás es ayudanta, pero el mejor cargo lo tengo yo y, este, Chabela. 68. Las gallinas y aves empleadas en curaciones Curo con gallina, cuando puedo, es casi más, más abajo me dijeron que quedan más bien los enfermos de 73 gallinas de acá, criollas o guajolota negra. Gallina negra cuando lo piden los de arriba o guajolote. Con el huevo de pato nomás una vuelta trabajé, pero siempre trabajo con el blanquillo de gallina. Y entonces, cuando me mandan o me piden los de arriba de, este, que se haga, que se lleve una gallina, pues yo debo de cumplir. Hora el enfermo, si el enfermo le toca tener el cargo igual ... La gallina, el enfermo lo limpia con la gallina, y esa gallina se tiene que, este, que matar para que hace la comida. Y ésa se lleva para los templos, allí se pone. Lo limpiamos al enfermo, la matamos a la gallina y esa gallina dedicadamente para los templos, para la ofrenda. Pero cuando limpian al enfermo, la gallina debe de estar viva. Lo limpiamos al enfermo todo , todo. Luego la gallina ya está dispuesta para matarla, para llevarla de una vez. Cuando cae el relámpago de arriba y le pega a alguno, ya se sabe que es dedicada una gallina completa. Entonces la limpiamos y se mata y se hace la comida y se lleva, se va a entregar a donde está pedida la gallina. Antes había una costumbre que bailaban el guajolote en los templos. A veces piden gallina, a veces piden esos animales. Porque aquí abajo piden un pato. Aquí donde vive la Maura, pa' abajo. Allá está otro lugar que ya no lo quieren poner "Pepe Cruz" pero me dijo el otro día una muchacha que allá lo soñó, que lo soñó al animal, al pato. Entonces ese pato, ese más antes era un lugar que ponían el estambre, la fruta. Todo allí llevaban. 69. Cómo curar con huevo agüerado La buena curandera(o) conoce varias formas de curar o limpiar con huevo de gallina o pato. Las limpias con huevo agüerado son más efectivas, más que los animales nombrados, es muy significativo según dicen que el huevo agüerado tiene más fuerza ya que no 74 logró su ciclo de supervivencia o sea que quedó a un término medio y la muerte no llegó porque no tuvo desarrollo y no logró nacer, y se complementa las tres fuerzas de la naturaleza: ¡naturaleza, vida y muerte! Estas limpias se le hacen a una persona en caso de emergencia cuando se encuentran muy malas y hacer un desalojo muy fuerte , ya que la curandera(o) está consciente del trabajo que realiza y tiene la facultad y energía para saberse desalojar, porque también a ellas se les pasa el mal y sufren mucho. Por eso ellas dicen: "estos trabajos no son gratis, son trabajos muy especiales, no cualquiera los puede hacer, se necesita mucho conocimiento y magia para·hacerlos". 70. Cómo limpiar con huevo de pato El huevo de pato para hacer limpias es mejor que el huevo de gallina y guajolota, por su alta absorción a lo espiritual, son más de la tierra y la humedad, y esto quiere decir que tiene contacto con la naturaleza. El buen granicero o curandero lo entiende de esta manera ya que sus limpias son más efectivas. En esta zona hay veces que se dificulta conseguir el huevo de pato, por lo que es muy dificil que alguien le dé una limpia con este tipo de huevo. El caminar hacia las cuevas para hacer petición y el sudor que saca del cuerpo es la penitencia para que tengamos lluvia. 75 71. Un templo olvidado, Pepe Cruz Ese lugar, donde la muchacha soñó un pato, se llama Pepe Cruz, sí, porque lo quieren borrar, pero no, no se puede. Ése es un camino, un lado del camino. Sí, en Pepe Cruz ofrendaban todos los que trabajan en eso, porque, es decir, los templos, andamos todos. Cuando un enfermo, asegún el templo que él toque, allí es donde vamos a cumplir, eso es todo. 72: De cómo doña Silvestra se hizo tiempera [Juan Muñeco] -Se tiene usted que recibir de tiempera, doña Silvestra, para que ande con usted como yo, trabajando. Entonces, usted doña Silvestra, hable usted a su marido, porque si no, no se va usted a aliviar. Este cargo que tiene usted es para que empiece usted a trabajar. Me dice , me dice: -Pues mira, yo ya me anduve curando, ahí está mi marido que diga. El marido que era obrero, trabajaba en la fábrica su marido y todo ese dinero que lo iba guardando, se acabó con tal que se aliviara y no se pudo aliviar. Entonces ya me dice, dice "sí", me dice su hija: -¿Sabe usted que ya se quiere levantar a ... ? Le digo: - No, todavía no, porque está usted como débil. Entonces entró su marido y dice: -Sí, de veras, no tiene fuerzas. Se ve lo derecho en cuatro limpias, entonces le había yo hecho las cuatro limpias y me dice: -No, usted siga hasta que vea yo un poquito más. Le digo: -Está bien. 76 Entonces yo seguí. -"Usted viene usted, usted, me sigue curando". Pues mire usted hasta que después yo me hablaron los de arriba, me hablaron que ella se tenía que recibir, es herencia, es herencia, ¡eh! Entonces yo le dije. Entonces Doña Silvestra y su marido preguntaron en qué lugar, en qué templo, ¿eh? Entonces, y le dije que allí hay cruces en ese lugar, que el espíritu salió de Almula, pero no es allí, es el lugar del que manda el espíritu, ése se llama Soltepec. Ella, le digo: -¿Sabe usted de allí le duele a usted, eh?, usted va a recibir ese cargo. Y sí, quedó conforme, pues mire usted, quedó conforme. Le digo: -Pero de aquí manda otro lugar que le llaman Tlachaloni, ¡eh!, dos templos va usted a mandar. Pues ése lo recibió, se los entregué y ahora manda ella. Y mire usted, doña Silvestra está sana. 73. Los nuevos rayados Acá nueva gente, que se dedique a esto o que le haya caído el rayo, acá en San Pedro recientemente le pegó a sus hijos de la difunta Bernarda, de allá arriba, donde vive Chabela para allá. Doña Silvestra sabe bien porque le fuimos a curar. Sí, este, ésa, en la que estoy pensando de ir a preguntar al muchacho, pero ya le pregunté, creo que es su tío, y le dije: -¿Qué tal están los enfermos? -"Están contentos". No, no fue apenas eso, tiene un año, pero de todos modos, para el trabajo, esto es, para eso está fresco ... Porque a mí me resultó, ya era yo chico y me vino a resultar como a los diez, a los doce años ... Ya, ya, pus, pue que sí como a los diez doce años ... Hora verás, ya recuerdo que como quince... dieciséis, veinte, 77 veinticinco y me resultaría como a los veintiocho años. Si otra vuelta me empecé a sentir mal. Sí, me resultaría como a los veintiocho años. Sí, otra vuelta y por eso horita ayer le fui y le pregunté a su familia de ... ¿no has visto a los muchachos contentos? Eso ahí tendrá como, pue que sí, como veinte, veintidós ... Ellos andaban, creo que fue a trabajar y venía con los animales, creo con un caballo y lo mató, le pegó el relámpago. Sí, él lo cegó a los dos y el caballo se murió; estaban tirados, los fueron a levantar. Aquí mismo, y después en el templo de Soltepec, Tlacoxtepec, allá los fuimos a dejar. Nomás los fuimos a dejar porque no, es este, nomás los fuimos a dejar, porque no, no se recibieron. Pero eso tienen su fin de que al rato les pueden dar cargo, hasta que venga de arriba el cargo para que les den el poder, para que ya allí ellos otra vuelta tienen que pedir favor con nosotros. Ya se cumpla, si les dan cargo, ya ellos ya saben los de arriba qué cargo les van a dar. Esta pequeña cueva es la puerta y allí se tiene que pedir permiso para entrar al templo mayor de Tlalquitilulco. 78 Algunos les raya. Sí, a veces algunos por medio de que los de arriba también se dan cuenta de que algunos se enojan. Y a veces éste los busca para el trabajo. Ahí va dos divisiones, a la vez a veces, llega el día en que si ya los apuntan a mandar a hacer trabajo. Y otra vuelta les vuelve a dar. Porque poco a poco los van persiguiendo. Así me dijo el encargado, el que era el encargado de aquí. Que el primero, cuando los persigue, este, les empieza a dar el relámpago. Ése ya los empieza a perseguir y ahí a veces los agarra, y a veces no, poco a poco. 74. De cómo le pasó el poder a Juan Muñeco De cómo don Chano le pasó el poder a Juan Muñeco. Ese poder tenía él, me dijo: este cargo, el que yo tengo el cargo, tú lo vas a tener. Y yo, bueno, en una palabra como que no le quería recibir, pero como después empecé a estar malo y malo. Hasta después que yo vi que mis brazos se torcían y mis pies, fue cuando le dije: -Chano, y sí recibo el cargo. Dice: -Vente mano, vamos a ver un enfermo y tú lo tienes que curar. Entonces fui. Luego me dijo: -La señora Anastasia. Él me llevó con Anastasia, voy a preguntar. Sí, me llevó él. Voy a preguntar, sí, está cerquita. Porque el marido era Velásquez, pero la señora era... su mamá se apellidaba Córdova. Entonces, Anastasia Córdova, porque se llamaba Maria Córdova y ésa jue su mamá. Ya su marido, ése no, ése ya se llamaba Juan Velásquez. Éste fue el primerito que curé, Juan Velásquez. Don Marciano, él me llevo, él me enseñaba. Don Chano me decía: 79 -Mira, muchacho, tú vas a agarrar este cargo. Y yo como quiera yo y como que no quería yo. Cuando vi que no me podía componer, entonces dije: -Chano, mira, sí agarro el cargo. Pero hora sí que de veras yo veo que mis brazos se van a un lado, mis pies se tuercen. Yo enfermo, ese enfermo se llamaba, Juan Velásquez, ¡eh! Y sí, mira, empecé a trabajar, hasta hoy hasta lo presenté, mira aquí me tienes, Marciano Sánchez. Es el mismo, Chano y Marciano, nomás que de respeto le decíamos Chano, pero su verdadero nombre es Marciano Sánchez. Ya después yo como agarré el cargo, ya poco a poco iban apareciendo los enfermos y ya los iba yo, como asegún, mandaban los de arriba, los que me decían que se recibieran, pues yo les avisaba yo. Y los que nomás se iban aliviando así, ahí quedaban. 75. El Popocatépetl Sí, pues, mira, el Popocatépetl, la Maura2 dice que el Popocatépetl "viene a verme , pero que yo no lo conozco". Y que la Maura dijo que ella se le presentó el mismo Popocatépetl habló y dijo: "No me conoces", dice "no, yo no te conozco", dice "yo soy el Volcán". Entonces, como vamos a vestir la cruz, el día en que revistan la cruz yo voy a estar aquí con ustedes. "Mira, yo estoy muhino, porque cuando suben los japoneses me hacen amohinar, me quieren desnudar". Entonces él se enoja, "pero con los de aquí de este pueblo no estoy muhino, estoy contento y por eso vengo a verte, pero yo sí quisiera, yo los castigo a ésos". El Popocatépetl aventaba lumbre y donde caiba la lumbre 2 Maura es hija de Juan Muñeco y ella sueña por el puesto que es heredera de la magia de su padre para ayudar a su pueblo. 80 prendía la tierra. Eso fue lo que me dijo. "Y no le hace aunque esté lejos, yo les aviento hasta el norte llega". Les avienta. Ahí acabo de platicar ella. 75. La lztaccíhuatl La Iztaccíhuatl dice que bajan los ángeles del cielo con las músicas, ellos le vienen a cantar y tocan las músicas del cielo, porque está dormida. Entonces, el Volcán lo va a ver, a su reina. Eso es todo. Las Peñas del Santo se encuentran como grandes centinelas, cuidando a la diosa Iztaccíhuatl en su sueño eterno. Se ubican a los pies de ella y, a un lado, están las cuevas del Templo mayor. 81 La Iztaccíhuatl sí se aparece, nomás que necesita hombres y personas que la conozcan, porque ella viene de varias formas de mujer, viene de gringa, viene de catrinzota y viene de indita, de varias formas se confunde ella. De aquí de San Pedro, pocos la han visto, pero el que sabía más bien es don Chano. Don Chano era tiempero, él fue el mayor de acá, éste era el que recibía a los enfermos. Ora sí que, como le dieron el poder, pues es decir que él cumpla. 76. Las curaciones y los sueños Yo limpio y sueño en la noche. Me dice: pues este va ser esto, éste va a llevar esto y todo esto. Todo lo que piden los de arriba. En Tlalpanzinco un nuevo granicero hace su juramento con su guía don Cheto, en sus manos tiene su palma, escoba, jícara, cruz y sahumador. Estas son sus armas de trabajo para controlar el tiempo. 77. El pueblo y los tiemperos A través de los años, el pueblo me reconocía como tiempero como horita saben. Cuando doña Silvestra 82 empezó a sacar lo suyo, ella quería quedar casi quería quedar como primero pero arriba les dan el poder. Se paraba como si de veras ellos mandan. Así como que me quiera hacer menos. Cuando nos vimos allá en Provincial. Quien jue la que trabajó y vinieron los de arriba los relámpagos, fue cuando ellos quisieron creer que yo mando. Sí porque cada quien trabaja. Don Julio Glockner, desde hace años conoció a doña Silvestra. Julio me dijo que no te conocía, que nunca había oído hablar de ti. Y ni lo conozco, pero era porque doña Silvestra siempre te ocultó, y yo como que me hacía menos. Y ellos lo hacían por ganar, porque ellos cobran. Cuando cobran ellos. 78. Algunos tiemperos cobran Me habías platicado que vinieron unos muchachos que les cobró, que te vinieron a buscar a Juan Muñeco, pues dice que fueron aquí en creo en su cabeza de la volcana, porque allí está un templo, pero que ese templo no es de ellos, ese templo lo manda Amecameca. Entonces dicen que los alcanzaron allá los muchachos de Amecameca y ellos también. Pero allí claro les dijeron que pa qué se fueron a meter, si el templo no les conviene a ellos qué se anden metiendo. Que los pelearon y como que los corrieron, que ya no vuelvan a meterse allá. Pero parece ser que los muchachos pagaron, porque trabajaron ellos. Sí, pues fijate las cosas, es decir, yo cuando hago trabajo, yo no cobro, no'más lo que sea su voluntad, porque fijate que se tiene que hacer lo que mande el Señor de arriba. Y si se cobra, pues ellos tienen que decir. Si ellos mandan que se cobre, sí se cobra. Pero si dicen que no, no, porque lo castigan a uno. Así es de que, el que tiene legítimo el poder pues que diga: Bueno, miren, vecinos, ayúdenme lo que sea su voluntad de ustedes. Eso ya es otra cosa. Eso es todo. 83 Todavía se tiene la costumbre que los campesinos del pueblo cooperan para que tú, como tlahutlazqui, trabajes el temporal. Pues, este, pues yo me dijeron unos muchachos que sí, ahí de ellos de que sí pida y ayuda pa pedir agua. No, pues eso nosotros mismos no nos podemos enojar, porque el agua no nomás es para ti, el agua es para todos nosotros y las milpas y los terrenos. Así es de que, tú habla con nosotros. Yo sé si tengo dinero. No, pues tú tienes derecho de pedir, eso me dijo el muchacho. Tú tienes derecho, para que vayas a cumplir allí. Y ya tú ... Pero fija te que hasta te pedimos por el pueblo. Que te ayude el pueblo. Porque el agua viene para todos, ¿sí?. Lo que no, no, porque los gastos son grandes, las ofrendas. No, cien pesos no alcanza. Cómo crees que cien pesos horita, la carestía que está ahí, que compramos esto que compramos esto y compramos esto. Nomás me ven les digo: ustedes nomás quieren que llueva, hasta se alegran. Todos están bien, hasta que quedaron conformes, pero no dicen vamos a ayudar, eso no se oye. No, por eso usted, puede usted pedir, para que lo ayuden a usted. Eso es todo lo que me dieron los muchachos de acá. De nuestra costumbre, tradición, eso no se puede perder, porque todavía ustedes son elegidos. 79. De cómo es el regimiento de los volcanes Pues hora sí que , a la vez, este, pienso que como hoy estoy pedido acá en este pueblo San Pedro Nexapa, el mismo trabajo no me comprendo. Elegimos nosotros los tiempos de elegir a cumplir que las lluvias se vengan sobre nuestros pueblos, porque ellos ya me admitieron hasta donde corresponden las nubes, eh. Y como ora los demás no saben, pero hoy sí sé. Mira, de aquí las nubes, sabe , se van hasta la coronita. Y los de la coronita se van para México. Y los de la Volcana también saben y se van para Puebla. El Volcán corresponde baja así, queda hasta como por Ozumba a 84 un lado, ése es regimiento que viene el mando más duro, porque allá ya les toca a otros. Ése ya le toca aquí. Aquí un lugar que le, que está su campo de los señores de San Juan Tehuixtitlán, está con Atlautla. Atlautla ya es otro, ¿me entiendes? Nosotros regimos todavía el campo de San Juan Tehuixtitlán, de ahí para acá, para todo Ameca. Porque todos tenemos parte de mandar. No porque llueve también como quiere, también tiene su límite. En San Juan ahí otros tiemperos. Aquí todos los de Ameca y los de aquí, es todo junto, eh, es una unión. Pero ya por los otros lados, eso ya es diferente. 80. Algunos de mis sentimientos como tiempero Pues yo mira, me siento, en que a veces se va a hacer los trabajos. Y a veces hay dinero y a veces no hay. Entonces yo y mi compañera Isabel hacemos una plática de acuerdo para cumplir esas cosas porque nos falta dinero. Entonces nos vamos ayudando como quedamos. Pues yo a veces tengo algo y a veces no. Luego le digo: yo también no. Pero en fin, vamos a ver cómo le hacemos para cumplir y así vamos trabajando. Eso es todo, sí, sí. 81. La historia de cómo se recibió Juan Muñeco Yo me recibí en el templo de Santo Domingo y aquí en Pepe Cruz, aquí abajo. Ora allí yo mando. En Almulancingo ya nomás me fui a presentar. Me dijo el señor Marciano, mira, vamos a ir a Alcalica, que es el mayor, allí te voy a presentar, porque allí es como Gobernación, te voy a presentar. Y me fue a presentar. Entonces me dice: compañero, dice, ya estás presentado aquí. Ora, para mayo, ya te voy a presentar aquí en Almula. Entonces otra vuelta allá me presentó. Dice: mira, van a venir varios, compañeros, eh. Todos esos compañeros, este, tiene que trabajar aquí en 85 Almula. Entonces igualmente allí en este Alcalica, igualmente también van los señores de Ameca, de diferentes pueblos que llegan allí, que son recibidos. Y ya tienen el cargo, pues trabajan. Allí ya todos trabajamos, cumplimos el deber. Eso es todo. 82. El que mandaba en Alcalica El primero, cuando yo me recibí, mandaba el señor Marciano, aquí en San Pedro y allá... Ándale, ofrendaba. Luego me decía, luego me decía: compañero, vamos a Alcalica, porque hora se cumple. Y fuimos , llegamos allí. Entonces llegó un carra de gente. Dice: señor Chano, ya llegó usted. "Ya venimos aquí". Dice: está bien, don Chano. Dicen ellos: vamos a soplar. Pues soplamos, entonces hoy, como no sabía yo el trabajo, dijo don Chano: Miren, compañeros, yo soy el que voy a pedir permiso aquí en el templo. Entonces él subió arriba y él pidió permiso. Después, él regresó con nosotros y dice: ora sí, compañero, ora sí, ya vamos a subir todos, ya pedí permiso. Luego nos formamos. Empezó el rezandero con la santa oración para que entremos. Entonces llegando allí, allá en los templos, empezamos a floriar. Acabamos de floriar, luego, este, pues comíamos. Ya después nos despedíamos. No, ya no me tocó bailar en el palo del baile. No, ya no lo conocí (el palo de baile), ya no lo conocí, para que te digo ... Y ya te digo que no, entonces ya nos vamos. Ya cada quien, ya cumplimos, cada quien ya se va pa su casa. Y así.. .. bajamos. 83. Benito Velásquez Martínez No es historia, sino que es verdad, es la pura verdad. Algunos que creo yo que no creen porque no oyen lo que cantan ellos, lo que piden ... Alguna oración de ellos, porque según rezan también el Padre Nuestro y el Ave María cuando comienzan a trabajar el temporal, 86 pero hay algunos que no creen. Yo sí creo, un tiempo estuve malo, malo como pasadito de medio año; tenía yo mis reses, apenas habíamos comprado unas reses , unos becerrotes, me fui a cuidar. Venían jugando los tres. Ahí cerca de Tlachaloni, se vienen cuerniando. Y yo les chiflé de torito. Como cuando tocan aquí cuando se queman los toros. Y este, y les chiflé a los becerros. Me ámale. Bueno, pero al mismo tiempo no quise creer, pero luego a largo tiempo ya quise creer, porque les gustó que yo les cante a mis toros, que par torito. Y les gustó. Sí será más de medio año. O sea me agarró aire. Más en Tlachaloli, que es un lugar sagrado, me agarró como gripa, un estado frío. Bueno, que la sentí un poquito raro. Y después un señor que se llamaba Marciano que vivía aquí y lo fue a ver mis papás que me limpiare, y me limpiaron. Y le dijeron a mis padres que él. Así es la cantada de pa· torito, y les quise chiflar Descanse. Pues sí ... No le digo. Pa· torito. Y les quise chiflar. 'y yo creo que a esos espíritus les gustó. Y como que me agarraron y me tiraron, más de medio año. Me limpió un señor que se llama Marciano Sánchez. Y luego había una señora que adivinaba, se llamaba Agustina Rosas , la jijo. Creo que lo conoció, Porfirio Hernández. Y fue mi mamacita a verla que. Y no , ya vinieron a dejar el mole, tamales, estambre. Pues sí, sí me compuse, sí, y al mismo tiempo. Pero sí duele, sí me alivié. Sus cuetes y su molito. Y me alivié, me limpiaron con flores y blanquillos. Y ya ahí me tiene trabajando (hasta la fecha). Pero se murió ese señor Porfirio Hernández. "Pillo", "¿Dónde está?" "Entra, ¿quién eres?" ¿Qué? Van a ir a cuidar. Siéntate, mientras que v1ene. Espéralo. Llévate , sí me daba de comer. Ella, ¿cómo adivinaba? 87 84. Ella adivinaba comiendo hongos Ella adivinaba comiendo hongos.3 Hay hongos de adivino, sí hay quien. sabe lo que no conocí, ésos que les dicen tepochtecos. Son como unos frijolitos. Parece que son como unos hongos. Con ése que comían adivinaban. Pero también los bendecía con sahumerio. Y sí adivinaba y se aliviaba uno. Y ya mi papá y mi mamá fueron a preguntar y les iba diciendo. Iba juntando su mente. Me alivié. Ella los comía, los niños, la señora los derrumberos, los de aquí en la montaña. Y también limpiaba, ella los comía, la señora era la que adivinaba. Y ya no hay otras señoras que coman eso. Y también limpiaban con huevo. También limpiaba, también. 85. Templos tlatatonis Cada quien ve su destino, cómo va a ser, cómo va a curar. Lo único que nos pasa, nos descuidamos, por tal motivo es que él no va a misa, no al rosario y es lo que importa. Ellos le hablan a las montañas, nomás a la cruz. Pues digo yo que, a lo largo de la cruz es las montañas también porque está incluido. No somos, no tenemos ese don y ni somos curiosos. Por lo menos, es la curiosidad y la creencia. Porque yo, fijese usted que yo, mi jefe, sabía capar los marranos, quitarle su agua y yo sí agarré eso. Porque mi papá yo creo que le gustó desde jovencito le gustó una cantada. No, usted ya no vio. Había una creencia gustosa que a donde nacía el niño, ese tiempo se le llamaba a esos bailes populares Los hongos son los apipilzin o "niñitos de agua" escribe Julio Glockner, los traen de Nepapualco, Santiago y de Cholula, que crecen en agosto, en el tiempo de los ejotes, y que la gente de su pueblo los recoge en el bosque, cuando vienen de regreso de la feria de Cholula. 3 88 que les llamaban bañatorios, que se bailaba con música. En aquel tiempo había una creencia de las camas. Entonces la gente a donde nacía la criatura ahí hacían el mole, tamales. Había una música popular que tocaban piezas. Hacían unos ramilletes unas varas con flores amarradas. Entonces ése que hacía la persona que se encargaba de hacer eso se le llamaba tlatatoni. Y tocaban los músicos. Y a la hora de la comedera todos querían comer mole. Fulano ya se fue y no le dimos de comer. Hay que llamarlo para que se alivie el niño, la niña. Era bonito y era gastoso. Puro guajolote. Puro guajolote. Cada cama con doce guajolotes machos. Mira como almuerzo. Bueno al hacer una comidita con harta comida. Nada de carne de puerco porque eso era malo. Y luego compraban una lata de alcohol. Era una creencia muy dura y gastosa. Porque yo mis padres todavía lo hicieron porque yo nací. Fueron en casa de una tia. Mi tía cada rato se enfermaba que era mi cama, que era mi cama. Agarraba una gripa, que era mi cama. Y mis padres ya estaban aburridos de eso. Hicieron fiesta. Harta gente. Quiere decir que en lugar en donde usted nació. Todavía nací en esas creencias. Sabía cantar esas canciones, echándoles el agua a las mujeres. Más allá sí me las sabía. Todo eso me lo impiden. Pero esas canciones eran particulares. Y alguna cantadita que tenga. Y no. Bueno, era un relajo, para mí era un relajo. No, mire era contrabajo, una trompeta. Sí. Esa musiquita, todavía vive en uno. Don Pablo López, él sabe de eso. Vive por ahí en frente del auditorio. Donde vive Pedro que le dicen Pica Piedra. A un lado en la esquinita. Ése sí sabía tocar de eso. Sí lo sabré él. Llamó Benito Velásquez Martínez. Se me olvidó todo porque cuando estuve en la parroquia de Amecameca todo lo fui olvidando. Hasta ahora. Vino a verme el hombre este. Y murieron los viejitos. Uno se llamaba Marciano Sánchez y el otro ... Sí, ya, ya murieron. Mujeres, pues 89 también ya murieron. No, no recuerdo sus nombres. Más allá. Como hora don Isidoro, él sabrá quiénes fueron los del tiempo. ¿Lo conoce usted? Su hijo se llama Guadalupe Sánchez. Vive ahí en las Flores. Ahí v1ve ese señor. Nomás que no recuerdo. Él si los conoció. Preparación de la hoguera para hacer el carbón y preparar los sahumadores, y así entrar en procesión a la cueva de Tlalpanzinco para recibir a un nuevo granicero. Y su hijo ya no vive. Ya murió. Y lleva como, ya así ya lleva como tres años. Ninguno de ellos, este, pues tomó esa tradición como herencia. No, ninguno de ellos tomo esta tradición, esa tradición como herencia. Sí hay nietos. Hijas no tuvieron. Eran. ¿Lo conociste a don Felipe que le decían el General?, pues ése era el hijo de esa señora. Hora quedó Benito Hernández, pero ves que él es de otra religión. Es lo que a mí me importa y él ya no cree en esto. Había cosas que sí valían la pena. Pero ahora ya no. Bailaba bien y enseñaba bien. Era muy activo a ese bailable, pero se murió y luego su hijo cambió de religión y él ya no cree . Se perdió. 90 86. San Pedro Nexapa reconoce a Juan Muñeco Luego creo más abajo. Luego él, otra vez le pegaron. O sea él se hizo tiempero por lo del rayo. Lo bueno es que aquí en San Pedro lo reconocen. Da limpias y se alivia uno. ¡Ah, mire, qué bueno! Lo que queremos es que no se pierda esa trascendencia. La misma modernidad nos ha ido bajando. Aquí todavía hay hartos. Uno se llama Vicente Sánchez. Y la otra, su esposa, Silvestra Palacio. Y viejitos, que ya hayan muerto. Los templos donde iban los tiemperos. Ahí donde vive su hija de Juan Macario, ahí había una cruz, lo iban a renovar por la tubería. Ahí firmaba Pepe Cruz, otro lugar que estaba hasta allá abajo. Nomás le decía. Allá estaba otra cruz. Luego está otra aquí en Almula. Allá donde siembran otro terreno de éstos. Allá. Y luego otro lugar, Tetepotl. Y otro está aquí en La Joya, Tlachaloli. Y luego está otra cruz hasta Santo Domingo. Y otra está hasta Provincial, hasta allá. Y vienen desde México. Van a Alcalica. Van por allá. Pero allá casi no van los de San Pedro. Si van, van a la fiesta del 3 de mayo, van a floriar. Andan floriando. Y eso ustedes lo toman como una cosa sagrada. Pues más o menos lo contamos como una cosa sagrada. Salen ellos por la leña. Nomás que pus ellos mismos se han abandonado por motivo de que como atajan el agua las tempestades malas. Había que pedir una coperacha para que de ahí mismo se ayuden, porque son gastos que se hacen ellos. Sí, y ahí a veces no cumplen por motivo de que no tienen con qué bailar. No hay billete para cumplir todos los requisitos. Y usted, cuando estaban más jóvenes, sus papás cooperaban para tiemperos. Pues cuando pasaban sí pedían su cooperativa pues sí, sí les daba. Pero después de que fallecieron perdió. Más o menos pues me dieron ése, pues esa costumbre. Yo creo en él, porque nada me quita con decir no creo, nada. Cada 91 quien tiene. O sea que viene uno destinado. Cada quien trae su destino, cómo va a ser y cómo va. 87. Otros lugares piden lluvia Mira, el americano vino y me dijo él, que yo mandara las lluvias para allá, y yo no le respondí, porque yo pensé: así no se puede mandar, señor. Qué tal si se va para allá y aquí nos falta agua, quiobo. Y la gente sabe, mira tiene la culpa ese pendejo, no señor, lo de nosotros, nosotros, ¿verdad? Lo de aquí, aquí, eh. Chabela está de acuerdo en eso, todo ya lo puse en acuerdo. Lo de nosotros, nosotros, aquí, aquí nosotros, nuestro trabajo es aquí, y aquí cumpliremos, ¿verdad? Para que tengamos "la palabra linda", ya que nosotros, como dices tú , pedimos una ayuda. Ya es una obligación también las de acá. Hasta ya me dijeron los muchachos: No, don Juan, si eso que pida usted, si es para nosotros, aquí también ayudamos. Ese chambea, ¿por qué? Porque casi como quiere decir que trabajamos, pero para nosotros. Eso está bonito, ¿verdad? Claro, que si no lo hacemos de esa manera, otros vienen y nos ganan el mandado. Ése es de nosotros. San Juan, todo ahí. Sí, lo que es de nuestro volcán es lo que voy a dar, de ideas no me meto ni doy permiso. Ándale. También igualmente el pariente Marcelino, también que sepa, que sepa, como él tiene su mando dirá: ah, entonces éste viene siendo también como un sargento , él también manda. Cuando sepa que tú eres tiempero de la misma familia, caraja, lo traemos de trascendencia y esto no es ninguna vergüenza. Mira pariente, te digo, ese Vicente quería quedar bien, pero allí ese santo provincial, el templo, allí lo vio, porque yo el tiempo que fuimos para ahorita aquí, como horita, pegan tres tronidazos, pero seguidito. Ese señor que lo tiene se llama Isaura y que dice "Ay, don Juan", me ve y le da risa. Entonces, pasa recontento y dice: hasta que me eche una copa. No 92 pues ya lo vio a lo derecho. No pues, y, a lo derecho. Hora, igualmente Isabel, se ha dado cuenta bien, eso fue aquí en el templo de Santo Domingo, lo vio. El difunto Chano. "Ahí está la peña, ahí está. Donde sé cuándo quiéramos pedir el agua ... y ése no sabe. La posición de las cruces representa la fuerza de cada trabajador del tiempo, éstas se encuentran en la cima del cerro Coronilla. Ellos ven piedra, pero no saben a dónde está marcado. Y el difunto Chano sí, dice: mira, hijo, aquí esto está marcado para los que pidan, pero ellos no saben, y allí van, pero no saben, nomás lo ven piedra, pero no conocen a dónde está el mando. Entonces y sí sé, y ese día fui allí y hablé nomás yo solito, ninguno me vio. Para poco ratito está este un muchacho que vive por ahí, estaba sentado, y otro que nombran Ignacio, así los dos juntos, dice: -Hora que, ya llueve, pues mira y nomás porque vino ese señor y tantito se sentó y ya mira. Entonces pasa a decir este muchacho: -Hasta que tuvimos quien manda. 93 Y nos dieron un aplauso. -Híjole -dicey echamos otro aplauso. Entonces, imagínate, tú eres elegido, lo traes de trascendencia. Mira, este .. . Antes de empezar el ritual, se hace limpieza. No cualquiera puede hacerlo, sólo quien cuente con la autorización de don Cheto y demás graniceros. 88. Ángela López Remigios, la Chomi La Chomi habla del tiempero Melecio Palacio Castro. -Mi esposo es el que nomás él curaba, limpiaba. Se llamaba Melecio Palacio Castro. Nomás agarraba el blanquillo y limpiaba. Usaba también Santa María, ruda, loción de alcohol, nada más. Cuando caiban los rayos, él los iba a levantar a los que quedaban heridos por el rayo. Y luego él hasta que, por ejemplo, tronaba cuando caiba el rayo. 94 Ángela Remigio, La Chomi. Su esposo, ya finado, le hereda el cargo de curandera de San Pedro Nexapa, y ella sigue siendo fiel a la tradición. Esperaba hasta que volvía a levantar otro, hasta que tronaba otro. Para que se levantara el enfermo. Ya que se levantó, lo levanta, lo limpia, entonces ya. Y luego tiene que ir para que fueran las cuatro limpias, y ya. Luego, cuando por ejemplo, cuando quería ir a dejarlo a su lugar a donde cayó el rayo, tenían que hacer moles, tamales, comprar, este, estambre, veladoras, angelitos, adornos, sahumerio, sahumador, un torito y mole, y, este, arroz, frijoles, plátano, naranja, mango, uvas, dulces, este, velas codales, estambre de colores, este, rosas, una escoba, cuetes. Es decir, todo. Todo lo de la ofrenda. 95 89. Melecio Palacios Castro Melecio Palacios Castro curaba con huevo de gallina criolla y de granja. Melecio, en su forma de trabajar para curar a los enfermos soñaba. Soñaba el problema del que limpiaba. Se le revelaba, por ejemplo, a donde parecía dónde salía el rayo. Porque él se da cuenta dónde salía el rayo, dónde está. Todo él lo sabía. Él, su templo era Provincial, Santo Domingo. Nomás dos partes. El cargo que tenía mi esposo ya lo agarré. Yo curo igual, peor no, yo no sueño. No, yo no sueño, muy rara la vez que llego a soñar. Lo limpio y luego ya se ve qué cosas es lo que tiene. Ya después que ya lo reconocí, ya le digo qué cosa tiene. Y ya, después de eso ya lo voy a seguir curando. Ya. Se le compran los cuatro huevos. Me pagan lo que es y ya. Les he cobrado, cobrado treinta pesos por limpia, es lo que me dan como una cooperación. -Porque tú no puedes cobrar más caro. -No, yo puedo cobrar más. Nomás que como es de la misma familia pues no les puedo cobrar más, les cobro menos porque es de la misma familia. Y fuera otra persona, pues sí. Ya ve que uno, y, este, recibe dice fiador pagador. Porque le pasa a uno la enfermedad que tiene la persona. Antes que muriera, yo me fui a hacer el recibido allá a Provincial, allá tengo mi cruz, allá arriba. Sí me sentí bien con esa responsabilidad, cuando me coroné. Cuando por ejemplo no voy por motivo de que a veces no me avisan cuando van, o no tengo dinero para comprar o cooperar para la flor o para cualquier cosa pide. Cuando me avisan voy. Va estar doña Silvestra, don Vicente, doña Natalia, la Chabela, don Juan Muñeco, don Beta, este, va el enfermo que va a ser recibido. -¿Tú ya coronaste a alguien? 96 -No, todavía no me ha tocado recibir a nadie, todavía. No, la que le tocó la suerte de coronar a alguien fue a mi marido. Doña Silvestra y don Vicente se fueron a recibir aquí en Sultepec, de aquí en este cerrito que está aquí enfrente. No, doña Silvestra y don Vicente. Mi marido los llevó a coronar, él fue el padrino. Luego allá se casaron para recibirse allá; después que ya se casaron, lo curaron, se recibieron. Hasta ahí nomás, luego comimos. El día que van a florear, va a bailar las contradanzas allá en ese lugar, contradanzas apaches. Porque viene un señor que dice que viene del norte, se llama Alejandro, pero viene cada mes de mayo a floriar las cruces, un barbón alto. Siempre lo veo, siempre pasa. Anda floriando los templos. Viene a las cruces. Un barbón alto. Pero nomás el que venga. Nomás cada año, cada mes de mayo. Siempre pasa. Anda floriando templos. Porque él también estuvo malo. Él también se recibió, se enfermó, se engranó todo su cuerpo, como roña. Vino a preguntar sobre cómo curarse. Después mi esposo le platicó todo. "Bueno, dice, me voy a recibir yo también". Así es de que por eso viene. Antes venía con su esposa pero ya no, se dejaron él y su esposa, es la que también trae los apaches. Por ejemplo, vienen unos de lejos, cuando viene él y van allá a enflorar, vienen los apaches, viene la contradanza. Luego bailan allá luego ya después ya acabaron, ya comemos, ya alevantamos, ya nos despedimos. -Yo curo con ruda y Santamaría, nada más; alcohol y huevo, nada más. -Cuando es una enfermedad fuerte, ¿qué otros ingredientes metes? ¿No metes fruta para limpiar, listones rojos? -No. 97 -Entonces tú nomás lo sencillito, ya que una enfermedad más fuerte, ¿con quién lo mandarías? -Lo levantamos, lo curamos al enfermo y donde se apareció ya lo vamos a dejar a su lugar. La levantamos y es una de las más fuertes aquí. Juan Muñeco y la Chabela. Y esta Natalia, don Vicente , Pancho Rojas, el chaparrito. Vive aquí. ¿De don Jacobo?, sí, ya también me platicó. Sí, también se recibió Pancho Rojas. Valeria Plaza, ella vive en su casa de la Colonia. Allí de donde vive Faustino Agustín. Allá mero. Ésos son los que trabajan el tiempo. También tengo una comadre. También saben curar de aire. Tú curas de espanto también. Se le compra, le consigue los maicitos cuates, pero los rojos, y ya que le ahiga uno comprado se cura el enfermo a las doce del día. Ya que la ahiga uno curado, ya lo cura uno con una jicarita roja, y ya con unas flores con agua de azúcar, nada más, se le jala los bultos, el espanto . -¿Y tú también puedes curar a los niños, cuando se le cae la mollera? -No, eso es diferentes, ésa es otra tiene que saber. Doña Andrea, ¿te acuerdas que vivía aquí abajito?, ella era una muy diferente, pero más o menos doña Silvestra también ha de saber, pero yo no, de la mollera no te sé decir. -¿Quién tiene más poderes de don Juan Muñeco y doña Silvestra? -No, don Juan Muñeco es de allí de .. . no, la que tiene más poder es doña Silvestra porque ella tiene un cristote grandote, tiene una cruz, pero grandota. Es el que manda, doña Silvestra viene siendo como compañera. Pues varios vienen siendo compañeros de los mismos lugares. Pero según tengo entendido a Juan Muñeco le cayó el rayo. Él también está recibido. Y Juan Muñeco es el que manda. Doña Silvestra viene siendo como compañero, ¿no? Varios son compañeros 98 de los mismos lugares. Todo ellos son compañeros de los mismos lugares. 90. La Chomi informa la muerte de su esposo Cuando iba a ofrendar, él hacia llover, cuando iba a ofrendar, pedía el agua. Pedíamos el agua. Para pedir el agua es allá en Alcalica y allá en Provincial. Ésas son las que se ponen. Ésas son las que se ponen las jicaritas llenas de agua. Para cuando va uno a pedir el agua se abre muy poquito, poquito nomás, no se abre harto, para que no fuertes tempestades. Poco. Para que no suelte tempestades. Entonces Alcalica y Provincial son los más fuertes para pedir el agua. Allí en Alcalica está grande el templo. Allá también van a recibirse los graniceros. Mi nombre completo es Ángela López Remigios. Mi esposo hablaba mexicano. Me siento bien trabajando lo que trabajó mi esposo. Ya él ya me pasó a dejar, pero ya no puedo levantar ni revivirlo. Quisiera uno que reviviera, pero ya ... No me acuerdo de cómo le pegó el rayo a mi esposo, no, ya no me acuerdo. No me acuerdo de quién es el caballo. Le tocó a un caballo, era un colorado ese lo fue a curar él, pero no se alivió, el caballo se murió. Como le tocó y es animal ... Pero él lo fue a curar, pero ya no se levantó. Entonces todo esto, esa tradición no se ha perdido, todavía ustedes siguen adelante. Esa tradición no se ha perdido. 91. La Chomi dice a quién le va a dejar su cargo ¿A quién de tus hijos le piensas dejar tu cargo? -Pus horita a ninguno, no están aquí. 92. La Chomi dice ... La Chomi dice que para pedir el agua todo sale de la bolsa Todos los gastos para pedir el agua provienen de 99 la bolsa de uno. De la bolsa, por cada que trabaja el tiempo. Todo sale de su bolsa. 4 El pueblo ya no se acerca, porque nosotros habíamos hablado, que íbamos de pedir por ejemplo una cooperativa para pedir el agua, porque el agua se pide nomás porque se pide, también pierde uno tiempo, pierde uno el día. Gasta uno; ya que flores, ya que cuetes, ya que ... pues otras cosas más que piden. Y Doña Natalia ella se junta con nosotras ella no es independiente ella viene con nosotras para cargarse de energía para curar a la gente del pueblo de San Pedro Nexapa, pero cuando curamos muy fuerte nos ponemos malas y lo hemos estado aunque tenemos el don de curar, todos tenemos que ir a enflorar al "Templo del Provincial" (debajo del Popocatepetl), que es de las curanderas del pueblo y también Don Juan Muñeco r- nos acompaña porque el es el principal. -¿Si no saben limpiar, también les perjudica a ustedes? -Sí, también, cuando por ejemplo el enfermo está muy malo, uno dice: fiador pagador, porque le pasa, que no que le dolía todo esto, por aquí, todo le dolía y lo curé, le alivió. Pero me pasó a mí. Me pasó, pues yo qué. Pero lo cura uno. Dice ya no se aguanta uno, ¿ya qué va uno a hacer? Ya lo curé, ya me pasó, pues ya qué. Pero pues lo cura uno, pus ... -Y tú por ejemplo aquí tienes tu altarcito, con tus vírgenes ¿tienes la virgen de la lluvia, Santa Bárbara? -No, en mi altar no tengo Santa Bárbara, nomás la Virgen, San Lucas, Santa Teresa, la Virgen de las Monjitas, el Señor de Chalma. Y nada más son los que Se refiere a la tradición que tienen en Santiago Xalitzintla de cooperar para que se le dé una gratificación al tiempero y vayan a ofrendar para pedir agua para tener buena cosecha. 4 100 tengo, nada más, sí son todos y el Niño Dios. Son los que tengo. 93. Leyenda de Juan Muñeco Don Juan era un señor que le · decían el tiempero porque siempre iba al Volcán donde hay un centro de ceremonias, cantaban y bailaban para que lloviera en tiempo que se sembraba y si llovía o granizaba mucho también realizaba el ritual para que no se perdieran las cosechas. Cuentan que a don Juan le cayó un rayo y no le pasó nada y por eso también le decían el Siete Vidas y del cielo le vino el don de poder invocar a la lluvia y a los dioses del tiempo, decían que los espíritus le hablaban cuando iba a hacer mal tiempo y él tenía que salir a parar el aire, lluvia o granizo. Al final de su vida vivía solo porque sus hijos ya eran casados y una noche hizo mucho aire y los espíritus le hablaron pero él estaba muy cansado y no salió al amanecer y lo encontraron muerto. / La forma de vivir de Juan Muñeco no tenía nada de extraordinario. Esta fue su casa en la cual fue encontrado muerto. 101 94. ¿Quién soltó a los burros? En el pueblo de Amecameca también se comenta que algunos leñeros que fueron a cortar su leña al bosque, en un lugar seguro fueron a amarrar sus seis burros a unos árboles. Los leñadores se introdujeron al bosque no muy lejos de los animales y empezaron a recolectar la leña y más tarde se acercaron al lugar donde estaban los animales para empezar a cargarlos con los tercios de leña, cruel fue la sorpresa que no encontraron a ningún animal, los perros que los acompañaban no hicieron ruido alguno ya que ellos presienten a un extraño cuando se acerca, los leñeros sabían de la trascendencia del Cuatepochtle y rápido pensaron en él, y se pusieron a buscarlo por medio del rastro y viendo que se encaminaron rumbo al pueblo tomaron sus cosas y marcharon rumbo al pueblo encontrado a los animales en las primeras calles y espantados como si hubieran visto algo extraño y muy inquietos, los metieron a sus casas, con esta maldad del Cuatepochtle tuvieron un día perdido. 95. Lo vio volar y sin gorro El Señor Crispín, nativo de Amecameca se sorprendió en ver a un niño chaparrito diciéndose: ¡A caray, ese es el pingo! Y ese niño chaparrito se le quedo mirando a él, y de un abrir y cerrar los ojos como una bola se fue a clavar al otro lado. Después vuelve a volar de sentido contrario y todo de rojo y su cabeza no es como la de nosotros, sin cabello y es rapón y su cabeza es como de una calabaza con costras como costillas en forma de calabaza y si me asuste y me encomendé a Dios, y me regrese lo más pronto para salir del bosque y llegando a mi casa les comente a mi familia lo que había visto en el bosque y mi familia me recomendó que siempre que fuera al 102 bosque me encomendara a Dios porque ese ser podía hacerme algo malo 96. El bueno y el malo Gumersindo y Virginia Cordoba Castillo, ellos son los hijos de don Cheto, el tiempero mayor que ofrenda en las cuevas de los volcanes de Amecameca. Para su hija Virginia el Coatepochtle verde es el bueno, ya que este ser diminuto ayuda a la gente cuando esta extraviada o se pone a platicar pidiendo un taco pero es muy rara la vez que alguien comente que tuvo contacto con el Coatepochtle verde. Ya no se ha oído hablar de las apariciones del verde, para ella es el corazón del bosque. Para Gumersindo el rojo es el maldoso. Dice: Es como la gente que hay calmados y nobles y otros con cosita de nada se les sube la sangre a la cabeza y se violentan. Este niño que se aparece todo de rojito con su hacha al hombro es muy peligroso porque cuando destruyen su bosque él se violenta en diferentes formas y hasta el más hombre se retira del lugar por miedo a que le vaya a ocasiOnar un accidente. Don Cheto dice que el Coatepochtle vivía en Tepeyehual cuando estaba boscoso. Allá se hallaba mucho pero ahora como ya esta descubierto por la tala inmoderada que hubo en esa zona se va para otro lado donde hay mucho bosque. 97. El arcoíris me curo mi enfermedad [Moisés] -Cuando yo tenía alrededor de unos tres años me salió una enfermedad llamados mezquinos, en las manos y los pies. Me corrían de las escuelas porque decían que la enfermedad era contagiosa. 103 Entonces mi abuela, que en paz descanse, mi abuela me dijo: "hijo, yo te voy a curar esa enfermedad no mas que salga el arcoíris" Una tarde que llovió, salió el sol y se formo un arcoíris, de extremo a extremo, del Popocatépetl al Iztaccíhuatl, tan bonito. Y mi abuela me dice: "hora si hijo, quítate tu ropa y quédate en calzoncillo" Y empezó a macerar el agua con cal y cantando en mexicano (náhuatl), pero ofrendando la cal hacia el arcoíris, hacia el Popocatépetl y el Iztaccíhuatl y me empezó a untar los pies, entons ella me dice: "¡pídele con muchas ganas, grítale al arcoíris que te quite esta enfermedad!" Y entonces yo arriba del pesebre le grite al arcoíris que me quitara la enfermedad. Mi abuela me dijo que no me lavara, que después veríamos resultados. Al día siguiente para irme a la escuela mi mamá me empezó a llamar y me dice: "oye, ya no tienes tus mezquinos" sorprendiéndose y eso fue una cosa inexplicable porque de un día para otro se me cayeron. 98. Cuando me dio un mal aire [Moisés] -Cuando yo tenía alrededor de 15 años, en ese tiempo, aquí en Amecameca se empezó a usar mucho el pelo largo, que el rock y esa música pesada. Entonces pues yo veía a los muchachos de unos 20, 25 años con su pelo largo, bonito, hasta se lo enchinaban, entonces yo siempre tuve ganas de tener mi pelo largo y sucede que una vez me acerque a una imagen de Jesús y tenía muy bonito su pelo entons yo agarré y le dije: como me gustaría tener tu pelo. Y le acaricie el pelo a esa imagen, pero eso es un secreto porque no'mas yo lo sabía, y pues para en la noche que caigo enfermo, entons mi mamá como ya sabía que siempre me agarraba aire o mal aire mando a 104 traer a una señora que se llamaba Micaela, que era una curandera, entonces, este, me dio una limpia con un blanquillo de pato y ya cuando abrió el huevo ella lo empezó a estudiar y cosa que a mí me sorprendió porque me dice la señora: "tu aquí envidiaste el pelo de Jesús, por eso caíste enfermo, o sea, te agarro fuerte aire". Y yo nada más sabia ese secreto y la señora me dice: "nunca vuelvas a hacer eso porque es jugar con Dios". 99. Le pidió de comer Este relato es contado por el señor Julio Hernández Aguilar. Dice que cuando estaba leñando en el lugar llamado Almorada, en los bosques de Chalma se le apareció un niño todo de rojo trayendo un olor a humedad, identificándolo como el Coatepochtle y acercándose al señor le pidió que para al día siguiente le trajera de comer y a cambio le dijo: No te preocupes, para mañana tu leña ya estará cortada, llegas temprano, cargas y te vas y así todos los días tendrás tus cargas de leña seca. Con el tiempo, la gente estuvo observando al señor Julio, viendo que rápido regresaba del bosque con su carga de leña seca, nunca trayendo leña verde, aunque fuesen tiempos e lluvia, ya que en esta temporada es muy dificil encontrar leña seca. La gente del pueblo le dice al señor, en todo de burla: "Don Julio es tu amigo el Coatepochtle" y el señor riéndose les platica que también se le apareció en forma de conejo blanco: Cuando estaba observándolo que me chiflan de un árbol y cuál fue mi sorpresa, al mirar arriba del árbol, veo un niño en una rama y vuelvo a mirar hacia abajo y ya no estaba el conejo, desapareciendo por segundos, y vuelvo a mirar hacia el árbol y viendo al niño sentado en una rama, todo de rojo, con su 105 hachita y después desapareciendo del lugar dejando un aire muy frio. 100. Bomberos sorprendidos Amigos de Felipe Linares que trabajan de bomberos en Amecameca, le platicaron que una noche fueron a hacer un recorrido por el rumbo de Tomacoco para ver un ritual en la Piedra del Conejo, eran como las 12:30 de la madrugada, y se sorprendieron al ver un niño en medio del bosque, en la madrugada, y les dio miedo y regresaron todos sorprendidos. 106 MEXICALTEPETLACUICAL HIMNO NACIONAL MEXICANC Icuacyaotl technozas metzxica Mexicanos al grito de guerra ticanacan temicti tepoztli, el acero aprestad y el bridón, iuan ueliqui man tlalcocomoni y retiemble en sus centros la tierra icuac totepoz cueponiz nohuian. al sonoro rugir del cañón. Tlazotlalnan ximo ixuaxochitlali Ciña ioh Patria! tus sienes de oliva in pacayotl nemiliztli zecnitlaca de la paz el arcángel divino, iluacapa nonemiliz nochipa que en el cielo tu eterno destino omocuilo catema toteotl. por el dedo de Dios se escribió. Tia quinoquezque in uehca chaneque Mas si osare un extraño enemigo mo tlalpac quintlalizque inicxihuan profanar con su planta tu suelo, tlazotlalnan ximati ca mopiluan piensa ioh Patria querida! que el cielo quin yeanaz toteotzin pan yaotl. un soldado en cada hijo te dio. Tlazotlalnan mopiluan amitzihuia iPatria! iPatria!, tus hijos te juran ca nochipa mopampa mimiquizque exhalar en tus aras su aliento, tlatachnotzas in yaotlapitzalli si el clarín con su bélico acento ica intenyo uelinqui quemanian. los convoca a lidiar con valor. Inicteuatl iztque xochime iPara ti las guirnaldas de oliva; inec yeuan ze iluico ilnamiquilliz iun recuerdo para ellos de gloria! zente tlatzca tlataniliz mohuaxca iun laurel para ti de victoria; ze mahuiztic tecochtli inic ye. iun sepulcro para ellos de honor! Icuacyaotl technozas metzxica · Mexicanos al grito de guerra ticanacan temicti tepoztli, el acero aprestad y el bridón, iuan ueliqui man tlalcocomoni y retiemble en sus centros la tierra icuac totepoz cueponiz nohuian. al sonoro rugir del cañón. Poesía en náhuatl de Sor Juana (Villancico VIII del Tercero Nocturno, San Pedro Nolasco, 1677) (Mestizo y Mexicano) (Tocotin del Villancico VIII. Ensaladilla. Tercero Nocturno, Asunción de 1676) (Náhuatl6) Tocotín - Tia ya timohuica Los Padres bendito totlazo Zuapilli tiene on Redentor; maca ammo, Tonantzin, amo nic neltoca titechmoilcahuíliz. quimati no Dios. Ma nel in llhuícac Sólo Dios Piltzintli Huel timomaquítiz del Cielo bajó, ¿amo nozo quenman y nuestro tlatlácol timotlalnamíctiz? nos lo perdonó. In moayolque mochtin Pero esos Tepoxqui huel motilinizque; dice en so sermón tiaca amo, tehuatzin que este San Nolasco ticmomatlaníliz. mletchin compró. Ca mitztlacamati Yo al Santo lo tengo motlazo Piltzintli mucha devoción mac tel, in tepampa y de Sempual Xúchil xicmotlatlauhtili. un Xúchille doy. SALUDOS Y PREGUNTAS EN NAHUATL COMO TE LLAMAS? (Q!JENIN TI MONOTZA) R= ME LLAMO ... R= MANI MONOTZA MOISES ¿cUANTOS AÑOS TIENES? (CANOSI-ll SI-llHUITIPIA) R= TENGO SO AÑOS R= NIPIA SO SI-llHUIT - ¿cóMO ESTAS? (Q!JENIN TIETOC) R= iESTOY BIEN! R= CUALI ETOC ¿cóMO ESTÁN TODOS? (Q!JENIN.NENYETOQUE) R= iTODOS ESTAMOS BIEN! R= TINOCI-ll CUALI TIE TOQUE ¿VAMOS A PLATICAR? (TIMO NONOZATIC) R= iSI VAMOS A PLATICAR! R= QUEMA TIMO NONOZATIC LVAMOS A PASEAR? ¿TIOHUE TIP ASHALOTI? R=:= iNO Q!JlERO! R= iAMO NINEQ!JlC! iBUENOS OlAS! TANEZIC O CUALI TONALTIN iBUENAS TARDES! TIO TAYIC O CUALI TEOTIACTIN iBUENAS NOCHES! TIOTAC O CUALI YOHUALTIN iNOS VEMOS, HASTA MAÑANA ITIMOTA HASTA MOSTLA! ¿QUÉ PASO? HONPANOVA? NADA AMOTELI ESTA BIEN CUAL! ETOC ¿Q!JÉ VAS A HACER? !MUCHAS GRACIAS! (HON CI-llCI-llHUATIN?) iMIAC TIAZOCAMATI! R= iVOY HACER MUCHAS COSAS! R= NIO NICI-llHUATIC MIAC CI-llHUALI iDE NADA! iDE AMOTELI! ¿QyÉ TIENES? HON TIPIA? R= iME DUELE EL CUERPO! R= NESH COCUHU NOOMI lA DÓNDE VAS? íVOY A MI CASAl CANTIO NIO NOCHAN SEÑORAS Y SEÑORES TATAME UAN NANAME MAESTRAS Y MAESTROS TLAMASHTIQ!JE AUN TIAMESHTIA NUMEROS l=CE 2=0ME 3=YEVEYI 4=NAHUI S=MACUILI 6=CHICOASEN 7=CHICONAVI 8=CHICOME 9=CHICUEY 1O=MACTI.ATI ·MAMA=MONANA PAPA=MOTATA ABUELO=MONITZIN ABUELA=MONITZIN HERMANA=MOCHI HERMANO=MOCHI TAGA NIÑO=PILIT NIÑA=ZAPILTIZ SI=Q!JEMA NO=AMO iDISCULPE!=iNESHTAPOPOL VI! JOVEN=OXQ_UISHPffi JOVEN (MUJER)=ZUAPffi Monstruo de dos cabezas: La Tierra Códice Dresde Esta obra se terminó de imprimir en noviembre de dos mil diez El tiraje fue de 3000 ejemplares y 50 versiones digitales. Tipografia Bookman Old Style en 9, 10, 11 y 12 puntos. Hardware: AMD Phenom Quad Core 2800 Mhz Software: Windows Vista Ultimate Office 2007 lZTAVISIÓN & lPAN TEPEME IHUAN OZTOME www.montero.org.rnx México, Naucalpan MMIX 109 SECCIÓN: 36, Estado de México TITULO: 100 historias de linaje de graniceros del Popocatepetl e lztaccihuatl EDITORIAL: lpan Tepeme lhuan Oztome AUTOR (ES): Moisés Vega Mendoza TEMA: Ciencias Sociales En la época prehispánica la labor de los graniceros era ejercida por la elite sacerdotal. Quienes poseían el .poder del conjuro y la predicción de los fenómenos atmosféricos, que regían la vida de los pueblos mesoamericanos, ostentaban una jerarquía social importante. Con la ruptura histórica que propició la Conquista estos cultos fueron perseguidos, y por ende, pasaron a la práctica oculta. Más tarde, para muchos pueblos, se convirtieron en creencias y prácticas subalternas.