EL VESTIDO PERSONAJES. ALBA (Entre 40 y 50 años) MERCEDES (15 años) PEDRO (Entre 40 y 50 años) EUGENIO (Entre 40 y 50 años) GERTRUDIS (Entre 65 y 75 años) 1 (UN COMEDOR DE GENTE DE CLASE MEDIA BAJA, DONDE PUEDE HABER APARATOS EN VARIOS LUGARES Y MUÑECAS. ALBA ESTÁ COSIENDO FRENETICAMENTE. CORTA HILITOS, VA Y VIENE CON LA PRENDA, LA MIRA, LA ACOMODA. HAY UN TELEVISOR ENCENDIDO CON UN PROGRAMA DE “FIESTAS”) ALBA- Mer! Vení, mi amor… Merce! (CONTINÚA ESTIRANDO Y ACOMODANDO EL VESTIDO) Vení, por favor! (ENTRA UNA ADOLESCENTE CON ROPA SUELTA Y ASPECTO BIZARRO, ESTÁ COMIENDO ALGO. CAMBIA DE CANAL. SE SIENTA, NI LA MIRA) ALBA- Sacáte eso, vení. MERCEDES- Ni pienso ALBA- ¡Vení Mer! Y dejá de comer que cada vez que te lo pruebo, te lo tengo que agrandar. MERCEDESALBA- Ni pienso, te dije. ¿Y qué te pensás poner para tu fiesta? MERCEDES- ¡¿Mi fiesta?! ALBA- ¿Quién cumple 15? ¿Yo? MERCEDES- Estaría ¿no? ALBA- Vamos, dejáte de jorobar, ponételo. MERCEDES- ¡Te dije que no quiero ninguna fiesta! ALBA- ¡Siempre fuiste tan egoísta! Sos incapaz de hacer felíz a tu madre. MERCEDES- No es mi ocupación preferida. 2 ALBA- ¿Y cuál vendría a ser, amorcito? ¿Comer, tal vez? (MERCEDES HACE GESTOS DE FASTIDIO) ALBA- ¿Y tu padre? MERCEDES- ¿Qué pasa con papá? ALBA- ¡Que está tan ilusionado! Y yo, no veo la hora de verlos bailar el vals. MERCEDES- (IRÓNICA) Me imagino. ALBA- Bueno, todas las chicas bailan con su papá. MERCEDES- (IRONICA) Sí, claro (ENTRA PEDRO CON UNOS APARATOS EN LA MANO Y AURICULARES PUESTOS, TRAE TAMBIEN UNAS PINZAS. COLOCA TODO SOBRE LA MESA, SE PONE A “TRABAJAR” Y CAMBIA EL CANAL) ALBA- (A PEDRO) ¿Sabés lo que dice tu angelito? Que no quiere ninguna fiesta. (PEDRO NI LA MIRA) ¿Me escuchaste? PEDRO- ¿Qué? ALBA- ¡Dice que no quiere la fiesta! PEDRO- (SACÁNDOSE LOS AURICULARES) ¿Qué fiesta? MERCEDES- (IRÓNICA) ¡Está tan ilusionado! ALBA- (A MERCEDES) ¡Dejá de engullir y vení para acá! (MERCEDES CORRE Y ALBA CORRE DETRÁS DE ELLA. MERCEDES TOMA DE ALGUN LADO UNA CRUZ Y LA PONE FRENTE A SU MADRE) 3 MERCEDES- ¡Vade Retro! ¡Vade Retro! ¡Sal, demonio! ¡Aléjate! (MERCEDES SALE DE ESCENA) ALBA- ¿De dónde sacaste eso? ¡Mocosa de porquería! (A PEDRO) ¿Y vos? ¿Pensás seguir así? ¿Sin decir nada? PEDRO- ¡Si cada vez que digo algo, me contradecís! ALBA- El día que digas algo coherente, no te voy a contradecir. (PEDRO SIGUE CON LO SUYO. HACE UN RUIDO TERRIBLE) ALBA- PEDRO- ¡Pedro! ¡Pará con ese ruido! (SE PONE AURICULARES Y GRITA) ¡¿Está bien ahora?! (ALBA LE HACE SEÑAS DE QUE APAGUE, ÉL NO ENTIENDE, ELLA INSISTE, HASTA QUE SE ACERCA, SE LA APAGA Y LE SACA LOS AURICULARES. A PARTIR DE AQUÍ ÉL SE LOS PONE Y SE LOS SACA VARIAS VECES EN DISTINTOS MOMENTOS) ALBA- Estábamos conversando. PEDRO- ¿Vos y tu otro yo? ALBA- Está claro ¡La chica tiene a quién salir! ¿Hablaste con Eugenio? PEDRO- … ALBA- (GRITA) ¡Pedro! PEDRO- (SE SACA LOS AURICULARES) ¿Qué pasa? ALBA- ¿Qué te dijo Eugenio? ¿Viene? PEDRO- ¡Si estuvo hace poco! ALBA- No hace poco. 4 PEDRO- Octubre. ALBA- Septiembre. Hace más de cuatro meses. PEDRO- ¡Octubre! Vos lo hiciste venir para nada. ALBA- ¿Cómo para nada? ¡Fue cuando se perdió tu madre! PEDRO- No hacía falta que viniera, nosotros podíamos encontrarla. ALBA- Hacía dos días que había desaparecido y vos seguías con que “ya va a venir, algún vecino la va a traer”, mientras escuchabas la nada y seguías con… eso! PEDRO- ¡Pero si salí tres veces con el auto a buscarla! ALBA- ¿Y quién la encontró? PEDRO- ¡La policía! ALBA- Porque Eugenio hizo la denuncia PEDRO- ¡Gran cosa! ALBA- No sé por qué te molestó que lo llamara, después de todo es la madre de los dos. PEDRO- ¡Tiene mucho laburo! ¡Está muy ocupado! ALBA- ¿Le dijiste que era importante? PEDRO- ¿Cuándo? ALBA- Cuando llamó, hace un mes. ¿Le dijiste que tenía que venir? Es importante que él vea cómo la organicé, si va a invertir. PEDRO- ¿Cómo le voy a decir que TIENE que venir? El llamó por el cumpleaños, vendrá. ALBA- Claro ¿Cómo se lo va a perder? En cualquier momento aparece por esa puerta con un gran paquete para su sobrina. ¡Pobre 5 Eugenio! PEDRO- ¿Por qué pobre? ALBA- Es una manera de decir (MOSTRÁNDOLE EL VESTIDO) ¿Qué te parece? PEDRO- … (MIENTRAS ELLA HABLA, ÉL VUELVE A PONERSE LOS AURICULARES Y SIGUE CON LO SUYO) ALBA- (HACIA LA HABITACION) No puedo entender que seas tan ingrata, yo a tu edad nunca le hubiera hablado a mi mamá como vos me hablás a mi… (APARECE MERCEDES Y LA INTERRUMPE) MERCEDES- Cuando vos cumpliste quince, hacía diez años que tu madre se la había tomado con el vecino. ALBA- Se las había tomado. MERCEDES- Es lo que dije. ALBA- No, vos dijiste “se la había tomado” y es “se las había tomado” MERCEDES- Sí, mamá, diez años que se garchaba al vecino y se había ido con él. ¿Está bien? ALBA- No hables así, Merceditas, no es lindo que una niña use esas palabras (LA MIRA CON ASCO) ¡Cada vez te vestís más horrible! ¿Diez años? MERCEDES- No la puteabas porque no estaba. ALBA- En cambio, yo aquí estoy para escucharte, y vos no agradecés nada. 6 (MERCEDES HACE ALGÚN GESTO DE BURLA, Y SIN QUE LA VEAN, LE DESENCHUFA LA RADIO AL PADRE, QUIEN EMPIEZA A ACTUAR COMO NO ENTENDIENDO QUÉ LE PASA AL APARATO) ALBA- Menos mal que con tu hermana fue muy distinto. ¡Tan agradecida! ¡Qué contenta estaba con su fiesta! Todavía se acuerda, a veces me pone en las cartas: “mamita, qué lindo vestido me hiciste” MERCEDES- (IRÓNICA) Sí ¡Las cartas! ALBA- Sí, las que me escribe todos los meses (LE SEÑALA LA ROPA QUE TIENE PUESTA) ¡Estás toda manchada! MERCEDES- ¿No era que te escribía todas las semanas? ALBA- ¡Qué celosa sos, Mer! Eso no ayuda en la vida. ¡Vas a tener problemas con los hombres! (PEDRO SE LEVANTA FURIOSO, MIRA EL CABLE, LO ENCHUFA) PEDRO- ¡¿Quién carajo tocó esto?! (A ALBA) ¡Ustedes, que pasán como trombas! ¡Seguro! ¡Nunca miran nada! MERCEDES- (MIRANDO A PEDRO CON ASCO) No pienso tener una mierda con los hombres, nada. ALBA- ¡No hables así, te dije! MERCEDES- Si hablo de garchar, porque hablo de garchar, si hablo de no garchar, porque hablo de… ALBA- ¡Con tal de repetir esa palabra tan fea!... (PAUSA) ¿No serás de ésas vos, no? 7 MERCEDES- ¿Y? ¿Qué pasa si soy trola? ALBA- ¡Pedro! ¡¿Estás escuchando?! PEDRO- ¿Qué pasa? ALBA- ¿Cómo qué pasa? MERCEDES- Sí, eso ¿qué pasa? (ALBA SE SONRIE, MERCEDES LA MIRA) ALBA- Siempre tuve curiosidad… ¿Cómo harán las… para…? MERCEDES- ¿Para garchar? ALBA- Porque… (AMAGA CON SEÑALARSE ABAJO PENSATIVA) MERCEDES- ¡No es la única forma…! ALBA- (LA INTERRUMPE DÁNDOSE CUENTA DE LO QUE ESTÁ DICIENDO) ¡Este no es un tema para una niña como vos! Yo no creo que… ¡yo te crié bien, nena! (SE SONRÍE OTRA VEZ) MERCEDES- ¿Qué te pasa? ALBA- ¡Yo que coso tan bien! Tuviste montones de muñecas con sus vestiditos… MERCEDES- ¿Y? ALBA- Bueno… aunque… MERCEDES- ¿Si? ALBA- (MIRANDO A PEDRO QUE ESTÁ EN LO SUYO) Le darías un poco el gusto a papá, que quería un varón. MERCEDES- Una trola no es… ¡Bah! No importa… Entre vos que no querías nada y papá que quería un varón… yo digo: ¿por qué no usaron forro? ¡vos que le hacés la campaña! 8 ALBA- Condón, Merceditas, se dice condón. (SUENA EL TELÉFONO, QUE LAS INTERRUMPE. SE MIRAN. ALBA SE LEVANTA Y ATIENDE) ALBA- Hola… ¡Eugenio! ¿Cómo estás?... Muy bien, con los preparativos, claro… Estaba segura que no te ibas a olvidar, hace un momento decíamos eso con tu hermano… Pero, claro, Merceditas y yo estamos ansiosas por que vengas… por supuesto… La fiesta es este sábado sí… MERCEDES- ¡No hay ninguna fiesta! ALBA- No, nada ¿a qué hora llegás? MERCEDESALBA- ¡Ninguna fiesta! Nada, no, dice siesta, que no va a dormir la siesta, que te espera. (MERCEDES TRATA DE SACARLE EL TELÉFONO, ALBA NO LA DEJA. LUCHAN) (PEDRO SE SACA LOS AURICULARES Y LAS OBSERVA) ALBA- ¡Ah! ¿Estacionando? ¡Fantástico!... No, no me pasa nada. ¡Es que no te oigo bien! ¡hola, hola! te esperamos, chau! (ALBA CUELGA EL TELÉFONO Y LA EMPUJA A MERCEDES) Enseguida está acá, prepárense. PEDRO- ¿Preparar qué? ALBA- (VA APURADA HACIA LA COCINA, SIGUE HABLANDO DESDE AHÍ). Vos sabrás, acordáte lo que hablamos. Yo por mi parte voy a hacer café. MERCEDES- ¡Te dije que no hay ninguna fiesta! 9 ALBA- ¡Decíselo vos a tu tío, está tan ilusionado! MERCEDES- (IRÓNICA) ¿Él tambien? ALBA- Andá a cambiarte, mirá lo que parecés. MERCEDES- Tu hija parezco. ALBA- Sos mala, Mercedes, mala. MERCEDES- Siempre me lo dijiste, mamá, un demonio decías cuando era chica ¿te acordás? ALBA- ¡Cariñosamente! ¡Qué chica complicada! (VUELVE, AGARRA EL VESTIDO, LO DOBLA) No te lo probaste Merceditas… (SE OYE UNA VOZ, LA DE LA ABUELA GERTRUDIS) GERTRUDIS (EN OFF)- ¡Alba! ¡Alba! ALBA- ¿Qué querrá ahora? MERCEDES- Salir, como siempre. ALBA- No puede, y ya lo sabe. ¿Para que se vuelva a escapar y nos volvamos locos buscándola? No, de ninguna manera. PEDRO- De la habitación podría salir. ALBA- (IRÓNICA) ¡No es la hora de la novela todavía! Cuando se habla de tu mamita bien que escuchás ¿no? (TRATA DE PONERSE ENCIMA DE LO QUE TIENE EL VESTIDO DE MERCEDES QUE NO LE ENTRA) Ahora cuando llegue su otro bebé, la sacan si quieren. PEDRO- Si no tuviéramos su jubilación tendrías que trabajar en serio, vos. ALBA- ¿Por qué yo? 10 PEDRO- ¡Claro! ¡Cómo se me va a ocurrir semejante cosa! ¡Dejá ese vestido, no seas ridícula. No podemos hacer ninguna fiesta. MERCEDES- ¡Bravo, papá! ALBA- ¡Hagan alianza nomás! Pero te digo ¡La fiesta se hace! ¡Con todo lo que trabajé! Además, es una inversión PEDRO- Aunque Eugenio nos dé la guita, cosa que no creo, no hay para una fiesta. MERCEDES- ¿Qué guita? ALBA- Nada, son cosas de grandes. PEDRO- Ella no quiere fiesta, y no tenemos un puto mango. ALBA- Qué costumbre de hablar así delante de la chica. No tenemos plata, dirás. PEDRO- Sea lo que sea, no tenemos. ALBA- No me interesa. Nunca hay que mostrar que uno no tiene. PEDRO- ¿A quién no hay que mostrar? ALBA- ¿No ves? ¡Con esa falta total de ambición…! (SUENA EL TIMBRE) PEDRO- (A ALBA) Andá apuráte, ahí lo tenés al triunfador, abríle. (ALBA VA ENTUSIASMADA ACOMODÁNDOSE EL PELO Y LA ROPA. ABRE LA PUERTA. ENTRA EUGENIO) ALBA- ¡Cuñado! ¿Cómo estás? ¡Qué bueno verte! EUGENIO- ¡Hola familia! ¿Cómo están? PEDRO- (A EUGENIO) ¡Fantástico! Dejálo ahí el paquete, que está pesado. 11 EUGENIO- ¿Qué paquete? ALBA- (MOLESTA) No le hagas caso, Euge ¿Viajaste bien? EUGENIO- (A MERCEDES) ¿Y mi sobrinita? Un beso para el tío, ¡urgente! (A PEDRO) Vos siempre igual, eh? PEDRO- (IRÓNICO) No creas, cada vez estoy más cerca de lograrlo. (EMPUJA A MERCEDES PARA QUE LO SALUDE. ELLA LO BESA RÁPIDO) ¿Y vos? EUGENIO- Se hace lo que se puede. ALBA- Sentáte, enseguida va a estar el café. Estábamos justamente diciendo lo mucho que te extrañábamos. (ALBA VA HACIA LA COCINA, MERCEDES VA DETRÁS DE ELLA, ALBA LA EMPUJA PARA QUE SE QUEDE CON EL TIO. PEDRO SE VUELVE A SENTAR FRENTE A LA RADIO Y SIGUE CON LO QUE HACÍA, EUGENIO SE ACERCA A PEDRO, MIRA LO QUE HACE) EUGENIO- (SEÑALANDO EL EQUIPO) ¿Todo bien? PEDRO- mmm EUGENIO- ¿Mucho trabajo? PEDRO- mmm (MERCEDES SE VA ESCAPANDO DE LA SALA DISIMULADAMENTE) EUGENIO- ¿Y? (BURLÓN) ¿Conseguiste lo que estabas…? ¿Cómo era eso del transistor que conectaba con la estratosfera? ¿Ya…? 12 PEDRO- No es exactamente así pero… Todavía no, casi… ya van a ver! EUGENIO- Siempre te gustaron los aparatos, eh? PEDRO- mmm ALBA- (ENTRANDO CON UNA BANDEJA CON CAFÉS) Lo de aparato ¿Lo decías por mi? EUGENIO- ¡Jamás me referiría a mi cuñadita preferida en esos términos! (SE ESCUCHA UN RUIDO FUERTE QUE VIENE DE LA HABITACIÓN. SALEN TODOS CORRIENDO A VER QUÉ PASA, LA PRIMERA EN SALIR ES ALBA. PASAN UNOS SEGUNDOS, ALBA VUELVE, Y ELLOS DETRÁS) ALBA- No pasó nada. Se enfría el café. EUGENIO- ¿Adónde fue Merceditas? ALBA- No sé, pero en esta casa tienen la costumbre de salir por la ventana. PEDRO- ¿Quiénes salen por la ventana? ALBA- Tu hija y tu madre, que son igualitas. PEDRO- ¿Qué tiene de malo que la chica se parezca a la abuela? Son los genes… ahora se habla mucho de eso, parece que... ALBA- (LO INTERRUMPE) Espero que haya recibido algunos de los míos, modestia aparte. PEDROEUGENIO- ¿Te cabe alguna duda? (SE QUEDÓ MIRANDO HACIA LA HABITACIÓN) 13 Y la vieja ¿cómo está? ALBA- ¡Rebien! PEDRO- ¿Qué decís? Ya casi no me reconoce. ALBA- Por eso. EUGENIO- (DESDE LA PUERTA, A ALBA) ¿Y a vos, te reconoce? ALBA- No, ahora cree que soy una mucama que tenía en España. EUGENIO- Y… ¿no te molesta? PEDRO- ¡No! Menos cuando le paga el sueldo, y menos todavía cuando le dá la propina por lavarle el culo cagado. ALBA- ¡Ay! ¡Este Pedro tiene cada cosa, está cada vez más chistoso! EUGENIO- Eso es bueno. (SE VA, EL SONIDO DEL TEXTO SIGUIENTE SE ESCUCHA EN OFF) Hola mamita! ¿Cómo está mi reina? ALBA- (EN VOZ BAJA A PEDRO) ¿La podés terminar? Vas a arruinar todo. PEDRO- Me quedo mudo. ALBA- Nada de mudo, acordáte que le tenés que hablar. PEDRO- Ni pienso, fue idea tuya. ALBA- Justamente, ahora te toca a vos hacer algo. PEDRO- La que quiso pedirle sos vos, yo no estuve de acuerdo. Además, yo me arreglo. ALBA- Claro, me olvidaba que pronto vas a descubrir la pólvora y vamos a ser ricos. PEDRO- La pólvora ya está inventada, lo mío es mucho más importante, la comunicación es todo en este mundo de hoy. 14 ALBA- Sí, claro! Todo te dá lo mismo, sangre de pato tenés. PEDRO- Agradecé, si no fuera así, tu vida correría peligro. EUGENIO- (ENTRANDO) Yo la veo muy bien. PEDRO- ¿A quién? EUGENIO- A mamá. Creo que no me reconoció porque me dijo “hola querido”, pero tiene buen aspecto PEDRO- El otro día escuché en la tele que decían que el Alzheimer es… ¿o la demencia senil? ¿Qué es lo que tiene? ALBA- (LO INTERRUMPE) Se la ve bien porque es muy coqueta, ayer Merceditas le pintó las uñas ¿No se las viste? EUGENIO- ¿Qué me tienen que decir? PEDRO- ¿Decir? nada. EUGENIO- ¿Cómo nada? Escuché que… ALBA- Que necesitamos plata. EUGENIO- ¿Ah, sí? PEDRO- ¡No! (EUGENIO MIRA SIN ENTENDER, ALBA Y PEDRO SE SUPERPONEN) ALBA- ¡Sí! PEDRO- ¡No! EUGENIO- ¿Y? ¿Cómo es? (SE VUELVE A ESCUCHAR UN RUIDO QUE VIENE DE LA HABITACIÓN) ALBA- (A EUGENIO) ¿Le abriste la ventana? 15 EUGENIO- Me pidió que…le faltaba un poco el aire me dijo… ALBA- (A PEDRO) ¡Se fue! APAGON 16 (ESTA ALBA COSIENDO CON UNOS TULES Y FLORCITAS Y EUGENIO SENTADO) EUGENIO- ¿No te parece que lo tendría que haber acompañado? ALBA- ¿Para qué? Vos estás cansado, venís manejando hace ocho horas… EUGENIO- Cuatro. ALBA- ¿Cuatro? EUGENIO- Sí ALBA- ¡Ay! ¡Estos autos modernos! ¡Qué bárbaro! EUGENIO- No es tan moderno, Alba, son 300 kilómetros. ALBA- No seas tan modesto Euge, si tenés un buen auto ¿qué pasa? Trabajás un montón ¿por qué no vas a tener un buen auto? ¿A quién era que se lo habías comprado? EUGENIO- A Vázquez, el concejal. ALBA- ¡Claro! ¡Por eso! (PAUSA) EUGENIO- No creo que haya ido muy lejos ¿no? Yo recién venía de estar con ella. ALBA- ¡Pero, no! Quedáte tranquilo, le encanta llamar la atención. Tu papá la tenía demasiado mimada. EUGENIO- Mi papá le pegaba ¿no te acordás? ¡Le daba cada paliza! ALBA- Claro que me acuerdo, y después se sentía tan culpable que ¡la llenaba de mimos! ¡Pobre Luis! EUGENIO- ¿Por qué pobre? 17 ALBA- Es una manera de decir (MOSTRÁNDOLE LO QUE HACE) ¿te acordás de qué era este tul? EUGENIO- (SE ACERCA, LO TOCA, PIENSA) No tengo ni idea. ¿Tendría que acordarme? ALBA- ¡De mi vestido de novia! ¿Te acordás Eugenio lo linda que estaba? EUGENIO- ¡Claro! (PREOCUPADO, MIRA POR LA VENTANA) ALBA- Tu papá no paraba de decírmelo. Me quería mucho Luis. Y vos tambien me decías… (COQUETA) ¿te acordás lo que me dijiste esa noche? Eso de “si no fueras mi cuñada…”, igual no impidió que… EUGENIO- (LA INTERRUMPE NERVIOSO) Sí sí, me acuerdo, pero… ALBA- (LO INTERRUMPE TAMBIEN. CON MUCHA NOSTALGIA) ¡Cuánta ilusión! ¡Era tan joven y tan delgadita! Tenía el cabello por acá (SEÑALANDO EL CODO) ¡brilloso! EUGENIO- (SIGUE MIRANDO POR LA VENTANA) mmm ALBA- ¿Te acordás? EUGENIO- Claro, era blanco. ALBA- ¡¿Cómo iba a tener el cabello blanco?! Castaño era. EUGENIO- No, digo el vestido. ALBA- ¿Cómo era yo, te acordás? EUGENIO- (LA MIRA CON ASCO) Por supuesto (SIGUE MIRANDO POR LA VENTANA) ALBA- (TRISTE) Yo no… A veces miro las fotos... 18 EUGENIO- La otra vez se alejó muy rápido. La encontraron en… ¿Lugano era? ALBA- … EUGENIO- La vieja. ALBA- (VUELVE AL TONO ALEGRE) ¡Ah! ,eso fue porque se tomó un taxi la muy desgraciada ¡se gastó un montón de plata! EUGENIO- Supongo que no le dejaron más la plata a su alcance. ALBA- ¡Si no la larga! ¿Cómo querés que…? EUGENIO- ¿Cómo que no la larga? ALBA- Justamente de eso queríamos hablar con vos, porque hay que Convencerla, de alguna manera… para que nos firme un poder. Vos sabés el lío que es todos los meses ir con ella al banco. ¡Es por su seguridad! Esto que estábamos hablando, mirá pobrecita si le pasa algo ¡tan lejos de casa!¡Y más cómo está de la cabeza! EUGENIO- Y, no sé, habría que ver… ¿vos creés que…? ALBA- ¡Pero claro! (SE LEVANTA DE LA SILLA Y VA A BUSCAR ALGO) ¡Ay, Eugenio! ¡casi me olvido! ¡Otra cosa! Es que no se puede estar en todo. Vos me tenés que ayudar con otro problema que tengo… EUGENIO- ¿Qué necesitás? 19 ALBA- (MIRA SU RELOJ Y PONE LA TELE EN EL CANAL QUE MIRA ELLA DONDE ESTAN DANDO UNA CLASE DE BAILE, SE TRATA DE UN VALS) Me tenés que ayudar a practicar porque con tu hermano es imposible. ¡Es de madera! (ALBA VA HACIA ÉL, LO SACA A BAILAR, ÉL DUDA, FINALMENTE SE LEVANTA Y EMPIEZAN A BAILAR. LUEGO DE UN MINUTO ENTRA PEDRO. CAMBIA DE CANAL) PEDRO- ¿Qué están haciendo? ALBA- ¿Qué parece? Practicando para la fiesta, es obvio. EUGENIO- (DEJANDO DE BAILAR) ¿No la encontraste? PEDRO- (IRÓNICO) Si la hubiera encontrado la hubiera traído. EUGENIO- (A ALBA) Tenías razón, está más chistoso. PEDRO- Parece que se la hubiera tragado la tierra… y ustedes, dále con la fiesta. ALBA- Por supuesto, no voy a permitir que nos la arruine. Ya está todo organizado. Lo único que falta es pensar qué vamos a decir de la abuela? PEDRO- ¿A quién? ALBA- A los invitados. Bueno, ya veremos… En vez de poner esa cara ¡hacé algo! PEDRO- Vengo de patear todo el barrio. ¿Y vos qué hiciste, además de bailar? EUGENIO- ¡No discutan, che! Eso no ayuda. 20 ALBA- Le dí a Betty las fotocopias. PEDRO- ¿Qué fotocopias? ALBA- Las de las fotos de Gertrudis. Ella las fue a repartir en los negocios y a pegar en los postes. EUGENIO- ¿Quién es Betty? ALBA- La vecina, es muy gauchita. PEDRO- ¿Qué fotos le diste? ALBA- Las que tenía, las mismas de la otra vez ¡Son las únicas que hay! PEDRO- ¿Pero qué tenés debajo de la tintura? ¡Ya te dije que no sirven! ALBA- Te pedí que le sacaras otras, pero nunca me hacés caso. PEDRO- ¡Si se ponía a gritar como una loca! Las tres fotos que le saqué parecen placas odontológicas EUGENIO- ¿Por qué no sirven las fotos? PEDRO- Porque ahí mamá tenía 30 años. ALBA- Es lo que hay, tenemos que seguir practicando, Eugenio. PEDRO- (YÉNDOSE CON UN CABLE EN LA MANO) Yo tengo que seguir con mi trabajo (SE VA) EUGENIO- Después seguimos, cuñadita… ¿Por qué no te preparás un vermucito? Yo traje un salamín de allá que está buenísimo ALBA- Buena idea (SE VA PARA LA COCINA) (EUGENIO SE SIENTA, BAJAN LAS LUCES, Y VUELVEN A SUBIR DE A POCO) 21 (ESTÁ GERTRUDIS SENTADA MIRANDO SU PROGRAMA DE TV, ES DE NOCHE. ENTRA EUGENIO. ELLA ES UNA ANCIANA EXTRAÑA, CON UN PEINADO ALTO, MUY APARATOSO, QUE HABLA CON ACENTO ESPAÑOL, EUGENIO SE SOBRESALTA AL VERLA) GERTRUDIS- ¿Quién es usted? ¿Qué hace acá? EUGENIO- ¿Vos qué hacés acá? ¿quién te abrió la puerta de tu habitación? GERTRUDIS- ¡Ah! ¡Ya veo! EUGENIO- ¿Qué ves? GERTRUDIS- Que si yo salgo se les acaba la fiesta ¿no? Cuando el gato no está… EUGENIO- ¿Fiesta? No empezó todavía la fiesta. ¿No te acordás quién soy? ¿En serio? Miráme bien. GERTRUDIS- No me tutee, por favor. (SE ACERCA UN POCO, LO MIRA) Se parece a… a… no, no, a nadie. EUGENIO- ¿Cómo a nadie? Además estaba acá cuando te trajo esa señora, esta mañana. GERTRUDIS- ¿Qué señora? EUGENIO- ¿No te acordás que te habías perdido y te trajo la peluquera? GERTRUDIS- ¿Que yo me había perdido? Yo sé muy bien dónde está la peluquería, y fui porque tengo una fiesta. Cumple años mi nieta. EUGENIO- Pero… mamá, la señora te trajo cuando le dijiste que no tenías plata y que no te iban a ir a buscar. 22 GERTRUDIS- Salió un poco caro, pero fue muy amable ¿le habrán dado una propina? EUGENIO- No sé, estábamos desesperados. GERTRUDIS- No era para tanto, digo una propina nada más. Y no me cambie de tema, yo quiero saber qué hace en mi casa. EUGENIO- Te vine a visitar. GERTRUDIS- (LO INTERRUMPE) No recibo a gente que no conozco, mucho menos a hombres. EUGENIO- Pero… ¡hacé un esfuercito! No habré sido un hijo modelo pero tampoco… GERTRUDIS- ¡Déjese de muñeiras! Si no tiene una buena explicación rápido, se retira de mi casa. Ya me dí cuenta de lo que está pasando, y no la autoricé a recibirlo aquí. ¡Qué desparpajo! EUGENIO- ¿A quién no autorizaste? GERTRUDIS- A su mujer, usted ha venido por Alba seguramente. EUGENIO- No es mi mujer, yo soy soltero. GERTRUDIS- Será su amante, entonces. Si yo no lo invité, cosa que no hice, porque no lo conozco, entonces ha sido mi criada, que es muy atrevida. EUGENIO- No hables más tonterías, ella no es mi amante. GERTRUDIS- Poco me importan los títulos. Ya me va a escuchar. ¡Alba! EUGENIO- (ACERCÁNDOSE) ¡Pero mamá! Soy tu hijo, ella es mi cuñada, la mujer de Pedro… (TRATA DE AGARRARLA CARIÑOSAMENTE) 23 GERTRUDIS- Qué manera de inventar… (LE PEGA EN LAS MANOS) ¡No se atreva a tocarme! ¡No crea que en esta casa somos todas tan poco recatadas! ¡Alba! ¡Vení! ¡Decíle a tu novio o lo que sea, que se vaya de esta…! EUGENIO- ¡Dejá de gritar! GERTRUDIS- ¡No me toque! ¡Váyase sinverguenza! Tambien le voy a decir que trató de propasarse. EUGENIO- ¿Pero qué decís? ¿Estás loca? GERTRUDIS- ¡Encima me insulta! ¡Auxilio! EUGENIO- Tranquilizáte, por favor. GERTRUDIS- ¡Alba! ¡Auxilio! (EUGENIO INTENTA HACERLA CALLAR. AL PRINCIPIO TRATA DE CALMARLA, NO PUEDE. SE VA NOTANDO QUE LA ODIA Y QUE VA PERDIENDO EL CONTROL. LE TAPA LA BOCA, ELLA LUCHA) EUGENIO- Si prometés que te vas a callar, te suelto y me voy. ¿Sí? (GERTRUDIS DICE QUE SÍ CON LA CABEZA) EUGENIO- ¿Trato hecho? (GERTRUDIS VUELVE A DECIR QUE SÍ CON LA CABEZA. EUGENIO LE SACA LA MANO, ELLA GRITA, ÉL EMPIEZA A AHORCARLA AGARRÁNDOLA DEL CUELLO CON LAS DOS MANOS, GERTRUDIS TRATA DE DEFENDERSE GOLPEÁNDOLO. ENTRA MERCEDES) MERCEDES- ¿Qué pasa? (A EUGENIO) ¡¿Qué hacés?! (EUGENIO LA SUELTA, ELLA LE SIGUE PEGANDO, ÉL 24 TRATA DE DISIMULAR) EUGENIO- Me pegaba. ¿No viste? (BAJA EL TONO DE VOZ) Está reloca, tenían razón. GERTRUDIS- (TOSE, SE ACOMODA) ¡Fuera de aquí! MERCEDES- ¿Y por eso la ibas a matar? EUGENIO- ¿Matar? ¿Pero cómo se te ocurre, Merce? GERTRUDIS- ¡Asesino! ¡Salga de esta casa y no vuelva a acercarse! (EUGENIO LA MIRA A MERCEDES) MERCEDES- Es inútil, salí. EUGENIO- Pero… MERCEDES- Hasta que se olvide (EUGENIO SALE DE ESCENA) GERTRUDIS- (A MERCEDES) ¡Qué linda niña eres Mercedes! (LA ACARICIA) ¿Tienes todo listo para tu cumpleaños? MERCEDES- Pero… si ya sabés que… GERTRUDIS- Yo fui a la peluquería para tu fiesta. MERCEDES- Ya veo, abuela, estás muy linda. GERTRUDIS- Debías haberme visto cuando era joven, entonces sí era bonita. MERCEDES- Ví las fotos. GERTRUDIS- ¿Sí? MERCEDES- Están por todo el barrio (SE RÍE) ¡Parecés una estrella de cine que promociona su última película! (SE RÍEN LAS DOS) GERTRUDIS- ¿De veras? ¿Otra vez? ALBA- Por todos lados. 25 GERTRUDIS- Me hubiera gustado… ¿Cómo podría llamarse esa película? MERCEDES- “Se busca” GERTRUDIS- “Viva o muerta” (SE RÍEN) MERCEDES- Actriz invitada: Mercedes de todos los demonios. GERTRUDIS- De todos los… (SE RÍE) es un buen nombre. Yo tengo una criada que se llama… ¿cómo es que se llama? ¡Amparito se llama! Lo que no sé es ¿por qué se hace llamar Alba?... así que tú serías Merceditas de todos los demonios… APAGON 26 (ALBA Y PEDRO ESTÁN SENTADOS FRENTE A FRENTE CON CARA DE “DEPRESIÓN”. ELLA CEBA MATE Y TOMA. ÉL EXTIENDE LA MANO PERO ELLA NO LE DÁ NINGUNO. CUANDO VAYA SUBIENDO LA TENSIÓN EL TELEVISOR ACOMPAÑA LA SITUACIÓN) ALBA- ¡Y claro! ¿Cómo nos iba a dar la plata? ¡Si no mostraste el menor entusiasmo! PEDRO- ¿Entusiasmo? ALBA- Sí, o convicción, o ganas, aunque más no sea. PEDRO- No puedo. ALBA- ¿Por qué no podés? PEDRO- Porque estoy muy ocupado. ALBA- Vos te hacés el ocupado. PEDRO- ¡Estoy ocupado! Y ahora preocupado, porque no puedo reproducir el experimento, me falta tan poco… ALBA- Un poco de criterio de realidad te haría falta. PEDRO- Mirá quien habla ¿Quién se gastó toda la guita en una fiesta de mierda? en la que todo el mundo se cagó de hambre. ALBA- Fue austera PEDRO- ¿Ahora se llama austero al cagarse de hambre? ALBA- Es fino eso, vos no entendés nada. PEDRO- Yo lo único que entiendo es que ahora no tengo para comprar el cable magnetizado que necesito, y sin ese cable no puedo seguir. ALBA- Entrás en un círculo viscoso y todo te sale mal. 27 PEDRO- Vicioso. ALBA- No es eso lo que quiero decir. Quiero decir ¡viscoso y asqueroso! PEDRO- Pero no tiene sentido ALBA- ¿Qué no tiene sentido?! PEDRO- En un programa en la tele explicaron por qué se lo llama círculo vicioso, es muy interesante… ALBA- No me cambies de tema. ¿Me vas a instruir ahora con lo de la tele? PEDROALBA- Imposible. ¿Qué es imposible?! (PEDRO SE LEVANTA Y VA A BUSCAR EL EQUIPO CON EL QUE ESTABA TRABAJANDO. SILENCIO) ALBAPEDRO- (MIRÁNDOLO) ¿Qué hacés? (PENSATIVO) Claro, eso es lo que pasa ¡el círculo vicioso! Si yo voy a la estratósfera sin pasar por la ionósfera… pero no puedo pasar por la ionósfera si no fui antes a… es un círculo vicioso… ¡Tenés razón! ¿Cómo sabías vos que…? ALBA- ¿De qué hablás? Yo te decía que todo se estropeó porque la fiesta no salió como tenía que salir PEDRO- (BURLÓN) Fue demasiado fina ALBA- (LLOROSA) No me van a contratar las otras madres, y encima no sé cómo vamos a pagar lo que debemos. 28 PEDRO- ¡Eso! ¿Cómo le pago al ferretero todo lo que le llevé la semana pasada? ALBA- ¿Qué ferretero? Lo que tenemos que pagar son los 200 metros de broderie que puse en las mesas, los 20 kgs. de… PEDRO- ¿Todo eso te lo dieron fiado?! (ÉL EMPIEZA A ENRROSCAR UN CABLE QUE TIENE EN LA MANO EN FORMA AMENAZADORA) ALBA- Y claro. ¿O te creés que con la jubilación y el aguinaldo de la vieja yo iba a hacer todo lo que viste en esa fiesta hermosa?… aunque haya habido algunas fallas PEDROALBA- ¡Vos estás cada vez más loca! ¡Encima que trabajé como una burra…! Porque tenés que reconocer que lo que dependió de mi estuvo perfecto! ¿No me lo vas a reconocer tampoco eso? ¿Vas a seguir diciendo que no sirvo para nada? PEDRO- Precisamente. Ni para limpiar… ¡mirá cómo está todo! ALBA- ¿Querés que sea una fregona? ¡Sos un insensible! PEDRO- ¡El insensible que te mantiene! ALBA- ¡La vieja nos mantiene! Y el plan. PEDRO- Sí, ¿y es la madre de quién? Y el plan ¿quién lo consiguió? ¡Mi hermano! Así que el que te mantiene soy yo. ALBA- ¡Falta que digas “como a una reina”! PEDRO- En ese caso sería un imbécil, no un insensible. ALBA- Hoy estás decidido a sacarme de quicio. PEDRO- … 29 (PAUSA) ALBAPEDRO- ¿En qué pensás? En nada. ALBA- Ya me parecía… Bueno, perdonáme. ALBA- Contáme ¡Dále! ¿Por qué estás tan pensativo? PEDRO- ¿La habrá llamado a Mercedes el día de su cumpleaños? ALBA- ¿Quién? PEDRO- La hermana. Ellas… se querían. ALBA- ¿Qué se te dió por…? PEDRO- ¿No te gustaría saber? ALBA- Creí que pensabas en algo más útil. PEDRO- Al menos pienso, no como vos. ALBA- En Suecia debe hacer mucho frío ahora. PEDRO- No sabemos si está ahí. Estoy tratando de averiguar, el otro día me contestaron “sweden, sweden”, pero no sé si… ALBA- Sabemos lo que tenemos que saber. El tema es otro. PEDRO- Siempre es otro. (PAUSA) ¿Se habrá acordado? ALBA- (GRITANDO) ¡Está esquiando en la nieve! ¡Seguro que está esquiando! ¡O trabajando! ¡Por ahí se le pasó porque trabaja mucho! ¡¿Sabés lo que es ese país?! ¡Una maravilla! Debe estar por llegar una hermosa tarjeta ¡Pensá en alguna solución para nuestro problema en vez de preguntar lo que no se debe! PEDRO- ¿Nuestro problema? ¿Cuál? 30 ALBA- ¡Que estamos re-endeudados! PEDRO- ¿Y qué querés que haga yo? Eugenio te falló. ALBA- Vos fallás, desde hace 30 o 40 años, Eugenio no tiene nada que ver. PEDRO- ¡Habla la perfecta! ¡Nos largó bien duros! Nunca le pedí nada, es la primera vez que te hago caso y… (PAUSA) ALBA- Al menos le dejó a Merceditas un generoso regalo (HACIENDO GESTO DE PLATA) en la mesita de luz. PEDRO- ¿De veras? ALBA- Sí, con una tarjeta, pero la tarjeta no me la quiso mostrar. PEDRO- Nunca te quiere mostrar nada. ALBA- ¡Cómo te gusta mortificarme! El problema es que vos no me apoyaste cuando le expliqué lo que pensábamos hacer. PEDRO- ¿A quién? ¿Qué cosa? ALBA- ¿Cómo a quién? ¡A Eugenio, lo del negocio de las fiestas! Teníamos que estar unidos, pero vos, como siempre… PEDRO- Eugenio no tiene ningún interés en hacer un negocio de esa clase. ALBA- Con vos. PEDRO- Con nadie. Ya tiene bastante guita, está tranquilo. ALBA- Puede ser que no la quiera perder con un fra... PEDRO- ¿Y? ¡Decílo! ALBA- ¡Claro que lo digo! No te tengo miedo PEDRO- Si nunca te pegué ¿Por qué me vas a tener miedo? 31 ALBA- ¡Pena te tengo! PEDRO- ¡Guardáte tu pena y decí lo que ibas a decir! ALBA- No quiere hacer negocios con ¡un fracasado como vos! PEDRO- Ningún fracasado, yo ganaba buena guita, hasta que me echaron ¡hijos de puta! ¡Lo sabés muy bien! ALBA- ¡Porque la hiciste mal! PEDRO- ¿Qué hice mal?! ALBA- ¡Si hubieras hecho lo que tenías que hacer, no te hubieran echado! ¡Pero empezaste con esa historia bendita de la estratosfera! PEDRO- ¡Tuve mala suerte!, eso pasó Y mejor calláte, porque estoy a punto de pasar a la historia de la comunicación ¡ya vas a ver! ALBA- Justo ahora que nadie más escucha radio. PEDRO- ¡No ves que no entendés nada! No es de la radio lo mío, pero para qué me gasto en explicarte a vos?! (PAUSA) ¿No será que Eugenio no quiere hacer negocios con una puta? ALBA- ¿Qué decís? PEDRO- Lo que oíste. ALBA- Las putas se venden por plata. (HACIENDO UN GESTO QUE LO SEÑALA A ÉL) Es obvio que no es mi caso. PEDRO- Por supuesto ¡ya ni para eso servís! (ALBA EMPIEZA A LLORAR) PEDRO- ¿Qué te pasa ahora? ALBA- Nada 32 PEDRO- No seas ridícula ¿qué te pasa? ALBA- Me estoy poniendo vieja… PEDRO- ¡Qué descubrimiento! ALBA- Gracias. PEDRO- Bueno, no te quise decir… (SE ACERCA, LA TOCA, ELLA SE CORRE OFENDIDA) No te pongas así. Todavía… (GESTO DE TOCARLE EL CULO) Lo que pasa es que me ponés nervioso a veces. ALBA- Linda era antes. PEDRO- ¿Cuándo? ALBA- ¡Antes de parir a esas dos yeguas que me estropearon! PEDRO- ¡No seas injusta! No te estropearon tanto. (PAUSA) ALBA- ¿Lo decís de verdad que todavia estoy linda? (PEDRO HACE CARA COMO DE “NO DIJE NADA”) (ALBA ENCIENDE LA TELE, BUSCA, SE ESCUCHA UN BOLERO, SE ACERCA, LO SACA A BAILAR CON UN GESTO, EL DUDA, SE LEVANTA Y BAILAN. VAN BAJANDO LAS LUCES, Y LA MÚSICA MIENTRAS ELLOS SE VAN YENDO DE ESCENA BAILANDO) 33 (VAN SUBIENDO LAS LUCES. ESTÁ MERCEDES COMIENDO ALGO. ENTRA ALBA CON EL VESTIDO EN LA MANO, SE ACERCA, LE MUESTRA) ALBA- Mirá, lo manchaste. Además de reventarlo, lo manchaste. Y eso está re-sucio, lo que tenés puesto, miráte. ¿Por qué no te ponés la remerita que te regalé? (MERCEDES SE CORRE PARA QUE NO LA TOQUE. SIGUE COMIENDO) ALBA- ¿Sabés cual te digo? La amarillita. Cambiáte, dále. (MERCEDES NO RESPONDE. SIGUE COMIENDO) ¡Mer! La de florcitas amarillas…! Te encanta hacerme sufrir. (MERCEDES NO LA MIRA) Ni siquiera una servilleta usás, andás llena de manchas como tu padre. Además estás comiendo mucho, Mer. ¿Qué te pasa? ¿Estás ansiosa? Cuando seas como yo te vas a arrepentir de haber comido tanto. Este vestido te hubiera quedado… ¡un sueño! ¡Si no hubieras engordado de esa manera! Yo me maté trabajando ¿para qué? Parecías un matambre. Y encima lo manchaste ¿cómo hago para venderlo? (LO REFRIEGA) Un remiendo le puedo hacer, pero eso ¿cómo le saco…? Helado parece… o torta… ¡Pará! (MERCEDES ESTÁ EN OTRA, NI LA ESCUCHA. ALBA SE ACERCA OTRA VEZ, LE QUIERE SACAR DE LA MANO LO QUE COME, MERCEDES NO LO SUELTA, TIRONEAN) MERCEDES- ¡Dejáme en paz! 34 ALBA- ¡Qué modales! MERCEDES- ¡Dejá de mirarme si no te gusto! ALBA- (TOCÁNDOLE LA CINTURA Y LA PANZA) ¡Basta, te dije! ¡Dejá de comer! ¡Estás cada vez más gorda! MERCEDES- (LA EMPUJA) ¡Y vos, más vieja! ALBA- ¿Vos tambien? MERCEDES- Yo al menos si adelgazo, no voy a quedar fofa. ALBA- ¡Sos mala! MERCEDES- ¡Y gorda, y sucia! ¿Qué más mamita? ¿Qué más? ¡Ah! Un demonio ¿no? ALBA- ¡No seas rencorosa! Una dice cosas, pero todo lo que yo te digo es por tu bien. MERCEDES- ¿Como cuando me dijiste que no me parecía en nada a papá, que dudabas de que fuera su hija? ALBA- ¿Yo te dije eso? ¿Estás segura? MERCEDES- Y después lo quisiste (IRÓNICA) “arreglar” con que era un cumplido. ALBA- No me acuerdo. MERCEDES- ¡Nunca te acordás de lo que no te conviene! ALBA- ¡Cómo les gusta discutir a vos y a tu padre! ¡Ya lo creo que se parecen! Si dije que no se parecían me equivoqué. (AGARRÁNDOLA Y SACÁNDOLE LA COMIDA) ¡Dejá de comer, Merce…! 35 MERCEDES- ¡No es cuestión de comida! ¿No entendés? ¡No es por eso que estoy gorda! ALBA- ¡No, claro! ¡¿Por qué va a ser si comés como un cerdo?! MERCEDES- ¡Es porque estoy preñada! ALBA- Preñada no, embarazada. Las mujeres no se preñan, los animales se preñan, las mujeres (SE VA DANDO CUENTA DE LO QUE PASA) se embarazan MERCEDESALBA- ¡Salvo que sea un animal el que las preñe! ¿Qué decís Merceditas? No seas desagradable, por favor. ¿De qué hablás? MERCEDESALBA- ¡De tu querido Eugenio, de él hablo! ¿Qué? No puede ser… No digas esas cosas… ¡Qué chica…! Eugenio se fue hace una semana. ¿Cómo vas a estar gorda si estás embarazada de una semana? ¿No ves que…? MERCEDES- No es de ahora, es de la última vez que vino. ALBA- ¡Ah! (SILENCIO TENSO) ¡Con razón te dejó esa plata! Era para que te lo sacaras… considerado dentro de todo… MERCEDES- (IRÓNICA) Sí, muy considerado. ALBA- ¿Y? MERCEDES- Ya es tarde para eso. ALBA- ¿Voy a ser abuela, entonces? MERCEDES- No, mamá. ALBA- ¿Cómo que no? Si vos vas a tener un bebé… 36 MERCEDES- No voy a tener un bebé, voy a tener un demonio… un pequeño demonio. ALBA- No dramatices Merce, no vas a ser ni la primera ni la última que… que… Qué vieja me hace sentir esto de… MERCEDES- ¡Basta mamá! El hijo de puta ése me embaraza y vos… ALBA- ¡Me embaraza, me embaraza! Como si vos… ¡No fue Eugenio! MERCEDES- Fue él. ¡Y no te hagas la sorprendida! Bien que ayudaron ustedes dejándonos solos cada vez que él venía y haciéndolo dormir en mi pieza. ALBA- (TURBADA) ¿Qué pavadas estás diciendo? Si no hay otro lugar en la casa ¿dónde querías que durmiera? MERCEDES- ¡Ustedes, por un mango hacen cualquier cosa! ALBA- (LA INTERRUMPE GRITANDO) ¡Debe ser el de anteojitos ése que te manosea! ¡Ése te lo habrá hecho! MERCEDES- ¡No me manosea! ALBA- Yo los ví, el otro día en la plaza. MERCEDES- Fue hace un montón y me dió un beso… porque me quiere. ALBA- ¡Te quiere coger, como todos! MERCEDES- ¡Ah! ¡Lo dijiste! ¡Repetílo, dále! ¡Co-ger! ALBA- Sí, y por lo visto ya lo hizo ¡porque sos una ingenua y una cualquiera! MERCEDES- No se dice cualquiera, se dice ¡Puta! ¡Puta! ¡Coger! ¡y se dice entregadora! ALBA- ¡Qué desagradable sos! MERCEDES- ¿Ingenua o puta?! ¡Decidíte! 37 GERTRUDIS/EN OFF- ¡Mercedes! ¡Merceditas! MERCEDES- ALBA- (YENDO) ¡Voy abuela! (YENDO DETRÁS DE MERCEDES) Estamos hablando, ¡Mercedes! ¡Estamos conversando! (LO SIGUIENTE SE ESCUCHA EN OFF MIENTRAS VAN BAJANDO LAS LUCES) ¡Vení! Una vez que conversamos… APAGON 38 (ESTÁN PEDRO Y ALBA COMO AL PRINCIPIO. ALBA ESTÁ CON EL VESTIDO EN LA MANO) (ENTRA MERCEDES CON CARA DE IDA, TIENE LA ROPA MANCHADA DE SANGRE, OCULTA LA MANO DONDE TIENE UN CUCHILLO) MERCEDES- Ya está. ALBA- ¿Ya está qué? (VE LA SANGRE, SE LEVANTA DESPACIO) ¿Qué te pasó? MERCEDES- Ya no estoy gorda. ALBA- (SE ACERCA, Y LE MIRA DE DONDE VIENE LA SANGRE) ¿Qué te pasó? ¡Tenemos que ir al hospital! (MERCEDES ESTÁ DURA, MIRA FIJO HACIA DELANTE) MERCEDES- Nada de hospital, ya está. ALBA- ¿Qué pasó? ¿Y el… el bebé? MERCEDES- No necesito hospital. ALBA- Estás perdiendo mucha sangre. MERCEDES- (MOSTRANDOLES EL CUCHILLO) No es mía… ALBA- ¿Qué hiciste? MERCEDES- Ya te dije que era un pequeño demonio. ALBA- (ESPANTADA) Mercedes… ¿vos…? (CORRE HACIA LA HABITACIÓN, SE DETIENE EN LA PUERTA) ¿Vos estás segura que…? (SALE DE ESCENA) (PEDRO RETROCEDE, ESTÁ MUDO) MERCEDES- Tenía cara de demonio, manos y pies de demonio. 39 (ALBA VUELVE DEMUDADA, CON UN GESTO COMO DE ESTAR POR VOMITAR, LA AGARRA, LA QUIERE LLEVAR, NO PUEDE, MERCEDES ESTÁ DURA) MERCEDES- Mucha sangre, sangre roja, verde, azul… ALBA- ¡No puede ser! ¿Por qué? ¿Por qué…? MERCEDES- Un demonio chiquito… (ALBA TRATA DE AGARRARLA, MERCEDES SE ALEJA, SILENCIO TENSO) ALBA- ¡Mi nena! No tenías que… Podríamos haber… MERCEDES- Ya está. ALBA- Vamos a darte un bañito, y a ver a un médico mi amor. PEDRO- Si la ve un médico, va en cana. ALBA- (A PEDRO) Ayudála ¿qué esperás? (GRITA) ¡Hacé algo! PEDRO- Ya lo hicimos ¿no te dás cuenta? Y no grites que vamos a ir todos presos. ALBA- (TOMA UN TRAPO Y SE LO PASA A MERCEDES POR TODO EL CUERPO COMO TRATANDO INUTIL Y FRENETICAMENTE DE LIMPIARLA, MERCEDES DEBILMENTE TRATA DE SACÁRSELA DE ENCIMA, PERO ALBA SIGUE) Pero hay que… llevarla a… (A MERCEDES) ¿Te sentís bien? Sentáte, tomá agua… MERCEDES- (TRATA DE ZAFAR DE LA MADRE) Tenía los ojos rojos. 40 ALBA- Quedáte tranquila Mer, hay que… te tenés que lavar, (INTENTA DESVESTIRLA, MERCEDES NO LA DEJA, TIRONEAN) yo te lavo la ropa, te la tenés que sacar, no, mejor la tiramos, la quemamos, y te bañás bien, hay que lavarte bien, bien… PEDRO- ¡Basta! (SE ACERCA A MERCEDES, LA EMPUJA A ALBA PARA QUE LA DEJE DE TOCAR, ALBA SE CAE AL SUELO, ÉL HACE UN GESTO COMO DE PEGARLE, ELLA SE ATAJA) ¡Cerrá esa boca de una vez! ALBA- ¡¿Me vas a pegar?! PEDRO- ¡Dejála en paz! (MERCEDES CAMINA COMO ZOMBI HACIA LA TELE EN LA QUE ANTES TRABAJABA PEDRO, SUBE EL VOLUMEN AL MÁXIMO, SE PUEDE ESCUCHAR ALGUNA CANCIÓN O RUIDO, LUEGO SE SIENTA EN EL PISO, PASÁNDOSE LA SANGRE DE LAS MANOS POR LA CARA. ESTÁN PARALIZADOS. PEDRO REACCIONA, APAGA LA TELE) ALBA- ¡Es (ENFATIZA) TU hermano! PEDRO- ¡¿Qué carajo querés decir con eso?! (SE ACERCA, LA LEVANTA, LA TOMA DE LA MANO A MERCEDES) Vení, vamos hija. Yo te ayudo. Como cuando enterramos a Pochito ¿te acordás? (MERCEDES SIGUE COMO IDA, NO CONTESTA, ÉL LA TOMA DE LA CINTURA) 41 PEDRO- ¿Te acordás de Pochito? Estaba duro en la jaulita, vos llorabas. ¿Qué hizo papá? Lo enterramos en el fondo… (LA VA LLEVANDO PARA LA HABITACIÓN, MIENTRAS LE HABLA COMO A UNA NENITA) Y le pusimos una crucecita… ¿Te acordás que lo puse en una cajita y vos le ponías flores…? Todo va a salir bien, papito se ocupa. No se lo decimos a nadie ¡a nadie! Es nuestro secretito… APAGON 42 (ALBA Y PEDRO COMO AL PRINCIPIO. PEDRO ARREGLA UNA RADIO CON LOS AURICULARES PUESTOS. ALBA SACA DEL BOLSILLO UNA FOTO O UNA POSTAL Y LA SACUDE FRENTE A ÉL) ALBA- ¡Tarjeta de Suecia! (SE ACERCA A ÉL Y LO TOCA CON LA TARJETA, LUEGO SE APARTA) ¡La nena escribió! (PEDRO LEVANTA LA VISTA Y LUEGO SIGUE CON LO SUYO. ELLA VUELVE A TOCARLO CON LA TARJETA) ¡Es muy linda! ¡Llena de nieve! ¿Querés verla? PEDRO- (SE SACA LOS AURICULARES Y SE ACERCA PARA TOMAR LA TARJETA DE LA MANO DE SU MUJER) ¡A ver! (ALBA LA SACUDE, NO DEJA QUE SE LA SAQUE, SE LA PONE CONTRA EL PECHO) ALBA- (JUGUETONA) ¡No! ¿Qué te dije? ¡Vos no creías que iba a escribir! PEDRO- ¡Dáme eso, dejáme ver! ALBA- ¡No! ¡No te la merecés! ¡Es mía! PEDRO- ¿Dónde la compraste? Seguro que es de Bariloche. ALBA- Nada de Bariloche (ENFÁTICA) ¡Suit-zer-land! ¡Qué montañas! PEDRO- ¡Dejámela ver! ALBA- ¡Es mía! ¡Me cuenta cosas a mi, no te la voy a dar! (SIGUE JUGANDO Y SACUDIENDO LA TARJETA) PEDRO- ¿A vos sola? ¡Mirá qué interesante! ALBA- Siempre me escribió a mi. (CANTURREANDO) ¡Está celoso! ¡está celoso! 43 PEDRO- ¡Ridícula! ALBA- Dijiste bien: (ENFATIZANDO) ME escribe, a mi sola. PEDRO- Sí, claro. ALBA- Si querés, te puedo contar lo que dice, no te lo merecés por envidioso, pero a lo mejor... PEDRO- (IRÓNICO) Por favor ¡contáme! Me muero de curiosidad. ALBA- Dice que está muy bien, que (ENFATIZA) ME quiere mucho (SE RÍE) No, es un chiste, que NOS quiere mucho, y que en cualquier momento nos viene a ver. PEDRO- (IRÓNICO) Seguramente. ALBA- Apenas pueda tomarse vacaciones... Porque allá les resuelven todo, (ENFATIZA) ¡TODO! Pero se trabaja mucho, no como acá. Acá la gente no quiere trabajar. Por algo allá es el primer mundo. PEDRO- ¿Y qué más? ALBA- Que si no puede, voy a ir yo, me va a mandar un pasaje… acá dice que me va a mandar… pero cuando haga calor porque yo no estoy acostumbrada al frío… Así que se van a tener que arreglar sin mi, lo siento… vos y (MIRA HACIA LA HABITACIÓN) esas dos… (ALBA SE GUARDA ENTRE LA ROPA LA TARJETA. SE OYE UNA CANCIÓN DE CUNA QUE CANTA GERTRUDIS, EN OFF, Y QUE SIGUE HASTA EL FINAL. POR UN MOMENTO SE QUEDAN MUDOS ESCUCHANDO. GERTRUDIS SE CALLA, SIGUE CANTANDO MERCEDES, LUEGO SIGUEN LAS DOS JUNTAS) ALBA- Tenías razón, se parecen mucho, y se llevan muy bien. 44 PEDRO- ¿No va a salir más Mercedes…? ALBA- Están lo más bien las dos ¿qué te preocupa? PEDRO- Mamá no se escapó más. ALBA- Justamente PEDRO- Pero… ALBA- Yo no me meto, es cosa de ellas. Por mí se pueden quedar para siempre ahí metidas. ¿Para que se la agarren conmigo? ¡No, de ninguna manera! ¡Yo ya cumplí! Le hice la fiesta, le hice el vestido. ¡Qué linda estaba! ¡Esas son las cosas que nunca se olvidan! ¡Nunca! (ALBA ENCIENDE LA TELE, PROGRAMA DE LAS FIESTAS, SE DÁ VUELTA A MIRARLO, LUEGO DE UNOS SEGUNDOS ÉL TAMBIEN LO MIRA) FIN 45 46