50 años: formación de los arquitectos en Rosario-1956-2006 / Ebe Bragagnolo ... [et.al.]. - 1a ed. - Rosario : Indigo, 2015. 106 p. ; 18x23 cm. ISBN 978-987-1365-81-4 1. Arquitectura. 2. Historia Regional. I. Bragagnolo, Ebe CDD 720.098 224 este libro fue realizado por el equipo de Investigación de la Cátedra de “Historia de la Arquitectura” de la Arq. Ebe Bragagnolo perteneciente a la UNR | FAPyD ©2015. diseño y maquetación: arq. dis. Ariel Ibarra. arq91 índice Prólogo Introducción 1956-1970 1971-1975 1976-1982 1983-2006 Bibliografía General 05 07 37 49 61 81 100 pr l go o 4 o prólogo Este trabajo es parte de otro iniciado hace tiempo con la intención de recuperar una crónica del tiempo perdido; hemos revisado muchos documentos, signos de cosas que describen, y en el lenguaje de las resoluciones administrativas, programas, planes de estudio, etc. revivimos hechos apasionantes; vestigios que con su presencia disimulan otras tantas ausencias. Contamos con la contribución de personas que para nosotros removieron en su memoria, compartiendo los recuerdos que consideran únicos y primordiales. Vimos como los recuerdos radican el heroísmo de una misma anécdota en diversos personajes, como puede mermar o acrecentarse un detalle. Lo que aquí está es una síntesis de cantidad de papeles vistos, fragmentos de lo que fue, en una notación cuya verdad debería considerarse sólo aparente. 5 in t du r ió c n 6 introducción Formación de Arquitectos Los Inicios: de 1923 a 1955.1 Arq. Ebe Bragagnolo Docente-investigadora FAPyD 1- REFORMA Y UNIVERSIDAD En 1919, siendo Presidente de la República Don Hipólito Irigoyen, se crea la Universidad Nacional del Litoral. Su fundación mantiene una clara relación con los sucesos acaecidos en Córdoba durante la reforma del 18. Allí, entre el 20 y el 31 de Julio, sesionó el Primer Congreso Nacional de Estudiantes, convocado por la Federación Universitaria Argentina. “El Congreso marchó bastante a la zaga de los episodios revolucionarios; sesionó solemnemente, y no pudo aprobar el proyecto sobre gratuidad de la enseñanza superior presentado por Dante Ardigó y Gabriel Del Mazo. Sin embargo, proyectó interesantes esquemas de ley y estatutos universitarios y proclamó la necesidad de autonomía, gobierno tripartito paritario; asistencia libre, docencia libre, régimen de concursos y periodicidad de cátedra, publicidad de los actos universitarios, bienestar estudiantil, extensión y orientación social universitaria, libertad de juramento, nacionalización de las universidades provinciales del Litoral y Tucumán, etc.”2 La campaña de nacionalización fue sumamente ardua, pero culminó con éxito con la ley de nacionalización de octubre de 1919, en el Litoral. La nueva Universidad se estructuró, pues, según siete facultades, basadas en Escuelas preexistentes, entre las que se encontraba la Facultad de Ciencias Matemáticas, Físico Químicas y Naturales Aplicadas a la Industria organizada a partir de la Escuela Industrial de la Nación, creada en 1907. Su vinculación inicial con el accionar reformista se 7 8 torna directamente comprobable con la presencia en ella de personajes que actuaron en Córdoba. Sabemos así, que en las tomas de Facultades de agosto estuvieron presentes Ángel Guido, Cortés Plá e Ismael Bordabehere; éste último resultaría electo por la Federación Universitaria de Córdoba como Decano de Ingeniería. Asimismo tuvo destacada actuación Dante Ardigó, del que ya hemos mencionado su propuesta sobre gratuidad de la enseñanza. En cuanto al Primer Delegado Organizador, Ing. Julio Gorbea, el mismo había conducido la Facultad de Ciencias Exactas de Córdoba, durante la intervención del Ministro Salinas; aquel que recibieran los estudiantes con entusiasmo. Precisamente a Salinas es a quien se dirige Gorbea en su Memoria, diciendo: “Atravesábamos una época de eclosionismo escolar y universitario que se producía en pos de reformas y nuevas orientaciones; circunstancias que imponían fatalmente mucho tacto y una comprensión clara y completa de las aspiraciones y de los ideales que se agitaban y se ponían en marcha.” 3 Es por ello que no nos sorprende que en el acto inaugural de la Facultad de Ciencias Matemáticas, etc., haciendo uso de la terminología reformista, Gorbea descalifique la formación verbalista tradicional, erudita y pedante, abogando por un “profesionalismo práctico”4 . Dicho profesionalismo, a su juicio, no puede agotarse en sí mismo, sino que debe destinarse a aportar a la industrialización del país, colaborando con la resolución de los problemas sociales que ello conlleva. Se trata, pues, de formar técnicos nacionales, que la industria demanda y que aporten a resolver los problemas sociales. La estructuración de la Facultad de Ciencias Matemáticas se basará en estos principios. Así, en el decreto del 22 de julio de 1920, en donde se establecen los fi- nes de la institución, se explicita que en ella se deberán formar “desde obreros a las diversas especializaciones de la Ingeniería en general”.5 De manera que se organizarán cinco ciclos que conformen un continuum entre la enseñanza secundaria de la Escuela Industrial, que ahora se anexa, y la Universidad propiamente dicha. Estos son: 1.- Enseñanza Técnica Elemental 2.- Enseñanza Técnica de Especialización 3.- Ciclo (A) Enseñanza Técnica Superior (Preparatorio) 4.- Ciclo (B) Enseñanza Técnica Superior (Especialización) 5.- Ciclo (C) Enseñanza Técnica Superior (Civil) El ingreso a la Universidad se proyecta en el paso del segundo al tercer ciclo. Este paso es automático para los técnicos que provengan de las escuelas industriales o con títulos emitidos por esa Facultad6. Los profesores Normales en Ciencias, Contadores Públicos Naciona- 9 10 les y Bachilleres Nacionales deberán practicar en los talleres de la Escuela, durante las vacaciones o el año anterior, para que su ingreso sea admitido a la Facultad. En ella, el ciclo Preparatorio (A) es común a todos los estudiantes y durará tres años. El ciclo (B) desgranará a las especializaciones de dos años en Ingeniería Industrial, Mecánica, Electricista e Hidráulica. En Agrimensura, (A) y (B) durarán tres años. Pero es en realidad el ciclo (C) el que constituye el escalón superior de tres años, al final de los cuales se otorga el título de Ingeniero Civil, cuya misión declarada es la de formar técnicos superiores que establecerán sus propias industrias. Se apunta así a una división y clasificación del trabajo en el cual el Ingeniero Civil se considera el escalón superior de una pirámide; lo que evidencia con claridad el valor que entonces se le confería. El interés de involucrar a la Facultad en tareas de extensión abarca todos los niveles; así la Escuela Industrial preparara para las más diversas Artes y Oficios, los ciclos de especialización se vincularán a las industrias aportando su trabajo; incluso se podrán proyectar prototipos de casa baratas desarmables o de amoblamientos escolares que los alumnos podrán ir a construir in situ, evitando la enseñanza puramente teórica y obteniendo una rentabilidad en ello. Hasta los viajes de estudios que la Facultad promueva deberán ser tales; es decir, profesores y alumnos aprovechando sus vacaciones para conocer y ejercitarse. Asimismo, el cuerpo de profesores estará obligado a producir cartillas vulgarizadoras sobre la totalidad de los temas tratados, a fin de difundir su conocimiento entre los artesanos y obreros. La Facultad, que con estos ideales se inicia, posee un cuerpo de profesores jóvenes, venidos en muchos casos de Buenos Aires y Córdoba que, lentamente, van accediendo a la docencia por concurso7. Muchos ejercen también en la escuela Industrial Anexa. Si bien cada uno ha optado por una cátedra, el Ing. Gorbea ha tomado la determinación de rotarlos entre si en las materias afines, a fin de que puedan completar un ciclo con el mismo grupo de estudiantes. Y en este contexto en donde prosperará el proyecto de fundar la carrera de Arquitecto. 2- LOS INICIOS Cuenta Ángel Guido que la idea de la carrera de Arquitectura despertó al principio el rechazo abierto del Decano Gorbea8. Lo cierto es que éste hace constar ante el Consejo Directivo que el 5 de septiembre de 1922 se ha reunido la Asamblea de Profesores que estudia la modificación de los planes de estudio vigentes en la Facultad y que ha decidido la fundación de la Carrera de Arquitecto9. Y es precisamente en octubre de 1922 cuando aparece la revista N°1 del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Matemáticas, donde se encuentra la propuesta de fundación firmada por Guido y Durand, ambos Profesores Titulares de Arquitectura I y II del Ciclo Básico de Ingeniería Civil. La propuesta parece haberse nutrido del entusiasmo de un grupo de estudiantes y egresados recientes del Industrial. Así, el mismo De Lorenzi destaca entre sus antecedentes la actuación que cumplió, siendo estudiante de 3ero, impulsando la iniciativa, conjuntamente con Guido, Durand, Dellarole10. El 12 de abril de 1923 se renueva el Consejo Directivo, que para a estar constituido por los señores Lorenzo Baralis, Dante Ardigó, Bartolomé S. Daneri, Miguel Vasalli, Juan C. van Wyk, Erich Rosenthal, José S. Cardarelli, Arturo Sallovitz y Simón Rubinstein 11 12 como representantes de los profesores y Alfredo Castellanos, Ángel Guido e Ismael C. Bordabehere, elegido entre los profesores como delegados representantes de los estudiantes. Este cuerpo elige como Decano al Ing. José C. Cardarelli11. El mismo notificará al Rector, Dr. Pedro Martínez, que el 13 de junio el Consejo Directivo ha sancionado la Ordenanza de Creación de la carrera de Arquitecto que eleva para su aprobación12. Entre el proyecto y su aprobación existen diferencias considerables, la más notable por sus consecuencias posteriores es la desaparición de Historia II con relación a la idea original. En realidad, la propuesta es aceptada en condiciones precarias. La mayor parte de los profesores son preexistentes y se compartirán los alumnos de Ingeniería, de tal manera que se trata de fundar solamente seis cátedras que se agregarán con los años. En su informe de fundamentación al Rector sobre la medida adoptada, Cardarelli destaca criterios que hoy nos resultarían sorprendentes. Considera así, que en el Plan de Estudios de Ingeniería se ha cometido una omisión inexplicable. Aduce allí que los Maestros Mayores de Obra no pueden, como los Técnicos Mecánicos o Electrónicos, conquistar un título más alto, como no sea el superior de Ingeniero Civil. Precisamente para salvar este vacío es que requiere la fundación de la Carrera de Arquitecto como escalón intermedio. Se iniciará, sin embargo, como escuela, con el mismo grado de autonomía académica que Agrimensura, aunque no exista ninguna estructura administrativa que la avale. El 2 de julio, el Rector sanciona la ordenanza del 27 de junio del Consejo Superior, confiando en la promesa de los profesores que se ofrecen a trabajar ad-honorem.13 Al realizarse el acto de la Primera Colación de Grados de Ingeniería, el 9 de octubre de 1925, él mismo fijará la línea de la Escuela por varias décadas. Así, en su discurso, haciendo gala de las ideas románticas vigentes, dirá: “El sentimiento cósmico que alienta en todas las almas, desde las más rudimentarias hasta las más complejas, buscó entre sus medios de expresión las formas y los estilos arquitectónicos, dando por regla general a las viviendas la frágil consistencia de la vida que es un tránsito, y a sus tumbas la perdurable solidez de la piedra que vela inmóvil, silenciosa como un dolor eterno, el misterio insondable de la muerte”. Vinculado a este romanticismo, lógicamente, aparece el tópico del problema de la identidad nacional, respecto de la que observa: “Sólo cuando un pueblo ha impuesto un sello de unidad -no de uniformidad- a todas sus manifestaciones en la vida política, moral, Científica y técnica, puede decirse que ha adquirido una individualidad y con ello una personalidad que al distinguirlo de los otros actúe como fuerza de vida interior que consolide su existencia. Por eso debemos aspirar a una arquitectura propia, sin pretender desconcertantes originalidades, para que al menos nuestros grandes monumentos dejen de ser una abigarrada muestra de estilos reformados, cuando no de la ausencia de todo estilo”. Finalmente, intentando sintetizar su pensamiento, el Rector concluye: “Las escuelas de Arquitectura tienen, pues, contraído ante el país, un grande y honroso compromiso: hacer sentir su acción desde el problema práctico de la vivienda, hasta las formas superiores del arte; que si aquel afecta justas exigencias de la vida, estas califican y enaltecen la espiritualidad de un pueblo civilizado.” 14 Evidentemente, el “profesionalismo práctico”, en el momento en que se inicia el reflujo reformista, está 13 14 por admitir a su adversario; iniciando una dialéctica de equilibrio precario, que malamente disimula el “poder unificador del discurso”.15 Como es previsible, el mayor peso del esfuerzo recaerá en los docentes de la Escuela, pues sus honorarios serán reducidos a la mitad y sólo cobrarán los ocho meses de trabajo escolar. 17 3.- LOS FUNDADORES De esta forma, Guido y Durand, profesores de Arquitectura I y II, se hacen cargo ahora de Historia y Teoría de la Arquitectura respectivamente; Dellarole y Ocampo dictarán Composición Decorativa I y II. Algo similar sucederá con Arquitectura III y IV. Al no dictarse los cursos de estas materias durante los años ‘25 y ‘26, los alumnos, perjudicados en la prosecución de sus estudios, elevaron su protesta. 18 La escuela de Arquitectura nace con una alta dosis de entusiasmo puesta al servicio de superar las dificultades económicas. El problema se evidencia en la comunicación que el Decano eleva al rectorado frente a la exigencia recibida de reducción presupuestaria, se aclara allí que el incremento de gastos propuesto para 1924 se debe en parte a la Creación de la carrera de Arquitectura, a la que se siente en la obligación de completar y mantener. Cardarelli opta entonces por un criterio de emergencia: rebajando sus propios emolumentos, retendrá los últimos aumentos otorgados y les descontará el 5% de su sueldo a los profesores. 16 Ante el dilema, el Concejo Directivo se limitará a admitir que los Arqs. De Lorenzi y Micheletti, que se ofrecían a trabajar ad ¬honorem, dicten cursos paralelos a los aún no creados. Dado el régimen vigente, que exigía para ello un 30% de inscriptos sobre el total posible y fijaba el derecho de los profesores a integrar los tribunales examinadores, esta solución permitió a los estudiantes aprobar esas materias en igualdad de condiciones que las restantes; de manera que en agosto comenzaron las clases de ambas asignaturas. 19 4- LOS PROFESORES El régimen en el cual se organizan las tareas se articula en una importante cantidad de categorías: existen profesores titulares e interinos, sustitutos, suplentes y adjuntos, jefes de trabajos prácticos y, más adelante, encargados y conservadores de taller. Para cada una de estas categorías se ejecutan concursos, de los que se obtiene una terna que se eleva al Consejo Superior para su decisión. En caso de no haber suficiente distancia entre los oponentes, se exige la prueba de oposición, que solicita insistentemente el bloque estudiantil. Dicha oposición tiene características que merecen ser destacadas, porque evidencian la confusión sistemática entre capacidad docente y profesional. Nótese, por ejemplo, que durante los concursos de 1930, a los postulantes se les llegó a exigir un encierro de proyecto, suceso que terminó motivando el retiro de De Lorenzi. 20 También por momentos, el régimen de incompatibilidad provocó escasez de profesores. Salvo muy raras excepciones, nadie podía ejercer más de dos cátedras; lo que complicaba notoriamente la situación, pensando que casi todos dictaban clases en la Escuela Industrial e Ingeniería. Especialistas de renombre, como de la Paolera, vieron limitado por ello su participación. Patético resulta incluso comprobar que en 1956, el propio Guido debe solicitar su jubilación por un cargo ad honorem. 21 15 16 El sistema era ciertamente exigente. Los programas sintéticos, ya sea de la teoría que dictaban los titulares como los prácticos que conducían los jefes de trabajos prácticos, eran puntillosamente reclamados y verificados. Las clases teóricas se anunciaban en los periódicos e incluso, a veces, los prácticos y sus modalidades fueron fijados por ordenanza general, y publicados. 22 Los profesores de las materias proyectuales debían acordar con sus pares los temas del año, de manera que le ofrecieran al estudiante un régimen de dificultades crecientes y sin contradicciones23 . Como cada profesor tenía la obligación de dictar una docena de clases especiales anuales, se suscitaban permanentes pedidos de excepción y los respectivos llamados de atención24 . Además la posibilidad de aperturas de cátedras paralelas pendía como espada de Damocles para algunos. Por alguna de estas exigencias, profesionales excelentes como Bereterbide o Virasoro tuvieron que ser despedidos.25 Pese a todo, los docentes de la Escuela de Arquitectura continuaron con la experiencia inicial de Ingeniería y llevaron adelante una vida académica intensa. Se realizaron numerosos viajes y se asistió a casi todos los congresos de la especialidad en el período. En este sentido, merecen especial atención los primeros Congresos Panamericanos de Arquitectos, que activaron las conexiones de la comunidad con otras universidades Asimismo la institución procuró que cada presentación o conferencia fuera debidamente publicada en la Revista de la Universidad Nacional del Litoral, en la Serie Universitaria (publicación de la Facultad de Ciencias Matemáticas de la U.N.L.) y en la Revista del Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Matemáticas. 26 Matemáticas, se inscribieron 43 aspirantes al título de Arquitecto; incluso 6 de ellos rindieron materias al mes de inaugurarse, ese mismo invierno. 27 Pese a ello, en la década del ‘30, aunque el número de alumnos se duplicó, hasta alcanzar algo más que el centenar, el crecimiento quedó opacado frente al éxito de Ingeniería, que mantuvo por largo tiempo su prestigio intacto. 28 5- DE LOS ESTUDIANTES El sistema previsto para el ingreso en la propuesta original de Guido y Durand era libre sólo para Maestros Mayores de Obras, dado que establecía que “la carrera empezará a manifestarse desde 4to año de la Escuela Industrial”. El verdadero escollo de la estructura general de la Facultad consistía en buscar medios adecuados de homologar aquí a los demás bachilleres que quisieran acceder. En 1923, al iniciarse la carrera, el éxito fue notable. Así sobre 163 estudiantes de la Facultad de Ciencias En los inicios, se exigía un examen que demostrara una buena ejercitación en modelado y dibujo, y la 17 18 vinculación con la Escuela Industrial era tal, que aún en 1927, se mantenía el requisito de cumplir horas de taller en ella al ingresar29. Este sistema recién se suprimió en 1931, cuando Dellarole presentó una propuesta de exámenes bastante más exigente. 30 Al calor del impulso inicial, en 1923 se constituyó el primer Centro de Estudiantes de Arquitectura, en el que se inscribieron la casi totalidad de los alumnos de la carrera. Este centro parece haber funcionado de manera autónoma durante varios años; así, por lo menos, lo testifica De Lorenzi, quien dice haber ganado un concurso organizado por la institución en 1924, ejerciendo la vicepresidencia en 1925 y la presidencia en 1926.31 No obstante, el mismo se fusionará con el Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Matemáticas en 1933, año en el cual esté último organiza su Comisión Directiva por especialidad. 32 Y es precisamente este Centro, nacido en 1922, el que edita una revista de persistente duración, puesto que su último número data de 1945. Financiada en parte por la Facultad, la misma es destacable por las colaboraciones académicas que promueve. Podemos decir que el Centro, más allá de los viajes de estudio y competencias deportivas que suscita, dirige sus reclamos a superar los vicios del funcionamiento cotidiano.33 Lógicamente, no siempre las relaciones con el gobierno de la Facultad fueron excelentes. Consta, por ejemplo, que en 1926 el Vicedecano los desalojó del local que tenían otorgado y, posteriormente, debieron sufrir todos lo avatares característicos de nuestra historia política. 34 Los estudiantes tardaron en tener representación en el Consejo Directivo. Al principio, ésta se ejercía a través de algunos profesores 35. En 1930 fueron obligados a agremiarse para participar en el gobierno de las facultades; pero en 1932 y 1934, las elecciones se realizaron sin su participación. Recién en 1935 los vemos actuar e incluso colaborar en el nuevo Plan de Estudios. Pero ya en 1933, frente al quiebre institucional, que provocó algunas esperanzas en sectores progresistas de la comunidad universitaria, el estudiantado adoptará una posición muy clara: “... el Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Matemáticas, hace su profunda reafirmación de fe liberal, sin banderías ni finalidades utópicas. Y cree que hoy más que nunca, ningún hombre de este suelo, ni borracho ni dormido, debe tentar contra la libertad de su prójimo. Por todo ello, si las agrupaciones nacionalistas del presente tratan de acallar con la falsía de su verba, con el descreimiento y la violencia, las voces honradas de los que sienten su pesar, porque le es propio, muy suyo y por si mismo gestado; el Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Matemáticas, haciendo un llamado a la concordia y a la civilización de esta época, invita a disolverse a toda agrupación nacionalista del presente.”36 En los primeros años, la vida cotidiana de los docentes y de los alumnos se desarrolló en el edificio alquilado en la calle Córdoba 615, donde hoy se encuentra funcionando el Liceo Avellaneda. Después de 1927, se inaugura el simbólico edifico de Avda. Pellegrini 250. Sin embargo, mucho más allá del régimen horario o de los lugares establecidos; bares, viviendas y principalmente estudios profesionales servían ocasionalmente para vincularse en un proceso de enseñanza amplio, que desbordaban los límites fijados por la institución. En ese marco en donde el profesor, muchas veces admirado, se ofrecía como astro y guía general de principios de todo orden, enriqueciendo de manera informal la enseñanza a los que se acercaban. Legendario es así el afecto que muchos guardaban por Dellarole, J. Micheletti o Sallovitz. Ayer, como hasta hace poco, los alumnos aprendían más que de los textos de la vinculación paternalista que se les brindaba; sólo que en esos años, se discutía mucho más de arquitectura, y se tomaba a Guadet y a Vignola como los dioses tutelares 19 20 por todos aceptados. Este clima de idílica Arcadia encuentra, por momentos, sus límites. Buen ejemplo de ello lo constituyen las discusiones en el Concejo Directivo al descubrirse que los alumnos jugaban a las cartas en los talleres de Arquitectura. Y más clarificador resulta aún la encendida discusión que motiva en las autoridades la aparición de un barril de cerveza en un encierro. Es que, además de las reprimendas que deben sufrir los responsables, Guido y Giorgetti, el consejero A. Schanis expresa: “... que se debe evitar la farsa de los “encierros” en que nadie está encerrado y en que los alumnos pueden copiar, consultar, salirse del aula y hacerse por otros el proyecto que deben hacer personalmente para comprobar su capacidad. Que no se debe, por lo tanto, permitir que los alumnos queden un solo instante sin la vigilancia del profesor o del jefe de trabajos prác- ticos, y ese es el objeto de la ordenanza cuyo cumplimiento hay que exigir con toda severidad.”37 Habrá que esperar a 1935 para que aparezca oficialmente la idea del Taller como colaboración entre alumnos de distintos años. Lo que Micheletti llamara “espíritu de atelier”, promovido por las conclusiones del IV Congreso Panamericano de Arquitectos. 38 6- CONCURSO REALIZADO POR LA INSTITUCIÓN MITRE “En el concurso universitario de arquitectura organizado por la Institución Mitre para optar al “Premio José de San Martín” (año 1930 - 31), los alumnos regulares de la Escuela de Arquitectura don Carlos Díaz Abbot y don Emilio Maisonnave se hicieron acreedores al primer y segundo premios, respectivamente, de ese certamen; por sus trabajos “EL PANTEON NACIONAL” y “UNA ESTANCIA” ejecutados en el curso del tercer año de esa especialidad. Dichos premios consistieron en quinientos pesos moneda nacional, medalla de oro y diploma el primero y doscientos pesos, medalla de plata y diploma el segundo”. 39 El Interventor de la Universidad, Dr. Abraham de la Vega, al contestar la comunicación de la Facultad dando cuenta de la distinción discernida a sus alumnos, hizo llegar a los mismos sus plácemes y dispuso que se publicaran en el Boletín los trabajos premiados. Culmina así positivamente una serie de gestiones que expresaba álgidas relaciones entre los integrantes del cuerpo docente de la Escuela. En efecto, el dictamen del jurado encargado de seleccionar los trabajos que se presentarían al premio de entre los aspirantes, después de una larga deliberación motivada por la distinta apreciación de méritos que ofrecían los referidos proyectos, se resuelve el envío de dos trabajos completos, pero no así del que luego obtuviera el 1er Premio; del cual se envió el frente, el corte y una vista lateral, no así la planta que adolecía de defectos. En las consideraciones se estima que “la planta no tiene mayor valor de estudio, ya que se trata de un monumento decorativo”. Lo que ocurre, en realidad, es que la crítica a los trabajos que ejecuta el alumno viene a derivarse en motivo de crítica personal al profesor que lo ha guiado. Contradicciones en los informes sobre los alumnos presentados por los Arqs. Ángel Guido y Ermete De Lorenzi, terminan en el nombramiento de una Comisión Investigadora para definir con precisión los tiempos en que han sido realizados los trabajos enviados, y las guías responsables de los mismos. 7.- DE LOS EGRESADOS Acostumbrados a una intensa vida de relación, y motivados por eso que nuestros mayores denominaban vocación profesional, los primeros egresados siguieron 21 22 reuniéndose durante décadas. En este sentido merece especial mención la fundación de la Sociedad de Arquitectos de Rosario, constituida el 14 de enero de 1927. Algunos años más tarde, se produce la incorporación a la Sociedad Central de Arquitectos. En el pergamino de constitución oficial exhibido en Avda. Belgrano 657, sede actual del Colegio de Arquitectos, leemos: “En la ciudad de Rosario de Santa Fe, a los 25 días del mes de junio de 1932, con asistencia de los miembros de la Comisión Directiva de la Sociedad Central de Arquitectos: Jorge V. Rivarola, Presidente; Oscar González, Vicepresidente; Raúl J. Méndez, Tesorero y Julio V. Otiola, Vocal; y de los arquitectos adherentes a aquella institución residentes en esta ciudad y que firman al pie, conjuntamente con los antedichos, se declaró constituida oficialmente la Seccional Rosario de la Sociedad Central de Arquitectos, quedando en posesión de sus cargos los miembros de su primera Comisión Directiva, integrada de la siguiente forma: Jorge A. Cavenier, Presidente; H. Hernández Larguía, Vicepresidente; Guido A. Lo Voi, Secretario; Domingo Trangoni, Tesorero; Ernesto J. Manzana y Roberto C. Hope, Vocales y Elector A. Bianchi, Vocal suplente”. 40 La nómina de egresados de la Facultad, en la especialidad Arquitectura, que en 1930 ya tenían su diploma, es la siguiente: Arqs. Francisco Casarrubia, Lorenzo Giovannoni, Inocencio Ergonzi, Luis Dasso, Lorenzo Carattini, Carlos Spirandelli, Carlos Vescovo, Emilio Bessone, Alberto Cicutti, Ángel Giorgetti, Guido Lo Voi y Juan García y Casas. 8.- EL FRENTE EXTERNO Es evidente que en un principio los ingenieros tomaron una actitud muy positiva frente a la Carrera de Arquitectura y no es casual que su propia Asamblea de Profesores sugiriera esta. Las vinculaciones preexistentes con la Escuela Industrial, así como la duplicidad de títulos en personajes notorios como Guido o Cortés Pla, tanto como la relación filial entre los hermanos Micheletti son factores que operaron para que las relaciones fueran de sana camaradería. 41 Durante décadas, los ingenieros fueron profesores de ambas casas y los arquitectos, igualmente, dictaron Urbanismo y Arquitectura para ingenieros. En la lectura de las actas del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Matemáticas, sorprende descubrir el importante lugar que ocupan las cuestiones referentes a Arquitectura. En realidad, por circunstancias diversas, hubo siempre algún arquitecto en el Consejo Directivo. Incluso la Comisión de Enseñanza del mismo tenía una Comisión especial de Arquitectos. 42 En su reemplazo en 1930, se estableció un acuerdo 23 24 para que cada una de las comisiones del C.D. estuviera compuesta por un profesor de Arquitectura. Un profesor residente en Buenos Aires y un Ingeniero Civil; y en 1936 se aprobó una propuesta de Micheletti para que las listas de delegados titulares, adjuntos y sustitutos de los profesores se conformaran con 11 delegados de ingeniería y 5 de Arquitectura. Dentro de las discusiones que se entablan en el Consejo Directivo, son reiteradas las observaciones de que se está trabajando para cambiarlos; incluso algún consejero, en el fragor de la batalla y exagerando un poco, llega a protestar argumentando que en cinco años ya se han dictado cinco planes de estudio para los arquitectos. 44 No obstante, fueron infructuosas las negociaciones para obtener que el Vicedecanato fuera Arquitecto, como se estilaba en la Facultad de Ciencias Matemáticas de la Universidad de Buenos Aires. 43 Aquí nos interesa su consideración paulatina, en la medida en que en estas discusiones se va relevando poco a poco el debate académico de dos décadas, tanto como la presencia, “in nuce”, de otros problemas y propuestas muy posteriores. 9.- EL DEBATE ACADEMICO En primer lugar, destaquemos lo que más arriba hemos acotado. Esto es, que el proyecto inicial de Guido y Durand ha sufrido modificaciones considerables hasta arribar a la sanción de la Ordenanza de 1923 conque se inicia la carrera. Analizando el material documental de los primeros años, a simple vista surge la idea de que los Planes de Estudio de Arquitectura han vivido en mutación permanente. A poco de andar, sin embargo, los cambios del Plan de Ingeniería de 1920, repercuten sobre los de Arquitectura. Estas modificaciones, propias de una Facultad de reciente formación, son tan confusas que el Consejo Superior, al borde de iniciar la publicación del Boletín de la Universidad Nacional del Litoral solicita al Consejo Directivo de la Facultad que aclare las correcciones introducidas; y es el propio Decano Laporte quien deberá rastrearlas en los Libros de Sesiones. Se considera entonces algún cambio de nombre y desplazamiento de año de algunas materias y la eliminación de un par de asignaturas técnicas en ambas carreras. Al aceptarse esas modificaciones, se aprueba el “plan definitivo”. 45 Observándolo, surge con claridad alguna incoherencia que deviene del arrastre de pensar la carrera de Arquitecto como paso a la de Ingeniero. Así, por ejemplo, la presencia de Geología, que será más adelante considerada un error y eliminada; y la de Física. En segundo lugar, el caso de Física y su consiguiente debate; porque es quizás el primero que devela la divergencia de opiniones. El problema es de larga data. En efecto, la disconformidad reinante en la Facultad por la preparación insuficiente que traen los egresados del secundario, condujo a que se incorporara Elementos de Física a todos los primeros años de la Facultad. 46 Pero en octubre de 1927, el Consejo Directivo pone a discusión un petitorio de los alumnos de Arquitectura que aboga por la suspensión de la asignatura. Los estudiantes aducen que su carrera posee un bajo porcentaje de “materias artísticas”, comparada con otras similares del país y del exterior. Notan también que ya en 1923 la materia fue eliminada en Buenos Aires y que no se la encuentra en el “Plan de París” (vinculado a Beaux Arts); lo que, dicho sea de paso, aclara el rumbo de los modelos que desean. 47 Destacan asimismo, su interés por dedicar mayor cantidad de tiempo a otros temas, observando que el 25 26 Arquitecto necesita poseer una cultura general mucho mayor que la que es posible obtener en la Escuela Secundaria. Agrimensura49 . Esta idea, no obstante, había sido propuesta por Cardarelli con motivo de la futura participación de la Facultad en el 6to Congreso Universitario. La comisión de Enseñanza de Arquitectura, molesta por no haber sido consultada en la introducción de Física, avala, obviamente, a los estudiantes; destacando que, en todo caso, ésta es una asignatura que debería incluirse en los cursos superiores, a fin de enseñar temas tales como ventilación, calefacción, etc.; en caso de modificarse el Plan y alargarse la duración de la carrera. Su posición giraba alrededor de incluir la asignatura en Ingeniería y Arquitectura50 . El hecho merece destacarse porque se trata de la fundación de la Primera Cátedra de la especialidad en el país; estará a cargo de Della Paolera, que acaba de obtener su título de Urbanista en La Sorbona. 51 Cortés Pla, titular de la materia en cuestión, recuerda que él ha insistido durante un año en dictar el curso para Arquitectos de otra manera, pero que no ha sido escuchado. Tras una intervención moderadora de Micheletti, la suspensión es, por el momento, aceptada. 48 No obstante, normalizada la Facultad en 1931, los consejeros deciden la revisión del Plan, considerándolo inconsulto52 . Para entonces el debate se llevará a cabo en el Consejo Directivo en un ambiente de enfrentamiento revelador. Resurge ahora un problema de vieja data. Cuenta Cortés Pla que durante la intervención de Belloni, en 1929, éste sancionó un nuevo Plan que introdujo Urbanismo en la carrera de Ingeniero Civil y Es notorio que Guido ha sufrido malamente la eliminación original de Historia II, en 1923. Por ello se ha visto obligado a dictar una cátedra libre sobre Arquitectura Moderna y en 1924 ha presentado su famosa propuesta de “Ampliación de los Planes de Estudio de las Facultades de Arquitectura de la República Argentina” (Congreso del 13/9/1929)53. En 1930, lo vemos aún reclamando un Seminario sobre el tema. La respuesta de Cortés Pla, que lo considera “superfluo”, más allá de ser intempestiva, indica una diferencia ideológica sustancial sobre el pensamiento científico. 54 En un caso, un pensamiento histórico globalizador que se propone como operativo. En el otro, un pensamiento analítico, que fragmenta el saber de la ciencia. La discusión del Plan, en octubre de 1931, contiene todos los ingredientes de esta problemática. Sólo que aquí los Arquitectos, utilizando una estrategia similar a la anterior, se apoyan en, las conclusiones de IV Congreso Panamericano, que aconseja conferir importancia principal a Composición Arquitectónica, Urbanismo y Arte Nacional; y promocionar el espíritu de atelier. 55 La comisión de Arquitectura propone ahora dos planes: uno de máxima y otro de mínima, que se basan principalmente en el agregado de tres materias: una composición decorativa más; una cátedra de Arquitectura y Arte Decorativo Americano, para que se produzcan formas modernas y nuestras; y la división de Arquitectura I en dos materias: Teoría y Práctica.56 El debate sobre operatividad de la Historia es muy claro entonces: Durand considera que la Historia Nacional es sólo propia de estudios postuniversitarios; los ingenieros declaran no interesarles más que la Arquitectura Moderna e insisten en reemplazar Historia por Física. El plan, en definitiva, se aprueba dispersando Física en otras materias. 57 27 28 En realidad el problema no ha terminado para ninguna de las partes. Micheletti ha sido claro al explicar que el Plan discutido es sólo de transición pero que debería pensarse en una reforma más integral que el mero agregado de tres materias. Y ahora, en una conferencia, expone una nueva propuesta, salida del claustro de profesores reunidos en asamblea. 58 Su argumentación gira alrededor de considerar errónea la preparación por asignaturas desintegradas, que sólo se vinculan en la práctica profesional posterior. Entre los inconvenientes existentes en la Escuela, destaca algunos que sólo décadas más tarde aflorarán privilegiadamente. Así observa: “... que la enseñanza se desenvuelve de manera gradual, no cíclica ni concéntrica, como debería ser la evolución real del alumno; que existe una tendencia en las materias técnicas a prescindir de casos reales (siempre excepcionales); y que desde su posición profesional, nota la ausencia de una formación social - jurídica y estética al servicio del pueblo.” “Precisamente en ello reside el sentido de la profesión: se trata de producir un “Arte Escultórico Monumental” a su servicio y (siguiendo a Guadet), “no proyectar por sí, sino para construir”. El arquitecto, por decir así, “tendría primero visiones de forma y color, no plantas y fachadas aisladas”. Las materias técnicas deberían estar a mano, confluir en el momento en que la composición lo necesite, sin recargar de conocimientos inútiles. Su proyecto, de máxima y mínima, contempla 5 y 6 años respectivamente, e implica una modificación sustancial de todo el sistema (incluso el ingreso), desarrollándose tres ciclos: uno de estudios muy generales o preparatorio; otro concéntrico, en donde las materias técnicas avancen por semestre aportando a Composición; y un tercero casi profesional. 29 30 Ni las insinuaciones de Micheletti, ni el Plan de 1931 pudieron ser puestos en marcha en virtud de la intervención de 1934. También el interventor Ing. Laporte produjo un plan que no entró en vigencia, porque en agosto de ese año asumió el Decanato el propio Cortés Pla. 59 Ese año es nombrada la Comisión que actuará en la redacción del Plan que verdaderamente perdurará en la Escuela hasta 195060 . En esencia, éste contiene como novedades la incorporación de tres asignaturas: Arquitectura I, Teoría II y Estabilidad; y la creación de los talleres verticales a costa del sacrificio de tres cargos de Jefe de Trabajos Prácticos. 61 A poco de andar, no obstante, el enfrentamiento político conduce a Cortés Pla a exigir “antecedentes morales” a su cuerpo docente, estableciendo penalidades en Defensa de la Democracia. Detenido por la Policía Federal, su Vicedecano convoca al claustro a defenderlo. El final es previsible: conduce, en mayo de 1946, a la asunción del Interventor Maturo.62 Esta gestión resulta verdaderamente dura. Todo el personal de la Casa es puesto en Comisión y se procede a su “depuración” con una larga lista de cesantías y jubilaciones. El nombramiento de numerosos adjuntos para las asignaturas vacantes completa la modificación del cuerpo de profesores.63 Prohibidas las elecciones en el Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Matemáticas, las relaciones con las agrupaciones estudiantiles se entablan con la Asociación Gremial de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Matemáticas (A.G.E.F.Cs.Ms.). 64 La intervención de Vasallo, en 1947, tiene un estilo completamente diferente; y las consultas a los docentes se vuelven casi permanentes. El 1º de enero de 1948 entra en vigencia la Ley N° 13.031. El ideario reformista queda en ella opacado por otro tipo de novedades, tales como las disposiciones sobre seguro obligatorio, facilidades de crédito para el personal, y el escalafonamiento del sector nodocente, notoriamente agradecido por el mismo. En cuanto a los estudiantes, éstos adquieren en esa época las posibilidades de concurrir a las aulas en los turnos vespertinos y son liberados del examen de ingreso. Al decidirse la departamentalización de la Facultad de Ciencias Matemáticas, y habiendo unanimidad sobre la creación de una Facultad de Arquitectura, se nombra una Comisión para dictar un Plan. Posteriormente, y habida cuenta de las renuncias en su seno, el 18 marzo de 1948 será nombrado otro equipo conformado por Ocampo, de la Riestra, Guido, Caggiano, Newton y Van Vyk. 65 Tras la breve intervención de Castellanos, el llamado a elecciones de ese año conducirá al Ing. Micheletti al Decanato. 66 La normalización va acompañada de la puesta en marcha, nuevamente, del examen de ingreso y de la aparición del nuevo Plan de Estudios que entra en vigencia en 1950. Este Plan supone ya una carrera de 6 años con numerosas materias que pretenden una vasta erudición; esto es: Introducción y 6 Arquitecturas, 3 Teorías: Interiores, Filosofía del Arte y Sociología, 2 Urbanismos, 3 Historias, 3 Dibujos, Modelado, 2 Composiciones Arquitectónicas y 13 materias técnicas de apoyo. Para su funcionamiento se establecen dos comisiones que determinarán desde las correlatividades hasta el sistema de prácticos. Durante este Decanato, en 1949, la Escuela festejará pomposamente su 25º Aniversario. Cuando el Rector Guido rinda allí homenaje a los profesores fallecidos, flota en el auditorio el entusiasmo por las gestiones que realiza para la fundación de la Facultad. 67 Decía entonces el Rector: 31 32 “Nuestra Escuela de Arquitectura ha pasado de la mayoría de edad en pleno vigor, superando con éxito completo la etapa constructiva de su desarrollo. Joven Minerva, si bien con más gracia que sabiduría, límpida y alta la frente, con la mirada de sus ojos serenos fija en la verdad y la belleza, dones divinos, se encamina con paso firme y armonioso a la consecución plena de un fecundo y brillante destino. Y como tiene la edad suficiente y posee la conciencia exacta de su valor, quiere independizarse”. Mientras el Decano, Ing. Luciano Micheletti, concluyó así su discurso: “El H. Consejo Universitario ha solicitado al Poder Ejecutivo Nacional la transformación de la Escuela, hasta ahora integrante de nuestra casa de estudios, en Facultad de Arquitectura y Urbanismo, como instituto independiente dentro de la Univer- sidad. La Facultad de Ciencias Matemáticas seguirá sus pasos con amor y solicitud maternales, se alegrará con sus triunfos y formula, por mi intermedio, los más formales augurios y efusivos votos porque siga cumpliendo con dignidad y brillantez, como hasta ahora, la delicada misión que le concierne en la formación de futuros forjadores de la grandeza de nuestra patria”. La situación del momento queda impecablemente descripta en sus palabras: “Ese matiz de sereno eclecticismo que hemos adoptado, entre lo clásico y lo moderno, es en mi sentir una de las causas del éxito obtenido por la orientación de la enseñanza en la Escuela de Arquitectura de la Universidad Nacional del Litoral”. En realidad, sus conceptos parecen dar cabida a 33 todas las expectativas. Cierto es que aún algunos se encuentran aferrados a Vignola; pero otros como de la Riestra, Maisonnave, Solari o Vanzo hacen y dejan hacer lo que con extrema generalidad se ha dado en llamar Movimiento Moderno, principalmente en versión del Expresionismo Alemán. No en vano, al VII Congreso Panamericano de Arquitectura realizado en La Habana en el año 1950, han concurrido trabajos de signo muy diferente. En cambio, el desacuerdo estudiantil, que en muchos sin duda existe, viene interpretado como puro problema académico; y en ese sentido se realizan ingentes esfuerzos por resolverlo. Esfuerzos que en pocos años demostrarán su inoperancia; más aún con los vaivenes de una política errática, blanda a veces, pues sólo busca la serenidad en el claustro; dura otras veces, cuando abruptamente la política lo invade. 34 En efecto, durante la intervención de Arfeli (19501952), aparecen novedades tales como la puesta en marcha de las tesis obligatorias para adjuntos asistentes. En estos años, algunos alumnos, en tanto, se lamentan de tener que esgrimir su certificado de buena conducta para ingresar a la Facultad y estar obligados a aprobar los cursos de formación política.68 En ese año se organiza la Comisión local del CONICET. El Arq. Racca pasa a integrar la Comisión permanente de Construcciones Universitarias; y se forma la Comisión Asesora de Planificación de Investigaciones Científicas de la Facultad de Ciencias Matemáticas. 69 En 1952, el interventor Fajardo comienza su gestión sumariando a los estudiantes de la oposición. Pese a ello, y puesto que el nuevo Plan ha suscitado una multitud de problemas de correlatividades, en un intento por resolverlos se organiza una Comisión integrada por Mongsfeld, Bertuzzi, Saccone, Sinópoli, de la Riestra y Maisonnave. Asimismo, se encarga a Mongsfeld planificar la reestructuración de la futura Facultad. 70 Elegido nuevamente Decano Micheletti, decide am- pliar esa resolución de Comisión, integrando además a Vanzo y Véscovo, otorgándole “amplias facultades para auscultar la opinión de los estudiantes”. Al renunciar Micheletti, el 2 de mayo de 1953 y asumir su Vicedecano Dezorzi., confirmado después por elecciones, el Rector ordena que “todos los agentes dependientes del rectorado se encuentren identificados con la Doctrina Nacional Justicialista” y “colaboren con el Segundo Plan Quinquenal”.71 Entra ahora en vigencia la Ley N° 14.297, y la Asociación Gremial de Estudiantes de Ciencias Matemáticas es invitada a participar del Consejo Directivo. Para entonces, el Consejo Nacional Universitario ha emitido un Plan de Arquitectura unificado para todo el país; por lo que la Facultad nombra para ponerlo en marcha una Comisión integrada por Mongsfeld, Bertuzzi, Saccone, de la Riestra, Maisonnave, Solari y Vanzo72. Esta comisión decide considerar como asignaturas artísticas a Elementos de Arquitectura, Arquitectura, Plástica y Planificación Urbana. 73 El Plan tiene en realidad un fundamento muy claro. La enseñanza se distribuye en él según dos ciclos: preparatorio y de aplicación; de 2 y 4 años de duración respectivamente. El grupo central de materias lo constituyen Introducción, Elementos, 4 Arquitecturas, 2 Teorías, Socio - Urbanismo, Urbanismo y Planificación; que tienden a destacar el “papel social de la Arquitectura, el espacio como fenómeno arquitectóni- co y el valor de la proporción”. Se consideran complementarias propiamente dichas a Matemáticas, Sistemas y Legales y en donde se destacan dos para Educación Física e Idiomas. Despuntan asimismo algunas novedades, como el impulso a los Seminarios y el intento de que Plástica se dé conjuntamente con Arquitectura. La tendencia a la erudición es insoslayable. Este Plan, al igual que el Plan de 1950, no fue nunca terminado de aplicar. Los tiempos políticos se aceleran. Entre resoluciones de Seminarios y Congresos, aparecen abruptamente las que designan a la antipatria, adhieren al líder y motivan un desagravio por la destrucción de los bustos del Hall de la Facultad. 74 La institución queda cerrada desde noviembre del ‘55, y una etapa totalmente distinta es provocada por la autoproclamada “Revolución Libertadora”, que en la Escuela de Arquitectura se inicia con las investigaciones y denuncias que desembocan en la cesantía de la mayoría del personal. 35 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo IX (B) de 1935. Págs. 107 y 313. 22 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo IV. Nºs 1 - 4 de1930. Pág. 349 y Tomo V. Nºs. 1 -3 de 1931. Pág. 161. 23 Boletín de la Universidad nacional del Litoral. Tomo V. Nºs. 1 - 3 de 1931. Pág. 149. 24 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo V. Nºs. 4 - 12 de 1931. Pág. 588. 25 Ibídem. Pág. 578 y Torno IX (A) de 1935. Pág. 387. 26 No hemos encontrado rastros de las cartillas vulgarizadoras mencionadas en el Plan de Estudios. No obstante, algo de ello, por lo menos en térmi¬nos de apuntes debe haber existido, puesto que Guido lo menciona entre su producción. 27 Memoria de 1922 - 24. Op. Cit. Pág. 226. 28 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo XIII (A) de 1939. Pág. 341. 29 Memoria de 1922 - 24. Op. Cit. Pág. 538. 30 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo XIII (A) de 1939. Pag. 254 y Tomo V. Nºs. 1 - 3 de 1931. Pág. 133. Además resolución del Decano De Lorenzi del 3/12/1943 donde decide, debido a que la Escuela de Arquitectura es la única que requería un examen de ingreso, organizar cursillos pre-examen. 31 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo III. Nºs 9 – 12 de 1929. pág. 119. 32 Revista del Centro de estudiantes de Ciencias Matemáticas. Nº4 de 1933. En tapa. 33 Revista del Centro de estudiantes de Ciencias Matemáticas. Nº2. Agosto de 1926. Pág. 88. 34 Ibídem. 35 Memoria de 1922 – 24. Op. Cit. Pág. 72. 36 Revista del Centro de Estudiantes de Ciencias Matemáticas. N° 5. Segun¬do cuatrimestre de 1933. Págs. 72 - 73 37 Memoria de 1922 - 24. Op. Cit. Pág. 358 y Boletín de la Universidad Na¬cional del Litoral. Tomo (A) de 1932. Pág. 221. 38 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo (B) de 1935. Pág. 317. 39 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo V. Nºs 4 - 12 de 1931. Págs. 553 en más. 40 En original en el Centro de Arquitectos de Rosario. 41 Guido y Cortés Pla eran Ingenieros y Arquitectos. Los hermanos Michele¬tti era uno Arquitecto y el otro Ingeniero. 42 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo IV. Nºs. 9 - 12 de 1930. Pág. 1058. 43 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Torno X (A) de 1936. Págs. 188 y 207. 44 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo 1. Nºs. 5 - 6 de 1927. Pág. 633. 21 CITAS BIBLIOGRÁFICAS Este escrito forma parte del libro Arquitectura y Poder en Rosario, de la Arq. Ebe Bragagnolo, realizado en el año 2003. 2 Ciria, Alberto y Sanguinetti, Horado: “La Reforma Universitaria (1918 1983). Biblioteca Política Argentina. Centro Editor de América Latina S.A. Buenos Aires. 1983. 3 Memoria correspondiente al período de Organización de la Facultad y Escuela Industrial (Anexa). Comprendido entre 1920 y 1921. Presentado por el Delegado Ing. Julio S. Gorbea al Exmo. Señor Ministro de Justicia e Institución Pública Dr. José S. Salinas. Facultad de Ciencias Matemáticas, Físico - Químicas y Naturales aplicadas a la Industria. U.N.L. Rosario. 1922. Pág. 7. 4 Ibídem Pág. 43 en más. 5 Ibídem Pág. 11. 6 Ibídem Pág. 13. 7 Memoria correspondiente al Periodo Universitario 1922- 1924. Presentada al rector de la Universidad Nacional del Litoral Dr. Pedro E. Martínez por el Decano Ing. José S. Cardarelli. Facultad de Ciencias Matemáticas FísicoQuímicas y Naturales Aplicadas a la Industria. U.N.L. Rosario. 1925. Pág. 6. 8 Conmemoración del 25° aniversario de la Escuela de Arquitectura. Serie Universitaria. Publicación N°49. Facultad de Ciencias Matemáticas, FísicoQuímicas y Naturales Aplicadas a la Industria. U.N.L. Rosario. 1950. Pág. 28. 9 Correspondencia del Decano de 1922 (en original). Facultad de Ciencias Matemáticas, Físico- Químicas y Naturales Aplicadas a la Industria. U.N.L. Rosario. 1922. 10 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo II, N°s 9- 12. 1929. Pág. 119. 11 Memoria de 1922- 1924. Op cit. Pág. 72. 12 Ibídem Pág. 107. 13 Ibídem Pág. 529. 14 Ibídem Pág. 448. 15 Sobre el poder unificador del discurso, véase la obra de Theodor W. Adorno. 16 Memoria de 1922 - 24. Op. Cit. Pág. 179. 17 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo I. Nºs. 5 -6 de 1927. Pág. 643. 18 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo I. Nºs. 2 - 4 de 1927. Pág. 389. 19 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo II. Nºs. 4 - 6 de 1928. Págs. 294- 624. 20 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo IV. Nºs. 5 - 6 de 1930. Págs. 536 - 550. 1 36 Ibídem. Págs. 633 en más. Considerado como Plan de 1920, con modifi¬caciones, de agosto de 1927. Comparado con el anterior, este Plan tiene Complementos de Física en ler. Año, Mampostería se ha desplazado de 3ero. a 4to., se ha suprimido Materiales II y Proyecto; aún permanece geología. Aceptado por el Rector de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo I. Nº’s. 2 - 4 de 1927. 46 Memoria de 1922 - 24. Op. Cit. Págs. 196 y 206. Primeramente la pidie¬ron Baralis y Castellanos. Se la aprobó por resolución del Consejo Supe¬rior de septiembre de 1924. Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Nºs 5 - 6 de 1926. Pág. 633. 47 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo 11. Nºs. 1 - 3 de 1928. Pág. 42. 48 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo I. Nºs. 5 - 6 de 1927. Pág. 738. La suspensión es aprobada por el rector Araya. 49 Revista Universidad N°6 de Junio de 1940. Artículo del Ing. Cortés Pla “La Facultad de Ciencias Matemáticas”. Pág. 215. Universidad Nacional del Litoral. 50 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo II. Nºs. 7 - 12 de 1928. Pág. 953. 51 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo III. N’s. 9 - 12 de 1929. Pág. 389. El Plan Belloni ha suprimido Geología, al fin. Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo IV. Nºs 5 -6 de 1930. Pág. 34. En su programación ha habido un breve intermedio en donde se pensó en una materia “Perspectiva y Sombra”, reemplazada por el desdoblamiento mencionado. Ibídem, Pág. 621. Posteriormente, a pedido de los profesores se fijó el desplazamiento de Materiales de ler Año a 3ero. 52 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo IV. Nº 9 - 12 de 1930. Pág. 1065. 53 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo I. Nºs. 2 - 4 de 1927. Pág. 551. 54 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo V. Nºs. 1 - 3 de 1931. Pág. 161. 55 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo V. Nºs. 4 - 12 de 1931. Págs. 606 en más. 56 Desdoblando Geometría Descriptiva en I y II; Dibujo de Figura y Compo¬sición 1 y Composición II en tres materias: a) Dibujo de Figura y Acuare¬do; b) Composición Decorativa 1 y c) Composición Decorativa II. 57 Arte Americano es reemplazado por Construcciones de Hierro y Madera en 3ero.; en 4to. Va Hormigón Armado en cambio de Hierro y Madera, y en 5to. Arte Americano en lugar de Hormigón Armado. Este es el Plan de máxima; porque en el de mínima no está Arte Americano y las otras dos se encuentran en los cursos inferiores. El Plan completo está en el Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo V. Nºs 4- 12 de 1931. Pág. 608. 58 Revista del Centro de Estudiantes de Ciencias Matemáticas. N° 5. 3er Tri¬mestre de 1933. 59 Conocemos pocas noticias del Plan Laporte, salvo la referencia de Cortés Pla que aclaraba que su eje pasaba por Geometría Descriptiva. Cortés Pla. 45 Op. Cit. Pág. 224. 60 Cortés Pla. Op. Cit. Pág. 224. 61 Boletín de la Universidad Nacional del Litoral. Tomo IX (A) de 1935. Pags 357 en más. El Plan deviene de cambios en Ingeniería Civil, en donde Arquitectura I se desdobló en Arquitectura y Elementos de Edificios, por lo que no quedan profesores para Arquitectura II. Además agre¬ga Mampostería y una parte de Hormigón Armado; se modifica Historia y se sacan horas de Arquitectura. Dellarole se opone a que desaparezca Perspectivas y Sombras y los tres Jefes de Trabajos Prácticos. 62 Ibídem del 16 de julio y 27 y 28 de septiembre de 1945. 63 Ibídem del 6 y 10 de diciembre de 1946. Las exoneraciones del personal en Resolución del 19 de noviembre de 1946 y las suspensiones en la Re¬solución del 5 de noviembre de 1946. 64 Ibídem del 25 de octubre de 1946. En ésta se resuelve la disolución del Centro de Estudiantes. 65 Ibídem del 1 de septiembre de 1947. La comisión original del Plan queda formada por Ermete De Lorenzi, Cesar Caggiano, Ángel Guido y Luís Sobrino Aranda. 66 Ibídem del 21 de julio de 1948 67 Conmemoración del 25° Aniversario, etc. Op. Cit. y Resoluciones del Decanato del 29 de diciembre de 1949, por la que se responde a un pedido de Guido para crear la Facultad de Arquitectura. 68 Resoluciones del Decano. Resolución 384/53 69 La Comisión se forma con varios Ingenieros y por Arquitectura van Guido y de la Riestra 70 Resoluciones del Decano. Resolución 1452/52 del 20 de febrero de 1952. 71 Ibídem. Resolución 384/53 del 24 de abril de 1953. 72 Ibídem. Resolución 392/53 del 25 de abril de 1953. 73 Plan de Estudios para las Escuelas de Arquitectura y Urbanismo de las Universidades Nacionales. 1953. 74 Resoluciones del Decano. Resolución 1253/55 del 29 de julio de 1955. 37 38 la escuela de arquitectura: 1956-1970 Arq. Laura Biazoni Rolla Docente-investigadora FAPyD Arq. Paula Lapissonde Docente-investigadora FAPyD En 1955 se produce la expulsión de profesores peronistas de las universidades, a partir de la destitución del presidente democrático por el golpe de estado autodenominado Revolución Libertadora, la Escuela de Arquitectura no es ajena a los hechos acaecidos en junio ya que el Decano Ing. Rodolfo R. Dezorzi declara duelo por 48 horas en apoyo al General Juan Domingo Perón. Comienzan ciclos de permanentes movimientos en el claustro docente y con el trabajo mancomunado del Centro de estudiantes y SCA se decide reformar la carrera de arquitectos; se suspenden las clases del 18 al 31 de octubre con el fin de reorganizar el cuerpo docente y reestructurar la Escuela. En noviembre de ese mismo año se dan por termi- nadas las funciones de algunos docentes del periodo anterior; como los ingenieros Valentín Grondona, Edmundo Quaglia, Adolfo J.B. Farina, Rodolfo L. Dezorzi, José Ignacio Mercado; los arquitectos Oscar E. Mongfeld, José Manuel Newton, Martin Augusto de la Riestra y se designa a su vez como profesores titulares a los ingenieros Dante Ardigó, Carlos Isella, Cortés Plá, Dr. Miguel Ernesto Vasalli y al arquitecto Guido A. Lo Voi. Por otro lado docentes anteriormente relevados de sus cargos por el peronismo son reintegrados a las cátedras, entre ellos el Ing. Emigdio Pinasco, Roberto Chichoni, Eduardo Lamarque y Adolfo Pedro Farengo, paralelamente otros son cesanteados, como los Ings. Antonio Roberto Podadera y Hugo Edgard Butigliero; otros renuncian como el Ing. Civil Luis Sobrino Aranda, Ing. Químico Emilio Díaz Molano, el Abogado Sper Sabao Domínguez; Arq. Carlos J. Díaz Abbott; o presentan la jubilación, como es el caso de Ángel Guido. 39 40 En sus primeros 30 años la Escuela de Arquitectura había mantenido, como dijo en ocasión del festejo de los 25 años en 1949 el entonces decano Ing. Luciano Micheletti, un matiz de sereno eclecticismo…, entre lo clásico y lo moderno, siendo esto la causa del éxito obtenido. La nueva generación de jóvenes arquitectos, algo iconoclasta y con un complejo no siempre justificado contra los órdenes clásicos, desempeña su misión con dignidad, patriotismo, eficacia y espíritu de sacrificio. Se promovió la transformación a partir de la introducción de las teorías funcionalistas o el lenguaje de volúmenes más simples, en pos de la utilidad y de la economía, la llegada de Niemeyer, Neutra, la arquitectura de Wright y el organicismo exaltado por Zevi, además la nueva pedagogía tipo Bauhaus que no encajaba con la anterior, que continuaba inmersa en un persistente académico; entrando así en los primeros años ´50 con el ansia de renovar la Escuela de Arquitectura y Urbanismo de la Facultad de Ciencias Matemáticas, Físico Químicas y Naturales Aplicadas a la Industria, de la UNL. En enero del ´56 se anulan los concursos del ´47 y ante la carencia de personal se contrata a un grupo de jóvenes arquitectos porteños para renovar la planta docente, partidarios del movimiento moderno generan una apertura de la Escuela al ámbito internacional y al debate de la arquitectura moderna. Alfredo Ibarlucía, Juan Oscar Molinos, Carlos Méndez Mosquera, Alberto Le Pera, Juan Manuel Borthagaray, Manuel J. Paz, Jorge Enrique Hardoy y Francisco Bullrich, (estos últimos fueron directores de la Escuela entre el 57 y el 59, de manera sucesiva y reiterada) a los que se agrega Gastón Breyer desde 1959; ellos marcaron tendencia, a pesar de su corta presencia en la docencia de la Escuela, determinaron varios de los talleres que aun hoy permanecen en la Facultad, a partir de los estudiantes y jóvenes graduados que se agruparon en torno a ellos. Se produjo así el reordenamiento a partir del llama- do Plan de los 45 días, que consistió en una serie de ordenanzas modificatorias de las correlatividades vigentes durante la etapa anterior. De hecho, las mismas permitieron la nivelación y promoción hacia los cursos superiores de buena parte de los alumnos. El 20 de febrero del ´56 se designa como delegado organizador de la Escuela de Arquitectura y Urbanismo a Jorge Ferrari Hardoy con el fin de independizarla de la Facultad de Ciencias Matemáticas para que a partir de la reforma se nivelara con otras escuelas extranjeras. Hardoy el 2 de mayo da inicio a las clases con una conferencia sobre “Principios de reestructuración del aprendizaje de la Arquitectura y el Urbanismo”. Durante ese año lectivo desaparece Modelado y Maquette (del plan ´34) y pasa a llamarse Sistema de Representación, renunciando E. Barnes y ocupando su lugar Edgar M. Romeau. Por resolución del 28 de diciembre se presenta el nuevo Plan de Estudios que será aprobado el 3 de abril de 1957, éste promueve una Escuela más comprometida con el medio, se pretende hacer del profesional un elemento activo dentro de la comunidad, compenetrado de sus necesidades y sus posibilidades; proporcionando “métodos” y no “soluciones”; sólo así podrá satisfacer el permanente estado de renovación por el cual atraviesa la sociedad contemporánea, el arquitecto contemporáneo debe poseer un serio dominio de su técnica, una metódica capacidad creadora y un profundo conocimiento del medio y sus problemas. En consonancia con estos criterios se estructuran los Institutos de Investigación que pretenden cumplir con estos fines trascendentes. Su labor de coordinación de cátedras afines, formación de docentes e investigadores y su propósito extradocente de integrarlos a la vida nacional tiende a crear una conciencia que transforme los actuales intereses del profesionalismo individualista. Se establecen cuatro grupos de materias, distribuidas en seis años de estudios: Arquitectura y Planeamiento, 41 42 integrado por las materias Arquitectura y Planeamiento; Visión integrado por las materias Visión y Sistemas de Representación; Tecnológico integrado por las materias Matemáticas, Construcción, Estabilidad, Estructuras y Legislación, Financiación y Organización de Obra; e Integración cultural compuesto por las materias Integración Cultural e Historia de la Arquitectura. La enseñanza será continua y progresiva dividida en tres ciclos, el primero vocacional (1°ano) de carácter orientador, de transición entre la enseñanza secundaria y universitaria. El segundo ciclo (2° y 3° año) preparatorio de carácter analítico, de incorporación de conocimientos técnicos, científicos y culturales. Y el tercer ciclo (4°, 5° y 6°) de aplicación de carácter sintético, para entrenar al alumno en el manejo de mecanismos integradores propios de la tarea arquitectónica. La materia Arquitectura se ocupará del proyecto siendo la encargada de integrar los conocimientos adquiridos en las restantes materias. Junto a Planeamien- to, tiene como objetivo la enseñanza del pensamiento y la técnica del planeamiento, urbano y rural, situar al alumno dentro del marco y de la escala de la ciudad y el campo y, de la misión específica del arquitecto: determinar el uso y el dimensionamiento de los espacios destinados a la vida del hombre sobre la superficie de la tierra, de acuerdo con las necesidades del individuo y de los medios sociales. Los cursos de Visión tendrán por objeto llevar al conocimiento los fenómenos visuales, desarrollando la capacidad de observación, de crítica y de creación. El método didáctico tenderá a que cada alumno descubra por sí mismo los hechos evidentes o comprobables de la visión. Para ello se lo pondrá en contacto directo con materiales de diversa índole y se lo incitará a lograr un conocimiento íntimo de sus propiedades a través de una continua manipulación, estimulándolo gradualmente, a realizar construcciones espaciales no utilitarias y diseños de simple ejecución, reforzando y calificando así su formación arquitectónica. Las visiones desde 1957 conducidas por Carlos Méndez Mosquera, cofundador de la Revista Nueva Visión (1951) y Ediciones Summa S.A. (1963); intentaron desarrollar la imaginación, organizando tareas de experimentación de materiales, técnicas y herramientas de dibujo, manejo de color y textura, e investigación de generación de formas, desde distintos procedimientos; en ejercicios claramente sustentados por la experiencia de Bauhaus. Posteriormente Gastón Breyer incorporó un desarrollo teórico conceptual, previo al desarrollo práctico. El 18 de junio del ´60 se aprueba la creación del Instituto de Diseño dependiente de la Facultad de Ciencias Matemáticas Físico Químicas y Naturales Aplicadas a la Industria atendiendo al pedido de Breyer y desde el ´62 se denominará Instituto de Diseño Industrial y el director será Jorge Luis Pio Vila Ortiz. Integración Cultural pondrá al alumno en contacto con la problemática del presente cultural, a través de 43 44 clases donde se impartirán conocimientos de sociología, economía, corrientes filosóficas contemporáneas, Filosofía de la Ciencia, Psicología de la Forma, Semántica General y Teoría de la Comunicación e Historia del arte actual. El curso de Historia de la Arquitectura, intentará valorizar los elementos de la tradición y de la innovación en cada período del pasado arquitectónico, en forma dialéctica, forjando en los alumnos una noción crítica, que los ayudará a desentrañar el sentido de la moderna revolución en la Arquitectura. La ahora llamada Escuela de Arquitectura y Planeamiento, con dependencia administrativa de la Facultad de Ciencias Matemáticas y con relación directa con el Honorable Consejo de la Universidad en el orden técnico- docente logra la autonomía docente y se crea la Comisión Asesora Docente como comisión permanente del Honorable Consejo, dependiendo de la UNR y con J. E. Hardoy como delegado organizador; paulatinamente se irá normalizando la situación del cuerpo docente con la sustanciación de los concursos nacionales. De acuerdo al enfoque del Plan hacia la tarea de investigación, en mayo del ´57 se crea el Instituto de Arquitectura y Planeamiento a cargo del ingeniero Atilio Daniel Gallo y el arquitecto José A. Le Pera; bajo cuya supervisión se elaborarán las bases para el programa de necesidades del CUR. Fomentando asimismo la realización de cursillos, becas, seminarios y el intercambio con otras escuelas: Francisco J. Bullrich asiste a las reuniones de enseñanza promovidas por el Instituto de Historia de la Arquitectura en Tucumán como delegado de la Escuela; en julio los docentes de las distintas áreas asisten a la reunión de decanos y directores de Escuelas y Facultades de Arquitectura del país en Buenos Aires; Manuel José C. Paz asiste al 1° Congreso Argentino de Planeamiento y Vivienda en Tucumán. Juan Oscar Molinos viaja al Institut National Technique et Scientifique du Batiment de París a fin de realizar un informe sobre construcciones para alojamiento de estudiantes en centros universitarios y nuevas técnicas aplicadas a la construcción de viviendas económicas; a partir de lo cual, posteriormente, en el año 1961, se lo contratará para desarrollar un estudio sobre el problema creado por la falta de vivienda, especialmente en nuestra zona. En concordancia con los tiempos de apertura y cambio, propiciando la participación, en septiembre se crea un Consejo Docente plural, integrado por un director organizador, tres profesores, dos alumnos y un egresado; dos meses después se aprueba el curso preparatorio de admisión a la carrera de arquitecto y por resolución, en mayo del ´58, la Comisión Asesora resuelve instaurar en la Escuela de Arquitectura y Planeamiento el sistema de talleres verticales que al incluir alumnos del 2° al 6° año, permite configurar unidades pedagógicas mucho más equilibradas y por lo tanto eficientes… y potenciar los esfuerzos del alumnado multiplicando los contactos y las experiencias. El estudiante empezaba el primer año con ejercicios de relevamiento y representación del entorno y a partir del segundo año ingresaba a uno de los talleres verticales, al principio eran cuatro las alternativas: Ibarlucía, Borthagaray, Molinos y otro compartido por Hernández Larguía y Benetti Aprosio. Los intentos por consolidar la planta docente se ven dilatados cuando a mediados ´58 presentan la renuncia entre otros Bullrich, Hardoy, Ibarlucía, Benetti, Borthagaray, no obstante las mismas son rechazadas pero aún así no hay docentes para comenzar las clases y se debe postergar la reunión de jurados y las pruebas de oposición de los concursos de auxiliares hasta que se resuelva la falta de titulares y en mayo se llama a inscripción para cubrir estos cargos. Se nombra Director provisorio a Hilarión Hernández Larguía por terminar las tareas provisorias Jorge Ferrari Hardoy, y a partir de desdoblamientos y reemplazos se instauraron, finalmente, seis talleres: Benetti Aprosio, Hermes Z. Sosa, Aníbal Moliné, Alfredo Molteni, Flavio Bella y Jorge 45 46 Borgato que sustituye a Borthagaray. La diversidad de estos talleres permitía al estudiantado la elección de acuerdo a afinidades y generaba en muchos casos antagonismos, había desde variantes formalistas en versión Le Corbusier o Alvar Aalto, versiones localistas comprometidas con la realidad del país y otras que priorizaban la materialidad del edificio, considerando la infraestructura, servicios y mantenimiento. El Instituto de Historia de la Arquitectura (IDEHA), se constituye en 1956 y es quien promueve la visita de prestigiosos protagonistas; tiempos fecundos en cuanto a cantidad y diversidad de cursos, Richard Neutra expone sobre “El arquitecto y el cliente”; el arquitecto Mukhopahyay Ahangjit sobre “Modos y maneras de construir en la India”; Mario C. Robirosa da un cursillo de “Sociología para el planeamiento”; Alberto L. Cignoli sobre “Los nuevos conjuntos urbanos”; Eduardo Sacriste sobre “Teoría de la arquitec- tura”, dicta además dos conferencias sobre “Vivienda espontánea; Borthagaray sobre “La ciudad”, “El paisaje urbano”, “La catedral”, “La plaza”, “El palacio”, “Los pioneros”, “Internacional Style” y “Vivienda moderna”. Sumado a estos, hacen su contribución conferencias como la de Nikolaus Pevsner; Marina Kitroser de Waisman sobre “Introducción al siglo XX: posición del arte y de la arquitectura”; Takamasa Yosizaka referido a “La obra de Le Corbusier y a la arquitectura japonesa”; el señor Gillo Dorfles sobre “Relaciones entre el diseño industrial, el artesanado y la arquitectura”; el Prof. Giulio Carlo Argán sobre “La obra de Frank Lloyd Wright”; Ignacio J. Faure sobre “Estructuras laminares: el paraboloides hiperbólico y la obra del Arq. Candela”; además de la visita del arquitecto Misha Black. Son momentos de intercambio, viajes y producción; en octubre del ´61, por solicitud de Bullrich e Iván J. Hernández se aprueba la creación del Departamento de Historia de la Arquitectura. Hardoy se hace cargo de la Dirección del Instituto de Arquitectura y Planeamiento al volver de su beca para realizar estudios en Harvard. Hermes Sosa va en ´63 representando a la Escuela a Capital Federal al V° Congreso Argentino de Vivienda, dedicado a la vivienda económica de interés social; más tarde viajará a París junto a Aymar L. Ferrari y Jorge Borgato, en mayo del ´65 al VIII Congreso Mundial de Arquitectos y en julio se realizará en Córdoba un seminario con el profesor de Historia del Arte de la Universidad de Yale M. Vincent Scully Jr. En diciembre del ´61 se nombra un comité de redacción para la publicación de una revista que difunda las actividades que se desarrollan en la Escuela, se designa al Prof. Iván Javier Hernández y los arquitectos Hardoy, Moliné y Lurá; publicándose el primer número de la revista AyP en 1963. Estos textos complementan las publicaciones de Infinito y Nueva Visión y los textos extranjeros de Hauser y Benévolo. 47 Para 1963 se continúa consolidando la planta docente y es a través de diversas resoluciones que se designan cargos para completar las distintas cátedras. 48 El ambiente nacional de principios de los ´60 lleva a la presentación de la renuncia del Decano Ing. José León Garibay en abril del 64, la cual es rechazada por resolución del CD, a partir de los hechos producidos durante una conferencia en el aula magna, cuando un grupo de estudiantes interrumpió al orador, se condena tal actitud y se expresa la convicción de que sólo mediante la más amplia tolerancia y libertad de expresión se podrá encontrar el camino que conduzca a la superación que se anhela para la Universidad y el pueblo todo, firma Arq. Mario A. Segovia Mayer. En mayo del ´65 renuncia el arquitecto Hermes Zacarías Sosa al cargo de Director de la Escuela de Arquitectura y Planeamiento asumiendo como director Aymar Lorenzo Ferrari y Flavio Bella como sustituto. Otro hecho se suscita en mayo cuando son reprimidos en la cercanía del comedor universitario alumnos y la Facultad condena la injustificada y violenta acción; en octubre la Universidad se hace eco del llamado de estudiantes y profesores de la Universidad de Berkeley (California, EE.UU.) para instituir los días 15 y 16 como “Días internacionales de protesta” contra las intervenciones militares norteamericanas y califican la masacre que realizan las fuerzas norteamericanas en Vietman como una vergüenza para la historia de la humanidad. Mientras tanto a nivel nacional se produce el golpe de Onganía en el ’66 y se intervino la Universidad don- de el ambiente intelectual politizado desde la izquierda generó la resistencia de profesores y estudiantes y tuvo como consecuencia la noche de los bastones largos, la respuesta fue la instalación del pensamiento de izquierda con más vigor manifestado en el ’68 con el Cordobazo, la experiencia Tucumán Arde, obra colectiva de artistas rosarinos y porteños exhibida en las sedes de la CGTA en Rosario y Buenos Aires y en la calle; con el leit motiv en lo social, la clase obrera y los desposeídos. En medio de este proceso se crea en 1968 la Universidad Nacional de Rosario. El 16 de mayo del ’69 se produce el Rosariazo en repudio a los hechos acontecidos en la Facultad de Medicina de Corrientes y el rector de UNR decide suspender las clases y los estudiantes se movilizan, este clima continuó hasta el 16 de septiembre cuando a partir de la huelga ferroviaria marchan estudiantes y trabajadores al local de la CGT y son reprimidos por la policía. Por resolución del 30 de junio se reafirma la defensa de la constitución nacional, de la autonomía universitaria y del cogobierno de la Universidad y se adhiere a la declaración de la UBA. El 12 de septiembre, se suspenden las actividades en la Facultad por la muerte de Santiago Pampillón durante el decanato de Benetti Aprosio. Dentro de las reformas del periodo, en la Escuela se crea en el ´66 el Departamento de Graduados y Perfeccionamiento Docente, dependiente de la Dirección de la Escuela de Arquitectura y Planeamiento; el taller de Maquetas y Modelos y la Diapoteca que concentrará todas las diapositivas en poder de las distintas cátedras. En el ´67 se crea la Biblioteca con los libros pertenecientes al arquitecto Hilarión Hernández Larguía, las colecciones de revistas de arquitectura que llegan a la Facultad, las publicaciones especializadas que llegan a la Escuela en calidad de obsequio o canje, las publicaciones que haga el departamento de publicaciones de la Escuela, próximo a crearse y toda otra publicación que se considere necesario incluir en esta Biblioteca. A fines de los ´60 la Escuela vive al ritmo de las revistas donde se difunden las ideas de Yona Friedman, Fumiko Maki y Archigram. En marzo al volver Mario Luis Corea con el Master of Urban Design de la Universidad de Harvard, se lo designa como profesor de los talleres de Arquitectura con la misión de asesorar en los trabajos que tengan relación con problemas de diseño urbano. Así los sistemas y subsistemas, las cápsulas, monorrieles y megaestructuras reemplazan a la plástica en los proyectos. En junio del ´68 asisten los arquitectos Héctor Horacio Elena y Adelaida Arribillaga a Córdoba al Seminario que dicta Reyner Banham, quien en julio dicta una conferencia en Rosario sobre “La ciudad como equipamiento en acción. Reseña del Archigram y de la arquitectura visionaria británica”. En octubre se realiza un ciclo de conferencias sobre Arquitectura Argentina (1850-1930, década del 30, reacción antirracionalista) a cargo de los arquitectos Federico Ortiz, Miguel Ascensio y Rafael Iglesias; y el arquitecto Reginald Malcomson, Profesor de la Universidad de Michigan pronuncia una charla sobre el tema “Ciudad Lineal”. Y en 1970 dictará conferencias en la Facultad el Prof. Umberto Eco. Se presentan tiempos cada vez más agitados en los que la Facultad transita un rol ciertamente relevante, en abril de 1970 son prohibidas las reuniones de estudiantes de cualquier carácter, asambleas, peñas, bailes, etc. y la exhibición de letreros de toda índole, a esto se agrega la suspensión de clases nuevamente por actos de violencia repetidos y se suspende la entrada de veinte alumnos a la Escuela; como consecuencia de esto en diciembre renuncia el decano Benetti Aprosio y se nombra delegado organizador al arquitecto Flavio Bella quien será el primer decano de la Facultad; cuando finalmente, a partir de la ordenanza n° 40 del 16 junio de 1970, el Consejo de Rectores en la reunión del día 31 de marzo otorgó la autorización exigida por el Art. 77 inc. C de la Ley orgánica de las universidades y los señores Decanos de Universidad, unánimemente han prestado su aprobación al proyecto de transformación de la Escuela en la desde ahora Facultad de Arquitectura, Planeamiento y Diseño. 49 50 la facultad de arquitectura y planeamiento: 1971-1975 Arq. Laura Biazoni Rolla Docente-investigadora FAPyD Los primeros ‘70 encuentran a la Universidad inmersa en un ánimo de cambio a la sazón del ambiente político- social contemporáneo, y se suscita una apertura que admite la aparición de experiencias con preponderancia ideológica de izquierda implementándose la experiencia del Taller Total en las facultades de Buenos Aires, La Plata, Córdoba y Rosario. La Facultad de Arquitectura se halla en medio del tránsito de calle Pellegrini a Berutti 2121, parte de la naciente Ciudad Universitaria, traslado sustanciado en ´73, con fuertes cuestionamientos internos hacia la enseñanza y el desarrollo de los cursados. Los docentes, conforme al espíritu de la época fuertemente politizado, invitan a estudiantes a Asambleas conjuntas donde se denuncian temas como la falta de objetivos en el trabajo académico, cuestionando las cátedras compartimentadas a las que denominan “feudos” y el sentido de “carrera” ausente de objetivos que se alienta y alimenta administrativamente, llevando a que ocurran irregularidades en la inscripción de cursos y en la calificación de exámenes que se dan en una fecha y la nota aparece en otra, alumnos del último curso que adeudan materias del segundo, etc.; y la “demagogia” implícita en estos actos consentidos además los déficits de presupuesto para el trabajo docente, en cuanto a cantidad, ubicación real de acuerdo a la designación, la remuneración y los que no perciben remuneración, la dedicación por presupuesto y la dedicación real, equipamiento, etc. Se propone reconocer la forma de trabajo alienante que implica trabajar sin sentido tanto para alumnos como para docentes en Arquitectura, la falta de diálogo hizo que no se entienda la necesidad de cambiar de óptica y para hacerse escuchar encuentran que fue necesario recurrir a la fuerza, una fuerza pequeña si se 51 52 quiere compararla con la fuerza necesaria para cambiar el curso de la dinámica social … pero suficientemente firme para expresar la necesidad de un cambio de actitud en nuestra actividad que es incuestionablemente de carácter social, de servicio social o no es nada. Este cambio de actitud requiere ser respaldado contractualmente para institucionalizar el proceso en un acto de defensa de lo que consideramos justo, es un ejercicio de responsabilidad que no debemos resignar, ni como universitarios, ni como ciudadanos, si se diera que este seccionamiento fuera posible, estando implícita en toda declaración la base marxista como puntal de las acciones. Los objetivos propuestos por los partidarios del cambio para lo académico manifiestan el nuevo sentido que se le quiere dar a la disciplina, se precisa la enseñanza con contenido real acorde a la realidad concreta, la cogestión docente- alumno y la consecuente desjerarquización en cuanto a decisiones en una actitud compro- metida y crítica frente al aprendizaje y al medio, una integración de contenidos y actividades mediante la unidad dialéctica teoría- práctica, integración necesaria que pretende reemplazar las materias estancas y enciclopedistas, productoras de conocimiento parcelario y la destrucción del academicismo que estetiza y distorsiona el proceso dinámico del aprendizaje. En síntesis, toda valoración formal de la arquitectura era considerada reaccionaria y se considera necesario pensar a la arquitectura desde su “valor de uso”. Así por resolución del C.S. el 27 de octubre de 1971 se homologa el proyecto de Plan de Estudios y Régimen de Equivalencias que propone la Dirección de la Escuela de Arquitectura y Planeamiento con carácter experimental, firmado por el rector Sol Rabasa y el Secretario Académico Luís A. Suñer; cuyos resultados serán evaluados posteriormente por la Escuela a efectos de la elaboración del Plan Definitivo. Puesto en vigencia a partir del 1º de marzo del mismo año el Plan Experimental sustituye los seis años de la carrera por tres niveles que se corresponden a los años en los cuales se encontraba cursando el alumno. Siendo el Nivel 1 de un año lectivo (correspondiente al antiguo 1º año); el Nivel 2, subdividido en 2A y 2B, de dos años lectivos (correspondientes a 2º y 3º año respectivamente), y el Nivel 3, subdividido en 3A, 3B y 3C, de tres años lectivos (correspondientes a 4º, 5º y 6º año respectivamente). Se establecen seis comisiones, en tres turnos y los niveles son vistos como un proceso ya no como materias estancas, con la intención de integrar conocimientos para diferenciarse de los anteriores cursos de promoción anual cerrados, se presenta como un sistema de proceso abierto. Los contenidos pedagógicos se desarrollaran en dos planos, uno teórico- práctico y otro práctico- teórico interrelacionados, el primero compuesto por tres áreas unidisciplinares. Una Socio- económica- política (socio- cultural) consistente en práctica específica en el campo de las ciencias sociales, productora de cues- tionamiento y crítica como modo de interpretación y transformación de la realidad; una Tecnológica que es la materialización del hábitat, considerado como continente del ser social, es la tecnología al servicio de las soluciones. Y la Instrumentación e implementación donde se entrena al alumno en la proyección, la expresión y el correcto lenguaje. Teoría de la Arquitectura se encuentra dentro del plano teórico- práctico, es un área de síntesis interdisciplinaria, conceptual de elaboración teórica, que engloba los conocimientos producidos en las primeras tres áreas. Mientras tanto, en el segundo plano, el prácticoteórico, se conforman comisiones de trabajo como práctica integradora, síntesis del marco teórico en función del problema a enfrentar. Es un proceso críticogenerador con participación activa de los docentes de los cursos teóricos. 53 54 Debe ser crítico respecto a las tareas académica y profesional, con el fin de generar una nueva actitud frente a la problemática, cuestionando y encontrando enfoques aptos, conceptuales y prácticos para su quehacer siempre en función social. Las materias del viejo plan se equiparan a las nuevas áreas y niveles para realizar la transición al año lectivo ’71 y para reubicar al plantel docente de acuerdo al área de interés. El área Tecnológica se conforma en dos cuerpos que operativamente no pudieron ser integrados, con docentes de Construcciones I, II, III y IV, Matemáticas I y II y Estructuras A1, A2 y B1 y B2. Implementaciones se conformará con los docentes de Visión I, II y III y Sistema de representación; Trabajo en comisiones con docentes de Arquitectura de I a VI año. Y en el área Socio- económica- política estarán los docentes de Integración Cultural, Historia I y II y Planeamiento I y II. Tendrá gran importancia en tanto será la encargada de guiar el análisis socio- político del problema de diseño y de dar coherencia al análisis y marco teórico elegidos; convirtiéndose de este modo en el eje vertebrador de la carrera. Esta tendencia al análisis social conllevó la depreciación de las materias de diseño como Arquitectura e Implementación y las puramente técnicas, Estructuras y Construcciones. Teoría de la Arquitectura no funcionó como área independiente el primer año por falta de docentes, y se determinó que los conocimientos se impartirán en las comisiones por los docentes de las mismas. Otra innovación se revela en los criterios de evaluación y promoción de esta etapa transitoria, éstos se basan en la valoración del trabajo del alumno, de su forma de trabajo, la ubicación en el nivel que corresponda según los conocimientos reales en relación a las exigencias de cada nivel y la posibilidad de promoción del nivel. Al momento de la evaluación se tenía en cuenta el proceso y se formalizaba una evaluación final en relación con el producido del trabajo integrado de las comisiones. Quedando entonces constituido el Nivel 1 por Arquitectura I, Socio- cultura I, Implementación I, Tecnología I, Trabajo de comisión I. Nivel 2 por Arquitectura II, Socio- cultura II, Implementación II, Tecnología II, Trabajo de comisión II. Y Nivel 3 integrado por Arquitectura III, Socio- cultura III, Implementación III, Tecnología III, Trabajo de comisión III. El alumno debía tener aprobado el nivel inmediato anterior para cursar el subsiguiente y habiendo aprobado los trabajos prácticos de cada nivel, se rendía un examen por cada una de las áreas (o se promovían) y se evaluaban los trabajos de comisión, siendo todas las pruebas públicas. Luego las calificaciones eran sometidas a una comisión integrada por docentes de todas las áreas y trabajo de comisión del nivel respectivo, que decidía si el alumno pasaba al nivel siguiente. Los objetivos de formación y enseñanza de la Arquitectura en los distintos niveles del Plan Experimental con lo social como vocación principal, son aprobados por resolución de C.A. Arquitectura el 24 de febrero de 1972, firmada por el delegado organizador Flavio Bella y la secretaria administrativa interina Blanca Rosa Foresto. Allí se determina la enseñanza del objeto, la disciplina, como soporte de valores sociales, vehículo de funciones sociales; y el sujeto, el arquitecto, como intérprete crítico de estos valores sociales, estructura las relaciones espaciales que hacen posible la organización funcional. Los objetivos del Plan tienen como base la producción de conciencia, de actitudes, además de la producción material y ésta a su vez tiene por objeto la transformación del sistema cultural, social, de los productos culturales y sociales, de los individuos y del conjunto. Dentro de los objetivos generales se destaca el reco- 55 56 nocimiento del valor de la disciplina como respuesta a la dinámica de las necesidades sociales, inscriptas en un sistema social, de precisas instancias de ubicación temporal. Se reconoce la necesidad de integrar las áreas de conocimiento, la interpretación de la realidad y efectuar propuestas de transformación, mediante la actitud crítica del alumno y del docente respecto de las formas sociales, arquitectónicas y su ubicación en la perspectiva histórica. Por resolución del 6 de marzo de 1972, firmada por el delegado organizador Flavio Bella, se aprueban las orientaciones y los objetivos para el trabajo integrado para los distintos niveles, este trabajo supone un cuestionamiento sobre el producto de tarea completa y debe complementar el cuestionamiento al proceso que se ha venido realizando, debe ser el cierre de un ciclo para evaluar y abrir un ciclo nuevo de superación del proceso y sus objetivos con miras al próximo año lectivo. El trabajo integrado será un proyecto para la materialización de un grupo habitacional realizado para el área urbana de Rosario, conformando espacios y usos, integrando la vivienda al entorno necesario para la vida del conjunto del grupo social, no pensando en “prototipos” de uso independiente del sistema en que se están insertando. Involucrando a todas las áreas de conocimiento en el desarrollo de la propuesta: la economía que posibilite su construcción y la dotación de la base tecnológica ajustada al medio, la teoría de la arquitectura para hacer claro el diseño y su desarrollo de manera de justificar las opciones funcionales y arquitectónicas coherentes con el marco socio- político establecido. A mediados del ’72, por resolución del C.S. se resuelve constituir una Comisión Asesora para evaluar el método seguido y los resultados obtenidos en la aplicación del Plan Experimental durante el curso lectivo 1971, antes de continuar con su aplicación en el curso correspondiente al año 1972. Esta comisión fue presi- dida por el delegado organizador en la ahora Facultad de Arquitectura arquitecto Flavio Bella, e integrada por los arquitectos Horacio Panvini, Aníbal Moliné, Alfredo Molteni, Edy Ausburger, Norma Giorgetti, y el ingeniero Jorge Fernández Milani. Como esta comisión no llegó a constituirse en virtud de las sucesivas renuncias de los miembros designados para integrarla, ni la Facultad de Arquitectura cumplimentó formalmente con el estudio de la experiencia instituida, por resolución del C.S., firmada por el rector Dr. Roberto H. Brebbia; se decide mantener la vigencia experimental del Plan de Estudios y Régimen de Equivalencias y se da a la Facultad de Arquitectura un plazo de 30 días corridos para producir la evaluación del plan a fin de elaborar un plan definitivo, disponiendo que el incumplimiento de lo antes mencionado producirá la caducidad automática del Plan Experimental vigente. 57 58 PLAN de ESTUDIOS año 1973. Pero los acontecimientos nacionales, una vez más, determinan el proceso cuando en 1973, tras el triunfo del Frente Justicialista de Liberación dirigido por Héctor J. Cámpora, Juan Domingo Perón regresa a la Argentina de su exilio en España y asume la presidencia, tras los comicios de septiembre. En octubre del mismo año se interviene la Facultad de Arquitectura de la UNR para realizar una transformación revolucionaria en el campo de la Educación Universitaria” con un “accionar integrador, que según la concepción justicialista de la educación debe armonizar con las necesidades de la totalidad del Pueblo y la educación universitaria estar vinculada al problema social no se reduce a un enfoque economicista de elevación material del ser humano sino que se realiza en el desarrollo intelectual y espiritual que lo definen como ser integrador. El objetivo del Plan, es entonces elevar a un nivel de cultura aceptable a la gran masa del Pueblo Argentino, para que desaparezca la división entre gobernantes y gobernados. No es “abrir la Universidad del Pueblo” que plantea una igualdad formal pues aunque estén liquidadas las barreras jurídicas de la limitación como exámenes de ingreso, aranceles, etc. no significa el acceso del pueblo a la Universidad, la limitación es hoy un fenómeno estructural. La Universidad debe “diluirse en el Pueblo”, logrando que todos los estudiantes trabajen y todos los trabajadores estudien. La división entre trabajo productivo y quehacer intelectual sólo constituye antinomias en la sociedad cuyo fin es el lucro.” La Secretaría Académica, a cargo del arquitecto José Luis Felcaro, eleva un informe a la intervención de la Facultad de Arquitectura sobre la situación académica, 59 60 explicitando que la situación real de la Facultad presenta distintos matices, estando dividida en dos sectores. Uno, el Proceso de Arquitectura, que se mantiene sin cambios significativos, trata de mantener a la comisión operando como una verdadera unidad pedagógica… y las relaciones de estructuración académica entre las áreas, las formas de evaluación y promoción y los mecanismos de transmisión de conocimiento teórico y práctico. El otro sector, atendiendo a las condiciones de la realidad al espacio y tiempo docente respecto a la cantidad de alumnos considera imposible desarrollar la enseñanza tal cual se postulara en 1971, éstas últimas presentan coincidencias con el nuevo Proyecto de Estructuración Académica que propone, de acuerdo con la concepción del Estado Nacional, formar y capacitar profesionales y técnicos con una conciencia apoyada en la tradición cultural argentina para cubrir los requerimientos nacionales y regionales, que fomente el es- fuerzo autodidacta e indagativo y las cualidades que lo habiliten para actuar con idoneidad moral e intelectual en su profesión, en la vida pública o privada… fundada en valores de solidaridad social. Se incita a desarrollar la investigación y la enseñanza científica y técnica, elaborar y difundir el conocimiento, y el estudio de la realidad nacional y el rol de la Argentina dentro del orden mundial fomentando el proceso de integración regional y continental. Se rescatan los objetivos del “Proceso” en cuanto a integración de conocimientos, mayor compromiso con la realidad, y el rol del Arquitecto y las relaciones más flexibles docente- alumno. Pero se cuestiona la estructura desde el punto de vista académico, y se la rechaza como proyecto político elitista desvinculado del proyecto nacional dado que no se ha superado una forma académica ya perimida, sino que se la a reemplazado por otra caótica e ineficaz que imparte conocimientos de manera asistemática… dando por resultado niveles cada vez más pobres de capacitación a… los egresados (sic); y continúa la estructura anterior de feudos sin comunicación entre sí ha sido acentuada, ya que en la actualidad, la anarquía total de objetivos y contenidos pedagógicos permite que cada grupo … tenga objetivos sin integración en un proyecto común. El sistema de promoción única para cuatro áreas diferentes hace que el estudiante tenga que cursar de nuevo todo un año por déficit en una de ellas… la alternativa frecuentemente aplicada en los últimos años es la aparición de la “promoción masiva” que significa que los estudiantes aprueban un curso sin haberse capacitado y lo que significa una injusticia para el conjunto de la Nación. Por lo cual se propone el ordenamiento de la Institución adecuándola para que forme profesionales capaces de resolver problemas. Esta reestructuración implica la formulación de programas y contenidos comunes por área y por nivel coordinados horizontal y verticalmente con responsables de áreas y objetivos en el marco de los planes nacionales. Frente a la preponderancia del área Socio- cultural y la consecuente afectación por parte de las otras áreas, se plantea la coordinación horizontal las áreas Arquitectura, Socio- cultural y Tecnológica definiendo un Programa de Objetivos para cada uno de los seis niveles con los correspondientes contenidos pedagógicos. El área Implementación se fundirá con el área Arquitectura y ésta desarrollará Diseño, Implementación teórica y coordinación de programas. La coordinación vertical deberá asegurar el desarrollo coherente de contenidos. En cuanto a la estructura académica el curso lectivo de dividirá a partir de ahora en dos cuatrimestres, en el primero deberán dictarse clases por nivel y pruebas periódicas de verificación de conocimientos, teóricos y prácticos. En el segundo se realizarán trabajos integradores y, nuevamente, se efectuará la redistribución de los docentes para garantizar la aplicación de la actual estructura. Termina así la experiencia del Taller Total en la Facultad de Arquitectura, la que también se fue diluyendo en otras facultades a medida que transcurrían los hechos a nivel político en el país, la muerte de Perón y la asunción de Ma. E. Martínez de Perón hicieron que el cada vez más complicado clima de mediados de los ´70 se adentrara en algunos sectores del claustro académico, mientras otros siguieron su curso sin sobresaltos. La implementación del Plan ´73 nunca se llevó a cabo y la enseñanza continuó muchas veces a estricto criterio de cada docente que elaboraba su propio programa sin atenerse a ningún plan de estudios, en general no se modificaron contenidos que sólo adoptaban nuevos nombres, se mantuvo el sistema por niveles y continuó así hasta el siguiente gran cambio que se producirá a raíz del golpe cívico- militar del ´76. 61 62 el proceso: 1976-1982 Arq. Paula Lapissonde Docente-investigadora FAPyD En el año 1975, se inicia la gestión del Arq. Santiago Racca y a los meses el terror se apoderó de la República Argentina, el 24 de Marzo de 1976 se derroca al gobierno constitucional y se impone un gobierno de facto, el ambiente universitario no fue ajeno al mismo y un mes después un tercio de la planta docente queda fuera de la facultad. Este proceso fue regido por el rector Humberto Ricomi quien asume en agosto de 1976 y deja su cargo en setiembre de 1882 con la vuelta a la democracia, este período lo precedió el coronel Joaquín Sánchez Matorra como delegado militar. Un nuevo orden comienza, se baja la línea en todo, no hay posibilidades de debate u opiniones; el decano normalizador de la Facultad de Arquitectura en ejercicio de atribuciones del H. Consejo Directivo, Arq. J. Hugo R. Caggiano, el día 17 de Marzo de 1976, es quien resuelve establecer la creación de un Cuerpo de Coordinación Operativa Académica formado por Profesores Titulares o Profesores Adjuntos del área Arquitectura con la intención de poner en marcha una operativa para mejorar el proceso académico, esto está previsto para el año 1976 y se llamó TRABAJO INTEGRADO. Estos profesores formaron el Cuerpo de Coordinadores Académicos, seis titulares y seis suplentes, institucionalizados con la misma jerarquía, obligaciones y derechos competentes, actuando uno por cada Nivel en todas las Comisiones; los mismos se dedicarán sólo y exclusivamente a estas nuevas funciones. Ellos son: Coordinadores Académicos Titulares: Los Arqs. Carlos Alberto SERRA, para Nivel 1, 1° Año; Jorge Manuel ROSADO, para Nivel 2, 2°Año; Edmundo QUAGLIA, para Nivel 2, 3° Año; Raúl FERNANDEZ MILANI para Nivel 2, 4°Año; Mario Luís COREA para Nivel 2, 5° Año; Aníbal J. MOLINÉ Y LURA para Nivel 3, 6° Año. Y los Coordinadores Académicos Suplentes lo conforman los Arqs. José María MAR- 63 64 CHETTI para Nivel 1, 1° Año; Adolfo O.L CONCINA para Nivel 2, 3° Año; José Luis. FELCARO para Nivel 2, 4° Año; Andrés F. FACCHINO para Nivel 2, 5° Año y Horacio PANVINI para el Nivel 3, 6°Año. En el mes de Abril de de 1976 el Dr. Cortés Plá solicita un informe que es emitido con el título de: Informe del Decanato normalizador de la Facultad de Arquitectura sobre la situación y Estado Académico en esa casa de Estudios al asumir sus funciones. El informe, justifica su intervención por pedido de alumnos y padres de mejorar el nivel de la carrera. En un relevamiento hecho para el mes de setiembre del año 1975 la facultad funcionaba a través de seis Comisiones completas (de primero a sexto nivel) y una séptima con primer nivel solamente, cada nivel abarca cuatro áreas académicas: Área Socio Cultural, Área Tecnológica (con Sub área Construcciones y Sub área Estructuras), Área Implementación y el Área Arquitectura. Esta forma de trabajo tiene su origen en el año 1971 el mismo funcionó en forma parcial y con fa- lencias sumado a los problemas administrativos. En el trabajo integrado, la calificación se reduce a insuficiente y aprobado, evitando los pases de comisiones donde se encontraban afinidades con los docentes llegando en algunos casos a plantear el mismo tema de arquitectura en toda la carrera. Inclusive en ciertos casos por falta de docentes en algunas áreas de nivel, los alumnos pidieron la “Promoción Masiva” lo que les dio áreas completas aprobadas sin dictarse los cursos. Esto mostraba las dificultades de conocimientos a adquirir ya que el alumno aprobaba el año con el Trabajo Integrado (las cuatro áreas) evaluando lo realizado durante el cursado, si no aprobaba rendía libre el total de las materias y no sólo el área donde tenía insuficiente. Estas complicaciones y situaciones negativizaron el sistema llegando en algunas situaciones puntuales donde el examen libre venía hecho desde fuera siendo difícil probar su autoría o grupos que aprobaban sin individualizar el trabajo de cada integrante del mismo. Debido a todos los inconvenientes y problemas que trajo este sistema se pone en funcionamiento un plan a partir del año 1976 que responde al PLAN HOMOGÉNEO MÍNIMO Y BÁSICO aprobado por el Ministerio de Cultura y Educación de la Nación para todas las Facultades de Arquitectura para lo cual se introdujeron algunas modificaciones que dieron origen a un nuevo plan de estudios para la carrera de Arquitectura, superador de la experiencia que se venía desarrollando en años anteriores. Este informe lo firma el Decano Normalizador Arq. Hugo R. Caggiano. Con el estado de situación relevado y con el plan nuevo se realiza 25 de Agosto de 1976 la primera reunión entre decanos y el Rector de la Universidad Nacional de Rosario con el fin de recuperar a los docentes alejados de la misma en los últimos años. En este caso le tocó al Arq. Francisco José Junoy quien había renunciado el día 30 de Abril de 1975; ser reintegrado a su labor docente por el Decano actual Hugo R. Caggiano; en ejercicio de atribuciones de H. Consejo Académico, aportando… “así su propio esfuerzo a la política de recuperación general…”. El plan es “único para todas las facultades del país”; armado para propiciar la autonomía de la arquitectura, sin subordinación a la política, ni a los acontecimientos del momento. El rectorado de la Universidad Nacional de Rosario propuso el Plan de Trabajo, Agosto 1976-Febrero 1977, aprobado en la reunión de Decanos antes mencionada. Para llevar a cabo el mismo el Honorable Consejo Directivo resuelve el 1 de Octubre de 1976 designar como delegados de la Facultad de Arquitectura ante el Consejo de Investigaciones de la Universidad a los profesores Adjuntos Ing. Jorge Raúl Sixto Bogado como titular, al Arq. Enrique Mario Badano como suplente. Y siguiendo la tesitura de mantenerlo activo en octubre de 1976 son nombrados los delegados de esta Facultad ante el Consejo de Enseñanza para Graduados de la Universidad a los profesores Arqs. Martín Augusto de la Riestra como titular y Jorge Manuel Rosado como suplente. Para adecuar los requerimientos que plantea la enseñanza de Arquitectura con el nuevo plan se agrega el funcionamiento de un Cuerpo Coordinador Acadé- 65 66 mico para los mismos niveles de todas las comisiones, se define una Estructura Académica que posibilite mejorar el Plan Vigente, concebida la Facultad como una unidad que agrupe funciones de docencia, investigación y extensión. El plan de Trabajo Agosto 76-Febrero 77 establece un sistema de asesoramiento y consulta que permite la participación del cuerpo docente en la conducción de la Facultad, esto da como resultado el Consejo Asesor. El mismo permitió evaluar la opinión de los docentes sobre la Estructura Académica necesaria para mejorar las experiencias obtenidas, y llevó a amplios debates realizados dentro del seno del Consejo Asesor lo cual concluyó que la Estructura debe ser flexible como para posibilitar el adecuamiento progresivo a las exigencias de tipo técnico, cultural, científicas y pedagógicas que la evolución y evaluación natural vaya requiriendo. El decano aprueba este programa de Estructura Académica que permite departamentalizar esta Facultad, por la cual la misma debe ser flexible e ir amoldándose a los cambios de las tareas académicas. Esta estructura se apoya en las siguientes premisas básicas: 1) Las Ordenanzas 208/76 y 63/71, como instrumentos normativos idóneos para definir una Estructura Académica adecuada a los requerimientos pedagógicos, científicos y técnicos de la Facultad de Arquitectura. 2) Necesidad de reafirmar aspectos positivos de experiencias anteriores y desechar caminos que condujeran a la Facultad a profundas crisis de carácter pedagógico, científico y técnico. 3) Establecer el necesario equilibrio en la formación del educando, entre la globalización y particularización de conocimiento a adquirir, asegurando la unidad interior del hombre universitario. En la resolución del día 15 de noviembre de 1976 el decano de la Facultad decide nombrar con carácter interino a los directores de Departamento ya que la departamentalización de la Facultad fue aprobada por el señor Rector de la Universidad, Arq. Jorge Manuel Rosado, Titular de dedicación semiexclusiva del Departamento de Arquitectura y Planeamiento como director; al Arq. Fernando Natalio Boix, adjunto de dedicación simple, Director del Departamento de Construcciones al Ing. Jorge A. Fernandez Milani, Profesor Titular de Dedicación simple, Director del Departamento de Estructuras y en el Departamento de Historia de la Arquitectura hasta que se designe Director llevará a cabo las tareas de Secretario Académico el Arq. Edmundo Quaglia. El resto del personal docente pasará a las asignaturas determinadas. Conformaron el cuerpo de Coordinadores Académicos para el curso 1977; los Arqs. Carlos Alberto Serra, para 1° Año; José Luis Felcaro para 2° Año; Edmundo Quaglia para 3° año; Oscar Raúl Stoddart, para 4° año; Adolfo Oscar Luis Concina, para 5° año y el Arq. Aníbal Julio Moliné y Lurá para 6° año. Con el ciclo lectivo en marcha en la ciudad de Rosario, finaliza el año siendo aprobado 3 de Diciembre de 1976 el Plan de Estudio para la carrera de Arquitectura, teniendo en cuenta lo aconsejado por la Secretaría Académica, a cargo del Rector Dr. Humberto A. Riccomi y el Dr. Marcelo T. Rodríguez como secretario Administrativo. El mismo tiene como finalidad los siguientes puntos: A / Sustentar la formación del Arquitecto, partiendo de una definición de la disciplina como “práctica técnico –espacial, organizadora y materializante del entorno artificial del hombre (hábitat)”. B / Garantizar una adecuada preparación profesional, tendiente a la máxima adquisición de los valores científicos, técnicos y culturales sobre los que se asiente la disciplina y el método que permita su aplicación a los actos concretos de transformación del medio físico. C / Adelantar el desarrollo de una conciencia profesional, claramente ubicada en las posibilidades y límites de la realidad presente y profundamente enraizada en el contexto del espacio nacional y en las necesidades de su comunidad. 67 68 El mismo se implementará a través de 3 ciclos: Básico, de Formación y de Profundización y Orientación. El primero se denomina Nivel 1 y comprende cinco asignaturas, que se desarrollarán en un año lectivo. El segundo se denomina Nivel 2 y comprende cuatro asignaturas que se desarrollarán en cuatro años lectivos y el último se denomina Nivel 3 se da en un año lectivo, presenta diversas alternativas de cursado que se implementarán cada año según las necesidades que el medio pudiera plantear y los recursos, tanto humanos como materiales que se encuentran en la Facultad. Las diferentes alternativas para cursar Arquitectura 6 más un grupo de materias afines a la orientación que se eligió. Existen tres orientaciones: Diseño edificios de alta complejidad, Diseño urbano y construcciones y Tecnología. Las materias se dictarán por departamento: DEPARTAMENTO ARQUITECTURA Y PLANEAMIENTO que dictará: Arquitectura 1, 2, 3,4 y 5 PLANEA- MIENTO 1 Y 2 y optativa 1,2 y 3. El Departamento de IMPLEMENTACIÓN dictará las materias de Implementación 1, 2, 3 y 4. El Departamento de CONSTRUCCIÓN dictará: Introducción a la Construcción, Instalación en los edificios, Acondicionamiento de edificios, Materiales y Sistemas, Organización y producción de obras. El Departamento de Estructuras tendrá a su cargo el cursado de: MATEMÁTICA, FÍSICA y las ESTRUCTURAS 1, 2, 3 y 4. El Departamento de Historia de la Arquitectura tendrá a su cargo a Historia 1, 2 e Historia de la Arquitectura Argentina y Ciencias Sociales. El plan tiene como norma común que para promover al nivel inmediato superior, los alumnos tienen que tener aprobado la totalidad de las materias del nivel que cursan. En el segundo nivel para promoverse al año siguiente sólo podrán adeudar una asignatura, menos Arquitectura y esta debe estar regularizada, para los que no promovieron Arquitectura pueden cursar las otras materias correlativas a las que aprobaron. En agosto de 1977 se modifica el plan de Estudios, pasando la materia Ciencias Sociales al Departamento de Arquitectura y Planeamiento cambiando las horas en los departamentos como las condicionalidades de regularidad y determinando que todas las materias del departamento de Estructuras que estuvieran en diferentes años son correlativas entre sí. La última modificación al Plan se lleva a cabo en octubre de 1978 y consiste en suprimir el punto 3.3 de NORMAS COMUNES lo que permite cursar la materia de Arquitectura teniendo aprobado la Arquitectura anterior y regularizada las correlativas. En el Área Socio Cultural bajo el objetivo era que los alumnos adquieran conocimientos y actitud crítica, en relación a las manifestaciones contemporáneas del diseño; desarrollando en ellos una conciencia crítica para poder enfrentar así sus propios trabajos de forma más lúcida. Se trabajó con los textos de Benévolo sobre Historia de la Arquitectura, Nicolás Pevsner con su libro Esquema de la Arquitectura Europea y los orígenes de la Arquitectura Moderna y del Diseño de Bruno Zevi entre muchos otros. En el Área de Arquitectura en 1er.año la bibliografía utilizada tiene como autores a Sacriste, Le Corbusier, Gropius, Bonta, Alexander, Borgato y unos cuantos más. A partir de 2do.año se incorporan las revistas de 69 70 Nuestra Arquitectura, Summa, Conescal y los Documentos A y P. En 3er. año la temática de vivienda se acompaña con bibliografía como: Qué es la casa? de E. Sacriste, La organización social de la vivienda de G. Baker. La vivienda en el desarrollo económico-social del Ministerio de la Vivienda de España entre otros. Son el Team X, La Carta de Atenas, El Simposio de Portmouth, La ciudad no es un árbol, La ciudad de Lewis, los cuadernos Nueva Visión, las revistas Architectural Design, Review, Ekistics, Architecture D´Aujourd´Hui, junto a muchas más las que se van sumando a la lista, en el ciclo superior. Dentro del área Socio Cultural en las materias de Planeamiento los textos trabajados están divididos por temas en que se desarrolla la materia y entre los muchos que se exponen figuran los siguientes autores: E. Banfield, J. Friedman, Ch. Haar, M. Fuentes, G. Childe, E. Ullman, J.B. Mac Loughlin, entre muchos otros. Se suman a estos las fichas del IPRUL, las revistas Vivienda, Construcción y Planificación, Planificación Regional, revistas A y P, siendo estas sólo una pequeña muestra frente al total. A los libros men- cionados se agrega el contenido de las clases teóricas. En el Departamento de Implementación, en las tres materias, entre los autores de la bibliografía se encuentran: Scott, Kepes, Hesselgren, Arnheim, Bonta, Gull, Tedeschi, etc. El último mes del año 1976 se decide modificar el Consejo Asesor de la Facultad; la modificación se realizó en lo referente a la constitución del mismo, dispo- AÑO niendo que quedara integrado de la siguiente forma: a- Directores de los Departamentos de: Arquitectura y Planeamiento, Implementación, Estructuras, Construcciones e Historia de la Arquitectura. b- El Cuerpo de Coordinación Operativa Académica creado por resolución n° 5/76 C.D. e integrado de acuerdo con las resoluciones correspondientes y con los Secretarios Académicos y de Asuntos Estudiantiles. EL 28 de Diciembre de 1977 se aprueba el reglamento para la carrera del Doctorado Único de la Facultad de Arquitectura. El mismo se ve con la necesidad de ser ampliado para el año 1979 en su artículo 12° del reglamento, cuyo título es TRIBUNALES EXAMINADORES DE ASIGNATURAS OBLIGATORIAS Y ELECTIVAS, para permitir al doctorado que opte por cursar asignaturas en otras unidades académicas dependientes de esta Universidad u otras universidades, bajo los requisitos que sobre exámenes y evaluaciones rijan en dichas unidades, por lo que la Facultad de Arquitectura 1979 1978 1977 1976 INGRESANTES 172 172 216 687 ACTIVOS 1090 1150 1425 1281 ACTIVOS (que no se inscribieron) 21 PASIVOS 216 420 PASIVOS READMITIDOS 137 176 135 PASIVOS READMITIDOS CON EXAMEN 29 22 7 TOTAL 1411 1348 1783 TOTAL ACTIVOS 1520 1520 ALUMNOS EXTRANJEROS ACTIVOS EGRESADOS 469 389 2357 29 sin datos 101 58/59 112 71 72 reconocerá en lo concerniente a sistemas de exámenes, cursos y evaluaciones de las asignaturas correspondientes al régimen del doctorado Único que se dicten en otras unidades académicas de ésta u otras universidades, el régimen que impere en cada una de ellas. Igualmente se aceptará el sistema de exámenes para alumnos libres en las materias de la carrera del doctorado. Los siguientes datos estadísticos muestran el movimiento de alumnos en estos primeros años en la facultad:(ver cuadro) Los números reflejan el movimiento de los alumnos en la facultad en estos años, con la reducción de los ingresantes a la carrera al estar en vigencia el examen de ingreso. En el año 1979 fue necesario designar Delegado de esta facultad ante el consejo de Investigaciones de la Universidad, lugar que ocupó el Profesor Adjunto Arq. Enrique Mario Badano. Como así también se nombra a Directores de Departamentos; ya que los anteriores han caducado. Para lo cual el Decano Arq. Hugo R. Caggiano designa a: Arq. Jorge Manuel Rosado a cargo del Departamento de Arquitectura y Planeamiento al Arq. Roberto Eduardo Doberti director del Departamento de Implementación, quien al decir de la Arq. Bragagnolo en el libro 70° Aniversario de la creación de la carrera de Arquitecto en Rosario 1923-1993 se orientó a constituir una lógica del diseño, buscando un procedimiento que calificara la práctica proyectual, diferenciándola con respecto a otros modos de intervención del hábitat; Horacio A. Panvini, Director del Departamento de Construcciones; al Ing. Jorge Arturo Fernández Milani como Director del Departamento de Estructuras, al Arq. Rafael Eliseo José Iglesias a cargo del Departamento de Historia de la Arquitectura (entrando en licencia el 14 de setiembre de 1979 y hasta el 30 de Octubre de 1979, cubriendo ese cargo el Arq. Ernesto Nelson Yaqüinto; y por último al Arq. Martín Augusto de la Riestra profesor emérito, Director del Departamento de Graduados. Al mismo tiempo se determina la constitución del Cuerpo de coordinadores Académicos por el término de un año, para ello el Decano designa a los siguientes docentes: para 1er. Año al Tit. Arq. Serra Carlos Alberto y Suplente al Arq. Augsburger Edy René; para 2do. año Tit. al Arq. Felcaro José Luis y al sup. Arq. Bella Flavio Juan; para 3er.año Tit. al Arq. Quaglia Edmundo y suplente al Arq. Facchini Andrés Fausto para 4to. Año Tit. al Arq. Marchetti José María A. y sup. al Arq. López Carlos José, para 5to. Año al Tit. Arq. Concina Adolfo Oscar L. y sup. Al Arq. Seghesso Jorge Aníbal y para el último año como Tit. al Arq. Moliné y Lurá Anibal J. y suplente al Arq. Fernández Milani Raúl José. Para el comienzo del ciclo lectivo del año 80 se decide modificar la modalidad de la materia Arquitectura 6 suprimiéndola dentro de las materias que deberán ser aprobadas por Promoción. La cual ahora para su aprobación constará de una parte teórica y una parte práctica; con una planificación anual y una califica- ción conforme a la siguiente escala: 2 (aprobado), 3 (Bueno), 4 (Distinguido), 5 (Sobresaliente). Se podrán inscribir los alumnos que hayan alcanzado la condición de “regular” y el examen final se ajustará al Reglamento General de Exámenes. El ciclo lectivo del año 1980 comienza con las siguientes orientaciones en el nivel 3, el cual está planteado como un Ciclo de Profundización y Orientación. Estas orientaciones son tres a saber: ORIENTACIÓN EDIFICIOS ESPECIALES, ORIENTACIÓN DISEÑO URBANO Y ORIENTACIÓN BIOCLIMÁTICA RACIONALIZADA. Cada orientación está integrada por una asignatura Arquitectura 6, correspondiente a cada una de las orientaciones, cuya designación se le adicionará a los efectos de diferenciarlas, se les suma una asignatura electiva, definida por los dictados teóricos del resto de las orientaciones. Todos estos cambios estarán dentro del Reglamento General de Regularización y Realización de Trabajos Prácticos y el “Reglamento General de Exámenes”. 73 74 Debido a la labor que desarrolló durante el año 1979 el grupo docente que trabajó en el área de Pedagogía; la Secretaría Académica solicitó al Decano crear un nuevo departamento. Esto dio como resultado la creación del Departamento de Pedagogía; quedando la Facultad conformada por los siguientes Departamentos: Arquitectura y Planeamiento, Implementación, Estructuras, Construcciones, Historia de la Arquitectura, Graduados y Pedagogía. A partir de abril del año 1981 se deja sin efecto el Departamento de Pedagogía y en su defecto se crea el Servicio de Pedagogía cuya misión será orientar la formación docente , como objetivo de fundamental importancia en el quehacer académico; y contribuir a todo lo referido a la formación pedagógica de los docentes de la Facultad y en casos particulares de estudiantes: este servicio dependió directamente de la Secretaría Académica y desarrolló su acción en función de planes y objetivos presentados anualmente. A mediados del año 80 y por orden del Rector se procedió al cambio de la denominación del Departamento de Graduados a Escuela de Graduados. Y finalizando el mismo año la Secretaría Académica presentó un anteproyecto para instituir la carrera docente en la Facultad; bajo la consigna de… proveer y ordenar los esfuerzos tendientes a la formación de recursos humanos, promover la superación académica del cuerpo docente, brindar condiciones adecuadas para un mejor sistema de selección e incorporación de nuevos docentes, aportar un sistema de evaluación que complete el registro de actuación docente. Haciendo eco a este proyecto el Decano resolvió instituir un SISTEMA DE EVALUACIÓN PERMANENTE (SEP) de los docentes de la Facultad, este régimen se basó en un sistema de unidades elementales de evaluación. Las mismas estaban a cargo de comisiones evaluadoras integradas de la siguiente manera: para la docencia auxiliar a cargo del Director de Departamento y el docente profesor directamente vinculado con la tarea del auxiliar de docencia a ser evaluado: Para los Profesores titulares, asociados y Adjunto: por el Secretario Académico, el Director del Departamento y el Profesor coordinador del curso. Centros, Institutos y grupos de investigación Para el mes de Marzo del año 1981 se crea el CURDIUR (Centro Universitario Rosario de Investigaciones Urbanas y Regionales) este centro surge con la finalidad específica de alentar y promover la investigar referida a los núcleos urbanos creados y a crear y sus áreas territoriales, con especial énfasis referido a la ciudad de Rosario y su región como campo de análisis y contrastación. Los programas de investigación que se propongan y aprueben, instarán a fomentar el interés, formación de recursos humanos y esfuerzos interdisciplinarios. El fin es que el CURDIUR sea un ámbito de generación, confluencia y coordinación de las indagaciones que relacionadas con el mismo objetivo realice nuestro medio Universitario y presten, dentro de su especialidad el apoyo al medio social público o privado que lo requiera. Este centro de investigación dependió académicamente del Departamento de Arquitectura y Planeamiento de esta Facultad, la participación fue a través de su Director en la preparación y presentación de propuestas, la formación de recursos humanos, etc. En todo lo concerniente a relaciones con terceros dependió del Instituto de Arquitectura, entes públicos o privados, en lo referido a la formulación de condiciones, contratos, etc. El cargo de Director lo ocupó el Arq. Dr. Raúl José Fernández Milani. Funcionó bajo la premisa que todos los programas que se desarrollen en el centro sean volcados al área docente correspondiente para que sea conocido por los docentes y alumnos; a través de charlas, clases, publicaciones y otros medios de comunicación. El director posee la total libertad de estudio de las propuestas de trabajo, pudiendo consultar con funcionarios y docentes de la Facultad que luego serán consideradas por el Decano para su aprobación. 75 76 Por pedido del Departamento de Arquitectura y Planeamiento se crea un ente interdepartamental destinado a la investigación de problemas de la vivienda. Ante este requerimiento el Decano crea el Equipo para Estudios de la Vivienda (EPEV) cuya finalidad será profundizar el conocimiento del hombre en relación a los espacios que habita, el estudio y la aplicación de este conocimiento a los distintos aspectos y escalas que configuran el habitat humano, empleando la tecnología como instrumento para la materialización de estos procesos en relación a una realidad económica y financiera, y la evolución de todos estos factores como generadores de valores que posibiliten alcanzar distintos niveles de calidad de vida. Este organismo dependerá académicamente del Departamento de Arquitectura y Planeamiento y del Instituto de Arquitectura en todo lo concerniente a relaciones con terceros, entes públicos o privados, formulación de condiciones, contratos, etc. En la Facultad se podrá disponer la habilitación de un sector especial en los temas que van a abordar el Equipo. Los resultados de los temas trabajados serán volcados a los alumnos y docentes de la Facultad. Siguiendo en este camino en Mayo de 1981 se crea el “Centro de Estudios Bioambientales” (C.E.B) cuyas finalidades quedan expresas en el art.2° El centro creado tendrá como finalidades específicas propender al estudio y a la formulación de propuestas de diseño a requerimientos de problemas específicos planteados por el medio, así como a la divulgación de este enfoque con la finalidad de concientizar la necesidad de respetar el medio ambiente y obtener de él su máximo provecho. Para comenzar y por el término de dos años se designó al Arq. Elio Ricardo Di Bernardo que realiza esta función como extensión de su cargo. El desarrollo del mismo tiene los mismos alcances que los restantes institutos. Debido a que el “Instituto de Diseño Industrial” se perdiera en el traslado y transformación en Facultad a finales del año 1971 el cual fue creado en la Escuela de Arquitectura; y viendo la necesidad de cubrir aspectos referidos a la investigación y la enseñanza del diseño arquitectónico, cuales son la aplicación de las técnicas y principios de los procesos de industrialización, aun los más avanzados y de máximo grado de sofisticación, aplicados a las partes constitutivas de un edificio y a los elementos del equipamiento de los espacios, sean estos arquitectónicos o urbanos. Debido a esta carencia se decide en el mes de Mayo de 1981 crear el Equipo de Diseño Industrial de la Facultad de Arquitectura (EDIFA) La finalidad del mismo será el estudio, la investigación y experimentación del diseño de partes constitutivas de los edificios susceptibles de ser objeto de fabricaciones seriadas de los elementos que completan el diseño arquitectónico como configurantes de los espacios con relación a su uso y también los elementos funcionales y expresivos que complementan y otorgan calidad al paisaje urbano y natural… , también incluye en su finalidad la asistencia a terceros. Dependerá académicamente del Departamento de Implementación y trabajará en cogestión con los Departamentos de Arquitectura y Planeamiento y de Construcciones. El director lo designa el Decano a propuesta hecha por los directores de los 77 78 departamentos antes mencionados. El funcionamiento será igual al resto de los institutos. Por solicitud de Departamento de Estructuras el decano decide crear el “Laboratorio de Estructura” este tendrá por finalidad maquetas y modelos estructurales …tendientes a favorecer la mejor comprensión de los fenómenos de transmisión de cargas y distribución de tensiones en las estructuras , así como favorecer el desarrollo de investigación y producción de los distintos tipos de estructurales, a fin de enriquecer de esta forma la labor académica de formación de diseñadores que la facultad realiza… El Director del Laboratorio lo propondrá el del Departamento de Estructuras por un período de un año. Finalizando el año 1981 se va a crear otro centro el CIFAR (Centro de Investigaciones de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de Rosario). Integrado por el Decano, el Secretario Académico y los representantes de esta Facultad ante el Consejo de Investigación de la U.N.R. La finalidad del mismo consiste en implementar un organismo que atienda al ordenamiento de todos los aspectos relacionados con la investigación en el campo de la Arquitectura y el Planeamiento. Además tiene la tarea de coordinar los distintos departamentos y sus equipos o centros en los campos de investigación aplicada en la transferencia y en la acción en el medio, siempre con la directa dependencia del decanato. Debido al convenio suscripto por la Facultad y la Dirección de Asistencia Técnica de Gobierno de la provincia de Santa Fe; ya que estos trabajos se están desarrollando a un nivel de producción de resultados y posibilidades de aplicación lo cual supone la necesidad de vincularse con institutos, centros, reparticiones, para lograr así los fines propuestos. Se crea el GRUPO DE INVESTIGACIÓN EN APLICACIONES DE LA COMPUTACIÓN AL DISEÑO (GIACAD). La finalidad del grupo será el estudio, investigación y aplicación de los procesos de computación… susceptibles de expresarse gráficamente, y su aplicación a la investigación de las formas en general y al caso particular de las formas arquitectónicas… Dependerá del Departamento de Implementación en su aspecto académico y del Instituto de Arquitectura, en sus relaciones con terceros. El grupo puede prestar a su vez servicios a terceros dentro del ámbito universitario y del medio en general para mayor divulgación de las investigaciones y estudios que allí se realizan. Desde Mayo de 1982 y Mayo de 1983 se prorroga la designación del Arq. César Augusto Benetti Aprosio como Director del EPEV. Con el mismo criterio y hasta el mes de Junio del año 1982 se prorroga la designación del Arq. Roberto Eduardo Doberti como Director del Equipo de Diseño Industrial (EDIFA); y en forma ad honorem a la profesora Mercedes Alicia María Anido para realizar tareas de investigación en el grupo GIACAD. En Junio de 1981 el Decano define las orientaciones del Nivel 3, para el presente año lectivo. Este es 79 80 un ciclo de Profundización y Orientación y ellas son tres a saber: Orientación Diseño Edificios Especiales, Orientación Diseño Urbano y Orientación Diseño Bioambiental. Cada una de ellas está integrada por la asignatura Arquitectura 6 que comprenderá: la práctica (diferente en cada orientación) y la teoría que deberán cursar y aprobar para su promoción. En caso de no promover tendrá la posibilidad del examen final complementario. No se podrá aprobar la teoría independiente de la práctica. Para llegar a cursar el nivel 3, 6° curso lo harán teniendo aprobado Arq. 5 y todas las materias de cursos anteriores a excepción de una “indistinta” del curso precedente, pero debe estar regularizada. Por ser el último año pueden los alumnos elegir la práctica hasta en dos cursos lectivos en los cuales podrán desarrollar los dos aspectos fundamentales de la práctica que realizan una es “práctica de diseño con propuesta y conducción docente” y la otra “práctica de diseño auto propuesta con conducción docente”. Al término del curso lectivo el estudiante debe aprobar la primera instancia o debe recomenzar el próximo año. En este mismo año se define en un anexo las incumbencias que posee el título de Arquitecto para el desarrollo y trabajo profesional. El documento consta de dos anexos bajo los títulos de: función de arquitecto, formación del arquitecto, acción del arquitecto y determinación de las incumbencias. Finalizando el año dentro del Departamento de Implementación se crearon los talleres de Diseño Gráfico y de Medios Audiovisuales cada una con sus actividades, investigaciones y trabajos. Los directores los determinará el del Departamento de Implementación. De la misma forma va a surgir en el seno del Departamento de Arquitectura y Planeamiento el “taller de creatividad” con sus propios planteos y cuyo director será propuesto por el director del Departamento que le dio origen. Al comienzo del año 82 y imbuidos del clima de las “Primeras Jornadas Nacionales de Trabajo sobre Técnicas de Evaluación de Conjuntos Habitacionales” se decidió crear la Secretaría Permanente de Evaluación Habitacional (S.P.E.H.) para seguir estudiando estas problemáticas. Esta secretaría actuaba en colaboración con la Subsecretaría de Estado de Desarrollo Urbano y Vivienda del Ministerio de Acción Social. La misma fue dirigida por una comisión ejecutiva integrada por: un representante del Curdiur, uno del EPEV, otro del Equipo de Arquitectura y Planeamiento y dos representantes de la Subsecretaría de Estado de Desarrollo Urbano y Vivienda. Para mediados del mismo año se crea el grupo de trabajo Control de Calidad (C.C.) dependiente del Departamento de Construcciones. La finalidad del mismo fue la investigación tecnológica acerca de los distintos materiales de construcción en su comportamiento, uso, etc.; con un director a cargo que lo designó el departamento de Construcciones del que dependió en la faz académica y del Instituto de Arquitectura cuando se trataba de relaciones con terceros. Conferencias de personajes extranjeros Se declaró huésped oficial de la Facultad de Arquitectura al señor Arquitecto Alan Colquhon, el cual dictó la conferencia sobre el tema HISTORICISMO Y ARQUITECTURA MODERNA. También visitaron la facultad Broadbent y Cristopher Jones; junto a estos personajes y los viajes al extranjero de algunos docentes de la casa trajeron las teorías del Arq. Aldo Rossi a las cátedras. Muy cerca de la democracia y por el término de seis meses se renuevan los siguientes cargos: Titular 1er año: Arq. José Luis Bermúdez, Adjunto: Arq. Raúl Alberto Budano. Titular de 2do año Arq. José Luis Felcaro, Adjunto Arq. Andrés Fausto Facchini. Titular 3er año: Arq. José Luis Felcaro, Adjunto Arq. José María Ernesto Cuesta. Titular 4to.año Arq. Adolfo Oscar Luis Concina, Adjunto Arq. Sushilla Iris Albertina Bali. Titular 5to año Arq. Adolfo Oscar Luis Concina, Adjunto Arq. Hugo Jorge Alberto Escobar. Titular 6to año Arq. Jorge Manuel Rosado, Adjunto Arq. Horacio Antonio Panvini. El decano propone al H. Consejo Superior el llamado a concurso y la designación de jurados de los profesores ordinarios en los departamentos y especialidades que se detallan: Departamento de Implementación, especialidad: Morfología Arquitectónica; cargos:-Profesor Titular: un cargo dedicación: Exclusiva. Profesor Titular: tres cargos Dedicación: simple. Departamento de Estructuras, especialidad: Diseño de Estructuras; cargos: Profesor Titular; cuatro cargos dedicación: Simple. Departamento de construcciones, especialidad: Infraestructura de servicios con énfasis en el diseño y aplicación de recursos energéticos renovables y materialización constructiva a nivel de edificios y conjuntos urbanos; cargo: Profesor Titular; un cargo Dedicación Semiexclusiva Especialidad: Diseño y acon- dicionamiento de los edificios (luz, calor, sonido) con énfasis en la aplicación de recursos energéticos (docencia e investigación), cargo: Profesor Asociado: un cargo Dedicación Exclusiva Departamento de Arquitectura y Planeamiento Especialidad: Diseño Arquitectónico (enseñanza y coordinación académica), cargo: Profesor Titular: diez cargos Dedicación Semiexclusiva. En Octubre del año 1982 se deroga el artículo 16° de la resolución n° 66/80 C.A. del 05/ 11/ 1980 el cual establece que los cargos docentes de los miembros integrantes de las comisiones de evaluación no podrán concursarse después de dos años de haber dejado de pertenecer a las mismas esta disposición rige en forma interna para la Facultad. Soplan aires de cambio, el clima reinante aumenta las posibilidades de opiniones, de diversidad en los pensamientos políticos, aparecen los partidos junto a las multitudes de alumnos que ya ingresan a la facultad en forma irrestricta cambiando la fisonomía de los pasillos de la facultad, a ellos se suman los profesores echados que van regresando y comienza un período de adaptación, la democracia está ahora al frente de los acontecimientos. 81 82 vuelta a la democracia: 1983-2006 Arq. Mariela Borromeo Docente-investigadora FAPyD A partir de 1983, con el fin de la última dictadura militar en Argentina y la recuperación de la democracia, las universidades también registraron una transición democrática iniciándose el camino hacia la normalización de la vida institucional universitaria. Las facultades fueron intervenidas y regularizadas, recuperando la autonomía y el cogobierno estudiantil, retomándose el debate de los contenidos académicos y los planes de estudio. El gobierno de la universidad en la época de la dictadura estuvo al mando de Humberto Ricomi desde agosto de 1976 hasta setiembre de 1983, año en que presentó su renuncia como consecuencia de la huelga de hambre que realizaron los estudiantes en defensa de la democratización universitaria. El Ing. Renard asumió en su reemplazo hasta la asunción del primer Rector normalizador del gobierno democrático, Dr. Artemio Luis Melo. El gobierno del Dr. Raúl Alfonsín asumió el compromiso de normalizar la Universidad y sancionó la Ley 23068 que acogió los principios reformistas adoptando para su normalización el Estatuto de la Universidad Nacional del Litoral de 1966, hasta tanto pudiera dictar el propio. El proceso de normalización finalizó con el llamado a elecciones en el mes de abril de 1986, con la reunión de la Asamblea Universitaria que elegiría al primer Rector de la UNR Juan Carlos Millet, quien mantuvo ese cargo por dos períodos consecutivos (1986-1990, 1990-1994), y con el establecimiento del primer Consejo Superior con representación de los claustros docente, estudiantil y graduado; luego lo sucedieron en el cargo de Rector Raúl A. Arino, 1994- 1998 y Ricardo Suárez, 1998-2003, reelecto para el período 2003-2007. En este período los ideales democráticos invocados se manifestaron concretamente con la democratización del acceso, reestableciéndose el acceso directo, la democratiza- 83 ción de los órganos de gobierno inspirados en la Reforma de 1918 y en el pluralismo del claustro docente, de los Programas y la bibliografía utilizada. 84 El 26 de setiembre de 1984, la Facultad de Arquitectura Planeamiento y Diseño de la UNR, declara abierta la primera sesión del Consejo Académico Normalizador Consultivo, presidido por el decano normalizador Arq. Sujer Gorodischer, que reemplazará en sus funciones de gobierno al anterior Consejo Académico Consultivo Provisorio, que fuera creado en marzo de 1984, en forma transitoria, atendiendo al petitorio de la Comisión de docentes declarados cesantes, en el cual, éstos solicitaron que no se constituyeran los consejos académicos Normalizadores Consultivos en las distintas facultades, hasta tanto se produjera la reincorporación de ese personal. En marzo de 1984, por debido al incremento de ingresantes al primer año de la Carrera y considerando la falta de personal docente para garantizar una adecuada relación de enseñanza, siendo imposible un llamado a concurso teniendo en cuenta el período de organización en que se encuentran las autoridades universitarias y siendo necesario efectuar una selección entre los posibles interesados para lograr una mayor jerarquización y eficiencia del claustro docente, se resuelve aprobar el Reglamento del Curso de Introducción a la Docencia Auxiliar y llamar a inscripción durante el mes de marzo a aspirantes en los distintos Departamentos existentes designándose Comisiones Asesoras y de Evaluación en cada Dpto. para tal fin. En diciembre de ese mismo año, se creó una Co- misión ad-hoc para considerar el Plan de estudios de la Carrera de Arquitectura designándose como miembros docentes de la misma a los Arqs. Capettini, Bragos, Fernández de Luco, Yaqüinto, Bragagnolo, Di Bernardo, Utges, Boix, Floriani, Salvay, Del Río y como estudiantes al Sr. Torrent y a las Srtas. Salomón y Saenz, incorporándose en marzo de 1985 las Arqs. Stábile, Chazarreta y Feugeas y el Arq. Bártola (en reemplazo del Arq. Di Bernardo en licencia) y los estudiantes Schillman, Degiovanni y Pecoraro. Dicha Comisión elaboró numerosos informes al Consejo que constituyeron informes de avances para la formulación definitiva del Plan, que se implementa durante 1985. En sesión del Consejo Académico Normalizador realizada en noviembre de 1984, se leen los informes sobre el tema Plan de Estudios confeccionado por el Dpto. de Construcciones, las conclusiones del Encuentro Nacional de Jóvenes Arquitectos organizado por el Centro de Arquitectos de Rosario y la propuesta del centro de estudiantes, esbozándose diferentes opiniones sobre el perfil del profesional Arquitecto en relación a las exigencias que la sociedad demanda. En sesiones posteriores se discuten otros tantos temas referidos a la estructuración de turnos y criterios de evaluación frente a la masividad de estudiantes, homologación del nuevo plan de estudio con el Plan vigente, los contenidos didácticos y pedagógicos de las distintas asignaturas, etc. En el mes de abril de 1985, por Res. 060/85 ante la necesidad de reestructurar y producir ajustes y modificaciones en los contenidos de las áreas de conocimiento y asignaturas de la carrera se propone elevar al Consejo Superior la homologación del Plan de estudios para la Carrera de Arquitectura, que comenzará a regir a partir del curso lectivo 1985. El flamante Plan homologado finalmente pos Res. 151/85 del Consejo Superior plantea como finalidad producir la formación del arquitecto, asumiendo la práctica disciplinaria específica en tanto producción, transformación y materialización del entorno físico-artificial de una comunidad en un momento histórico determinado, avanzando en la producción de conocimientos técnicos-científicos, para que el profesional egresado adquiera un amplio bagaje instrumental que lo habilite para una activa preocupación por los problemas de su tiempo y por la búsqueda de soluciones eficaces para los mismos. Propone como alcances del título de Arquitecto lo referido a la Programación, el Proyecto, la ejecución del ambiente físico-artificial de una comunidad en todas sus escalas, así como de los elementos de su equipamiento. Como características generales se destaca el concepto de concebir al ámbito universitario y a la Facultad de Arquitectura específicamente como espacio de producción intelectual que lejos de cualquier dogmatismo o concepto de “verdad” asegure la pluralidad propia de una estructura democrática como única forma de no coartar su hacer. Se propone la necesidad de llevar adelante la práctica proyectual de y en la ciudad y el territorio, partiendo del reconocimiento directo de cada realidad, en tanto práctica social y cultural íntegra, por encima de límites catastrales. Dicha especificidad es imposible de abordar desde un único campo de acción, proponiéndose en tal sentido el establecimiento de AREAS concebidas como núcleos disciplinarios autónomos fundados en la existencia de una elaboración disciplinaria autónoma con objetos y métodos de estudio que les son propios. Este Plan propone se esta manera una forma compleja, pero abierta, articulada, no autocrática sino dialogante, funcional al conocimiento colectivo, que es considerada la única forma hoy posible de mantener 85 86 actualizada la enseñanza y de llevar adelante el proceso educativo. La organización curricular propuesta contempla la organización de un ciclo Básico instrumental y un Ciclo Superior de carácter formativo y reflexivo, funcional a la maduración crítico propositiva. Las Diferentes Áreas, planteadas como sistematización del pensamiento pueden abordarse desde distintas opciones teóricas e ideológicas presentándose de este modo como una pluralidad; se establece que cada área podrá optar por la modalidad de “Taller” como asociación de cátedras, cuya particularidad reside en el hecho de presentarse en función de una secuencialidad de cursos (en “vertical”), que se resuelve por la articulación de tres instancias fundamentales: la teórica, la pedagógica y al temática, constituyéndose en laboratorios que permiten formalizar cada etapa secuencial como la concatenación de una continuidad teórica puesta a prueba en la práctica. La formulación, el avance y producción de conocimientos implica en esta óptica, la erradicación del tradicional concepto de “transmisión de conocimientos” en base a agentes catalogables como “emisor” y “receptor”. Las áreas propuestas por el nuevo Plan son: Teoría y Técnica del Proyecto arquitectónico, presenta como rasgo distintivo la construcción de una teoría, es decir de un procedimiento instrumental, que esté fundada en la experiencia proyectual arquitectónica. A esta Área pertenecen las asignaturas: Introducción a la Arquitectura, Análisis Proyectual I y II, Taller de Materialidad I, II y III, Geometría Descriptiva Aplicada, Diseño de Estructuras I y II, Proyecto Arquitectónico I y II. Teoría y técnica Urbanísticas, plantea analizar los diversos roles y márgenes de acción, en función de lo urbano, que caracterizan a cada uno de ellos, orientando el estudio de las materias urbanísticas a partir de la observación de su dimensión operativa, es decir del estudio de las instituciones urbanísticas y de las principales prácticas técnico-administrativas a ligadas a ellas. Esta Área abarca las asignaturas Introducción al Urbanismo, Análisis Urbanístico e intervención Urbanística. 87 88 Historia de la Arquitectura, cuyo objetivo consiste en interpretar el transcurrir histórico desde el presente, definiendo como campo privilegiado de acción la problemática de la arquitectura en el país. En esta Área se desarrollan Historia de la Arquitectura I, II y III. Tecnología de la Producción Edilicia, propone como objetivo desarrollar la capacidad de relacionar y operar, a través de una evaluación intencionada, el conocimiento sistemático de los procedimientos constructivos con aquellos factores que caracterizan la producción edilicia. Comprende las asignatura Producción Edilicia I y II. Física aplicada a las construcciones, cuyo objetivo consiste en proveer al alumno los instrumentos y nociones que le permitan definir y controlar las variables que hacen a la naturaleza material de las obras y a la adecuación y confort de los ambientes construidos. Involucra las asignaturas Taller de Física I y II. Matemáticas: plantea como objetivo potenciar el desarrollo de los procederes intelectuales a través de la lógica y la intuición, el análisis y la construcción, la generalidad y la individualidad, brindando un amplio campo de experimentación en su permanente interacción. Comprende el desarrollo de Matemáticas y de Informática. Teoría del Conocimiento: plantea como objetivo afrontar aquello que precede a todas las áreas que integran el Plan de Estudios, no en sentido temporal sino en su carácter fundacional, es decir, las bases mismas del pensamiento. Esta asignatura se dictaría en principio, durante el Primer año de la Carrera. Cabe mencionar que en todas las Áreas, como culminación del Ciclo Superior, se proponen Seminarios Conclusivos que posibiliten la confrontación de lo producido por las cátedras, abordando desde la especificidad las cuestiones que la Facultad defina como relevantes en relación al referente externo. Definidas las áreas, la distribución de asignaturas correspondientes a cada una de ellas en relación al tiempo de duración de la Carrera, queda definida en el siguiente cuadro: 89 90 En julio de 1986, se reglamenta el criterio de homologación entre el Plan de Estudios 1977 y el Pan de estudios 1986 y se aprueba un régimen de correlatividades de transición para los años 1985 y 1986: Por esos años la bibliografía enumerada en los Programas aprobados por Consejo Directivo de las distintas asignaturas menciona entre sus autores a Norberg Schulz, Ludovico Quaroni, Marina Waismann, Rob Krier, Kevin Lynch, Leonardo Benévolo, Bruno Zevi, Nicolaus Pevsner, Gordon Cullen, Gregorri Vittorio, Aldo Rossi, Robert Venturi, Reyner Banham, Marchan Fiz, Manfredo Tafuri, Alexander, etc.; revistas y publicaciones como Summa Historia, sumarios, Architectural Design, Architecture D´Aujourd´Hui por citar algunos de los innumerables autores y bibliografías difundidas en el período. Los principios fundamentales planteados por este Nuevo Plan fueron analizados y difundidos en una Mesa Redonda pública que se realizó por única vez durante el 2003 en la que participaron miembros de los diferentes claustros que fueron protagonistas en su elaboración, produciéndose un documento difundido en diversa publicaciones, donde se rescatan los aspectos positivos del Plan y su vigencia a través del tiempo. A partir de 1985 y sobre la estructura definida por el nuevo Plan, se comienzan a convocar a los primeros Concursos Nacionales del período democrático, aprobándose unos meses más tarde las Normas Particulares para la Provisión de cargos de Profesores por Concurso en la Facultad. En dichas Normas se establecen las características a valorar en los aspirantes a ocupar cargos de profesores: “… el docente de la Facultad de Arquitectura, planeamiento y Diseño, deberá asumir como tarea y compromiso fundamental, la producción intelectual en tanto formulación, avance y profundización de conocimientos científicotécnicos en relación con “el ambiente artificial” como referente de reflexión y su transformación cualitativa a través de la Arquitectura. Deberá estar plenamente dispuesto a sumarse a una estructura democrática, alejado de cualquier dogmatismo o concepto de “verdad”, asegurando la pluralidad de enfoques. Deberá dominar lo específico de su área, poseerá formación pedagógica y dispondrá de conocimientos de nuestra realidad, valores indispensables que le permitan conocer el medio social, posibilitando a través de la formación de profesionales ser parte del cambio y desarrollo para el logro del mejoramiento de nuestra sociedad”… En agosto de 1985 el Arq. Fenner, miembro del Consejo Normalizador, anuncia que el Rector Dr. Artemio Melo ha aceptado la renuncia presentada por el Sr. Decano Normalizador Arq. Sujer Gorosdicher con fecha 30 de julio de 1985; esta decisión de carácter indeclinable se había anunciado en la reunión del Consejo Académico Normalizador del 12 de julio como consecuencia de los hechos acontecidos en durante el “cartelazo” organizado por el Centro de Estudiantes de Arquitectura reclamando la falta de agilización en la resolución de cuestiones políticas pendientes referentes a docentes repudiados, creación de cátedras paralelas, etc. Posteriormente en la siguiente sesión, el Arq. Fenner 91 92 informa que a partir del 16 de agosto tiene la confirmación del Decanato de la Facultad, no habiéndose realizado hasta el momento la toma de posesión, por lo cual sigue siendo Secretario Académico a cargo, y a raíz de ello pide que se nombre un presidente para no vulnerar la reglamentariedad de la reunión, designándose al Arq. Capettini. A principios de setiembre el Arq. Fenner anuncia que ha asumido oficialmente el decanato de la Facultad y reafirma el compromiso que tiene con el Arq. Villalba y Cavalli, Sec. académico y de Asuntos Estudiantiles, para llevar a cabo la normalización, la democratización y la reforma universitaria, con cuyos principios adhirieron. En abril del año 1986, finalizado el período Normalizador, luego de realizadas las elecciones en Sesión especial por Consejo Directivo de la Facultad de Arquitectura, Planeamiento y Diseño de la UNR a los fines de proceder a elegir Decano y Vice-Decano de esta Facultad, se designa al Arq. Armando Torio como Decano de la Facultad por el término de 4 años y al Arq. Ernesto Yaqüinto como Vicedecano. Por ese año, se aprueba también el Reglamento de adjudicación de cargos docentes y el Reglamento de otorgamiento de cargos interinos, suplencias y partidas temporarias y se auspicia la creación del Centro de Graduados de la Facultad. En abril del año 1986 luego de realizadas las elecciones en Sesión especial por Consejo Directivo, a los fines de proceder a elegir Decano y Vice-Decano de esta Facultad, conforme al escrutinio realizado se designa al Arq. Armando Torio como Decano de la Facultad por el término de 4 años y al Arq. Ernesto Yaqüinto como Vicedecano. Por ese año, se aprueba también el Reglamento de adjudicación de cargos docentes y el Reglamento de otorgamiento de cargos interinos, suplencias y partidas temporarias y se auspicia la creación del Centro de Graduados de la Facultad. En septiembre de 1986 la Asamblea reforma el Estatuto estableciendo el gobierno cuatripartito, que incorporaba seis consejeros no docentes al Consejo Superior que quedaba integrado por once decanos, once consejeros docentes, once consejeros estudiantes, seis consejeros graduados y seis consejeros no docentes. Los Consejos Directivos quedaban integrados por ocho consejeros docentes, ocho consejeros estudiantiles, cuatro graduados y cuatro no docentes. Por primera vez, entonces, desde su creación la Universidad Nacional de Rosario contó con sus órganos de gobierno en pleno funcionamiento. primera vez los decanos integrantes de las facultades de Arquitectura y acordaron constituirse en consejo permanente conformándose el CODFAUN (Consejo de Decanos de las Facultades de Arquitectura de Argentina). En esa instancia se trataron los temas de plan de estudios e inserción de las facultades en el medio, se definieron conocimientos y capacidades de la actividad profesional, proponiéndose fijar conocimientos comunes y básicos en lo referente a planes de estudio de las facultades, trabajando en la problemática del medio devolviendo a la comunidad elaboraciones sobre esos problemas. De esta forma, a partir de 1988, con la reforma del Estatuto, se incorpora el claustro no docente y se equipara la representación estudiantil a la docente. Asimismo se incluye dentro del claustro docente a Jefes de Trabajos Prácticos y Ayudantes de Primera, concursados. En 1987, se acepta la propuesta para la creación del taller de informática de la facultad (T.I.A) (que queda in efecto por res. 095/96) y se inicia la aprobación y realización de diferentes convenios con otras facultades y organismos municipales y provinciales (EPEV, Fac. de Humanidades y Artes, CURDIUR, etc.), que continuarán suscribiéndose en años posteriores. Por ese mismo año, en la UNL se reunieron por 93 94 Ese mismo año, desde el punto de vista de la infraestructura, se habilita la ciudad universitaria de Rosario y en abril de 1989 se inauguran nuevas aulas para radicar la FAPyD y la Facultad de Cs. Políticas y relaciones internacionales. Las obras de remodelación se continuaron y entre los años 1998 y 2002 se implementó la urbanización del CUR. En abril de 1990, se reelige y designa al Arq. Armando Torio como Decano de la Facultad por el término de cuatro años y al Arq. Ernesto Yaqüinto como Vicedecano conforme al escrutinio realizado en las elecciones realizadas en Sesión especial por Consejo Directivo de la Facultad. En sesión del Consejo Directivo de mayo de 1990 se conformó la Comisión ad hoc que entenderá en el tratamiento del tema de Aprobación de Incumbencias profesionales del título de Arquitecto por el Ministerio de educación y justicia. Dicha Comisión estuvo integrada por los siguientes consejeros: Asorey, rabino, Utges, García y Ghirardi. Secretario académico Arq. Boix. Otro hecho de importante trascendencia por esos años está vinculado a la creación del Colegio de Arquitectos Independientes de la Provincia de Santa Fe. En distintas resoluciones del Consejo Directivo dictadas en 1990 se apoya la creación de dicho organismo y en setiembre del mismo año se envía una solicitud a la cámara de Diputados para aprobación de la Ley de Creación de dicha institución. El 8 de octubre de 1991 es promulgada la Ley 10653 de creación del Colegio de Arquitectos de la Provincia de Santa Fe que unifica en un solo organismo de Ley de la actividad gremial con el control de la matrícula y la fijación de honorarios. Anteriormente, desde 1958 se había conformado el Centro de Arquitectos de Rosario que funcionaba desde 1985 en la sede de calle Belgrano 650. Comienza nuevamente a vislumbrarse por entonces, la necesidad de reformar el Plan de estudios vigente desde 1985. En junio de 1991 el secretario Académico Arq. Fernando Boix en una nota dirigida al Decano, Arq. Armando Torio y de acuerdo con lo establecido en el Consejo Directivo, propone con respecto a este tema el siguiente tratamiento: “Que la revisión del Plan no supone renunciar a los fines, objetivos y contenidos que sustenta, sino que trata de perfeccionar su implementación. Estudiar y definir la situación de materias aún no implementadas. Definir los mecanismos para la adecuación y revisión de las asignaturas cuyos dictados actuales no responden a lo establecido por el Plan. Reubicación de las materias con la finalidad de obtener un mejoramiento académico perfeccionando su relación de correlatividad dentro de la currícula, facilitando así al alumno alcanzar los objetivos de las mismas en 95 96 virtud de un mejor desarrollo, de sus conocimientos y de sus prácticas proyectuales. Lograr una mejor distribución de materias en cada curso de manera que no se produzcan situaciones de gran densidad a través de un mayor equilibrio de materias anuales y de tiempos semanales. Obtener un mejoramiento académico, otorgando tiempos adecuados a los dictados teórico/prácticos de las materias para lo cual se será imprescindible replantear las asignaciones horarias y concretarlas en valores reales”. Se propone que la revisión del Plan se discuta en el Seno del Consejo Directivo fijando los lineamientos generales y se trate oportunamente por una Comisión ad hoc que analice particularmente las distintas situaciones invitándose al cuerpo docente a participar con sus opiniones de modo que el resultado final tenga el compromiso y acuerdo de todos los integrantes de este proceso pedagógico. En setiembre de 1990 se aprueba por unanimidad la propuesta decanal, respecto a la implementación de la asignatura “Teoría del Conocimiento”. Posteriormente, en noviembre de 1991, el Consejo Directivo aprueba la implantación del dictado de dicha asignatura estableciéndose que durante el año 1992 se dicte en dos períodos cuatrimestrales, donde en el segundo se operen mejoras y ajustes respecto del primero y se integren los cursos con estudiantes de los tres turnos en proporción a determinar. Finalmente en setiembre de 1992 se suspende el dictado de clases del 2°cuatrimestre de dicha Asignatura, para la formación del equipo docente y para ajustar los programas con la incorporación de los aspectos informativos indispensables, estableciéndose que antes de finalizar le período ordinario de sesiones deberá presentarse un informe explicitando contenidos y modalidades de la materia para su dictado en forma regular en 1993. También a partir del ciclo lectivo 1993, ingresa a la Currícula de la Carrera la materia idioma Moderno (modalidad lecto-comprensiva), estableciéndose que dicha asignatura tendrá carácter obligatorio para los ingresantes 1993 y extra curricular para ingresantes anteriores; se dispone además que la mencionada asignatura no tiene correlatividad y puede ser aprobada durante el transcurso de la Carrera. En 1994, luego de las elecciones realizadas en Sesión Especial del Consejo Directivo se designa por un nuevo período de cuatro años al Arq. Daniel Vidal como Decano de la facultad de Arquitectura y al Arq. Carlos Galli como Vicedecano por un período de cuatro años. Durante su gestión, en 1997, finalmente se aprueba la reforma del Plan de Estudios (res. 150/97; 180/97 y Modificatoria 200/97) con vigencia retroactiva al año 1993. Los cambios se enmarcan en un conjunto de modificaciones particulares que pueden entenderse como ajustes del Plan y no como una modificación significativa Dichos cambios se produjeron exclusivamente en las asignaturas del Ciclo Básico de la Carrera: Las asignaturas Materialidad I, II y III de 2º, 3º y 4º año se corrieron a 1º, 2º y 3º año de la carrera respectivamente, quedando ubicadas por completo en el denominado Ciclo Básico. También la asignatura de Geometría Descriptiva Aplicada, perteneciente al Ciclo Básico, se articuló en dos materias cuatrimestrales (Geometría Descriptiva Aplicada I y II), la primera de las cuales se dicta en el primer cuatrimestre de 1er año y la segunda en el 2do año. Del mismo modo la asignatura Teoría del Conocimiento se articuló en dos materias cuatrimestrales en 1ero y 2do año. Se eliminó la Materia “Informática” y los “Seminarios Conclusivos”, que eran de carácter optativo para 97 98 los alumnos del último año de la carrera; cabe aclarar que esta eliminación fue sólo nominal, pues dichas actividades curriculares no se habían implementado en los años transcurridos desde la aprobación del Plan 1985. De esta modo, la distribución por Áreas de las distintas asignaturas queda determinada de la siguiente manera: CICLO BÁSICO: 1° AÑO: Introducción a la Arquitectura Taller de Física I Taller de Materialidad I Matemáticas Teoría del Conocimiento I Geometría Descriptiva Aplicada I 2° AÑO: Análisis Proyectual I Taller de Materialidad II Taller de Física II Teoría del Conocimiento II Geometría Descriptiva Aplicada II Historia de la Arquitectura I 3° AÑO: Análisis Proyectual II Taller de Materialidad III Diseño de Estructuras I Introducción al urbanismo Historia de la Arquitectura II CICLO SUPERIOR: 4° AÑO: Proyecto Arquitectónico I Diseño de Estructuras II Análisis Urbanístico Historia de la Arquitectura III Producción Edilicia I 5° AÑO: Proyecto Arquitectónico II Intervención Urbanística Producción Edilicia II 6° AÑO: Proyecto Arquitectónico III Idioma Moderno: se cumplimentará en el transcurso de la carrera Dos años antes de la aprobación del nuevo Plan, en julio de 1995, el Congreso había sancionado la Ley de Educación Superior; en 1993, se había aprobado la Ley Federal de educación que creó la EGB y Enseñanza Gral. Básica y el Polimodal eliminando los niveles primario y secundario (esta Ley fue reemplazada en el año 2006 por la Ley Nacional de Educación que reintrodujo nuevamente los niveles primario y secundario), y la Ley de transferencia de los establecimientos educativos que todavía dependían de la Nación a las correspondientes administraciones provinciales. La Ley de Educación Superior, aún hoy vigente, estableció una nueva manera de relación entre el Estado y las Universidades, que además de financiarlas, les exigió que cumplieran ciertos requisitos y luego evaluaba los resultados. Se creó por entonces y con esta finalidad la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU), que sirvió también como organismo de control a las Universidades privadas. Algunos vieron y criticaron con esta ley la reducción de la autonomía universitaria con la implementación de un sistema centralizado de control; otros en cambio la consideraron como un instrumento para elevar y equiparar el nivel académico de las distintas casas de estudio. Esta ley buscó enmendar un antiguo problema en la vida universitaria argentina: el énfasis en el perfil profesional de los egresados en desmedro de la investigación. Frente a esta situación e intentando modernizar el sistema universitario se alentó la creación de posgrados, maestrías y doctorados, se estableció el incentivo docente para los docentes investigadores y se creó una agencia de Promoción Científica para la financiación de proyectos. Estos cambios deben contextualizarse dentro del período de modernización neoliberal que caracterizó la década de 1990 durante el gobierno menemista, donde muchos arquitectos, luego de un período de estancamiento del sector de la construcción, se vieron implicados en proyectos de gran envergadura debiendo contar con los instrumentos técnicoscientíficos para responder a las necesidades “reales” de la sociedad y del mundo, perfilándose los inicios de un 99 100 proceso de internacionalización que se ha afianzado considerablemente en los últimos años de gestión. En este sentido, en setiembre 1989 se aprueba en la Asamblea Universitaria la implementación del Programa de Carrera docente que determina el sistema de ingreso, promoción y evaluación docente; en 1996, el Consejo Directivo de la facultad aprueba el reglamento interno de dicho Programa, cuya revisión y seguimiento se centralizó en la Universidad Nacional de Rosario a partir del año 2000. En noviembre de 1995, se aprobó el Curso de Orientación para Ingresantes, que comienza a dictarse en marzo de 1996, y se ha mantenido vigente hasta el presente. Dicho curso fue propuesto por la Secretaría de Asuntos Estudiantiles en coordinación con el servicio de Orientación Vocacional de la UNR, con el objetivo de que los ingresantes puedan reafirmar su vocación hacia la carrera acercándose los contenidos de la arquitectura. En abril de 1998, se aprueba la suscripción del convenio Marco de Mutua colaboración entre la Facultad de Arquitectura y la Fundación Arquitectónica para el desarrollo de actividades destinadas a la investigación profesional, análisis de realizaciones de estudios profesionales nacionales y del exterior, becas, concursos, exposiciones, publicaciones, congresos, seminarios, debates, conferencias, presentaciones de profesionales extranjeros y nacionales, régimen de pasantías, Premio Arquitectónica. También por ese mismo año, se aprueba el proyecto de creación de la maestría en Planificación urbano territorial presentado por el Arq. Héctor Floriani. En abril de 1998, se propone al Consejo Superior, la aprobación del Reglamento de la Carrera del Profesorado en Arquitectura, suspendiéndose posteriormente la inscripción a la misma durante los años 2000 y 2001. Durante la gestión del Arq. Alberto Santanera, que es designado Decano de la Facultad a partir de octubre de 1998 hasta el 2003, conjuntamente con el Arq. Elio Di Bernardo como Vicedecano, en noviembre de 1999, viendo la necesidad de implantar el Doctorado en arquitectura e incorporar a la Facultad el Programa de Consolidación Académica de la UNR, se propone al Consejo Superior la aprobación del Plan de estudios y reglamento del Doctorado en Arquitectura. Ya hacia finales de la década del ´90 la UNR había establecido el Doctorado de Consolidación Académica para estimular la obtención del Título de Doctor siguiendo un procedimiento de validación y reconocimiento de la Trayectoria académica. En noviembre del 2000 se designan los miembros de la Comisión Académica de Doctorado que intervendrán en la evaluación de los inscriptos al doctorado de consolidación académica; en agosto del 2001 se establecen las condiciones y funciones del Cargo de Director académico del Doctorado en Arquitectura aprobándose durante el 2003, los programas y docentes a cargo de las asignaturas, iniciándose desde enton- ces un proceso de afianzamiento de dicha Carrera que culmina en el 2011 con el reconocimiento y aprobación de CONEAU . En diciembre de 2000, se autoriza al Secretario de Posgrado a proseguir con las gestiones del curso de Posgrado de actualización en Higiene y Seguridad en obras de Arquitectura a fin de que pueda ponerse en marcha a principios del 2001, cuya elaboración ha sido encomendada al Arq. Oscar Suárez. A mediados de 2001, se aprueba el Programa de Postítulo en Diseño y Comunicación Visual. En abril de 2003, finalizado el período de gestión del los Aqrs. Santanera y Di Bernardo, se elige al Arq. Héctor Floriani y al Arq. Marcelo Barrale como Decano y Vicedecano respectivamente hasta el 2007. Durante su gestión, en marzo de 2004 se aprueba la Carrera de Especialización en Planificación Urbano 101 102 Territorial, designándose en agosto del 2005 al Arq. Floriani como director de la misma. Por ese mismo año se designa al Arq. Raúl Fernández Wagner como director de la Carrera de Posgrado “Gestión local del hábitat”. En noviembre de 2004 se aprueba el convenio Marco de Cooperación entre la Escuela de Arte y Arquitectura de la Universidad del Salvador (USAL) y la FAPyD. Ese mismo año se suma la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile, al convenio realizado durante la gestión del Arq. Santanera con la Escuela Técnica Superior de Arquitectura y paisaje de Burdeos, para la concreción de un Workshop de proyecto y eventual intercambio de docentes y alumnos. Se organizaron además durante el 2004, Seminarios de Integración e Intercambio Curricular entre asignaturas, tanto del Ciclo Básico como del Ciclo Superior, que dieron lugar a documentos que fueron difundidos entre los docentes. En el año 2005, se concretaron unas Prejornadas sobre “Enseñanza de la Arquitectura” como instancia de preparación para la participación de la FAPyD en el Congreso ARQUISUR 2005, y durante los años 2006 y 2007, se desarrollaron variadas reuniones de trabajo en relación a esta problemática. A partir del año 2007, se crea la Comisión de Autoevaluación para la Acreditación de la Carrera, surgiendo de la misma el Grupo de trabajo del Plan de estudios en el cual se ha ido gestando y consolidando el actual “Plan 2008”, cuyo análisis y evaluación acerca de las modificaciones implementadas serán seguramente objeto de estudio de alguna investigación e interpretación futura. Concluyendo este relato, es necesario remarcar que las palabras contenidas en estas páginas constituyen un intento más de rescatar y resaltar algunos de los innumerables acontecimientos que marcaron cambios significativos o nuevos rumbos en la enseñanza y formación de los Arquitectos en Rosario en el período comprendido entre 1956- 2006; período que por su cercanía y extensión en el tiempo, resulta difícil sintetizar, sin dejar escapar otros tantos hechos, documentos y personalidades que han sido y siguen siendo autores y protagonistas de este fragmento y de esta historia. Como sujetos historiadores cada uno podrá construir a partir de estas páginas su propio relato, podrá rescatar algún momento del pasado en el que siendo protagonista, espectador o nuevo lector, se encuentre identificado, sin olvidar que el pasado es, por supuesto, siempre infinitamente más de lo que cualquier discurso puede narrar y reconociendo, que los procesos no existen de antemano por la simple relación de los hechos, sino que necesitan una visión que los configure y una escritura que los teja1. 1 María Fernanda Palacios, “Introducción” en Mariano Picón-Salas, Monte Ávila Editores, 1984. 103 bibliografía general 104 Actas de reuniones del Consejo Directivo de la FAPyD de la UNR. Años 1956-2006. Actas de reuniones del Consejo Académico Consultivo Normalizador de la FAPyD de la UNR. Actas de reuniones del Consejo Académico Consultivo Transitorio de la FAPyD de la UNR. Resoluciones de Decano de la FAPyD de la UNR. Resoluciones del Consejo Directivo de la FAPyD de la UNR. Plan de estudios 1955. Plan Experimental 1971. Proyecto Plan de estudios 1973. Plan de estudios 1985. Plan de estudios 1997. Plan de estudios 2008. - BRAGAGNOLO, Ebe et Alt; “Una Reseña Histórica”, En “70° Aniversario de la Creación de la Carrera de Arquitecto en Rosario 1923 -1993”. Edición de la Facultad de Arquitectura, Planeamiento y Diseño. U.N.R, Rosario, 1993. - BRAGAGNOLO, Ebe; “Arquitectura y Poder en Rosario”; Impresión digital Librerías La Cubana- División Gráfica, Rosario, 2003. - Diccionario de Arquitectura en la Argentina. Estilos, obras. Compilador: J. F. Liernur y F.Aliata. Edit. Diario de Arquitectura de Clarín, Buenos Aires, 2004. - Referencias históricas de la evolución institucional de la UNR, sin datos, en http://www.e-universitas.edu.ar - La agenda del Consejo superior de la Universidad Nacional de Rosario: Entre la construcción de las rutinas democráticas y la defensa de la autonomía. Ponencia II Encuentro Nacional “La Universidad como Objeto de Investigación”. Centro de Estudios Avanzados (CEA - Universidad de Buenos Aires -UBA), Noviembre 1997, en http://www.naya.org.ar/ - Sánchez Martínez, Eduardo (2003). La legislación sobre Educación Superior en Argentina. Entre rupturas, continuidades y transformaciones. Documento de Trabajo N° 102, Universidad de Belgrano. Disponible en la red: http://www.ub.edu.ar/investigaciones/dt_nuevos/102_sanchez_martinez.pdf - Clarín Bicentenario Argentina 200 Años; edición literaria a cargo de José Aleman, 1° edición, Buenos Aires, Arte Gráfico editorial Argentina, 2010. - Archivo personal de la Arq. Ebe Bragagnolo. agradecimientos Agradecemos a Hugo Escobar, Alfredo Molteni, Amalia Jalignier, Ernesto Janda, Cristina Argumedo, Adolfo Concina, Marcelo Barrale, Fernando Boix, Manuel Fernández De Luco, Laura Santuillan, Horacio Panvini, Aníbal Moliné, , Elio Di Bernardo, Rogelio Molina, María Inés Quilhot, Juan Manuel Rois, César Benetti Aprosio, Sujer Gorodischer, Eda María Simich, Oscar Suarez, Adolfo Fenner, Mito Solari, Susana Giordanengo, Eduardo Martínez, Juan Scapigliati, Leonor Heker, Diana Fernández, Hugo Menéndez, Hugo Yannarelli, Leila Giglione, Delia Spagnolo, María Segovia, Carlota Werbin, Luis Di Vito, Ricardo Baraldi, Mario Segovia Mayer, Raúl Caviglia, Santiago Edmundo Racca, Selfor Bortolotto, Pablo Fleider, Alejandro Preis, Oscar Goitía, Daniel Perone, Eduardo Petitti, Víctor Musura, Agustín Fragapane, Guillermo Voss, Mariela Borromeo, Paula Lapissonde, Silvia Solian, Ezequiel Quijada, Nicolás Campodónico, Pedro Soria, J. Manuel Rois, Mauro Grivarello, Ricardo Olevar, Martin Guarneri, Mónica Cornaglia, María González, Gabriel Fraire, Ariel Ibarra, al personal de la Oficina de Despacho, de Consejo Directivo, de Secretaría Académica de la FAPyD y a todos los que colaboraron con su testimonio y su tiempo. 105 imágenes 106 PÁGINA AÑO AUTOR MATERIA CÁTEDRA TEMA 8 1949 NN ARQUITECTURA 4 ARQ. SOLARI VIGLIENO UNA MUNICIPALIDAD 13 1949 NN ARQUITECTURA 4 ARQ. SOLARI VIGLIENO UNA MUNICIPALIDAD 16 1951 OSCAR SUAREZ ARQUITECTURA 1 UN PABELLÓN CIRCULAR 23 1951 OSCAR SUAREZ ARQUITECTURA 1 CUERPO CENTRAL DE UN EDIFICIO 28 1950 MARIO SEGOVIA MAYER / CAVIGLIA ARQUITECTURA 4 ARQ. SOLARI VIGLIENO GRAN ESTADIO OLÍMPICO 33 1950 NN ARQUITECTURA 5 ARQ. SOLARI VIGLIENO UNA MUNICIPALIDAD 40 1969 DIANA FERNANDEZ / HUGO MENENDEZ 43 1961 OSCAR SUAREZ 44 1969 ADOLFO FENNER TALLER ARQ. BENETTI APROSIO CABAÑA EN LA COSTA 52 1974 SANCHEZ / MOLINA COMISION 4 ARQ. STTODART ESCUELA RURAL 57 1974 SANCHEZ / MOLINA COMISION 4 GRUPO HABITACIONAL AUDITORIO TRASLADABLE 58 1974 SANCHEZ / MOLINA COMISION 4 GRUPO HABITACIONAL AUDITORIO TRASLADABLE 60 1974 HUGO YANNARELLI COMISIÓN 4 - NIVEL 3A 64 1976 CARRA/GIORDANENGO COMISIÓN 6 NIVEL 2B 69 1982 EDUARDO PETITTI COORDINACION 4TO Y 5TO AÑO 75 1977 EDUARDO MARTINEZ ARQUITECTURA 3 76 1978 OSCAR GOYTIA DISEÑO URBANO /(6TO NOCHE) 79 1977 EDUARDO MARTINEZ ARQUITECTURA 3 85 1983 VICTOR MUSURA ARQUITECTURA 3 87 1985 AGUSTIN FRAGAPANE 91 1986 NORBERTO SISCA 94 1986 NORBERTO SISCA 99 1994 NICOLAS CAMPODONICO ANALISIS PROYECTUAL 1 MOLINE CENTRO DE DISTRITO 100 2005 LUCIA GALARETTO / GABRIEL STIVALA ANALISIS PROYECTUAL 2 MOLINE ESCUELA GRUPO HABITACIONAL CARPA AUDITORIO TRASLADABLE AREA ARQUITECTURA GRUPO HABITACIONAL SECTORES URBANOS ARQ. JALIGNIER GRUPO HABITACIONAL VIVIENDA/COMERCIO ARQ. JALIGNIER GRUPO HABITACIONAL CARLOS GALLI PATIO DE LA MADERA CAMPING GRUPO HABITACIONAL GRUPO HABITACIONAL