LA EDUCACIÓN EN TIEMPOS DE CORONAVIRUS EN GUATEMALA La pandemia de enfermedad por coronavirus (COVID-19) ha provocado una crisis sin precedentes en todos los ámbitos. En la esfera de la educación, esta emergencia ha dado lugar al cierre masivo de las actividades presenciales de instituciones educativas en más de 190 países con el fin de evitar la propagación del virus y mitigar su impacto. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) ha planteado que, incluso antes de enfrentar la pandemia, la situación social en la región se estaba deteriorando, debido al aumento de los índices de pobreza y de pobreza extrema, la persistencia de las desigualdades y un creciente descontento social. En este contexto, la crisis tendrá importantes efectos negativos en los distintos sectores sociales, incluidos particularmente la salud y la educación, así como en el empleo y la evolución de la pobreza. Por su parte, la UNESCO ha identificado grandes brechas en los resultados educativos, que se relacionan con una desigual distribución de los docentes, en general, y de los docentes mejor calificados, en particular, en desmedro de países y regiones con menores ingresos y de zonas rurales, las que suelen concentrar además a población indígena y migrante. En el ámbito educativo, gran parte de las medidas que los países de la región han adoptado ante la crisis se relacionan con la suspensión de las clases presenciales en todos los niveles, lo que ha dado origen a tres campos de acción principales: el despliegue de modalidades de aprendizaje a distancia, mediante la utilización de una diversidad de formatos y plataformas (con o sin uso de tecnología); el apoyo y la movilización del personal y las comunidades educativas, y la atención a la salud y el bienestar integral de las y los estudiantes. La pandemia de COVID-19 en Guatemala, como en otros países, ha agravado los problemas sociales, la educación es uno de ellos. El presidente Alejandro Giammattei declaró el 14 de marzo el cierre de los establecimientos educativos tanto públicos como privados. El 31 de marzo el Mineduc inició un programa televisivo para que se pudiera dar continuidad a clases de preprimaria, primaria y secundaria, pero no todos los estudiantes tienen acceso a telecomunicaciones y tecnología. Varios docentes están impartiendo sus clases mediante las diferentes plataformas, pero muchos otros están perdiendo su rol como profesores sólo mandando las tareas sin explicar mayor contenido, haciendo que muchos de los estudiantes nos sintamos preocupados y estresados ya que al final entregamos las tareas, pero no estamos aprendiendo al 100%. Algunos de los problemas son: Insuficiente dominio de las habilidades informáticas en los estudiantes. La motivación del alumno puede ser complicada. Si en la enseñanza presencial ya es complicado poder estimular actitudes emotivas positivas que mejoren el rendimiento académico, en la enseñanza a distancia el problema adquiere dimensiones mayores. Se reducen el tipo de relaciones sociales que se establecen en las aulas tradicionales. La disponibilidad de las computadoras en tiempo y espacio. Según el censo de la población realizado en 2018 en Guatemala, el 68% no tiene acceso a internet y el 78% no cuentan con una computadora. Solo el 16% de los estudiantes del sector público tiene acceso a internet, lo que limita su acceso a la formación en línea durante la crisis. Dentro de los programas que el gobierno implementó sobresalen como temas positivos: el aumento de la inversión en la alimentación escolar, que se ejecuta de forma descentralizada, transfiriendo recursos a las organizaciones de padres de familia, OPF. Estas reciben 4 quetzales diarios por cada estudiante de la preprimaria y primaria, contándose con menús regionalizados que buscan cumplir con una adecuada nutrición, ya que muchos de los niños y niñas era el único alimento que recibían al día, y sin una buena alimentación hay un déficit de atención. También destaca el arranque de la estrategia para atender a la niñez de los 0 a los 4 años, que incluye la implementación de centros comunitarios de desarrollo infantil temprano. El Ministerio de Educación, como parte de las medidas por la amenaza de la pandemia y la necesidad de contención del virus, implementó un Plan Integral de Prevención, Respuesta y Recuperación; en el cual la tercera fase implica el retorno a clases, es incierto cuándo podrá realizarse, lo que se ha adelantado es que al suceder será importante cumplir con medidas de distanciamiento social y de sanitización de los ambientes escolares. Es entonces urgente realizar mejoras a la infraestructura escolar, priorizando la disponibilidad de agua en todos los establecimientos educativos. Entre los retos principales en esta emergencia están la necesidad de ampliar la disponibilidad de internet para beneficio de millones de estudiantes, ya que según el último censo solamente dos de cada diez hogares cuentan con acceso a conectividad. A la par de ello, es necesario un plan para que los estudiantes, y principalmente del área rural, puedan contar con dispositivos tecnológicos, como tabletas o teléfonos, que les permitan acceder a las diversas plataformas y recursos digitales para continuar su formación en casa de forma efectiva. Asimismo, es necesario apoyar a los docentes con tecnología y con capacitación en metodologías de formación a distancia y en apoyo psicosocial para poder orientar mejor a sus estudiantes en esta etapa, y luego les ayuden en el retorno a clases, evitando a su vez la deserción escolar. Los padres de familia requieren, a su vez, mucha información para saber cómo apoyar a sus hijos en su aprendizaje, identificando recursos, sitios y aplicaciones educativas; conversando y haciendo juegos, que contribuyan al desarrollo de destrezas desde el hogar. La educación en línea tanto a docentes como a estudiantes nos ha sido complicada, hemos tenido que liderar con problemas de conexión, y se requiere de una buena tecnología y a lo que llamo buena tecnología es tener un ordenador y wifi, pero, aunque ambas cosas son cada vez más habituales no todo el mundo tiene la posibilidad de tener un ordenador y wifi. Sé que esto no me sucede únicamente a mí, le está pasando a la mayoría de los estudiantes, tenemos demasiadas dudas sin resolver, las clases virtuales tienen un tiempo muy corto de duración, todo es explicado muy rápido y, muchas otras tareas son enviadas sin darnos mayor explicación, haciendo que nos frustremos todo el tiempo porque sentimos que no estamos aprendiendo.