UNIDAD 5 LA DOMINACIÓN EUROPEA DEL MUNDO. EL IMPERIALISMO COLONIAL 1. IMPERIALISMO Y COLONIALISMO A partir de 1870, los países europeos se lanzaron a la conquista del mundo, necesitaban mercados donde dar salida a los productos resultado de la Primera Revolución Industrial y encontrar nuevas y abundantes materias primas, además de solucionar el problema del excedente de población, resultado del crecimiento demográfico del siglo. Fue una época repleta de cambios en la ciencia, en la técnica, en las mentalidades, en las condiciones de vida, las costumbres; pero también, en la estrategia de las potencias en el ámbito mundial. Una época que llamaba a los europeos a la aventura en a tierras desconocidas. En 1914 la mayor parte de las tierras y de la población del planeta estaban bajo control europeo: Europa dominaba el mundo. El imperialismo es un fenómeno complejo que se desarrolla a mediados del siglo XIX y se extiende hasta la actualidad y que se caracteriza por las relaciones de dominio que las potencias desarrolladas ejercen sobre países o territorios menos desarrollados. Aunque estén bajo la influencia y la manipulación de la nación poderosa en el imperialismo las naciones sometidas permanecen formalmente autónomas. Por el contrario, el término colonialismo se refiere al poder absoluto que una nación ejerce sobre otro territorio. Es la posesión directa de tierras conquistadas por las potencias industriales, en las que ejercen un control político, económico y social total. La nación más desarrollada ejerce la violencia para someter a la colonia, un ejemplo de ello es la esclavitud, 2. LA EXPANSION DE EUROPA a) Causas del colonialismo Las principales cusas fueron de carácter económico: - La creación de una economía global que unió a los países desarrollados y a éstos con el mundo subdesarrollado. La necesidad de materias primas (oro, caucho, maderas) y fuentes de energía (carbón, petróleo) que provocaron una especialización industrial de la metrópoli, abastecida por las colonias. El incremento en la demanda de los productos coloniales: azúcar, café, té, cacao, como resultado del crecimiento de la población. La inversión de capitales en lugares sin competencia de otros países. La búsqueda de nuevos mercados para solucionar la superproducción, dar salida a los excedentes y asegurar los beneficios. La crisis de 1873: la superproducción provocó un descenso de los precios y la aplicación de medidas proteccionistas, dando lugar a una paralización del mercado internacional y lanzando a las potencias europeas a una carrera por la conquista de mercados ultramarinos. Además de las económicas, otras causas fueron: - - La presión demográfica, producida por el descenso de la mortalidad y el mantenimiento de un alto índice de natalidad. Europa duplicó su población en un siglo y familias enteras se vieron obligadas a emigrar a otros continentes para buscar mejores condiciones de vida. Para controlar el acceso a determinadas regiones con intereses comerciales como rutas marítimas (Gibraltar) o zonas de aprovisionamiento de materias como el carbón en las Bermudas (razones estratégicas). Razones de prestigio: para ser consideradas grandes potencias,tanto en las relaciones internacionales como en la propia opinión pública nacional, al tener colonias. Para atenuar los problemas y el descontento internos, practicando la exaltación patriótica. Por racismo: la raza blanca se consideraba superior a las otras razas del mundo y debía mantener su dominio sobre ellas. Razones religiosas: para convertir a los paganos, llevando a cabo una actividad misionera a gran escala. Por la pasión exploratoria del hombre del siglo XIX, lo que produjo importantes descubrimientos geográficos y que dio lugar a nuevos héroes que eran seguidos de cerca por la opinión pública, como Livingstone, Stanley o Amundsen. b) Características de la colonización La ocupación de nuevos territorios no presentó excesivas dificultades teniendo en cuenta las diferencias profundas entre el desarrollo armamentístico y militar de los colonizadores y el de los pueblos indígenas. Los avances técnicos se pusieron al servicio de la conquista e incluso se crearon cuerpos de ejércitos indígenas que conocían mejor el territorio y que fueron peones fundamentales para los invasores. La población se dividió en: - Dominantes: los colonizadores, son minoría, extranjeros, de religión cristiana, de economía potente, técnicas avanzadas, y ejercen su superioridad racial y cultural. - Dominados: los colonizados, son mayoría, indígenas, no cristianos, materialmente inferiores, carentes de técnica, con una economía agraria de subsistencia, que subordinarán sus intereses a los de la metrópoli. c) Modelos coloniales Tras la empresa de conquista, la organización del territorio podía revestir varias modalidades, según las características del territorio ocupado y los intereses de la metrópoli: - - - Colonias: En ellas, la metrópoli impone sus funcionarios, sus instituciones y organiza la administración. Se podrían distinguir dos tipos: o Colonias de explotación: con población mayoritariamente indígena, la administración estaba a cargo de la población europea, funcionarios civiles y militares enviados por la metrópoli, que implantaban un gobierno colonial con exclusión total de los indígenas. Se explotaban los recursos naturales a través de empresas occidentales (compañías privadas). Este fue el modelo preferente para el África negra. o Colonias de poblamiento (dominios): la población era mayoritariamente europea, y se establecía de forma definitiva en la colonia. El modelo administrativo y de gobierno estaba calcado del europeo y tendía progresivamente a la autogestión. Este modelo se implantó en Canadá, Australia, o la República Sudafricana que contaron con parlamento y gobierno propio, aunque la política exterior era competencia de Londres. Protectorados: Se aplicaba cuando en un territorio existía una administración indígena suficientemente organizada. Se mantenía el gobierno indígena que se encargaba de la política interior, mientras que la política exterior y el ejército dependían de la metrópoli. Este modelo se aplicó en gran parte de la India. Concesiones: eran ciertas ventajas o monopolios comerciales que las potencias europeas imponían a países demasiado extensos pero con un poder político organizado, como ocurrió en China, obligando al gobierno de Pekín a abrir sus puertos al comercio occidental. Al mismo tiempo, obtenían la cesión de puertos estratégicos, como el de Hong Kong a Gran Bretaña. d) El reparto del mundo A partir de 1870 el número de países en busca de nuevos territorios aumentó, a Francia y Gran Bretaña se le unieron Rusia, Alemania, Italia, Bélgica, España, Portugal, EEUU y Japón. En este proceso se pueden diferencia dos etapas: - - Desde 1870 a 1885: las grandes protagonistas fueron Francia y Gran Bretaña. En África, las potencias ocuparon las costas con valor estratégico o comercial, sin plan de conquista hacia el interior; en esta etapa se pusieron las bases de la futura expansión. Al mismo tiempo aparecieron figuras de políticos colonialistas que crearon una opinión pública favorable a esta expansión como Disraeli (primer ministro británico) o el rey Leopoldo II de Bélgica. El enfrentamiento entre las potencias surgió por la concurrencia de varios países en torno al Congo (Zaire). Ante la compleja situación, Bismarck (canciller alemán) convocó la Conferencia de Berlín, estableciéndose la preponderancia belga sobre la zona, aunque la orilla norte del río quedó en manos de Francia. A Alemania se le cedió Togo, Tanzania, Namibia y Camerún, también se acordó la libertad de comercio en la cuenca del Congo y la libre navegación en los ríos Níger, Congo y Zambeze. Se establecieron las formalidades que había que cumplir para que se considerara efectiva la ocupación de una zona: debía comunicarlo a las otras potencias de inmediato y establecer en el territorio una organización capaz de hacer respetar sus derechos. Desde 1885 hasta 1914: la entrada de otras potencias en el reparto colonial hizo necesario la firma de acuerdos bilaterales para completarlo, entrando en juego Rusia, con la construcción del transiberiano, Italia, que fracasaría en el intento de ocupar Abisinia (Etiopía) o Japón que entró en una guerra con China de la obtuvo Formosa (Taiwán). Fue entonces el continente asiático el que sufrió una ocupación progresiva: solo mantuvieron su independencia Siam (Tailandia) o Afganistán al convertirse en estados barrera, por separar zonas de interés colonial para varios estados. En los años 90 comenzaron aproliferar los conflictos entre las potencias, planteándose una competencia entre las grandes (Gran Bretaña y EEUU) y las pequeñas (España, Portugal, Italia): o El enfrentamiento entre Portugal, Francia y Gran Bretaña por el intento portugués de unir Angola y Mozambique que fracasó ante la amenaza inglesa de romper relaciones con Lisboa. o El conflicto protagonizado por Francia y el Reino Unido cuando en Sudán (Fachoda) entraron en pugna sobre los derechos de sus respectivas naciones sobre la cuenca del Nilo. Francia se retirará y Gran Bretaña tendrá un imperio continuo desde Egipto a Sudáfrica. o El enfrentamiento entre España y EEUU por la isla de Cuba, que significará la pérdida de nuestras últimas colonias ultramarinas. e) Consecuencias del imperialismo colonial Los cambios producidos en las sociedades indígenas fueron profundos y afectaron a todos los ámbitos: económicos, sociales, ideológicos, intelectuales y religiosos, de formas de vida, costumbres y demográficos. Consecuencias económicas: - Las colonias se convirtieron en centros de explotación sistemática de los recursos naturales al servicio de la metrópoli. - Se propició el monocultivo de plantación (café, tabaco, te, arroz, cacao...). - Se creó una economía extractiva cuyo objetivo fue la obtención de minerales, poniéndose trabas a la industrialización. Consecuencias demográficas: - La introducción de adelantos médicos y de higiene, redujo la incidencia de algunas enfermedades endémicas y epidémicas (el paludismo, la lepra) produciendo un descenso de la mortalidad y creciendo la población. - En algunos casos fueron los europeos los que llevaron nuevas enfermedades desconocidas en las colonias. Consecuencias sociales: - Se destruyeron las estructuras tribales y apareció una nueva estratificación social: Los grupos dominantes fueron las élites gobernantes y los terratenientes. La burguesía medianade funcionarios y comerciantes se instaló en el nivel más alto aprovechándose de los beneficios de la colonización.La mayoría de la población era campesina, sometida a una dura explotación colonial. Los pequeños y medianos propietarios perdieron sus tierras y sufrieron proletarización; al que se prohibió la sindicación. - Se decretó la abolición de la esclavitud, pero se implantó, en muchos casos, el trabajo forzado (África). - Se practicó el exterminio de pueblos indígenas o se les confinó en reservas. - Los indígenas sufrieron segregación, marginados en barrios especiales en las nuevas poblaciones. - A veces, se fomentaba el odio entre las tribus para debilitarlas con guerras. Consecuencias culturales: - Transformación de las ideas, aspiraciones y valores de la sociedad indígena, con la pérdida de identidad de estos pueblos. - Desarrollo de las ideas de superioridad de la raza blanca sobre las demás, lo que generó una actitud de desprecio por las culturas indígenas. - El analfabetismo se redujo levemente, ya que no existió una planificación educativa y, en algunos casos, se impidió, manteniendo a la población indígena al margen de toda formación. - Se repartieron los territorios sin tener en consideración a las civilizaciones o las tribus, que quedaban separadas o unidas a la fuerza según los intereses de los colonizadores. - Se generó un interés por las formas de espiritualidad oriental: budismo. - Las vanguardias europeas se inspiraron en las formas artísticas de Japón, África y Oceanía (Cubismo). 3. LAS GRANDES POTENCIAS EUROPEAS a) Inglaterra El siglo XIX estuvo marcado por el largo reinado de Victoria I (1838-1901). En esta etapa el Imperio británico vivió una época de prosperidad material y bienestar económico, basada en una política económica y comercial de gran libertad, siendo la época dorada del librecambismo. Se caracterizó por la estabilidad de los gobiernos gracias al sistema parlamentario bipartidista: Conservadores (Torys) y Liberales (Whigs) se alternaban en el poder. La reforma electoral amplió el sufragio y se modernizó la administración estatal y municipal. A pesar de la prosperidad, Gran Bretaña también encontró dificultades interiores y exteriores: La Guerra de Crimea Ocurrida entre 1853 Y 1856, fue un enfrentamiento entre el Imperio Ruso y el Imperio Turco, apoyado por Francia e Inglaterra, una guerra que frenó los deseos expansionistas de Rusia hacia el Mediterráneo y Oriente Medio y la última cruzada para recuperar los Santos Lugares. Fue la última guerra antigua en la que combatieron “caballeros” tal como se hacía en tiempos de Napoleón, pero también la primera guerra moderna con nuevas armas, más eficaces. También en Crimea aparecieron por primera vez las enfermeras de campaña, con el cuerpo creado por Florence Nightingale. Al mismo tiempo W. H. Russell, con sus crónicas en el Times, inauguró el periodismo de guerra. Tras la derrota y la pérdida de Crimea, Rusia se avino a firmar la paz, por la que perdió sus posesiones en el Danubio y Besarabia. Pero la gran perdedora del conflicto fue Turquía, que pasó a depender de la “protección” y la ayuda económica de Francia y Gran Bretaña. El levantamiento hindú (la Guerra de los Cipayos) Los cipayos eran soldados nativos de la India que estaban al servicio de la Compañía de la Indias Orientales. Se sublevaron en 1857 cuando se difundió el rumor de que los cartuchos de un nuevo fusil utilizado por el ejército, estaban cubiertos de grasa de vaca o de cerdo (algo prohibido para los hindúes y musulmanes respectivamente); en el fondo estaban los abusos cometidos por la Compañía, la expropiación de tierras y los cambios administrativos. La revuelta fue sofocada pero, como consecuencia, la Compañía fue disuelta y el territorio pasó a ser administrado por la Corona Británica. Las huelgas obreras y proliferación del sindicalismo La clase obrera se reunía en organizaciones burguesas-republicanas, marxistas revolucionarias o anarquistas con el fin de conseguir el sufragio universal masculino, la mejora de sus condiciones laborales y la jornada de 8 horas. El medio fundamental de actuación era la huelga general revolucionaria. El movimiento sufragista A finales del Siglo XIX las mujeres continuaban excluidas de la toma de decisiones y comenzaron a organizarse para reclamar ante sus gobiernos el derecho que les era negado. Emmeline Pankhurst, creó el movimiento femenino conocido como las "suffragettes" (Unión Social y Política de las Mujeres), tenía como objetivos lograr la aprobación del voto femenino y mejorar las condiciones de vida de las mujeres en Gran Bretaña. Para lograrlo, las sufragistas apelaron a las huelgas de hambre, que fueron duramente reprimidas por las autoridades carcelarias británicas. El problema de Irlanda Conquistada en el siglo XVII, dominaba una minoría protestante de origen británico sobre la mayoría irlandesa y católica. En 1801 se unieron los dos parlamentos y crearon el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda. Los campesinos irlandeses se veían obligados a pagar impuestos a la Iglesia anglicana. Tras la crisis agraria de 1847, los irlandeses comenzaron a reclamar un parlamento propio. La autonomía se le concedió en 1914, aunque esta no se aplicó hasta después de la I Guerra Mundial. b) Alemania Quedó unificada en 1871 y proclamado el II Reich con Guillermo I. El artífice de la nueva Alemania fue el canciller Otto von Bismarck. Se convirtió en una federación de 25 estados sobre los que Prusia mantenía su hegemonía. El nuevo Estado se sustentó sobre un fuerte crecimiento demográfico, una revolución agraria y un importante desarrollo industrial, convirtiéndose Alemania en potencia económica en competencia con Gran Bretaña. En 1890 Bismarck dimitió al no encajar con la agresiva política exterior de Guillermo II, finalizó una época en la que la política exterior estuvo marcada por el establecimiento de alianzas internacionales contra Francia. c) Imperio austrohúngaro El Congreso de Viena (1815) restauró a los Habsburgo, estando el país en manos del Canciller Metternich, que hizo frente a las revoluciones liberales y a los nacionalismos, aunque la revolución de 1848 supuso su marcha y la llegada de Francisco José I. Se elaboró una nueva constitución con un gobierno parlamentario y Francisco José I fue coronado rey de Hungría, constituyéndose el Imperio Austro-Húngaro (Compromiso de 1867). Se inicia una etapa liberal caracterizada por el desarrollo económico y el impulso del comercio, la industria y los transportes. La convivencia en el Imperio fue difícil al no concederse a los eslavos los mismos derechos que a húngaros y austriacos. d) Imperio ruso Se encontraba bajo el poder de la dinastía de los Romanov desde el siglo XVI. Los zares gobernaban despóticamente mediante leyes dictadas por ellos mismos y mantenían la autoridad sobre el ejército. En el siglo XIX Rusia se expandió a través de Siberia llegando al Pacífico y se anexionó territorios de Asia central. Entre sus pretensiones estaba la de buscar una salida al Mediterráneo, lo que provocó la intervención rusa en los conflictos balcánicos previos a la I Guerra Mundial. e) Francia La restauración borbónica en la persona de Luis XVIII (1815) dio paso al gobierno de Luis Felipe de Orleans (1830) y tras la revolución de 1848, a la II República con Luis Napoleón Bonaparte como presidente, pasando a ser el II Imperio desde 1852, cuando mediante un golpe de estado se proclamó emperador. Sus objetivos fueron: Mantener el orden, modernizar la agricultura, construir grandes infraestructuras (carreteras, canales, puertos), generalizar la Banca y el crédito e invertir en industria y comercio. Todo ello provocó el crecimiento y desarrollo del país, que se convirtió en exportador de capitales y empezó a ser una potencia colonial, dándose a conocer gracias a la celebración de las exposiciones internacionales, símbolos de prosperidad del país. El II Imperio mostró la Francia del nacionalismo y de la expansión de la burguesía, intervino en la política internacional, convirtiéndose en la inspiradora y sostenedora de los movimientos nacionalistas, sobre todo del italiano. La Guerra Franco-prusiana (1870) significó la derrota de Napoleón III en Sedán y su abdicación, proclamándose la III Republica. Se creó un gobierno de “Defensa Nacional” frente a los alemanes, que firmó la paz y el fin de la guerra en 1871. El gobierno convocó elecciones a una Asamblea Nacional en la que estaban representadas diferentes opciones, eligiendo para el poder ejecutivo a Adolfe Thiers que se propuso reconstruir las instituciones francesas sin entrar en la cuestión del tipo de régimen. Este periodo de transición se caracterizó por la inestabilidad de los gobiernos y la corrupción de los políticos. En 1877 se aprobó un conjunto de leyes, que sin llegar a establecer una constitución republicana, descartó la monarquía. Los problemas más graves a los que se enfrentó la Francia de finales del XIX fueron: - La Comuna de París (1871), la ciudad de París se sublevó proclamando un gobierno municipal libre encabezado por los obreros y la pequeña burguesía. Se acusó a la I Internacional de estar detrás de ella y de la violencia que se desató. Fue derrotada miliarmente y los miembros del gobierno de la Comuna fusilados. - El intento fallido de construcción del canal de Panamá. La sociedad francesa promotora de su construcción quebró en 1881 y se destaparon casos de soborno a parlamentarios para que votasen a favor de conceder créditos a dicha sociedad. - El asunto Dreyfus, en el que un militar francés, hijo de un judío, fue acusado con pruebas falsas de espionaje a favor de Alemania y traición. Fue deportado a la Guayana francesa y años después se demostró su inocencia. - El boulangismo (de Georges Boulanger) fue un movimiento radical ultraconservador que promovía el revanchismo hacia Alemania. Aunque desapareció, dejó su huella para reavivarse en los años previos a la I Guerra Mundial. 4. LAS RELACIONES INTERNACIONALES: LA EUROPA DE BISMARK Y LA PAZ ARMADA Otto Von Bismark, canciller alemán, se convirtió entre 1872 y 1888 en el árbitro de la política internacional. Su propósito siempre fue mantener la hegemonía de Alemania en Europa, aislando a Francia, su potencial enemigo. Para ello elaboró una compleja trama de alianzas públicas y secretas conocida como “Sistemas Bismarkianos”: - Primer sistema (1872): Guillermo I de Alemania, Francisco José I de Austria y Alejandro II de Rusia firmaron la Entente de los Tres Emperadores con el fin de preservar el principio monárquico. El sistema se disolvió en 1878 cuando Rusia se enfrentó a Alemania por apoyar al Imperio Austrohúngaro en su expansión en los Balcanes (Congreso de Berlín). - Segundo sistema (1879): Bismark llegó a un acuerdo secreto con el Imperio austrohúngaro y a su vez renovó la Entente de los Tres Emperadores con al nuevo zar, Alejandro III. Además se formó la triple alianza entre Alemania, Austria-Hungría e Italia. Esta última reclamaba ayuda en el norte de África ante la expansión francesa. - Tercer sistema (1887): Se reforzó la tripla alianza y se sumaron los “acuerdos mediterráneos” en los que entraron Alemania, Austria-Hungría, Gran Bretaña, Italia y España contra la expansión francesa en el norte de África. Además se firmó el Tratado de Reaseguro entre Alemania y Rusia, que garantizaba la neutralidad del otro miembro en caso de recibir un ataque. El ascenso al trono alemán del emperador Guillermo II (1888), supuso la puesta en marcha de una política expansionista por parte de Alemania, iniciándose la llamada Paz Armada (1890-1914): - Alemania no renovó el tratado de reaseguro con Rusia y mantuvo roces con el Reino Unido por territorios en China y el Imperio Otomano. - Francia firmó un acuerdo militar secreto con Rusia. Ahora Alemania tenía enemigos tanto al este como al oeste. - Francia y Gran Bretaña chocaron en su expansión en África, provocando el Incidente de Fachoda. Este conflicto resuelto amigablemente entre Francia y Gran Bretaña abrió un periodo de entendimiento: Francia aceptó el protectorado británico en Egipto y Gran Bretaña los derechos franceses sobre Marruecos. - En 1907 se creó la Triple Entente (Rusia, Francia y Reino Unido) frente a la Triple Alianza (Alemania, Imperio austrohúngaro e Italia). Habían quedado puestas las bases de la I Guerra Mundial. 5. LAS POTENCIAS EXTRAEUROPEAS EMERGENTES a) Estados Unidos A lo largo del siglo XIX Estados Unidos vivió hechos importantes, convirtiéndose en una potencia de primer orden: - - La expansión de sus territorios hacia el oeste. La llegada masiva de inmigrantes. Un fuerte crecimiento económico basado en el desarrollo industrial, la agricultura de plantaciones y la agricultura y ganadería extensivas. La adopción del sufragio universal masculino en 1830. La guerra de Secesión (1861-1865): surgió a raíz de la abolición de la esclavitud por el presidente Abraham Lincoln. Los estados del sur se opusieron, crearon los Estados Confederados de América y se proclamaron independientes. La guerra finalizó con la victoria de los partidarios de la Unión (Federales). La guerra contra España de 1898, con la que consiguió el dominio sobre Puerto Rico, Cuba y Filipinas. b) Japón Hasta el siglo XIX Japón fue una monarquía feudal. En 1867 el joven emperador Mutshu Hito inició una serie de reformas adoptando modelos occidentales, lo que se conoció como Revolución Meiji: igualdad ante la ley, fin de la servidumbre y Constitución de 1889. Estas reformas fueron acompañadas de un fuerte desarrollo económico y un rápido crecimiento demográfico, lo que obligó a iniciar una política de expansión en busca de materias primas y mercados. A principios del siglo XX Japón se embarcará en guerras contra países vecinos como Rusia y China.