Para hablar de las historia de los espacios urbanos en la Cd. De Guadalajara tendríamos que ir sus inicios en el siglo XVI. Guadalajara, como toda ciudad definió sus espacios a partir de las personas, en épocas donde la planeación era inexistente, se creaban los asentamientos y posterior a eso las conexiones, como calles, servicios básicos y demás, curiosamente pareciera que el mismo método que se aplica hoy en día. Mi percepción personal viene desde el año de 1995 que llegue a vivir a la ciudad, son poco mas de 14 años los cuales han visto y he visto un cambio radical en la configuración de la urbe, la apuesta principal de los últimos años ha ido completamente ligada al uso del automóvil, lo cual a definido la cara que tiene Guadalajara y su zona metropolitana, en 1995 la metrópoli estaba conformada por dos municipios, Guadalajara y Zapopan, el día de hoy la zona metropolitana esta conformada por Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque, Tonala, Tlajomulco, El Salto e Ixtlahuacan del Rio, esto fue creciendo no por que se hicieran vías mas eficientes entre los diferentes municipios si no por que el crecimiento urbano se comió las fronteras municipales, esto genero que Guadalajara de ser una cd. Tranquila de provincia se convirtiera en una metrópoli de 6 millones de habitantes, con la complejidad que esto genera. La indiferencia ha sido en gran parte el causante de que los espacios urbanos en Guadalajara y su ZM. Estén mermados al punto de ser prácticamente inexistentes y los que existen sean ineficientes o no tengan las mejores condiciones, los parques y plazas publicas están en uso por personas de bajos niveles económicos por el hecho de que no hay que pagar un porte de entrada, no por lo funcional o agradable que puedan ser, en pocas palabras por que no queda de otra. El ayuntamiento en tiempos recientes ha querido reavivar la vida en el centro histórico y otras plazas con la realización de eventos artísticos y culturales mas no ha hecho de estos espacios objeto de deseo entre los habitantes de la ciudad, la apuesta no siguen siendo las personas. El desarrollo de la vida de un tapatio es como en casi todas las ciudades del mundo, viven se trasladan a los centros de estudio, de trabajo y espacios de ocio, mas la gran mayoría lo hace en coche, lo que a convertido a Guadalajara en una ciudad con 1,300,000 coches, en 1995 se podía considerar una Cd. Funcional en cuanto a trafico, el parque vehicular era por mucho menor al actual, las vías rayaban en lo suficiente, con el paso del tiempo eso fue cambiando, las obras viales se convirtieron en el monumento al progreso y el parque vehicular creció, y por mucho, la vida diaria se acelero, las distancias se incrementaron las personas trabajan a mayor distancia de donde habitan, los centros de estudio particulares son utilizados por personas que no viven en el área, lo que satura las calles en las horas pico. La conciencia ciudadana respecto al uso y conservación de los espacios públicos no es suficiente, lo que no a obligado a los ayuntamientos a tomar acciones reales en el tema de planeación urbana, los planes de desarrollo y de planeación no son tema publico, y esto solo genera atención a unos cuantos ciudadanos que están atentos a estos hechos, por lo regular ong’s que llevan por bandera el mejoramiento de la ciudad. Cuando los planes finalmente se muestran a la ciudadanía, se presentan como hechos consumados. Los ‘planes’, entregados en papel y a lápiz a quienes forman parte de las minorías con acceso al poder, se exhiben al resto de los mortales como cincelados en mármol. No se reserva espacio alguno para la deliberación o el análisis público y ningún proyectista es obligado a defender su propuesta ante una junta vecinal. Sin mecanismos accesibles y permanentes para la participación democrática, quienes están a disgusto –o tienen una idea alternativa- solo pueden decidir entre manifestarse en las calles y someterse a la voluntad del gobernante en turno. En la gran mayoría de las ciudades de México las direcciones de desarrollo urbano son oficinas con escaso personal y presupuesto, y con poca influencia real sobre las decisiones públicas. En esas condiciones, muchas de ellas son desbordadas por la realidad y operan tan solo como oficialías de partes para los proyectos de las constructoras. A pesar de las buenas intenciones de sus funcionarios, no tienen tiempo, ni presupuesto, para planear el largo plazo o para incluir a la ciudadanía en la toma de sus decisiones. Salvo en el caso de unas cuantas mega-obras. Contrario a lo que muchos piensan, en Guadalaajra el problema no radica en la inexistencia de planeación. Al contrario, existen planes por doquier, y muchos de ellos brillan por su impecable calidad técnica. El problema real consiste en que no se planea con los intereses de la ciudadanía en mente o el interes comun. ¿De qué otra manera podemos entender que el imponente desarrollo de Puerta de Hierro y el centro comercial Andares –la nueva zona de rascacielos en la Ciudad de Guadalajara- no cuente con accesos para el transporte público o peatonales? ¿Cómo explicar que se construyan miles de viviendas en los lejanos límites de las ciudad, mientras que las áreas centrales permanecen plagadas de terrenos baldíos y edificios abandonados? ¿De qué otra forma se puede justificar que en un país donde el automóvil continúa siendo privilegio de las minorías, la prioridad a la construcción de avenidas sea siempre mayor que la destinada a la construcción de banquetas? Hoy casi nadie – en ocasiones ni siquiera los propios funcionarios públicosadaptan sus proyectos inmobiliarios al ‘plan’ o a la reglamentación vigente. Como dichos estatutos no fueron producto de la deliberación ciudadana, el pueblo no los ha hecho suyos. Su cambio, modificación, ajuste, sustitución u olvido no genera mayores reacciones. Al excluir al ciudadano común de la planeación de la ciudad, se han producido espacios que reflejan y profundizan esta exclusión. El resultado es observable. En todo la ciudad, se construye una urbe que se distingue por la generación de pequeñas islas de desarrollo dispersas entre mares de desigualdad. Una vez que el cemento se seca, la visión de unos pocos a transformado para siempre la vida de muchos. Podriamos hacer un estudio muy extenso de las carencias de los epacios publicos de la ciudad, en la actualidad hay onbras muy loables en cuanto a la recuperacion de espacios, el fondo de ellas es lo que no termina de convencer, la parte positiva es que se estan realizando. Las dos mas grandes y que se vienen a mi cabeza es la recueperacion del centro historico, consiste en ensanchamiento de las banquetas, ocultar lineas de luz, telefonicas y demas, asi como la tanqililización de las calles. La otra y es una se las mas sonadas es la via recreativa que cuenta con mas de 65 kms, se realiza todos los domingos de 8 de la mañana a 2 de la tarde, en la cual confluyen mas de 150 mil personas, ahí se disfruta de las calles sin coches, con uso exlcusivo de peatones, ciclistas, patinadores, etc. La historia reciente de la ciudad no es quiza la mas positiva en el tema de espacios urbanos, hay muchos vicios por vencer, y mucho mas que hacer, poco a poco tendera a convertirse en una ciudad para los ciudadanos, la labor esta en todos, los gobernantes, la iniciativa privada y los ciudadanos, en conjunto unos en accion y otros como observadores, lo que si cualquier accion al mejorameinto urbano es urgente, sin eso no podra transformarse la ciudad.