76192949-30-Estudios-Biblicos-Esenciales

Temas Bíblicos
Esenciales
“Lámpara es a mis pies tu Palabra,
y lumbrera a mi camino.”
Salmo 119:105
Índice
1. La Palabra que da vida.................................................................................3
2. Cómo es Dios ................................................................................................6
3. El maravilloso Jesucristo ..............................................................................9
4. Cómo hablar con Dios ............................................................................... 12
5. Por qué hay sufrimiento ............................................................................ 16
6. El grandioso plan de salvación ................................................................ 19
7. La dulce seguridad del perdón ................................................................. 22
8. El destino del mundo ................................................................................. 25
9. El glorioso regreso de Jesucristo ............................................................. 28
10 Cuándo volverá Cristo .............................................................................. 32
11 Mil años en la tierra y en el cielo ............................................................. 35
12. El juicio ha llegado ................................................................................... 38
13. Una ley que nos protege ......................................................................... 42
14. El verdadero día de reposo .................................................................... 45
15. A quién obedecer ..................................................................................... 49
16. Esperanza segura ante la muerte ......................................................... 52
17. La Iglesia Cristiana y su fundamento .................................................... 55
18. La verdadera iglesia final ........................................................................ 58
19. Un don que nos guía ............................................................................... 61
20. En sociedad con Dios.............................................................................. 64
21. Una vida sana y feliz................................................................................ 68
22. El verdadero bautismo ............................................................................ 71
23. La mayor decisión de la vida .................................................................. 74
24. Cómo nos ayuda el Espíritu Santo........................................................ 77
25. Belleza de la vida cristiana ..................................................................... 81
26. Un hogar armonioso ................................................................................ 85
27. El joven cristiano....................................................................................... 89
28. Fortaleza en las pruebas ........................................................................ 94
29. Embajadores de Cristo............................................................................ 96
30. Hacia la gran victoria ............................................................................... 99
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1. LA PALABRA QUE DA VIDA
Biblia es un conjunto de 66 libros agrupados en secciones, llama-das Testamentos. El Antiguo Testamento, escrito antes de Cristo; y el Nuevo
Testamento, que presenta la historia de Cristo, su doctrina y desarrollo de la iglesia cristiana. Los libros de la Biblia fueron escritos por unos 40 escritores
que vivieron en un lapso de quince siglos. Contienen historia, biografías inspiradoras, poesías, legislación y ciencia; pero sobre todo, contienen el gran
mensaje de Dios para nuestra felicidad y salvación. Las Sagradas Escrituras del Antiguo y Nuevo Testamento son la Palabra de Dios dada por inspiración
divina por medio de los santos hombres de Dios que escribieron inspirados por el Espíritu Santo. En esta Palabra, Dios ha dado al hombre el conocimiento
“para su salvación.”
Revelada por Dios
1. ¿Cómo fueron dadas las Sagradas Escrituras?
“Toda Escritura es inspirada por Dios.” (2ª Timoteo 3:16)
“Los santos hombres de Dios hablaron inspirados por el Espíritu Santo.” (1ª Pedro 1:21).
2. ¿Con qué otros nombres se conoce la Biblia?
“Las Escrituras.” (Mateo 21:24) “La Palabra de Dios.” (Romanos 3:2) “La Palabra de verdad” (2ª Timoteo 2:15).
3. ¿Hasta cuándo durará la Palabra de Dios?
“La hierba se seca, la flor se cae; pero la Palabra de Dios permanece para siempre.” (Isaías 40:8). “El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabra nunca
pasarán.” (Mateo 24:35).
Fuente de orientación
4. ¿Con qué se compara la Biblia?
“Lámpara es a mis píes tu Palabra y lumbrera a mi camino” (Salmo 119:105)
5. ¿Qué utilidad tiene la Biblia?
“Las Sagradas Escrituras... te pueden hacer sabio para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. Toda la Escritura es útil para enseñar, reprender,
para corregir e instruir en justicia, para que el hombre de Dios sea perfecto, cabalmente instruido para toda buena obra” (2ª Timoteo 315-17).
6. ¿Qué beneficios espirituales brinda la Biblia?
Enseña la verdad: “Tu palabra es verdad” (Juan 17:17).
Revela a Cristo: Estas palabras “fueron escritas para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios; y para que creyendo tengáis vida.” (Juan 20:31).
7. ¿Qué poder tiene la Biblia?
“La Palabra de Dios es viva y eficaz, más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los
tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón” (Hebreos 4:12).
Bendiciones prometidas
8. ¿Qué hermosas bendiciones proporciona el estudio de la Biblia?
“Todo lo que antes fue escrito, para nuestra enseñanza fue escrito, para que por la paciencia y el consuelo de las Escrituras, tengamos esperanza.”
(Romanos 15:4).
“Cuando recibía tus palabras, yo las devoraba, y tu palabra fue el gozo y la alegría de mí corazón.” (Jeremías 15:16).
“Habéis nacido de nuevo, no de semilla corruptible, sino incorruptible, por medio de la Palabra de Dios, que vive y permanece para siempre.” (1ª Pedro
1:23).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Aceptar la Santa Biblia como la Palabra inspirada de Dios y creer en ella.
“El Espíritu del Señor ha hablado por mí, y su palabra ha estado en mi lengua.” (2ª Samuel 23:2).
2. Obtener un ejemplar de la Santa Biblia, y estudiarla todos los días.
Los berréanos “fueron más nobles que los de Tesalónica, pues recibieron la Palabra de todo corazón y examinaban cada día las Escrituras.” (Hechos
17:11).
3. Pedir a Dios sabiduría.
“Si alguno necesita sabiduría, pídala a Dios, quien da a todos generosamente.” (Santiago 1:5).
4. Pedir la ayuda de otros para entender la Biblia.
Felipe oyó que el etíope leía al profeta Isaías Y le preguntó: “¿En-tiendes lo que lees? Él dijo: ¿Y cómo podré si alguno no me enseña-re? Y rogó a
Felipe que subiese y se sentase con él.” (Hechos 8:30, 31).
5 Obedecer la enseñanza bíblica, poniéndola en práctica en la vida diaria.
“Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca.” (Apocalipsis
1:3)
MI DECISIÓN
¿Cree usted que la Biblia es la autoridad suprema de la verdad? ... ¿Está dispuesto a estudiarla todos los días y a seguir sus enseñanzas?
NADA MEJOR
“Para fortalecer la inteligencia no hay nada mejor que el estudio de las Sagradas Escrituras. Ningún otro libro es tan potente para elevar los
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pensamientos para dar vigor a las facultades, como las grandes y ennoblecedoras verdades de la Biblia.
“Si se estudiara la Palabra de Dios como se debe, los hombres tendrían una grandeza de espíritu, una nobleza de carácter y una firmeza de propósito que
raramente se puede ver en este tiempo.” (Felicidad Abundante, Pág. 44).
2. ¿CÓMO ES DIOS?
La creencia en Dios es universal, es innata en la conciencia del hombre. “Dios, el Padre eterno, es el Creador, origen, sustentador y soberano de toda la
creación. Es justo y santo, misericordioso, piadoso... y grande en permanente amor y fidelidad.”
La persona de Dios
1. ¿Cuántos dioses hay?
“Hay un solo Dios, el Padre, de quien proceden todas las cosas, y para quien nosotros vivimos.” (1ª Corintios 8:6)
“El Señor nuestro Dios, el Señor uno es.” (Deuteronomio 6:4).
2. ¿Cuántas personas forman la deidad?
“La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros.” (2ª Corintios 13:14).
Hay un solo Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo, una unidad de tres personas coexistiendo por la eternidad.
3. ¿Cómo es Dios?
“Dios es Espíritu.” (Juan 4:24).
Nuestro Señor Jesucristo enseñó que la naturaleza de Dios es espiritual. Es todopoderoso y no está sujeto a las limitaciones humanas.
Atributos de Dios
4. ¿Cuáles son algunos atributos de Dios?
Dios es inmortal, todopoderoso, omnisciente, superior a todo y omnipresente. Dios es infinito, inaccesible a la comprensión humana, y conocido
únicamente mediante la revelación que ha hecho de sí mis-mo.
Es el Creador grandioso. “El Señor de los ejércitos” (Isaías 37:16).
Dios es Santo. “Así dice el Excelso y Sublime, el que habita en la eternidad, y cuyo nombre es el Santo.” (Isaías 57:15).
Dios es Todopoderoso. “En Dios hay una majestad terrible. El es Todopoderoso al cual no alcanzamos, grande en poder.” (Job 37:22, 23).
Dios y el hombre
5. ¿Qué es Dios para el hombre?
Dios es el Creador del universo, del mundo y del hombre:
“Creó Dios al hombre a su imagen, conforme a su semejan-za.”(Génesis 1:27).
6. ¿Qué tierno sentimiento abriga Dios hacia el hombre?
Amor eterno. “Con amor eterno te he amado, por tanto te prolongué mi misericordia.” (Jeremías 31:3).
Amor abnegado. “En esto hemos conocido el amor, en que Él puso su vida por nosotros.” (1ª Juan 3:16).
7. ¿Cómo podemos considerar a Dios?
“Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios... Amados, ahora somos hijos de Dios.” (1ª Juan 3:1,2)
Cristo nos enseñó a amar a Dios y a llamarlo: “Padre nuestro.” (Mateo 6:9).
8. ¿Qué hace nuestro Padre por nosotros?
Nos auxilia; “Dios es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.” (Salmo 46:1).
Nos alienta: “Bendito sea el Dios y Padre... Él nos consuela en toda tribulación.” (2ª Corintios l:3, 4)
Nos defiende: “El ángel del Señor acampa alrededor de los que le temen, y los defiende... Dichoso el hombre que confía en Él.” (Salmo 34:7, 8).
Es nuestro proveedor: “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.” (Filipenses 4:19).
Cómo se nos revela Dios
Por la naturaleza: “Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos.” (Salmo 19:1).
Por medio de Cristo: “A Dios nadie lo vio jamás; el Unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, Él lo ha dado a conocer.” (Juan 1:18).
Por la Biblia: “Escudriñad las Escrituras... Ellas son las que dan testimonio de mí.” (Juan 5:39).
Por el Espíritu Santo: “Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu.” (1ª Corintios 2:10).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Creer en Dios.
Eso nos paz, salud y felicidad. “El que se acerca a Dios debe creer que Dios existe.” (Hebreos 11:6).
2. Conocerlo,
“Esta es, la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.” (Juan 17:3).
3. Confiar en Dios.
“Gustad y ved que bueno es el Señor. ¡Dichoso el hombre que con-fía en Él.” (Salmo 34:8).
4. Respetar su santo nombre.
“No tomaras el Nombre del Señor tu Dios mi vano.” (Éxodo 20:7)
5. Dar a Dios el primer lugar.
“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadida.” (Mateo 6:33).
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“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien.” (Romanos 8:28).
6. Amar a Dios sobre todo.
“Amaras al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas.” (Deuteronomio 6:5).
El amor se demuestra por la obediencia voluntaria y alegre. “Por-que yo te mando hoy que ames al Señor tu Dios, que andes en sus caminos, y
guardes sus mandamientos... Amando al Señor tu Dios, atendiendo a su voz, y siguiéndole a Él; porque Él es vida para ti y prolongación de tus días.”
(Deuteronomio 30:16, 20).
MI DECISIÓN
¿Cree usted en Dios el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo?... ¿Reconoce que su santa voluntad es lo mejor para su vida?... Está dispuesto a amarle y
obedecerle?
COMENTARIO
Así como Dios el Padre es eterno, así también lo es Cristo. Isaías lo llama Padre, porque en un sentido especial es Padre de toda la humanidad, pues
es el Creador del hombre y del mundo (Juan 1: 3; Efe. 3:9; Col. 1:16; Heb. 1:2; Gén. 1:26). Sólo la palabra ‘Padre’ expresa plenamente el amor y el
cuidado de Jesús para con sus hijos. Cuando Cristo reine lo hará como un padre para su pueblo (Isa. 22:21-22; Apoc. 3: 7).
3. EL MARAVILLOSO JESUCRISTO
Nunca hubo en este mundo una persona tan pura, tan amante y tan amable como Jesucristo. Junto con el Padre, Cristo es el Creador de cuanto existe.
Mediante la encamación vino a ser verdadero hombre. Fue tentado en todo, pero jamás cometió pecado. Su maravilloso amor culminó en su muerte
voluntaria en la cruz, en su gloriosa resurrección y en su regreso al cielo, de donde volverá a esta tierra a llevar a los suyos
Naturaleza de Cristo
1. ¿Desde cuándo existe Jesucristo?
“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Éste era en el principio con Dios.” (Juan 1:1, 2).
2. ¿Qué es Jesucristo: es Dios, es hombre, o es ambas cosas?
Jesucristo es plenamente divino “Porque en Él habita corporal-mente toda la plenitud de la deidad.” (Colosenses 2:9).
Por amor a nosotros se hizo hombre. “El cual siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a
sí mismo, tomando forma de siervo, hacho semejante a los hombres.” (Filipenses 2:6, 7).
3. ¿Por qué fue llamado Jesús?
“Y llamarás su nombre Jesús, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados... Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es Dios con nosotros.”
(Mateo 1:21, 23.) “Será grande, y será llamado Hijo del Altísimo.” (Lucas 1:32).
4 ¿Quién es el Creador del mundo y de nosotros?
La Deidad trazó los planes de la creación, que fueron ejecutados por Cristo. “Todas las cosas por Él fueron hechas. Y nada de cuanto existe fue hecho
sin Él.” (Juan 1:3) “Por Él fueron creadas todas las cosas, las que están en el cielo y las que están en la tierra... todo fue creado por medio Él y para Él.”
(Colosenses 1:16).
Ministerio de amor
5. ¿Qué hizo Cristo en favor de los sufridos seres humanos?
“Jesús de Nazaret... pasó haciendo el bien y sanando a todos los oprimidos por el diablo.” (Hechos 10:38) “No vino para ser servido, sino para servir, y
para dar su vida en rescate de muchos.” (Mateo 20:28).
6. ¿Cuál fue la principal misión de Jesucristo?
“Vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.” (Lucas 19:10).
7. ¿Qué figuras empleó Jesús para describir su obra?
“Yo soy la luz del mundo.” (Juan 8:12). “Yo Soy la puerta.” (Juan 10:9). “Yo Soy el buen pastor.” (Juan 10:11). “Yo Soy el camino, la verdad y la vida.”
(Juan 14:6).
Relación de Cristo con nosotros
8. ¿Cuál es la relación de Jesucristo con nosotros?
Es nuestro hermano (Mateo 12:50). Es nuestro amigo (Juan 15:15). Es nuestro abogado (1ª Juan 2:1).
9. ¿Qué siente Cristo por nosotros?
“Habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta lo sumo.” (Juan 13:1).
10. ¿Qué promete darnos Cristo?
Paz. “La paz os dejos, mi paz os doy.” (Juan 14:27)
Descanso “Venid a mí todos los que estáis afligidos y cargados, y yo os haré descansar.” (Mateo 11:28).
Perdón. “Ni yo te condeno. Vete, y no peques más.” (Juan 8:11).
Vida eterna. “Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.” (Juan 11:25).
Relación eterna.
11. ¿Qué maravillosa promesa hizo Jesucristo?
“Y si me fuere y os prepare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.” (Juan 14:3).
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¿QUÉ DEBO HACER?
1. Creer en Cristo.
“Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.” (Hechos 16:31).
2. Responder al llamado de Cristo.
“Jesús... vio a un hombre llamado Mateo... y le dijo: Sígueme Y él se levantó, y le siguió.” (Mateo 9:9).
3. Permanecer unido a Cristo,
Para obtener fuerza espiritual. “Permaneced en mí, y yo en vosotros... Yo soy la vid, vosotros los pámpanos. El que permanece en mí, y yo en él, éste
lleva mucho fruto. Porque separados de mí, nada podéis hacer.” (Juan 15:4, 5).
4. Seguir el ejemplo de Cristo en todo.
“Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.” (Juan 13:15).
5. Mostrarle nuestro amor a Cristo mediante la obediencia.
“Si me amáis, guardad mis mandamientos.” (Juan 14:15).
6. Seguir en las pisadas de Cristo.
“Para esto fuisteis llamados, porque también Cristo padeció por vosotros, dejándoos ejemplo, para que sigáis sus pisadas.” (1ª Pedro 2:21).
MI DECISIÓN
¿Cree usted que Jesucristo es su Dios, su Creador y su Salvador? ¿Desea unirse a Él y seguir sus elevados principios?
COMENTARIO
“En Cristo está la ternura del pastor, el afecto del Padre y la incomparable gracia del Salvador compasivo.” (El Deseado de Todas las Gentes, p. 766.).
“El valor incomparable que eleva al cristianismo por encima de todas las religiones es la figura de Cristo.”(Osvaldo Spengler –filósofo alemán).
4. CÓMO HABLAR CON DIOS
“Orar es el acto de abrir nuestro corazón a Dios como a un amigo. No es que se necesite esto para que Dios sepa lo que somos, sino a fin de
capacitarnos para recibirlo. La oración no baja a Dios hasta nosotros, antes bien nos eleva a Él.
“Cuando Jesús estuvo sobre la tierra, enseñó a sus discípulos a orar. Les enseñó a presentar Dios sus necesidades diarias y a echar toda su solicitud
sobre Él. Y la seguridad que les dio de que sus oraciones serían oídas, nos es dada también a nosotros. (El Camino a Cristo, p. 93).
¿Qué es la oración?
1. ¿Cómo podemos comunicarnos con Dios?
Mediante la oración “Volví mi rostro al Señor Dios, y lo busqué en oración y ruego.” (Daniel 9:3).
2. ¿En qué consiste la oración?
Es el clamor del alma necesitada, elevado hacia nuestro Padre celestial: “En mi angustia invoque al Señor, clamé a mi Dios, y oyó mi voz... mi clamor
llegó a sus oídos.” (2ª Samuel 22:7)
¿Cómo debemos orar?
3. ¿A quién debemos dirigir nuestra oración?
Jesús enseño a dirigir nuestras oraciones a Dios el Padre: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu Nombre.” (Mateo 6:9).
4. ¿Qué nombre debemos invocar?
El nombre de nuestro Señor Jesús: “Todo lo que pidáis al Padre en mi nombre, eso haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.” (Juan 14:13).
5. ¿Qué factores son importantes en la oración?
La sencillez. “Al orar, no uses vanas repeticiones.” (Mateo 6:7).
El agradecimiento. “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de
gracias.” (Filipenses 4:6).
La constancia. “Gozosos en la esperanza, sufridos en la tabulación, constantes en la oración.” (Romanos 12:12).
6. ¿Qué tipo de oración es la más provechosa?
La oración privada. “Cuando tú ores, entra en tu aposento, cierra tu puerta, y ora a tu Padre que está en secreto. Y tu Padre que ve en secreto, te
recompensará en público.” (Mateo 6:6).
¿Contesta Dios nuestras oraciones?
7. ¿Qué condiciones requiere la oración eficaz?
Pedir con fe: “Todo lo que pidáis en oración creyendo, lo recibiréis.” (Mateo 21:22).
Pedir conforme a la voluntad de Dios: Jesús “se postró sobre su rostro en tierra, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa,
pero no sea como yo quiero, sino como tú.” (Mateo 26:39).
Vivir conforme a la voluntad de Dios: “Todo cuanto pedimos lo recibimos de Él, porque guardamos sus mandamientos, y hacemos lo que le agrada.”
(1ª Juan 3 22)
8. ¿Qué cosas pueden estorbar la eficacia de la oración?
Pedidos indebidos: “Pedís y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.” (Santiago 4:3).
La duda “Pero pida con fe, no dudando nada.” (Santiago 1:6).
El pecado. “Vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír.” (Isaías 59:2).
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9. ¿Qué hermosa seguridad nos da Dios acerca de la oración?
Que Él oirá y responderá. “Clama a mí, y yo te responderé.” (Jeremías 33:3)
Que Él contestará. “Al Señor clamé estando en mi angustia, y Él me respondió.” Salmo 120:1). “Pedid, y seos dará; buscad y hallaréis; llamad, y se os
abrirá.” (Mateo 7:7).
10. ¿Por qué orar con fe?
“Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le
buscan.” (Hebreos 11:6).
11. ¿Cómo nace la fe, y cómo se desarrolla?
Dios da la fe a cada uno “conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.” (Romanos 12:3).
Se desarrolla por medio del estudio de la Biblia: “La fe viene por el oír, y el oír, por la Palabra de Dios.” (Romanos lo 10:17).
12. ¿En quién debemos depositar la fe?
“Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe.” (Hebreos 12:2).
¿QUÉ DEBO HACER?
Acudir a Dios con entera confianza.
“En el día de mi angustia te llamaré, porque Tú me respondes.” (Salmo 86:7).
1. Cultivar un espíritu de oración.
“Tarde, mañana y a mediodía oraré y clamaré, y Él oirá mi voz.” (Salmo 55:17).
2. Ser perseverante en la oración.
“Jesús les contó una parábola acerca de la necesidad de orar siempre, y no desmayar.” (Lucas 18:1).
3. Pedir conforme a la voluntad de Dios.
“Esta es la confianza que tenemos en Él: que si pedimos algo conforme a su voluntad, Él nos oye.” (1ª Juan 5:14).
4. Tener constante fe en Dios.
“Respondiendo Jesús les dijo: Tened fe en Dios.” “Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios.” (Marcos 11:22; Lucas 18:27).
MI DECISIÓN
Siendo que Dios oye nuestras oraciones, y responde en la forma más favorable para nuestro bien, ¿decide usted orar todos, los días?
COMENTARIO
“Presentad a Dios vuestras necesidades, gozos, tristezas, cuidados y temores. No podéis agobiarlo ni cansarlo. El que tiene contados los cabellos de
vuestra cabeza, no es indiferente a las necesidades de sus hijos. ‘Porque el Señor es muy misericordioso y compasivo' (Santiago 5:11). Su amoroso
corazón se conmueve por nuestras tristezas y aún por nuestra presentación de ellas. Llevadle todo lo que confunda vuestra mente. Ninguna cosa es
demasiado grande para que Él no la pueda soportar; Él sostiene los mundos y gobierna todos los asuntos del universo. Ninguna cosa que de alguna
manera afecte nuestra paz es tan pequeña que Él no la note.” (El Camino a Cristo, Pág. 100).
5. ¿POR QUÉ HAY SUFRIMIENTO?
El anhelo más profundo del ser humano es ser feliz. Sin embargo, la diaria realidad es el sufrimiento, la angustia y el dolor; y todo es causado por el
pecado. El mal o pecado se originó en un ser celestial, y luego pasó a la tierra. El pecado es la rebelión contra Dios, que consiste en rechazar a Dios y sus
requisitos, para hacer la voluntad propia. El pecado siempre acarrea malas consecuencias, y finalmente la muerte eterna.
El ser humano necesita conocer lo que es el pecado, sus nefastas consecuencias, y lo ofensivo que es para Dios. Sin embargo, en su gran amor,
Dios trazó un maravilloso plan para que podamos salvar-nos eternamente.
Creados para ser felices
1. ¿En qué hermosa condición fue creado el ser humano?
“Creó Dios al hombre a su imagen... Hombre y mujer los creó... Y los bendijo Dios... Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en
gran manera.” (Génesis 1:27, 28, 31).
2. ¿Cuál era el plan de Dios para el ser humano?
Dios “les dijo: Fructificad y multiplicaos. Llenad la tierra y gobernadla.” (Génesis 1:28) y “estad siempre gozosos.” (1ª Tesalonicenses 5:16).
3. ¿Quién alteró el plan de Dios?
“Esto he hallado: que Dios hizo al hombre recto, pero ellos buscaron muchas perversiones.” (Eclesiastés 7:29).
La causa del sufrimiento
4. ¿Cómo se describe la vida humana por causa del pecado?
“El hombre nacido de mujer, corto de días y hastiado de sin-sabores. Sale como una flor y es cortado, y huye como la sombra y no permanece.” (Job
14:1,2).
5. ¿Cuál es la causa de las desdichas y de los sufrimientos?
“Los impíos son como el mar en tempestad, que no puede estar quieto, y sus aguas arrojan cieno y lodo.” (Isaías 57:20, 21).
“La tierra se contaminó bajo sus habitantes, porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto eterno. Por eso la maldición
consumió la tierra y disminuyeron los hombres.” (Isaías 24:5, 6).
Qué es el pecado
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6. ¿Qué es el pecado?
Es la transgresión de la ley de Dios. “Todo aquel que comete pecado infringe también la ley, pues el pecado es la transgresión de la ley.” (1ª Juan
3:4).
7. ¿Quién es el autor del pecado?
El diablo. “El que practica el pecado es del diablo, porque el diablo peca desde el principio.” (1ª Juan 3:8).
8. ¿Cómo llegó a existir el diablo?
Dios creó a un ser llamado Lucifer, que era “perfecto” en todos sus caminos (Ezequiel 28:15) Pero Lucifer se pervirtió y quiso ser “semejante al
Altísimo” (Isaías 14:14). Finalmente se rebeló contra Dios, y en una batalla en el cielo, “fue lanzado fuera,” “y sus ángeles fueron arrojados con él"
(Apocalipsis 12:7-9).
9. Entonces, ¿cómo entró el pecado en el mundo?
Dios pidió a Adán y Eva que como muestra de amor y obediencia, se abstuvieran de tocar “el árbol del conocimiento del bien y del mal” (Génesis
2:15-17). Pero Satanás los tentó (Génesis 3:1-6). El pecado original consistió en desobedecer a Dios y seguir las sugerencias de Satanás.
10. Desde entonces, ¿cuántos han pecado?
Todo ser humano ha pecado. “Todos pecaron.” (Romanos 5:12).
“Porque la inclinación del corazón del hombre es mala desde su juventud.” (Génesis 8:21).
“Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos.” (1ª Juan 1:8).
Tristes consecuencias del pecado
11. ¿Qué desdicha provoca el pecado?
“Tribulación y angustia sobre toda persona que obra lo malo.” (Romanos. 2:9).
“El impío es atormentado de dolor todos los días.” (Job 15:20) “No hay paz para los impíos.” (Isaías 57:21).
12. ¿Qué terribles consecuencias espirituales produce el pecado?
Separa de Dios. “Pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios.” (Isaías 59:2).
13. ¿Cómo podemos obtener la victoria sobre el pecado?
Haciendo lo que Dios pide. “Someteos, pues, a Dios. Resistid al diablo, y huirá de vosotros.” (Santiago 4:7).
“El don gratuito de Dios es la vida eterna en Cristo Jesús.” (Ro-manos 6:23).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Odiar el pecado y sentir vergüenza por haberlo cometido.
“Aborreced el mal y amad el bien.” (Amós 6:13).
“Ý os acordaréis de vuestros malos caminos, y de vuestras obras que no fueron buenas, y os avergonzaréis de vosotros mismos por vuestras
iniquidades y vuestras abominaciones.” (Ezequiel 36:31)
2. Apartarme de las tentaciones y resistir el mal.
“No entres por la vereda de los impíos, ni vayáis por el camino de los malos.” (Proverbios 4:14). “Apártate del mal y haz el bien.” (Salmo 34:14).
3. Resistir decididamente a Satanás, usando las armas espirituales.
“Vestíos de toda la armadura de Dios para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo...” (Efesios 6:11-18).
4. Aceptar que la victoria es segura en Cristo.
“Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de Aquel que nos amó.” (Romanos 8:37).
“Gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo.” (1ª Corintios 15:57).
MI DECISIÓN
Siendo que sólo con la ayuda de Dios podemos vencer, ¿Quiere usted abandonar todo hábito pecaminoso, y vivir limpiamente para Dios.
6. EL GRANDIOSO PLAN DE SALVACIÓN
El ser humano cayó en el pecado con su triste consecuencia de des-gracia y muerte. Nuestro amante Dios actuó como un Padre justo pe-ro
misericordioso, y puso en ejecución inmediata un admirable plan previamente trazado, para salvar a los seres humanos. El plan requería que Dios
realizara el inmenso sacrificio de dar a su hijo unigénito. Jesucristo tuvo que dejar su morada celestial, luchar contra Satanás y pagar la deuda contraída
por el ser humano, para lo cual debía morir. Jesús obtuvo la victoria, confirmada por su resurrección. Así aseguró la redención de los seres humanos.
El Calvario se yergue como un monumento del asombroso sacrificio requerido como propiciación por la transgresión de la ley divina. No estimemos el
pecado como una cosa trivial. Las manos, los pies y el costado del Hijo del Dios infinito, ¿no constituyen un testimonio eterno ante el universo de la
malignidad y maldición del pecado?
Horrendas consecuencias del pecado
1.¿Cuáles son algunas terribles consecuencias del pecado?
Separa al hombre de Dios: “Vuestras iniquidades os han separado de vuestro Dios.” (Isaías 59:2).
El pecador queda sujeto al dominio de Satanás: “El que practica el pecado es del diablo.” (1ª Juan 3:8)
El resultado final es la muerte: “Porque la paga del pecado es la muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.” (Romanos
6:23).
2. ¿Puede el ser humano solucionar el problema del pecado?
El ser humano tiene una fatal propensión a pecar: “Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero.” (Romanos 7:19).
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Por nosotros mismos, es imposible solucionar el problema del peca-do:
“Aunque te laves con lejía, y amontones jabón sobre ti, la mancha de tu pecado sigue ante mí dice Dios, el Señor.” (Jeremías 2:22).
Un maravilloso plan de amor
3. ¿Cuál fue la amante reacción de Dios ante el problema del pe-cado?
Dios manifestó su inmenso amor: “Con amor eterno te he amado" (Jeremías 31:3). “Vivo yo, dice el Señor Dios: que no quiero la muerte del impío, sino
en que se vuelva el impío de su camino, y que viva.” (Ezequiel 33:11).
Por lo tanto, Dios trazó un asombroso plan para nuestra salvación, basado "en la esperanza de la vida eterna, que Dios, que no miente, prometió antes
del principio del tiempo.” (Tito 1:2).
4. ¿En qué consiste este maravilloso plan de salvación?
En su gran amor, el Padre dio el don precioso de su Hijo para nuestra salvación: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo
unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” (Juan 3:16).
Jesucristo el gran Salvador
5. ¿Cuál fue la misión de Jesucristo al venir a esta tierra?
Salvar a los pecadores: “Lo llamarás Jesús, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados.” (Mateo 1:21).
“El Hijo del Hombre vino a buscar y salvar lo que se había perdido.” (Lucas 19:10).
Vivir sin pecado: “Cristo apareció para quitar nuestros pecados. Y en Él no hay pecado.” (1ª Juan 3:5). Morir inocente: “Él mismo llevó nuestros
pecados en su cuerpo sobre el madero.” (1ª Pedio 2:24).
Resucitar triunfante: Cristo “Fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.” (Romanos 4:25)
6. Entonces, ¿en quién únicamente hay salvación?
Jesucristo es el único perfecto y suficiente Salvador: “Y en ningún otro hay salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en
quien podamos ser salvos.” (Hechos 4:12)
7. ¿Cómo somos salvos?
Aceptando la generosa gracia de Cristo “Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús.” (Romanos 3:24)
8. ¿Qué hermoso efecto tiene la redención lograda por Cristo?
El perdón de nuestros pecados. En Cristo “Tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia.” (Efesios 1:7)
La paz del corazón. “Habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.” (Romanos 5:1)
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Reconocer la desesperada condición que provoca el pecado.
“Por cuanto todos pecaron están destituidos de la gloria de Dios.” (Romanos 3:23)
2. Aceptar a Jesucristo, sin reservas, como mi único y suficiente Salvador.
“Cree en el Señor Jesucristo y serás salvo tú y tu casa.” (Hechos, 16:31)
“Porque todo aquel que invocaré el nombre del Señor, será salvo.” (Romanos 10:13)
3. Reconocer que la salvación es un don de la gracia de Dios.
“Aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo... Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de
vosotros, pues es don de Dios.” Efesios 2:5, 8)
4. Permitir que el Espíritu Santo nos guíe.
“Todos los que son guindos por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.” (Romanos 8:14).
MI DECISIÓN
En vista que Jesucristo vivió, murió y resucitó para salvarlo a usted, ¿quiere aceptarlo como su Salvador, y entregarle su corazón?
COMENTARIO GENERAL
Todo pecador puede obtener el perdón de sus pecados, por muy graves que sean. Para obtenerlo, debe creer en el amante Jesucristo y aceptarlo
como su Salvador personal.
“Todo es cuestión de creer, y además, cuestión de confiar. El proceso milagroso que Dios obra en la salvación de cada uno de nosotros, a costa de la
sangre preciosísima de su Hijo, sólo exige de nuestra parte esa disposición inicial que después se deja llevar por los caminos de la gracia" (Mons. Juan
Straubinger, en Espiritualidad Bíblica).
7. LA DULCE SEGURIDAD DEL PERDÓN
Por su vida sin pecado, su muerte inocente y su gloriosa resurrección, Cristo nos da la seguridad de la Salvación.
Por eso cada ser humano, con el divino auxilio y con la disposición contrita y humilde, da los pasos necesarios para apropiarse los méritos de la
salvación ofrecida por Jesucristo, y de esa manera obtener el perdón completo, la justificación y la reconciliación con Dios.
El camino de la salvación
1. ¿Cuál es nuestra desesperada condición?
Estamos puntidos “Por cuanto todos pecaron, están destituidos de la gloria de Dios.” (Romanos 3:23)
2. ¿Cómo únicamente podemos ser salvos?
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Por medio de Cristo. Jesús es “el Cordero de Dios que quita el pe-cado del mundo.” (Juan 1:29).
Jesús nos salva gracias a su vida, su muerte y su resurrección. “El cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra
justificación.” (Romanos 4:25).
Jesús es el único Salvador. “Porque en ningún otro hay salvación, porque no hay otro Nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser
salvos.” (Hechos 4:12)
3. ¿Cuán perfecto y definitivo fue el sacrificio de Cristo?
Su salvación fue del todo suficiente y provee plena salvación porque “Somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo, hecha una vez
y para siempre... Habiendo ofrecido por los pecados un solo sacrificio... hizo perfectos para siempre a los santificados.” (Hebreos 10:10, 12, 14)
Cómo obtenemos el perdón
4. ¿Cuál es el primer paso para obtener el perdón?
Reconocer humildemente que somos pecadores: “Porque yo reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre; delante de mí.” (Salmo 51:3)
5. ¿Qué profundo sentimiento debemos abrigar?
Debemos experimentar el arrepentimiento, que es sincero dolor por haber pecado y sincero propósito de no volver a pecar. “Porque la tristeza que es
según Dios produce arrepentimiento para salvación.” (2ª Corintios 7:10).
6. ¿Qué debemos reconocer y aceptar?
Debemos reconocer y aceptar sin reservas a Cristo como nuestro Salvador porque “Todos los que en Él creyeren, recibirán el perdón de los pecados
por su Nombre.” (Hechos 10:43).
7. ¿Qué debemos hacer con nuestros pecados?
Confesarlos: “Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones al Señor, y Tú perdonaste la mal-dad de mi pecado.”
(Salmo 32:5).
8. ¿Qué maravilla ocurre cuando uno acepta el perdón que Dios nos da?
Se experimenta una nueva naturaleza espiritual: “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí, todas son
hechas nuevas.” (2ª Corintios 5:17).
9. ¿A qué acto importante conduce el perdón?
Al bautismo, que debe ser precedido por el arrepentimiento: “Arrepentíos, y bautícense cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo, para perdón
de vuestros pecados, y recibiréis el don del Espíritu Santo.” (Hechos 2:38).
El perdón completo y definitivo
10. ¿Qué hace el pecador arrepentido, y cuál es el maravilloso resultado?
Arregla toda su cuenta de pecados pendientes: “Si confesamos nuestros pecados, Dios es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de
toda maldad.” (1ª Juan 1:9).
11. ¿Cuán completo es el perdón que nos da Dios?
Toda maldad queda limpiada: “Si andamos en la luz, como Él está luz... la sangre de su Hijo Jesús nos limpia de todo pecado.” (1ª Juan 1:7).
El perdón es total: “Justificados gratuitamente por su gracia mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por
medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los peca-dos pasados.” (Romanos 3:24, 25).
Dios borra y olvida nuestros pecados: “Yo, soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados.” (Isaías 43:25).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Dar prioridad a la seguridad de la salvación.
“Ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor.” (Filipenses 2:12).
2. Reconocer humildemente y sin excusas mi condición de pecador.
“Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.” (1ª Juan 1:8).
3. Experimentar verdadero y sincero arrepentimiento.
“Arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros peca-dos.” (Hechos 3:19).
4. Confesar mi pecado a Dios, y hacer restitución si es necesario.
“El que peque en alguna de estas cosas, confesará aquello en que pecó... Entonces, el que ha pecado y ofendido, restituirá lo que robó o el daño que
causó.” (Levítico 5:5 y 6:4).
5. Habiendo sido perdonado, no volver a pecar voluntariamente.
“Todo aquel que ha nacido de Dios, no practica el pecando, pues Aquel que fue por Dios le guarda, y el maligno no le toca.” (1ª Juan 5:18).
Al aceptar a Jesucristo y recibir el perdón, se produce una completa transformación de la vida. Dios concede fuerzas para no pecar más (Romanos 6:1,
2). Se recibe un nuevo corazón. (Ezequiel 36:26, 27).
MI DECISIÓN
Al reconocer que usted es un pecador. ¿Acepta el perdón que Jesús le ofrece. ¿Quiere confesar sus faltas a Dios, y pedir que le de el verdadero
arrepentimiento?
8. EL DESTINO DEL MUNDO
El único que puede dar una respuesta segura acerca del futuro es Dios. En un acto de amor, Dios ha revelado el futuro mediante las profecías
contenidas en la Santa Biblia. A continuación estudiaremos una de las más dramáticas profecías bíblicas que cubro gran parte de la historia humana,
penetra en el futuro y revela el hermoso plan de Dios do rehacer un mundo nuevo y feliz.
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Las maravillosas profecías dadas por Dios
1. ¿Quién únicamente conoce el futuro?
“Yo Soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí. Que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era
hecho.” (Isaías 46:9, 10)
2. ¿Por medio de qué revela Dios el futuro?
Por medio de las profecías. “Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos, como a una antorcha que
alumbra en lugar obscuro, hasta que el día esclarezca, y el Lucero de la mañana salga en vuestro corazón.” (2ª Pedro 1:19).
3. ¿A quiénes y cómo revela Dios el futuro?
Revela el futuro a los profetas: “Porque no hará nada el Señor Dios, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas.” (Amós 3:7)
El futuro revelado
El capítulo 2 del libro profético de Daniel contiene una extraordinaria profecía que describe la historia humana desde el tiempo del profeta hasta el fin
del drama humano.
4. ¿Qué notables acontecimientos sucedieron en Babilonia seis siglos antes de Cristo?
Dios le dio un sueño al rey. “Nabucodonosor tuvo un sueño, y se perturbó su espíritu, y no pudo seguir durmiendo.” (Daniel 2:1).
El rey consultó a los adivinos, pero ellos no pudieron interpretar el sueño: “Por esto, el rey con ira y con gran enojo mandó que matasen a todos los
sabios de Babilonia.” (Daniel 2:12).
Daniel, que estaba entre ellos, oró a Dios y pidió sabiduría, “entonces el misterio fue revelado a Daniel en visión de noche.” (Daniel 2:19).
5. ¿Cuál era el propósito de Dios al dar el sueño al rey?
Revelar el futuro. Daniel le dijo: “Estando tú, oh rey, en tu cama, te vinieron pensamientos por saber lo que había de venir en lo por venir; y el que revela
los misterios te mostró lo que ha de ser.” (Daniel 2:29)
6. ¿Qué había soñado el rey?
Un sueño intrigante: “Tú, oh rey, veías, y he aquí una gran imagen. Esta imagen, que era muy grande, y cuya gloria era muy sublime, estaba en pie
delante de ti, y su aspecto era terrible. La cabeza de esta imagen era de oro fino, su pecho y sus brazos, de plata; su vientre y sus muslos, de bronce; sus
piernas, de hierro; sus pies, en parte de hierro y en parte de barro cocido. Estabas mirando, hasta que una piedra fue cortada, no con mano, e hirió a la
imagen en sus pies de hierro y de barro cocido, y la desmenuzó.” (Daniel 2:31-34).
7. ¿Qué simboliza esa imagen?
Simboliza el surgimiento y la caída de los grandes imperios mundiales que han existido en la historia de este mundo.
a. La cabeza de oro, Babilonia, desde al año 600 al 538 A.C. “Tú, oh rey, eres rey de reyes, porque el Dios del cielo te ha dado reino, poder, fuerza y
majestad... Tú eres aquella cabeza de oro.” (Dan. 2:37, 38).
b. El pecho y los brazos de plata, Medo-Persia, del 538 – 331 A.C. “Después de ti se levantará otro reino inferior al tuyo,” (Dan. 2:39).
c. El vientre y los muslos de bronce, Grecia, del 331 – 168 A.C. “y un tercer reino de bronce que dominará toda la tierra.” (Dan. 2:39).
d. Las piernas de hierro, Roma, del 168 A. C al 476 D.C. “Y el cuarto reino será fuerte como hierro; y como el hierro desmenuza y rompe todas las
cosas, desmenuzará y quebrantará todo.” (Dan. 2:40).
e. Los pies, en parte de hierro y en parte de barro cocido, simboliza nuestro mundo actual. “Y lo que viste de los pies y los dedos... será un reino
dividido... y será en parte fuerte y en parte débil... Así como viste el hierro mezclado con barro, se mezclarán por medio de alianzas humanas,
pero no se unirán el uno con el otro.” (Dan. 2:41-43).
8. ¿Qué hermoso acontecimiento ocurrirá al fin de la historia humana?
Se establecerá el reino eterno de Dios. “De la manera que viste que del monte fue cortada una piedra, no con mano, la cual desmenuzó el hierro, el
bronce, el barro, la plata y el oro” simboliza que “en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será dejado
a otro pueblo, desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre.” (Daniel 2:45, 44).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Reconocer que Dios es soberano, conoce el futuro y controla los acontecimientos.
“El muda los tiempos y las edades; quita reyes y pone reyes; da la sabiduría a los sabios y la ciencia a los entendidos. Él revela lo profundo y lo
escondido, conoce lo que está en las tinieblas, y con Él mora la luz.” (Daniel 2 2I. 22).
2. Comprender que vivimos en el fin de la historia humana, y que pronto Dios establecerá el reino eterno de los redimidos.
La piedra “hirió a la imagen en sus pies de hierro y de arcilla, y los desmenuzó.” (Daniel 2:34) Hace más de 1,500 años que vivimos en el tiempo de los
reinos representados por los dedos, de hierro y arcilla. “En los días de estos reyes, [en nuestros días] el Dios del cielo levantará un reino que nunca jamás
será destruido.” (Daniel 2:44).
3. Entonces, ahora debemos buscar el reino eterno y nuestra salvación en él.
Jesús recomendó: “Buscad primero el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.” (Mateo 6:33).
“Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración.” (1ª Pedro 4:7)
MI DECISIÓN
Ya que Dios establecerá pronto su reino eterno, ¿desea usted prepararse para ese hermoso evento?
9. EL GLORIOSO REGRESO DE JESUCRISTO
Dios prometió volver a este mundo con gloria y poder. Esta gran doctrina, que llena de esperanza a los cristianos, se menciona sesenta y seis veces en
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el Nuevo Testamento.
La segunda venida de Cristo afectará profundamente a los seres humanos y a la tierra. Será motivo de indecible gozo para los fieles y de horror
indescriptible para los incrédulos. Necesitamos conocer de-talladamente los sucesos relacionados con el segundo advenimiento de Cristo a esta tierra
para llevar a cabo la preparación espiritual correspondiente.
El fin del drama mundial
1. ¿Cómo menciona la Biblia el fin del mundo?
Nuestro Señor Jesús enseñó con claridad que el mundo llegará a su fin: “He aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.” (Mateo
28:20).
2. ¿Qué dice la Biblia acerca del fin del mundo?
El mundo habrá llegado a una crisis insoluble. “Se enlutó la tierra y se marchitó, enfermó, cayó el mundo; se marchitaron los nobles de los pueblos de
la tierra. La tierra se contaminó bajo sus habitantes, porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto eterno. Por eso, la maldición
consumió la tierra, y sus habitantes fueron desolados. Por eso fueron consumidos los habitantes de la tierra y disminuyeron los hombres.” (Isaías 24:4-6)
Entonces Dios intervendrá. “El Dios del cielo levantará un reino que nunca jamás será destruido.” (Daniel 2:44).
Mediante Cristo Dios establecerá un nuevo orden. “El reino del mundo ha venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo, y reinará para siempre jamás.”
(Apocalipsis 11:15).
Maravillosa promesa de Jesucristo
3. ¿Cuál es uno de los primeros pedidos del padre nuestro?
“Venga tu reino.” (Mateo 6:10).
4. ¿Qué admirable promesa hizo Jesucristo?
Jesús prometió regresar, al decir: “Y si me fuere, y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy vosotros
también estéis.” (Juan 14:3).
5. ¿Cómo llama el apóstol Pablo al regreso de Jesucristo?
La bendita esperanza. “Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo.” (Tito
2:13).
¿Cómo será la segunda venida de Jesucristo?
6. ¿Qué advertencia hace Cristo acerca de su segunda venida?
“Se levantarán falsos Cristos y falsos profetas, y harán grandes, señales y prodigios, para engañar, si fuera posible, aun a los elegidos.” (Mateo 24:24).
7. Entonces, ¿cómo volverá Cristo?
En forma personal y visible: “Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.” (Hechos 1:11).
Vendrá con poder y gloria: “Entonces verán al Hijo del Hombre, que viene en las nubes, con poder y grande majestad.” (Lucas 12:27).
Vendrá acompañado de sus ángeles: “Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con Él, entonces se sentará en su
trono de gloria.” (Mateo 25:31).
Será visible para todos: “He aquí viene en las nubes, y todo ojo le verá.” (Apocalipsis 1:7).
Propósito de la venida de Cristo
8. ¿Cuál es el propósito de la segunda venida de Cristo con relación al ser humano?
Hacer el juicio: El “Señor Jesucristo ha de juzgar a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino.” (2ª Timoteo 4:1).
Pagar a cada uno lo que merece: “Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno
conforme a sus obras.” (Mateo 16:27).
9. ¿Cuál será el propósito del regreso de Cristo con relación al planeta?
Hacer un nuevo mundo: “Pero el día del Señor vendrá... y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán
quemadas... Pero nosotros esperamos según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia.” (2ª Pedro 3:10,13).
Reacciones ante la venida de Cristo
10. ¿Cómo reaccionarán los rebeldes?
“Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y todo siervo y todo libre, escondieron en las cuevas y entre las peñas de
los montes; y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros,, y escondednos de la vista de Aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del
Cordero. Porque ha llegado el gran día de su ira, ¿Y quién podrá sostenerse en pie?” (Apocalipsis 6:15-17).
11. ¿Cuán feliz será la reacción de los justos?
“Y se dirá en aquel día: He aquí, este es nuestro Dios, Le hemos esperarlo, y nos salvará; este es Dios a quien hemos esperado, y nos salvará; nos
gozaremos y nos alegraremos en su salvación.” (Isaías 25:9).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Siendo que el regreso de Cristo es la gran esperanza del cristianismo, debo amar su venida.
“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor,
Juez justo, en aquel día. Y no sólo a mí, sino a todos los que aman su venida.” (2ª Timoteo 4:8).
2. Estar preparado en todo momento.
“Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis.” (Mateo 24:44)
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3. Limpiarme de todo pecado conocido.
“Y todo aquel que tiene esta esperanza en Él, se purifica a sí mismo, así como Él es puro" (1ª Juan 3:3).
4. Ayudar a proclamar el regreso de Jesucristo.
“Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, por testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin.” (Mateo 24:14).
MI DECISIÓN
En vista de que Jesús volverá pronto para llevar a los fieles, ¿desea usted participar de esa felicidad eterna?
10. ¿CUÁNDO VOLVERÁ CRISTO?
Cristo volverá gloriosamente a esta tierra. La Biblia enseña que nadie sabe el momento exacto del regreso de Jesús. Pero por las muchas señales
cumplidas sabemos que ese grandioso día está cerca.
Así como en las carreteras hay carteles indicadores, Dios ha coloca-do en la carretera de la historia, señales que indican la proximidad del
advenimiento de Jesús.
El tiempo de la venida de Cristo
1. ¿Qué seria pregunta hicieron los discípulos a Jesús acerca de su regreso?
“Y estando Él sentado en el monte de las Olivos, los discípulos se acercaron aparte, diciendo: dinos, ¿Cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de
tu venida y del fin del mundo?” (Mateo 24:3).
2. ¿Se sabe la fecha del regreso de Jesús?
“Pero el día y la hora nadie sabe, ni aún los ángeles del cielo, sino sólo mi Padre.” (Mateo 24:36).
3. Entonces, ¿cómo podemos saber cuándo vendrá Cristo?
“Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como un ladrón.” (1ª Tesalonicenses 5:4).
Aunque la fecha exacta del advenimiento no ha sido revelada, Cristo pintó un cuadro fiel de las condiciones que prevalecerían antes de su regreso
Estudiemos ese cuadro.
Señales del regreso de Jesús
4. ¿Qué condiciones políticas acaecerían?
Guerras y rumores de guerras: “Oiréis guerras y rumores de guerras... Se levantarán nación contra nación, y reino contra reino.” (Mateo 24:6, 7).
Temor: “desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán a la tierra.” (Lucas 21:26).
Búsqueda de la paz: “Que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encienta, y
no escaparán.” (1ª Tesalonicenses 5:3).
Los débiles pretenderán ser fuertes: “Proclamad esto entre las naciones, proclamad guerra... diga el débil: Soy fuerte;” (Joel 3:9,10).
5. ¿Qué desastres sucederán antes del fin?
Hambres y enfermedades: “Habrá pestes y hambres.” (Mateo 24:7).
Movimientos sísmicos: “Y habrá grandes terremotos,” (Lucas 21:11).
Problemas ecológicos: Porque el Señor destruirá a “los que destruyen la tierra.” (Apocalipsis 11:18).
6. ¿Qué creciente decadencia social prevalecerá?
Aumento de la maldad: “Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará.” (Mateo 24:12).
Búsqueda desenfrenada de placeres y riquezas: “Vuestras riquezas están podridas... Vuestro oro y plata están enmohecidos... Habéis vivido en
deleites sobre la tierra, y sido disolutos.” (Santiago 5:1-6).
Tiempos peligrosos: “En los postreros días vendrán tiempos peligrosos.” (2ª Timoteo 3:1).
Degradación del carácter humano: “En los postreros días... habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos,
desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores,
impetuosos, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad; a éstos evita. (2 Timoteo 3:1-5).
7. ¿Qué señales astronómicas habrá?
Perturbación en los cielos: “El sol se oscurecerá, la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo y las potencias de los cielos serán
conmovidas.” (Mateo 24:29).
El oscurecimiento del sol aconteció el 19 de mayo de 1780, en el noreste de los Estados Unidos.
La caída de las estrellas ocurrió el 13 de noviembre de 1833.
8. ¿Qué condiciones religiosas habrá?
Falsos Cristos: “Se levantarán falsos Cristos y falsos profetas.” (Mateo 24:24).
Burladores: “En los postreros días vendían burladores.” (2ª Pedro 3:3)
Religiosidad aparente “Con apariencia de piedad.” (2ª Timoteo 3:5).
Apostasía: “En los postreros días algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios.” (1ª Timoteo 4:1).
Aumento del conocimiento. En el tiempo del fin “la ciencia se aumentará.” (Daniel 12:4).
9. ¿Qué debe ocurrir antes que venga Cristo?
“Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, por testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin.” (Mateo 24:14).
¿En qué tiempo estamos?
10. ¿Por qué Cristo no ha venido aún?
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“El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca,
sino que todos procedan al arrepentimiento.” (2ª Pedro 3:9).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Estudiar las señales y reconocer que vivimos en los días que preceden a la venida de Cristo.
“Cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que está cerca el reino de Dios.” (Lucas 21:31).
2. Estar continuamente preparado y velando.
“Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor... Por tanto, también vosotros estad preparados porque el Hijo del Hombre
vendrá a la hora que no pensáis.” (Mateo 24:42, 44).
“Por tanto, no durmamos como los demás, sino vigilemos y seamos sobrios.” (1ª Tesalonicenses 5:6).
3. Mantenerme preparado para recibir al Señor.
“Por cual, oh armados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por Él sin mancha e irreprensibles, y en paz.” (2ª Pedro
3:14). “Y todo aquel que tiene esta esperanza en Él, se purifica a sí mismo, así como Él es puro" (1ª Juan 3:3).
MI DECISIÓN
Siendo que Jesús volverá en breve a esta tierra, ¿quiere usted prepararse para recibirlo?
11. MIL AÑOS EN LA TIERRA Y EN EL CIELO
La Biblia presenta un cuadro muy alentador del plan de Dios para restaurarnos y restaurar al planeta tierra, que quedará totalmente purificado y
renovado para ser la residencia perfecta, hermosa y eterna de la raza humana.
El acontecimiento supremo
1. ¿Cómo empezará el prodigioso futuro que Dios planifica para los redimidos?
“Entonces verán al Hijo del Hombre, que vendrá en las nubes con gran poder y gloria.” (Marcos 13:26).
2. ¿Qué sucederá cuando Cristo vuelva a esta tierra?
“Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.” (Mateo 16:27).
“Y serán reunidas ante Él todas las naciones. Y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos Y pondrá las ovejas a su
derecha, y los cabritos a la izquierda.” (Mateo 25:32, 33).
3. ¿Qué sucederá con los justos muertos?
“Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán
primero.” (1ª Tesalonicenses 4:16)
4. ¿Qué ocurrirá entonces con los justos que estén vivos?
“He aquí, os digo un misterio. No todos dormiremos, pero todos seremos transformados. En un instante, en un abrir de ojos, a la final trompeta; porque
se tocará la trompeta y los muertos serán resucita-dos incorruptibles, y nosotros seremos transformados.” (1ª Corintios 15:51, 52).
5. ¿Cuál será la hermosa suerte de los justos?
“Luego nosotros, los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y
así estaremos siempre con el Señor.” (1ª Tesalonicenses 4:17)
6. En cambio, ¿cuál será la triste suerte de los rebeldes?
“Pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de
los hombres impíos.” (2ª Pedro 3:7).
Mil años con Dios
7. Los justos que fueron arrebatados en las nubes, irán a la morada de Dios donde estarán mil años.
“Y vivieron y reinaron con Cristo mil años.” (Apocalipsis 20:4).
8. ¿Cuál será la actividad principal de los justos en el cielo, durante esos mil años?
Juzgar: “Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron autoridad para juzgar.” (Apocalipsis 20:4).
9. ¿Qué pasará mientras tanto, con la tierra y con Satanás?
“Miré la tierra, y estaba sin forma y vacía.” (Jeremías 4:23).
Debido a esta circunstancia, Satanás quedará como atado, “Para que no engañe más a las naciones, hasta que mil años sean cumplidos.”
(Apocalipsis 20:3).
Victorioso desenlace del gran conflicto
10. ¿Qué sucederá al fin de los mil años?
Cristo, los santos y la ciudad capital descenderán a la tierra: “Y yo Juan, vi la santa ciudad, la Nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios.”
(Apocalipsis 21:2).
11. ¿Cómo culmina el gran conflicto entre el bien y el mal?
Resucitarán los impíos: “Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años.” (Apocalipsis 20:5).
Satanás queda desatado: “Cuando los mil años se cumplan, Satanás será suelto de su prisión, y saldrá a engañar a las naciones.” (Apocalipsis 20:7,
8).
Destruidos para siempre: “Y de Dios descendió fuego del cielo, y los devoró. Y el diablo que los engañaba, fue lanzado en el lago de fuego y azufre.”
(Apocalipsis 20:9, 10).
- 14 -
“Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno, y todos los soberbios, y todos los que hacen maldad serán estopa; aquel día que vendrá los
abrasará, y no quedará de ellos ni raíz ni rama.” (Malaquías 4:1)
Entonces lo justos heredarán la tierra: “Y tu pueblo, todos ellos serán justos, para siempre heredarán la tierra.” (Isaías 60:21).
Un nuevo mundo feliz
12. ¿Qué se dice del nuevo mundo que Dios dará a los fieles?
“Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón humano, son las que Dios ha preparado para los que le aman.” (1ª Corintios 2:9).
13. ¿Qué habrá terminado para siempre?
“Y ya no habrá más muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas pasaron.” (Apocalipsis 21:4).
14. ¿Cuál será el más grande privilegio de los santos?
“Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán, y verán su rostro, y su Nombre estará en sus
frentes. No habrá allí más noche, y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol porque Dios el Señor los iluminará, y reinarán por los siglos de
los siglos.” (Apocalipsis 22:3-5).
¿QUÉDEBO HACER?
1. Esperar con gozo los hermosos acontecimientos del futuro cercano.
“Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y una tierra nueva, en los cuales mora la justicia. Por lo cual, oh amados, estando en
espera de estas cosas, procurad con diligencia ser halla-dos por Él sin mancha e irreprensibles, en paz.” (2ª Pedro 3:13, 14).
2. Ser un cristiano cabal, para poder participar de la resurrección de los justos.
“Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de
Dios y de Cristo.” (Apocalipsis 20:6).
MI DECISIÓN
¿Quiere usted aceptar a Jesús y disfrutar de la gran esperanza cristiana?
12. EL JUICIO HA LLEGADO
Los cristianos están familiarizados con la expresión “juicio final.” La Biblia afirma que habrá un juicio, que en realidad tendrá varias fases importantes.
Por la expresión ‘juicio final’ entendemos un juicio general de todos los justos y de todos los malos.”
“Jesús volverá al mundo al final de los tiempos, para ejercer su poder de juez soberano. Este juicio llamado público, universal, último, es necesario
para justificar la divina providencia, glorificar a Jesucristo y alegrar a los justos.” (Hillaire, La Religión Demostrada).
La realidad del juicio final
1. ¿Qué acto serio y trascendental realizará Dios?
“Por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia.” (Hechos 17:31).
2. ¿Cuántos comparecerán ante ese juicio?
“Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo... De manera que cada uno de nosotros dará cuenta a Dios de sí.” (Romanos 14:10, 12).
3. ¿Qué se ventilará en el juicio?
“Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras
estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo.” (2ª Corintios 5:10).
El juicio en acción
4. ¿Cuáles son las tres fases del juicio final?
A.
La primera precede al segundo advenimiento de Cristo, y trata el caso de los que profesaron ser leales a Dios. “Porque es tiempo que el juicio
comience por la casa de Dios.” (1ª Pedro 4:17).
B.
La segunda fase trata el caso de los infieles y los ángeles rebeldes. Esta fase la realizan Cristo y los redimidos, durante el milenio. “O no sabéis
que los santos han de juzgar al mundo... O no sabéis que hemos de juzgar a los ángeles... Y vi tronos y se sentaron sobre ellos los que recibieron
facultad de juzgar.” (1ª Corintios 6:2, 3; Apocalipsis 20:4).
C.
La tercera fase es la ejecución del juicio, la destrucción final de los infieles. “Y subieron sobre la anchura de la tierra y rodearon el campamento de
los santos y la ciudad amada; y de Dios descendió fuego del cielo y los consumió.” (Apocalipsis 20:9), y la recompensa feliz de los fieles. “El que
venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo.” (Apocalipsis 21:7)
5. ¿Quién es el juez?
Dios, el Padre ocupa el lugar de honor en el juicio (Daniel 7:8, 9), pero ha dado al Hijo la tarea específica de juzgar.
Jesús explicó: “Porque el Padre a nadie juzga, sino que todo el juicio dio al Hijo.” (Juan 5:22).
6. ¿En qué se basará el juicio?
Se basa en los registros asentados en los libros del cielo, que son:
Libro de la Vida: “Y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el Libro de la Vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que
estaban escritas en los libros, según sus obras.” (Apocalipsis 20:12).
Libro de Memoria: “Y fue escrito un Libro de Memoria delante Él para los que temen al Señor, y para los que piensan en su Nombre.” (Malaquías 3:16).
“Arrepentíos y convertíos para que sean borrados vuestros pecados.” (Hechos 3:19).
7. ¿Quiénes son los testigos?
Los ángeles: “No dejes que tu boca te haga pecar, ni digas delante del ángel que fue ignorancia.” (Eclesiastés 5:6).
- 15 -
8. ¿Cuál es la norma usada para el juicio?
La Ley de Dios: “Así hablad y así obrad, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la libertad.” (Santiago 2:12).
9. ¿Quién es el abogado e intercesor?
“¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también
intercede por nosotros.” (Romanos 8:34).
“Y si alguno hubiere pecado, Abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.” (1ª Juan 2: I). En la primera parte del juicio, antes del
advenimiento. Cristo actúa de abogado intercesor. Luego, como juez desciende a ejecutar la sentencia.
Seguridad del juicio
10. ¿Qué garantía hay de una justicia verdadera?
Dios es el juez (2ª Timoteo 4:8)
El juicio es justo (Romanos 2:2)
Un juicio sin favoritismo (Romanos 2:11)
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Reconocer que habrá un juicio divino en el cual todo será considerado.
“Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala.” (Eclesiastés 12:14).
2. Vivir de acuerdo a la voluntad de Dios y de sus mandamientos; para que por los méritos de Cristo, sea justificado.
“El fin de todo discurso oído es este: Teme a Dios y guarda sus mandamientos, porque esto es el todo del hombre.” (Eclesiastés 12:13)
3. No temer el juicio, sino confiar en Cristo y en su Palabra.
“De cierto, de cierto os digo, el que oye mi palabra y cree al que me envió, tiene vida eterna, y no vendrá a condenación mas ha pasa-do de muerte a
vida.” (Juan 5:24) “En esto se ha perfeccionado el amor en nosotros para que tengamos confianza en el día del juicio.” (1ª Juan 4:17).
4. Aceptar a Jesús como nuestro Abogado e Intercesor.
“Por lo cual, puede también salvar eternamente a los que por Él se allegan a dios, viviendo siempre para interceder por ellos.” (Hebreos 7:25).
MI DECISIÓN
Ante la realidad del juicio divino, ¿desea usted aceptar a Jesús como su abogado, y confiarle mi vida?
COMENTARIO
La Palabra de Dios establece que al final del período profético de los 2,300 años, “el Santuario (celestial) será purificado.” (Daniel 8: 14).
El Santuario terrenal era el templo del culto de los judíos Una vez al año se realizaba en ese Santuario una importante ceremonia de juicio. La Biblia
explica que en el cielo está el verdadero Santuario (Hebreos 8:2, 5). La purificación del Santuario celestial no es otra cosa que el comienzo del juicio divino
de los fieles. Este juicio ya empezó al finalizar los 2,300 años, es decir, en 1844.
13. UNA LEY QUE NOS PROTEGE
Dios ha establecido una sabia ley moral para la felicidad de sus hijos.
La santa ley contiene diez mandamientos, que son la suma del deber humano hacia Dios y hacia nuestros semejantes, y al seguirlos disfrutamos de
paz, bienestar y felicidad.
Importancia de la Ley de Dios
1. ¿Quién dio esa santa ley?
“Y habló el Señor con vosotros de en medio del fuego. Oísteis la voz de sus palabras... Y Él os anunció su pacto [alianza], el cual os mandó poner por
obra, los diez mandamientos. Y los escribió en dos tablas de piedra.” (Deuteronomio 4:12, 13)
2. ¿Por qué es tan importante esta Ley?
“Tu justicia es justicia eterna, y tu ley la verdad.” (Salmo 119:142)
“Así hablad, y así obrad, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la libertad.” (Santiago 2:12)
Eternidad de la santa Ley de Dios
3. ¿Por cuánto tiempo son válidos los mandamientos de Dios?
“Hace ya mucho que he entendido tus mandamientos, que para siempre los has establecido.” (Salmo 119:152)
4. ¿Realizó Jesús algún cambio en la Ley moral?
“No penséis que he venido a abrogar la ley o los profetas, no he venido a abrogar, sino a cumplir. Porque de cierto os digo, que hasta que perezca el
cielo y la tierra, ni una jota ni un tilde perecerá de la ley, hasta que todas las cosas sean hechas.” (Mateo 5:17, 18).
5. ¿Tiene alguien autoridad para cambiar la santa Ley de Dios?
“La ley de Dios es perfecta, que convierte el alma.” (Salmo 19:7)
“He entendido que todo lo que Dios hace, eso será perpetuo, sobre aquello no se añadirá, ni de ello se disminuirá.” (Eclesiastés 3:14).
6. ¿Quien ha intentado cambiar la Ley de Dios?
Un poder político religioso. “Y hablará palabras contra el Altísimo; a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos y la ley.”
(Daniel 7:25).
7. ¿Qué nos advierten Cristo y los apóstoles?
- 16 -
Jesús afirmo: “En vano me honran, enseñando como doctrinas mandamientos de hombres.” (Mateo 15:9).
“Pedro y los apóstoles respondieron: Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.” (Hechos 5:29).
El cristianismo y la santa Ley de Dios
8. ¿Cuál es la relación entre la salvación y la Ley de Dios?
La ley de Dios no salva, pues Cristo es el único que salva. Sin embargo, la Ley de Dios juega un papel vital en el proceso de la salvación.
La ley de Dios revela el pecado: “Porque por las obras de la Ley ninguna carne se justificará delante Él; porque por la Ley es el conocimiento del
pecado.” (Romanos 3:20).
Nos guía a Cristo, quien salva: “La Ley es nuestro ayo [tutor], para llevarnos a Cristo, para que seamos justificados por la fe.” (Gálatas 3:24).
Nuestra obediencia a la Ley demuestra nuestro amor a Dios. Jesús afirmó: “Si me amáis, guardad mis mandamientos.” (Juan 14:15).
9. ¿Cuántos mandamientos debemos guardar?
Todos, los diez: “Porque cualquiera que hubiere guardado toda la Ley, y ofendiere en un punto, es culpado de todos.” (Santiago 2:10).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Siendo que la Ley de Dios es tan importante, debo meditar en ella y aprender a amarla.
“Bienaventurado el varón... que en la ley Dios está su delicia, y en su ley medita de día y de noche. Será como árbol plantado junto a corrientes de
aguas, que da fruto a su tiempo, y su hoja no cae, y todo lo que hace, prosperará.” (Salmo 1:1-3)
“¡Oh, cuánto amo yo tu Ley! Todo el día en ella es mi meditación.” (Salmo 119:97).
2. Nunca olvidar los Mandamientos.
“Nunca jamás me olvidaré de tus Mandamientos, porque con ellos me has vivificado.” (Salmo 119:93).
3. Es nuestro privilegio obedecer la buena Ley de Dios.
“Porque no son los oidores de la ley los justos ante Dios, sino los hacedores de la ley serán justificados.” (Romanos 2:13).
“Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la ley de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será
bienaventurado en lo que hace.” (Santiago 1:25).
4. Reconocer que por esfuerzo propio, no puedo guardar fiel-mente esa santa ley.
“Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios, pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me
lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros.” (Romanos 7:22, 23).
5. Unirme a Cristo para que Él me de fuerza y placer para obedecer su santa Ley.
Jesús reveló: “Yo Soy la vid, vosotros los pámpanos. El que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto. Porque separados de mí, nada
podéis hacer.” (Juan 15:5).
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” (Filipenses 4:13).
6. Con la fe en Cristo, guardaré los mandamientos, lo que me capacitará para ser ciudadano del reino eterno de Dios.
“Bienaventurados los que guardan sus Mandamientos, para que su potencia sea en el árbol de la vida, y entren por las puertas en la ciudad.”
(Apocalipsis 22:14).
MI DECISIÓN
Siendo que la santa Ley de Dios expresa su carácter, ¿desea usted, con la ayuda de Dios, guardar todos sus Mandamientos?
COMENTARIO
La Ley de Dios es la expresión del carácter amante de Dios. Como el carácter bondadoso de Dios no cambia, así, su Ley no puede cambiar.
Dios y su Ley son santos: (1ª Pedro 1:16: Romanos 7:12).
Dios es justo, y su Ley es justa: (Juan 17:25; Salmo 119:172).
Dios es perfecto, y su Ley es perfecta: (Mateo 5:48; Salmo 19:7).
Dios es Eterno, y su Ley es Eterna: (Salmo 10:16; 111:7, 8).
Dios es amor, y su Ley es amor: (1ª Juan 4:8; Romanos 13:10).
14. EL VERDADERO DÍA DE REPOSO
Dios estableció el sábado para nuestro bien físico y espiritual. Al guardar el sábado le rendimos tributo y disfrutamos su bendición.
El día de reposo dado por Dios
1. ¿Cuándo estableció Dios el día de reposo?
En la misma semana de la creación: “Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo, y reposó en el día séptimo de todo lo que había hecho en la
creación.” (Génesis 2:2).
2. ¿Por qué el sábado es un día especial?
“Y bendijo Dios el día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de todo lo que había hecho en la creación.” (Génesis 2:3).
3. ¿Cómo fue la santidad del sábado confirmada en forma solemne y permanente?
Dios confirmó el sábado como día de santo descanso y adoración, cuando lo colocó en el mismo corazón de su Ley. Su mandamiento dice:
“Acuérdate del día sábado para santificarlo. Seis días trabajarás y harás toda tu obra. Mas el séptimo día será de reposo para el Señor tu Dios. No hagas
en él obra alguna... Porque en seis días hizo el Señor los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día. Por tanto,
el Señor bendijo el sábado y lo santificó.” (Éxodo 20:8-11).
4. ¿Para beneficio de quién estableció Dios el sábado?
- 17 -
Jesús dijo: “El sábado por causa del hombre es hecho.” (Marcos 2:27).
Historia del sábado
5. ¿Cuán antiguo es el sábado?
El sábado como día de descanso y adoración es la más antigua institución religiosa. Fue ordenado en la misma creación (Génesis 2:2, 3), y fue
respetado por los patriarcas y por el pueblo de Israel (Éxodo 16:21-30).
6. ¿Qué enseña el Nuevo Testamento acerca del sábado?
Jesús guardaba el sábado: Un día Jesús “vino a Nazaret, donde se había criado; y entró, conforme a su costumbre, el día sábado en la sinagoga, y se
levantó a leer.” (Lucas 4:16).
Al terminar la obra de la creación, Cristo descansó el sábado, y cuando completó la obra de la redención, también descansó el santo sábado, esta vez
en la tumba.
María, la madre de Jesús, y las otras mujeres creyentes guardaban el sábado: “Y las mujeres que habían venido con él desde Galilea, siguieron de
cerca, y vieron el sepulcro, y cómo fue puesto su cuerpo. Y vueltas, prepararon especias aromáticas y ungüentos, y reposaron el sábado, conforme al
mandamiento.” (Lucas 23:55, 56).
El apóstol Pablo guardaba el sábado. Aunque durante la semana trabajaba haciendo carpas, en ese día predicaba: “Y discutía en la sinagoga todos
los sábados... Y Pablo, como acostumbraba, entró a ellos, y por tres sábados debatió con ellos de las Escrituras.” (Hechos 18:2-4; 17:2).
7. ¿Qué día se guardará en la tierra nueva?
“Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra, que yo hago, permanecen delante de mí, dice el Señor, así permanecerá vuestra simiente y vuestro
nombre. Y será que de mes en mes, y de sábado en sábado, vendrá toda carne a adorar delante de mí, dice el Señor. (Isaías 66:22, 23).
El cristiano y el sábado
8. ¿Por qué el cristiano observa el sábado?
Porque es una señal entre Dios y su pueblo: “Santificad mis sábados, y sean por señal entre mí y vosotros; para que sepáis que yo soy el Señor
vuestro Dios.” (Ezequiel 20:20).
Porque Cristo guardó el sábado, y nosotros debemos seguir su ejemplo “El que dice que permanece en Él, debe andar como Él anduvo.” (1ª Juan
2:6).
9. ¿Cómo se debe observar el santo sábado?
En forma religiosa: “Si retrajeres del sábado tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y al sábado llamares delicias, santo, glorioso del Señor; y lo
venerares, no haciendo tus caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus palabras.” (Isaías 58:13).
Abstenerse de los trabajos comunes. “No hagas en él obra alguna.” (Éxodo 20 10).
Guardarlo desde el viernes a la puesta del sol, hasta el sábado a la puesta del sol. “De tarde a tarde guardaréis vuestro sábado.” (Levítico 23:32).
Asistir al culto de adoración como la hacía Jesús. Jesús “vino a Nazaret, donde se había criado; y entró, conforme a su costumbre, el día sábado en la
sinagoga, y se levantó a leer.” (Lucas 4:16).
Realizar buenas obras: Jesús enseñó que “es lícito hacer bien en sábado.” (Mateo 12:12).
Dar testimonio cristiano “Y un día sábado salimos de la puerta junto al río, donde solía ser la oración; y sentándonos, hablamos a las mujeres que se
habían reunido.” (Hechos 16:13).
10. ¿Qué hermosa bendición promete Dios a los que guardan el sábado?
“Bienaventurado el hombre que esto hiciere, y el hijo del hombre que esto abrazare: que guarda el sábado de profanarlo.” (Isaías, 56:2).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Reconocer qué Dios estableció el sábado como memorial de la creación.
“Y bendijo Dios al séptimo día y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.” (Génesis 2:3).
2. Reconocer que Cristo, el Salvador, es Señor del sábado.
“Así que el Hijo del Hombre es Señor aún del sábado.” (Marcos 2:28).
3. Hacer todos los preparativos antes de la puesta del sol, el viernes.
“Y era la tarde del día de preparación; y estaba por comenzar el sábado. Y las mujeres que con Él habían venido de Galilea, siguieron también, y
vinieron al sepulcro, y cómo fue puesto su cuerpo. Y vueltas aparejaron especias aromáticas y ungüentos y reposaron el sábado conforme al
mandamiento.” Lucas 23:54-56.
4. Hacer todos los trabajos durante la semana, para dedicar el sábado a Dios.
“Seis días se trabajará, pero el séptimo día será sábado de reposo, día de santa reunión. Ninguna obra haréis.” (Levítico 23:3).
5. Asistir los sábados a la iglesia, y manifestar reverencia.
“Yo me alegré con los que me decían: A la casa del Señor iremos.” (Salmo 122:1).
MI DECISIÓN
En vista de que el sábado es para su bendición, ¿está usted dispuesto a guardarlo fielmente?
15. ¿A QUIÉN OBEDECER?
La práctica de Jesús, de los apóstoles y de la Iglesia primitiva indican que el verdadero día de reposo es el sábado.
Sin embargo, muchos guardan el domingo. Este cambio no vino de Dios. ¿Cómo se realizó este grave atentado contra un claro manda-miento de
Dios?
- 18 -
1. ¿Qué día de reposo ordenó Dios?
Al terminar la creación, Dios descansó el séptimo día, el sábado, lo bendijo y lo santificó. (Génesis 2:1-3).
La orden de guardar el sábado fue ratificada por la ley de Dios (Éxodo 20:8-11). Y Jesús declaró que Él es el Señor del sábado (Mateo 12:8), es decir,
que el sábado es el verdadero día del Señor.
Un audaz y grave atentado
2. ¿Qué serio atentado contra la Ley de Dios estaba profetizado?
Daniel predijo que en el tiempo del Imperio Romano se levantaría un poder político religioso que: Hablaría “palabras contra el Altísimo, a los santos del
Altísimo quebrantará, y pensará cambiar los tiempos y la ley.” (Daniel 7:25)
3. ¿Qué graves acontecimientos tendrían lugar en la iglesia cristiana?
Pablo predijo que se introducirían doctrinas erróneas, y que se levantaría un poder contrario a Dios. “Y de vosotros mismos se levantarán hombres que
hablen cosas perversas, para llevar discípulos tras sí.” (Hechos 20:30).
4. En medio de esta apostasía, ¿qué cambio se efectuó?
El emperador romano Constantino, emitió un decreto en el año 321 que ordenaba: “Que todos los magistrados, vecinos de las ciudades y artesanos
descansen en el venerable día del sol (el domingo)... (Corpus, Juris Civilis, libro 3, tit. 12).
El cambio del sábado al domingo fue un proceso gradual precipitado por ese decreto civil de Constantino, y ratificado por la iglesia católica en el
Concilio de Laodicea del siglo IV D.C. El domingo era el día en que los paganos mitraítas adoraban el sol invicto. Por eso el domingo se llamaba “el día del
sol.”
Pero ese cambio no tiene apoyo bíblico. Así lo reconocen los mismos jerarcas católicos, como el cardenal Gibbons, quien escribió: “Podéis leer la Biblia
desde el Génesis hasta el Apocalipsis, y no encontraréis una sola línea que autorice la santificación del domingo. Las Escrituras hablan de la observancia
religiosa del sábado...” (La fe de nuestros padres, Pág. 98, edición 1903).
El respetado historiador eclesiástico Neander declara: “La fiesta del domingo, como todas las demás, fue siempre una institución humana. Muy lejos
estuvo de la intención de los apóstoles darle carácter de mandamiento divino, ni tampoco ellos ni la iglesia primitiva pensaron jamás en transferir las leyes
del sábado al domingo.” (Church History, –La Historia de la Iglesia, Pág. 186).
Dios condena los cambios de su Ley
5. ¿Cuál es la actitud de Dios y de Jesús hacia las verdades doctrinales?
“No olvidaré mi pacto, ni cambiaré lo que ha salido de mis labios.” (Salmo 89:34). Y Cristo declaró: “Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis
en mi amor; así como yo también he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor.” (Juan 15:10).
“No penséis que he venido para abrogar la Ley o los profetas. No he venido para abrogar, sino para cumplir,” (Mateo 5:17).
6. ¿Tienen los hombres derecho a cambiar la Ley de Dios?
“No añadiréis a la palabra que os mando, ni disminuiréis de ella, para que guardéis los mandamientos del Señor vuestro Dios, que os ordeno.”
(Deuteronomio 4:2). Y Cristo agregó: “¿Por qué también vosotros quebrantáis el mandamiento de Dios por vuestra tradición?” “En vano me honran,
enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres.” (Mateo 15:3, 9).
Restauración del sábado
7. ¿Qué profetiza la Biblia acerca de la restauración del sábado?
Que en el tiempo del fin surgirá un pueblo que restaurará las verdades eternas de Dios, respetará los Diez Mandamientos en su totalidad y
restablecerá el sábado como día de santo reposo:
“Y los tuyos edificarán las ruinas antiguas, levantarás los cimientos de generaciones en generación levantarás y serás llamado reparador de portillos,
restaurador de calzadas para habitar.” (Isaías 58:12).
“Vi a otro ángel que volaba por el cielo, con el evangelio eterno para predicarlo a los que habitan en la tierra, a toda nación y tribu, lengua y pueblo.”
(Apocalipsis 14:6).
“Entonces el dragón (el diablo) se airó contra la mujer (la iglesia), y fue a hacer guerra contra los otros de la simiente de ella, los que guardan los
Mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesús.” (Apocalipsis 12:17).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Reconocer que el verdadero día de descanso dado por Dios es el sábado, y cualquier otra práctica contraria es de origen humano.
“Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.” (Hechos 5:29).
2. Reafirmar mi decisión de guardar el día que Dios santificó.
“Y el que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, comete pecado.” (Santiago 4:17).
3. Ser fiel a Dios guardando todos sus mandamientos.
“Mirad, yo os he enseñado estatutos y preceptos que el Señor mi Dios me mandó... Guardadlos, pues, y ponedlos por obra; porque ésta es vuestra
sabiduría y vuestra inteligencia.” (Deuteronomio 4:5, 6).
4. Considerar que es un gran privilegio y una gran bendición guardar el santo día del Señor.
“Si retrajeres del sábado tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y al sábado llamares delicias, santo, glorioso del Señor; y lo venerares, no haciendo
tus caminos, ni buscando tu voluntad, ni ha-blando tus palabras. Entonces te deleitarás en el Señor, y yo te haré subir sobre las alturas de la tierra, y te
daré a comer la heredad de Jacob tu padre, porque la boca del Señor lo ha hablado.” (Isaías 58:13, 14).
MI DECISIÓN
¿Quiere usted obedecer a Dios, y no a los hombres, guardando el sábado?
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16. ESPERANZA SEGURA ANTE LA MUERTE
El patriarca Job preguntó: “Si el hombre muriere, ¿volverá a vivir?" (Job 14:14). Las contradictorias respuestas humanas son meras suposiciones. Pero
Dios, en su amor y sabiduría, nos ha dado una res-puesta segura, que combina la verdad, el consuelo y la esperanza.
¿Qué es la vida?
1. ¿Por quién vino la vida?
Dios es el autor de la vida: “Y creó Dios al hombre a su imagen,... varón y hembra los creó.” (Génesis 1:27)
2. ¿Qué proceso siguió Dios para darnos la vida?
Asoció la materia con el soplo de la vida: “Formó, pues Dios el Señor al hombre del polvo de la tierra, y alentó en su nariz soplo de vida; y fue el hombre en
alma viviente.” (Génesis 2:7).
Hombre = Polvo + Soplo de vida = Alma viviente. [Un ser viviente]
¿Qué es la muerte?
3. ¿Cómo entró la muerte?
Por medio del pecado: “El pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte. Así la muerte pasó a todos los hombres, pues todos
pecaron.” (Romanos 5:12),
4. ¿Cuál es el proceso de la muerte?
Lo inverso al de la vida: “y el polvo vuelva a la tierra, como era, y el aliento de vida vuelva a Dios que lo dio.” (Eclesiastés 12:7).
Dios
Hombre = Polvo + Soplo de vida = Alma viviente
Tierra
5. ¿Cuál es la verdadera condición de los muertos?
Se acaba su existencia: “Les quitas el aliento, dejan de ser, y vuelven al polvo.” (Salmo 104:29).
La persona desaparece: “Porque los que viven saben que han de morir; pero los muertos nada saben, ni tienen más paga; porque su memoria es puesta
en olvido. También su amor y su odio y su envidia perecieron ya, y nunca más tendrán parte en todo lo que se hace bajo el sol.” (Eclesiastés 9:5, 6)
No tienen vida consciente: “Sale su aliento, vuelven a la tierra. En ese mismo día perecen sus pensamientos.” (Salmo 146:4).
El muerto queda en el sepulcro No va al cielo ni a ningún otro lugar, y allí permanece inconsciente: “David, que murió, y fue sepultado, y su sepulcro
está con nosotros hasta el día de hoy... Porque David no subió al cielo.” (Hechos 2:29, 34).
6. ¿Podemos comunicarnos con los muertos?
Siendo que los muertos están inconscientes, cualquier pretendida comunicación con ellos es sólo un engaño. Satanás tiene el poder de hacer “señales
y milagros mentirosos.” (2ª Tesalonicenses 2:9).
Por eso Dios prohíbe terminantemente cualquier intento de hablar con los muertos: “No sea hallado en ti quien haga pasar su hijo o su hija por el fuego,
ni quien practique adivinación, astrología, hechicería o magia; ni quien sea adivino, ni médium, ni espiritista, ni quien consulte a los muertos. Porque es
abominable al Señor cualquiera que haga estas cosas.” (Deuteronomio 18:10-12).
Una maravillosa seguridad
7. ¿Con qué se compara la muerte?
La Biblia compara la muerte con el sueño. Jesús mismo se expresó así: “Nuestro amigo Lázaro duerme... Pero Jesús decía esto de la muerte de
Lázaro.” (Juan 11:11, 13).
Así como después de un arduo día de trabajo, sobreviene una noche de sueño reparador, así después de una vida repleta de problemas, sinsabores, y
también de satisfacciones, Dios permite el tranquilo sueño de la muerte.
8. ¿Qué segura esperanza aguarda al cristiano, después de la muerte?
La resurrección de los justos. “Porque el Señor mismo, con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo, y los
muertos en Cristo resucitarán primero... Por lo tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras.” (1ª Tesalonicenses 4: 16, 18).
9. ¿Qué milagro ocurrirá en la resurrección de los justos?
Una total transformación: “He aquí, os digo un misterio. No todos dormiremos, pero todos seremos transformados. En un instante, en un abrir de ojos, a
la final trompeta; porque se tocará la trompeta y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. Porque es necesario que
esto corruptible sea vestido de in-corrupción, y esto mortal sea vestido de inmortalidad.” (1ª Corintios 15:51-53).
10. ¿Qué sucederá con la muerte y los impíos?
Serán destruidos: “Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte.” (1ª Corintios 15:26).
11. ¿Qué precioso don conferirá entonces Dios al hombre?
La inmortalidad: “Porque es necesario que esto corruptible sea vestido de incorrupción, y esto mortal sea vestido de inmortalidad... entonces se
cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte con victoria.” (1ª Corintios 15:53, 54).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Abrigar la esperanza de la vida.
“Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.” (1ª
Tesalonicenses 4:13).
2. Tener plena seguridad de que Jesús comprende y simpatiza con el dolor de la separación temporal que causa la muerte.
“Jesús entonces, al verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió.” (Juan 11:33).
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3. Reconocer que los muertos están inconscientes, descansando.
“Los muertos nada saben.” (Eclesiastés 9:5).
4. Tener plena seguridad y esperanza en la resurrección.
“Te será recompensado en la resurrección de los justos.” (Lucas 14:14).
5. Creer que Jesús tiene poder para resucitarnos y darnos vida eterna.
“Jesús le dijo: Yo Soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.” (Juan 11:25).
MI DECISIÓN
Siendo que la muerte es un sueño hasta el regreso de Jesús, ¿quiere usted confiar en su gracia para ser resucitado con los justos?
17. LA IGLESIA CRISTIANA Y SU FUNDAMENTO
Siempre Dios ha tenido instrumentos selectos, llamados a ser depositarios y testigos de la verdad eterna. Al principio fueron los patriarcas, después la
nación hebrea elegida para representar a Dios entre las naciones. Finalmente Jesús estableció la iglesia cristiana, a la cual podrán pertenecer los que
aceptan a Jesús y son fieles a la verdad para predicar el evangelio’
Fundamento de la iglesia
1. ¿Quién fundó la iglesia cristiana?
Cristo la fundó al declarar: “Sobre esta Roca edificaré mi iglesia, y las puertas del Hades [muerte] no prevalecerán contra ella.” (Mateo 16:18).
2. ¿Cuál es el fundamento de la iglesia?
La Roca sobre la cual está edificada la iglesia es Cristo. “Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del
ángulo Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor.” (Efesios 2:20, 21).
“Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo.” (1ª Corintios 3:11).
3. ¿Cuál es la relación de Cristo con la iglesia?
Cristo es la cabeza de la iglesia: Hablando de Cristo, afirma que Dios “sometió todas las cosas bajo sus pies y lo dio por cabeza sobre todas las cosas
a la iglesia.” (Efesios 1:22).
Cristo tiene el primado en la iglesia. “Y Él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, el que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que
en todo tenga la preeminencia.” (Colosenses 1:18).
Cristo ama a la iglesia. “Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella.”
Organización de la iglesia
4. ¿Quiénes son los dirigentes espirituales de la iglesia?
Pastores, ancianos, diáconos, y otros miembros de autoridad. “Y Él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas, a otros,
pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los san-tos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo.” (Efesios 4:11, 12).
Pablo y Bernabé “constituyeron ancianos en cada iglesia.” (Hechos 14:23). “Los diáconos... que guarden el ministerio de la fe.” (1ª Timoteo 3:8, 9).
5. ¿Cómo se llaman entre sí los fieles?
Con el término de ‘hermanos.’ “Uno es vuestro, Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos.” (Mateo 23:8).
6. ¿Cómo debe gobernarse la iglesia?
Las decisiones se deben tomar por el conjunto de la iglesia, orientada por sus dirigentes. “Entonces los doce convocaron a la multitud de los
discípulos.” (Hechos 6:2).
7. ¿Cuáles son las ceremonias y ritos de la iglesia?
El matrimonio: “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne Por tanto, lo que Dios unió,
no lo separe el hombre.” (Mateo 19:5, 6).
Bendición para los niños: “Entonces le fueron presentados unos niños para que les impusiera las manos, y orase por ellos... Y Él puso sus manos
sobre ellos, y partió de allí.” (Mateo 19:13, 15).
Unción de los enfermos: “¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos y oren por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor.”
(Santiago 5:14).
Consagración de los dirigentes: “A los cuales presentaron ante los apóstoles, quienes orando, les impusieron las manos.” (Hechos 6:6).
Bautismo: “Así que, los que recibieron su palabra, fueron bautizados.” (Hechos 2:41).
Lavamiento de los pies: Jesús “comenzó a lavar los pies de los discípulos... vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros.” (Juan 13:517).
Santa cena o comunión: “Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado... Así, pues, cada vez que comáis este pan, y bebáis esta copa, la
muerte del Señor anunciáis hasta que venga.” (1ª Corintios 11:23-26),
El cometido de la iglesia
8. ¿Qué relación tiene la iglesia con la verdad?
Son una unidad: “La casa del Dios viviente, es columna y baluarte de la verdad.” (1ª Timoteo 3:15).
9 ¿Cuál es la principal misión de la iglesia?
Dar a conocer el evangelio: “Por tanto, id y haced discípulos en todas las naciones, bautizándolos en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo,
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado Y yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.” (Mateo 28:19, 20).
10. ¿Cuál es el ideal de Cristo para su iglesia?
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Que llegue a la perfección: “Cristo amó a la Iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua
por la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga, ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin
mancha.” (Efesios 5:25-27).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Reconocer que Cristo es el fundador, cabeza y fundamento de la iglesia.
“Siendo Jesucristo mismo la piedra angular.” (Efesios 2:20).
2. Apreciar el alto honor de ser parte de la iglesia de Cristo.
“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de
las tinieblas a la luz admirable. Vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios.” (1ª Pedro 2:9, 10).
3. Aceptar el consejo oportuno y valioso de los pastores de la iglesia.
“Obedecer a nuestros dirigentes, y sujetaos a ellos. Porque ellos velan por vosotros, como quienes han de dar cuenta.” (Hebreos 13:17).
MI DECISIÓN
¿Cree usted que Jesús es el fundamento y la cabeza de la iglesia cristiana?
18. LA VERDADERA IGLESIA FINAL
La verdadera iglesia debe conocer y practicar toda la verdad bíblica. A través de los tiempos, Dios tuvo personas a quienes confió su representación, y
que luego fracasaron. Luego el Señor predijo que hacia el fin del tiempo surgiría un movimiento religioso con características distintivas definidas, que sería
el sostenedor y predicador de las verdades divinas.
El gran drama de la iglesia
1. ¿Qué graves problemas ocurrirían en la iglesia cristiana?
La Biblia predice una apostasía: “Pero el Espíritu dice claramente que en postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus
engañadores y a doctrinas de demonios.” (1ª Timoteo 4:1).
Surgiría un poder político religioso arrogante, que usurpando la autoridad divina conduciría al error: “Nadie os engañe en ninguna manera, porque ese
día no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y levanta contra todo lo que se
llama Dios, o es objeto de culto, tanto que se sienta en el templo de Dios, haciéndose pasar por Dios.” (2ª Tesalonicenses 2:3, 4).
La obra de este poder: “Echó por tierra la verdad, e hizo cuanto quiso y prosperó.” (Daniel 8:12).
“Y hablará palabras contra el altísimo, a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos y la Ley.” (Daniel 7:25).
2. ¿Cuánto tiempo durará esta grave situación?
“Un tiempo, y tiempos, y medio tiempo.” (Daniel 7:25). Que son 1,260 años, que comenzaron en el 538 D.C. y llegaron hasta 1,798 D.C. (Apocalipsis
12:6, 14 y 13:5).
3. Cómo resurgiría la iglesia verdadera?
Al terminar el período de 1,260 años, se levantaría un movimiento que predicaría la verdad de Dios; “Vi volar por en medio del cielo a otro ángel, que
tenía el evangelio eterno para predicarlo a los mora-dores de la tierra, a toda nación y tribu, lengua y pueblo.” (Apocalipsis 14:6).
Características de la iglesia verdadera
4. ¿Qué doctrinas distintivas tendrá el pueblo de Dios del último tiempo?
Guarda los mandamientos de Dios: “Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los Mandamientos de Dios y la fe de Jesús.” (Apocalipsis
14:12).
Al respetar todos los mandamientos, guardan el santo sábado como día de descanso: “Dios reposó de sus obras en el séptimo día.” “El que ha entrado
en su reposo, también descansa de sus obras, como Dios de las suyas.” (Hebreos 4:4, 10).
Dará gran importancia al segundo advenimiento de Cristo: “Levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca.” (Lucas 21:28).
Tiene la manifestación visible del don de profecía: “Guardan los Mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesús.” (Apocalipsis 12:17).
“El testimonio de Jesús es el espíritu de profecía.” (Apocalipsis 19:10).
5. ¿Qué mensaje especial proclamará?
El mensaje de los tres ángeles registrado en Apocalipsis: “Temed a Dios y dadle gloria y honra, porque la hora do su juicio ha llagado; y adorad a aquel
que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas. Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha hecho
beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación. Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y
recibe la marca en su frente o en su mano, él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira, y será atormentado
con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero.” (Apocalipsis 14:7-10).
6. ¿Cuál será la doble misión de la iglesia verdadera?
Lograr que se forme un pueblo que esté preparado para recibir a Jesús: “Una iglesia... santa y sin mancha.” (Efesios 5:27).
Predicar el evangelio a todo el mundo: “el evangelio eterno para predicarlo a los que habitan en la tierra, a toda nación y tribu, lengua y pueblo.”
(Apocalipsis 14:6).
7. ¿Cuán numeroso será el verdadero pueblo de Dios?
“No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino.” (Lucas 12:32)
8. ¿Cuál será el medio para ingresar a la iglesia?
“Los qué recibieron su palabra, fueron bautizados. Y se les unieron en ese día como tres mil personas.” (Hechos 2:41).
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¿QUÉ DEBO HACER?
1. Ante el llamado divino, seguir la actitud de Pablo.
“No fui rebelde a la visión celestial.” Hechos 26:19).
2. Aceptar la verdad de Dios, aunque sea necesario hacer decisiones difíciles y aun dolorosas que impliquen dejar creencias anteriores.
“Oí otra voz del cielo que decía: ‘Salid de ella, pueblo mío, para que no participéis de sus, pecados, y no recibáis, de sus plagas’” (Apocalipsis 18:4).
3. Recordar que cualquier sacrificio que haga por seguir a Cristo será ampliamente recompensado.
“Y cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o esposa o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien voces más,
y heredará la vida eterna.” (Mateo 19:29).
4. Seguir al buen Pastor.
“Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.” (Juan
10:27, 28).
MI DECISIÓN
¿Es claro para usted que la verdadera iglesia es la que enseña todos los mandamientos de Dios?
COMENTARIO
La Iglesia Adventista del Séptimo Día, bajo la dirección divina, ha restaurado las verdades eternas del evangelio. La Santa Biblia, las enseñanzas de
nuestro Señor Jesucristo, de los apóstoles y la Ley de Dios son la norma de conducta de los miembros, de esta iglesia.
19. UN DON QUE NOS GUÍA
Dios siempre se ha comunicado con los hombres para declararles la verdad, expresar su voluntad y revelar el futuro.
Dios se comunica con el ser humano
1. Al principio, ¿cómo se comunicaba Dios con el hombre?
En forma directa: “Y crió Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo crió; varón y hembra los crió. Y los bendijo Dios; y les dijo Dios: Fructificad y
multiplicad, y henchid la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces de la mar, y en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la
tierra.” (Génesis 1:27, 28).
2. ¿Qué interrumpió esa comunicación?
“Pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír.”
(Isaías 59:2).
Se restablece la comunicación
3. ¿Qué medio de comunicación estableció Dios?
“Porque no hará nada el Señor Dios, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas.” (Amós 3:7)
4. ¿Cómo se comunica Dios con los profetas?
Mediante sueños y visiones: “Y él les dijo: Oíd ahora mis palabras: si tuviereis profeta de Dios, le apareceré en visión, en sueños hablaré con él.”
(Números 12:6)
Por inspiración “Porque la profecía no fue en los tiempos pasados traída por voluntad humana, sino los santos hombres de Dios hablaron siendo
inspirados del Espíritu Santo.” (2ª Pedro 1:21).
El profeta verdadero
5. ¿Quién determina al que ha de ser profeta?
Dios elige a los profetas, tanto hombres como mujeres: “Profeta les suscitaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su
boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare.” (Deuteronomio 18:18).
6. ¿Qué prevención debemos tener en cuenta?
Que se levantarán falsos profetas: “Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas son
salidos en el mundo.” (1ª Juan 4:1).
7. ¿Cuáles son las características del verdadero profeta?
Su vida y su enseñanza se ciñe a la Biblia y al Espíritu de Profecía: “¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no los ha
amanecido.” (Isaías 8:20).
Sus predicciones se cumplen: “Cuando el profeta hablare en nombre de Dios, y no fuere la tal cosa, ni viniere, es palabra que el Señor no ha hablado:
con soberbia la habló aquel profeta: no tengas temor de él.” (Deuteronomio 18:22).
Sus frutos testifican “Por sus frutos los conoceréis.” (Mateo 7:20).
Ensalza a Cristo: “En esto conoced el Espíritu de Dios: todo espíritu que confiesa que Jesucristo es venido en carne es de Dios.” (1ª Juan 4:2).
Habla en Nombre de Dios: “Les hablarás, pues, mis palabras, escuchen o dejen de escuchar.” (Ezequiel 2:7).
Reprueba el pecado: “Yo empero estoy lleno de fuerza del Espíritu del Señor, y de juicio, y de fortaleza, para denunciar a Jacob su rebelión, y a Israel
su pecado.” (Miqueas 3:8).
Consuela y exhorta: “Mas el que profetiza, habla a los hombres para edificación, y exhortación, y consolación.” (1ª Corintios 14:3).
Revela el futuro: “Tú, oh rey, en tu cama subieron tus pensamientos por saber lo que había de ser en lo por venir; y el que revela los misterios te mostró lo
que ha de ser. Y a mí ha sido revelado este misterio, no por sabiduría que en mí haya, más que en todos los vivientes, sino para que yo notifique al rey la
declaración, y que entendieses los pensamientos de tu corazón.” (Daniel 2:29, 30)
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Guía al pueblo de Dios: “Y por profeta hizo subir el Señor a Israel de Egipto, y por profeta fue guardado.” (Oseas 12:13).
El don profético en la iglesia verdadera
8. ¿Ha puesto Dios el don profético en su iglesia?
“Y él mismo dio unos, ciertamente apóstoles; y otros, profetas; y otros, evangelistas; y otros, pastores y doctores;” (Efesios 4:11).
9. En el tiempo del fin, ¿en qué pueblo se manifestará el don de profecía?
En el pueblo que guarda los Mandamientos de Dios: “Los que guardan los Mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesús.” “El testimonio de
Jesús es el espíritu de profecía.” (Apocalipsis 12:17 y 19:10).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Apreciar las profecías como una luz orientadora.
“Tenemos también la palabra profética más permanente, a la cual hacéis bien de estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro hasta
que el día esclarezca, y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones.”(2ª Pedro 1:19)
2. Estar alerta contra los falsos profetas.
“Y guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, mas de dentro son lobos rapaces.” (Mateo 7:15).
“Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y darán señales grandes y prodigios; de tal manera que engañarán, si es posible, aun a los
escogidos.” (Mateo 24:24).
3. Creer a los profetas verdaderos y seguir sus consejos.
“Josafat estando en pie, dijo: Oídme, Judá y moradores de Jerusalén. Creed al Señor vuestro Dios, y seréis seguros; creed á sus profetas, y seréis
prosperados.” (2 Crónicas 20:20).
MI DECISIÓN
Siendo que en este tiempo del fin, Dios ha otorgado a su iglesia el don de profecía, Estoy dispuesto a aceptarlo y a seguir sus escritos.
COMENTARIOS
El don profético y la mujer.
El don profético no es exclusivo del hombre, la Biblia menciona mujeres nobles que tuvieron ese don: María (Éxodo 15:20). Débora (Jueces 4:4). Hulda
(2ª Reyes 22:14). Ana (Lucas 2:36). Cuatro hijas de Felipe (Hechos 21:8, 9).
El don profético en la iglesia verdadera
El don profético ha sido siempre característica de la iglesia de Dios (2ª Pedro 1:21). Está prometido en forma especial para los últimos tiempos (Joel
2:28) y 1ª Corintios 1:7). Será característica sobresaliente de la iglesia verdadera del tiempo del fin (Apocalipsis 12:17). Se recomienda no menospreciar
las profecías (1ª Tesalonicenses 5:19-21).
20. EN SOCIEDAD CON DIOS
Dios es el dueño de todo y en su amor nos ha designada sus mayor-domos de los bienes que nos ha confiado. Sin embargo, el Señor de-clara que la
dé-cima parte de nuestras ganancias, o sea el diezmo, le pertenece a él. Y como demostración de nuestra voluntaria obediencia y gozosa gratitud, le
devolvemos el diezmo a Dios, quien lo emplea para el sostén y la propagación del evangelio. El Señor nos invita a entrar en sociedad con Él, y por ello nos
promete grandes bendiciones.
El dueño de todo
1. ¿Por qué Dios tiene derecho de soberanía?
Porque es el creador y sustentador de todo: Dios, el Señor es “Creador de los cielos, y el que los extiende; el que extiende la tierra y sus verduras; el
que da respiración al pueblo que mora sobre ella, y espíritu a los que por ella andan.” (Isaías 42:5)
2. Aunque todo pertenece a Dios, ¿qué cosas menciona que son suyas?
Los seres humanos: “Así dice el Señor Dios, el Creador de los cielos, y el que los extiende; el que extiende la tierra y sus verduras; el que da
respiración al pueblo que mora sobre ella, y espíritu a los que por ella andan.” (Salmos 24:1).
Las riquezas: “Mía es la plata, y mío el oro, dice El Señor de los ejércitos.” (Hageo 2:8).
Mayordomos de Dios
3 ¿De dónde provienen nuestros bienes?
Del poder de Dios: “No digas en tu corazón: Mi poder y la fortaleza de mi mano me han traído esta riqueza. Antes acuérdate del Señor tu Dios: porque
Él te da el poder para hacer las riquezas.” (Deuteronomio 8:17, 18).
4. ¿Qué sagrada responsabilidad nos confía Dios?
Ser sus mayordomos de los bienes que pone a nuestro cuidado: “Digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria, Y el hijo del hombre, que
lo visites? Lo hiciste enseñorear de las obras de tus manos; Todo lo pusiste debajo de sus pies.” (Salmos 8:4, 6).
La parte de Dios
5. ¿Qué parte de nuestros ingresos debemos devolver a Dios como suya?
El diez por ciento. “Y todas las décimas de la tierra, así de la simiente de la tierra como del fruto de los árboles, del Señor son: es cosa consagrada al
Señor. Y toda décima de vacas ó de ovejas, de todo lo que pasa bajo la vara, la décima será consagrada al Señor.” (Levítico 27:30, 32)
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6. ¿Qué ejemplo dieron los patriarcas a Israel?
Abrahán: “Y le dio Abram los diezmos de todo.” (Génesis 14:20).
Jacob: “Y esta piedra que he puesto por título, será casa de Dios: y de todo lo que me dieres, el diezmo lo he de apartar para ti.” (Génesis 28:22).
El pueblo hebreo: “También los hijos de Israel y de Judá, que habitaban en las ciudades de Judá, dieron del mismo modo los diezmos de las vacas y
de las ovejas: y trajeron los diezmos de lo santificado, de las cosas que habían prometido al Señor su Dios, y los pusieron por montones.” (2ª Crónicas
31:6).
7. Además del diezmo, de qué forma debemos dar a Dios las ofrendas voluntarias?
Conforme a las bendiciones recibidas: “Cada uno con el don de su mano, conforme a la bendición del Señor tu Dios, que te hubiere dado.”
(Deuteronomio 16:17).
Dar con alegría: “Cada uno de como propuso en su corazón: no con tristeza, o por necesidad; porque Dios ama el dador alegre.” (2ª Corintios 9:7).
8. ¿Qué generosa bendición promete Dios a los fieles en el diezmo y las ofrendas?
Hasta que sobreabunde: “Traed todos los diezmos al alfolí, y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice El Señor de los ejércitos, si no
os abriré las ventanas de los cielos, y vaciaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.” (Malaquías 3:10).
Uso sagrado del diezmo
9. ¿Qué uso indicó Dios para el diezmo en la época del pueblo hebreo?
“Y he aquí yo he dado á los hijos de Leví todos los diezmos en Israel por heredad, por su ministerio, por cuanto ellos sirven en el ministerio del
tabernáculo del testimonio.” (Números 18:21)
10. ¿Qué uso se da al diezmo ahora?
Siguiendo la enseñanza divina, la iglesia usa el diezmo para el sostén de los ministros, para predicar el evangelio que lleva la salvación a otros: “Así
también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio.” (1ª Corintios 9:14).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Mantener una actitud sana y madura acerca del dinero, que puede ser una bendición o una maldición.
“Porque raíz de todos los males es el amor al dinero: el cual codiciando algunos, se descaminaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores.”
(1ª Timoteo 6:10).
2. Si el Señor nos permite las bendiciones materiales, debemos usarlas para nuestro bien y el bien de los demás.
“En todo os he enseñado que, trabajando así, es necesario sobre-llevar a los enfermos, y tener presente las palabras del Señor Jesús, el cual dijo: Más
bienaventurada cosa es dar que recibir.” (Hechos 20:35).
3. Ser buenos administradores de los bienes del Señor.
“Cada uno según el don que ha recibido, adminístrelo a los otros, como buenos dispensadores de las diferentes gracias de Dios.” (1ª Pedro 4:10).
4. Devolver a Dios lo que le pertenece, o sea el diezmo.
“Indispensablemente diezmarás todo el producto de tu simiente, que rindiere el campo cada un año.”(Deuteronomio 14:22).
5. Recordar que la verdadera dadivosidad se mide por lo que damos además del diezmo, es decir, por las ofrendas.
“Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda: de todo varón que la diere de su voluntad, de corazón, tomaréis mi ofrenda.” (Éxodo 25:2).
6. Entrar en sociedad con Dios, mediante el diezmo y las ofrendas, confiando en sus bendiciones.
“Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida, y rebosando darán en vuestro seno: porque con la misma medida que midiereis, os será vuelto
á medir.” (Lucas 6:38).
MI DECISIÓN
Ya que Dios es el dueño de todo cuanto existe, y me da todos los bienes que gozo, quiero serle fiel, y devolverle el diezmo y darle sus ofrendas, para
sostener su obra.
21. UNA VIDA SANA Y FELIZ
Dios desea nuestra felicidad, prosperidad y éxito. Se interesa no sólo en nuestra vida espiritual, sino también en nuestra salud y bienestar físico.
Así como el Señor dio instrucciones y mandatos en cuanto a la doctrina religiosa, nos imparte también instrucciones y mandatos, acerca de la forma
saludable de vivir.
Templos vivientes
1. ¿Cuál es el amante deseo de Dios para nuestro ser?
“Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.” (3ª Juan 2)
2. ¿Cómo considera Dios el cuerpo humano?
“¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?” (1ª Corintios
6:19).
3. ¿A través de qué medio glorificamos a Dios?
“Porque comprados sois por precio: glorificad pues a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.” (1Corintios 6:20)
4. ¿Cuál es el fundamento de la buena salud?
“Y dijo: Si oyeres atentamente la voz del Señor tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus
estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los Egipcios te enviaré á ti; porque yo soy el Señor tu Sanador.”(Éxodo 15:26).
Principios bíblicos acerca de la salud
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5.
¿Cuál es el principio bíblico en cuanto a la alimentación?
A través de la alimentación nos mantenemos en relación con Dios. “Si pues coméis, ó bebéis, ó hacéis otra cosa, hacedlo todo para gloria de Dios.” (1ª
Corintios 10:31).
6. ¿Qué principios de alimentación sana recomienda la Biblia?
Un régimen natural: “Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda hierba que da simiente, que está sobre la haz de toda la tierra; y todo árbol en que hay
fruto de árbol que da simiente, os serán para comer.” (Génesis 1:29)
La carne como alimento fue una medida de emergencia dada después del diluvio: “Y bendijo Dios a Noé y a sus hijos, y les dijo: Fructificad, y
multiplicad, y henchid la tierra... Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y hierbas, os lo he dado todo.”
(Génesis 9:1, 3).
7. ¿Qué normas establece la Biblia para diferenciar los animales permitidos como alimento de los prohibidos?
Los animales, cuadrúpedos permitidos como alimento deben tener pezuña hendida y deben rumiar. Los que carecen de cualquiera de es-tos
elementos son inconvenientes; entre éstos está el cerdo cuya carne no es limpia. El Señor dijo: “De entre los animales, todo el que tiene pezuña hendida y
que rumia, éste comeréis.” (Levítico 11:3). Los peces asignados como alimento son los que tienen aletas y escamas: “Esto comeréis de todas las cosas
que están en las aguas: todas las cosas que tienen aletas y escamas en las aguas del mar, y en los ríos, aquellas comeréis;” (Levítico 11:9, 10).
Acerca de las aves, en lugar de dar características, la Biblia las menciona por nombre: (Levítico 11:13-23).
8. ¿Por qué las bebidas alcohólicas son perjudiciales?
El alcohol perjudica gravemente la salud, embota la mente y torna al individuo en irresponsable, peligroso para sí mismo y para los demás. Por esto la
Biblia recomienda: “No mires al vino cuando rojea, Cuan-do resplandece su color en el vaso: Entrase suavemente; Mas al fin como serpiente morderá, Y
como basilisco dará dolor.” (Proverbios 23:31, 32).
9. ¿Cómo considerar el tabaco y las drogas?
El consumo de cigarrillos es culpable de graves enfermedades del corazón, del sistema respiratorio y digestivo; además es un factor que predispone al
cáncer.
Las drogas crean dependencia y destruyen al adicto, física y psicológicamente. Los vicios esclavizan al individuo y lo privan de disfrutar de salud plena.
La Biblia nos exhorta: “¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? Si alguno violare el templo de Dios, Dios
destruirá al tal: porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es.” (1ª Corintios 3:16, 17).
Vida modesta y correcta
10. ¿Cuál es el consejo bíblico acerca del arreglo personal?
“Asimismo también las mujeres, ataviándose en hábito honesto, con vergüenza y modestia; no con cabellos encrespados, u oro, ó perlas, ó vestidos
costosos.” (2ª Timoteo 2:9).
10. ¿Cuál es la orientación acerca de los espectáculos y diversiones mundanas?
“Porque todo lo que hay en el mundo, la concupiscencia de la carne, y la concupiscencia de los ojos, y la soberbia de la vida, no es del Padre, mas es
del mundo.” (1ª Juan 2:16).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Reconocer que somos creados por Dios para gloria suya.
“Todos los llamados de mi nombre; para gloria mía los cree, los formé y los hice.” (Isaías 43:7).
2. Estar dispuesto a honrar a Dios mediante una actitud correcta hacia la salud y el cuerpo humano.
“Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro
racional culto.” (Romanos 12:1).
3. Abstenerme de todo lo que perjudica la salud física y mental.
“Y todo aquel que lucha, de todo se abstiene: y ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible; mas nosotros, incorruptible.” (1ª Corintios 9:25).
4. Dejar definitivamente todo hábito perjudicial, confiando plena-mente en Jesucristo.
“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” (Filipenses 4:13).
MI DECISIÓN
Como mi cuerpo es templo del Espíritu Santo, estoy dispuesto a dejar todo hábito perjudicial y a seguir las leyes de la salud.
22. EL VERDADERO BAUTISTO
El bautismo es un rito cristiano mediante el cual se expresa la fe en el sacrificio redentor de Jesucristo, la solemne renuncia a la pasada vida de
pecado, y el nacimiento a una nueva vida según los Mandamientos de Dios. Fue practicado por Jesús y ordenado por Él como necesario para la
salvación.
Jesús y el bautismo
1. ¿Qué ejemplo dio Jesús en cuanto al bautismo?
“Entonces Jesús vino de Galilea a Juan al Jordán, para ser bautizado de él. Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los
cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre Él. Y he aquí una voz de los cielos que decía: Este es mi Hijo
amado, en el cual tengo contentamiento.” (Mateo 3:13, 16, 17).
2. ¿Qué ordenó Jesús a sus seguidores?
“Entonces Jesús les dijo: Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id y haced discípulos en todas las naciones, bautizándolos
en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.” (Mateo 28:18, 19).
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3. ¿Cuán indispensable es el bautismo?
“El que creyere y fuere bautizado, será salvo. Mas el que no creyere, será condenado.” (Marcos 16:16).
Importancia del bautismo
4. ¿Qué simboliza el bautismo?
La muerte, sepultura y resurrección de Cristo; “¿O no sabéis que todos los que somos bautizados en Cristo Jesús, somos bautizados en su muerte?
Porque somos sepultados juntamente con Él para muerte por el bautismo; para que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así
también nosotros andemos en novedad de vida.” (Romanos 6:3, 4).
5. ¿En nombre de quién se realiza el bautismo?
En el nombre de la Deidad: “Bautizándolos en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.” (Mateo 28:19).
6. ¿Cuál es la forma correcta de bautizar?
Por inmersión, porque bautizar significa “sumergir.” Y esta es la forma practicada por Juan el Bautista, confirmada por Cristo, y continuada por los
cristianos primitivos: “Y bautizaba también Juan en Enón junto a Salim, porque había allí muchas aguas; y venían, y eran bautizados.” (Juan 3:23).
Además, cuando Jesús “fue bautizado, subió del agua” (Mateo 3:16). En el caso del etíope, “mandó parar el carro: y descendieron ambos al agua,
Felipe y el eunuco; y [Felipe] le bautizó.” (Hechos 8:38).
7. ¿Qué experiencias confirma el bautismo en el creyente?
El perdón: “Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don
del Espíritu Santo.” (Hechos 2:38).
La recepción del Espíritu Santo: “bautícese... y recibiréis el don del Espíritu Santo.” (Hechos 2:38).
La muerte al pecado: “somos sepultados juntamente con Él para muerte por medio del bautismo... nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con
Él... a fin de que no sirvamos más al pecado.” (Romanos 6 4, 6).
Vestirnos de Cristo: “Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos.” (Gálatas 3:27).
Unión a la iglesia: “Así que, los que recibieron su palabra, fueron bautizados: y fueron añadidas a ellos aquel día como tres mil personas.” (Hechos
2:41).
8. ¿A qué edad es conveniente ser bautizado?
Cuando la persona pueda ser adoctrinada, entienda las verdades bíblicas y esté en condiciones de tomar una decisión correcta. Un niño pequeño no
reúne esas condiciones. “El que creyere y fuere bautizado, será salvo.” (Marcos 16:16).
9. ¿Qué debe hacer el que haya sido bautizado en forma incorrecta (sin conocer la doctrina)?
Debe proceder para ser bautizado de acuerdo a la enseñanza bíblica, tal como se registra cuando Pablo encontró a ciertos creyentes que habían sido
bautizados sin conocer plenamente la verdad Una vez que fueron instruidos, en señal de que aceptaban la verdad de Jesús, fue-ron bautizados
nuevamente. “Entonces dijo: ¿En qué pues sois bautizados? Y ellos dijeron: En el bautismo de Juan. Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el
nombre del Señor Jesús.” (Hechos 19:3, 5).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Creer en Cristo.
“Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.” (Hechos 16:31).
2. Ser adoctrinado en las verdades cristianas y practicarlas.
“Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado.” (Mateo 28:20).
3. Experimentar el nuevo nacimiento.
“Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.” (Juan 3:5)
4. Decidir ser bautizado.
“Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua; y dijo el eunuco: He aquí agua; ¿qué impide que yo sea bautizado? Y Felipe dijo: Si crees de todo corazón,
bien puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios. Y mandó parar el carro: y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco; y le
bautizó... y siguió su camino gozoso.” (Hechos 8:36-39).
MI DECISIÓN
¿Comprende usted que el bautismo es una señal de que amamos a Jesús, y queremos servirle?
DESPUÉS DEL BAUTISMO
En la tumba líquida queda sepultada la vida pasada Ahora comienza una vida nueva (Romanos 6:4). La vida anterior debe quedar sepultada.
(Efesios 4:22-24) Ahora todo es nuevo: intereses, formas de vivir, ideales, costumbres, palabras, relaciones. (Efesios 5:17). Ahora los intereses son
espirituales, pero aunque vivimos en la tierra, nuestra aspiración es celestial. (Colosenses 3:1, 2).
23. LA MAYOR DECISIÓN DE LA VIDA
Durante la vida deben tomarse muchas decisiones importantes, que afectan nuestro bienestar y nuestro éxito Pero hay una decisión que no sólo tiene
que ver con esta vida, sino con nuestro destino eterno. Es la decisión de entregarnos definitivamente a Cristo, de unirnos a su iglesia, y en adelante vivir
una vida cristiana genuina.
Nueva vida de fe y esperanza
1. ¿Cuál es la condición natural del ser humano?
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Sin Dios y sin esperanza: “Que en aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la república de Israel, y extranjeros a los pactos de la promesa, sin
esperanza y sin Dios en el mundo.” (Efesios 2:12)
2. ¿Cómo es el proceso que nos conduce a la nueva vida?
El estudio de la Biblia aumenta la fe: “Luego la fe es por el oír; y el oír por la palabra de Dios.” (Romanos 10:17)
Se cree en Jesús y se le acepta como Salvador “Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.” (Romanos 10:13).
Un paso necesario para la salvación.
3. ¿Qué paso es necesario para poder ser salvado?
A la fe unir el bautismo: “El que creyere y fuere bautizado, será salvo.” (Marcos 16:16) “Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros.”
(Hechos 2:38).
4. ¿Quiénes dieron este buen ejemplo?
Jesús: “Y Jesús, después que fue bautizado, subió del agua.” (Mateo 3:16)
Pablo: “Fue bautizado” (Hechos 9:15-18)
Lidia: “Lidia... fue bautizada” (Hechos 16:14, 15).
El carcelero de Filipos: “En seguida se bautizó él con todos los suyos.” (Hechos 16:33).
Tierna y amante invitación
5 ¿Qué amable invitación nos dirige Jesús?
Seguidme: “Si alguno me sirve, sígame: y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará.” (Juan 12:26).
“Y pasando Jesús de allí, vio a un hombre que estaba sentado al banco de los tributos públicos, el cual se llamaba Mateo; y le dice: Sígueme. Y se
levantó, y le siguió.” (Mateo 9:9).
6 . Ante la amable invitación de Cristo, ¿qué actitud fatal tomaron algunos?
Postergar la respuesta: “Félix, respondió: Ahora vete, mas en teniendo oportunidad te llamaré.” (Hechos 24:25).
Casi persuadido: “Entonces Agripa dijo a Pablo: Por poco me persuades a ser cristiano.” (Hechos 26:28)
Rechazar: “Y oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.” (Mateo 19:22).
7. ¿Qué nos advierte Dios?
No equivocarnos en la decisión: “Porque ¿qué aprovechará al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?” (Marcos 8:36).
8. ¿Cuál es la única respuesta segura?
Abrir el corazón: “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo: si alguno oyere mi voz y abriere la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.”
(Apocalipsis 3:20)
No rebelarnos: “No fui rebelde a la visión celestial.” (Hechos 26:19).
Decidirse por la vida: “A los cielos y la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la
maldición: escoge pues la vida, para que vivas tú y tu simiente:” (Deuteronomio 30:19).
Decidirse en seguida: “Habiendo dicho esto, fue y llamó a María su hermana, diciendo: El Maestro está aquí y te llama. Ella, como lo oyó, se levanta
prestamente y viene a Él.” (Juan 11:28, 29).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Evitar duplicidad.
“Ninguno puede servir a dos señores.” (Lucas 16:13).
2. Practicar la verdad y pedir el bautismo.
“Si sabéis estas cosas, bienaventurado seréis si las hacéis.” (Juan 13:17).
3. Decidirme firmemente en seguida.
“No te jactes del día de mañana; Porque no sabes qué dará de sí el día.” (Proverbios 27:1).
“No recibáis en vano la gracia de Dios, En tiempo aceptable te he oído, Y en día de salvación te he socorrido: he aquí ahora el tiempo aceptable; he
aquí ahora el día de salvación.” (2ª Corintios 6:1, 2).
“Porque Él es nuestro Dios... Si hoy oyereis su voz, No endurezcáis vuestro corazón.” (Salmo 95:7, 8).
4. Si hay oposición o problemas, recordar que la obediencia a Dios está en primer lugar.
“Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres,” (Hechos 5:29).
5. Ante la amable invitación de Dios a unirnos con su pueblo, hacer una decisión positiva e inmediata.
“Ahora pues, ¿por qué te detienes? Levántate, y bautízate, y lava tus pecados, invocando su Nombre.” (Hechos 22:16).
“Mis ovejas oyen mi voz, yo las conozco, y me siguen.” (Juan 10:27).
6. Decidirme por Cristo, junto con mi familia.
“Elegid hoy a quien servir... que yo y mi casa serviremos al Señor.” (Josué 24:15).
MI DECISIÓN
Como el verdadero bautismo nos une con Cristo y con su iglesia, ¿quiere usted ser bautizado cuando sea posible?
COMENTARIO
“Cuando vamos a Cristo como seres falibles y pecaminosos, y nos hacemos participantes de su gracia perdonadora, el amor brota en nuestro
corazón. Toda carga resulta liviana, porque el yugo de Cristo es suave. Nuestros deberes se vuelven delicias y los sacrificios un placer. El sendero que
antes nos parecía cubierto de tinieblas brilla ahora con los rayos del Sol de Justicia.” (Felicidad Abundante, Pág. 28).
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24. COMO NOS AYUDA EL ESPÍRITU SANTO
El poderoso Espíritu Santo, la tercera persona de la deidad, actúa en forma muy amorosa en favor de nuestra salvación. Nos animará conocer mejor
la gran ayuda que el Espíritu Santo nos da.
La personalidad del Espíritu Santo
1. ¿Quién es el Espíritu Santo?
El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo forman la Deidad, que es el Dios verdadero manifestado en tres personas. Por esto Jesús mencionó: “el nombre del
Padre del Hijo y del Espíritu Santo.” (Mateo 28.19).
2. ¿De quién procede el Espíritu Santo?
“Pero cuando viniere el Consolador, el cual yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, Él dará testimonio de mí.” (Juan
15:26).
3. ¿Qué características demuestran que el Espíritu Santo es una persona?
Clama: “Dios envió el Espíritu de su Hijo en vuestros corazones, el cual clama: Abba, Padre.” (Gálatas 4:6).
Contiende: “Mi Espíritu no contenderá con el hombre para siempre.” (Génesis 6:3).
Intercede: “El Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.” (Romanos 8:26).
Explora: “El Espíritu todo lo examina.” (1ª Corintios 2:10).
Se entristece: No entristezcáis al Espíritu Santo.” (Efesios 4:30).
4. ¿Cuáles son algunos nombres dedos al Espíritu Santo?
Consolador; “Os dará otro Consolador para que esté con vosotros para siempre.” (Juan 14:16).
Espíritu de verdad: “El Espíritu de verdad...” (Juan 14:17).
Espíritu eterno: “Por el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo.” (Hebreos 9:14).
La obra del Espíritu Santo
5. ¿En qué actividades participó y participa el Espíritu Santo?
Inspiró los profetas: “Santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.” (2ª Pedro 1:21).
Participó en la encarnación de Cristo: María “se halló que había concebido del Espíritu Santo.” (Mateo 1:18).
Habita en el creyente: “¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?” (1ª Corintios 3:16).
Nos guía a la verdad “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, Él os guiará á toda verdad.” (Juan 16:13).
Enseña: “Os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que os he dicho.” (Juan 14:26).
Habla a la conciencia. “Y cuando Él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.” (Juan 16:8).
Regenera y renueva: “por su misericordia nos salvó, por el lavacro de la regeneración, y de la renovación del Espíritu Santo.” (Tito 3:5).
Ayuda nuestra flaqueza: “De igual manera, el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad.” (Romanos 8:26)
Nos asegura que somos hijos de Dios: “El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.” (Romanos 8:16).
Nos sella: “Habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación: y habiendo creído en Él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la
promesa,” (Efesios 1:13).
El Espíritu Santo y el creyente
6. ¿Qué tres experiencias debe tener el cristiano con relación al Espíritu Santo?
Recibimos el Espíritu al creer: “Habiendo creído en Él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,” (Efesios 1:13).
Lo recibimos en el bautismo: “Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el
don del Espíritu Santo.” (Hechos 2:38).
Renovarlo cada día: “Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador para que esté con vosotros para siempre.” (Juan 14:16).
7. ¿Qué tenemos que hacer para tener el Espíritu Santo?
Pedirlo: “Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los
que se lo pidan?” (Lucas 11:13).
Obedecer a Dios: “El Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen.” (Hechos, 5:32)
8. ¿Qué hermoso fruto produce el Espíritu en nosotros?
Un proceder cristiano correcto. “Mas el fruto del Espíritu es: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza: contra tales
cosas no hay ley (Gálatas 5:22,23)
9. ¿Cómo ayuda el Espíritu Santo en nuestra obra misionera?
Nos transforma en testigos. “Pero recibiréis poder, cuando haya ve-nido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos.” (Hechos 1.8).
Nos enseña: “El Espíritu Santo os enseñará en la misma hora lo que debáis decir.” (Lucas 12:12).
Da confianza: “Y como hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaron la palabra de
Dios con confianza.” (Hechos 4:31).
Actúa en nosotros: “Y cuando os trajeren para entregaros, no premeditéis qué habéis de decir, ni lo penséis: mas lo que os fuere dado en aquella hora,
eso hablad; porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu Santo.” (Marcos 13:11).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Tener la dedada actitud hacia el Espíritu Santo.
“Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual estáis sellados para el día de la redención.” (Efesios 4:30).
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2. Recordar que el único pecado que no tiene perdón es el rechazo del Espíritu Santo.
“Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres: mas la blasfemia contra el Espíritu no será perdonada a los hombres.”
(Mateo 12:31).
El orgullo y la continua obstinación induce a los hombres a despreciar al Espíritu de Dios, a ocupar un lugar donde ninguna manifestación del Espíritu
puede convencerlos de su error. Sus mentes endurecidas no están dispuestas a ceder. En nuestros días los hombres se han colocado donde se
incapacitan completamente para llenar las condiciones del arrepentimiento y la confesión; por lo tanto no pueden ha-llar misericordia y perdón. El pecado
de la blasfemia contra el Espíritu Santo no radica en cualquier palabra o hecho súbito, sino en la firme y determinada resistencia contra la verdad y la
evidencia. (MS 30 1890).
3. Seguir siempre la inclinación del Espíritu.
“Porque la intención de la carne es muerte; mas la intención del Espíritu, vida y paz:” (Romanos 8:6).
MI DECISIÓN
En vista de que el Espíritu Santo nos guía y nos fortalece, ¿quiere usted seguir su dirección?
25. BELLEZA DE LA VIDA CRISTIANA
La vida cristiana es, la más hermosa experiencia que podamos disfrutar en este mundo tenebroso, una experiencia nueva y gozosa, a la que nos
adaptamos con la ayuda del Señor. Surgen nuevos ideales, nuevos hábitos y nuevos deberes que cumplir
A medida que pasa el tiempo y crece nuestra unión con Cristo y con su iglesia, más agradecidos estamos al Señor por habernos llamado a una vida
diferente plena de significado, de realizaciones y de seguridad para el presente y el futuro.
Una vida nueva
1. ¿Qué cambio profundo ocurre al aceptar a Cristo?
Una total transformación. “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nueva.” (2ª
Corintios 15:17).
2. ¿Cuál es el secreto del triunfo en la nueva vida?
La plena unión con Cristo. “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque sin mí nada podéis
hacer.” (Juan 15:5).
El crecimiento continuo. “Mas creced en la gracia y conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la
eternidad. Amén.” (2ª Pedro 3:18)
Vida devocional esencial
3. ¿Qué actos devocionales diarios son esenciales?
Alimentarse de la Palabra. “Mas él respondiendo, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.”
(Mateo 4:4).
La oración. “Velad pues, orando en todo tiempo, que seáis tenidos por dignos de evitar todas estas cosas que han de venir, y de estar en pie delante
del Hijo del hombre.” (Lucas 21:36).
La vida de adoración:
4. ¿Qué día especial ordenó Dios para que lo adoremos semanal-mente?
Dios ha dado el sábado con los siguientes propósitos:
Asistir al culto. “Y vino á Nazaret, donde había sido criado; y entró, conforme a su costumbre, el día del sábado en la sinagoga, y se levantó á leer.”
(Lucas 4:16).
“Seis días se trabajará, y el séptimo día sábado de reposo será, convocación santa: ninguna obra haréis; sábado es del Señor en todas vuestras
habitaciones.” (Levítico 23:3).
Hacer obras de bien. “Así que, lícito es en los sábados hacer bien.” (Mateo 12:12).
Hacer obra misionera. “Y Saulo consentía en su muerte. Y en aquel día se hizo una grande persecución en la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos
fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Sama-ria, salvo los apóstoles. Y llevaron á enterrar á Esteban varones piadosos, é hicieron gran llanto
sobre él. Entonces Saulo asolaba la iglesia, entrando por las casas: y trayendo hombres y mujeres, los entregaba en la cárcel. Mas los que fueron
esparcidos, iban por todas partes anunciando la palabra.” (Hechos 8:1-4).
Vida apartada del mundo
5. ¿Cuál es la relación del cristiano con el mundo que lo rodea?
“No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.” (Juan 17:15, 16).
“No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.” (1ª Juan 2:15).
6. ¿Cuál es la misión del cristiano en el mundo?
“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de aquel que os ha llamado de las
tinieblas a su luz admirable.” (1ª Pedro 2:9).
La vida del miembro de la Iglesia
7. ¿Cómo se ilustra nuestra relación con la Iglesia?
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Piedras vivas: “Vosotros también, como piedras vivas, sed edifica-dos una casa espiritual, y un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales,
agradables á Dios por Jesucristo.” (1ª Pedro 2:5).
Miembros del cuerpo de Cristo: “Cristo es la cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo,, y Él es su Salvador.” (Efesios 5:23).
8. ¿Qué honrosos deberes tienen los miembros de la iglesia?
Asistir a los cultos: “No dejando nuestra congregación, como algunos tienen por costumbre, mas exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel
día se acerca.” (Hebreos 10:25).
Ayudar a sostener la iglesia con nuestro diezmo y ofrendas: “Traed todos los diezmos al alfolí, y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto,
dice El Señor de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y vaciaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.” (Malaquías 3:10).
Mantener buena relación con los hermanos: “Sufriéndoos los unos á los otros, y perdonándoos los unos á los otros si alguno tuviere queja del otro: de
la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.” (Colosenses 3:13).
9. ¿Cuál es nuestro deber supremo?
“Y Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y de toda tu mente. Este es el primero y el grande manda-miento. Y el
segundo es semejante a éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.” (Mateo 22:37-39).
10. ¿Cuál es la actitud constante del cristiano?
“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.” (Mateo 6:33).
¿QUÉDEBO HACER?
1. Crecer continuamente.
“Resta, pues, hermanos, que os roguemos y exhortemos en el Señor Jesús, que de la manera que fuisteis enseñados de nosotros de cómo os
conviene andar, y agradar á Dios, así vayáis creciendo.” (1ª Tesalonicenses 4:1).
2. Mantener los ojos en el Señor Jesús.
“Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y
corramos con paciencia la carrera en tenemos por delante. Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe.” (Hebreos 12:1, 2).
3. En todo, seguir el seguro ejemplo de Jesús.
“Porque para esto sois llamados; pues que también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que vosotros sigáis sus pisa-das:” (1ª
Pedro 2:21).
4. Ser fiel hasta la muerte.
“Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.” (Apocalipsis 2:10).
MI DECISIÓN
En vista de la belleza de la vida cristiana, ¿quiere usted ser un cristiano íntegro?
COMENTARIO
“Dios no nos trata como los hombres se tratan entre sí. Los pensamientos de misericordia, de amor y de la más tierna compasión, Él dice: ‘Deje el
impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase al Señor, quien tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, que será amplio en
perdonar.’ ’’ (Felicidad Abundante, Pág. 26).
26. UN HOGAR ARMONIOSO
El matrimonio fue instituido por Dios para que sea una fuente de felicidad y bendición para los seres humanos. Para esto es necesario concertar el
matrimonio con la persona adecuada y en el momento adecuado; y luego dar lo mejor de uno mismo para lograr mutua comprensión. Además, ejercer
sabiduría, tacto y tolerancia, tanto con el cónyuge como con los hijos, a quienes se debe cuidar, educar y enseñar a respetar y amar a Dios.
Institución del matrimonio
1. ¿Cuál es el origen del matrimonio?
Dios creó un hombre y una mujer “Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó (Génesis 1:27).
2 ¿Qué dijo Jesús en cuanto al matrimonio?
Que los esposos son una unidad: “Por tanto, el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y serán dos en una carne” (Mateo 19:5).
3. ¿Qué dijo Jesús acerca del divorcio?
Cristo reconoció una sola causa aceptable para el divorcio, y explicó: “Le dicen: ¿Por qué, pues, Moisés mandó dar carta de divorcio, y repudiarla? Les
dice: Por la dureza de vuestro corazón Moisés os permitió repudiar a vuestras mujeres: mas al principio no fue así. Mas yo os digo que cualquiera que
repudiare á su mujer, si no fuere por causa de fornicación, y se casare con otra, adultera: y el que se casare con la repudiada, adultera.” El que se divorcia
de su esposa, a no ser por fornicación, y se casa con otra, comete adulterio.” (Mateo 19:7-9).
4. ¿Qué deber fundamental se deben los esposos?
Ser fieles el uno al otro. La santa Ley de Dios establece: “No cometerás adulterio.” (Éxodo 20:14).
Propósitos del matrimonio
5. ¿Qué propósito sano tiene el matrimonio?
La ayuda mutua: “Y dijo el Señor Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.” (Génesis 2:18).
La procreación de hijos: Dios les dijo: “Y los bendijo Dios; y les dijo Dios: Fructificad y multiplicad, y henchid la tierra, y sojuzgad-la.” (Génesis 1:28).
La satisfacción juiciosa del impulso sexual, enmarcado en el decoro y el amor: “Mas a causa de las fornicaciones, cada uno tenga su mujer, y cada una
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tenga su marido. El marido pague a la mujer la debida benevolencia; y asimismo la mujer al marido. La mujer no tiene potestad de su propio cuerpo, sino
el marido: e igualmente tampoco el marido tiene potestad de su propio cuerpo, sino la mujer. No os defraudéis el uno al otro, a no ser por algún tiempo de
mutuo consentimiento, para ocuparos en la oración: y volved a juntaros en uno, para que no os tiente Satanás a causa de vuestra incontinencia.” (1ª
Corintios 7:2-5).
Principios fundamentales para un hogar feliz
6. ¿Qué principio fundamental asegura la comprensión y la felicidad?
Casarse con una persona de la misma fe: “No os unáis en yugo desigual con los incrédulos. Porque, ¿qué tienen en común la justicia con la injusticia?
¿Qué comunión tiene la luz con las tinieblas” (2ª Coríntios 6:14).
7. ¿Cómo debe ser un buen esposo cristiano?
Cabeza responsable del hogar: “Porque el marido es cabeza de la mujer,” (Efesios 5:23).
Considerado: “Vosotros maridos, semejantemente, habitad con ellas según ciencia, dando honor á la mujer como á vaso más frágil.” (1ª Pedro 3:7).
Amoroso y paciente: “Esposos, amad a vuestras esposas, y no seáis ásperos con ellas.” (Colosenses 3:19).
8. ¿Cómo debe ser una buena esposa cristiana?
Sujeta a su esposo: “Las casadas estén sujetas a sus maridos, como al Señor.” (Efesios 5:22).
Prudente: “Que enseñen a las mujeres jóvenes a ser prudentes, a que amen a sus maridos, a que amen a sus hijos, A ser templadas, castas, que
tengan cuidado de la casa, buenas, sujetas a sus maridos: para que la palabra de Dios no sea blasfemada.” (Tito 2:4, 5).
Temerosa de Dios: “Engañosa es la gracia, y vana la hermosura: La mujer que teme al Señor, ésa será alabada (Proverbios 31:30).
9. ¿Cuáles son los peores enemigos del matrimonio?
El adulterio: “Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, disolución, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos,
celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,” (Gálatas 5:19, 20).
Las palabras airadas: “La blanda respuesta quita la ira: Mas la palabra áspera hace subir el furor.” (Proverbios 15:1).
La educación de los hijos
10. ¿Cuál es el deber principal de los padres hacia sus hijos?
“Instruye al niño en su carrera: Aun cuando fuere viejo no se apartará de ella.” (Proverbios 22:6).
11. ¿Qué error se debe evitar?
“Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos; sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor.” (Efesios 6:4).
12. ¿Qué se recomienda en cuanto a la disciplina?
“El que detiene el castigo, a su hijo aborrece: Mas el que lo ama, madruga a castigarlo... La vara y la corrección dan sabiduría: Mas el muchacho
consentido avergonzará a su madre.” (Proverbios 13:24 y 29:15).
13. ¿Cuál es la enseñanza principal que se debe impartir a los hijos?
“Y todos tus hijos serán enseñados del Señor; y multiplicará la paz de tus hijos.” (Isaías 54:13).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Pedir la ayuda de Dios para hacer una buena elección conyugal.
“El que halló esposa halló el bien, Y alcanzó la benevolencia del Señor.” (Proverbios 18:22).
2. Reconocer que los esposos constituyen una unidad.
“Mas ni el varón sin la mujer, ni la mujer sin el varón, en el Señor. Porque como la mujer es del varón, así también el varón es por la mujer: empero todo
procede de Dios.” (1ª Corintios 11:11, 12).
3. Dar a Dios el primer lugar en el hogar.
“Si el Señor no edificare la casa, En vano trabajan los que la edifican: Si el Señor no guardare la ciudad, En vano vela la guarda.” (Salmo 127:1).
4. Desarrollar una relación basada en el amor y el respeto.
“Cada uno de vosotros ame a su mujer como a sí mismo; y la mujer respete a su marido.” (Efesios 5:33).
5. Reconocer que los hijos son de Dios.
“He aquí, herencia del Señor son los hijos: Cosa de estima el fruto del vientre.” (Salmo 127:3).
6. Guiar el hogar por el camino de Dios y de su verdad.
El Señor lo eligió para que mande “a sus hijos y a su casa después de sí, que guarden el camino del Señor.” (Génesis 18:19).
MI DECISIÓN
¿Quiere usted honrar a Dios en su propio hogar?
27. EL JOVEN CRISTIANO
La juventud es una etapa crucial de la existencia, en la cual se ponen las bases de una vida exitosa y útil. Será así si se aprovechan las oportunidades
para estudiar, trabajar y adquirir un carácter sólido. Además, la juventud es el momento más adecuado para conocer a Dios y aceptar a Cristo.
El privilegio de ser joven
1. Una época de frescura y fortaleza:
“Tienes tú el rocío de tu juventud.” (Salmo 110:3). “La gloria de los jóvenes es su fortaleza, Y la hermosura de los viejos la vejez.” (Proverbios 20:29)
2. ¿Cuáles son las tres decisiones más importantes que debe tomar un joven?
Su profesión: “Yo he visto el trabajo que Dios ha dado a los hijos de los hombres para que en él se ocupasen.” (Eclesiastés 3:10).
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Su matrimonio: “El que halló esposa halló el bien, Y alcanzó la benevolencia del Señor.” (Proverbios 18:22).
Su fe: “Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra: porque yo soy Dios, y no hay más.” (Isaías 45:22).
3. Siendo que de estas decisiones dependen su felicidad y su utilidad, ¿a qué fuentes de orientación debe acudir el joven?
A Dios: “Porque el Señor da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia.” (Proverbios 2:6).
A los padres: “Oye, hijo mío, la doctrina de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre.” (Proverbios 1:8).
A la Biblia “¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.” (Salmo 119:9).
Peligros que amenazan a los jóvenes.
4. ¿Quién es el peor enemigo de los jóvenes?
Satanás: “Para que no seamos engañados de Satanás: pues no ignoramos sus maquinaciones.” (2ª Corintios 2:11).
5. ¿Qué peligrosa filosofía puede arruinar el futuro de un joven?
Buscar una vida fácil: “Y he aquí gozo y alegría, matando vacas y degollando ovejas, comiendo carne y bebiendo vino, diciendo: Comamos y
bebamos, porque mañana moriremos.” (Isaías 22:13).
6. ¿Contra qué graves peligros debe el joven estar en guardia?
Amistades inconvenientes: “¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo?” (Amós 3:3).
Los vicios: “¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios habita en vosotros? Si alguno destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a
él. Porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es.” (1ª Corintios 3:16, 17).
Pereza: “El perezoso desea mucho, y nada alcanza; pero el deseo de los diligentes será satisfecho.” (Proverbios 13:4).
El pecado: “No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias.” (Romanos 6:12).
Cualidades dinámicas
7. ¿Qué virtudes debe cultivar el joven que aspira al éxito?
Ser trabajador: “Bueno le es al hombre llevar el yugo desde su juventud.” (Lamentaciones 3:27).
Diligente y animoso: “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres.” (Colosenses 3:23).
Seguir una conducta honorable: “Ninguno tenga en poco tu juventud; pero sé ejemplo de los fieles en palabra, en conversación, en amor, en espíritu,
en fe, en limpieza.” (1ª Timoteo 4:12).
Rectitud. “Aun el muchacho es conocido por sus hechos, Si su obra fuere limpia y recta.” (Proverbios 20:11).
Noviazgo y matrimonio
8. ¿Cuál es el principio fundamental en la elección del futuro cónyuge?
Acuerdo en las creencias: “No os unáis en yugo desigual con los in-crédulos. Porque, ¿que tiene en común la justicia con la injusticia? ¿Qué comunión
la luz con las tinieblas?” (2ª Corintios 6:14, 15).
9. ¿Qué ayuda se debe buscar en la elección del compañero?
Conviene actuar con prudencia y pedir consejo: “Si clamares a la inteligencia, Y a la prudencia dieres tu voz; Entonces entenderás el temor del Señor,
Y hallarás el conocimiento de Dios.” (Proverbios 2:3, 5).
El joven y la vida espiritual
10. ¿Cuál debe ser el interés supremo de los jóvenes?
“Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los malos días, y lleguen los años, de los cuales digas, No tengo en ellos.”
(Eclesiastés 12:1).
11. ¿Qué llamado dirige Dios a los jóvenes?
“Dame, hijo mío, tu corazón, y miren tus ojos por mis caminos.” (Proverbios 23:26).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Honrar a mis padres y escuchar sus consejos.
“Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que el Señor tu Dios te da.” (Éxodo 20:12).
“Guarda hijo mío, el mandato de tu padre, y no dejes la enseñanza de tu madre.” (Proverbios 6:20).
2. Mantener siempre una conducta ordenada y honorable.
“Examina la senda de tus pies, Y todos tus caminos sean rectos. No te apartes a la derecha ni a la izquierda: Aparta tu pie del mal.” (Proverbios 4:26,
27).
3. Escuchar los consejos y la corrección
“El que tiene en poco la disciplina, menosprecia su alma: Mas el que escucha la corrección, tiene entendimiento.” (Proverbios 15:32).
4. Confiar siempre en Dios.
“Porque tú, oh Señor Dios, eres mi esperanza: Seguridad mía desde mi juventud.” (Salmo 71:5).
5. Vencer el mal con el bien.
“No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal.” (Ro-manos 12:21)
6. Si Dios me llama a servirle, responder como Isaías.
“Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí.” (Isaías 6:8).
MI DECISIÓN
¿Quiere usted dedicar su juventud a Dios y a su iglesia?
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28. FORTALEZA EN LAS PRUEBAS
Debido a que vivimos en un mundo de pecado y de maldad, siempre hay la posibilidad de ser sometidos a la dura prueba del sufrimiento y el dolor.
Pero el cristiano no se deja vencer, porque tiene puesta su confianza en Dios, que es “nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las
tribulaciones.” (Salmo 46:1).
La realidad del dolor y el sufrimiento.
1. ¿Por cuál experiencia pasan todos los seres humanos?
“El hombre nacido de mujer, corto de días y hastiado de sinsabores.” (Job 14:1).
2. ¿Qué efecto produce el sufrimiento?
Desfallecimiento: “A causa de mi fuerte dolor, mi corazón desfallece en mí.” (Jeremías 8:18).
3. ¿Qué diversas causas producen pruebas y sufrimientos?
Satanás procura desanimarnos: “Sed sobrios, y velad, porque vuestro adversario el diablo, cual león rugiente, anda alrededor buscando a quién
devorar.” (1ª Pedro 5:8).
La lucha universal entre el bien y el mal: “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne; sino contra principados, contra potestades, contra señores
del mundo, gobernadores de estas tinieblas, contra malicias espirituales en los aires.” (Efesios 6:12).
El ser cristiano: “Entonces os entregarán para ser afligidos, y os matarán; y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre.” (Mateo
24:9).
La amante disciplina de Dios: “Hijo mío, no menosprecies el castigo del Señor, Ni desmayes cuando eres de él reprendido. Porque el Señor al que ama
castiga, Y azota a cualquiera que recibe por hijo. Si sufrís el castigo, Dios se os presenta como á hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no
castiga?” (Hebreos 12:5-7).
El cristiano y las pruebas
4. ¿Qué actitudes de Dios inspiran confianza?
Dios es compasivo: “El Señor no desecha para siempre. Antes, si aflige también se compadece según la multitud de sus misericordias. Porque no
aflige ni entristece voluntariamente a los hijos de los hombres.” (Lamentaciones 3:32, 33).
Dios ejerce un control comprensivo: “No os ha sobrecogido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados
más de lo que podéis resistir; sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.” (1ª Corintios 10:13).
5. ¿Cuáles son algunos aspectos positivos de las pruebas?
Producen paciencia: “Nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia.” (Romanos 5:3).
Obran arrepentimiento: “fuisteis contristados para arrepentimiento; porque habéis sido contristados según Dios.” (2ª Corintios 7:9).
Pulen el carácter: “Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria.” (2ª Corintios 4:17).
Seguridad en las pruebas
6. ¿Qué absoluta seguridad podemos abrigar?
Que Dios conoce nuestros problemas: “porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis.” (Mateo 6:8).
Para Dios todo es posible: “Y él les dijo: Lo que es imposible para con los hombres, posible es para Dios.” (Lucas 18:27).
Dios actúa en nuestro favor: “Como el padre se compadece de los hijos, Se compadece el Señor de los que le temen.” (Salmo 103:13).
7. ¿Qué maravillosas promesas de cuidado y protección son nuestras?
Dios nos ama más que cualquier ser humano: “Aunque mi padre y mi madre me dejaran, el Señor con todo me recogerá.” (Salmo 27:10)
“El que habita al abrigo del Altísimo, Morará bajo la sombra del Omnipotente. Diré yo al Señor: Esperanza mía, y castillo mío; Mi Dios, en él confiaré. Y él
te librará del lazo del cazador: De la peste destruidora. Con sus plumas te cubrirá, Y debajo de sus alas estarás seguro: Escudo y adarga es su verdad.”
(Salmo 91:1-4).
8. En vista de tales promesas, ¿cuál debe ser nuestra actitud?
“Por tanto os digo: No os acongojéis por vuestra vida, qué habéis de comer, ó que habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir: ¿no es la
vida más que el alimento, y el cuerpo que el vestido? Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial
las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?” (Mateo 6:25, 26).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Nunca desanimarme por los problemas y dificultades.
“Estando atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperamos; Perseguidos, mas no desamparados; abatidos, mas no
perecemos;” (2ª Corintios 4:8, 9).
2. Recibir el consuelo que viene de Dios.
“Bendito sea el Dios y Padre del Señor Jesucristo, el Padre de misericordias, y el Dios de toda consolación, El cual nos consuela en todas nuestras
tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquiera angustia, con la consolación con que nosotros somos
consolados de Dios.” (2ª Corintios 1:3, 4),
3. Usar la poderosa arma de la oración para pedir el auxilio de Dios.
“la oración del justo, obrando eficazmente, puede mucho.” (Santiago 5:16)
4. Aceptar la voluntad de Dios sabiendo que es lo mejor.
“Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi potencia en la flaqueza se perfecciona. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis flaquezas,
porque habite en mí la potencia de Cristo.” (2ª Coríntios 12:9).
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“Y sabemos que a los que a Dios aman, todas las cosas les ayudan a bien, es a saber, a los que conforme al propósito son llamados.” (Ro-manos
8:28)
5. Confiar totalmente en Dios
“Confiad en el Señor perpetuamente: porque en el Señor Dios está la fortaleza de los siglos.” (Isaías 26:4).
MI DECISIÓN
Siendo que las penalidades de esta vida ayudan a desarrollar nuestro carácter para el cielo, ¿está usted dispuesto a soportarlas con fe, integridad y
amor?
29. EMBAJADORES DE CRISTO
Dios, el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo operan unidos en nuestra salvación. Pero en su amor y en su sabiduría nos dan la oportunidad de colaborar
en la proclamación de las verdades redentoras. Nada es más natural que un cristiano que experimentó la felicidad de encontrar a Cristo, se transforme en
un entusiasta propagador de las buenas nuevas de salvación.
La gran comisión
1. ¿Qué misión suprema confió Cristo a su iglesia?
“Por tanto, id, y doctrinad á todos los Gentiles, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo: Enseñándoles que guarden
todas las cosas que os he mandado: y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.” (Mateo 28:19, 20)
2. ¿Qué deber tiene cada cristiano acerca de esta misión?
“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de aquel que os ha llamado de las
tinieblas á su luz admirable.” (1ª Pedro 2:9).
3. ¿En qué fases ministró Jesús en favor de la gente?
“Y rodeó Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en
el pueblo.” (Mateo 4:23).
Los métodos adecuados
4. ¿Para qué debe estar siempre preparado el cristiano?
“Sino santificad al Señor Dios en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo
que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros:” (1ª Pedro 3:15).
5. ¿Cuál es la forma fundamental de dar un buen testimonio en favor de Cristo?
El argumento más poderoso es el ejemplo de una vida santa: “Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras obras buenas,
y glorifiquen á vuestro Padre que está en los cielos.”(Mateo 5:16).
6. ¿Cuáles son las principales formas de predicar el evangelio?
La predicación pública y la enseñanza en los hogares: “Cómo nada que fuese útil he rehuido de anunciaros y enseñaros, públicamente y por las
casas,” (Hechos 20:20).
7. ¿Qué método de proclamar la verdad se describen en el Nuevo Testamento?
El testimonio personal: “El hombre de quien habían salido los demonios le rogaba que le dejase estar con Él; pero Jesús le despidió diciendo: Vuélvete
a tu casa, y cuenta cuán grandes cosas ha hecho Dios contigo. Y él se fue, publicando por toda la ciudad cuán grandes cosas había hecho Jesús con él.”
(Lucas 8:38, 39).
La presentación en los hogares: “Y le hablaron la Palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa.” (Hechos 16:32).
El testimonio al aire libre: “Y un día de sábado salimos de la puerta junto al río, donde solía ser la oración; y sentándonos, hablamos a las mujeres que
se habían reunido.” (Hechos 16:13).
Enseñanza colectiva o clases bautismales: “Y se congregaron allí todo un año con la iglesia, y enseñaron a mucha gente; y los discípulos se les llamó
cristianos por primera vez en Antioquía.” (Hechos 11:26).
Cualidades y capacitación
8. ¿Qué cualidades debe poseer un ganador de almas?
“Llegó entonces a Éfeso un judío, llamado Apolos, natural de Alejandría, varón elocuente, poderoso en las Escrituras.” (Hechos 18:24).
Ferviente y diligente: “Éste era instruido en el camino del Señor; y ferviente de espíritu, hablaba y enseñaba diligentemente las cosas que son del
Señor.” (Hechos 18:25)
Prudente y sencillo: “Sed prudentes como serpientes, y sencillos como palomas.” (Mateo 10:16).
Confianza en Dios: “Mas cuando os entregaren, no os apuréis por cómo ó qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado qué habéis de hablar.
Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.” (Mateo 10:19, 20).
¿QUÉ DEBO HACER?
1. Reconocer que Cristo estableció la iglesia con fines misioneros.
Cristo “Y les dijo: Id por todo el mundo; predicad el evangelio a toda criatura.” (Marcos 16:15).
2. Aceptar el privilegio de testificar y trabajar en favor de Cristo.
Andrés “Halló primero a su hermano Simón, y le dijo: hemos halla-do al Mesías. Y le trajo a Jesús.” (Juan 1:40-42).
“Entonces la mujer dejó su cántaro, y fue a la ciudad, y dijo a aquellos hombres: Venid, ved un hombre que me ha dicho todo lo que he hecho: ¿si quizás
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es éste el Cristo? Entonces salieron de la ciudad, y vinieron a Él.” (Juan 4:28-30).
3. Recordar que el Señor espera que cada seguidor suyo testifique de la verdad.
“Todo el que me confiese ante los hombres, yo también lo confesaré ante mi Padre que está en los cielos.” (Mateo 10:32).
4. Colaborar con Dios en proclamar la verdad, sabiendo que Él da su poder.
“Vosotros sois mis testigos, dice el Señor, y mi siervo que yo escogí; para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no
fue formado Dios, ni lo será después de mí.” (Isaías 43:10).
“No temas, que yo estoy contigo. No desmayes que yo soy tu Dios que te fortalezco. Siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi
justicia.” (Isaías 41:10).
5. Testificar con perseverancia, aunque no se vean resultados inmediatos.
“Echa tu pan sobre las aguas, y después de muchos días lo hallarás.” (Eclesiastés 11:1).
6. Recordar que Dios tiene en alta estima a los que colaboran en la actividad misionera.
Escrito está: “¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian el evangelio de la paz,
de los que anuncian buenas nuevas!” (Romanos 10:15).
MI DECISIÓN
En vista de que Dios nos comisiona a dar el evangelio a los demás, ¿está usted dispuesto a testificar acerca de su amor, dentro y fuera de la iglesia?
30. HACIA LA GRAN VICTORIA
La vida cristiana es una lucha permanente contra las asechanzas del maligno, las tentaciones y contra nuestra propia naturaleza. El cristiano, puesta
su confianza en el poder de Dios, marcha hacia adelante y hacia arriba, hacia la victoria que es segura en Cristo Jesús.
Desesperada condición
1. ¿Cuál es la condición del ser humano sin Cristo?
“Muertos en vuestros delitos y pecados... Que en aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la república de Israel, y extranjeros a los pactos de la
promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo.” (Efesios 2:1, 12).
2. ¿Cómo y por quién cambió radicalmente esta triste situación?
“Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido acercados por la sangre de Cristo.” (Efesios 2:13).
3. ¿Cuál fue el tremendo costo de la victoria?
“Él mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros podarnos morir a los pecados, y vivir a la justicia; porque por sus
heridas fuisteis sanados” (l Pedro 2:24).
4. ¿Qué tenemos que hacer ahora para obtener y mantener la victoria sobre el pecado?
Volver a Cristo: “Arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados” (Hechos 3:19).
Confesar los pecados: “Si confesamos nuestros pecados, Dios es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de todo mal.” (1ª Juan 1:9).
5. ¿Qué proceso nos conduce a la victoria, y nos mantiene en ella?
La justificación: “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios; Siendo justificados gratuitamente por su gracia por la redención que es
en Cristo Jesús; Al cual Dios ha propuesto en propiciación por la fe en su sangre, para manifestación de su justicia, atento á haber pasado por alto, en su
paciencia, los pecados pasa-dos,” (Romanos 3:23-25).
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.” (Romanos 5:1).
“Estando ya justificados en su sangre, por Él seremos salvos de la ira.” (Romanos 5:9).
Santificación: “Porque la voluntad de Dios es vuestra santificación: que os apartéis de fornicación; Que cada uno de vosotros sepa tener su vaso en
santificación y honor” (1ª Tesalonicenses 4:3, 4).
“Mas creced en la gracia y conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.” (2ª Pedro 3:18).
“Mas el que perseverare hasta el fin, ése será salvo” (Mateo 24:13).
Glorificación: “Y si hijos, también herederos; herederos de Dios, y coherederos de Cristo; si empero padecemos juntamente con él, para que
juntamente con él seamos glorificados.” (Romanos 8:17).
La glorificación será al regreso de Cristo: “En un momento, en un abrir de ojo, á la final trompeta; porque será tocada la trompeta, y los muertos serán
levantados sin corrupción, y nosotros seremos transformados.” (I Corintios 15:52)
6. ¿En quién estriba el secreto de estos procesos?
En Cristo, y sólo en Cristo: “Mas de él sois vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, y justificación, y santificación, y
redención.” (I Corintios 1:30).
“Es Cristo en vosotros la esperanza de gloria.” (Colosenses 1:27).
Frutos de la vida victoriosa
7. ¿Qué buenos frutos producirá una vida consagrada a Cristo?
Obediencia: “Habiendo purificado vuestra almas en la obediencia de la verdad,” (1ª Pedro 1:22)
Firmeza. “Que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar... nadie os engañe en ninguna manera.” (2ª Tesalonicenses 2:2, 3).
Transformación: “No os conforméis á este siglo; mas reformaos por la renovación de vuestro entendimiento, para que experimentéis cuál sea la buena
voluntad de Dios, agradable y perfecta.” (Romanos 12:2).
Perfección “Sed, pues, perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto.”(Mateo 5:48).
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¿QUÉ DEBO HACER?
1. Andar en la luz que recibí.
“Si andamos en la luz, como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangro de su Hijo Jesús nos limpia de todo peca-do” (1ª Juan
1:7).
2. Mantenerme unido con Cristo.
“Permaneced en mí, y yo en vosotros... El que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto. Porque separados de mi, nada podéis hacer”
(Juan 15:4, 5).
3. Estudiar la Biblia cada día, como los creyentes de Berea.
“Estos fueron más nobles... pues recibieron la Palabra de todo co-razón, y examinaban cada día las Escrituras.” (Hechos 17:11).
4. Orar a Dios con fervor, como Daniel.
“Se arrodillaba tres veces al día, y oraba y daba gracias delante de su Dios.” (Daniel 6:10).
5. Confiar en nuestro amante Dios, como confiaron los innumerables personajes de la Biblia.
“Es pues la fe la sustancia de las cosas que se esperan, la demostración de las cosas que no se ven. (La fe es estar seguros de lo que esperarnos, y
ciertos de lo que no vemos.) (Hebreos 11:1).
6. Confiar en nuestro Abogado perdonador.
“Hijitos míos, esto os escribo para que no pequéis. Pero si alguno hubiera pecado, abogado tenemos ante el Padre, a Jesucristo el Justo.” (1ª Juan 2:l).
MI DECISIÓN
En vista de que Dios quiere darnos la gran victoria, ¿Está usted dispuesto a mantenerse unido con Cristo?
COMENTARIO
“Si os entregáis a Él y le aceptáis como vuestro Salvador, por pecaminosa que haya sido vuestra vida, seréis contados entre los justos, por consideración
hacia Él. El carácter de Cristo reemplaza el vuestro, y sois aceptos por Dios como si no hubierais pecado" (Felicidad Abundante).
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