Tipear 1 La Asamblea de los Pájaros - Capítulo 1: Invocación Alabado sea el Santo Creador, entronizado sobre las aguas, que creó a todas las criaturas de la Tierra. Otorgó a los Cielos dominio, y a la Tierra dependencia; a los Cielos dio movimiento, y a la Tierra reposo. Elevó sobre la Tierra el firmamento, a modo de carpa sin pilares para sostenerlo. En seis días creó los siete planetas y con dos letras creó las nueve cúpulas de los Cielos. En el comienzo dio a las estrellas un baño de oro para que por las noches los cielos jugaran al chaquete. Otorgó diversas propiedades a los tejidos del cuerpo y puso polvo sobre la cola del pájaro del alma. Hizo al océano líquido como signo de dependencia, y las cimas de las montañas se coronan de hielo por temor a El. Secó el lecho del mar y de sus piedras hizo surgir rubíes, y de su sangre, almizcle. A las montañas de picos como dagas y valles como cintos; de este modo con orgullo elevan sus cabezas. Hace a veces surgir ramilletes de rosas del rostros del fuego; otras, coloca puentes sobre las aguas. Hizo que un mosquito picara a Nimrod, su enemigo, quien por ello sufrió durante cuatrocientos años. En su sabiduría, hizo que la araña tejiera su red para proteger al más elevado de los hombres. Estrecho la cintura de la hormiga hasta el espesor de un cabello, le dio los negros ropajes de las Abasidas y adornos de brocado dignos de un pavo real y la hizo compañera de Salomón. Al ver que había defectos en el tapiz de la naturaleza, volvió a acomodarlo de forma perfecta. Tipo la espada con el color del tulipán, y del vapor creó un lecho de nenúfares. Empapó de sangre terrones de tierra para poder sacar de allí cornalinas y rubíes. El Sol y la Luna, uno de día, la otra de noche, posan su frente sobre el polvo en señal de adoración; y de su gesto surge el movimiento. Es Dios quien desplegó el blanco día y plegó la noche llenándola de oscuridad. A la cotorra dio un collar de oro, e hizo a la abubilla mensajera del Camino. El firmamento es como un pájaro aleteando a través del sendero que Dios le señalara, golpeando la Puerta con su cresta como un martillo. Dios hizo que el firmamento girara: la sigue al día, el día a la noche. Cuando respiraba sobre arcilla, el hombre crea y da forma al mundo a partir de un poco de vapor. Hace que el perro guíe a veces al viajero, usa otras al gato para mostrar el Sendero. Por momento da a un báculo el poder de Salomón, o concede elocuencia a la hormiga. Produce de una vara la serpiente; y de un bastón hace surgir torrentes de agua. Colocó en lo alto la órbita soberbia, y la ata con hierro cuando, al rojo vivo, mengua. Sacó un camello de la roca, e hizo bramar al becerro de oro. En invierno disemina nieve plateada; en otoño, hojas de amarillo oro. Cubre la espina y la tiñe del color de la sangre. Da al jazmín cuatro pétalos y al tulipán bonete rojo. Coloca una corona en la frente del narciso, y deja caer en su interior perlas de rocío. Ante la idea de Dios, la mente se desconcierta, la razón sucumbe; por El los Cielos giran, la Tierra oscila. Desde las escamas del pez, hasta la Luna, cada átomo… … atestigua su Ser. Las profundidades de la Tierra y la altura de los Cielos le rinden homenaje. Dios produce el viento, la tierra, el fuego, y la sangre, y en ello anuncia su secreto. Tomó un poco de arcilla y la amasó con agua, y al cabo de cuarenta días colocó en ella el espíritu que vivifica el cuerpo. Le dio inteligencia para discernir las cosas. Cuando vio que la inteligencia tenía discernimiento, le dio conocimiento, para pesar y ponderar. Pero cuando el hombre entró en posesión de sus facultades, confesó su impotencia y lo sobrecogió el asombro, al tiempo que su cuerpo se entregaba a actos exteriores. Amigos o enemigos, todos se someten al yugo que Dios, en su sabiduría, impone; y, ¡Es sorprendente! El cuida de todos nosotros. Al comienzo de los tiempos, Dios usó las montañas como clavos para fijar la Tierra; y lavó el rostro de la Tierra con el agua del Océano. Luego colocó a la Tierra en el lomo de un toro, al toro sobre un pez, y al pez en el aire. ¿Y sobre qué está apoyado el aire? Sobre nada. Pero nada es nada, y todo eso es nada. Admiremos, entonces, las obras del señor, a pesar que El mismo las considera nada. Viendo que solo Su Esencia existe, es claro que no hay nada más que El. Su trono está sobre las aguas y el mundo en el aire. Pero dejemos agua y aire, porque todo es Dios: el trono y el mundo son sólo un talismán. Dios es todo, las cosas sólo tienen valor nominal; el mundo visible y el mundo invisible sólo son El. No hay nada más que El. Pero ¡oh misterio!, nadie puede verlo. Los ojos son ciegos aunque el mundo esté iluminado por un sol brillante. Si tienes de El apenas un atisbo, pierdes la razón, y si Lo ves completamente, te pierdes a ti mismo. Todo hombre conocedor de su ignorancia, recogiéndose, honestamente dice: “Oh tú no puedes ser visto a pesar de que te das a conocer, todos somos tú y nada que no… … seas tú se manifiesta. El alma está escondida en el cuerpo y tú estás oculto en el alma. Oh tú que estás escondido en lo que está escondido, tú eres más que todo. Cada uno se ve a sí mismo en ti y te ve en cada cosa. Si tú morada está rodeada de guardias y centinelas ¿Cómo podemos acercarnos a tu presencia? La mente y la razón no tienen acceso a tu esencia, y nadie conoce tus atributos. Como eres eterno y Perfecto siempre confundes al sabio. ¿Qué más podemos decir, si no puedes ser descrito?”. Oh, corazón mío, si quieres llegar al origen del conocimiento, anda con cuidado. Para cada átomo hay una puerta diferente, y a cada átomo un camino diferente lo conduce al misterioso Ser del que estoy hablando. Para conocerte a ti mismo tienes que vivir cien vidas. Pero a Dios se lo conoce por así mismo y no por ti; es Él el que abre el camino que a El conduce y no la sabiduría humana. El conocimiento de Dios no se encuentra visitando a los retóricos. Conocimiento e ignorancia, en este caso son la misma cosa, porque no pueden explicar ni describir. La opinión de los hombres sólo surge de su imaginación; y es absurdo tratar de deducir algo de lo que dicen: estén sanos o enfermos, lo que dicen sólo sale de ellos. Dios está más allá del conocimiento y la evidencia, y nada puede darnos una idea de su Sagrada Majestad. Oh tú que valoras la verdad, no busques analogías; la existencia de este Ser sin igual no las admite. Si ni los profetas ni los mensajeros celestiales han comprendido la menor partícula, y han puesto su frente sobre el polvo diciendo: “No te hemos conocido como verdaderamente eres”, ¿Quien soy yo, entonces, para pavonearme diciendo que Lo conozco? Oh ignorante, hijo del primer hombre, el Califa de Dios en la tierra, trata de participar del conocimiento espiritual de tus padres. Todas las criaturas que Dios saca de la… … nada se postran ante él. Cuando quiso crear a Adán, lo hizo salir detrás de cien velos y le dijo: “Oh Adán, todas las criaturas me adoran; sé tú también adorado”. El único que se apartó de esta adoración fue transformado de ángel en demonio. Maldecido, no conoció el secreto. Su rostro se tornó negro y dijo a Dios: “Oh tú que posees absoluta independencia, no me abandones”. El Altísimo le respondió: “Tú que estás maldito, sabe que Adán es al mismo tiempo mi servidor y rey de la naturaleza. Ve adelante de él hoy, y mañana quema ispand para él”. Cuando se unió el alma al cuerpo, formó parte del todo: nunca hubo antes un talismán tan maravilloso. El alma participaba de aquello que es elevado, y el cuerpo de lo que es bajo; estaba formada de una mezcla de arcilla pesada y espíritu puro. Por esta mezcla, el hombre era el más sorprendente de los misterios. No sabemos ni comprendemos ni un poquito de nuestro espíritu. Si desearas decir algo acerca de ello, será mejor que guardes silencio. Muchos conocen la superficie de este océano, pero no comprenden nada de sus abismos; y el mundo invisible es el talismán que lo protege. Pero este talismán de obstáculos corporales será finalmente quebrado. Encontraras el tesoro cuando el talismán desaparezca; el alma se manifestará cuando el cuerpo quede de lado. Pero tú alma es otro talismán; es, por este misterio, otra sustancia. Anda pues por el camino que te indico, pero no pidas explicación. En este vasto océano, el mundo es un átomo y el átomo un mundo. ¿Quién sabe qué tiene más valor aquí, si la cornalina o el guijarro? Hemos arriesgado nuestra vida, nuestra razón, nuestro espíritu y nuestra religión para comprender la perfección de un átomo. Sella tus labios y no preguntes nada acerca del paraíso o del trono de Dios. Nadie conoce verdaderamente la esencia del átomo, preguntale a quien quieras. Los Cielos son como una cúpula invertida, sin estabilidad, al mismo tiempo inmóviles y en movimiento. Nos perdemos al contemplar tales misterios, son velos sobre velos; somos como figuras pintadas sobre una pared y lo único que podemos hacer es mordernos el dorso de la mano. Considera a los que han entrado en el camino del Espíritu. Mira lo que le ocurrió a Adán; ve cuántos años pasó en aflicción. Contempla el diluvio de Noé y todo lo que sufrió el patriarca en manos de los impíos. Considera a Abraham, lleno de amor por Dios: sufrió torturas y fue arrojado al fuego. Observa al infortunado Ismael, ofrecido en sacrificio al amor divino. Mira cómo Jacob quedó ciego de tanto llorar a su hijo. Fíjate en José, tan admirable en su poder como en su esclavitud, en el pozo de la prision. Recuerda al desgraciado Job tendido en la tierra, presa de gusanos y lobos. Piensa en Jonás que, apartado del Camino, fe desde la Luna al vientre del pez. Sigue a Moisés desde su nacimiento: un arca le sirvió de cuna y fue exaltado por el Faraón. Piensa en David, que puso en su pecho una coraza y sus suspiros derretían el hierro como si fuera cera. Observa a Salomón, cuyo imperio fue gobernado por el Usurpador. Recuerda a Zacarías, tan ardiente de amor por Dios que mantuvo en silencio mientras lo mataban; y a Juan Bautista, despreciado ante el pueblo, su cabeza presentada en bandeja. Détente ante el milagro de Cristo al pie de la cruz, cuando se había salvado de manos de los judios. Y finalmente, pondera lo que el Principal de los Profetas sufrió por los insultos e injurias de los impíos. Después de todo esto, ¿Crees que será fácil alcanzar conocimiento espiritual? Significa nada menos que morir a todo. ¿Qué más puedo decir, si ya no queda ni una rosa en el monte? ¡Oh sabiduría!, no eres más que un niño de pecho; la razón del versado anciano se pierde en este camino. ¿Cómo podría yo, un necio, llegar a esa Esencia; y si llegara, como podría entrar por la puerta? ¡Oh Santo Creador! ¡Vivifica mi espíritu! Creyentes y no creyentes por igual están bañados en sangre, y mi cabeza da vueltas con los cielos. No me falta esperanza pero estoy lleno de impaciencia. ¡Amigo mío!, tan cuencanos el uno del otro: anhelo repetirte mi discurso día y noche para que no cese ni un instante su deseo de iniciar el viaje en búsqueda de la Verdad. - Capítulo 2: Los Pájaros se Reúnen ¡Bienvenido, oh Abubilla! Tù que fuiste guía del Rey Salomón y verdadera mensajera del valle, que tuviste la buena fortuna de ir hasta los límites del Reino de Saba. Tu trinado diálogo con Salomón fue una delicia; por ser su compañera obtuviste una corona de gloria. Debes encandelar al demonio, el tentador, y habiéndolo hecho entrarás al palacio de Salomón. ¡Oh avecilla de las Nieves, parecida a Moisés! Levanta tu cabeza y haz resonar tu chirimia para celebrar el verdadero conocimiento de Dios. Igual que Moisés, has visto el fuego desde lejos; verdaderamente eres un pequeño Moisés en el Monte Sinaí. Mi discurso es sin palabras, sin lenguaje, sin sonido; compréndelo entonces sin mente, sin oído. ¡Bienvenida, oh Cotorra! Bellamente vestida y con collar de fuego; tu collar es digno de un morador de las antípodas pero tu traje es merecedor del Cielo. ¿Pudo Abraham salvarse del fuego de Nimrod? Rompe la cabeza de Nimrod y sé como Abraham, amigo de Dios. Cuando te hayas liberado de manos de Nimrod, ponte el ropaje de la gloria y no temas al collar de fuego. ¡Bienvenido, oh Perdiz! Tú, que caminas con tanta gracia y te contestas sobrevolando los montes del conocimiento divino. Elévate con regocijo y considera los beneficios del Camino. Golpea con el martillo la puerta de la casa de Dios; y humildemente haz que se fundan las montañas de tus perversos deseos para que el camello pueda salir. ¡Salud, oh Halcón Real! Tú de mirada penetrante, ¿Por cuánto tiempo seguirás siendo tan violento y apasionado? Ata a tus patas la carta de amor eterno pero no rompas el sello hasta la eternidad. Mezcla tu espíritu con la razón y mira la eternidad del antes y después como una. Rompe tu inmundo cadáver y establécete en la caverna de la unidad; y Mahoma se hará presente. ¡Salud, oh Codorniz! Cuando en tu espíritu oyes el “alast” del amor, tu cuerpo del deseo contesta, con disgusto, “balé”. Consume tu cuerpo del deseo como el asno de Cristo, y enciéndete, como el Mesías, con el amor del Creador. Haz arder este asno y toma el pájaro del amor, para que el Espíritu de Dios pueda felizmente llegar a ti. ¡Salud, oh Ruiseñor del Jardín del Amor! Pronuncia tus notas melancólicas, quejumbrosas por heridas y penas de amor. Laméntate dulcemente desde el corazón, como David. Abre tu garganta melodiosa y canta a las cosas espirituales. Muestra a los hombres con tus cantos el Camino verdadero. Haz el hierro de tu corazón tan blando como la cera, y serás como David, ferviente en el amor a Dios. ¡Salud, oh Pavo Real del Jardín de las Ocho Puertas! Has sufrido a causa de la serpiente de siete cabezas por la que fuiste expulsado a Edén. Si te liberes de esta detestable serpiente, Adán te llevará con él al Paraíso. ¡Salud, oh Excelente Faisán! Tú ves aquello que está lejos; percibes la fuente del corazón inmersa en el océano de luz, al tiempo que estás metido en el pozo de la oscuridad, la prisión de la duda. Sal del pozo y eleva tu cabeza hacia el trono divino. ¡Salud, oh Tórtola gimiente! Saliste llena de alegría y regresaste con corazón triste a una prisión tan estrecha como la de Jonás. Oh tú que vagas de aquí para allá como una pez ¿Te dejarás consumir por el rencor? Corta la cabeza de este pez para que puedas acomodar tus plumas en el ápice de la Luna. ¡Salud, oh Paloma! Entona tus notas para que yo pueda rodearte con siete bandejas de perlas. No te cabe la infidelidad, ¿Acaso no es un collar de lealtad el que rodea tu cuello? Cuando penetres el camino de la compresión, Khizr te ofrecerá el agua de la vida. ¡Bienvenido, oh Halcón! Tú que has levantado vuelo, y luego de revelarte contra tu amo has bajado la cabeza. Compórtate correctamente. Estás atado al cuerpo de este mundo, y por ello estás lejos del otro. Cuando te liberes de ambos mundos, presente y futuro, descansarás en las manos de Alejandro. ¡Bienvenido, oh Jilguero! Ven con alegría, como el fuego, deseoso de actuar. Cuando hayas quemado todos tus lazos, la luz de Dios se manifestará cada vez más. Dado que tu corazón conoce los secretos de Dios, sigue siendo fiel. Cuando hayas llegado a la perfección, ya no existirás. Pero Dios permanecerá. - Capítulo 3: La Asamblea de los Pájaros 1 Apertura de la Asamblea Todos los pájaros del mundo, los conocidos y los desconocidos reunidos en asamblea, dijeron: “Cada país de este mundo tiene su rey, ¿Por qué entonces el reino de los pájaros carece de un gobernante? Esto no puede seguir así. Debemos aunar esfuerzos para encontrar uno, porque ningún país puede estar bien organizado y tener buena administración si carece de un rey”. Así, comenzaron a considerar como iniciar la búsqueda. La Abubilla, excitada y llena de esperanzas, adelantándose, se colocó en medio de la asamblea de los pájaros. En su pecho figuraba el ornamento evidencia de que había entrado en el camino del conocimiento espiritual; la cresta de su cabeza era como la corona de la verdad, y poseía conocimiento del bien y el mal. “Queridos Pájaros”, comenzó a decir, “en todo momento estoy dispuesta para la santa batalla, soy mensajera del mundo invisible. Tengo conocimiento de Dios y de los secretos de la creación. Cuando se lleva en el pico, como es mi caso, el nombre de Dios, Bismilá, significa que se conoce el significado oculto de las cosas. Y sin embargo, no hay reposo en mi inquietud, no me comprometo con persona alguna porque estoy plena de amor por el Rey. Por instinto encuentro agua donde nadie puede hallarla, y conozco muchos otros secretos. He hablado con Salomón y soy su principal seguidora. ¿No es sorprendente?: nunca preguntaba por quienes se ausentaba de su reino, y sin embargo, cuando yo me alejaba de él por un día, enviaba a sus mensajeros en mi búsqueda, y dado que no podía estar sin mí por un instante, mi valor quedó establecido para siempre. Yo llevaba sus cartas y fui su confidente. El pájaro que siempre fue buscado por el profeta Salomón, merece una corona en su cabeza. Este pájaro, de buen concepto a los ojos de Dios, ¿Cómo podría arrastrar sus plumas en polvo? Durante años he viajado por tierra y mar, sobre montañas y valles. Recorrí un inmenso espacio en tiempos del diluvio; acompañé a Salomón en sus viajes y he llegado a medir los límites del mundo. “Conozco bien a mi Rey, pero sola no puedo iniciar su búsqueda. Abandona tu timidez, tu presunción y falta de fe, porque aquel que ilumina su propia vida queda liberado de sí mismo; queda liberado del bien y del mal en la búsqueda de su amado. Sé generoso con tu propia vida. Pon los pies sobre la tierra y emprende con gozo el camino hacia la corte del rey. Tenemos un rey auténtico, vive tras las montañas Caf. Su nombre es Simurg y es el rey de los pájaros. Está cerca de nosotros, pero nosotros estamos lejos de él. El sitio donde mora es inaccesible, y no existe lengua que pueda expresar su nombre. Ante él hay cien mil velos de luz y oscuridad, y en los dos mundos no hay poder que dispute su reino. Es el soberano y está bañado en la perfección de su majestad. No se manifiesta completamente, ni aún en el sitio donde mora, y no hay inteligencia que pueda llegar a él. El camino que lleva a su morada es desconocido y nadie tiene suficiente resolución para seguirlo, sin embargo miles de criaturas viven en añoranza. El alma más pura no puede describirlo, no puede la razón comprenderlo:ambos ojos son ciegos. El sabio no descubre su perfección y belleza por la imaginación. ¿Pero cómo se podría recorrer ese sendero con el pensamiento? ¿Cómo llegar desde la Luna hasta el pez? Por eso, miles de mentes vagabundean, como la bola en el juego de polo, y sólo se escuchan lamentos y suspiros de amor. Hay que atravesar muchas tierras y mares en el camino. No imagines que el viaje es corto. Se debe poseer el corazón de un león para entrar en esta senda inusual, porque es muy larga y el mar es muy profundo. En estado de estupefacción, se avanza con paso pesado, a veces sonriendo, a veces llorando. En cuanto a mí, me sentiría feliz sólo solo de llegar a ver la huella del sendero. Eso ya sería grandioso, pero vivir sin ello, no lo soportaría. No se debe esconder el alma al amado, sino más bien ponerla en tono para llevarla hacia la corte del Rey. Lávate las manos del polvo de esta vida para poder ser un hombre de acción. Por el amado, renuncia, con valor, a esta pequeña vida tuya. Si te sometes con buena voluntad, el amado dará su vida por tí”. Primera Manifestación del Simurg “¡Algo asombroso! La primera manifestación del Simurg tuvo lugar en China en medio de la noche. Una de sus plumas cayó en China y luego se hizo famosa en todo el mundo. Cada criatura tuvo una imagen de esta pluma, y al formarse su propia idea, cayó en agitación. Esta pluma aún se encuentra en la galería de arte de ese país, de ahí el dicho: ‘¡Busca conocimiento hasta en la China!’ “De no haber sido por su manifestación no se hubiera producido tanta inquietud en el mundo en relación a este misterioso Ser. Ese signo de su existencia es símbolo de su gloria. Todas las almas tienen una impresión de la imagen de su pluma. Y como su descripción no tiene cabeza ni cola, principio ni fin, no es necesario decir nada más al respecto. Ahora, tú que estás por emprender la búsqueda, prepárate y da el primer paso.” Cuando la Abubilla concluyó, los pájaros, con gran evitación, comenzaron a comentar la gloria de este rey, y arrebatados por el anhelo de tenerlo como soberano estaban impacientes por partir. Resolvieron viajar juntos: cada uno sería amigo para el otro y enemigo de sí mismo. Pero cuando comenzaron a darse cuenta de lo largo y doloroso que el viaje sería, vacilaron, y a pesar de la aparente disposición comenzaron a presentar sus excusas, cada uno de acuerdo a su tipo, y así dijeron: 2 El Ruiseñor Casi a pesar de sí mismo, el primero en adelantarse fue el Ruiseñor. Cantó apasionadamente, llenando de emoción cada una de las mil notas de su canto; y cada una encerraba en un mundo de secretos. Mientras cantaba sus misterios, los pájaros guardaron silencio. “Los secretos del amor no me son desconocidos”, dijo. “Toda la noche repito mis estrofas de amor, ¿No hay siempre, acaso, un David triste a quien cantar los melancólicos salmos del amor? Los dulces gemidos de la flauta y los lamentos de laúd se inspiran en mí. Creó conmoción entre las rosas y en el corazón de los amantes. Siempre enseño nuevos misterios, a cada instante renuevo mis canciones de tristeza. Cuando el amor subyaga mi alma, mi cantar es como un mar que suspira: el que me escucha pierde la razón, aunque se cuente entre los sabios. Si me separan de mi amada Rosa me siento desolado, dejo completamente de entonar. Mis secretos no son para cualquiera; sólo la Rosa los conoce con certeza. Tan profundamente amo a la Rosa que ya no pienso en mi propia existencia más sólo en ella y en el coral de sus pétalos. El viaje hacia el Simurg está más allá de mis fuerzas; el amor de la Rosa es suficiente para un Ruiseñor. Es por mí que ella abre sus cien pétalos; ¡Qué más puedo pedir! La Rosa que hoy florece está en pleno anhelo, y sonríe para mí llena de gozo. ¿Cómo puede el Ruiseñor privarse ni un instante del amor de esta hechicera?”. 3 La Abubilla La Abubilla replicó: “Oh Ruiseñor, tú que no te dejas deslumbrar por la forma exterior de las cosas, cesa de deleitarte en este apego tan engañoso. El amor de la Rosa tiene muchas espinas; te perturba y domina. La Rosa es bella, pero su belleza pronto acaba. El que busca ser Perfecto no debería ser esclavo de un amor tan pasajero. Si la sonrisa de la Rosa despierta tu deseo, llenará luego tus días y noches de lamentos. Olvida a la Rosa y avergüénzate de ti: porque ella ríe contigo cada primavera y luego deja de sonreír.” Y relato una historia: La Princesa y el Derviche Un rey tenía una hija tan bella como la Luna, amada por todos. Su mirada y la dulce embriaguez que producía su presencia, despertaba pasión alrededor. Su rostro era blanco como alcanfor, su cabello negro azabache. Un rubí de los más finos se secó, celoso de sus labios, y el azúcar, turbado, se fundía en ellos. La voluntad del destino hizo que un derviche la viera y el pan que sostenía cayó en sus manos. Ella pasó a su lado como una llamarada, y al pasar, sonreía. Ante eso, el derviche cayó a la tierra casi privado de vida. No podía descansar de noche ni de día y lloraba constantemente. Cuando pensaba en su sonrisa derramaba lágrimas como una nube derrama lluvia. Este amor desesperado duró siete años, en los que vivió en la calle con los perros. Finalmente los servidores de la princesa decidieron terminar con esto. Pero ella habló en secreto, diciéndole: “¿No ves que es imposible que entre tú y yo tengamos relaciones íntimas? Vete de inmediato o serás ejecutado: retírate de mi puerta, ¡vete!”. El pobre derviche respondió: “El día que me enamore de ti lave mis manos de esta vida. Miles como yo se sacrificaron por su belleza. Dado que tus hombres están empeñados en matarme injustamente, responde a una simple pregunta: ¿El día que te convertiste en la causa de mi muerte, por qué me sonreías?”. “Oh gran tonto”, dijo ella, “cuando vi que estabas a punto de humillarte, sonreí por compasión. No me está permitido burlarme, pero si sonreír por compasión”. Y diciendo esto, se desvaneció como una voluta de humo, dejando al derviche lleno de aflicción. 4 La Cotorra Luego se adelantó la Cotorra, con un turrón de azúcar en su pico, vestida con su traje verde y collar de oro. El halcón es un mosquito ante el brillo de este pájaro; la alfombra verde de la tierra es un reflejo de sus plumas, y sus palabras son como azúcar destilada. Escuchemos lo que dice: “Hombres viles con corazón de hierro me han encerrado en una jaula para admirar mis encantos. Atada en esta prisión, vivo ansiando la fuente de agua de la inmortalidad que guarda Khizr. Igual que él, visto de verde, porque soy un Khizr entre los pájaros. Anhelo llegar hasta esa fuente de agua, pero esta mariposa nocturna no tiene fuerzas para elevarse hasta las grandes alas de Simurg; la fuente de Khizr es suficiente para mi”. La Abubilla respondió: “¡Oh tú, no tienes idea de la felicidad! El que no está dispuesto a renunciar a su vida no es hombre. La vida te ha sido dada para que por un instante tengas un digno amigo. Emprende el Camino, ya que no eres una almendra sino sólo una cáscara. Únete a hombres de valor y entra libremente en la Vía”. El Loco de Dios y Khizr Había un hombre, loco de amor por Dios. Khizr le dijo: “Hombre perfecto, ¿Serías mi amigo?”. Y le respondió: “Tú y yo no somos compatibles, porque has bebido grandes tramos del agua de la inmortalidad y por eso existes por siempre y yo, yo deseo abandonar mi vida. No tengo amigos y tampoco me valgo por mí mismo. Tú te ocupas de preservar tu vida, yo sacrifico la mía cada día. Será mejor que te abandone, como los pájaros escapan de la trampa, por lo tanto, adiós”. 5 El Pavo Real Luego siguió el dorado Pavo Real, con sus plumas coloridas, ¿Qué diré?, ¡De miles de colores! Se mostraba, de un lado y del otro, como una novia. “El que pintó este mundo”, dijo, “al darme forma tomó en sus manos el pincel de Gin. Pero a pesar de que soy un ángel Gabriel entre los pájaros, mi suerte no es envidiable. Por ser amigo de la serpiente en el paraíso terrenal fui expulsado de ahí ignominiosamente. Los que confiaban en mí, me retiraron su confianza, y mis pies fueron a prisión. Sin embargo siempre tengo la esperanza de que un guía benevolente me saque de esta oscura morada y me lleve a las mansiones eternas. No espero llegar hasta el palacio del rey del que me hablas, me alcanzará con llegar hasta su puerta. ¿Cómo se puede esperar que yo busque al Simurg cuando he vivido en el paraíso terrenal? No tengo otro deseo más que el de vivir nuevamente allí. Ninguna otra cosa tiene sentido para mí”. La Abubilla respondió: “Tú te apartas del Camino verdadero. El palacio de este Rey supera tu paraíso. Nada será mejor que tratar de llegar a él. Es la habitación del alma, es la eternidad, es el objeto de nuestros deseos más auténticos, la morada del corazón, trono de la verdad. El Altísimo es un vasto océano; el paraíso de la gracia terrenal es sólo una pequeña gota; todo lo que no es este océano es una distracción. Si puedes tener el océano, ¿por qué querrías una gota de rocío? ¿Podría el que participa de los secretos del sol entretenerse con una mota de polvo? ¿El que tiene todo puede preocuparse por una parte? ¿Se ocupa el alma de los miembros del cuerpo? Para llegar a la perfección busca el todo, elige el todo, sé el todo”. El Maestro y su Discípulo Un discípulo preguntó a su Maestro: “¿Por qué se vio obligado Adán a abandonar el paraíso?”. El Maestro respondió: “Cuando Adán, la más noble de las criaturas, entró al paraíso, escuchó una voz resonante del mundo invisible que decía: ‘Oh, tú que estás atado al paraíso terrenal por cien lazos, debes saber que, en ambos mundos, a cualquiera que se identifique con lo que está entre él y yo, lo privaré de todo lo visible, para que pueda estar atado sólo a mí, su verdadero amigo’. Para un amante, cien mil vidas no son nada sin su amada. Todo aquel, así fuera el mismo Adán, que vivió en pos de algo que no fuera Él, fue expulsado. Los moradores del Paraíso saben que lo primero que deben entregar es su corazón”. 6 El Pato El pato salió del agua con timidez y se unió a la asamblea, vestido con sus mejores galas. “Nadie ha conocido jamás una criatura más bella o pura que yo”, dijo: “Cada hora realizó las abluciones correspondientes y extiende luego sobre las aguas la alfombra de la oración. ¿Qué pájaro puede vivir y moverse en el agua como lo hago yo? ¿Acaso no tengo un poder maravilloso?Entre los pájaros soy un penitente de visión clara, de límpida vestidura; y vivo en el elemento más puro. Nada me es más provechoso que el agua porque en ella encuentro mi alimento y tengo mi morada. Si me aquejan penas, las lavo con agua. Agua clara alimenta el arroyo en el que vivo, la tierra seca no me es grata. Por ello, porque me ocupo sólo del agua, ¿cómo podría abandonarla? Todo lo viviente vive gracias al agua. ¿Cómo sería posible que yo cruzara los valles y volara hacia el Simurg? ¿Cómo podría alguien como yo, feliz en la superficie del agua, anhelar ver el Simurg?” La Abubilla dijo: “¡Oh tú que te deleitas en el agua, llenando así con ella tu vida! Indolentemente te adormeces allí, pero luego viene una ola que te barre. El agua sólo es buena para los de semblante bello y rostro limpio. ¡Si así eres, está bien! Pero ¿cuánto tiempo permanecerás limpio y puro como el agua?”. Historia del Hombre Piadoso Alguien preguntó a un santo loco: “¿Qué son los dos mundos que siempre ocupan nuestros pensamientos?”. Y respondió: “Tanto el mundo superior como el inferior son como una gota de agua, que es y no es. Fue una gota de agua que se manifestó en el principio, y luego asumió muchas formas encantadoras. Todas las apariencias son como el agua. Nada es más duro que el hierro, y sin embargo el agua es su origen. Todo lo que tiene agua como origen, incluso el hierro, sólo tiene la realidad de un sueño. El agua no es estable”. 7 La Perdiz La siguiente fue la Perdiz, graciosa aunque llena de autosatisfacción. Tímidamente se asoma de su escondite de perlas, vestida de amanecer. Pico rojo y ojos pintados con sangre, vuela ladeando levemente la cabeza, con su cinto y espada. Dijo: “Me gusta vagar entre ruinas porque amo las piedras preciosas. Ellas han encendido en mi corazón un fuego que me satisface. Cuando ardo en deseo por ellas, los guijarros que he tragado se tiñen de sangre. Pero a menudo me encuentro entre piedra y fuego, inactiva y perpleja. ¡Oh, amigo míos, ved cómo vivo! ¿Será posible despertar a alguien que duerme sobre piedras y traga grava? “Mi corazón está herido por cientos de penas porque mi amor por las piedras preciosas me ha atado a las montañas. El amor que se siente por otras cosas es pasajero; pero el reino de las joyas es eterno, ellas son la esencia de la montaña perpetua. Conozco las montañas y las piedras preciosistas. Con mi cinto y mi espada siempre estoy buscando el diamante, y habría que ver si existe una sustancia de naturaleza más elevada que las piedras, como hundidos en arcilla blanda. ¿Cómo podría llegar valerosamente ante él poderosos Simurg con la mano sobre mi cabeza y mis pies en el barro? Con seguridad, o muero o encuentro piedras preciosas en el camino. Mi nobleza es evidente. Aquel que no comparte mi meta no merece ser tenido en cuenta.” La Abubilla replicó: “¡Oh tú que posees los colores de todas las piedras, titubeas un poco y tus excusas son poco convincentes! La sangre de tu corazón mancha tu pico y tus patas, y tus afanes te degradan. ¡Qué son las joyas sino piedras de colores!, y sin embargo, por amor a ellas se te vuelve piedra el corazón. Sin su colorido no serían más que pequeños guijarros ordinarios. El que posee el perfume no busca los colores; el que tiene la esencia no renuncia a ella por el brillo de las formas exteriores. Busca la joya verdadera, la de auténtica calidad, y deja de contentarte con piedras”. El Anillo de Salomón Ninguna piedra fue tan famosa como la del Anillo de Salomón, y sin embargo era sólo una piedra simple que no pesaba más que medio dang. Pero cuando Salomón hizo con ella un sello, entró en dominio del mundo entero. Se impuso su ley y su poder llegó hasta los horizontes más lejanos. El viento llevaba su voluntad a todos los rincones, pero él poseía sólo una piedra medio dang. Se dijo: “Si mi reino y mi ley dependen de esta piedra, nadie en adelante tendrá semejante poder”. Si bien Salomón fue un gran rey a causa de su sello, esto mismo demoró su progreso en el sendero espiritual; y llegó al Paraíso del Edén quinientos años más tarde que otros profetas. Si una piedra pudo producir semejante cosa a Salomón, ¡qué no podrá producir a un ser como tú, pobre Perdiz! Aleja tu corazón de las joyas comunes. Busca la verdadera y busca siempre al Buen Joyero. 8 El Humay Luego el Humay, el Dador de Sombra, que otorga pompa a los reyes, se puso de pie frente a la asamblea. También ha sido llamado “Humayun”, el afortunado, porque de todas las criaturas es el de mayor ambición. Dijo: “Pájaros de tierra y de mar, no soy un pájaro como cualquiera de vosotros. Me mueve una gran ambición y para satisfacerla me separo de las otras criaturas. He subyugado en mí al animal y he asegurado mi espíritu en su contra. ¿Cómo pueden los hombres darle la espalda a aquel cuya sombra crea reyes? Todos buscan refugio bajo mis alas. ¿Acaso necesito la amistad del Simurg cuando tengo a mi disposición toda la realeza?”. La Abubilla respondió: “¡Oh esclavo del orgullo! Deja de proyectar tu sombra y no te jactes más. En este momento, lejos de conferir poder a los reyes eres como un perro jugando con hueso. Dios no quiera que vuelvas a poner a un rey en el trono. Pero suponiendo que así fuera, esos reyes en su trono enfrentarán mañana la desgracia y se verán privados por siempre de su realeza, mientras que si nunca hubieran visto tu sombra no habrían tenido que rendir cuenta tan amarga al final de sus días”. Mahmud y el Sabio Un hombre piadoso, seguidor del Camino, vio al Sultan Mahmud en un sueño y le preguntó: “Oh auspicioso Rey, ¿cómo son las cosas en el Reino de la Eternidad?”. El Sultán respondió: “Golpea mi cuerpo si deseas, pero deja mi alma en paz. No digas nada, vete, porque aquí no se habla de realeza. Mi poder solo fue vanidad y orgullo, error y presunción. ¿Puede un puñado de tierra pretender soberanía? La soberanía pertenece a Dios, el Amo del Universo. Ahora que conozco mi debilidad y mi impotencia, me averguenzo de mi realeza. Si deseas otorgarme un título, que sea “el acongojado”. Dios es el Rey de la Naturaleza, de modo que no me llames rey a mí. El imperio le pertenece; yo hoy sería feliz siendo un simple derviche en la tierra. Ojala hubiera Dios tenido cientos de pozos en que encerrarme y que no hubiera sido yo gobernante en la tierra. Quisiera haber sido espigador de trigales. Llamame esclavo; Mahmud el esclavo. Bendice a mi hijo Masud y dile: “Si tienes discernimiento advierte al estado de tu padre”. ¡Que se marchiten las plumas y las alas de ese Humay que proyectó su sombra sobre mí!”. 9 El Halcón Presenta su Excusa El siguiente fue el Halcón, con su cabeza erguida y porte de soldado. Dijo: “Yo que gozo en compañía de reyes, no les presto atención a otras criaturas. Cubro mis ojos con un crestón para poder posar mis pies en las manos del rey. Estoy bien educado para el comportamiento amable y práctico abstinencia como cualquier penitente, de modo que cuando soy llevado ante la presencia del rey puedo comportarme de la manera exacta que se espera que lo haga. ¿Porque querría ver al Simurg, ni aun en sueños? ¿Porque me arrojaría, aturdido, en su búsqueda? No me siento llamado a realizar este viaje. Me contento con un bocado de manos del rey; su corte es suficientemente bueno para mí. El que goza de los favores del rey, obtiene lo que desea. Yo, para serle agradable, sólo necesito elevar mi vuelo atravesando los valles sin límites, no tengo otro deseo: que mi vida transcurra así, en pleno gozo, esperando las órdenes del rey o cazando para él”. Respuesta de la Abubilla La Abubilla dijo: “Oh tú que te apegas a la forma exterior de las cosas sin reparar en sus valores esenciales, el Simurg tiene merecida su realeza porque es único en su poder. Ningún rey verdadero impone su voluntad tontamente. Un rey verdadero es piadoso y fiel. Si bien un rey del mundo puede ser justo, también puede pecar de injusticia: cuanto más cercano a él estés, más delicada será tu posición. Las necesidades de un creyente pueden ofender al rey, por lo que la vida está siempre en peligro. Y dado que al rey se lo compara con el fuego, mejor será mantenerse alejado. ¡Cuídate tú que vives cerca de reyes! Escucha: Había una vez un noble rey que tenía un esclavo cuyo cuerpo era como de plata. Lo amaba tanto que no podía apartarse de él ni un instante. Le dio sus ropas más preciadas y lo puso por encima de todo lo demás. Pero el rey se entretenía a veces arrojando flechas; ponía una manzana sobre la cabeza de su favorito y la usaba como blanco. Cuando el rey soltaba la flecha el esclavo se ponía blanco de miedo. Un día, alguien le preguntó al esclavo: ‘¿Por qué tiene tu rostro esa blancura? Tú eres su favorita, ¿por qué entonces esa palidez mortuoria?’. Y contestó: ‘Si el rey, en lugar de la manzana, me tocará con su flecha, diría: “Este esclavo es lo más inútil de mi reino”; pero cuando su flecha da en el blanco todos lo atribuyen a su habilidad. En cuanto a mí, en esta difícil situación, ¡solo me queda esperar que el rey siga dando en el blanco!”. 10 La Garza Apresuradamente se adelantó la Garza e inmediatamente comenzó a hablar de sí: “Mi encantador hogar está cerca del mar entre lagunas, donde nadie puede oír mi canción. Soy tan inofensiva que nadie de mí se queja. Triste y melancólica, me detengo pensativa a la orilla del mar, mi corazón anhelante por el agua, porque si no la hubiera, ¡qué sería de mí! Pero como no soy de los que moran en el mar, muero en la playa con los labios resecos. Si bien las aguas se agitan y las olas rompen a mis pies, no puedo tragar una sola gota; y sin embargo si el océano perdiera aunque fuera un poco de su agua, mi corazón ardería de indignación. Para una criatura como yo, la pasión por el mar es suficiente, no tengo la fuerza necesaria para emprender la búsqueda del Simurg, por eso pido que me excusen. ¿Cómo podría alguien como yo, que sólo anhela una gota de agua, llegar a una unión con el Simurg?”. La Abubilla dijo: “Oh ignorante, ¿no te das cuenta de que el mar está lleno de cocodrilos y otras criaturas peligrosas? Sus aguas son a veces amargas, otras saladas; por momentos es mar calmo y por momentos turbulento, siempre cambiante, nunca estable; a veces fluye, a veces refluye. Muchos de gran valía han sido tragados en su abismo. El buceador en sus profundidades contiene el aliento para no ser arrojado como una paja. El mar es un elemento que carece de nobleza. No confíes en él o acabará devorándote. Está lleno de inquietud a causa de amor por su amigo. A veces alza olas gigantescas, a veces ruge. Si él no puede hallar lo que desea ¡cómo encontrarás en él un lugar de descanso para tu corazón! El océano es sólo un arroyuelo en el camino que conduce al amigo; ¿por qué permanecerías tú aquí contenta en vez de buscar el rostro del Simurg?”. El Sabio y el Océano Un sabio habituado a ponderar sobre el significado de las cosas, se presentó amante el Océano y le preguntó por qué estaba vestido de azul siendo que ese es el color del duelo, y por que hervía siendo que carecía de fuego. A este hombre contemplativo, el Océano respondió: “Me turba estar separado de mi amigo. Como soy inepto no lo merezco, por eso me pongo vestido de azul, como señal del remordimiento que siento. En mi pena la ribera de mis labios se reseca, y por el fuego de mi amor se produce la turbulencia. Si hallara una simple gota de agua celestial de Kausar, me sentiría como frente a la puerta de la vida eterna. Careciendo de esa gota, moriré de deseo, con los miles que perecen en el camino”. 11 El Búho Se adelantó el Búho con aire aturdido y dijo: “Como morada he elegido una casa destartalada y en ruinas. Nací entre las ruinas y entre ellas me deleito, y no necesito beber vino. Conozco cientos de lugares habitados, pero en ellos se encuentra un estado de gran confusión o se hallan en medio del odio y la lucha perpetua. El que desea vivir en paz debe acudir a las ruinas, como hacen los lunáticos. Deambulo taciturno entre las ruinas buscando tesoros ocultos. Por amor a los tesoros vagabundeo entre las ruinas, porque en ellas se los halla. Además, oculto de los demás mi ansiosa búsqueda con la esperanza de encontrar un tesoro que no esté protegido por un talismán; si mis pies tropezaron con uno, el deseo de mi corazón se haría realidad. Estoy convencido de que el amor por Simurg no es una fábula, ya que no es amor que sientan los incautos; pero soy débil, y estoy lejos de tener un amor tan firme porque mi anhelo está dirigido a los tesoros y las ruinas”. La Abubilla le dijo: “¡Oh tú, ebrio de amor por las riquezas, supongamos que encuentras un tesoro! Ah, bien, morirías por él, y la vida se te escurriría de las manos sin haber alcanzado la elevada meta de la cual al menos tienes conocimiento. El amor por el oro es característico de los infieles. El que hace del oro un ídolo es otro Tharé. ¿No te estarás transformando en un Samiri, uno de los israelitas que fabricaron el becerro de oro? ¿No sabes que todo el que se corrompe por el amor al oro, el día de la resurrección, como moneda falsa, verá su rostro cambiando por el de un ratón?”. El Avaro Un avaro escondió un cofre de oro, y al poco tiempo murió. Un año más tarde, su hijo vio al padre en un sueño, con aspecto de ratón, y los ojos llenos de lágrimas. Corría de aquí para allá en el lugar donde había escondido el oro. El hijo le preguntó: “¿Qué haces aquí?”. Y el padre respondió: “Escondí un cofre de oro y vine a ver si alguien lo había descubierto”. “¿Por qué tienes aspecto de ratón?”, preguntó el hijo. Y el padre respondió: “El alma de un hombre que ha dado todo por amor al dinero asume este aspecto. ¡Comprende lo que me ha sucedido, oh hijo mío, saca de esto una enseñanza! ¡Renuncia al amor por el oro”. 12 El Gorrión Luego se acercó el Gorrión, de cuerpo débil y corazón tierno, temblando como una pluma de pies a cabeza. Y dijo: “Me encuentro pasmado y alicaído. No sé cómo existir, soy frágil como un cabello. No hay nadie que me ayude y no tengo ni la fuerza de una hormiga. No tengo plumas ni plumones: nada. ¿Cómo puede un debilucho como yo abrirse camino hasta el Simurg? Un gorrión jamás llegaría. El mundo está lleno de los que buscan esta unión, pero no es conveniente para alguien como yo. No deseo iniciar un viaje tan agotador por algo que no lograré alcanzar. Si emprendiera vuelo hacia la corte del Simurg me consumiría en el camino. De modo que, como no soy apto para esta empresa, me contentaré con buscar aquí a mi José en el pozo. Si lo encuentro y consigo sacarlo de allí, remontaré vuelo con él desde el pez a la Luna”. La Abubilla respondió: “Oh tú, que en tu abatimiento, a veces estás triste y otras alegre. No me engañan tus astutas excusas. Eres un pequeño hipócrita. Tu humildad esconde un centenar de signos de vanidad y orgullo. ¡Ni una palabra más!, sella tus labios y pon los pies en tierra. Si te consumes, te consumirás con los otros. Y no te compares con José!”. Historia de Jacob Cuando José le fue arrebatado a Jacob, su padre, éste perdió la vista a causa de las lágrimas de sangre que inundaban sus ojos. El nombre de su hijo siempre estaba en sus labios. Finalmente el Angel Gabriel se le presentó y le dijo: “Si vuelves a pronunciar el nombre de José, borraré tu nombre de la lista de profetas y mensajeros”. Al recibir este mensaje de Dios el nombre de José desapareció de lengua, pero no dejo de repetirlo en su corazón. Una noche vio a José en un sueño y estuvo a punto de nombrarlo pero recordando la orden de Dios se golpeó el pecho y de su inmaculado corazón escapó un triste suspiro. Entonces se acercó el Angel Gabreil y le dijo: “Dios ha visto que aunque no has pronunciado el nombre de José con tu lengua, tu suspiro ha destruido todo el efecto de tu penitencia”. 13 Los Pájaros Piden Explicaciones Luego los pájaros, uno después del otro, comenzaron a poner tontas excusas. Discúlpame lector si no las expongo todas porque llevaría demasiado tiempo. Pero ¿cómo esperaban estos pájaros prender en sus garras al Simurg? Así continuó la Abubilla su discurso: “Quien ame al Simurg más que a su propia vida deberá enfrentarse a sí mismo con valor. Si tu molleja no digiere un simple grano, ¿cómo compartirás el banquete del Simurg? Si vacilas ante un trago de vino, ¿cómo podrás beber toda la copa? Si careces de la energía de un átomo, ¿cómo encontrarás el tesoro del sol? Si te ahogas en una gota de agua, ¿cómo llegarás desde las profundidades del mar hasta las alturas celestiales? No se trata de un simple perfume; esta no es empresa para quien no tenga el rostro limpio.” Después de meditar nuevamente, los pájaros volvieron a dirigirse a la Abubilla: “Has asumido la tarea de mostrarnos el camino, tú, el mejor y más poderoso de todos los pájaros. Pero nosotros somos débiles, no tenemos pluma ni plumón: ¿cómo podremos entonces llegar hasta el Sublime Simurg? Si llegáramos sería un milagro. Háblanos de ese maravilloso ser por medio de analogías, de otro modo, ciegos como somos, no entenderemos nada acerca del misterio. Si hubiera alguna relación entre este Ser y nosotros, sería mucho más fácil emprender el camino. Pero, tal como lo vemos, él es comparable a Salomón, y nosotros a las hormigas pordioseras. ¿Cómo puede un insecto desde el fondo de un pozo subir hasta el gran Simurg? ¿Puede un mendigo pretender realeza?”. Respuesta de la Abubilla La Abubilla dijo: “¡Oh pájaros sin aspiraciones! ¿Cómo puede nacer un amor generoso en un corazón carente de sensibilidad? Suplicar de esta manera, que parece satisfacerlos, no dará resultados. Aquel que ama emprende con ojos bien abiertos el camino hacia su meta poniendo en juego su vida. “Cuando el Simurg se manifestó más allá de su vuelo, radiante como el sol, proyectó miles de sombras sobre la tierra. Cuando posó sus ojos sobre esas sombras, aparecieron miles de pájaros. Los diferentes tipos de pájaros que se conocen en el mundo son sólo la sombra del Simurg. Sabed, entonces, oh ignorantes, que cuando comprendáis esto veréis cuál es exactamente vuestra relación con el Simurg. Ponderad sobre este misterio, pero no lo reveléis. El que adquiere este conocimiento se hunde en la inmensidad del Simurg; pero por eso no puede pensar que ya es Dios. “El que llega a esto de lo que hablo no será Dios, pero estará inmerso en Dios. Un hombre así inmerso, ¿se transubstancia? Cuando comprendas de quién eres la sombra serás indiferente a la vida y a la muerte. Si el Simurg no hubiera deseado manifestarse no habría proyectado su sombra; sí hubiera deseado permanecer oculto no habría aparecido su sombra en el mundo. Todo lo que esta sombra produce se torna visible. Si tu espíritu no es apto para ver al Simurg, no será tu corazón un espejo brillante, apto para reflejarlo. Es verdad que no existe ojo capaz de contemplar la maravilla de su belleza, ni capaz de comprender; no se puede medir el sentimiento hacia el Simurg con el sentido de la belleza de este mundo. Pero en su gracia infinita nos ha dado un espejo que lo puede reflejar, y ese espejo es el corazón. Mira dentro de tu corazón y allí verás su imagen.” El Rey Encantador Había una vez un rey de incomparable encanto y belleza. El alba era un rayo proyectado por la luz de su semblante, el Angel Gabriel una emanación de su fragancia, y el reino de la belleza era el Corán de sus secretos. El mundo entero se hacía eco de su fama, y todas las criaturas percibían su amor. Cuando cabalgada por la ciudad cubría su rostro con un velo carmesí, pero los que alcanzaban a ver el velo perdían la cabeza, y los que pronunciaban su nombre, de ahí en más quedaban sin habla. Miles murieron por amor a él; otros, porque lo consideraron mejor que vivir separados de él. Y lo asombroso es que no podían tolerar su presencia durante mucho tiempo ni podían existir sin él. Sin embargo, él se mostraba a aquellos que podían tolerarlo; y los que no, debían contentarse con oír su voz. Por esto, el rey ordenó construir un espejo para que su rostro pudiera verse de manera indirecta. Se instaló el espejo en el palacio y el rey se acercó a mirarse en él, para que todos pudieran ver su reflejo. Es lo mismo contigo. Si aprecias la belleza de tu amigo, es porque tu corazón es el espejo, puedes ver en él al rey en la mansión de su gloria. Toda apariencia no es otra cosa que la misteriosa sombra del Simurg. Si él hubiera revelado su belleza, la habrías reconocido en su sombra. Aunque hubieran existido treinta pájaros, “Simurg”, o cuarenta, sólo habrías visto su sombra. El Simurg no se distingue de su sombra, sostener lo contrario es errar; el uno y la otra existen juntos. Busca la reunión; o mejor, deja la sombra y descubrirás el Secreto. Con suerte verás al Sol en la sombra; pero si te pierdes a ti mismo en la sombra, ¿cómo llegarás a unirte al Simurg? Mahmud y Ayaz Ayaz era víctima de una maldición, por lo que tuvo que abandonar la corte del Sultán Mahmud. Desesperado, cayó en el abatimiento y yacía en la cama llorando. Cuando Mahmud supo esto dijo a uno de sus siervos: “Busca a Ayaz y dile: “Sé que estás triste, y yo me encuentro en el mismo estado. Pero si bien mi cuerpo está lejos de ti, mi espíritu está cercano. Oh tú que me amas, no estoy ausente de ti ni un instante. Un hechizo, en efecto, ha causado daño a un hombre encantador”. Y agregó: “¡Ve de inmediato, como el fuego, como agua torrentosa, como el rayo antes del trueno!”. El siervo voló como el viento y de inmediato encontró a Ayaz. Pero el Sultán ya estaba allí, sentado frente a su esclavo. El siervo, temblando, se dijo: “Que desgracia tener que ser siervo de un rey; sin duda hoy mismo mi sangre será derramada”. Luego dijo al Sultán: “Te aseguro que no me detuve ni un instante, ni sentado ni de pie; ¿cómo es entonces que el rey llegó aquí antes que yo? ¿Me cree el rey? Si de algún modo he sido descuidado reconozco mi falta”. “Tú no eres Mahram”, dijo Mahmud, “¿cómo podrías entonces ser capaz de viajar como yo viajé? Vine por un camino secreto. Cuando pedí noticias de Ayas, mi espíritu ya estaba junto a él”. 14 La Abubilla Habla a los Pájaros acerca del Viaje Propuesto Cuando terminó su discurso, los pájaros habían comenzado a comprender algo de los antiguos misterios y de la relación entre ellos y el Simurg. Pero si bien estaban posesionados por el deseo de hacer el viaje, no se atrevían a emprenderlo porque la duda perturbaba todavía su mente, de modo que dijeron a la Abubilla: “¿Quieres que abandonemos de repente nuestras tranquilas vidas? Nosotros, débiles pájaros que somos, no podemos pretender encontrar el camino a la sublime morada del Simurg”. La Abubilla respondió: “Soy vuestro guía, escuchad. Aquel que ama no repara en su propia vida; para amar verdaderamente, un hombre, sea asceta o libertino, debe olvidarse de sí mismo. Si tus deseos son contrarios a tu espíritu, sacrifícalos, y avanzarás hasta el final del viaje. Si el cuerpo del deseo obstruye el camino, recházalo; fija tus ojos frente a ti y contempla. Una persona ignorante preguntará: ‘¿Qué relación hay entre creencia o escepticismo, y amor?’. Pero yo pregunto: ‘Los que aman, ¿reparan en su vida? El que ama prende fuego a toda esperanza de cosecha, se pone la espada al cuello, perfora su cuerpo. El amor trae dolor y el corazón sangra. El amor ama las empresas difíciles’. “¡Oh escanciador! Llena la copa con la sangre de mi corazón y si no hubiera más, dame los sedimentos. El amor es una pena cruel que todo lo devora. Por momentos desgarra el vuelo del alma, por momentos la vuelve a cubrir. Un átomo de amor es preferible a todo lo que existe entre los horizontes, un átomo de su dolor es mejor que la felicidad de todos los amantes. El amor es la verdadera esencia de los seres; pero no puede haber amor real sin verdadero sufrimiento. El que está firmemente enraizado en el amor renuncia a la fe, la religión y el escepticismo. El amor te abrirá la puerta de la pobreza espiritual y esa pobreza te mostrará el camino al escepticismo. Cuando no quede ni religión ni incredulidad, tu cuerpo y tu alma desaparecerán; entonces será merecedor de los misterios, si finalmente puedes desentrañarlos. Es la única manera. “Avanza entonces, sin temor. Abandona las cosas pueriles y, sobre todo, apela a todo tu valor; porque cientos de vicisitudes inesperadas te sobrevendrán.” Historia del Sheik San’an El Sheik San’an fue un hombre virtuoso de su tiempo, había perfeccionado su ser hasta un grado muy elevado. Durante cincuenta años había permanecido en retiro con cuatrocientos discípulos trabajando día y noche sobre sí mismo. Poseía gran conocimiento y gozaba tanto de revelaciones interiores como exteriores. La mayor parte de su vida la había pasado en peregrinajes a la Meca. Sus plegarias y ayunos habían sido innumerables y no olvidaba ninguna de las prácticas sunnitas. Obraba milagros y su aliento curaba al enfermo y al deprimido. Una noche soñó que iba de la Meca a Grecia y allí adoraba un idolo; y al despertar, sobrecogido por el dolor que este opresivo sueño le produjo, dijo a sus discípulos: “Debo partir inmediatamente hacia Grecia, quizás pueda descubrir el significado de este sueño”. Con sus cuatrocientos discípulos abandonó la Caabá y al tiempo arribó a Grecia. Atravesaron el país de extremo a extremo y un día por casualidad vieron una joven sentada en un balcón. La niña era cristiana y la expresión de su semblante evidenciaba su inclinación a ponderar sobre asuntos divinos. Su belleza era como el esplendor del sol y su dignidad como los signos del zodíaco. Celosa de su radiante belleza, la estrella matutina merodeaba por encima de su casa. Aquel cuyo corazón quedaba enredado en sus cabellos, se ponía el cinto cristiano; aquel cuyo deseo se encendía por el rubí de sus labios, perdía la cabeza. El alba se teñía de oscuridad con el negro de sus cabellos, la tierra de Grecia retrocedia ante la belleza de sus pecas. Sus ojos eran el cebo de los amantes; sus arqueadas cejas encerraban tiernamente un par de lunas. Cuando se iluminaban sus pupilas, cien corazones caían prisioneros. Su rostro centelleaba como una llama ardiente y los rubíes de sus labios podían hacer morir de sed a un mundo entero. Sus lánguidas pestañas eran como cien puñales y su boca era tan pequeña que ni las palabras podían atravesarla. Su cintura, delgada como un cabello, se estrechaba a la altura del zunnar; y el plateado hoyuelo de su mentón era tan vivificante como el discurso de Jesús. Cuando levantó un extremo de su velo el corazón del sheik se encendió; y uno solos de sus cabellos lo sujetó como cientos de zunnars. No podía retirar los ojos de ese rostro y tal fue el amor que lo embargó, que la voluntad se le escapó de las manos. La infidelidad, desde los cabellos de la dama, se diseminó sobre su fe. Y él gritó: “Oh, qué terrible es este amor que siento por ella. ¡Cuando la religión te abandona, para qué sirve el corazón!”. Cuando sus compañeros entendieron lo que sucedía y vieron en qué estado se hallaba, se llevaron las manos a la cabeza. Algunos trataron de hacerlo razonar, pero se negaba a escuchar. Día y noche estaba allí de pie, con los ojos fijos en el balcón y boca abierta. Las estrellas, para brillar como lámparas, aprovechaban la combustión del corazón de este hombre, que estaba en llamas. Su amor creció hasta superarlo. “Oh Señor”, oraba, “en mi vida he ayunado y sufrido, pero nunca he padecido como ahora; esto es un tormento. La noche es tan larga y negra como su cabello. ¿Dónde está la luz del Cielo? ¿Se extinguió con mis suspiros o está escondida por celos? ¿Dónde quedó mi buena fortuna, que no me ayuda a obtener el amor de esta joven? ¿Dónde se halla mi razón, que ya no puedo usar mi conocimiento? ¿Dónde está mi mano para que pueda echar tierra sobre mi cabeza? ¿Dónde están mis piernas para llegar hasta mi amada, y mis ojos para ver su rostro? ¿Dónde está mi amada, que me dé su corazón? ¿Qué es este amor, esta pena, este dolor?”. Los amigos del Sheik volvieron a acercarse. Uno le dijo: “Oh valeroso Sheik, levántate y aléjate de esta tentación. Dominante y realiza y realiza las abluciones encomendadas”. Y él replicó: “¿No sabes que esta noche he hecho cien abluciones con la sangre de mi corazón?”. Otro le dijo: “¿Dónde está tu rosario? ¿Cómo puedes orar sin él?”. Y él respondió: “He desechado mi rosario para poder ponerme como faja el zunnar cristiano”. Otro le dijo: “Oh, hombre santo, has pegado, arrepiéntete sin demora”. Y respondió: “Me arrepiento de haber seguido la ley verdadera, y sólo deseo abandonar ese absurdo”. Otro le dijo: “Abandonar este lugar y vuelve a adorar a Dios”. Y él respondió: “Sí mi ídolo estuviera aquí, ante ella me inclinaría”. Otro exclamó: “¡¿Entonces ni siquiera tratarás de arrepentirte?! ¿Ya no eres un fiel del Islam?”. Y él respondió: “De lo único que me arrepiento es de no haber conocido hasta ahora el amor”. Otro le dijo: “Si sigues este camino te conducirá a los abismos del infierno, pero si te cuidas, podrás evitarlos”. Y él respondió: “Sí existe el infierno es a causa de mis suspiros; podría alimentar con ellos siete infiernos”. Después de pasar toda la noche suplicándole, viendo que sus palabras no producían ningún efecto sobre el Sheik, los amigos se alejaron. Mientras tanto, el Turco de la Mañana, con su sable y escudo dorados, cortó la cabeza a la Negra Noche, y el mundo de ilusiones se bañó con los rayos del sol. El Sheik, juguete de su amor, durante un mes vagó con los perros y sentado en la calle esperaba ver el rostro amado. El polvo del camino era su cama y su almohada el peldaño de la puerta de la joven. La hermosa cristiana, al ver ese desesperado amor, se cubrió con su velo y se acercó a decirle: “Oh Sheik, ¿cómo tú, un asceta, te embriagas con el vino del politeísmo y te sientas en la acera cristiana en tal estado? Si me adoras de este modo te volverás loco”. El Sheik replicó: “Tú me has robado el corazón. Devuélvemelo o acepta mi amor. Si lo deseas, abandonaré mi vida por ti, pero tú puedes restituirme la vida con un toque de tus labios. Por ti mi corazón está en llamas. He derramado lágrimas en torrentes y mis ojos han perdido la visión. Donde estaba mi corazón sólo queda sangre. Si pudiera unirme a ti, la vida me sería restituida. Tú eres el sol, yo la sombra. Soy un hombre perdido, pero si te inclinas hacia mí, tomaría bajo mis alas las siete cúpulas del mundo. ¡No me abandones, te lo imploro!”. “¡Oh viejo baboso!”, le dijo, “¿No te avergüenzas de usar alcanfor en tu mortaja? Deberías enrojecer al sugerir intimidad conmigo, ¡con ese aliento helado! Envuélvete ya en el sudario en vez de perder tu tiempo conmigo. ¡No puedes inspirar amor. Vete!”. El Sheik replicó: “Digas lo que digas yo te amaré. Qué importancia tiene ser joven o viejo, el amor afecta todos los corazones”. Ella le dijo: “Bien, ya que no es fácil rechazarte, escúchame. Deberás lavarte las manos del Islam; porque el amor que no se identifica con su amado no es más que color y perfume”. Y él dijo: “Haré todo lo que pidas. Emprenderé todo lo que me ordenes. Tú, la de cuerpo como plata, soy tu esclavo. Pon en mi cuello un rizo de tus cabellos para recordarme esta esclavitud”. “Ya que eres un hombre de acción”, dijo la joven cristiana, “debes hacer cuatro cosas: prosternarte ante los ídolos, quemar el Corán, beber vino, y cerrar los ojos a tu religión”. Y él contestó: “Beberé vino en honor a tu belleza pero no puedo hacer las otras tres cosas”. “Muy bien”, dijo ella, “ven a beber conmigo, y pronto aceptarás las otras condiciones”. Luego lo condujo a un templo de magos donde había una reunión muy extraña: estaban reunidos para un banquete y la anfitriona se distinguía por su belleza. Su amada le alcanzó una copa de vino y él la tomó embelesado por los sonrientes rubíes de sus labios, se encendió fuego en su corazón y un torrente de sangre asomó a sus ojos. Intentó recordar los libros sagrados que había leído y escrito sobre la religión, y el Corán, que tan bien conocía; pero cuando el vino llegó a su estómago olvidó todo; su conocimiento espiritual se desvaneció. Perdió su voluntad y el corazón se le escapó de las manos. Intentó posar su mano sobre el cuello de su amada, y ella dijo: “Tú amor es pura pretensión. No conoces los verdaderos misterios del amor. Si tu amor fuera firme encontrarías el acceso a mis rizados cabellos. Piérdete en la infidelidad a través de mis enredados bucles; atrévete en el laberinto de mis rizos y llegarás a mi cuello. Pero si rehúsas seguir mi camino, levántate y vete; y llévate el bastón y manto de faquir”. Entonces, el Sheik se desconcertó por completo, y se entregó sin más a su destino. El vino que había bebido hizo que su mente funcionara con la inquietud de una brújula. El vino era añejo y su amor joven. Su estado no podía ser otro que el de un borracho enamorado. “Oh esplendor de la Luna”, dijo, “pídeme lo que desees. No era idólatra antes de perder el juicio, pero ahora que estoy ebrio quemaré el Corán ante el ídolo”. La bella joven dijo: “Así habla mi hombre. Ahora eres digno de mí. ¡Bien! Antes estabas crudo para el amor, ahora la experiencia te ha cocido”. Al darse cuenta los presentes de que por fin el Sheik había abrazado la fe cristiana, lo condujeron, todavía en estado de ebriedad, a la iglesia y le indicaron que se ciñera el zunnar. Así lo hizo, y arrojando al fuego su antiguo hábito derviche, olvidó la Fe y se entregó a las prácticas de la religión cristiana. Le dijo a la joven: “Oh dama encantadora, nadie hizo nunca tanto por una mujer como yo he hecho. He adorado tus ídolos, he bebido vino, y he renunciado a la Fe verdadera. Todo lo he hecho por amor a ti, para poder poseerte”. Y ella respondió: “Viejo baboso, esclavo del amor, ¿cómo puede una mujer como yo unirse a un faquir? Me son necesarios el oro y la plata, y como tú no los tienes, retírate de mi vista”. El Sheik dijo: “Oh adorada mujer, tu cuerpo es un ciprés y tus pechos son como plata. Si me rechazas me conducirás a la desesperación. La idea de poseerte me ha arrojado a este tormento. Por esta situación mis amigos se transformaron en mis enemigos. Así eres tú y así son ellos, ¿qué puedo hacer? Oh mi amada, prefiero el infierno contigo que el paraíso sin ti”. Finalmente la joven cedió, y cuando él fue su hombre, también ella comenzó a sentir la llama del amor. Pero, poniéndolo a prueba una vez más, le dijo: “¡Oh, hombre imperfecto, por dote quiero que durante un año te hagas cargo de mis cerdos, luego pasaremos el resto de nuestras vidas en alegría o tristeza!”. Sin protestar, este Sheik de la Caabá, este santo, se transformó en cuidador de cerdos. En la naturaleza de cada uno podemos encontrar un centenar de cerdos. ¡Oh tú, perfecta nulidad, que sólo piensas en la peligrosa situación de Sheik! Cada uno de nosotros está en peligro: el riesgo comienza desde el mismo momento en que iniciamos el camino del autoconocimiento. Si no conoces tus propios cerdos, no conoces el Camino. Pero si emprendes la búsqueda, encontrarás un millar de cerdos un millar de ídolos-. Desembarázate de los cerdos, quema tus ídolos en el terreno del amor; o de lo contrario, vive como el Sheik, en la deshonra del amor. Entonces, cuando corrió la noticia de que el Sheik se había transformado al cristianismo, sus compañeros sintieron gran dolor y todos menos uno se apartaron. El que quedó le dijo: “Háblanos de este secreto para que podamos convertirnos al cristianismo contigo. No queremos que seas el único apóstata, de modo que ceñiremos también el zunnar cristiano. Si no estás de acuerdo, regresaremos a la Caabá y haremos penitencia para no ver lo que estamos viendo”. El sheik le respondió: “Mi alma está llena de pena. Ve donde te lleven tus deseos. En cuanto a mí, la iglesia es mi lugar, y la joven cristiana mi destino. ¿Sabes por qué tú eres ibre? Porque no te encuentras en mi situación. Si compartieras mi situación me sentiría acompañado en este amor desgraciado. Regresa pues a la Caabá, querido amigo, porque no hay quien pueda compartir mi estado actual. Si te preguntan por mí, diles: “Sus ojos están llenos de sangre, su boca llena de veneno; está atrapado en las fauces del dragón de la violencia. Ningún infiel consentiría en hacer lo que este orgulloso musulmán ha hecho por efecto del destino. Una joven cristiana, con el lazo corredizo de sus cabellos, lo atrapó por el cuello”. Si me critican, diles que son muchos los que quedan en el camino de esta senda sin principio ni fin, pero algunos, por azar, se salvarán del peligro y la caída”. Y luego, dio la espalda a su amigo y regresó con los cerdos. Los otros compañeros, que habían estado observando desde cierta distancia, lloraron con amargura. Finalmente, regresaron a la Caabá, y aturdidos y avergonzados intentaban ocultarse. En la Caabá había un amigo del sheik, un discípulo fiel que no había podido acompañarlo en el viaje a Grecia; era un hombre de clara visión, un hombre del Camino. Nadie conocía mejor que él al sheik. Cuando este hombre pidió noticias de su amigo, los discípulos le relataron todo lo que había sucedido y preguntaron si la rama dañina que había perforado el pecho de sheik había actuado como obra del destino. Le dijeron que una joven infiel lo había enlazado con uno solo de sus cabellos y lo mantenía apartado de los caminos del islam. “Se entretiene jugueteando con sus bucles y rizos, y ha quemado su kirka. Ha olvidado su religión y ahora ciñe el zunnar y cuida una manada de cerdos. Pero aunque ha puesto en juego hasta su alma, creemos que todavía hay esperanzas.” Al oír esto el discípulo se puso pálido y comenzó a lamentarse amargamente. Luego dijo: “Compañeros de desgracia, en religión no hay diferencias entre hombre y mujer. Cuando un amigo necesita ayuda a veces sucede que una sola persona en un millar puede ser de utilidad”. Luego les reprocho haber abandonado al sheik, y dijo que deberían hacerse convertido en el cristianismo para ayudarlo. Y agregó: “Un amigo es amigo hasta el final. En la desgracia se descubre en quién se puede confiar; porque en las buenas siempre se cuenta con miles de amigos. Viendo que el sheik cayó en las fauces del cocodrilo, se alejaron para cuidar su reputación”. “Nos ofrecimos a permanecer con él”, dijeron, “y accedimos a transformarnos en idólatras. Pero él es un hombre sabio y en él confiamos; cuando nos dijo que nos dijera que nos marcháramos, regresamos aquí”. Y el discípulo fiel dijo: “Si realmente desean actuar deben golpear a las puertas de Dios; así, a través de la oración, serán admitidos en su presencia. Deberían haber rogado a Dios por su amigo. cada uno recitando una plegaria diferente; y Dios, viendo esto, hubiera traído al sheik de regreso. ¿Por qué no golpearon a la puerta de Dios?”. Al escuchar estas palabras se avergonzaron y no osaban levantar la cabeza. Pero él les dijo: “No es momento para lamentarse. Acudamos ya mismo a la corte de Dios. ¡Arrojémonos en el polvo del camino, visitamos la túnica del suplicante para que podamos recuperar a nuestro guía!”. De inmediato los discípulos emprendieron viaje hacia Grecia y allí permanecieron junto a su sheik. Oraron durante 40 días y cuarenta noches. Durante 40 noches y 40 días no durmieron ni comieron; no probaron pan ni agua. Finalmente, el poder de la plegaria de estos hombres sinceros se hizo sentir en el Cielo. Ángeles y arcángeles y todos los Santos que visten de verde en las alturas y en los valles, se cubrían con vestidos de luto. La flecha de la oración había dado en el blanco. Al llegar la mañana, un céfiro cargado de almizcle sopló suavemente sobre el fiel discípulo que oraba en su celda, y el mundo se develó a su espíritu. Vio al Profeta Mahoma que se aproximaba, radiante como el sol de la mañana, dos bucles de su cabello cayendo sobre su pecho; la sombra de Dios era el sol de su semblante, el deseo de cientos de mundos estaba aferrado a cada uno de sus cabellos. Su sonrisa encantadora atrajo hacia él a todos los hombres. El discípulo se levantó y dijo: “¡Oh mensajero de Dios, guía de todas las criaturas, ayudame! Nuestro sheik se extravió. ¡Muestrale el camino, te lo imploro en el nombre del Santísimo!”. Mahoma respondió: “Oh tú que posees la mirada interior, tus deseos más puros serán satisfechos debido a tus esfuerzos. Durante un tiempo ha habido un obstáculo entre el sheik y Dios; pero yo he derramado el rocío de la súplica y lo he esparcido sobre el polvo de su existencia. Él se ha arrepentido y su pecado se ha limpiado. Los errores de cientos de mundos pueden desvanecerse como vapor en un instante de arrepentimiento. Cuando el océano de la bondad se mueve, sus olas lavan los pecados de hombres y mujeres”. El discípulo exhalo un suspiro que movió los cielos. Corrió a llevar a sus compañeros las buenas noticias, y luego, llorando de alegría se acercó apresuradamente hasta donde el sheik estaba cuidando los cerdos. Pero el sheik estaba como en llamas, como un iluminado. Se había arrancado el cinturón cristiano, había arrojado la faja, había retirado de su cabeza el bonete de ebriedad y había renunciado al cristianismo. Se vio tal como era y derramando lágrimas de remordimiento elevó sus manos al cielo; todo lo que había abandonado -el Corán, los misterios y profecías- regresaba a él, y quedó liberado de la miseria y la locura. Le dijeron: “Ahora es momento de gratitud. El Profeta ha intercedido por ti. Gracias a Dios te sacó del océano de la separación y puso tus pies en la ruta del Sol”. Entonces el sheik volvió a vestir su kirka y a realizar sus abluciones y partió hacia el Hejaz. Mientras tanto, la joven cristiana tuvo un sueño en el que el sol descendía y se derramaba sobre ella, y escuchó estas palabras: “Sigue a tu sheik, abraza su fe, conviértete en su sombra. Tú que estás manchada, purificate hasta el grado de su pureza. Lo arrastraste por tu camino, sigue el suyo ahora”. Al despertar, su espíritu estaba iluminado y sólo deseaba iniciar el camino. Su mano tomó su corazón, y el corazón se le cayó de la mano. Pero cuando se percató de que estaba sola y que no conocía el camino, su alegría se tornó en llanto y corrió a echar polvo sobre su cabeza. Luego emprendió la búsqueda del sheik y sus discípulos hasta que abatida y turbada, cubierta de sudor, se arrojó a la tierra y gritó: “¡Quiera Dios el Creador perdonarme! Soy una mujer asqueada de la vida. No me rechaces, porque yo te golpeé a causa de mi ignorancia; todos mis errores fueron por ignorancia. Perdona el daño que he hecho. Adopto la Fe verdadera”. Una voz interior alertó al sheik acerca de esto. Se detuvo y dijo: “Esa joven ya no es una infiel. La luz ha llegado hasta ella y la ha guiado hasta nuestro Camino. Regresemos. Ahora puede estar íntimamente ligado al ídolo sin pecado”. Pero sus compañeros le dijeron: “¡Cuál es el sentido de tu arrepentimiento! ¿Quieres regresar a tu amada?”. Pero él les habló de la voz interior que había oído y les recordó que había renunciado a su comportamiento anterior, por lo que regresaron hasta donde yacía la joven. Su rostro estaba pálido, sus pies desnudos, su vestido desgarrado. Cuando el sheik se inclinó hacia ella, la joven se desmayó. Al recobrar el sentido derramó lágrimas como gotas de rocío, y dijo: “Me consumo de vergüenza a causa de ti. Levanta el velo del secreto e instrúyeme en el Islam para cuando pueda transitar el Camino”. Cuando este bello ídolo finalmente formó parte de los fieles, los compañeros derramaron lágrimas de alegría. Pero el corazón de la joven se impacientaba por ser liberado de la pena. “Oh sheik”, dijo, “ya no me quedan fuerzas. Quiero abandonar este mundo sucio y ensordecedor. Adiós, sheik San´an. Confieso mis pecados. Perdóname y déjame ir”. De este modo, esa luna de belleza que sólo había vivido media vida, se le escapó de la mano. El sol se escondió tras las nubes mientras su dulce alma se separaba de su cuerpo. Ella, una gota en el océano de la ilusión, había regresado al océano verdadero. A todos nos llega el momento de irnos como el viento; ella se fue y nosotros también nos iremos. Estas cosas suceden a menudo en los caminos del amor. Hay desesperación y piedad, ilusión y seguridad. Si bien el cuerpo del deseo no comprende estos secretos, la adversidad no puede evitar la dicha. Se debe escuchar con el oído de la mente y con el del corazón, no con el del cuerpo. La lucha del espíritu con el cuerpo de deseos no tiene fin. ¡Laméntate! Porque hay motivo para ello. - Capítulo 4: Excusas de los Pájaros 15 Debate de los pájaros acerca del Viaje Hacia el Simurg Después de que los pájaros reflexionaron sobre la historia del Sheik San’an, decidieron apartarse de la vida que hasta entonces habían llevado. La idea del Simurg los sacaba de su acostumbrada indiferencia; sus corazones estaban llenos de amor por él, y comenzaron a considerar emprender el viaje. Dijeron: “Ante todo debemos contar con un guía que ate y desate los nudos. Necesitamos un líder que nos indique que hacer, que nos proteja de las profundidades de este mar. Le obedeceremos de corazón y haremos lo que ordene, sea agradable o desagradable, para que nuestra bola de polo caiga en el mazo del Cáucaso. Entonces, el átomo se unirá al sol majestuoso y la sombra del Simurg se proyectará sobre nosotros. Echemos a suerte la elección del líder. Aquel sobre el que la suerte recaiga, será nuestro guía y será grande entre nosotros”. Se produjo entonces una gran conmoción, todos hablaban al mismo tiempo, pero cuando finalmente todo estuvo listo, los gorjeos y parloteos se calmaron y sobrevino un gran silencio. La elección se realizó con la debida ceremonia, y finalmente la suerte cayó sobre la Abubilla. Todos al unísono estuvieron de acuerdo en obedecerla aún a riesgo de sus propias vidas; se entregarían en cuerpo y alma. La Abubilla se adelantó y pusieron en su cabeza una corona. En el momento de la partida, era tan grande la cantidad de pájaros reunidos, que ocultaban desde el pez hasta la Luna; pero cuando atisbaron la entrada al primer valle, llenos de temor, emprendieron vuelo hacia las nubes. Luego, con un gran revoloteo de alas y plumas, trataron de darse coraje mutuamente y resurgió el deseo de renunciar a todo. Pero la empresa que tenían por delante era dura y el camino largo. En la ruta que se extendía ante ellos reinaba un absoluto silencio y uno de los pájaros se atrevió a preguntarle a la Abubilla porque estaba tan desierta. “Por el temor reverente que el Rey, a cuya morada conduce, inspira”, contestó. Anécdota de Bayazid Bistami Una noche el Sheik Bayazid salió de su ciudad y vio que en las llanuras reinaba un profundo silencio. La Luna iluminaba el mundo haciendo que la noche fuera tan luminosa como el día. Las estrellas se reunían por simpatía, y cada constelación tenía una función especial. El Sheik camino y a su alrededor no había un alma: todo estaba en quietud. Su corazón estaba agitado y dijo: “Señor, me conmueve una tristeza desgarradora. ¿Por qué una corte tan sublime carece de fervientes adoradores?”. “No te sorprendas”, contestó una voz interior, “el Rey no admite en su corte a cualquiera. Su dignidad no le permite recibir vagos. Cuando ese magnífico santuario difunde su resplandor, desdeña al que duerme y al que carece de atención. Tú eres uno entre los miles que suplican ser admitidos y debes esperar pacientemente”. 16 Los Pájaros Inician el Camino Los pájaros fueron presa del miedo y la aprensión al enfrentarse al camino que no tiene fin, ese donde el fuerte viento del desapego de las cosas terrenas parte en dos la bóveda celeste. En su ansiedad, se amontonaban alrededor de la Abubilla y le pedían consejos diciendo: “No sabemos cómo presentarnos ante el Rey con la debida reverencia. Pero tú has estado en presencia del Rey Salomon, y conoces las reglas de etiqueta. Además ya has transitado este camino e incluso has volado alrededor de toda la tierra. Tú eres nuestro Imán, para unir y separar. Te pedimos que subas al minabar y nos instruyas. Háblanos del camino y de la corte del Rey, y del ceremonial de ese lugar, porque no queremos comportarnos torpemente. Además, hay en nuestra mente todo tipo de dudas y para este viaje es necesario que nos liberemos de toda inquietud. Tenemos muchas preguntas y deseamos que tranquilices nuestros temores, para que podamos ver con claridad en el camino”. La Abubilla se colocó la corona en su cabeza, se sentó en su trono y se dispuso a hablarles. Una vez que todos formaron fila frente a ella, el Ruiseñor y la Tórtola subieron también y entonaron una melodía tan dulce que todos los oyentes se sintieron elevados. Luego, uno tras otro, ciertos pájaros se acercaron a ella para hablarle de sus dificultades y presentar sus excusas. 17 Discurso del Primer Pájaro El primer pájaro dijo a la Abubilla: “Oh tú, que has sido designada nuestro guía, dinos qué te distingue de nosotros. En realidad nos parecemos, tú a nosotros, nosotros a ti, ¿En qué reside entonces la diferencia? ¿Qué pecados, del cuerpo o del alma, hemos cometido para permanecer ignorantes mientras tú posees comprensión?”. La Abubilla respondió: “Sabe, oh pájaro, que cierta vez por azar, Salomon posó en mí su mirada; mi dicha no fue el resultado del oro y la plata si no de este afortunado encuentro. ¿Cómo podría alguien obtener esa ventaja solo por obediencia? Iblis también obedece. Sin embargo, si alguien aconsejara rechazar la obediencia, caerá sobre él por siempre una maldición. Practica la obediencia y recibirás la mirada del verdadero Salomón”. Mahumud y el Pescador Cierta vez el sultán Mahmud se separó de su ejército y se alejó galopando como el viento. Vio a un niño pequeño sentado a la orilla de un río en el que había arrojado su red. El sultán se le acercó y al notar que estaba deprimido y desanimado le preguntó: “¿Por qué estás tan triste, querido niño? Nunca vi a nadie tan abatido”. “Oh príncipe ilustre”, respondió el pequeño, “somos siete hermanos que no tenemos padre y mi madre es muy pobre. Cada día vengo al río con la esperanza de regresar con un pescado para la cena. Solo cuando tengo éxito en la pesca podemos cenar”. “¿Me dejas intentarlo?”, preguntó el sultán. El niño asintió y el sultán arrojó la red; a causa de su buena fortuna, recogió cien peces de una sola vez. Viendo esto, el niño se dijo: “Mi fortuna es asombrosa. Qué suerte grandiosa tengo de que todos estos peces cayeron en mi red”. Pero el sultán le dijo: “No te engañes, hijo. La causa de tu buena suerte soy yo. El sultán pescó estos peces para ti”. Diciendo esto, montó en su caballo. El niño lo invitó a llevarse su parte, pero el sultán se negó diciendo que aceptaría la pesca del día siguiente. “Mañana, tú pescarás para mi”, dijo, y luego regresó a su palacio. Al día siguiente envió a buscar al niño. Cuando lo trajeron lo hizo sentar en el trono junto a él. “Señor”, dijo uno de sus ministros, “¡este niño es un mendigo!”. “No importa”, respondió el sultán, “ahora es mi compañero. Hemos formado una sociedad y no puedo separarlo de mí”. De modo que el sultán lo trató como a un igual. Finalmente, alguien preguntó al niño: “¿Qué sucedió para que tú recibieras tales honores?”. Y el niño respondió: “La tristeza se alejó y llegó la alegría cuando conocí a un monarca afortunado”. Mahmud y el Leñador En otra ocasión el sultán Mahmud cabalgaba en soledad y vio a un leñador montado en un burro cargado de zarzas. En ese preciso momento el burro tropezó y el viejo leñador cayó al suelo con todas las zarzas cuyas espinas le lastimaron la cabeza. El sultán, viendo las zarzas en el suelo, el burro boca arriba y el hombre frotándose la cabeza, preguntó: “Oh, hombre de poca fortuna, ¿necesitas un amigo?”. “Es Justo lo que necesito”, respondió el leñador. “Buen caballero, si me ayudas me beneficiarias sin recibir ningún daño. Tu apariencia es para mi un buen presagio; es de esperar recibir ayuda de los que cuenten con un semblante agradable.” Y así este sultán de buen corazón se bajó del caballo y luego de poner el burro sobre sus patas, levantó el hato de zarzas y lo aseguró sobre el lomo del asno. Luego se alejó yendo al encuentro de su ejército. Le dijo a sus soldados: “Un viejo leñador montado en su burro cargado zarzas viene hacia aquí. Bloquead el camino para que tenga que pasar frente a mi”. Al llegar, viendo a los soldados, el leñador se dijo: “¿Cómo haré para pasar esta valla con mi débil animal?”. De modo que cambio de ruta, pero al ver a la distancia el parasol real y darse cuenta de que el camino que se había visto obligado a elegir lo llevaba cara a cara con el sultán, comenzó a temblar. Al acercarse, la confusión lo sobrecogió porque bajo el parasol vio un rostro que le era familiar. “Oh Dios”, dijo, “¡en qué estado me encuentro! ¡Era Mahmud el que hoy me sirvió de maletero!”. Al llegar, Mahmud le dijo: “Mi pobre amigo, ¿qué haces para ganarte la vida?”. El leñador respondió: “Tú lo sabes, sé honesto. ¿Acaso no me reconoces? Soy un pobre viejo, comercio con leña; día y noche recojo zarzas en el desierto y luego las vendo, y a pesar de esto mi burro padece hambre. Si me deseas el bien, dame un poco de pan”. “Pobre viejo”, dijo el sultán, “¿Cuánto pides por tu paquete?”. El leñador replicó: “Tú no querrás tomarlo por nada y yo no deseo venderlo, por lo tanto, dame una bolsa de oro”. Al escuchar esto, los soldados gritaron: “¡Contén tus palabras, tonto! Tu leña no vale más que un puñado de cebada. Deberías darla por nada”. El viejo dijo: “Eso está muy bien, pero su valor ha cambiado. Cuando un hombre de buena fortuna como el sultán posa sus manos sobre un manojo de espinas, estas se transforman en un ramo de rosas. Si quiere comprarlas debe pagar por ellas al menos un dinar porque el valor de estas espinas se multiplicó mil veces cuando él las tocó”. 15 Discurso del Segundo Pájaro Otro pájaro se acercó a la Abubilla y dijo: “¡Oh protectora del ejército de Salomón! No tengo la fuerza necesaria para emprender este viaje. Soy demasiado débil para cruzar los valles. La ruta es tan difícil que me agotaría y moriría en la primera etapa. Hay volcanes en el camino. Además, no es para todos emprender semejante aventura. Miles de cabezas rodaron como bolas de polo: muchos de los que partieron en busca del Simurg han perecido. En un camino como éste, en el que muchas criaturas sinceras han ocultado sus rostros por temor, ¿qué sería de mí, que sólo soy un puñado de polvo?”. La Abubilla respondió: “¡Oh tú de semblante lastimero! ¿Por qué está tan oprimido tu corazón? Si tienes tan poco valor en este mundo, da lo mismo que seas joven y valiente o viejo y débil. El mundo es verdaderamente una cochinada; en cada puerta mueren cantidades de criaturas. Miles se ponen pálidas como la seda, y perecen en medio de lágrimas y aflicción. Es mejor perder la vida en la búsqueda que languidecer miserablemente. Si no tenemos éxito, y morimos de pena, tanto peor, pero en este mundo los errores ya son numerosos; al menos ¡no adquiramos nuevos! Miles de criaturas se ocupan hábilmente de los cuestiones del cadáver del mundo; si te entregas con astucia a este comercio ¿serás acaso capaz de hacer de tu corazón un océano de amor? Hay quienes dicen que el deseo de cosas espirituales es presunción, y que los advenedizos no lo colman. Pero, ¿no es mejor sacrificar la propia vida en pos de este deseo que estar identificado con un negocio? Yo lo he visto todo y hecho de todo; nada hace tambalear mi resolución. Por mucho tiempo he tenido relación con hombres y he visto que pocos son los verdaderamente desapegados de las riquezas. Mientras nos identifiquemos con alguien o algo, no seremos libres. Hay que morir en sí mismo para experimentar libertad. El camino espiritual no es para aquellos que están entregados a la vida exterior. Pon tus pies en la Ruta si eres hombre de acción sin pedir clemencia con excusas femeninas. Sabe con seguridad que aún cuando la búsqueda fuera impía sería necesario emprenderla. Verdaderamente no es fácil, el reto del árbol del amor no tiene hojas. Dile al que tiene hojas que renuncie a ellas. “Cuando el amor toma posesión de un hombre, eleva su corazón, lo sumerge en sangre, lo obliga a postrarse fuera del telón, no le da descanso por un instante siquiera; lo mata y todavía le reclama su precio en sangre. Él bebe agua de lágrimas y come pan levado con aflicción; pero aunque sea más débil que una hormiga, el amor le da fortaleza”. Anécdota de un Contemplativo Un loco de amor por Dios iba desnudo mientras otro iba vestido. Dijo: “Oh Dios, dame vestidos bellos, y de este modo seré feliz como este otro”. Una voz del mundo invisible le contestó: “Te he dado un sol cálido, siéntate y deléitate con él”. El loco dijo: “¿Por qué me castigas? ¿No puedes darme un vestido mejor que el sol?”. La voz dijo: “Espera con paciencia durante diez días, y sin más te daré otro vestido”. El sol lo escaldó durante ocho días; entonces pasó a su lado un hombre pobre y le dio un vestido que tenía miles de parches. El loco dijo a Dios: “Oh tú que tienes conocimiento de las cosas ocultas, ¿por qué me has dado este vestido andrajoso? ¿Has repartido todos los vestidos y sólo te quedó este viejo y emparchado para mí? Has unido en ésta miles de prendas, ¿de quién has aprendido este arte?”. No es fácil tener tratos en la corte de Dios. Un hombre debe tornarse como polvo del camino que lo conduce a Él. Después de una larga lucha pensará que ha alcanzado su meta sólo por descubrir que no ha llegado todavía. Historia de Rabiáh Rabiáh era una mujer, y a pesar de eso era la cúspide de los hombres. Una vez tardó ocho años en un peregrinaje a la Caabá., midiendo la distancia con toda la extensión de su cuerpo. Cuando finalmente llegó a las puertas del templo sagrado, pensó: “Por fin, he concluido mi tarea”. En el día de la consagración, cuando estaba por entrar a la Caabá, sus mujeres la abandonaron, de modo que retrocedió sobre sus pasos y dijo. “¡Oh Dios, poseedor de la gloria, durante ocho años he medido el camino con extensión de mi cuerpo, y ahora, cuando en respuesta a mis plegarias, el día anhelado llega, pones espinas en mi camino!”. Para comprender la importancia de un incidente como éste es necesario conocer la calidad de amor a Dios de Rabiáh. Mientras flotes en las profundidades del océano del mundo, sus olas alternativamente te recibirán y te rechazarán. Por momentos serás admitido en la Caabá, otras veces suspiraras en una pagoda. Si logras separarte de las ataduras del mundo gozarás de felicidad; pero si permaneces apegado, tu cabeza girará como la piedra de un molino. Ni un instante gozarás de tranquilidad; hasta una simple mosca te alterará. El Loco de Amor por Dios Un pobre hombre, loco de amor por Dios, tenía la costumbre de estar durante horas de pie en cierto lugar del camino. Un día el rey de Egipto, que varias veces lo había visto pasar por allí, se detuvo y dijo: “Veo en ti cierta calidad de relajación y tranquilidad”. El loco respondió: “¿Cómo podría estar tranquilo si soy pasto de moscas y pulgas? Durante el día las moscas me atormentan y por las noches las pulgas no me dejan dormir. Una pequeña mosca al entrar en el oído del Nimrod le perturbó el cerebro durante siglos. Quizás sea el Nimrod de esta época porque recibo mi parte de esas amigas, las moscas y las pulgas”. 19 Discurso del Tercer Pájaro El tercer pájaro dijo a la Abubilla: “Estoy lleno de faltas, ¿cómo podría iniciar el camino? ¿Puede una sucia mosca merecer el Simurg del Cáucaso? ¿Cómo es posible que un pecador, desviado del verdadero camino, se acerque al Rey?”. La Abubilla dijo: “Oh, pájaro deprimido, no desesperes, pide la gracia y el favor de Dios. Si tan rápidamente arrojas el escudo, tu tarea será verdaderamente difícil”. Anécdota de un Criminal Un hombre había cometido diversos pecados, se arrepintió amargamente y retomó el justo sendero. Pero después de un tiempo, los deseos de cosas mundanas se le volvieron a presentar con más fuerza que antes y nuevamente se entregó a malos actos y pensamientos. Luego, la pena estrujó su corazón y lo redujo a un estado miserable. Nuevamente deseó cambiar la actitud pero no tenía la fuerza necesaria para hacerlo. Día y noche, como un grano de trigo en la sarten, su corazón no encontraba sosiego; sus lágrimas mojaban el polvo del camino. Una mañana, una voz misteriosa le dijo: “Escucha al Señor del Mundo. Cuando te arrepentiste por primera vez, acepte tu penitencia. Podría haberte castigado y no lo hice. Cuando caíste en pecado por segunda vez, te tuve paciencia, y a pesar de mi cólera no causé tu muerte. Hoy reconoces tu perfidia y deseas regresar a mí por tercera vez. ¡Hazlo, retoma el Camino, te abriré la puerta y te esperaré! Cuando tu actitud haya cambiado verdaderamente tus pecados serán perdonados”. El Angel Gabriel y las Buenas Intenciones Una noche estaba el Angel Gabriel en el Sidráh y oyó la voz de Dios pronunciando palabras de conformidad; se dijo: “Un siervo de Dios invoca en este momento al Eterno. ¿Quién será?, ya que se trata de un hombre de gran mérito cuyo cuerpo del deseo ha muerto y su espíritu vive”. Y de inmediato partió en busca del feliz mortal. Buscó en tierra firme y en todas las islas, en las montañas y valles, pero no pudo hallarlo. Así, regresó a Dios, y nuevamente escuchó una respuesta favorable a una plegaria. Volvió a sobrevolar tierras y mares, sin hallarlo, y preguntó: “Oh Dios, ¿qué camino conduce hacia tu siervo?”. Dios dijo; “Ve al país de Rum, y en cierto monasterio cristiano lo encontrarás”. El Angel Gabriel llegó hasta el monasterio y vio allí al hombre que recibía la gracia celestial reverenciando un idolo. “Oh amo del mundo”, dijo Gabriel, “no comprendo este misterio. ¿Cómo puedes responder a la plegaria del que adora a un ídolo en un monasterio?”. Dios dijo: “Su corazón está oscurecido. No sabe que ha perdido el camino. Porque está extraviado en la ignorancia, mi bondad lo perdona y abro para él el acceso a un estado elevado”. entonces el Altísimo desató la lengua del hombre para que pusiera pronunciar el nombre de Dios. No se debe descuidar ni el más mínimo detalle. El renunciamiento no se compra en el mercado; no se llega a la Corte del Altísimo intentando pagar una suma pequeña. El Sufi Un sufi que se dirigía con premura hacia Bagdad oyó que alguien decía. “Tengo mucha miel y la vendo a un precio razonable a quien quiera comprarla”. El sufi dijo: “¿Querido amigo, no me darías un poco por nada?”. El hombre enojado contestó: “Vete. Eres codicioso y estás loco. ¿No sabes que no obtienes nada si no tienes con qué?”. Entonces el sufi escuchó una voz interior que decía: “Abandona este sitio y te daré aquello que el dinero no puede pagar: la dicha y todo lo que deseas. La misericordia de Dios es un sol cálido que llega hasta el átomo más pequeño. Al mismo Moises reprendió a Dios en favor de un infiel”. Dios Reprende a Moises cierto día dijo Dios a Moises: “Coré te ha llamado setenta veces sollozando y no obtuvo respuesta. Si me hubiera llamado a mí una sola vez de esa manera, yo había rescatado su corazón del pozo del politeísmo y cubierto su pecho con una vestidura de fe. Oh, Moises, lo has hecho perecer en un pozo de agonía, lo has arrojado a la tierra de la desgracia. Si fueras su creador, no habrías sido tan severo con él”. El que es piadoso aun con los que no tienen piedad se ve favorecido por los hombres de compasión. Si cometes las mismas faltas que cometen los pecadores ordinarios te contarás entre los malvados. 20 La Duda del Cuarto Pájaro Otro pájaro preguntó a la Abubilla: “Soy afeminado y solo sé saltar de rama en rama. Por momentos soy juguetón y disoluto, y por momentos abstinente. Algunas veces el deseo me arrastra a la taberna, otras, mi espíritu me inclina a la oración. A veces Satán, a pesar de mí mismo, me lleva por mal camino y, otras tantas, los ángeles me traen de regreso. Entre ambas inclinaciones, me hallo en el pozo de la prisión. ¿qué otra cosa me queda sino lamentarme, como José?”. La Abubilla respondió: “Esto les sucede a todos los hombres, de acuerdo a su naturaleza. Si desde el comienzo hubiésemos estado libres de pecado no habría sido necesario que Dios enviara sus mensajeros y profetas. A través de la obediencia puedes llegar a la felicidad. Oh, tú que te consumes en la indolencia y estás lleno de frívolos deseos, mientras sigas alimentando al perro del deseo tu naturaleza será peor que la de un imponente hermafrodita”. Anécdota de Shabli Shabli desapareció una vez de Bagdad, nadie supo donde estaba. Finalmente fue visto en una casa de eunucos, sentado, con ojos húmedos y labios secos, entre grotescas criaturas. Sus amigos le dijeron: “Este no es un lugar para ti que eres un estudioso de los misterios divinos”. Y respondió: “En el camino de la religión, estas personas no son ni mujeres ni hombres. Yo soy como ellos. Me hundo en la inercia y mi virilidad es mi deshonra. Al usar alabanzas y culpas para hacer distinciones, estamos creando ídolos. ¿Si oculto cien ídolos bajo la kirka, por qué aparecer como sufi ante los hombres?”. La Querella de Dos Sufies Dos hombres vestidos con la kirka de los sufies querellaban frente al tribunal. El juez los detuvo y les dijo: “No es justo que dos sufres se peleen. Os habéis puesto el vestido de la resignación, ¿por qué pelear entonces? Si sois hombres violentos renunciais a esos vestidos. Pero si son merecedores de ellos, reconciliaos. Yo soy juez, no soy hombre del camino espiritual, pero siento vergüenza por la kirka. Sería mejor estar de acuerdo en la diferencia que pelear por ella”. Si deseas seguir el camino del amor arroja al viento tus prejuicios y renuncia a tu atadura de placeres del cuerpo. ¡Mientras tanto, para no ser fuente de maldad, no abrigues resentimiento ni amor propio! El Rey y el Mendigo Hubo una vez en Egipto un hombre pobre que se enamoró de un rey. Al enterarse de esto el rey mandó a buscarlo y dijo: “Dado que estás enamorado de mí debes elegir el exilio o que te corten la cabeza”. El hombre dijo preferir el exilio, y casi fuera de sí se dispuso a partir. Pero el rey ordenó que le cortaran la cabeza. Un cortesano preguntó al rey: “Si es inocente ¿por qué debe morir?”. Y dijo el rey: “Porque no ama de verdad y con todo el corazón. Si realmente me hubiera amado, habría preferido perder la cabeza que apartarse del objeto de su amor; eso si hubiera sido todo o nada. Si hubiera admitido su ejecución yo me habría preparado para transformarme en su derviche. El que ama más su cabeza que el amado, no ama de verdad”. 21 Excusas del Quinto Pájaro Otro pájaro dijo a la Abubilla: “Soy mi propio enemigo; haya en mí un ladrón. Estoy lleno de apetitos carnales; con un perro del deseo que no se someterá, ¿Cómo puedo hacer este viaje? ¿Cómo podría salvar mi alma? Conozco bien al lobo que merodea pero no conozco a este perro, ¡y es tan seductor! No sé donde me encuentro en este cuerpo infiel. ¿Llegaré alguna vez a comprenderlo?”. La Abubilla respondió: “Tú eres un perro extraviado y pisoteado. Esta ‘alma’ tuya es tuerta y estrábica; vil, perezosa e infiel. Si un hombre se ve atraído, es por el brillante oropel de tu ‘alma’. No es bueno mimar y cuidar este perro de los deseos. Cuando niño, el hombre es débil y desatento; cuando joven, batallador incansable; y cuando llega la vejez el deseo se desvanece y el cuerpo es débil. Siendo así la existencia ¿cómo puede este perro adquirir ornamento de calidad espiritual? Desde el principio al fin vivimos sin atención y nada obtenemos. A menudo el hombre llega a su fin vacío, sin nada excepto el deseo de cosas de la vida externa. Miles mueren de dolor pero este perro de deseos no muere nunca. “Escucha la historia de un sepulturero que envejeció en su oficio. Alguien le preguntó: ‘Has pasado tu vida clavando tumbas, ¿has visto alguna maravilla?’ Y dijo: ‘Durante setenta años mi perro de deseos vio enterrar a los muertos pero él no ha muerto ni por un instante, ni un solo momento obedeció las leyes de Dios. ¡Eso es una maravilla!”. Una anécdota de Abbasáh Cierta vez dijo Abbasáh: “Supongamos que todos los infieles que llenan el mundo, incluso los locuaces turcomanos, aceptaran sinceramente la Fe; admitamos esta posibilidad. Pero ciento veinte mil profetas han sido enviados para que el alma infiel acepte la fe musulmana o perezca, y no lo han conseguido. ¿Por qué tanto celo con tan poco resultado?”. Todos estamos bajo el dominio del Nafs de este cuerpo infiel y desobediente, que albergamos. Ayudado como está, de ambos lados, sería sorprendente que este cuerpo pereciera. El Espíritu, como un fiel caballero, lo cabalga, pero siempre siempre lo acompaña el perro; aunque ande al galope, el perro va tras él. El amor que el corazón recibe es tomado por el cuerpo. Sin embargo, el que llegue a ser amo de este perro tendrá en su red al león de los dos mundos. 22 Un Rey Interroga a un Derviche Una vez un rey vio a un hombre que, aunque vestido con harapos, transitaba el camino de la autoperfección. Lo llamó para preguntarle: “¿Quién de los dos está en mejores condiciones, tú o yo?”. El hombre dijo: “Oh ignorante, golpéate el pecho y contén tu lengua. El que se alaba a sí mismo no comprende el significado de las palabras, pero esto debes saber: no hay duda de que un hombre como yo está en una condición mil veces mejor que un hombre como tú. Dado que no tienes ni vestigios del sabor de lo religioso, tu perro de deseos te ha reducido a la situación de un asno. Es tu amo y te conduce con la brida haciéndote girar para aquí o para allá. Haces todo lo que te ordena. Eres una noentidad, no sirves para nada, mientras que yo, yo conozco los secretos del corazón, soy el amo de este perro y lo cabalgo como un asno. Tu perro te gobierna, pero si lo transformas en tu asno serás como yo, cien veces mejor que tus congéneres”. Pregunta del Sexto Pájaro Otro pájaro preguntó a la Abubilla: “Siempre que trato de emprender el Camino, el diablo despierta mi vanidad y me impide buscar un guía. Mi corazón está apenado porque no tengo fuerzas para resistir su tentación. ¿Cómo puedo salvarme de Iblis y ser vivificado por el vino del Espíritu?”. La Abubilla respondió: “Mientras el perro del deseo te gobierne el diablo no te abandonara; usará la seducción del perro para engañarte. Cada uno de tus vanos deseos se convierte en un demonio preparado para engendrar otros cien. Este mundo es una prisión, el reino del demonio; no hagas tratos con él ni con su dueño”. Queja de un Rovicio por las Tentaciones de un Demonio Un joven incauto se acercó a un sheik que ayunaba para quejarse de las cuarenta tentaciones de un demonio. Dijo: “El demonio me mantiene apartado del Camino, ha reducido mi religión a nada”. El sheik dijo: “Querido joven, justo antes de que llegaras hasta mí vi a un demonio merodeando a tu alrededor. Contrariamente a lo que tú dices, estaba enfadado y echaba tierra sobre su cabeza porque tú lo habías maltratado, y me dijo: “El mundo entero me pertenece pero no tengo poder sobre el que es enemigo del mundo”. Dile al demonio que siga su camino y te dejará en paz”. El Khoja y el Sufi Un sufi al oir a un khoja pronunciar lo siguiente: “Oh Dios ten piedad de mí y ayúdame en mis empresas”, le dijo: “No esperes misericordia si no adoptas la kirka del sufi. Has levantado tu rostro hacia el cielo y hacia las cuatro paredes doradas. Tienes diez siervos varones y diez esclavas. ¿Cómo podría la gracia divina llegar a ti en secreto? Obsérvate a ti mismo y ve si mereces favores. Dado que pides posesiones y honores, la misericordia ocultara su rostro. Alejate de todo esto y libérate, como lo hacen los hombres perfectos”. 23 Excusas del Séptimo Pájaro Otro pájaro dijo a la Abubilla: “Amo el oro; para mí es como la almendra dentro de su cáscara. Si no tengo oro estoy atado de mis pies y manos. El amor por las cosas terrenales y el amor al oro me llenan de deseos vanos y me ciegan a las cosas espirituales”. La Abubilla respondió: “¡Oh tú que estás deslumbrado por las formas exteriores, tu corazón nunca percibe el valor de las cosas verdaderas! Eres como un hombre que solo ve en la oscuridad, un nictálope; eres como una hormiga subyugada por las apariencias. Trata de comprender el sentido de las cosas. Sin su color el oro sería un material ordinario; sin embargo te seduce el color, como a un niño. El amor al oro no es propio de un hombre real. ¡No ves que lo esconden en la vagina de una mula! ¿Acaso se esconden las cosas preciosas en un lugar como ese? Si no permites que otros se beneficien con tu oro, tampoco tú sacarás provecho de él. Pero si das un óbolo a algún pobre miserable, ambos se beneficiarán. Si tienes oro puedes ayudar a muchos; pero si tu hombro está marcado, también esto es a causa del oro. Por un puesto en el mercado debes pagar renta y a veces el precio es tu propia alma. Sacrificas todo por tus negocios, incluso sacrificas a los que dices que más amas, y al final no tienes nada. Solo nos resta esperar que la fortuna ponga una escalera bajo la horca. Esto no significa que no debas usar todas las cosas del mundo, sino que deberías repartir por todos lados lo que posees. La dicha se presentará cuando des. Si no puedes renunciar complelas riquezas y honores”. El Pir y su Compañero Un joven discípulo, a escondidas de su sheik (creía él), guardaba un pequeño tesoro en piezas de oro. El pir no decía nada. Un día emprendieron juntos un viaje, y al cabo de cierto tiempo llegaron a un valle oscuro a la entrada del cual se abrían dos caminos. El discípulo empezó a sentir cierto temor, porque el oro corrompe a los que lo poseen. Temblando preguntó al sheik: “¿Qué camino debemos tomar?”. El sheik respondió:”Renuncia a aquello que te hace temer, luego cualquiera de los dos será bueno. El demonio le tiene miedo al qué es indiferente al dinero, y huye rápidamente de él. Por amor a un grano de oro serías capaz de separar en dos un caballo. En el camino de la religión el oro es como un burro cojo: no tiene valor, solo peso. Cuando sin esperarla un hombre recibe fortuna, primero lo sorprende, luego lo gobierna. El que se identifica con el amor por el dinero y las posesiones está atado de pies y manos en un pozo. Evita este pozo si puedes; si no puedes, conten tu aliento, porque el aire allí es bien extraordinario”. Dios Reprende a un Derviche Un hombre santo que había encontrado gracia a los ojos de Dios se dedicó durante cuarenta años a adorarlo. Había huido del mundo pero como Dios estaba íntimamente unido a él, se sentía satisfecho. Este derviche había cercado un lote de tierra en el desierto en el medio del cual había un árbol; en ese árbol un pájaro hizo su nido. El canto de ese pájaro estaba lleno de dulzura, en cada una de sus notas revelaba cientos de secretos. El siervo de Dios se deleitaba con él. Pero Dios habló en estas palabras dirigiéndose a un vidente: “Dile a este sufi que estoy asombrado de que después de tantos años de devoción haya acabado cambiandome por un pájaro. Es cierto que el pájaro es admirable, pero su canto lo ha hecho caer en una trampa. Yo lo he comprado, pero él me ha vendido”. 24 Excusas del Octavo Pájaro “Mi corazón resplandece de placer porque vivo en un sitio encantador. Tengo un palacio dorado, tan bello que todo el mundo lo admira, y existo allí en un mundo lleno de dicha. ¿Cómo se puede esperar que renuncie a él? En ese palacio soy como un rey entre los pájaros, ¿por qué?, entonces, debería exponerme a las penurias de esos valles de los que hablas? ¿Debo abandonar mi palacio y mi noble condición? Ninguna criatura razonable renunciaría a los jardines de Irem para emprender un viaje tan difícil y esforzado”. La Abubilla respondió: “¡Oh tú que no tienes aspiraciones y careces de energía! ¿Eres acaso un perro? ¿O tu único deseo es ser sirviente en los baños? Este mundo inferior no es más que un baño de calor y tu palacio forma parte de él. Aun cuando tu palacio fuera un paraíso un día la muerte lo transformara en una prisión de sufrimiento. Sólo si la muerte dejará de ejercer su poder sobre las criaturas de este mundo sería conveniente para ti permanecer contento en tu dorado palacio”. Un Sabio se Mola de un Palacio Un rey construyó un palacio que le costó cien mil dinares. Por fuera estaba adornado con torres y cúpulas doradas, y los adornos y alfombras hacían que el interior se asemejara al paraíso. Cuando estuvo terminado invitó a hombres de todos los países para que lo admiraran. Vinieron en gran cantidad trayendo regalos, y se sentaron a su lado. Luego les preguntó: “Díganme qué piensan de mi palacio. ¿Hemos olvidado algo cuya falla estropee su belleza?”. Todos, protestando, dijeron que nunca existió un palacio igual sobre la tierra y nunca se volvería a ver uno igual. Es decir, todos menos uno, un sabio que se puso de pie y dijo: “Señor, hay solo una pequeña grieta que a mi entender empaña su belleza. Si no fuera por esta mancha, el paraíso mismo te traería regalos desde el mundo invisible”. “No veo la grieta”, dijo el rey enojado. “Eres un ignorante y solo deseas darte importancia”. “No, rey soberbio”, replicó el sabio. “Esta grieta de la que hablo es esa a través de la cual entrará Azrael, el ángel de la muerte. Ojala Dios quisiera que pudieras detenerlo, porque de otro modo, ¿de que te sirven tu grandioso palacio, tu corona y tu trono? Cuando la muerte llegue, serán como un puñado de polvo. Nada dura por siempre, y es esto lo que arruina la belleza de tu morada. No hay arte que pueda transformar en estable lo inestable. ¡Ah! ¡No deposites en un palacio tu esperanza de felicidad! No permitas que el corcel de tu orgullo haga caracolas. Es una gran desgracia que nadie se atreva a hablarle al rey de manera clara y recordarle sus faltas”. La Araña ¿Has observado alguna vez una araña? ¿Has visto su maravilloso obrar? Con previsión y rapidez teje su extraordinaria tela, una casa que adorna para su uso. Cuando una mosca se precipita en la red, de prisa la araña chupa la sangre del pequeño insecto y deja su cuerpo secar para usarlo luego de alimento. Más tarde, arremete el ama de casa con su escoba ¡y en un instante, la tela, la mosca y la araña han desaparecido! La tela de araña representa el mundo; la mosca, el sustento que puso Dios en él para el hombre. Aun cuando el mundo entero esté a tu disposición, puedes perderlo en un instante. No eres más que un niño en el sendero del conocimiento; sin embargo, en tu insignificancia, pretendes situarte fuera de la tela. No busques un lugar de honor si no has comido el cerebro de un asno. Y sabe, pobre tonto, que este mundo le fue dado a los toros. El que toma estandartes y tambores por alta dignidad nunca llegará a derviche; estas cosas no son sino el soplar del viento, menos valiosos que la más pequeña de las monedas. Refrena el corcel de tu locura; que no haga caracoles. Que no te engañe una posición de poder. Como la pantera es desollada, así tu vida te será arrebatada. Abre el ojo del verdadero anhelo y descubre el Sendero espiritual; emprende el Camino de Dios buscando su corte celestial. Una vez que la hayas vislumbrado ya no te aferrarás al brillo de este mundo. El Derviche Misántropo Un hombre, cansado y desanimado, agotado de caminar en el desierto llegó por fin a un lugar donde vivía un derviche solitario y le preguntó:”Oh derviche, ¿cómo van por aquí tus cosas? “. El derviche respondió: “ ¿No te avergüenza hacerme esa pregunta cuando ves que me encuentro confinado en un lugar tan cerrado?”. Y el hombre dijo: “Eso no es verdad. ¿Cómo puedes sentirte encerrado viviendo en este vasto desierto?”. El derviche agregó: “¡Si el mundo no fuera tan pequeño jamás hubieras tropezado conmigo!”. 25 Excusas de Roveno Pájaro Otro pájaro se dirigió a la Abubilla: “Oh eminente pájaro, se ha posesionado de mí un ser encantador; me ha hecho perder la razón y soy su esclavo. La imagen de su amado rostro es la del ladrón del gran Camino; le ha prendido fuego a la cosecha de mi vida. Cuando me alejo de mi amada no tengo un instante de paz. Mi corazón está encendido por la pasión, así que no veo cómo puedo emprender este viaje. Para ello debería cruzar esos valles y pasar por cientos de pruebas. ¿Se puede esperar de mí que renuncie a esta belleza para padecer las penurias de calor que abraza y un frío cortante? Soy demasiado débil para irme sin ella; no soy más que polvo de su camino. Si tal es mi estado, ¿qué puedo hacer?”. La Abubilla respondió: “Tú estás apegado a las cosas visibles, y enterrado de pies a cabeza en el sufrimiento que es su conciencia. El amor sensual es un juego. El amor inspirado por la belleza pasajera es fugaz. Siempre comparas un cuerpo de sangre y humores con la belleza de la luna. ¿Hay algo más feo que un cuerpo compuesto de sangre y huesos? La verdadera belleza está escondida. Buscala en el mundo invisible. Si cayera el velo que oculta a tus ojos los misterios, no quedaría nada en el mundo. Todas las cosas visibles se reducirán a nada”. Otra Anécdota de Shablí Un hombre se presentó a Shablí llorando. El sufi le preguntó por qué lloraba. “Oh Sheik”, contestó, “yo tenía un amigo cuya belleza hacía reverdecer mi alma como las hojas de los árboles en primavera. Pero ayer murió, y yo me siento morir de pena”. Shablí dijo: “¿Por qué te lamentas? Durante mucho tiempo gozaste de su amistad. Elige ahora, otro amigo, uno que no muera, así no tendrás causa de aflicción. El apego a un mortal solo trae dolor”. El Rico Mercader Un rico mercader, poseedor de una gran fortuna, tenía una esclava dulce como el azúcar. Sin embargo, un día decidió venderla. Al poco tiempo comenzó a echarla de menos. Lleno de ansias se presentó al nuevo sueño y le rogó que la dejara volver con él ofreciéndole a cambio mil piezas de oro. Pero esté negó el trato. El mercader se fue desesperado y echando tierra sobre su cabeza dijo: “Fue a causa de mi propio error, porque cerrando los ojos, en mi codicia vendí a mi amante por una pieza de oro. Fue un mal día para mi cuando la vestí con sus mejores galas para venderla en el mercado por un magro beneficio”. Cada respiración mide tu existencia: cada una es una perla y cada uno de tus átomos te guía a Dios. Los beneficios de este amigo te cubren de pies a cabeza. Si verdaderamente te dieras cuenta de esto ¿cómo soportarías la separación? Anécdota de Halláj Cuando estaban por empalar a Halláj, él repetía estas palabras: “Yo soy Dios”. Le cortaron las manos y los pies para que empalideciera por la pérdida de sangre. Entonces él puso sangre de sus muñones en su rostro diciendose: “No me conviene estar pálido hoy porque pensaran que tengo miedo. Enrojeceré mi rostro para que, cuando el hombre sangriento que ejecutó la sentencia se vuelva hacia la picota, se dé cuenta de que soy un hombre valeroso”. El que come y duerme en julio con el dragón de siete cabezas tendrá muy mala suerte en la jugada, pero la picota será para él juego de niños. 26 Excusa del Décimo Pájaro Este pájaro dijo a la Abubilla: “Temo a la muerte. Este valle es vasto y yo no tengo nada para el viaje. Estoy tan lleno de temor a la muerte que la vida me abandonaría en la primera etapa. Aun cuando fuera un emir poderoso, no tendría menos miedo a la hora de la muerte. El que con una espada trata de detener a la muerte, sólo logra ver su arma rota como un Kalam; porque desgraciadamente, la fe en la fuerza de la mano y de la espada sólo trae desilusión y dolor”. La Abubilla respondió: “Oh tú que eres inconstante y de débil voluntad, ¿deseas seguir siendo una mera armazón de huesos y médula? ¿No sabes que la vida, sea larga o corta, está compuesta de unas pocas respiraciones? ¿No comprendes que el que nace debe también morir? ¿Que volverá a la tierra y el viento dispersará los elementos que constituyeron su cuerpo? “¡Fuiste alimentado para la muerte; fuiste traído al mundo para ser sacado de él! El cielo es como un plato invertido que se sumerge cada noche en la sangre del ocaso. Se podría decir que el sol, empuñando una cimitarra, está cortando cabezas sobre este plato. Seas bueno o malo, eres sólo una gota de agua amasada con tierra. Aunque hayas pasado toda tu vida en un puesto de autoridad, al final entregaras, con dolor, tu alma a Dios”. El Fénix El Fénix es un pájaro admirable que vive en Indostán. No tiene pareja, vive solo. Su pico, muy largo y duro, está perforado como una flauta. Tiene casi un centenar de agujeros y cada uno emite un sonido que contiene un secreto particular. A veces a través de esos agujeros produce música y al oír sus dulces y melancólicas notas los pájaros y los peces se inquietan y hasta las bestias más feroces caen en éxtasis; todos hacen silencio. Una vez un filósofo visitó a este pájaro y aprendió de él la ciencia de la música. El Fénix vive cerca de mil años y conoce con exactitud el día de su muerte. Cuando llega el momento se rodea de hojas de palmeras y allí entre las hojas, tumbado, emite melancólicos quejidos. Por las aberturas de su pico se producen diversas notas: una música que sale de las profundidades de su corazón. Sus lamentos expresan el dolor de la muerte y él tiembla como una hoja. Al sonido de su trompeta los pájaros y las bestias se acercan para asistir al espectáculo. Quedan estupefactas y algunas mueren porque les flaquean las fuerzas. Mientras el Fénix todavía tiene aliento, bate sus alas y encrespa sus plumas, y al hacerlo produce fuego. El fuego se expande hasta las hojas de palmera, y pronto las hojas y el pájaro quedan reducidos a brasas y luego cenizas. Pero cuando vacila la última chispa, surge de las cenizas un nuevo pequeño Fénix. ¿Le ha sucedido a alguien renacer después de muerto? Aun cuando vivas tanto como el Fénix, morirás cuando se cumpla la medida de tu vida. Sus mil años de vida están llenos de lamentos y vive solo, sin compañera ni hijo; no tiene contacto con nadie. Cuando le llega el fin, arroja al viento sus cenizas para que te enteres de que nadie, cualquiera sea el truco que use, puede escapar de la muerte. Aprende del milagro del Fénix. La muerte es un tirano, pero debemos tenerla siempre presente. Si bien es mucho lo que hay que soportar, nada puede compararse con morir. Consejo de Tai al Morir Cuando Tai estaba muriendo, alguien le preguntó: “Oh, Tai, tú que has visto la esencia de las cosas, ¿cómo te sientes ahora?”. Y dijo: “No puedo decir nada de mi estado actual. He medido el viento todos los días de mi vida, y ahora el fin ha llegado y seré enterrado, de modo que ¡buenas noches!”. No existe otro remedio para la muerte que mirarla constantemente a la cara. Todos nacemos para morir; la vida no permanecerá en nosotros; debemos someternos. Incluso aquel que tuvo al mundo entero bajo el sello de su anillo es ahora un mineral de la tierra. Jesús y el Cántaro de Agua Jesús bebió agua de un límpido arroyuelo, su sabor era más agradable que el rocío de la rosa. Uno de sus compañeros llenó un cántaro con esa agua y siguieron el camino. Luego Jesús tuvo sed y bebió del cántaro, pero el agua estaba amarga; se detuvo asombrado y oró: “Oh Dios, el agua del arroyuelo y el agua del cántaro son la misma. Dime por qué una era más dulce que la miel y la otra tan amarga”. Y habló el cántaro: “Soy muy viejo, he sido fabricado bajo el firmamento de nueve cúpulas, a veces como vasija, a veces como cántaro, a veces como jarra. Cualquiera fuera la forma que adoptará, siempre tuve en mi la amargura de la muerte. Estoy hecho de manera tal que el agua que contengo comparte siempre esa amargura”. ¡Oh, hombre incauto! Trata de comprender el significado del cántaro. Busca descubrir el misterio antes de que la vida te sea arrebatada. Si no te encuentras a ti mismo mientras vives, si no te conoces, ¿cómo serías capaz de comprender el secreto de tu existencia cuando mueras? Participas de la vida del hombre y sin embargo sólo eres un seudo-hombre. Sócrates y sus Discípulos Cuando Sócrates estaba por morir, uno de sus discípulos le preguntó: “Maestro, ¿dónde quieres que te enterremos después que te hayamos lavado y puesto en la mortaja?”. Sócrates dijo: “Querido discípulo, ¡si me encuentras entierrame donde quieras y listo! Siendo que durante toda mi larga vida no me he encontrado a mi mismo, ¿cómo harás para encontrarme cuando esté muerto? He vivido de manera tal que en este momento sólo sé que el mínimo vestigio de conocimiento de mí mismo no es evidente”. 27 Excusa del Undécimo Pájaro Otro pájaro se acercó a la Abubilla: “Oh tú, de fe sincera, no tengo ni un soplo de buena voluntad. He pasado toda mi vida fastidiado, deseando la bola del mundo. Hay tanta tristeza en mi corazón que nunca cesó de lamentarme. Siempre me encuentro en estado de estupor e impotencia; y cuando por un momento me sentí satisfecho, no pude creerlo. En consecuencia, me he hecho derviche. Pero ahora dudo de iniciar el camino del conocimiento espiritual. Si mi corazón no estuviera tan lleno de pena estaría encantado con el viaje. Pero lo está, y me siento perplejo. Ahora que te he descrito mi situación, dime qué debo hacer”. La Abubilla respondió: “Tú, que te entregas al orgullo, y eres devorado por la autocompasión, es normal que estés perturbado viendo que el mundo pasa, tú mismo deberías dejarlo de lado. Abandónalo, porque quien quiera que se identifique con las cosas pasajeras no puede participar de lo que es duradero. Los sufrimientos que soportan pueden transformarse en gloriosos en vez de ser humillantes. Lo que en su apariencia exterior es sufrimiento puede ser un tesoro para el que ve. Cien bendiciones te serán dadas si haces un esfuerzo en el Camino. Pero tal como eres, eres sólo un trozo de piel cubriendo un cerebro torpe”. El Esclavo Agradecido Un día un rey bondadoso ofreció a un esclavo un fruto raro y bello, el esclavo la probó y dijo que nunca en su vida había comido algo tan delicioso. Esto hizo que el rey quisiera probarlo también, por lo que le pidió un trozo. Pero al ponerlo en su boca lo halló amargo y quedó muy asombrado. El esclavo dijo: “Señor, habiendo recibido tantos regalos de tus manos ¿cómo puedo quejarme por un fruto amargo? Siendo que me colmas de beneficios, ¿por qué debería una amargura separarme de ti?”. Así, siervo de Dios, si experimentas sufrimientos en tu búsqueda, date cuenta de que pueden ser un tesoro para ti. Esto puede ser confuso, pero recuerda al esclavo. El Sheik y la Anciana Una anciana dijo al sheik Mahmáh: "Enséñame una El sheik respondió: “Hace mucho tiempo me retiré a que deseas; pero no le he sentido ni lo he visto.Cómo podemos estar satisfechos si no aceptamos todo en el camino del amor?”. Una pregunta y Junaid Alguien preguntó a Junaid: “Esclavo de Dios a la vez que hombre libre, dime cómo se alcanza el estado de satisfacción'' .Junaid replicó:“Cuando se ha aprendido,por amor,a aceptar”. El átomo sólo tiene de brillante la apariencia. Por naturaleza es sólo un átomo, pero si se pierde a sí mismo en el sol, compartirá la calidad del sol por siempre. Ei Murciélago que Buscaba el Sol Una noche se oyó decir a un murciélago:“¿Cómo es que soy incapaz de ver aunque sea por un instante la luz del sol? Toda mi vida la he pasado en desesperación porque me fue imposible perderme en él ni por un instante. Durante meses y años he volado de aquí para allá con los ojos cerrados, y heme aquí!". Un contemplativo le dijo: “Estás lleno de orgullo, todavía tendrás que viajar durante miles de años. ¿ Cómo puede un ser como tú descubrir el sol? ¿Puede una hormiga llegar a la luna?" "Sin embargo", dijo el murciélago, "seguiré tratando". Y así durante varios años continuó buscando hasta que ya no le quedaban ni fuerzas ni alas. Como todavía no había descubierto el sol, dijo: “Quizás he volado más allá de él". Un pájaro sabio, al oírlo, dijo: “Vives en un sueño; has estado volando en círculos y no has avanzado un solo tramo; iy en tu orgullo supones que has dejado al sol atrás!". Esto fue un golpe duro para el murciélago que dándose cuenta de su desamparo, se dijo con gran humildad: “Has encontrado un pájaro de visión penetrante, quédate junto a él”. 23 Pregunta del duodécimo Pájaro Otro pájaro dijo a la Abubilla:“Oh tú, que eres nuestro guía, ¿qué obtendré si someto mi voluntad a ti? Por mi propia voluntad no puedo aceptar el esfuerzo y sufrimiento que estoy seguro habré de padecer en el camino, pero podría obedecer tus órdenes; y si por casualidad me desviara,trataré de corregirme”. La Abubilla respondió: “Has hablado bien, no se pue de esperar nada mejor. Porque ¿cómo podrías ser amo de ti mismo si te guías por tus gustos y disgustos? Pero si obedeces de propia voluntad puedes transformarte en tu propio amo. El que se somete a obediencia en este camino se libera del engaño y evita muchas dificultades. Una hora de servir a Dios de acuerdo a la ley verdadera vale lo que una vida entera al servicio del mundo. El que acepta pasivamente el sufrimiento es como un perro extraviado que obedece al capricho de cualquiera que pasa. Pero aquel que soporta aunque sea un instante de sufrimiento voluntario en este camino,recibe su recompensa". Bayazid y Tarmazi Un sabio doctor, de excelentes cualidades, uno de los ejes del mundo, relató lo siguiente: “Una noche”, dijo,“vi en un sueño a Bayazid y Tarmazi, y me rogaron que fuera su guía. Me pregunté por qué estos dos sheiks eminentes me trataban con tanta deferencia. Luego recordé que una mañana había yo exhalado un suspiro desde las profundidades de mi corazón, el cual, al subir, había golpeado las puertas del santuario que así se abrieron para mí. Entré,y todos los maestros espirituales y sus discípulos, hablando sin palabras, me preguntaron algo;todos excepto Bayazid Bistami que deseaba conocerme pero no tenía una pregunta. Dijo: 'Cuando escuché la llamada de tu corazón me di cuenta de que sólo me era necesario obedecer tus órdenes, ser guiado por tu voluntad. Si soy nada, ¿quién soy yo para decir qué deseo? Es suficiente para el siervo cumplir con los deseos de su amo'. ”Fue por eso que los sheiks me trataron con respeto y me dieron preeminencia. Cuando un hombre transita el camino de la obediencia, actúa de acuerdo a la palabra de Dios. No es siervo de Dios el que se jacta de serlo. El verdadero siervo muestra su calidad en momentos de experiencias dolorosas. Sométete pues, a pruebas, para llegar a conocerte a ti mismo.” Ei Esclavo y el vestido de Honor Un rey dio a un esclavo un vestido de honor. El Esclavo salió muy satisfecho de sí. Al caminar, el polvo de las calles se deposita en su rostro y con descuido se limpió con la manga del vestido. Uno que estaba celoso no perdió tiempo en informar al rey, quien, indignado por su falta de modales,lo hizo empalar. El que se deshonra con conductas impropias no merece pisar la alfombra de un rey. 29 Pedido Del Decimotercer Pájaro Otro pájaro pidió a la Abubilla: “Oh, tú, que no tienes intenciones de seducción, dime cómo puedo ser sincero en este camino hacia Dios. Dado que no puedo renunciar al anhelo de mi corazón, gasto todo lo que tengo para llegara mi meta. Lo que tenía, lo he perdido; lo que retuve se hizo escorpión en mis manos. No estoy atado por ningún lazo,he desechado todos los grilletes y cadenas.Deseo ser sincero en el Camino espiritual con la esperanza de ver algún día cara a cara el objeto de mi adoración”. La Abubilla replicó: “Este Camino no es para cualquiera, sólo el honesto puede andar por él. El que con esfuerzo lo transita debe hacerlo con tranquilidad y de todo corazón. Cuando hayas quemado todo lo que posees, junta las cenizas y siéntate sobre ellas. No serás libre a menos que mueras a todas las cosas de este mundo, una por una. Viendo que no estarás por mucho tiempo en la prisión del mundo, rompe todos los lazos. Cuando la muerte llegue, clos objetos que hoy te esclavizan, podrán acaso alejarla? Para andar este camino es necesario ser sincero con uno mismo, y serlo es más difícil de lo que imaginas”. Palabras alegóricas de Tarmazi El santo del Turquestán se dijo una vez: 'Amo dos cosas, a mi hijo y a mi caballo moteado. Si oyera decir que mi hijo está muerto, entregaría mi caballo, porque ambos son ídolos para mi alma”. Pon luz sobre tus faltas, resentimientos y vanidades Quémalos y no te jactes de ser más sicero que otros. El que se enorgullece de su sinceridad debería verse tal cual es. Ei Sheik Khircani y la Berenjena Un dia el Sheik Khircani, que descansa en el mismo n e dios, tuvo un deseo intenso de berenjena. Pidió a los gritos de modo que su madre salió a buscar una. No bien la hubo comido sucedió que le cortaron la cabeza a su hijo, y por la noche un hombre malvado la puso en el umbral de su puerta. El sheik dijo entonces: “Cientos de veces tuve el presentimiento de que si comía aunque fuera un trozo pequeño de berenjena algo desastroso sucedería. Pero el deseo que sentí fue tan fuerte que no pude controlarme”. El que permite que sus deseos lo gobiernen,ahoga su propia alma. Los eruditos no saben nada; no hay certeza en su saber; y se requieren muchos distintos tipos de conocimiento. En cualquier momento puede llegar una caravana con uma nueva prueba. No sé de nadie tan afortunado como los magos del lerain, quienes con la fe de los hombres de hoy, separaban salmas de sí mismos, y enraizando en la religión, renunciaban a todo amor por las cosas del mundo. 30 Habla ell Decimocuarto Pájaro Otro pájaro habló a la Abubilla:"Oh tú,de clara visión. Esto que propones es una aspiración muy elevada. En cuanto a mi, si bien parezco débil, en realidad tengo un noble ardor; aunque tengo poca fuerza, soy de gran ambición". La Abubilla respondió: "Si tienes aunque sea un poco de esta noble ambición, ella obtendrá victoria aún sobre el mismo sol. Estas ansias son las alas y las plumas del pájaro del alma". La Anciana que Deseaba Comprar y:José Se cuenta que cuando José fue vendido a los egipcios, éstos lo trataron con bondad. Había muchos compradores, por lo que los mercaderes le pusieron precio entre cinco y diez veces su peso en almizcle. Entonces, en estado de gran agitación,una anciana corrió a colocarse entre los compradores y dijo a un egipcio:"Déjame comprar al canaanita; ¡deseo tanto poseer a ese joven! He hilado diez carretes de hilo para pagar por él, tómalos y dame a José sin decir más". Los mercaderes,sonriendo,dijeron:"Tu simpleza te ha extraviado. Esta perla única no es para ti; ya se han ofrecido un centenar de tesoros por él. Con tus carretes de hilo ¿cómo podrías competir con esas ofertas?``.La anciana, mirándolos a la cara, les dijo: "Sé muy bien que no lo venderan por tan poca cosa,pero me es suficiente que mis amigos y enemigos digan: 'esta anciana estuvo entre los que querían comprar a José'". El que carece de aspiración nunca alcanzará el reino sin límites.Poseído por una gran ambición, un príncipe consideraba su reino en este mundo como un puñado de cenizas. Cuando se dio cuenta de la vacuidad del honor temporal, vio que la realeza espiritual valía mil reinos de este mundo. Ibrahim Adham Un hombre se quejaba amargamente de su pobreza, de modo que Ibrahim Adham le dijo: “Hijo mío, quizás no hayas pagado por tu pobreza?". El hombre respondió: “Lo que dices no tiene sentido, ¿cómo se puede comprar la pobreza?”. “Yo al menos", dijo Adham, “la elegí por voluntad y la he comprado al precio de un reino del mundo. Y compraría aún un momento más de esta pobreza con un centenar de estos mundos”. Los hombres sedientos de autoperfección ponen en juego cuerpo y alma en la cuestión. El pájaro de aspiraciones se remonta hacia Dios en las alas de la fe,se eleva por encima de las cosas temporales y espirituales. Si no tienes una aspiración tal, es mejor que te retires. La Visión del Mundo de un Sufi Un sufí despertó una noche y se dijo: “Me parece que el mundo es como un cofre; nos ponen en él y luego cierran la tapa, y allí nos entregamos a la necedad. Cuando la muerte levanta la tapa, el que ha adquirido alas, se eleva hacia la eternidad, pero el que no, queda en el cofre presa de un millar de tribulaciones. Asegúrate entonces de que el pájaro de la ambición adquiera alas para elevarse, enséñale a tu corazón y a tu razón el éxtasis del alma. Antes de que la tapa del cofre se abra, transfórmate en un pájaro del Espíritu, listo para desplegar tus alas". 31 Duda del Decimoquinto Pájaro Otro pájaro dijo a la Abubilla:"Puede ser que el Reydel cual hablamos sea justo y recto, pero también a nosotros Dios nos ha dado integridad y rectitud; en cuanto a justicia, yo nunca le he fallado a nadie.Qué valor tiene en la escala del conocimiento espiritual un hombre que posee estas cualidades?”. La Abubilla respondió: “La justicia es la cúspide de la salvación. El justo está a salvo de todo tipo de errores y frivolidades. Es mejor ser justo que pasarse toda la vida en reverencias y gestos exteriores de adoración.Ni la generosidad iguala en ambos mundos a la justicia que se ejerce en secreto; pero el que abiertamente se jacta de ser justo, encontrará dificultades para dejar de ser hipócrita. En cuanto a los hombres del Camino espiritual, no piden justi-cia sino que la reciben generosamente de Dios”. Anécdota del Iman Hambal Ahmad Hambal fue el Imán de su época, sus virtudes superaban toda posibilidad de expresión. Cierta vez quiso descansar de sus estudios y de su posición y salió a caminar con un hombre muy pobre Alguien lo vió y censuró diciendo: “no hay nadie más instruido que tú y no necesitas la opinión de otros hombres y sin embargo malgastas tu tiempo con un pobre miserable que nada descalzo y con la cabeza descubierta”. “Es verdad” dijo el Iman “tengo más conocimiento que este hombre, pero en cuanto comprensión él está más cerca de Dios que yo". Tú que eres injusto por ignorancia, reflexiona, al menos un instante, sobre la integridad de los que transitan el sendero del espíritu. Ei Raja de la India El sultán Mahmud tomó una vez prisionero a un vicjo rajáh, quien, experimentando el amor de Dios, se hizo musulmán y renunció a los dos mundos. Sentado solo en stu tienda pasaba el tiempo absorto en su amor, llorando amargas lágrimas y exhalando suspiros de añoranza, durante el dia más que por las noches, y por las noches más que durante el dia. Cuando Mahmud se enteró de esto lo mandó llevar a su presencia: "No llores y no te lamentes", le dijo. “Eres un rajáh y te daré cien reinos a cambio del que has perdido."“Oh Padisháh", replicó el viejo, "no lloro por mi reino perdido ni por mi dignidad, lloro porque el dia de la resurrección, Dios, poseedor de la gloria, me dirá: 'Oh hombre desleal, sembraste el grano del insulto en contra de mi. Nunca pensaste en mí antes de que Mahmud te atacara. Cuando enfrentaste tu ejército contra él y perdiste todo. sólo entonces me recordaste. :Crees que es eso justo?'.Oh. joven rey, lloro, a mi edad, porque estoy avergonzado". Escucha las palabras de fe y justicia; escucha la enseñanza del Diwán de los Libros Sagrados. Si tienes fe, emprende el viaje al que te estoy invitando. Pero el que no figura en el índice de la fidelidad, ¿habrá de encontrarse en el capítulo de la generosidad? Ei Guerrero Musulmán y el Cristiano Un musulmán y un eristiano estaban luchando.Cuan-do llegó la hora de las plegarias el musulmán con orgullo pidió una tregua al cristiano. El cristiano estuvo de acuerdo,de modo que el musulmán se apartó y dijo sus plegarias. Cuando regreso,reanudaron el combate con renovado vigor. Al poco tiempo el cristiano pidió una tregua para decir sus plegarias.Al serle otorgada se retiró y eligiendo un sitio adecuado se arrodilló frente a su ídolo. Cuando el musulmán vio a su adversario con la cabeza inclinada se dijo:"Esta es mi oportunidad de obtener victo riz", pensando en atacarlo a traición. Pero una voz interior le dijo:"Oh,hombre desleal, zromperias tu compromiso? (Traicionarias tu palabra? El infiel no empuñó su arma contra ti cuando pediste una tregua.No recuerdas las palabrasdel Corán:'Mantén con fidelidad tuspromesas?Si el cristiano ha sido generoso contigo, no seas tú menos generoso con él. El actuó bien, tú deseas hacer el mal Haz con él lo que él hizo contigo". Ante esto, el musulmán se contuvo.Lo sobrecogió el remordimiento y quedó bañado en lágrimas de piesa cabeza. Cuando el cristiano vio estole preguntó la razón. Y dijo el musulmán: “Una voz del cielo me reprochó por haber pensado en traicionarte. Me enr cuentro en este estado porque me ha vencido tu generosi-dad", Aloir esto el cristiano lanzó un grito y dijo: "Situ Dios puede otorgarme enta gracia a mi, su enemigo, y reprender asuamizo por un pensamiento desleal, no puedo permane cer en la incredulidad. Enseñame los principios del Islam para que pueda aceptar la verdadera leyadoptar losritosde la ley.Oh,como deploro la ceguera que hasta ahora me impidió reconocer al Maestro". jOh tú, que has descuidado la búsqueda del verdadero objeto de tus deseos, y que careces de la fe que merece! Llegará el momento en que el cielo se te hará presente para recordarte todos tus actos,uno por uno. José y sus Hermanos En tiempos de hambruna, los diez hermanos de José emprendieron el largo viaje hacia Egipto. José los recibió, su rostro cubierto con un velo, y ellos le rela-taron sus penurias y le pidieron ayuda para combatir el terror del hambre. Frente a José había una copa y él la frotó con sus manos; la copa produjo un sonido lastimero. Los hermanos en estado de consternación, no pudieron contenerse y le preguntaron: “;Oh Aziz! ;Sabes tú qué significa ese sonido?”. “Lo sé muy bien”, dijo José, “pero vosotros no soportaréis oírlo; porque la copa dice que teníais un hermano cuyo nombre era José que era notable por su belleza”. Entonces José frotó la copa una segunda vez y dijo: “La copa me dice que arrojasteis a José a un pozo y luego matasteis a un inocente lobo para manchar con sangre su manto”. Frotó la copa una tercera vez y volvió a producir un lamento. Entonces agregó: “La copa dice que los hermanos de José hundieron a su padre en la más profunda de las penas al vender a José. ”¿Qué hicieron estos infieles con su hermano?Temed a Dios, al menos, vosotros que estáis frente a mí.” Esto los puso en tal estado que comenzaron a sudar de temor; ellos, que habían acudido a pedir pan. Al vender a José se habían vendido a sí mismos; al abandonarlo en el pozo se habían arrojado ellos mismos a las profundidades de la aflicción. El que escucha esta historia sin sacar enseñanza está ciego. No oigas con indiferencia, porque se trata de tu propia historia. Sigues cometiendo pecados y faltas porque no has sido iluminado por la comprensión. Si alguien frotara la copa de tu vida, se te revelarían tus actos censurables. Cuando se frote la copa de tu vida y te despiertes del sueño; cuando tus injusticias y pecados queden expuestos uno por uno, dudo de que mantengas tu paz y tu cordura. Eres como una hormiga coja en un cuenco. ¿Cuántas veces has apartado tu mirada de la copa del cielo? Extiende tus alas y vuela alto, tú, que tienes cierto conocimiento de la verdad. Si no, siempre te avergonzaras al escuchar el sonido de la copa. 32 Pregunta del Decimosexto Pájaro Øtro pájaro preguntó a la Abubilla: “Oh, tú, que eres nuestro guía, cse permite la audacia para aproximarse a la Majestad del Simurg? Se me ocurre que el que tiene coraje se libera de muchos miedos. Tú que lo posees, desparrama tus perlas de sabiduría y háblanos del secreto”. “El que tiene dignidad”, replicó la Abubilla,“es Mahram del secreto de la divinidad, y es bueno ser osado si se conocen los secretos de Dios. ¿Pero cómo puede el que posee los secretos comunicarlos a otro? ;Puede un camellero del desierto ser confidente de un rey? "Sin embargo, si uno está movido por un amor puro, se admite un poco de audacia. El que está en el sendero del conocimiento de sí debería saber cuándo ser osado, y no dejarse morir por falta de esfuerzo. "Un verdadero derviche será audaz y confiado por la misma esperanza que experimenta. El que por amor ha perdido el miedo, ve al Señor en todas las cosas. Entonces su audacia es buena y loable, porque es un idiota de amor, en llamas.” Un idiota de Dios y los Esclaros de Amid Khorassán era una ciudad próspera gracias al sabio gobierno del príncipe Amid. Servían al príncipe un centenar de esclavos turcos de rostros resplandecientes como la luna llena, sus cuerpos eran esbeltos cipreses, sus piernas como de plata, y sus alientos como de almizcle. Usaban pendientes de perlas cuyos reflejos iluminaban la noche haciendo que pareciera día; sus turbantes estaban hechos del más fino de los brocados y lucían collares de oro alrededor del cuello; sus pechos estaban cubiertos con telas de plata con cintos incrustados de piedras preciosas. Todos montaban caballos blancos. Quienquiera que posara sus ojos en uno de ellos perdía su corazón al instante. Por casualidad, un sufí, vestido de harapos y descalzo, vio a la distancia este ejército de jóvenes, y preguntó: “ĉQué es este desfile de huríes?”. Le contestaron: “Esos jóvenes son los pajes de Amid, el príncipe de esta ciudad". Cuando el idiota de Dios oyó esto, el vapor de la locura se le subió a la cabeza y gritó: “Oh Dios, poseedor del trono de gloria, enseña a Amid a cuidar a sus siervos”. Si eres como este idiota, ten también su osadía; yér-guete como un árbol esbelto; pero si no tienes hojas, no seas atrevido y no te mofes. La osadía de los locos de Dios es cosa buena. Ellos no podrían opinar si el camino es bueno o malo, sólo saben cómo actuar. Un Loco de Dios La Abubilla continuó: “Un idiota de Dios iba desnudo y hambriento por el camino en pleno invierno. No teniendo casa ni refugio, estaba empapado por la lluvia y la nevisca. Finalmente llegó a un palacio en ruinas y decidió cobijarse ahí, pero al pasar por el umbral una teja cayó sobre su cabeza lastimando su cráneo que manaba sangre. Volvió su cara al cielo y dijo: “¿No seria mejor batir el tambor real que arrojar una teja sobre mi cabeza?” Plegaría de un Loco Había en Egipto una hambruna tan espantosa que hombres y mujeres morían por todas partes mendigando pan. Pasó por casualidad un loco y viendo cuántos morían de hambre dio a Dios: "Oh, tm, que posees todas las comas buenas del mundo y de la religión, si no puedes alimentar a todos, porque no creas menos?". Si algún audaz dijera algo impropio en la corte, deberá pedir humildemente perdón. Otro Loco Un sufí, un idiota de Dios,estaba atormentado por unos ninos que le arrojaban piedras. Se refugió en una casa abandonada. Pero en ese momento comenzó a granizar y las piedras calan sobre su cabeza por un agujero del techo. El Hombre tomó el granizo por guijarros y comenzó a sacar la lengua e insultar a los niños a quienes suponía responsables, porque la casa estaba a oscuras. Finalmente descubrió que los guijarros eran sólo piedras de granizo y apenado, oró: "Oh Dios, fue porque la casa estaba a oscuras que pequé con mi lengua". Si comprendes los motivos de los que están en la oscuridad, sin duda los podrás perdonar. 33 Discurso del Decimoséptimo Pájaro Otro pájaro preguntó a la Abubilla:"Mientras esté con vida el amor del Ser Eterno me será agradable y valioso, y nunca cesaré de pensar en él. He conocido a todas las criaturas vivientes y lejos de apegarme a ellas no me he identificado con ninguna. La locura del amor ocupa por completo mis pensamientos, de modo que para mí, el amor es suficiente. Pero un amor así no es conveniente para todos, y ahora llega el momento en que debo dar un giro en mi vida para poder ser capaz de tomar una copa de vino de mi amado; entonces el ojo de mi corazón se iluminará con su belleza y mi mano tocará su cuello como voto de unión”. La Abubilla respondió: “No es a través de esta jactancia pretenciosa como se llega a ser huésped de honor del Simurg del Cáucaso. No ensalces tanto el amor que crees tener por él, porque un amor tal no le es dado a cualquiera poseer. Es necesario que el viento de la buena fortuna levante el velo del misterio, entonces el Simurg te atraerá hacia él y te sentarás con él en su harem. Si deseas llegar al lugar sagrado debes buscar, ante todo, conocimiento espiritual, de otro modo tu amor por el Simurg se tornará un tormento. Para que tu felicidad sea verdadera es necesario que el Simurg también te ame”. Sueño de un Discípulo de Bayazid El mismo día en que Bayazid abandonó el palacio de este mundo un discípulo suyo lo vio por la noche en un sueño y le preguntó cómo había escapado de Munkir y Nakir. El sufí le contestó: “Cuando estos dos ángeles me preguntaron acerca piensa el de mi. si me llaman su siervo, sabrán que es a. Si no lo hace, entonces ane abandona a las ataduras que me tienen prisionero. Dado que no es fácil unirse a Dios, ¿de qué me serviría llamarlo mi Señor? Si no esta conforme con su siervo, ide qué sirve que lo proclame mi amo? Es cierto que he inclinado la cabeza, pero también es necesario que él me reconozca como su esclavo". Wahmud Disita los Daños Una noche, encontrándose Mahmud deprimido, fue al hammam por un baño. El Joven de servicio le dio la bienvenida y lo acomodó en la sala de carbones para que sudara cómodamente. Luego le dio pan seco, que el sultán comió. Entonces Mahmud se dijo: “Si este joven se hubiera negado a atenderme le hubiera hecho cortar la cabeza''.Finalmente el sultán le dijo al joven que deseaba regresar a su palacio. El joven dijo: “Has comido mi comida, has descansado en mi cama, y has sido mi huésped. Siempre me sentiré feliz de atenderte.Si bien en realidad estamos hechos de la misma sustancia, en relación a las cosas exteriores ¿cómo podrías ser comparable a uno de mi baja condición?". El sultán quedó tan encantado con su hablar que lo visitó siete veces más. En la última ocasión le dijo que le concedería un pedido. “Si yo, un mendigo, hiciera un pedido", dijo el joven, “el sultán no me lo concedería”. “Pide lo que quieras", dijo el sultán, “aun si fuera dejar el hammam para que te haga rey".“Mi único pedido", contestó el joven, "es que el sultán siga siendo mi huésped. Servir en los baños y estar sentado a tu lado en la sala es mejor que ser un rey en un jardín y estar lejos de ti. Dado que la buena fortuna se me presentó en los baños, sería ingrato si quisiera abandonar el hammam. Tu presencia ha iluminado este sitio: ¿qué cosa más valiosa existe que yo pudiera pedir?”. Si amas a Dios busca también ser amado por él. Pero mientras un hombre busca este amor, siempre el mismo y siempre nuevo, otro desea dos óbolos de plata del tesoro de este mundo; suspira por una gota de agua cuando podría tener el océano. Los Dos Iguatcros Un aguatero encontró a otro y le pidió un poco de su agua. El segundo dijo: “Oh, tú que ignoras las cosas del espíritu, ¿por qué no bebes de la tuya?". El primero dijo: “Dame un poco de tu agua, tú que tienes conocimiento espiritual, porque ya estoy harto de la mía”. Adán estaba saciado de las cosas conocidas, y esto lo llevó a probar el trigo, algo nuevo para él. Vendió todo lo viejo por un poco de trigo. Se transformó en tuerto. El Amor golpeó a su puerta. Cuando estaba completamente destruido por la luminosidad del amor, todo, lo viejo y lo nuevo, desapareció y ino quedó nada! Pero no le es dado a cualquiera hastiarse de sí mismo y morir completamente a la antigua vida. 34 Discurso del Decimoctavo Pájaro Otro pájaro dijo a la Abubilla: “Creo que he adquirido toda la perfección que es posible adquirir, y lo he logrado a través de penosas austeridades. Dado que he obtenido en este mundo el resultado que deseaba, me es difícil emprender un viaje hacia el lugar de que hablas. ¿Acaso conoces a alguien que haya abandonado un tesoro para vagar fatigosamente por las montañas, selvas y llanuras?” La abubilla replicó”¡Oh, criatura diabólica llena de orgullo y presunción! ¡Tú qie estás hundida en el egoísmo! ¡Tú que tienes semejante aversión al esfuerzo!Tu imaginación te ha seducido y estás alejada de las cosas divinas. El cuerpo de deseos deberias considerarla como aguijón de un escorpión. No te desanimes por la oscuridad del camino que te mostraré, ni porque la luz que allí veas no te produzca la ilusión de ser compañera del sol. Mientras tengas vida, querida criatura, en el orgullo de la vida, tus lecturas y tus insignificantes esfuerzos no valen un óbolo. Sólo cuando renuncies a este orgullo y vanidad serás capaz de abandonar la vida exterior sin arrepentimientos. Mientras te aferres a la presunción y al orgullo de ti misma y a las cosas de la vida exterior, un centenar de flechas de disgusto te perforarán de cada lado”. Ei Sheik Hbu Bekr de Nishapur El sheik de Nishapur salió un día del monasterio en compañía de sus discípulos, iba montado en su burro yss paneros caminaban a su lado.De repente el burro explotó un flato con un ruido extraordinario, después de lo cual el sheik gritó y se desgarró la kirka. Sus discípulos lo miraron sorprendidos y uno de ellos le preguntó por qué había actuado así. Contestó: “Cuando miré a mi alrededor y vi la cantidad de seguidores que me acompañaban pensé: Ahora verdaderamente soy igual que Bayazid. Hoy me acompañan muchos discípulos serios; por lo tanto, mañana, cabalgaré sin duda con gloria y honor en la tierra de la resurrección ''. Y Agregó: “Fue entonces, mientras así estaba presumiendo acerca de mi destino, cuando mi burro produjo ese sonido aparentemente discordante. Con eso quiso decir: ';Esta es la respuesta que da un asno a aquel que tiene semejantes pretensiones y pensamientos tan vanos!'. Por eso cayó tan repentinamente sobre mi alma el fuego del arrepentimiento, por eso cambió mi actitud, mientras mi posición imaginaria se hacía trizas”. Oh, tú que cambias a cada momento, eres como el faraón hasta la raíz de tus cabellos. Pero si destruyes en ti el ego, aunque sea por un día, tu oscuridad se iluminará. Nunca pronuncies la palabra “yo”. A causa de tus “yoes”serás siempre tentado por el diablo, y te sobrevendrán un centenar de males. Dios Habla a Moisés Dijo Dios un día a Moisés en secreto: “Ve y recibe consejo de Satán”. De modo que fue Moisés a visitar a Iblis y cuando se le acercó le pidió consejo. “Recuerda siempre”, dijo Iblis,“este simple axioma: nunca digas 'yo', para que no te parezcas a mí”. Mientras haya en ti un poco de amor propio, encontrarás en ti infidelidad. La indolencia es una barrera en el camino espiritual; pero si puedes cruzar esa barrera un centenar de “yoes” quedarán destruidos al instante. Todos ven tu vanidad y amor propio, tu resentimiento, tu envidia y tu ira, pero tu mismo no puedes verlos. Hay en tu ser un rincón lleno de dragones y por negligencia te entregas a ellos y los mimas y los alimentas dia y noche. Pero si te percatas de tu estado interior ¿por qué permaneces tan indiferente? Ei Derviche que Tenía hermosa Barba En tiempos de Moisés vivía un derviche que se pasaba los días y las noches en plegarias de adoración,y sin embargo no experimentaba sentimientos espirituales.Tenía una larga y hermosa barba y a menudo interrumpía sus oraciones para peinarla. Un día, viendo a Moisés, se acercó a él y le dijo: "Oh Pashá del Monte Sinaí, pídele a Dios,te lo ruego, que me diga por qué no encuentro satisfacción espiritual ni llego al éxtasis". La vez siguiente que fue Moisés al Monte Sinai habló con Dios acerca del derviche, y Dios dijo, con tono de desagrado: "Si bien este derviche anhela unirse a mí, no obstante está constantemente pensando en su larga barba".Cuando Moisés bajó del Sinaí le relató al sufí lo que Dios le había respondido. El sufí comenzó entonces a arrancarse la barba, llorando amargamente.Luego se acercó el Angel Gabriel a Moisés y le dijo: “Todavía está el sufi pensando todo el tiempo en su barba. No piensa en otra cosa mientras ora, y a pesar de que ahora, en lugar de peinarla se la arranca, está aún más apegado a ella que antes". Oh tú que piensas que has dejado de estar ocupado con tu barba, estás sumergido en un océano de aficción Cuando puedas mirar tu barba con desapego tendrás dere barba tendrás dificultad para encontrar la salida. Otra Anécdota de un Hombre con una Larga Barba Un borracho, que tenía una bella y larga barba, cayó accidentalmente en un pozo de aguas profundas. Uno que pasaba, al verlo, le gritó: “Sácate la cartera de la cabeza". El hombre que se estaba ahogando respondió: “Esto no es una cartera, es mi barba, y no es esto lo que me traba". El otro hombre dijo: "De todos modos, suéltala, o te ahogarás”. Oh tú que eres como una cabra que no tiene vergüenza de su barba, mientras tengas un cuerpo de deseos y un demonio inquietándote, participarás del orgullo del faraón. Da la espalda al mundo como hizo Moisés y serás capaz de tomar a este faraón por la barba con firmeza. El que transita el camino buscándose a sí mismo debe considerar su cora-zón como shis kebab*. El hombre que tiene la regadera no espera que caiga agua de lluvia. 35 Duda del Decimonoveno Pájaro Otro pájaro dijo a la Abubilla: "Tú que eres alabada en todo el mundo, dime qué debo hacer para encontrar felicidad en este viaje. Si me lo dices, mi mente se sentirá más calma, y estaré deseoso de dejarme guiar en esta aventura. En realidad, es necesario recibir instrucciones a fin de perder el recelo. Dado que sólo deseo aceptar el mandato del mundo invisible, rechazo, con buenas razones, la falsa orientación de las criaturas terrenas". *Shis kebab: carne asada. "Mientras tengas vida", replicó la Abbilla,"vive en la dicha de recordar a Dios,y permanece alerta contra la charla indiscreta. si puedes hacer esto, las penas e inquietudes de tsm desaparecerán.Vive en Dios con completa satisfacción. Vuélvete como la bóveda del cielo por amor a él. Si conoces algo mejor, dilo, oh pobre pájaro, para que puedas ser feliz al menos por un instante". Anécdota de un Amigo de Dios Un amigo de Dios que estaba muriendo comenzó a llorar y los que lo rodeaban le preguntaron por qué lo hacía. "Lloro como las nubes de primavera", dijo, “porque ha llegado el tiempo de morir y estoy turbado. Si mi corazón ya está con Dios, ¿cómo puedo morir?". Uno de los presentes dijo: "Si tu corazón está con Dios tu muerte será una buena muerte". El sufí replicó: “¿Cómo puede la muerte llegar al que está unido a Dios? Dado que estoy unido a él, mi muerte parece imposible”. El que se siente dichoso de existir como partícula del gran todo pierde su egoísmo y se libera. Por eso te digo: vive en completa satisfacción con tu amigo,como la rosa en el cáliz. Anécdota Alegórica Un hombre perfeccionado dijo:“Durante setenta años he trabajado sobre mí mismo y estoy ahora en éxtasis, satisfecho y dichoso, y en este estado participo de la Majestad Soberana y estoy unido a la Divinidad. En cuanto a ti, mientras estés ocupado buscando los errores de los demás, ¿cómo serás capaz de saborear la dicha del mundo desconocido? Si buscas faltas mirando hacia afuera, ¿cómo podrás ver lo que sucede en el mundo interior? Serías capaz de partir un cabello por errores de los otros, pero a tus propias faltas las miras con ceguera.Reconoce tus faltas,luego,a pesar de tus pecados, Dios tendrá misericordia de ti". Los Dos Borrachos Un hombre que bebía mucho llegó pronto al punto de perder los sentidos y todo respeto por sí mismo. Una vez,un amigo lo encontró en ese estado deplorable tirado en el camino. De modo que tomó un gran saco y puso allí al borracho, y lo cargó sobre sus hombros para llevarlo a casa. En el camino, apareció otro borracho, arrastrándose apoyado en un compañero. En ese momento, el borracho que iba en el saco con la cabeza colgando, se despertó y viendo al otro en ese estado lamentable dijo en tono de reproche: “Ah, desgraciado, en el futuro, toma dos copas de vino menos, entonces serás capaz de andar como yo, libre y sin necesidad de apoyarte". Nuestro propio estado no difiere de este. Vemos las fallas de los otros porque no amamos. Si tuviéramos la mínima comprensión del amor verdadero, las faltas de las personas que nos rodean nos parecerían virtudes. El Amante y su Amada Un joven, audaz e impetuoso como un león, estuvo durante cinco años enamorado de una mujer. Uno de los ojos de la bella joven tenía una pequeña mancha, pero el hombre, al contemplar la belleza de su amada, no la veía. Cómo puede un hombre tan enamorado notar una leve imperfección? Sin embargo, con el tiempo, su amor comenzó a menguar y él recuperó el dominio de si mismo. Fue entonces cuando notó la mancha y preguntó a su amada cómo había surgido. Ella dijo: “apareció cuando tu amor comenzó a enfriarse. En el momento en que tu amor por mi se volvió imperfecto, mi ojo se manchó a causa de tí” ¡Oh tú de corazón ciego! ¿Por cuánto tiempo continuarás buscando errores en los demás? Trata de observar lo que ocultas tan cuidadosamente. cuando veas tus propias faltas en todo su horror no te fastidiaran tantos la de los otros. Ei Policía y el Borracho Un policía golpeó un día a un borracho y éste le dijo: "Por qué actuar con tanta pasión? Estás haciendo algo ilegal. No le estoy haciendo daño a nadie pero tú te enredas con la ebriedad y la arrojas a la calle. Tú estás más ebrio que yo, pero nadie lo nota. Déjame en paz, y pide justicia para ti mismo”. 36 Pregunta del Vigésimo Pájaro Otro pájaro dijo a la Abubilla:“Oh, lider del Camino, ċqué debo preguntar al Simurg cuando llegue al lugar donde mora? Por él se iluminará el mundo y yo no sabré qué preguntarle. Si supiera qué es lo mejor para pedirle al Simurg en su trono, mi mente estaría más calma”. La Abubilla respondió: “;Oh, idiota! ¿No sabes que preguntar? Pregunta por lo que más deseas. Un hombre debería saber qué desea pedir, aunque el Simurg mismo es mucho mejor que cualquier cosa que se pueda desear. ¿Aprenderás de él lo que deseas preguntar?”. Plegaria del Shiek Rubdar Cuando Bu Ai Rubdar estaba a punto de morir pronunció estas palabras: "Tengo el alma en los labios en espera del bienestar eterno. Las puertas del cielo están abiertas y habrá trono para mi en el paraíso. Los santos que moran en el palacio de la inmortalidad cantan con voz de ruiseñor: 'Entra, oh amante verdadero. Avanza con gratitud y alegría, porque nadie en la tierra ha entrado jamás a este palacio'. Oh Dios, si obtuviera tu gracia y tu favor, mi alma no se soltaría de la mano de la certeza. No inclinaré mi cabeza como en el mundo de los hombres, porque mi alma ha obtenido forma gracias a tm amor, y por lo tanto no conozco "Si me reducen a cenizas, no encontrarán en mí otro ser que Tú. A Ti Te conozco, pero no conozco religión o infidelidad. Yo soy Tú, Tú eres yo. A Ti te deseo, mi alma está en Ti. Sólo Tú me eres necesario. Tú eres para mi este mundo y el mundo por venir. Satisface, aunque sólo sea en lo minimo, la necesidad de mi corazón herido. Muestra, aunque sea pequeño, tu amor por mí, porque gracias a Ti respiro." Palabras de Dios a David Dios desde las alturas dijo a David: “Diles a mis siervos: 'jOh, manojos de tierra! Si no tuviera yo el cielo por recompensa y el infierno por castigo, ¿pensaron alguna vez en mi? Si no existieran luz y fuego, ¿pensarían alguna vez en mi? Dado que soy digno de supremo respeto deben adorar-me sin esperanza ni temor; y sin embargo, si no encontraran sostén en la esperanza o el temor, ¿pensarian alguna vez en mi? Como soy tu Señor, deberías adorarme desde lo profundo de tu corazón. Rechaza todo lo que no es YO, quémalo hasta que sólo queden cenizas y arroja las cenizas al viento de la excelencia". Mahmud y Ayaz Un día Mahmud llamó a su favorito, le dió su corona y lo sentó en su trono, y le dijo: “Ayaz, te doy mi reino y mi ejercito. reina porque este país te pertenece, y ahora deseo que tomes mi lugar y arrojes tu aro de esclvitud al Pez y la Luna”. Cuando los cortesanos se enteraron losojos se les pusieron negros de celos y lijeron: "Nnca jamás en d mando un rey ha honrado tanto a un esclavo". Pero Ayaz lloraba, y le preguntaron: "¿Has perdido el sentido? Ya ma eres esclavo y perteneces ahora a la realeza, ¿por que lloras? |Deberías estar feliz!", Ayaz respondió:"No veis las cosas como son, no comprendéis que el sultán de este gran país me ha exiliado de su presencia. Desea que yo gobierne su reino, pero yo no quiero separarme de é. Quiero obedecerle pero no puedo abandonarlo. ¿Qué tengo yo que ver con gobierno y realeza? Mi felicidad consiste en ver su rostro". Aprende de Ayaz cómo servir a Dios, tú que haraga neas día y noche, ocupado con placeres baratos y vulgares. Ayaz abdica la cúspide del poder, y tú no te remueves de donde estás, ni tienes el menor deseo de cambiar. ¿A quién podrás al final del camino hablarle de tus penas? Mientras dependas del paraíso y del infierno, ¿cómo seras capaz de comprender el secreto que deseo revelarte?Pero cuando no dependas de esos dos, el alba del misterio se abrirá paso en la noche.Por otra parte, el jardin del paraiso no es par el indiferente;y solo para los hombres de corazones es el cielo de los bienaventurados. Plegaria de Rabiah "Oh Dios, Tú que conoces el secreto de todas las cosas, haz que se hagan realidad los deseos mundanos de mis enemigos, y garantiza a mis amigos la eternidad de la vida futura. En cuanto a mí, soy libre de ambos. Aun cuando poseyera el mundo actual o el mundo del futuro, en poco los estimaría en comparación con estar cerca de Ti. Sólo a Ti te necesito. Si volviera mi rostro hacia los dos mundos, o deseara alguna cosa que no fueras Tú, no sería más que un infiel.” Palabras de Dios a David El Creador del Mundo habló a David desde detrás del velo del misterio: "Todo lo que existe, lo bueno y lo malo, lo visible y lo invisible, lo móvil y lo estático, no es más que sustituto, no se trata de mí mismo, para quien no encontraras igual ni reemplazo. Dado que nada puede tomar mi lugar, no te separes de mí. Yo te soy necesario, dependes de mi.Por lo tanto no desees lo que se te ofrece que no sea Yo". El Sultán lahmud y el Ídolo de Somnat Mahmud y su ejército descubrieron en Somnat un ídolo llamado Lat, que Mahmud decidió destruir.Los hin-dúes, para salvarlo, ofrecieron diez veces su peso en oro, pero Mahmud rechazó la oferta y ordenó que se hiciera un gran fuego para quemar el ídolo. Uno de sus cortesanos se permitió decir: "¿No seria mejor, Señor, aceptar el oro que quemar el idolo?". "Entonces", dijo Mahmud, “en el día del juicio supremo, el Creador diría ante todo el universo reunido: jOid lo que Azaz y Mahmud hicieron; el primero fabricó idolos, el segundo los vendió!'”. Dicen que cuando el idolo de los adoradores del fuego estaba siendo quemado, un centenar de maunds* de piedras preciosas cayó del cielo, y así Mahmud recibió un tesoro. Y dijo: “Lat obtuvo lo que merecía y Dios me ha recompensado”. Otra Anécdota de Mahmud Cuando esta antorcha de reyes dejó Gazna para iniciar la guerra contra los hindúes, al vislumbrar el poderoso ejército enemigo se sintió descorazonado e hizo una prome-sa al Rey de la Justicia; si salía victorioso entregaría a los derviches todos los botines que cayeran en sus manos. Obtuvo la victoria, y su ejército recolectó una enorme cantidad de tesoros. Cuando los de negro rostro se retira-ron abandonando el botín, Mahmud dijo: “Enviad esto a los derviches, porque así lo he prometido a Dios, y debo respe-tar mi voto". Entonces sus soldados protestaron diciendo: “¿Por qué dar tanto oro y plata a un manojo de hombres que no pelean? :Por qué no darlo al ejército que ha soportado el peso de la batalla, o, al menos, ponerlo en el tesoro real?”. Ante las protestas de su ejército el sultán vaciló. Mientras tanto pasaba por el camino Bu Hassein, un idiota de Dios, que aunque carecía de instrucción, era inteligente. Al verlo a la distancia Mahmud dijo: “Llama al idiota; dile que venga y me diga qué debo hacer, haré lo que él indique; ya que no teme al sultán ni al ejército, me dará una opinión imparcial”. Cuando el sultán presentó el caso a Bu Hassein, éste dijo: “Señor, se trata de dos óbolos, pero si deseas actuar correctamente para con Dios, no pienses más Oh Sultán querido, en los dos óbolos; y si obtienes por su gracias otra victoria avergüénzate de retener dos bolos,Fueron quien te dio la victoria, ¿acaso puede pertenecerte a tí lo que pertenece a Dios?". * Maund: medida de peso en la India equivalente a 82,28 libras. Mahmud dio entonces el tesoro a los derviches,y se transformó en un gran monarca. Pregunta del Vigésimo Primer Pajaro Otro pájaro se acercó a la Abubilla preguntando: "Di-nos, oh tú que deseas guiarnos hacia la Majestad desconocida, èqué es lo más valorado en esa corte? Al presentarse ante reyes es necesario llevar preciosos regalos; sólo los hombres viles se acercarían con manos vacías”. La Abubilla respondió: “Si sigues mis consejos llevarás al país del Simurg lo que no se encuentra allí. Acaso es correcto llevar lo que ya hay? En ese lugar encontramos verdadero conocimiento; encontramos allí secretos y obediencia a los seres superiores. Lleva entonces el ardor del amor y el anhelo del espíritu; no es posible ofrecer otra cosa. Si un simple suspiro de amor llega a ese lugar llevará consigo el perfume del corazón. Ese sitio está consagrado a la esencia del alma. Cuando un hombre exhala un suspiro de verdadera contrición entra de inmediato en posesión de su salvación”. José y Zulaica En los tiempos en que Zulaica gozaba de alto rango y dignidad,hizo que José fuera llevado a prisión, y pidió a uno de sus esclavos que lo castigara con cincuenta latigazos. Pesale fuerte", le dijo, "para que yo pueda oir sus gritos". Pero el buen hombre no quería lastimar a José, de modo que tomó la piel de un animal y dijo a José: “Grita a cada golpe que yo dé sobre esta piel". Cuando Zulaica escuchó los gritos fue a la celda y dijo:"Eres demasiado bueno con él,golpea más fuerte". Entonces el esclavo dijo a José:"Oh tu,radiante como el sol! Si Zulaica te examina y no ve ninguna marca me castigará severamente. Descubre tus hombros y endurece tu corazón para poder soportar los golpes. Si gritas por los golpes, no prestará mucha atención a las marcas". José se descubrió los hombros, el látigo cayó y sus gritos subieron al cielo. Cuando Zulaica lo escuchó se acercó y dijo: “Es suficiente, esos gritos produjeron su efecto. Antes, sus gemidos eran como nada; ahora, son muy reales". Ei Sheik Ben Plui Tuci Ben Alí Tuci, uno de los más grandes sabios de su tiempo, transitó el valle de la conciencia y la atención. No conozco a nadie que poseyera tanta gracia y que llegara a tanta perfección. Dijo una vez: “En el otro mundo, el infeliz condenado verá claramente a los moradores del cielo, y éstos podrán hablarle de la dicha de ese lugar y del beneficio de la unión. El afortunado dirá: '¡Los goces vulgares no existen aquí porque el sol de divina belleza se nos ha hecho presente y su resplandor es tal que a su lado los ocho paraísos parecen oscuros. Ante el brillo de esta belleza no queda de la eternidad ni rastro ni nombre!'. Entonces los que están en las antípodas dirán: 'Sentimos que lo que dices es verdad; en cuanto a nosotros, en este horrible lugar, es evidente que hemos despertado la ira de Dios y por eso hemos sido depositados lejos de su rostro. El fuego del remordimiento en nuestros corazones, nos recuerda el fuego del otro mundo". Trata de tolerar aflicción, penas y heridas,y muestra de este modo tu fervor. Si eres herido, acéptalo, y no te entregues a la autocompasión. Pedido :Tahoma Un hombre pidió humildemente permiso para decir una oración sobre la alfombra del Profeta, quien se negó diciendo:“La tierra y la arena están en llamas. Pon tu rostro sobre la arena en llamas y sobre la tierra del camino, ya que todos los que están heridos de amor deben llevar la señal en su rostro, y la cicatriz tiene que estar a la vista. Deja que se vea la cicatriz del corazón, porque por sus heridas se conoce a los hombres que están en el camino del amor". V LA DESCRIPCIÓN DE LOS VALLES 38 Pregunta del Vigésimo Segundo Pajaro y Descripción Del Primer Dalle o Valle de la Búsqueda Este pájaro dijo a la Abubilla:“Oh,tú que conoces el camino del que nos hablas y a través del cual puedes conducirnos, lo veo como un camino oscuro, y en la penumbra parece ser muy difícil y de muchas parasangas* de longitud”. La Abubilla replicó:“Tendremos que cruzar siete valles y sólo después de haberlos cruzado descubriremos al Simurg. Nadie que haya hecho este viaje ha podido regresar al mundo, y es imposible decir cuántos parasangas se extienden ante nosotros. Ten paciencia, oh temeroso, ya que todos los que se aventuraron en este camino estaban en tu mismo estado. "El primer valle es el Valle de la Búsqueda; el segun-do, el Valle del Amor; el tercero es el Valle de la Compren-sión; el cuarto, el Valle de la Independencia y el Desapego; el quinto el de la Unidad; el sexto es el Valle del Asombro yel séptimo el Valle de la Pobreza y la Nadidad. *Parasangas: antigua medida persa. "Cuando entres al primer valle, el Valle de la Búsqueda. un centenar de dificultades te asaltaran,experimentarás un centenar pruebas.Ali,el papagayo del cielo no es más que una mosca. Tendrás que pasar allí varios años, tendrás que realizar grandes esfuerzos y cambiar tu estado. Deberás abandonar todo lo que te ha parecido valioso y estimar en nada todo lo que posees. Cuando estés seguro de no poseer nada, todavía te faltará desapegarte de todo lo que existe.Luego tu corazón estará a salvo de la perdición y verás la luz pura de la Majestad Divina y entonces la fuerza de tu deseo se verá multiplicada al infinito. El que entra en este valle quedará tan sobrecogido de anhelo que se entregará por completo a la búsqueda que simboliza. Pedirá a su escanciador una trago de vino, y cuando lo haya bebido, ninguna otra cosa, que no sea ir tras su verdadera meta, tendrá importancia. Entonces ya no temerá a los dragones guardianes de la puerta que tratan de devorarlo. Cuando la puerta se abra y entre, religión, fe y escepticismo, dejarán de existir.” Extracto del Granj-Rama, el Libro de los Tesoros de Osman Amru Cuando Dios exhaló el puro aliento de vida en el cuerpo de Adán, que era sólo tierra y agua, deseó que la hueste de ángeles no se enterara, que ni siquiera lo sospechara. De modo que les dijo: “¡Postraos ante Adán, oh Espíritus Celestiales!”. Todos ellos se arrodillaron e inclinaron sus cabezas, y Dios introdujo en Adán el aliento de vida sin que ninguno de los ángeles se diera cuenta del secreto que Dios deseaba ocultar. Es decir, ninguno a excepción de Iblis, que se dijo: “Nadie me verá doblar las rodillas.Aun si mi cabeza quedara separada de mi cuerpo, eso no seria tan malo como hacer lo que Dios quiere.Bien que me doy cuenta que no es sólo cuestión de que Adán esté en la tierra, de modo que no tengo la intención de agachar mi cabeza y no ver el secreto", Por lo que en vez de inclinarse, Iblis miró,y descubrió el secreto, Luego dijo Dioe:"Oh tú que yaclas de mentira, has robado mi secreto y por eso te daré muerte, porque no deseo que ningún otro ser conozca ese secreto, Cuando un rey de la tierra oculta un tesoro mata a Ia persona que lo ve eseonderlo, Tú eres esa persona". "Señor", dijo Iblis, "dame una tregua, porque soy tu siervo: dime cómo puedo expiar mi pecado", "Porque lo pides",dijo Dios,"te daré una tregua, sin embargo, desde este momento pondré en tu cuello el collar de la maldición y le impongo el nombre de mentiroso y difamador, para que iodos se guarden de ti hasta el día de la resurrección". Iblis dijo: “¿Por qué habría de causarme temor tu maldición, dado que este tesoro puro me ha sido manifestado? Si de ti viene la maldición, también viene la misericordia. Donde hay veneno hay también antídoto. Tú maldices a algunas criaturas y bendices a otras. Ahora que he transgredido soy objeto de tu maldición". Si no puedes descubrir y comprender el secreto del que hablo, no es porque no exista, sino porque no buscas correctamente. Si estableces distinciones en lo que viene de Dios no eres hombre del sendero espiritual. Site consideras honrado por el diamante y humillado por la piedra, Dios no está contigo. Mira bien, no deberías amar al diamante y detestar a la piedra, porque ambos vienen de Dios. Si en un momento de frenesí tu amada te arroja una piedra,es mejor que cualquier joya ofrecida por otra mujer. En el camino del perfeccionamiento el hombre no debe holgazanear ni un instante. Si por un momento deja de trabajar sobre sí mismo, retrocederá . Histerio de Majnum Un hombre que amaba a Dios vio a Majnun hurgando en el polvo del camino y dijo: "Majnun, ¿qué estás buscando?”", "Estoy buscando a Laila", contestó. El hombre volvió a preguntar:"¿Esperas acaso encontrarla allí?". “La busco en todas partes", dijo Majnun, "con la esperanza de hallarla en algún lugar". Yussul Namdani Yussuf Hamdani era un hombre honrado en su tiempo, un hombre de clara visión que conocía los secretos de los dos mundos. Dijo: "Todo lo visible, sea en las alturas o en las profundidades, cada átomo en verdad, es otro Jacob pidiendo noticias de José a quien ha perdido". En el camino espiritual, amor y esperanza son necesarios. Si no tienes de ambos será mejor que abandones la búsqueda. El hombre debe tratar de ser paciente. Pero tiene paciencia el que ama? Ten paciencia y busca con esperanza encontrar a alguien que te muestre el camino. Manténte en tu interior y no permitas que la vida exterior te cautive. Historia de Aba Said Mahnáh El sheik Mahnáh se hallaba en estado de confusión, su corazón hecho pedazos, cuando vio a la distancia a un viejo aldeano de digna apariencia, que caminaba pausadamente emanando de su cuerpo una luz brillante. El sheik lo saludó y le habló del triste estado en que se hallaba. El anciano escuchó y luego de pensar un poco dijo: “Oh, BU Siad, si fueran a llenar con mijo, no una sino un centenar de veces, el espacio de la Tierra aquí abajo hasta el trono de Dios, y si para ello un pájaro tomara un grano de mijo cada mil años y luego volara cien veces alrededor del mundo, en todo ese tiempo tu alma no tendría noticias de la corte celestial y Bu Said estaría aún distante". Una gran paciencia le es necesaria al que sufre; pero nadie es paciente. Si la búsqueda se desvía del interior al exterior,aun cuando se extienda por todo el universo, será en definitiva insatisfactoria. El que no está dedicado a la búsqueda de la vida interior no es más que un animal, ¿cómo decirlo?, ni siquiera existe, es una no-entidad, una forma sin alma. Mahmud y el Buscador de Oro Una noche Mahmud cabalgaba en soledad y vio a un hombre que cernía tierra buscando oro; su cabeza estaba inclinada y había apilado aquí y allá montoncitos de tierra cernida. El sultán lo miró y luego arrojó su brazalete entre los montoncitos y se alejó cabalgando velozmente. La noche siguiente Mahmud regresó al lugar y encontró al hombre cribando aún. “Lo que encontraste ayer", le dijo, “seria suficiente para pagar el tributo de todo el mundo, iy sin embargo continúas buscando!”. El Hombre respondió:“Encontré el brazalete que arrojaste,y habiendo encontrado semejante tesoro no podría dejar de buscar mientras tenga vida”. Bus ca como este hombre, hasta que la puerta se abra para ti. Tus ojos no estarán cerrados por siempre, busca la puerta Respuesta de Rabiáh Un hombre oraba: “Oh, Señor, abre la puerta para que pueda llegara Ti". Rabiáh, al oírlo, dijo:";Oh idiotal&Es que acaso la puerta está cerrada?”. 39 El Segundo Dalleo Dalle del /Imar La Abubilla continuó:"El siguiente valle es el Valle De Amor. Para entrar en él se debe ser una llama ardiente, ¿cómo decirlo?; el hombre debe ser fuego. El rostro del amante debe estar inflamado, ardiente e impetuoso como el fuego.El Amor verdadero no conoce segundos pensamientos; al amar, el bien y el mal dejan de existir. "En cuanto a ti, descuidado y desatento, este discurso no te tocará, tus dientes nunca lo mordisquean. Una persona leal pone en juego todo su dinero, apuesta incluso su cabeza, para unirse a su amigo. Otros se contentan prometiendo lo que harán por ti mañana. Si el que emprende este camino no se dedica íntegramente y por completo, nunca se liberará de la tristeza y melancolía que lo agobia. El halcón permanece agitado e inquieto hasta que logra alcanzar su presa. Si un pez es arrojado a la orilla por la ola, lucha esforzadamente para llegar nuevamente al agua. "En este valle, el amor está representado por el fuego, y la razón por el humo. Cuando llega el amor, la razón desaparece. La razón no sobrevive a la locura del amor; el amor no tiene nada que ver con la razón humana. Si tuvieras visión interior, los átomos del mundo visible se te manifestarían. Pero si miras las cosas con el ojo de la razón ordina-ria nunca comprenderás qué necesario es amar. Sólo el hombre que ha sido probado y es libre, puede sentir esto. El que emprende este viaje debería tener un millar de corazones para poder sacrificar uno a cada instante." Un Khoja Enamorado Un khoja vendió todo lo que poseía,muebles,esclavos, todo, para comprar cerveza a un joven vendedor. Estaba completamente enamorado del joven vendedor de cerveza. Estaba siempre hambriento, porque cuando le daban pan, lo vendía para comprar cerveza. Finalmente alguien le preguntó: “¿Qué es este amor que te pone en un estado tan lamentable?;Dime el secreto!”, “El Amor es tal", respondió, "que se venden los bienes de un centenar de mundos para comprar cerveza. Mientras no comprendas esto, jamás experimentarás el verdadero sentimiento del amor". Una Historia de IMajnun Los padres de Laila se negaban a que Majnun se acercara a sus tiendas. Pero Majnun, embriagado de amor, pidió a un pastor del desierto en el que la tribu de Laila tenia sus tiendas, que le prestara la piel de una oveja. Majnun se inclinó, se puso la piel de oveja y dijo al pastor: “En el nombre de Dios, ¡permíteme que camine entre tus ovejas y dirige tu rebaño hacia la tienda de Laila así quizás pueda sentir su dulce perfume, y estando escondido en esta piel tal vez se me ocurra qué hacer!". El pastor hizo lo que le pedia y cuando pasaron por la tienda, Majnun vio a Laila y se desvaneció.El pastor lo llevó entonces nuevamente al desierto y le mojó el rostro para enfriar su ardiente amor. Otro dia, Majnun estaba en el desierto con unos compañeros y uno de ellos le preguntó:":Cómo puede un hombre noble como tú andar desnudo por los caminos? Yo podría conseguir para ti unos vestidos si me dejas". Majnun dijo: “No hay vestido que pueda usar que sea digno de mi amiga, de modo que para mí no hay nada mejor que la desnudez o una piel de oveja. Ella es para mí como ispand para alejar el mal de ojo. Majnun usaría gustoso vestidos de seda y oro, pero prefiere esta piel de oveja gracias a la cual pudo ver a su Laila”. El amor debería arrebatarte la prudencia. El amor te cambia la actitud. Amar es renunciar a la vida ordinaria y abandonar tus placeres deslucidos. Un Pordiosero Enamorado de Iyaz Un pobre derviche se enamoró de Ayaz, y pronto se divulgó la noticia. Cabalgaba Ayaz por la calle, perfumado de almizcle, y ese extravagante espiritual, que estaba siempre a la espera, corría para verlo, y lo miraba fijamente como un jugador de polo fija su ojo en la bola. Finalmente le hablaron a Mahmud acerca del mendigo enamorado de Ayaz. Un día cabalgaba Ayaz junto al sultán y al ver al derviche Mahmud se detuvo y lo que vio fue que el alma de Ayaz era como un grano de cebada y el rostro del enamorado como un trozo de masa que lo encerraba. Vio que la espalda del mendigo se curvaba como un mazo y su cabeza giraba hacia todos lados al mismo tiempo como una bola de polo. Mahmud dijo: “Miserable mendigo, ¿deseas beber de la misma copa que el sultán?”. “Aunque me llames mendigo”, respondió el derviche, “no soy menos que tú en el drama del amor. El amor y la pobreza marchan juntos. Tú eres el soberano, y tu corazón es luminoso; pero para amar, es necesario un corazón ardiente como el mío. Tu amor es una vulgaridad. Yo sufro en cambio el dolor de la ausencia. Tú estás junto al amado; pero en el amor se debe aprender a soportar el dolor de la ausencia ``.El sultán dijo: “Oh tú que te has apartado de la existencia ordinaria, el amor ces para ti como un juego de polo?". “Lo es”, respondió el mendigo, "porque la bola está siempre en movimiento, igual que yo, y yo igual que ella.La bola y yo tenemos cabezas giratorias, y carecemos de pies y manos. Ambos conocemos el dolor que nos causa el mazo; pero la bola es más feliz que yo, porque el caballo la toca de vez en cuando con sus pies. La bola recibe los golpes del mazo en su cuerpo, pero yo los recibo en el corazón”. "Pobre derviche!", dijo el sultán, “te jactas de tu pobreza, ¿pero dónde está la evidencia?”. “Si sacrifico todo por amor”, respondió el derviche, "eso es símbolo de mi pobreza espiritual. Y si tú, oh Mahmud, no has experimentado nunca verdadero amor, sacrifica tu vida para ello; en caso contrario, no tienes derecho a hablar de amor”. Diciendo esto, el derviche murió, y el mundo oscureció para Mahmud. Un Arabe en Persia Un árabe fue una vez a Persia y quedó asombrado por las costumbres del país. Un día pasó por una residencia de Qalandars y vio a un grupo de hombres que no pronunciaban palabra. No tenían esposas, y no poseían ni un óbolo, pero eran puros de corazón e inmaculados. Cada uno sostenía un vaso de vino espeso que cuidadosamente había llenado antes de sentarse. El árabe sintió tanta compasión hacia esos hombres que se detuvo y en ese momento perdió su mente y su corazón. Ante esto los Qalandars le dijeron: “jEntra, oh hombre que ya eres nada!". De modo que entró, de buen o mal rado, así nomás! Le dieron una copa de vino y al instante perdió el sentido, Se emborrachó y su fuerza quedó reducida. a la nada, Uno de los Qalandars le quitó el oro y la plata y todo lo que tenga de valor, le dieron más vino y finalmente lo sacaron de la casa, Luego este árabe regresó a su país, pobre y desvalijado, su estado había cambiado y sus labios estaban resecos, Cuando llegó a su lugar de origen sus compañeros le preguntaron: "¿Qué sucedió? ¿Qué has hecho con tu dinero y tus bienes? (Te los robaron mientras dormian? ,Te fue tan mal en Persia?;Cuéntanos!;Quizás podamos ayudartel", "Estaba caminando por una calle", dijo, "y de repente me vi entre Qalandars, No sé nada más, excepto que me vi separado de mis posesiones y ahora no tengo nada". Le pidieron que describiera a los Qalandars. Pero él sólo respondió:"Simplemente me dijeron 'Entra'". El árabe permaneció por siempre en un estado de sorpresa y asombro, como un niño, turbado por la palabra'Entra'. También tú, da un paso. Si no quieres hacerlo, sigue entonces con tus fantasías. Pero si prefieres los secretos del amor de tu alma, sacrificarás todo.Perderás lo que consideras valioso, pero pronto oirás la palabra sacramental:'Entra'. Ei Amante que Perdió a su Amada Un hombre de ideales elevados se enamoró de una joven hermosa. Pero pasando un tiempo, la mujer a la que había entregado su corazón adelgazó y se puso pálida como un ramito de azafrán.Los días de brillo se apagaron y la muerte, que observaba a la distancia, se acercó. Cuando el amante se dio cuenta de lo que estaba sucediendo tomó una daga y dijo: "Mataré a mi amada en su lecho para que esta belleza, que es una figura maravillosa, no muera por muerte natural". Y le dijeron:"¡Estas locol ¿Por que la quieres matar si está a punto de morir?" El Amante dijo:"si muere en mis manos, me matarán, ya que está prohibido asesinar,Entonces, el día de la resurrección, estaremos juntos coo lo estamos ahora. Si muero a causa de mi pasión por ella, seremos uno, como la llama clara de una vela encendida"、 Los amantes que han puesto en juego su vida por amor, han entrado en el Sendero. En la vida del Espíritu estan unidos al objeto de su amor. Abraham y el ángel de la Muerte Cuando le llegó la hora de morir al amigo de Dios, se negaba a entregar su alma a Azrael. “Espera", dijo a Azrael. *¿Te ha pedido el Rey del Universo que me lleves?” Pero Dios, el Altísimo, dijo a Abraham: "Si fueras verdaderamente mi amigo, ¿no desearías venir a mí? Al que se niega a entregar su vida por su amigo le será arrancada por la espada". Entonces, uno de los presentes dijo: “Oh Abraham, Luz del Mundo, ¿por qué no entregas tu alma con beneplácito a Azrael? Los amantes del Camino Espiritual juegan su vida por su amor; ¿tanta importancia le das a la tuya?". Abraham dijo: “:Cómo puedo abandonar mi vida cuando Azrael se interpone en el camino? Me niego a su pedido porque sólo pienso en Dios. Cuando Nimrod me arrojó al fuego y se me presentó Gabriel, lo ignoré porque sólo pensaba en Dios. Si le di la espalda a Gabriel, ces de esperar que entregue mi alma a Azrael? Cuando oiga a Dios decir: "Dame tu vida!' entonces mi vida no valdrá más que un grano de cebada.?Cómo puedo entregar mi vida a menos que me sea pedida por Él Es todo lo que tengo que decir". El Tercer Valle o Valle de la Comprensión La Abubilla continuó:"Después del valle del que he hablado, viene otro: el Valle de la Comprensión, que no tiene principio ni fin. No hay camino que se le parezca y la distancia que hay que atravesar para cruzarlo no puede ser calculada. "La comprensión es permanente pero el conocimien-to es transitorio. El alma, como el cuerpo, está en estado de progreso o de declinación; y el Camino Espiritual se revela sólo en la medida en que el viajero ha superado sus faltas y debilidades, su sueño y su inercia; cada uno se acercará a su meta según sus esfuerzos. Si un mosquito volara con todas sus fuerzas, ¿podría igualar la velocidad del viento? Hay diferentes maneras de cruzar este Valle, y no todos los pájaros vuelan igual. Se llega a la comprensión de maneras diversas; algunos encontraron el Mihrab, otros el ídolo. Cuando el sol de la comprensión brilla sobre este sendero cada uno recibe luz de acuerdo a sus méritos, según la medida que le fue asignada en la comprensión de la verdad. Cuando el misterio de la esencia de los seres se nos revela con claridad, el horno de este mundo se transforma en un jardín de flores. El que busca será capaz de ver la almendra dentro de su dura cáscara. Ya no se ocupará de sí mismo, sino que elevará su mirada hacia el rostro de su amigo. En cada átomo verá al todo; tendrá un millar de secretos luminosos para reflexionar ";Pero cuántos han perdido el camino en esta búsqueda, por uno que ha llegado a comprender los misterios! Es necesario tener un deseo profundo y duradero para llegar a ser como es necesario ser a fin de cruzar este difícil valle. Una vez que has probado el sabor de los secretos, tendrás un deseo real de llegar a comprenderlos. Pero, sea lo que fuere lo que logres, no olvides nunca las palabras del Corán: 'eNo hay nada más?'. "Y en cuanto a ti, que estás dormido (y no puedo elogiarte por ello) ¿por qué no te pones de luto? Tú que no has visto la belleza de tu amigo, ilevántate y busca! ¿Cuánto tiempo permanecerás así, como un burro sin cabestro!?” Lágrimas de Piedra Hay en China un hombre que junta piedras, sin cesar. Derrama lágrimas en abundancia que al caer sobre la tierra se transforman en piedras, y él las vuelve a juntar. Si las nubes lloraran lágrimas como ésas, sería a causa de suspiros y dolor. Llega al verdadero conocimiento el que busca de verdad.Si es necesario ir a la China, ve allí a buscarlo. Pero la mente formal distorsiona el conocimiento, lo petrifica. ¿Hasta cuándo seguirá siendo mal comprendido el verdadero conocimiento? Este mundo, esta casa de lamentos, está en oscuridad; pero el verdadero conocimiento es una joya, te iluminará con su luz y te guiará en este ámbito sombrío. Si desdeñas esta joya serás presa del arrepentimiento; y si demoras en seguirla llorarás lágrimas amargas.Pero si duermes poco por las noches, y ayunas de día, puede que encuentres lo que buscas. Busca, entonces, y piérdete en la búsqueda. Ei Amante Dormido Un enamorado,inquieto, con la mente turbada, y agotado de tanto suspirar, se quedó dormido sobre el montículo de un sepulcro. Su amada se acercó y al verlo dormido le escribió una nota que dejó pinchada en su manto. Al despertar el enamorado leyó lo que ella había escrito y gimió angustiado, porque decía:“;Oh, hombre torpe! Ponte de pie y, si eres mercader, haz negocios y gana tu dinero; si eres asceta, vela de noche y ora a Dios, sé su esclavo. Pero si eres un amante, avergüénzate de ti mismo. ¿Qué tiene que ver el sueño con los ojos del enamorado? Durante el día el amante mide el viento; por la noche su corazón en llamas ilumina su rostro con el brillo de la luna. Ya que no eres así, deja de alardear de que me amas. Si un hombre se queda dormido en todas partes sin estar en su mortaja, se podría decir que es un enamorado, pero de sí mismo”. Ei Centinela Enamorado Un soldado estaba enamorado. Aunque no fuera su turno de guardia, no descansaba. Finalmente, un amigo le rogó que durmiera algunas horas. El soldado dijo: “Soy un centinela, y estoy enamorado. ¿Cómo podría descansar? Un soldado en su tarea no debe dormir, por lo tanto estar enamorado le es una ventaja. Cada noche el amor me pone a prueba, y de este modo puedo permanecer despierto vigilando el fuerte. Este amor es un amigo para el centinela, porque el estado de alerta se hace carne en él; el que llega a un estado tal estará siempre en guardia”. No duermas, hombre, si buscas conocerte a ti mismo. Vigila bien la fortaleza de tu corazón, porque por todas partes hay ladrones acechando. No permitas que bandidos roben la joya que posees. El verdadero conocimiento llega al que puede permanecer despierto. El que vigila con paciencia, se dará cuenta cuando Dios se acerca.Los amantes de verdad, los que están dispuestos a rendirse a la embriaguez del amor, se unen. El que posee amor espiritual tiene en su poder las llaves de los dos mundos. Si es mujer se torna hombre; y si es hombre se torna océano profundo. Mahmud y el Idiota de Dios Un dia, en el desierto, Mahmud vio a un faquir que tenia la cabeza gacha en profunda tristeza y la espalda arqueada por la pena. Cuando el sultán se le acercó el hombre dijo: "jAléjate!, o te daré cien golpes. Vete, te digo, no eres un monarca sino un hombre de pensamientos viles, un infiel a la gracia de Dios". Mahmud contestó severamente: “No me hables de ese modo, soy el sultán, dirígete a mí como corresponde". El faquir replicó: “Si supieras, oh, ignorante, que estás patas para arriba, el polvo del camino y todas las cenizas no te serían suficientes; te lamentarías sin cesar y prenderías fuego a tu cabeza”. 41 EI Cuarto Valle o Valle de la Independencia y el Desapego La Abubilla continuó:"Luego viene el valle en que no existe ya deseo de poseer ni ansia de descubrir. En este estado del alma, sopla un viento helado tan violento que en un instante devasta un espacio inmenso; los siete océanos no son más que un piletón; los siete planetas apenas una chispa; los siete cielos un cadáver; los siete infiernos, trozos de hielo. Entonces, icosa sorprendente, imposible de explicar!, una hormiga tiene el poder de cien elefantes, y un centenar de caravanas perecen mientras la graja se llena el buche. "Para que Adán pudiera recibir la luz celestial, huestes de ángeles de verde vestidura fueron consumidos por el dolor.Para que Noe pudiera llegar a ser carpintero de Dios y construyera el arca, miles de criaturas perecieron en el agua. Miriadas de mosquitos cayeron sobre el ejército de Abrahah, para que ese rey pudiera ser derrocado. Para que Moises pudiera ver a Dios un millar de recien nacidos asesinados.Miles de personas asumieron la faja del cristianismo para que Cristo pudiera poseer el secreto de Dios.Miles de corazones y almas fueron saqueadas para que Mahoma pudiera ascender al cielo una noche.En este valle nada tiene valor, ni lo viejo ni lo nuevo; puedes actuar o no actuar. Si vieras arder un mundo entero hasta que los corazones quedaran convertidos en shis kebab, sólo sería un sueño comparado con la realidad. Si cayeran miles de almas en este océano sin límites, sería como una gota de rocio. Si el cielo y la tierra estallaran en pequeñas partículas no sería más que una hoja cayendo de un árbol; y si todo fuera aniquilado, desde el pez hasta la luna, ĉsería posible encontrar en el fondo de un pozo la pata de una hormiga coja? Aun si no quedaran rastros de hombres ni de Gins, será todavía necesario reflexionar sobre el secreto de una gota de agua a partir de la cual todo fue formado.” Ei Joven que Cayó en un Pozo En mi aldea había un joven bello como José que cayó en un pozo y la tierra se derrumbó sobre él. Cuando lo sacaron estaba en un estado lamentable. Ese bello joven se llamaba Muhamad, y era por todos apreciado. Su padre al verlo gimió y dijo: “Oh Muhamad, tú eres la luz de mis ojos, eres el alma de tu padre. jOh hijo mío háblame,di alguna palabra!". Eljoven dijo una palabra y entregó su alma.Y Eso es todo. Oh, tú, que eres un joven discípulo del sendero espiritual,capaz de observar y reflexionar,considera a Muhamad y a Adán: piensa en Adán y los átomos, el todo y las partículas del todo; habla de la tierra y de los cielos, de las montañas y del océano; habla de duendes y de dioses, de hombres y de ángeles, de cien mil almas puras; habla del penoso momento de entregar el alma; di que los individuos, cuerpo y alma, son nada. Si reduces los dos mundos a polvo y ciernes el polvo un centenar de veces, ¿qué será esto para ti? Será como un palacio cabeza abajo, y no encontrarás nada en la superficie del cernido. Este valle no es tan fácil de cruzar como, en tu simplicidad, te imaginas. Aun si la sangre de tu corazón llena el océano, sólo serás capaz de avanzar hasta la primera etapa. Aun si recorres todos los caminos del mundo no será más que dar el primer paso. Ningún viajero ha percibido el limite de este viaje ni ha encontrado un remedio para el amor. Si te detienes, te vuelves piedra, o quizás mueras; si continúas andando, siempre avanzando, oirás por toda la eternidad un grito: “Sigue aun más.” No puedes irte ni quedarte. No encontrarás ventaja en vivir, ni en morir. ¿Qué beneficio has obtenido de todo lo que te ha acontecido? :¿Qué has ganado con todas las dificultades que has sido capaz de soportar? Poco importa si te devanas el cerebro o no. Oh, tú que me estás escuchando, guarda silencio, y trabaja activamente. Renuncia a tus metas inútiles y ve tras lo esencial. Ocúpate lo menos posible de las cosas del mundo exterior y mucho de las del mundo interior; entonces la justa acción conquistará la inacción. En cuanto a los que no pueden dejar de actuar, sería mejor que no hicieran nada, ya que es necesario saber cuándo actuar y cuándo abstenerse. Pero ¿cómo conocer lo que no se puede conocer? Y sin embargo, es posible actuar como es debido, aun sin conocer. Olvida todo lo que has hecho hasta ahora, y trata de ser independiente y de bastarte a ti mismo, aunque por momentos llores y por momentos te regocijes, En este Cuarto Valle arde el rayo del poder, que es el descubrimiento de tus propios recursos,de tu propia competencia, y su calor consume un centenar de mundos,Cuando a centenar de mundos quedan reducidas a polvo ¿es extraño que tambien el tuyo desaparezca? Ei Astrólogo ¿Has visto alguna vez a un sabio cubrir de arena la tablilla en la que trazará figuras y dibujos? Allí ubica lan estrellas y los planetas, los cielos y la tierra, Hace a veces predicciones celestiales, a veces terrenales, También dibuja las constelaciones y los signos del zodiaco e indica el levante y el poniente de las estrellas, y de esto deduce buenos o malos augurios. Una vez que ha trazado un horóscopo, de buena o mala fortuna, toma la tablilla de una esquina y sacude la arena, y es como si todos esos signos y figuras nunca hubieran existido. La circunstancial superficie de este mundo es como la tablilla. Si no tienes fuerza para resistir el deseo de lo que se halla en la superficie de este mundo, aléjate y siéntate en un rincón. Hombres y mujeres llegan a este mundo sin tener idea de ambos mundos, interior y exterior. La Mosca y la Miel Una mosca que buscaba miel vio una colmena en un jardín. El deseo de miel la puso en tal estado que la hubieras confundido con un Azad, y gritó:"Daré un óbolo a quien me ayude a entrar a esa colmena". Alguien se apiadó de ella, y por un óbolo la ayudó a entrar. Pero no bien hubo entrado, sus patas se atascaron en la miel. La cosa empeoraba cuando revoloteaba sus alitas o trataba de brincar, de modo que gimió: "Esto es tiranía, esto es veneno. Estoy atrapada. Di un óbolo por entrar aquí pero gustosamente daria dos para salir". “En este valle", continuó la Abubilla, “nadie debe permanecer inactivo, y sólo se debe entrar en él después de haber alcanzado cierta etapa del desarrollo. Porque es tiempo de trabajar en lugar de vivir en la incertidumbre y la despreocupación. Sal de la apatía, renuncia a las ataduras exteriores e interiores, y cruza este valle de dificultades; porque si no renuncias a ellas, te volverás más incauto que los adoradores de dioses, y nunca llegarás a bastarte a ti mismo". Palabras de un Sheik a un Discípulo Un discípulo pidió a su sheik respuesta a una pregunta frívola. El sheik respondió: “Primero lávate la cara. ¿Puede percibirse el perfume del almizcle en medio de la putrefacción? No imparto conocimiento a los borrachos”. Un Derviche Enamorado de la Hija de un Cuidador de Perros Había una vez un sheik, por todos honrado, que usaba la kirka de la pobreza, pero se enamoró profundamente de la hija de un hombre que cuidaba perros, y con la esperanza de verla, vivía y dormía en la calle. La madre de la joven se dio cuenta y dijo al sheik: “Tú sabes, por supuesto, que somos cuidadores de perros, pero dado que has entregado tu corazón a nuestra hija puedes casarte con ella, y vivir con nosotros; pero tendrás que cuidar perros y aceptarás en todo nuestro modo de vida". Como el sheik no era un amante debilucho, se sacó el manto de sufí y se puso a trabajar. Un día un sufií amigo suyo, le dijo “Oh Hombre que no eres nada ¡durante treinta años has trabajo y reflexionado sobre cosas espirituales y ahora haces lo que nunca hicieron tus iguales”. el Sheick replicó “tú no ves las cosas en su verdadero sentido, de modo que deja ya de reprocharme si quieres comprender, date cuenta de que solo Dios conoce el secreto y sólo él lo puede revelar. Es mejor hacer el ridículo que, como tú, no haber penetrado nunca los secretos del Camino espiritual". 42 Ei Ouinto Valle o Valle de la Unidad La Abubilla continuó:"Luego tendrás que atravesar el Valle de la Unidad. En este valle todo se rompe en pedazos y luego se unifica. Todos los que aquí elevan sus cabezas la sacan de un mismo collar. Aunque te parezca ver muchas cosas, en realidad sólo hay una, todo hace uno, que es completo en su unidad. Nuevamente, lo que te parece una unidad no es diferente de lo que aparece como múltiple.Y como el Ser del que hablo está más allá de la unidad y la cantidad, deja de pensar en la eternidad en términos de antes y después. Dado que ambas eternidades se han desvanecido, deja de hablar de ellas. Cuando todo lo visible queda reducido a nada, ¿queda algo que contemplar?”. Respuesta de un Idiota de Dios Alguien preguntó a un sabio: “¿Qué es el mundo?;¿Con qué se lo puede comparar?”. Y el sabio respondió: “Este mundo, que está compuesto de crímenes y horrores, es como una palmera de cera pintada de muchos colores. Si estrujas el árbol, se transforma en un mazacote de cera; por ello, los colores y las formas que admiras no valen un óbolo. Si hay unidad no puede haber dualidad. ;'Yo' y 'Tú':esto carece de importancia! "Pero de qué sirven mis palabras, aunque surjan de la profundidad de mi alma, si tú no las ponderas. Si has caído en el océano de la vida exterior, como una perdiz cuyas alas y plumas no pueden soportarla, no dejes jamás de pensar en cómo puedes alcanzar la orilla.” EI Sheik Bu Aui Dakkáh Una anciana ofreció a Bu Alí una moneda de oro diciendo: “Acepta esto de mí”. Él respondió: “Sólo puedo aceptar lo que viene de Dios”. La anciana replicó:“:Dónde aprendiste a ver doble? No tienes el poder de atar y desatar. Si no fueras bizco, ¿verías acaso varias cosas a la vez?”. No existe Caabá ni Pagoda. Escucha de mis labios la verdadera doctrina: el Ser de existencia eterna. No hay otra cosa excepto El. Somos en Él, por Él y con El. O también podemos estar fuera de estos estados. Quienquiera que no esté inmerso en el Océano de la Unidad no merece llamarse hombre. Llegará el día en que el Sol descorrerá el velo que lo cubre. Si estás separado, bien y mal surgirán en ti, pero si te pierdes en el sol de divina esencia, ambos son trascendidos por amor. Mientras vagues por el camino, tus faltas y debilidades te mantendrán retenido. (No te has dado cuenta todavía de que en tu cuerpo hay vanidad, orgullo, presunción, amor propio y otras suciedades? Aunque en tu inte-rior, serpiente y escorpión parezcan muertos, sólo están dormidos; y si algo los tocara, despertarían con la fuerza de un centenar de dragones. En cada uno de nosotros hay un Infierno de serpientes. Si estás en guardia contra estas sucias criaturas, puedes estar tranquilo; si no, te picarán hasta en la tierra del sepulcro, hasta el día del juicio final. "Y ahora, oh Attar, deja tus discursos metafóricos,y regresa a la descripción del misterioso Valle de la Unidad. La Abubilla continuó: “Cuando el viajero espiritual entre a este valle desaparecerá y se perderá de vista porque se manifestará el Ser Único; el viajero guardará silencio porque este Ser hablará. ”La parte se tornará todo, o más bien, ya no habrá parte ni todo. En la Escuela de los Secretos verás miles de hombres de gran conocimiento intelectual, con sus labios plegados en silencio. ¿Qué es aquí el conocimiento intelectual? Se detiene en el umbral de la puerta como un niño ciego. El que descubre algo de este secreto da la espalda al reino de los dos mundos. El Ser del que hablo no existe de manera separada; todos somos este Ser, Él es la existencia y la no existencia.” Plegaria de Lokman de Sarkhasi Lokman de Sarkhasi dijo: “Oh Dios, soy viejo, y mi mente está turbada; me he apartado del Camino. Al esclavo cuando es viejo le dan un certificado de libertad. A tu servicio, oh mi Rey, mis negros cabellos se tornaron blan-cos como la nieve. Soy un esclavo, agotado; dame ya mi certificado de libertad”. Una voz del mundo interior respondio: Tú, que has sido especialmente admitido en el santuario, debes saber que el que desea liberarse de la esclavitud tiene que dejar de lado su razón, y cesar de preocuparse con inquietud y ansiedad”. Lokman dijo:“Oh mi Dios, sólo a Ti te deseo, y sé que no debo entregarme a la imaginación ni a la inquietud nia Ia ansiedad''.Cuando Lokman renunció a estas cosas,dijo: "Ahora no sé lo que soy. No soy un esclavo, pero ique soy? Mi esclavitud ha terminado,pero mi libertad no se ha producido:en mi corazón no hay pena ni alegria. Carezco de cualidades, y sin embargo no estoy privado de ellas.Soy un contemplativo, y sin embargo no poseo intención. No sé si Tú eres yo o yo soy Tú; he sido reducido a nada en Ti, la dualidad se ha perdido”. Un Amante Rescata a su Amada de las Aguas Una joven cayó a un río y su amante se zambulló para salvarla. Cuando la tenía en sus brazos, ella dijo: “Oh, ¿por qué arriesgas tu vida por mí?”. Y él respondió: “Para mí no existe otra cosa que tú. Cuando estamos juntos, verdaderamente yo soy tú y tú eres yo. Los dos somos uno. Nuestros dos cuerpos son uno, y eso es todo”. Donde desaparece la dualidad, se encuentra la unidad. Una Historia de Mahmud y Ayaz Se cuenta que una vez Faruk y Masud estaban presentes cuando Mahmud pasaba revista a su ejército, que consistía de innumerables elefantes, caballos y tropas en tal cantidad que la tierra parecía como cubierta de hormigas y langostas. Ayaz y Hassan acompañaban a Mahmud que estaba sentado sobre un trono elevado. Mientras el inmenso ejército desfilaba ante ellos,el gran monarca, dirigiéndose a Ayaz, dejó escapar estas palabras: “Hijo mío, todos estos elefantes, caballos y hombres míos son desde este momento tuyos, porque mi amor por ti es tal que te veo como un rey”. Aunque estas palabras eran pronunciadas por el mismo Mahmud,Ayaz estaba indiferente e inconmovible; no hizo comentario alguno ni agradeció al rey. Hassan, asombrado, le dijo: "Ayaz, un rey te ha honrado, a ti, un simple esclavo,y no muestras el menor vestigio de gratitud; no te postras ni te inclinas como señal de respeto". Ayaz pensó un poco y luego dijo: "Dos respuestas tengo para tus reproches: la primera es que si yo, que carezco de estabilidad y posición, deseara mostrar mi devoción al rey, debería arrojarme al polvo del camino frente él, como gesto de humillación, o bien cantarle una alabanza con voz quejumbrosa. Entre hacer demasiado o demasiado poco, mejor es no hacer nada. Este esclavo pertenece al rey, y su respeto por él está garantizado. En cuanto al honor con que este monarca afortunado me ha favorecido, si los dos mundos proclamaran loas, el testimonio no igualaría al mérito. Sino me comporto de manera ostentosa para afirmar mi fidelidad es porque siento que no soy digno de hacerlo". Hassan dijo: “Oh Ayaz, ahora veo que eres agradecido, y me doy cuenta de que eres digno de cientos de favores". Y agregó: "Dime ahora la segunda respuesta". Pero Ayaz dijo: “No puedo hablar con libertad frente a ti, sólo soy capaz de hacerlo si estoy a solas con el rey. Tú no eres Mahram del secreto". De modo que el rey pidió a Hassan que los dejara, y cuando ya no habla "nosotros" ni "yo", Ayaz dijo:“Cuando el rey se digna posar en mi sus ojos, aniquila mi existencia con el brillo de su rayo. Dado que a la luz de su sol glorioso yo dejo de existir, ¿cómo podría postrarme ante él? Ayaz es su sombra, perdido en el sol de su semblante". 43 Ei Sexto Valle:EI Valle del Asombro y la Estupefacción Después del Valle de la Unidad viene el Valle del Asombro y la Estupefacción, donde uno es presa de tristeza y dolor. Allí los suspiros son como espadas, y cada respiración un amargo suspiro; hay lamento y aflicción, y un ansia ardiente.Al mismo tiempo es de día y de noche. Allí hay fuego,sin embargo el hombre está deprimido y melancólico. ¿Cómo puede, en su turbación, continuar el camino? Pero el que ha llegado a la unidad olvida todo y se olvida de sí mismo. Si se le pregunta: “cEres o no eres?, tienes o no tienes sentimiento de existencia?, ¿estás en el medio o en el borde?,ceres mortal o inmortal?”, responderá con certeza: “No sé nada, no comprendo nada, no me doy cuenta de mí mismo. Estoy enamorado, pero no sé de quién. Mi corazón está al mismo tiempo vacío y pleno de amor”. La Princesa Enamorada de su Esclavo Un rey, cuyo imperio se extendía hasta el lejano horizonte, tenía una hija tan bella como la luna. Ante sus encantos hasta las hadas se avergonzaban. El hoyuelo de su mentón recordaba el pozo de José, y los bucles de su cabello herían un centenar de corazones. Sus cejas eran dos arcos y, cuando soltaba sus flechas, el espacio que la rodeaba le cantaba alabanzas. Sus ojos, lánguidos como narcisos, arrojaban las espinas de sus pestañas en el camino del sabio. Su rostro era como el sol cuando tomó la virginidad de la luna. El Angel Gabriel no podía apartar sus ojos de las perlas y rubíes de su boca. Una sonrisa de esos labios secaba el agua de vida del espectador, que sin embargo rogaba una limosna de esos mismos labios.Quien-quiera que mirara su barbilla caía de cabeza en un pozo de agua burbujeante. El rey tenía también un esclavo, un joven tan hermoso que por su belleza el sol palidecía y menguaba la luz de la luna. Cuando andaba por las calles o el mercado, todos se detenían a admirarlo. Un día por azar la princesa vio al esclavo, y al instante se le escapó el corazón de las manos. La razón la abandonó y el amor ocupó su lugar. Su alma, de extraordinaria dulzura, se llenó de amargura. Meditó en soledad,y meditando y reflexionando, comenzó a arder. Luego llamó a sus diez damas de honor. Las jóvenes eran excelentes intérpretes de flauta y chirimía; poseían voces como de ruiseñor, y su canto, que llegaba al alma, era digno de David. Las reunió y les habló de su estado, diciéndoles que estaba lista para sacrificar su nombre, su honor y su vida por el amor de ese joven; porque cuando uno está profundamente enamorado no sirve para otra cosa. “Pero”, dijo, “si le hablo de miamor sin duda hará algo imprudente, y si se divulga que he intimado con un esclavo tanto él como yo sufriremos.Por otro lado, si no me posee, moriré gimiendo tras la cortina del harem. He leído cientos de libros que hablan de la paciencia y sin embargo carezco de ella. Qué puedo hacer? Debo encontrar la forma de gozar el amor de este esbelto ciprés, para que el deseo de mi cuerpo concuerde con el anhelo de mi alma, y esto debe suceder sin que él lo sepa". Entonces sus compañeras de dulce voz le dijeron: “No te aflijas. Esta noche lo traeremos sin que nadie se entere; ni él se dará cuenta”. Pronto, una de las jóvenes se presentó en secreto ante el esclavo y le pidió, como jugando con él, que trajera dos copas de vino. En una copa puso una droga, y se aseguró de que él la bebiera. De inmediato cayó en sueño y así ella pudo llevar a cabo su plan mientras el joven de pecho de plata yacía sin sentido en ambos mundos. Al caer la noche las jóvenes llegaron donde el esclavo dormía, Io pusieron en una litera y lo llevaron junto a la princesa.Luego lo sentaron en un trono dorado y colocaron en su cabeza una corona de perlas. A Medianoche, todavía un poco drogado, abrió los ojos y vio un palacio bello como un paraíso, y vio que estaba rodeado de tronos dorados. El sitio estaba iluminado por diez grandes velas, y el perfume de madera dulce de aloe impregnaba el lugar. Las criadas comenzaron a cantar,con sonidos tan dulces que la razón le decía adiós al espíritu, y el alma al cuerpo. Luego el sol del vino giró alrededor de la luz de las velas. Turbado por el goce de todo lo que lo rodeaba y embriagado por la belleza de la princesa, el joven perdió el sentido. Ya no estaba verdaderamente en este mundo aunque tampoco estaba en el otro. Con el corazón pleno de amor, y el cuerpo poseído de deseo, entre todas esas delicias, cayó en un estado de éxtasis. Sus ojos estaban aferrados por la belleza de la joven y sus oídos por el sonido de las flautas de junco. Se embriagó con el perfume y con el vino, que se tornaba fuego líquido en su boca. La princesa lo besó, y él derramó lágrimas de alegría; y las de ella se mezclaron con las suyas. Por momentos ella le daba dulces besos en la boca, por momentos eran besos matizados con sal. La poseyó y así siguieron hasta que el alba surgió por el Este. Cuando el céfiro matutino se dejó ver, el joven esclavo entristeció; pero lo volvieron a dormir y lo llevaron nuevamente a su lugar. Cuando el de pecho como plata volvió en sí, sin saber por qué comenzó a llorar. Uno podría preguntarse,isi la cosa había acabado qué valor tiene llorar? Se desgarró las vestiduras, se arrancó los cabellos y arrojó tierra en su cabeza. Los compañeros le preguntaron por qué hacía esto, y qué había sucedido. Y dijo: “Es imposible describir lo que he visto, nadie puede ver algo así excepto en sueños, porque lo que me ha sucedido jamás le aconteció a nadie con anterioridad. Nunca se produjo un misterio tan asombroso”. Otro le dijo: “Despierta y cuéntanos al menos una del centenar de cosas que te han sucedido”. Y habló así el esclavo: “Estoy turbado porque lo que he visto me ha sucedido a mí en otro cuerpo. Sin oír nada he oído todo, sin ver nada, he visto todo”. Otro le preguntó: “;Has perdido la razón o has estado soñando?”. “Ah”, contestó, “no sé si estaba sobrio o en estado de ebriedad. Qué puede ser más extraño que algo que no está oculto ni es revelado? Lo que he visto jamás lo olvidaré, sin embargo no tengo idea de dónde estuve. Durante una noche completa gocé con una belleza que no tiene igual. Quién o qué es, no lo sé. Sólo queda el amor, y eso es todo.Nadie más que Dios conoce la verdad”. La Madre y su hija Tuerta Un hombre pasó junto a una madre que lloraba sobre la tumba de su hija muerta y dijo: “Esta mujer es superior a todos los hombres, porque sabe a quién ha perdido y de quién está separada. Feliz la mujer, o el hombre, que sabe a quién ha perdido, y por quién llora. En cuanto a mí, si bien estoy de luto y mis lágrimas fluyen como la lluvia, no sé por quién lloro.Esta mujer se ha ganado la bola de excelencia de entre los miles como yo,porque ella conoce el perfume del ser que ha perdido”. La llave Perdida Un sufí escuchó a un hombre que gritaba: “¿Ha encontrado alguien una llave? Mi puerta está cerrada y estoy de pie en el medio del camino. Si mi puerta sigue cerrada, ¿qué haré?”. El sufí le dijo:“¿De qué te preocupas? Si es tu puerta, permanece junto a ella, aunque esté cerrada. Si tienes paciencia y esperas lo suficiente, sin duda alguien la abrirá para ti. Tu situación es mejor que la mía porque yo carezco de llave y de puerta. Ojalá Dios me permitiera encontrar una puerta, abierta o cerrada”. El hombre vive en estado de imaginación, en sueño; nadie ve las cosas como son. Al que te diga:“¿Qué debo hacer?”, dile: “No hagas lo que siempre has hecho; no actúes como siempre has actuado”. El que entra al Valle del Asombro tiene dolor suficiente para un centenar de mundos. En cuanto a mí, estoy estupefacto y me he extraviado. Hacia dónde dirigiré mis pasos? ¡Quisiera Dios indicármelo! Pero, recuerda: los gemidos del hombre evocan Su misericordia. El Discípulo que Vio a su Maestro en un Sueño Un discípulo vio una noche en un sueño a su maestro muerto y le dijo: “Dime en qué estado te encuentras ahora. Desde que te fuiste estoy perdido y estupefacto,ardo de pena y dolor". El pir respondió:“Estoy en tal estado de asombro que sólo puedo morderme el dorso de la mano. Me encuentro en un pozo, pasmado; y he experimentado el golpe más duro que jamás experimenté en mi vida". 44 El Séptimo Valle o Valle de la Pobreza y de la Muerte La Abubilla continuó:“Finalmente viene el Valle de la Pobreza y de la Muerte, que es casi imposible de describir. "La esencia de este Valle es el olvido; quedas mudo sordo y turbado; los miles de sombras que te rodean se desvanecen en un solo rayo del sol celestial. "Cuando el océano de la inmensidad comienza a encresparse, el diseño de su superficie empieza a perder forma; y ese diseño no es otra cosa que el mundo presente y el mundo por venir. ”Quienquiera que declare no existir, adquiere gran mérito. La gota que se hace parte de este gran océano habitará en él por siempre y en paz. "Al principio, en ese mar calmo, el hombre experimenta sólo humillaciones y trastornos; pero cuando sale de ese estado lo comprende como creación, y muchos secretos se le revelan. ”Muchas criaturas no dieron nunca el primer paso y por ello no accedieron al segundose las puede considerar como minerales. ”Cuando se queman madera de aloe y zarzas, las cenizas son semejantes pero su calidad es diferente. ”Un objeto impuro que cae en el agua de rosa sigue siendo impuro por su calidad innata; pero un objeto puro que cae en el océano perderá su existencia específica y participará del océano y de su movimiento; deja de existir de manera separada pero retiene su belleza. "Existe y no existe. ¿Cómo puede ser? La mente no puede concebirlo.” Consejo de Rassir Udin El amado de Tus,océano de secretos espirituales,dijo a uno de sus discípulos: "Fúndete en el fuego del amor hasta que llegues a ser tan delgado como un cabello, entonces serás digno de ocupar tn lagar entre los mechor nes de tu amado. Si tus ojos están dirigidos hacia el Camino y posees clara visión, contempla y pondera uno a uno los cabellos. "El que abandona el mundo para seguir el Camino, encuentra la muerte; el que encuentra la muerte llega a la inmortalidad. Oh corazón mio, si has podido darte vuelta como un guante, cruza el puente Sirat, atraviesa el fuego ardiente; porque cuando el aceite de la lámpara está ardien do produce un humo tan negro como un viejo cuervo,pero cuando ha sido totalmente consumido por el fuego, su calidad ordinaria desaparece. "Si deseas llegar al sitio más elevado desembarázate primero de ti mismo; y emerge luego de la nada como otro Borak. Ponte la kirka de la nadidad y bebe de la copa de la aniquilación, cubre luego tu pecho con el cinto de la pequeñez y ponte en la cabeza el albornoz de la no existencia. Pon tu pie en el estribo del desapego y conduce velozmente tu corcel hacia el lugar donde no hay nada. Pero si aún queda en ti algún vestigio de egoísmo, los siete mares se te presentarán llenos de adversidad." Historia de las Mariposas Una noche,las mariposas nocturnas se reunieron. abrumadas por el deseo de unirse a la luz de la vela. Resolvieron enviar una emisaria que les trajera información acerca del objeto de su búsqueda amorosa. De modo que una de ellas emprendió viaje y llegó a un castillo dentro del cual había una vela encendida. Regresó, y según su entendimiento, informó lo que había visto. Pero la sabia mariposa que presidía la reunión expresó su opinión: no había comprendido nada acerca de la vela. De modo que partió otra mariposa. Esta tocó la llama con la punta de su alita,pero el calor la hizo retroceder. Por no ser su información más satisfactoria que la de la primera, enviaron a una tercera mariposa.Está, ebria de amor, se arrojó a la luz; con sus patas delanteras se aferró a la llama y gozosa se unió a ella. La luz la abrasó por completo y su cuerpo se tornó rojo como el fuego. La mariposa sabía, que observaba desde la distancia, vio que la llama y la mariposa se veian como una, y dijo: “Esta aprendió lo que deseaba saber; pero sólo ella comprende, no se puede decir nada más". Un Sufi Maltratado Un sufí caminaba sin prisa cuando fue golpeado por detrás. Se dio vuelta y dijo al pillo que lo había golpeado: “Este que has golpeado ha estado muerto más de treinta años". El pillo replicó: “¿Cómo es posible que hable un hombre muerto? Avergüénzate,no eres uno con Dios. Si estás separado de él, aun cuando se trate del espesor de un cabello, es como si entre él y tú hubiera un centenar de mundos”. Cuando estés reducido a cenizas, incluyendo tu equipaje, no te quedará el menor sentimiento de existencia; pero si todavía tienes, como Jesús, una simple aguja, cientos de ladrones te acecharán en el camino. Si bien Jesús se había desembarazado de su equipaje, la aguja fue suficiente para arañar su rostro. Cuando desaparece la existencia, imperio y riquezas, honor y dignidades dejan de tener significado. El Príncipe y el Mendigo Hubo una vez un rey que tenía un hijo tan encantador como José,lleno de gracia y belleza. Era amado por todos. y todo el que lo veía se sentía dispuesto a ser polvo baje sts pies. Si salia de noche, era como un nuevo sol surgiendo sobre el desierto. Sus ojos eran negro azabache,y cuando miraba prendia fuego a un mundo entero.Su sonrisa espar cia dulzura, y dondequiera que fuese florecian rosas sin esperar la primavera. Y había un derviche simple que habla perdido su corazón por ese joven príncipe. Permanecía día y noche sentado cerca del palacio, sin comer ni dormir. Su rostro fue empalideciendo mientras sus ojos derramaban lágri mas de plata, porque su corazón estaba partido en dos. Hubiera muerto, de no haber sido que de tanto en tanto podía vislumbrar al joven cuando visitaba el bazar. ¿Pero. cómo podía un príncipe consolar a un pobre derviche en ese estado? Sin embargo, el hombre simple, que era una sombra, la partícula de un átomo, deseaba recibir en su pecho al sol radiante. Un dia cuando el principe cabalgaba a la cabeza de su compañía, el derviche al verlo pegó un grito diciendo:"Mi razón me ha abandonado, mi corazón está consumido,ya no tengo paciencia ni fuerza para seguir sufriendo", y golpeó su cabeza contra el camino delante del príncipe. Uno de los cortesanos tuvo el impulso de matarlo y se presentó ante el rey. "Señor", le dijo, "un libertino se ha enamorado de lm hijo". El rey muy enojado dijo: "Haz que ese andaz sinver. gienza sea ahorcado. Que lo aten de pies y manos y pongan Su cabeza en la estaca".El cortesano partió de inmediato a cumplir lo encomendado.Pusieron un nudo corredizo en el cuello del mendigo y lo arrastraron hasta la estaca.Nadie entendía que pasaba y nadie intercedió por él. Cuando estuvo bajo el patíbulo, el derviche pegó un grito de dolor y dijo: “Por amor de Dios, dadme un respiro,para que al menos pueda decir una oración bajo la horca". Esto le fue permitido y el derviche se postró y oró: “Oh Dios,ya que el rey ha ordenado mi muerte, concede a este siervo inocente e ignorante, antes de morir, la buena fortuna de ver sólo una vez el rostro de este joven, para que de este modo pueda ofrecerme en sacrificio. Oh Dios, mi Rey, Tú que escuchas millares de plegarias, concédeme este último deseo". No bien terminó el derviche de pronunciar su plegaria, una flecha de su deseo dio en el blanco. El verdugo comprendió su secreto y se apiadó de él. Entonces se presentó ante el rey y le explicó el verdadero estado de las cosas.Ante esto el rey se tornó pensativo; luego su corazón se llenó de compasión y perdonó al derviche. Y dijo al príncipe:"Ve y saca al pobre hombre de bajo de la horca. Sé gentil con él y bebed juntos, porque él ha probado tu veneno. Llévalo a tu jardín y luego tráelo ante mí". El joven príncipe, otro José, fue de inmediato; el sol con rostro de fuego se enfrentó cara a cara con un átomo. Este océano de bellas perlas fue a buscar una gota de agua. ¡Entrégate al gozo, disponte a danzar, bate palmas! Pero el derviche había caído en desesperación; sus lágrimas habían transformado en lodo el polvo bajos sus pies y el aire se había densificado a causa de sus suspiros. Hasta el mismo príncipe no pudo menos que llorar. Cuando el derviche vio las lágrimas del joven, dijo: “Oh, príncipe. ahora puedes tomar mi vida". Y asi diciendo, entregó su alma y murió. Cuando supo que estaba unido a su amado, ya no quedó en él otro deseo. Oh tú, que a la vez que existes eres una no-entidad, cuya felicidad está mezclada con infelicidad, si nunca has estado perturbado, ¿cómo podrás apreciar la tranquilidad? Extiendes tu mano hacia el rayo te detiene un montoncito de nieve. Busca valientemente, quema tu razón y entrégate a locura, Si deseas usar esta alquimia, reflexiona un poco y, siguiendo mi ejemplo, renuncia a ti mismo;retírate hacia el interior de tu alma, desligate de tus pensamientos errantes, y así podrás llegar a la pobreza espiritual, En cuanto a mi, que no soy Yo ni no-Yo, me he extraviado de mi mismo, y no encuentro otro remedio que la desesperación. Pregunta de un Discípulo a au Sheik Un hombre empeñado en sobreponerse asu debilidad preguntó un día a Nuri: “¿Cómo podré llegar a unirme a Dios?".Nuri respondió: “Para ello debes cruzar siete océanos de luz y siete de fuego, y viajar a través de un extenso camino. Una vez que hayas cruzado estos -dos veces siete- océanos, un pez te atraerá hacia sí, un pez tal que cuando respira abarca en su seno al primero y al último. Ese pez maravilloso no tiene cabeza ni cola; se mantiene en el medio del océano en quietud y desapego; arrasa con los dos mundos, y atrae hacia sí a todas las criaturas sin excepción". 45 La Plenitud de los Pájaros Cuando los pájaros hubieron escuchado el discurso de a Abubilla,inclinaron su cabeza y el dolor les perforó el corazón.Ahora comprendían que difícil era para un puñado de polvo como ellos tensar ese arco. Se produjo una agitación. tal que muchos de ellos murieron allí mismo. Pero otros, a pesar de la angustia,decidieron emprender el largo camino. Durante anos viajaron por montañas y valles, y gran parte de su vida transcurrió en ese viaje. ¿Pero cómo relatar todo lo que les sucedió si no partimos con ellos para ver por nosotros mismos sus dificultades y las sinuosidades del largo camino? Sólo así sería posible entender lo que los pájaros sufrieron. Al final, sólo un pequeño número del gran conjunto llegó hasta el sublime lugar al que la Abubilla los había conducido. La mayoría de los miles de pájaros que iniciaron la búsqueda ha desaparecido. Muchos se han perdido en el océano, otros han perecido en las cumbres de las grandes montañas, torturados por la sed; otros perdieron las alas y los corazones consumidos por el fuego del sol; otros fueron devorados por tigres y panteras; otros murieron de fatiga en el desierto o en la selva, con los labios resecos y el cuerpo vencido por el calor; algunos se volvieron locos y se mataron entre ellos por un grano de cebada; otros, debilitados por el sufrimiento y el agotamiento, se dejaron caer en el camino incapaces de seguir andando; otros, estupefactos por las cosas que veían, se detuvieron en el lugar en que estaban, confundidos; y muchos, que comenzaron por curiosidad o placer, perecieron sin una mínima idea de lo que habían salido a buscar. De modo entonces que de entre todos los millares de pájaros, solo treinta llegaron al final del viaje. E incluso éstos estaban aturdidos, agotados y abatidos, sin plumas ni alas. Pero ahora se encontraban junto a la puerta de esa Majestad que no puede ser descrita, cuya esencia es incomprensible, el Ser que está más allá de la razón y el conocimiento humanos. Entonces centelleó el rayo de la culminación y un centenar de mundos se consumieron en un instante.Vieron un millar de soles, cada uno mas resplandeciente que el otro, y un millar de lunas y estrellas cuaI más bella:y al ver todo eso estaban turbados y agitados como un átomo de polvo danzando al viento, y gritaron: "Oh, Tú que eres más radiante que el sol. Tú, que has reducido el sol a la medida de un átomo, ¿cómo podremos presentarnos ante Ti?iAh!¿Por qué hemos soportado tan inútilmente todo el sufrimiento de este Camino? Hemos renunciado a nosotros mismos y a todas las cosas, y no podremos obtener ahora lo que hemos buscado con tanto esfuerzo; aqui, poco importa si existimos o no". Entonces los pájaros, que estaban tan descorazonados que parecían gallos medio muertos, se hundieron en la desesperación. Pasó mucho tiempo. Pero en el momento propicio, la puerta se abrió y salió un noble chambelán de la corte de la Majestad Suprema. Miró a los pájaros y vio que de miles, sólo estos treinta quedaban. Dijo: “Bien, veamos, oh Pájaros, čde dónde venís, y qué hacéis aquí? ¿Cuál es vuestro nombre? Oh vosotros, carentes de todo, dónde está vuestro hogar? ¿Cómo os llamabais en el mundo? i¿Qué se puede hacer con un indigente puñado de polvo como vosotros?!”. “Hemos venido”, dijeron los pájaros, “a reconocer al Simurg como nuestro Rey. Por nuestro deseo y amor a él hemos perdido la razón y la paz. Hace mucho tiempo, cuando iniciamos este viaje, éramos miles, y sólo treinta de nosotros hemos llegado a esta corte sublime.No podemos creer que el Rey nos desdeñe después de todo el sufrimiento que hemos padecido.;Ah,no! iNo puede menos que ofrecernos una mirada benevolente!”. El chambelán replicó: “Oh,vosotros, que tenéis la mente y el corazón perturbados, el Rey cuyo Ser es eterno no depende de si vosotros existís o no en el universo.Miles de mundos de criaturas no son más que una hormiga ante esta puerta . No traéis nada más que gemidos y lamentos ¡Regresad al lugar de donde partisteis , oh vil puñado de tierra ! " . Ante esto , los pájaros quedaron petrificados y aturdidos . No obstante , al volver un poco en sí , dijeron : " ¿ Nos rechazará este Rey tan ignominiosamente ? Y si realmente tiene para con nosotros una actitud tal , ¿ no la cambiaría por una más honorable ? Recordemos a Majnun que dijo : ' Si todas las personas que viven en la tierra desearan cantar mis alabanzas , no las aceptaría ; prefiero los insultos de Laila . Uno de sus insultos vale para mí más que cien cumplidos provenientes de otra mujer!". " Cuando el rayo de su gloria se manifiesta " , dijo el chambelán , " eleva la razón de todas las almas . ¿ Qué ventaja ofrece que el alma se consuma en un centenar de penas ? ¿ Cuál es el beneficio de la grandeza o la pequeñez en este momento ? " . Los pájaros , ardientes de amor , dijeron : " ¿ Cómo puede la mariposa salvarse del fuego si desea hacerse uno con la luz ? El amigo que buscamos nos alegrará con sólo permitirnos la unión con él . Si somos rechazados no queda nada por hacer . Somos como la mariposa que deseaba unirse a la luz de la vela : le rogaron que no se sacrificara tan tontamente por una meta imposible , pero ella agradeció el consejo y respondió que como había entregado su corazón a la vela para siempre , el resto carecía de importancia " . Entonces el chambelán , habiéndolos probado , abrió la puerta ; y tras descorrer uno tras otro un centenar de velos , el mundo tras el velo quedó revelado . Ahora se manifestaba la Luz de las Luces , y todos se sentaron en el masnad , sitio de la Majestad y la Gloria . Les fue entregado un escrito que debían leer ; y habiéndolo leído y ponderado , les fue posible comprender el estado en que se hallaban . Cuando estuvieron completamente en paz y desapegados de todas las cosas, se dieron cuenta de que el Simurg estaba allí con ellos, y comenzó para ellos una nueva vida en el Simurg. Todo lo que habían hecho previamente fue limpiado. El sol de la Majestad emitió sus rayos y cada uno de estos treinta pájaros (si-murg) del mundo exterior, en el reflejo del rostro de los otros, contempló el rostro del Simurg del mundo interior. Esto los turbó tanto que no sabían si eran ellos mismos todavía o si se habían transformado en el Simurg. Finalmente, en estado de contemplación, se dieron cuenta de que eran el Simurg y de que el Simurg era los treinta pájaros. Al mirar al Simurg veían que verdaderamente era el Simurg quien estaba allí, y al volver los ojos hacia sí mismos veían que ellos mismos eran el Simurg. Y percibiendo ambos al mismo tiempo, ellos y Él, se dieron cuenta de que ellos y el Simurg eran uno y el mismo ser. ¡Nadie en el mundo ha oído algo semejante! Luego comenzaron a meditar y después de un tiempo pidieron al Simurg, sin necesidad de hablar, que les revelara el secreto del misterio de la unidad y la pluralidad de los seres. El Simurg, también sin palabras, les dio esta respuesta: "El sol de mi majestad es un espejo. El que se mira en él ve allí su alma y su cuerpo, los ve íntegramente. Como sois treinta pájaros, si-murg, los que habéis venido, veis treinta pájaros en este espejo. Si fuerais cuarenta o cincuenta, sería lo mismo. Aunque ahora estáis completamente cambiados, os veis igual como erais antes. "¿Puede la visión de una hormiga llegar hasta las Pléyades? ¿Puede ese insecto levantar un yunque? ¿Habéis visto alguna vez un mosquito asir un elefante con sus dientes? Todo lo que habéis conocido, todo lo que habéis visto, todo lo que escuchasteis o dijisteis, todo eso ya no es aquello. Cruzasteis los valles del Camino Espiritual y realizasteis grandes esfuerzos, y todo eso fue hecho por mi acción; y fuisteis capaces de ver el valle de mi esencia y perfección. Vosotros, que sólo sois treinta pájaros, hicisteis bien en sentir admiración, impaciencia y asombro. Pero yo soy más que treinta pájaros. Soy la misma esencia del verdadero Simurg. Aniquilaos entonces con gloria y regocijo en mí, y en mí os encontraréis a vosotros mismos." Finalmente los pájaros se perdieron a sí mismos para siempre en el Simurg. La sombra se perdió en el sol, y eso es todo. Todo lo que has oído o visto o conocido no es ni el comienzo de lo que debes conocer, y dado que la habitación en ruinas de este mundo no es tu lugar, debes renunciar a ella. Busca el tronco del árbol, y que no te preocupe si las ramas existen o no. Inmortalidad Después de la Aniquilación Cuando hubieron pasado cien mil generaciones, los pájaros mortales se entregaron espontáneamente a la aniquilación total. Ningún hombre, ni joven ni viejo puede hablar propiamente de la muerte y la inmortalidad. Del mismo modo que estas cosas están lejos de nosotros, su descripción está más allá de toda explicación o definición. Si mi lector deseara una explicación alegórica de la inmortalidad que sigue a la aniquilación, sería necesario para mí escribir otro libro. Mientras estés identificado con las cosas Edel mundo no emprenderás el viaje, pero cuando el mundo ya no te ata, entras como en un sueño; sólo que conociendo el final te das cuenta del beneficio. Para que llegue a ser inteligente y activo, el embrión es alimentado con amor y se le dedican un centenar de cuidados. Más tarde se lo instruye y se le da el conocimiento necesario. Luego viene la muerte y arrasa con todo, su dignidad es derrocada. Eso que fue un ser se ha tornado polvo del camino. Fue aniquilado muchas veces, pero mientras tanto pudo aprender un centenar de secretos de los que antes no tenía conciencia, y al final recibe la inmortalidad, es honrado en lugar de deshonrado. ¿Sabes tú lo que posees? Entra en ti mismo y reflexiona sobre esto. Mientras no te des cuenta de tu nadidad y no renuncies a tu orgullo, vanidad y amor propio, nunca llegarás a la altura de la inmortalidad. En el Camino, eres derribado y deshonrado y eres elevado y honrado. Ahora mi historia llegó a su fin, no tengo nada más que decir. Epílogo j0h h Attar! Has diseminado por el mundo todos los secretos contenidos en la vasija de almizcle Los cuatro horizontes están impregnados con tus perfumes y has per turbado a todos los amantes. Tus versos son tu sello, y se los conoce como Mantiq Ut-Tair y Makamat Uttiyur Estos discursos de los pájaros son las etapas del sendero del asombro, o, se podría decir, son el Diwan de la Embriaguez. Entra en este diwan con amor. Cuando el Duldul de tu amor galopa y deseas algo, actúa conforme a tu deseo. Ya que el amor es el remedio de todas las enfermedades, y es el remedio del alma en los dos mundos. Oh, tu que te has aventurado en el sendero del desarrollo interior, no leas mi libro como un mere escrito poético, o como libro de magia, leelo con comprensión, y para ello debes estar hambriento, insatisfecho de ti mismo y de este mundo. El que no ha percibido el perfume de mi discurso no conoce el camino de los enamorados. Pero el que lo lea con atención, se pondrá activo y será digno de entrar en el Camino del que hablo. Los del mundo exterior quedarán como ahogados en relación a mi discurso, pero los hombres del mundo interior comprenderán sus secretos Mi libro es el ornamento de su época, es al mismo tiempo un regalo para los hombres distinguidos y un favor para los ordinarios. Si un hombre frío como el hielo lee este libro, se verá lanzado como fuego fuera del velo que para él oculta el misterio. Mis escritos tienen una peculiaridad asombrosa: el beneficio que se obtiene depende de la manera en que se los lea. Si reflexionas acerca de ellos a menudo, cada vez te darán mayores beneficios. El velo de esta esposa del harem será apartado para ti solo gradualmente en el lugar de honor y gracia. He diseminado las perlas del océano de la contemplación; por lo tanto he cumplido mi deber, y éste, mi libro, es la prueba. Pero si me elogio demasiado a mí mismo, tú podrías disgustarte; aunque aquel que es verdaderamente imparcial reconocerá mi mérito, porque la luz de mi luna llena no está oculta. Aunque no sea recordado por mí mismo, lo seré, hasta el día de la resurrección, por las perlas de poesía que he esparcido en las cabezas de los hombres. Las cúpulas del cielo se disolverán antes de que este poema perezca. Lector, si experimentas algún bienestar por haber leído este poema con atención, recuerda al escritor en tus plegarias. He salpicado aquí y allá rosas del jardín. Recuérdame bien, ¡oh amigo mío! Cada maestro revela sus ideas de su manera propia y especial, y luego desaparece. Igual que mis predecesores he manifestado el pájaro de mi alma a aquellos que están dormidos. Quizá el sueño que llena tu vida te ha privado de este discurso; pero, habiéndolo conocido, tu alma despertará por el secreto que revela. Y ahora, mi cerebro está ahumado como un nicho en el que arde una lámpara. Me he dicho: “Oh, tú, que hablas demasiado, en lugar de tanto hablar devánate el cerebro y busca los secretos. ¿Qué utilidad tienen todas estas narraciones para hombres corruptos por el egoísmo? ¿Qué puede surgir de corazones presos de vanidad y orgullo?". Si deseas que el océano de tu alma permanezca en un saludable estado de movimiento, debes morir a toda tu vida anterior, y luego, guardar silencio. Rota Sobre Attar Farid ud-Din Abu Hamid Muhammad ben Ibrahim, recibía generalmente el nombre de Attar, el perfumador. Si bien poco se conoce con certeza acerca de su vida, parece que nació en el año 1120 A.D. cerca de Nishapur, en el noroeste de Persia (lugar de nacimiento de Omar Khayam). La fecha de su muerte es incierta pero se cree que se produjo alrededor del 1230 A.D., de modo que se considera que vivió ciento diez años. La mayor parte de lo que se sabe acerca de él tiene carácter de leyenda, incluso su muerte en manos de soldados de Gengis Khan. A partir de elementos diseminados en sus escritos parecería que pasó trece años de su juventud en Meshed. Según Dawlatsháh, Attar estaba un día sentado con un amigo a la puerta de su negocio cuando pasó un derviche. El hombre, al oler los dulces perfumes del ambiente, suspiró y comenzó a llorar. Attar pensó que estaba tratando de inspirar compasión y le pidió que se fuera. El derviche dijo: "Sí, no hay nada que pueda evitar que me aleje de esta puerta y diga adiós a este mundo. Todo lo que tengo es mi kirka desgastada. Pero me aflijo por ti, Attar. ¿Cómo podrás alguna vez mirar de cara a la muerte y renunciar a todos los bienes terrenales?". Attar respondió que esperaba terminar su vida en pobreza y satisfacción como un derviche. "Veremos", dijo el derviche, y sin más se recostó y murió. Esto produjo tal impresión en Attar que abandonó el negocio de su padre, se hizo discípulo del famoso sheik Bukn-ud-Din, y comenzó a estudiar, en teoría y práctica, el sistema de ideas de los sufíes. Durante treinta y nueve años viajó por diversos países, estudiando en monasterios y reuniendo escritos de devotos sufíes y leyendas e historias. Luego regresó a Nishapur, donde vivió el resto de su vida. Se dice que llegó a una comprensión de las ideas del sufismo más profunda que la de cualquiera de los de su época. Compuso alrededor de doscientos mil versos y muchos escritos en prosa Vivió antes que Jelal-uddin Rumi. Cuando se le preguntó a un sufí cuál de los dos hombres tenía mayor comprensión, dijo: "Rumi llegaba a las alturas de la perfección como un aguila, en el lapso de un parpadeo; Attar llegaba al mismo lugar deslizándose como una hormiga". Rumi dijo: "Attar es el alma misma". Garcin de Tassy relata que en 1862, Nicolás Khanikoff descubrió una piedra, en las afueras de Nishapur, que había sido erigida entre 1469 y 1506 (alrededor de doscientos cincuenta años después de la muerte de Attar) en la cual estaba grabado en persa lo siguiente: "Dios es Eterno En el nombre de Dios El Misericordioso el Compasivo Aquí, en un jardín del Edén inferior, Attar perfumó el alma del más humilde de los hombres. Esta es la tumba de un hombre tan eminente que el polvo bajo sus pies hubiera servido de colirio para el ojo del firmamento; del ilustre sheik Attar Farid, de quien los santos fueron discípulos; de este excelente perfumador cuyo aliento perfumó al mundo de una Caf a la otra. En su negocio, ese nido de ángeles, el firmamento, fue como un frasco de bolitas perfumadas con citrón. La tierra de Nishapur será honrada hasta el día de la resurrección gracias a este ilustre hombre. La mina de su oro se encuentra en Nishapur porque él nació en Zarwand en el distrito de Gurgan. Vivió en Nishapur durante ochenta y dos años, de los cuales treinta y dos los vivió en tranquilidad. En el año de Hijrá 586 (1190) fue perseguido por la espada del ejército que devora todas las cosas. Farid pereció en la época de Hulakú Khan, martirizado en la masacre que en ese entonces tuvo lugar... ¡Quiera Dios, el Altísimo, renovar su alma! Acrecienta, oh Señor, su mérito. La lápida de la tumba de este hombre eminente fue colocada aquí durante el reinado del Rey del Mundo, Su Majestad el Sultán Abú Igazi Hussein..." El resto de la inscripción consiste de elogios al sultán. No parece existir ningún documento contemporáneo que indique cómo, cuándo ni dónde murió o fue enterrado. Nota Acerca del Sufismo La palabra sufi deriva de suf, lana: los trajes de lana de los ascetas. Los sufíes siguen la enseñanza esotérica del Corán. Junto con un sistema de as basadas en los preceptos de su libro sagrado, tienen un método práctico de trabajo sobre sí mismos, que se transmite oralmente. Por medio de ejercicios, posturas y danzas, las fuerzas del hombre, que constantemente están siendo desviadas fuera de sí mismo, pueden ser usadas y transmutadas para el desarrollo interior y la ampliación de la conciencia. La meta y finalidad de su trabajo es la unión del alma con Dios. Puede haber momentos de pregustación de esto -momentos de revelación y éxtasis-, “la gracia”, como la llaman, pero la perfección, la unión con Dios, debe ser obtenida a través de un trabajo: una búsqueda permanente. Existe un Dios. Todos los seres moran en El y El Es en todos los seres. Todas las cosas, visibles e invisibles, emanan de El. Las religiones en sí mismas no son importantes, si bien pueden servir para guiar al hombre hacia la Realidad. El bien y el mal, tal como los comprendemos, no existen en realidad, porque todo procede del Ser Único, Dios. Al mismo tiempo, hay un bien y un mal objetivos. El hombre no es libre en sus acciones; no tiene libre voluntad, aunque esto puede ser logrado a través de una búsqueda llevada a cabo de la manera correcta. El hombre es llevado de aquí para allá por fuerzas interiores y exteriores, al ritmo del viento que sopla en el momento. La unión se encuentra a través de dos formas de renunciamiento y desapego: por un lado de nuestros propios deseos, vanidades, ensueños; y por otro de las cosas del mundo: amor al poder, fama, riquezas y honores. Pero la plegaria y el ayuno también pueden ser un gran obstáculo: uno puede identificarse con cualquier cosa. Un sufí, sin embargo, no renuncia a las cosas necesarias y no se retira del mundo. Debe permanecer en él pero no ser de él. Es una gran bendición tener lo que es necesario para el cuerpo físico. El sexo en sí no era considerado ocasión de pecado, como lo fue en el cristianismo ortodoxo, sino una posesión apreciada. Se conocía el significado y uso de la fuerza sexual. Como señala Orage en su ensayo Sobre el amor: "La castidad de los sentidos (en tiempos antiguos) era enseñada desde la temprana niñez. Por lo tanto el erotismo llegaba a ser un arte entre los más elevados que el mundo ha podido conocer. Sus débiles ecos se pueden hallar en la literatura sufí y persa actual". El alma (en el sentido de la parte más elevada del hombre, que busca la perfección) existe antes que el cuerpo y está confinada en él como en una jaula. La vida humana es un viaje que se lleva a cabo por etapas; y el que busca a Dios es un viajero, que debe realizar grandes esfuerzos para sobreponerse a sus debilidades y fallas, y para obtener verdadero conocimiento y comprensión. Los seguidores del sufismo dicen que estas ideas existieron siempre bajo diversos nombres; y que el sistema y método, en sus diferentes formas, eran conocidos por los egipcios, hindúes, budistas, judíos, griegos y por los primeros cristianos: en realidad, por todas las grandes religiones en sus orígenes. Existe actualmente también en Occidente. Sólo la comunidad de los que han alcanzado cierto estado de desarrollo puede iniciar al viajero en el camino. Siempre y cuando el principiante tenga cierta capacidad de disciplina y de esfuerzo, la posibilidad de estar un solo día -incluso una sola hora en compañía de hombres de comprensión le será más valiosa que años de ascetismo y formas exteriores de adoración. Entre las reglas para los discípulos en presencia del maestro se cuentan las siguientes: "Presta atención y habla poco. No respondas a preguntas que no están dirigidas a ti; pero si te preguntan, responde con premura, y no te avergüences de decir 'No sé'. No discutas por el hecho de discutir. No te jactes ante tus mayores. No estés buscando ocupar el lugar más alto. No seas ceremonioso en demasía. Obedece todas las convenciones ordinarias, y confórmate a los deseos de otros, siempre y cuando no contradigan tus convicciones interiores. No transformes nada en una práctica, a menos que sea una tarea religiosa o útil para otros, ya que podría transformarse en un ídolo". Los sufíes dicen que casi todos las personas nacen con posibilidades de desarrollo interior pero los padres y los que rodean al niño lo transforman en judío, cristiano, hindú o mago, y pronto adquiere prejuicios y acepta lo que otros dicen sin referirse a su propia experiencia o razón, y esto se transforma en un obstáculo. Cuando un "creyente" -uno que ha trabajado sobre sí mismo muere*, su alma va al cielo correspondiente al grado hasta el cual ha sido perfeccionada. Pero, por más "conocimiento" que un hombre tenga, si no se ha examinado a sí mismo, y si no ha reconocido ante sí que realmente no comprende nada, todo lo que ha adquirido será como "viento en sus manos". Glosario Abraháh: También llamado Azaz y Tharé. Padre de Abraham. Un idólatra adorador del fuego. Abraham: Uno de los seis profetas. Nimrod lo hizo arrojar a un horno ardiente pero fue rescatado por el Angel Gabriel, que transformó el fuego en un jardín de rosas. Nimrod le hizo la guerra a Abraham, pero su ejército fue vencido por un enjambre de mosquitos; uno de ellos entró al cerebro de Nimrod: el que deseó ser el Señor de todo fue castigado por la más pequeña de las criaturas. Abubilla: "Hudhud" por su canto. Cuando Salomón terminó el templo fue en peregrinaje a la Meca y luego atravesó el desierto. Como necesitaba agua llamó a la Abubilla que era capaz de descubrir agua subterránea, y cuando ella con su pico indicó el lugar, los demonios extrajeron el agua. La Abubilla llevaba las cartas de Salomón a Balkis, reina de Saba. "No veo a Hudhud, ¿Se encuentra entre los ausentes?", dijo Salomón al inspeccionar a los pájaros. Una marca que tiene en el pico se asemeja a los caracteres persas para "Bismilá". Su "corona de gloria" es su cresta. Cuando su pareja muere no vuelve a aparearse; además, se ocupa de sus padres. Mahoma prohibió a su pueblo matarla. Adán: Los musulmanes lo consideran el primer profeta, "elegido de Dios", Califa de Dios en la Tierra. El primer hombre. Según los musulmanes, el trigo era el alimento prohibido que Adán comió en el Paraíso. Alast: La primera palabra de un pasaje del Corán: "¿No soy acaso tu Señor?" Palabras dirigidas al alma humana contenida en Adán, que responde: "Sí". Alma: Attar usa la palabra en dos sentidos. Uno, la parte más elevada del hombre; el otro, la parte más baja del hombre. En esta versión usamos alma para la parte elevada, la parte divina; y "cuerpo del deseo" para la parte baja del hombre. Ángeles: Se los considera constituidos de una sustancia simple. Cuatro son arcángeles: Gabriel, el ángel de la Revelación; Miguel, el patrón de los israelitas; Israfel, que hará sonar la trompeta en el día final; Azrael, el ángel de la muerte. Munkir y Nakir examinan a los muertos en sus tumbas. Y hay muchos otros. Araña: Cobijó a Mahoma tejiendo una tela a la entrada de la cueva donde estaba escondido. Arca: Consistía de tres pisos: el más bajo para las bestias, el siguiente para los seres humanos y el de arriba para los pájaros. Barba: Los musulmanes la consideran una muestra de dignidad y hombría. De ahí: "Por las barbas del Profeta". Bismilá: En el nombre de Dios. Borak o Buraq: El Luminoso. El animal sobre el cual Mahoma hizo su viaje, el Mihraj, durante la noche. Un animal blanco más pequeño que un caballo, con alas. Caabá: Cubo. La piedra cúbica en el centro de la mezquita de la Meca. Contiene la piedra negra que cayó blanca del cielo pero se tornó negra a causa de los pecados de los que la tocaron. Caf: Cadena de montañas que rodea la tierra. Cielo: El firmamento. Distinto del Paraíso. Hay siete cielos, y siete etapas o senderos en el Cielo. Mahoma pasó a través de las siete durante el Mihraj. Comer: Los musulmanes tienen encomendado comer en el nombre de Dios. El diablo tiene poder sobre el alimento que no se come recordando a Dios. Cuando un hombre recuerda el nombre de Dios, y se recuerda a sí mismo, al comer, el diablo dice a sus demonios: "Este no es lugar para nosotros: no hay alimento aquí para nosotros". Coré: Números. Cuatro paredes doradas: Los puntos cardinales. Dang: Un cuarto de dinar. Derviche: De la raíz persa dar, puerta: el que mendiga de puerta en puerta. Para los árabes, faquir, pobre de espíritu. Siguen la enseñanza sufí. Existen varias órdenes derviches. Diablo: Satán, el Opositor. Iblis, el Malvado. Satán también denota al que está lejos de la verdad e Iblis al uno para el cual no existen esperanzas. Mahoma dijo: "No hay uno entre ustedes que no tenga un ángel y un diablo destinados". Los compañeros preguntaron: "¿Esto te incluye?". El dijo: "Sí, también yo, pero Dios me otorgó la victoria sobre el diablo y sólo me ordena hacer lo que es bueno. Todo hijo de Adán, excepto María y su hijo Jesús, es tocado por el diablo al nacer: por eso el llanto". Dios: Dios tiene cien nombres o atributos. El primero y último es Alá. Dinar: Moneda de oro. Dos letras: "Con dos letras creó..." Las letras Kaf y Nun, que forman Kun, "Ser". Fénix: Su "trompeta" es una alusión al día final. Gato: Un gato despertó a Mahoma cuando era la hora de la plegaria. Abu Qutadáh dijo: "Los gatos no son impuros, vigilan a nuestro alrededor". Genios: Espíritus del bien y del mal. Entre ellos hay Gins, Jans, Efrits y Marids. Los Gins del mal son llamados Deves por los persas. Hijrá: "Migración". Huida de Mahoma de la Meca. También, "huir del pecado". Hombro marcado: En Persia, los ladrones eran marcados en el hombro. Humay: Especie de cuervo. El más grande de los pájaros predadores del Viejo Mundo. Saca huesos de animales muertos y los tritura contra las rocas para alimentarse. La sombra del humay proyectada sobre la cabeza de una persona es señal de que será elevado a un trono. Idiota: Madjnun en árabe. Una persona cuya mente está en el cielo y su cuerpo en la tierra. Se los considera idiotas de Dios, y hagan lo que hagan, eso no afecta su santidad. En inglés antiguo, los Apóstoles y las personas simples eran llamados idiotas. "Santos idiotas inocentes", Jeremy Taylor. En griego: "una persona en particular". En ciertas enseñanzas esotéricas: el que se está liberando de las ataduras interiores y exteriores, proceso que tiene varias etapas. También se usa la palabra en otros sentidos: tonto, lunático, impostor. Infierno: El Fuego eterno. Tiene siete puertas o divisiones. Una es Jahanán, el Purgatorio. Ismael: El progenitor de la raza árabe, un profeta inspirado. Se dice que fue ofrecido en sacrificio (no es Isaac). Ispand: Hierba, quizás mostaza, que se quema en nacimientos y casamientos para alejar el mal de ojo. Jesús: Mahoma se refería a él como Hijo de María, Mesías, Palabra de Dios, Palabra de la Verdad, Mensajero de Dios. No fue crucificado porque en la cruz murió un sustituto. Fue llevado al séptimo cielo y por accidente contra el mandato de Dios que prohibía cosas terrenas, había una aguja y un cántaro roto, por esto fue bajado al cuarto cielo. Pero quedará allí en la gloria y volverá en el día final. A menudo Attar se refiere a él como al pez. La palabra griega que equivale a pez equivale a las letras iniciales de Jesus Cristo Hijo del Dios Salvador. Jyjad: Esfuerzo, búsqueda. Los sufíes dicen que hay dos jijads o guerras: la mayor, contra nuestras faltas y debilidades; la menor, contra los infieles. José Hijo de Jacob. Un profeta inspirado. Fue arrojado a un pozo. Después de ser vendido a los egipcios, la mujer de su amo, Zulaica, se enamoró de él. Pero como él no se entregó, ella lo hizo aprisionar. Cuando murió el marido, se casaron y tuvieron dos hijos. Una de las más grandes historias de amor de Oriente es José y Zulaica". Judios: Favorecidos por Dios con la enseñanza divina, según los musulmanes, la abandonaron. Kausar: "Abundancia". Estanque en el Paraíso de Mahoma. Khizr, Al Khizr: Se dice que vivió en tiempos de Abraham, todavía está vivo porque bebió del agua de la vida y así llegó a la inmortalidad. Kirka: Manto de los derviches, prenda hecha con parches y remiendos. Mahmud: 969-1030 A.D. Uno de los más famosos gobernantes musulmanes. Su corte era centro de reunión de poetas, artistas y eruditos. Mahram: Un pariente cercano con quien no es legal casarse; una relación íntima. Majnun: "Poseído por un Gin". Su pasión por Laila es una de las grandes historias de amor de Persia. Se enamoraron a primera vista pero el padre de ella la casó con otro hombre. Majnun pasó el resto de su vida semidesnudo, esperando verla y escribiendo poemas para ella. Los escritores sufies usan la historia como analogía del hombre que abandona todo para unirse a Dios. personas. Masnad: Lugar de honor en donde hay sitio para varias Mihrab: Nicho en la mezquita que apunta a la Meca. Muerte: El Corán dice que la hora de la muerte está fijada para cada criatura viviente. "Si Dios castigara a los hombres por sus errores no dejaría a un solo ser humano sobre la tierra, pero les da tregua; y cuando llega su hora ninguno de ellos puede demorarla ni apresurarla." Mula: Alusión a una costumbre oriental por la que las mujeres ocultaban cartas o pequeños objetos preciosos en la vagina de una mula. Nafs: Tiene varias acepciones, una de ellas: la parte que niega. Obolo: Una pequeña moneda usada en el Cercano Oriente y en Europa en tiempos antiguos. Pájaros: Los musulmanes consideran que los pájaros (y también otros animales) tienen un lenguaje con el cual se comunican entre sí. El rey Salomón conocía el lenguaje de los pájaros. Perro: Para los musulmanes un animal sucio, aunque se permite cazar con perros entrenados. El perro es capaz de ver a Azrael, el ángel de la muerte. Pir: Anciano. Lider religioso. Pozo: Cisternas o pozos de agua secos que se usaban como prisión. Qalandar: Una orden de derviches de Persia y Arabia que practican una vida errante. Fundada por Qalandar Yusuf al Andalusi de España. Rodilla: (Ver "El sheik y la anciana".) Alusión a una postura de los sufíes. Ruinas: A menudo los musulmanes se esconden en ellas para beber vino, que está prohibido. Salomón: Hay una leyenda que dice que un Gin robó el sello de Salomón y lo privó de su poder durante cuarenta días. El anillo fue encontrado en el estómago de un pez y fue devuelto a Salomón, y con él su poder. Se dice también que Salomón, ya anciano, arrojó el anillo al mar para que nadie pudiera tener el secreto de su poder. Attar alude también a Salomón como un "mineral de la tierra". Sheik: El superior de una orden de derviches o de un monasterio. Un anciano venerable. El jefe de una familia o tribu. Simurg: El Gran Pájaro. Garuda en el Mahabarata. Hay dos Simurgs, uno vive en el Monte Elbruz, en el Cáucaso, alejado de los hombres. Su nido está hecho con pilares de ébano, sándalo y aloe. Tiene el don del habla y sus plumas poseen poderes mágicos. Es el guardián de los héroes, un símbolo de Dios. El otro es un monstruo horrible que también vive en una montaña, pero se parece a una nube negra. Sirat: El Recto Camino, El Verdadero Sendero. Un puente sobre los abismos del infierno que es más delgado que un cabello, más filoso que una espada, lleno de púas y espinas. Los hombres de buena voluntad pasarán por él y serán salvados, pero los malvados caerán en el abismo. Verde: Para los persas el color del cielo es verde. Zikr: "Recordar". Recordar a Dios, recordarse a sí mismo. Es nombre de diversas ceremonias practicadas por las diferentes órdenes derviches que consisten de plegarias, danzas y posturas, y que se ejercitaban (y se lo hace todavía en ciertos lugares) para el desarrollo interior y para llegar a una conciencia. Zunnar: Una faja. El cinto usado por cristianos y judíos. Un término que usan los sufies denotando sinceridad en el sendero religioso. También se usa para denotar prácticas externas de la religión.