Quechua Pedro Plaza Martínez* 1. Aspectos generales1 El quechua es la lengua indígena más hablada en la actualidad. Como dice Albó (1980: 15) “el quechua sigue siendo el idioma autóctono más hablado en Sudamérica, y también en Bolivia, donde [de acuerdo al censo de 1976)] lo saben aproximadamente 1.594.000 personas, y lo hablan regularmente en su hogar 1.186.000 personas.” Para Cerrón-Palomino (1987: 40), es la “lengua de mayor difusión”, ya que se habla en: Bolivia, Ecuador, Perú principalmente, además de Colombia, Argentina y Brasil. Según pudimos constatar, también hay algunos hablantes en el Norte de Chile (Plaza 2009). Es hablada por entre 9 y 14 millones de personas y parece no estar relacionada genéticamente con otras familias conocidas. Se la considera la familia de lenguas más extendida en América. En Bolivia, la lengua quechua se ubica territorialmente en los departamentos del occidente del país, principalmente en los departamentos de Cochabamba, Potosí, Chuquisaca, aunque también en zonas de colonización en Santa Cruz. 1.1 Situación actual En Bolivia, según los datos del último censo, el quechua es la lengua indígena más hablada con 1.555.641 hablantes mayores de 15 años, o sea un 30,7% del total como muestra el gráfico 1. Cabe aclarar que el número absoluto de quechuas y hablantes quechuas (así como los de las otras lenguas) es mayor, pues en las cifras del gráfico 1 solamente se incluyen los mayores de 15 años. En el cuadro 1, la categoría ninguno se refiere a aquellas personas que no se identifican con ningún pueblo indígena y hablan el castellano, o incluso alguna lengua extranjera. * 1 Quechua del Norte de Potosí, profesor de estado, lingüista y educador (Ph.D.), fue director del Instituto Nacional de Estudios Lingüísticos y del Instituto Nacional de Antropología, docente de la UMSA; actualmente docente-investigador del PROEIB Andes; quechuista, enseñanza de lenguas indígenas. Se agradece al PROEIB Andes y el Postgrado de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Mayor de San Simón; a Rosaleen Howard de la Escuela de Lenguas Modernas de la Universidad de Newcastle por proporcionar espacios y tiempos para la redacción; a Pieter Muysken y Mily Crevels por la oportunidad, las correcciones y sugerencias; y la cooperación de Jazmín Daza y Elvira Peralta por la compilación de datos para el presente artículo. 216 lenguas de bolivia Mapa 1 Areas donde se habla el quechua Gráfico 1 Distribución de las principales lenguas de Bolivia Ninguno 1.922,355 38,0% Quechua 1.555,641 30,7,% Otro nativo 69.364 1,4% Mojeño 46.336 0,9% Chiquitano 112,218 2,2% Guaraní 81.197 1,6% Aymara 1.277,881 25,2,% (Fuente: Molina & Albó 2006: 70). (Fuente: Basado en Plaza y Carvajal 1985, citado en ­Cerrón-Palomino 2003: 69). Al nivel de los nueve departamentos en los que está dividida Bolivia, la situación estadística del quechua es la siguiente: Cuadro 1 Quechua por Departamentos Departamentos % Chuquisaca 188.427 La Paz 117.587 7,56 Cochabamba 595.629 38,29 12,11 Oruro 89.699 5,77 Potosí 319.903 20,56 Tarija 29.910 1,92 206.417 13,27 Beni 6.831 0,44 Pando 1.238 0,08 Bolivia 1.555.641 100 Santa Cruz Números absolutos (Fuente: Molina & Albó 2006: 71). 217 quechua El Gráfico 2 siguiente ayuda a apreciar las diferencias en números absolutos y porcentajes de quechuas en los departamentos del país. Gráfico 2 Las diferencias en números absolutos y porcentajes de quechuas en los departamentos 700000 595629,38,29% 600000 500000 400000 319903,20,6% 300000 206417,13,3% 188427,12,1% 1238,0,1% 89699,5,8% nt o ni nd aC ru z 6831,0,4% Sa Ta r sí to Po o ur am ab ch Or ba z Pa La Co Ch uq ui sa ca 0 ija 29910,1,9% Pa 117587,7,6% 100000 Be 200000 (Fuente: Molina & Albó 2006: 71). Los departamentos de Cochabamba, Potosí, Santa Cruz y Chuquisaca, en ese orden, albergan mayoritariamente a los hablantes quechuas con el 38,29%, 20,6%, 13.3% y 12,1%, respectivamente. Puesto que Santa Cruz es un departamento t radicionalmente castellano hablante, llama la atención el que se ubique en el tercer lugar con respecto al número, más de 200 mil hablantes, y porcentaje de hablantes del quechua con un 13,3%. Siguen La Paz y Oruro, con 7,6% y 5,8%, y Tarija con sólo un 1,9% de hablantes quechuas. Beni y Pando, departamentos ubicados en la amazonía boliviana, tienen pocos hablantes de quechua, con 0,4% y 0,1%, respectivamente, con respecto al total de hablantes quechuas en el país. El caso de Santa Cruz nos ilustra que los fenómenos sociales, en este caso la migración de hablantes quechuas y aimaras del occidente del país a las regiones orientales, desde los años 50 del siglo pasado, tienen efectos en la vida de las lenguas y van reconfigurando constantemente la situación lingüística de las mismas. 1.2 Perfil sociolingüístico El quechua como todas las lenguas indígenas de la región ha estado sometida a las presiones del castellano desde el mismo momento en que se establecen las desiguales relaciones entre europeos (conquistadores, republicanos, citadinos) y pueblos americanos. En todo caso, a partir del contacto con los europeos el uso de la lengua quechua queda afectado por la presencia del castellano. En 1900 casi el 90% son hablantes de lenguas indígenas en Bolivia. En 1950, hay 987.700 hablantes quechuas, un 36,5% de la población total; en 1976, 1.593.900 personas hablan el quechua, haciendo un 38,4% (Albó 1980: 70). En 2006, estas cifras disminuyen ligeramente, como veremos más adelante. Aquí un ejemplo personal del bilingüismo y la diglosia: En siglo XX, un campamento minero en el Norte de Potosí, en mi casa, siempre hablaba el quechua con mi madre y mi hermano mayor, y en castellano con mi padre y mis hermanos menores. Con algunos vecinos y parientes también hablábamos en quechua, pero en la calle, la escuela, en los lugares públicos la lengua era el castellano. Con excepción de algunas palabras como 218 lenguas de bolivia waskhiri, q’aqchiri ‘estudioso’, q’iwalo ‘cobarde’, qhuñalo ‘mocoso’ y algunas otras que los alumnos utilizábamos en nuestros intercambios verbales, generalmente fuera de la clase, tanto la comunicación y la enseñanza procedían exclusivamente en castellano. En forma esquemática, en las comunidades rurales predomina el uso del quechua, mientras que en los pueblos de vecinos se presenta un bilingüismo quechua-castellano, y en los grandes centros urbanos la tendencia es el uso del castellano. Presentamos dos situaciones a manera de ejemplo: una comunidad monolingüe y una ciudad bilingüe. En las poblaciones rurales de El Paredón, en Chuquisaca, la vida cotidiana se desenvuelve en quechua, todos hablan quechua, excepto tal vez algún visitante de la ciudad. La vitalidad del quechua parece garantizada pues la transmisión intergeneracional está consolidada. El castellano, sin embargo, está también presente, aunque en forma periférica a través de la radio (no hay electricidad ni televisión en muchas de estas comunidades), de vez en cuando, las noticias impresas y algunas visitas. Cabe aclarar que los foráneos que visitan el lugar por cuestiones asistenciales, de trabajo u otras necesitan hablar el quechua para ser entendidos en la comunidad: el maestro, el cura, el político, el médico, el funcionario de ONG, todos hablan el quechua en la comunidad. Por otro lado, los comunarios también entran en contacto más directo con el castellano cuando se desplazan a Tarabuco, donde cada domingo se reúnen muchos comunarios para hacer sus compras y mantener sus relaciones sociales, o a Sucre, la capital, para hacer trámites o simplemente para visitar, o a las regiones de trabajo: el Chapare, Santa Cruz, Monteagudo o incluso países vecinos como la Argentina y Chile. En suma, estas comunidades mantienen su monolingüismo en quechua (tampoco hay aimara), pero la tendencia hacia la emigración a los centros urbanos contribuye al avance del castellano. En la ciudad de Cochabamba y poblaciones aledañas la presencia del quechua es substancial aunque casi siempre en convivencia con el castellano. Hay hablantes monolingües quechuas pero también castellanos, así como bilingües en las dos lenguas. En la ciudad, sin embargo, opera la diglosia. El castellano es la lengua predominante, pública, utilizada en la administración, la prensa escrita, la escuela. El quechua es relegado a ciertos sectores de la ciudad: la cancha2 donde hay muchos comerciantes, hombres y mujeres, que prefieren hablar en quechua, al igual que algunos compradores para obtener precios más baratos en los productos del campo; el hogar donde el quechua puede usarse más líbremente; las chicherías, lugares de consumo de chicha; y poblaciones aledañas más rurales. En las radios, sin embargo, se puede escuchar más quechua, aunque en muchas el uso de quechua es predominante solamente al amanecer. Cabe destacar, además, la existencia de todo un pequeño mundo de cultores de la música folklórica popular que continuamente van renovando repertorios y modas, incluso avanzando hacia la sociedad global, es el caso de la melodía titulada Cholita Marina que hizo furor no solamente en los pueblos sino ingresó también a la ciudad, donde grupos criollos también la intepretaron. Betty Veizaga, Gregorio Mamani, Julia Yrigoyen, Flora Cortez, para mencionar sólo a algunos, han producido canciones en castellano y en quechua, se presentan en peñas y eventos bailables populares y han hecho videos musicales. Hay también grupos más autóctonos como Mozoq Ñan Puriypi del Norte de Potosí, con más canciones en quechua. Muchos de estos videos musicales son pasados frecuentemente por algunos canales de televisión privados, en programas muchas veces animados en quechua, incluyendo conversaciones telefónicas con la audiencia. Sin embargo, en el centro urbano, la presencia del quechua es mínima. En la actual coyuntura política, desde la asunción al gobierno de Evo Morales, como primer presidente indígena del país, se han generado nuevas exigencias y demandas así como expectativas renovadas para las lenguas indígenas. Hay varios artículos en la nueva CPE que favorecen a los pueblos indígenas, entre ellas la declaratoria de 36 lenguas indígenas como oficiales (Art. 5.i). Luego se establece que tanto el “Gobierno plurinacional” como “los gobiernos departamentales deben utilizar al menos dos idiomas oficiales”, el castellano y una lengua indígena (Art. 5.ii). De manera similar, para ser empleado público se requiere “Hablar al menos dos idiomas oficiales del país” (Art. 234.7). La implicación es que además del castellano se debe 2 La cancha, palabra quechua adoptada ya por el castellano y que originalmente significaba ‘recinto cerrado’, en la ciudad de Cochabamba designa al mercado informal, donde se vende desde productos agrícolas de las comunidades hasta electrodomésticos, comida y ropa. quechua 219 hablar una lengua indígena3. Esto ha determinado en algunos críticas en sentido de que el artículo estaría discriminando, conculcando el derecho de los monolingües castellano-hablantes al trabajo; pero en otros ha despertado un interés renovado por aprender el quechua. Sin entrar en detalles, hay más interesados en la enseñanza y aprendizaje de las lenguas indígenas, lo que a su vez presiona al sistema educativo para la consolidación de la educación bilingüe, pero también para la inclusión de los saberes y conocimientos propios de las lenguas y culturas indígenas en la educación. Algunos ejemplos del renovado interés por el quechua: cursos de quechua en colegios privados, cursos para el público dictados por la Academia de la Lengua Quechua, cursos de quechua para docentes de colegios privados (realizados por ANDECOP en convenio con el PROEIB Andes-UMSS), dos diplomados en el Postgrado de la Facultad de Humanidades en la UMSS sobre la enseñanza del quechua como segunda lengua en contextos urbanos. El interés por el quechua y otras lenguas indígenas, en realidad, es parte de una tendencia de reconocimiento de la diversidad (lo que implica a los pueblos indígenas) iniciada hacia los años 50 en el mundo occidental (Revel verificar). En Bolivia, la tendencia hacia la erradicación de las lenguas indígenas, consideradas una “remora”, un obstáculo para el progreso empieza a cambiar con la revolución nacional del 52. En este nuevo contexto, más favorable a las lenguas indígenas, que el quechua y el aimara, principalmente, se van enseñando en las universidades estatales por lo menos desde los años 70. Cabe resaltar, además, que a pesar de la discriminación hacia el quechua y sus hablantes en pueblos de vecinos y centros urbanos, la utilización prioritaria del castellano en las esferas públicas y la conceptualización del castellano como la lengua moderna y técnica que responde a las necesidades de la sociedad y, en contrapartida, la idea de que las lenguas indígenas, entre ellas el quechua, no son aptas para responder a estas necesidades ‘modernas, técnicas, científicas’, siempre ha habido interés por las lenguas indígenas, desde los años iniciales de la colonia. Como dice Porras Barrenechea (1952: 7): “El entusiasmo por el aprendizaje del quechua es general en el siglo XVI. Es la gran tarea original y creadora de captación del alma indígena para fundirla con el espíritu cristiano y occidental.” El fervor evangelizador contribuyó a la expansion y consolidación del quechua, el nahuatl, el aimara que se convirtieron en “lenguas generales”. Durante más de tres siglos, estas lenguas fueron utilizadas para la evangelización. Pero esta política sería substituida por la castellanización, a partir de las rebeliones indígenas, particularmente, el levantamiento de Tupac Amaru en 1780 (Heggarty 2007: 328). Dado el contacto entre pueblos, lenguas y culturas y dada la situación asimétrica de las relaciones sociales y étnicas, en general, la tendencia dominante ha sido la imposición del castellano y el marginamiento de las lenguas indígenas. Sin embargo, muchas lenguas indígenas, entre ellas el quechua, han sobrevivido a esta tendencia y continúan hablándose. Es cierto que han venido disminuyendo proporcionalmente, pero han aumentado en números absolutos. 1.3 Perfil etnohistórico El quechua o más precisamente las familias quechuas proceden genéticamente del protoquechua, que, según Torero (1974), se hablaba en la costa y sierra centrales del antiguo Perú en sus formas Yungay y Chinchay, y que luego se fue expandiendo hacia el sur reemplazando al aimara. A principios del siglo V, el protoquechua habría cruzado la cordillera para instalarse en la sierra central (Valle del Mantaro) entonces protoaimara hablante, produciéndose la división entre Quechua I (al este) y Quechua II. Cabe recordar, sin embargo, que ha habido varias hipótesis con respecto al origen del quechua: su origen serrano, costeño, forestal, ecuatoriano (Cerrón-Palomino 1987: 324-347). Según este autor, la hipótesis del 3 Además el artículo 95.ii establece: “Las universidades deberán implementar programas para la recuperación, preservación, desarrollo, aprendizaje y divulgación de las diferentes lenguas de las naciones y pueblos indígena originario campesinos.” 220 lenguas de bolivia origen costeño se considera “la más probable hasta el momento: evidencias lingüísticas, históricas y arqueológicas parecen abonar en su favor” (Cerrón-Palomino 1987: 348). Dicho de otro modo, se refuta la hipótesis del origen cusqueño. En todo caso, la expansión del quechua hacia el territorio boliviano fue favorecida, por la política incaica de introducción del quechua en los territorios bajo su dominio, introduciendo de este modo la variedad del quechua cusqueño, hacia la segunda mitad del siglo XV, lo que produjo en este mismo siglo una importante expansión hacia el sur, incluyendo la parte templada del territorio boliviano, en el siglo XV. 1.4 Clasificación genética En primer término, cabe aclarar que contrariamente a la tendencia general de concebir el quechua como una sola lengua con varios dialectos, por la presencia de diferencias entre algunas de las variedades que hacen difícil si no imposible la mutua inteligibilidad, se plantea más bien familias quechuas dentro de las cuales hay mayor inteligibilidad (Heggarty 2007: 313). En esta perspectiva, estas familias de lenguas habrían evolucionado de un tronco común, el protoquechua, de manera similar a como las lenguas romances se desarrollaron a partir del latin vulgar (Heggarty 2007). En la actualidad, las familias lingüísticas quechuas se hablan desde Colombia hasta Argentina y Chile, incluyendo Bolivia, Perú, y Ecuador. El quechua boliviano corresponde a la familia quechua conocida como Cuzco-Collao que a su vez es parte del Quechua Sureño (Quechua II-C), dependiente del ramal Chinchay del Quechua II. Cabe añadir que entre el quechua de Cuzco y el quechua boliviano hay cierta comprensión mutua, aun cuando las diferencias en el uso de algunos sufijos, así como las diferencias lexicales dificultan la comprensión, especialmente en los encuentros inciales. En Bolivia las variantes principales son el quechua del norte de La Paz que, en general, se diferencia de las variantes sureñas: el quechua de Cochabamba, Chuquisaca, Oruro y Norte de Potosí. Las variantes de Oruro y Norte de Potosí conviven con el aimara, por lo que, además de las influencias que se han producido a lo largo de los siglos entre el quechua y el aimara,4 también aparecen préstamos morfológicos que parecen más recientes. Por ejemplo: Qhapa-r-t’a-pu-wa-y! gritar-inc-inc-ben-1.o-imp ‘¡Grítenmelo!’ (una mujer pidiendo a los pasajeros, que le hagan parar el camión) En este ejemplo, el sufijo -ri pierde su vocal delante de -t’a, sufijo propio del aimara. Finalmente, cabe agregar que muchas variantes del quechua boliviano han asimilado elementos fonológicos, morfológicos, sintácticos, y léxicos del castellano, tendencia asimilacionista que se inicia desde los momentos iniciales del contacto entre el castellano y el quechua. En el contexto andino, el quechua boliviano parece sobre todo al quechua cuzqueño. 1.5 Estudios anteriores y fuentes para el presente trabajo Dada la importancia demográfica del quechua en el continente, desde muy temprano en la colonia, se lo ha estudiado y numerosos trabajos han sido publicados, catecismos, diccionarios, gramáticas; al respecto, resaltan, por ejemplo, los trabajos de Fray Domingo de Santo Tomás (1951a,b [1560a,b]) y Diego González Holguín (1607, 1608). Pero también se lo ha estudiado desde las universidades tanto de los propios países como de universidades extranjeras, ingleses, holandeses, franceses, alemanes han estudiado el quechua y continúan haciéndolo. 4 Como lo plantea Cerrón (1994) el quechua y el aimara actualmente comparten mucho de su ordenamiento sintáctico,q ue no responde a una herencia filo-genética sino más bien al contacto prolongado entre estas lenguas (Mannheim 1991). 221 quechua Hay numerosos trabajos sobre el quechua en Bolivia que muestran el interés y las demandas de enseñanza de esta lengua, tales como Stark, Segovia & Segovia (1971) para Sucre, Herrero, Lozada & Morató (1970), Herrero & Sánchez de Lozada (1978), Morató (1993) y Quiróz (2000) para Cochabamba, y finalmente Gómez & Arévalo (1988) para Oruro. Grondín (1980) para el Norte de Potosí – Cochabamba. También es conveniente resaltar los esfuerzos de Hervas Sandoval (1998, 2002), para el quechua en general. Que sepamos no hay una gramática para el quechua del Norte de La Paz. Tampoco hay estudios dialectológicos del quechua boliviano que den cuenta de la diversidad pero también de las características de cada variante. Es importante señalar que la descripción lingüística aislada, aunque prolija en el análisis y la descripción lingüística, puede encubrir que la evolución histórica del quechua no es independiente de los fenómenos sociales, económicos, políticos del contexto en el que se desenvuelve. Por lo tanto, cuando sea conveniente, señalaremos algunas de las implicaciones del colonialismo lingüístico. En este trabajo es inevitable tomar en cuenta otros trabajos, pero nos concentraremos en nuestras propias observaciones y análisis de algunas variedades del quechua en Bolivia. 2. Esbozo gramatical Según Cusihuamán (1976: 59), la lengua quechua es “aglutinante o polisintética”, porque “su estructura gramatical obedece a una serie de derivaciones y flexiones morfológicas bastante complejas”. Cerrón-Palomino (1994: 69), distingue tres características de una lengua aglutinante. a) “Las lindes intermorfémicas al interior de la palabra son nítidamente deslindables”. Es decir, a una raíz se unen distintas clases de sufijos, las cuales pueden ser a su vez separables: Por ejemplo, tenemos la palabra formada con la raíz verbal ruwa- que significa ‘hacer’ en ruwa-chi-ku-ni podemos separar el sufijo -chi, y tener ruwa-ku-ni; o podemos separar el sufijo -ku y tener ruwa-chi-ni; o podemos quitar los dos sufijos y tener simplemente ruwa-ni. b) “Los morfemas concatenados (aglutinados) se muestran de manera isomórfica (= de una misma forma), a lo largo de toda la gramática”. c) “Los elementos aglutinados muestran una solidaridad formal-semántica biunívoca, donde a cada forma corresponde un significado y viceversa.” Sin embargo, el significado de algunos sufijos puede tornarse complicado por las variaciones y sutilezas que se dan en el uso, como veremos más adelante. 2.1 Fonología 2.1.1 Vocales Al nivel fonémico, las vocales del quechua son tres: /i, u, a/. Al nivel fonético, hay una variación muy grande en los tres fonemas y según hablantes y variantes regionales. La tendencia predominante en Bolivia ha sido la caracterización de las vocales solamente incluyendo las variantes abiertas de las vocales cerradas, como se presenta esquemáticamente en el cuadro siguiente. Cuadro 2 Vocales del quechua boliviano Anteriores Cerradas Medias Abiertas (Fuente: Plaza 2005: iv). Centrales Posteriores i u [e] [o] a 222 lenguas de bolivia En la pronunciación opera, casi sin excepciones, una simple regla de distribución complementaria. Las vocales se actualizan fonéticamente como vocales medias (abiertas) si hay presencia de una consonante post­velar en la palabra. pisi tinku chimpu killa qeru / qero ‘poco’ ‘encuentro’ ‘marca’ ‘luna’ ‘vaso’ puka tuta ch’uspi k’ullu q’otu rojo’ ‘noche’ ‘mosca’ ‘madero’ ‘bocio’ suqta seis’ Es decir que las vocales /i, u/ se actualizan fonéticamente como [e, o] respectivamente, solo en presencia de una consonante postvelar; es decir, un caso claro de distribución complementaria. 2.1.2 Consonantes Las consonantes del quechua se caracterizan por la presencia de las postvelares y las laringales (oclusivas aspiradas y glotalizadas). El Alfabeto Único, promulgado por el Ministerio de Educación y Cultura, establece 25 fonemas consonantales para el quechua en Bolivia. Cuadro 3 Consonantes del quechua boliviano Oclusivas & africadas Bilabiales Dento-alveolares Palatales Velares Simples p t ch k q Aspiradas ph th chh kh qh Glotalizadas p’ t’ ch’ k’ q’ s (sh) j (x) Fricativas Laterales Nasales m Vibrante l ll n ñ Postvelares r Semivocales w y (Fuente: Plaza 1995: 58) Las consonantes africadas, representadas en el cuadro por <ch>, <chh> y <ch’>, han sido ubicadas en la fila de las otras consonantes oclusivas con el fin de simplificar la presentación y no priorizar la descripción lingüística sobre la funcionalidad de la escritura. Además se incluyen las variantes fonéticas principales (léase, las que provocaban controversias en esos momentos) entre paréntesis, indicando que no es necesario escribirlas. En el caso de las vocales, se indicaba que se podía escribir con tres o cinco vocales. A continuación presentamos el cuadro de consonantes del quechua en Alfabeto Fonético Internacional (AFI), incluyendo las variantes más salientes que se encuentran en el quechua en Bolivia. Cuadro 4 Consonantes quechuas (AFI) Bilabiales Dento-alveolares Palatales Velares Postvelares p [b] t [d] t� k [g] q [G] Aspiradas ph th t�h kh qh Glotalizadas p’ t’ t�’ k’ q’ Fricativas s [z] [x] [χ] Laterales l [�] λ n () Oclusivas & africadas Nasales Simples m Vibrante Semivocales R w j Glotales h 223 quechua 2.1.3 Estructura de la palabra y la sílaba La sílaba en quechua se constituye en base a una vocal precedida y / o seguida por una consonante, incluyendo entre estas a las semivocales. Los patrones son los siguientes: V VC CV CVC [a.ma] [is.ta.a] [tu.suy] [chum.pi] ‘no’ ‘bolsa’ ‘bailar ‘ceñidor, faja, cinturón’ [ay.say] ‘jalar’ [chaw.pi] ‘medio’ Todas las combinaciones son posibles para formar palabras, excepto que no puede haber secuencias de vocales sin que por lo menos haya un margen entre ellas; tampoco pueden haber dos consonantes juntas en una sílaba: CCV, o VCC. Las marcas de glotalización y aspiración no se consideran consonantes aparte, sino que constituyen una sola unidad ligadas al segmento consonantal respectivo. Las palabras quechuas se forman en base a estas sílabas, con una restricción, característica del quechua: no puede haber más de una laringal en cada palabra (como puede ser en aimara, por ejemplo). Además, casi siempre las laringales aparecen en la primera sílaba. K’allku-ya-pu-sqa. agrio-trf-ben-pas.nar ‘Se había agriado.’ Phaska-ri-mu-chka-nku. desatar-inc-cis-dur-3pl ‘Están yendo a desatar (algo).’ Observemos, además, la tendencia de representación de los sufijos siguiendo la estructura de las sílabas. Es decir, cada sufijo se representa por una sílaba. 2.1.4 Acentuación de las palabras quechuas La acentuación de las palabras quechuas es regular, el acento recae en la penúltima sílaba de la palabra. Ejemplos: lláqta pueblo ‘el pueblo’ llaqta-káma pueblo-lim ‘hasta el pueblo’ llaqta-kamá-lla pueblo-lim-del ‘solamente hasta el pueblo’ El acento va recorriendo hacia la penúltima sílaba a medida que se agregan más sufijos a la palabra. Hay sin embargo, algunas excepciones a esta regla. arí ‘sí’ se diferencia de ari ‘pues’: Arí, jamu-waq. sí venir-2.pot ‘Sí, deberías venir.’ Jamu-waq ari. venir-2.pot pues ‘Deberías venir pues.’ El sufijo ignorativo-asertivo -chá ‘no se sabe pero se supone que así es’ también tiene acento. Pay-chá jamu-chka-n. él/ella-ign venir-dur-3 ‘El / ella seguramente está viniendo.’ (La implicación es que no sé realmente, pero supongo que así es.) 224 lenguas de bolivia El sufijo admirativo -má implica admiración: Pay-má jatun-qa. él/ell-adm grande-top ‘Ella sí que es grande.’ 2.2 La normalización de la escritura del quechua De acuerdo al análisis de la distribución complementaria de las vocales, desde la lingüística descriptiva se propuso un alfabeto solamente con tres letras para representar las vocales (además de otras soluciones también basadas en el análisis fonológico). Pero también hubo propuestas basadas en cinco vocales que desde los años cincuenta del siglo pasado e incluso hasta hoy continúan provocando discusiones. Este es otro ejemplo de cómo el destino del quechua (y de las otras lenguas indígenas del país) está ligado al contacto con el castellano, la lengua dominante. La introducción de préstamos del castellano ha contribuido a sustentar la posición pentavocálica. Los préstamos del castellano son abundantes en el quechua hablado actual, pero recordemos que la tendencia a la introducción de términos castellanos fue muy fuerte desde los tiempos coloniales, por la política lingüística de predicar en la lengua de los mismos indígenas. Así, […] los frailes hispanos repiten en quechua al indio naturalista adorador del sol y los luceros, y sacrificador de llamas o de niños, los primeros artículos de fe del dogma católico: “Inti, Quilla, Coyllorcuna, Chasca Coyllor, Choque Ylla, Huaca, Villcacuna … Manan Dioschu chaychaycunaca, Diospa canascallanmi, rurascallanmi. Cay Capac Diosmi, hanac pachacta, cay pachacta, llapa ymaymana, haycaymana, hanavpachapi cay pachapi cactahuampas, runap allinimpac camarcan.” “El Sol, la Luna, Estrellas, Luzero, Rayo, Huaca, ídolo, Cerro … no son Dios, mas son hechura de Dios, que hizo el cielo, la tierra, y además todas las cosas, para el bien del hombre” (Porras Barrenechea 1952: 8). La introducción de los nuevos conceptos culturales, en este caso, religiosos, da lugar a traducciones o más simplemente a la transferencia de términos, o sea da lugar a los préstamos lingüísticos, que como señala Calvet (1981) casi nunca se devuelven. En el segmento citado no solamente apreciamos la introducción de las nuevas ideas religiosas, sino también el préstamo ‘Dios’ y que además del concepto introduce la consonante /d/ y la vocal /o/. En la escritura además aparecen algunas combinaciones propias del castellano como la <qu> y <ch> en ‘choque’, y la introducción casi natural de las vocales abiertas /o/ y /e/ del castellano. Esta tendencia se ha mantenido a través de los años (v.gr. escribir el quechua en base a las convenciones ortográficas y características fonológicas del castellano). Pero el contacto de casi 500 años con el castellano ha ido teniendo sus efectos en todos los niveles de la lengua quechua, aun cuando sin haberla rebasado completamente. En algunos dialectos hay una tendencia a la refonemización de las vocales cerradas y medias (i-e, u-o) que ha determinado nuevas distinciones, básicamente debido a la incorporación de préstamos del castellano. Albó proporcionaba hace años las distinciones entre los siguientes dos préstamos del castellano, corrientes en el uso actual: misa (liturgia) vs mesa (mueble) y luru (pepa del durazno, < ruru) vs loro (ave). También hay algunas palabras que tienen vocales medias cuando según la regla de distribución complementaria de las vocales se debería tener una vocal cerrada: t’ola ‘arbusto, oreganillo’, totora ‘junco’, sinqa ó senqa ‘naríz’, koka ‘coca’, kosa ‘bueno’ Estas y otras palabras se pronuncian con vocales medias, dando soporte a la posición pentavocalista. Estas variaciones además de la influencia de la alfabetización en castellano ha determinado por lo menos en los últimos cincuenta años desacuerdos y discusiones sobre la escritura del quechua (cf. Plaza 2008). La gran controversia es si se debe escribir con tres vocales, como lo plantean en general los lingüistas, o con cinco vocales, como lo promueven los aficionados, incluyendo paradójicamente algunos miembros de la Academia 225 quechua de la Lengua Quechua en Cochabamba. Sin embargo, esta discusión también se produce en el Perú y las escaramuzas entre partidarios de estas propuestas trivocalistas o pentavocalistas continúan. Las controversias y el uso de las cinco vocales, sin embargo, no han terminado. En el uso popular, en los letreros de restaurants, en la televisión todavía se siguen usando las cinco vocales y otras formas de escritura de las consonantes en disonancia con los procesos de estandarización y normalización de la escritura del quechua. Las controversias y el uso de las cinco vocales, sin embargo, no han terminado. En el uso popular, en los letreros de restaurants, en la televisión todavía se siguen usando las cinco vocales y otras formas de escritura de las consonantes en disonancia con los procesos de estandarización y normalización de la escritura del quechua. En lo que respecta a las consonantes, de manera similar, ha habido desacuerdos aunque no con la misma intensidad que el tema de las vocales. Aquí también las discrepancias surgen por la influencia de la fonología y ortografía del castellano. No hubo, sin embargo, casi ninguna discusión con respecto a la representación de las consonantes b, d, g, propias del castellano; la solución fue la refonemización de las palabras con estas consonantes: burro [buzo] se escribió <wuru>. Tampoco se debatió mucho la escritura de las variantes fonéticas, como por ejemplo, la [G] que algunos en Cochabamba escribían como <g>, ñuqanchis ‘nosotros’. En todo caso, los préstamos del castellano, han estado introduciendo no solamente la distinción entre vocales altas y medias del castellano (<i, e> vs. <u, o>), sino también consonantes sonoras como <b>, <d>, <g>. ima dakuwan entablay denorí latabaso mesakajón ‘qué me importa’ ‘tomar el pelo’ ‘o sino’ ‘vaso de lata’ ‘cajón de la mesa’ Uno de los problemas fue introducido por las Sociedades Bíblicas y el Instituto Lingüístico de Verano (ILV), principalmente por su deseo de facilitar la transición de la lengua indígena a la escritura del castellano, por ejemplo en el caso de la escritura de la /k/ se propuso escribir <ka>, <ko>, <ku>, <que> y <qui>, siguiendo el sistema del castellano. Esta posición fue superada a partir de 1984 con la aprobación del Alfabeto Único para el quechua y el castellano. Otro problema mayor tuvo que ver con la escritura de las consonantes oclusivas p, t, ch, k, q en posición final de sílaba. En el caso de la <k> y la <q> en esta posición, en palabras como /lliklla/ ‘tejido’, /pukllay/ ‘jugar’; /llaqta/ ‘pueblo’, /akllay/ ‘escoger’, /suqta/ ‘seis’ se establece una distinción fonémica, /k/ diferente de /q/. Sin embargo, en el quechua boliviano, se perdió la distinción entre /k/ y /q/ en posición final de sílaba. Una tendencia fue ignorar la diferencia entre /k/ y /q/ en posición final de sílaba y escribir todo con <j> como lo hace, por ejemplo, el escritor Jesús Lara (1997), cuyo Diccionario ha sido el más comercializado en Bolivia. Cuando el Alfabeto del Instituto Indigenista Interamericano, aprobado en 1951, establece la distinción, la tendencia fue a escribir la /k/ con <j> y la /q/ con doble jota <jj>. Así llijlla, llajjta. Afortunadamente, a partir del Alfabeto Único que evita el uso de la doble jota (o la letra <x> adoptada para el aimara) se propone más bien utilizar la letra <q>, y se va cayendo en cuenta que hay una distribución complementaria entre las consonantes oclusivas antes y después de vocal en la sílaba. Como señala Cerrón-Palomino, en los dialectos sureños ha habido un proceso de debilitamiento (1987: 169), traducido en una “espirantización” de las consonantes oclusivas (1987: 176-181). En el caso boliviano, las consonantes oclusivas finales de sílaba se han transformado en fricativas, como en los ejemplos que siguen: /llipt’a/ [llixt’a] /thatki/ [thaski] /phuchka/ [phushka] /lliklla/ [llijlla] /llaqta/ [llaxta] Finalmente otro problema con la normalización de la escritura del quechua fue la escritura básicamente de cuatro morfemas: durativo -chka, plural -chik, conectivo -pti, y el -pa genitivo (cf. Heggarty s/f). Aquí el 226 lenguas de bolivia problema se presenta porque la realización fonética o fonémica de estos morfemas varía ampliamente en los dialectos quechuas en Bolivia, como se presenta en el cuadro a continuación. Cuadro 5 Realización de algunos elementos del quechua boliviano en dialectos distintos Morfema Variantes <chka> <shka> <chcha> <sha> <sa> <ja> Dialectos -chka [t∫ka] [∫ka] [t∫:a] [∫a] [∫a] [ha] -chik [nt∫is, nt∫aχ] <nchis, nchaq> [nt∫eχ] <ncheq> [nt∫ik] <nchik> Cochabamba Potosí, Chuquisaca Chuquisaca, rural -pti [χti]5 Bolivia -pa [χ, pa] <q, pa> Bolivia -mi [n, mi, min] Norte de Potosí <qti> Norte de La Paz Norte de Potosí, rural Norte de La Paz, Niño Corín Potosí, Chuquisaca, pueblos Cochabamba Chuquisaca, rural En Bolivia el problema de las vocales se zanjó eclécticamente en 1984, en el INA bajo mi dirección, en ese entonces. Puesto que ninguno de los bandos daba brazo a torcer y dada la urgencia de la definición de un alfabeto para la campaña de alfabetización del SENALEP, en esta reunión del INA, se aceptó que se podría escribir tanto con tres como con cinco vocales, dependiendo del escritor. Con esto, ambos bandos quedaron contentos y la difusión (y consecuentemente, la estandarización del alfabeto) ahora dependería de la producción de textos por parte de sus proponentes. Inmediatamente después el Ministerio de Educación promulgó el Alfabeto Único para el Quechua y el Aymara, incluyendo el cuadro anterior para las vocales, anotando que las vocales entre paréntesis (e, o) eran fonéticas, pero que se las podría incorporar en la escritura opcionalmente. En las cartillas publicadas por SENALEP (en 1983) para su campaña masiva de alfabetización se empezó a utilizar el alfabeto único, utilizando las tres vocales. Luego, el PEIB (1990-94) también introdujo las tres vocales a la enseñanza del quechua (y del aimara) en las aulas bilingües. Finalmente, el mismo alfabeto único, utilizando solamente las tres vocales, fue utilizado extensivamente por la REB (1994-2005), difundiendo esta versión del alfabeto, además de iniciar seriamente la normalización de la escritura del quechua, consolidando de este modo la utilización de la versión trivocálica al nivel de la educación primaria. En el marco de la REB, se publicó la cartilla autoinstructiva Qhichwata Qillqanpaq (Plaza 1995), con una tirada de 60.000 ejemplares. Más adelante, el PROEIB Andes realizó, a pedido del MEC, una capacitación en Lectura y Producción de Textos en quechua, aimara y guaraní (PCLPT), también utilizando el alfabeto único con las tres vocales fonémicas. En este programa se capacitó a más de 10.000 maestros bilingües quechuas, aimaras y guaraníes. Posteriormente, los alfabetos oficializados, incluyendo el Alfabeto Oficial Único para el Quechua y el Aymara, se utilizaron de manera exclusiva en las aulas bilingües de la Programa de Reforma Educativa (1995-2005, aunque actualmente en las escuelas bilingües que persisten se siguen utilizando estos alfabetos). Esta utilización de los alfabetos y escrituras normalizadas por el Ministerio de Educación, en gran medida, han ido cambiando las percepciones y adhesiones hacia los alfabetos, determinando una mayor aceptación de los alfabetos normalizados. 5 En las variantes del quechua en Bolivia, el conectivo se pronuncia [ti], aunque en la escritura normalizada se utiliza -pti. 227 quechua 2.3 La escritura normalizada A partir de la publicación y uso de las cartillas autoinstructivas para el quechua, aimara y guaraní, se fueron difundiendo los principios de la escritura normalizada. En la cartilla Qhichwata Qillqanapaq (Plaza 1995: iv-vi) se proponían, entre otros, los siguientes principios y reglas. Los principios de la escritura normalizada son los siguientes: La escritura y la pronunciación son dos niveles de representación diferentes; la escritura no impide la pronunciación local o regional; la escritura no debe ser reducida a lo fonémico y local: la escritura al trascender los límites locales y fonémicos debe ser estudiada y aprendida. Reglas para escribir el quechua: Las grafías entre paréntesis constituyen variantes de la pronunciación y no se utilizan en la escritura ,normalizada. Para las vocales solamente hay necesidad de escribir las tres letras siguientes: <i>, <u>, <a>. Las letras <i>, y <u> responden a la regla de pronunciación siguiente: i u → → → → [e] [i] [o] [u] cuando hay /q/ en la palabra: cuando no hay /q/ en la palabra: cuando hay /q/ en la palabra: cuando no hay /q/ en la palabra: irqi simi urqu muju → → → → [erqe] [simi] [orqo] [muju] Para las consonantes <ch>, <k>, y <q> opera una regla similar. Estas letras tienen dos pronunciaciones: una oclusiva delante de vocal y otra fricativa detrás de vocal en la sílaba. ch → k → q → [ch] [S] [k] [x] [q] [X] delante de vocal: detrás de vocal: delante de vocal: detrás de vocal: delante de vocal: detrás de vocal: chunka phuch-ka kancha lliklla qallpa llaqta → → → → → → [chunka) [phuSka) [kancha) [llixlla) [qallpa) [llaXta) Algunos morfemas trascienden la escritura fonémica y requieren de una escritura basada en la morfología. Orden alfabético de las letras quechuas: a, ch, chh, ch’, i, j, k, kh, k’, l, ll, m, n, ñ, p, ph, p’, q, qh, q’, r, s, t, th, t’, u, w, y Cuadro 6 El alfabeto quechua a allqu ‘perro’ p puka ‘rojo’ ch chumpi ‘faja’ ph phuru ‘pluma’ chh chharpu ‘borroso’ p’ p’akiy ‘romper’ ch’ ch’iru ‘astilla’ q qam ‘tu’ i inti ‘sol’ qh qhaway ‘mirar, cuidar’ j jampi ‘remedio’ q’ q’iru ‘vaso’ k kancha ‘cancha’ r rumi ‘piedra’ kh khituy ‘frotar’ s saphi ‘semilla’ k’ k’antiy ‘entorcelar’ t tapuy ‘preguntar’ l layqa ‘brujo’ th thuta ‘noche ll llama ‘llama’ t’ t’usu ‘pantorrilla’ m mama ‘mamá, madre’ u urmay ‘caer’ n nina ‘fuego’ w wawa ‘criatura, niño’ ñ ñawi ‘ojo’ y yapa ‘aumento’ (Fuente: Plaza 2005: vi) 228 lenguas de bolivia 2.4 Morfología y clases de palabras 2.4.1 Raices Las raíces llevan el significado léxico de las palabras (por ejemplo, puklla- ‘jugar’, es diferente de mikhu‘comer’). Todas las palabras tienen una raíz, pero algunas pueden ocurrir en forma aislada (formas libres), en cambio, otras, como los verbos en quechua precisan por lo menos de un sufijo (formas ligadas). Hay tres clases de raíces libres: los nombres, los ambivalentes y las partículas. 2.4.1.1 Raices nominales Las raíces nominales (N) como expresión de palabras léxicas pueden aparecer en forma autónoma, aunque normalmente vienen acompañadas de sufijos, ej. urqu: ‘cerro’, jaqay urqu k’achitu ‘aquel cerro es bonito’. Las raíces nominales pueden ser modificadas por sufijos flexivos y / o derivativos. 2.4.1.2 Raices ambivalentes Una raíz ambivalente puede comportarse como un nombre o como un verbo dependiendo del contexto. Según Cerrón-Palomino (1994: 79), en el quechua es muy común esta “doble valencia” como por ejemplo: Cuadro 7 Raices ambivalentes Raíz t’ika pirqa ñawi q’uñi Nombre flor pared ojo caliente Verbo florecer construir muro mirar calentar Se determinarán como verbo o nombre de acuerdo a los sufijos con los que se combinen. Básicamente, para la constitución del verbo es necesario incluir tiempo y persona. 2.4.1.3 Partículas Los elementos que corresponden a esta categoría son formas libres igual que los nombres. La diferencia es que las partículas no se combinan con los sufijos flexivos ni derivativos nominales ni verbales sino sólo se combinan con los sufijos independientes, como por ejemplo: mana + raq ‘todavía no’ (Cerrón-Palomino 1987: 264). Las partículas más productivas en el quechua boliviano son arí ‘sí’, mana ‘no’; ichá ‘tal vez’. 2.4.2 Morfología nominal La categoría gramatical de persona es muy importante en la cosmovisión quechua (Plaza 1987: 179), ya que aparece en varios paradigmas: pronombres personales, posesivos y terminaciones verbales. También aparece en los pronominales (o pronombres objetivos) que marcan la persona ‘objeto’ en los verbos. 2.4.2.1 Pronombres Personales En quechua los pronombres personales son tres: primera, segunda y tercera persona, que pueden aparecer en singular y plural. La primera persona plural, además, se ramifica en inclusivo y exclusivo. En el cuadro siguiente se presentan los pronombres, incluyendo a los plurales. 229 quechua Cuadro 8 Pronombres personales Singular Pronombre personal 1 2 3 Plural 1-pi 1-pe 2-pl 3-pl Traducción ñuqa qam pay ‘yo’ (el hablante solo) ‘tu’ (el oyente solo) ‘él, ella’ ñuqa-nchik ñuqa-yku qam-kuna pay-kuna ‘nosotros’ (yo y vos-otros) ‘nosotros’ (yo y otros menos tú) ‘ustedes’ ‘ellos, ellas’ 2.4.2.2 Sufijos posesivos Estos sufijos son los que denotan posesión o pertenencia tanto a personas, animales o cosas terminadas en vocal. Cuadro 9 Sufijos posesivos Singular Sufijos posesivos Ejemplos 1 2 3 -y -yki -n p’anqa-y ‘mi libro’, chumpi-y ‘mi cinturón’ tata-yki ‘tu padre’, chakra-yki ‘tu tierra’ ñaña-n ‘su hermana’, qullqi-n ‘su dinero’ 1pi 1pe 2pl 3pl -nchik -yku -ykichik -nku llaqta-nchik ‘nuestro país’, waka-nchik ‘nuestra vaca’ papa-yku ‘nuestra papa’, aqha-yku ‘nuestra agua’ wasi-ykichik ‘vuestra casa’, michi-ykichik ‘vuestro gato’ chupa-nku ‘sus colas’, qhatu-nku ‘su mercado’ Plural Pero cuando la palabra termina en consonante <y, w, r, s, n> se recurre a la partícula -ni, comunmente conocida como ‘eufónica’. Asi: kawsay-ni-y vida-euf-1 ‘mi vida’ sipas-ni-yki joven- euf-2 ‘tu hija’ (lit. tu jóven) kuntur-ni-n cóndor-euf-3 ‘su cóndor (de él, de ella)’ 2.4.2.3 Sufijos pluralizadores -kuna. Tradicionalmente el plural se marca con el sufijo -kuna. Quiróz (2000: 71) dice: “que agregado a la palabra pluraliza en forma similar a la “s” del castellano”. Por ejemplo: wasi-kuna qhari-kuna allqu-kuna p’isqu-kuna ‘casas’ ‘hombres’ ‘perros’ ‘aves’ Sin embargo, hay situaciones donde la diferencia entre singular y plural no aparece marcada. Uwija-ta kampu-man qhati-chka-n. oveja-ac campo-al arrear-dur-3 ‘Está arreando la oveja (o las ovejas) al campo.’ 230 lenguas de bolivia Por otro lado, el sufijo -kuna se utiliza también para indicar grupos o clases compuestas de individuos, elementos del mismo tipo. Así: Warmi-kuna sumaq-ta awa-nku bonito-ac tejer-3pl mujer-pl ‘Las mujeres tejen bonito.’ (implica las personas que pertenecen a la clase warmi ‘mujer’) Cabe añadir que la -s que marca el plural en el castellano ya es común en el habla popular, como en una canción que se escuchaba en pueblos del Norte de Potosí, cantada por los vecinos. p’isqu-s-qa ave-pl-top pata arriba pajaro-s-qa pájaro-pl-top pata-manta arriba-abl chullu-q picar-ag ka-sqa ser-pas.nar durazno-s-ta durazno-pl-ac ‘las aves, los pájaros de la parte de arriba habían sabido, picar los duraznos’ -pura. Generalmente se utiliza para marcar actividades realizadas entre personas de la misma clase. Qhari-pura maqa-na-ri-ku-nku. hombre-entre pelear-rec-inc-rfl-3pl ‘Se han peleado / se pelean entre hombres.’ (se implica solamente entre hombres) Reduplicación. Una forma de plural se obtiene por la reduplicación de la palabra. Rumi-rumi-lla chay ñan-qa. piedra-piedra-del ese camino-top ‘Ese camino estaba lleno de piedras / era un camino pedregoso.’ Aquí la traducción engaña y aparece el plural, pero el sentido de la reduplicación apunta más bien a la creación de sustantivos colectivos. Plural en las terminaciones verbales. El plural de las personas se marca con las partículas -chik para la 1pi y para la 2pl, y -ku para la 1pe y la 3pl. 2.4.2.4 Sufijos nominales de caso Según, Quiróz (2000: 70-91), cuyos conceptos y ejemplos reproducimos en este apartado, los casos en el quechua son: nominativo, genitivo, acusativo, ilativo,6 ablativo, locativo, instrumental, benefactivo, limitativo, causal, comparativo y transitivo. Nominativo. El caso nominativo designa el sujeto de la oración. No tiene marca, como podemos ver en el siguiente ejemplo: 6 De acuerdo con la tradición vigente en la lingüística andina, en este capítulo se usa el termino ‘alativo’ en vez de ‘ilativo’ para este caso. 231 quechua Allqu aycha-ta mikhu-n perro carne-ac comer-3 ‘El perro come carne.’ Sin embargo, en el uso cotidiano del quechua esta utilización no es usual. El uso sin marcas de los nombres aparece en las producciones de hablantes semilingües del quechua que se dejan entender recurriendo a las palabras léxicas y dejando de lado los significados que proporcionan los sufijos. En el ejemplo, la tendencia será calificar allqu ya sea con un adjetivo demostrativo (chay allqu ‘ese perro’) o un marcador oracional (­allqu-qa … ‘el perro …’, allqu-chu… ‘es el perro … ?’), por lo menos. Genitivo. Este sufijo marca la persona posesora (el que posee algo). En el quechua boliviano, el genitivo tiene varias representaciones fonéticas: [X] cuando la raíz termina en vocal, que se escribía con ­-q en la escritura con base fonológica, y que se escribe con -p en la escritura normalizada actual; [paX] cuando la raíz termina en consonante y que se escribía -paq; y [pa] cuando se combina con el acusativo -ta. En la escritura normalizada, sin embargo, la tendencia ha sido utilizar -p cuando la raíz termina en vocal y -pa cuando la raíz termina en una consonante. Por ejemplo: k’anka-p k’akara-n [X] gallo-gen cresta-3 ‘la cresta del gallo’ tatay-pa wasi-n [paX] padre-gen casa-3 ‘la casa de mi padre’ Esta regla también se aplica a los pronombres personales sin ninguna variación, excepto en la primera persona inclusiva plural. En estos ejemplos, utilizamos la escritura fonémica. 1sg 2sg 3sg 1pi 1pe 2pl 3pl ñuqa-q llaqta-y yo-gen pueblo-1 qam-paq chakra-yki tú-gen chacra-2 pay-paq corral-ni-n él/ella-gen corral-euf-3 ñuqanchi-q llaqta-nchik < ñuqa-nchik-paq nosotros.pi-gen pueblo-1pi ñuqayku-q llaqta-yku nosotros.pe-gen pueblo-1pe qam-kuna-q chakra-ykichik tú-pl-gen chacra-2pl pay-kuna-q corral-ni-nku él/ella-pl-gen corral-euf-3pl En el caso de la 1pi, la irregularidad se presenta en las variantes que actualizan el plural -nchik como [ncheX], donde la [X] al parecer se interpreta como la marca del genitivo. La forma [-pa] aparece en las construcciones donde el nombre poseído se suprime y se reemplaza por el acusativo -ta, como en los ejemplos que siguen: pregunta: respuesta 1: Pi-qta-taq chay chakra? quién-gen-enf ese terreno Ñuqa-q-ta. / Ñuqa-y-paqta. yo-gen-ac / Ñuqa-y-pa-ta. 232 lenguas de bolivia respuesta 2: respuesta 3: respuesta 4: pregunta: respuesta: Qam-paq-ta. / Qam-pata. tú-gen-ac Pay-paq-ta. / Pay-pata. él/ella-gen-ac Ñuqanchiq-ta. / Ñuqanchiq-pa-ta. yo-gen-ac ‘¿De quién es ese terreno?’ ‘Es mío, tuyo, suyo, nuestro.’ En la primera persona singular, la forma regular es ñuqa-q-ta, pero también hay una inclusión irregular de -y, como en ñuqa-y-pa-ta ‘mío, mía’ que aparece en la variante del Norte de Potosí. Acusativo -ta. Este sufijo indica la persona, animal o cosa donde recae la acción del verbo. El sufijo -ta dentro de la oración quechua es el marcador del complemento directo. Imill-ita-s-qa maki-lla-nku-wan rumi(ta) wikch’u-mu-nku. niña-dim-pl-top mano-lim-3pl-ins piedra-ac botar-cis-3pl ‘Las niñitas con sus manos nomás tiran las piedras’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 116) Peralta (2006: 58), encuentra que el acusativo -ta tiene las siguientes nociones, a) es marcador de objeto directo, b) señala meta, y con su alternante -nta, c) como trayector, señala por dónde se va. a) -ta, como objeto directo tata-n-ta yanapa-n padre-3-ac ayudar-3 ‘ayuda a su padre’ Ch’uñu-ta ruwa-nchik, chay-pi chay-ta saru-nchik. ese-loc ese-ac pisar-1pi chuño-ac hacer-1pi ‘Hacemos chuño, ahí pisamos eso.’ (Peralta 2006: 15)7 b) -ta, como marcador de meta Jamu-ni-puni tiyu-s-ni-y-ta a! venir-1-cert tío-pl-euf-1-ac excl ‘Vengo siempre pues a donde mis tíos.’ (Peralta 2006: 17) c) -n-ta, como trayector, señala por dónde se va Toro-Toro-nta, Toro-Toro-tra auto auto ñan camino ka-pti-n, ser-sub-3 chay-ta-ña ese-ac-ya auto-qa auto-top tukuy tiempo-ta yayku-mu-nqa a! todo tiempo-ac entrar-cis-3.fut excl ‘Cuando haya camino por Toro-Toro, por ahí el auto vendrá pues!’ (Peralta 2006: 18) 7 En los ejemplos de la tesis de Peralta, los números después del año indican el número del ejemplo y no la página. 233 quechua d) -ta, también se utiliza para marcar los adverbios kay qullqi pisi-y-qa ancha-ta sukri-chi-ku-n este dinero disminuir-inf-top mucho-ac sufrir-caus-rfl-3 ‘esta falta de dinero hace sufrir mucho’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 51) Imillitasqa maki-lla-nku-wan rumi(ta) niña-dim-pl-top mano-lim-3pl-ins piedra-ac ‘Las niñitas con sus manos nomás tiran las piedras.’ wiqch’u-mu-nku. botar-cis-3pl Jatari-ku-y utqhay-ta wikch’u-y-chik ñi-spa ñi-na-ku-nku. levantarse-rfl-imp rápido-ac botar-imp-2pl decir-sub decir-rec-rfl-3pl ‘Levántate, rápido, “tiren” diciendo se dicen una a otra’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 116) Alativo -man ‘hacia, a’. Indica el destino a que se encamina el movimiento. El sufijo -man es el marcador del complemento indirecto. También se denomina direccional. En Peralta (2006: 60-62), el alativo -man indica: a) dirección espacial de la acción hacia un objeto, b) dirección temporal, c) objeto indirecto y d) razón, motivo de la acción verbal. Veamos los ejemplos: a) -man, señala dirección espacial: Ñuqa-qa wasi-y-man casa-1-al yo-top ‘Voy a mi casa.’ … tuta-pacha … noche-desde ri-ni. ir-1 ri-pu-q ir-ben-ag ka-yku ser-1pe a!, excl kay este animal-es-ni-ntin animal-pl-euf-col cueva-s-man, sach’a ura-s-man, monte-s-man … cueva-pl-al bosque árbol-pl-al monte-pl-al ‘ … tarde en la noche, teníamos que irnos pues!, junto con estos animales, a las cuevas, bajo los árboles, hacia los montes …’ (Peralta 2006: 19) b) -man, señala dirección temporal: Chay-manta-qa ese-abl-top descansa-yku descansar-1pe hasta las dos de la tarde. hasta las dos de la tarde Ya dos y media-ta-taq yayku-lla-yku-taq tarde-man. ya dos y media-ac-enf entrar-del-1pe-enf tarde-al ‘Después descansamos hasta las dos de la tarde. Ya, a las dos y media entramos nuevamente al turno de la tarde.’ (Peralta 2006: 20) c) -man, marca al objeto indirecto o adverbial: … pero turno-pi jamu-chka-n, toca-wa-nqa ñuqa-man-pis arí … pero turno-loc venir-dur-3 tocar-1.o-3.fut yo-al-adi pues ‘… pero en turno está viniendo, me tocará a mí también pues’ (Peralta 2006: 21) 234 lenguas de bolivia d) -man, indica razón, motivo de la acción verbal: … tukuy … todo ima-paq qué-ben puri-nchik campo-pi-qa. caminar-1pi campo-loc-top llamt’a-man-pis leña-al-adi ri-nchik juk monte tiya-n, llamt’a-ta apa-mu-yku. ir-1pi uno monte estar-3 leña-ac llevar-cis-1pe ‘… para todo tenemos que caminar en el campo. Por leña también vamos, leña nos traemos.’ (Peralta 2006: 22) Ablativo -manta (de). El ablativo -manta, en general, indica procedencia: la acción del verbo parte o viene de la palabra marcada con este sufijo. Entre los usos de este sufijo destacamos los siguientes: a) indica procedencia espacial, b) procedencia temporal, c) procedencia de una actividad, d) el material del que está hecho algún objeto, e) el motivo de la conversación, f) especifica una parte o esencia, g) señala un rol adoptado. a) -manta indica procedencia espacial; de, desde un lugar, un objeto, persona: llaqta-manta jamu-nku pueblo-abl venir-3pl ‘vienen del pueblo’ Mama-y-qa Cenajo-manta. mamá-1-top Cenajo-abl ‘Mi mamá es de Cenajo.’ wañu-q irmana-y-manta qullqi-ta manu-ku-sqa morir-ag hermana-1-abl dinero-ac prestarse-rfl-pas.nar ‘se había prestado dinero de mi hermana finada’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 150) b) -manta procedencia temporal, desde un punto en el tiempo: Chay-pi-qa ese-loc-top ka-n ser-3 lurasnu durazno wirta, huerta unay-manta hace.tiempo-abl pacha-puni tiempo-cert ka-sqa. ser-pas.nar ‘Ahí había habido una huerta de duraznos, desde hace mucho tiempo.’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 97) c) -manta a partir de una actividad, implica una consecuencia a la dicha actividad: Chanta luego jina-man-qa así-al-top rikch’a-ni, despertar-1 puñu-sqa-y-manta-qa, dormir-nml-1-abl-top sumaq mancha-ri-sqa. muy asustar-inc-nml ‘Entonces de ese modo me despierto, de haber estado durmiendo, muy asustado.’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 38) d) -manta señala material: Kustala-n-qa yana q’aytu-manta ka-sqa. costal-3-top negro hilo-abl ser-pas.nar ‘Su costal era de hilo negro.’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 147) 235 quechua e) -manta motivo de la conversación: Chay-pi-qa ese-loc-top rima-y-qa hablar-nml-top jampi medicinal sach’a-s-manta, árbol-pl-abl jampi lanta-s-manta parla-ku-n. medicinal planta-pl-abl hablar-rfl-3 ‘Ahí la conversación es de árboles medicinales, se habla de plantas medicinales.’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 108) f) -manta una parte, esencia: Chanta luego kuti-spa regresar-sub ñuqa-qa yo-top wawa-s-ta-qa aysa-mu-ni niño-pl-ac-topestirar-cis-1 maki-s-ni-nku-manta. mano-pl-euf-3pl-abl ‘Luego, regresando, yo a los niños los traigo de sus manos.’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 109) g) -manta señala un rol adoptado: Pay-qa purpisur-manta llaqta-pi él/ella-top profesor-abl pueblo-loc ‘Él está trabajando de profesor en el pueblo.’ llamk’a-ku-chka-n. trabajar-rfl-dur-3 Locativo -pi ‘en’. El locativo indica el lugar donde se ubica la acción del verbo, por ejemplo: Pay-qa Cochabamba-pi él/ella-top Cochabamba-loc ‘Él vive en Cochabamba.’ tiya-ku-n. estar-rfl-3 chanta musqu-y-pi-qa ñuqa-qa ri-q ka-ni jaqay jatu luego soñar-nml-loc-top yo-top ir-nml ser-1 aquel grande ‘luego solía ir a ese río grande en mi sueño’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 7) mayu-ta río-ac Además, en Peralta (2006: 66), se señala los siguientes significados del locativo -pi. a) -pi señala ubicación temporal: Hay veces hay veces achkha mucho llamt’a leña ka-pti-n-qa ser-sub-3-top ni neg a a sapa cada diya día ri-ni-chu … ir-1-neg Hay veces-ri killa-pi achkha-s, tawa kuti-s-ta ri-ni. hay veces-topn mes-loc mucho-pl cuatro vez-pl-ac ir-1 ‘Hay veces, cuando hay mucha leña no voy pues cada día … Pero hay veces que en un mes varias, cuatro veces voy.’ 236 lenguas de bolivia b) -pi señala forma de transportarse: ¡Hasta Cliza ri-q ka-yku a!, chaki-pi. Kimsa diya-pi chaya-q tres día-loc llegar-ag hasta Cliza ir-ag ser-1pe excl pie-loc ‘¡Hasta Cliza solíamos ir pues!, a pie. En tres días llegábamos.’ (Peralta 2006: 29) ka-yku. ser-1pe Instrumental -wan ‘con’. El sufijo marca el objeto con el que se realiza la acción del verbo. También señala la persona que acompaña al nombre. Por ejemplo: chaki-wan puri-nchik pie-ins caminar-1pi ‘caminamos con los pies’ ñuqa-qa Sisa-wan yo-top Sisa-ins ‘yo hablo con Sisa’ parla-ni hablar-1 El instrumental -wan a menudo se combina con el acusativo -ta dando el significado de ‘más’, por ejemplo, en ima-ta-wan ‘¿qué más?’; también se combina con el adverbio as ‘un poco’ (o as-ta), transformándose así en un comparativo, para indicar ‘más’. Por ejemplo: Chanta luego as-ta-wan poco-ac-ins ñuqa-qa yo-top nina-ta-qa fuego-ac-top muna-chka-ni querer-dur-1 k’aja-chi-y-ta musqu-y-pi-qa. brasa-caus-inf-ac soñar-inf-loc-top ‘Entonces, yo estoy queriendo hacer arder más el fuego.’(Ilafaya & Plaza 2002.7: 55) Benefactivo -paq ‘para’. Indica la persona, animal o cosa en cuyo provecho se realiza la acción del verbo. Algunos lo conocen como dativo. mama-y-paq mamá-1-ben llamk’a-ni trabajar-1 ‘trabajo para mi mamá’ Además, en Peralta (2006: 64), encontramos otros usos del benefactivo -paq: a) -paq señala propósito o utilidad: queso-paq leche-cha urqhu-yku queso-ben leche-dim sacar-1pe ‘para hacer queso sacamos leche’ (Peralta 2006: 24) b) -paq señala el tiempo de espera para realizar una acción: Ajina-ta así-ac kay-pi-qa este-loc-top fiesta-s-paq-puni fiesta-pl-ben-cert aqha-sqayku. hacer.chicha-1pe.fut ruwa-y-ta hacer-inf-ac a. excl Kay este Chay-manta ese-abl yacha-yku saber-1pe agosto agosto aqha-qa chicha-top chaya-mu-chka-n-ña llegar-cis-dur-3-ya Todos Santos-paq … Todos Santos-ben a!, excl chay-paq ese-ben ajina fiesta-s-lla-paq así fiesta-pl-del-ben 237 quechua aqha-ri-yku. hacer.chicha-inc-1pe ‘Así pues aquí sabemos hacer chicha!, para las fiestas siempre pues. Por ejemplo, (la fiesta de) agosto ya está llegando para eso vamos hacer chicha. Después, para Todos Santos … así para las fiestas no más pues hacemos chicha.’ (Peralta 2006: 26) Limitativo -kama ‘hasta’. Indica el término o punto final de una duración o distancia. Es conocido también como ‘terminativo’. Puede tener varios significados, como en los ejemplos que siguen. a) -kama indica alcanzar un lugar, o un punto en el tiempo: Wasi-kama jamu-nki. casa-lim venir-2 ‘Vendrás hasta la casa.’ Yuqall-itu-qa muchacho-dim-top q’aya -kama mañana-lim ‘hasta mañana’ (Plaza 2005: 7) juk uno kuti-pi-qa vez-loc-top pampa-kama suelo-lim pasa-rpa-n, pasar-intl-3 uma-n-ta pampa-man taka-rpa-n yuqall-itu-qa. golpear-intl-3 muchacho-dim-top cabeza-3-ac suelo-al ‘El muchachito en cierta ocasión se pasó hacia el suelo, golpeó su cabeza en el suelo el muchachito.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 92-3) Chanta-qa luego-top siñala-nku jallp’a-pi maki-wan señalar-3pl tierra-loc mano-ins raya-nku rayar-3pl chay-kama pay-kuna-qa phinki-spa chaya-nku. ese-lim él/ella-pl-top saltar-sub llegar-3pl ‘Después señalan en la tierra, rayan con la mano, hasta ahí llegan ellos saltando.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 162) b) -kama indica el límite de tiempo: Q’aya-kama kay-lla-pi qhipa-ku-sun. mañana-lim este-del-loc quedarse-rfl-1pi.fut ‘Nos quedaremos aquí hasta mañana.’ c) -kama una actividad se realiza ‘entretanto’: Puklla-na-nku-kama mikhu-na ruphaykusqa. jugar-nml-3pl-lim comer-nml quemarse-intns-pas.nar ‘La comida se quemó / se había quemado mientras jugaban.’ Juk-ni-nku-qa uno-euf-3pl-top khuchi-ta chancho-ac kuti-chi-mu-q volver-caus-cis-ag ri-nku, ir-3pl chay-kama juk-qa picha-yku-n pampa-ta eso-lim uno-top barrer-intns-3 suelo-ac ‘Algunos de ellos van a hacer regresar los chanchos, entretanto el otro barre el suelo.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 126) 238 lenguas de bolivia d) -kama la actividad se realiza hasta lograr que la actividad se realice, o hasta el agotamiento: Sayk’u-na-nku-kama pay-kuna-qa puklla-nku. cansarse-nml-3pl-lim él/ella-pl-top jugar-3pl ‘Ellos juegan hasta cansarse.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 12) e) -kama una actividad se realiza ‘hasta lograr que la actividad del verbo se realice’: juk uno imill-ita-wan muchacha-dim-ins juk yuqall-itu-wan uno muchacho-dim-ins thanqa-spa empujar-sub tiqra-na-ku-nku asta waqa-chi-na-nku-kama. voltear-rec-rfl-3pl hasta llorar-caus-nml-3pl-lim ‘Una muchachita y un muchachito empujando(se) se voltean mutuamente hasta hacer(se) llorar.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 36) Causal -rayku ‘por’. Indica la razón u obligación por el que se realiza la acción del verbo. Por ejemplo: pay-rayku él/ella-csl jamu-rqa-ni venir-pas-1 ‘vine por él’ El pronombre demostrativo chay- se usa para componer oraciones compuestas, donde la primera oración es la causa y la segunda el efecto: Mana-a no-enf allin bueno llinphu totalmente kawsa-y-qa vivir-inf-top nuqanchik nosotros.pi kampu campo ka-n-chu ser-3-neg nuqanchik-paq-qa nosotros.pi-ben-top runa-qa gente-top wikch’u-sqa-lla-puni relegar-nml-del-cert chay-rayku eso-csl phiya-sqa-lla-puni ka-nchik. fregar-nml-del-cert ser-1pi ‘No pues, no hay buena vida para nosotros, por eso nosotros la gente del campo estamos totalmente relegados fregados.’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 23) -rayku modifica al pronombre interrogativo ima ‘qué’, para componer una pregunta causal: ima-raykutaq ‘por qué’; pero también para indicar duda con la adición del sufijo ignorativo -chus. En el quechua más conservado, las preguntas con ima-rayku-taq requieren respuestas con la nominalización obligativa (V-napersona-rayku) para indicar una acción a realizarse en el futuro, o la forma participial (V-sqa-personarayku) para indicar una acción ya realizada. Veamos los ejemplos: -rayku indica acción futura: Kuska juntos karwa-wan cabra-ins ri-na-y-rayku-qa ir-nml-1-csl-top q’ipi-ri-yku-ku-q cargar-inc-intns-rfl-nml ka-ni, ser-1 jina llasa-ta-pis ñuqa-qa. así pesado-ac-adi yo-top ‘Por ir junto con la cabra, solía cargarme, aunque sea así de pesada.’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 187) 239 quechua -rayku indica acción realizada: Kay-kuna-qa este-pl-top qhapaq ricos parti-s parte.de-pl ka-nku, ser-3pl pay-kuna él/ella-pl yayku-nku, entrar-3pl waqcha runa-s-ta ranti-spa yayku-q-kuna, qullqi-n ka-sqa-n-rayku. pobres gente-pl-ac comprar-sub entrar-ag-pl dinero-3 haber-nml-3-csl ‘Éstos son parte de los ricos, ellos entran (a algún cargo), comprando a la gente pobre, por que tienen plata.’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 160) De manera similar, la forma imarayku-chus, indica una duda, como en los ejemplos que siguen: Ima-rayku jamu-sqa? qué-csl venir-pas.nar ‘¿Por qué había venido? Ima-rayku-chus, mana yacha-ni-chu. qué-csl-ign no saber-1-neg ¿Por qué será?, no lo sé.’ Ima-rayku-taq mana jamu-n-chu? Ima-rayku-chus qué-csl-enf no venir-3-neg qué-csl-ign ‘Por qué no ha venido? No sé por qué será.’ a. excl O sea, que los pronombres interrogativos modificados por -chus no pueden utilizarse como conjunciones, como se lo ha estado haciendo en algunas variantes, como en el discurso radial. Sin embargo, estas estructuras (v.gr. obligativa y participial) están siendo substituidas con oraciones más simples pero conjuncionadas con ‘porque-chus’ o ‘imaraykuchus’ Ñuqayku-man nosotros.pe-al kay-man-qa este-al-top mana no yayku-mu-wayku-chu ima-rayku-chus entrar-cis-3>1pe-neg qué-csl-ign mana ati-nku-chu yayku-mu-y-ta. no poder-3pl-neg entrar-cis-inf-ac ‘A nosotros aquí no nos visitan porque no pueden entrar (aquí).’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 1) Comparativo -jina ‘como’. Indica una relación de comparación entre personas, animales o cosas. tata-n-jina puri-ykacha-ri-chka-n padre-3-comp caminar-osc-inc-dur-3 ‘está caminando como su padre’ Yuqall-itu-s-qa muchacho-dim-pl-top maki-nku-wan-ña-taq mano-3pl-ins-ya-enf picha-spa barrer-sub yanta-jina camino-comp ruwa-nku q’inqu q’inqu-ta pay-kuna-qa ruwa-rqu-nku. hacer-3pl curva curva-ac él/ella-pl-top hacer-aug-3pl ‘Los muchachitos limpiando (el suelo) con sus manos hacen como caminos, con curvas los hacen ellos.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 60) 240 lenguas de bolivia -jina también sirve para comparar con alguna cualidad: Qhati-mu-y arrear-cis-imp ñi-n decir-3 jatun-ña-pis grande-ya-adi ka-n-man ser-3-al jina comp mama-n-qa mamá-3-top kama-chi-n. encargar-caus-3 ‘“Ve a arrear (las ovejas) hacia aquí” le dice la mamá como si (la niña) ya fuese grande.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 61) -jina también se usa para indicar que se realiza una acción a semejanza de otra: Chay ese puklla-na-nku jugar-nml-3pl pata-pi encima-loc pay-kuna-pura él/ella-pl-entre phiña-na-ku-q enojar-rec-rfl-ag jina pay-kuna-qa puklla-nku, wawa-s-qa. él/ella-pl-top jugar-3pl niño-pl-top ‘Ahí en su juego, ellos juegan como si estuvieran enojándose entre sí, los niños.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 2) comp Q’ipi-cha-sqa-n-pi-qa sayk’u-sqa jina pay-qa arqhi-yku-chka-n. bulto-fac-nml-3-loc-top cansar-nml comp él/ella-top jadear-intns-dur-3 ‘Al preparar el bulto, ella está jadeando como si estuviera cansada.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 125) -jina indica que la actividad del verbo se realiza de la manera descrita previamente: Jatari-y levantarse-imp ñi-na-ku-nku. decir-rec-rfl-3pl Juk-taq uno-enf mana no ñi-n. decir-3 Chay-jina-ta parla-spa pay-kuna-qa puklla-nku. eso-comp-ac hablar-sub él/ella-pl-top jugar-3pl ‘Entre ellos se dice “retírate”. El otro le dice “no”. Hablando de ese modo juegan ellos.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 2) Finalmente, cabe indicar que -jina también se puede utilizar como verbo: Mama-qa ama jina-y-chu ñi-spa mich’a-ku-n. hacer-imp-neg decir-sub negar-rfl-3 madre-top no ‘La madre diciéndole “no lo hagas”, le impide (lavar a la niña pequeña).’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 10) Colectivo -ntin. Indica que una persona realiza una acción en compañía de alguien. ñaña-ntin hermana-col ‘la hermana con la hermana’ Warmi-qa mujer-top qusa-n-man-qa esposo-3-al-top quyllur-ni-ntin estrella-euf-col ‘alguien con estrella’ jaywa-n alcanzar-3 mikhu-na-ta, comer-nml-ac tata-qa padre-top 241 quechua wawa-s-ni-nti-n mikhu-nku wasi ukhu-man yayku-spa. niño-pl-euf-col-3 comer-3pl casa adentro-al entrar-sub ‘La mujer le alcanza la comida a su marido, el padre conjuntamente con sus hijos comen entrando dentro de la casa.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 51) -nti enfatiza la inclusión de la palabra marcada en una acción, o grupo Imill-ita-qa muchacha-dim-top saya-spa parar-sub chakra chakra kantu-manta orilla-abl qhawa-mu-n mirar-cis-3 uwija-nti-n-ta khuchi-nti-n-ta. oveja-col-3-ac chancho-col-3-ac ‘La muchachita parándose en la orilla de la chacra está cuidando tanto a las ovejas como a los chanchos (a todos juntos).’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 62) Pay-kuna-qa él/ella-pl-top wasi casa punku-manta puerta-abl runpi-nku correr-3pl juk uno iskay dos chunka diez mitru-ta jina yana-na-ku-pi kimsa-nti-nku yuqall-itu-s-qa. metro-ac comp ganar-rec-rfl-loc tres-col-3pl muchacho-dim-top ‘Ellos corren desde la puerta de la casa como unos veinte metros, en competencia los tres juntos, los muchachitos.’ (Ilafaya & Plaza 2001.5: 73) 2.4.3 Numeración Números cardinales. Los numerales sencillos son: juk iskay kimsa tawa phichqa 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 suqta qanchis pusaq jisq’un chunqa pachak 100 waranqa 1.000 junu 1.000.000 El sistema de numeración es decimal. Los números mayores a diez se generan agregando las unidades a diez, cien y mil, simplemente marcando la unidad añadida con -yuq ‘con’ o -ni-yuq si el numeral anterior termina en consonante (huk, iskay, qanchis, jisq’un). chunka juj-ni-yuq chunka kimsa-yuq pachak jisq’un-ni-yuq 11 13 109 ‘once’ (diez con uno) ‘trece’ (diez con tres) ‘ciento nueve’ (cien con nueve) Para marcar las decenas, centenas y millares se anteponen las unidades (1 a 9). La regla básica es: unidades antepuestas (menores) se multiplican, unidades pospuestas se suman. iskay chunka 20 (juk) waranqa 1 1000 ((1 x 1000) + ‘veinte’(2 por 10) jisq’un 9 (9 x pachak pusaq 100 8 100) + (8 x chunka 10 10) + tawa-yuq 4 4) 1984 242 lenguas de bolivia Números ordinales. Son los números que sirven para contar en orden, por ejemplo: primero, segundo, etc. Con excepción de la palabra ñawpaq para el primer ordinal, se utilizan los números cordinales anteriores, solamente agregando la terminación -ñiqi. Por ejemplo: primero segundo tercero décimo trigésimo tercero ñawpaq iskay-ñiqi kimsay-ñiqi chunka-ñiqi kimsa chunka kimsa-yuq-ñiqi Números partitivos. Son los que significan algunas de las diferentes partes en que se puede dividir un todo. Se forman con los números cardinales añadiendo las palabras phatma o chiqta. Por ejemplo: khuskan kimsa phatma o chiqta qanchis phatma mitad un tercio un séptimo Números proporcionales. Indican el número de veces que una cantidad comprende, en si, a otra inferior, de la que son múltiplos, añadiendo la palabra kuti ‘vez’. Por ejemplo: iskay kuti kimsa kuti phichqa kuti doble, duplo, dos veces triple, tres veces quíntuplo Hasta aquí nos referimos a la morfología nominal, ahora veremos la morfología verbal. 2.4.4 Morfología verbal La estructura de las formas verbales es más compleja que la de la morfología nominal, no solamente por los sufijos de flexión sino más que todo por los sufijos derivativos (son alrededor de 18). Según Cerrón-Palomino (1994), la flexión verbal tiene cinco procesos: la flexión de persona, la flexión del número, ambas comprendidas por las terminaciones verbales de 1sg, 2sg, 3sg y plural; la flexión del tiempo; la flexión del modo potencial y el modo imperativo; y la flexión de subordinación, condicional y aproximativa. 2.4.4.1 Persona Los sufijos flexivos marcan las categorías gramaticales de persona, número, tiempo (estas tres marcas a la vez pueden estar concentradas en una sola forma). En el cuadro siguiente se presentan los marcadores del presente/pasado y del futuro. Cuadro 10 Conjugaciones o terminaciones verbales Persona Presente/pasado Futuro 1sg -ni -saq 2sg -nki -nki 3sg -n -nqa 1pi -nchik -sun-chik 1pe -yku -saqku / -sqayku 2pl -nkichik -nki-chik 3pl -nku -nqa-nku 243 quechua El sistema verbal en el quechua en Bolivia funciona básicamente en torno a estos dos paradigmas de conjugación, y el modo imperativo que tiene, hasta cierto punto, sus propios marcadores. El modo condicional se basa en la conjugación del presente/pasado, al igual que las modalidades de conocimiento directo e indirecto. En el cuadro 10 observamos la concordancia de los pronombres personales con las terminaciones verbales correspondientes, sin embargo, es necesario aclarar que la concordancia opera más regularmente con la 1ra y 2da persona, y en el uso real, la concordancia en la 3ra singular y plural es mucho más flexible. 2.4.4.2 Tiempo Según Cerrón-Palomino (1994), el tiempo en quechua está compuesto por: tiempo realizado y tiempo no realizado. El tiempo no realizado es el tiempo futuro y se reconoce porque tiene sus propias marcas de persona+tiempo futuro. El tiempo realizado incluye al presente, al pasado experimentado y al pasado narrativo. Por tanto, hablar de presente y pasado es más bien una adecuación a la división del tiempo del castellano. Tiempo realizado (no futuro) a) Presente/pasado: El tiempo presente/pasado incluye los sufijos en las terminaciones verbales -ni, -nki, -n, -nchik, -yu, -nkichik, -nku. Podría suponerse que la -n marca el modo indicativo por tanto es el marcador del presente, excepto en primera persona plural exclusivo, que tiene -y + ku (-ku indicando pl). En ausencia de los marcadores de imperativo, condicional, conocimiento directo y conocimiento ­indirecto, o el durativo/progresivo -chka (que en este caso va a implicar acción presente en curso), los verbos marcados por este tiempo realizado, efectivamente pueden ser ambiguos con respecto al presente y al pasado. El ­problema es que frecuentemente las traducciones engañan. Yachachiq-qa profesor-top parla-ku-y hablar-rfl-imp wawa-y ñi-wa-rqa. niño-1 decir-1.o-pas Ch’in-situ ruwa-ku-ni. Mana ancha ruwa-y-ta muna-q-chu ka-ni. silencio-dim hacer-rfl-1 no mucho hacer-inf-ac querer-ag-neg ser-1 ‘El profesor me dijo que hablase. Hacía (mis tareas de la clase) en silencio. Pero no quería mucho hacer (trabajar en la clase).’ (Vargas & Plaza 1998: 1) En la segunda oración del ejemplo, no hay marca alguna que indique pasado en ruwa-ku-ni, pero dado el contexto no puede sino interpretarse que el hablante (en este caso un niño de Qullakamani, Tarabuco, Chuquisaca) está relatando un hecho pasado. Asimismo: imayna -ta cómo-ac puklla-nki jugar-2 Podría traducirse / entenderse como presente o pasado: ‘¿cómo jugaste?, o ¿cómo juegas? dependerá del contexto. Puesto que la marca de la segunda persona en futuro es también -nki, la oración anterior también puede entenderse como ‘¿cómo vas a jugar?’. b) El conocimiento directo, algunos también lo llaman pasado experimentado se marca con -rqa, antecediendo siempre al marcador de presente/pasado. Dicho de otro modo, el marcador de presente/pasado no cambia. Solamente hay una variación: el sufijo -n de la tercera persona singular, generalmente se omite con las dos formas de conocimiento, en este caso -rqa. 244 lenguas de bolivia Primiru-ta-qa primero-ac-top ñi-wa-n. decir-1.o-3 yayku-rqa entrar-pas Mana no qhichwa-wan, quechua-ins ati-rqa-ni-chu, poder-pas-1-neg chay ese tapu-pti-y preguntar-sub-1 papil-ni-lla-y-ta papel-euf-del-1-ac tuku-rqa-ni y lapis-ni-y-ta-wan. terminar-pas-1 y lápiz-euf-1-ac-ins ‘(En la escuela) primero se empezó con quechua, me dijo cuando le hice esa pregunta. No pude, solo terminaba mi papel (cuaderno) y también mi lápiz.’ (Vargas & Plaza 1998: 1) El uso de -rqa es regular, se antepone al marcador de presente/pasado sin ninguna modificación. Sin embargo, la marca de tercera persona singular -n se elide en las variantes sureñas del quechua boliviano. Por ejemplo: mana ati-rqa-ni-chu no poder-pas-1-neg ‘no pude / no podía’ mana ati-rqa-nki-chu no poder-pas-2-neg ‘no pudiste / no podías’ mana ati-rqa-n-chu " mana ati-rqa-chu no poder-pas-3-neg ‘no pudo / no podía’ El conocimiento directo del pasado, marcado por -rqa ‘pas’, se utiliza cuando el hablante ha percibido la información viendo, oyendo, escuchando, sintiendo de primera mano; el hablante implica que lo dicho es ­verdadero. Ñuqa-qa yo-top iskuyla-man-qa escuela-al-top ka-chka-pti-n. ser-dur-sub-3 yayku-rqa-ni iskay entrar-pas-1 dos Chay-manta-qa fiscal-man-taq eso-abl-top fiscal-al-enf wata-ta año-ac iskay dos mana-raq no-cnt wata-ta año-ac fiskalis fiscales yayku-ni entrar-1 ñuqa-qa as-ta-wan mana yayku-ni-chu yacha-ku-q-qa. entrar-1-neg aprender-rfl-ag-top yo-top poco-ac-ins no ‘Yo entré a la escuela dos años, cuando todavía no habían fiscales. Después yo entre dos años al fiscal, más no entré a aprender.’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 39) Como ya lo anotamos anteriormente, los verbos conjugados con el presente/pasado (v.gr. sin la presencia del marcador de conocimiento directo -rqa) también implican pasado, especialmente después de haber establecido que se está narrando algo pasado y experienciado (yaykuni, lit. ‘entro’ pero en el contexto significa ‘entré’) en la oración antecedente. c) El conocimiento indirecto, o pasado narrativo, es marcado por el morfema -sqa, que indica que el hablante no conoce de primera la información del verbo, que más bien lo sabe por información de segunda mano. En muchos textos también se lo presenta como el pretérito pluscuamperfecto utilizando el auxiliar ‘había’ para su traducción. -sqa conoce la información de segunda mano, incluyendo relatos históricos. Por ejemplo para relatar la pasión de Jesucristo: 245 quechua Chanta luego muchu-sqa, padecer-pas.nar ima-yma-na cómo-así-nml k’aspi-ta palo-ac asta hasta wañu-chi-na-nku morir-caus-nml-3pl ruwa-yku-na-s-ta. hacer-intns-nml-pl-ac jilu-cha-spa filo-fac-sub chay-wan-ña-taq eso-ins-ya-enf chanta luego ruwa-sqa-nku hacer-pas.nar-3pl mana-puni wañu-pti-n-qa no-certmorir-sub-3-top t’uqsi-sqa-nku. punzar-pas.nar-3pl Chay-wan-pis mana wañu-y-ta-qa ati-sqa-chu. eso-ins-adi no morir-inf-ac-top poder-pas.nar-neg ‘Después había padecido, hasta matarlo le habían hecho diversas cosas. Entonces como no se moría, afilando un palo, ahora con eso le habían punzado. Ni con eso había podido morir.’ (Vargas & Plaza 2000.4: 52) -sqa no se acuerda, por estados no conscientes: Punchu-y chinka-chi-ku-sqa-ni, mana poncho-3 perder-caus-rfl-pas.nar-1 no ‘Había perdido mi poncho, no recuerdo nada.’ ima-ta-pis qué-ac-adi yuya-ni-chu. recordar-1-neg -sqa para indicar un ‘darse cuenta, repentino, sorpresivo’ Mana no yacha-spa-qa saber-sub-top mana-qa no-top parla-y-lla-ta-pis hablar-inf-del-ac-adi ati-q-chu poder-ag-neg ka-sqa-nchik ser -pas.nar-1pi ‘Sin tener conocimientos no habíamos sabido ni hablar siquiera.’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 43) Iskuyla-man-qa escuela-al-top allin-ta-puni bien-ac-cert ri-na-puni ir-nml-cert phalta-ku-q faltar-rfl-ag ka-sqa ser-pas.nar ka-sqa ser-pas.nar piru pero piru pero i y yacha-y-qa saber-inf-top may-ta dónde-ac ri-na-paq-pis ir-nml-ben-adi ima-ta qhawa-na-paq-pis sumaq-ta yacha-y-qa phalta-q ka-sqa. qué-ac mirar-nml-ben-adi bueno-ac saber-inf-top faltar-ag ser-pas.nar ‘Pero había sido importante ir a la escuela y saber había sabido ser necesario, pues incluso para ir a cualquier parte para mirar cualquier cosa el saber había sabido hacer falta.’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 44) En los relatos de los sueños, también se utiliza para indicar situaciones que uno acaba de comprender: Chanta-qa ñuqa-qa jamu-chka-sqa-ni wichay kinray-ta jina. luego-top yo-top venir-dur-pas.nar-1 subida ladera-ac comp ‘Luego yo había estado viniendo (me acabo de dar cuenta) como por una cuesta.’ (Ilafaya y Plaza 2002.7: 9) 246 lenguas de bolivia Kunan ahora wapu-s fuerte-pl tuta-qa noche-top musqu-ku-ni soñar-rfl-1 ka-sqa-nku. ser-pas.nar-3pl kay este Chanta luego jina-ta así-ac waka-s vaca-pl kancha-pi cancha-loc iskay dos allin bien ka-chka-sqa-nku. ser-dur-pas.nar-3pl Chanta chay-pi-taq iskay-ni-nku maqa-na-ri-ku-nku. luego eso-loc-enf dos-euf-3pl pelear-rec-inc-rfl-3pl ‘Esta noche he soñado de este modo, dos vacas muy fuertes habían estado (ahí). Entonces, habían estado peleando en la cancha.’ (Vargas & Plaza 2001.7: 21) En este ejemplo hay -sqa pero también presente/pasado (v.gr. maqanarikunku ‘se pelean’); -sqa introduce la situación, de la que el hablante se fue dando cuenta, pero luego se pasa a narrar la pelea de los toros como algo experienciado ya de primera mano. En los medios, en la radio y la televisión, presentadores y políticos utilizan en castellano el calco de este uso: ‘con guitarra había sido otra cosa’. Tiempo no realizado (futuro) El futuro indica la futura realización de la acción. El futuro tiene marcas para cada persona: ruwa-saq ‘haré’, ruwa-nki ‘harás’, ruwa-nqa ‘hará’, ruwa-sun ‘haremos’, ruwa-sqayku ‘haremos’, ruwa-nkichik ‘uds. harán’, ruwa-nqanku ‘ellos harán’. Dos notas aclaratorias son necesarias: (a) la marca de futuro para 1pi podría también incluir el plural -chik dando ruwa-sun-chik ‘haremos’; (b) 1pe varía sqayku ~ sayku ~ saqku (Norte de Potosí, regiones de Cochabamba, Norte de La Paz, respectivamente); (c) las formas para las segundas personas tanto en singular como en plural son las mismas del no futuro, es el contexto que define el significado. 2.4.4.3 Modo Las oraciones con el tiempo futuro y el pasado/presente descritas anteriormente están en el modo indicativo. El modo imperativo tiene sus propias terminaciones y el modo potencial/condicional tiene formas regulares basadas en el pasado/presente y formas irregulares propias. Flexión del modo potencial -man; -waq. La forma regular del modo potencial en quechua es expresada por el sufijo -man, pero también existe la forma irregular para la segundas personas, tanto singular como plural, que son -waq y -waqchik, respectivamente. La estructura verbal es la siguiente: Cuadro 11 Formas del Potencial/Condicional Persona Regular PresPas/Fut Irregular Potencial 1sg -ni " -y -man -- 2sg -nki -man -waq 3sg -n -man -- 1pi -nchik / -sun(chik) -man -swan 1pe -yku -man -- 2pl -nkichik -man -waqchik 3pl -nku -man --- En breve, para construir el potencial/condicional regular solamente hay que agregar el sufijo -man a la conjugación pasado/presente. La flexión para la primera persona singular -ni cambia a -y delante del 247 quechua potencial -man. En la 1pi, alternativamente al uso del presente/pasado -nchik, se puede utilizar el futuro -sun(chik), esta última construcción para enfatizar la posible acción futura como sugerencia. El irregular, por otro lado, solamente se da con la segunda persona con la marca -waq, y -swan (-chwan en el Norte de La Paz) para la 1pi. a) -man: Este sufijo implica que la acción del verbo no se ha realizado, pero que podría realizarse dadas algunas condiciones. Por ejemplo: Iskuyla-pi-taq ka-y-man ni-taq yacha-y-man-chu, allin-chu ka-n-man escuela-loc-enf ser-1-pot ni-enf saber-1-pot-neg bien-int ser-3-pot ‘Estuviera / estaría en la escuela pero no sabría, ¿estaría bien?’ (Ilafaya & Plaza 1997: 36) Chanta-qa luego-top imayna-ta cómo-ac ña ya puklla-chka-lla-nku-ña-taq. jugar-dur-lim-3pl-ya-taq ati-sun-man poder-1pi.fut-pot yacha-y-ta saber-inf-ac Chay eso jina-ta comp-ac iskuyla-pi escuela-loc ka-spa ser-sub ka-spa-pis ser-sub-adi ni-chá ni-ign yacha-sun-man-chu ima-ta-pis. saber-1pi.fut-pot-int qué-ac-adi ‘Entonces, ya están jugando otra vez. Siendo así cómo podríamos saber, incluso estando en la escuela, seguramente no sabríamos nada.’ (Ilafaya & Plaza 1997: 14) Iskuyla-qa escuela-top ajina así ima-pti-n-taq qué-sub-3-enf ka-pti-n-qa ser-sub-3-top ni-chá ni-ign kunan ahora ni ni jina comp jayk’aq nunca ka-n-man ser-3-pot iskuyla, escuela yacha-nku-man saber-3pl-pot ni-taq ati-nku-man-chu wawa-kuna-qa. ni-enf poder-3pl-pot-neg niño-pl-top ‘Por qué la escuela debería ser como ahora, si la escuela es así seguramente nunca aprenderían ni podrían los niños.’ (Ilafaya & Plaza 1997: 42) b) -waq: carnaval raymi chay-pi jamu-ri-waq carnaval fiesta ese-loc venir-inc-2.pot ‘para la fiesta de carnavales vendrías’ Qham-kuna-qa mana ati-waq-chik-chu salwa-sqa kira-ku-y-ta-qa. tú-pl-top no poder-pot-pl-neg salvar-nml quedar-rfl-inf-ac-top ‘Ustedes no podrían quedarse salvados.’ (Vargas & Plaza 2000.4: 58) Flexión del modo imperativo -y; -chu. Los imperativos se utilizan para dar órdenes a la segunda y tercera personas tanto en singular como en plural, así como para la primera persona inclusiva. El marcador de imperativo para la segunda persona es -y, -chu para la tercera; y -na para la primera persona inclusiva (ñuqanchik). Para indicar los plurales se agregan los pluralizadores respectivos, de acuerdo al cuadro ­siguiente. 248 lenguas de bolivia Cuadro 12 Formas del imperativo 1sg -y 2sg -nki 3sg -chu-n 1pi -na(chik) --- 2pl -nkichik 3pl -chu-nku Estos imperativos, generalmente se utilizan para la realización de la acción indicada por el verbo de manera inmediata, por ejemplo en punkuta wichq’ay! ‘¡cierra la puerta!’; punkuta wichq’a-chu-n! ‘¡que cierre la puerta!’; punkuta wichq’a-na! ‘¡cerremos la puerta!’ En el caso de la 1pi, -na implica tanto una sugerencia como un comando para el hablante y el oyente (una suerte de dual) y se agrega el pluralizador -chik cuando se involucra a un grupo más grande. Finalmente cabe indicar que además del imperativo propiamente dicho, también se puede utilizar el futuro (excepto para la 1sg) para indicar ya sea una orden, una sugerencia o una consigna. Por tanto, cualquier oración con el verbo en segunda persona y ausencia de marcadores que podrían desambiguar el significado (pasado, condicional) o el contexto, pueden presentar ambigüedades: wasita qhawa-nqa puede entenderse como ‘el mirará la casa’ (simplemente futuro), o ‘que mire la casa’ (imperativo futuro). En el contexto, por supuesto, normalmente los hablantes están sintonizados acerca del tiempo en el que se está hablando: lapis-ta wurradur-ta allin-ta jap’i-nki ñi-spa kacha-q ka-yku lápiz-ac borrador-ac bien-ac agarrar-2 decir-sub enviar-ag ser-1pe ‘“vas a agarrar bien el lápiz, el borrador” diciendo les enviábamos’ (Ilafaya & Plaza 1997: 14) o en el caso de la tercera persona en futuro para indicar un sugerencia más adelante en el tiempo, por ejemplo: Allin-ta bien-ac yacha-nqa saber-3.fut ñi-spa kacha-yku decir-sub enviar-1pe ati-chu-n poder-imp-3 iskuyla-man-qa escuela-al-top ñi-spa. decir-sub ‘“Que aprenda” diciendo, (los) enviábamos a la escuela.’ (Ilafaya & Plaza 1997: 5) Resumen de la estructura de los tiempos: Cuadro 13 Paradigmas de la conjugación Persona (Conocimiento) Directo Indirecto PresPas -rqa -sqa -ni " -y Potencial Regular Futuro Irregular -- -- -saq -nki -waq -y -nki 3sg -n -- -chu-n -nqa 1pi -nchik -swan -na(chik) -sun(chik) 1pe -yku -- -- -saq-ku 2pl -nki-chik -waq-chik -y-chik -nki-chik 3pl -nku -- -chu-nku -nqa-nku 1sg 2sg -man Imperativo 249 quechua En resumen, las formas del presente/pasado contrastan con el futuro, el imperativo y el potencial irregular; los pasados se indican antecediendo los marcadores respectivos delante del presente/pasado; el potencial regular se ubica después del presente/pasado. Finalmente, cabe agregar que se puede optar por el conocimiento directo/indirecto o el potencial, pero no por ambos (indicados por las flechas). 2.4.4.4 Persona objeto En los verbos quechuas es necesario marcar el tiempo y la persona (v.gr. las flexiones arriba descritas). Pero además, también se marcan las relaciones de sujeto a objeto en el verbo, relaciones que también se designan como pronominales, que en castellano aparecen en juegos como ‘yo te …’, ‘tu me …’. Las marcas de flexión ya descritas expresan la persona sujeto así como el tiempo y el modo. Para el objeto hay tres sufijos que anteceden a la marca del sujeto: -wa, -su, -ø, para la primera persona ‘me’, la segunda ‘te’, y la tercera ‘le’, respectivamente. Las relaciones entre persona sujeto y objeto se marcan con la combinación de estos sufijos, aun cuando hay excepciones que confunden la descripción. El problema es que muchas de las relaciones entre personas se usan con poca frecuencia en la vida cotidiana, por tanto no hay fluidez en el uso del sistema, especialmente en las relaciones sujeto-objeto con plurales. En el cuadro 14, se presentan los sufijos que marcan las relaciones sujeto-objeto (como en riku-wa-n­qa-nku­ ‘ellos me verán’). En este cuadro, si la persona es la misma tanto como sujeto como objeto se marca con el sufijo reflexivo -ku. (Al nivel semántico, este sufijo tiene connotaciones adicionales, ver -ku). Las relaciones de objeto-sujeto normalmente aparecen en los verbos transitivos, aunque pueden usarse los pronominales también con algunos verbos intransitivos. 3ª persona objeto riku-ni ‘veo’ o riku-nki ‘ves o riku-n ‘ve’ o ‘le/la/lo veo’ ‘le/la/lo ves’ ‘le/la/lo ve’ o o ‘les/las/los ves’ ‘les/las/los ve’ En la traducción puede aparecer el verbo conjugado sin indicar el objeto (v.gr. veo, ves, ve), pero puesto que la marca de la tercera persona objeto es -ø, cualquier verbo conjugado con la persona sujeto siempre implica un objeto (v.gr. cuando se ve, se ve algo o alguien). Además, la tercera persona aquí puede también ser plural, es decir obviando la marca de pluralidad -nku. El problema aquí es que el sistema es irregular: en lugar de -su + -ni, o -n tenemos las formas irregulares -yki ‘yo-te’, y sunki ‘él/ella-te’. La irregularidad se mantiene en la 1ra persona sujeto en el futuro, también se observa una metatesis del marcador de la primera persona futuro (v.gr. de -saq " -sqa). En la 3ra persona se sigue la regla general, objeto + sujeto (v.gr. -su-nqa). Cuadro 14 Marcación de sujeto y objeto Objeto " Sujeto $ 1sg 2sg 3sg 1pe 1sg -ku -(su)yki -ø 2sg -wa-nki -ku -ø -wa-yku 3sg -wa-n -su-nki -su-n -ku -wa-yku 1pe - -su-yku -ø 1pi - 2pl -wa-nki-chik - -ø 3pl -wa-n-ku -su-nki-ku -su-nku -ø 1pi 2pl 3pl -su-nchik (su-)yki-chik -ø -wa-nchik -su-nki-chik -ø -ø -ø -ø -ku -wa-yku-chik -ø -ku -ø -ku 250 lenguas de bolivia Cuadro 15 Marcación de sujeto y objeto en futuro Objeto" Sujeto $ 1sg 2sg 3sg 1pe 1sg -ku -(su)-sqa-yki -ø 2sg -wa-nki -ku -ø -wa-sqa-yku 3sg -wa-nqa -sun-qa -ku -wa-sqa-yku -su-sqa-yku -ø -ku 1pe 1pi -ø 2pl -wa-nki-chik 3pl -wa-nqa-nku -su-nqa-nku 1pi 2pl -(su-) sqa-yki-chik -ø -su-nqa-chik -ø -su-sqa-yku-chik -ø -ku -ø -su-nqa-nku-chik -ku -ø -wa-su-nchik -ku -ø -wa-sqa-yku -ø -wa-sqa-yku 3pl -wa-su-nchik -ø En las formas que indican fuente del conocimiento (conocidas popularmente como pasado), las combinaciones se dan del siguiente modo: *riku-surqa-ni *riku-su-rqa-n " " riku-rqa-yki riku-su-rqa ‘(yo-te) vi’ ‘(él/ella-te) vio’ En la 1ra persona sujeto, en el conocimiento directo, se produce la misma irregularidad que el no futuro (v.gr. se mantiene -yki). Sin embargo, en la 3ra persona sujeto, la combinación es regular (v.gr. -su-rqa se mantiene), aunque el marcador de la 3ra persona sujeto, en esta conjugación, en la mayoría de los dialectos de Bolivia, desaparece. 1rª persona objeto riku-wa-nki riku-wa-n ver-1.o-2 ver-1.o-3 ‘me ves’ ‘me ve’ En este caso, el sistema es completamente regular, solamente hay que combinar la persona objeto y con la persona sujeto (v.gr. -wa con -nki y -n). En el futuro, hay variaciones con respecto a los marcadores pronominales, como se ilustra en el cuadro 15. Las formas descritas se encuentran en uso actual, como en los ejemplos recogidos por Peralta (2006), la relación pronominal de 1rª persona sujeto a la 2dª persona objeto se muestra sólo con el sufijo -yki: kunan katari ka-n ñi-yki, no ve? ahora víbora ser-3 decir-1>2 no ve ‘donde te dije que hay una víbora ¿no ve?’ En el verbo -ñi-yki se muestra la relación de primera a segunda persona ‘yo a ti’. Para 2sg, la relación pronominal es de 2sg sujeto a 1sg objeto, por ejemplo: Qam-pis … yanapa-ri-wa-nki juk chhikan. tú-adi ayudar-inc-1.o-2 uno poco ‘Tu también pues … me has ayudado un poquito.’ En el verbo vemos la relación pronominal ‘tu a mi’. En el 3sg, tenemos dos procesos pronominales; el primero es la relación pronominal de 3sg a 1sg, por ejemplo: 251 quechua kay doña Braulia, pay este doña Braulia él/ella ‘Doña Braulia, ella me avisó.’ willa-wa-n avisar-1.o-3 Aquí vemos la relación pronominal ‘ella a mi’. 2.4.5 Procesos de derivación Siguiendo a Cerrón-Palomino (1994: 80), Peralta (2006: 162) establece que “Los procesos de derivación que afectan a la morfología verbal son dos: el proceso de derivación deverbativa y el proceso de derivación denominativa. Los sufijos derivativos deverbativos se combinan con verbos y los sufijos derivativos denominativos se combinan con nombres, pero ambos tienen la función de generar temas verbales.” 2.4.5.1 Derivación deverbativa Las derivaciones verbales que presentamos a continuación están vigentes en el quechua boliviano. En esta sección nos basaremos en la clasificación y ejemplos encontrados por Peralta (2006:162-196) en Yambata. Así desglosaremos las categorías de sufijos: I. Deícticos, II. Gramaticales y III. Aspectuales, que forman temas verbales al unirse a raíces verbales. I. Deícticos: señalan ‘dirección u orientación’ se combinan con verbos de movimiento, por eso conocidos también como direccionales. -yku a) Expresa atención y cuidado al ejecutar la acción del verbo. Chay-manta-qa ese-abl-top jallma-lla-nku-taq, aporcar-del-3pl-enf jallma-yku-nku, aporcar-intns-3pl jallp’a-wan patita-man qhata-yku-lla-nku-taq. tierra-ins encima-al tapar-intns-del-3pl-enf ‘Después lo aporcan también, lo aporcan con cuidado, le echan tierra encimita y con cuidado también lo vuelven a tapar.’ (Peralta 2006: 115) b) Expresa amistad y cortesía. Pollera-ta pollera-ac chura-yku-sqayku, poner-intns-1pe.fut sombrero-ta sombrero-ac manchay cinta terrible cinta puru-ta fiesta-ri-sqayku. puro-ac fiesta-inc-1pe.fut ‘Nosotros te pondremos (con gusto) pollera, sombrero lleno de cintas, vamos hacer fiesta pues.’ (Peralta 2006: 116) c) Con verbos de movimiento expresa orientación de arriba hacia abajo. Monte-manta monte-abl apa-mu-yku llevar-cis-1pe rakhu grueso llamt’a-ta, leña-ac ima-tá qué-ac chay-jina así-como 252 lenguas de bolivia chhir-itu-s-qa delgado-dim-pl-top kay-pi-qa … este-loc-top para-yku-n llover-intns-3 chay-qa!, ese-top mana lawra-y-ta muna-nku-chu. no arder-inf-ac querer-3pl-neg ‘Del monte nos vamos a traer leña gruesa porque esas leñas delgaditas … ¡les (moja) llueve!, ya no pueden arder.’ (Peralta 2006: 117) d) Con verbos de movimiento expresa orientación de afuera hacia dentro. Wasi-y-pi casa-1-loc Chay-man ese-al katari víbora ka-rqa ser-pas chhalla-ta chala-ac a!, tiya-y excl tía-1 Virgilia Virgilia chura-yku-sqa-nku, meter-intns-pas.nar-3pl willa-wa-rqa … avisar-1.o-pas chay-pi, ese-loc chay ese ukhu-man yayku-mu-n, ñi-n ári, katari-qa. adentro-al entrar-cis-3 decir-3 pues víbora-top ‘¡En mi casa había pues una víbora!, mi tía Virgilia me avisó … Es que ahí habían metido la chala del choclo, ahí adentro había entrado pues, dice, la víbora.’ (Peralta 2006: 118) -rqu a) Expresa ‘honorabilidad’, respeto, gentileza. Wawa niño rikhu-ri-n, ver-inc-3 chay ese ratitu, ratito aswan más ratitu, ratito aswan más ratitu ratito joven-ya-rqu-n, joven-trf-aug-3 yasta … ya.está ‘Nace el niño, ese ratito, más un ratito, más un ratito se hace jóven y ya está…’ (Peralta 2006: 119) b) Puede ‘intensificar’ la acción del verbo. Puchu-ta sobras-ac mana no ñuqa yo mikhu-ni-chu, comer-1-neg libre libre jap’i-spa coger-sub allqu perro manka-man olla-al jich’a-rqu-rqa-ni. echar-aug-pas-1 ‘Sobras de comida yo no como pues, de rabia, rápido lo he echado a la olla del perro.’ (Peralta 2006: 113) -mu a) Cuando la acción se dirige hacia el hablante. Llamt’a-qa apa-mu-yku sapa tuku-ku-pti-lla-n … leña-top llevar-cis-1pe cada terminar-rfl-sub-del-3 ‘Vamos a traer(nos) leña cada que se termina no más …’ (Peralta 2006: 120) 253 quechua b) Cuando la acción se dirige hacia allá, lejos del hablante. Papasu-man papá-al ri-lla-ni-taq, ir-del-1-enf cabra-s-ta cabra-pl-ac michi-mu-ni … pastear-cis-1 oveja-s-ta-wan michi-mu-ni. oveja-pl-ac-ins pastear-cis-1 ‘A donde mi papá voy también pues, las cabras voy a pastear … las ovejas también voy a pastear.’ (Peralta 2006: 121) -ykacha marca que la acción del verbo se dirige ‘de un lugar a otro’: Tarpu-spa sembrar-sub trigu-ta, trigo-ac sara-ta, maíz-ac ati-n poder-3 mana no ati-n poder-3 apa-ykacha-ni carga-s-ta, yunta-s-ta … llevar-osc-1 carga-pl-ac yunta-pl-ac ‘Sembrando trigo, maíz, pudiendo sin poder llevo de un lado a otro las cargas, a la yunta …’ (Peralta 2006: 122) II. Gramaticales: establecen relaciones gramaticales por causación, por reflexión y por reciprocación Es decir, se incluye la participación de una tercera persona o “actante”. -chi a) ‘hacer’. La persona-sujeto causa u obliga que la persona-objeto efectúe o reciba la acción del verbo. Achay mama-y wasi-n-puni a, mama-y-wan papasu-y-wan ruwa-chi-nku … ese mamá-1 casa-3-cert excl mamá-1-ins papá-1-ins hacer-caus-3pl ‘Esa casa de mi mamá siempre es pues, mi mamá y mi papá hicieron hacer (con alguien) …’ (Peralta 2006: 123) b) ‘transitivizador’. Hace que un verbo intransitivo se vuelva transitivo. Ka-n-puni ser-3-cert monte-pi monte-loc a, excl achkha mucho katari-s, víbora-pl tukuy todo ima qué khuru-s bicho-pl tiya-n … wañu-chi-ni-puni rumi-wan ch’anqa-yku-ni, k’aspi-wan … estar-3 morir-caus-1-cert piedra-ins tirar-intns-1 palo-ins ‘En el monte hay siempre pues bastantes víboras y toda clase de bichos hay … yo les mataba de alguna forma les tiraba piedras, con palo …’ (Peralta 2006: 124) c) ‘verbalizador’. Cuando se combina con nombres puede generar temas verbales. Tenemos la palabra: jak’uchisaq, que viene del nombre jak’u que significa ‘harina’, más -chi, ahora significa ‘hacer harinar’, o ‘hacer moler’ (Peralta 2006: 94). Otro ejemplo es wayrachinchik, del nombre wayra ‘viento’, más -chi, se convierte en ‘hacer ventilar’. 254 lenguas de bolivia -ysi significa ‘ayudar’ / ‘dar cooperación’. Cabra qhati-ni, ima ruwa-ysi-wa-y, ñi-pti-n, ruwa-ysi-lla-ni-taq. cabra seguir-1 qué hacer-as-1.o-imp decir-sub-3 hacer-as-del-1-enf ‘Voy a pastorear las cabras, cuando dice ¡ayúdame!, en alguna cosa, le ayudo no más también.’ (Peralta 2006: 125) -ku a) Es reflexivo porque la acción del verbo se ejecuta y recae sobre el mismo sujeto. Mana no kay-pi-qa este-loc-top zapato-s-wan zapato-pl-ins allin-ta-chu bueno-ac-neg puri-nki caminar-2 a, excl chaki-s-ni-yki q’iwi-ku-nki. pie-pl-euf-2 torcer-rfl-2 ‘Aquí (en el campo) ni siquiera caminas bien con zapatos, te torcerás tus pies.’ b) Expresa ‘beneficio o provecho’ personal y deja de ser reflexivo. Mecheritu-pi k’ancha-ku-yku o velita-pi k’ancha-ku-yku a. mecherito-loc alumbrar-rfl-1pe o velita-loc alumbrar-rfl-1pe excl ‘Con mecherito nos alumbramos o sino con velita nos alumbramos pues.’ (Peralta 2006: 127) c) Intensifica la acción del verbo ‘añadiéndole ganas, pasión, dedicación, gusto, etc.’. Kay este campu-pi campo-loc man no ni neg ima-pis qué-adi ka-n-chu, ser-3-neg punku-s puerta-pl kicha-rpa-ri-sqa-pis puñu-ku-lla-yku mana ka-n-chu suwa-qa a! abrir-intl-inc-nml-adi dormir-rfl-del-1pe no ser-3-neg ladrón-top excl ‘Aquí en el campo no hay nada, nos dormimos no más (con gusto) con las puertas abiertas, ¡no hay ladrón pues!’ (Peralta 2006: 128) d) Verbalizador. Cuando se combina con un nombre hace que éste se actualice como verbo o tema verbal. mana suerte-ku-sun-man-chu no suerte-rfl-1pi.fut-pot-neg ‘no tendríamos suerte’ Donde el nombre suerte más el sufijo -ku, llegan a significar ‘tener suerte’. -pu expresa el actuar o hacer algo a favor de otra persona por ejemplo: por cariño, amistad, obligación. Mama-y-qa … nuqa-lla ropa-ta ruwa-pu-sqayki, ñi-spa, ñi-wa-rqa. mamá-1-top yo-del ropa-ac hacer-ben-1>2.fut decir-sub decir-1.o-pas ‘Mi mamá … yo no más te lo haré ropa, diciendo, me decía.’ (Peralta 2006: 130) 255 quechua -na-ku señala o expresa reciprocidad. Ancha muy unay-ña tiempo-ya tanta junto ka-yku ser-1pe a, excl primero-s-pi-qa primero-pl-loc-top maqa-na-ku-nchik-puni a. pelear-rec-rfl-1pi-cert excl ‘Ya estamos concubinados mucho tiempo pues, al principio nos peleamos siempre pues.’ (Peralta 2006: 132) III. Aspectuales: tienen que ver con el aspecto completo o incompleto que afecta a la acción de un verbo. Es decir, una acción puede estacionarse o prolongarse en el tiempo. -ri a) Expresa cortesía, ruego delicado y cariñoso, suaviza un mandato como decir ‘por favor’. Pedrito calmita-lla-wan wichq’a-yku-ri-y!, ári. Pedrito calmita-del-ins cerrar-intns-inc-imp sí ‘Pedrito con calmita cérralo (la puerta) por favor.’ (Peralta 2006: 133) b) Minimiza la acción verbal como diminutivo. Qam-pis Elvirita yanapa-ri-wa-nki juk chhikan. tú-adi Elvirita ayudar-inc-1.o-2 uno poco ‘Tú también pues Elvirita me ayudaste un poquito.’ (Peralta 2006: 109) c) Tiene la noción de que la acción verbal dura corto tiempo. Zapatu-s-ta-qa juk ratu-lla, kay fiesta diya-s-lla chura-ri-ku-yku a! zapato-pl-ac-top uno rato-del este fiesta día-pl-del poner-inc-rfl-1pe excl ‘Los zapatos son para un rato no más, para estos días de fiesta no más, nos ponemos un ratito pues!’ (Peralta 2006: 153) d) Da inicio a la acción verbal. Sapa diya ñuqa tuta-manta saya-ri-ni, las siete-ta chay-ta. cada día yo noche-abl levantar-inc-1 las siete-ac ese-ac ‘Cada día en la mañana yo me levanto, a las siete por ahí.’ (Peralta 2006: 136) e) Tiene doble presencia para intensificar la acción verbal. Chay-manta ese-abl na-ta-qa … cosa-ac-top cabra-s-ta cabra-pl-ac jina-pi como-loc michi-ni … pastear-1 león-qa león-top qhipa-y-ta jamu-ri-ri-chka-n miaw, miaw ñi-spa jamu-ri-ri-chka-nku. detrás-1-ac venir-inc-inc-dur-3 ono ono decir-sub venir-inc-inc-dur-3pl ‘Entonces este … a las cabras así he pasteado … y el león por mi detrás está viniendo miaw, miaw diciendo, poco a poco están viniendo.’ (Peralta 2006: 137) 256 lenguas de bolivia -chka señala la progresión de la acción verbal, se trata de un ‘gerundio’ del castellano y significa que la acción verbal se está realizando en el ‘tiempo verbal’ marcado en la flexión. El ejemplo anterior muestra un ejemplo. Otro ejemplo, en pasado: Cuenta-ri-chka-wa-rqa. contar-inc-dur-1.o-pas ‘Me estaba contando un poquito.’ (Peralta 2006: 113) -paya indica ‘reiteración’ de la acción verbal. Campo, campo-puni ári, ma castella-manta-pis parla-paya-nku-chu. campo campo-cert pues no castellano-abl-adi hablar-rep-3pl-neg ‘El campo, campo siempre es pues, ni siquiera se habla mucho en castellano.’ 2.4.5.2 Proceso de derivación denominativa Según Cerrón-Palomino (1994), citado en Peralta (2006: 197), dentro los procesos de derivación denominativa se encuentran los sufijos derivativos denominativos que son los que hacen cambiar la categoría gramatical de una raíz nominal a un tema verbal. Hay dos clases de sufijos: -cha, -ya. El verbalizador -cha, convierte en verbos a los nombres, adjetivos, y adverbios en verbos, indicando una transformación hacia el significado de la palabra original. Así, por ejemplo, t’uru ‘barro’ se transforma en el verbo t’uruchay ‘embarrar’. Implica la presencia de un agente. Jaqay punta-man ri-yku, chay-pi ch’uñu-cha-mu-yku aquel punta-al ir-1pe ese-loc chuño-fac-cis-1pe ‘Allá, por aquella punta vamos, ahí vamos a hacer el chuño.’ El transformativo -ya, también transforma nombres, adjetivos y adverbios en verbos, asignándoles una transformación hacia el contenido semántico de la palabra original. Por ejemplo, puka ‘rojo’ se transforma en pukayay ‘volverse rojo’. En este caso, la transformación es autónoma. Wawa niño rikhu-ri-n, ver-inc-3 chay ese ratitu, ratito aswan más ratitu, ratito aswan más ratitu joven-ya-rqu-n, ratito joven-trf-aug-3 yasta … ya.está ‘Nace el niño, ese ratito, más un ratito, más un ratio se hace joven, y ya se está envejeciendo no más también.’ La diferencia entre tales sufijos denominativos, que hacen cambiar a una acción verbal, es que con el sufijo -cha, interviene la acción de personas, y con el sufijo -ya, no interviene nadie, es natural, automático. 2.4.5.3 Procesos morfofonémicos Los procesos morfofonémicos básicamente se refieren a los cambios o alternancias que sufren ciertas vocales e los sufijos verbales, en presencia de otros adjuntos, tal proceso también es conocido como condicionamiento morfológico. Según Cerrón-Palomino (1987: 190), estos procesos consisten en: 1) la mutación vocálica, 2) la elisión vocálica y 3) la simplificación consonántica. 257 quechua 1) La mutación vocálica, ocurre en los siguientes sufijos: -yku cambia a -yka siempre y cuando se encuentre delante del sufijo -mu o -pu; y lo mismo ocurre con los sufijos -rqu, -ku y -naku. Veamos los ejemplos: Juk-lla-ta na-man junt’a-yka-mu-n Argentina-manta trigo uhhh trigo uhhh uno-del-ac cosa-al llenar-intns-cis-3 Argentina-abl ‘Uno no más aquí llega el trigo de Argentina uhhh, mejores.’ (Peralta 2006: 151) Ichá quizás burro burro phaska-rpa-ku-n desatar-intl-rfl-3 avena-man avena-al ri-chka-n ir-dur-3 mejores. mejores corre, corre, corre corre, corre, corre qhawa-rqa-mu-y wawa-y! mirar-aug-cis-imp niño-1 ‘Tal vez se ha desatado el llazo del burro y está yendo a donde la avena ¡corre, corre, corre apúrate andá a fijarte hijita!’ (Peralta 2006: 152) Zapatu-s-ta-qa zapato-pl-ac-top a. juk uno Chay-lla-pi ese-del-loc excl ratu-lla, rato-del kay este chura-ri-ku-yku, poner-inc-rfl-1pe fiesta fiesta diya-s-lla día-pl-del chay ese ratitu ratito chura-ri-ku-yku poner-inc-rfl-1pe costura-s-ni-n-qa costura-pl-euf-3-top phata-rqa-pu-n pacha. deshacer-aug-ben-3 seguro ‘Los zapatos son para un rato no más, para estos días de fiesta no más pues nos ponemos pues. Ese ratito nos ponemos y sus costuras ya se deshacen.’ (Peralta 2006: 153) 2) La elisión vocálica afecta al sufijo -mu que pierde su vocal delante del sufijo -pu, dando lugar a -mpu. Ejemplo: Wak otro trabajo-lla-pi trabajo-del-loc ri-sqa, ir-pas.nar recién recién kay este kunan ahora carnaval-ta carnaval-ac chay-ta, lluqsi-m-pu-n. ese-ac salir-cis-ben-3 ‘A otro trabajo había ido, recién ahora para carnavales, se salió de allá.’ 3) La simplificación consonántica, consiste en la elisión o caída de una consonante. Tal proceso ocurre comúnmente en el discurso hablado y los sufijos más usuales son -yku, su variante /-yka/, el sufijo -ykacha y también el sufijo -chka. La consonante que se simplifica es la [k]. a) Veremos el cambio de -yku en [yu] y de -yka en [ya]: Wapaqa wapaqa runas runa-pl [hamu-yu-sGά-ŋku] venir-intns-pas.nar-3pl kay este Yambata-man, Yambata-al sakiya-q, saquear-ag saltiya-q [hamu-yu-sGά-ŋku]. robar-ag venir-intns-pas.nar-3pl ‘Los wapaqa habían venido aquí a Yambata, a saquear, a robar habían venido.’ (Peralta 2006: 93) 258 lenguas de bolivia Chanta fregado kay lugar-es-ta may-ta-pis [urma-ya-pu-ŋkú-man] a! luego fregado este lugar-pl-ac donde-ac-adi caer-intns-ben-3pl-pot excl ‘Además, fregados son estos lugares, ¡donde sea se podrían caer pues (los borrachitos)!’ (Peralta 2006: 159) b) Veremos el cambio de -ykacha en [yacha]: Ma no ka-n-chu, [wixč’u-yača-ku-ŋkú-man] ser-3-neg botar-osc-rfl-3pl-pot ári, pues k’uchu-manta rincón-abl k’uchu, rincón fiero, í? feo cierto ‘No hay (borrachitos) se botarían pues por todos lados, de rincón en rincón, muy feo ¿no es cierto?’ (Peralta 2006: 159) c) Veremos el cambio de -chka en [Sa] Tele-ta [qhawari-Sa-nčéx-ña] a, wak-ita-s bujari-spa [pasa-ri-šá-ŋku]. tele-ac mirar-dur-1pi-ya excl vaca-dim-pl decir.buu-sub pasar-inc-dur-3pl ‘La tele ya estamos mirando pues, la vaquitas buu diciendo están pasando.’ (Peralta 2006: 162) En resumen, los procesos morfofonémicos (variaciones de los morfemas) son limitados y generalmente regulares. Muchos de los cambios en la forma de los morfemas están condicionados morfológicamente (por ejemplo, -ku cambia a -ka delante de mu o pu); pero también hay variación dialectal de los morfemas, principalmente en lo que respecta a la pérdida de consonantes (por ejemplo, -yku cambia a -yu). 2.4.6 Enclíticos o independientes Según Cerrón-Palomino (1987: 287), estos sufijos “se caracteriza[n] por su capacidad combinatoria que posibilita su anexión a las diversas ‘partes de la oración’ … En términos distribucionales, los sufijos independientes ocupan las posiciones más externas respecto del tema, cerrando la estructura de la palabra”. Es decir, son sufijos periféricos que cierran la estructura de la palabra pero éstos relacionan palabras, frases, oraciones o párrafos a través de conjuntos que funcionan como conectores, interrogaciones, aseveraciones, etc. Cusihuamán (2001: 71), hace una clasificación más específica y concreta, divide estos sufijos en cuatro grupos: Enclíticos de tópico, enclíticos de enfoque, enclíticos relacionales, y enclíticos de especificación. 2.4.6.1 Enclíticos de tópico Según Cusihuamán (2001: 227), los enclíticos de tópico pueden ser uno o más elementos explícitos de un “discurso” o también es la “secuencia de expresiones u oraciones que ocurren en el transcurso de una conversación, de una narración, o de un comentario”. Los sufijos característicos son: -qa y el res­ponsivo -ri. -qa puede combinarse tanto con verbos como con nombres dependiendo que lo que se quiere topicalizar, pueden haber varios en un mismo enunciado. Veamos los siguientes ejemplos: 259 quechua a) Topicaliza una acción verbal. Killa-pi-chá mes-loc-ign tuku-chi-ni acabar-caus-1 a excl phullu-ta. phullu-ac Casi casi iskay dos killa-pi-chus mes-loc-ign ima-chá lliklla-y-ta tuku-chi-ni-qa. qué-ign aguayo-1-ac acabar-caus-1-top ‘Tal vez en un mes he terminado (de tejer) el phullu. Casi en dos meses, algo así he terminado mi aguayo.’ (Peralta 2006: 175) b) Topicaliza sustantivos. Alumn-ito-s-manta, ahh ya. alumno-dim-pl-abl parla-yku hablar-1pe a, excl Pay-kuna-wan-qa él/ella-pl-ins-top porque porque kay-pi este-loc qhichwa quechua qhichwa-lla-ta quechua-del-ac puru-lla puro-del yacha-nku, saber-3pl icha-rí? cierto-topn Castellanu-ta-qa mana wakin entiende-nku-chu, wakin palabr-ita-s-lla. castellano-ac-top no algún entender-3pl-neg algún palabra-dim-pl-del ‘De los alumnos ahh ya, con ellos hablamos sólo en quechua, porque aquí saben solamente quechua, ¿no es cierto? El castellano no entienden algunos, excepto algunas palabritas.’ (Peralta 2006: 203) c) Responde a preguntas con taq ‘enfático’. E: Kunan ahora S: Ah, ñuqa-pata prima-y a, pay-qa. ah, yo-gen prima-1 excl él/ella-top E: ‘¿Y ahora la Emiliana, ¿qué es de vos?’ S: ‘Ah, ella es pues mi prima.’ (Peralta 2006: 177) kay este Emiliana, Emiliana ima-taq qué-enf qam-pata-rí? tú-gen-topn -ri Para Middendorf (1970: 132), citado en Peralta (2006: 229), el sufijo -rí significa ‘y, pero, pues’; como conjunción copulativa sirve para unir frases de una manera coordinada; pero que se lo usa con preferencia con frases interrogativas. Su función básica, sin embargo, es la introducción de un nuevo tópico en el discurso. Veamos los ejemplos que Peralta (2006) proporciona al respecto: -rí ‘¿y?’ Qam-pata-rí, may-manta mama-yki, papasu-yki-rí? tú-gen-topn dónde-abl mamá-2 papá-2-topn ¿Y de vos?, ¿De dónde son tu mamá y tu papá? 260 lenguas de bolivia -rí (duda) En oraciones afirmativas, -rí plantea un cuestionamiento, una duda. Llaqta-man ri-y-ta, ir-nml-ac pueblo-al ¿Acaso sabe ir al pueblo? yacha-n-chu-rí? saber-3-int-topn Estos sufijos plantean un problema de análisis: es un solo morfema con un significado común y dos formas (con y sin acento), o son dos morfemas con significados parecidos. 2.4.6.2 Enclíticos de enfoque Para Cusihuamán (2001), los enclíticos de enfoque se caracterizan “por marcar a uno de los elementos funcionales de la oración como foco de la misma. Este elemento enfocado comenta sobre el tópico, sea éste explícito o implícito, y de esa manera viene a ser parte primordial de la oración.” Dentro esta clase, se distinguen los siguientes sufijos: • • • • • el atestiguativo -mi-n el ignorativo asertivo -cha (o -chá acentuado) el dubitativo -sina el interrogativo-negativo -chu el ignorativo -chus -min Según Middendorf (1970: 317), es la partícula de “afirmación o comprobación” que no puede faltar en un contexto narrativo; que se agrega a las diversas partes de la oración, y no queda omitida en las frases interrogativas directas. El ejemplo de -min usado en afirmaciones es: Profesora-s profesora-pl q’ala-ta rulo-ac k’ururachu-wa-nku hacer.rulos-1.o-3pl chukcha-y-ta-qa cabello-1-ac-top jajajaa, jajajaa ñuqa-ta-qa yo-ac-top k’ururachu-wa-nku. hacer.rulos-1.o-3pl Chay ese tarde tarde pacha desde simp’a-ku-ni, ura-yku-lla-n-min, mana q’ulea-n-chu. peinar-rfl-1 bajar-intns-del-3-afm no enredarse-3-neg ‘Las profesoras me han hecho rulos en mi cabello jajajaa, lo han enrulado. Esa misma tarde me he peinado, por cierto que he podido peinarlo no más, no se ha enredado.’ (Peralta 2006: 179) Además, -min se combina con elementos interrogativos, como en el siguiente ejemplo. -chá El sufijo conjetural o inferencial -chá ‘seguramente’ según Middendorf (1970: 318), expresa duda, incertidumbre, o probabilidad. Tiya Blanca mayqin-ta-chá cuenta-ri-chka-rqa; piq, piq, pi-min ka-rqa? tia Blanca cuál-ac-ign contar-inc-dur-pas quién quién quién-afm ser-pas ‘La tia Blanca a no sé quién le estaba contando; ¿quién, quién, quién era?’ (Peralta 2006: 180) 261 quechua a) -chá expresa una suposición, especulación o anticipación acerca de un evento Waraka’-y-ta honda-1-ac kunan ahora chinka-chi-ni … perder-caus-1 may-man-chus dónde-al-ign t’aka-ni-pis derramar-1-adi q’aya-chá mask’a-mu-saq a!, ka-ku-chka-n-chá, jajaja. mañana-ign buscar-cis-1.fut excl ser-rfl-dur-3-ign jajaja ‘Mi honda lo hice perder hoy día … ¿dónde lo habré derramado?, supongo que mañana iré a buscarlo ¡pues!, seguramente se estará jajaja.’ (Peralta 2006: 181) b) -chá expresa duda o incertidumbre con la noción ‘no sé’ mayqin-ta-chá cuenta-ri-chka-rqa contar-inc-dur-pas cuál-ac-ign ‘no sé a quién estaba contando’ (Peralta 2006: 180) hermanu-y-ña-taq qhati-n, may-man-chá qhati-n hermano-1-ya-enf pastear-3 dónde-al-ign pastear-3 ‘mi hermano ya también les ha pastoreado, no sé a dónde iría a pastorear’ (Peralta 2006: 43) Como observamos en los ejemplos, el sufijo -chá se une a pronombres interrogativos y adquiere la noción de ‘no sé’. El asertivo dubitativo -sina ‘creer que’ Según Herrero & Sánchez de Lozada (1978: 422) el asertivo dubitativo ‘creer que’, -sina señala “un estado de incertidumbre, duda, o no certeza en el hablante, y lo traducen como ‘tal vez, quizás’.” Plaza (1981: 29), corrobora con lo mencionado y agrega que significa ‘creer que’. Tenemos el siguiente ejemplo: Q’asa-ta Q’asa-ac jamu-rqa-nki-chu?, venir-pas-2-int riku-rqa-yki-sina, ver-pas-1>2-dub mana no as poco ancha muy cuenta cuenta qulu-ni-chu, pero riku-rqa-yki-sina. darse-1-neg pero ver-pas-1>2-dub ‘¿(A la fiesta) de la Q’asa has venido?, creo que te he visto, no me doy cuenta muy bien, pero creo que te he visto.’ (Peralta 2006: 183) -chu Para Middendorf (1970: 318), citado en Peralta (2006: 238), la partícula interrogativa-negativa -chu cumple doble función: por un lado, tiene carácter interrogativo, y por otro, completa la negación indicada por la partícula mana. Veamos los ejemplos en interrogaciones: Elvira t’anta-ta ruwa-pu-sqayki-chu? Elvira pan-ac hacer-ben-1>2.fut-int ‘Elvira ¿te lo haré pancito? 262 lenguas de bolivia En negaciones: Ma(na) no escuela-man escuela-al chura-wa-nku-chu poner-1.o-3pl-neg a, excl mana no escuela-yuq-chu. escuela-pos-neg ka-ni ñuqa-qa. ser-1 yo-top ‘No me pusieron pues a la escuela, yo no tengo educación.’ (Peralta 2006: 51) El ignorativo -chus ‘no sé’: El sufijo -chus ‘ignorativo’ indica ‘incertidumbre’ (Plaza 1981: 128) se lo traduce ‘no sé qué, o quién sabe qué…’, y “normalmente se enfatiza contrastándolo con otro elemento similar que también se ignora (por lo que -chus aparece dos o más veces).” Chay ese pacha-qa tiempo-top Juvenal Juvenal ima-chus qué-ign (notario) notario ka-rqa ser-pas apellidu-n … apellido-3 na-ta … cosa-ac don Juvenal don Juvenal Cochabamba-man Cochabamba-al ka-rqa. ser-pas ri-pu-sqa, ir-ben-pas.nar may-pi-chus tiya-ku-n-pis a! dónde-loc-ign estar-rfl-3-adi excl ‘Esa vez era (notario) este … don Juvenal era. Juvenal no sé qué era su apellido … se había ido a Cochabamba, no sé dónde vivirá pues!’ (Peralta 2006: 188) 2.4.6.3 Enclíticos relacionales Berrios (1919: 80), describe a la conjunción como uno de los elementos de la gramática quechua, la cual “es la parte de la oración que sirve para denotar el enlace entre dos o más palabras, claúsulas u oraciones.” Es decir, los sufijos de esta categoría son los que se ocupan de enlazar o relacionar enunciados u oraciones o también podría contrastarlos. Pertenecen a este grupo los sufijos que significan la conjunción ‘y’ como son: el aditivo -pis, el contrastivo -taq, y el coordinador nominal -wan … -wan. Cusihuamán (2001: 237) resume los siguientes usos del aditivo -pis: a) expresa “inclusión, acuerdo, igualdad, o identidad del elemento escogido, con alguna referencia anterior”; b) en negaciones se traduce como “tampoco, no … ni …, ni tampoco”; c) expresa “acumulación coordinada de dos o más elementos en la oración complementaria”. a) -pis en afirmaciones expresa inclusión (por medio de la palabra ‘también’) Porque porque chay-pi ese-loc ñawpaq-ta-qa … antes-ac-top ni neg pi quien pi-chá quien-ign suwa-ku-q, warkhu-q robar-rfl-ag colgar-ag suwa-ku-na-n-paq. robar-rfl-nml-3-ben Layqa bruja ka-nku, ser-3pl warmi-pis, mujer-adi layqa qhari-pis ka-n-man, chay-ta-pis warkhu-lla-q-taq ka-nku. bruja hombre-adi ser-3-pot ese-ac-adi colgar-del-ag-enf ser-3pl ‘Porque antes … a quien robaba, lo colgaban para que nadie más robe. A la mujer bruja también, si fuera hombre el brujo también, a esos también los colgaban de la misma manera.’ (Peralta 2006: 189) 263 quechua b) -pis en negaciones expresa ‘tampoco’, ‘ni siquiera’ Mana no luz-ni-yku-pis luz-euf-1pe-adi Pila-s pila-pl Kunan ahora mana no mana no tiya-n-chu, estar-3-neg dura-n-chu. durar-3-neg ni neg kimsa tres radio radio Unay-ña largo.tiempo-ya diya-ta-pis, día-ac-adi toca-chi-na-yku-paq-pis. tocar-caus-1pe-ben-adi dura-q durar-ag seguidito seguidito ka-q, ser-ag pila-s-qa. pila-pl-top toca-chi-pti-yki, tocar-caus-sub-2 mana dura-n-ña-chu. no durar-3-ya-neg ‘Tampoco tenemos luz, ni siquiera para hacernos tocar radio. Las pilas ya no duran. Antes, duraban harto tiempo las pilas. Ahora no, ni siquiera tres días ya no duran si es que haces tocar seguidito.’ (Peralta 2006: 190) c) -pis expresa coordinación de dos o más elementos Arí, sí bueno, bueno kusa-lla bien-del chay-ta ese-ac juk uno chhikan-pi-qa poco-loc-top yacha-na-puni saber-nml-cert qhichwa-ta-pis, castellanu-ta-pis, aymara-ta-pis parla-y-ta quechua-ac-adi castellano-ac-adi aimara-ac-adi hablar-inf-ac ‘Sí, bueno, eso está bien, siquiera un poco hay que saber siempre hablar quechua, castellano y aymara también.’ (Peralta 2006: 191) El contrastivo -taq ‘y’, ‘pero’, ‘también’ según Cusihuamán (2001: 240), resume los siguientes usos: a) -taq expresa “contraste, diferencia, o divergencia de dicho elemento con respecto a alguna referencia anterior”; se usa en las siguientes traducciones: ‘pero, sin embargo, por otra parte, al contrario, y’. b) expresa “coordinación de dos o más acciones, simultáneas o alternadas que son realizadas por el mismo actor”. Veamos los siguientes ejemplos: -taq expresa “contraste” E: wawa-yki-rí? niño-2-topn R: chay ese E: tata-n-ri? padre-3-topn R: tata-n padre-3 waw-ita-lla-wan niño-dim-del-ins may-pi-chus donde-loc-ign ka-ku-chka-yku. ser-rfl-dur-1pe ka-chka-n-pis, ser-dur-3-adi wak otro warmi-wan mujer-ins 264 lenguas de bolivia ri-pu-n-chá ir-ben-3-ign a! excl Papasu-y-pis papá-1-adi wak otro warmi-wan mujer-ins ri-pu-n … ir-ben-3 ñuqa-taq sap-ita-y. yo-enf solo-dim-1 E: ‘¿Y tu hijito?’ R: ‘Con mi hijito no más estamos.’ E: ‘¿Y su papá?’ R: ‘Quién sabe dónde estará pues, ¡con otra mujer se habrá ido! Mi papá también con otra mujer se ha ido … pero yo (me quedé) solita.’ (Peralta 2006: 192) -taq expresa coordinación de acciones … chay-wan … ese-ins leon-ta-qa, león-ac-top antes antes kunka-manta cuello-abl ñi-spa decir-sub yayku-mu-n-taq entrar-cis-3-enf aysa-rqu-rpa-sunchik jalar-aug-intl-1pi.fut ñi-q decir-ag q’ajj ono ka-yku ser-1pe chay ese ratu rato a, excl y y sipi-rpa-sunchik matar-intl-1pi.fut ima-tá qué-ac ri-pu-n-taq ir-ben-3-enf sipi-sqayku-rí! … matar-1pe.fut-topn leon-qa, león-top aycha uqha-ri-sqa-ña ri-pun. carne alzar-inc-nml-ya ir-ben-3 ‘… con eso de su cuello lo vamos a jalar con fuerza y lo vamos a matar al león, decíamos pues, pero ¡qué íbamos a matar! … más bien el león se entraba y q’ajj ese rato también se iba, alzando su presa ya se iba.’ (Peralta 2006: 194) El coordinador nominal -wan … -wan, como dice Cerrón-Palomino (1994: 93), es el coordinador de dos o más nombres. Nuestro ejemplo dice: Jabon-ta-pis, jabón-ac-adi apa-mu-pti-nku, llevar-cis-sub-3pl ajina así cambiya-ku-yku cambiar-rfl-1pe a excl trigu-wan trigo-ins sar-ita-wan, anchay dura-chi-ku-yku a maíz-dim-ins muy durar-caus-rfl-1pe excl ‘El jabón también, si es que traen, así cambiamos por trigo y maíz, eso nos hacemos durar pues.’ (Peralta 2006: 198) 2.4.6.4 Enclíticos de especificación. Según Cusihuamán (2001), “Los sufijos enclíticos de especificación se unen a uno o más elementos de la oración a fin de especificar el estado o la frecuencia de la acción o el actor u otro elemento que interviene en la realización de la acción; además pueden operar indistintamente en declaraciones, mandatos o preguntas.” A esta categoría pertenecen el definitivo -puni, el continuativo -raq, el discontinuativo -ña, y el limitativo -lla. 1) El definitivo o certitudinal -puni ‘siempre’ Según Middendorf (1970: 319), -puni es la partícula de “afirmación” que significa “completamente, sin duda, seguro”. Y Cusihuamán (2001: 244), hace dos diferencias; a) cuando -puni “se añade a un elemento 265 quechua de la oración que no se refiere a la persona, indica que dicho elemento participa en el evento en forma definitiva, puntual o infalible, frecuente, o habitual”; b) cuando -puni se “añade a un elemento que se refiere a persona, identifica expresamente a dicha persona como actor, receptor, o co-partícipe de la acción; y se podría traducir como ‘yo mismo, tú mismo’, etc. a) -puni expresa participación definitiva de una acción Jamu-ni-puni tiyu-s-ni-y-ta a! venir-1-cert tio-pl-euf-1-ac excl ‘Vengo siempre pues a donde mis tíos!’ (Peralta 2006: 199) b) -puni señala participación específica de una persona como actor, receptor Ñawpaq-ta antes-ac uhhh uhhh grave grave trabaja-q trabajar-ag ka-ni, ser-1 ñuqa-lla-puni yo-del-cert trabaja-q trabaja-ag ka-ni, ser-1 qusa-y ri-pu-q estudio-man. esposo-1 ir-ben-ag estudio-al ‘Antes uhhh harto trabajaba yo, solamente yo solía trabajar, mi esposo se iba a su estudio.’ (Peralta 2006: 200) 2) El continuativo -raq ‘todavía, aún’, ‘primero’ Para Casihuamán (2001: 244), resume los siguientes usos del sufijo -raq, a) expresa “continuación de la acción o de la existencia de algo”. En tal caso el sufijo -raq se une por lo general “al verbo, al adverbio cualitativo, o a la partícula negadora”; se traduce como: ‘aún, todavía, todavía … no’; b) expresa “prioridad o anterioridad o anterioridad con que ocurre una acción en relación a otras acciones”, en tal caso se traduce como: ‘primero, previamente, antes que nada’. Vemos los ejemplos: a) -raq en el verbo T: Entonces, entonces kay-pi este-loc S: (profesora profesora ri-chka-yku-ña, ir-dur-1pe-ya T: ama-lla-raq a, suya-wa-y-chik!, parla-chka-yku-raq, ajina … prh-del-cnt excl esperar-1.o-imp-pl hablar-dur-1pe-cnt así T: ‘Entonces, … aquí bailan el tinku, les ven a las jovencitas …’ S. ‘(Profesora … ya estamos yendo, ¿vamos?)’ T. ‘No todavía pues, … ¡espérenme!, estamos hablando todavía, así …’ (Peralta 2006: 201) tinku-ta tinku-ac tusu-nku, bailar-3pl sipas-kuna-ta jovencita-pl-ac riku-nku … ver-3pl jaku-chu?) vamos-int b) -raq con la noción de prioridad Qhichwa-pi, quechua-loc tiya-n estar-3 digamos digamos primero-ta primero-ac juk uno leccion-ta lección-ac qhichwa-pi-raq, quechua-loc-cnt avanza-n, avanzar-3 icharí? … cierto ñuqa yo explica-na-y explicar-nml-1 chayma-taq, después-enf 266 lenguas de bolivia juk-ta-wan-qa castellanu-pi-ña-taq. uno-ac-ins-top castellano-loc-ya-enf ‘En quechua, digamos avanzo una lección, entonces yo tengo que explicar primero en quechua, ¿no es cierto? … después, recién en la próxima explicación en castellano ya también.’ (Peralta 2006: 203) 3) El discontinuativo -ña ‘ya’ Según Cerrón-Palomino (1994: 141), -ña “expresa lo opuesto a -raq, es decir, que el estado de cosas señalado por éste cambia a una nueva situación esperada o ansiada”. Middendorf (1970: 320), agrega que -ña “tiene carácter independiente”, es decir, puede ir como un afijo o pegado a cualquier elemento gramatical. Se traduce como ‘ya’. El siguiente ejemplo dice así: Tuta-manta, noche-abl q’achu-ta foraje-ac ña ya q’achu-taru foraje-ac mikhu-n comer-3 thu-chka-yku-ña, cortar-dur-1pe-ya (waka-qa) vaca-top waka vaca Ya, las ocho de la mañana ya las ocho de la mañana mikhu-chi-q-ña comer-caus-ag-ya ña ya ka-yku, ser-1pe tarpu-q sembrar-ag ri-pu-yku. ir-ben-1pe ‘Ya, de madrugada, forraje ya estamos cortando, ya les hacíamos comer a las vacas, porque forraje comen (las vacas). Ya a las ocho de la mañana, ya nos vamos a sembrar.’ (Peralta 2006: 205) 4) El limitativo -lla Cusihuamán (2001: 242) resume los siguientes usos comunes del sufijo -lla; a) “cuando marca a un elemento no verbal de la oración, sujeto, objeto, o adverbial, denota que el efecto de la acción se limita exclusivamente a dicho elemento”; en ese caso se traduciría como ‘solamente, únicamente, no más’; b) “cuando marca el verbo principal en la oración, indica que la acción se realiza en forma intensa, habitual o continuada”, traduciéndose como ‘siempre, frecuentemente, usualmente, no más’; c) cuando co-ocurre con el aditivo -pis, significa ‘aunque sea, por lo menos, siquiera’; d) cuando co-ocurre con el contrastivo -taq, significa ‘lo mismo, de igual modo, asimismo, igualmente, también’. Veamos los siguientes ejemplos:­ a) -lla marcando al elemento verbal Ima-man qué-al llaqta-man pueblo-al suwa-s-manta ladrón-pl-abl mmm mmm ri-sun-man ir-1pi.fut-pot ima-taq, qué-enf chay ese micro micro jina como uhku-man adentro-al peligro peligro kawsa-na-qa vivir-nml-top yayku-nchik entrar-1pi qhawa-chka-lla-wanchik. mirar-dur-del-3>1pi ‘A qué iríamos a la ciudad, tan peligrosa es la vida allá porque hay muchos rateros mmm … qué pues, entramos al micro y nos están mirando no más.’ (Peralta 2006: 172) 267 quechua 268 lenguas de bolivia wata-paq kuti-mu-nqa-chus mana-chus. año-ben volver-cis-3.fut-ign no-ign ‘Después, ahora a Yunguma se fue el profesor Miguel. Seguramente en Yunguma ya también está trabajando, ahí ya también está el profesor, y a los niños ya también ahí les debe estar enseñando, aquí (en Yambata) ya no. Luego, de la misma manera terminará la escuela (el año escolar), y después seguramente se irá, al año cómo será si volverá o no.’ (Peralta 2006: 195) 2.4.7 Sintaxis Según Cerrón-Palomino (2003: 289), el quechua de acuerdo al orden favorito de los elementos composicionales pertenece a las lenguas del tipo SOV; es decir, Sujeto-Objeto-Verbo, teniendo así un parecido estructural a los idiomas japonés y turco. Es decir, el sujeto al principio y el verbo al final, y los complementos directos o indirectos se ponen en medio de éstos. Como dice Grondín (1980: 23), “los complementos más cercanos al sujeto tienen mayor énfasis. Si en la frase existe un adverbio, éste se coloca antes del sujeto”. O sea, el orden de los complementos sirve para dar más énfasis ya sea al sujeto o al verbo. 2.4.7.1 La oración quechua Siguiendo con Cerrón-Palomino, dentro la oración, el verbo es la parte principal para toda conjugación o predicación. Puede haber otros elementos que acompañen al verbo, como ser; nombres o adverbios que, como modificadores, también pueden estar en forma de frases nominales, para cumplir la función básica de sujeto, y frases adverbiales para cumplir la función básica de objeto, modificando así no sólo al verbo sino a toda la oración. En lo que sigue, aunque tomamos los conceptos básicos del texto de Cerrón-Palomino, los ejemplos serán tomados del quechua boliviano, claro está siguiendo las mismas reglas del autor. En ese sentido, tenemos el siguiente ejemplo para ver la oración simple: Rogelio kay pampa-pi sara-ta Rogelio este terreno-loc maíz-ac ‘Rogelio sembrará maíz en este terreno.’ tarpu-nqa. sembrar-3.fut En el ejemplo demostrado, comienza la oración con la frase nominal Rogelio que tiene la función de sujeto; luego tenemos el predicado con la frase adjetival kay, en función de complemento, luego la frase nominal pampa-pi, también en función de complemento, después la siguiente frase nominal sara-ta, está en función de complemento u objeto directo porque está precisamente con ese sufijo marcador -ta, y finalmente viene la acción verbal tarpunqa. Sin embargo, el orden SOV no es único o inalterable, sino que puede variar según la actitud del hablante, siempre y cuando no se altere el sentido o significado de la misma: Kay este pampa-pi terreno-loc tarpu-nqa sembrar-3.fut sara-ta maíz-ac Rogelio. Rogelio Así mismo, Cerrón-Palomino (2003: 291), nos dice que existen también varias clases de verbos. Entonces, la oración en quechua puede clasificarse en tres grandes grupos: • • • Simples y complejas, atendiendo a su complejidad estructural. Transitivas, intransitivas o copulativas, de acuerdo a la naturaleza del verbo. Declarativas, interrogativas, imperativas, dependiendo de la actitud del hablante. quechua ­ 269 270 lenguas de bolivia Oraciones transitivas. Las oraciones transitivas se forman también con verbos transitivos y en quechua hay bastantes, como ser: “mikhu- ‘comer’, riku- ‘ver’, muna- ‘querer’, taka- ‘golpear’, qunqa- ‘olvidar’, etc” (Cerrón-Palomino 2003: 293). Los siguientes ejemplos, tomados de Peralta (2006), son datos reales de la lengua hablada del lado de Yambata, Norte Potosí. Llamta-ta-qa apa-mu-yku sapa tuku-ku-pti-lla-n. leña-ac-top llevar-cis-1pe solo acabar-rfl-sub-del-3 ‘Vamos a traer leña cada que se termina no más.’ (Peralta 2006: 120) Waka-s-ta vaca-pl-ac mikhu-n, comer-3 cabra-s-ta cabra-pl-ac mikhu-n, mikhu-3 burru-s-ta burro-pl-ac mikhu-n, comer-3 atuq-kuna-s-ta mikhu-n tukuy ima-ta mikhu-n a león-qa. qué-ac comer-3 excl león-top zorro-pl-pl-ac comer-3 todo ‘Se come a las vacas, se come a las cabras, se come a los burros, se come a los zorros, todo se come pues el león.’ (Peralta 2006: 10) Chay-manta-qa ese-abl-top sara-ta maíz-ac t’iqpa-ka-pu-nku, pelar-rfl-ben-3pl papa-pis papa-adi alla-nku, cosechar-3pl trigu-ta-pis ruthu-ka-pu-nku, juqha-ri-pu-nku q’alitu-ta. trigo-ac-adi cortar-rfl-ben-3pl recoger-inc-ben-3pl todo-ac ‘Después, lo pelan el maíz, cosechan la papa, lo ciegan el trigo también y todito empiezan a recogérselo.’ (Peralta 2006: 135) En los ejemplos mencionados, las frases nominales marcadas por el sufijo -ta son los objetos directos. Aunque, en el último ejemplo le falta el marcador -ta al ejemplo papapis -papa(ta)pis-, funciona igual como objeto directo. Por otro lado, hay otra clase de verbos denominados, según Cerrón-Palomino (2003: 294), “ditransitivos” y estos se caracterizan porque admiten más de un objeto. Es decir, admiten al objeto directo y además exigen a un objeto indirecto que también puede estar marcado por el sufijo -ta, o en su defecto por el sufijo -man. Los pocos verbos son: qu- ‘dar’, willa- ‘avisar’, ñi- ‘decir’, entre otros. Veamos los ejemplos: … chay-pi … ese-loc suwa-ku-spa, robar-rfl-sub saltiya-spa saquear-sub puri-q caminar-ag ka-nku ser-3pl malo malo runa-s-qa. Chay-ta mana willa-sqa-yki-chu! gente-pl-top ese-ac no avisar-pas.nar-1>2-neg ‘… entonces robando, saqueando solían caminar esas personas malas. ¡Eso no te había contado! (Peralta 2006: 93) En este ejemplo, el objeto directo de suwakuspa ‘robando’, saltiyaspa ‘asaltando’ está sobreentendido; solamente se marca en chay-ta ‘eso’. Entonces ima ayuditá ayuda-ri-nki, qu-sunqa por lo menos t’anta-yki-paq … entonces qué ayudita ayudar-inc-2 dar-3>2.fut por lo menos pan-2-ben ‘Entonces de alguna ayudita que tú hagas, te dará por lo menos para tu pan …’ (Peralta 2006: 112) Aquí, ayuditá no tiene la marca de objeto directo -ta, que muestra que en el habla muchas veces esta marca se omite, quedando como huella simplemente la acentuación de la palabra en la última sílaba. El 271 quechua objeto ­indirecto, en este qam-man ‘a ti’ tampoco se lo menciona explícitamente, pero queda marcado en la conjugación pronominal -sunqa 3>2.fut. Cabra qhati-ni, ima ruwa-ysi-wa-y!, ñi-pti-n, ruwa-ysi-lla-ni-taq. cabra seguir-1 qué hacer-as-1.o-imp decir-sub-3 hacer-as-del-1-enf ‘Voy a pastorear las cabras, cuando dice ¡ayúdame!, en alguna cosa, le ayudo no más también.’ (Peralta 2006: 125) La palabra cabra, objeto directo de qhatini ‘arreo’ tampoco tiene la marca correspondiente; así como también se omite el objeto directo de ruwaysillanitaq ‘también le ayudo’ o sea una tercera persona, la que pidió ayuda. En cuanto al orden normal de ocurrencia, el objeto indirecto precede al objeto directo, sin embargo, puede variar según la forma de hablar como estamos viendo. Oraciones intransitivas. Las oraciones intransitivas se forman con verbos intransitivos como: puñu­‘dormir’, wañu- ‘morir’, wiña- ‘crecer’, kusi- ‘alegrar(se’)” (Cerrón-Palomino 2003: 293). Continuamos con los ejemplos de Peralta (2006). kay-pi mana a, jaqay calle-s-pi-pis puñu-ku-lla-yku este-loc no excl aquel calle-pl-loc-adi dormir-rfl-del-1pe ‘aquí no pues, en aquellas calles también nos dormimos’ (Peralta 2006: 128) Con los verbos de movimiento, las oraciones siguen siendo intransitivas. Jamu-ni-puni tiyu-s-ni-y-ta a! venir-1-cert tío-pl-euf-1-ac excl ‘Vengo siempre pues a donde mis tíos!’(Peralta 2006: 17) Toro-Toro-nta, Toro-Toro-tra auto auto ñan camino ka-pti-n, ser-sub-3 chay-ta-ña ese-ac-ya auto-qa auto-top tukuy todo tiempo-ta yayku-mu-nqa a! tiempo-ac entrar-cis-3.fut excl ‘Cuando haya camino por Toro-Toro, por ahí el auto vendrá pues, todo el tiempo!’ (Peralta 2006: 18) En nuestros ejemplos, el sufijo -ta ya no señala a un objeto directo, sino que está con función adverbializadora y, en este caso, direccional. Oraciones copulativas. Las oraciones copulativas se forman con el verbo copulativo ka-. Este verbo tiene, al menos, tres significados principales: la de ‘ser’; ‘estar’, y, además la de ‘existir o haber’. wakin algún ka-nku ser-3pl catorce-yuq, catorce-pos wakin algún ka-nku ser-3pl quince-yuq, quince-pos, wakin algún ka-nku ser-3pl trece-yuq, dieciseis-ni-yuq ka-nku trece-pos, dieciseis-euf-pos ser-3pl ‘algunos tienen 14, algunos tienen 15, algunos tienen 13, tienen 16 años’ (Peralta 2006: 52) Ñuqa ka-ni yachachiq, interina. yo ser-1 profesor interina ‘Yo soy profesora, interina.’ (Peralta 2006: 1) 272 lenguas de bolivia 273 quechua Tipo preguntas de afirmación y negación. Comenzaremos con las oraciones interrogativas señaladas por -chu, el cual llama la atención sobre lo que se interroga (Cerrón-Palomino 2003: 297). Veamos: E: Qam tu N: Arí, kay-pi, kay-lla-pi muna-ni pero … sí este-loc este-del-loc querer-1 pero E: ‘¿Y tú, aquí no más (en Yambata) quieres vivir?’ N: ‘Sí, aquí, aquí no más quiero (vivir) pero …’ (Peralta 2006: 193) E: Yacha-nki-chu saber-2-int O: Mana, agosto-lla-pi recién toma-ri-ni. no agosto-del-loc recién tomar-inc-1 E: ‘¿Sabes beber chicha?’ O: ‘No, en agosto solamente recién bebo un poquito.’ (Peralta 2006: 144) kay-lla-pi-chu este-del-loc-int aqha chicha tiya-ku-y-ta estar-rfl-inf-ac muna-nki? querer-2 toma-y-ta-qa? tomar-inf-ac-top Como se puede advertir en estos dos ejemplos las preguntas interrogativas llevan el marcador -chu, y las respuestas, que están subrayadas, son de afirmación y negación respectivamente. Nótese además, que la posición del sufijo -chu puede estar junto a un verbo, como en el segundo, o junto a un demostrativo, como en el primer ejemplo. Tal situación, depende de qué es lo que se quiere focalizar, o sobre qué se quiere llamar la atención; si en la acción o verbo, o en la calificación o sea un adjetivo, o en el nombre o frase nominal que funciona sobre sujeto u objeto, etc. Tipo preguntas de información. En las preguntas de información se emplean los pronombres interrogativos: pi ‘quién’, ima ‘qué’, may ‘dónde’, jayk’aq ~ mayk’aq ‘cuándo’, mayqin ‘cuál’, imayna ‘cómo’, imarayku ‘por qué’; ima-ta-wan ‘qué más’. E: Ima-taq qué-enf G: Gato montés. gato montés usqullu suwa-ka-pu-n wallpa-ta a, apa-ka-pu-n. osgollo robar-rfl-ben-3 gallina-ac excl llevar-rfl-ben-3 E: ‘¿Qué es el osgollo?’ G: ‘Es el gato montés. Ese viene, de noche viene el gato montés se lo roba a la gallina pues, se lo lleva.’ (Peralta 2006: 155) E: Imayna-taq cómo-enf N: ah … ah michi-spa-lla, pastear-sub-del usqullu? osgollo kay este Chay ese jamu-n, venir-3 kay-pi este-loc tuta noche jamu-n venir-3 tiya-ku-nkichik? estar-rfl-2pl campu-pi-qa campo-loc-top kawsa-ku-yku vivir-rfl-1pe puri-spa-lla caminar-sub-del animal-es-paq animal-pl-ben kawsa-ku-yku. vivir-rfl-1pe cabra-s-ta cabra-pl-ac jajajaa jajajaa michi-spa, pastear-sub 274 lenguas de bolivia burru-s-ta. Tarpu-spa puqu-chi-yku, michi-spa kawsa-ku-yku. burro-pl-ac sembrar-sub producir-caus-1pe pastear-sub vivir-rfl-1pe E: ‘¿Cómo viven aquí?’ N: ‘Ah … aquí en el campo vivimos para los animales jajajaa pasteando solamente, caminando solamente nosotros así vivimos. Pasteando a las cabras, a los burros. Sembrando, hacemos producir, así, pasteando vivimos nosotros.’ (Peralta 2006: 129) En estos ejemplos el sufijo interrogativo -taq da lugar a preguntas abiertas, se podría decir, pidiendo información, o averiguando datos sobre algo que el interrogador desconoce y espera una explicación favorable por parte del informante. Oraciones imperativas. Como Cerrón-Palomino (2003: 299), lo dice, “este tipo de oraciones indican una orden, un mandato o una exhortación y se forman mediante el empleo de los sufijos flexivos de ­imperatividad.” Veamos algunos ejemplos: … llaqta-pi-qa … pueblo-loc-top qhapaq rico runa-s-qa gente-pl-top “hey … hey qam, tú indio-qa, indio-top jaqay-ta aquel-ac q’ipi-mu-y! …” cargar-cis-imp ‘… en la ciudad la gente rica les dice “hey … indio, tú, aquello ¡anda cárgate! …’ (Peralta 2006: 102) Ya ya ñi-yku, decir-1pe Maña-sunchik pedir-1pi.fut a ya q’aya-qa mañana-top pap-ita-ta papa-dim-ac apa-ka-mu-chu-nku!, llevar-rfl-cis-hort-3pl wawa-s-pa niño-pl-gen diya-n día-3 wathiya-sunchik wathiya-1pi.fut ya … ya apa-ka-mu-chu-nku!, hab-ita-ta llevar-rfl-cis-hort-3pl haba-dim-ac chuqllituta choclo-dim-ac pa-ka-mu-chu-nku!, llevar-rfl-cis-hort-3pl uchu-ta, ají-ac lechugu-ita-ta. lechuga-dim-ac ‘Hemos dicho ya, mañana es el día del niño vamos hacer “wathiya” listo … Les vamos a pedir que se traigan papita, que se traigan habita, que se traigan choclito, ají, lechuguita.’ (Peralta 2006: 103) S: T: Profesora ri-chka-yku-ña, jaku-chu? profesora ir-dur-1pe-ya vamos-int Ama-lla-raq a, suya-wa-y-chik!, parla-chka-yku-raq. Ajina a … prh-del-cnt excl esperar-1.o-imp-2pl hablar-dur-1pe-cnt así excl S: ‘Profesora ya estamos yendo, ¿vamos?’ T: ‘No todavía pues,¡espérenme!, estamos hablando todavía. Así pues …’ (Peralta 2006: 201) Cabe recordar que los mandatos u órdenes pueden ser directos o indirectos. Es decir, cara a cara, o por encargo de otra persona. El primer ejemplo es una orden directa, es como si uno le dijera a uno ‘cárgate’, en tal caso se usa el sufijo imperativo de segunda persona singular -y ‘tú’. El segundo es una especie de orden indirecta o más bien de exhortación, ciertos profesores estaban acordando qué les iban a mandar a decir para que los alumnos traigan (sus cosas), para tal caso tenemos al sufijo imperativo de tercera persona plural -chu-n-ku ‘que ellos …’. El último es un ejemplo de orden directa, la profesora ordenó a los demás alumnos, en ese caso se hace uso del sufijo imperativo de segunda persona plural -ychik ‘ustedes’. quechua 275 276 lenguas de bolivia quechua 277 278 • lenguas de bolivia agentivo -q, convierte los verbos en nombres (de yacha-chi- ‘enseñar’ se obtiene yachachiq, lit. ‘enseñador’, o sea ‘maestro’ o ‘profesor’); pero también se utiliza para indicar una actividad que se realiza habitualmente, y generalmente situada en el pasado, en cuyo caso complementa al verbo ka- ‘ser’ (a veces también utilizado para expresar ‘estar, haber, tener’: yacha-q kani ‘solía saber’; o en el futuro, como una meta (qhawarikuq jamuni ‘he venido a mirar’). Chanta luego ñuqa-qa 1-top as-ta-wan poco-ac-ins chay-ta ese-ac wasi-n casa-3 pasa-ni pasar-1 ka-q ser-ag unay-man tiempo.largo-al ura-n-man-qa abajo-3-al-top piru pero ranu-qa grano-top yuraq-situ ka-chka-n. blanco-dim ser-dur-3 ‘Entonces yo paso por ahí en largo rato, pero más debajo de lo que es su casa el grano está blanquito.’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 51) May-man-chus dónde-al-ign chay eso jina-ta así-cc ri-ni-pis ir-1-adi mana no parla-paya-ni-chu hablar-rep-1-neg chay ruwa-q-kuna-ta-qa ni pi-ta. eso hacer-ag-pl-ac-top ni quien-ac ‘Adónde habré ido de ese modo, no les conversé a los que hicieron eso (a los hacedores), a nadie.’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 52) Piru pero unay-chá tiempo.largo-ign kuka-ta-qa coca-ac-top yacha-q saber-ag ka-nku ser-3pl runa-qa gente-top purki ñuqa-qa riku-lla-q-puni ka-ni kuka-ta akulli-q-ta-qa. porque yo-top ver-del-ag-cert ser-1 coca-ac mascar-ag-ac-top ‘Pero ha debido ser antes (que) la gente sabía (mascar) la coca, porque yo siempre solía ver a los mascadores de coca.’ (Ilafaya & Plaza 2000.4: 14) Chanta luego tata padre Luritiyu-ta Luritiyu-ac riku-ni. ver-1 Pay-qa él/ella-top “qhawa-ri-ku-q mirar-inc-rfl-ag jamu-ni, venir-1 mana-qa ka-n-chu runa-s” ñi-spa ñi-wan musqu-y-pi-qa. no-top ser-3-neg gente-pl decir-sub decir-3>1 soñar-inf-loc-top ‘Después veo al señor Luritiyu. Él en el sueño me dice “he venido a mirar / espectar, pero no hay gente”.’ (Ilafaya & Plaza 2002.7: 62) • obligativo -na, de manera similar a los anteriores sufijos, convierte los verbos en sustantivos; pero también agrega la necesidad u obligación de su realización, en cuyo caso generalmente viene como complemento de los verbos ka- ‘ser’ (indicando algo que está pendiente, ruwa-na-y ka-chka-n ‘tengo que hacer algo, está pendiente’) o tiya- ‘estar’ (implicando obligatoriedad, ruwa-na-y tiya-n ‘tengo que hacer algo, estoy obligado, es necesario’). 279 quechua Chay-ta eso-ac ñuqa-qa yo-top mana no qunqa-ni-chu olvidar-1-neg imayna-ta-chus cómo-ac-ign tata-y padre-1 mama-y mamá-1 ka-rqa chay jina-lla-taq ñuqa-pis ka-na-y tiya-n. ser-pas-3 eso comp-del-enf yo-adi ser-nml-1 estar-3 ‘Eso yo no me olvido. Tal como era mi padre mi madre, así también yo tengo que ser.’ (Ilafaya & Plaza 2000.4: 11) Wasi-pi awa-na-y ka-pti-n chay-ta-pis ruwa-lla-ni-taq. casa-loc tener-nml-1 ser-sub-3 ese-ac-adi hacer-del-1-enf ‘Cuando hay qué tejer en la casa, eso también lo hago.’ (Ilafaya & Plaza 2002.1: 49) Ñuqa-p-pis yo-gen-adi ka-chka-n ser-dur-3 llamk’a-ku-na-y trabajar-rfl-nml-1 ñi-spa decir-sub ka-chka-n … ser-dur-3 apura-ku-nku. apurar-rfl-3pl ira era Ñuqa-p-pis yo-gen-adi wayra-chi-na-y ventear-ac-nml-1 llamk’a-na-y-qa trabajar-nml-1-top jin-ita ka-chka-n ñi-n. así-dim ser-dur-3 decir-3 ‘Yo también tengo trabajo que hacer … ventear la era, diciendo se apuran. Yo también tengo mi trabajo que hacer.’ (Lit. ‘asísito está esperando’) (Ilafaya & Plaza 2000.7: 11) • participial -sqa, también convierte los verbos en nombres, pero en la forma de participios pasivos del castellano (ruwa-sqa ‘hecho’; llamk’a-sqa ‘trabajado’); y puede ser también utilizado como complemento directo de otro verbo: Ruwa-sqa-y-ta riku-nki-chu? hacer-nml-1-ac ver-2-int ‘¿Viste lo que traje?’ Kay este wasi-y-man-qa casa-1-al-top para-sqa-n-ta-wan llover-nml-3-ac-ins jam-pu-ni venir-ben-1 llamk’a-y trabajar-1 ñawp-ita-p-ta. antes-dim-gen-ac ‘A esta mi casa, me vengo apenas llueve, antesitos del trabajo.’ (Ilafaya & Plaza 2000.7: 21) Llamk’a-sqa-nchik-man trabajar-nml-1pi-al jina-qa comp-top sumaq-ta bueno-ac kuyra-nchik cuidar-1pi llamk’a-sqa-nchik-ta-qa. trabajar-nml-1pi-ac-top ‘De acuerdo a lo que hemos trabajado, cuidamos bien nuestro trabajo (lo que hemos trabajado).’ (Ilafaya & Plaza 2000.7: 26) 280 lenguas de bolivia Ñuqayku-pis nosotros.pe-adi mana no qhati-ykacha-chka-yku, arrear-osc-dur-1pe tata-yku-p padre-1pe-gen ñuqayku-qa nosotros.pe-top mama-yku-p-ta-chu mamá-1pe-gen-ac-neg ranti-ku-sqa-yku-ta comprar-rfl-nml-1pe-ac ñi-n pay-qa. decir-3 él/ella-top ‘Nosotros también no estamos arreando de un lado a otro (los animales) de nuestro padre, de nuestra madre, nosotros (estamos arreando) lo que nos hemos comprado, dice él.’ (Ilafaya & Plaza ­2000.7: 90) Aqsu-s-ta sobrefalda-pl-ac awa-lla-ni-taq tejer-del-1-enf Chanta luego awa-pu-ni tejer-ben-1 wak otro chay-kuna-s-ta-qa. eso-pl-pl-ac-top runa-s-paq. gente-pl-ben Chay eso awa-chi-wa-q-kuna-manta-taq tejer-caus-1.o-ag-pl-abl-top Chanta luego awa-sqa-y-ta-qa tejer-nml-1-ac-top ñuqa-man yo-al winti-na-ta vender-nml-ac winti-ni. vender-1 paga-wanku pagar-3pl>1 qullqi-ta awa-pu-sqa-y-manta. tejer-ac tejer-ben-nml-1-abl ‘Tejo sobrefaldas para otras gentes. Después para vender también tejo esas cosas. Eso que he tejido vendo. Después los que me hicieron tejer a mi me pagan dinero, de lo que se los he tejido.’ (Ilafaya & Plaza 2000.7: 173) 3. Texto: Llamk’aymanta ‘Sobre el trabajo’ (Ilafaya & Plaza 2000.7: 3-4) t1 Tata Inrikiqa juwin runa. tata Inriki-qa juwin runa padre Enrique-top joven gente ‘El señor Enrique es una persona joven.’ t2 Payqa imaptintaq mana phamillata llamk’achisunmanchu, llamk’achina tiyan, juch’uymantapacha yachachina phamillamanqa llamk’aytaqa ñin payqa. pay-qa ima-pti-n-taq mana phamilla-ta llamk’a-chi-sun-man-chu él/ella-top por.qué-sub-3-enf no familia-ac trabajar-caus-1pi.fut-pot-int llamk’a-chi-na tiya-n, trabajar-caus-nml estar-3 juch’uy-manta-pacha pequeño-abl-tiempo yacha-chi-na saber-caus-nml phamilla-man-qa llamk’a-y-ta-qa ñi-n pay-qa familia-al-top trabajar-inf-ac-top decir-3 él/ella-top ‘El dice por qué no haríamos trabajar a la familia, hay que hacerla trabajar, hay que enseñarles desde pequeños a trabajar a la familia, dice él.’ 281 quechua t3 Chaypacha yachasqa … llamk’anamanqa yachasqa wiñanku phamillaqa. chay-pacha yacha-sqa … llamk’a-na-man-qa yacha-sqa wiña-nku trabajar-nml-al-top saber-nml crecer-3pl eso-tiempo saber-nml phamilla-qa familia-top ‘En ese caso la familia crece acostumbrada al trabajo.’ t4 Tatapuni sumaqta pinsana llamk’anapaqqa phamillapi. tata-puni sumaq-ta pinsa-na llamk’a-na-paq-qa phamilla-pi padre-cert bueno-ac pensar-nml trabajar-nml-ben-top familia-loc ‘Debe ser el padre quien debe pensar bien para trabajar bien en la familia.’ t5 Chanta yachanallataq tata kayta ñin payqa. chanta yacha-na-lla-taq tata ka-y-ta luego saber-nml-del-enf padre ser-inf-ac ‘Después también hay que saber ser padre, dice él.’ t6 Piru mana tatanjina mamanjina kasunchu chayqa, phamillaqa nichá yachanqankuchu llamk’aytaqa ­phamillapiqa, ñin payqa. piru mana tata-n-jina mama-n-jina ka-sun-chu chay-qa pero no padre-3-comp madre-3-comp ser-1pi.fut-neg eso-top phamilla-qa ni-chá familia-top no-ign yacha-nqanku-chu saber-3pl.fut-neg ñi-n decir-3 pay-qa él/ella-top llamk’a-y-ta-qa trabajar-inf-ac-top phamilla-pi-qa, ñi-n pay-qa familia-loc-top decir-3 él/ella-top ‘Pero si no somos como su padre o como su padre, seguramente la familia no podrá trabajar en la familia, dice él.’ t7 Chanta imapitaq mana yachaspa llamk’asun, iskuylaman kachana tiyan, yachanankupaq liyiyta qhilqiyta, ñin. chanta ima-pi-taq mana yacha-spa llamk’a-sun iskuyla-man saber-sub trabajar-1pi.fut escuela-al luego qué-loc-enf no kacha-na tiya-n yacha-na-nku-paq liyi-y-ta qhilqi-y-ta ñi-n enviar-nml haber-3 saber-nml-3pl-ben leer-inf-ac escribir-inf decir-3 ‘Luego en qué podríamos trabajar sin saber (sin tener conocimiento), hay que enviarlos a la escuela, para que aprendan a leer y escribir, dice.’ t8 Piru chanta phamillataqa mana rikhurichinachu. piru chanta phamilla-ta-qa mana rikhu-ri-chi-na-chu pero luego familia-ac-top no aparecer-inc-caus-nml-neg ‘Pero entonces no hay que hacer aparecer a la familia.’ t9 Pitaq ñiwanchik rikhurichiy achkhata phamillata, ñispa ñin. pi-taq ñi-wanchik rikhu-ri-chi-y achkha-ta quién-enf decir-3>1pi aparecer-inc-caus-imp mucho-ac phamilla-ta familia-ac 282 lenguas de bolivia ñi-spa ñi-n decir-sub decir-3 ‘Quién nos dice que hagamos aparecer una familia numerosa, dice él.’ t10 Ñuqanchik mismu phamillataqa rikhurichinchik, ni pipis kamachiwanchikchu. ñuqanchik mismu phamilla-ta-qa rikhu-ri-chi-nchik nosotros.pi mismos familia-ac-top aparecer-inc-caus-1pi ni pi-pis kama-chi-wanchik-chu. ni quien-adi ordenar -caus-3>1pi-neg ‘Nosotros mismos hacemos aparecer a la familia, nadie nos ordena.’ t11 Mana jallp’anchik kaptinchu mana phamillata kachasunman yachayman? mana jallp’a-nchik ka-pti-n-chu mana phamilla-ta no tierra-1pi ser-sub-3-neg no familia-ac kacha-sun-man yacha-y-man enviar-1pi.fut-pot saber-inf-al ‘Porque no tenemos tierras, ¿no enviaríamos a la familia a saber (a la escuela)?’ t12 Kachananchik tiyan, yachananpaq llamk’aytaqa allinta ari, ñin. kacha-na-nchik tiya-n, yacha-na-n-paq llamk’a-y-ta-qa enviar-nml-1pi estar-3 saber-nml-3-ben trabajar-inf-ac-top allin-ta ari, ñi-n. bien-ac pues, decir-3 ‘Debemos enviarla, para que sepa trabajar bien, pues, dice.’ Siglas y abreviaciones ANDECOP CPE INA MEC PEIB PCLPT REB SENALEP UMSS Asociación Nacional de Colegios Privados Constitución Política del Estado Instituto Nacional de Antropología Ministerio de Educación y Cultura Proyecto de Educación Intercultural Bilingüe Programa de Capacitación en Lectura y Producción de Textos, PROEIB Andes Reforma Educativa Boliviana Servicio Nacional de Alfabetización Universidad Mayor de San Simón (Cochabamba) Bibliografía Albó, Xavier 1980 Lengua y sociedad en Bolivia, 1976. 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