INTRODUCCIÓN La nutrición de las plantas es fundamental para su adecuado crecimiento y una producción alta y con calidad. EL DIAGNÓSTICO VISUAL DE LAS DEFICIENCIAS NUTRICIONALES EN LOS CÍTRICOS La nutrición de una plantación se puede conocer a través de: análisis de suelo, del análisis foliar y por medio del diagnostico visual, estos tres métodos son complementarios entre sí. El análisis de suelo, nos permite conocer su fertilidad y el análisis foliar nos indica el estado nutricional de la planta. Así por ejemplo si se tiene un adecuado programa de fertilización y éste no se manifiesta en el contenido foliar de la planta, esto nos lleva a pensar que algo anda mal a nivel del suelo o del sistema radicular de la planta. El diagnóstico visual, no es más que la simple observación de los desordenes nutricionales que la planta manifiesta como consecuencia de estar en un suelo con baja fertilidad, ya sea por su propia naturaleza o por una deficiente fertilización. El diagnóstico visual no permite cuantificar el grado de deficiencia, o la causa real del signo de la deficiencia observado, ya que también puede deberse a causas diferentes a la nutricional. Lo importante es que el técnico y/o productor, estén familiarizados con los métodos de diagnóstico y sus limitaciones, para tener un mejor respaldo a la productividad y rentabilidad de la plantación. IMPORTANCIA A través de diferentes visitas a plantaciones de cítricos, principalmente limón, naranja y mandarina, se observan claras evidencias de deficiencias nutricionales, entre las que sobresalen las ocasionadas por la carencia de microelementos, como: boro, zinc. Así también la ocasionada por elementos secundarios tal como: calcio, magnesio y azufre. En otros casos por macronutrientes como fósforo y potasio. Cada una de ellas mostrando signos con diferente grado de severidad, a continuación se presenta algunos signos. José Napoleón Irigoyen1 1 Técnico del Programa MAG-FRUTAL-ES, Santa Tecla, octubre de 2007. El Salvador. Tel. 2241-1593 SIGNOS DE DEFICIENCIA Deficiencia de Nitrógeno: Amarillamiento de hojas adultas. Hojas delgadas, frágiles y pequeñas. Fruto pequeño, con cáscara fina y maduran precozmente. Reduce el crecimiento, hay defoliación y muerte descendente de las ramas. Las plantas con deficiencia de N tienen los tallos largos y delgados. Deficiencia de Fósforo: Es poco común en los cítricos. Sin embargo, la deficiencia de P se observa en la reducción en la floración y P Bajo disminución en el amarre de los frutos. Deficiencia severa produce hojas de color verde pálido o bronceado, caída de hojas, reducción de la floración. Los frutos presentan piel más gruesa y rugosa. Al cortar el fruto se observa el centro muy abierto. Las raíces son pequeñas y poco ramificadas. Deficiencia de Potasio: Se reduce el tamaño de hojas nuevas, se presenta clorosis en las hojas viejas, iniciándose del ápice hacia adentro en forma de “V” invertida donde aparecen también áreas necróticas y moteados pardo amarillentos. El fruto es pequeño, de cáscara delgada y baja acidez, fruto con poca calidad. Deficiencia de Azufre: La planta muestra una decoloración hacia un verde pálido en las hojas jóvenes. En deficiencias severas las plantas no crecen y se decolora toda. Las hojas se secan con el tiempo al progresar la deficiencia. Los signos son similares a la deficiencia de N, pero en hojas viejas. La deficiencia de reduce la calidad del fruto. Deficiencia de Calcio: Responsable del poco desarrollo radicular. Hay clorosis o amarillamiento en los márgenes y nervaduras de las hojas jóvenes, luego se extienden a toda la lámina foliar. Se produce necrosis en áreas amarillentas, comenzando por los márgenes. Se presenta una severa defoliación. El fruto es pequeño y deforme, con bolsas de jugo arrugadas, cáscara áspera y gruesa. Se reduce el crecimiento y la producción. Cuando el B es deficiente las hojas jóvenes se deforman y toman un color amarillento en las venas central y lateral. Las hojas más viejas se enrollan y deforman. Se presenta una muerte descendente de las ramas y la formación múltiple de yemas vegetativas. Los frutos son pequeños, con poco jugo, duros, de cáscara gruesa y áspera, con puntos de goma en el interior de los gajos. Exceso de Boro: Es fácil inducir toxicidad de Boro, debido a que el espacio entre deficiencia y toxicidad es muy corto. Con la toxicidad aparecen manchas amarillentas en las puntas de las hojas, luego se extienden hacia los márgenes, mostrando un aspecto moteado. También se forma goma de apariencia pardusca en el envés de las hojas. En casos severos se produce defoliación. Los síntomas de deficiencia de hierro se presentan primero en las hojas jóvenes y luego en las viejas, con aspecto amarillento (clorótico), pero con las nervaduras verdes. No es una clorosis o amarillamiento uniforme ya que se observan ramas con clorosis fuerte junto a ramas sin clorosis en el mismo árbol. Otras deficiencias: Existen otros signos de deficiencia pero que son menos frecuentes como: la deficiencia de manganeso, deficiencia de cobre, deficiencia de molibdeno, entre otras. Deficiencia de Zinc Deficiencia de Magnesio: Deficiencias: Cobre, Se caracteriza por un amarillamiento intervenal, de aspecto bronceado, que toma forma de V que se inicia en la base de las hojas viejas y avanza hacia el centro cubriendo los márgenes. Las zonas amarillentas y los brotes terminales se necrosan. Los síntomas en mayor grado se observan en las hojas próximas a los frutos maduros. Los frutos son pequeños, con cáscara delgada y bajo contenido de azúcares y acidez. Deficiencia de Boro. El Zn es un nutriente inmóvil dentro de la planta y por eso los síntomas de deficiencia aparecen en las hojas nuevas. Estas hojas presentan una clorosis o amarillamiento intervenal, pero la nervadura central y las nervaduras laterales o secundarias, permanecen verdes. Las hojas son pequeñas, estrechas y puntiagudas. Los brotes jóvenes adquieren forma de roseta. Cuando la deficiencia es severa se reduce el tamaño de la planta y se disminuye la producción y calidad del fruto. Deficiencia de Hierro: Manganeso, Molibdeno RECOMENDACIÓN GENERAL Un programa para manejar la fertilización de los cítricos, no se puede basar en la aparición u observación de los síntomas de deficiencia, aunque en caso de que aparezcan deben ser considerados, ya que cuando aparece el signo de deficiencia, ya se ha hecho un daño importante en el cultivo, por lo cual su corrección no sólo es cara de realizar, sino que ya es tarde para rectificarla. Para un adecuado programa de fertilización y nutrición de los cítricos, los signos de deficiencia observados, deben complementarse con el análisis foliar y el análisis de suelo. El análisis de suelo debe ser completo, no solamente el análisis de rutina, para conocer el contenido de todos lo elementos, para que el aporte de los elementos faltantes, macros, secundarios y micros, sean a través de la fertilización al suelo, buscando con ello una eficiente nutrición del cultivo. Para una mejor fertilización y nutrición del cultivo de los cítricos, el productor debe consultar con los técnicos de las diferentes instituciones que brindan asistencia técnica, entre estas, el programa MAG-FRUTAL-ES.