Ese día Dios lloró Fue un 21 de octubre del 2005 cuando te ví por primera vez en una caja, mi Mamá fue quién me alentó a acercarme a la señora que te estaba vendiendo, cabe decir que pensaba llevarme en primer lugar a tu hermano de color negro, pero como solo ví tu rabo pedí a la señora si podía ver tu rostro y fue cuando decidí que tu irias conmigo a casa. Costaste 300 pesos y fuiste entregado en una caja de cartón, fue muy emocionante llevarte a casa en el taxi de regreso, ya que eras mi primer perro, aunque tu estabas asustado y hasta te hiciste pipi en el trayecto, eso no importaba ya que pensé que te quería pasear y jugar a aventarte un hueso, en fín en hacer todas las actividades típicas que uno piensa debido al conocimiento popular sobre que se puede hacer con un perro.