Tecnocracia Liberal Este sistema político que junta el concepto de tecnocracia y capitalismo, se basa en la premisa de que la clase política está podrida por dentro, porque el poder corrompe, y ataca directamente a la “democracia” generalizada en occidente y, por descarte, al resto de regímenes. (Esto es un resumen general, no voy a entrar en detalles, porque tampoco me sé los detalles) El político medio, debido a sus propias ambiciones o ineptitud y a cómo funciona la “democracia” per sé, lejos de hacer lo mejor para la sociedad, hace lo que le mantiene en el poder el mayor tiempo posible con la consiguiente compensación económica. Sin embargo, el objetivo de una empresa privada es ganar dinero sí, pero a diferencia del gobierno, gracias a nuestro querido capitalismo, gana más dinero aquella que ofrezca un mejor servicio. Tirando de esta idea, el gran objetivo de la tecnocracia liberal, es minimizar la intervención del Estado en la vida pública y sustituirlo por el servicio de empresas privadas. Esto último constituye la parte “liberal”, pero que hay de la “Tecnocracia”. Pues bien, esta idea de un Estado minoritario casa muy bien con el régimen tecnocrático, ya que se basa en sustituir TODA la clase política por expertos en las respectivas materias, que sean seleccionados por medio de exámenes extremadamente complicados (pues hay que ser una persona muy capaz para liderar un país) y de entre los seleccionados, que el pueblo elija el que más conveniente le parezca por medio del currículum o algo por el estilo. Como ven, en este sistema no hay discursos doctrinarios cuya única pretensión es manipular al pueblo para conseguir votos, no hay ansias de ascender a cualquier precio, no hay expertos en retórica, lo que hay son expertos en su materia, que es lo que se necesita. Menos discusiones barriobajeras y más trabajar. Además, al eliminar los espectros políticos y solo centrarnos en el mero pragmatismo, se evitaría en gran medida la crispación social y el odio que muchas veces aparece entre personas con ideologías políticas distintas. Y todos los conceptos de las distintas ideologías traducidos en leyes (sea la ley del sí es sí, la de violencia de género, etc.) a tomar por culo ya. Es cuestión de tener legisladores expertos, expertos en ética y un poco de sentido común para hacer una constitución que además de mantener el orden social, otorgue las mayores libertades posibles (eutanasias controladas, aborto, igualdad de derechos independientemente de raza, orientación sexual, sexo, etc. una buena política migratoria que dé la bienvenida a los inmigrantes sin antecedentes…) Estas cosas no tendrían que ser cuestiones ideológicas, sino sencillamente consecuencia de las opiniones de expertos y del sentido común. Pagar considerablemente menos puestos de trabajo en el Gobierno y evitar tanto chanchullo (al haber menos personas y menos recursos), se traduce en una bajada del dinero que pagamos. Que, además, va acompañado de una bajada mucho más sustancial al no tener que pagar impuestos destinados a las pensiones, seguridad social, etc., exceptuando, claro está, los que van destinados a servicios que no puede realizar una empresa privada pero que son esenciales para el funcionamiento de una sociedad, ya sean el mantenimiento de las calles, policía, bomberos, investigación, etc. Esta bajada de impuestos es para todo el mundo, clase baja, media, y alta, pero como es evidente, manteniendo aún la clásica premisa de que quien tiene más, paga más. Luego está el clásico argumento de que no podemos dar el sueldo bruto a las personas porque no sabrían cómo gestionarlo y acabarán en la miseria. Pues chico, esto se soluciona fácil con un poquito de educación financiera (que se podría dar en las escuelas) y 2 dedos de frente, dejémonos ya de paternalismos. Lo que está claro es que el dinero que yo gano lo quiero gestionar yo, no el Estado. Así se evita el gasto innecesario de dinero público y tenemos una mayor libertad económica. Seamos sinceros con más dinero, se es más feliz y es una realidad. Puede que no te la garantice, pero desde luego, es una base perfecta para que la vayas construyendo a tu gusto. Al final, el objetivo último de una sociedad es llegar al estado de bienestar y eso es lo que este sistema intenta conseguir, luego el resto, depende de nosotros. Y respecto al tema de la sanidad pública. Evidentemente la sanidad es un derecho fundamental y todo ser humano debería tener acceso a ella independientemente de sus recursos económica, pero la sanidad pública no es la única manera de conseguirlo e incluso es peor que la que planteo. La sanidad debería traducirse en un seguro como los de coche o casa etc. que TU y no el Estado elija. De tal forma que, como he dicho antes, se encargue de tu salud una empresa privada que por mero capitalismo y por cómo funciona, va ofrecer un mejor servicio (mejores profesionales al estar mejor pagados, menos tiempo de espera…). No como la sanidad pública que no tiene competencia alguna y que si va mal, te aguantas (o pagas un seguro privado, en cuyo caso pagarías el doble, por un “seguro” que no utilizas y otro que sí). Y respecto a los que están en paro o viven en la pobreza, pues que hayan ONGs o subvenciones o instituciones pagadas por el propio Estado que presten servicio a estas personas. Y esto se extiende, podría extender a otros muchos sectores como la educación, de tal manera que se evitaría también el adoctrinamiento político en los colegios o el predominio de la religión en la enseñanza.