Subido por Viridiana Gómez Flores

ENSAYO DEL CURSO DE EVANGELIOS SINOPTICOS

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NSTITUTO BIBLICO EMAUS
CURSO
Evangelios Sinópticos
TRABAJO FINAL
Ensayo sobre las Parábolas de Jesús con énfasis en la parábola del sembrador
TEMA
Parábola del sembrador
PROFESOR
Pr Erubiel Martínez Morales
ALUMNO
Joaquin Jimenez Morales
CENTRO DE ESTUDIO
Instituto Bíblico Emaús, Calle principal La Corsa s/n Anacleto Canabal 2da secc. Villahermosa Centro
Tab.
15 de abril del 2023
1
CONTENIDO
PAG.
INTRODUCCION…………………………………………………………………3
DEFINICION DE PARABOLA…………………………………………………...4
FINALIDAD DE LAS PARABOLAS……………………………………………5
ESTRUCTURA DE LAS PARABOLAS…………………………………………5
INTERPRETACION DE LAS PARABOLAS……………………………………6
LA CLASIFICACION DE LAS PARABOLAS DE JESUS ……………………7
LA PARABOLA DEL SEMBRADOR……………………………………………8
CONCLUSION……………………………………………………………………10
BIBLIOGRAFIA……………………………………………………………………11
2
INTRODUCCION
Jesús, sin lugar a dudas ha sido el personaje más polémico de la historia de la humanidad, por la manera
en la cual el abordo los temas relacionados con las cosas eternas. Cosas que habían estado ocultas para
muchos en el momento en que Él inicio su ministerio. Jesús enseño a muchas personas de diversos estratos
sociales y uso diversas formas y métodos para que aquellos a quienes les hablaba pudieran entender lo
que Él trataba de comunicarles.
Jesús era muy buen maestro; muchas veces para hacer que fuera fácil de entender lo que les estaba
enseñando a sus discípulos y a otras personas, utilizo parábolas. En Mateo 13:34 el escritor del evangelio
nos dice:<<Jesús hablo de todo esto a la gente por medio de parábolas, y sin parábolas no les hablaba.>>
En Marcos 4:33-34 dice <<Con muchas parábolas como estas les hablaba la palabra, conforme a lo
que podían oír. Y sin parábolas no les hablaba; aunque a sus discípulos en particular les declaraba todo.>>
Las parábolas de cristo siempre eran pintorescas. Hablaba de camellos que se arrastraban por el ojo de
una aguja (Mt 19:24), de personas que trataban de sacar pajas del ojo de otro cuando una viga estaba en
su propio ojo (Mt 7:5). Una casa que se dividida, asimismo, estaba destinada a derrumbarse (Mr 3:25),
todo eso no eran cuentos sino historias reales que buscaban enseñar una verdad espiritual.
En este ensayo vamos a mencionar las parábolas en general, pero nos vamos a enfocar en una sola
parábola, ya que son muchas las parábolas que Jesús hablo a la gente y a sus discípulos. Estaremos
mencionando algún tipo de clasificación de las parábolas que algunos autores hace para distinguirlas.
La parábola es semejante al símil, excepto que sus detalles se han aumentado para formar una
narración: la parábola es una extensión del símil.
También la parábola es una especie de ilustración, parecida a las que se usan en los sermones de
nuestros tiempos. Es la narración de algo que sucede con frecuencia en nuestro ambiente. Siempre
representa fielmente lo que pasa entre los hombres.
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DEFINICIONES DE PARÀBOLA
El vocablo “Parábola” es un derivado de dos palabras griegas: la preposición para (al lado de) y el
verbo balo(arrojar). La palabra compuesta connota la idea de colocar, poner, arrojar algo al lado de otra.
Se refiere a colocar algo al lado de otra cosa con el fin de compararlos. De hecho, muchas de las parábolas
de Jesús son historias que procurar establecer una comparación entre una cosa común de la vida diaria y
el Reino de Dios. Jesús nuestro Señor siempre usaba una parábola diciendo “¿Con que compararemos el
reino de Dios?”, era casi un estribillo fijo en el vocabulario didáctico de Jesús.
Beck (p. 185) define la parábola como: “un cuadro verbal que ocupa la comparación para ilustrar
alguna lección moral o religiosa”. William M. Taylor, escritor del siglo diecinueve, añade un poco a la
definición y dice “una parábola es una narración, ficticia o no, de una escena de la vida humana o de un
proceso de la naturaleza; aunque veraz en su representación de estos, tiene por fin una lección espiritual…”
Pablo Off.
Gr. Parabalè: “una cosa colocada al lado de otra”, una comparación o semejanza.
Una historia terrenal con un significado espiritual. Difiere de las fabulas: el relato de las parábolas es
ficticio, pero es factible, es decir, puede ocurrir.
Difiere de la alegoría: la parábola emplea las palabras en su sentido literal y no traspasa los limites de
un hecho verídico. La alegoría usa continuamente palabras en sentido metafórico.
WIKIPEDIA
Las parábolas de Jesús son aquellas breves narraciones dichas por Jesús de Nazaret que encierran una
educación moral y religiosa, revelando una verdad espiritual de forma comparativa. Las parábolas es un
relato religioso corto que es fácil de comprender y brindar verdad espiritual. No son fabulas, pues en estas
no intervienen personajes animales con características humanas, ni alegorías, pues se basan en hechos u
observaciones creíbles de la naturaleza, teniendo la mayoría de estos elementos de la vida cotidiana.
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FINALIDAD DE LAS PARABOLAS
A los primeros, cristo les presenta la verdad velada, para que la fueran percibiendo poco a poco; esto era
mejor que negarse totalmente. Enseñaba los misterios del reinado mesiánico de una forma que
despertara en aquellos que les gustaba investigar y las cosas del espíritu el deseo de entender mas y de
buscar su significado.
Los discípulos de Jesús dudaban de la sabiduría de enseñar de esta manera, y le preguntaron ¿Por qué les
hablas por parábolas? (Mt 13:10), Jesús les responde queriendo darles algunas ideas (Mt 13:11-17):
Podemos mencionar cuatro razones, por las cuales Jesús uso parábolas para enseñar:
A) Para hacer interesantes y fáciles de entender las verdades morales y espirituales. Las parábolas son
ilustraciones que aclaran la enseñanza.
B) Para poner las verdades en forma fácil de recordar y útil para hacer pensar al oyente. De esta manera,
las enseñanzas que en un principio son entendidas de una manera imperfecta, son presentadas de una
forma compacta, vivida y fácil de retener, hasta que se lleguen a comprender plenamente. La parábola
de es de fácil asimilación y provoca a la reflexión, pues generalmente deja al oyente el gozo de descubrir
por sí mismo la aplicación.
C) Para no ofender a los oyentes que no estaban en condiciones de recibir la verdad desnuda a causa de
sus prejuicios, y para ocultar la verdad de quienes lo acechaban.
D)Las parábolas eran una forma muy efectiva de enseñar ciertas verdades a aquellos cuyos corazones
estaban preparados para recibir el mensaje del evangelio. Por medio de ellas querían vencer la torpeza
de los que no estaban listos todavía para recibirlo.
E) Para traer juicio o castigo sobre los que se mantenían voluntariamente ciegos a la verdad que
enseñaba el Señor (Mt 13:10-17; Mr 4:10-12; Lc 8:9-10). El pasaje de mateo indica que el propósito de
las parábolas es doble; en primer lugar, revelas la verdad a las personas bien dispuestas, o sea a sus
discípulos; en segundo lugar, esconderla de las personas mas dispuestas por la dureza de su corazón y el
apego a sus pecados y a las cosas materiales.
ESTRUCTURA DE LAS PARABOLAS
Normalmente, la parábola esta compuesta de tres partes: la ocasión, la narración, y la lección espiritual.
En algunos casos la primera y la tercera parte no se encuentran en el texto bíblico. Pero podemos estar
seguros que, en todo caso, hubiera alguna ocasión adecuada, aun cuando el evangelio no la reporto. Así
enseñaba Jesús: respondió a la situación del momento con palabras adecuadas. Pero el Señor no siempre
señalaba la lección espiritual; a veces se la dejaba a sus oyentes para que ellos mismos la descubrieran.
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LA INTERPRETACION DE LAS PARABOLAS
La interpretación correcta de las parábolas demanda que las tres partes de la parábola se tomen en
cuenta. Cualquier interpretación que resulte contraria a la razón por la que fue narrada, o a la lección que
indico Jesús, tuene que ser equivocada. Pero cuando el interprete examina estas tres partes, no hace mas
que cumplir otra regla frecuentemente mencionada, la de observar el contexto.
La parábola normalmente enseña una sola verdad, justamente como hace la ilustración en el sermón.
Será practico en todo caso estudiar la parábola para encontrar y luego expresar su enseñanza en pocas
palabras.
Muchos detalles de las parábolas son incluidos solamente porque son necesarias para la narración
humana terrenal. No debemos fijar nuestra atención en ellas como si enseñaran algo diferente al
mensaje principal de la parábola; mucho menos, como si enseñaran algo contrario al mensaje de la biblia
entera. Muchos intérpretes yerran de esta manera, forzando cada detalle y sacando de la parábola
enseñanzas extrañas a su mensaje central.
Hay algunas reglas que nos pueden guiar para interpretarlas correctamente:
a) Buscar la idea principal o verdad central que quería enseñar el Señor. Por regla general, la
parábola encierra un pensamiento central. Por ejemplo, la PARABOLA del buen samaritano fue
narrada para enseñar que significa el amor al prójimo. A veces el Señor indica cual es la idea
central. En otras ocasiones, el mismo contexto señala el propósito. Jesús conto las tres parábolas
de las cosas perdidas para contrarrestar una censura dirigida a El por los fariseos y Escribas:
“este a los pecadores recibe, y con ellos come” (Lc 15:2-3). Las parábolas manifiestan el gran
valor que tienen los que aún están perdidos ante los ojos del Padre Celestial; de esta forma
justifican el trato entre Jesús y los pecadores.
b) Interpretar los detalles a partir de la idea central. No debemos atribuir significado a todos los
detalles, pues algunos son parte del relato o sirven simplemente de adorno. Por ejemplo, las aves
que menciona la parábola de la semilla de mostaza no tienen otro significado que dar a entender
el tamaño de la planta.
c) Tener precaución al apoyar una doctrina sobre alguna parábola. Las parábolas son
principalmente ilustraciones de la verdad, y debemos usarlas para apoyar las doctrinas que se
enseñan con claridad en otras partes de la Biblia, mas que para extraer doctrinas nuevas. No
debemos usar las parábolas para formar doctrinas nuevas o para contradecir algo que forme parte
de la enseñanza general de la Biblia.
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LAS PARABOLAS DE JESUS
I.
II.
III.
Parábolas didácticas
A. Acerca del reino de Dios
1. El sembrador (Mt 13:3-8; Mr 4:4-8; Lc 8:5-8)
2. La Cizaña (Mt 13:24-30)
3. La semilla de mostaza (Mt 13:31-32; Mr4:30-32; Lc 13:18-19)
4. La levadura (Mt 13:33; Lc 13:20-21)
5. El tesoro (Mt 13:44)
6. La perla (Mt 13:45-46)
7. La red de pesca (Mt 13:47-50)
8. El crecimiento del trigo (Mr 4:26-29)
B. El servicio y la obediencia
1. Los obreros en la cosecha (Mt 20:1-16)
2. El dinero prestado (Mt 25:14-30)
3. Las diez minas (Lc 19:11-27)
4. El deber del siervo (Lc 17:710)
C. Acerca de la oración
1. Un amigo a media noche (Lc 11:5-8)
2. El juez injusto (Lc 18:1-8)
D. Acerca del prójimo
1. El buen samaritano (Lc 10:30-37)
E. Acerca de la humildad
1. La fiesta de las bodas (Lc 14:7-11)
2. El fariseo orgulloso y el recaudador de impuestos (Lc 18:9-19)
F. Acerca de la riqueza
1. El rico insensato (Lc 12:16-21)
2. La gran fiesta (Lc 14:16-24)
3. El mayordomo infiel (Lc 16:1-9)
Parábolas evangélicas
A. Acerca del amor de Dios
1. La oveja perdida (Mt 18:12-14; Lc 15:3-7)
2. La moneda perdida (Lc 15:8-10)
3. El hijo prodigo (Lc 15:11-32)
B. Acerca de la gratitud
1. El préstamo perdonado (Lc 7:41-43)
Parábolas de juicio y el futuro
A. Acerca del regreso de Cristo
1. Las diez vírgenes (Mt 25:1-13)
2. El sabio y los sirvientes fieles (Mt 24:45-51; Lc 12:42-48)
3. El jefe que se fue de viaje (Mr 13:34-37)
B. Acerca de los valores de Dios
1. Los dos hijos (Mt 21:28-32)
2. Los granjeros malvados (Mt 21:33-34; Mr 12:1-9; Lc 20:9-16)
3. La higuera estéril (Lc 13:6-9)
4. La fiesta de bodas (Mt 22:1-14)
5. El siervo desagradecido (Mt 18:23-35)
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LA PARABOLA DEL SEMBRADOR
Mateo 13:1-9, 18-23; Marcos 4:1-9; 13:20; Lucas 8:4-8, 11:15
La primera parábola es ideal como punto de partida, ya que trata sobre los comienzos u orígenes del
reino. Aquí se compara este con un agricultor que siembra semilla: “el sembrador salió a sembrar” (Mt
13:3-9). No se dan explicaciones de todas las parábolas de cristo. De hecho, no se dan explicaciones de la
mayor parte de ellas. Pero de este si se da una explicación (vv.18-23), y la explicación que Jesús da es
nuestro punto de partida. La semilla es el Evangelio del Reino, y la tierra es el corazón humano (v. 19).
Lo que se enfatiza son las distintas clases de corazones y como rechazan o reciben el mensaje de Cristo.
El primer tipo de tierra representa el corazón duro, del cual hay muchos hoy en día, así como en
tiempos de Cristo. Se describe este corazón como la tierra junto al camino (v. 4). Tal tierra ha sido
pisoteada por los muchos pies que han pasado por ahí durante décadas. Puesto que la tierra es dura, la
semilla que cae ahí simplemente se queda en el camino y no se hunde, y las aves (que Cristo compara con
el diablo o los trabajadores del diablo) pronto la arrebatan. ¿Qué es lo que hace duro el corazón humano?
Solo puede haber una respuesta: el pecado. El pecado endurece al corazón, y el corazón que se endurece
peca aún más.
Se describe esa clase de persona en capítulo de Romanos. Dicho individuo comienza reprimiendo la
verdad acerca de Dios, que se puede conocer a partir de la naturaleza (vv. 18-20), se hunde inevitablemente
en ignorancia espiritual y degradación moral(vv21-31), y finalmente llega no solo a practicar los pecados
de los paganos, sino también a dar su aprobación a ellos (v. 32). Aquí vemos ambas mitades del circulo:
el pecado conduce al rechazo de Dios y de su verdad, y el rechazo de su verdad conduce a pecados aun
más graves. ¿Qué lleva una persona a rechazar la verdad de Dios? Según Pablo, es una decidida oposición
a la naturaleza de Dios mismo, que el apóstol describe como la “impiedad e injusticia de los hombres”
(Ro 1:18).
Prácticamente todos los atributos de Dios, ya sea la soberanía, la santidad, la omnisciencia, la
inmutabilidad, o incluso el amor divino, son ofensivos al hombre natural, si se entienden de manera
correcta. Por lo tanto, en vez de arrepentirse del pecado y buscar misericordia volviéndose a un Dios que
es totalmente soberano, santo, sabio e inmutable, los hombres y las mujeres reprimen el conocimiento que
tienen y se niegan a buscar ese conocimiento adicional que podría constituir la salvación de sus almas.
La razón por la cual nuestro país y muchos países están en condición moral decadente es porque aman
el pecado. Ese es el mensaje de romanos 1. La gente ama el pecado. El pecado endurece su corazón. Por
tanto, no quieren recibir el evangelio de reino de dios cuando se les predica.
La oposición del corazón no regenerado a la soberanía de Dios es particularmente evidente en estas
parábolas del reino, porque reino significa dominio, y el dominio es igual a la soberanía. Cuando Jesús
vino predicando el reino de Dios, vino predicando el derecho de Dios de reinar sobre la mente y el corazón
de todas las personas. Pero eso es precisamente lo que no quería la gente. Adán no lo quería. El tenia gran
libertad, pero le ofendía la restricción irrazonable y arbitraria (a su criterio) de Dios en el caso del árbol
del conocimiento del bien y del mal. Si dios ejercía su soberanía en ese punto, Adán se rebelaría. Y lo
hizo. Así cayo llevando consigo a la raza humana. Ese espíritu de rebelión contra el soberano Dios se
desarrolla en la historia, hasta que, por fin, el señor Jesucristo mismo viene a la tierra y la reacción de su
pueblo es: “No queremos que este reine sobre nosotros”.
Así es también hoy en día. Esa es probablemente la razón del rechazo del evangelio de la gracia de
dios en Jesucristo, en este o en cualquier otro tiempo de la historia.
El segundo tipo de tierra representa el corazón superficial. Jesús la describió como tierra que cubre
suelo pedregoso. Cuando la semilla caía ahí se hundía, pero solo hasta una profundidad mínima. Brotaba
rápidamente, pero también se marchitaba rápidamente al calor del sol, porque no tenia raíces. Después,
Jesús describió a aquella persona: “Y el que fue sembrado en pedregales, este es el que oye la palabra, y
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al momento la recibe con gozo; pero no tiene raíz en sí, sino que es de corta duración, pues al venir la
aflicción o la persecución por causa de la palabra, luego tropieza” (vv. 20-21).
Mucha gente se identifica con esta descripción, lo vemos en las iglesias. Sus corazones superficiales
son atraídos al gozo y la emoción de una iglesia donde hay mucha actividad. Oyen el evangelio y parecen
congeniar con los demás. Muchos hasta hacen una profesión de fe. Pero cuando viene alguna dificultad –
la perdida de un trabajo, malentendidos entre cristianos, enfermedad, el matrimonio, el novio(a) – fallan
igual que como abrazaron la fe, porque en realidad nunca hubo un nuevo nacimiento. Estar en la iglesia
repitiendo las cosas que uno oye decir a los demás no lo hace a uno cristiano. Se puede tener un corazón
superficial aun estando en la iglesia. Puede ser una tierra pedregosa.
El tercer tipo de tierra representa el corazón ahogado, ahogado por las cosas de este mundo. El Señor
describe esas cosas como espinos: “El que fue sembrado entre espinos, este es el que oye la palabra, pero
el afán de este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa” (v. 22). No hace
falta señalar cuantas vidas son ahogadas por las riquezas hoy en día. Incluso era cierta en los tiempos de
Jesús; sabemos eso por las muchas advertencias de nuestro Señor Jesucristo contra las riquezas: Entonces
Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrara un rico en el reino de los cielos” Mt
19:23; Más fácil es pasar un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Dios” Mr
10:25; “Mas ¡ay de vosotros, ricos!, porque ya tenéis vuestro consuelo” Lc 6:24.
En una ocasión, un joven rico se parto con tristeza de Jesús, porque le había dicho que vendiera todo
lo que tenia y lo diera a los pobres, y él no estaba dispuesto a hacerlo (Lc 18:23). Pero si eso era cierto en
tiempos de Jesús entre gente que era muy pobre, cuanto más cierto es en nuestro tiempo. Cuanto mas
estamos ahogados con riquezas- los que tienen autos, y casas, lanchas y cuentas bancarias y todos los lujos
que muchos tienen en un mundo con cultura materialista.
Las riquezas no ahogan a una persona de un golpe. Es un proceso gradual. Como la cizaña, las riquezas
crecen paulatinamente. Lentamente, muy lentamente, ahogan los brotes de la vida espiritual interior.
Cuídese de eso si ya tiene posesiones o las va adquiriendo. Sobre todo, tenga cuidado si está diciendo:
“necesito asegurar mi bienestar ahora y luego voy a asegurarme de lo espiritual”. Jesús advirtió contra eso
cuando hablo de un hombre cuyos campos produjeron una cosecha tan abundante que derribo sus graneros
y construyo uno mas grande, diciendo en su corazón: “alma, muchos bienes tienes guardados para muchos
años; repósate, come, bebe, regocíjate”. Las palabras de Jesús fueron: “Necio, esta noche vienen a pedirte
tu alma; y lo que has provisto, ¿de quien será?” (Lc 12:16-21).
El ultimo tipo de tierra es aquel para el cual toda la parábola ha preparado el terreno. Es el corazón
abierto, el corazón que recibe el evangelio como la tierra buena recibe la semilla. Esa tierra da una buena
cosecha, “y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno” (v.23). aquí se pueden hacer algunas
observaciones. Podríamos mostrar que la única prueba segura de la aceptación genuina de la Palabra de
Dios en la vida de una persona es la producción de fruto espiritual. La presencia del fruto es importante.
Solo el corazón abierto recibe el beneficio de la predicación del evangelio y es salvo.
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CONCLUSION
¿Su corazón es un corazón abierto? ¿esta usted abierto a la verdad de Dios? ¿Permite que la verdad se
arraigue a su vida y a su pensamiento de manera que le aparte del pecado, dirija su fe a Jesús y produzca
el fruto del espíritu santo? Quizá usted pueda decir:” me temo que no. Ojalá mi corazón fuera así, pero
creo que es duro o superficial, o se ahoga en los bienes de este mundo. ¿Qué puedo hacer?
La respuesta es que no puede hacer nada, como tampoco la tierra puede cambiar su naturaleza. Pero,
aunque usted no puede hacer nada, hay uno que si puede: el jardinero divino, que es experto en preparar
las tierras. El puede aflojar la tierra dura, arrancar las piedras y sacar los espinos. Esa es la esperanza que
usted puede tener. El dice por medio del profeta Ezequiel “Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis
limpiados de todas vuestras inmundicias; y todos vuestros ídolos os limpiare. Os daré corazón nuevo, y
pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitare de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un
corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi espíritu, y hare que andéis en mis estatutos y guardéis
mis preceptos, y los pongáis por obra” Ez 36: 25-27.
Aquel joven rico que se aparto con tristeza de Jesús. Después que el había comentado lo difícil que era
que los ricos entraran en el reino de Dios, los discípulos le preguntaron “¿Quién, pues, podrá ser salvo”?
Reconocieron las dimensiones del problema.
Jesús respondió: “lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios” Lc 18:26-27. En otras
palabras, “para Dios todo es posible” Mt 19:26. Para Dios es posible cambiar nuestro corazón para que
reciba el evangelio. Venga a Cristo y permita que le dé un corazón nuevo que reciba el evangelio.
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BIBLIOGRAFIA
-Se hizo hombre, Pablo Off, Editorial Vida
-Claves de interpretación bíblica, de la Fuente Thomas, Editorial Mundo Hispano
-Las parábolas de Jesús: una aplicación para hoy, Fricke S. Roberto
-Panorama del Nuevo Testamento, Serie de Fe y Acción, Wesley Adams Jhon, McGhee Quintin, Teague
Willard, Editorial principal
-Armonía de los Evangelios, Biblia Plenitud.
-Las parábolas de Jesús, Montgomery Boice, James, EDITORIAL PORTAVOZ
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