Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es POLÍTICAS DE IGUALDAD POLÍTICAS DE IGUALDAD MAINSTREAMING DE GÉNERO ESTRATEGIA MARCO COMUNITARIA SOBRE LA IGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES (2001-2005) PROGRAMA RELATIVO A LA ESTRATEGIA MARCO COMUNITARIA SOBRE IGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES (2001-2005) PROGRAMAS DE ACCIÓN PARA LA IGUALDAD 1 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es POLÍTICAS DE IGUALDAD Las políticas de igualdad representan la principal respuesta institucional a las desigualdades entre hombres y mujeres y forman parte de las políticas sociales. En cierto modo, las políticas sociales son fundamentales para la gestión de la desigualdad por medio de la asignación o reasignación de los recursos. Se trata de corregir desequilibrios, de establecer la igualdad, pero de hecho no ha quedado claro su impacto en la eliminación de las desigualdades de género. El objetivo de las políticas de igualdad es conseguir que, en los diversos ámbitos, hombres y mujeres tengan los mismos derechos y las mismas oportunidades. La igualdad parece un horizonte algo lejano, pero no inalcanzable. El primer paso en el avance hacia la igualdad entre hombres y mujeres ha sido el reconocimiento de la igualdad de derechos, la igualdad ante la ley o la no discriminación por sexo, es decir la igualdad formal. Así se reconoce en el Tratado de la CE y en la Carta de Derechos Fundamentales. Esta igualdad formal, que lleva a tratar como igual lo que es desigual o diferente, no ha servido para eliminar las desigualdades existentes en los diversos ámbitos. Esta igualdad de derechos no supone igualdad de hecho, igualdad real. Independientemente del ámbito que se considere, sea económico, político, social etc., las desigualdades siguen existiendo aunque no sean igualmente visibles en todos los ámbitos. Un segundo paso se produce cuando ante situaciones desiguales se proponen actuaciones desiguales, actuaciones cuyo objetivo es eliminar las desigualdades existentes, estas acciones se mantienen mientras persiste su necesidad. Es el caso de las medidas de acción positiva, son medidas concretas y temporales cuyo objetivo es el logro de la igualdad. El apartado 4 del artículo 141 del Tratado de la CE proporciona fundamento jurídico para la acción positiva. La acción positiva proporciona ventajas específicas ante situaciones de desigualdad, trata de compensar para paliar las desventajas iniciales. Los resultados obtenidos con las acciones positivas no son del todo satisfactorios, ya que no profundizan en el origen de la desigualdad, no cuestionan la socialización de géneros, ni el modelo de división sexual del trabajo; no se orientan hacia las causas que la producen, sino que únicamente intentan mejorar en lo posible la situación de las mujeres, el problema es que no se logra eliminar aquello que realmente genera desigualdad. Un paso adelante supone la incorporación del género, la construcción de la identidad de género, la necesidad de definir las relaciones entre hombres y mujeres. El mainstreaming de género y el análisis de género son absolutamente imprescindibles para poder eliminar las desigualdades existentes. A modo de ejemplo podemos pensar por qué surge o cómo surge el mainstreaming de género, o la integración de la perspectiva de género si se prefiere. Es evidente que no surge porque se piense que se debe tener en cuenta a la otra mitad de la sociedad, ni porque espontáneamente se considere necesario tener en cuenta cómo afecta a las mujeres el urbanismo, la elaboración de los presupuestos públicos, la política de pensiones o las condiciones de las pólizas de seguros. 2 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es Es el resultado de un largo proceso de lucha por la igualdad y por el reconocimiento de los derechos de las mujeres; el papel protagonista lo han desempeñado las mujeres, esa otra parte de la sociedad infrarrepresentada en determinadas esferas y sobrerrepresentada en otras, compatibilizando familia y empleo, y realizando actividades con escaso reconocimiento económico, político y social. 3 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es MAINSTREAMING DE GÉNERO 1. ¿Qué es el mainstreaming de género? Existen diversas definiciones de “gender mainstreaming“, aunque prácticamente todas coinciden en que se trata de una estrategia cuyo objetivo es conseguir la igualdad entre hombres y mujeres mediante su incorporación en todas las etapas y niveles de las políticas generales. Implica a toda la sociedad en la igualdad y no sólo a las mujeres. Es importante el compromiso y la colaboración de todas las personas que pueden influir de manera directa o indirecta en la lucha por la desigualdad. Su conceptualización en el marco de la Unión Europea se puede encontrar en un comunicado de la Comisión sobre la “Incorporación de la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres en todas las políticas y actividades de la Comunidad” del año 1996. Mainstreaming es la integración sistemática de las situaciones, prioridades y necesidades de mujeres y hombres respectivamente, en todas las políticas y actividades con vistas a promover la igualdad entre hombres y mujeres y a movilizar todas las políticas y las medidas generales con el propósito específico de alcanzar la igualdad teniendo en cuenta, de manera activa y abierta, desde la fase de planificación hasta la de evaluación, los efectos sobre las situaciones de hombres y mujeres. COM(1996) 67 En otros contexto el mainstreaming se define como “ el proceso de evaluación de las consecuencias para las mujeres y los hombres de cualquier acción planificada, inclusive las leyes, y está destinado a hacer que preocupaciones y experiencias tanto de las mujeres como de los hombres sean un elemento integrante de la elaboración, la aplicación, la supervisión y la evaluación de las políticas y programas en todas las esferas políticas, económicas y sociales a fin de que las mujeres y los hombres se beneficien por igual y se impida que se perpetúe la desigualdad. El objetivo final es lograr la igualdad entre los géneros”. ECOSOC, 1997 En el Informe del Grupo de expertos del Consejo de Europa sobre la integración de la perspectiva de género aparece definido del modo siguiente: “La integración de la perspectiva de género consiste en la reorganización, mejora, desarrollo y evaluación de procesos políticos, de modo que los actores implicados normalmente en la elaboración de las políticas incorporen una perspectiva de igualdad entre los hombres y las mujeres en todos los ámbitos de acción, a todos los niveles y en todas las etapas”. Consejo de Europa ,1998 2. ¿Por qué surge el mainstreaming de género? El mainstreaming fue en principio una exigencia de las Naciones Unidas y ahora es una exigencia de la Unión Europea. La incorporación de esta estrategia no debe suponer la 4 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es eliminación de las políticas específicas mientras persista la desigualdad, sino que debe tener carácter complementario. La integración de la perspectiva de género tiene por objeto completar la política específica de igualdad pero no pretende reemplazarla. Se trata de dos estrategias interdependientes para alcanzar la igualdad entre hombres y mujeres. La igualdad de género es una cuestión de derechos humanos y de justicia social. Los esfuerzos para promover una mayor igualdad entre las mujeres y los hombres también contribuyen al logro de otros objetivos, tienen por lo tanto un efecto multiplicador. El hecho de que la ONU se haya centrado en las tres últimas décadas en el avance de la mujer y la igualdad de género, ha dado lugar a un mayor reconocimiento internacional sobre la importancia de la perspectiva de género. Se ha recorrido un largo camino. Ya el año 1945 la Carta de Naciones Unidas reconoció expresamente en su preámbulo ”la igualdad de derechos de hombres y mujeres”, posteriormente en 1946 se creó la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer; esta Comisión sobre la Condición de la mujer, es el principal organismo de elaboración de las políticas sobre igualdad de género a nivel mundial. El año 1975, se declaró Año Internacional de la Mujer, y desde el año 1976 hasta el 1985 se proclamó el Decenio de Naciones Unidas de la Mujer. Las metas y objetivos de este decenio se describieron en la Declaración de México y en su Plan de Acción. En las tres primeras Conferencias Mundiales sobre las Mujeres se formularon recomendaciones para mejorar la situación de las mujeres. Estas recomendaciones fueron recogidas en los documentos correspondientes, y los gobiernos nacionales, al menos algunos, se comprometieron a cumplirlas. Poco a poco se fue poniendo de manifiesto que el simple compromiso no permitía alcanzar los objetivos previstos y que la situación de las mujeres apenas mejoraba. La Conferencia de México en 1975 fue la primera de las conferencias mundiales sobre la mujer, la de Copenhague se celebró en 1980, y la de Nairobi en 1985 como culminación del Decenio de las Naciones Unidas para la mujer. A medida que se han ido sucediendo las distintas conferencias, se han podido constatar dos aspectos diferenciados: por una parte, una mayor participación de los organismos internacionales, de los gobiernos, de las organizaciones no gubernamentales y de la sociedad en general, y por otra una mayor preocupación por eliminar las situaciones de desigualdad. En la primera Conferencia México (1975) se reflexiona sobre la situación de discriminación de las mujeres, y esta reflexión gira en torno a la Igualdad, el Desarrollo y la Paz. Se adoptó una declaración, la Declaración de México y además se formuló un Plan de Acción Mundial que estableció catorce objetivos en relación con las áreas de educación, empleo, salud, paridad en el ejercicio de los derechos civiles y presencia de mujeres en órganos de decisión. La Conferencia de Copenhague (1980) tuvo como objetivo principal evaluar los progresos alcanzados desde la reunión anterior, y determinar las acciones a llevar a cabo durante el quinquenio siguiente, manteniendo el eje de la primera conferencia en cuanto a igualdad, desarrollo y paz, y ampliándolo a empleo, salud y educación. Se aprobó para ello un Programa de Acción. 5 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es En la Conferencia de Nairobi (1985) se elaboró el documento “Estrategias de Nairobi orientadas hacia el futuro para el adelanto de la mujer hasta el año 2000”, que subraya la necesidad de la participación e integración de las mujeres en todas las áreas de desarrollo, se trazaron una serie de medidas específicas para todas ellas, y se incidió especialmente en empleo, salud y educación. Se incorpora una idea importante: “el desarrollo económico no beneficia automáticamente a las mujeres”. En la Conferencia de Beijing (1995), se consideró como uno de los objetivos básicos evaluar el avance en la igualdad logrado desde la reunión de Nairobi. En esta conferencia se elaboran dos documentos: la “Declaración de Beijing” y la “Plataforma para la Acción”, asumiendo, por parte de los estados allí representados, el establecimiento de compromisos básicos de los gobiernos, la fijación de unos mínimos irrenunciables y la voluntad de trabajar sin reservas por el avance de las mujeres. En esta conferencia se amplía de un modo significativo el número de áreas de trabajo, 12 en concreto considerando como tales, pobreza, educación, salud, violencia, conflictos armados, economía, poder y toma de decisiones, mecanismos institucionales de igualdad, derechos humanos, medios de comunicación, medio ambiente y derechos de las niñas. Se hace explicito que “los gobiernos y otros agentes sociales deberían promover una política activa y visible de integración de una perspectiva de género en todas las políticas y programas, a fin de que se analicen, antes de adoptar decisiones, sus posibles efectos en las mujeres y los hombres”. Además, supuso un avance cualitativo muy importante dado que se concluyó que la discriminación de las mujeres en función del género dificulta el desarrollo de la humanidad; por ello, era necesario tratar desde una dimensión política las causas de dicha discriminación para que el avance de las mujeres en lo económico, lo político, lo social y lo cultural fuese una realidad en el año 2000. Se reconoce la función y la contribución de la sociedad civil, especialmente las organizaciones no gubernamentales y las organizaciones de mujeres, en la aplicación de la Declaración y la Plataforma de Acción de Beijing. Se hace hincapié en que los hombres deben participar en la promoción de la igualdad de géneros y compartir con las mujeres esa responsabilidad. Se concreta una nueva estrategia el “mainstreaming” que debe ser utilizada para el avance de la igualdad. Es pues esta Conferencia Mundial de Beijing en el año 1995 el referente más significativo. Esta estrategia supone que los gobiernos no concentren las políticas de igualdad únicamente en un ministerio o área, sino que las introduzcan de manera transversal en todas las políticas y programas. Es evidentemente toda una declaración de intenciones. El mainstreming de género supone la integración de las políticas específicas en las políticas generales, de manera que la igualdad de género se incorpore en todas las políticas, a todos los niveles y en todas las etapas. En la Conferencia Mundial sobre las Mujeres Beijing+5, celebrada en Nueva York, “Mujeres 2000: Igualdad de género, desarrollo y paz para el siglo XXI se vuelve a considerar que la incorporación del género es fundamental, aunque los avances han sido escasos. Se han creado muchas expectativas respecto a la Conferencia Mundial Beijing+10. 6 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es Para lograr la igualdad entre los géneros es preciso corregir las desigualdades entre mujeres y hombres, y garantizar su igualdad de derechos, responsabilidades y oportunidades. La igualdad entre los géneros significa que las necesidades, los intereses, las preocupaciones, las experiencias, las prioridades son una dimensión integral de la formulación, la aplicación, el seguimiento y la evaluación de todas las políticas y medidas. La voluntad política y el compromiso a todos los niveles son fundamentales para incorporar la perspectiva de género. Se necesitan personas que tengan conocimientos sobre el género que puedan realizar un trabajo de sensibilización y concienciación, trabajo que resulta fundamental. Casi todos los organismos de ONU tienen personas expertas en género o puntos focales de género, que se refieren a personas que tienen que invertir parte de su tiempo en la promoción y el seguimiento del progreso del mainstreaming de género. A pesar de ello, queda mucho camino que recorrer hasta lograr la integración del género mejorando la difusión, comprensión y utilización de la estrategia, utilizando el análisis de género de modo sistemático, formando personas especialistas en género con el objetivo final de lograr la igualdad entre hombres y mujeres. La perspectiva de género debe ser incorporada desde el principio y no sólo al final. La Declaración del Milenio reconoció la necesidad de promover la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer. También se destacó la importancia de asegurar los Derechos Humanos de las mujeres. El Objetivo de Desarrollo del Milenio, específico sobre igualdad de género, quiere promover la igualdad de género y otorgar más poder a las mujeres con la finalidad concreta de eliminar las desigualdades de género en todos los niveles de la educación para el año 2015. El compromiso de la Unión Europea en la defensa de la igualdad entre hombres y mujeres está consagrado en el Tratado CE y en la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea. La igualdad de género es un principio fundamental. En el artículo 2 del TCE se establece como una de las tareas el promover la igualdad entre hombres y mujeres. En el apartado 2 del artículo 3 se establece que, en todas sus actividades la Comunidad se fijará el objetivo de eliminar las desigualdades entre hombres y mujeres y promover su igualdad. En el artículo 23 de la Carta de los Derechos Fundamentales se dice que la igualdad entre hombres y mujeres será garantizada en todos los ámbitos, inclusive en materia de empleo, trabajo y retribución. El mainstreaming de género, o la transversalidad de género, se ha ido incorporando paulatinamente, aunque se suele señalar como momento determinante la Conferencia Mundial de Beijing en 1995. A partir de este momento el mainstreaming de género se une a las acciones específicas para el logro de la igualdad. En este sentido , ya en el III Programa de Acción Comunitario sobre la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres 1991-1995 se hace referencia a la transversalidad, aunque realmente no adquiere relevancia hasta el IV Programa de Acción Comunitario 1996-2000 en el que se considera la necesidad de incorporar las políticas de igualdad dentro de las políticas generales, siendo en el último Programa de Acción 2001-2005 en el que el mainstreaming se convierte en un estrategia fundamental, que complementa la acción positiva. 7 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es El mainstreaming de género ha tenido un desarrollo desigual en las distintas áreas. Según los últimos informes de la Comisión de Derechos de la Mujer e igualdad de oportunidades la integración de la perspectiva de género ha sido desigual; en algunas áreas no se ha considerado, y por ello será necesario seguir haciendo importantes esfuerzos para su incorporación. Se hará referencia, en su momento, a la incorporación de la igualdad en el empleo por medio del análisis de la Estrategia Europea de Empleo por su importante papel en el logro de la igualdad. Conviene recordar que los estados miembros deben desarrollan sus Planes de Acción Nacionales para el Empleo, atendiendo a las pautas establecidas por la Unión Europea, donde la igualdad de oportunidades no sólo es uno de los pilares básicos, sino que debe ser considerada de forma transversal. Los Fondos Estructurales que apoyan la estrategia de empleo también son un marco de referencia del mainstreaming. En diciembre del 2002, la Comisión adoptó una Comunicación sobre la “integración de la igualdad entre hombres y mujeres en los documentos de programación de los Fondos Estructurales para el 2000-2006” COM(2002) 748 final. 3. ¿Por qué debe implementarse el mainstreaming de género? Existen fundamentos jurídicos, como se ha referido anteriormente, para la incorporación del “gender mainstreaming”. Con la entrada en vigor del Tratado de Amsterdam los estados miembros se comprometen a impulsar una política de igualdad de oportunidades activa e integral en todas las políticas comunitarias, en particular en las políticas de empleo y del mercado laboral. La integración de la perspectiva de género conduce a una sociedad más justa y más democrática en la que pueden participar tanto las mujeres como los hombres y, al considerar las diferencias entre mujeres y hombres, hace pleno uso de los recursos humanos. Es una estrategia básica para cumplir con los objetivos de promoción de la igualdad, que debe hacer visibles las situaciones de desigualdad existentes, debe situar a las persona y a sus necesidades en el centro del proceso político, debe poner de manifiesto que cualquier política tiene influencia en la igualdad de género y permite tener en cuenta a hombres y mujeres en todo el proceso de diseño, aplicación y evaluación de las políticas. Con la evaluación del impacto de las diversas políticas sobre hombres y mujeres se pondría claramente de manifiesto que las políticas no son neutras en cuanto al género. 4. ¿Cómo se introduce el mainstreaming de género? Para la integración de la perspectiva de género hay una serie de requisitos previos, indispensables como por ejemplo: voluntad política, políticas específicas de igualdad 8 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es entre hombres y mujeres, participación de las mujeres en los procesos de toma de decisiones, sensibilización y formación en cuestiones de género, recursos económicos y humanos, y datos y estadísticas desglosadas por sexo. Todo ello supone incorporar una nueva mirada en las organizaciones y en la sociedad, sin olvidar que para ver la desigualdad hay que estar preparada/o para ello. Significa considerar las relaciones de género en todas las acciones. La competencia de género comprende la reflexión sobre el propio papel desde el género, la capacidad para formular objetivos desde la perspectiva de género, así como para realizar un análisis de género. El mainstreaming no avanza por si sólo, hay que impulsarlo, apoyarlo y mantenerlo, sí realmente se quiere avanzar hacia la igualdad entre hombres y mujeres. Es una estrategia a largo plazo donde la voluntad política es fundamental. 5. ¿Qué es un análisis de género? Es un requisito básico del mainstreaming de género y exige conocimientos sobre las relaciones de género. Supone considerar la situación de mujeres y hombres, las necesidades, las expectativas, los roles, las responsabilidades, la toma de decisiones, el acceso a los recursos, el uso y control de los recursos..., es decir supone fijarse en la representación, los recursos, la realidad y tratar de ver en que medida existe una igualdad real. Significa prestar atención a las relaciones de género e identificar y documentar las desigualdades entre hombres y mujeres haciéndolas visibles. La incorporación del análisis de género en todas las políticas y en todas las etapas es un instrumento fundamental para fomentar la transparencia y la igualdad, de ese modo las necesidades y prioridades de mujeres y hombres tendrán la misma consideración. En su momento se hará referencia a la importancia del análisis de género en la elaboración de los presupuestos. El análisis de género no debe ser un proceso de análisis separado, debe ser una parte integral de todos los análisis. Para ello es fundamental contar con personas expertas en género, con capacidad para ayudar a comprender cómo se debe trabajar para prestar la atención adecuada a los temas de género, de manera que todo ello permita promover los cambios necesarios en las políticas y los programas. El hecho de que la mayoría de las personas especialistas en género, hoy en día, sean mujeres, puede dar la sensación de que la igualdad es sólo una cuestión de mujeres. Uno de los grandes retos es lograr que todas las personas se preocupen por las cuestiones de género, en especial aquellas personas con mayor capacidad de decisión. 9 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es ESTRATEGIA MARCO COMUNITARIA SOBRE LA IGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES (2001-2005) Un recorrido por este documento permite familiarizarse con la Estrategia de la Unión Europea para cumplir con el compromiso de la igualdad entre hombres y mujeres, con su marco jurídico, con sus ámbitos prioritarios de actuación, así como con los objetivos y las acciones propuestas en cada uno de ellos. 1 INTRODUCCIÓN El objetivo es establecer un marco de actuación que permita integrar la cuestión de la igualdad en todas las actividades comunitarias, de manera que éstas ayuden a alcanzar el objetivo de eliminar las desigualdades y promover la igualdad entre mujeres y hombres. En la Comunicación de la Comisión al Consejo, al Parlamento Europeo, al Comité Económico y Social y al Comité de las Regiones se presentan las ideas de la Comisión para una estrategia en materia de igualdad entre hombres y mujeres para los próximos cinco años. Con ella pretende establecer un marco de acción en el que todas las actividades comunitarias puedan contribuir a alcanzar el objetivo de eliminar las desigualdades y fomentar la igualdad entre hombres y mujeres. Para preparar la presente Comunicación, la Comisión ha analizado los siguientes aspectos clave de la política comunitaria en este ámbito en los últimos años: - el acervo legislativo en el ámbito de la igualdad de oportunidades y la jurisprudencia al respecto del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas, - el seguimiento y los compromisos adquiridos por la Comunidad en la «Plataforma de Acción» de la Cuarta Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre la mujer celebrada en Pekín en 1995, - la aplicación de anteriores programas comunitarios en materia de igualdad de oportunidades, en particular la del programa de acción comunitario a medio plazo para la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres (1996-2000), en la que se reforzó la estrategia de la «transversalidad», - la contribución de los Fondos Estructurales a la igualdad entre hombres y mujeres en los últimos diez años, mediante acciones específicas, en particular la iniciativa NOW y los nuevos reglamentos (2000 - 2006), así como la gran contribución de la estrategia europea de empleo desde 1997, - las iniciativas en el ámbito de las relaciones exteriores, las políticas de cooperación al desarrollo y la promoción y protección de los derechos humanos específicos de la mujer, - los impulsos del Parlamento Europeo y del Consejo, y 10 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es - las disposiciones reforzadas del Tratado de Amsterdam sobre igualdad entre hombres y mujeres. 2 LA IGUALDAD HOY: HACIA UNA DEMOCRACIA INTEGRADORA La democracia es uno de los valores fundamentales de toda la Unión Europea. Su plena realización requiere la participación de todos los ciudadanos, mujeres y hombres por igual, para participar y estar representados de forma igualitaria en la economía, en la toma de decisiones y en la vida social, cultural y civil. El compromiso de la UE con el fomento de la igualdad entre hombres y mujeres viene de lejos, pues está incluido en el Tratado desde 1957. El marco jurídico comunitario garantiza que las mujeres y los hombres son iguales ante la ley. A pesar de los progresos en cuanto a la situación de la mujer en algunos países, hombres y mujeres no gozan, en la práctica, de los mismos derechos. La infrarrepresentación persistente de las mujeres en diversos ámbitos, la violencia ejercida contra las mujeres y otros muchos aspectos ponen de manifiesto que continúa existiendo una discriminación estructural por razones de sexo. Para hacer frente a esta situación de desigualdad se ha considerado fundamental la integración del objetivo de la igualdad en todas las políticas que tengan repercusiones directas o indirectas en las mujeres. Conviene destacar que incluso aquellas políticas “aparentemente” neutras en cuanto al género en realidad no lo son, por lo cual es indispensable la incorporación del género en todas las políticas. En el diseño y aplicación de todas las políticas hay que tener en cuenta las preocupaciones, necesidades y aspiraciones de las mujeres, en la misma medida que las de los hombres. Este es el enfoque de la «transversalidad», adoptado en 1996 por la Comisión1. El mainstreaming se considera un principio de intervención proactiva. Paralelamente a este planteamiento global, la estrategia marco propone la puesta en marcha de acciones específicas a favor de las mujeres que siguen siendo necesarias para eliminar las desigualdades persistentes. La estrategia marco propuesta se basa en este enfoque dual que supone un importante cambio respecto a situaciones anteriores, centradas en acciones especifica dirigidas a las mujeres. El futuro trabajo de la Comunidad a favor de la igualdad se basará en una estrategia global, que abarcará todas las políticas comunitarias destinadas a promover la igualdad entre hombres y mujeres, ya sea ajustando sus políticas (intervención activa: integración del factor de igualdad) y/o aplicando medidas concretas destinadas a mejorar la situación de las mujeres (intervención reactiva: acciones específicas). Como apoyo a la estrategia y para desarrollar las acciones horizontales y de coordinación se propone un programa de acción que ayude a sensibilizar, a impulsar y 11 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es mejorar la recogida de datos y la elaboración de un sistema de indicadores y a poner en marcha proyectos transnacionales. La estrategia marco de igualdad pretende coordinar las distintas iniciativas y programas en torno a criterios claros de determinación, seguimiento, evaluación comparativa, evaluación teniendo en cuenta el género y evaluación global. Comunicación de la Comisión, de 21 de febrero de 1996, «Integrar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en el conjunto de las políticas y acciones comunitarias» COM(96) 67 final. 1 3. OBJETIVOS La Comisión ha determinado cinco ámbitos interrelacionados de intervención para la estrategia marco. Dentro de cada uno de ellos se perseguirán objetivos operativos que marcarán el camino hacia la igualdad entre hombres y mujeres en los próximos cinco años. En la estrategia marco, todas las iniciativas comunitarias relacionadas con la igualdad estarán explícitamente relacionadas con uno o varios de los siguientes ámbitos de intervención: vida económica, igual participación y representación, derechos sociales, vida civil y roles y estereotipos establecidos en función del sexo. 3.1. PROMOVER LA IGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES EN LA VIDA ECONÓMICA El Consejo Europeo de Lisboa instó a la Comisión y a los Estados miembros a profundizar en todos los aspectos de la igualdad de oportunidades en las políticas de empleo, por ejemplo reduciendo la segregación en el trabajo, y tratando de conciliar la vida laboral y familiar. Además, el Consejo Europeo de Lisboa estableció objetivos cuantitativos de la mayor importancia para alcanzar la igualdad entre mujeres y hombres en la vida económica, como el de hacer que el índice de empleo femenino pase de la media actual del 51% a más del 60% en 2010. En consecuencia, debe prestarse especial atención a la total integración de las mujeres en la nueva economía. Dado que las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) están afectando cada vez más al empleo en todos los sectores, resulta también esencial alentar e incorporar modos de que la mujer tenga el mismo acceso a la economía basada en el conocimiento, y ayudarla a participar en ella. En este sentido destacar que la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Oportunidades recientemente ha considerado la importancia de la presencia de la mujer en la sociedad de la información, la necesidad de propiciar su acceso a las TIC, el riesgo de exclusión que puede suponer...etc. Los Fondos Estructurales son el principal instrumento comunitario para promover la cohesión, mejorar las perspectivas de empleo y alcanzar un desarrollo sostenible. Por ello, ya actúan como un instrumento importante para promover la igualdad entre mujeres y hombres. El nuevo Reglamento de los Fondos Estructurales ya prevé un 12 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es mayor peso de la igualdad en el proceso de programación, ejecución, seguimiento y evaluación. La Comisión propone en este ámbito tres objetivos operativos con sus consiguientes acciones. 3.1.1. Objetivo operativo: reforzar la dimensión de la igualdad en la estrategia europea de empleo Se trata de fomentar el aprendizaje permanente de las mujeres y de promover su empleabilidad y su acceso a puestos de trabajo en el ámbito de las tecnologías de la información. Acciones Con el fin de profundizar en el proceso iniciado en Luxemburgo para el empleo, la estrategia marco deberá: Alentar la revisión de los sistemas fiscales para reducir los factores que disuaden a las mujeres de incorporarse al mercado de trabajo. Fomentar el aprendizaje permanente y el acceso a medidas activas del mercado de trabajo para las mujeres. Fomentar la empleabilidad y el acceso de las mujeres a puestos de las TI, especialmente incrementando la participación femenina en la educación y formación en esos ámbitos. Apoyar, cuando sea necesario, el perfeccionamiento y la coordinación de los sistemas estadísticos nacionales, para que sea posible un mejor control de las cuestiones relativas a la igualdad entre hombres y mujeres en la estrategia europea de empleo (programa de apoyo). Apoyar un grupo de expertos sobre la igualdad entre hombres y mujeres en la economía para asistir a la Comisión en estas tareas (programa de apoyo). 3.1.2. Objetivo operativo: mejorar la utilización de los Fondos Estructurales para promover la igualdad Acciones Entre otras cabe destacar las siguientes: Mejorar la integración de la igualdad en los Fondos Estructurales y sus iniciativas comunitarias (por ejemplo, Equal, Interreg, Urban y Leader). 13 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es Aportar financiación a escala comunitaria para acciones de información y sensibilización destinadas a fomentar la igualdad entre las mujeres y los hombres en el marco de los Fondos Estructurales. Apoyar la no segregación del mercado de trabajo, en concreto mediante la iniciativa comunitaria EQUAL de recursos humanos. Apoyar la creación de una red de personas responsables, en cada Estado miembro, de las cuestiones relativas a la igualdad en los Fondos Estructurales. 3.1.3. Objetivo operativo: Concebir estrategias para fomentar la integración de la igualdad en todas las políticas que tengan repercusiones sobre la mujer en la economía, (por ejemplo, política fiscal, financiera, económica, educativa, de transporte, de investigación y social). Acciones Se considera fundamental elaborar estrategias para lograr la integración de la perspectiva de género en todas las políticas, el potenciar el diálogo entre los diversos interlocutores sociales, así como el reconocimiento de las buenas prácticas en las empresas en relación a la igualdad de oportunidades. Incrementar el diálogo con la dirección de las empresas que actúan en Europa, especialmente en cooperación con los interlocutores sociales, sobre su contribución a la igualdad entre hombres y mujeres en la vida económica. Crear un distintivo europeo (premio o certificado de igualdad) que se concederá anualmente a las empresas que hayan creado buenas prácticas en la materia (programa de apoyo). 3.2. FOMENTAR UNA IGUAL PARTICIPACIÓN Y REPRESENTACIÓN Las mujeres están permanentemente infrarrepresentadas en todos los ámbitos de toma de decisiones, esto representa un déficit democrático fundamental que exige intervenciones a escala comunitaria. Se han definido tres objetivos operativos. 3.2.1. Objetivo operativo: mejorar el equilibrio entre hombres y mujeres en la toma de decisiones políticas Acciones Se han propuesto, entre otras, las siguientes acciones: Favorecer la creación de redes de mujeres elegidas a nivel europeo, nacional, regional y local, alentando el trabajo en red de las comisiones parlamentarias de igualdad de 14 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es oportunidades de los Estados miembros y del Parlamento Europeo (programa de apoyo). Promover, en la educación cívica, una mayor conciencia de la discriminación por razones de sexo y de la necesidad de un equilibrio entre hombres y mujeres. Realizar actividades de concienciación dirigidas a los ciudadanos sobre la necesidad de un equilibrio entre hombres y mujeres en los organismos públicos elegidos por sufragio y dentro de las estructuras de los partidos políticos, así como alentar a las mujeres a que sean activas en política, particularmente teniendo en cuenta las elecciones al Parlamento Europeo que se celebrarán en 2004 (programa de apoyo). 3.2.2. Objetivo operativo: mejorar el equilibrio entre hombres y mujeres en la toma de decisiones socioeconómicas Acciones Seguir y evaluar la transición de la educación y la formación a la vida laboral, la contratación y el desarrollo de la carrera profesional de las mujeres que puedan desempeñar altos cargos. Crear y mantener actualizadas estadísticas completas sobre la mujer en puestos decisorios de la vida socioeconómica y de la sociedad civil, que contengan datos sobre cargos directivos, organizaciones industriales y sindicales y las principales ONG. 3.2.3. Objetivo operativo: mejorar el equilibrio entre hombres y mujeres en la Comisión Acciones Verificar cuáles han sido los resultados de los esfuerzos realizados por los servicios de la Comisión para promover un equilibrio entre hombres y mujeres en los puestos de toma de decisiones. Proseguir e incrementar la formación específica, la concienciación y la información sobre cuestiones de género en todos los servicios de la Comisión. Evaluar en función del género, y mejorar, los sistemas existentes de contratación y ascensos en los servicios de la Comisión, en particular mediante una composición equilibrada entre mujeres y hombres de los tribunales de selección y el examen de los contenidos y la metodología de los concursos de acceso, para detectar un posible sesgo sexista. 15 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es 3.3. PROMOVER LA IGUALDAD DE ACCESO Y EL PLENO DISFRUTE DE LOS DERECHOS SOCIALES PARA LAS MUJERES Y LOS HOMBRES La igualdad en el acceso a los derechos sociales y el pleno disfrute de éstos constituyen pilares de las sociedades democráticas. En muchos casos, las mujeres no acceden a los derechos sociales existentes o ni siquiera tienen acceso a una información adecuada sobre ellos. Algunos de estos derechos ya se han convertido en legislación europea. Las acciones se dirigirán a mejorar la aplicación de la legislación comunitaria, particularmente en lo que se refiere a la protección social y en los ámbitos del permiso parental, la protección de la maternidad y el tiempo de trabajo. Además, las acciones incluirán una mejor difusión de la información. Dos objetivos operativos han sido definidos en este ámbito para mejorar la aplicación de la legislación europea, para contribuir a la información y difusión de la legislación social de la UE y para que la integración de la perspectiva de género se incorpore en todas las políticas comunitarias. 3.3.1. Objetivo operativo: Mejorar el conocimiento y vigilar la aplicación de la legislación existente en el ámbito social (permiso parental, protección de la maternidad, tiempo de trabajo, tiempo parcial y contratos de duración determinada). Acciones Las más significativas son: Proponer una Directiva basada en el artículo 13 del Tratado para garantizar la igualdad de trato entre hombres y mujeres en cuestiones distintas de las de la ocupación y el empleo. Garantizar el seguimiento y la evaluación de la aplicación en los Estados miembros de la legislación existente en la esfera social. Apoyar las actividades, dirigidas a los ciudadanos de la UE, de información y difusión de la legislación comunitaria en materia de igualdad (programa de apoyo). 3.3.2. Objetivo operativo: Supervisar la integración de la perspectiva de género al concebir, aplicar y evaluar las políticas y actividades comunitarias que tienen una repercusión en la vida diaria de las mujeres y los hombres (como la política de transporte, la salud pública, las relaciones exteriores, incluidas las políticas de derechos humanos, y el programa comunitario de lucha contra la discriminación basado en el artículo 13 del Tratado). Acciones Algunas de las acciones propuestas son las siguientes: 16 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es Integrar la perspectiva de género en todas las medidas comunitarias para prevenir y combatir la marginación, en particular las destinadas a poner freno a la creciente feminización de la pobreza. Mejorar el conocimiento y la comprensión y, si fuera necesario, proponer una nueva legislación comunitaria en el ámbito social. Apoyar campañas nacionales de concienciación que presenten la atención a las personas dependientes como una tarea tanto de hombres como de mujeres. 3.4. PROMOVER LA IGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES EN LA VIDA CIVIL El objetivo de promover la igualdad en la vida civil está en relación con la cuestión del pleno disfrute de los derechos humanos y las libertades fundamentales, tanto para las mujeres como para los hombres, con independencia del origen étnico o racial, la religión o creencias, la discapacidad, la edad o la orientación sexual. Se determinan tres objetivos operativos y una serie de acciones para cada uno de ellos, se han destacado las más concretas en cada uno de ellos. 3.4.1. Objetivo operativo: proceder al seguimiento de la legislación y la jurisprudencia comunitarias en materia de igualdad de trato entre mujeres y hombres Acciones Llevar a cabo estudios y recoger información sobre la dimensión de «género» de la salud y la seguridad en el trabajo. A partir de los resultados, explorar la necesidad de adaptar la legislación. Apoyar información y formación específicas sobre la legislación en materia de igualdad y sobre los derechos humanos específicos de la mujer, dirigidas a los juristas, los inspectores de trabajo y los interlocutores sociales en la UE y en los países candidatos a la adhesión . Supervisar el desarrollo de estructuras de apoyo a la aplicación del acervo comunitario en las cuestiones de igualdad entre hombres y mujeres en los países candidatos. 3.4.2. Objetivo operativo: promover los derechos específicos de la mujer como derechos humanos universales Acciones Financiar campañas de concienciación y campañas en la UE y en los países candidatos destinadas a capacitar a las mujeres a través de la aplicación de sus derechos humanos específicos, en particular a las mujeres que sufren una discriminación múltiple. 17 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es Financiar la creación de redes para recoger de forma sistemática datos comparables sobre las violaciones de derechos humanos de tipo sexista y los casos de discriminación por razones de sexo en los Estados miembros y los países candidatos a la adhesión. 3.4.3. Objetivo operativo: Luchar contra la violencia sexista y la trata de seres humanos con fines de explotación sexual Acciones Reforzar y financiar la prevención y la lucha contra la violencia ejercida contra las mujeres, en particular mediante los programas DAPHNE y STOP. Seguir actuando para luchar contra la violencia doméstica ejercida contra las mujeres en la UE, en los países candidatos y en los terceros países. Apoyar la investigación, la recopilación y difusión de información sobre la violencia contra las mujeres, en la UE y en los países candidatos. 3.5. PROMOVER EL CAMBIO DE LOS ROLES Y ESTEREOTIPOS ESTABLECIDOS EN FUNCIÓN DEL SEXO En este terreno se aborda la necesidad de modificar comportamientos, actitudes, normas y valores sociales que determinan unos roles estereotipados e influyen en ellos en la sociedad, mediante la educación, la formación, los medios de comunicación, la cultura y la ciencia. Para alcanzar la igualdad entre hombres y mujeres es fundamental eliminar los prejuicios culturales existentes y los estereotipos tradicionales. Al perpetuar una imagen negativa o estereotipada de la mujer, especialmente en los medios de comunicación y en los canales de información y entretenimiento informatizados, en la publicidad y en el material educativo, no se está ofreciendo una imagen exacta ni realista de los múltiples roles de las mujeres y los hombres, ni de sus contribuciones a un mundo cambiante. Para la intervención en este ámbito se han definido dos objetivos operativos para eliminar la discriminación en la educación centrándose en la eliminación de los estereotipos sexistas. Algunas de las acciones más significativas se refieren a continuación. 3.5.1. Objetivo operativo: Concienciación sobre la cuestión de la igualdad Acciones Es preciso hacer un mayor esfuerzo para contribuir a erradicar toda discriminación basada en clichés sexistas en la educación, por ejemplo en el material educativo, y para impulsar las buenas prácticas al respecto. 18 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es Desarrollar actividades de concienciación sobre la contribución de las mujeres al proyecto de Europa y a la cultura europea, así como sobre la importancia de la igualdad entre hombres y mujeres en nuestra sociedad democrática moderna. 3.5.2. Objetivo operativo: superar los estereotipos tradicionales en las políticas comunitarias pertinentes y mediante las mismas Acciones Vigilar la integración de una perspectiva de género en las políticas de especial importancia para superar los estereotipos tradicionales, como la política de educación, formación, cultura, investigación, medios de comunicación y deporte, y potenciar la igualdad en todas las fases futuras de programación de programas comunitarios en curso, como Sócrates, Leonardo, Juventud, Cultura, Investigación y demás programas e iniciativas afines. Promover el intercambio de opiniones y buenas prácticas en los medios de comunicación y crear un grupo de representantes de estos medios que asistan a la Comisión a aplicar los debates en este objetivo de la estrategia marco. 19 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es DIRECTRICES GENERALES PROGRAMA RELATIVO A LA ESTRATEGIA MARCO COMUNITARIA SOBRE IGUALDAD ENTRE HOMBRES Y MUJERES (2001-2005) I. INTRODUCCIÓN Como apoyo para la puesta en práctica de la estrategia europea para la igualdad, se establece un programa de acción para el periodo comprendido entre el 1 de enero de 2001 y el 31 de diciembre de 2005. Los objetivos del programa son los siguientes: Promover y difundir los valores y prácticas sobre los que se basa la igualdad entre hombres y mujeres. Mejorar la comprensión de las cuestiones relacionadas con la discriminación directa e indirecta detectando su existencia y sus dimensiones y evaluando la eficacia de las políticas y e la práctica. Incrementar la capacidad de los agentes clave (organismos independientes encargados de la promoción de la igualdad, interlocutores sociales y organizaciones no gubernamentales, especialmente a escala nacional, regional y local) de promover de forma eficaz la igualdad entre hombres y mujeres, en particular mediante la ayuda al intercambio de información y buenas prácticas y al establecimiento de redes a nivel europeo. Para lograr estos objetivos se especifican las acciones que se realizaran en un marco transnacional. 1. Sensibilización Principalmente resaltando la dimensión europea de la promoción de la igualdad entre hombres y mujeres y dando publicidad a los resultados del programa, en particular mediante publicaciones, campañas y actos varios: organización de conferencias, seminarios y actos diversos a escala europea; organización de un gran acontecimiento europeo de periodicidad anual sobre un aspecto prioritario del programa; organización de campañas de prensa y actos que sirvan de apoyo al intercambio transnacional de información, y a la determinación y difusión de buenas prácticas, incluyendo la concesión de un premio anual a empresas que hayan logrado resultados positivos en la promoción de la igualdad, con objeto de dar a conocer en mayor medida las cuestiones de género; publicación de documentación para difundir los resultados del programa, incluida la creación de un sitio en Internet con ejemplos de prácticas idóneas y un foro para el intercambio de ideas. 20 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es aplicación de iniciativas transnacionales como reuniones, seminarios, campañas, con el objetivo de apoyar y potenciar la sinergia de políticas nacionales de igualdad entre mujeres y hombres y lograr un valor añadido comunitario; organización de seminarios y difusión de información relativa a la aplicación de la legislación comunitaria sobre la igualdad entre mujeres y hombres. 2. Análisis y evaluación Análisis de los factores y políticas relacionados con la igualdad, incluida la recopilación de estadísticas, realización de estudios, evaluación del impacto en función del género, herramientas y mecanismos, desarrollo de indicadores y criterios de referencia para la evaluación comparativa y difusión eficaz de los resultados. Se hará el seguimiento de la aplicación y ejecución de la legislación comunitaria en materia de igualdad para evaluar su impacto y su eficacia. Desarrollo y difusión de estadísticas comparables, desglosadas por sexo, y de series estadísticas sobre la situación de las mujeres y los hombres en diferentes ámbitos políticos. Desarrollo y divulgación de metodologías e indicadores para evaluar la eficacia de políticas y prácticas de igualdad entre hombres y mujeres que permitan realizar una evaluación comparativa. Se realizará un análisis de la situación de las mujeres en el mercado de trabajo. Recopilación y evaluación de información actual y de experiencia sobre iniciativas, métodos y técnicas que hayan dado buenos resultados. Publicación de un informe anual sobre la igualdad entre hombres y mujeres en la Unión Europea. Realización y divulgación de estudios temáticos en ámbitos concretos. Realización de un estudio de viabilidad que analice las condiciones previas para la creación de un instituto europeo de estudios en materia de género. 3. Aumento de la competencia Cooperación transnacional entre los principales agentes mediante la promoción del establecimiento de redes y el intercambio de experiencias a escala comunitaria entre las autoridades nacionales, los interlocutores sociales y las organizaciones no gubernamentales. Se realizaran acciones transnacionales de intercambio en las que participen gran variedad de agentes, para transmitir información, enseñanzas aprendidas y buenas prácticas. Acciones para la comparación de la eficacia de los procesos, métodos e instrumentos, la mutua transferencia y aplicación de prácticas idóneas, los intercambios de personal, la creación conjunta de productos, procesos, estrategias y metodologías, la adaptación a diferentes contextos de métodos, instrumentos y procesos declarados como prácticas idóneas y la difusión de resultados y la producción de material que den a publicidad de este tema y la organización de eventos. 21 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es II. ACCIONES COMUNITARIAS El programa podrá aplicarse en uno o varios de los siguientes ámbitos de intervención: 1. Vida económica Se debe atender a los desfases persistentes entre mujeres y hombres en el mercado de trabajo y el modo de solucionarlos. Las acciones consisten en aumentar la tasa de empleo de las mujeres y reducir su tasa de desempleo, así como facilitar una mejor articulación entre la vida profesional y familiar de mujeres y hombres. Los temas de segregación entre mujeres y hombres en el mercado de trabajo, incluida la segregación vertical (“techo de cristal”) y las diferencias de remuneración entre hombres y mujeres, pueden abordarse en el presente programa en la medida en que se pretenda aplicar un enfoque integrado. 2. Igualdad de participación y representación Se hace referencia a la falta de participación de las mujeres en los órganos de decisión. Las acciones consisten en adoptar estrategias e instrumentos para fomentar la presencia de las mujeres en todos los niveles de toma de decisiones políticas, económicas y sociales. 3. Derechos sociales Es necesario integrar realmente la igualdad entre hombres y mujeres en todas las políticas que afectan a la vida cotidiana de las mujeres, como es el caso del transporte o la salud pública. Las acciones se coordinarán con las del programa de acción comunitario de lucha contra la discriminación y otros programas de acción comunitarios pertinentes. Se dirigirán a mejorar la aplicación de la legislación comunitaria, particularmente en lo que se refiere a la protección social, permiso parental, protección de la maternidad y tiempo de trabajo, a articular más fácilmente la vida familiar y la profesional, en especial estableciendo criterios de evaluación de los resultados en lo tocante a la mejora de las estructuras de atención a la infancia y a las personas mayores. 4. Derechos civiles Es imprescindible la aplicación de los derechos humanos específicos de la mujer. Las acciones fomentarán el reconocimiento de los derechos humanos específicos de las mujeres, harán respetar el derecho a la igualdad de oportunidades y reforzarán la lucha contra la violencia sexista y la trata de mujeres. 22 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es 5. Roles y estereotipos establecidos Este ámbito trata de las imágenes estereotipadas sobre las mujeres y los hombres y la necesidad de cambiar los comportamientos, las actitudes, las normas y los valores que, en la sociedad, definen los roles en función del sexo e influyen sobre ellos. Las acciones abarcarán la integración de la dimensión de género particularmente en la educación, la formación, la cultura, la ciencia, los medios de comunicación y la política de deporte. 23 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es PROGRAMAS DE ACCIÓN PARA LA IGUALDAD La igualdad entre hombres y mujeres es un principio fundamental del Derecho comunitario reconocido desde la adopción del Tratado de Roma en 1957. Con el Tratado de Ámsterdam en 1977 se refuerza la legislación relativa a la igualdad entre hombres y mujeres y se establece la obligación de conseguir la eliminación de las desigualdades y de promover activamente la igualdad en todos los ámbitos. Los artículos 21 y 23 de la Carta de los Derechos Fundamentales prohíben cualquier discriminación basada en el sexo y consagran el principio de igualdad en todos los ámbitos. La experiencia ha puesto de manifiesto que la promoción de la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres además de un marco legislativo necesita acciones concretas y nuevas estrategias que permitan avanzar en la igualdad. La Unión Europea desde el año 1982 hasta la actualidad ha ido desarrollando una serie de Programas de Acción para la igualdad entre hombres y mujeres dado, que la igualdad de derecho no supone en la práctica una igualdad de hecho. Estos programas han sido y continúan siendo una herramienta importante de la política europea para la igualdad. Los programas de acción para la igualdad de oportunidades son el resultado de un largo proceso, en cada uno de los cinco programas existentes hay una serie de aspectos comunes y algunos elementos diferenciadores como por ejemplo el marco legislativo, el tiempo de desarrollo del programa, la denominación del programa, el ámbito o los ámbitos de las iniciativas políticas, el tipo de estrategia para lograr la igualdad, la importancia de la cooperación , el papel de los interlocutores sociales, o la inclusión de toda la sociedad. Todos los programas de acción están influidos por avances y logros del pasado así como por los nuevos retos a los que debe hacer frente. A través de un breve recorrido por los diversos Programas de Acción trataremos de poner de manifiesto los aspectos más significativos de cada uno de ellos. Es importante destacar que uno de los primeros logros en este período fue la puesta en práctica del artículo 119 del Tratado de Roma, de modo que la igualdad de retribución entre mujeres y hombres se aceptó como un principio fundamental de la ley europea. Se elaboraron una serie de directivas comunitarias sobre la igualdad de trato entre hombres y mujeres en el lugar de trabajo, sobre la igualdad de trato en el acceso al empleo, a la formación y a la promoción profesional, se incluyó la posibilidad de la acción positiva para alcanzar la igualdad entre mujeres y hombres. Las medidas se centraban en la situación de las mujeres en el trabajo remunerado. Se consideró a la mujer como un colectivo homogéneo y se mostró escaso interés por las necesidades específicas de distintos grupos de mujeres. Los tres primeros programas han dedicado su atención al acceso de las mujeres al mercado laboral, lo que ha significado una mayor competencia entre hombres y mujeres y como expresa M. Rossilli: “La intensificación de la competencia entre hombres y mujeres en el mercado de trabajo... puede haber sido una de las razones de la novedad 24 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es introducida en el Tratado de Ámsterdam que legitima acciones positivas y ventajas concretas para el sexo menos representado, no sólo para las mujeres. El “Primer Programa de Acción sobre igualdad de oportunidades para las mujeres” 1982-1985 se elaboró después de un largo proceso de lucha por la igualdad por parte de las mujeres y de la formulación de una serie de leyes para la igualdad. Se centró en el ámbito del empleo y se propusieron actividades muy diversas, como estudios de aspectos característicos del empleo femenino, la importancia del establecimiento de una red para la formación de mujeres y la consideración de las implicaciones de las nuevas tecnologías en el empleo femenino. Se hizo un esfuerzo considerable por ampliar la difusión de información sobre política de igualdad y por crear una infraestructura de apoyo, y se optó por la puesta en marcha de redes de personas expertas. En 1981 se creó un Comité consultivo sobre igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, en el que figuraban representantes de las Agencias de igualdad de los Estados miembros o de los ministerios competentes. Al mismo tiempo se asignaron fondos a distintos grupos de mujeres. Así, la Oficina de la Mujer en la DG V (la Dirección General de Asuntos Sociales de la Comisión Europea) y la Comisión de Derechos de la Mujer del Parlamento Europeo se convirtieron en puntos centrales para este tipo de actividades. El “Segundo Programa de Acción para la igualdad de oportunidades para las mujeres” 1986-1990, se elaboró en circunstancias muy distintas al anterior. A comienzos de los 80, la Comunidad Europea estaba inmersa en una prolongada crisis económica y el desempleo paso a ser un grave problema. Las políticas sociales sufrieron las consecuencias de esta situación. Se amplio el ámbito de actuación y se consideró la igualdad en la educación y en la formación como elementos clave para la igualdad de oportunidades, se destacó la necesidad de lograr un acceso igualitario a las nuevas tecnologías, así como un reparto de las responsabilidades familiares y profesionales entre hombres y mujeres. Se prestó atención al trabajo no remunerado y a las responsabilidades familiares y laborales de hombres y mujeres. El “Tercer Programa de Acción a medio plazo para la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres” 1991-1995. El objetivo es contribuir a fomentar la plena y total participación de las mujeres en el mercado de trabajo y que se valore su contribución a la vida económica y social. Se prestó una atención especial a las circunstancias socioeconómicas en las que las mujeres tienen que desenvolverse y se produce una mayor concreción sobre los distintos factores capaces de mejorar la situación de las mujeres. Los ejes fundamentales de este tercer programa son: mejorar la aplicación de las disposiciones legales existentes, promover la integración de las mujeres en el mercado de trabajo, así como mejorar la situación de las mujeres en la sociedad. Se establece el compromiso de mejorar la participación de las mujeres en el proceso de toma de decisiones a nivel político. Se hace referencia a la transversalidad. Entre los objetivos destaca la necesidad de desarrollar medidas específicas a favor de la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, fomentar el empresariado femenino y las iniciativas locales de empleo. Se considera fundamental mejorar la calidad del empleo de las mujeres, reducir los obstáculos al acceso y a la participación de las mujeres en el empleo facilitando un reparto de las responsabilidades familiares y profesionales entre hombres y mujeres, así como alentar medidas destinadas al fomento 25 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es de la participación de las mujeres en el proceso de toma de decisiones en la vida económica, política y social. Es importante destacar que este Programa de acción se denomino de “igualdad de oportunidades para mujeres y hombres”, en lugar de “igualdad de oportunidades para las mujeres” como se habían denominado los programas anteriores. Se ha puesto de manifiesto que la igualdad no atañe exclusivamente a las mujeres sino a toda la sociedad. El “Cuarto Programa de Acción comunitaria a medio plazo para la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres” 1996-2000. Este programa se elabora después de las conclusiones de la IV Conferencia Mundial sobre las mujeres celebrada en Pekín en 1995. En este programa se hace referencia la consideración de ciudadanía y al reconocimiento de los derechos de las mujeres. Entre los objetivos cabe destacar la integración de la igualdad de oportunidades en todas las políticas y en todos los ámbitos, es decir lo que se denomina “mainstreaming de género”; es necesario movilizar a todos los agentes de la vida económica y social para lograr la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, se trata por lo tanto de sensibilizar y concienciar a los interlocutores sociales sobre la importancia de tener en cuenta el género; de nuevo se insiste en la lograr una participación equilibrada en los procesos de toma de decisiones y en la necesidad de poder compatibilizar la vida familiar y profesional. Las acciones seleccionadas para el logro de los objetivos se refieren al apoyo metodológico técnico y financiero a los proyectos con carácter innovador en las buenas prácticas, al seguimiento de las políticas pertinentes, así como a la difusión de los resultados de las distintas iniciativas y buenas prácticas. Es importante tener en cuenta que este cuarto programa se ha convertido en un elemento determinante en el nuevo panorama de las políticas de igualdad. Además del “mainstreaming" hay que destacar una continua mención a la importancia de una mayor presencia de las mujeres en la toma de decisiones. El “Quinto Programa de Acción para la igualdad entre hombres y mujeres” 20012005 es uno de los instrumentos necesarios para la puesta en práctica de la estrategia marco comunitaria para la igualdad entre mujeres y hombres. Los objetivos de programa son: promover y difundir los valores y prácticas en los que se basa la igualdad entre mujeres y hombres, mejorar la comprensión de cuestiones relacionadas con la igualdad-discriminación directa, discriminación indirecta, múltiple-, y potenciar la capacidad de los agentes sociales para promover la igualdad especialmente a través de intercambio de información y buenas prácticas, y el establecimiento de redes a nivel comunitario. En este programa se apoyarán acciones de sensibilización ante el problema de la desigualdad, de análisis de la realidad -datos, estadísticas, indicadores, estudios, evaluación de impacto, difusión de resultados-, así como acciones de promoción de trabajo en redes y de intercambio de experiencias a nivel comunitario. Se considera importante la coherencia y complementariedad de las acciones para evitar duplicidades y solapamientos. 26 Autora: Luz Varela Caruncho Profesora Titular de Escuela Universitaria. Universidad de Vigo. Publicado en Internet en: http://webs.uvigo.es/pmayobre/pc/profesorado#luz Correo: lvarela@uvigo.es Un aspecto muy importante es la estrategia empleada; se hace referencia a una estrategia dual con la incorporación del mainstreaming de género como estrategia complementaria a la acción positiva. Se insiste en la necesidad de cooperación de todos los actores implicados, así como en la importancia de difundir las buenas prácticas para la igualdad de hombres y mujeres. Se ha hecho especial hincapié sobre la importancia de la evaluación del impacto atendiendo a la dimensión de género. 27