Ruiz, Díaz y Villalobos (2012) describen: 1. Nombre: Terapia Racional Emotiva Conductual (TREC) 2. Objetivo: distinguir entre creencias racionales e irracionales y su influencia en las emociones, conductas y pensamientos adecuados o disfuncionales para que, a través de los pensamientos racionales flexibles, el individuo pueda establecer libremente sus metas. 3. Procedimiento (fases): a. Evaluación psicopatológica. Exploración psicopatológica y diagnóstico: se considera el DSM IV-R, se analizan factores psicológicos o biológicos implicados en el problema, se emplean entrevistas clínicas, cuestionarios, test psicológicos o autoinformes. b. Evaluación Racional-Emotiva. Se realiza una lista de problemas internos (reacciones emocionales intensas o conductuales disfuncionales de sucesos ambientales) y externos (los que dependen de acontecimientos ambientales, como divorcio o despido laboral). Se detectan absolutistas, catastróficas, de baja tolerancia a la frustración o de autodescalificación general. c. Insight Racional-Emotivo. Las creencias irracionales producen el malestar emocional, se activan con cada situación; el origen del malestar no son las experiencias, actuales o de la infancia, sino las creencias irracionales que se generaron ante ellas. Al cambiar el contenido de las creencias, cambiará el problema emocional. La responsabilidad del cambio emocional está en el individuo, no en la situación vivida. d. Aprender una base de conocimiento racional. Esto se realiza para aprender a debatir y refutar creencias irracionales, y a generar o afianzar creencias racionales alternativas para eliminar problemas actuales y prevenir que se repitan en el futuro. e. Aprender una nueva filosofía de vida. Se pretende: conseguir que las creencias racionales que se han ido instaurando a lo largo de las etapas anteriores se arraiguen; y fortalecer el hábito de detectar, debatir y refutar creencias irracionales sobre todo las basadas en exigencias absolutistas, creencias catastrofistas, auto-descalificaciones globales y baja tolerancia a la frustración. Martin (2014) afirma que lo nuevo es que la actitud del terapeuta ahora es activa y directiva, en vez de la escucha pasiva. Se evolucionó hacia un diálogo con el paciente, en el que se debatía y se cuestionaba sus pensamientos distorsionados que se creía eran los determinantes de sus síntomas. 2. NOMBRE: DETENCIÓN DEL PENSAMIENTO OBJETIVO: Objetivo: suspender los pensamientos negativos que generan malestar emocional para sustituirlos por otros mejores y más adaptativos. PROCEDIMIENTO (pasos): a. Enumeración y descripción de los pensamientos disfuncionales. El cliente escribe tres o cuatro temas que le preocupen y no pueda dejar de pensar; cada tema debe ser descrito b. c. d. e. f. - brevemente, con las frases típicas que aparecen en la mente del cliente cuando piensa en dichos temas. Elaborar lista de pensamientos funcionales y agradables. El cliente identifica tres o cuatro temas cuyo pensamiento resulte agradable y que dé tranquilidad o sensaciones agradables. Relajación e implicación en la secuencia de pensamientos disfuncionales. Se induce un estado de relajación y se selecciona uno de los temas problema; de inicio, el menos estresante; se propicia la secuencia de pensamiento hasta que el paciente esté bien inmerso en el tema. El cliente avisa al terapeuta con un gesto (acordado previamente) de que está totalmente metido en la secuencia mental. Interrupción de los pensamientos disfuncionales. Cuando el sujeto da la indicación de estar inmerso en la secuencia mental, el terapeuta gritará “STOP”, se puede acompañar de un golpe en la mesa, por ejemplo. Cambio hacia una secuencia de pensamiento agradable. Inmediatamente, ante la interrupción en la secuencia de pensamientos desagradables, se indica cambiar a un tema agradables elegidos previamente. Se le indicará que disfrute de esta nueva secuencia de pensamiento, reforzando la escena con indicaciones de sensaciones físicas, emocionales, sonidos o sabores. Si los pensamientos disfuncionales regresan antes de medio minuto, el cliente hará la señal y se gritará nuevamente “STOP”. Repetición del ejercicio con variaciones. Se repite en varias ocasiones la secuencia de pasos descrita (rumiación disfuncional-STOP-pensamiento agradable). Si una cadena de pensamiento no se mantiene en la atención se cambiará por otro de los temas problema. Se practica unos diez minutos con distintos temas. El pensamiento agradable tratará de mantenerse alrededor de un minuto. Martin (2003). El ABC de la terapia cognitiva. Funda foro, 1-17. https://www.fundacionforo.com/pdfs/archivo23.pdf Ruiz, A. Díaz, M. y Villalobos, A. (2012). Manual de técnicas de intervención cognitivo conductuales. Bibliotecas de Psicología. https://capacpsico.com.mx/wpcontent/uploads/2021/06/Manual-de-t%C3%A9cnicas-de-intervenci%C3%B3ncognitiva-conductuales.pdf