1 21 2.4. Logoterapia Concede gran importancia a la relación del paciente y el terapeuta. Frankl destaca que tal relación entre las dos personas es el aspecto más significativo del proceso terapéutico, un favor más trascendente que cualquier método o técnica. Esta relación debe contrapesar los extremos de la familiaridad humana y la separación científica. El logoterapeuta debe estar alerta para no imponer al paciente su propia filosofía. Debe impedir contratransferencia al paciente, respecto de su filosofía personal, de su personal concepto de valores, ya que el concepto de responsabilidad implica que el paciente debe ser responsable de sí mismo. El logoterapeuta solo debe proporcionarle la experiencia de su responsabilidad (Oblitas, 2008). La logoterapia enseña que el hombre, en el fondo, está penetrado de una ‘’ voluntad’’ de sentido. Ahora bien, esta teoría suya de la motivación puede definirse operacionalmente, aun antes de su verificación y validación empíricas. Y puede hacerse dando la siguiente explicación; llamamos sencillamente voluntad de sentido a aquello que se frustra en el hombre siempre que este cae en el sentimiento del absurdo y del vacío Frankl, (2011). Frankl acepta las otras tecnicas psicoterapuetucas, pero advierte que existen dos logoterapéuticas, que están diseñadas para el tratamiento de neurosis de angustia y las neurosis obsesivo-compulsivas 2.4.1 La intención paradójica La neurosis de angustia y las condiciones fobias se caracterizan por la ansiedad anticipatoria , que produce una situación a la que el paciente tiene miedo. Cuando el logoterapeuta aplica la intención paradójica no le interesan los síntomas en sí mismos, sino la actitud del paciente frente a su neurosis y a sus manifestaciones sintomáticas Dicha técnica es efectiva sobre todo en el tratamiento breve de fobias acompañadas de ansiedad anticipatoria. No es un método superficial, pues afecta a las capas más profundas de las personas. 2.4.2. La Derreflexión En las neurosis obsesivo-compulsivas, los pacientes exhiben respuestas de ‘’ actividad errónea’’ en sus ideas. Las intenciones desbordadas hacen imposible el funcionamiento deseado. En estos casos, es frecuente el exceso de atención y la observación compulsiva de uno mismo. La derreflexión, en sí misma, contiene aspectos positivos y negativos. El paciente ignorará su ansiedad anticipatoria, pero la cambiaría por alguna otra cosa. Mediante la derreflexión, el paciente es capaz de ignorar su neurosis y localizar su atención fuera de sí mismo. Se dirigirá hacia una vida llena de posibles significados y valores que tienen un especial atractivo para sus capacidades personales. El resultado es un cambio de actitud hacia los propios síntomas. Ahora, el paciente es capaz de ponerse a cierta distancia de sus síntomas, de alejarse de su neurosis. Si se tiene éxito el paciente deja de huir y luchar contra sus síntomas, e incluso, si los exagera, entonces observaremos que los síntomas disminuyen y dejan de obsesionar al paciente 22 2.4.3 La triada trágica Cuando Frankl habla de la tragedia del ser humano, se refiere a tres situaciones que le tocan inevitablemente vivirlas a las que denomina también el triple desafío; el sufrimiento, la culpa y la muerte. 2.4.3.1 Sufrimiento Frankl considera que cada hombre tiene un destino único, que, al igual que la muerte, es una parte de su vida. La llama destino a lo que esencialmente ‘’ limita de la libertad del hombre’’, puesto que ni está dentro del área del poder del hombre ni de su responsabilidad. Al hablar de sufrimiento, Frankl se refiere a aquel que no puede ser evitado, porque no se trata de masoquismo, ya que esto sería una patología. El sufrimiento es algo intrínseco a la vida humana. Todos en algún momento lo hemos vivido. Somos conscientes de él y tenemos que enfrentarlo con una actitud digna y responsable. 2.4.3.2 Posibles actitudes frente al sufrimiento Las posibles actitudes frente al sufrimiento son: a) escapismo; b) Apatía; Frankl la define como el sufrimiento de no poder sentir el sufrimiento. Cuando estamos apáticos, somos insensibles a lo que ocurre. c) la autocompasión; es vivir el sufrimiento como algo injusto que nos está ocurriendo. d) Contacto con el dolor; es asumir lo que nos está sucediendo, dejándonos sentir el dolor que, en forma inevitable, está aquí, en nosotros. Desde allí, se tienen que buscar las respuestas del espíritu. 2.4.3.3 La culpa (formas de expresión) La culpa como respuesta a no asumir la responsabilidad de mis sentimientos. Inconscientemente, es preferible seguir sintiendo culpa y recibir un castigo que asumir la responsabilidad por lo que verdaderamente siento. La culpa es la forma que tiene mi espíritu de decirme ‘’ Te sigues traicionando’’ La culpa como traición a mí mismo. La culpa y la traición a mí mismo están relacionadas. Cuando traicionó lo que soy. Sea o no consciente de ello, me alejo de mí mismo y siento culpa. La culpa puede llegar a generar en el ser humano la autoseparación y la autodestrucción al confiarle a un aislamiento, porque, en el fondo lleva una verdad no confesada de la que posiblemente no se dé cuenta. La culpa y la evasión de la realidad y de mi responsabilidad. La culpa es una evasión de la realidad, una evasión que tiene un alto costo, ya que mantiene a la persona paralizada, detenida, fijada en una posición de la que es imposible salir. El arrepentimiento. Para Frankl, el arrepentimiento honesto es la forma de aceptar la responsabilidad para salir del estado de culpa. 2.4.3.4 Sobre la muerte Pensar en el hecho de la muerte puede ser amenazante para muchas personas, pero es algo de lo cual no nos podemos liberar. A todos nos tiene que suceder en algún 23 momento de nuestra existencia. Frankl advierte que la muerte le otorga pleno sentido a la vida. La presencia de la muerte se nos presenta como un límite infranqueable de nuestro futuro y como una limitación de todas nuestras posibilidades. Por estas razones, nos vemos obligados a aprovechar el tiempo de vida y no a desperdiciar las ocasiones que solo se nos brindan una vez. 2.5. Psicoterapia Breve sistémica La psicoterapia breve sistémica tiene su origen hacia 1950, época en la que la posguerra abría un campo de estudio a modelos de acción rápida y eficaz en el tratamiento de urgencia en situaciones traumáticas, así como diferentes problemas psicológicos que habían quedado como secuela. El terapeuta, en la medida en que se enfoca al estudio de la totalidad y no de procesos aislados, lleva a cabo un procedimiento sistémico, en la medida en que estudia el comportamiento recíproco, la regularidad, la pauta y la organización, desarrollando un método cibernético. Un aspecto central en la psicoterapia breve sistémica es el cambio. la forma como tiene lugar espontáneamente y la manera de promoverse. Además, comparte las siguientes premisas. ● Se enfoca en el aquí y el ahora y no en el allá y el entonces ● No buscas causas subyacentes que impliquen aquello de lo que se quejan las personas al iniciar la terapia no es el verdadero problema, sino siempre la manifestación de algún problema más profundo. Se considera que, en su mayoría, los problemas son de naturaleza interaccional. ● Los pacientes definen los objetivos de la terapia, por lo que deben formularse para satisfacer la unicidad de las necesidades del individuo; dicho de otra manera; la terapia debe ser cortada a la medida y envuelta como regalo para cada persona ● La manera en que se etiqueta un dilema humano puede cristalizar un problema y hacerlo crónico. Catalogar a un niño como autista o etiquetar a un adulto como Borderline solo contribuye a participar en la creación de un problema mucho más difícil de solucionar. ● No hay una única forma ‘’ correcta’’ de ver las cosas; puntos de vista diferentes pueden ser igualmente válidos y ajustarse igual de bien a los hechos. En la psicoterapia breve, la intervención terapéutica se orienta a: 1. Cambiar la ‘’ forma de actuar’’ en la situación percibida como problemática, buscando pautas de comportamiento nuevas o diferentes 2. Modificar la ‘’ forma de ver’’ la situación percibida como problemática, ofreciendo otros marcos de referencia 3. Evocar los recursos y capacidades de la persona que pueda aplicar a la situación percibida como problemática. 2.6 Psicoterapia corporal Si por terapia corporal se entiende aquella modalidad terapéutica centrada en el cuerpo, por psicoterapia corporal se entiende aquella práctica en donde cuerpo y mente