Universidad Nacional Autónoma de México Facultad de Filosofía y Letras Colegio de Bibliotecología Control de lectura Unidad I. El renacimiento en Italia Reformas protestantes y lectura Argelia Flores Ortiz Historia del libro y las bibliotecas II El Renacimiento en Italia I El Renacimiento es conocido por ser la época de los gobernantes déspotas, el despertar del la razón y el saber, una gran revolución en todas las artes y las ciencias. Pero se podría decir que el Renacimiento, como muchos otros procesos históricos, no debe verse de manera asilada ya que en realidad es una transición entre la Edad Media y el mundo moderno. El cambio de la forma de gobierno propicio esta transformación; el fin del feudalismo se debió a la unificación y la creación de grandes monarquías con las cuales se consolidaron las potencias europeas, que se enriquecieron gracias a los viajes de exploración que hicieron a América y Asía. En Italia se sientan las bases del Renacimiento, ya que existe una estabilidad política y económica que permite el desarrollo intelectual. El papado puede ser visto como la última representación del imperio romano, que pierde su influencia en los nuevos estados totalitarios, con excepción de España con la que mantiene una alianza importante. La Edad Media es reconocida precisamente por la ignorancia en que la iglesia mantenía a la población en general, resguardando todo el conocimiento en sus centros religiosos. Está etapa de cambios, según el autor, debe ser definida como parte de la instauración de la democracia en el mundo moderno ya que Renacimiento-Reforma-Revolución permanecen históricamente relacionados. Los pensadores más importantes en Italia fueron Dante, que con “La divina comedia” introdujo la literatura clásica, al igual que Boccaccio con pensamiento de semipaganismo. Cambiaron el pensamiento puritano, cuyo mayor terror era el pecado. Estos dos grandes predecesores de la literatura se sumaron a muchos otros pensadores y científicos; que pusieron al hombre en el centro del universo. “Las dos grandes hazañas del Renacimiento fueron el descubrimiento del mundo y el descubrimiento del hombre”1 El hombre como modificador de su entorno y de sí mismo, dejando un poco de lado la adoración divina, es por eso que se habla de un semipaganismo. En el campo de los libros y las bibliotecas; el Papa Nicolás V crea la biblioteca del Vaticano. Cósme de Médicis y Puggio Braciolini clasificaron y rescataron muchos de los textos 1 Addington Symonds, John. "El espíritu del Renacimiento" en El Renacimiento en Italia I. México: Fondo de Cultura Económica, 1957. p. 16 clásicos grecolatinos. Dichos textos eran en sumo apreciados por los intelectuales, en la primera etapa de este renacer del la cultura, no fueron sujetos de critica ya que todos los postulados eran aceptados como verdades únicas, ya que rechazaban totalmente las ideología de la Edad Media y el poder que hasta entonces habían ejercido la iglesia y los señores feudales. Ante esto surge el movimiento encabezado por Martin Lutero conocido como la Reforma protestante; cansado de los continuos abusos de la iglesia, en los que su único objetivo era el enriquecimiento, Lutero invito al Vaticano a una serie de debates acerca del verdadero significado de la religión cristiana; la reacción natural de la iglesia fue la represión, aunque no era la primera vez que los intereses de la iglesia fueron puestos en riesgo, ya que anteriormente hubo revueltas. Afortunadamente el movimiento de Lutero tuvo éxito, tanto que posteriormente la iglesia inicio en España, sobre, todo un movimiento de contra reforma que utilizó como escudo al movimiento cultural conocido como Barroco. El renacimiento a fin de cuentas es una etapa en la historia del hombre que implica un despertar del intelecto humano, esto no quiere decir que la Edad Media haya sido una época de oscuridad, sino simplemente un preludio necesario al renacer humano por encima de lo divino. Sin duda es una base, como el mismo autor lo refiere, de la modernidad ya que además de desarrollarse las grandes naciones europeas, también comienzan a tomar forma las lenguas nacidas del latín, que no son sino todas aquellas que conocemos en la actualidad. Que con el descubrimiento de América se expanden por el nuevo mundo, con todas las repercusiones que eso implica; básicamente se solidifica la cultura occidental. En el campo de las bibliotecas se consolida al libro como elemento fundamental en el desarrollo del conocimiento humano; y al rescatar a los autores clásicos se recuperan grandes acervos, de los cuales también se logra la conservación y restauración. Reformas protestantes y lectura Según algunos historiadores, el gran éxito de la Reforma protestante, se debió sin duda al invento más importante del renacimiento, la imprenta. Muchos de los reformistas estaban de acuerdo con está postura, ya que la introducción de este artefacto iba de acuerdo a la nueva mentalidad humanista y divulgadora de las ciencias y el arte. Ya que se propicio la distribución de los textos y se redujeron costos de producción. Pero ¿Es cierto que fue tan importante como se dice? Para empezar la gran mayoría de la población europea de ese entonces era analfabeta. Sin duda es aquí donde el libro pasa de ser un objeto artístico y sagrado, a ser un objeto más de venta por lo que se habla de la desvalorización del libro; en ese entonces las portadas de los libros comenzaron a volverse artísticas para así atraer la atención de los lectores. Las bibliotecas cambian sus formatos, los manuscritos dejan de ser adquiridos y son remplazados por libros impresos. La gran ventaja de toda está evolución fue la divulgación de la cultura y el incremento de los lectores, que en su mayoría eran burgueses. En cuanto al protestantismo se refiere se inicio la “guerra de los panfletos”, en donde se manifestaban los ideales de Lutero y otros reformistas esto se extendió por toda Europa, claro está, con discreción el los países que aún conservaban bastante el tradicionalismo de la iglesia Católica, entre ellos Francia e Italia. La impresión de la Biblia traducida del latín al alemán por Lutero resulto exitosa, no solo para su movimiento, también para los bolsillos de los impresores que sólo veían sus intereses materiales. Uno de los postulados de la reforma era acercar los textos religiosos a la gente, es por eso que se imprimieron textos didácticos y síntesis teológicas que se mantenían en constantes renovaciones y correcciones para fortuna de los empresarios. Francia e Inglaterra de Enrique VIII cedieron a la producción de libros reformistas, aunque como es claro, España se negó rotundamente a aceptarlo ya que incluso promovió la actuación de su instrumento de Inquisición. Para entonces ya todos los grupos religiosos utilizaban como herramienta la imprenta. Y esto fue aprovechado por los libreros clandestinos que muchas veces vendían textos heréticos, y posteriormente eran terriblemente castigados hasta con al vida, a pesar de estos intentos de eliminarnos fue imposible ya que la había demanda. La iglesia católica publico el “Índice de libros prohibidos”, como respuesta a todo lo que sucedía en el momento. Aunque no todo iba en perfectas condiciones, comenzó a haber discusión acerca de si era pertinente traducir la Biblia a las lenguas vulgares, Calvino escribía en latín para hablar entre eruditos y escribió otros textos en lengua vernácula para que pudieran ser comprendidos por el pueblo. Fue difícil esta transición, y el latín seguía utilizándose en los grandes debates teológicos. Posteriormente las ideas centrales del reformismo fueron desmoronándose; un buen ejemplo fue el mismo Lutero, aunque paso lo mismo con muchos otros dirigentes de su época. Lutero pidió que la Iglesia tuviera un control sobre la Biblia y otros textos que se imprimían, a diferencia de sus primeros postulados en donde decía que cada quien podía darle su propia interpretación. Además, digamos que, comenzó a ser elitista o sencillamente siempre lo fue, ya que el veía la educación como un medio para formar solamente a los futuros gobernantes, e incluso pidió a las bibliotecas que facilitarán a los mismos la instrucción necesaria para serlo, como podemos notar jamás hablo del pueblo y de sus intereses. Por eso fomento la divulgación de textos sencillos y un control de la interpretación que se les pudiera dar a estos. Y otros pocos los reformistas más comprometidos, se alejaron de muchos de los textos que se decían oficiales. El discurso oral nunca fue excluido de la reforma, ya que por las circunstancias dadas en ese momento ese era el medio de difusión más útil para difundir entre la gente. Las características físicas del libro nos ayudan a inferir que tipo de lectura se le debería de dar. Por lo que algunos textos nos dicen seria posible afirmar que la mayoría de ellos estaba destinado a la lectura en voz alta; incluso incluían caricaturas e imágenes para una fácil comprensión. Utilizaron catecismos, ya que pensaban que eran de una comprensión mas sencilla, según ellos la ignorancia impedía introducir otro tipo de textos, además que dificultaba las cosas. Otra herramienta muy utilizada por reformistas de distintas corrientes fue la música, algunos como Calvino prefirieron que no tuviera voz, mientras que a Lutero le pareció de lo más interesante. El instrumento principal dentro de está música fue sin duda el salterio. Por otra parte mientras Lutero prefirió utilizar la lectura colectiva, o bien dada por un pastor, Calvino uso formatos de lectura individual. Otra cosa curiosa fue que cuando se imprimían biblias en lenguas vernáculas se especificaba que estaba hecha para “ignorantes”, claro no en todos los casos. Lo escrito en muchos casos indicaba la autenticidad de lo que ahí se decía, pero muchas veces los protestantes se quejaron del mal uso que se hacía de los libros, ya que a partir de la reforma se comenzaron a cuestionar cosas más delicadas como la veracidad de la “palabra divina”. Sin duda la aportación más importante de la Reforma protestante no fue el gran cambio que se esperaba en las ideas religiosas de ese momento, más bien la accesibilidad de los textos en general y el interés por la lectura de diversos sectores de la población; que en la Edad Media hubiera sido impensable ya que la iglesia tenia un control total del conocimiento humano. Lo que al final a Calvino y Lutero les pareció contraproducente, fue realmente impulsor de muchos otros movimientos históricos posteriores. La gente tenía su propia opinión sobre los textos que se les presentaban, y creció el interés por aprender a leer, crecieron las bibliotecas al abaratarse los costos de la adquisición de libros, y se llenaron de usuarios muchos de ellos burgueses, la nueva clase que comenzaba a tomar fuerza. Claro que entre todos estos beneficios había que tener alguna perdida, esa fue la desvalorización del libro, que ahora se veía como otro objeto comercial y por lo tanto la falta de reconocimiento de la profesión del bibliotecario, que hasta este entonces había sido ocupada por las personas más sabias e ilustres de la comunidad a la que pertenecieran. Los incunables Se pueden definir como incunables como todos los impresos por caracteres móviles desde el nacimiento de la imprenta hasta 1500. Estos han sido considerados por las bibliotecas como tesoros invaluables dentro de sus colecciones. Muchos de ellos no tenían nombre del impresor ni fecha de impresión, por lo que dificulta su análisis y lectura. Características particulares. Los tipos que se utilizaban eran, sobretodo, el gótico y el romano; el primero como ya sabemos tiene caracteres angulosos y el segundo más redondeado. Se hablaba entonces de una “escritura humanística”. También tenían abreviaturas como las usadas en los manuscritos cohetanos. La tipografía griega aún no contaba con tipos propios, por lo tanto los espacios que le correspondían se dejaban en blanco y posteriormente se hacían en manuscrito. Pasado un tiempo estos tipos y los hebreos se introdujeron a la imprenta. Y tardaron un poco más los símbolos musicales. Las portadas se caracterizaban por contener el titulo del libro, y un grabado de xilografía. Después venia la tabla de contenido, se dejaba muchas veces una hoja en blanco y después el nombre de la obra y el autor. Las signaturas eran marcas que se dejaban con el fin de que se encuadernaran bien los libros, y estos podían ser asteriscos, cruces y números. Los reclamos eran las palabras o silabas con que debía empezar la siguiente pagina. Se incluía la foliación y el Colofón, en donde se detallaba el lugar de impresión, nombre y fecha; el registro se ponía al final del libro y era la primera mitad de las hojas de cada pliego para saber que tipo eran. El tamaño más usado eran los folios, posteriormente cuartos y octavos. El material escriptorio era por lo regular papel y para libros de lujo pergamino. Para las ilustraciones se usaba el grabado en madera y posteriormente en metal, en donde utilizaban cobre, en Alemania surge la ilustración satírica y burlesca y en España se pretende un poco más de realismo. Por ultimo se mencionan los escudos tipográficos, que contenían las iniciales del editor o del tipógrafo. Sin duda la importancia de estos documentos es que sirven como materiales de estudio para averiguar como funcionaron las primeras imprentas de tipos móviles del mundo, como eran esos primeros impresores y como fue la evolución de este invento que revoluciono por completo al libro y las bibliotecas. Las bibliotecas italianas Después de dos siglos de Edad Media, el Renacimiento sin duda fue un redescubrimiento del hombre en la concepción de los clásicos. Se rescata toda la cultura grecolatina, eso incluía todos los escritos de la época, lo cual fue de gran importancia para las bibliotecas. También la expansión de las lenguas vernáculas, y por lo tanto los textos que se escribían con estas lenguas. El auge de las bibliotecas privadas, que representaban poder y conocimiento para quienes las poseían. Crecen el número de bibliófilos y cazadores de manuscritos, ya sea por la belleza exterior de los mismos, o por la dificultad que había en conseguirlos. Pero también fue el gran auge delas bibliotecas públicas, como se verá más adelante. Una biblioteca particular muy especial fue la del poeta Petrarca, que tenía obras religiosas y filosóficas así como también textos clásicos, donde el común denominador era la bella presentación del libro. Al morir cedió su colección a la Republica Veneciana, aunque como regularmente pasa el acervo se dividió en distintas bibliotecas. Florencia fue sin duda la capital del Renacimiento, y ahí florecieron familias ricas que fundaron bibliotecas importantes, este fue el caso de los Medici que colecciono por generaciones libros antiguos contaban con 800 volúmenes y crearon tres bibliotecas la de San Marcos, San Jorge y la Abadía de Fiesole, contaban con códices latinos, griegos, hebreos y árabes. Cuando fueron expulsados se pidió que se hiciera una biblioteca pública, con 1019 volúmenes y 300 manuscritos, tenía su propio catalogo y lo libros eran encadenados en sala. Domenio Maladesta Novello, señor de Cesena también hizo grandes aportaciones a las bibliotecas ya que su acervo constaba de libros hechos por copistas y todo estaba en latín, tenía una gran variedad de temas entre ellos teología, clásicos, cosmografía, ciencias, medievales, historia y códices. Se le llama la primera biblioteca pública de la modernidad, y afortunadamente su acervo permaneció casi intacto. Gracias a esta búsqueda de textos grecolatinos, también se buscó la traducción de los mismos y su recuperación después de la caída de Constantinopla. La conformación de la biblioteca Vaticana también fue un acontecimiento importante; esta se concentraba en el palacio de Letrán, para cuando se fueron a Francia ya tenían un acervo extenso de 2400 volúmenes, pero no conservaron todos a su regreso. Nicolás V creo la nueva biblioteca del Vaticano, aumento el acervo con 340 libros de su propia colección, además que ordeno donaciones de otros centros religiosos. Sixto IV también aporto, la hizo pública aunque como muchas otras de sus contemporáneas también tenía los libros encadenados, ya que muchos coleccionistas estaban buscando manuscritos raros para sus colecciones. Tenía cuatro secciones latín, griego, secreta y privada. Sólo se tenía acceso a las dos primeras, se hicieron catálogos de autores y de materias para ese entonces su acervo era de 3600 aunque no todos eran libros religiosos, también había clásicos y científicos. Sin duda esta biblioteca fue modelo de muchas otras del Renacimiento, posteriormente se cerró al público y no se volvió a abrir sino hasta 1890. En 1600 Fulvio Osirni heredó al Vaticano su importante colección de autores clásicos. Hubo otras donaciones de hasta 5000 libros y 3500 manuscritos. Adquirieron el último texto existente de la República de Cicerón. En la actualidad es una de las bibliotecas más importantes del mundo, por los textos únicos que resguarda, así como muchas otras, que gracias a los bibliófilos se rescatan muchos documentos clásicos importantes. Como mencionaba anteriormente las bibliotecas fueron incrementando sus colecciones y el libro gracias a la imprenta se volvió un objeto más común. Se incrementó la cantidad de lectores y por lo tanto Europa se alfabetizo lentamente. No cabe duda de que el Renacimiento fue la etapa más importante para la historia del libro después quizá, de la invención del papel. Bibliografía John Addington Symonds "El espíritu del Renacimiento" en El Renacimiento en Italia I. México: Fondo de Cultura Económica, 1957. Agustín Millares Carlo, "Capítulo VI. Los incunables" en Introducción a la historia del libro y de las bibliotecas. México: Fondo de Cultura Económica, 1971. Leer páginas 113, 120-129. Jean-Francois Gilmont "Reformas protestantes y lectura" en Guglielmo Cavallo y Roger Chartier, Historia de la lectura en el mundo occidental. Madrid, Taurus, 1998. Leer páginas 331-365. Hipólito Escolar "Renacimiento" y "Siglo XVI. I" en Historia de las bibliotecas. Madrid: Fundación Germán Sánchez Ruipérez-Pirámide, 1990.