LAS HEREDERAS MARCELO MARTINESSI NÚM. 14 LAS HEREDERAS MARCELO MARTINESSI 2 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 LOS CUADERNOS DE CINEMA23 | LAS HEREDERAS | GUIONES NÚM. 14 © 2019 LA INTERNACIONAL CINEMATOGRÁFICA, IBEROCINE, A.C. www.cinema23.com Director de Cinema23 | Diretor de Cinema23 | Ricardo Giraldo Editora en jefe | Editora-chefe | Paula Villanueva Rabotnikof Traducción al portugués | Tradução para português | Claudia Dias Sampaio Diseño de portada y formación | Desenho da capa e diagramação | Cinema23, Katia Tort Basado en el diseño editorial de | Baseado no desenho editorial de Cítrico Gráfico LOS CUADERNOS DE CINEMA23, idea de Alejandro Lubezki © Las herederas: La Babosa Cine © Fotografías e imágenes: Luis Armando Arteaga, Martín Crespo. Agradecimientos | Agradecimentos: Sebastián Peña Escobar, Marcelo Martinessi, Agustina Chiarino, Fernando Epstein, Claudia Steffen, Christoph Friedel, Júlia Murat, Marina Perales, Xavier Rocher e Hilde Berg. Publicación gratuita, prohibida su comercialización. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de esta publicación sin previa autorización del editor. CINEMA23 celebra las diferentes opiniones de sus integrantes. Publicação gratuita, proibida a comercialização. A reprodução total ou parcial dos textos e imagens contidos nesta publicação é proibida salvo prévia autorização do editor. CINEMA23 celebra as diferentes opiniões expressas por seus integrantes. Impreso en México | Impresso no México | 2019 INTRODUCCIÓN (Las plantas no se venden) Con la excusa de una mudanza a una casa más pequeña o de un viaje por tiempo indefinido, se organizan a veces lo que nosotros los asuncenos (y me imagino que también la mayoría de los latinoamericanos) llamamos “ferias de garaje”. Una persona pone precio a sus muebles, cristalería, mantelería, y las expone (¿se expone?) al mundo exterior. He estado en muchas de ellas y siempre me ha llamado la atención el intercambio entre dueña y cliente, comúnmente mujeres. Allí se juegan un montón de elementos: clase social, situación económica actual y, sobre todo, abolengo. Muchas veces en esos intercambios existe también una (velada) decadencia económica que las señoras se esfuerzan en disimular. Tal vez por tener tan fuertemente grabadas esas impresiones, una de las primeras escenas que escribí para Las herederas era ese duelo entre Chela y el par de compradoras que invaden la antigua mansión —hasta entonces un espacio demasiado privado— y manosean las pertenencias heredadas como si estuviesen en un mercado de barrio. La línea de diálogo que más me gusta de toda la película, “Las plantas no se venden, si quiere le regalo una”, la habré escuchado en una de esas ferias de garaje. Y es un sumario perfecto que en diez palabras comprendía miles de vivencias acerca de decadencia, crisis y clase que vi desde niño en Asunción. Aunque la autoría de un guion es, en la mayoría de los casos, de una o dos personas, esas ideas, diálogos e imágenes que escribimos salen muchas veces de lugares tan distintos como una prisión o una feria de garaje y pasan por un proceso cuya naturaleza es colectiva. Al recorrer esa distancia entre el papel y la pantalla, ese “manoseo” de actores, técnicos y productores, al menos en el caso de este guion en particular, hizo mucho bien. Entre esta y la primera versión de Las herederas no hay diferencias sustanciales. Sucede algo muy similar a lo que le pasa a Chela en la película. Entre un borrador y el siguiente, hay siempre un paso hacia fuera del encierro, hacia fuera de la nebulosa en la que empezó a gestarse esta historia. Y existe también, cada vez más evidente, un deseo de conectar. Partiendo de una narrativa lacrada, se empezaron a abrir ventanas, empezó a entrar algo de luz, al menos la suficiente para ver dónde estamos, identificar rostros, cuerpos, escuchar palabras por más que no signifiquen demasiado. Sabía que estábamos haciendo una película de encierros, pero era primordial que aquello muy hermético se tornara un poco más comprensible sin dejar de ser pudoroso. En ese sentido, siento una deuda enorme con Gabriel Casaccia, escritor paraguayo cuyas novelas han sido iluminadoras, dentro de su encantadora dosis de oscuridad. IV | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 La distancia de otras voces e impresiones me ayudó bastante a entender lo que estaba haciendo. Quiero agradecer a todas las personas que acompañaron de cerca mi proceso de escritura, en especial a Andrew John Lucas, Anita Voorham, Marietta von Hausswolff von Baumgarten, además del magnífico grupo de productores liderados por Sebastián Peña Escobar, al equipo de producción en rodaje, a los técnicos y directores de equipos (en especial Carlo Spatuzza, Luis Arteaga, Rafa Álvarez, Fernando Epstein y Fernando Henna) y a las actrices (y actores) cuyo ímpetu y talento quedaron fuertemente impregnados en la película. De las miles de cosas que aprendí y que moldearon este proceso, hay una en particular que nunca voy a olvidar. Una noche de rodaje terminamos muy temprano las escenas que estaban marcadas con Ana Brun (Chela) y Nilda González (Pati). Nos sobraban como tres horas de rodaje. Empezamos a evaluar qué se podía adelantar del guion. Pero eran las 2 am y resultaba imposible llamar a las actrices que no estaban en el set. Subimos a la terraza de la casa donde —desde el inicio— queríamos filmar algo, pero no sabíamos qué. Como “agregado” a una escena y sin saber dónde podríamos usarla, filmamos la escena de la subida de escaleras de Chela hasta la terraza, su encuentro con una noche de viento y el abrazo con Pati. Hoy me cuesta demasiado imaginar esta película sin esa escena crucial, que no está en el guion. Por más que la historia esté clara en la mente de un guionista —incluso usando storyboard—, es muy importante dejar ese espacio para que en el momento de rodaje pueda suceder algo asombroso, inesperado, que cuando estábamos metidos en un anotador o en un software de escritura, nunca habríamos podido imaginar. Marcelo Martinessi LAS HEREDERAS | V INTRODUÇÃO (As plantas não estão à venda) Com a desculpa de uma mudança para uma casa menor ou de uma viagem por tempo indefinido, se organizam às vezes o que nós paraguaios (asuncenos — e imagino que também a maioria dos latino-americanos) chamamos “vendas de garagem”. Uma pessoa coloca preços em seus móveis, cristaleira, jogos de mesa, e as expõe (se expõe?), ao mundo exterior. Fui a muitas delas e sempre me chamou atenção o intercâmbio entre dona e cliente, normalmente mulheres. Ali estão em jogo um monte de elementos: classe social, situação econômica atual e, sobretudo, ancestralidade. Muitas vezes nesses intercâmbios existe também uma (velada) decadência econômica que as senhoras se esforçam em dissimular. Talvez por ter tão fortemente gravadas essas impressões, uma das primeiras cenas que escrevi para Las herederas (As herdeiras) foi esse duelo entre Chela e o par de compradoras que invadem a antiga mansão — até então um espaço bastante privado — e manuseiam os pertences herdados como se estivessem em uma feira de bairro. A linha de diálogo que mais gosto de todo o filme, “As plantas não estão à venda, se quer te dou uma”, ouvi em uma dessas vendas de garagem. E é uma síntese perfeita que em dez palavras resumem milhões de vivências em relação à decadência, crise e classe que vi desde menino em Assunção. Ainda que a autoria de um roteiro é, na maioria dos casos, de uma ou duas pessoas, essas ideias, diálogos e imagens que escrevemos saem muitas vezes de lugares tão distintos como uma prisão, uma venda de garagem e passam por um processo cuja natureza é coletiva. Ao percorrer essa distância entre o papel e a tela, esse “manuseio” de atores, técnicos e produtores, ao menos no caso deste roteiro em particular, fez muito bem. Entre esta e a primeira versão de Las herederas não há diferenças substanciais. Acontece algo muito parecido ao que sucede com Chela no filme. Entre um rascunho e o seguinte, há sempre um passo para fora da prisão, para fora da nebulosa na qual se começou a gestar esta história. E existe também, cada vez mais evidente, um desejo de conectar. Partindo de uma narrativa lacrada, começam a se abrirem janelas, a entrar algo de luz, ao menos o suficiente para ver onde estamos, identificar rostos, corpos, escutar palavras por mais que não signifiquem muito. Sabia que estávamos fazendo um filme de prisões, mas era primordial que aquele muito hermético se tornasse um pouco mais compreensível sem deixar de ser da ordem do pudor. Nesse sentido, sinto uma dívida enorme com Gabriel Casaccia, escritor paraguaio cujos romances foram iluminadores, dentro de sua encantadora dose de obscuridade. VI | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 A distância de outras vozes e impressões me ajudou bastante a entender o que estava fazendo. Quero agradecer a todas as pessoas que acompanharam de perto meu processo de escrita, em especial a Andrew John Lucas, Anita Voorham, Marietta von Hausswolff von Baumgarten, além do magnífico grupo de produtores liderados por Sebastián Peña Escobar, a equipe de produção de filmagem, os técnicos e diretores de equipes (em especial Carlo Spatuzza, Luis Arteaga, Rafa Álvarez, Fernando Epstein w Fernando Henna) e às atrizes (e atores) cujo ímpeto e talento ficaram fortemente impregnados no filme. Das milhões de coisas que aprendi e que moldaram esse processo, há uma em particular que nunca vou esquecer. Uma noite de filmagem terminamos bem cedo as cenas que estavam marcadas com Ana Brun (Chela) e Nilda González (Pati). Nos sobraram umas três horas de filmagem. Começamos a avaliar o que se podia adiantar do roteiro. Mas eram duas da manhã e era impossível chamar as atrizes que não estavam no set. Subimos no terraço da casa onde — desde o início — queríamos filmar algo, mas não sabíamos o quê. Como “anexado” a uma cena e sem saber onde poderíamos usá-la, filmamos a cena da subida das escadas de Chela até o terraço, seu encontro com uma noite de vento e o abraço com Pati. Hoje me parece impossível imaginar este filme sem esta cena crucial, que não está no roteiro. Por mais que a história esteja clara na mente do roteirista — inclusive usando um storyboard —, é de suma importância deixar esse espaço para que no momento da filmagem possa acontecer algo surpreendente, inesperado, que quando estamos metidos em anotações padronizadas ou em um software de escrita, nunca poderíamos imaginar. Marcelo Martinessi LAS HEREDERAS | VII Dirección / Direção Marcelo Martinessi Producción / Produção Sebastián Peña Escobar, Marcelo Martinessi, Christoph Friedel, Claudia Steffen, Agustina Chiarino, Fernando Epstein, Júlia Murat, Hilde Berg, Xavier Rocher, Marina Perales Marhuenda Guion / Roteiro Marcelo Martinessi Dirección de fotografía / Direção de fotografia Luis Armando Arteaga Diseño de arte / Direção de arte Carlo Saptuzza Vestuario / Figurino Tania Simbrón LAS HEREDERAS Edición / Montagem Fernando Epstein Sonido / Som Daniel Turini, Fernando Henna, Rafael Álvarez, Ariel Henrique Compañía de producción / Empresa produtora La Babosa Cine, Pandora Film Produktion, Esquina Produções Artísticas, Mutante Cine, Norsk Filmproduksjon, La Fábrica Nocturna Ana Brun - Chela Margarita Irún - Chiquita Ana Ivanova - Angy El guion aquí publicado es el guion de rodaje. O roteiro aqui publicado é o de filmagem. Paraguay, Alemania, Brasil, Uruguay, Noruega, Francia | 95 min | 2018 VIII | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 LAS HEREDERAS | 1 1 INT. SALÓN - MAÑANA TEMPRANO 1 (CONT.) Sí. ¿Cloner de 2 miligramos tenés? Dos cajas. ¿A cuánto está cada caja? (...) Bueno. ¿Y Melatonina de 5, mandame dos frasquitos. ¿A cuánto está? (...) Sí, efectivo. (hace una pausa) Esperá. De Melatonina... mandame un frasquito nomás. ¡Gracias! DOS MUCHACHOS (22,25) destornillan una mesa que estaba embutida en la pared. Queda una marca en la pintura blanca. Mueven la mesa, mediana -pero pesada- desde el interior de la casa hacia la calle. Les ayuda un SEÑOR (50). Hablan entre ellos en guaraní dando indicaciones para poder pasar la mesa entre los muebles, objetos y aberturas de la casa. CHIQUITA (64) les acompaña. Lleva el cabello corto. Viste de entrecasa. ¡Cuidado! CHIQUITA Chiquita cuelga el teléfono. Enciende un cigarrillo. Se la nota preocupada. Se le nota atenta a que los muchachos no estropeen los demás muebles ni ensucien la pared. 3 CHIQUITA ¡Cuidado ahí! CHIQUITA Y esa lámpara también. Despacito... El Señor levanta la lámpara de cristal y la lleva hacia fuera. Se escucha el sonido de los cristales colgantes alejándose. Se escucha también un motor diesel, como de un camión que espera en la calle. Los muchachos salen y Chiquita cierra la puerta. CHIQUITA Encontré tu camisa celeste. Ya está acá, planchada. CHELA (OFF) ¡Chiquita! La luz mañanera invade el dormitorio, entonces Chela, molesta, se tapa con las sábanas y gira para cubrirse de la luz solar. Chiquita llavea la puerta y lleva consigo las llaves. La sala está finamente decorada, con varios muebles antiguos, lámparas, cuadros, cristalería delicada y objetos de mármol, varios de ellos con etiquetas y precios. Hay un reloj de pie que no funciona en una de las esquinas. CHELA No quiero salir. Chiquita deja de silbar. Mueve las ropas que estaban sobre una silla y las ordena dentro de uno de los cajones del estante. CHELA (OFF) ¡Chiquita! INT. COCINA - MAÑANA TEMPRANO Chiquita ordena las pastillas y vasos que están sobre la mesa de la cocina, en una bandeja donde hay una taza de café, un vaso de agua con gas, un vaso de gaseosa diet, un rosario, una libreta, bolígrafos, un pastillero y una botella de licor. Con el teléfono inalámbrico hace una llamada. CHIQUITA (AL TELÉFONO) (su voz se escucha en un segundo plano) Hola (...) ¿Puedo pedir un delivery? (...) Acá para la calle Cabo Martínez 975, al costado de las Fuerzas Armadas (MÁS) 2 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 3 A través de las persianas semiabiertas se filtra un poco de luz del sol. Pero el dormitorio aún está en penumbras. El viento hace volar suavemente las cortinas. En la pared está colgada una pintura de una mujer campesina paraguaya. CHELA (63) está acostada en la cama de dos plazas. Es una mujer robusta, con el pelo corto. Lleva puesto un cómodo camisón. Chiquita, silbando tranquilamente, entra al dormitorio y coloca la bandeja junto a la mesa de noche de Chela. Abre las cortinas y luego las persianas. Chiquita señala una lámpara que está en el piso. 2 INT. DORMITORIO - MAÑANA 2 CHELA ¿Vos te vas a ir igual? Chiquita se recuesta al otro lado de la cama. Su mesa de noche tiene una linterna, los controles de la TV y algunos viejos retratos de familia. CHIQUITA Hace más de un mes que Carmela nos invitó. ¿Como no nos vamos a ir? Chiquita agarra el control remoto y enciende el televisor grande ubicado al pie de la cama. Empieza a cambiar de canales hasta que se detiene en un programa mañanero. Chela se incorpora. LAS HEREDERAS | 3 fotografía de luis armando arteaga Int. Dormitorio - Chela y Chiquita CHELA (sin mirar a Chiquita) ¿Por qué no me contaste que se vendió la lámpara también? ¿Sí o no? CHIQUITA Ahora no. Hay que hacerle un mantenimiento. Chela molesta, agarra su bandeja y camina hacia el baño. (Chiquita puede decir texto de escena 4) 4 INT. BAÑO - MAÑANA 4 CHIQUITA (OFF) Pero si ya se vendió la mesa, que era del mismo juego... ¿Qué querés, que la lámpara se quede allí? ¿En el piso? INT. DORMITORIO Y POV SALÓN - MAÑANA Es media mañana y los sonidos del tráfico se escuchan con mayor claridad. Chela se acerca despaciosamente a la rendija de la puerta, para espiar y poder escuchar mejor lo que sucede en la sala. Allí, Chiquita está mostrando muebles y objetos a una CLIENTE MUJER (82). CHIQUITA Ese perchero va con este espejo que está acá. La cliente se acerca al espejo y lo toca con las manos. CLIENTE MUJER ¿De bronce? CHIQUITA Sí, madera y bronce. Chela consigue ver mejor parte del rostro de la cliente, reflejado en el espejo. Es una mujer rubia, está muy maquillada. CLIENTE MUJER (OFF) ¿Y aquel reloj funciona? CHIQUITA (dubitativa) Sí... Bueno... no... La cliente mujer la mira, molesta. 6 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 Chela observa a la cliente que camina hacia el reloj de pie que está al lado opuesto de la puerta del dormitorio. Chiquita la sigue. CHIQUITA Hasta hace unos años nomás funcionaba. Perfectamente. Chela se mira al espejo. Está despeinada. Se arregla el pelo. Abre la canilla y se enjuaga la boca. Chiquita le habla desde el dormitorio. 5 CLIENTE MUJER 5 La cliente y Chiquita se mueven hacia el otro lado de la sala. Sus voces se vuelven ahora más lejanas e incomprensibles. La mirada de Chela se pierde en una mesa del salón, donde hay un par de portarretratos dorados. En el primero, se ve a Chela joven, muy bien maquillada, con un peinado de los años 70. En el otro portarretratos, se ve a Chiquita, también joven y de pelo largo. Lleva puesto un collar extravagante. Chela vuelve a escuchar las voces más de cerca. CLIENTE MUJER ¿Tienen más sillas como esta? CHIQUITA No, esa sola. Es Luis quince... (duda) o dieciséis... Y esas copas que están al lado son de cristal de murano. Están las doce, intactas. Y puedo hacerte descuento. Chela nota que la cliente se sigue moviendo por la sala. CLIENTE MUJER No, las copas no. El reloj quiero llevar... Si me hacés un buen precio... Chela nota que Chiquita se toma un instante para pensar y que mira hacia el dormitorio, consciente de que Chela le está espiando. Sus miradas se encuentran, pero de inmediato Chiquita se mueve de donde estaba parada y se acerca a la cliente. CHIQUITA (OFF) (en voz más baja) ¿Hasta cuánto podrías pagar? Chela, molesta, se dirige de nuevo hacia la cama. (Definir si Chela puede moverse entre ambas puertas, la del dormitorio y la de la sala del teléfono). LAS HEREDERAS | 7 6 INT. DORMITORIO - MAÑANA 6 Chela no le responde. Chela está metida en la cama y tapada. La percha sigue colgada en la ventana, con la camisa celeste. La ducha del baño contiguo se apaga. Chiquita sale del baño envuelta en una toalla. CHIQUITA Vamos na, Chela. ¿Hace cuánto que no salís? (tras una pausa) Va a haber karaoke. Van a estar Marta y Silvita que ya volvieron de su viaje. Por ahí se va la Gordi también. Chela toma una pastilla del pastillero que está en su bandeja y la traga con un sorbo de agua. Chiquita se acerca a donde está la camisa celeste. CHIQUITA Si no te ponés vos, me voy a poner yo. Chiquita camina hasta el tocador y enciende el secador. CHIQUITA Cumple 50 la Carmela, tanto quiere que nos vayamos. ¿Te acordás la fiesta que hicimos cuando vos cumpliste 50? Ella ayudó toda la tarde con la decoración y la comida. Se quedó con nosotras hasta... CHELA (interrumpiendo) La fiesta esa fue cuando cumplí 40. CHIQUITA (OFF) (intentando recordar) ¿40? No. ¿Y qué entonces hicimos por tus 50? Chiquita gira y nota que Chela está mirando la camisa. CHIQUITA ¿Por qué no te probás? Chela hace un gesto de negación con la cabeza. Chiquita se sienta en la cama y se seca el cuerpo con la toalla. CHIQUITA (recordando de a poco) Ah... El viaje al Caribe, ¿verdad? Cuando cumpliste 50... Con la Gordi y con Anita... ¿Qué se habrá hecho de ella? Tenía miedo del avión, y cada vez que venía la azafata tomábamos todo lo que había, para tranquilizarnos. ¿Te acordás? 8 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 CHIQUITA (muy segura) Está bien, me voy yo... sola nomás. Chela sigue en la cama, sumamente frustrada. 7 INT. PATIO DE CUMPLEAÑOS - NOCHE 7 DIANA (70) está cantando el tema Mis noches sin ti en el karaoke, en medio del bullicio de la fiesta de cumpleaños. Chela está sentada observando lo que acontece a su alrededor. Está impecablemente vestida, con la camisa celeste que le deja un aspecto muy formal en comparación al resto. Es evidente que es la única allí que no está disfrutando de la velada. A su lado, Chiquita toma, fuma y conversa con DOS CHICAS (37/39) con las que comparten mesa. Chiquita pasa un cigarrillo a una de ellas. Chela nota que, a pocos metros de su mesa, JUANA (28), una de las chicas invitadas, se mete un pedazo de pan baguette en el pantalón para simular un órgano genital masculino. Luego, Juana se acerca a algunas chicas, con ánimos de bromear y hacerle “sentir” su protuberancia. El patio es grande, pero la fiesta acontece solo en un espacio que está decorado con globos y guirnaldas. El resto del patio está oscuro. Hay unas 5 mesas frente a una pantalla grande. Hay juego de luces. La fiesta parece entretenida, con bebidas, comidas y cigarrillos. CARMELA (50) se acerca a Chiquita que la felicita con besos y con un abrazo. Se ríen mucho. Luego Carmela llega hasta Chela y se agacha para darle un abrazo. CARMELA ¡Ey! ¡Qué gusto que viniste! Carmela levanta a Chela de su asiento, la mira de arriba abajo, como ponderando su elegancia. CARMELA ¿Vos no vas a cantar? Chela hace un gesto de negación con la cabeza. CHELA (sonriendo) Nooo. Chela vuelve a sentarse. Carmela sigue saludando a las demás personas de la mesa. Chela se da cuenta que Chiquita está sumamente entusiasmada con las demás invitadas, tomando unas copas demás. Pero ella se siente incómoda, fuera de lugar. (Probar que algunas de las chicas más entusiastas estén tomando y reventando globos, hacia el fondo). LAS HEREDERAS | 9 8 INT. AUTO EN LA CALLE - NOCHE 8 Chela va sentada en el asiento del acompañante, molesta, ni siquiera mira hacia el lado de Chiquita, que conduce el auto. Van en el Mercedes-Benz. Hay un anuncio en la parte posterior que dice: “SE VENDE”. Algunos de los pocos autos con que se cruzan a esa hora de la madrugada son más nuevos, incluso del año (2017). El interior del auto está limpio, pero en el volante y el tapizado de cuero levemente descosido se intuye el desgaste del tiempo. Hay un rosario colgado en el espejo retrovisor. Chela acelera un poco más. Mira de reojo a Chiquita un par de veces. CHELA (seria) Nora y la otra, esa que estaba al lado suyo. Esa que tenía la camisa... CHIQUITA (interrumpiendo) ¿La que parece un mita’í? (muchachito) CHIQUITA (un poco mareada) No sé por qué te ponés así. Yo no le dije nada a nadie. CHELA Esa. Estoy segura que hablaban de nosotras. Nora me miraba con lástima. Chela mira de reojo a Chiquita, desconfiada. Nota que Chiquita está muy cansada y semidormida. CHELA (alterada) ¡Pará! CHIQUITA Te habrá parecido nomás. CHELA ¿Ella no sabe nada? Chiquita disminuye la marcha. CHELA (levantando la voz) ¡Chiqui, pará! CHIQUITA La única que sabe es Carmela, porque me está ayudando. Ese juego de copas vendió ella. Y la máquina de cortar pasto también. (restándole importancia) No tenés que hacerle mucho caso a Nora, seguro que estaba borracha. Chiquita no se altera. Sigue manejando unos metros más, hasta donde hay un poste eléctrico, en una parte más iluminada de la calle. Allí detiene el auto, frente a una muralla con afiches y grafitis. CHELA (molesta) No podés manejar así. Chela se detiene en una esquina. Chiquita mira hacia ambos lados y nota que no hay tráfico. CHIQUITA Pasá, Chela. (suavemente) ¿No ves que no hay nadie? Chiquita se queda quieta en el volante, sin hacer mucho caso a lo que Chela acaba de decir. 9 INT. AUTO EN LA CALLE - NOCHE Chela consigue arrancar el auto tras dos intentos. Lo mueve con cierta dificultad. Frena de golpe y el motor se para. Arranca y vuelve a poner el auto en movimiento. Ahora Chiquita ocupa el asiento del acompañante. CHIQUITA Voy a manejar yo nomás... bien estoy. Chela no le responde. Maneja despacio. Chiquita enciende un cigarrillo y apenas abre su ventanilla, lo suficiente como para que salga el humo. La ventanilla se abre lentamente, haciendo un chillido agudo, molestoso. 10 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 CHIQUITA ¡Acelerá! ¿De qué lo que tenés miedo? 9 Chela mira hacia los costados. No vienen autos de ningún lado. En la esquina se ve un kiosco abierto con un par de focos encendidos, pero no se ve gente. Recién entonces Chela avanza. Chiquita controla el modo de manejar de Chela. CHIQUITA Hacia este lado ponete. CHELA (tímidamente) Carmela... seguro que ella contó algo... Chiquita la mira de reojo. LAS HEREDERAS | 11 Int. Dormitorio - Chiquita fotografía de luis armando arteaga (El kiosco puede tener un música tropical y luces de colores. Prever los diversos sonidos del auto: motor, ventanilla, rosario. Los autos con los cuales se cruzan también pueden ir escuchando radio, e ir mucho más rápido que el Mercedes). 10 INT. DORMITORIO - NOCHE CHELA ¿Alguien sabe que te vas a ir? Chiquita camina hacia el baño, quitándose la camisa. CHIQUITA (OFF) Ey... ¡No seas tan dramática! (imitándola) ¿Alguien sabe que te vas a ir? 10 Chela sale del baño, ya tiene puesta su ropa de cama y está lista para acostarse. Ve a Chiquita entrar al dormitorio, danzando al son del tema musical que se escucha de fondo. CHELA (frustrada) Usaste otra vez mi cepillo de dientes... Chela se quita el aparato del oído y lo coloca sobre su mesa de noche. ¿Yo? CHIQUITA Chiquita se sienta en la cama para quitarse los zapatos y sigue moviéndose al ritmo de la música. CHIQUITA ¿Viste que Mirta estaba otra vez con la chica esa argentina? (irónica, busca a Chela con la mirada) Me pareció que vos le mirabas mucho. ¿O es solo mi impresión? Chela se pone seria. CHELA Mirta también sabe. Yo escuché que vos hablabas con ella del precio del auto. CHIQUITA ¡Ay! Pero a Mirta le dije que íbamos a cambiar de auto nomás... (tras una pausa) Che, tranquilizate ya. Chiquita, un poco mareada, se acerca y abraza a Chela. Trata de bailar con ella. Pero Chela no se mueve. CHELA Chiqui, ¡qué olor a cigarrillo tiene tu camisa! Chela se separa de Chiquita y se sienta en la cama. 14 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 Chela se mete a la cama. (Prever qué música escucharían). 11 INT. COCINA - MAÑANA 11 Chiquita -vestida de entrecasa- está indicando a PATI (38) la preparación de la bandeja de Chela. Pati observa con atención. Es una mujer morena y robusta. Tiene atada en una de sus muñecas una pulserita de cordones con los colores del popular club Cerro Porteño (azul y rojo). La bandeja grande de plata está puesta sobre el mantel a cuadros de la mesa. Encima de la bandeja hay una taza de café humeante y dos posavasos. Sobre ellos, Chiquita coloca con cuidado dos vasos: uno pequeño con hielo y otro vacío. Abre una botella pequeña de gaseosa light y la sirve en el vaso con hielo. CHIQUITA (explicando pacientemente mientras sirve) Acá ponés su gaseosa dietética, con mucho hielo, en el otro vaso agua con gas, sin hielo. CHELA (OFF) (en voz alta) ¡Chiquita!... La voz de Chela llega desde el estudio. Chiquita la ignora. Sirve soda de una garrafa en el vaso vacío. CHIQUITA Esta siempre dejá en la heladera, que esté fría. A medida que se mueve de un lugar a otro de la cocina, se escuchan las chancletas que Chiquita arrastra al caminar. Suena su celular que está sobre la mesa. Ella lo mete en el bolsillo, sin atender. CHIQUITA La gaseosa siempre tiene que ser de botella chica, para que no pierda el gas. Y comprale diet, no vayas a comprarle zero. LAS HEREDERAS | 15 Chiquita acerca un botellón grande y pesado y lo ubica en una esquina de la bandeja. La pesadez provoca un sacudimiento de todo lo demás. VOZ DEL PERIODISTA (RADIO) ... Se presume que la joven empresaria secuestrada estaría en manos del autodenominado EPP, Ejército del Pueblo Paraguayo, una banda criminal organizada que tiene vínculos con ciertos partidos políticos y grupos campesinos... CHIQUITA Este licor dejá nomás que ella se sirva cuando quiera. Pero ponele siempre acá la botella. Chiquita entra. Chiquita agarra una cajita y un estuche de cuero. Los coloca a un costado de la bandeja. CHIQUITA ¿Se sabe algo de esa chica? CHIQUITA Y su estuche de los anteojos, no te confundas con el mío que es más oscuro. Chela hace un gesto de negación con la cabeza y baja el volumen de la radio. CHELA ¿A qué hora volvimos del cumpleaños? Coloca a un lado unas 10 lapiceras de distintos colores atadas con una goma trasparente. Camina hasta una alacena. CHELA Habrá sido a las 12 más o menos. 12 y media. CHIQUITA Y después de acá quitás sus pastillas. Hoy es lunes. ¿Vos sabes leer? Chela escribe y luego hojea su diario. Pati permanece en silencio. Chiquita le muestra un pastillero largo transparente con los días de la semana marcados en letras grandes de lunes a domingo. CHELA (como para sí) El jueves pasado no (leyendo) Vino la señora esa, que compró el juego Eso es lo único que CHIQUITA No importa, estas pastillas hay para cada día. (le indica los días con el dedo) Te vas a guiar así, de acá hacia acá: lunes, martes, miércoles... hasta domingo. Chiquita destapa el compartimiento del día “lunes” y lo vuelca. Unas ocho pastillas, algunas iguales, otras diferentes, caen sobre su mano. Coloca las pastillas en un pastillero redondo, dorado, que pone luego sobre la bandeja. Chela sigue revisando su diario. Pati entra con la bandeja, sintiendo un inestable temblor en los vasos, la taza y el botellón. Chela cierra su diario. Se acerca al lienzo donde está pintando una manzana. Cada cosa está dispuesta en su lugar. Chiquita coloca un rosario sobre la bandeja. INT. ESTUDIO - MAÑANA Chela -vestida de entrecasa- está sentada escribiendo en su diario. La radio está encendida con las noticias. 16 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 nueva rica, la de tazas inglés. escribí. CHIQUITA (pensando) ¿El jueves no fue que yo hice strogonoff? (tras una pausa) ¿Y ya pusiste que vimos la novela esa nueva? CHELA (OFF) (en voz alta) ¡Chiquita!... 12 escribí nada. 12 La figura de la manzana partida -que remite vagamente a un órgano genital femenino- está inconclusa. Pati coloca la bandeja sobre la mesita ubicada a un costado de Chela, que la ignora por completo. Despaciosamente, Pati sale del estudio. CHELA Tenés que darle un desodorante a esa chica. LAS HEREDERAS | 17 CHIQUITA ¡Shhh! No vayas a ser así, Chela. CARMELA (se ríe) La verdad que a mí no me gustaba tanto la idea del karaoke cuando la Gordi me sugirió. Pero finalmente todas se prendieron. Chiquita sube el volumen de la radio. Chela mueve algunas de las cosas que están sobre su bandeja, como ordenándolas mejor. VOZ DEL PERIODISTA (RADIO)... la víctima está en manos del EPP hace más de 200 días. En la nota entregada a su familia se aclara que el secuestro de la mujer es un mensaje para toda la burguesía, según expresó su esposo. Chela entra despaciosamente y saluda a Carmela con dos besos. Se sienta a la mesa, donde también está sentada Chiquita. En la mesa hay un resto de torta de cumpleaños. Pati entra con la bandeja de Chela y la coloca sobre la mesa. CHIQUITA (a Chela) E’a ¿Vos no era que ibas a pintar hoy? Tooooda la tarde... VOZ DEL ESPOSO DE LA SECUESTRADA (RADIO) Sabemos que le hicieron cavar la primera palada de un pozo, porque supuestamente no llegaban a un acuerdo con nuestra familia, quieren dinero, mucho dinero. Chela hace un gesto de negación con la cabeza. Abre la cajita de su aparato para los oídos y se los coloca. Chiquita parte un pedazo de (un resto de) la torta de cumpleaños que está en la mesa. VOZ DEL PERIODISTA (RADIO) El esposo también contó que los secuestradores juegan psicológicamente con ellos, contándoles que la mujer secuestrada duerme atada a un árbol, con las manos esposadas, y siempre con una venda que le cubre los ojos. CHIQUITA (a Chela) ¿Vos querés un poco? CHELA No, después voy a comer. CARMELA Tenés que probar, con dulce de leche casero. Empieza la cortina musical del noticiero. CHIQUITA Pobre mujer... Tanto tiempo con los ojos vendados... Chela nota que hay un sobre en la mesa. Lo toma y lo mira. Ve que hay dinero dentro. Chiquita sale del estudio. Chela se queda inmóvil, sin poder empezar a pintar. 13 INT. SALÓN - TARDE CHIQUITA Eso, es... Después te explico. 13 Chela -aún con ropa de cama- recorre la sala, todas las ventanas están cerradas, entonces los ambientes están semioscuros. CHELA ¿Qué cosa? Se escuchan bocinas y ruido de tráfico de ciudad, a lo lejos. CHIQUITA (terminante) Ay... Es de las chicas... y punto. Chela escucha risas y una conversación. Va hacia la cocina. 14 Chiquita toma el sobre y lo coloca a un costado. Chela la mira, sin saber lo que acontece. INT. COCINA - TARDE Hay una animada conversación en la cocina. CHIQUITA ... y Mirta, que cree que canta bien pero es un desastre. 18 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 14 No, no. CHELA CARMELA Es una pequeña forma de... Carmela se queda un poco cortada sin saber qué decir. LAS HEREDERAS | 19 CHELA (interrumpiendo, en voz alta) De ninguna manera. CHIQUITA ¡Shhhh! (hace una señal para que baje la voz) ¡Pero esperá que Carmela te explique bien, che! Hay una pausa incómoda. CARMELA Entre poquitas juntamos, las más amigas... Y no es mucho, cada una según su posibilidad... Chela se queda mirando a Chiquita. Ni escucha lo que Carmela está diciendo. CHELA (en voz alta) ¿Ahora vamos a vivir de caridad? CHIQUITA ¡Dejale que termine de hablar! CARMELA Ustedes nos ayudaron tanto, siempre. A la Gordi, no se olviden todo lo que le dieron para su hija. Y a Nora, que le ayudaron cuando le entraron a robar. A Julia, también, cuando estuvo sin trabajo. CHELA (mira a Chiquita, sorprendida) ¿A Julia? Chiquita ofrece el pedazo de torta a Pati. Ella y Carmela hablan a la vez. CHIQUITA (a Pati) Tomá mi hija, del cumpleaños de ella es. ¿Querés probar? CARMELA (a Chela) Y todo lo que hicieron por mí cuando mamá se enfermó. Pati agarra el pedazo de torta. 20 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 CHIQUITA (señala la parte posterior de la casa) Andá nomás mi hija hacia allá. CHELA (a Chiquita, terminante) No. ¿Y para qué entonces?... Pati agarra el pedazo de torta y va hacia el fondo de la casa. CHELA (alterada) ¿Para qué vendimos las pinturas que eran de mi abuela? Su juego de platería, mis lámparas. Todo se vendió. Hasta el auto que me regaló papá está a la venta. (pasando el sobre a Carmela) No. Gracias. Vamos a arreglarnos solas. Chiquita respira profundo. Mira a Chela de reojo. CHELA (a Chiquita) ¿Por qué me mirás así? Decime qué cosas... una cosa de tu familia que hayamos vendido. Chiquita se levanta y coloca el resto de torta en la heladera. La puerta de la heladera cubre su cuerpo. CHIQUITA (a Carmela) ¿Querés agua o gaseosa? Carmela le acerca su vaso. CARMELA (en voz baja) Agua. Chiquita se acerca a servir agua a Carmela. CHIQUITA (a Chela) ¿Más agua? CHELA (retirando su vaso) ¡Déjame en paz! (en voz alta) ¡Mentirosa! LAS HEREDERAS | 21 Rodaje fotografía de martín crespo Chiquita cierra la heladera y sale de la cocina. Chela se queda mirando hacia la puerta por donde Chiquita acaba de salir. Chela se queda mirándola sin decir nada. Ve que el sobre que había traído Carmela está sobre la mesa. Chiquita se incorpora y se sienta en el sofá. Enciende un cigarrillo. CHELA (como para sí) Si yo tuviese 20 años menos le dejaría, hoy mismo. CHIQUITA Ese cuadro que estaba en la entrada, el de los barcos, era de la casa de “mi” abuela. (En la cocina se está fritando algo o Pati puede estar haciendo un jugo, con algún aparato que haga ruido). 15 INT. DORMITORIO - NOCHE 15 Chela está acostada en la cama. La TV está encendida. Escucha que afuera Chiquita habla con Pati. CHELA No vayas a dormir ahí. CHIQUITA(OFF) Cerrá siempre bien esta puerta con llave y con la tranca. ¿Entendés? Chela deja abierta la puerta del dormitorio. 17 INT. BAÑO - NOCHE PATI (OFF) Sí, señorita. CHIQUITA ¿Ya tomaste tus pastillas? CHIQUITA (OFF) Este es para vos, para ponerte bajo el brazo. (se escucha el spray) Así. Ponete ahora, y después siempre a la mañana, siempre después de bañarte. Vos te bañás a la mañana ¿Verdad? Chela mueve de lugar las cosas que están en su bandeja. CHELA Mi melatonina... no encuentro. Chiquita enciende la luz del baño. Revuelve la bandeja hasta encontrar la pastilla y dársela a Chela. Luego se pone frente al espejo. Agarra un hilo dental y se lo pasa entre los dientes. Chela se levanta de la cama y cierra el dormitorio de un portazo. CHELA Yo nunca confié en esa abogada... (Chiquita, al encontrar el desodorante, puede agitarlo y probar el spray antes de salir). Chela abre la puerta de su dormitorio y camina por la sala, a oscuras. Observa a Chiquita que está dormitando de espaldas y ronca, en el sofá grande. Se acerca lentamente, se queda de pie mirándola. CHELA (suavemente) Chiqui. (le toca los pies) No vayas a dormir acá. Chiquita se despierta, se despereza y apenas abre los ojos. Se escuchan sonidos de alguna celebración, a lo lejos. 24 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 17 Chela está sentada sobre el WC, con las luces apagadas. La luz del pasillo ilumina parte del baño. Chiquita cruza el dormitorio sin mirar a Chela, se acerca a buscar algo al lado del tocador. Luego sale con algo en la mano. 16 INT. SALÓN - NOCHE Chiquita mueve los almohadones como para colocarse mejor en el sofá y vuelve a acostarse. Se queda quieta mirando hacia el techo. Chela se dirige de nuevo, despaciosamente, hacia el dormitorio. 16 CHIQUITA No empieces otra vez... Hay una breve pausa en que las dos se miran de reojo pero sin decirse nada. CHIQUITA Carmela me contó que a su prima le hicieron la misma cosa. Tenía una deuda nomás. Ella desesperada firmó documentos, así como los que me hicieron firmar a mí. (hace una pausa) Le acusaron de estafa también. Y ¡Búm! ¡Adentro! LAS HEREDERAS | 25 CHELA ¿Cuánto tiempo estuvo? CHELA ¿Por qué no trajiste el bolso de cuero marrón? Este bolso está todo manchado, con tinta. Chiquita se encoge de hombros, sin saber que responder. CHELA Vení un poco... Paran en un semáforo. Una ADOLESCENTE LIMPIAVIDRIOS (14) se acerca para limpiarles el parabrisas. Ambas tratan de evitarlo. Aun así, la adolescente tira violentamente agua enjabonada sobre el parabrisas y empieza a limpiarlo. Chiquita abre apenas la parte de arriba de la ventanilla para pasar la moneda. Y luego la cierra de inmediato. Chiquita se acerca. Chela, sin levantarse, trata de tocarle la cabeza, colocándola hacia la luz. Chiquita se agacha. CHELA ¿Por qué no te teñís antes de irte? CHIQUITA Decile a Pati que mantenga limpia la vereda. Y que le llame a don Ángel. Él tiene que venir en algún momento a colocar esas rejas en la puerta. Chiquita hace un gesto de negación con la cabeza. Vuelve al espejo, como para terminar de lavarse la boca. CHIQUITA Ya le avisé al coreano que esta chica va a retirar las cosas y anotar en la libreta. Todo, menos carne, que eso ella va a traer del carnicero y hay que pagar, tiene que llevar plata acá, del cajoncito... CHELA ¿Por qué no insistís con Ñeca? Esta chica no sabe ni lavar bien los platos... CHIQUITA Ya te dije que Ñeca consiguió otro trabajo y gana bien. No va a volver con nosotras. Enseñale a esta, y va a aprender. Chiquita deja de hablar cuando nota que Chela está como ausente. Chela levanta la mirada. CHELA ¿Y yo qué voy a hacer? CHELA Mejor voy a decirle que se vaya... Se nota que Chiquita también está muy preocupada. 18 INT. AUTO EN LA CALLE - MAÑANA Chiquita maneja y Chela está a su lado. Van por una avenida. La radio está encendida en las noticias y ninguna de las dos dice nada. Tras un rato, Chiquita rompe el silencio. CHIQUITA (quitando una llave de su cartera) La chica tiene todas las llaves, menos esta, que es la del cajoncito. Chela agarra la llave, indiferente. CHIQUITA No tengas vergüenza de hablar con Carmela... si necesitás... Chela hace un gesto negativo con la cabeza. Chiquita coloca su cartera atrás, Chela observa los dos bolsones que están en el asiento trasero. 26 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 El semáforo se pone verde y continúan andando. 18 CHIQUITA (molesta) ¿Y te vas a quedar en casa vos? ¿Sola? (tras una pausa, contundente) Entonces vas a tener que mudarte, irte a vivir con tu prima. Chela hace un gesto negativo con la cabeza. CHELA Ni loca. Después de todo lo que dijo de nosotras... CHIQUITA ¿Qué dijo? Chela no responde. LAS HEREDERAS | 27 19 INT. SALÓN DE ENTRADA DE LA CÁRCEL - MAÑANA 19 Chela escucha flashes fotográficos y conversaciones que no puede entender. Tras un instante la Guardia sale y se dirige a Chela. La entrada de la cárcel tiene una puerta de vidrio que da con un salón amplio iluminado por fluorescentes. Allí hay varias banquetas pegadas a la pared. Todas están vacías. El salón tiene varias puertas y ventanas cerradas. Se escucha un bullicio y música (tropical) que vienen de dentro. Chiquita camina adelante cargando los dos bolsones y lleva la carpeta judicial bajo el brazo. Chela carga con un termo. En el hall de entrada hay una puerta grande, entreabierta y custodiada por una GUARDIA (38). Es la oficina de entrada. Otras TRES MUJERES de origen muy humilde están aguardando en el hall. Una de ellas es muy anciana y está vestida de negro. Otra carga un BEBÉ. Junto a la puerta hay una imagen de la virgen de Caacupé con flores de plástico y una vela apagada. La Guardia se acerca y Chiquita le pasa los papeles de la carpeta que lleva en la mano. La mujer inspecciona los papeles detenidamente. GUARDIA (poco amable) Bueno, hasta acá ya está bien. Para la visita es miércoles y fin de semana solamente. Chela se queda quieta, sin saber qué hacer. Chiquita sale de la oficina de entrada, ya sin sus bolsones. Chela le pasa el termo. Chiquita lo agarra y le da dos besos. CHIQUITA (pasándole las llaves del auto) El sábado, el sábado nos vemos. Chela agarra las llaves y asiente con la cabeza. La Guardia vuelve a entrar a la oficina de guardia. GUARDIA (mirando a Chela) Nuñez Campos. Soy yo. CHIQUITA Manejá con cuidado. CHIQUITA Chela asiente con la cabeza. Se acerca de nuevo a Chiquita, le da un abrazo cariñoso. GUARDIA ¿Y ésta? ¿Es tu abogada? CHELA (apenas abriendo la boca) Chau. La Guardia habla con tono prepotente. La Guardia sale de la oficina con los bolsos de Chiquita, se los pasa y la conduce por el pasillo hacia el interior de la cárcel. Chela se da cuenta que las mujeres de la fila están todas pendientes de ella. Se dirige a la salida, apresurada. CHIQUITA No, mi abogada está llegando enseguida. Ella vino a acompañarme, ahora nomás. (Chela puede girar antes de salir. Probar que la mujer que está con el bebé tenga un juguete sonoro en el brazo para entretenerlo. Los zapatos que lleve la mujer policía pueden hacer un sonido sólido, fuerte). La Guardia abre la puerta de la oficina de entrada e indica a Chiquita que pase, la agarra del hombro para dirigirla. Acá. GUARDIA Chela se queda esperando fuera. Observa a través de la puerta entreabierta cuando la MUJER POLICÍA 1 (45) se pone a revisar a Chiquita tocándole todo el cuerpo. Nota que Chiquita está con miedo. La Guardia permanece en la puerta de entrada. 20 28 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 20 Chela está inmóvil dentro del auto, estacionado frente a la cárcel. Alrededor suyo hay un grupo de niños jugando fútbol en una canchita que está pegada al edificio carcelario. VOZ DE INSPECTORA (OFF) ¿Expediente? GUARDIA Termina 085. Banco de Asunción contra Martina María Nuñez Campos. (tras una pausa) Estafa. INT. AUTO FRENTE A LA CÁRCEL - MAÑANA Chela busca el lugar de arranque, duda al mover el cambio y enderezar el volante. Se queda con la mano agarrando la llave. Finalmente arranca el auto y empieza a manejar. 21 INT. AUTO EN LA CALLE - MAÑANA 21 Chela maneja el auto, insegura. En la radio pasan música clásica. LAS HEREDERAS | 29 Rodaje - Cárcel fotografía de martín crespo 22 INT. DORMITORIO - NOCHE 22 LILIA (tocando el comedor) Sí, pero... este está mucho mejor... Hay un fuerte viento que se siente aun dentro de la casa. El dormitorio está oscuro. Las ventanas y las cortinas están cerradas. Chela está mitad dormida, mitad despierta. Se mueve en la cama hacia la mesa de noche de Chiquita para encender un velador. 23 INT. SALÓN - NOCHE Chela nota que las clientes están mirando también otros objetos y cuadros de la sala. No logra entender todo lo que dicen. Por momentos consigue verlas mejor. Son dos señoras muy bien puestas. Beba mira una pintura y agarra la etiqueta. 23 BEBA Esta pintura está a... Chela -en camisón- camina por la sala, a oscuras. Va hasta la puerta del frente y controla que esté llaveada. Sigue caminando, como buscando a Chiquita. Enciende otro velador en la sala, da vueltas sin saber que hacer 24 INT. COCINA - NOCHE Beba se está poniendo sus lentes de vista pero Lilia se le adelanta. LILIA 2 y medio. 24 BEBA (toca el marco) Mirá. Le voy a decir a mi hija. Encima, este tipo de marcos no se consiguen más... Chela nota que en el escurridor hay algunos platos y vasos que no están bien limpios. Entonces vuelve a lavarlos, poniendo toda su energía al hacerlo. 25 INT. COCINA - MAÑANA 25 Lilia camina hacia el dormitorio, entonces Chela se esconde tras la puerta, para no ser vista. Pati está preparando la bandeja. Se equivoca al poner agua en el vaso con hielo. Mete la mano en el vaso, quita el hielo y lo coloca en otro vaso, con gaseosa. Pone el botellón pesado sobre la bandeja, pone el agua con gas y el rosario. Quita las pastillas del día viernes y las coloca en el pastillero. LILIA(OFF) (señalando la TV) ¿Esta tele es a control? PATI (OFF) No... (dubitativa) La tele esa... no se vende. Se nota cierta confusión en sus manos. Coloca el café en la taza. Finalmente termina de colocar las cosas en la bandeja, según como se acuerda, y la levanta para llevársela a Chela. 26 INT. DORMITORIO Y POV SALÓN - MAÑANA Cuando Chela siente que Lilia se aleja, vuelve a su posición anterior, para seguir espiando. Pero nota que Pati se acerca y cierra la puerta, para evitar que las clientes husmeen dentro. Entonces, Chela camina por el pasillo interno hasta la sala de teléfono. 26 Chela, está tomando café. Lleva puesto un vestido largo. A través de la rendija de la puerta del dormitorio observa cuando Pati atiende a dos clientes, BEBA (60) y LILIA (65). LILIA (mirando el reloj) ¿Este está a la venta? PATI No, ese ya se vendió. Las clientes rodean el comedor de caoba que ocupa un espacio central. BEBA Mirá, Lilia, este es parecido al de la casa de Susi. 32 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 27 INT. SALA DE TELÉFONO Y POV SALÓN - MAÑANA 27 Desde la Sala de teléfono, Chela sigue espiando todo lo que sucede. BEBA ¿El comedor será de qué año? LILIA Mirá que hay imitadores, Beba. Yo no sé si este es tan antiguo como parece. LAS HEREDERAS | 33 BEBA (OFF) ¿El lustre es original? BEBA Pagando en efectivo... Chela se pone impaciente. Lilia se acerca a unas copas que están sobre una mesa de apoyo. Chela se queda un instante sin saber qué decir. PATI Copa de cristal ese es... No. Beba, que permanecía expectante, se mueve y sigue mirando los muebles. Lilia, que está cerca de la ventana, observa el patio. Lilia golpea la copa con el dedo. La copa suena a cristal. LILIA Mirá... ¡De cristal! LILIA ¿Y estas orquídeas se venden de a una? BEBA ¿Por qué será que venden? Yo no vendería... 12 copas de cristal. CHELA No. Las plantas no se venden. (con cierta soberbia) Pero si quiere le regalo una. Chela deja la taza de café sobre la mesa del teléfono. Se arregla el pelo, abre la puerta. 28 INT. SALÓN - MAÑANA LILIA (incómoda) No, no... Yo preguntaba nomás... 28 Chela entra al salón. CHELA Buenos días... LILIA (sonriente) ¡Hola! Beba que está del otro lado de la sala, se acerca y la saluda con una sonrisa. ¡Hola! BEBA CHELA Las señoras se siguen moviendo por la sala, observando muebles y objetos. Se percibe una tensión incómoda, y ya no preguntan nada. 29 INT. DORMITORIO - NOCHE La TV está encendida en la telenovela. Chela está recostada en la cama. Pati está haciéndole masaje en los pies. PATI Mi prima es la que estudió. Y ella me solía hacer a mí. En una universidad luego ella se fue y tiene su título de masajista. LILIA Estábamos preguntando del comedor... Chela dobla la pierna. CHELA (tocando la mesa del comedor) Es de estilo chippendale. De caoba, 1920. Está relustrado, como la mayoría de los muebles de esa época, pero es original. ¡Ay! Lilia vuelve a acercarse y apoya las manos cuidadosamente sobre una de las sillas del juego de comedor. LILIA (sonriente) ¿El precio es negociable? 34 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 29 CHELA Pati le masajea con más cuidado. PATI Tranquila. No vayas a doblar tu pierna, así nomás estirá. Pati está también muy atenta a la telenovela. (Se van a re-escribir los diálogos en base a la telenovela elegida). LAS HEREDERAS | 35 30 INT. SALÓN DE ENTRADA DE LA CÁRCEL - MAÑANA Chela está en medio de un gentío. Carga con una bolsa de almuerzo y una gruesa de cigarrillos. Es día de visitas y en el salón hay una larga fila con mujeres, hombres, ancianos, niños, bebés. Hay vendedores ambulantes y ruidos varios. En el aspecto y la ropa de quienes forman la fila, se nota que son de clase obrera. Chela llama la atención por su ropa prolija, su pañuelo. La Mujer Policía 1 se le acerca. 30 31 32 MUJER POLICÍA 1 MUJER POLICÍA 1 ¿Tu cédula? Chela va sacando su documento de identidad de la cartera mientras sigue a la mujer policía que le hace atravesar la fila, por un costado. Caminan por un pasillo y llegan a una Mesa de Entrada, donde se está registrando a las visitas, y se les revisa los bolsones. La mujer policía 1 pasa la cédula de Chela a FRETES (60) que está sentado en el control de la entrada. MUJER POLICIA 1 (imperativa) Fretes, anotale. El hombre toma la cédula, anota los datos y se la pasa de nuevo. La mujer policía 1 le devuelve la cédula a Chela y le hace pasar. Con un gesto, indica a la MUJER POLICÍA 2 y MUJER POLICÍA 3 que no le revisen nada. MUJER POLICÍA 1 Pasá nomás, mamita. Chela ingresa, es muy observada por los demás, dada su situación privilegio. Pero apenas da unos pasos, la Guardia la detiene. GUARDIA Esperá. Andá allá primero. (a la Mujer Policía 1) Que le revisen. 36 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 EXT. PATIO DE LA CÁRCEL - MAÑANA 32 El pasillo enrejado, por el que Chela camina, es paralelo al patio de la cárcel. Las miradas de Chela y Chiquita se encuentran. Caminan a la par, una por el pasillo enrejado y la otra por el lado del patio tranquilo y aireado, con algunos árboles y arbustos. Al encontrarse, se saludan con dos besos. Chiquita agarra la bolsa que Chela trae en las manos y la revisa. CHELA Buenos días... La mujer indica a Chela que la siga. 31 La MUJER POLICÍA 2 y MUJER POLICÍA 3 revisan a Chela, tocándole la ropa, los bolsillos, las piernas. Entre las dos hablan en guaraní, susurrando. Una de ellas se ríe. MUJER POLICÍA 1 ¡Buen día! Acá. INT. SALITA DE REVISIÓN - MAÑANA 33 EXT. PATIO DE LA CÁRCEL - MAÑANA 33 Chela y Chiquita están sentadas en un mesón de visitas. Chiquita está terminando de comer un sándwich que Chela le trajo. El día de visitas carcelario transcurre en los alrededores. CHELA ¡Qué rápido que comiste! Chela le pasa un pañuelo de papel. Chiquita lo agarra y se limpia la boca y las manos. La SEÑORA DE GÓMEZ (60) está a cierta distancia de ellas. Es una mujer elegante. CHIQUITA (señalándola, discretamente) La que está allá es la de Gómez. Esa que le mató al marido y salió en todos los diarios. ¿Te acordás? Chela parece no recordar. Las dos observan a las mujeres que se pasean por el patio. Luego Chiquita señala a otra mujer. CHIQUITA Y mirale a esa, esa que está allá al lado del árbol, es de mi mismo pabellón. Clin. Clin Eswoo se le dice. CLIN (42) camina por el patio, con un sombrero de cowboy. Se nota que impone autoridad dentro del grupo de reclusas. A Chiquita le resulta entretenido observar a la gente de los alrededores. CHIQUITA Escondé... LAS HEREDERAS | 37 Chiquita agarra la gruesa de cigarrillos y los esconde detrás de la cartera de Chela. PATI (asomándose) Es una vieja. Esa que vive acá al lado. Ven a ANA ROSA (50) que pasa por frente a ellas, sonriente. Se nota que es una mujer con algún desorden mental. Hace una señal a Chiquita pidiéndole cigarrillos. Chiquita le hace un gesto negativo con las manos. ¿Pituca? PATI No sé su nombre, bajita, todo pelo blanco tiene... Le dije que la señorita Chiquita está de viaje. Y me preguntó por vos. CHIQUITA Cada vez que me ve fumando, me pide... CHELA Le pregunté a Carmela cuanto tiempo estuvo acá su prima, Gladys. Tres meses me dijo. (hace una pausa) Pero después le volvieron a meter adentro. Chela parece confundida. PATI Parece que quiere que le lleves a algún lado, en el auto. Chiquita se levanta, camina hasta una canilla cercana y se lava las manos. Se acerca a Chela y permanece parada, mirándola. 35 CHIQUITA (mirando a Chela) Estás cansada... ¿Vos no dormiste bien anoche? INT. DORMITORIO - MAÑANA Pati entra al dormitorio y coloca la bandeja junto a la mesa de noche de Chela. Abre las cortinas y las persianas. Chela está mirando las noticias del secuestro en la TV. Agarra su pastillero. CHELA Pusiste mal otra vez. Falta una pastilla acá. Pati observa la bandeja para tratar de entender. CHELA (agarrando una pastilla) Tenés que traerme una más de estas, una rosada. Suena el timbre y Pati sale para atenderlo. Chela se sienta en la cama. Al rato, Pati regresa. 38 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 INT. AUTO EN EL GARAJE - TARDE 35 Chela pone las manos al volante. Arranca y empieza a salir del garaje hacia la calle. Al final del largo sendero de salida de la casa, Pituca está aguardando, en la vereda. Chela hace un gesto de negación con la cabeza. Chiquita, discretamente agarra una cajetilla de la gruesa de cigarrillos, y saca un cigarrillo. Lo enciende y se pone a fumar. Sentada y en silencio, Chela observa la vida carcelaria. Nota que una mujer MARÍA (38) las observa a cierta distancia, atentamente. 34 CHELA 36 INT. AUTO EN LA CALLE - TARDE 36 Chela maneja despacio, sin salirse de su carril. Está muy tensa, pero trata de disimularlo. A su lado va Pituca. 34 PITUCA ¡Qué gusto! (exagerada) ¡Punta del Este en esta época del año! ¿Cuándo vuelve? CHELA (vacilante) En... en un mes más o menos. PITUCA Pero sabés cómo es Chiquita. Por ahí cambia de planes. Chela frena de golpe. Pituca se va para adelante pero no se lastima. CHELA Disculpame. Chela se asusta. Pituca sonríe y se incorpora para sentarse de nuevo cómoda en el asiento. LAS HEREDERAS | 39 Marcelo Martinessi fotografía de martín crespo PITUCA No pasó nada. (indicándole que doble) Acá a la derecha podés doblar. PITUCA (insistiendo) Pero cómo no, si yo te pedí. CHELA La próxima. Chela dobla con cuidado. Van por una calle empedrada que hace que el auto de saltos y haga mucho ruido. PITUCA No, no, no. Tomá sí, que para el combustible. PITUCA ¿De dónde le quitaron a esta empleada nueva? Cuando le pregunté por Chiquita, tardó en responder, como si fuese que no entiende castellano. (tras una pausa) ¿Cuánto ya hace que Ñeca se fue? Pituca insiste, pone los billetes entre ambos asientos. Chela siente un poco de vergüenza. Pituca le da dos besos y se dispone a bajar. Se mira al espejo del auto y se arregla. PITUCA ¡Gracias! Quedamos a las 7, o 7 y media... CHELA Casi un año. (resignada) Pero esta no es como Ñeca. CHELA A las 7 vengo y te espero. PITUCA A Ñeca ustedes le enseñaron todo. Cuando vino recién me acuerdo que era una bruta. Se despiden. Hay una sensación de alivio en Chela cuando Pituca se baja. A Chela le molestan las palabras de Pituca. 38 PITUCA Yo voy a decirle a Ramona que se vaya. Y voy a buscar una nueva también. Se acuesta a la hora que quiere, come todo lo que encuentra en la heladera. Y el celular, se pasa todo el día ahí con el celular. Hace 12 años que está en casa y ya es mucho... LOCUTOR (EN LA RADIO) (al terminar un tema) Desde Asunción Paraguay transmite la 107.7 FM estéreo. La radio para una inmensa minoría. Chela se detiene en un kiosco y compra -con los billetes que acaba de ganar- una barra de chocolate de un KIOSQUERO (60). Devora el chocolate mientras maneja. PITUCA Acá doblá. INT. AUTO FRENTE A LO DE ODILIA - TARDE Pituca le indica la casa de Odilia, que tiene una escalera y al fondo una puerta grande de madera y vidrio. PITUCA Ahí es. No sabés cuanto te agradezco. Chela estaciona. Pituca abre su billetera y quita unos billetes. CHELA No, por favor. 42 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 38 Chela maneja despacio. Escucha música clásica en la radio. Chela permanece muy atenta a la calle. 37 INT. AUTO EN LA CALLE Y FRENTE A UN KIOSCO - TARDE 39 INT. SALA DE ODILIA - TARDE 37 39 Chela está sentada en una silla al lado de la puerta de entrada. Observa los detalles de la casa de Odilia. La casa no es lujosa, pero está bien arreglada. Tiene algunos muebles antiguos, pero en mal estado. En la mesa redonda que hay al final de la sala están jugando naipes y conversando en voz alta ODILIA (75), CAMELÉ (80), RITA (86) y Pituca. PITUCA (a Chela, en voz alta) ¿No querés acercarte más? CHELA No se preocupen... Estoy bien aquí. LAS HEREDERAS | 43 Tras un instante, Chela escucha que ANGY (40) está del otro lado del hall de entrada, hablando en su móvil. Sus tacos hacen un sonido particular. CAMELÉ (pone una mano sobre el hombro de Chela) ¡Gracias! ANGY (AL TELÉFONO) No, yo no te dijo eso hermoso (...) ¿Y que vos le dijiste? (...) Eso fue a la mañana, nosotros nos vimos recién a la noche (...) No. No. (se ríe) Se despiden. Chela aguarda a que Camelé abra el portón para entrar a su casa. En ese mismo momento, Pituca agarra de nuevo los billetes que Camelé acaba de darle y los cuenta. PITUCA (contando) 5, 10, 20, 25, 30 mil (mira a Chela de reojo) Está bien... Una vez ya Chiquita le trajo a esta hasta acá. Y yo le dije bien que le dé lo mismo que le sale un taxi, 30 mil. Porque esta... siempre especula, siempre trata de sacar ventaja... Odilia camina hasta donde está Chela, llevándole un vaso de agua. ODILIA Tomá, mi hija. Chela se sorprende. Gracias. CHELA Ambas observan a Camelé que ya está entrando y les hace una señal de despedida. Odilia vuelve a la mesa de juego. Chela, discretamente, sigue observando a Angy que sube al entrepiso de la casa y se mete a una habitación. 40 INT. AUTO EN LA CALLE Y FRENTE A LO DE CAMELÉ - TARDE Chela está manejando. A su lado va Pituca. Atrás van Camelé y Rita. PITUCA (a Chela) Cómo me duelen los huesos, ha de ser porque va a llover. Siempre me pasa lo mismo. Camelé se incorpora y se acerca a ellas. CAMELÉ (metiéndose en la conversación) Desde la semana pasada que estás así, Pituca. PITUCA Pero no me dolía tanto. Esta noche seguramente va a llover. O mañana. CAMELÉ (indicándole a Chela) ¡Acá es! Al lado del basurero... Chela detiene el auto. Camelé abre la puerta para bajarse y le pasa unos billetes a Chela. Se nota que Chela aún se siente incómoda con recibir un pago. Pituca agarra los billetes y los coloca junto a la billetera de Chela. 44 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 40 PITUCA Su marido vos sabés que era un tipo generoso: alto, churro... no sé como se casó con ella... Chela mueve el auto y siguen andando. Pituca gira hacia el asiento de atrás. Nota que Rita está dormida. PITUCA (indicando a Chela que siga derecho) Vamos, vamos por acá, derecho. 41 EXT. PATIO DE LA CÁRCEL - MAÑANA 41 Subida a una escalera, Ana Rosa levanta las manos y bendice a las demás reclusas que están alrededor suyo. ANA ROSA Dios les bendiga “enteroveteape”. Algunas reclusas que están allí cerca responden “Amén”. Chela y Chiquita están junto al tablón, como para sentarse. Observan lo que sucede en el patio. CHIQUITA (mirando a Ana Rosa) Había sido que esta vino del psiquiátrico, porque ahí no le podían tener. Chela se toman un instante antes de hablar. LAS HEREDERAS | 45 CHELA Vos no le avisaste nada a Pituca... Encima el tráfico... Imaginate vos, si chocás... Si le atropellás a alguien y le matás... (hace otra pausa, como para dar mayor dramatismo al momento) Salgo yo de acá y entrás vos. CHIQUITA (pensativa) Yo... le dije que viajaba. Ella se habrá olvidado nomás. CHELA Con esto de los secuestros, andan con miedo. Me pidió que le transporte, cuando yo pueda. CHIQUITA (irónica) Pero que tomen un taxi. ¿Quién le va a querer secuestrar a esas viejas? Chiquita se sienta, luego se sienta Chela, a su lado. Chiquita tiene una cajetilla de cigarrillos de las que saca uno. La cajetilla está casi vacía. CHIQUITA ¿No trajiste cigarrillo hoy? CHELA ¿Ya fumaste esa gruesa entera? CHIQUITA Todavía no. Pero acá... Chela mira a Chiquita de reojo antes de hablar. CHELA (con cierta timidez) Me parece que Pituca no quiere más tomar taxi. CHIQUITA (se ríe) No le hagas caso. Las dos o tres veces que yo le llevé me habrá dado algo... pero una miseria, apenas para comprar cigarrillos... Chiquita enciende su cigarrillo. CHIQUITA ¿Te parece que ella sospecha que yo estoy acá? Chela se encoge de hombros sin saber que responder. CHIQUITA Vos no deberías andar manejando eh... Ni registro tenés. (hace una pausa) 46 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 Chela se queda pensando. Se distrae al ver a DOS RECLUSAS peleando, a pocos metros de donde ellas están sentadas. 42 INT. DORMITORIO - NOCHE 42 Chela no consigue dormir. Escucha unos ruidos raros que le molestan. Se levanta y enciende un velador del dormitorio. Se acerca a la ventana, como tratando de entender de donde proviene el ruido, pero todo volvió a ser muy silencioso. Se mete por un pasillo estrecho hacia la sala de teléfono. 43 INT. SALA DE TELÉFONO - NOCHE 43 Chela sube hasta la mitad de la escalera. ¡Pati! CHELA Duda, y vuelve a bajar unos escalones. Mira hacia arriba. CHELA (en voz más alta) ¡Pati! Se escucha que Pati abre una puerta. PATI (semidormida) ¿Qué pasa, señorita? Chela siente un poco de vergüenza. CHELA No podés venir a dormir aquí abajo, al sofá. (tras una pausa) Cómodo es. ¿El sofá? Sí... PATI CHELA Chela se sienta en la escalera, a esperar. Pati, con short y remera, baja del piso de pelo suelto y trae en las manos una sábana que Chela está como aérea. Se sienta junto Tras un instante, arriba. Tiene el y su almohada. Nota a ella. LAS HEREDERAS | 47 PATI ¿Qué te pasa, señorita? CESAR Ey, ¿por qué llevás todas la toallas? (Definir coreografía de la escena en base al espacio). 44 INT. SALA DE ODILIA - TARDE Angy no le presta atención. En la vereda de la casa de César está estacionada una camioneta grande, muy bien equipada. 44 Chela está sentada, aguardando que Odilia, Camelé, Rita y Pituca terminen de jugar naipes. Escucha que hablan de la mujer secuestrada, y de que no se sabe nada de ella. Angy baja vestida con jeans y remera. 46 CESAR (cariñosamente) Decile nomás a la señora que se vaya... Quedate na vamos a hablar un rato... CHELA Tras colocar la TV en el asiento trasero, Chela y Angy suben al auto. El teléfono móvil de Angy suena y ella lo apaga. ANGY (a Pituca que está en el fondo) ¡Pituca! ¿Será que ella me puede llevar un ratito? Acá cerca nomás. 47 Sus palabras suenan más a afirmación que a pregunta. El móvil de Angy vuelve a sonar y ella lo apaga de nuevo. Chela mira hacia la mesa, donde las mujeres siguen jugando naipes concentradísimas. CHELA Sí, claro. ANGY César. Cómo lo que pude aguantar 2 años y medio con un tipo tan conformista. No puedo creer. CHELA Sí, cómo no. Chela está aguardando en el auto, observando lo que acontece en la casa, cuya puerta está abierta. CÉSAR (40) está sin camisa, parado del lado interno de la puerta. Por la forma en que gesticula, Chela asume que Angy y César están peleando. Angy camina hacia el auto con un bolso grande. Lo coloca en el asiento trasero. CHELA ¿Necesitás ayuda? Angy no la escucha, vuelve hacia la casa. Trae dos bolsones más y una bolsa de súper. César le sigue hasta el auto. 48 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 47 ANGY (abriendo la ventanilla) Puedo fumar... ANGY Acá cerca... ¿Será que podés llevarme? Un ratito nomás. INT. AUTO FRENTE A LA CASA DE CÉSAR - TARDE INT. AUTO EN LA CALLE - TARDE Chela maneja. Angy enciende un cigarrillo. Da una pitada, que llena el auto de humo y se da cuenta que a Chela le incomoda. PITUCA No sé. Preguntale a ella. 45 46 Chela ayuda a Angy a cargar con una TV grande, la meten en el auto. ANGY ¡Hola! ¿Vos sos la que maneja? Sí. EXT. FRENTE A LO DE CÉSAR - TARDE 45 Siguen andando. Angy gira como para mirar hacia lo de César. ANGY ¿Será que podés dar una vuelta y pasar otra vez por enfrente? Quiero ver nomás una cosa. Chela gira y da la vuelta. Pasan de nuevo frente a la casa de César, que ahora está subiendo a su camioneta. Angy se agacha, y luego se vuelve a levantar lentamente. ANGY Vos sabés que antes que este, yo tuve otro novio, 2 años también. Arsenio se llamaba. Vivía en un edificio él. (MÁS) LAS HEREDERAS | 49 fotografía de luis armando arteaga 50 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 LAS- HEREDERAS | 51 Int. Sala de Odilia Chela y “chicas” (CONT.) Lloré tanto en la puerta de su departamento cuando nos separamos. Después bajé los 14 pisos, y al salir del ascensor, no tenía ni una sola lágrima. Ya me había olvidado de todo. ¿Nunca te pasó? No. patio, donde algunas mujeres venden frutas y verduras. Se meten en un pasillo. 49 EXT. PATIO DE LA CÁRCEL - MAÑANA Ana Rosa lleva de la mano a Chela hasta un largo corredor donde encuentran a Chiquita, que camina con sus dos bolsones. A su lado camina María, que va fumando, lleva una silla cable y dos bolsas de supermercado. CHELA (sonriente) ANA ROSA (a María) ¡Andate de acá vos! ¡Puerca! Angy sonríe, mira a Chela un rato antes de hacerle una pregunta. ANGY ¿Cuánto cobrarías vos por un viaje largo? Te digo, así un viaje semanal, por ejemplo a Itauguá. María deja la silla y las bolsas. Se aparta de Chiquita. ¡Hola! CHELA No. Yo no manejo en ruta. Chiquita y Chela se saludan con dos besos. CHELA No, la verdad es que no... nunca manejé en ruta. ANA ROSA (a Chiquita) No tenés que hacerle caso a esa. Esa está mal. (hace un gesto implicando que María está loca) Angy se tira para atrás en el asiento. ANGY Será que hay alguien que maneje así como vos y no me cobre tan caro. Tengo que llevarle a mamá a su tratamiento, todos los jueves a Itauguá. CHIQUITA (discreta, a Chela) Hoy se liberó acá una pieza más linda, con aire acondicionado. Recién nomás me avisaron. CHELA (como para sí) Itauguá... Ana Rosa levanta la silla. Chela se da cuenta que más la Mujer Policía 1 las está aguardando. Chela levanta bolsas de supermercado que están en el piso. Las tres a la Mujer Policía 1, por el sector donde hay algunas lavando la ropa. Angy anota su número en una hoja de papel. ANGY (le pasa el papel) Acá, mi número. Avisame na si se te ocurre alguien. (tras una pausa) Deberías animarte a la ruta, che. Fácil es. EXT. PATIO DE LA CÁRCEL - MAÑANA Chela entra al patio de la cárcel. Carga su cartera y una gruesa (10 paquetes) de cigarrillos bajo el brazo. Ana Rosa le saluda, le agarra de la mano y le lleva hacia dentro. Caminan por un 52 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 CHIQUITA CHELA ¡Hola!, ¿qué pasó? ANGY Manejás muy bien, ¿Por qué no? 48 49 adelante las dos siguen mujeres CHIQUITA Acá hacia el fondo es. El pabellón está a cargo de una pastora. CHELA ¿Una pastora? 48 50 EXT. PABELLON DE LA PASTORA - MAÑANA 50 Chela, Chiquita y Ana Rosa llegan hasta un pabellón, en cuya entrada hay varias mujeres. Se quedan en la entrada, mientras la mujer Policía entra al pabellón. Tras un instante, emerge LAS HEREDERAS | 53 del interior a la PASTORA (55). Está vestida de blanco, con anteojos de sol y sombrero marrón. (Diálogo va a re-escribirse en base al momento de la relación entre ambas y a lo que suceda en la telenovela). MUJER POLICÍA 1 (presentando a Chiquita) Ella es... 52 CARMELA Me dijo que te vayas por la calle Cabo Ortíz y doblás en Capitán Mendieta. No debe ser difícil encontrar la casa. PASTORA ¡Bienvenida, hermana! Yo soy la pastora, soy evangélica, de Jerusalén, soy judía y hermana de la luz. Somos una congregación que estamos a cargo de este proyecto, que es para ayudar a la iluminación, y a la vida. ¡Adelante! Tenemos un pabellón hermoso, con su propia cocina. (le guía hacia adelante) Vas a estar muy bien con nosotras. Adelante hermana, adelante. Chela mira su reloj. CHELA Igual voy a salir enseguida ya. Pati cambia algunas de las bebidas de la bandeja de Chela. CARMELA Yo ya le dije el precio y todo. ¿Vos estás segura que querés hacer esto? Chiquita sonríe. La Pastora da directrices en guaraní a las mujeres que están con ella para que ayuden a cargar las cosas a Chiquita y para que lleven también la silla. CHELA Sí, claro que sí. CHIQUITA (a Chela) Esperame acá. Voy a dejar mis cosas. Chela toma un poco de agua con dos pastillas. Chela observa cuando Chiquita entra al pabellón. Ana Rosa, vuelve a agarrarle de la mano y estirarla hacia abajo. CARMELA Me imagino que debe ser una señora agradable, pero no sé. ANA ROSA Sentate acá, conmigo. Chela está sentada en la cama. Pati está haciéndole masaje en los pies mientras ven la telenovela. PATI Dos veces ya le dijo, pero igual nomás ella no le quiere perdonar. Pati nota que Chela no está mirando la novela. PATI ¿Qué te pasa? Pati se sienta a su lado PATI ¿Ya tomaste tus pastillas? 54 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 52 Carmela se puso un lente de vista y está sentada en la mesa mirando sus anotaciones. Chiquita y la pastora se saludan. Chela se queda unos pasos más atrás, observando. 51 INT. DORMITORIO - NOCHE INT. COCINA - MAÑANA 51 CHELA ¿Vos ya manejaste alguna vez hasta Itauguá? A Carmela le sorprende la pregunta. CARMELA ¿Itauguá? La ruta 2. ¡Ni loca! (curiosa) ¿Vas a manejar en la ruta también? Chela hace un gesto de negación con la cabeza. CHELA Noooo. No. 53 INT. AUTO EN LA CALLE - MAÑANA 53 Chela maneja el auto. Tiene en el asiento de al lado un papel con una dirección. Va observando las casas del barrio, buscando LAS HEREDERAS | 55 la dirección exacta de su cliente nueva. Se ven muchas rejas, árboles grandes, mansiones lujosas. Gira por una calle que no tiene salida. Retrocede y no sabe muy bien donde está. Vuelve a girar en una calle pero pronto se da cuenta que es la calle equivocada. Le cuesta mucho maniobrar. Se da cuenta que está perdida. Mira su reloj. Se agita aún más. 54 INT. AUTO EN LA CALLE - MAÑANA hacia dentro de la casa. Ve que Angy está sentada hablando en su móvil, pero no la ve ni la saluda. 56 57 Alba la mira por el espejo retrovisor. La mujer nota que Chela va a doblar. ALBA ¡No! ¡No doble todavía! ALBA Vamos a ir aquí derecho mejor, hasta Montevideo, bajamos allí hasta Rodríguez de Francia, tomamos después Paí Perez hasta Rca de Colombia, gira en Perú y vamos hasta Eligio Ayala. ¿Ok? Ana Rosa ceba y pasa un tereré a Chela que no lo acepta. CHELA No, gracias. Entonces Ana Rosa le pasa el tereré a Chiquita que sí lo acepta. CHELA (amablemente) Sí, claro. ANA ROSA (a Chiquita) Avisame que bien si vas a salir de acá. Porque si vos salís, yo me muero. Chela se concentra en manejar. A Chela le enternece el cariño que Ana Rosa le tiene a Chiquita. Chiquita toma tereré. ALBA Puede ir un poco más rápido. CHIQUITA ¿Ya se fue Ángel a colocar las rejas? (Tener preparado un cambio de ropa por si valga la pena hacer una escena más que iría como transición entre otras escenas). ODILIA ¡Buenas tardes! Chela se queda esperando en la puerta mientras Pituca, Camelé y Rita se van despidiendo de Odilia. Permanece expectante mirando 56 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 57 CHIQUITA Carmela estuvo en lo del abogado. (tras una pausa) Le dijo que en dos semanas, es posible que tengamos buenas noticias. Chela frena y sigue derecho. Chela toca el timbre. Ve su rostro en el reflejo del vidrio y se arregla la ropa y el pelo. Odilia abre la puerta. EXT. PATIO DE LA CÁRCEL - MAÑANA Chela y Chiquita -con su nuevo color de pelo- están caminando hacia la sombra de un árbol. Ana Rosa trae dos sillas, una para cada una. Luego acerca una tercera silla donde ella se sienta, al lado de Chiquita. Se escucha a alguien tocando guitarra y cantando en uno de los círculos de visitantes. Otro grupo habla y se ríe mucho. CHELA Disculpe el atraso. 55 EXT. FRENTE A LA CASA DE ODILIA - TARDE 56 Chela observa cuando una peluquera le está terminando de teñir el pelo a Chiquita. Le manosea los hombros y el cuello con una intimidad que a Chela le molesta. Escuchan música tropical. Hablan y se ríen todas a la vez. 54 Chela maneja en silencio. ALBA (80), vestida elegantemente, va sentada atrás. Es la primera vez que una cliente que va sola ocupa el asiento de atrás, reforzando para Chela su condición de chofer. EXT. PELUQUERÍA DE LA CÁRCEL - MAÑANA 55 No. CHELA CHIQUITA (molesta) Se tenía que haber ido ya. No puedo creer. Cualquiera empuja esa puerta de adelante y entra. (tras una pausa) ¿Y le pagaste a Pati su sueldo? LAS HEREDERAS | 57 fotografía de martín crespo Marcelo Martinessi y Ana Brun (Chela) Chela asiente con la cabeza. Se da cuenta que Chiquita está queriendo demostrar su autoridad sobre Chela, frente a Ana Rosa, que sigue cebando y tomando tereré. 59 ANA ROSA Hermoso está, hermoso. 60 CHELA Te cambiaste de tono. CHIQUITA (mira su reloj) Dentro de un rato empieza el culto, con la pastora. 61 Chela está viendo la telenovela con Pati, que le está masajeando los pies. CHIQUITA ¿Qué te vas a ir a hacer? (burlonamente, a Chela) Vas a seguir jugando “taxi driver”... PATI Mirá. Ese era su novio. ¿Te acordás? Pero ella ya no le quiere más. Chiquita pronuncia “taxi driver” con un exagerado acento americano. Chela se molesta. Chela se levanta. (Re-escribir diálogo de acuerdo a novela elegida). CHIQUITA (sonriente) Andá tranquila, hablamos el sábado. 62 CHELA INT. SALA DE TELEFONO - NOCHE 62 Chela camina y se sienta junto al teléfono. Quita de su bolsillo el papel donde tenía guardado el número de Angy. Se despiden con dos besos, de forma fría, indiferente. Chiquita se adelanta luego hacia la puerta del lugar de culto. A cierta distancia, mientras se aleja, Chela observa a Chiquita, alineada con otras dos internas, mimetizándose con ellas. Su ropa, su pelo, su postura, es similar a la de las internas que están a su lado. Chela sale por la puerta principal de la cárcel. Camina hasta el auto. A un costado hay un partido de fútbol. 60 61 INT. DORMITORIO - NOCHE CHELA No. Yo voy a irme nomás ya. INT. FRENTE A LA CÁRCEL - MEDIODÍA INT. AUTO EN LA RUTA - TARDE Chela está sola en el auto, estacionado al costado de la ruta 2. Le tiemblan las manos. Hay mucho tráfico de ómnibus y camiones. Chela enciende el motor y permanece sin moverse por un instante. Luego toma coraje, sale al carril derecho y empieza a manejar con cuidado. Va despacio. Varios vehículos le pasan. Le tocan bocinazos. De a poco ella va sintiéndose más segura y sigue manejando. En un momento acelera y maneja a una velocidad similar a la de los demás vehículos de la ruta. Chiquita se para y camina hacia el pequeño espejo que está junto a la canilla. Chela la sigue. 58 59 Chela está sentada en el asiento del conductor. Respira profundo. Está a punto de arrancar pero no lo hace. Mira hacia atrás. Sale del auto y se sube al asiento trasero. Quita el cartel de “SE VENDE” y lo hace pedazos. Luego se sube de nuevo al volante, arranca y sale a la calle. CHIQUITA (a Chela) No me dijiste nada de mi pelo. Bueno. INT. AUTO FRENTE A LA CÁRCEL - MEDIODÍA Disca. 58 CHELA (AL TELÉFONO) Hola, Angy (...) Hola Angy... Soy Chela, la... Sí. ¿Cómo estás?... (Chela está muy ansiosa) Te llamo por la... Sí. No, no conseguí... Chela se queda en silencio, hasta que finalmente se anima a hacerle la propuesta. CHELA (AL TELÉFONO) Yo... Yo puedo... 60 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 LAS HEREDERAS | 61 Chela está muy entusiasmada. ANGY No, no te preocupes, gracias. CHELA (AL TELÉFONO) No. No te preocupes por eso ahora. Si es la salud de tu mamá. Hoy por vos, mañana por mí... 63 INT. DORMITORIO - NOCHE Chela baja el visor. A ambos lados se ven paisajes verdes con cerros. Angy abre la ventanilla y deja entrar el viento que le hace volar el pelo. 63 Chela entra al dormitorio, hay una alegría inusual en su rostro. Pati no se da cuenta porque está muy atenta a lo que sucede en la telenovela. Chela se sienta de nuevo en la cama, completamente abstraída de lo que sucede en su entorno. 64 INT. AUTO EN UNA RUTA - TARDE Chela maneja el auto. Van despacio. A su lado va Angy con un gafas de sol con marco blanco y atrás va Odilia. En la ruta hay camiones, ómnibus, humo, suciedad. Angy está manipulando la radio, la cambia de dial varias veces. Se da cuenta que Chela se pone nerviosa. ANGY Tranquila. Vamos despacito nomás. La radio se escucha cada vez peor. Angy la apaga. Llegan a un desvío. CHELA ¿Acá es a la derecha? Angy mira los carteles, dubitativa. ANGY Sí, me parece que sí. DOS POLICÍAS que están en el desvío le hacen disminuir la marcha pero no le detienen. Angy nota que Chela está muy tensa. ANGY ¿Tenés miedo que te pare la policía? Giran a una ruta menos transitada. CHELA Tengo que sacarme un registro. Angy nota que el sol le queda de frente a Chela. Entonces, se quita sus gafas de sol y se las ofrece. ANGY Ponete estas... Chela no agarra las gafas. 62 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 ANGY ¡Mirá mamá, qué lindo! Angy gira hacia atrás y ve que Odilia está semidormida. 64 ANGY (volviendo a Chela) Si me das una foto carnet, tengo un contacto que te puede hacer un registro de conducir “en 24 horas”. Angy sonríe. 65 INT. AUTO EN ESTACIONAMIENTO - TARDE 65 Chela está sentada en el auto estacionado en el amplio parking del centro de rehabilitación. Mira su foto carnet, que no le convence. No salió bien, tiene cara de asustada. La guarda. Ve las gafas de sol que Angy dejó sobre el asiento y se las prueba. Le dan a su rostro un aspecto juvenil. Inesperadamente, Angy se acerca y sube al asiento del acompañante. ANGY (acercándose) Va a tardar 45 minutos más... Chela se quita el anteojo. ANGY ¡No! ¡Te quedan muy bien! ¿A ver? Chela sonríe, se vuelve a colocar las gafas y a mirarse al espejo retrovisor. ANGY Sí... Te regalo... No, no... CHELA Chela se quita las gafas y se las pasa a Angy. Dale... No. ANGY CHELA LAS HEREDERAS | 63 ANGY ¡Cómo que no! Con el favorazo que me estás haciendo. CHELA No, ni loca... Angy está agarrando su estuche de cigarrillos, lo abre y cierra un par de veces. CHELA No, en serio. ¡Gracias! ANGY ¿Por qué no? Angy mira sus gafas y se las vuelve a poner. Saca una cajetilla de cigarrillos y enciende uno. Le llega un mensaje a su teléfono. Lo escucha, es un mensaje de Eric, que quiere encontrarse con ella. CHELA No sé, nunca fumé... ANGY Ay Eric... Este me llama de vez en cuando. Hace poco nos conocimos. Una de las veces que me separé de César. Alto, ojos negros, 40 años. Pero me respetaba demasiado. Y le dejé... (tras una pausa) Era lo opuesto a este otro, de 23 años. El morocho nomás yo le digo. Un pendejo que... Empezamos así como jugando. Y ese sí que ya la primera noche... Uy... Angy da una larga pitada y mira a Chela. ANGY Cerrá los ojos, a ver. Así me hicieron a mí probar, la primera vez. Angy le coloca la mano sobre los ojos. Luego, le acerca el cigarrillo y suavemente le hace dar un pitada. ANGY Abrí la boca, un chiqui nomás. Chela, hace una señal de negación con la cabeza. Angy le ataja del brazo. Le acerca a su boca el cigarrillo, que tiene muy marcado el labial. Chela está asustada, aun así, da una breve pitada. De inmediato, se siente ahogada. Empieza a toser. Angy se asusta y le da golpes en la espalda. Chela se ríe. Ambas se ríen mucho de lo que acaban de hacer, como si fuesen dos niñas adolescentes. Angy hace un gesto sugerente con las manos. ANGY El morocho... 23 años. Igual yo también le dejé. (se incorpora) ¿Vos fumás? No. ANGY ¿Estás bien? CHELA CHELA (aún con tos) Sí, estoy bien. ANGY ¿Nunca fumaste? No. CHELA Angy parece muy sorprendida. Trata de recostar el asiento para colocarlo en posición más horizontal. No entiende cómo hacerlo. Chela se inclina para ayudarle a moverlo, pero trata de que sus cuerpos no se toquen. ¡Ahí! ANGY Chela se incorpora. ANGY A vos te quedaría bien fumar... Un poco. 64 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 66 INT. AUTO EN RUTA - TARDE 66 Chela maneja. Está a punto de oscurecer. A su lado va Angy, con las gafas de sol puestas. El viento, que entra por la parte de arriba de la ventanilla, le hace volar el pelo. Está dormida. Atrás va Odilia, recostada por una de las puertas, también está dormida. Chela se fija en el cuerpo de Angy, de arriba abajo, como estudiándolo. Mira sus piernas, sus senos, su cuello, su pelo. 67 INT. ESTUDIO - NOCHE Chela está sentada frente a su lienzo logra avanzar. Mira sus pinceles pero un sillón de su estudio. Se empieza a se detiene. Llavea la puerta. Toma un 67 inconcluso, en el que no no los agarra. Se tira en tocar las piernas. Luego poco de agua de un vaso LAS HEREDERAS | 65 fotografía de luis armando arteaga Int. Auto en estacionamiento - Chela y Angy que está en su bandeja. Camina hasta la ventana y la cierra. Se tira al sillón y empieza a masturbarse. 68 INT. DORMITORIO - MAÑANA el piso y vuelve a ver las marcas que dejó la mesa del comedor. Trata inútilmente de removerlas con su zapato. Chela se mira frente al espejo de su ropero, que está abierto. Se estira levemente las arrugas con ambas manos. Va hasta su bandeja y toma unas pastillas. Abre el ropero y mira su ropa. Quita una camisola blanca y se la prueba, no le gusta como le queda. Luego se prueba otra camisa rosada, tampoco le convence del todo, pero se la deja puesta. Abre un cajón y empieza a revisarlo, como buscando algo. ¡Pati! 70 CHELA Angy se acerca de nuevo y agarra del brazo a Chela. Pati camina hasta el ropero, mete la mano al fondo del estante y quita un estuche negro. Chela sonríe ANGY Vení acá te presento. CHELA Caminan juntas hacia la sala donde están conversando VERO (36) y CATA (42). Sobre la mesa hay algunos bocaditos y vino tinto. Escuchan jazz. Chela lo abre y dentro hay unas gafas de sol con marco marrón. Se lo prueba. ANGY (a sus amigas) Ella es Chela. (a Chela) Cata es mi prima. Vero es mi colega, traductora. PATI ¡Qué mucho dormiste esta mañana, señorita! CHELA Se saludan con besos. Los vestidos, maquillajes y peinados de las amigas de Angy contrastan con el pantalón, la camisa y el pelo corto de Chela. PATI Vinieron a buscar ya el comedor ese, que vendió la señora Carmela. 69 INT. SALÓN - MAÑANA Chela camina hasta donde estaba el comedor, se enfrenta al nuevo espacio vacío. La mesa y las sillas ocupaban un espacio grande que ahora parece completamente desnudo. Pati se acerca. PATI Ruidazo hicieron, y vos ni te despertaste. 70 ANGY (en voz alta) Ya llegó Chela, no le hagan esperar mucho. CHELA Vos no viste un estuche, negro, con unos anteojos de sol. ¿Sí? INT. SALA DE ODILIA - TARDE Chela entra a la casa y Angy le saluda muy amablemente con dos besos y un abrazo, como si fuesen grandes amigas. Chela lleva puestas sus gafas de sol, pero Angy no le dice nada. Gira y camina hasta la mesa de juego donde están sentadas Odilia, Pituca, Camelé y Rita. Chela se quita las gafas y las guarda en la cartera. Pati entra al dormitorio. ¡Ese es! (Es importante que los pasos de Chela se escuchen bien en esta escena, como si tuviese un zapato con más taco). 68 69 CATA Traductoras, sin trabajo. Así que si tenés cualquier changuita... inglés, portugués, están las dos a tu disposición. Todas se ríen. Chela se sienta en el grupo y Vero se levanta, como para traer algo del espacio contiguo. Angy la sigue. Chela nota que Vero la mira mientras arregla el vestido a Angy, toqueteándola y haciendo un comentario de modo burlón, que Chela no logra escuchar. La habitación vacía crea un eco sonoro inusual. Pati vuelve a la cocina. Chela -que lleva puestas las gafas de sol- se mira al espejo grande que hay en la sala. Mira a su alrededor, mira 68 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 LAS HEREDERAS | 69 71 INT. SALA DE ODILIA - TARDE 71 VERO (a Chela) Yo voy a darle tu teléfono a una tía mía que seguro te contrata. Angy está sentada sobre un almohadón en el piso, a su lado en una silla está Chela. Conversan con Cata y Vero. Siguen escuchando jazz. Cata hace un gesto de aprobación con la cabeza. ANGY Ellas son para mí como hermanas. Siempre compartimos todo. CATA Deberíamos decirle a Ilse que pruebe lo mismo. Ella no sabe hacer nada y le encanta manejar. VERO Incluso los hombres. Angy se mueve mucho, sirviendo las copas y ordenando los bocaditos sobre la mesa. Sus movimientos distraen la atención de Chela. Todas se ríen. CATA ¿Vos sos casada? No. VERO Cierto, Ilse, no había pensado en ella... encima ¡no tiene un peso! CHELA CATA (a Chela) Ilse es una amiga de infancia. Todo lo que hace le sale mal, abrió una boutique, y no, probó vender bijoux, como yo, y tampoco. Quizás esto sea para ella. Hay un breve silencio, incómodo. Vero reacciona. VERO (a Cata) Ella es la que les lleva y trae a las “chicas”. ¿Te acordás que Angy nos contó? ANGY No, Ilse no tiene paciencia. Chela es un encanto... Vero pone hincapié en la ironía de la palabras “chicas” para referirse a mujeres mayores. Todas se ríen. ANGY Ahora nos lleva también a mamá y a mí al tratamiento, a Itauguá. VERO Olvidate, ustedes saben cómo es Ilse, nunca va a aceptar ser chofer. Ella es muy... Va a ser como aceptar que necesita. Y ella, bueno... ustedes la conocen. Va a preferir comer tierra en vez de eso... CATA (a Chela) Ah... ¿Tenés mucho trabajo? CHELA Todavía no. Estoy... empezando. VERO ¿Siempre mujeres? Hay un leve tono irónico en la pregunta de Vero. Sí. CHELA Vero sonríe. Chela se siente algo incómoda. ANGY ¿Decime si no es una buena idea? Y cobra como si fuese un taxi. 70 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 Chela escucha la charla, que la incomoda. 72 EXT. SALITA DE REVISIÓN - MAÑANA 72 Chela está siendo revisada por la MUJER POLICÍA 2 y MUJER POLICÍA 3 a quienes escuchamos en OFF -esta vez seriashaciendo comentarios en guaraní. 73 EXT. PATIO DE LA CÁRCEL - MAÑANA 73 Chela y Chiquita están sentadas cada una en una silla, escuchando el relato de Norma, una de las presas, que está sentada con ellas. De fondo se ve la cotidianeidad de un día de visitas carcelarias. LAS HEREDERAS | 71 NORMA Yo trabajaba todos los días. A veces incluso domingo. Lavaba ropa ajena, de la gente de Benjamín Aceval. Teníamos nuestra casita afuera mismo de la villa, cerca del río. Apenas gritó. Yo sabía que él tenía otra mujer. Pero eso no me importaba tanto. Yo no quería que él se vaya. (hace una pausa) Hace más de 20 años ya de esto. Ahora yo estoy ya por salir. Y no tengo donde irme. No sé más ni donde se le enterró. Porque me hubiese ido a visitarle. A pedirle perdón. Mis hijas, mi hijo, no sé nada de ellos hace años... (hace otra pausa) Le pregunté a Sor Nélida, si no puedo pa entrar al convento. “Nooooo”, me dijo. “Para eso tenés que sentir el llamado de Dios”. Chela está escuchando con atención. Chiquita también escucha pero se distrae por momentos, mirando a los alrededores. NORMA Julián, mi concubino, era albañil. Tres hijos tenemos, dos nenas y un nene. Otra, la última, falleció, pobrecita, cuando estaba por cumplir dos años. Teolinda se llamaba. Mi angelito. Chela, conmovida, se levanta y abraza a Norma. Norma, llorosa apoya su cabeza en el pecho de Chela, que le acaricia el pelo. Norma hace una pausa. Chela nota que María, camina por ahí cerca. Se da cuenta que Chiquita y María se miran. CHELA (a Chiquita) ¿Vos podés traerle agua? NORMA Y cuando empezó a trabajar hacia Asunción, empezaron los problemas. A veces se quedaba por ahí a dormir. Pasaba poco tiempo con nosotros. En esa época le conoció a ella. CHIQUITA No te preocupes. (tocando el brazo de Norma) No hace falta que hables de eso... CHELA ¡Yo quiero escuchar! Norma las mira, hace una pausa, se arregla el pelo. NORMA Volví a casa esa tarde. Calor hacía. Tantas horas bajo el sol, yo estaba cansada y por momento me daba pytû ... o sea mareo. Él no hablaba tanto. Pero sabía decir las cosas. Y me miró un rato largo. Yo pensé que había perdido otra vez su trabajo. Pero no era eso. Otra cosa era. Las criaturas ya estaban dormidas. “Voy a dejarte”, me dijo, en guaraní. Rohejata. Guaraní nomás nosotros hablábamos. Chela nota que los ojos de Norma están llorosos. NORMA Rohejata me dijo. Y hasta eso me acuerdo. Después ya estaba él ahí en el piso, todo acuchillado, llorando. 72 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 Desganada, Chiquita se levanta y va a buscar agua. Chela la sigue con la mirada y se da cuenta que María aún está por allí cerca. 74 EXT. AUTO EN ESTACIONAMIENTO - TARDE 77 Angy están fumando fuera del auto, sentada al lado de Chela. El estacionamiento del centro de rehabilitación es muy grande, pero hay pocos autos. Observan el paisaje de atardecer sobre el campo. Hay una vaca atada en el gran baldío, contiguo al estacionamiento. Angy la mira. ANGY (hacia la vaca) Muuhhh. Chela sonríe. ANGY (en voz alta) ¡Muuuuuuuuuuuhhhh! Chela se ríe aún más. ANGY A veces te responden... eh... (tras una pausa) Cuando yo era chica estudiaba pintura. Y mis amiguitas todas pintaban castillos y princesas. Y yo pintaba vacas. LAS HEREDERAS | 73 CHELA ¿En serio? ANGY (a la vaca, que ahora las mira) ¡Muuuuuhhhh! Suena un mensaje en el teléfono de Angy. Ella lo lee y responde. ANGY (a Chela) Sí. Y cuando se reían de mí, papá decía: “Esas nenitas creen todavía en el príncipe azul, pero mi hija es la más inteligente de todas... ya está buscándose un ganadero”. Las dos se ríen a carcajadas. ANGY Le extraño a papá... Chiqui me decía él, mi chiqui. ¿Vos tenés algún apodo? No. CHELA ANGY Alguien alguna vez te habrá puesto un apodo... CHELA No. Bueno... papá me decía muñeca, porque mi abuelo, que era francés, me decía Pupé. ANGY Pupé. ¡Qué lindo! ¿Yo puedo llamarte Pupé? Chela se encoje de hombros. CHELA Sí, claro. Hay un rato de silencio. Angy camina hacia la vaca y después regresa. CHELA Yo también pinto. ANGY Sí. ¡Tenés que mostrarme tus pinturas! Chela sonríe. 74 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 CHELA No. Casi ninguna está para mostrar, todavía. Pinto frutas. ANGY Yo igual quiero ver... ¡Me encanta la pintura! Pero hace años que no pinto más... Ahora escribo poemas. CHELA ¿Sí? ANGY Poemas románticos... Las dos se ríen. ANGY Algún día voy a ser como el poeta, Manú: “¡Oh loca divina!, que canta y que llora, que ríe y que reza. Atrévete siempre, es ese un gran culto que pocos profesan”. Chela se queda fascinada, mirándola mientras recita. Suena otro mensaje en el teléfono de Angy, ella lo lee. Empieza a mirar a los alrededores y ve que está dando vueltas por el estacionamiento la camioneta de César. Tiene los vidrios polarizados y se detiene a unos metros del auto de Chela. Angy mira a Chela, toma fuerza, le pasa su cigarrillo encendido y camina hasta la camioneta. César apenas baja su vidrio para hablar con ella. Chela se queda con el cigarrillo de Angy en la mano, que está consumiéndose. Tras una breve charla, Angy regresa al auto para agarrar su cartera. César mueve su camioneta, acercándose más al auto. ANGY (con algo de vergüenza) ¿Te molestaría esperar y llevarle vos a mamá? CHELA No, claro. Ningún problema... Angy le da un abrazo fuerte. ANGY ¡Gracias! (como para sí, mientras coloca su celular en la cartera) Ay, este César... (le señala una de las puertas del centro de rehabilitación) En 20 minutos mamá ya debe salir, por aquella puerta. CHELA Andá nomás. Tranquila. LAS HEREDERAS | 75 fotografía de martín crespo Marcelo Martinessi y Ana Brun (Chela) Angy le da un beso y camina hacia la camioneta. Gira y la mira a los ojos. PITUCA ¿Pití Florentín? ¿Por qué no me avisaron antes? ANGY Pupé, ¡gracias! ODILIA Ahora, me acaba de llamar Estela a avisar. Angy camina y sube a la camioneta de César. Se van. Chela deja caer suavemente al piso el cigarrillo -a medio fumar-. Se queda pensativa, mirando hacia la vaca sola, atada, que está en el enorme baldío. 75 INT. AUTO EN LA RUTA - NOCHE Ah... 75 Chela va manejando. A su lado está Odilia, dormida. Chela va despacio por la ruta, se le cruzan algunos camiones con luz alta y eso le molesta. 76 INT. COMEDOR - MAÑANA 76 PITUCA ¿Cuántos años tiene el nene? RITA No sé, 14 o 15. El papá quería que siga derecho, pero él quiere irse a Milán a estudiar diseño de modas. ¿Vos te imaginas? (irónicamente) ¡Estudiar en Italia para ser modista! Pati mira la mesa con cierto desagrado. Chela tira sobre la mesa verde un mantel de color crudo, para cubrirla. Pati va hacia la cocina. Chela mueve y ajusta el mantel hasta que queda bien y tapa la mesa por completo. Pati trae la bandeja de Chela. PATI La señora Carmela te llamó. Todas se ríen a carcajadas. Chela se pone de pie, mira hacia la cocina, hacia un pasillo, pero no encuentra ninguna señal. CHELA ¿Y no llamó nadie más? 78 INT. AUTO EN CALLE Y FRENTE A LO DE RITA - NOCHE Pati hace una señal negativa con la cabeza. ODILIA (aún de pie) Se está muriendo el marido de Pitita... 78 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 RITA (en voz más baja) La hija de Estelita le pilló al nene con un su compañero de colegio en la cama, ahí mismo en su casa... Chela escucha los suspiros de las demás. CHELA Acá está bien. Chela está sentada junto a la puerta. Pituca, Camelé y Rita están jugando a las cartas en la mesa del comedor. La silla de Odilia está vacía. Chela, discretamente, busca a Angy con la mirada, pero no consigue encontrarla. Ve que Odilia regresa a la mesa de juego. Chela escucha la charla de las mujeres en la mesa. RITA Pobre Estelita ¿Ya se enteraron lo de su nieto? Todas se quedan calladas para escuchar mejor. Chela y Pati están cargando con una mesa verde, vieja y ajada. Les lleva tiempo hacerla pasar por las puertas de la cocina, por el pasillo. Para levantar la mesa, que aparenta pesada, Chela hace una fuerza inusual. Llegan al comedor y la colocan en el lugar donde estaba la mesa que fue vendida. 77 INT. CASA DE ODILIA- TARDE PITUCA 78 Chela maneja. A su lado va Pituca y atrás va Rita. 77 PITUCA Pobre Pitita. Rita se incorpora y se acerca al asiento de adelante. RITA Yo que ella, ya mando a alguien a limpiar el panteón de la Recoleta. Estas cosas cuando más rápido se acaban mejor. PITUCA Por ahí mañana deberíamos ir a verla... LAS HEREDERAS | 79 RITA (pensativa) Cada vez que se muere el marido de una de nosotras, revivo todo lo que pasé con Chito... Pero no la parte de su enfermedad, revivo las cosas lindas... Pituca le mira a Chela, incrédula. Rita se da cuenta. RITA (molesta) Si vos te hubieras casado alguna vez, Pituca, me entenderías... (tras una pausa) 52 años estuve casada. Y nos llevábamos tan bien. Rita indica a Chela el lugar exacto de su casa. RITA Ahí, ahí, al lado del basurero. Chela detiene el auto frente a la casa de Rita. RITA ¿Cuánto es lo mío? 35 mil. CHELA Chela se da cuenta que Rita no escuchó bien ¿Cuánto? RITA PITUCA (en voz alta) ¡35 mil! Rita quita el dinero de su cartera y le pasa a Chela que lo guarda en una billetera que está en medio de los asientos de adelante. Rita se despide y se baja. Pituca se queda mirándola mientras abre el portón y entra a su casa. PITUCA 52 años de casada... Pero su marido se pasaba todo el tiempo en la estancia. Dicen que tenía otra mujer allá. Incluso dicen que tiene dos hijos más. Seguro que esta sabe eso, pero se hace la tonta... 80 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 79 INT. DORMITORIO Y POV SALÓN - TARDE 79 Desde el dormitorio, Chela observa cuando DOS SEÑORAS ELEGANTES retiran un par de cuadros y una jarra de porcelana. Pati les acompaña hasta la puerta de entrada. Cuando salen, Pati llavea la puerta. CHELA (en voz alta) Pati, ¿estás segura que no llamó nadie? Pati se asoma al dormitorio. PATI No. No sonó hoy el teléfono. CHELA ¿Podés fijarte si está bien colgado? Es raro que nadie llame... ¿Será que anda? 80 EXT. PASILLO DE LA CÁRCEL Y POV PATIO - MAÑANA 80 Hay una lluvia torrencial. La Mujer Policía 1 está en un pasillo, dando indicaciones a Chela, que lleva en la cabeza las gafas de sol, atajándose el cabello. MUJER POLICÍA 1 (mostrándole) Allá tenés que irte, doblás en ese otro pasillo y vas a ver una puerta de hierro. Por ahí entrás hacia el pabellón. Algunas personas que están en el patio corren cubriéndose con hules. MUJER POLICÍA 1 (mostrándole un hule grande) ¿Vos querés este? CHELA Sí, si se puede. Chela sale corriendo bajo la lluvia. Se dirige al pabellón de Chiquita, cubierta con un hule transparente. 81 INT. PIEZA DE CHIQUITA EN LA CÁRCEL - MAÑANA 81 Chela observa con curiosidad la pieza de Chiquita. Es amplia, de techo alto. Tiene una ventana con rejas y una puerta con rejas. La pared tiene bastante humedad. La cama de Chiquita es pequeña. Al costado de la cama está un ropero. Del otro lado también hay otra cama pequeña pero sin ropero. La ropa de la LAS HEREDERAS | 81 mujer que comparte la pieza con Chiquita está en el piso. En una de las paredes hay una canilla. También hay dos sillas con una mesa, bastante estropeadas. Allí están sentadas Chela y Chiquita. Afuera sigue lloviendo torrencialmente. Chiquita está vestida sin ningún cuidado, muy de entrecasa. CHELA O me voy. No sé... CHIQUITA Hay que llavear acá. CHIQUITA Vino Carmela con la abogada ayer. Me dijo que pasa por casa y no estás, que no le devolvés las llamadas. CHELA (mirando la cama de la otra interna que duerme allí) ¿Y si viene la otra? CHELA Me olvidé. Le voy a llamar mañana. O esta noche. CHIQUITA Ella no va a venir todavía. CHIQUITA (con optimismo) Carmela ya habló con juez. Chela no puede dejar de mirar la otra cama que está en la habitación. Se quita las gafas de sol que tenía en el pelo y las deja sobre la mesa. Chiquita las agarra y se las prueba. CHIQUITA ¿Estas no eran mías? CHELA No, las tuyas eran negras. Chiquita se para, se mira al espejo y sonríe. Chela mira las piernas de Chiquita, sus manos ajadas, su rostro cansado. Chiquita se quita las gafas y se las devuelve. CHIQUITA Igual me quedan muy bien a mí. De repente, en la puerta enrejada aparece Ana Rosa. Prueba entrar y ve que está candadeada. Tras dos intentos, como una autómata, gira y se va. CHELA ¿Ella es la que duerme ahí? No. CHIQUITA (se dispone a salir) Yo me voy al baño. ¿Vos venís? CHELA ¿No puedo esperarte acá? Chiquita, permanece dubitativa por un instante. Luego asiente. Sí... 82 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 CHIQUITA CHELA Entonces te espero acá nomás. Chiquita abre el candado y la puerta. La vuelve a cerrar y coloca de nuevo el candado. Lleva las llaves. Camina por el pasillo silbando. Chela se queda sola en la habitación. Mira a su alrededor. La humedad y la poca luz dan un aspecto extraño a todo el espacio. De repente, Ana Rosa aparece de nuevo en la puerta e intenta abrirla. Está llorosa, preocupada. ANA ROSA ¿Por qué cerraste? Se escucha que alguien le grita del fondo. VOZ FEMENINA ¡Ana Rosa, vení acá! ANA ROSA (suavemente) Mamita, dejame na entrar. Chela no sabe cómo reaccionar. CHELA Chiquita tiene las llaves. Ana Rosa parece desencajada y está haciéndose pis. Empieza a cantar, llorosa, un pedazo de una canción. ANA ROSA (recordando la letra de a poco, (con cierta duda al cantar) Nde poty morotïmíre che jazminpe rojhenóiva, jha mano rojhechajhápe jhi’äitéva rojhetü, remimbígui pyjharérö ñasaindy ndie reyoapiíva, jha ye aipo che angataránte co yvy ári nde reyu. Es una canción de cuna tradicional, en idioma guaraní. LAS HEREDERAS | 83 82 INT. AUTO EN LA CALLE - MAÑANA 82 ODILIA Un muchacho pintón, interesante... Chela aún está conmovida. Maneja por una avenida donde hay bastante tráfico. 83 INT. AUTO FRENTE A LO DE ODILIA Y EN LA CALLE - TARDE Chela está esperando, sentada en el asiento del conductor. Atrás van Camelé, Rita y Pituca. Odilia está parada afuera, esperando. Las mujeres están todas vestidas de negro. ODILIA Dos minutos... Chela ve que Angy sale de la casa, aún arreglándose la ropa. Entonces, Chela se mira al espejo retrovisor como para arreglarse el peinado, se da cuenta que Pituca la está mirando. Angy entra al auto y se ubica adelante, muy pegada a Chela, a quien saluda con un beso en la mejilla. Al lado de Angy se sienta Odilia. Van apretadas. Chela pone en marcha el auto. A través del espejo retrovisor ve de nuevo a Pituca que pareciera estar vigilándola. PITUCA Seguro que ahora ese hijo de Camelé va a aprovechar para quedarse a cargo de la estancia, de la fábrica, de todo. Se acuerdan que desde hace tiempo ya tenía problemas con la hermana y el cuñado. CAMELÉ Sí, pero la hermana es la que está en la fábrica. PITUCA Ese muchacho ya debe estar abriendo la caja fuerte antes de cerrar el cajón... Angy le codea a Chela, como para que escuche la conversación. CAMELÉ ¡Ay, Pituca! ODILIA (mirando a Angy) ¿Vos te acordás del hijo que tiene más o menos tu edad? Angy hace un gesto de afirmación. ANGY (discreta) Claro que me acuerdo, Rafa... era un poco más grande que yo, unos años mayor. 84 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 Las mujeres empiezan a hablar todas a la vez. 83 84 INT. AUTO FRENTE AL SALON VELATORIO Y CALLE - NOCHE 84 Chela está esperando. Angy sale del salón velatorio y camina hasta el auto. Chela la observa cuando sube y se sienta. Deja la puerta abierta. ANGY Uf... Yo ya estoy eh, pero las “chicas” quieren quedarse hasta el rezo, que es a las 10 y media de la noche... DOS MUJERES (80/82) muy ancianas caminan por la vereda, pasan justo al lado del auto donde están ellas. ANGY (mirando a las ancianas) ¿No habrá algún bar por acá cerca? Digo... Para no tener que quedaaaarnos en el auto a esperarlas. Angy mira su reloj. CHELA Bar... Había uno solo sobre esta avenida... Pero se cerró ya. (mira a Angy) Yo vivo acá cerca... Angy parece muy entusiasmada. ANGY ¿Y si compramos un vinito y esperamos allí? CHELA Sí... Claro. ANGY (mira las manos de Chela) ¿Vos te hiciste las manos? Chela tiene un poco de vergüenza. CHELA Sí. Me pinté un poquito nomás. Chela pone el auto en movimiento. LAS HEREDERAS | 85 Int. Salón - Angy y Chela fotografía de luis armando arteaga 85 INT. SALÓN Y POV DE PATIO - NOCHE 85 Chela entra apresurada. Encuentra a Pati en la sala, preparando su cama. ¡Pati! CHELA Angy se queda un rato en silencio. Chela la observa atenta. ANGY Él vivía allí sobre Sargento Meza. Yo pasaba frente a su casa cada mediodía al volver caminando del colegio. Le veía a veces en el balcón que daba a la calle, sin camisa. Siempre me saludaba, nuestra mamás se conocían. Un día que él estaba me llamó, hizo así. (hace un gesto con los brazos) Era invierno. Yo ya sabía lo que él quería. Habré tenido 14 años, él 18 o 19. (cierra los ojos y respira (profundo) Me acuerdo cuando me quitaba esa pollera a cuadros, de colegio de monjas, y me acariciaba el cuello. “¿Te gusta bobita?”, me decía. Bobita. Desde ese día empecé a inventar trabajos prácticos, almuerzos en lo de mis compañeras, siestas de vóley, inventar cualquier cosa para no volver a casa y encontrarme con él. Me hacía el amor durante una, dos, a veces tres horas. Chela parece sorprendida. Hay un instante de silencio. PATI Te perdiste hoy la novela señorita... Chela se queda un instante mirándola, sin decirle nada. PATI Pero no pasó gran cosa... Pati se da cuenta que a Chela le sucede algo raro. Ambas se quedan calladas. CHELA Pati, ¿vos podés irte a dormir hoy a tu pieza? Pati se sorprende. Sí. PATI Pati empieza a agarrar sus sábanas y su almohada. Chela le ayuda y le acompaña hasta la escalera. Cuando Pati sale, Chela cierra la puerta de la sala de teléfono. Luego ordena el mantel del comedor, se asegura de que tape bien la mesa. Se mira al espejo de la sala y se arregla. Va hacia la puerta de entrada, y antes de salir observa a través de la ventana. Ve que Angy, con una botella en la mano, está jugando con las rejas que están al lado del auto. 86 INT. SALÓN - NOCHE Chela está sentada frente a Angy, que está sirviendo vino en dos copas. De fondo se escucha música clásica. ANGY Pupé, vas a tomar un poco al menos, porque yo odio tomar sola. CHELA (tratando de que Angy no le llene la copa) Ahí está bien, que después tengo que manejar... Chela mira la botella de vino. Brindan, Angy sonríe y bebe casi su copa entera. 88 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 ANGY Vos sabés que Rafa, el hijo de este, el difunto, fue el único hombre que me dejó a mí... dos veces. Angy toma otro sorbo de vino. Hay un momento de silencio. Cuando las miradas de las dos se cruzan, Chela siente vergüenza, pero Angy no. 86 ANGY Nuestras siestas largas, empezaron a ser cada vez más calurosas. Y llegó el verano. Angy se sirve más vino en su copa. Agarra un cigarrillo y va hacia la puerta de entrada. CHELA Podés fumar aquí si querés... Angy se para en el umbral de la puerta, enciende un cigarrillo y fuma. Chela gira levemente para no perderla de vista. ANGY Ese verano él desapareció. Y yo dejé de existir. Seguí buscándole tantas veces en el balcón. Pasaba y (MÁS) LAS HEREDERAS | 89 (CONT.) pasaba frente a su casa. Llamaba por teléfono y cortaba. Y lo peor era que no podía llorar... que no me salían las lágrimas. (CONT.) Él me miró y sonrió. Habían pasado apenas unos 6 meses, pero me daba la sensación de que mi cuerpo, mis piernas, mis pechos. Todo había cambiado. (hace una pausa) Y empezamos a vernos los tres. Volvieron las siestas calientes... A ellos dos yo les debo todo lo que soy... Ellos me enseñaron a explorar mi cuerpo. Todo mi cuerpo. ¡Qué hermoso! Rafa se volvía loco conmigo. Y yo me acostumbré a que seamos tres. Le quise a Claudia también, no como a una hermana, era más que eso. Chela se levanta y camina hacia Angy. Angy sale hacia el frente de la casa. (Va a cambiar el diálogo). 87 EXT. FRENTE DE LA CASA - NOCHE 87 Chela está parada atrás de Angy, que fuma y observa la calle. ANGY Al año siguiente, ese primer día de clases, cuando me volví a poner el uniforme, la misma pollera, la misma camisa, toda esa ropa que se parecía tanto a él. Esa mañana lloré, lloré mucho. Angy, mareada, entra a la sala y le trae la copa de vino a Chela, que está a medio tomar. Angy pone un poco del vino de la copa de Chela en su copa. CHELA ¿Estás bien? Angy se acerca a Chela ANGY ¿Yo? Sí... (tomándole del brazo) Pupé... ¿Vas a mostrarme tus pinturas? ANGY Al poco tiempo, me enteré que él tenía novia, que estaba saliendo con una chica más grande que yo, pero de mi mismo colegio. Hermosa, elegante, con unos ojos... CHELA Sí. Dame un ratito. Chela se mete a la casa. Angy mira a Chela a los ojos. ANGY Tenía unos ojos grandes, pero no tan hermosos como los tuyos. Angy le toca la cara. Chela sonríe. ANGY Claudia se llamaba... Y empezó mi lento trabajo de acercamiento a ella. Me hice primero amiga de su amiga, después empezamos a hablar. Supe que le gustaba la poesía y le compré un librito de poemas cubanos. Todo para volver a ver a Rafa. Angy camina hasta dentro de la casa, agarra de nuevo su copa y vuelve hasta Chela. ANGY “Él es mi novio”, me dijo Claudia, un día que Rafa fue a buscarla a la salida (MÁS) 90 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 (Va a cambiar todo el diálogo). 88 INT. BAÑO - NOCHE 88 Chela se sienta al WC a hacer pis. Luego se levanta, se mira frente al espejo, se toca los ojos. Se arregla la ropa y el pelo. Sale del baño. 89 INT. DORMITORIO Y BAÑO - NOCHE 89 Al pasar por su dormitorio, Chela se sorprende al ver a Angy que está ahora recostada en la cama de dos plazas, como distraída, pero insinuante a la vez. Esto le causa un shock enorme. Angy sonríe, sin perder su aire infantil, juguetón. Se nota que está mareada. La música que escuchaban suena lejana. Chela la mira de arriba abajo, luego gira, vuelve a entrar al baño y se llavea. LAS HEREDERAS | 91 90 INT. BAÑO - NOCHE 90 Chela permanece inmóvil en el baño. Siente cuando Angy golpea la puerta, despacio. Pero no reacciona. Se queda quieta, como intentando no hacer ningún ruido. En una doble de plástico, carrito. Hay está a pocos ANGY (OFF) Eso era lo que querías. ¿O no? INT. DORMITORIO - NOCHE 91 INT. SALÓN - NOCHE 92 Chela camina por el salón grande, donde están la botella y las copas. Busca a Angy en la sala. 93 EXT. FRENTE DE LA CASA - NOCHE 93 94 INT. AUTO EN LA CALLE - NOCHE 95 Chela conduce de regreso a las mujeres, después del velatorio. A su lado va Pituca que está dormida. Atrás van Camelé, Odilia y Rita. Todas están semidormidas. Chela mira a los alrededores POLICÍA Ayer fue el día de visita, ayer fue miércoles. O si no, el fin de semana. Chela gira y sale. Se equivoca de lado al intentar abrir la puerta. Se siente torpe, desorientada. 100 INT. SALITA DE TELÉFONO - NOCHE 96 la ciudad. marcha en la radio andando. Chela entra a la cárcel con sus gafas de sol puestas. Se nota que está reventada, pero ella trata de disimularlo. La amplia sala de espera de la cárcel está vacía. Junto a la puerta de entrada, hay una Mujer Policía 3 y una SEÑORA (40). La mujer policía camina hacia Chela. CHELA (con vergüenza) ¡Gracias! Mira su reloj. Chela está manejando ahora sola, por las calles de Da varias vueltas sin saber a dónde ir. Detiene la una calle cualquiera, se le nota cansada. Enciende buscando música. Encuentra un tema tropical. Sigue 99 Chela se da cuenta de que se equivocó. No sabe qué decir. Chela maneja. Recorre el camino desde su casa hasta la casa de Odilia, buscando a Angy. No consigue encontrarla. Se detiene frente a la casa de Odilia, sin saber bien qué hacer. INT. AUTO EN LA CALLE - NOCHE Chela maneja. Sigue recorriendo la ciudad. Se le nota cansadísima. Está empezando a amanecer. CHELA Yo vengo a visitar a una persona. 94 95 INT. AUTO EN LA CALLE - NOCHE 98 MUJER POLICÍA 3 ¡Hola! ¿Te puedo ayudar en algo? La puerta de entrada está abierta. Chela va hasta el portón y ve que Angy lo dejó abierto. Sale, camina hasta el medio de la calle, frente a su casa y busca a Angy, sin encontrarla. 96 avenida, Chela come un pancho sentada en una silla frente a donde está un PANCHERO (40) cerrando su un GRUPO DE MUCHACHOS charlando y riéndose, que metros de ella y la miran. 99 INT. SALÓN DE ENTRADA DE LA CÁRCEL - MAÑANA Chela abre la puerta del baño. Trata de no hacer mucho ruido. Al mirar la cama nota que la colcha está arrugada, con la marca de Angy. La estira y la vuelve a dejar bien prolija. 92 97 98 INT. AUTO EN LA CALLE - AMANECER Chela no se anima a salir. 91 97 EXT. DOBLE AVENIDA - NOCHE 100 Chela, con ropa de cama, camina hacia el teléfono. Observa que Pati está recostada en el sofá. CHELA (en voz alta) Pati, ¿vos no escuchaste un ruido? Pati no le responde de inmediato. CHELA Pati, ¿no escuchaste un ruido? 92 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 LAS HEREDERAS | 93 Rodaje fotografía de martín crespo PATI (OFF) ¿Ruido?... No. 103 INT. BAÑO - MAÑANA Chela se lava la cara y se arregla el pelo en el baño. Se pone desodorante y se lava los dientes. Se mueve apurada, pero se le nota llena de entusiasmo. Escucha que Pati entra a la casa con gente. De repente escucha el silbido de Chiquita que poco a poco va acercándose hacia ella. Chela se sorprende, está confundida y su primera reacción es ponerse a llorar. Chela agarra el teléfono. Disca y le atiende un contestador automático. CHELA (al teléfono) Hola Angy. Disculpá la hora. Quería hablarte... Pedirte que hablemos. (se queda un largo rato callada) Soy Pupé. 104 Corta y se queda quieta, sin saber qué hacer. 101 INT. DORMITORIO - MAÑANA 101 Chela está sentada en su cama. Tiene frente suyo su bandeja. Está tomando sus pastillas. Pati abre las persianas del dormitorio. Entra mucha luz. Chela camina hasta Chiquita que está entrando al dormitorio. Se abrazan fuertemente. Unos pasos más atrás están Carmela y Pati, junto a la puerta de entrada. Carmela sonríe, también se acerca y le acaricia la espalda a Chela, tratando de calmarla. CARMELA ¡Qué linda estás! PATI Y contenta de verte. CHELA ¿Qué horas son? Chela está aún confundida, Chiquita agarra su bolsón y se acerca a Pati. PATI Las 9 y media ya. CHIQUITA (a Pati) Acá hay ropa para lavar. Pati camina hacia fuera. Chela le sigue. 102 INT. SALÓN - MAÑANA 102 Chela se mueve por la sala sin saber muy bien que hacer. CHELA están sobre el sofá. Las sábanas y las lleva hacia el toca el pelo. Se da cuenta regresa. El timbre vuelve a CHELA Me parece que es para mí. Decile que entre y se siente. Y servile café o té. 96 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 104 CHIQUITA ¿Cómo estás, Pati? Suena el timbre. Chela se sorprende. Chela nota que las sábanas de Pati recoge. Pati se acerca, agarra las fondo. Chela se mira al espejo, se que aún está en ropa de cama. Pati sonar. INT. SALÓN - MAÑANA Chela y Chiquita se quedan abrazadas un rato largo. Chiquita luego gira y se acerca a Pati. PATI Me fui ya a comprar gaseosa y te traje también cigarrillos para la señorita Chiquita. Esperá. 103 Chiquita le pasa a Pati sus dos bolsones. Luego entra al dormitorio. Carmela se acerca y abraza a Chela. CHELA (como rogándole) No te vayas todavía. CARMELA Me están esperando en mi casa. (en voz baja) Voy a tener que irme en un rato. Carmela se mueve con Chela por el enorme salón que está mucho más vacío que antes. CARMELA Yo estoy... Tenemos que estar tan agradecidas que Chiqui volvió. Chela se sienta en una de las sillas del salón. LAS HEREDERAS | 97 CHELA Sí, claro. No... La voz de Chela no suena convincente. Chiquita se acerca de nuevo desde el dormitorio. Va hasta la puerta del frente que había quedado abierta y la cierra. 105 INT DORMITORIO - NOCHE Al volverse de nuevo hacia su caballete de pintura, Chela, sin querer, empuja su bandeja que cae al piso y se hace pedazos. Chela se asusta. Chiquita se acerca y mueve el cuerpo de Chela hacia uno de los costados. 105 Chiquita está roncando. Chela se levanta. Se aleja de la cama en la oscuridad. 106INT. GARAJE - NOCHE INT. ESTUDIO - MAÑANA 106 107 CHIQUITA(OFF) Pati, ¿vos no viste las llaves del auto? Pati sale y tras un instante Chiquita entra. Lleva las llaves del auto colgadas en el ojal de sus jeans. Las llaves hacen un ruido particular. Chela coloca en el caballete un lienzo en blanco. CHELA No sé... No me salió como yo quería. Chiquita se mueve por el estudio, quita unos billetes de su bolsillo. CHIQUITA Vino Pituca. Trajo una plata que te quedó debiendo... Chiquita deja los billetes junto a la bandeja de Chela y se dispone a salir. CHELA ¿No te dijo nada más? Chiquita se detiene en el umbral de la puerta. 98 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 CHIQUITA Trae algo para limpiar, Pati. Chela aun asustada, observa cuando Pati regresa de la cocina y empieza a juntar los pedazos y a limpiar. Chela está en el estudio. Escucha noticias en la radio. La pintura con la manzana está a punto de terminarse. Chela la observa por un rato, luego la baja del caballete. Pati entra trayéndole su bandeja. CHIQUITA (mirando la pintura de la manzana) ¿No vas a terminar esta primero? CHIQUITA Cuidado. No vayas a pisar nada. En ese momento Pati entra. Nota que en el piso están tazas y vasos rotos, líquidos desparramados, el diario mojado. El auto Mercedes está estacionado en el garaje. Por la parte de atrás se aproxima una figura humana, entre las sombras. Es Chela, que no consigue dormir. 107 CHIQUITA 108INT. DORMITORIO - MAÑANA 108 La habitación de Chela está en penumbras. Chela nota que Chiquita no está a su lado. Ve que en su mesa de noche está una nueva bandeja, más pequeña que la anterior, donde sus vasos, tazas y demás elementos están todos encimados. Se levanta. (Ver si es posible que moviendo algunas cosas Chela pueda ver su rostro reflejado en la bandeja). 109 INT. SALÓN Y POV A GARAJE - MAÑANA 109 Chela escucha música tropical y no sabe de dónde viene. Camina lentamente hacia la puerta que da con el garaje. Observa que, con ayuda de Pati, Chiquita está lavando el auto con una manguera. Escuchan música y se ríen mucho. 110 INT. AUTO EN LA CALLE - TARDE 110 Chiquita maneja. Chela va a su lado. Chiquita enciende un cigarrillo. CHIQUITA Ángel va a venir el viernes a colocar la reja en la puerta. ¿Te acordás la última vez que vino a casa, a arreglar el techo? Chela se queda pensativa, como tratando de recordar. CHIQUITA Tocó el timbre y yo le hice entrar. Vos estabas hacia la cocina. Y te enojaste, me dijiste... LAS HEREDERAS | 99 (imitando voz de Chela) “¡Cómo le dejaste entrar sin avisarme!” Y corriste con Ñeca hasta el patio, hasta donde estaba colgada nuestra ropa. Y empezaste a quitar de ahí nuestros calzones. Que eran de este tamaño... (muestra el tamaño grande con las manos) Y estaban colgados al lado de los de Ñeca, que eran así chiquititos. (muestra el tamaño pequeño con las manos) 114 ¡Chela! 115 No. 111 115 116 PATI INT. ESTUDIO - MAÑANA 116 En el estudio están todos las pinturas de Chela amontonadas en el piso. En el caballete, permanece el lienzo completamente blanco. CHIQUITA El viernes entonces. ¿A qué hora? ¡Chela! COMPRADOR Y llamame na antes de las 10. Porque me gustaría ya tener para el fin de semana. CHIQUITA (OFF) 117 INT. SALON - MAÑANA 117 En el comedor, el mantel está bien puesto sobre la mesa que reemplaza al viejo juego de caoba. La sala está muy ordenada. Se escuchan los pasos de Chiquita deambulando. CHIQUITA Bueno. ¡Gracias! Chiquita entra al auto, se sienta. Mira a Chela sin saber qué decirle. ¡Chela! 112 Chiquita maneja y Chela va a su lado. Regresan a la casa sin hablar, cuando ya empezó a oscurecer. Las dos parecen muy cansadas, como si toda la vida les hubiera pasado por encima. INT. SALON - MAÑANA EXT. PATIO DEL FONDO - MAÑANA CHIQUITA (en voz alta) Pati, ¿vos no viste la llave del auto? Chela está dentro del auto, con los vidrios cerrados. Ve a Chiquita que está fuera conversando con COMPRADOR. Abren el capot y dan la vuelta el auto. Tras un instante, Chiquita abre la puerta del auto, mientras se despide del Comprador. 113 CHIQUITA En el patio del fondo están colgadas varias ropas de mujer. CHIQUITA Ey. No te vayas a poner tampoco así... O te hubieses quedado en casa. (tras una pausa) El señor este quiere ver nomás, todavía no hablamos ni del precio. 112 INT. AUTO EN LA CALLE - TARDE 114 Chiquita se está vistiendo como para salir. Termina de arreglarse, se pone un perfume y busca la llave del auto. La busca en su mesa de noche y no la encuentra. Se toca los bolsillos, revisa en el bolsillo del pantalón que tenía puesto antes y tampoco está. A pesar de la manera tan pintoresca de narrar que tiene Chiquita, Chela no se ríe. 111 INT. AUTO FRENTE A PLAYA DE VENTAS - TARDE INT. DORMITORIO - MAÑANA CHIQUITA (OFF) 118 EXT. GARAJE DEL FRENTE - MAÑANA 118 El portón enrejado del garaje quedó abierto de par en par. El auto ya no está. El portón de la calle también está abierto. FADE A NEGRO 113 FIN Chela observa a DON ÁNGEL (60) que está colocando las rejas en la puerta de entrada de la casa. 100 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 LAS HEREDERAS | 101 fotografía de martín crespo 102 | GUIONES | ROTEIROS | NÚM. 14 LAS HEREDERAS Rodaje | 103 Este cuaderno se terminó de imprimir en mayo de 2019. El tiraje constó de 500 ejemplares. Este livro foi impresso em maio de 2019. A impressão consistiu de 500 cópias.