LIMPIEZA PARA DESPUES DE CADA REUNION 1. 2. 3. 4. 5. 6. Pasar el trapo de piso al auditorio. Lavar los baños – Damas y Caballeros. Aspirar las alfombras del auditorio y plataforma (antes controlar que el filtro de la aspiradora se encuentre limpios). Pasar el trapo de piso al Hall de entrada y Sala B. Limpiar los muebles con lustra muebles. Limpiar las veredas: de entrada, del frente y la que bordea al Salón del Reino. Repasar la limpieza antes de cada reunión LIMPIAR ASPIRADORA DESPUES DE CADA LIMPIEZA LIMPIEZA PROFUNDA SEMANAL 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. Lavar los baños; limpiando pisos, lavatorios, sanitarios y cerámicos. Auditorio: pasar el trapo de piso, aspirar las alfombras y limpiar los muebles con lustra muebles. Limpieza de todas las ventanas: vidrio, marco, y tela mosquitera. Lavar persianas y rejas (con trapo o con rejilla). Limpiar cielorraso, ventiladores (se necesita escalera), Zócalos de plataforma y auditorio. Sacar telarañas de los tapa-rollos de ventanas, y del exterior del Salón. Lavar las veredas del frente, de entrada y las que bordean el Salón. LIMPIAR ASPIRADORA DESPUES DE CADA LIMPIEZA MANTENIMIENTO DEL SALÓN 1. Cortar el césped, frente con sus flores y al fondo. LIMPIAR UNA VEZ TERMINADO EL TRABAJO *** km 11/99 pág. 7 Sección de preguntas *** ▪ ¿Quién debe limpiar el Salón del Reino? Un Salón del Reino limpio y acogedor dice mucho del mensaje que predicamos (compárese con 1 Pedro 2:12). Es esencial mantenerlo arreglado, y todos podemos contribuir a ello. No debemos permitir que esa labor recaiga en unos cuantos. Por lo general, la limpieza se asigna por grupos de Estudio de Libro de Congregación, y el conductor o su ayudante dirigen las tareas. Si en un Salón se reúnen dos o más congregaciones, los ancianos dispondrán lo necesario para que todas ellas colaboren en su mantenimiento. ¿Cuál es la mejor manera de cumplir con esta responsabilidad? El Salón del Reino se limpiará siguiendo un programa establecido. Los productos y enseres de limpieza estarán accesibles. Se colocará una lista de las tareas que deben efectuarse en un lugar donde puedan consultarla quienes limpian. Puede haber dos listas, una para la limpieza ligera después de cada reunión y otra para una limpieza semanal más profunda. El conductor del estudio de libro programará esta última para un día y hora que libro programará esta última para un día y hora que resulten convenientes para todos los hermanos asignados. Asimismo debe darse continua atención al césped, las flores y los arbustos. Las aceras y estacionamientos deben mantenerse limpios. Todos los años, tal vez poco antes de la Conmemoración, debe efectuarse una limpieza a fondo que puede incluir el lavado de las ventanas, paredes y alfombras, así como la limpieza de las cortinas y la tapicería. Además, todos podemos colaborar no arrojando chicles ni basura dentro o fuera del Salón, así como dejando limpios los baños para quien vaya a utilizarlos después. Tengamos cuidado de no estropear o romper el equipo ni el mobiliario. Observemos si hay manchas en la alfombra, lámparas fundidas u otras anomalías y comuniquémoslo sin demora al hermano encargado del mantenimiento del Salón del Reino. Si todos estamos dispuestos a colaborar, haremos de la casa de adoración a Jehová un lugar placentero y nos distinguiremos por ser un pueblo limpio que honra a Jehová Dios (1 Ped. 1:16).