ENSAYO: ¿CÓMO IMPLEMENTAR LOS PROCESOS DE ESTIMACIÓN, REDUCCIÓN Y PREPARACIÓN DE LA GESTIÓN DEL RIESGO DE DESASTRES EN MI ESTABLECIMIENTO DE SALUD O DESDE MI LUGAR DE TRABAJO? El manejo de las emergencias y desastres en los establecimientos de salud debe ser de forma orgánica, activa y con enfoque en cerrar brechas a corto y largo plazo. En el hospital Eleazar Gusman Barrón HII-2, se realizan medidas de PREVENCIÓN, REDUCCIÓN Y PREPARACIÓN a cargo de la UGRD, mediante el fortalecimiento de infraestructura para la evitar el riesgo frente a las lluvias de gran intensidad por el fenómeno del niño, se mejoran los accesos y salidas de evacuación para hacer frente a un sismo, sin embargo, estas mejoras no se articulan al plan organizacional de personal asistencial y usuarios. Hace falta mesas de trabajo recurrentes para dar seguimiento a las metas cortas para mitigar el riesgo, convocando así a jefes de unidad quienes deben presidir el Grupo de Trabajo de Gestión de Riesgo (GT GDR), para la toma de decisiones de optimizar el funcionamiento de su unidad prestadora de servicios (UPS) y responder ante una emergencia, como el acceso al módulo de emergencias del Hospital, fue planificado para mejorar el acceso al centro quirúrgico y otros servicios clínicos, optimizando así su funcionamiento y también generando un espacio de circulación ágil ante una emergencia de desastre natural. Pues es así como los proyectos tienen mayor viabilidad cuando el establecimiento no tiene conciencia de Prevención y Gestión de Riesgo. La UGRD como líder en esta actividad para el monitoreo y evaluación vulnerabilidad del Hospital, debe generar esos espacios de diálogo, así como emplear instrumentos claros para la evaluación y reflexión sobre la vulnerabilidad del establecimiento a las autoridades y jefes de comandos, pues es claro que muchos serán personal de la salud y el enfoque ha de ser humanitario y organizacional. En razón al ejercicio y aprendizaje alcanzado puedo plantear el siguiente proceso para la Gestión de Riesgo de Desastre en mi centro de trabajo: Se manejará en 3 etapas, Prevención, Reducción y Preparación. Estas se evaluarán para la mejora continua del funcionamiento hospitalario y de personal. PREVENCIÓN: Convocar a un personal de cada unidad prestadora de servicios UPS a formar parte de la brigada y mesa de trabajo interna del hospital, involucrando así a un encargado para que lidere en su unidad la forma de acción y respuesta antes, durante y después de una emergencia. Este personal es quien brindará información de primera mano del comportamiento de cada sector del hospital, que muchas veces se divide en zonas dentro de un mismo pabellón, o infraestructura aislada del centro de operaciones y/o comunicaciones. Convocar al personal parte del Grupo de Trabajo de Gestión de Riesgo, para evaluar y plantear metas claras a corto, mediano y largo plazo, con enfoque humanitario y de optimización del funcionamiento en mejora de la respuesta a siniestros. Este trabajo se realizará en conjunto de la UGRD y el director del hospital, como representante y jefe responsable de la prevención del riesgo. Se corroborará mejoras y brindará asistencia técnica para la mejora de la unidad que cuente con mayores metas a corto plazo realizadas, estas pueden ser la evaluación del personal capacitado para liderar durante una emergencia, contar con los equipos, herramientas o insumos necesarios para responder ante una emergencia, avalado por documentos que respalden el trabajo en la mejora continua. La UGRD deberá obtener los recursos de monitoreo y comunicaciones en cada UPS mediante la partida presupuestal 068, garantizando así los recursos para mantenerse siempre en comunicación. Esto es importante para prevenir métodos o estrategias de trabajo durante una emergencia, así como garantizar una acción y coordinación ágil al momento de un desastre. La UGRD debe contar con copias y exigir los planes de acción frente a una emergencia de cada unidad y del hospital en su conjunto, para articularlos durante la etapa de Reducción de Riesgo, y al momento de un desastre permitiría un entendimiento más claro de las dinámicas o trabajos que realiza cada UPS. REDUCCIÓN: Para mitigar el riesgo durante una emergencia preparamos al personal para una acción antes, durante y después de una emergencia. Una capacitación oportuna y participativa permite lograr metas específicas y tangibles, por ejemplo en talleres prácticos, se puede desarrollar los planes de acción del personal como producto, y este servirá como documento base para aplicarse y mejorar la respuesta del personal de salud. De igual forma la infraestructura debe tener un plan de uso, mantenimiento y mejora, dotando de mejores espacios de circulación, un plan de señalización y concientización de las vías de escape continua, mantenimiento de cubiertas para que no causen accidentes durante el siniestro. El Grupo de Trabajo de Gestión de Riesgo tiene la tarea para educir el riesgo, brindar oportunidades al establecimiento, esto mediante alianzas o convenios con instituciones y entidades que compartan la visión de hacer frente con una política de gestión de riesgo. Por ejemplo, dotar de personal capacitado para preparar a los brigadistas o personal responsable. Coordinar un plan de respuesta conjunto con autoridades locales y regionales, por ejemplo la cadena de mando, lugares de abastecimiento de insumos o ayuntamientos de ayuda. Debe coordinarse la gestión para abastecerse de personal que pueda atender a toda una población afectada, mucho más en el Hospital Regional que recibe referencias, una estrategia es tener un portafolio de contactos para la contratación emergente, un respaldo económico para sostener este personal y un plan articulado con el gobierno regional o el ministerio de economía y finanzas para abastecer un tiempo estimado de 1 mes o más. Experiencia evidenciada durante la pandemia del Covit 19. Es importante realizar los estudios y diagnósticos necesarios para conocer la realidad del hospital, es por esto que la UGRD solicitó el desarrollo y evaluación del índice de Seguridad Hospitalaria y star h, que permitió conocer y sobre todo hacer de conocimiento a las autoridades los riesgos más graves a los que se enfrenta el hospital, dando valor e importancia a las acciones a tomar y haciéndolos partícipes de una ruta de trabajo. La evaluación demostró un riesgo inminente con el sistema antiguo de drenaje en el edificio principal de hospitalización de al menos 5 pisos. Problema que no se tenía ningún plan de acción o trabajo claro que pudiera hacer frente a una emergencia sanitaria derivada de este problema, tampoco se contaba con contactos especializados que puedan brindar una solución temporal o eficiente, ya que la unidad de mantenimiento no se daba abasto para resolverlo. Es por eso que este tipo de estudios son importantes por que permiten visibilizar riesgos latentes, que pueden trabajarse junto a los actores colaboradores como el gobierno local, regional o los ministerios nacionales. PREPARACIÓN: Para la preparación frente a un desastre natural, es importante tener información de los antecedentes, esta no basta en los registros únicamente del establecimiento, sino también su entorno y como le afecta. En este caso al ser un hospital de referencia, es frecuente que albergue usuarios de zonas aledañas o incluso de la sierra de Ancash, El personal debe tener capacitaciones para el manejo de grandes volúmenes de usuarios, así como un plan de manejo de personal, flujos de pacientes y concentración de estos. Recientemente una de las medidas del hospital para ordenar el entorno de comercio ambulante, usuarios que pernoctan fuera del establecimiento para ocupar una cita médica, y la acumulación de residuos, decidió restringir la vía para autos a 1 solo acceso, en la idea de que como no se afecta a las personas directamente sería un apoyo para controlar a las personas, sin embargo esto generó un embotellamiento de autos, molesto e inseguro ya que al tener espacio libre de autos, el comercio informal trata de posesionarse o incluso los transeúntes ocupan este espacio, arriesgándose a un siniestro automovilístico. Pues la estrategia adecuada nunca fue quitar espacio, sino da espacio al transeúnte, a la persona de a pie con un espacio apropiado y digno, que le permita reflexionar hacia un resguardo seguro durante una emergencia. Otra estrategia para prepararnos frente a un desastre es mantener los equipos de respuesta operativos, como las radios, centros de monitoreo, ambulancias, etc. Estos son parte fundamental en las comunicaciones y la toma de decisiones, ya que, así como el establecimiento busca responder y reaccionar de forma eficiente frente a un desastre, es un centro de referencia y asistencia para el público local, por lo que nuestros recursos también deben estar a disposición de la población y las autoridades, según lo requiera y se haya planificado como tal. Las comunicaciones institucionales son otro factor que debe prepararse el hospital, para brindar información oportuna y ágil, ya que en un día común es normal ver a los establecimientos de salud saturados, posiblemente fallen al momento de atender una emergencia masiva. Por eso un plan de acción claro sirve para el manejo interno del establecimiento, pero no para la población usuario. Prepararse con mensajes claros y un plan de acción fácil de entender, mitigaría la cantidad de usuarios que lleguen al hospital sin necesidad de una atención de emergencia. Ese personal en el hospital no existe, lo asume alguno de las personas bajo su autoridad, sin embargo, no suelen estar preparados para dirigirse y liderar grupos humanos a nivel vecinal o distrital, es ahí una situación clave para trabajar de la mano de la municipalidad, dirigentes locales, instituciones lideres como universidades o institutos que ayuden a movilizar al grupo humano para una mejor atención y respuesta. Es importante entender que las personas capacitadas están allí afuera en la ciudad, y junto a ellos con un trabajo articulado las emergencias se resuelven de forma más eficiente. Es por ello que podemos apoyarnos en estas instituciones para tener una data confiable y planes estratégicos de acción. En el hospital es importante comprender que albergamos todo tipo de usuarios empleando la edificación, desde niños en el módulo de cred, los adultos y adultos mayores. Dicho personal está ubicado de acuerdo a la necesidad de atención, sin embargo, no bajo el enfoque de gestión de riesgo. No existe en los planes de emergencia una zona segura ágil para los ancianos o personas con discapacidad, pues también son una población importante que amerita una atención ágil y segura. Estos usuarios deben ser guiados por un profesional encargado del grupo etéreo o característica de atención, para así agilizar el manejo del personal humano y ser eficiente en el manejo de la gestión de riesgo. Una población importante y de sumo cuidado son las mujeres gestantes y pacientes en cuidados intensivos, de los cuales el personal debe contar con un plan de acción para reducir el riesgo en las áreas donde son atendidos o en su defecto un plan de evacuación. En el caso del Hospital Regional cuenta con escaleras de emergencia a los extremos del edificio de intervención y hospitalizaciones, sin embargo, se encuentra obstruido por mobiliario antiguo sin uso, generando un alto riesgo de embotellamiento o simplemente bloqueo de salida de emergencia. La UGRD hace los esfuerzos logísticos para retirar el mobiliario y lograr una salida de emergencia eficiente, Todas estas decisiones deben estar reglamentadas, normadas y anexadas en documentación ágil que sirva de reporte y sustento legal para la toma de nuevas decisiones. El Grupo de Trabajo de Gestión de Riesgo de 1er, 2do y 3er nivel de gobierno debe ser muy consciente del modo de participación el hospital frente a un desastre, por ello anualmente el responsable de defenza civil en el hospital brinda información oportuna de diagnostico del establecimiento de salud. Pese a la antigüedad del establecimiento continúa funcionando con muy mejores retrasos, justificados por la realización de mejoras de las UPS. Uno de los problemas fueron los techos salitrosos afectados por las lluvias del fenómeno del niño en el 2017. Como vemos la seguridad del hospital deben de tanto de las autoridades locales del establecimiento, las autoridades del gobierno regional y nacional que permitan una acción eficiente y oportuna de la gestión de la emergencia y desastre. Es importante la capacitación recibida pues aborda un panorama amplio de la gestión de riesgos y desastres, con un enfoque participativo de inversiones que permiten a las autoridades tener una noción más clara de las gestiones a realizar. Este proceso involucra conversar y liderar las mesas de trabajo o reuniones para conseguir apoyo constante al hospital, si bien es cierto que el hospital cuenta con recursos, es la agilidad de los gobiernos locales, regionales o nacional que tienen la capacidad para hacer frente a emergencias de gran magnitud. Es por eso que desde mi parte es comprensible que el jefe municipal o de la autoridad competente lidere el Grupo de Trabajo de Gestión de Riesgo. Las decisiones políticas deben ayudarnos a direccionar la gestión que elaboramos, con un horizonte claro a la rehabilitación y generar mejoras con cambios. Los hospitales al ser antiguos son difíciles de mejorar su infraestructura, pero edificaciones nuevas o complementarias al establecimiento cuentan con la capacidad de ampliarse como las postas locales. Durante una emergencia estos establecimientos podrían ayudar a mitigar la cantidad de usuarios esperando una atención. Sin embargo, como antes lo he ya mencionado, ha de tener el hospital un respaldo económico para el crecimiento de personal que pueda satisfacer la demanda. Finalmente, la gestión de riesgo y desastre es una oportunidad para conocer a nuestro centro hospitalario ante las autoridades. Conformación del grupo de trabajo en los diferentes niveles de atención, los cuales deben contar con un registro de proveedores que puedan apoyar durante la emergencia. Como vemos la seguridad del hospital deben de tanto de las autoridades locales del establecimiento, las autoridades del gobierno regional y nacional que permitan una acción eficiente y oportuna de la gestión de la emergencia y desastre. Los hospitales al ser antiguos son difíciles de mejorar su infraestructura, pero edificaciones nuevas o complementarias al establecimiento cuentan con la capacidad de ampliarse como las postas locales. Durante una emergencia estos establecimientos podrían ayudar a mitigar la cantidad de usuarios esperando una atención. Sin embargo, como antes lo he ya mencionado, ha de tener el hospital un respaldo económico para el crecimiento de personal que pueda satisfacer la demanda. En el hospital es importante comprender que albergamos todo tipo de usuarios empleando la edificación, desde niños en el módulo de cred, los adultos y adultos mayores. Dicho personal está ubicado de acuerdo a la necesidad de atención, sin embargo, no bajo el enfoque de gestión de riesgo. No existe en los planes de emergencia una zona segura ágil para los ancianos o personas con discapacidad, pues también son una población importante que amerita una atención ágil y segura. Es importante entender que las personas capacitadas están allí afuera en la ciudad, y junto a ellos con un trabajo articulado las emergencias se resuelven de forma más eficiente. Es por ello que podemos apoyarnos en estas instituciones para tener una data confiable y planes estratégicos de acción. hospitalario ante las autoridades. Conformación del grupo de trabajo en los diferentes niveles de atención, los cuales deben contar con un registro de proveedores que puedan apoyar durante la emergencia.