See discussions, stats, and author profiles for this publication at: https://www.researchgate.net/publication/278409654 Sistema para el Monitoreo de la Calidad de la Atención en Salud por Indicadores en los Hospitales de I, II y III Nivel de Atención Book · January 2003 CITATIONS READS 4 5,225 6 authors, including: Andrés Cubillos Novella Nelson Ardon Pontificia Universidad Javeriana Pontificia Universidad Javeriana 28 PUBLICATIONS 7 CITATIONS 15 PUBLICATIONS 47 CITATIONS SEE PROFILE SEE PROFILE Claudia Ariza Olarte Pontificia Universidad Javeriana 15 PUBLICATIONS 37 CITATIONS SEE PROFILE Some of the authors of this publication are also working on these related projects: “Determinantes sociales de las desigualdades en mortalidad materna y neonatal en las comunidades indígenas arhuaca y wayuu: evidencias y propuestas de intervención View project Migraciones de Frontera en Iberoamerica View project All content following this page was uploaded by Andrés Cubillos Novella on 16 June 2015. The user has requested enhancement of the downloaded file. PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE CIENCIAS ECONOMICAS Y ADMINISTRATIVAS POSGRADOS EN ADMINISTRACIÓN DE SALUD Y SEGURIDAD SOCIAL FACULTAD DE ENFERMERIA Sistema para el Monitoreo de la Calidad de la Atención en Salud por Indicadores en los Hospitales de I, II y III Nivel de Atención. Bogotá, 2003 Investigador Principal: Nelson Ardón Centeno Co-Investigadores: Zuleima Rubio Silva Clara Isabel Parra Navarro Rosa Daza de Caballero Claudia Ariza Olarte Asistente de Investigación: Andrés Felipe Cubillos Novella Bogotá, D.C. 2003 Proyecto 1201BH0401200. Financiado por la Vicerrectoría Académica de la Universidad Javeriana y Registrado bajo el número 1399 de 2002 2 PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA Gerardo Remolina Vargas, S.J. Rector Jairo Humberto Cifuentes Madrid Vicerrector Académico Pedro Pablo Martínez Serrano Vicerrector Administrativo Miguel Rozo Durán, S.J. Vicerrector del Medio Universitario Jaime Bernal Escobar, S.J. Secretario General FACULTAD DE CIENCIAS ECONOMICAS Y ADMINISTRATIVAS Guillermo Galán Correa Decano Académico Luis Carlos Duque Naranjo Decano del Medio Universitario Adriana Campos Rodríguez Secretaria Académica Nelson Contreras Caballero Director Posgrados en Administración de Salud y Seguridad Social Nelson Ardón Centeno Investigador Principal 3 Investigador Principal: Nelson Ardón Centeno1 Co-Investigadores: Zuleima Rubio Silva2 Clara Isabel Parra Navarro3 Rosa Daza de Caballero4 Claudia Ariza Olarte5 Asistente de Investigación: Andrés Felipe Cubillos Novella6 1 Odontólogo. Magíster en Administración de Salud, Magíster en Educación con énfasis en Formación Universitaria y Especialista en Política Social de la Universidad Javeriana. Profesor-Investigador Asistente de los Posgrados en Administración de Salud de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Javeriana. Director de la línea de investigación de “Calidad en salud y calidad de la atención en salud”. 2 Licenciada en Bacteriología y Magíster en Microbiología Médica de la Universidad Javeriana. Diplomada en Gerencia de Empresas del Sector Salud de la Universidad de los Andes. Especialidad en Sistemas de Calidad, Garantía de la Calidad y Auditoría de CELAG e ICONTEC. Investigador Científico de la Dirección General para el Control del Sistema de Calidad de la Superintendencia Nacional de Salud. Docente de Cátedra de Garantís de la Calidad y Auditoría en la Especialización en Administración de Salud con énfasis en Seguridad Social de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Javeriana. 3 Odontóloga de la Fundación Universitaria San Martín. Especialista en Administración Hospitalaria de la escuela de Administración de Negocios. Especialista en Auditoria en Entidades de Salud de la Universidad Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario. Especialista en Gestión Pública de la escuela Superior de Administración Pública. Profesional especializado en el Proceso de Garantía de la Calidad del Área de Vigilancia y Control de la Dirección de Desarrollo de Servicios de Salud de la Secretaría Distrital de Salud de Bogotá. 4 Enfermera de la Universidad de Cartagena. Magíster en Filosofía de la Universidad Javeriana y Magíster en Docencia Universitaria de la Universidad de los Andes. Enfermera Pediatra de la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia de la Universidad Nacional Autónoma de México. Profesora Investigadora Asociada del departamento de Enfermería Clínica de la facultad de Enfermería de la Universidad Javeriana. 5 Licenciada en Enfermería de la Universidad Javeriana. Enfermera Cardióloga del Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez de México. Profesora Investigadora del Departamento de Enfermería Clínica de la Facultad de Enfermería de la Universidad Javeriana. Coordinadora del Programa de Posgrado en Cuidado Crítico de la Facultad de Enfermería de la Universidad Javeriana. 6 Odontólogo del Colegio Odontológico Colombiano. Estudiante del Segundo Semestre de la Especialización en Administración de Salud con énfasis en Seguridad Social de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Javeriana. 4 5 AGRADECIMIENTOS A las autoridades de la Pontificia Universidad Javeriana por la oportunidad y el apoyo brindados durante el diseño y ejecución del proyecto. A la Dra. Amparo Hernández Bello, profesora asistente de los Posgrados en Administración de Salud y Seguridad Social, en cuya dirección nos fue aprobado el proyecto. Al Dr. Nelson Contreras Caballero, Director de los Posgrados en Administración de Salud y Seguridad Social por todos sus aportes y apoyo al proceso. Al Dr. Henry Jaír García, quien nos brindó sus valiosos aportes para la primera parte del proyecto. Al Dr. Francisco Raúl Restrepo Parra, por toda su colaboración y las asesorías y aportes brindados a lo largo del desarrollo del trabajo. Al Dr. Jesús Fonseca Cruz, por su colaboración al revisarnos como par académico nuestro informe de investigación. 6 TABLA DE CONTENIDO pág. PROLOGO 9 1. CONTEXTO DE LA INVESTIGACIÓN 10 1.9 OBJETIVOS 47 1.9.1 Objetivo General 47 1.9.2 Objetivos Específicos 47 2. METODO 49 2.1 Tipo de Estudio 49 2.2 Fuentes de Información 49 2.3 Instrumentos 49 2.4 Variables 49 2.5 Recolección de la Información 49 2.6 Procesamiento de la Información 50 2.7 Análisis de la Información 50 2.8 Criterios para la Selección de IPS de la muestra 50 2.9 Selección de las IPS 52 2.10 Elección de las IPS de la muestra para la prueba piloto 55 3. RESULTADOS 57 3.1 Sistema de Indicadores para el monitoreo de la calidad en hospitales de I, II y III 57 Nivel de atención 3.2 Metodología para la aplicación del sistema de indicadores para el monitoreo de la 73 calidad en hospitales de I, II y III nivel de atención BIBLIOGRAFÍA 81 GLOSARIO DE TERMINOS 84 7 LISTA DE ANEXOS Anexo 1 Marco Legal de Calidad de la Atención en Salud en Colombia Anexo 2 Criterios de selección de los hospitales de I, II y III nivel de atención para la prueba piloto Código de Ética para la aplicación del sistema de indicadores para el monitoreo de la calidad en hospitales de I, II y III nivel de atención Cuestionario de aplicación para los hospitales de I, II y III nivel de atención Anexo 3 Anexo 4 Anexo 5 Base de datos para la consignación de la información del Sistema de Indicadores para el monitoreo de la calidad en los hospitales de I, II y III nivel de atención 8 PROLOGO El trabajo desarrollado por el grupo de investigadores acá publicado, constituye en mi concepto un importante avance en especial en dos aspectos relevantes: la notable mejora en la solidez del marco conceptual, y la incorporación del manejo integral de los indicadores clínicos de calidad, por lo cual pronostico que se constituirá en un punto de referencia para los trabajos subsecuentes en el tema. A sus autores felicito por el excelente esfuerzo realizado y la Universidad agradezco la oportunidad de haber podido revisar el manuscrito y aportar observaciones que, espero, hayan contribuido a sumar un granito de arena para el impulso de las metodologías de evaluación y mejoramiento de la calidad en nuestro país. FRANCISCO RAÚL RESTREPO PARRA Médico Epidemiólogo de la Universidad de Antioquia. Postgrado en Evaluación y Mejora de la Calidad de la Universidad Autónoma de Barcelona/Fundación Avedis Donabedian. Docente de cátedra de la Pontificia Universidad Javeriana. Ponente en las Conferencias Internacionales de Calidad de Dublín y Buenos Aires. Autor de diversos textos de calidad y Ex Gerente Nacional de Calidad del Instituto de Seguro Social Se presenta a la comunidad académica el estudio “Sistema para el Monitoreo de la Calidad de la Atención en Salud por indicadores en los Hospitales de I, II y III Nivel de Atención” En relación con los aspectos metodológicos y formales, el documento recoge los resultados de varios años de esfuerzo de un grupo de profesores y estudiantes de la Universidad en esta línea de investigación. El marco teórico realiza una revisión de las principales aproximaciones conceptuales a la calidad en salud, así como precisa la importancia y el impacto del seguimiento permanente a los indicadores más relevantes en la prestación de los servicios de salud. El desarrollo metodológico posterior ofrece a los responsables de la gestión de calidad en las Instituciones Prestadoras de Servicios, los elementos necesarios para aproximarse al diseño de un sistema de indicadores práctico y útil para la toma de decisiones. Estamos seguros de que este documento realizará un aporte sustancial a la cultura de la gestión por calidad en las instituciones que formarán parte del estudio y de todas aquellas que, una vez terminado, se beneficiarán con los resultados del mismo. JESÚS A. FONSECA CRUZ Jefe Oficina de Calidad HOSPITAL UNIVERSITARIO SAN IGNACIO 9 CONTEXTO DE LA INVESTIGACIÓN 1. MARCO TEORICO CONCEPTUAL El Sistema General de Seguridad Social en Salud (SGSSS) creado con la Ley 100 de 1993, estableció la calidad, como uno de los fundamentos en la prestación de los servicios de salud, en la cual el control de los servicios de salud se orienta a garantizar unas condiciones de oportunidad, de atención personalizada, humanizada, integral y continua, según los estándares nacionales y los procedimientos de la práctica profesional. Bajo este concepto, en Colombia, tras la implementación del Sistema General de Seguridad Social en Salud (SGSSS) se crearon expectativas en torno al cambio real que este sistema involucraba especialmente en materia de calidad de prestación de los servicios de salud por parte de las Instituciones Prestadoras de Servicios (IPS), y más aún luego del decreto 2174/96 en el cual se organizó el Sistema Obligatorio de Garantía de Calidad, donde cada IPS debe incorporar dentro de sus actividades diarias la cultura de la calidad, y el desarrollo del sistema a partir de la creación interna de un subsistema de información soportado con el consolidado de la información estadística de la Institución, para poder evaluar no sólo el desempeño del servicio sino también la calidad con la que se presta y que termina justificando su existencia. Así mismo, los organismos de control de Estado, especialmente la Superintendencia Nacional de Salud, han mantenido un interés en poder conocer cómo se encuentra la calidad en las instituciones de salud, especialmente en las Empresas Sociales del Estado, para lo cual se han establecido algunos indicadores de reporte mensual o semestral obligatorio para éstas Instituciones. Así mismo se ha difundido una Guía para Evaluar el Sistema Obligatorio de Garantía de la Calidad de Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud. Sin embargo, a la fecha no se cuenta con estudios que hayan hecho un monitoreo o que evalúen la calidad con la que éstas Instituciones se encuentran prestando los Servicios, luego de la reglamentación. Por lo anterior el presente estudio pretende realizar el diseño, la selección, aplicación de una prueba piloto y el análisis de unos indicadores básicos de calidad para las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud de Primero, Segundo y Tercer Nivel. 10 Es importante destacar algunos conceptos que hacen parte del marco de referencia y sobre los cuales se apoyó el desarrollo de la investigación: 1.1 Calidad. En un sentido etimológico el concepto de calidad proviene del latín QUALITIS que significa el conjunto de cualidades que constituyen la manera de ser de una persona o cosa, y es sinónimo de cualidad, clase, aptitud, excelencia, categoría, casta, nobleza, superioridad entre otras muchas acepciones. (Ardón, N. y Jara, M. I. 1998) La calidad no es un concepto simple y su significado varía dependiendo de las condiciones históricas, culturales, etc. Según Donabedian “La evaluación de la calidad debe apoyarse en una definición conceptual y operativa de lo que significa “calidad de la atención médica”. En este aspecto fundamental se presentan muchos problemas, pues la calidad de la atención es una idea extraordinariamente difícil de definir” y agrega “Hay algunos que consideran que la calidad del cuidado de la salud es una propiedad tan compleja y misteriosa, tan variable de significado entre una y otra situación, que no es asignable a una especificación previa. Algunos otros tienen otro punto de vista creyendo que la calidad puede llegar a tal especificación que puede ser comprada y venida por ‘kilos’”. (Donabedian, A. 1993) Según Juran “Hay muchas frases cortas entre las que elegir, pero la frase corta es una trampa. No se conoce ninguna definición breve que traiga como consecuencia un acuerdo real sobre lo que quiere decir calidad. Sin embargo, es vital el acuerdo real; no podemos planificar la calidad a menos que primero nos pongamos de acuerdo en lo que quiere decir calidad.” Muchos conceptos diferentes han de ser incluidos de manera que la definición cubra todos los aspectos importantes de la calidad asistencial. La experiencia nos ha demostrado que no hay una simple medida de la calidad que abarque todos estos aspectos, diferentes apreciaciones pueden discrepar sobre la calidad de determinados procesos asistenciales, dependiendo desde el punto de vista del que se le mire, el interés del proveedor de los servicios (IPS, profesional), desacuerdos del pagador (EPS, ARS, paciente) o del receptor (paciente), los pueden surgir al hacerse hincapié en diferentes valores o aspectos de la calidad. Frecuentemente, por lo tanto, un estudio concreto de garantía de calidad se centra sobre un determinado aspecto para conseguir su mejora. Al revisar algunos de los principales abordajes que mejor se adapten a las necesidades especificas del entorno en el cual deba desarrollarse la actividad especifica de calidad, lo más importante para tener en claro es que la definición del concepto de calidad que se adopte para el programa de calidad debe ser lo 11 suficientemente concreta como para permitir que las evaluaciones que se hagan del desempeño puedan medir la calidad de éste en términos claramente cuantificables y que ofrezcan validez y reproducibilidad. Desde el punto de vista del modelo industrial, la calidad tiende a definirse en función de la aceptación del producto por el cliente: Juran la define como “idoneidad o aptitud o para el uso” (Juran, J.M. 1990); en tanto que para Ishikawa es la “satisfacción de los requisitos de los consumidores de ese producto o servicio”. (Ishikawa, K. 1985) Desde el punto de vista de los diversos esfuerzos desarrollados en el campo asistencial, las definiciones han ido variando desde abordajes tan cualitativos como los expresados en los Criterios de Lee y Jones7 hasta definiciones como la del Institute of Medicine: calidad del cuidado de la salud es “la medida en que los servicios de salud tanto los enfocados a los individuos como a las poblaciones mejoran la probabilidad de unos resultados de salud favorables y son pertinentes al conocimiento actual profesional”. (Suñol, R. 1998) “Donabedian define la Calidad de la atención como "el tipo de atención que se espera que va a maximizar el bienestar del paciente, una vez tenido en cuenta el balance de ganancias y pérdidas que se relacionan con todas las partes del proceso de atención". (Donabedian, A. 1984) Para su análisis, Donabedian señala tres puntos de vista diferentes según los elementos que la integran (aspectos técnico-científicos, interpersonales y del entorno), los factores resultantes (grado de atención, costos y riesgos y beneficios) y quién la define. Desde una óptica exclusivamente científica, técnica o profesional, la calidad de la atención médica sería el grado en que se consiguiera restaurar la salud de un paciente teniendo en cuenta solamente la ciencia y la tecnología médicas. En este caso, la atención médica de calidad se definiría como el tratamiento que alcanzara el mejor equilibrio entre los beneficios y los riesgos. Cuando, desde una perspectiva individual, es el usuario el que define la calidad de la atención médica, intervendrían sus expectativas y valoración sobre los costos, los beneficios y riesgos que comporte la asistencia. Este enfoque obligaría al paciente a implicarse en la toma de decisiones a partir de la información proporcionada por el profesional sanitario. Desde una óptica social, en la definición de la calidad de la asistencia médica se considerarían los mismos factores que al enunciarla desde la perspectiva individual. Pero habría que estimar nuevos criterios: el beneficio o la utilidad netos para toda una población, el modo de distribución del beneficio a toda la comunidad y procurar producir, al menor costo social, los bienes y servicios más valorados por la sociedad.” (Saturno, P. 1990) 7 En el capítulo referente a desarrollo histórico internacional de R. Suñol Y J. Bañeres, se ha incluido la transcripción de tales criterios que en su momento constituyeron un importante hito en la conceptualización de la calidad 12 Asimismo, a la luz del análisis de la teoría del Dr. Donabedian, se encuentra que la calidad de la atención trae consigo una interrelación entre dos componentes: la atención técnica y la relación interpersonal, de la cual se derivan componentes adicionales y subcomponentes, los cuales se terminan agrupando en tres diferentes aproximaciones para la evaluación: la estructura, el proceso y los resultados de dicha atención. Esta conclusión también podría tener diferentes aproximaciones desde el punto de vista de los entes reguladores del administrador, del prestador del servicio y por último del usuario. (Donabedian, A. 1990) Con base en las definiciones anteriores se deduce que la calidad implica dimensiones tales como la dimensión técnica. Al no tener un gran desarrollo en nuestro país, la dimensión técnica requiere de la mejor aplicación del conocimiento a nivel de la idoneidad profesional y la tecnología, a nivel de los procedimientos y equipos disponibles en favor del paciente. Refiriéndose a la calidad técnica, Avedis Donabedian, reitera que consiste en la aplicación de la ciencia y la tecnología médica de un modo que rinda los máximos beneficios para la salud sin aumentar de forma proporcional los riesgos. (Public Health Policy, 1998). En la dimensión técnica adquiere gran relevancia el tema de la seguridad. Con ella se busca que al tratar un paciente se consiga el mayor beneficio y el menor riesgo posible, por lo que en las medidas de calidad se debe ponderar el grado en que se logró el equilibrio más favorable entre ellos y se enfatiza que no deben lograrse beneficios para un paciente a costa de aumentar los riesgos a él o a terceros. En la tercera dimensión de la calidad, a nivel del servicio, es necesario considerar la oportunidad y continuidad con que se presta la atención, siendo importante la relación interpersonal con el paciente, las características del lugar en que se preste el servicio y la facilidad de acceso que se tenga para la prestación de éste. Hacer calidad es un imperativo ético de la vida. El reto para los profesionales de la salud es mantener una alta calidad en su desempeño, y el vehículo para ello es el establecimiento de procesos de control total de calidad como medida para evaluar y probar que se está entregando un cuidado óptimo, eficaz, efectivo, con la satisfacción absoluta del paciente. Otra razón a tener en cuenta es el mandato legal. Las Leyes son la expresión normativa de lo que una sociedad es; por lo tanto, son el punto final y no el comienzo de los desarrollos históricos. Hay que tenerlo en cuenta porque al desarrollar programas de calidad en cumplimiento de normatividad no se debe perder de vista la racionalidad económica: “hacer calidad es un imperativo ético de la vida profesional sin lugar a dudas, en este sentido significa retomar el ideal del ser profesional para desarrollar esfuerzos en un proceso de 13 alcanzarlo en la práctica profesional de la vida cotidiana; sin embargo, y a pesar de la altruista que esto pueda parecer, no es la única, tal vez ni siquiera la principal explicación de porqué están tan “a la moda” actual los programas de calidad, hay otra razón, que aunque no tan altruista, quizá tiene mayor peso práctico, sin que en ningún momento digamos que menos importancia que la anterior: hay una razón de necesidad económica: lo que la evolución de la humanidad de las últimas décadas ha evidenciado hasta la saciedad es que los diferentes métodos para el control de la calidad se han mostrado altamente ineficientes en el propósito de establecer barreras externas al prestador del servicio: hemos descubierto que finalmente es más rentable convencer al proveedor del servicio de que hay que hacerlo bien, y darle los medios y las técnicas para ello, que montarle 1000 inspectores policíacos a su alrededor; finalmente, y como consecuencia de lo anterior hay una tercera razón: el mandato legal para que se hagan esfuerzos en la mejora de la calidad de los servicios de salud; es importante tener en cuenta esto, puesto que las Leyes como tal simplemente son la expresión normativa de lo que una sociedad es, por lo tanto, son el punto final y no el comienzo de los desarrollos históricos, hay que tenerlo en cuenta, porque al desarrollar programas de calidad en cumplimiento de la normatividad, nunca debemos perder de vista la racionalidad económica y de otro tipo que les ha dado origen. (Restrepo, F. R. Video “La Ruta de la Calidad”) A partir de esta conceptualización, un experto norteamericano, W. Edwards Deming (1992), describe la calidad como “un grado predecible de uniformidad y confiabilidad de un producto a bajo costo y acorde con el mercado.” Esto solo será posible si se establece un control estadístico de la calidad, si se logra el cambio en la cultura organizacional y se compromete a los trabajadores en los procesos de producción de la empresa. Una observación que acompaña esta definición establece que al determinar si un producto o servicio satisface su aplicación debe considerarse el efecto de tal producto o servicio a la sociedad. De acuerdo con Rafael Ignacio Pérez Uribe (1992), la calidad es la satisfacción de las necesidades a diferentes niveles a partir de la producción de un bien o servicio para y por el hombre. (Pérez, R.. 1992) Para Gómez (1991) por ejemplo, la calidad puede definirse como “la satisfacción de un consumidor utilizando para ello adecuadamente los factores humanos, económicos, administrativos y técnicos de tal forma que se logre un desarrollo integral y armónico del hombre de la empresa y de la comunidad” (Gómez, E. 1991). Esto significa que la calidad no esta circunscrita exclusivamente al producto sino que se puede ampliar a aspectos tan variados como la calidad de vida, la calidad humana, calidad de la administración, calidad del sistema de la comercialización, calidad del servicio y calidad del cliente. En términos generales, la calidad puede definirse como el conjunto de características de un bien o servicio que logra satisfacer las necesidades y expectativas del cliente. (OPS. Programa de garantía y mejoramiento de la calidad en los servicios de salud en América Latina). 14 Finalmente, la Ley 100 de 1993 estableció la Calidad como uno de los fundamentos del Sistema General de Seguridad Social en Salud, con el objeto de garantizar a los usuarios una Calidad de la atención en salud oportuna, integral, continua y humanizada. 1.2 Los dos Componentes del Cuidado de la Salud. Otro concepto importante para tener claro, por su comportamiento diferente en la industria y en al ámbito sanitario, es el de los componentes del cuidado de la salud, lo cual también le da unas características específicas a la conceptualización de la calidad en el ámbito del cuidado de la salud. En palabras de Donabedian: “el cuidado del paciente tiene dos componentes: técnico e interpersonal. La calidad del manejo técnico depende del balance de los riesgos y beneficios esperados. La calidad del proceso interpersonal consiste en la conformidad con las legítimas expectativas del paciente y las normas sociales y profesionales. De esta conformidad se espera que resulte en beneficios personal y social. Una definición unificada de la calidad podría derivarse incluyendo los beneficios y los riesgos de ambos aspectos del cuidado” (Donabedian, A. 1979) 1.3 Calidad de la atención en salud. Teniendo en cuenta los anteriores puntos de vista, muchos expertos se han esforzado en establecer de manera clara y precisa la definición de la calidad en salud; sin embargo, quien más ha trabajado este concepto es el Dr. Avedis Donabedian, quien desde finales de los años 60´s y hasta la fecha se ha convertido en la máxima autoridad mundial sobre la calidad de la atención médica. Él define la calidad en salud así: “la calidad en salud es una propiedad de la atención médica que puede ser obtenida en diversos grados. Es la obtención de los mayores beneficios con menores riesgos para el paciente en función de los recursos disponibles y de los valores sociales imperantes” (Donabedian). A. 1980) Para una conceptualización más completa de calidad en salud se necesita considerar la relación entre el valor de la mejoría del estado de salud y los recursos necesarios para producir dicha mejoría. Donabedian al respecto especifica que “la atención médica se da como el tratamiento que proporciona un profesional de la salud a un episodio de enfermedad claramente establecido, en un paciente dado, del cual se originan dos aspectos, el primero, como la atención técnica que es la aplicación de la ciencia y tecnología para la resolución de un problema de salud y el segundo como la relación interpersonal, que es la interacción social y económica entre el profesional de la salud y el paciente” (Donabedian, A. 1990) En las definiciones anteriores se deduce que la calidad implica varias dimensiones, las cuales son la dimensión técnica, la seguridad, el servicio y el costo racional, donde la dimensión técnica es la más 15 importante, ya que consiste en la mejor aplicación del conocimiento a nivel de la idoneidad profesional y la tecnología a nivel de los procedimientos y equipos disponibles en favor del paciente. Refiriéndose a la calidad técnica, Avedis Donabedian reitera que consiste en la aplicación de la ciencia y la tecnología médica de un modo que rinda los máximos beneficios para la salud sin aumentar de forma proporcional los riesgos. (Public Health Policy. 1998) La calidad es, por consiguiente, la medida en que se espera que la atención suministrada logre el equilibrio más favorable entre los riesgos y beneficios. El modelo entonces propuesto por Avedis Donabedian abarca tres aspectos de control de la calidad: estructura, proceso y resultados. (Donabedian, A. 1985) Otra de las dimensiones que se toman en cuenta para evaluar la calidad es la dimensión de la seguridad: se busca que al tratar un paciente se consiga mayor beneficio que riesgo para él mismo; por tanto, en las medidas de calidad respectivas se debe ponderar en que grado se logró el equilibrio más favorable entre ellos y se enfatiza que no deben lograrse beneficios para un paciente a costa de aumentar los riesgos a él o a terceros. En la tercera dimensión de la calidad, a nivel del servicio, se considera importante la oportunidad y continuidad con que se presta la atención, siendo muy importante la relación interpersonal con el paciente, las características del lugar en que se preste el servicio y la facilidad de acceso que se tenga para la prestación del servicio. La cuarta dimensión es el costo racional de la atención, entendiendo su relación con los beneficios y riesgos que se derivan de ello, ya que al mejorar la calidad puede implicar incrementar los costos, pero también, el hacer uso innecesario o inadecuado de servicios se generan aumentos que no aumentan la calidad. (SDS, Guía. 2000) Por su parte Lee R. J., en forma de “ocho artículos de fe”, enuncia como atributos que serán bases científicas para la practica médica la prevención, la colaboración de los consumidores, de proveedores, el tratamiento del individuo en su totalidad, la relación estrecha y continuidad entre paciente y médico y el acceso integral para toda la población como variables que influyen directamente en la calidad de la salud. (Ardón, N. y Jara, M.I. 1998) En este sentido, entonces, la calidad en salud puede ser casi cualquier cosa que se quiera que sea, si bien por lo común es un reflejo de los valores y metas vigentes en el sistema de atención médica y en la sociedad. Sin embargo, es importante que la calidad de la atención que se brinda en salud sea regulada y evaluada constantemente bajo criterios estandarizados, para así garantizar un servicio sanitario óptimo. 16 1.4 Evaluación de la calidad en salud. En las instituciones que prestan servicios de salud se debe propender por que las acciones y programas de garantía de calidad se desarrollen en varios ámbitos del sistema de salud, desde el servicio clínico individual hasta la red nacional de establecimientos y servicios. Se hace entonces indispensable desarrollar mecanismos permanentes para medir y evaluar tanto cuantitativa como cualitativamente y desde el punto de vista de los financiadores, observadores, prestadores y usuarios del sistema. Para esto se deben establecer estándares que permitan comparar permanentemente el sistema y la percepción que de él tienen los usuarios, todo esto con el fin de establecer procesos de mejoramiento continuo que eleven la calidad dentro del sistema y hacia los usuarios del mismo. Para poder evaluar la calidad de la atención se deben definir los criterios, indicadores y estándares, ya que estos deben adaptarse y formularse de acuerdo a la situación particular que se va a evaluar y los objetivos que se persiguen, porque el gran reto de los sistemas de salud para establecer una metodología de evaluación apropiada y adaptada a las necesidades y oportunidades de diversas áreas radica en establecer criterios unificados acerca de lo que consiste la atención en salud. (Ardón, N. y Jara, M.I. 1998) Las metodologías documentadas en gran parte dirigen su enfoque ante todo al conocimiento de los aspectos que determinan la evaluación de la calidad y toman en cuenta tres elementos de aproximación fundamentales: la estructura (atributos de los sitios en que se presta la atención), el proceso (incluye a todos los proveedores de la atención y sus habilidades para brindarla) y los resultados (los beneficios que obtiene el paciente). El método clínico, la revisión por pares y la auditoria médica (fundamentada en la revisión de la historia clínica) siguen siendo utilizados por algunos autores, a pesar de que reconocen que los registros médicos por sí solos no sirven de base para establecer criterios de evaluación de la atención que se brinde al paciente. (Ardón, N. y Jara, M. 1998) Al realizar la evaluación de la calidad a nivel de la estructura se tiene como objeto el análisis sobre las características de las instalaciones, equipos, tecnología, recurso humano técnico y auxiliar, recursos financieros y sistema de información interna y externa. Las ventajas de esta evaluación residen en la posibilidad de alcanzar información objetiva, de gran validez y confiabilidad. Su mayor desventaja está en que no se puede deducir de la calidad de la estructura, la buena calidad de la atención. Al realizar la evaluación de la calidad a nivel del Proceso se reúne información sobre la calidad de los servicios ofrecidos por los profesionales de la institución, y sobre el grado de coordinación e integración entre las distintas dependencias encargadas del diagnóstico, tratamiento y rehabilitación, y del soporte administrativo financiero, donde cobra gran importancia la existencia y aplicación de las guías o protocolos de manejo diagnosticó y terapéutico. Por tanto, para realizar una buena evaluación de 17 procesos se debe tener mecanismos de seguimiento de la atención, tendientes a garantizar la calidad del servicio. Y por último, al realizar la evaluación de la calidad en los Resultados, se relaciona con la preocupación de si la prestación del servicio ha reportado beneficios para el usuario. El resultado se evalúa mediante indicadores que miden la conservación o mejoría en el estado de salud del paciente, la presencia o ausencia de complicaciones, la muerte o invalidez en distinto grado. Se evalúa igualmente la satisfacción obtenida por el proveedor y el usuario de los servicios. Las ventajas de esta evaluación son la efectividad del cuidado en salud, que los resultados en términos generales son más concretos y la cuantificación mas exacta, y los estudios pueden ser mas universales y comparables en razón de la validez y confiabilidad de sus resultados. Sin embargo, como desventajas se tiene que los resultados dependen mas de la capacidad técnico-científica del personal de salud que de la calidad integral de la atención; además, los resultados pueden ser no muy significantes en la valoración del proceso integral de la atención y finalmente los resultados de la satisfacción de usuarios y proveedores tienen un alto grado de subjetividad, resultando difícil su cuantificación. (Malagón, G. y otros. 1998) En el ámbito internacional se observa un interés por evaluar el desempeño de los profesionales de la salud, especialmente los autores mexicanos que han sido los más preocupados no sólo por establecer y documentar por escrito metodologías con enfoques y elementos mejor definidos, sino también por establecer mecanismos y estrategias que consoliden el Sistema Nacional de Salud de su país y mejoren la calidad de la prestación de sus servicios. Pero Avedis Donabedian es el más descriptivo en su metodología, especialmente en lo referente a los criterios que deben tomarse en cuenta para la evaluación de la calidad. Los criterios enfocados hacia la estructura involucran los recursos con que cuentan los proveedores de la salud; los criterios del proceso incluyen el objeto primario de evaluación, ya que comprende las actividades que se llevarán a cabo por y entre profesionales y pacientes, y entre los criterios de resultado se incorpora el cambio del estado actual y futuro de la salud del paciente. (Ardón, N. y Jara, M.I. 1998) La evaluación de la calidad y su implementación ha tenido una evolución en el tiempo. Inicialmente las actividades relacionadas con la Calidad de los servicios sanitarios se centraron, (década de los años 60´s), en la evaluación de los servicios sanitarios. Las primeras experiencias consistieron en la acreditación de los centros sanitarios e instituciones docentes, evaluando los aspectos estructurales en los que se desarrollaban estas actividades. En un momento posterior y en forma paralela al crecimiento del sistema de acreditación de centros sanitarios, se desarrolló la metodología necesaria para evaluar la práctica clínica, observando directamente el proceso mediante el empleo de criterios implícitos o bien aplicando métodos estructurados como el audit. Médico, en el que se utilizaron criterios explícitos que permitían, además de establecer estándares asistenciales, comparar la Calidad entre diversos centros. La evaluación del proceso asistencial cobró un fuerte impulso como consecuencia de que la acreditación, 18 además del prestigio que suponía, fue una vía importante para acceder a fuentes de financiación pública que establecía, entre sus requisitos, la realización de auditorias médicas. A partir de la década de los 70´s la evaluación de la Calidad se complementa, haciendo un énfasis especial, con su mejora explícita. Comienza lo que se puede denominar “la etapa de la garantía o mejora de la Calidad”. Durante esta fase, el incremento de los costes asistenciales justificó la implementación de programas externos en los que se evaluaba la adecuación de los ingresos y las estancias hospitalarias, así como la utilización de los recursos asistenciales. La necesidad de evaluar la eficiencia de la atención facilitó el desarrollo de métodos basados en la evaluación de los resultados de la asistencia. Dentro de estos resultados se incluyó, además de las modificaciones en el estado de salud, la satisfacción de los pacientes atendidos. Además, el interés por la contención de costos favoreció también las evaluaciones de tipo concurrente, ya que para que las actividades de mejora de la Calidad tuvieran impacto sobre los costos, éstas debían realizarse antes de que se concluyera el proceso asistencial. A partir de la década de los 80´s, se van incorporando y adaptando los conceptos y métodos de la Gestión de Calidad de la industria. Las principales aportaciones han sido la estructuración de los programas de mejora de la Calidad en un ciclo secuencial con tres actividades definidas: planificación, ejecución de la tarea y comprobación; la metodología del control estadístico de proceso y la incorporación de una cultura de la Calidad en la que tienen una gran relevancia el liderazgo de los gestores, la participación de los profesionales y las necesidades del usuario. En el país, tras la implementación del SGSSS, se han creado expectativas en torno al cambio real que éste involucra especialmente en materia de la calidad de la prestación de los servicios de salud por parte de las Instituciones Prestadoras de Servicios (IPS), más aún luego del decreto 2174 de 1996 con el cual se organizó el Sistema Obligatorio de Garantía de Calidad, se establece que cada IPS debe incorporar dentro de sus actividades diarias la cultura de la Calidad y el desarrollo del sistema a partir de la creación interna de un subsistema de información soportado con el consolidado de la información estadística de la Institución, para poder evaluar no sólo el desempeño del servicio sino también la calidad con la que se presta. Por ello, se está promoviendo a nivel gubernamental que las instituciones prestadoras de servicios realicen el montaje de sus sistemas de garantía de calidad, para que puedan someterse a evaluaciones 19 externas, como es la de los requisitos esenciales y la de acreditación. Con los requisitos esenciales se pretende que al ser éstos estándares básicos para la prestación de los servicios de salud, se constituyan el primer escalón de calidad y por tanto la primera evaluación de calidad a la que debe estar sometida una IPS. Con la acreditación se pretende que mediante una institución no gubernamental se acredite que una Institución Prestadora de Servicios cumple con estándares elevados de calidad.(SDS, Guía. 2000) Pero para pensar en la evaluación de la calidad hay que establecimiento de un Sistema de Monitorización, tener en cuenta la importancia del considerado como el conjunto consolidado de mecanismos para la recolección, procesamiento y análisis de datos relativos al estado de la calidad. Un Sistema de Monitorización constituye uno de los elementos que integran el sistema de Calidad y constituye un sistema de alerta en puntos críticos que mediante la identificación de la variación contra estándares internos o externos, o las variaciones esporádicas indicadoras de problemas, puede dirigir los esfuerzos a desatar acciones que disminuyan costos o mejoren los procesos. Por tanto, antes de diseñar un sistema de monitorización es necesario tener en cuenta los siguientes aspectos: definir cuál es el desempeño, identificar las funciones claves y precisar los problemas o riesgos. Asimismo, es necesario tener en cuenta una serie de dificultades que se pueden presentar durante la instauración de un eficiente sistema de monitorización: o Desequilibrio del desarrollo metodológico en su diseño. El hacer énfasis en el qué medir, en el para qué o el cómo, se introduce un desequilibrio en el proceso de diseño de los indicadores que finalmente afecta su valor predictivo y su capacidad real para representar herramientas gerenciales que permitan obtener resultados específicos, cuantificables y significativos para la gestión institucional o los resultados de la atención del paciente. o Dificultades para centrarse en lo importante. No hay que medir mucho, hay que medir lo estrictamente necesario para obtener resultados importantes. Hay que medir los procesos claves en los cuales existan riesgos importantes para la calidad y en los cuales se puedan obtener resultados concretos que justifiquen el esfuerzo. Para obtener una medición efectiva deben cumplirse condiciones tales como conocer qué es lo importante y relevante para medir, disponibilidad de buenas herramientas de medición, habilidad en la aplicación de estos instrumentos y medir correctamente las cosas correctas. 20 o Enfoque estructuralista. Existe la tendencia a privilegiar el enfoque hacia deficiencias estructurales de los prestadores de los servicios dándose como resultante instrumentos de evaluación con numerosos criterios, estándares e indicadores que identifican las deficiencias en la estructura o en recursos humanos, físicos y tecnológicos. Sin embargo, la existencia de la estructura no garantiza que el resultado final que se pretende alcanzar se consiga. o Desconocimiento del desarrollo metodológico. La construcción de indicadores es un paso intermedio y no el primero de un sistema de garantía de calidad que tiene que estar articulado en el conjunto del sistema y es necesario conocer los enfoques posibles, sus componentes, sus fuentes y las metodologías necesarias para desarrollar sistemas de monitorización modernos con capacidad de tener resultados. 1.5 Indicadores. La medición es acción y efecto de medir y medir es determinar una cantidad comparándola con otra. Proporcionar y comparar una cosa con otra, pero es importante determinar el porqué de la medición: • La medición permite planificar con mayor certeza y confiabilidad • La medición permite discernir con mayor precisión las oportunidades de mejora de un proceso dado. • La medición permite analizar y explicar cómo han sucedido los hechos. El argumento más importante y que incluye los anteriores, es que la medición es necesaria e indispensable para conocer a fondo los procesos, ya sean administrativos o técnicos, de producción o de apoyo que se dan en la organización, y para gerenciar su mejoramiento acorde con la exigente competencia actual. El conocimiento de un proceso parte de admitir y conocer su variabilidad y sus causas, y las mismas son imposibles de conocer sin medición. Conocer esto es precisamente la clave para gerenciar el proceso, para alcanzar los objetivos de excelencia que se plantean. Conocer un proceso no es hacer “un estudio una vez”, sino que se trata de una actitud permanente de observación y estudio para aprender las tendencias del proceso, sus condiciones, potencialidades, limitaciones y causas. 21 Muchas veces se interpreta que la medición solo es útil para conocer las tendencias “promedios”, olvidando que éstas son útiles dependiendo de cómo sean presentadas o procesadas y que cuando se dirigen procesos dentro de las empresas (y se quiere hacerlo a los niveles de la excelencia que está exigiendo la competencia en la actualidad) no basta solo saber las tendencias promedios sino que se debe ir más allá, conociendo con precisión la variabilidad en toda su gama y la interconexión de factores y causas en cada nueva situación. Medir es el medio o instrumento para gerenciar sobre la base de datos, para evitar el “yo creo”, “me parece”, “yo pienso”, dejando opiniones subjetivas para las situaciones en las que no existan medios cuantificables para medir y verificar a través de datos. La gerencia sobre la base de datos es, a su vez, una clave para la gerencia participativa, ya que se eliminan muchas discusiones, facilitando la observación común de todos y los aportes enriquecidos que surgen de interpretar una realidad específica correctamente desde diversas posiciones o puntos de vista. Por otra parte, desde el mismo punto de la participación, hay mucha resistencia a la medición. Algunos manifiestan que lo importante es hacer las cosas bien, con calidad, mejorar siempre y por tanto la medición es innecesaria; sin embargo, pronto o tarde caen en cuenta que no se pueden desarrollar mejoras si no tenemos claro cómo medir lo que vamos a mejorar. Esta resistencia parte de la gerencia que no dota al personal de habilidades para medir, establecer y calcular indicadores válidos, representativos del proceso o trabajo en el que intervienen; en segundo lugar parte del mal uso que ha tenido la medición cuando lo que se pretende es buscar culpables. La medición no puede entenderse como un proceso de recoger datos, sino que debe insertarse adecuadamente a un sistema de toma de decisiones. Por esto es importante resaltar que para entender un fenómeno es necesario tener una teoría que ayude a explicar la concatenación y sucesión de los hechos que se quieren estudiar. Los datos ayudarán a confirmar o a replantear una teoría, pero siempre se debe contar con un marco teórico que posibilite la caracterización de los datos que se requieren y que además ayude a interpretarlos. Se pueden tener muchos datos sobre las causas de un efecto, pero si no se tiende a clasificarlos, estudiar su frecuencia, aislar los principales y establecer sus relaciones, con la finalidad, ya sea de poner bajo control el proceso o de mejorar su desempeño, de poco servirán dichos datos y su medición. Para garantizar la confiabilidad de los resultados de un sistema de medición es fundamental contar con un clima organizacional sano, donde los intereses comunes de la organización prevalezcan sobre los de 22 los departamentos y mucho más sobre aquellos intereses individuales incompatibles con el logro de los objetivos del sistema analizado. En esta perspectiva debe buscarse que el análisis de las mediciones tienda a identificar responsabilidades de mejora y no a establecer culpables. Por responsable se entiende aquel que puede y debe tomar las decisiones pertinentes para la mejora en el momento oportuno. Establecer este clima es una de las tareas fundamentales de la alta gerencia, que debe propender por despejar las dudas que atentan contra ese clima de confianza. Se debe insistir en que la medición interesa como un aspecto de los procesos de toma de decisiones a los diferentes niveles y vista la dimensión organizacional de las mediciones, es importante desarrollar las mismas de la manera más participativa posible. Esto ayuda a lograr el clima de confianza y aceptación en que deben desenvolverse las mediciones, así como a mejorar los niveles de participación y compromiso de todo el grupo de trabajo en las etapas ulteriores de análisis y mejoramiento de las áreas de oportunidad detectadas. Una buena medición debe tener características y atributos. Debe ser transparente y entendible para quienes deben hacer uso de ella y además debe tener: • Pertinencia • Precisión • Oportunidad • Confiabilidad • Economía La pertinencia se refiere a que las mediciones que se hagan deben ser tomadas en cuenta y tener importancia en las decisiones que se toman sobre la base de las mismas. Esta medición debe revisarse periódicamente, ya que algo que sea muy importante en un momento determinado puede dejar de serlo al transcurrir el tiempo. La precisión se refiere al grado en que la medida obtenida refleja fielmente la magnitud el hecho que se quiere analizar y corroborar. Para lograr la precisión de una medición se debe contar con una buena definición operativa, se debe elegir un instrumento de medición y se debe asegurar que el dato dado por el instrumento sea bien recogido por el operador. 23 La medición es la información para el logro de ese conocimiento profundo de los procesos que permita tomar las decisiones adecuadas, bien sea para prevenir, corregir o para diseñar elementos que impidan que las características deseadas se salgan fuera de los límites de tolerancia. Por esto, contar con la información procesada oportunamente es un requisito importante para quienes diseñan un sistema de medición. La confiabilidad hace referencia al hecho de que la medición en la empresa no es un acto que se haga una sola vez; es un acto repetitivo y de naturaleza generalmente periódica. Un aspecto de suma importancia para garantizar la calidad en el desarrollo de herramientas de medición para la evaluación de la calidad en salud son los Indicadores, ya que estos se definen como “... Instrumentos de medición válidos destinados a establecer el cambio, resultado o impacto de una actividad, proyecto o programa... ” (CIENES/OEA. 1995) Otros autores dicen que un indicador es un rastro, una señal, una medida de las variables, y que todo indicador tiene una dimensión cualitativa (descripción de la variable) y una dimensión cuantitativa (la expresión porcentual, numérica, o de cantidad, que puede adquirir). Los indicadores están disponibles para respaldar integralmente la gestión organizacional y gerencial, pero es el tipo y alcance de la gestión lo que, en primera instancia, potencia sus resultados (Giraldo, P. 1997) El diccionario Larousse define indicador como “que indica o sirve para indicar”, si a ésta se añade el calificativo de “gestión” que es “la acción y efecto de administrar la empresa”, se puede obtener una definición completa y factible de ser operacionalizada: “es la expresión cuantitativa del comportamiento o desempeño de una organización o departamento, cuya magnitud, al ser comparada con algún nivel de referencia, puede estar señalando una desviación sobre la cual se tomarán acciones correctivas o preventivas según sea el caso”. Se pueden resaltar algunas de las virtudes de los indicadores, entre las cuales sobresalen las siguientes: permiten una visión globalizante; focalizan la atención y los esfuerzos; hablan por sí mismos y por ello deben ser claros y objetivos, subjetivos bajo estándares; potencian y promueven la acción; se defienden con base en un acuerdo, lo que permite que sean comúnmente aceptados; y su medición y análisis sistemático son viables (Granados, R. 1997) 24 La Joint Commission define que un indicador de calidad “... es una medida cuantitativa que puede ser usada para monitorizar y evaluar la calidad de las funciones claves del gobierno, la administración, clínica y de soporte, que afectan los resultados del paciente. Un indicador no es una medida directa de la calidad. Sin embargo, es un instrumento que puede ser utilizado para evaluar el desempeño y puede dirigir la atención a los asuntos potenciales del desempeño que podrían requerir mas intensiva revisión dentro de una organización.” (Restrepo, F. R. 1998) De otra parte, Rafael Rincón define un indicador de calidad como una herramienta que nos permite evaluar unas actividades y si lo aplicamos a las actividades de la organización que implican directamente en el producto o servicio y por lo tanto en el cliente, estas medidas se transforman en indicadores de calidad. (Rincón, R. 1998) Los indicadores de gestión son expresiones cuantitativas que permiten analizar cuan bien se está administrando la empresa o unidad en áreas como uso de recursos (eficiencia), cumplimiento de las actividades programadas (eficacia), errores de documentos (calidad), etc. Para trabajar con los indicadores se debe establecer todo un sistema que vaya desde la correcta aprehensión del hecho o característica a ser medida hasta la toma de decisiones acertadas para mantener, mejorar e innovar el proceso del cual dan cuenta. Por ello en la construcción de indicadores de gestión se deben tener en cuenta los siguientes elementos: • Definición • Objetivo • Niveles de referencia • Responsabilidad • Puntos de lectura • Periodicidad • Sistema de procesamiento y toma de decisiones Cada vez que se tenga que establecer un indicador nuevo o revisar los existentes se deben chequear los anteriores elementos para garantizar su uso adecuado. La definición de un indicador es la expresión matemática que cuantifica el estado de la característica o hecho que se quiere controlar. La definición debe ser expresada de la manera más específica posible, evitando incluir las causas y soluciones en la relación. Se debe contemplar solo la característica o hecho 25 que se observará o medirá. Se pueden medir cantidades de producción, proporciones, lapsos de tiempo, etc. Ejemplos de indicadores que se pueden definir son: porcentaje de ocupación de camas, número de accidentes de trabajo mensuales, porcentajes de cumplimiento de un estándar, rotación de personal, número de facturas cobradas antes de 45 días de vencimiento, cantidad de reportes retrasados, número de errores por informe. El objetivo del indicador debe expresar el “para qué se quiere gerenciar el indicador seleccionado”; expresa el lineamiento político, la mejora que se busca y el sentido de esa mejora (maximizar, minimizar, eliminar, etc). El objetivo, en consecuencia, permitirá seleccionar y combinar acciones preventivas y correctivas en una sola dirección. Esta combinación dependerá de la magnitud de los problemas y el momento (oportunidad) de intervención. No es lo mismo atacar un problema de porcentaje de productos defectuosos al momento de diseñar el producto, que al momento de cumplir la producción del día. El objetivo permitirá tener claridad sobre lo que significa mantener un estándar en niveles de excelencia y adecuarlo permanentemente ante los diversos cambios, así como proponerse nuevos retos. El acto de medir se realiza a través de la comparación, y ésta no es posible si no se cuenta con una referencia contra la cual contrastar el valor de un indicador. Esa desviación es la que realmente se transforma en el reto a resolver. Un mismo valor actual de un indicador puede señalar varios tipos de problemas si se comparan contra diversos niveles de referencia, dentro de los cuales se pueden mencionar histórico, estándar (medición del trabajo), teórico, requerimiento de los usuarios, competencia, consideración política, técnica de consenso, planificado. El nivel histórico se determina a partir del análisis que se haga de la serie de tiempo de un indicador, presenta la manera como ha variado en el tiempo. Con esa información, y aplicando las técnicas de análisis y proyección adecuadas, se pueden proyectar y calcular un valor esperado para el período que se está gerenciando bajo las premisas de que nada cambiará. El valor histórico es clave para presupuestos y programas sobre bases realistas y para ilustrar el logro en la evolución de los resultados. El valor histórico señala la variación de los resultados de la unidad de análisis, su capacidad real, actual y probada. Informa acerca de si el proceso está o ha estado controlado o no, según la disposición de sus valores. Cada resultado muestra la manera como se han combinado en un período determinado los factores externos e internos, los factores controlables y los no controlables, las circunstanciales, los 26 permanentes, etc. El valor histórico dice qué se ha hecho, pero no dice el potencial alcanzable, aunque dependiendo del grado de control, algunos valores pueden estar indicando capacidades del sistema, si se eliminaran las llamadas causas especiales. El estándar se calcula utilizando las técnicas de estudio de métodos y de medición del trabajo. El estándar señala el potencial de un sistema determinado, unos equipos, insumos y mano de obra dada, con unos métodos de trabajo dados en unas instalaciones dadas, etc. Representa lo mejor del statu quo. En este sentido representa el valor que se puede lograr si se hacen bien las tareas. El estándar nos dice el comportamiento del sistema en el tiempo; no dice mucho acerca de la incidencia de factores externos en coyunturas, o del comportamiento ante la presencia de factores o situaciones extraordinarias. El estándar es un nivel de preferencia insustituible y siempre debe tratar de construirse; pero el estándar no se calcula una sola vez, sino que hay que mantenerlo actualizado con los diversos cambios de orden tecnológico o de materias primas, o avances en las curvas de aprendizaje de los operarios, o por mejoras de los métodos y sistemas. El nivel teórico, llamado también de diseño se utiliza como referencia de indicadores vinculados a capacidades de máquinas y equipos en cuanto a producción, consumo de materiales, fallas esperadas. El nivel teórico de referencia es un dato que da el fabricante del equipo, es un dato de diseño. Este da la máxima capacidad del sistema con una maquinaria y equipos determinados, cuya operación solo puede ser superada si se mejora, modifica, innova o sustituye la tecnología dura del mismo. Su incumplimiento refiere causas múltiples asociadas a los sistemas, normas, métodos, recursos humanos, materiales, etc. con que se operan dichos equipos, es decir, asignables a la gerencia de la empresa. La utilización de los requerimientos del cliente como nivel de referencia señala las pautas inmediatas de la mejora en caso de que estos sean deficientes. En el caso de que se cumplan holgadamente puede llevar a reorientar acciones frente a la competencia o a redefinir políticas de tarifas, o a incursionar en mercados más exigentes y atractivos. La utilización adecuada de los requerimientos de los usuarios como nivel de referencia presupone un conocimiento a fondo de las verdaderas necesidades de los usuarios. Implica el conocimiento de las características de calidad real del usuario, a fin de fijar adecuadamente parámetros para las características de calidad sustitutas. 27 Para abordar el uso de niveles de referencia provenientes de la competencia se dividen en dos grupos: aquellos que se refieren al producto final (calidad, impacto) y aquellos que se refieren al proceso (rendimientos, productividad, eficiencia). El uso del primer grupo de indicadores es un imperativo del mercado, el cliente optará por la mejor combinación de características en la gama de productos que le están ofreciendo. De ahí que debe considerarse ineludible compararse con el mejor de la competencia si se quiere asegurar la permanencia en el mercado. Esta perspectiva exige un permanente afinamiento de las estrategias de mercadeo y ventas, a fin de asegurar las ventajas competitivas que se vayan logrando. El uso del segundo grupo de indicadores referidos incide en los niveles de costos y por esa vía en la magnitud de los beneficios. El uso de indicadores de la competencia no toma en cuenta las características de capacidad del proceso de cada empresa, de ahí que deba tenerse claridad que la comparación con la competencia solo señala hacia dónde y con qué rapidez se debe mejorar, pero no dice nada del esfuerzo. En el nivel planificado se han visto diversos niveles de referencia con métodos de cálculo específico, los cuales tienen utilidad para establecer responsabilidades por la mejora de diferentes niveles o para tipificar las causas particulares. También se han mencionado en sentido inverso a lo que se podría llamar la pirámide de los niveles de referencia para los indicadores de gestión, comenzando en la base con el histórico y concluyendo en la cúspide con la referencia política. En cada nivel habrá mayores o menores desviaciones a ser gerenciadas a través de un plan de acciones específicas, por ello entre cada nivel se tendrán niveles de referencia planificados que no son otra cosa que los niveles-meta que se pueden y deben alcanzar en el futuro inmediato. La responsabilidad se refiere a la necesidad de especificar y clarificar a quiénes les corresponde actuar en cada momento y en cada nivel de la organización frente a la información que está suministrando el indicador y su posible desviación respecto a las referencias escogidas. Un indicador clínico es una medida cuantitativa que puede usarse como guía para monitorear y evaluar la calidad de actividades importantes al paciente y los servicios de apoyo. Un indicador no es una medida directa de calidad. Es un filtro o barrera que identifica o dirige los aspectos específicos del desempeño en una organización de salud hacia áreas que requieren un análisis más profundo. La calidad de la atención al paciente es determinada por varios factores que incluyen: accesibilidad, oportunidad, 28 efectividad, eficacia, eficiencia, continuidad, privacidad, confidencialidad, participación y adecuación; los indicadores son usados para evaluar uno o más de los factores anteriores. Los indicadores de calidad en Enfermería definen la esencia de la práctica de la profesión al describir el alcance y contenido de un excelente cuidado. Describen qué deberá hacerse, y cómo se beneficiará el paciente de unos buenos cuidados. Además, identifican las responsabilidades principales de la enfermera y definen la calidad de la ejecución de estas responsabilidades. Los indicadores de calidad ayudan en la evaluación y en el perfeccionamiento de la propia experiencia, dando satisfacción cuando se desempeñan de manera excelente, proporcionando criterios objetivos para la valoración de una actividad y determinando las necesidades del personal de una unidad de cuidados de Enfermería. En el ambiente de calidad, los empleados ya no tienen temor de señalar los problemas en el sistema; el trabajo en equipo aumenta la capacidad de integración de conceptos y ofrece una visión más amplia de la empresa permitiendo una mayor cobertura. El doctor Deming introdujo conceptos de gran valor para el mejoramiento de la calidad y entre otros nos ofrece 14 aspectos que incluyen el trabajo en equipo. Este debe crear un constante propósito hacia el mejoramiento del producto y del servicio, con el objetivo de hacerse competitivo, permanecer en el círculo laboral y ofrecer oportunidades de trabajo. El grupo debe adoptar una nueva filosofía: asumir responsabilidades y tomar el liderazgo como cambio; reducir al mínimo posible el costo total; mejorar constantemente y para siempre el sistema de producción y servicios para subir la calidad y productividad, disminuyendo así los costos y en forma constante; establecer el entrenamiento en el trabajo; establecer el liderazgo, eliminar los temores de modo que todos puedan trabajar eficientemente para la compañía; echar abajo las barreras entre departamentos, eliminar las consignas, exhortaciones y objetivos para la fuerza del trabajo, pidiendo nuevos niveles de productividad; eliminar la administración de objetivos; romper las barreras que roban al trabajador contratado por horas su derecho a sentirse orgulloso del trabajo realizado; establecer un programa vigoroso de educación y mejoramiento de sí mismos; poner a todo el mundo en la institución a trabajar en el logro de la transformación. Estos “deberes” para el mejoramiento, proporcionan una guía para la creación y el establecimiento de un ambiente de calidad mediante cambios en el comportamiento y la utilización de métodos estadísticos para mejorar continuamente un proceso. Dentro de ellos encontramos el diseño y aplicación de indicadores que permiten la evaluación de dicho proceso, como se ha mencionado anteriormente. Es importante hacer énfasis en que todo proceso debe comenzarse con una planeación estratégica dentro de la cual se resaltan los siguientes aspectos: 29 • Recurso Humano y la Calidad Total: Este punto resalta la necesidad de hacer participar a todos en el proceso de gerencia de la calidad total, con el fin de desarrollar el potencial que posee cada una de las personas que conforman la empresa o institución. Es importante tener en cuenta la calidad humana al hacer la selección y reclutamiento del personal que ingresará a la empresa, pues serán los empleados los responsables del proceso y el resultado de su trabajo, bajo las directrices de acción que brinda la empresa. Pretende hacer sentir a las personas como dueñas de sus tareas y que la empresa confía en su capacidad para realizarla de manera que converjan los objetivos del empleado, la empresa y el usuario y así contribuir al mejoramiento de la calidad. • Evaluación del desempeño: Debe satisfacer las expectativas de las personas y permitir el desarrollo de su potencial. Debe tener en cuenta las expectativas y objetivos tanto de la institución como de los clientes internos y externos. Debe incluir la evaluación de proceso y resultado para identificar en qué parte se encuentran las fallas del desempeño. Los resultados obtenidos de la evaluación del desempeño deben dar lugar a un sistema de reconocimiento, no solo de tipo económico, sino también de promociones, ascensos, diplomas, que contribuyan a mantener un elevado espíritu de trabajo; además, este sistema de reconocimiento está directamente relacionado con el éxito o fracaso de la aplicación de la filosofía de la calidad total • Educación en calidad total: Es una manera eficaz de transformación que permite establecer un rumbo a la organización. Es necesario enseñar la filosofía de la calidad total, qué se pretende con ella y qué papel juega cada uno en el proceso de cambio; también se debe enseñar los métodos y técnicas para aplicar los principios de la calidad total en el trabajo diario y favorecer el desarrollo de habilidades. La educación en calidad total se convierte en una inversión en capital humano, considerado como el más importante de la empresa. • Metodología para mejorar la calidad: Existen modelos que buscan contribuir al mejoramiento de la calidad mediante su aplicación, la cual es llevada a cabo en forma cíclica para favorecer su aprovechamiento. Dentro de ellos se pueden mencionar: NECA: Normalizar el proceso Ejecutar el proceso según normas Comprobar estabilidad o variabilidad del proceso Actuar para hacer cumplir las normas 30 PHVA: Planear el cambio del proceso (cómo, cuándo, qué, quien, dónde, para qué, cuánto) Hacer el cambio según el plan Verificar los resultados Actuar para mejorar • Escuchar al cliente interno: Todos los empleados deben participar en la formulación de la misión de su departamento (razón de ser, para qué existe, propósito). Así se establece un compromiso con ésta y cada uno tiene bien claro y definido su papel en el cumplimiento de la misión, la cual es integrada a la de la empresa. Escuchar al cliente interno sirve para definir proyectos de mejoramiento, identificar problemas que pueden ser solucionados en el departamento, o que involucran a otros departamentos y de esta manera poder conformar un equipo de mejoramiento interdepartamental. Incluye los siguientes aspectos: * Identificar el problema de calidad * Conformar el equipo de mejoramiento * Ratificar la gravedad del problema * Escuchar al cliente sus necesidades y expectativas * Definir el proceso * Identificar las raíces del problema * Formular estrategias para la búsqueda de soluciones * Normalizar acciones correctivas * Reconocimiento a quienes hayan impulsado la calidad total * Hacer el control sistemático por medio de ciclos de control. • La calidad del servicio: Servicio es el resultado tangible de una actividad de trabajo. Quien define la calidad es el cliente con base en la satisfacción de sus necesidades y expectativas en relación con el producto o servicio obtenido. Es importante medir la lealtad del cliente, establecer canales permanentes de comunicación con el cliente, evaluación de procesos y productos internos, responsabilizar al empleado para que afronte los riesgos en la búsqueda de la satisfacción del cliente, crear un departamento de servicio al cliente, dar reconocimiento a las personas por aplicar la filosofía de la calidad total, y realizar autoevaluación periódica. 31 Para este proyecto de investigación es importante tener en cuenta el concepto de indicadores de calidad en salud, que según Ruiz (1998) Joint Commission los define como “... una medida cuantitativa que puede ser usada para monitorear y avaluar la calidad de las funciones claves del gobierno, la administración clínica y de soporte que afectan los resultados del paciente. Un indicador no es una medida directa de la calidad; sin embargo, es un instrumento que puede ser utilizado para evaluar el desempeño y puede dirigir la atención a los asuntos potenciales del desempeño que podrían requerir mas intensiva revisión dentro de una organización...” (Ruiz, L. 1998). Por ello, en el marco de esta investigación, un indicador será considerado como una unidad de medida de las variables que permiten monitorear y evaluar la calidad en la prestación de los servicios de salud de las instituciones prestadoras de servicios de salud tanto de primero, segundo como de tercer nivel. 1.5.1 Utilidad de los indicadores. Los indicadores sirven para conocer el cambio o comportamiento de una variable; miden la capacidad de reacción ante cambios en el entorno (flexibles); determinan el aprovechamiento de recursos frente a unos resultados (eficiencia); muestran un cumplimiento o un avance en determinada actividad (eficacia); y sirven para “observar” y medir los cambios cuantitativos (mayores o menores) y cualitativos (positivos o negativos) que presentan, en determinado momento del tiempo o entre períodos del tiempo, cierta variable. (Giraldo, P. 1997) 1.5.2 Construcción de indicadores. Los indicadores se construyen con base en la identificación de las variables que subyacen en los objetivos del estudio, en sus metas y en sus resultados. Para lograrlo, es necesario: identificar los “conceptos claves” del estudio; construir un significado colectivo de la variable, lo que exige llegar a un acuerdo sobre lo que se entiende por cada variable; desglosar las variables, a través de un proceso de deducción lógica, en indicadores que representan ámbitos específicos de las variables y se encuentran en un nivel de abstracción intermedio; diseñar todos los indicadores que sean necesarios para expresar cada dimensión de una variable; priorizar y seleccionar los indicadores. (Giraldo, P. 1997) 1.5.3 Formas de expresar los indicadores. Dentro de la forma de expresar los indicadores se encuentran: las proporciones, que se usan para destacar aspectos de distribución; las tasas, para mostrar la evolución de un fenómeno en el tiempo; las medidas estadísticas, que se usan para mostrar comportamientos típicos (promedios, mediana, moda; y las razones (índices) que se utilizan para dar cuentas de características particulares en un momento dado. Una vez que se cuenta con la información proveniente de fuentes primarias o secundarias, se realiza el respectivo cálculo, el cual depende del tipo de indicador seleccionado (cifra absoluta, tasa, promedio, etc.) y de su estructura (simple o compleja) (Giraldo, P. 1997) 32 1.5.4 Tipos de indicadores: Los indicadores pueden clasificarse de acuerdo al objeto de evaluación, según su umbral de activación o según el resultado esperado: 1.5.4.1 Según su aproximación: Donabedian estableció tres clasificaciones que deben ser tenidos en cuenta al evaluar la calidad. Ellos son ESTRUCTURA, PROCESO Y RESULTADOS; por tanto, los indicadores pueden ser de estructura, de proceso y/o de resultado. Sin embargo, los de estructura tienen poco uso, ya que su sola existencia no garantiza el resultado esperado se de. En cambio, cuando el resultado es negativo, en el análisis puede retrocederse hasta detectar si la falla se ha dado en la estructura. Los indicadores de proceso tienen valor en cuanto tengan alta correlación con los resultados esperados, que definen una atención de calidad. Y los indicadores de resultado son los más importantes, puesto que evidencian si efectivamente se dio la atención con calidad. Sin embargo, en muchas ocasiones los resultados se dan al final del proceso de atención y su información no es siempre oportuna para tomar los correctivos necesarios. 1.5.4.2 Según Umbral de activación pueden ser basados en Tasas o Centinelas. Los primeros operan en función de la Tasa, en la cual los eventos ocurren dentro de un universo definido en un período de tiempo determinado. Cuando ellos son utilizados es necesario definir un umbral (estándar) para el indicador. Cuando el estándar se fija en umbrales inferiores al comportamiento observado poco sirve como elemento para presionar el inicio de un proceso de mejoramiento. Cuando es ubicado en niveles superiores fija metas que por lo inalcanzables tampoco consiguen el objetivo. 1.5.4.3 Según el resultado esperado se clasifican en deseables y no deseables. Todo lo anterior lleva a pensar que el reto para los profesionales de la salud en la presente década es mantener una alta calidad en su desempeño. El vehículo para esto es el establecimiento del control de la calidad como medida para presentar y probar que se está entregando un cuidado óptimo en eficiencia y efectividad con la satisfacción absoluta del paciente. Dicha calidad y su mejoramiento dependen en gran parte de la habilidad de la administración para crear una atmósfera que demuestre su dedicación en comprender su importancia y en aceptar la responsabilidad para mejorarla. El medio ambiente de la calidad fomenta el trabajo en grupo, la comunicación, la solución de los problemas en común, la seguridad, el orgullo en la labor ejecutada, la 33 confianza y un mejoramiento interminable. En esta clase de atmósfera prevalece un espíritu de verdadera comunicación; el trabajo en grupo es un requisito previo para las operaciones de la institución y para mejorar constantemente el proceso aplicado. 1.6 Sistema de indicadores. Para Blalock (1984), un sistema de indicadores constituye las operaciones y mediciones a través de, o por medio de las cuales se va a estudiar o a investigar un fenómeno. También constituye las operaciones y mediciones necesarias para la evaluación de un fenómeno (Guillén, F. y otras. 1997) Para la presente investigación, el sistema de indicadores se define como el conjunto de unidades de medida que permite caracterizar un fenómeno, a través de la operacionalización y conceptualización de variables. La información requerida por un indicador dentro de un sistema permite entender su utilidad, logística, interpretación, y en general lo concerniente a su capacidad explicativa del sistema. 1.7 Marco legal para el sistema de monitoreo de la calidad por indicadores en IPS del I, II y III nivel de atención. Si bien es cierto que al revisar la normatividad Colombiana en materia de salud, se puede observar que ésta es bastante extensa y ha contemplado múltiples aspectos, el tema de la calidad de los servicios de salud no ha sido tratado de manera específica y directa sino hasta hace aproximadamente una década. Al referirnos a la Ley 9 de enero 24 de 1979 podemos mencionar que ésta dispuso la utilización de la información epidemiológica, dentro del proceso de vigilancia y control (capítulo 2, titulo VII, art. 488), con el objeto de informar sobre el estado de salud de la comunidad, prevenir y reducir el daño en la salud. Desde este momento la expresó su voluntad de reglamentar un sistema de “Auditoria para las profesiones médicas y paramédicas, con base en el seguimiento de eventos infecciosos, para prevenirlos y controlarlos. Once años después, la Ley 10 del 10 de enero de 1990, mediante la cual se reorganizó el Sistema Nacional de Salud reafirma la necesidad de contar con normas de calidad de los servicios de salud que deban ser objeto de seguimiento por la Superintendencia Nacional de Salud y las entidades de seguridad y previsión social (art. 1), incluyendo dentro de esta normatividad el régimen de referencia y contrarreferencia de pacientes, según los niveles de atención. 34 El régimen de referencia y contrarreferencia se reglamenta con el Decreto 2759 del 11 diciembre de 1.991 y se define como el conjunto de normas técnicas y administrativas que permiten prestar adecuadamente al usuario el servicio de salud, según el nivel de atención y grado de complejidad de los organismos de salud con la debida oportunidad y eficacia, para facilitar acceso universal de la población al nivel de tecnología que se requiera, propender por una racional utilización de los recursos institucionales y la prestación oportuna y eficaz de los servicios de salud (artículo 2). Es de resaltar que la Ley 10 de 1.990 establece como requisito especial para el reconocimiento de personería jurídica de las instituciones o fundaciones de utilidad común y para las corporaciones o asociaciones sin ánimo de lucro, cuyo objeto sea la prestación de servicios de salud, que cumplan con las “condiciones de calidad tecnológica y científica para la atención médica, de suficiencia patrimonial y de capacidad técnico-administrativa, que previamente determine el Gobierno Nacional.“. Este concepto es retomado posteriormente por la Ley 715 del 2001, (once años después), con el Sistema Único de Habilitación y reglamentado mediante el Decreto 2309 del 2002 y la Resolución 1439 del 2002, actualmente vigentes. Adicionalmente, esta normatividad dispone la obligatoriedad de evaluar la Calidad de la Atención, mediante la identificación de procesos críticos y el diseño de indicadores y estándares que permitan evaluar estos procesos críticos. El Sistema General de Seguridad Social en Salud en Colombia establecido mediante la Ley 100 de 1.993 dispone que uno de los fundamentos del servicio público de salud sea la calidad (art. 153, N. 9 Ley 100 de 1.993) y la relaciona con mecanismos de evaluación y control de los servicios de salud que garanticen unas condiciones de calidad, en términos de atención oportuna, personalizada, humanizada, integral y continua, según los estándares nacionales y los procedimientos en la práctica profesional. Además de establecer la Calidad como un fundamento del S.G.S.S.S., la Ley 100 de 1.993 en sus artículos 186, 199, 227 y 232 dispone que reglamentará el Sistema de Acreditación para brindar información a los usuarios sobre la calidad de la prestación de servicios de salud y promover su mejoramiento, como también que definirá normas para medir la satisfacción de los usuarios, los tiempos máximos de espera por servicios, según patologías y necesidades del paciente. Así mismo, los artículos 227 y 232 disponen la obligatoriedad de los Sistemas de Garantía de Calidad y auditoria por parte de las IPS y EPS, con el objeto de garantizar la adecuada calidad en la prestación de los servicios. Con base en esta legislación el Ministerio de Salud reglamentó el Sistema de Garantía de Calidad en los Prestadores de Servicios de Salud, en el cual se estableció como de uno de los objetivos generales, la necesidad de estimular el desarrollo de un Sistema de Información sobre la Calidad para facilitar labor 35 de auditoria, de vigilancia y control, como también para informar a los usuarios. (Artículo 5, N. 4, Decreto 2174 de 1.996) Paralelamente, y con el objeto de instruir a sus vigilados sobre la aplicación de la normatividad en materia de Calidad, la Superintendencia Nacional de Salud expidió varias circulares, como son: la Circular Externa No. 014 del 28 de diciembre de 1995, sobre la Atención de Urgencias; la Circular Externa 022 del 13 de noviembre de 1.996, sobre las competencias del Nivel Departamental sobre Inspección, Vigilancia y Control (IVC) del SGSSS que dispone que las actividades de inspección, control y vigilancia de la calidad en la prestación de los servicios de salud buscan verificar que los prestadores del Servicio Público de Salud realicen sus actividades de acuerdo con el marco jurídico que los regula, en especial frente al cumplimiento de los principios rectores del Sistema General de Seguridad Social en Salud, contenidos en la Ley 100 de 1993, dentro de los que está el de Calidad. Con la expedición de la Ley 715 del 21 del 2001 se reafirma el mandato de la Ley 100 de 1.993 y se dispone el ajuste del Sistema Obligatorio de Garantía de Calidad, así como la reglamentación de los Sistemas de Habilitación y de Acreditación de EPS y EPS (Capítulo I. Artículo 42.10 y 42.15). Es así que después de casi nueve años y por segunda vez, se expide la actual reglamentación en materia de Garantía de Calidad, basada en un amplio estudio contratado por el Ministerio de Salud, la cual contó con una discusión de casi dos años y la participación de los integrantes del S.G.S.S.S. en Colombia, así como de dos organismos extranjeros (QUALIMED de México y CONSEJO CANADIENSE DE ACREDITACIÓN). Mediante el Decreto 2309 del 15 de Octubre del 2002 se dispone su aplicación en los Prestadores de Servicios de Salud, las Entidades Promotoras de Salud, las Administradoras del Régimen Subsidiado, las Entidades Adaptadas, las Empresas de Medicina Prepagada y a las Entidades Departamentales, Distritales y Municipales de Salud. En su artículo 6, del decreto en mención define las características del S.O.G.C. del S.G.S.S.S., con el objeto de evaluar y mejorar la Calidad de la Atención de Salud, así: “1. Accesibilidad. Es la posibilidad que tiene el usuario de utilizar los servicios de salud que le garantiza el Sistema General de Seguridad Social en Salud. 2. Oportunidad. Es la posibilidad que tiene el usuario de obtener los servicios que requiere, sin que se presenten retrasos que pongan en riesgo su vida o su salud. Esta característica se relaciona con la organización de la oferta de servicios en relación con la demanda, y con el nivel de coordinación institucional para gestionar el acceso a los servicios. 36 3. Seguridad. Es el conjunto de elementos estructurales, procesos, instrumentos y metodologías, basadas en evidencia científicamente probada, que propenden minimizar el riesgo de sufrir un evento adverso en el proceso de atención de salud o de mitigar sus consecuencias. 4. Pertinencia. Es el grado en el cual los usuarios obtienen los servicios que requieren, de acuerdo con la evidencia científica, y sus efectos secundarios son menores que los beneficios potenciales. 5. Continuidad. Es el grado en el cual los usuarios reciben las intervenciones requeridas, mediante una secuencia lógica y racional de actividades, basada en el conocimiento científico.” En esta reglamentación se enfatiza la necesidad que las organizaciones de salud cuenten con mecanismos de auditoria, define su operación y funcionamiento en cada una de ellas (Art. 39, EPS, IPS, Ministerio Público (MP) y Direcciones Territoriales de Salud (DTS)), como también establece la necesidad de adoptar indicadores y estándares que les permitan precisar los parámetros de calidad esperada en sus procesos de atención. Con base en esta información, estas Entidades deben implementar acciones preventivas, de seguimiento y coyunturales, en las que evalúen de manera continua y sistemática, la concordancia entre los parámetros establecidos y los resultados obtenidos, para el cumplimiento de sus funciones de garantizar el acceso, la seguridad, la oportunidad, la pertinencia y la continuidad de la atención y la satisfacción de los usuarios. En el artículo 40 del mismo decreto se definen los procesos de carácter prioritario que deben se objeto de evaluación para cada una de ellas. En el caso de las EPS, ARS y MP, éstas deben realizar procesos de autoevaluación sistemática de la suficiencia de su red de servicios de salud; del desempeño del sistema de referencia y contrarreferencia, como también deberán verificar que todos los prestadores de su red de servicios estén habilitados. Adicionalmente las EPS deberán evaluar sistemáticamente la satisfacción de los usuarios con respecto al ejercicio de sus derechos, y al acceso y oportunidad de los servicios. En las IPS las Auditorias de Calidad deben enfocarse como mínimo en procesos de Auto-evaluación de eventos identificados como prioritarios, con base en el cumplimiento de las características de calidad establecidas en el Artículo 6 del Decreto 2309/02, como también de la satisfacción de los usuarios, con relación a los servicios ofrecidos. (artículo 42) La operación del Sistema de Habilitación de IPS fue reglamentada mediante la Resolución 001439 del 1 de Noviembre del 2002, con la cual se adoptan los formularios de inscripción y novedades para el Registro Especial de Prestadores de Servicios de Salud, se establecen los Manuales de Estándares y de Procedimientos, las Condiciones de Suficiencia Patrimonial y Financiera del Sistema Único de Habilitación de Prestadores de Servicios de Salud. 37 El Manual de Estándares de las Condiciones Tecnológicas y Científicas del Sistema Único de Habilitación de los Prestadores de Servicios de Salud define los procesos prioritarios que deben ser objeto de evaluación y seguimiento por parte las IPS, como también se incluyen los criterios de evaluación. En relación con estos procesos, se estableció: “Procesos prioritarios asistenciales. Estándar: Están documentados los principales procesos asistenciales, guías clínicas internas o definidas por normas legales. La documentación incluye acciones para divulgar su contenido entre los responsables de su ejecución y para controlar su cumplimiento. Criterios: 1. Se tienen definidos y documentados los procedimientos o guías clínicas de atención y los protocolos de enfermería, de acuerdo con los procedimientos más frecuentes en el servicio, e incluyen actividades dirigidas a verificar su cumplimento. 2. Los procedimientos, procesos, guías y protocolos son conocidos por el personal encargado y responsable de su aplicación, incluyendo el personal en entrenamiento. 3. La institución cuenta con guías clínicas de atención para las patologías que constituyen las primeras 10 causas de consulta o egreso, oficialmente reportadas en cada uno de los servicios de hospitalización, unidades de cuidado intermedio e intensivo, unidad de quemados, obstetricia, cirugía, consulta externa y urgencias. 4. Si la institución ofrece actividades de promoción y prevención, ha implantado las Normas Técnicas de protección específica y detección temprana definidas por las autoridades en salud del nivel nacional 5. La institución cuenta con procedimientos documentados para el manejo de los residuos hospitalarios infecciosos o de riesgo biológico. 6. Si la institución ofrece servicios de urgencias, cuidado intensivo e intermedio tiene establecido un procedimiento para la revisión en cada turno del equipo de reanimación; la solicitud de interconsultas y un sistema organizado de alerta. 7. La institución cuenta con procedimientos de coordinación permanente entre el comité de infecciones y el servicio de esterilización, limpieza y aseo y mantenimiento hospitalario. 8. La institución cuenta con guías sobre el manejo de gases medicinales, cambio de tanques de agua y sistemas de alarma. 9. Si la institución presta servicios de hospitalarios, y en especial unidad de cuidado intermedio e intensivo, unidad de quemados, obstetricia, cirugía o urgencias, cuenta con: Procedimientos para la entrega de turno por parte de enfermería y de medicina, y normas sobre la ronda 38 médica diaria de evolución a los pacientes, Guías o manuales de los siguientes procedimientos: Atención en Reanimación Cardio-Cerebro-Pulmonar, control de líquidos, plan de cuidados de enfermería, administración de medicamentos, inmovilización de pacientes, venopunción, toma de muestras de laboratorio, cateterismo vesical y preparación para la toma de imágenes diagnósticas. 10. Si la institución presta servicios de unidad de cuidado intermedio e intensivo, además de lo anterior cuenta con: Guías para: sondas de alimentación, declaración de muerte cerebral, colocación de catéter de presión intracraneana, inserción de catéteres centrales, inserción de marcapaso interno transitorio, traqueostomía, broncoscopia, toracentesis, cambio de líneas IV (centrales y periféricas), control de nutrición parenteral, anticoagulación profiláctica.” Con la reglamentación aquí analizada es posible concluir que la evaluación y mejora de la Calidad de los servicios de salud en Colombia tiene un desarrollo de aproximadamente diez años y durante este tiempo, esta evaluación se ha enfocado en aspectos de tipo asistencial, como también de la evaluación de la percepción de los usuarios. No obstante, no es sino hasta la expedición del Decreto 2309 del 2002 que estas evaluaciones tienen una clara orientación hacia los principales problemas de las instituciones, los cuales han sido detectados por las diferentes organizaciones de salud del S.G.S.S.S. Así mismo, se estableció la obligatoriedad de diseñar indicadores para monitorear estos problemas, los cuales deben ser utilizados dentro de los procesos de auditoria de la calidad de la atención en salud. En virtud de la reglamentación descrita en el presente documento, se puede concluir que desde un poco mas de una década existe una gran necesidad normativa de evaluar y mejorar las condiciones en que prestan los servicios de salud en Colombia, la cual dispone de una amplia gama de procesos que deben ser medidos, como también de las características que deben cumplir estos servicios y de la herramientas que deben utilizarse, para lo cual el desarrollo de los Indicadores de Monitoreo de la Calidad se constituye en un tema de gran trascendencia, que debe ser abordado con prioridad. 1.8 Estado del arte. Al estudiar la evolución de la Calidad en Salud en el mundo encontramos que ésta se inició desde hace aproximadamente un siglo con las evaluaciones del Colegio Americano de Cirujanos en 1.912 a los hospitales en Norteamérica, a partir de las cuales se definieron los primeros estándares mínimos que cumplirían voluntariamente las instituciones de salud. Estos estándares se centraron en la composición y calificación del personal médico, en la necesidad de contar con una Historia Clínica por paciente y en la revisión y análisis periódico de la práctica clínica. Con estas evaluaciones se dio origen al proceso de Acreditación Hospitalaria en Norteamérica, desarrollada por la 39 Comisión Conjunta Norteamericana para Acreditación de Hospitales (JCAHO), establecida formalmente desde los años 50. En Canadá se inició igualmente el proceso de Acreditación con el Consejo Canadiense de Acreditación Hospitalaria (CCA). (Affelt, J.E. Shanahan, F. 1987) De otra parte y casi medio siglo antes, hacia 1.854, la enfermera Florence Nightingale había demostrado con sus cuidados de desinfección que podía reducir la mortalidad de los pacientes hospitalizados de un 32 % al 2%, en un período de 6 meses. Con estos ejemplos es posible afirmar que las primeras evaluaciones de calidad de los servicios de salud se centraron, en una primera etapa, en la evaluación de los aspectos estructurales en los que se desarrollaban estas actividades. Posteriormente, con el crecimiento del Sistema de Acreditación en las instituciones de salud, se desarrolló la metodología para evaluar la práctica clínica, observando directamente el proceso de atención mediante el empleo de criterios implícitos o la aplicación de métodos estructurados como el “audit médico” en el que se utilizaron por primera vez criterios explícitos que permitían, además de establecer estándares asistenciales, comparar la Calidad entre las diferentes instituciones. La evaluación del proceso asistencial al interior de los proveedores (evaluación interna) cobró importancia como consecuencia de que la acreditación era una vía para acceder a fuentes de financiación pública, la cual establecía entre sus requisitos, la realización de auditorias médicas, además del prestigio que representaba. Hacia los años setenta, la evaluación de la Calidad enfatizó la mejora explícita de los servicios de salud y se inició "la etapa de la Garantía o Mejora de la Calidad". En esta etapa se implementaron programas de evaluación externa de los ingresos, las estancias hospitalarias y la utilización de los recursos asistenciales; debido principalmente al incremento de los costos de la asistencia. La necesidad de valorar la eficiencia de la atención facilitó el desarrollo de métodos basados en la evaluación de los resultados de la asistencia. Dentro de estos resultados se incluyó, además de las modificaciones en el estado de salud, la satisfacción de los pacientes atendidos. El interés por la contención de costos favoreció las evaluaciones de tipo concurrente, de manera que las actividades de mejora de la Calidad tuvieran impacto sobre los costos. A pesar de la aplicación de procedimientos de auditoria y de contención de costos, no se pudo probar la relación entre la reducción de los costos y el mejoramiento de la calidad de los servicios de salud. Por el contrario, y desde el sector industrial, los americanos Deming y Juran demostraron que la 40 disminución del costo no se traducía necesariamente en mejoría de la calidad. Sus conceptos sobre el enfoque estadístico de la calidad, los procesos y la responsabilidad final de la calidad y la denominada “trilogía de la calidad: planificación, control y mejora”, sentaron las bases de los procesos de mejora continua de la calidad. (Suñol, R. Bañeres, J. 1998) En la década de los ochenta se incorporan y adaptan de manera paulatina los conceptos y métodos de la Gestión de la Calidad de la industria en Norteamérica, ya aplicados en Japón. Entre los principales aportes de este concepto tenemos la estructuración de los Programas de Mejora de la Calidad en un ciclo con tres actividades definidas: planificación, ejecución de la tarea y comprobación; la Metodología del Control Estadístico de Procesos y la incorporación de una Cultura de la Calidad en la que tienen una gran relevancia el liderazgo de los gestores, la participación de los profesionales y las necesidades del usuario. El desarrollo de los programas de calidad de los ochenta en los hospitales se ocupó de proyectos de mejora de la utilización de recursos, la disminución de la estancia media y el uso de pruebas diagnósticas. El staff médico tenía su propio programa de garantía de Calidad basado habitualmente en la revisión de casos; las áreas de enfermería evaluaban de forma periódica su trabajo y jugaba un papel específico en los estudios de utilización de recursos. Los centros de salud desarrollaron sistemas de prevención de riesgo (risk management) encaminados en principio a evitar las demandas judiciales aunque progresivamente se enfocaron hacia temas de prevención (abordando problemas de prevención de caídas, lesiones por presión, etc.).A partir de los departamentos de relaciones públicas surgieron los estudios de la opinión del paciente donde se recogían sugerencias, reclamaciones, encuestas etc. Durante esta década la JCAHO (Comisión Conjunta de Acreditación Hospitalaria) requirió de planes de calidad en todos los centros. En 1986 propone la “agenda para el cambio” que incluye el estándar que implementaba los sistemas de monitorización y su desarrollo metodológico. Los sistemas de monitorización concebidos como una valoración global de todo un servicio y no sólo de las áreas problemáticas que pudieran detectarse. Para llevarlos a cabo era necesario definir el tipo de atención que se realizaba en un determinado servicio o centro mediante un proceso "dimensionado", estableciendo las principales áreas de trabajo y creando los indicadores que permitían medirlo. Estos indicadores se evaluaban de forma periódica, permitiendo tener una visión del conjunto de la calidad del servicio, para actuar en los casos en que se presentaran desviaciones. Se aplicaron básicamente a la evaluación de diferentes especialidades y con menos intensidad a nivel global de los centros. Además, a finales de los 80 la JCAHO propuso la instauración de indicadores de resultados que permitieran la comparación de los diferentes proveedores de servicios. Con esta finalidad se inicia un ambicioso proyecto de desarrollo de indicadores que se prolongó hasta mediados de los 90. (Restrepo, F. R. 1.998) 41 Al estudiar el papel de la Garantía de Calidad, a finales de 1990 Donabedian, analiza la importancia del Monitoreo de la Evaluación del Desempeño Clínico como una forma de mejorar y mantener la Calidad. (Donabedian, A. 1990) En Colombia las primeras evaluaciones de calidad de los servicios de salud se iniciaron a finales de los años 70, por parte del ISS, en las cuales se estudiaba la calidad de las historias clínicas, la implementación de los comités de calidad, en especial el Comité Ad- hoc como herramienta de auditoría y la revisión de la cama hospitalaria. En 1983, se inician las evaluaciones sistemáticas y se publica “Garantía de Calidad de los Servicios de Salud” primer documento formal y estructurado sobre los procesos de calidad en el país. A partir de la Ley 100 de 1.993 se introduce el concepto del Control de la Calidad, relacionado con características como la oportunidad, continuidad, suficiencia, integralidad y humanización. A partir de un mandato legal se establece la necesidad de desarrollar Sistemas de Garantía de Calidad y Auditoría en las organizaciones de salud del S.G.S.S.S., cuyos componentes se establecen por primera vez en el Decreto 2174 de 1.996: los Requisitos Esenciales, componente básico de carácter estructural, la Auditoría Médica, el Sistema de Información, los Planes de Mejoramiento de Calidad, la Acreditación y la Evaluación de Tecnología de Biomédica. De estos componentes sólo se desarrolla ampliamente el de los requisitos mínimos, pero su orientación no es clara y es sobredimensionado. Después de cuatro años de su emisión y con base en la problemática encontrada para la implementación del sistema, el anterior Ministerio de Salud realiza el primer estudio que identifica la problemática y desarrolla los ajustes que requiere el S.O.G.C., el cual concluye dos años mas tarde, con la emisión del Decreto 2309 del 2002 que define y organiza el S.O.G.C., la Resolución 1439 del 2002, mediante la cual define el Sistema de Habilitación y la Resolución 1474 del 2002, mediante la cual se define el Sistema de Acreditación de IPS y EPS. Con estos ajustes, Colombia define que el Sistema de Garantía de Calidad en Salud involucra a todas las organizaciones de salud, independiente de su papel de asesor, de vigilancia y control, de prestador y administrador; para que desarrollen procedimientos como la Autoevaluación, las Auditorias Internas y Externas, con la utilización de metodologías de monitorización de procesos, en primera instancia “críticos”, que incluyan el desarrollo de indicadores para los procesos de interés prioritario, como son todos aquellos relacionados con los principales riesgos para los usuarios. Estas mediciones o procedimientos de control de calidad deben realizarse por pares (“peer review”) y frente a estándares 42 predeterminados, de manera que permitan determinar el grado de cumplimiento de la calidad observada frente a la calidad deseada. Durante la última década ha habido marcado interés por el desarrollo de medidas de resultado y de proceso de la Atención en Salud. Al revisar las investigaciones que se han realizado sobre el tema, se encuentra que se han realizado para generar o analizar metodologías para la evaluación de la calidad, para desarrollar sistemas de indicadores, y algunos estudios sobre evaluaciones aisladas de la calidad vista desde la perspectiva de los usuarios: en 1995 Mario Díaz y otros autores, conceptualizaron la calidad de los servicios de salud y las metodologías para su medición; posteriormente, en 1996, Ruth Bello y otros autores analizaron críticamente las metodologías para evaluar la calidad de los servicios de salud frente a los requerimientos de información de los máximos organismos de control y las condiciones de información existentes en las Instituciones del S.G.S.S.S. Ellos establecieron que en Colombia no existe un marco de referencia debidamente reglamentado en cuanto a las metodologías para la evaluación de la calidad. Luego, Fabricio Guillén y otras autoras, en 1997, diseñaron un sistema de indicadores para el diseño y/o adaptación de una metodología que permita evaluar los cambios de la calidad en la prestación de los servicios en salud y lograron avances significativos en la generación de instrumentos de medición, como son los indicadores determinados y la importancia de la necesidad de la unificación de la información requerida por entes reguladores y la de las instituciones, ya que para ese momento no se había diseñado el sistema único de Información del Ministerio de Salud. En 1998, Cano, Giselle y otras analizaron los resultados de la encuesta de calidad de vida relacionados con la calidad en la prestación de servicios de salud, y concluyeron que en Colombia se han realizado esfuerzos al formular criterios para evaluar el proceso y los resultados de la atención médica, al estandarizar casos que impliquen calidad en sus resultados; sin embargo, en este estudio no se evidencia una evaluación de la calidad de prestación de Servicios de las Instituciones; en 1999 Daniel Heredia e Isaías Montilla, diseñan el sistema de indicadores básicos para la evaluación y seguimiento de la calidad del Sistema General de Seguridad Social en Salud a través del Sistema Integral de Información del Ministerio de Salud, en el cual generan 75 indicadores clasificados en los tres aspectos que involucran la calidad: Estructura, Proceso y Resultados, los cuales dependen totalmente del Sistema del Ministerio y arrojan información generalizada para el territorio Nacional. Sin embargo, en éste estudio solamente se realiza el diseño de los indicadores, sin realizarse su aplicación para el monitoreo y evaluación de la calidad en las instituciones prestadoras de servicios. 43 La Dirección General para el Control del Sistema de Calidad de la Superintendencia Nacional de Salud identificó la necesidad de disponer de un Sistema de Monitoreo de la Calidad en la Prestación de Servicios de Salud por Niveles de Atención que permitiera conocer la operatividad de algunos procesos institucionales relacionados con las características de Seguridad, Oportunidad y Racionalidad Técnico Científica, para orientar sus acciones de Vigilancia y Control hacia los aspectos prioritarios que deben ser mejorados en las IPS, así como para promover el desarrollo de una cultura de la obtención, procesamiento, análisis y utilización de la información en la toma de decisiones, todo esto en aras de avanzar en el Mejoramiento de la Calidad de los Servicios de Salud en Colombia. En este orden de ideas, la Dirección General para el Control del Sistema de Calidad, a partir del año 2.000 inició el diseño de un grupo de Indicadores para Monitorear la Calidad en las IPS del II y III nivel de atención. Después de analizar los diferentes temas manejados en la Dirección y de identificar algunos aspectos críticos para la Calidad, se conformó un grupo interinstitucional en el que participaron varias organizaciones del Sector Salud. Después de un año de trabajo de este grupo, se obtuvo un conjunto de 13 indicadores, los cuales fueron aplicados en una prueba piloto a 33 hospitales de Bogotá, Cundinamarca y Boyacá. De la prueba piloto se obtuvo alguna información sobre la organización, obtención, procesamiento y utilización de los datos, así como de los beneficios y dificultades enfrentadas por las instituciones participantes para la aplicación de los indicadores. Posteriormente se realizó una reunión de retroalimentación y se determinó la necesidad de ajustar las fichas técnicas, de elaborar un instructivo para la aplicación de los indicadores que incluyera un Glosario de Términos, de disponer de una Base de Datos o aplicativo para la consolidación de la información y generación de reportes, como también para la obtención de recursos para continuar con la prueba piloto e iniciar procesos de discusión y capacitación de las instituciones participantes. De acuerdo con lo dispuesto en la reunión en mención, se ajustaron las Fichas Técnicas de los Indicadores y se modificaron algunos de éstos, resultando dieciséis (16) en total. Después de una interrupción coyuntural del proyecto, se realizó una reunión en la que se determinó la necesidad de iniciar una Segunda Fase del proyecto, con la realización de otra prueba piloto, teniendo en cuenta que la anterior no continuó por dificultades de capacidad de resolución de la Dirección de Calidad. Así mismo, se manifestó la necesidad de contar con recursos asignados para el proyecto. En este momento, la Dirección General para el Control del Sistema de Calidad dispone de dieciséis (16) Indicadores para Monitorear la Calidad en la Prestación de Servicios de Salud del II y III nivel de atención, los cuales deben ser utilizados en la próxima prueba piloto, en la que la información obtenida 44 sea manejada y analizada con la utilización de una base de datos. Esta prueba piloto deberá permitir la identificación de la estrategia a ser utilizada para ampliar el número de instituciones que se comprometerían a participar en el proyecto, dentro de un ambiente de análisis y discusión de los procesos de carácter administrativo y técnico - científico que deban ser ajustados para mejorar la Gestión de Calidad de las instituciones involucradas, como también para la realización de actividades de capacitación y de asistencia técnica que se generen de este proceso. En el caso de las instituciones de baja complejidad, I nivel de atención, no se dispone de indicadores, por lo que es necesario diseñarlos y aplicarlos en la prueba piloto. De otra parte, el proyecto del Sistema de Garantía de la Calidad en Salud para Colombia, proyecto prioritario para el país y para el sector, fue ejecutado por el consorcio internacional conformado por la Asociación Centro de Gestión Hospitalaria, el Consejo Canadiense de Acreditación de Servicios de Salud y Qualimed, como resultado del concurso internacional de méritos 06 de 1999, llevado a cabo por el Ministerio de Salud con cofinanciación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en 1999. Este proyecto se inició en enero del año 2000 e incluyó la revisión y ajuste de los requisitos esenciales para la prestación de servicios de salud, como un instrumento de defensa del usuario; el desarrollo de un sistema de acreditación para que los prestadores de servicios, de manera voluntaria, puedan compararse contra estándares superiores de calidad con el fin de buscar su propio mejoramiento; el desarrollo de un sistema de acreditación similar para las EPS, ARS y ESS; el desarrollo de un sistema de información a los usuarios que a través de elementos de juicio de calidad les permita tomar decisiones sobre los prestadores y aseguradores; el diseño de un conjunto de incentivos para promover calidad en el país; y finalmente, apoyar la implementación y avance de los procesos de auditoria de servicios. El proceso de acreditación de prestadores de servicios de salud y el de entidades promotoras y similares siguió un proceso similar que tuvo tres fases: diseño, desarrollo e implementación. Dentro de los productos obtenidos del componente de acreditación pueden mencionarse: la filosofía y lineamientos base para este proceso, el modelo de acreditación para el país y su estructura, los estándares de acreditación, el manual para los evaluadores y la guía preparación de las instituciones para la acreditación. (Ministerio de Salud, 2001) La Secretaría Distrital de Salud desarrolló en 1999 el Proyecto Monitorización de Indicadores de Calidad para IPS del Distrito Capital, con el nombre “Desarrollo de Indicadores de Calidad para Instituciones de Salud” y presentado por el Centro de Gestión Hospitalaria, el cual vincula a seis (6) instituciones para aplicación de la prueba piloto. Dentro de la propuesta de indicadores se concentraron 45 algunos trazadores como: salud materno infantil, infección respiratoria aguda y trauma craneoencefálico; adicionalmente, incluye 15 indicadores para las EPS - ARS y ESS. En el año 2001 se realizó el primer consolidado de la monitorización a través del software ESTRATEGOS, donde se incluyeron 14 instituciones de primer nivel de atención (Empresas Sociales del Estado), 29 de segundo nivel de atención y 31 de tercer nivel de atención, para un total de 74 instituciones, sin embargo no todas reportaron los datos completamente. A pesar de que era un proceso vital para el seguimiento a la calidad de la atención en salud, el proceso no tuvo continuidad, debido a que no existía en las instituciones una cultura de información establecida que permitiera la oportunidad del dato; adicional a esto en la Secretaria se dificultó el soporte técnico permanente al software que permitiera el análisis oportuno de la información y la correspondiente retroalimentación. Por esta razón la Secretaria de Salud de Bogotá se incorporó al proyecto de monitorización de calidad en salud a través de indicadores, direccionado por la Universidad Javeriana y con la participación de la Superintendencia Nacional de Salud, con el fin de entregar a las instituciones de salud una herramienta útil de gestión y la unificación de la información requerida por parte de lo Entes de Control, motivando el compromiso gerencial de las instituciones para que reporten y analicen la información, obteniendo como resultado la mejora continua de la calidad en salud. Finalmente, Freddy Velandia y otros investigadores de los Posgrados en Administración de Salud y Seguridad Social de la Universidad Javeriana, en el 2001, y como una consultoría para COLCIENCIAS a través del Programa de Investigación en Salud Pública y Sistemas de Salud de la Universidad de Caldas, realizaron la investigación “Satisfacción, oportunidad y razones de no uso de los servicios de salud en Colombia” en el cual, basado en los resultados de la encuesta de Calidad de Vida de 1997, la calidad es vista como el grado de satisfacción del usuario con la prestación de los servicios de salud, y por esta misma razón se recomienda profundizar en el estudio de la problemática de la calidad al interior del sistema y en la evaluación de la calidad de los servicios propiamente dichos, puesto que al realizar el análisis a partir de los resultados de encuestas prediseñadas, se presentan limitaciones en la información y más aún por ser desde la perspectiva del usuario y no desde la prestación misma de los servicios a nivel de las Instituciones. Los últimos avances en este sentido los ha logrado la Secretaria Distrital de Salud de la Ciudad de Bogotá, quien ha realizado esfuerzos para que se logre tener una aproximación al estado de la calidad en las Instituciones Prestadoras de Servicios de la Red Adscrita, para lo cual diseño 8 indicadores, en los cuáles se incluye indicadores de proceso, de resultados, e incluso indicadores financieros. Así mismo, se 46 ha promovido la creación de los comités de calidad, de los manuales de calidad y de la autoevaluación de la calidad, mediante guías. Pero, a pesar de todos los esfuerzos anteriormente mencionados, hasta la fecha no se ha desarrollado un sistema de indicadores que ayude a monitorear y evaluar la calidad en la prestación de los servicios de las instituciones de primero, segundo y tercer nivel de complejidad, tanto a nivel nacional como local, aplicando los indicadores diseñados y buscando determinar su pertinencia y sensibilidad; todo ello a pesar que se encuentra reglamentada desde la misma Ley 100 de 1993 en su artículo 153 y con el Decreto 2174 de 1996, el Ministerio de Salud organiza el Sistema Obligatorio de Garantía de Calidad del SGSSS. 1.9 Objetivos 1.9.1 Objetivo General: Desarrollar un sistema de monitoreo de la calidad de la provisión de los servicios de salud de las instituciones prestadoras de servicios de salud de I, II y III nivel, mediante un conjunto de indicadores factibles, sensibles, implantables y con capacidad de uso generalizado, a partir del cual se genere información relevante y precisa sobre las condiciones de calidad en que se prestan estos servicios. 1.9.2 Objetivos Específicos: Para la primera fase de la investigación se cumplieron los siguientes objetivos: 1.9.2.1 Elaborar un modelo conceptual del sistema de monitoreo a aplicar, según las características mencionadas en el objetivo general. 1.9.2.2 Determinar los criterios para la selección de las instituciones prestadoras de servicios de salud a ser tenidas en cuenta en el estudio. 1.9.2.3 Realizar un caracterización de los tipos de servicios, instituciones prestadoras de servicios de salud y redes que podrían ser comparados por el conjunto de indicadores seleccionados. 1.9.2.4 Diseñar el Sistema de indicadores para el Monitoreo de la Calidad en las instituciones de I nivel y ajustar los indicadores para II y III nivel de atención. 1.9.2.5 Seleccionar del conjunto de indicadores los que sean mas sensibles y pertinentes para monitorear la calidad de la prestación de servicios de salud en las instituciones de I, II y III nivel de atención. 47 1.9.2.6 Determinar la articulación del conjunto de indicadores para monitorear la calidad de la prestación de servicios de salud con la plataforma estratégica organizacional de las instituciones de I, II y III nivel de atención. 1.9.2.6 Determinar los instrumentos y procesos que se requerirán para la aplicación del Sistema de Indicadores para el Monitoreo de la Calidad en las instituciones de I, II y III Nivel de Atención. Para el desarrollo de la segunda fase de la investigación, la cual está sujeta a la asignación de fondos por parte de la Universidad Javeriana y se tiene planeado llevarla a cabo durante el año 2004, se tienen definidos los siguientes objetivos: 1.9.2.7 Validar los indicadores seleccionados, los instrumentos y los procesos diseñados para la generación y envío de información, en una prueba piloto que incluya las instituciones de I, II y III nivel de atención, previamente seleccionadas. 1.9.2.8 Seleccionar del conjunto de indicadores aplicados en la prueba piloto, y de acuerdo con los resultados obtenidos en la misma, los que sean mas sensibles y pertinentes para monitorear la calidad de la prestación de servicios de salud en las instituciones de I, II y III nivel de atención. 1.9.2.8 Determinar la evidencia en las cual está basado el conjunto de indicadores para monitorear la calidad de la prestación de servicios de salud de las instituciones de I, II y III nivel de atención. 1.9.2.9 Diseñar, proponer y presentar una estrategia pedagógica que contenga los medios e instrumentos para la implementación del Sistema de Monitoreo de la Calidad por indicadores en las instituciones de I, II y III nivel de atención, que incluya todas las actividades requeridas para el análisis de los procesos y los responsables de su aplicación. 48 II. METODO 2.1 Tipo de Estudio: Se adoptó un diseño descriptivo-evaluativo de corte transversal , en el que se diseñó el sistema para el monitoreo de la calidad y se probará en algunos de los hospitales de I, II y III nivel de atención del Sistema General de Seguridad Social en Salud, seleccionados previamente. 2.2 Fuentes de Información: las fuentes de información para este estudio estuvieron constituidas por: la documentación del estudio realizado por la dirección de calidad de Superintendencia Nacional de Salud sobre indicadores para IPS del año 2000-2001, los documentos del proyecto de ajuste del sistema obligatorio de garantía de calidad del Ministerio de Protección Social y los estudios sobre indicadores para evaluación de la calidad de la Secretaría Distrital de Salud, la reglamentación actual sobre el sistema de garantía de calidad; además, textos relacionados con los indicadores para medir la calidad de la prestación de servicios de salud. 2.3 Instrumentos: los instrumentos utilizados fueron formatos de inspección de archivos y de documentos. 2.4 Variables: las variables fueron definidas conforme las revisiones de la bibliografía sobre indicadores para medir la calidad de la prestación del servicio y teniendo en cuenta las apreciaciones de los funcionarios del Ministerio de Protección Social, de la Superintendencia Nacional de Salud y de la Secretaría Distrital de Salud. Además, se tuvieron en cuenta los indicadores que habían sido definidos en los estudios realizados por estos organismos. 2.5 Recolección de la Información: la información se recolectó en varias etapas: en la primera se hizo la recopilación y sistematización de estudios y datos relevantes para la investigación; se revisó bibliografía nacional e internacional sobre calidad y evaluación de la calidad, con el fin de determinar los indicadores pertinentes, se realizó el análisis de las experiencias y documentación; además, se realizaron discusiones con funcionarios de las entidades de control y con expertos en el tema con el fin de depurar los indicadores establecidos por ellos. En la segunda etapa se realizó el diseño y ajuste de los instrumentos de captura de la información del sistema de indicadores para el monitoreo de la calidad, fichas técnicas y demás instrumentos necesarios para la aplicación de dicho sistema. Además, se realizó la caracterización de los tipos de servicios, las instituciones y redes que podrían ser comparados por el conjunto de indicadores seleccionados. En la tercera etapa se realizó el ajuste de los indicadores y se determinó que estos podrían ser aplicados indistintamente en los tres niveles de atención. Posteriormente, en la segunda fase del estudio se procederá a hacer la aplicación de los indicadores 49 definidos, en las instituciones hospitalarias seleccionadas, en una prueba piloto de la cual se generará un análisis preliminar de los resultados del proyecto. Finalmente se realizará la elaboración y presentación de la propuesta final de la estrategia para la implementación del sistema para el monitoreo de la calidad en las instituciones hospitalarias de I, II y III nivel de atención del Sistema General de Seguridad Social en Salud. 2.6 Procesamiento de la Información: la información se procesó de múltiples formas, por una parte la información de las discusiones se procesó y manejó con miras a retroalimentar la estructuración del marco teórico, y con el fin de poder tener la visión de cada uno de los entes de control del sistema. De otro lado, con base en los estudios sobre indicadores desarrollados por la Supersalud, el Ministerio de Protección Social y la Secretaría Distrital de Salud, se estructuró una base datos para consignar la información de cada una de las instituciones hospitalarias, la cual será manejada, procesada y analizada en la aplicación de la prueba piloto. Los resultados obtenidos en la prueba piloto en relación con las puntuaciones de los indicadores, serán manejados por medio de escalas de medición comparándolos con patrones nacionales e internacionales que se encuentran establecidos en la literatura. 2.7 Análisis de la Información: se realizaron dos tipos de análisis: en el primero se analizó cada uno de los indicadores diseñados en los estudios realizados por la Supersalud, el Ministerio de Protección Social y la Secretaría Distrital de Salud y se seleccionarán los que eran mas pertinentes y sensibles para el objetivo del estudio; posteriormente se presentaron a dos pares expertos en el tema, con el fin de que ellos avalen el proceso. En la segunda fase se tiene planeado realizar un segundo análisis una vez se haya hecho la prueba piloto con el fin de determinar cuáles de los indicadores son los que definitivamente conformarán el sistema para el monitoreo y evaluación de la calidad en las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud de I, II y III nivel de atención del Sistema General de Seguridad Social en Salud. 2.8 Criterios para la selección de IPS de la muestra: La selección de las instituciones de la muestra para la prueba piloto y la aplicación de los indicadores tuvo en cuenta, en primer lugar, la Base de Datos del Distrito Capital, dado que representa aproximadamente una cuarta parte de la oferta de servicios del País, así como la facilidad de ubicación para la realización del estudio y el apoyo proporcionado al proyecto por la Secretaría de Salud de Bogotá. Los criterios de selección de la muestra son elementos que permiten circunscribir el tamaño de la misma, de manera que el estudio sea aplicable. Se recomienda no establecer infinidad de criterios sino 50 que éstos incluyan aquellos aspectos objetivos, de acuerdo con la realidad de las instituciones, deben ser sencillos, claros, de común utilización y aplicables en el análisis de la información obtenida. Adicionalmente, se tuvo en cuenta la reglamentación de Calidad actualmente vigente en el País, dentro de la que podemos mencionar el Mapa de Habilitación de los Prestadores de Servicios de salud, el artículo 9 de la Resolución 486 del 4 de abril del 2.003 y la Circular del Ministerio de Protección Social del 13 de mayo del 2.003, en la cual se definen algunos criterios para el Plan de Análisis del Mapa. Finalmente, se elaboró un cuestionario que pretende indagar sobre el grado de desarrollo e implementación dl Sistema de Garantía de Calidad en las IPS, así como del Sistema de Información y el compromiso con que cuentan las instituciones para la implantación del Sistema de Monitoreo mediante los indicadores seleccionados. De acuerdo con lo anterior se incluyeron como Criterios de Selección de las IPS de la prueba piloto los siguientes: 1. Ubicación Geográfica: Distrito Capital Bogotá, Zonas Norte, Sur, Este y Occidente, Localidades (Chapinero, Usaquen, Teusaquillo, etc.). 2. Naturaleza Jurídica: Públicas, Privadas, Mixtas 3. Tipo de Prestador: Institucional 4. Tipo de Servicios declarados en Habilitación: Ambulatorios: Consulta Externa General y Especializada, Farmacia, Laboratorio Clínico, Imágenes Diagnósticas. Pediatría y Ortopedia opcionales. Hospitalarios: Cirugía, Ginecoobstetricia, UCI y Urgencias 5. Nivel de Complejidad: Bajo, Medio y Alto (Resoluciones 14707 de 1.99 y 1439 del 2.002) 6. Cuestionario evaluación y desarrollo del Sistema de Garantía de Calidad en las IPS 51 2.9 Selección de las IPS: Con base en los criterios anteriormente mencionados se procedió a realizar una serie de filtros a las bases de datos con el fin de ir depurándolas y que fueran quedando únicamente las instituciones que cumplieran con todos y cada uno de los criterios seleccionados; la depuración de las bases de datos dio el siguiente resultado: 2.9.1 Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud de Primer Nivel de Atención: El número total de instituciones una vez filtradas fue de 156, que incluían IPS de todo tipo; de ellas se seleccionaron 46, las cuales se detallan a continuación: 1. Fundación Hospital San Carlos-Clínica Santa Rosa 2. Caja de Compensación Familiar Compensar 3. Cami Chircales 4. Cami Trinidad Galán 5. Hospital San Cristóbal 6. Cami Altamira 7. Upa 1° de Mayo 8. Upa Bello Horizonte 9. Upa los Alpes 10. Fundación San Juan de Dios-Instituto Materno Infantil 11. Cami Gaitana 12. Cami Perseverancia 13. Cami Jerusalem 14. Cami Manuela Beltrán 15. Upa Candelaria Nueva 16. Cami Chapinero 17. Hospital de Usaquén 18. Clínica Colsanitas S.A.-Clinicentro Cedro Bolivar 19. Clínica Colsanitas S.A.-Clinicentro Infantil 20. Clínica Colsanitas S.A.-Clinicentro Calle 69 21. Cami Nazareth 22. Cami San Juan de Sumapaz 23. Cami Santa Librada 52 24. Virrey Solis IPS S.A. 25. Salud Total S.A. Plaza 26. Salud Total S.A. Chapinero 27. Salud Total S.A. Occidente 28. Clínica Federman 29. Policlínica los Andes E.U. 30. Caja de Compensación Familiar de Cundinamarca 31. Cami Vista Hermosa 32. Hospital de Suba 33. Cami Prado Veraniego 34. Cami Samper Mendoza 35. Cami Garcés Navas 36. Hospital Pablo VI Bosa 37. Upa Olaya 38. Cami Verbenal 39. Salud Total S.A.-Avenida Caracas 34 40. Upa Emaus 41. Cami Diana Turbay 42. Cami Patio Bonito 43. Upa San Blas 44. Upa La Victoria 45. Cami Usme 46. Salud Total S.A.-Calle 100 2.9.2 Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud de Segundo Nivel de Atención: El número total de instituciones una vez filtradas fue de 67, que incluían IPS de todo tipo; de ellas se seleccionaron 29, las cuales se detallan a continuación: 1. Hospital Fundación Clínica Emmanuel 2. Clínica Cafam 3. Inversiones Dama Salud S.A. 4. Cruz Roja Colombiana-Seccional Bogotá 5. Clínica de Traumatología y Ortopedia Limitada 6. Universidad del Bosque 53 7. Hospital Vecinal de Suba San Pedro Claver 8. Clínica La Carolina S.A. 9. Hospital San Blas 10. Hospital de Bosa 11. Red Salud IPS-Clínica el Campín 12. Cami 2 El Guavio 13. Hospital Meissen 14. Centro de Investigaciones Oncológicas Clínica San Diego 15. Clínica Candelaria IPS Limitada 16. Clínica Juan N. Corpas Limitada 17. Cami 2 La Granja 18. Clínica Fundadores 19. Cami 2 Fontibón 20. Hospital Tunjuelito 21. Clínica Quirúrgica 22. Instituto de Ortopedia y Cirugía Plástica S.A. 23. Eusalud Limitada 24. Clínica Palermo 25. Sociedad Médica las Américas Limitada 26. Clínica Infantil Colsubsidio 27. Clínica Materno Infantil 28. Clínica de Medicina Interna 29. Clínica David Restrepo 2.9.3 Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud de Tercer Nivel de Atención: El número total de instituciones una vez filtradas fue de 34, que incluían IPS de todo tipo; de ellas se seleccionaron 25, las cuales se detallan a continuación: 1. Hospital Santa Clara 2. Clínica El Bosque S.A. 3. Clínica La Inmaculada 4. Hospital Universitario Clínica San Rafael 5. Hospital de La Misericordia 6. Clínica de Nuestra Señora de La Paz 7. Instituto Nacional de Cancerología 54 8. Fundación Abood Shaio 9. Clínica Nueva 10. Epsiclínicas S.A. 11. Sociedad de Cirugía de Bogota-Hospital de San José 12. Fundación Cardioinfantil-Instituto de Cardiología 13. Clínica Colsanitas-Clínica Reina Sofía 14. Clínica de Marly S.A. 15. Clínica San Pedro Claver 16. Clínica del Niño 17. Clínica Fray Bartolomé de Las Casas 18. Hospital Simón Bolívar 19. Clínica El Country 20. Hospital Universitario de San Ignacio 21. Clínica del Occidente Limitada 22. Hospital El Tunal 23. Hospital Universitario de La Samaritana 24. Hospital Occidente de Kennedy 25. Fundación Santa Fe de Bogotá 2.10 Elección de IPS de la muestra para la prueba piloto: Con base en los anteriores resultados se procedió a realizar una asesoría estadística con una estadísticaepidemióloga de la Unidad de Epidemiología Clínica del Hospital San Ignacio, se decidió tomar el 10% de cada una de las instituciones incluidas en cada uno de los niveles de atención. Los resultados fueron los siguientes: 2.10.1 Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud de Primer Nivel de Atención: 1. Fundación Hospital San Carlos-Clínica Santa Rosa 2. Hospital San Cristóbal 3. Hospital de Usaquén 4. Hospital Vista Hermosa 5. Hospital de Suba. 55 6. Hospital Pablo VI Bosa 2.10.2 Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud de Segundo Nivel de Atención: 1. Clínica Cafam 2. Clínica La Carolina 3. Clínica Palermo 2.10.3 Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud de Tercer Nivel de Atención: 1. Hospital Universitario Clínica San Rafael 2. Hospital Universitario de San Ignacio 3. Fundación Cardioinfantil-Instituto de Cardiología 56 III. RESULTADOS DEL ESTUDIO 3.1 Fichas Técnicas del Sistema de Indicadores para el Monitoreo de la Calidad de la Atención en Hospitales de I, II y III Nivel de Atención FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 1 OPORTUNIDAD EN CIRUGIAS PROGRAMADAS Estructura Proceso (x) Resultado Accesibilidad (x) Seguridad ( ) Pertinencia (x) Continuidad () Oportunidad (x) DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Número de días que transcurren entre la presentación de la solicitud del usuario para que se le programe el procedimiento quirúrgico trazador, indicado por el médico y su ejecución durante el año. Este indicador debe establecerse mediante trazadores por especialidades, de manera que puedan hacerse comparaciones entre diferentes IPS en condiciones similares. Ejemplo: reemplazo total de cadera Fórmula: Denominador Número de usuarios con indicación de que se les realice el procedimiento quirúrgico trazador, durante el año. Unidad de medida Promedio de tiempo de espera en días. Los datos se expresan en días como unidad de tiempo. Valor de los datos Entre menor sea el valor, mejor la oportunidad de la autorización. Cuando el procedimiento sea autorizado el mismo día de la radicación de la solicitud (sin tratarse de una urgencia quirúrgica) se considera que el tiempo de espera es igual a cero. Cuando el procedimiento no pueda ser programado por mora en el pago de aportes del usuario o por condiciones médicas del paciente, no será considerado como procedimiento indicado, siempre y cuando estas condiciones se hayan presentado en el momento en que se indicó el procedimiento. Descripción del cálculo. Numerador: Se toma la fecha de radicación de las solicitudes del procedimiento quirúrgico trazador indicadas por los médicos y presentadas por los usuarios ante la IPS, durante el periodo a estudiar y la fecha en la que el prestador lo programe y se establece el número de días transcurrido entre los dos datos. Denominador: Se toma el total de las solicitudes del procedimiento quirúrgico trazador indicadas a los usuarios y recibidas por la IPS en el mismo período. Ajuste por riesgo La oportunidad con que el prestador programe el procedimiento autorizado, deberá medirse para evaluación de la red de prestadores, como un indicador separado. No pueden ser tenidos en cuenta en esta medición, los procedimientos quirúrgicos, cuando estos se realicen como consecuencia de una situación de urgencia médica. Nombre Categoría ámbito sistémico Dimensiones 57 Nombre VARIABLES Fuente primaria Unidad de medida Frecuencia de medición Utilización del Indicador FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 1 OPORTUNIDAD EN CIRUGIAS PROGRAMADAS NUMERADOR DENOMINADOR Departamento, división u oficina de la Departamento, división u oficina de IPS responsable por la aprobación de la IPS responsable por la procedimientos quirúrgicos. aprobación de procedimientos quirúrgicos. Número (cantidad) Número (cantidad) Este indicador deberá emitirse en Este indicador deberá emitirse en forma anual de tal manera que se forma anual de tal manera que se garantice un volumen representativo garantice un volumen representativo de casos y puedan corregirse sesgos de casos y puedan corregirse sesgos por situaciones coyunturales, por situaciones coyunturales, realizando consolidados anuales. En realizando consolidados anuales. En caso de signos de problema en alguna caso de signos de problema en especialidad, deberá desarrollarse el alguna especialidad, deberá indicador o una variante de este para desarrollarse el indicador o una un seguimiento a más corto tiempo. variante de este para un seguimiento a más corto tiempo. La oportunidad en la realización de los procesos quirúrgicos indicados a los usuarios se relaciona con la efectividad del procedimiento, el mejoramiento de las condiciones físicas del usuario, la disminución de riesgos de incapacidad en tiempo y severidad, la gravedad de las secuelas y la congestión y mal uso de servicios de urgencias. El seguimiento de este indicador permite evidenciar la aplicación de políticas contrarias al bienestar de los usuarios y detectar problemas de suficiencia de la red de prestadores y orientar la selección de IPS con base en criterios de calidad. 58 FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 2 OPORTUNIDAD DE LA ATENCIÓN DE CONSULTA CON MEDICO GENERAL EN LAS IPS Categoría ámbito sistémico Estructura (x) Proceso () Resultado (X) Dimensiones Accesibilidad (x) Pertinencia () Continuidad () Oportunidad (x) Seguridad () Nombre DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos Descripción del cálculo. Frecuencia de medición Ajuste por riesgo Número de días/horas que transcurren en la institución prestadora de servicios de salud, entre la solicitud de una consulta general programada y la atención por parte del médico en el mes y el trimestre. Número de consultantes para medicina general en el mes y el trimestre. Promedio de tiempo de espera. Los datos se expresan en unidades de tiempo – horas y días. El mejor resultado es el más cercano a cero, cuanto menor sea el valor es mejor la oportunidad de la atención. Numerador: Se toma la fecha y hora del total de las solicitudes de consulta médica general programada realizadas por el prestador de servicios de salud durante cada período trimestral y la fecha y hora en la que fue otorgada la cita y se establece el tiempo (en horas) transcurrido entre los dos datos. Cuando el tiempo de espera supera las 72 horas, los resultados se enuncian en número de días eliminando las fracciones restantes de horas. En ningún caso se enunciarán en número de meses. Denominador: Se toma el total de las solicitudes de consulta médica general programada recibidas por el prestador de servicios de salud durante el mismo período. Este indicador deberá emitirse en forma mensual y trimestral, de manera que puedan corregirse sesgos por situaciones coyunturales, realizando consolidados semestrales y anuales. Esta medida puede ser desviada por eventos coyunturales, situaciones epidemiológicas o de estacionalidad de los eventos en salud. Por lo tanto se recomienda su medición en períodos trimestrales. 59 Nombre VARIABLES Fuente primaria Unidad de medida Frecuencia de medición Utilización del Indicador FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 2 OPORTUNIDAD DE LA ATENCIÓN DE CONSULTA CON MEDICO GENERAL EN LAS IPS NUMERADOR DENOMINADOR Departamento, división u oficina del Departamento, división u oficina del prestador de servicios de salud, prestador de servicios de salud, responsable por la asignación de citas. responsable por la asignación de citas. Días/Horas Número(cantidad) Mensual/Trimestral Mensual/Trimestral La atención por médico general es una de la más frecuentes puertas de entrada al sistema. Este indicador muestra la oportunidad y el acceso a los servicios de salud. Las IPS tienen una capacidad resolutiva de la demanda del usuario y orientan, en alguna proporción de casos la demanda a niveles superiores de complejidad y especialidad. Una respuesta rápida en este nivel contribuye a la detección y tratamiento en etapas iniciales del proceso patológico disminuyendo la incapacidad, secuelas y riesgos inherentes al proceso, disminuye la congestión y mal uso de servicios especializados y de urgencias. El tiempo de respuesta en los prestadores puede resultar útil para medir la suficiencia institucional para la demanda de servicios que recibe, orientando decisiones de mejoramiento. La información de este indicador orienta a los usuarios sobre la oportunidad de la atención, para la selección de prestadores de servicios y permite la comparación entre los diferentes prestadores de servicios de salud. Adicionalmente con información de otros indicadores, orienta la suficiencia de la oferta de servicios en el país. 60 FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 3 Nombre Categoría ámbito sistémico Dimensiones DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos Descripción del cálculo. Frecuencia de medición Ajuste por riesgo OPORTUNIDAD DE LA ATENCIÓN DE ESPECIALIZADA PROGRAMADA EN LAS IPS Estructura Proceso () Resultado Accesibilidad ( ) Pertinencia Continuidad () Oportunidad Seguridad CONSULTA (x ) (x) (x) (x) Número de días / horas que transcurren en la institución prestadora de servicios de salud, entre la solicitud de una consulta especializada programada especialidad trazadora y la atención por parte del médico en el mes y el trimestre. Número de consultantes para la consulta especializada trazadora en el mes y el trimestre. Los datos se expresan en unidades de tiempo: horas y días. El mejor resultado es el más cercano a cero, cuanto menor sea el valor es mejor la oportunidad de la atención. Numerador: Se toma la fecha y hora del total de las solicitudes de consulta especializada programada realizadas al prestador de servicios de salud, durante cada período trimestral, la fecha y hora en la que fue otorgada la cita y se establece el tiempo (en horas) transcurrido entre los dos datos. Cuando el tiempo de espera supere las 72 horas, los resultados se enuncian en número de días eliminando las fracciones restantes de horas. En ningún caso se enunciarán en número de meses. Denominador: Se toma el total de las solicitudes de consulta médica especializada programada recibidas por el prestador de servicios de salud durante el mismo período. Este indicador deberá emitirse en forma mensual y trimestral, de manera que puedan corregirse sesgos por situaciones coyunturales, realizando consolidados semestrales y anuales. Esta medida puede ser desviada por eventos coyunturales, situaciones epidemiológicas o de estacionalidad de los eventos en salud. Por lo tanto se recomienda su medición en períodos trimestrales. 61 FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 3 Nombre Unidad de medida OPORTUNIDAD DE LA ATENCIÓN DE CONSULTA ESPECIALIZADA PROGRAMADA EN LAS IPS NUMERADOR DENOMINADOR Se relaciona con la necesidad de la atención de casos de mayor complejidad que requieren de la intervención de especialistas. La oportunidad en la respuesta tiene relación con a capacidad resolutiva de los casos. Su detección y atención temprana disminuye los riesgos de incapacidad en tiempo, severidad, secuelas, la congestión y mal uso de servicios de urgencias. El tiempo de respuesta en los prestadores puede resultar útil para medir la suficiencia institucional ya la demanda de servicios que recibe, orientando decisiones de mejoramiento y la evaluación de IPS por las EPS. Provee a los diferentes usuarios y clientes del sector salud, la información que permita una comparación entre los diferentes prestadores de servicios de salud. Orienta la evaluación sobre la suficiencia de la oferta de servicios. Departamento, división u oficina del Departamento, división u oficina del prestador de servicios de salud prestador de servicios de salud responsable por la asignación de citas. responsable por la asignación de citas. Número (cantidad) Días/Horas Frecuencia de medición Mensual/ Trimestral VARIABLES Utilización del Indicador Fuente primaria 62 Mensual/Trimestral FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NÚMERO 4 SATISFACCIÓN GLOBAL DE LOS USUARIOS CON LOS SERVICIOS RECIBIDOS EN LA IPS Categoría ámbito sistémico Estructura () Proceso Resultado (x) Dimensiones Aceptabilidad (x) Coordinación (x) Idoneidad (x) Nombre DEFINICION OPERACIONAL Ámbito de atención al usuario en la realización de trámites administrativos ante la IPS Fórmula: Numerador Sumatoria de la calificación sobre atención al usuario o su representante, para la realización de trámites administrativos pertinentes para el acceso al servicio en la IPS en el trimestre Fórmula: Denominador Número total de encuestas que respondieron el ámbito, en el trimestre. Ámbito de atención al usuario en el trato y relaciones interpersonales del personal Asistencial y administrativos de la IPS Fórmula: Numerador Sumatoria de la calificación sobre trato y relaciones interpersonales del personal asistencial y administrativo que atiende al paciente en la institución prestadora de servicios de salud en el trimestre. Fórmula: Denominador Número total de encuestas que respondieron en el trimestre. Ámbito de atención al usuario en la calidad técnica de los servicios de la IPS Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Utilización Sumatoria de la calificación sobre calidad técnica de los servicios de salud, percibida por el usuario en el trimestre. Número total de encuestas que respondieron el ámbito en el trimestre. La percepción de satisfacción de los usuarios ha demostrado en diferentes estudios que es uno de los factores con mayor incidencia, en la toma de decisiones al momento de seleccionar instituciones prestadoras de servicios de salud. Por esta razón es importante que el sistema estructure el indicador con los factores más preponderantes del mismo – tratando de corregir en algún grado la subjetividad- para ser entregado a la población general como elemento orientador de la selección. 63 Nombre Foco FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NÚMERO 5 CALIDAD DE LOS REGISTROS DE LA HISTORIA CLINICA, PARA LOS EVENTOS EN LOS QUE EL PACIENTE ES INTERNADO EN LA INSTITUCIÓN Se considera una historia clínica completa aquella que cuenta con los siguientes registros, en forma ordenada sistemática y cronológicamente: Categoría ámbito sistémico Dimensiones INGRESO: ü Identificación del paciente ü Motivo de consulta ü Antecedentes personales y familiares ü Examen físico de ingreso ü Impresión diagnóstica ü Conducta médica EVOLUCION DIARIA ü Notas diarias de evolución ü Notas diarias de enfermería ü Control de Signos Vitales ü Controles de líquidos (según requerimiento) ü Controles neurológicos (según requerimiento) ü Otros controles especiales (según requerimiento) PROCEDIMIENTOS DIAGNOSTICOS Y TERAPEUTICOS ü Informe de procedimientos medico quirúrgicos realizados ü Resultados de procedimientos diagnósticos realizados ü Registro de Medicamentos aplicados RESUMEN DE ATENCIÓN Estructura ( x) Proceso (x) Resultado () Accesibilidad (x ) Pertinencia (x) Continuidad (x ) Oportunidad (x ) Seguridad (x) DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos Número de Historia Clínicas completas durante el mes. Total de Historia Clínicas revisadas en el mes. Porcentaje de Historia Clínicas de pacientes que estuvieron hospitalizados durante el periodo de tiempo a estudiar que contienen todos los registros enunciados. Los datos deben expresarse en porcentaje de historias clínicas completas. El mejor resultado será el más cercano a 100%. 64 Descripción del cálculo. Frecuencia de medición Ajuste por riesgo VARIABLES Nombre Fuente primaria Frecuencia de medición Para la operacionalización de este indicador, puede tomarse una muestra estadísticamente representativa de Historia Clínicas considerando como universo el total de pacientes que fueron hospitalizados durante el periodo de tiempo a estudiar y dando a la muestra una estratificación por servicios o unidades funcionales. Como estrategia para establecer planes de mejoramiento institucional en este aspecto, se puede establecer el porcentaje de cumplimiento de acuerdo a la existencia o no de los registros, asignando una participación porcentual igual a cada uno de los registros. Numerador: En el numerador se registra el número de Historias Clínicas que a la revisión, presentaban todos los registros básicos enunciados en forma ordenada y legible. En el caso de que los registros encontrados no sean legibles o se encuentren en desorden, se considerará como incompleta o inadecuada. Denominador: En el denominador se registra el total de las Historia Clínicas revisadas como muestra estadísticamente representativa de los casos atendidos en el periodo a estudiar. El indicador debe ser producido mensualmente en la IPS. Para efectos de presentación y divulgación a los usuarios y al sistema en general, puede manejarse a través de consolidados semestrales y anuales. No requiere. NUMERADOR DENOMINADOR Número de Historia Clínicas Total de Historia Clínicas revisadas completas durante el mes. en el mes. Historias Clínicas de los pacientes que Historias Clínicas de los pacientes estuvieron hospitalizados durante el que estuvieron hospitalizados período de tiempo a estudiar, ubicadas durante el período de tiempo a en los departamentos o direcciones de estudiar, ubicadas en los estadística o archivo. departamentos o direcciones de estadística o archivo. Mensual Mensual 65 Nombre Categoría ámbito sistémico Dimensiones FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NÚMERO 6 MORTALIDAD PERINATAL Estructura ( ) Proceso ( ) Resultado Oportunidad (x) Continuidad (x) Pertinencia Accesibilidad (x) Seguridad DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos (x) (x) (x) Número de defunciones de recién nacidos en las 48 horas siguientes al parto en el mes. Total recién nacidos vivos en el mes. Mortalidad perinatal. Los datos deben expresarse en porcentaje de mortalidad perinatal dentro de las 48 horas siguientes al parto. El mejor resultado será el más cercano a 0%, pero el dato esperado estará directamente relacionado con las características institucionales. Descripción del cálculo. Frecuencia de medición Ajuste por riesgo Utilización del Indicador VARIABLES Fuente primaria Frecuencia de medición Numerador: Debe registrarse el número de recién nacidos vivos que murieron dentro de la institución dentro de las 48 horas siguientes al parto, durante el período a evaluar. Denominador: Debe registrarse el total de recién nacidos vivos en la institución en el mismo período. El indicador debe ser producido mensualmente en el ámbito de la institución prestadora de servicios de salud. Para efectos de presentación y divulgación en general, puede manejarse a través de consolidados semestrales y anuales. Este indicador requiere de ajuste en los siguientes atributos: ü Nivel de complejidad ü Carácter general o especializado. ü Carácter público o privado. ü Nivel socio económico y cultural de las maternas que atiende. ü Control prenatal ü Patología concomitante con el embarazo ü Edad gestacional del recién nacido ü Peso al nacer ü Patología congénita La tasa de mortalidad perinatal es un indicador utilizado en los sistemas de salud para detectar problemas de calidad en la atención tanto al proceso asistencial del parto a madre e hijo, como a la atención y control prenatal. Está directamente relacionado con características como nivel de complejidad de los servicios de gineco-obstetricia y pediatría de la institución, el nivel socio cultural de las maternas que demandan servicios en la institución, su perfil epidemiológico y el seguimiento o no del embarazo a través del control prenatal. NUMERADOR DENOMINADOR Registros hospitalarios – Registro de ingresos hospitalarios. Certificados de defunción, ubicados en los departamentos o direcciones de estadística o archivo. Mensual Mensual 66 Nombre Categoría ámbito sistémico Dimensiones FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 7 TASA DE MORTALIDAD MATERNA Estructura ( ) Proceso ( ) Resultado Oportunidad (x) Continuidad (x) Pertinencia Accesibilidad (x) Seguridad DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos Descripción del cálculo. Frecuencia de medición Ajuste por riesgo Utilidad del Indicador (x) (x) (x) Número de defunciones en maternas en las 48 horas siguientes al ingreso a la institución, en el mes. Total recién nacidos vivos por 100.000 en el mes. Los datos deben expresarse en porcentaje de mortalidad materna dentro de las 48 horas siguientes al ingreso. El mejor resultado será el más cercano a 0%, pero el dato esperado estará directamente relacionado con las características institucionales. Numerador: Debe registrarse el número de maternas que murieron dentro de la institución con dentro de las 48 horas siguientes al ingreso, durante el período a evaluar. Denominador: Debe registrarse el total de maternas egresadas en la institución en el mismo período. El indicador debe ser producido mensualmente en el ámbito de la institución prestadora de servicios de salud. Para efectos de presentación y divulgación en general, puede manejarse a través de consolidados semestrales y anuales. Este indicador requiere de ajuste en los siguientes atributos: ü Nivel de complejidad ü Carácter general o especializado. ü Carácter público o privado. ü Nivel socio económico y cultural de las maternas que atiende. ü Control prenatal ü Patología concomitante o complicación del embarazo ü Patologías no relacionadas con el embarazo. Determinar la mortalidad de las maternas dentro de las 48 horas siguientes a su ingreso, considerando como maternas las mujeres que durante la estancia y como consecuencia de su embarazo, realizaron el proceso de parto en forma espontánea, inducidas o sometidas a cesárea. Excluye los abortos espontáneos o inducidos por razones médicas y a aquellas mujeres embarazadas admitidas en la institución para atención de patologías concomitantes o complicaciones del embarazo, pero que dentro del proceso, no cursa el parto. VARIABLES Nombre Fuente primaria Unidad de medida NUMERADOR Número de defunciones en maternas en las 48 horas siguientes al ingreso a la institución, en el mes. Registros hospitalarios – Certificados de defunción, ubicados en los departamentos o direcciones de estadística o archivo Número (cantidad) 67 DENOMINADOR Total recién nacidos vivos en la institución durante el mes, por 100.000 Registro de egresos hospitalarios. Número (cantidad) Nombre FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 8 INFECCIONES INTRAHOSPITALARIAS Foco Categoría ámbito sistémico Dimensiones Tasa de Infección Nosocomial de la institución. Estructura ( ) Proceso ( ) Resultado Oportunidad (x) Continuidad () Pertinencia Accesibilidad () Seguridad (x) (x) (x) DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos Descripción del cálculo. Frecuencia de medición Ajuste por riesgo Utilidad del Indicador VARIABLES Nombre Fuente primaria Frecuencia de medición Número de infecciones nosocomiales en el mes. Total egresos en el mes. Los datos deben expresarse en índice de infección nosocomial dentro de la institución. El mejor resultado será el más cercano a 0%, pero el dato esperado estará directamente relacionado con las características institucionales. Sobre este indicador pueden realizarse múltiples estratificaciones por servicios o unidades funcionales, por patología de ingreso, por otras patologías presentes en el paciente y que pueden constituirse como factores de riesgo para la infección nosocomial, entre otros. Numerador: Debe registrarse el número de infecciones que se presentaron en los pacientes atendidos por la institución durante el período estudiado. En el caso de que un mismo paciente presente infección nosocomial en más de un órgano o por más de un agente infeccioso, estas deberán registrarse el dato por número de infecciones y no como un solo caso. Denominador: Debe registrarse el total de egresos de la IPS en el mismo período. El indicador debe ser producido mensualmente en el ámbito de la institución prestadora de servicios de salud. Para efectos de presentación y divulgación a los usuarios y al sistema en general, puede manejarse a través de consolidados semestrales y anuales. Este indicador requiere de ajuste en los siguientes atributos: ü Nivel de complejidad de la institución ü Servicio o unidad funcional donde es atendido el paciente. ü Carácter general o especializado de la institución ü Especialidad que atiende al paciente. ü Patología concomitante de los pacientes con infección nosocomial. Permite tener una visión transversal de la institución, teniendo en cuenta que involucra múltiples áreas y disciplinas, además de la participación de los usuarios y un acercamiento entre los aspectos de carácter técnico, científico, administrativo y aquellos subjetivos inherentes a la cultura organizacional y de los usuarios. NUMERADOR DENOMINADOR Número de infecciones Total ingresos en el mes. nosocomiales en el mes. Registros hospitalarios debidamente Registro de ingresos hospitalarios. diligenciados por el Comité de Vigilancia Epidemiológica o Infecciones de la Institución Mensual Mensual 68 FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NUMERO 9 INFECCIONES NOSOCOMIALES POR PROCEDIMIENTOS QUIRÚRGICOS Categoría ámbito sistémico Estructura ( ) Proceso ( ) Resultado (x) Dimensiones Accesibilidad () Continuidad () Pertinencia (x) Oportunidad (x) Seguridad (x) Nombre DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos Descripción del cálculo. Frecuencia de medición Ajuste por riesgo Utilidad del Indicador VARIABLES Nombre Fuente primaria Frecuencia de medición Número de infecciones nosocomiales en procedimientos quirúrgicos en el mes. Total pacientes con procedimientos quirúrgicos. Los datos deben expresarse en índice de infección nosocomial quirúrgica dentro de la institución. El mejor resultado será el más cercano a 0%, pero el dato esperado estará directamente relacionado con las características Numerador: Debe registrarse el número de infecciones que como complicación de un procedimiento quirúrgico, se presentaron en los pacientes quirúrgicos atendidos por la institución durante el período estudiado. Se incluyen en este indicador las infecciones directamente relacionadas con el proceso quirúrgico como infecciones de herida quirúrgica o abscesos en los tejidos adyacentes y no las infecciones de otros órganos o tejidos derivados de procesos invasivos, excepto cuando estos hayan sido realizados dentro del área quirúrgica y por personal de la misma. Denominador: Debe registrarse el total de pacientes sometidos a intervenciones quirúrgicas en la institución durante el período estudiado. El indicador debe ser producido mensualmente en el ámbito de la institución prestadora de servicios de salud. Para efectos de presentación y divulgación a los usuarios y al sistema en general, puede manejarse a través de consolidados semestrales y anuales. Este indicador requiere de ajuste en los siguientes atributos: ü Nivel de complejidad ü Carácter general o especializado y tipo de especialidad. ü Especialidades quirúrgicas contenidas en el portafolio de servicios. ü Patología concomitante de los pacientes con infección nosocomial quirúrgica. NUMERADOR DENOMINADOR Número de infecciones nosocomiales en procedimientos quirúrgicos en el mes. Registros hospitalarios debidamente diligenciados por el Comité de Vigilancia Epidemiológica o Infecciones de la Institución Mensual Total pacientes con procedimientos quirúrgicos. 69 Registro de ingreso de pacientes a salas de cirugía Mensual FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NÚMERO 10 OPORTUNIDAD DE LA ATENCIÓN EN CONSULTA DE URGENCIAS EN LAS IPS Categoría ámbito sistémico Estructura ( ) Proceso (x) Resultado () Dimensiones Accesibilidad () Continuidad () Idoneidad (x) Oportunidad () Seguridad (x) Nombre DEFINICION OPERACIONAL Tiempo de espera para la atención de urgencias de triage 1 Fórmula: Numerador Número de minutos que transcurren en el servicio de urgencias de la institución prestadora de servicios de salud, entre la solicitud de una consulta de urgencias clasificada como triage 1 y su atención por parte del médico en el trimestre. Fórmula: Denominador Número de consultantes clasificados como triage 1 en el servicio de urgencias en el trimestre. Tiempo de espera para la atención de urgencias de triage 2 Fórmula: Numerador Número de minutos que transcurren en el servicio de urgencias de la institución prestadora de servicios de salud, entre la solicitud de una consulta de urgencias clasificada como triage 2 y su atención por parte del médico en el trimestre. Fórmula: Denominador Número de consultantes clasificados como triage 2 en el servicio de urgencias en el trimestre. Tiempo de espera para la atención de urgencias de triage 3 Fórmula: Numerador Número de minutos que transcurren en el servicio de urgencias de la institución prestadora de servicios de salud, entre la solicitud de una consulta de urgencias clasificada como triage 3 y su atención por parte del médico en el trimestre. Fórmula: Denominador Número de consultantes clasificados como triage 3 en el servicio de urgencias en el trimestre. Tiempo de espera para la atención de urgencias de triage 4 Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos Número de minutos que transcurren en el servicio de urgencias de la institución prestadora de servicios de salud, entre la solicitud de una consulta de urgencias clasificada como triage 4 y su atención por parte del médico en el trimestre. Número de consultantes clasificados como triage 4 en el servicio de urgencias en el trimestre. Promedio de tiempo de espera según clasificación de triage. Los datos se expresan en unidades de tiempo –minutos. El mejor resultado es el más cercano a cero, cuanto menor sea el valor es mejor la oportunidad de la atención. 70 FICHA TECNICA DEL INDICADOR NÚMERO 11 REINGRESO DE PACIENTES ATENDIDOS EN URGENCIAS DENTRO DE LAS 48 HORAS SIGUIENTES AL EGRESO DEL SERVICIO Categoría ámbito sistémico Estructura () Proceso ( x) Resultado (x) Dimensiones Accesibilidad ( ) Continuidad (x) Pertinencia ( x) Oportunidad () Seguridad (x) Nombre DEFINICION OPERACIONAL Fórmula: Numerador Fórmula: Denominador Unidad de medida Valor de los datos Descripción del cálculo. Frecuencia de medición Ajuste por riesgo Utilización del Indicador VARIABLES Nombre Fuente primaria Unidad de medida Frecuencia de medición Número de reingresos en las 48 horas siguientes al alta de una atención de urgencias. Número total de pacientes atendidos por urgencias. Porcentaje de reingreso antes de las 48 horas en los servicios de urgencias. Los datos deben expresarse en porcentaje de pacientes que reingresaron al servicio de urgencias antes de las 48 horas después de haber sido dados de alta. El mejor resultado será el más cercano a 0, pero este debe compararse con los parámetros establecidos como de reingreso esperado, común y adecuado según la evolución clínica del paciente. Numerador: Numero de pacientes que habiendo sido atendidos en los servicios de urgencias, reingresan a estos antes de 48 horas de haber sido dados de alta. Denominador: Número total de pacientes que fueron atendidos en el servicio de urgencias en el mismo período. Este indicador debe ser llevado en forma trimestral, realizando consolidados semestrales y anuales. Existen casos en los que la evolución de la patología del paciente no responde a los protocolos o mejores prácticas médicas, sin que por esta razón pueda inferirse una falla en la calidad de la atención. Por esto es necesario comparar el indicador frente a los registros históricos de la institución y a los de otras entidades de características similares, identificando el margen de reingreso esperado. El reingreso de los pacientes a los servicios de urgencias se presenta con frecuencia, como consecuencia de un deficiente abordaje y la solución del problema que generó la consulta o fallas en la calidad de la información dada al usuario sobre la evolución del evento médico que la generó. Por esta razón, este indicador puede constituirse como un signo de alarma sobre la calidad de los servicios prestados. NUMERADOR DENOMINADOR Número de reingresos en las 48 horas Número total de pacientes siguientes al alta de una atención de atendidos por urgencias. urgencias. Registros de los servicios de Registros de los servicios de urgencias. urgencias. Número (cantidad) Número (cantidad) Trimestral (consolidado semestral y Trimestral (consolidado semestral y anual) anual) 71 Nombre Categoría ámbito sistémico Dimensiones FICHA TÉCNICA DEL INDICADOR NÚMERO 12 TASA DE MORTALIDAD HOSPITALARIA Estructura () Proceso ( ) Resultado Accesibilidad (x) Continuidad (x) Pertinencia Oportunidad (x) Seguridad DEFINICION OPERACIONAL Definición Interpretación Límites de la Interpretación Método de Cálculo Fuente Unidades de medida Frecuencia de medición (x) (x) (x) Proporción de pacientes que egresaron por muerte respecto al total de pacientes egresados en un período. Es una medida indirecta de la capacidad resolutiva de la institución hospitalaria, esto quiere decir que tiene que ver con la disposición y gestión de recursos para la atención, como también con la capacidad técnicocientífica ofrecida. Este índice de mortalidad hospitalaria es necesario estudiarlo con otros aspectos que tienen que ver con las condiciones premórbidas del paciente, por ejemplo en trauma agudo, quemados etc. Además depende del nivel de complejidad de que se trate y los servicios que se presten, tales como: Unidad de Cuidado Intensivo o Unidades de Recién Nacidos, Servicios de Trauma Agudo. Numerador: Número de egresos por muerte. Denominador: Número total de egresos en el período Multiplicado por la base de 100 Registros de las instituciones prestadoras de servicios de salud. Número de egresos hospitalarios Número de egresos por muerte Mensual Mensual 72 3.2 Metodología de Aplicación del Sistema de Indicadores de Calidad Para desarrollar el tema objeto de este capítulo, es necesario retomar algunos conceptos teóricos sobre los indicadores, su identificación, su utilización, en qué consiste el Sistema de Monitoreo Mediante Indicadores y la metodología para su implementación. 3.2.1. Los Indicadores: Los indicadores son medidas usadas en el tiempo, para determinar el desempeño de funciones o procesos, para evaluar la adherencia a un estándar o el logro de metas de calidad. Adicionalmente se definen como valores cuantificables que pueden usarse en la evaluación de elementos de estructura, de proceso y de resultado de la atención en salud y proporcionan una imagen del estado de la calidad en una organización. Pueden expresarse en tasas y porcentajes, por ejemplo de las infecciones intrahospitalarias, de mortalidad; como también basarse en el seguimiento de eventos centinelas o eventos adversos, tales como reacciones a medicamentos, caídas de pacientes y manejo de errores. Los indicadores deben cumplir con características como la validez, objetividad, poder ajustarse por riesgo o severidad y ser extraídos de bases de datos, no deben ser muchos y deben seleccionarse por consenso, sobre los procesos críticos identificados como críticos. (Rooney L. A., Vam Ostemberg, P.R. 1999) 3.2.2. El Sistema de Monitoreo mediante la utilización de Indicadores de Calidad: el sistema de monitoreo mediante indicadores de calidad corresponde a un conjunto de herramientas de evaluación que permiten obtener información sobre los principales problemas a estudiar por las organizaciones de salud, dentro de los cuales están los indicadores entre sí, la utilización de un instrumento o cuestionario de evaluación del grado de desarrollo del sistema de garantía de calidad en las instituciones, con el propósito de indagar sobre la capacidad de las instituciones para la implementación del sistema de monitoreo; el análisis de la variación en los procesos identificados para el seguimiento, el establecimiento de acciones de mejora de los procesos y resultados, en términos de efectividad, eficiencia y el cumplimiento de las normas mínimas de la calidad, así como los mecanismos implementados para la difusión de la información obtenida. En la implementación de este sistema se requiere de algunos pasos previos orientados a determinar el alcance y nivel de aplicación del mismo. Estos pasos podrán identificarse como: 1. La definición del Nivel de Desempeño en que se encuentra la institución; 2. La identificación de las Funciones Claves; 3. 73 El diseño de los indicadores; 4. El establecimiento de los estándares; 5. La utilización de Bases de Datos; 6. El Análisis y Seguimiento de la Información; 7. Las acciones de Mejoramiento y 8. La presentación y difusión de la información obtenida. 3.2.3. Definición del nivel de desempeño: Para la definición del nivel de desempeño, las instituciones deben autoevaluarse y determinar el grado de desarrollo de su Sistema de Calidad, identificar los procesos clave objeto de evaluación, los recursos disponibles, las metas a alcanzar de manera cuantificable, la capacidad para liderar el proceso de calidad en términos de compromiso con la filosofía de mejoramiento continuo, la identificación y desarrollo de las competencias y habilidades con que cuenta la institución. Para la implementación de un sistema de monitoreo por indicadores de resultados, éste debe tener en cuenta el tipo de resultados a ser medidos, la relación entre la medida de resultado y el establecimiento de estándares, cómo serán colectados los datos, como serán agrupados, cómo serán utilizados los datos para los procesos de referenciación o identificación de mejores prácticas y acceso de los datos al público, entre otros. (Rooney L. A., Vam Ostemberg, P.R. 1999) 3.2.4. Identificación de funciones claves: Para la identificación de funciones claves es necesario tener en cuenta, aquellas que están directamente relacionadas con los efectos en el paciente y su familia, como son: los deberes y derechos, las necesidades iniciales y futuras, la asistencia personalizada, el impulso de comportamientos saludables y potenciación de la coordinación de la asistencia. Otras funciones claves a tener en cuenta corresponden a aquellas relacionadas con el Direccionamiento de la Organización, como son: el Liderazgo, la Gestión del Entorno, de los Recursos Humanos, de la Información, de la Vigilancia y Control de Infecciones, de aquellos procesos que involucren mayor posibilidad de riesgo para los usuarios, que presentan alto volumen y altos costos. En este punto es de importancia fundamental que la organización haya identificado los procesos claves, razón de ser de la misma. Es necesario que las instituciones se centren en aquellas funciones verdaderamente importantes, que sean objeto de evaluación y seguimiento, cuya información sea utilizada para tomar decisiones y permita realizar ajustes y establecer acciones de mejoramiento. En este punto se recomienda tener en cuenta, en una primera etapa, los procesos mínimos establecidos en la reglamentación de habilitación como son el seguimiento de los riesgos inherentes al tipo de servicio que presta, la mortalidad hospitalaria, las infecciones intrahospitalarias; complicaciones quirúrgicas inmediatas, anestésicas, terapéuticas, especialmente medicamentosas y transfusionales y aquellas complicaciones derivadas de la falta de 74 efectividad de las intervenciones de protección específica y detección temprana. Posteriormente y a medida que la institución desarrolle y maneje su sistema de monitorización por indicadores podrá ajustarlos, de manera que su base se amplíe y su orientación hacia las funciones clínicas se fortalezca. 3.2.5. Guías, estándares, base de datos, análisis y seguimiento de la información: Como se mencionó anteriormente los indicadores deben identificarse por consenso, con la participación de toda la organización, orientados a procesos y resultados, previa identificación de los procesos prioritarios, relacionados directamente con la Seguridad y Satisfacción de los clientes o usuarios. El Sistema de Monitorización debe ser liderado por la alta dirección de la institución, de manera que se garantice su implementación, funcionamiento, su confiabilidad y la utilización de sus resultados para la toma de decisiones. Para optimizar la utilización de los recursos del sistema y lograr un mayor impacto del mismo, es recomendable organizar una estructura en “cascada”, es decir que incluya la definición de niveles, el desarrollo de indicadores que atraviesen todos los niveles, así como indicadores propios de cada nivel y según las necesidades del servicio. Los indicadores deben ser mas administrativos y globales en el nivel más alto y más específicos y clínicos en los niveles básicos. Los estándares corresponden a documentos obtenidos por consenso para el cumplimiento de un objetivo, definición del desempeño, capacidad, método, procedimiento, responsabilidad, deber, autoridad, concepto, etc; con el objetivo de unificar y simplificar criterios, de manera que sean convenientes y benéficos para las personas involucradas. (Restrepo, F. R. Monitorización de Indicadores, mayo 2002, sin publicar). Estos se obtienen con la información obtenida periódicamente y después de consultar las necesidades y expectativas de los usuarios, mediante la utilización de herramientas como la Gerencia de Procesos. (Gerencia de Procesos, Vía Salud 2001) 3.2.6. Análisis y Evaluación de la información: Para el análisis y evaluación de los resultados obtenidos durante el proceso de monitorización es necesario capacitar al personal en la filosofía del mejoramiento continuo, en la reglamentación de calidad en nuestro país, en la identificación de procesos prioritarios, la utilización de formatos de registro y obtención de la información, manejo de bases de datos para la consolidación, generación de los reportes, metodologías de consenso para la discusión de la información. Adicionalmente al procesamiento de la información, es de importancia fundamental tener claridad sobre conceptos de Variabilidad y Control Estadístico. En este sentido se presentan los siguientes conceptos: 75 3.2.6.1. Variabilidad natural y Control Estadístico: El concepto de “variabilidad”, en el ámbito sanitario según J.C. Benneyan, puede ser planteado así: “muchos procesos exhiben alguna variabilidad, cuyas causas pueden ser clasificadas en dos categorías: “natural” o “no natural”. La variación natural de un proceso es la variación sistémica inherente como parte regular del proceso. Algunos ejemplos de “causas comunes” de la variabilidad natural podrían incluir la duración del día, el censo del hospital y el “case-mix”, peso y condiciones físicas de los pacientes, otras diferencias entre pacientes y variaciones en los comportamientos y demografía. Dado que ellas son causadas por fuentes regulares dentro del proceso o su entorno, los datos que representan la variación natural, pueden ocurrir en frecuencias predecibles y relativamente comunes. (Benneyan, J.C. 1998). Por el contrario, los resultados u observaciones en el proceso que tienen muy pocas probabilidades de ocurrencia, usualmente representan desviaciones del proceso regular y sugieren que el proceso fundamental ha cambiado, para bien o para mal, debido a la variabilidad atípica, no natural que podría señalarse por la ruta de causas asignables en el manejo de la intervención. Ejemplos de “causas especiales” de variabilidad no natural podrían incluir cambios en los procedimientos clínicos, falla en la habilidad, falla del equipo, nuevo staff y cambios en la demografía de la población, tasa de la enfermedad o la fisiología del paciente. De otra parte, el término “control estadístico” se refiere a la estabilidad y predictibilidad de un proceso sobre el tiempo y el tipo de variabilidad que existe. Un proceso que es completamente estable en el tiempo exhibe solamente variabilidad natural, la cual es comportamiento aleatorio regular que permanece inalterado y al cual se refiere como estando en un estado de control estadístico. Inversamente, un proceso que cambia respecto a su norma exhibirá variación natural y será referido como estando fuera de control estadístico. 3.2.6.2. Análisis de la Ruta Causal. (Root Cause Analysis). El análisis de la ruta causal es un proceso para identificar los factores básicos o causales que subyacen en la variación del desempeño, incluyendo la ocurrencia o posible ocurrencia de un evento centinela. Este análisis se enfoca primariamente a los sistemas y los procesos, al progreso de las causas especiales, las causas comunes, a través de la pregunta repetitiva porqué?, porqué y porqué?. Su meta es el rediseño para la reducción del riesgo, con la utilización de una serie de preguntas que pretenderán ir de lo general a los especifico y de lo superficial a las causas reales que originaron el problema. 76 A continuación se transcribe, en una traducción libre, los pasos recomendados por la JAHC, para realizar un Análisis de la Ruta Causal: Asignar un equipo para la evaluación del evento centinela, incluyendo personal de todos los niveles estrechamente ligados al asunto a evaluar, inclusive aquel con capacidad de decisión. Este equipo debe tener sus miembros claves y líderes claramente identificados, reunirse tan frecuente como sea necesario, estar facultado para hacer su evaluación y los cambios o recomendaciones para los cambios, disponer de los recursos necesarios, incluido tiempo para hacer su trabajo, contar con una estructura y procesos definidos para moverse hacia delante. Establecer una vía de comunicar su progreso y hallazgos a la alta dirección y mantener informados a los directivos. Es muy importante que el equipo pueda crear un plan de alto nivel, que incluya fechas para las cuales pueda llevar a cabo objetivos específicos de tal manera que tenga un referente contra el cual guiar y medir su progreso. Mediante una lluvia de ideas se puede identificar todas las causas posibles o potenciales, siguiendo las reglas tradicionales tales como “no hay idea mala” y no expresar comentarios de las ideas. Es necesario mantenerse enfocado en el proceso, no en la gente. Hacer preguntas de “porqué”, buscar las causas encubiertas hasta que su comprensión haya explorado exhaustivamente todas las posibles preguntas y causas. La importancia de esta etapa no debe ser subestimada. Ella proveerá la sustancia inicial para su análisis sin la cual no se podrá proceder. Seguidamente ordene y analice su lista de causas, construya un diagrama de causa y efecto. Posteriormente se empezará determinando el proceso o sistema con cada causa, si es una causa especial o común en el sistema. Es posible encontrar que una misma causa sea especial en un proceso y una común en otro. El proceso de hacer un diagrama de flujo puede ser útil. No se debe esperar hasta acabar el análisis causal para empezar a diseñar e implementar los cambios, éstos podrían ser no sólo apropiados, sino necesarios y podrían necesitarse para reducir un riesgo inmediato. Además, podrían se parte de un ciclo de Planear-hacer-estudiar-actuar para probar el proceso de rediseño antes de implementarlo extensamente en la organización. Finalmente podrían existir causas adicionales encubiertas, que fueron previamente enmascaradas, pero que son críticas para su búsqueda de la ruta causal. Periódicamente debe evaluar el progreso para hacer ajustes. Repita ciertas actividades como la lluvia de ideas, el diagrama de causa y efecto para mejor identificar partes de un proceso y definir el blanco de las mejoras, tantas veces como sea necesario. Además de hacer mejoras intermedias a lo largo del trabajo, no pare su análisis antes de identificar la ruta causal y tomar la acción correctiva. Enfoque los esfuerzos de mejora en el sistema global. Solo los sistemas globales pueden ser rediseñados para eliminar las causas comunes de variación. Rediseñe para eliminar 77 la ruta causal. Esto puede involucrar cambios en el entrenamiento, las políticas, los procedimientos, las formas, el equipo, etc. (Fuente: Joint Commission On Accreditattion Of Healthcare Organizations: Root Cause Analysis) 3.2.7. Análisis de Acciones de Mejora: Se deben buscar las estrategias y acciones que permitan corregir el problema determinado anteriormente y canalizar los que sean del manejo de otros grupos En esta fase es muy importante tener en cuenta el grado de cumplimiento de los criterios, puesto que así podrá determinar en cual de las causas es en la que irá a trabajar para generar mejora, así como el impacto esperado de las acciones que se desarrollen de manera que se alcance una relación costo efectividad que justifique tales acciones. Igualmente hay que tener cuidado de que las acciones que se determinen estén integradas y coordinadas con las que se desarrollarán para impactar los otros problemas que haya decidido enfrentar el programa de calidad. También en está etapa se podrán utilizar técnicas sobre priorización de problemas. 3.2.7.1. Priorización de Problemas. Con base en los problemas detectados, se debe proceder a agruparlos en orden descendente según la importancia. Los criterios con los cuales se haga tal priorización pueden ser establecidos por expertos, pero siempre utilizando alguna de las técnicas de consenso que eviten la inútil dispersión de los esfuerzos en elucubraciones interesantes desde el punto de vista teórico pero con poco efecto como orientadores de un plan de acción específico. Por consenso y de acuerdo al análisis de los problemas según los criterios establecidos para la priorización de problemas, se analizan los problemas y da un orden de importancia, como se observa en el siguiente ejemplo: 1. Infecciones Postoperatorias 2. Mal Manejo De Desechos Cortopunzantes 3. Falta Colaboración De Los Pacientes En La Higiene 4. No Hay Dispensadores De Jabón De Pedal 5. No Hay Descripción Quirúrgica 6. No Hay Protocolo De Antibióticos 7. Cancelaciones Por Falta De Suministros En Ortopedia 8. Pacientes Sin Consulta Preanestesica 9. Relación Oferta Demanda 10. Falta Actualización Para Los Profesionales 78 3.2.8. Implantación de Acciones de Mejora: La sistemática de la implantación estará estrechamente ligada a la planificación de diferentes estrategias para favorecer el cambio y tratar las resistencias que todo cambio provoca. Por lo tanto se deberá trabajar en buscar acciones para lograr el cambio y detectar las posibles resistencias, el motivo de las mismas y las acciones a tomar. 3.2.9. Reevaluación: Una vez implantadas las acciones de mejora se evalúan el impacto frente a los criterios de evaluación definidos, se harán los correctivos o ajustes necesarios de acuerdo con los nuevos resultados y si se identifican nuevos problemas se repetirá nuevamente el ciclo. (Restrepo, F. R.. 2000) Para la definición de los indicadores diseñados en el presente trabajo se revisaron los indicadores de la Superintendencia Nacional de Salud, los diseñados por el Ministerio de Protección Social en el estudio del Sistema Obligatorio de Garantía de la Calidad, contratado con el Consorcio del Centro de Gestión Hospitalaria, los desarrollados en el anexo técnico de la Resolución 1439 del 2002, sobre el Sistema Único de Habilitación, los indicadores de la AJCHA y en Manual de la Organización Panamericana de la Salud sobre Garantía de la Calidad de 1996. 3.2.10. Implementación del Sistema de Monitoreo por Indicadores en la Prueba Piloto: Para la implementación del Sistema de Monitoreo por Indicadores en las IPS de la Prueba Piloto, se invitará a las instituciones a participar en el proyecto y aquellas que decidan ser incluidas en el marco de la muestra diseñada, serán seleccionadas al azar. Estas instituciones deberán formalizar su intención de participar en el proyecto, mediante la presentación de una solicitud por parte del Representante Legal, incluyendo el informe de la autoevaluación desarrollada, de conformidad con el cuestionario suministrado por el estudio, un plan para la implementación de los indicadores que incluya: los antecedentes de calidad, los objetivos establecidos, la metodología diseñada para la aplicación de los indicadores, recursos asignados, tiempo proyectado para su ejecución y la presentación del líder del proyecto. Una vez agotada la presentación de la documentación, se procederá a la evaluación documental y posteriormente se realizarán visitas por el equipo definido para evaluar en campo la concordancia de la documentación, con los informes presentados. Esta evaluación se realizará mediante la asignación y cumplimiento de puntajes. Al inicio del proyecto se realizarán reuniones conjuntas con las organizaciones definidas en la prueba piloto, en las que se discutirá la metodología a utilizar, para homologar conceptos y definir, por 79 consenso, las metas a lograr, el tiempo para su cumplimiento y el procedimiento que será utilizado para la medición de los compromisos adquiridos. En este momento se adoptará y firmará la carta de compromiso de la ética de las organizaciones. Durante el desarrollo de la prueba piloto se invitarán expertos en Calidad, para la discusión de temas, así como de las dudas surgidas en el proceso por los participantes y posibles ajustes requeridos. Se presentarán informes trimestrales y semestrales, según el Plan diseñado por las instituciones, los cuales serán conjuntamente analizados y retroalimentados. Una vez se termine el proyecto se presentará un informe consolidado de las IPS que hayan presentado su información, el cual será divulgado mediante presentaciones, publicaciones y charlas. 80 BIBLIOGRAFÍA 1. AFFELT, J.E. SHANAHAN, F. La Acreditación Voluntaria en los Estados Unidos: una perspectiva de control de calidad. Control de Calidad Asistencial. 2, 2, 41 –45. 1.987. 2. ANSI/ASQC. Estándar Q1-1.998 Generic for Auditing of Quality Systems (directrices generales para la auditoría de los sistemas de calidad). 3. ARDON, N. y JARA, M. Interpretación de la conceptualización de la calidad y calidad en salud y de las metodologías existentes a nivel internacional para evaluar la calidad en los Servicios de salud. Análisis Preliminar. Pontificia Universidad Javeriana. Bogotá. 1998. 4. BENNEYAN, J. C. Use and Intrepretattion of Statistical Quality Control Charts. International Journal for Quality in Health Care. Vol 10, Nº 1. February 1998 5. CASTELLANOS. J.L. y otros. 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BIRGHAM, J.R. Manual de Control de Calidad. Ediciones Reventé. Barcelona, 1990 23. LEE, R. J. The fundamentals of good medical care. Chicago, III: University of Chicago Press, USA, 1993. 24. MALAGON, G. y OTROS. Administración hospitalaria. Editorial medica Panamericana. Bogotá. Colombia. 1996. Página 9 25. MALAGON, G y OTROS. Auditoría en Salud. Una Gestión Eficiente. Editorial Medica Panamericana. Bogotà, Colombia. 1998. 26. MARIÑO, H. Gerencia de la Calidad Total. Tercer Mundo Editores. Colombia.1992. 27. MINISTERIO DE SALUD. Resolución 5261 del 5 de Agosto. Colombia, 1994. 28. MINISTERIO DE SALUD. Acuerdo No 20.Colombia, 1990. 29. MINISTERIO DE SALUD. Acuerdo No 11. Colombia, 2000. 30. MINISTERIO DE SALUD. Proyecto : Evaluación y ajuste de los procesos, estrategias y organismos encargados de la operación del Sistema de Garantía de Calidad para las instituciones de prestación de servicios. Componente Acreditación. Informe Final de Acreditación. Junio de 2001 31. PEREZ, R. 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Auditoria de la Calidad: es el mecanismo sistemático y continuo de evaluación del cumplimiento de estándares de calidad complementarios a los que se determinan como básicos en el Sistema Único de Habilitación. Los procesos de auditoria serán obligatorios para las entidades departamentales, distritales y municipales de salud, las instituciones prestadoras de servicios de salud, las entidades promotoras de salud, las administradoras del régimen subsidiado, las entidades adaptadas y las empresas de medicina prepagada. 2. Auditoria para el Mejoramiento de la Calidad de la Atención de Salud implica: La realización de actividades de evaluación y seguimiento de procesos definidos como prioritarios; y la comparación entre la Calidad Observada y la Calidad Esperada, la cual debe estar previamente definida mediante guías y normas técnicas, científicas y administrativas. La auditoría base de este documento para todos los efectos se entenderá como auditoría de la calidad de la atención en salud, definida en los términos contenidos en el artículo 14 del Decreto 2174 de agosto de 1996 como “la evaluación sistemática de la atención en salud, con el objetivo fundamental de mejorar la calidad de los servicios”. Significa la comparación entre la calidad observada y la calidad deseada de acuerdo con las normas técnico - científicas y administrativas previamente estipuladas para la atención en salud. (2) Se define como un examen sistemático de las actuaciones y decisiones de las personas con respecto a la calidad, con el objeto de verificar o evaluar de manera independiente e informar el cumplimiento de los requisitos operativos del programa de calidad o de la especificación o de los requisitos del contrato del producto o servicioi. (3) Es una iniciativa que busca mejorar la calidad y resultado de la atención en salud, se examinan sus prácticas contra estándares preestablecidos y se modifica la práctica donde esté indicado 3. Auditoria interna: es uno de los componentes del Sistema de Control Interno, de nivel gerencial o directivo, encargado de medir y evaluar la eficiencia, eficacia y economía de los controles, asesorando a la dirección en la continuidad del proceso administrativo, la reevaluación de los planes establecidos y en la introducción de los correctivos necesarios para el cumplimiento de las metas u objetivos previstos.ii 4. Auditoria externa: en este tipo de auditoria se presenta un cambio en la relación entre los participantes. El cliente es una organización separada de la del auditado, lo cual es, por supuesto, el motivo por el que es una auditoria externa 84 5. Autocontrol: es una condición que permite a cualquier individuo controlar el proceso de trabajo al tiempo que lo ejecuta. El trabajador debe: Querer intervenir: debe estar motivado para desempeñar mejor sus tareas. Saber intervenir: ha de tener la formación necesaria no sólo para saber hacer su trabajo, sino también para detectar los fallos y corregirlos. Poder intervenir: tiene que estar dotado de la suficiente autonomía y responsabilidad para poder subsanar, por sí mismo, aquellos errores que se produzcan en el trabajo 6. Cliente: cualquier individuo, familia, grupo y/o comunidad (interno o externo a la organización) que recibe cuidados y tratamientos o servicios de la organizacióniii. En el contexto de este manual de estándares se homologará la palabra cliente externo al de paciente. 7. Código de Ética: conjunto de estándares para la construcción y funcionamiento de los principios de la moral aplicados a las acciones humanas. 8. Confidencialidad: respeto a los derechos del paciente para controlar la distribución y difusión de los datos de su enfermedad. Limitación al acceso, a los datos y la información a los individuos que tengan necesidad, motivo y esté autorizado su acceso 9. Control: conjunto de operaciones encaminadas a verificar y comprobar el funcionamiento, productividad, de algún proceso de acuerdo con unas directrices y planes establecidos. 10. Efectividad: el grado en que la asistencia médica se presta de forma correcta, según el estado actual del conocimiento, para alcanzar el resultado proyectado o deseado por el paciente. 11. Eficacia: el grado en que el resultado proyectado o deseado por el paciente es logrado por la asistencia médica prestada. En la prestación de servicios sanitarios, beneficio o utilidad para el individuo de los servicios preventivos, terapéuticos o diagnósticos que se le presten. 12. Eficiencia: indicadores y resultados que miden el nivel de recursos empleados en un proceso para atender los requisitos de los clientes. Relación entre los resultados (resultados de la asistencia) y los recursos utilizados para prestar la asistencia al paciente. 13. Estándar: nivel alcanzable y deseable del desempeño contra el cual puede ser comparado el desempeño actual. En evaluación de la calidad es un valor numérico o rango numérico de variaciones que especifica el nivel aceptable, adecuado u óptimo de calidad. 85 14. Estrategia: acción de largo y mediano plazo necesaria para alcanzar la visión. Camino que ha de seguir por la organización para garantizar su supervivencia en el largo plazo. Medios o caminos escogidos (necesarios) para alcanzar posiciones futuras favorables (metas) con relación a otros competidores en determinado mercado. 15. Exámenes Diagnósticos: es la suma del número de pruebas y sus técnicas realizadas en las instituciones prestadoras de servicios de salud, con el fin de contribuir a la investigación y esclarecimiento de las características y circunstancias del estado de salud de los usuarios y sus patologías (incluye exámenes de laboratorio clínico, patológico, inmunológico, genético, biológico, electrofisiológico, oftalmológico, auditivo, etc.; así como también pruebas imagenológicas invasivas y no invasivas). 16. Guías de Práctica Clínica: las guías de manejo clínico basadas en evidencia científica son recomendaciones desarrolladas de manera sistemática que buscan ayudar al médico y al paciente en decisiones sobre el cuidado apropiado en salud en circunstancias clínicas específicasiv. Las guías de manejo clínico han sido promovidas como una estrategia para apoyar las decisiones clínicas, buscando mejorar la efectividad y optimizar costos de los servicios de salud. Promueven una apreciación mas explícita de los determinantes de la toma de decisiones clínicas y facilitan la estandarización y evaluación de la calidad de la práctica médica mediante parámetros confiables y científicamente sólidos. 17. Historia Clínica Única: es la historia clínica de los tratamientos ambulatorios archivada en el mismo lugar de la historia clínica de tratamientos intrahospitalarios hechos al paciente y que es de fácil acceso y consecución. También incluye los resultados de los exámenes clínicos, radiológicos y de laboratorio realizados al paciente. 18. Infecciones nosocomiales (u hospitalarias): todas las infecciones que se presentan en el hospital, excepto los casos en los que el paciente ingresa con la infección activa o en período de incubación. Infecciones adquiridas en el hospital que no se ponen de manifiesto hasta después del alta. Infecciones entre el personal sanitario 19. Indicador: La Joint Commission define que un indicador de calidad “... es una medida cuantitativa que puede ser usada para monitorizar y evaluar la calidad de las funciones claves del gobierno, la administración, clínica y de soporte, que afectan los resultados del paciente. Un indicador no es una medida directa de la calidad. Sin embargo, es un instrumento que puede ser utilizado para evaluar el 86 desempeño y puede dirigir la atención a los asuntos potenciales del desempeño que podrían requerir mas intensiva revisión dentro de una organización.” 20. Insumos: son los recursos humanos, financieros, de infraestructura, materiales, etc., que utilizan una institución para producir servicios. 21. Monitoreo: se refiere a la vigilancia constante y la medición sistemática de un fenómeno, se utiliza para detectar tempranamente cualquier alejamiento del buen manejo o estándar del proceso y su corrección inmediata. Se utilizan criterios explícitos para temas considerados como importantes, esenciales o básicos, manejados en condiciones específicas. 22. Oportunidad: dimensión de la actuación referente a la manera en que se presta la asistencia o se realiza una intervención en el paciente en el momento más beneficioso o necesario 23. Personal: funcionarios que laboran en o para la organización. Incluye a los profesionales de la salud, a los profesionales de áreas diferentes de la salud y a los demás trabajadores no profesionales de cualquier nivel. 24. Pertinencia: cualidad de lo que exactamente conviene o corresponde al objetivo que se trate. 25. Proceso: el concepto de proceso puede ser entendido como el conjunto de causas que provocan un o unos efectosv. La Joint Commission lo define como una serie de acciones, sucesos, mecanismos, o pasos interrelacionados y orientados hacia un objetivovi. Vicente Falconi lo define como la secuencia de tareas organizadas, repetitivas que producen un resultado (producto/bien/o servicio) predeterminado, y tienen un solo responsablevii. En este documento se entenderá por proceso una forma de articular el conjunto de actividades, prácticas, comportamientos, procedimientos, sistemas y mecanismos repetitivos con los cuales opera una organización.viii 26. Productividad: es la relación entre la cantidad de un bien o servicio y la cantidad de factores que han servido para producirlo. La productividad se relaciona con la capacidad de los recursos para producir o no los servicios necesarios. 27. Producto: es la combinación de bienes y/o servicios que se ofrece al mercado para su adquisición, uso o consumo y que satisface una necesidad o un deseo. Así los productos en salud pueden verse representados en una glicemia, una curva de glicemia, una apendicectomía, una curación de una herida, 87 la atención de un parto, un día de hospitalización o una comida. La definición de cada uno de los productos lleva implícita un costeo y una fijación de precio, pues cada producto se debe manejar como un ente independiente. Habitualmente suele distinguirse entre productos intermedios y finales. Los productos intermedios (outputs) se refieren a las diversas actividades que (de forma diferenciada según la naturaleza del producto) se integran en el proceso global de producción componiendo el producto final; mientras que los productos finales (Outcomes) se refieren a la integralidad de tales bienes o servicios, que constituyen en cada caso los objetos básicos (unitariamente facturables) de la actividad considerada. 28. Resultado (Outcomes): efecto y consecuencia de la actuación (o no actuación) de una función o proceso(s). 29. Resultado de Calidad: es un cambio en el estado actual y futuro de la salud del paciente, en sus aspectos físico, fisiológico y social que pueden ser atribuidos al antecedente de la atención médica. 30. Triage: es un término de origen francés que significa clasificar para definir prioridades; se aplica en la medicina de desastres para establecer no cuáles pacientes están más graves, sino para establecer el orden en el cual deben ser manejadas (rescate, estabilización, remisión, tratamiento). 31. Unidad Funcional: conjunto organizado de factores o recursos productivos que interactúan de una manera armónica, se encuentran bajo el control de un centro de decisión único y están dedicados a la obtención de productos o resultados concretos. 32. Validez (de datos): verificación de la corrección de los datos, refleja una situación verdadera. También se refiere a la característica de un instrumento de medir lo que se propone medir. 88 View publication stats