COMUNICACIÓN MEDIÁTICA Y ORGANIZACIONES Fundamentación y régimen de cursada y aprobación Si bien la propuesta pedagógica de la asignatura “Comunicación Mediática y Organizaciones” expuesta en el régimen de cursada- constituye un factor importante en el diseño operativo de los cursos que se brindan, vale la pena aclarar que partió de una visión estrictamente académica que efectué ante las autoridades de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social en el año 1997, quienes -luego de un detallado análisis- decidieron incluirla en la currícula del actual Plan de Estudios de la carrera. Aquella proposición nació en función de la simple observación de acontecimientos reales cotidianos y que podían resumirse en la siguiente conclusión: los alumnos de los últimos años de la carrera y los recientemente graduados no tenían los conocimientos ni la práctica mínimos y necesarios para desempeñarse correctamente en las Áreas de Comunicación de las distintas organizaciones (públicas, privadas y no gubernamentales). Esta opinión, sustentada en la propia experiencia al cumplir durante años el rol de Sub-director de Prensa del Ministerio de Economía de la Provincia de Buenos Aires, me llevó a sugerir insistentemente la creación de una cátedra destinada básicamente a brindar las herramientas teóricoprácticas para que los alumnos se graduaran con una correcta capacitación respecto de lo que constituye la gestión de prensa y comunicación en las organizaciones. Llevaba más de una década como profesor de la Facultad (dictando otras asignaturas) y rescataba anualmente aproximadamente cuatro alumnos para que efectuaran sus prácticas rentadas en Prensa de Economía, pero la falta de conocimientos específicos que ellos tenían obligaba a capacitarlos durante dos años. Pocas eran las dependencias que aceptaban incorporar alumnos de la Facultad debido, precisamente a su falta de experiencia. Afortunadamente, hoy día todas esas dependencias tienen alumnos y graduados de nuestra Facultad con conocimientos calificados que, en muchos casos, les posibilitaros acceder a los puestos jerárquicos propios de nuestra profesión. Hoy en día la idea es seguir con la capacitación básica de los alumnos y a la vez sumar los vertiginosos conocimientos específicos que surgen en pos de una permanente actualización. Ahora bien, la propuesta se asienta sobre un régimen de cursada optativo cuatrimestral y sobre una intensiva actividad tanto en las clases teóricas como prácticas, basada fundamentalmente en el trabajo en clase con los alumnos. Todas las clases incluyen la difusión de conocimientos teóricos y la realización in situ de trabajos prácticos; no obstante, la organización de las actividades pautadas es lo suficientemente flexible para lograr la optimización de los resultados. Generalmente, las primeras horas de clase se emplean para la enseñanza teórica; mientras que en las horas siguientes los alumnos trabajan en grupos de no más de cinco integrantes sobre las situaciones problemas que se les plantean. Su trabajo debe concluir y ser entregado al final de la clase y durante la realización del mismo cuentan con la posibilidad de consultar de manera abierta y permanente a todos los docentes que nos hallamos presentes en la clase. Por otra parte, los alumnos -tanto en forma individual como grupal- deben realizar trabajos prácticos extra-curriculares, guiados y asesorados por un docente. Para lograr la aprobación del curso, los alumnos deben cumplir un régimen de cursada regular que exige el 80% de asistencia a las clases. También deben aprobar el 80% de los trabajos prácticos exigidos. Por otra parte, deben rendir una prueba parcial (individual) en fecha a designar y aprobar un trabajo final (grupal). Quienes cumplen con los requisitos mencionados aprueban el régimen de cursada regular y quedan eximidos de una evaluación final. Tanto los trabajos prácticos como la evaluación parcial y el trabajo final se aprueban con la nota 7 (siete), que no es promediable. No obstante, podrán recuperar las pruebas parciales y los trabajos prácticos los alumnos que no alcancen esa calificación. La nota final es el resultado del promedio de las calificaciones obtenidas en el parcial, los trabajos prácticos, el trabajo final grupal y el nivel de la calidad de participación en las clases. Quienes no alcancen el promedio 7 (siete) al finalizar la cursada, deberán presentarse a rendir una prueba final en la fecha que oportunamente se designe. Los alumnos que opten por el régimen libre de cursada deberán rendir una prueba final que, además de contemplar todos los conocimientos alcanzados en las clases regulares, incluirá preguntas vinculadas a las actividades horarias extra-curriculares que realizaron los alumnos que escogieron la cursada regular. En otras palabras, quienes opten por la cursada libre tendrán las mismas obligaciones que los alumnos que adoptaron la cursada regular. Por ejemplo, no sólo deberán estudiar la bibliografía dispuesta en el Programa de Estudios, sino que además deberán consultar todo lo expuesto en las clases teóricas y prácticas. El objetivo es evitar que los alumnos que elijan la cursada libre tengan menos obligaciones que aquellos que se inclinaron por el régimen regular y el esfuerzo sea lo más equitativo posible. Por último, vale aclarar que en todos los casos, el examen final (que deberán rendir los alumnos que cursaron regularmente pero no alcanzaron la calificación 7 y los alumnos que optaron por la cursada libre) se aprueba con calificación 4 (cuatro). Lic. Gabriel Lamanna Profesor Titular