LA MEDIACIÓN SOCIAL EN LA EMPRESA: SEGUIMIENTO EN LA INSERCION. Esta ficha propone un modelo de funcionamiento relacionado con el seguimiento en la inserción en el que se emplea la mediación en el contexto laboral como ayuda para la solución de conflictos laborales relacionados con las personas beneficiarias. La estructura de la ficha es la siguiente: - Seguimiento en la inserción laboral - Conflictos en el contexto laboral - Situaciones desencadenantes de conflictos - Conflicto, negociación, mediación, y arbitraje: aclaraciones terminológicas SEGUIMIENTO EN LA INSERCIÓN LABORAL La mediación social se integra en el contexto laboral como herramienta de resolución y prevención de conflictos que se pueden originar. Hacemos referencia sobre todo a los conflictos que pueden surgir en el proceso de adaptación al puesto de empleo, es decir, adaptación de la persona a su puesto de trabajo y adaptación de la empresa a la persona, requiriendo un seguimiento por parte del mediador/a sociolaboral desde una doble óptica: ■ Empresa ■ Persona En la gestión de ofertas de empleo por parte del Dispositivo, el seguimiento en la inserción es fruto de una intervención previa que ha realizado el mediador/a sociolaboral, tal como se muestra en la tabla adjunta. Para generar ofertas de empleo, en primer lugar se establece un contacto con las organizaciones, posteriormente se realiza una visita personal a la misma para ofrecerles los servicios (gestión de ofertas de empleo3 y asesoramiento en materia de contratación y ayudas económicas), en tercer lugar se define el puesto de empleo, y posteriormente se hace la selección de candidaturas y el contacto con las personas usuarias. GESTIÓN DE OFERTAS DE EMPLEO 1. Contacto inicial con las empresas 2. Ofrecimiento del servicio: Visita a empresas 3. Análisis de puesto de empleo: Delimitación del perfil profesional 4. Búsqueda de candidaturas: Contacto con demandantes de empleo. 5. Envío de candidaturas a la empresa 6. Resultados de selección 7. Inserción laboral 8. Seguimiento de la inserción 9. Adaptación al puesto de empleo. Por tanto, el seguimiento en la inserción supone la suma de múltiples intervenciones que se deben llevar a cabo para establecer futuros contactos con la empresa que generen un mayor número de ofertas de empleo que podrán ser cubiertas por la población en riesgo de exclusión social atendida. El mediador/a sociolaboral, ofrece sus servicios de seguimiento en la inserción de modo continuado como garantía para las empresas Por otra parte, el seguimiento supone la comprobación del grado de satisfacción por parte de la empresa-persona insertada en cuanto a la gestión realizada por parte del Dispositivo. A la empresa se le ofrece la garantía de continúo apoyo y asesoramiento a lo largo de toda la fase de adaptación al puesto de empleo pues un seguimiento óptimo por parte de la empresa y por parte de la persona usuaria garantiza el mantenimiento en el puesto de empleo y la posibilidad de generar futuras ofertas de trabajo para personas demandantes de empleo usuarias de los servicios en el Dispositivo. La inserción laboral de las personas en riesgo de exclusión social requiere un especial seguimiento de los grupos de población atendida (discapacidad, inmigración, jóvenes, mujeres o minorías étnicas), debido a que estos colectivos se encuentran en desventaja social con especiales problemas para acceder y sobre todo mantenerse en el mercado laboral. En el caso de la mujer, se incide en la flexibilidad horaria así como en la conciliación de la vida laboral y la vida familiar dentro del contexto laboral. Consideramos que el mantenimiento en un puesto de empleo es uno de los elementos más importantes del proceso de inserción de una persona. La incorporación de un/a usuario/a al puesto de trabajo es un momento critico dentro de un itinerario de inserción laboral. Por ello, resulta esencial el acompañamiento que se realiza en esta fase fomentando su integración laboral en la empresa y en el mercado de trabajo. CONFLICTOS EN EL CONTEXTO LABORAL El conflicto, introduciéndonos ya dentro del mundo empresarial, es un elemento consustancial a la dinámica organizacional. Nuestro modelo no concibe el conflicto como algo positivo ni negativo, sino como una oportunidad de cambio y transformación por parte de los trabajadores/as y la empresa. Siguiendo a Fernández Ríos (1983) para que una situación sea calificable o no de conflicto laboral debe tener en cuenta los siguientes elementos: - Interacción entre dos o más participantes - Existencia de conductas internas y/o externas incompatibles subjetivamente - Intencionalidad de perjudicar al otro/a o atribución de tal intencionalidad - Utilización directa o indirecta de poder - Ineficacia normativa En relación con los elementos anteriormente señalados, basta con que alguna de las partes perciba la existencia de conductas subjetivamente incompatibles y la atribución de una intencionalidad de perjudicar, para que nos encontremos potencialmente con una situación de conflicto. Éste no requiere que objetivamente existan unos intereses contrapuestos, simplemente, la percepción subjetiva de tal incompatibilidad puede producir el desencadenamiento de un conflicto. Cada elemento del conflicto, en este caso, la empresatrabajador/a con su propio marco de referencia, hace que algo que pueda ser tremendamente significativo para uno/a puede que para el otro/a no lo sea. También en el ámbito organizacional se hace una diferenciación entre conflicto latente y conflicto manifiesto. El paso de conflicto latente a conflicto manifiesto se produce cuando las acciones colectivas adquieren una magnitud o las individuales toman un carácter de representación colectiva. Entonces el conflicto latente deja de ser tal para convertirse en manifiesto. No obstante, en muchas organizaciones observamos la existencia de indicadores que acusan la existencia de un conflicto latente, generalmente ignorado o ocultado por el empresario/a. Los conflictos que manifiestan las personas recién insertadas en ocasiones son ignorados u ocultados por la empresa. En estos casos el mediador/a sociolaboral detecta un conflicto que no sale a la luz, por parte de la empresa, porque, aparentemente, es perjudicial para la misma. Ante la pregunta a la propia empresa la contestación es “en esta empresa no tenemos ningún conflicto”, lo cual repercute contra la evolución y desarrollo de la misma, acarreando daños, muchas veces, irreparables para la propia organización. En el seguimiento en la inserción se observa la existencia de una tendencia a ocultar los conflictos que se dan en la relación laboral entre trabajador/a y empresa. En el momento en que se dan situaciones conflictivas, el mediador/a sociolaboral es la persona que ayuda a ambas partes a llegar a un acuerdo común. Éste no actúa en forma alguna representando a alguna de las partes, es aceptado por ambas y se presenta como una tercera persona imparcial y neutral que carece de poder de decisión ante el conflicto. Así la mediación se contempla como un espacio de facilitación de la comunicación en la que se alcanza un objetivo común “la cooperación en torno a la resolución del conflicto”. Cabe decir, que en ocasiones la figura del mediador/a sociolaboral es poco utilizada en el ámbito organizacional. Por ello, las funciones o roles a desempeñar por el/a mediador/a es un elemento clave en la difusión y promoción de los servicios de mediación sociolaboral. Este perfil profesional se sitúa en el contexto laboral para reconciliar los puntos de vista divergentes de las partes logrando que se flexibilicen las “rutinas defensivas” y se produzca, una recategorización de la situación. Es decir, se presenta la intervención técnica para que se adopten nuevas fórmulas de trabajo por parte de la persona en relación con el desempeño, organización, responsabilidad, valores, etc., y por parte de las empresas para que modifiquen sus líneas de actuación en cuanto a normas, designación de tareas, recursos humanos, gestión de personal y condiciones laborales. SITUACIONES DESENCADENANTES DE CONFLICTOS LABORALES EN EL PROCESO DE ADAPTACION ■ Manifestadas por la empresa Desempeño inadecuado de tareas Lentitud en el desempeño de tareas Incumplimiento de normas: asistencia, horario, puntualidad Falta de adaptación con sus iguales Dificultades en la comunicación Carencia de competencias básicas laborales ■ Manifestadas por la persona Dificultad de relación con los iguales y superiores Ocultación de información que afecta al desempeño del puesto Sobrecarga de tareas o carencia de designación de tareas Retribución económica contraria a la previamente pactada Discriminación de tareas Nivel de retribución insuficientes Falta de información y ambigüedad de tareas Discriminación por razones de género o grupo de pertenencia Infravaloración de competencias profesionales en la designación de tareas Carencia de recursos básicos para el desempeño del puesto. Marginación de las relaciones sociales en el trabajo: redes informales La demanda de intervención del mediador/a sociolaboral por parte de la empresa se produce cuando el conflicto es ya claramente manifiesto, y lleva mucho tiempo instaurado en las relaciones laborales entre empresa-trabajador/a. Ante esta situación es cuando la intervención resulta fundamental para ayudar a resolver conflicto. Además, no debemos olvidar que una acertada labor diagnóstica y preventiva de conflictos latentes evitará futuros conflictos manifiestos. Por otro lado, cuando el/a mediador/a detecta situaciones irregulares e inaceptables en torno a las relaciones laborales y que significan la privación de los derechos de la persona deberá, como trabajador/a que asesora a la persona usuaria de empleo, motivarla para que denuncie o manifieste esa situación a los organismos competentes a tal fin. CONFLICTO, NEGOCIACIÓN, MEDIACIÓN Y ARBITRAJE. Por último, consideramos diferenciar la mediación de otros procedimientos para abordar los conflictos en el contexto laboral: ■ MEDIACIÓN; Procedimiento de ayuda a resolver el conflicto, en presencia de una tercera persona, que se muestra ante ambas partes como neutral e imparcial. Por otro lado, carece de poder ante la toma de decisiones de ambos/as. El proceso de resolución de conflictos se concibe como la búsqueda de alternativas que beneficie ambas partes. ■ NEGOCIACIÓN: Procedimiento de discusión que se establece entre las partes adversas por medio de representantes oficiales, cuyo objetivo básico estriba en llegar a un acuerdo aceptable para todos/as. Existe voluntariedad por ambas partes. La negociación colectiva es el procedimiento entre empleadorestrabajadores/as desarrollado con el objeto de establecer condiciones comunes de trabajo y de remuneraciones por un tiempo determinado. La negociación tiene como principal objetivo la materialización de un contrato colectivo. Existe la percepción por ambas partes que es posible alcanzar dicho acuerdo. ■ ARBITRAJE: Es el procedimiento de solución pacífica de conflictos laborales, individuales o colectivos que suponen la intervención de un tercero/a, denominado árbitro. Ambas partes se someten al juicio del mismo. La aceptación del arbitraje es voluntaria por ambas partes, lo que no es voluntario es la aceptación y cumplimiento de la resolución. Se concibe por ambas partes la situación, según las teorías de los juegos, de que sólo puede existir un ganador/a y un perdedor/a, en función del dictamen del árbitro.