MOTIVOS, MÚSICA Y POESÍA Todo lo que tengo que decir está ya dicho en mi música. Ante la insistente pregunta que tan a menudo me formulan: ”¿Qué has querido decir con esta obra?”, o “¿Cuál es el significado de tu música?”, yo siempre respondo: “significa lo que acabas de escuchar en la interpretación de la obra.” Por un extraño motivo que desconozco, en nuestra época siempre se nos exige un comentario, una introducción de algún tipo. Parece que una gran parte de los oyentes tuviera miedo de escuchar simplemente, con el oído abierto, lo que sucede en la música. Por más que lo intento, no puedo imaginarme a Mozart asistiendo a un programa radiofónico y explicando, por ejemplo, la forma sonata, para que el público pudiera con ello “comprender” mejor una de sus obras. Esto no quiere decir, en modo alguno, que en mi música no haya una estructura basada en relaciones formales complejas. Simplemente no creo que el público necesite conocerlas para disfrutar de la audición y para poder captar su mundo poético. En este sentido me gusta citar a menudo a algunos artistas que han planteado el tema con mucha agudeza mental: “Hablar de música es como pescar de arquitectura” (Frank Zappa) “La estética es a los artistas lo mismo que la ornitología es a los pájaros” (Barnett Newman) “ Si yo le explico lo que quiere decir este cuadro, usted podrá entender la explicación, pero no el cuadro” (Pablo Picasso) Para mí la música está relacionada con una especie de pensamiento místico muy particular, que no puedo nunca disociar de mi vida cotidiana. Quizás se pudiera comparar con el peyote que toman en determinados rituales algunas comunidades de indios centroamericanos, un elemento para una transformación psicológica profunda y renovadora. Desde este punto de vista, la música no es sólo un fin en si misma, es un fin pero al mismo tiempo es un “medio”, o tal vez un “medium”. De hecho, a veces tengo la sensación de que no soy yo el que compone la música, sino que es la música la que me compone a mí. Precisamente una experiencia de este tipo es la que me condujo, hace unos cuantos años, por el camino de la composición. Cuando tenía quince años empecé a tocar la guitarra clásica, simplemente para poder tener más técnica al interpretar el rock, que era lo que me gustaba entonces. El profesor de guitarra me hizo escuchar, casi por casualidad, una pieza de Stockhausen, “El Canto de los Adolescentes”, para sonidos electrónicos y voces pregrabadas. La audición de esta música me produjo una impresión tan profunda que estuve varios días completamente dominado por ella, sin poder pensar en otra cosa. Entonces tuve la absoluta certeza de que ya no podría dedicarme a otra cosa que no fuera componer música. Si tuviera que escribir una pequeña nota biográfica a partir de esta experiencia, todos los momentos más importantes para mí estarían relacionados con experiencias de tipo psicológico y de carácter privado que están íntimamente ligadas a mi labor como compositor. Aunque, por supuesto, también ha sido muy importante en mi formación mi relación con Luis de Pablo y con Francisco Guerrero, y, sobre todo, mi amistad con algunos compositores de mi generación como David del Puerto, Jesús Rueda, Jesús Torres, Javier Arias, y más tarde con José Manuel López, Fabián Panisello o Polo Vallejo. Es fundamental, también, la relación profesional y personal con algunos magníficos intérpretes con los que tengo la fortuna de trabajar habitualmente, como el Trío Arbós, el percusionista Miguel Bernat el pianista Alberto Rosado o el Plural Ensemble. Siempre he pensado que la música no es lo que está escrito en la partitura, sino que es más bien lo que suena en el concierto, la obra se completa con la interpretación, es más; la obra no es la obra de César Camarero, es más bien la obra de César Camarero interpretada por el Trío Arbós. Mi interés por las demás artes, sobre todo la plástica, el cine, y más adelante la literatura, ha influido mucho en mi manera de trabajar. Y desde el año 95, mi forma de pensar la música está íntimamente ligada al descubrimiento de la poesía, y más concretamente de la obra de ciertos poetas, que han ejercido y ejercen una gran influencia en mi manera de entender la creación. Elegí algunos poemas de Vicente Huidobro como texto para mi obra “Al Borde de las Constelaciones”. Este en concreto, titulado “VOZ”, es el que cierra la pieza. EL QUE PODRÍA CANTAR No tiene garganta Su grito de angustia Ahogado en el bosque de fieltro TRAS SU CABEZA EL BORDE DEL MUNDO Si levantara un pie caería al vacío SIN EMBARGO SUS LÁGRIMAS LE SALVARÁN En mi ópera de bolsillo “Horizonte Cuadrado” utilicé nuevamente poemas de Huidobro, y también de Juan Larrea. Este, en concreto, corresponde a una de las escenas centrales de “Horizonte Cuadrado”: Deja fluir mis huesos entre las hojas entre las hojas nacidas de haberte conocido un día de lluvia cuando los barquichuelos de tus orejas cortaban las flores ocultas bajo los nombres de mis calles Cuando buscaba textos sobre sueños para un viejo proyecto radiofónico que nunca se llegó a materializar, descubrí a Juan Eduardo Cirlot. Al final de un corredor, tan pronto Iluminado como en la oscuridad, había un payaso que me sonreía. En 1997 conocí a Menchu Gutiérrez, de quien tengo la suerte de ser buen amigo, y a la que dediqué mi obra “Abreviaturas”. A cambio caminarás en círculos. Yo sembraré la riqueza blanca, apartaré el sarmiento que crece de mi recuerdo, te abandonaré para volver a encontrarte. Uno de mis proyectos futuros incluye poemas de Alejandra Pizzarnik. cuidado con las palabras (dijo) tienen filo te cortarán la lengua cuidado te hundirán en la cárcel cuidado no despertar a las palabras acuéstate en las arenas negras y que el mar te entierre y que los cuervos se suiciden en tus ojos cerrados cuídate no tientes a los ángeles de las vocales no atraigas frases poemas versos no tienes nada que decir nada que defender sueña sueña que no estás aquí que ya te has ido que todo ha terminado ¿Qué significan estos poemas?, ¿Qué significa una manzana?, ¿Qué significa el texto que he escrito?, ¿Qué significa soñar?, ¿Qué significa que tengamos ojos y veamos?, ¿Qué significa significa….? César Camarero 4-noviembre-2002