“Revolución sexual” Pa-Digital.com.pa por Clarence C. King Dos artículos de análisis en la prensa de Panamá. Juventud y sexualidad. Se está perdiendo la capacidad de amar y la magia de la intimidad. Antes era la pastilla anticonceptiva y ahora es el condón, lo que prometió tanto a jóvenes como adultos una nueva revolución sexual. Parte de esa promesa implicaba poder tener relaciones sexuales caprichosas sin responsabilidad y sin la necesaria conexión emocional y espiritual. Sólo había que despojarse de sentimientos de culpa y ansiedad, del temor a ser infectada, fertilizada o censurada, y el terreno estaría abonado para todo tipo de experimentos sexuales Muchos son los niños y adolescentes que han experimentado gran incremento en sus deseos e impulsos sexuales por la promoción constante del uso del condón, que ha hecho disipar su cautela y temor al embarazo, a las enfermedades de transmisión sexual y al peso de la responsabilidad que conlleva su iniciación sexual muy temprano en sus vidas; y es muy probable que muchos jóvenes a la larga se sentirán frustrados y burlados en su desenfreno sexual, porque lo que hace falta aquí en esta revolución sexual es parar la prisa a la cama y regresar al cortejo, al aprecio, el respeto y la dignidad, y así evitar la inevitable angustia y sentimiento de culpa que se crea cuando las personas tratan de hacer lo que su conciencia, sus padres y docentes les dicen no hacer. Y es que los niños y adolescentes hoy día no ven en sus padres esa figura dominante y autoritativa cuyas críticas y desaprobaciones han de temer. Por otro lado, el movimiento de liberación femenina ha cambiado la forma cómo las mujeres se visualizan en nuestra sociedad y su actitud hacia el sexo. En muchas formas son más agresivas y provocativas sexualmente y han abierto áreas que les eran vedadas. Nunca antes ha habido más sexo casual, desviación sexual y variedad sexual. Nunca ha habido más revistas, libros y películas sobre sexo; sin embargo, cada vez hay más personas descontentas sexualmente – anhelando intimidad y calidad y recibiendo en vez, sexo lujurioso y vacío emocionalmente. Se está perdiendo la capacidad de amar y la magia de la intimidad que tienen dimensiones espirituales. Abstinencia hasta el matrimonio, II MARINA AUREA VIDEGAÍN DE ESPAÑÓ Prensa.com LIBERTAD Y AUTOCONTROL. El título de este artículo alude al programa en educación en la sexualidad es una respuesta efectiva para reducir los problemas sociales y de enfermedades, como lo expuse en mi primer artículo sobre el tema. Es el reemplazo ideal para los programas de educación sexual sugeridos, que tanto rechazo han recibido de la ciudadanía, especialmente de las personas que se guían por comportamientos basados en los valores fundamentales y absolutos, que no cambian. La lógica indica que si los casos de sida van en aumento en Europa, Asia y Norteamérica (aumenta en los países que promueven la libertad en todo sentido), es que los modelos de prevención que promueven, como el condón, los anticonceptivos, la libertad sexual, han fracasado rotundamente. En Washington se transmite actualmente una publicidad en TV en donde un joven le dice a sus padres: "Papá, mamá, no tengan miedo de hablarme de sexo, pídanme que posponga las relaciones sexuales". De los estudios y encuestas en EU se sabe que el 93% de los adolescentes aceptaron que era muy importante para ellos recibir un fuerte mensaje de abstenerse de relaciones sexuales (Campaña Nacional de prevención de embarazos precoces 2000). Los padres de familia tienen la obligación de reiniciar esta campaña de abstención, sin tener el miedo de parecer anticuados ante sus hijos. Por el contrario, es una decisión inteligente el sentarse y explicarles las razones por las cuales es mejor abstenerse hasta el matrimonio. Además, las enseñanzas del Concilio Vaticano II, el Catecismo de la Iglesia católica dice: "Es imperativo instruir adecuada y certeramente a la juventud, sobre todo, en el seno mismo de sus propias familias, acerca de la dignidad del amor marital, su rol y su ejecución". Las estadísticas del Meduca indican que el 90% de los jóvenes prefiere hablar de sexo con sus padres, versus el 2% que eligió a los docentes. En los programas educativos de abstinencia se enfatiza el rol del matrimonio como la meta. La libertad y el autocontrol son algunas de las virtudes y beneficios que se reciben en esta opción de vida y programa para lograr metas. Por supuesto que incluye la educación en los peligros de las enfermedades, y los riesgos de los métodos anticonceptivos, además de la explicación biológica, y muchas cosas más. Igual de importante son los daños emocionales que crean las relaciones de pareja esporádicas. Estos tipos de relaciones son causas de depresiones y problemas emocionales. Miriam Grossman, psiquiatra del Centro de Salud Estudiantil de la Universidad de California, escribió el libro Sin protección, en el que explica que la noción de sexo seguro provee a los estudiantes de una falsa seguridad que promueve las relaciones sexuales casuales que pone en peligro su salud emocional y física. Menciona que muchas de sus pacientes sufren depresión, ansiedad y desórdenes alimenticios. Nadie le advierte a una joven que su cuerpo está creado para vincularse emocionalmente a través de las relaciones sexuales y que ningún condón ni anticonceptivo la protegerá del sufrimiento y confusión que experimentará por la inseguridad de la relación. La oxitocina, una hormona que transmite mensajes de un órgano a otro, se libera durante la actividad sexual en la mujer, reforzando el vínculo entre la pareja. En el hombre la hormona vasopresina, que está relacionada con reforzar vínculos, puede causar depresión por la pérdida de la relación. En 1960 había solo tres enfermedades venéreas; ahora hay dos docenas que son incurables (Crouse, J. C., Gaining Ground: A profile of American women in the 20th century, 2000). En 40 años, de modernismo y libertinaje, eso fue lo que se logró. Así seguiremos por no aceptar que abstinencia y fidelidad son las respuestas seguras para evitar la propagación del sida y de las otras enfermedades de transmisión sexual incurables. Ojalá que el Ministerio de Educación y el Despacho de la Primera Dama revisen estos programas para que los financien con los subsidios que Naciones Unidas les tiene prometido, para cumplir con los objetivos de Educación Sexual Reproductiva que está incluida en la agenda del milenio.