RESPONSABILIDAD CIVIL DEL PROFESORADO En materia de responsabilidad civil del profesorado tenemos que marcar un punto de arranque importante que fue la ley 1/1991 de 7 de enero que modificó los artículos 22 del Código Penal y los artículos 1903 y 1904 del Código Civil. En ellos se contempla a modo de resumen que las personas o entidades que sean titulares de los centros docentes de enseñanza no superior (entendemos que son las correspondientes Administraciones Educativas) responderán de los daños y perjuicios que causen los alumnos menores de edad durante los periodos de tiempo en que los mismos se hallen bajo el control o vigilancia del profesorado del centro, tanto en el desarrollo de actividades escolares o extraescolares y complementarias. Posteriormente, la Ley de Régimen Jurídico y Administraciones Públicas LRJAP estableció en su articulado (Art. 145) que para hacer efectiva la responsabilidad patrimonial, los particulares exigirán directamente a la Administración Pública correspondiente las indemnizaciones por los daños y perjuicios causados por las autoridades y personal a su servicio. Será la Administración posteriormente de oficio cuando haya indemnizado directamente a los lesionados, a repetir (o sea, reclamar por pago indebido) contra el profesor que hubiese actuado con dolo, culpa o negligencia grave. Para ello se instruirá un procedimiento administrativo, en el que deberá quedar probado el dolo o negligencia grave del profesor. También la LOE y actualmente la LOMCE en su artículo 105 establece que: “Corresponde a las Administraciones educativas, respecto del profesorado de los centros públicos, adoptar las medidas oportunas para garantizar la debida protección y asistencia jurídica , así como la cobertura de la responsabilidad civil , en relación con los hechos que se deriven en su ejercicio profesional. Incluso es necesario remarcar en referencia a este tema la cobertura de su responsabilidad civil que contempla la ley de autoridad de Madrid (ley 2/2010 de 15 junio) en su artículo 7: “La Administración educativa, respecto a los profesores de los centros escolares públicos, adoptarán las medidas oportunas para garantizar su adecuada protección y asistencia jurídica, así como la cobertura de su responsabilidad civil, en relación con los hechos que se deriven en su ejercicio profesional y de sus funciones que se realicen dentro o fuera del recinto escolar”. Raquel García Blanco Asesora jurídica de ANPE Nacional