www.fbbva.es DEPARTAMENTO DE COMUNICACIÓN NOTA DE PRENSA Según explicaron ayer los autores del Libro de la salud cardiovascular del Hospital Clínico San Carlos y la Fundación BBVA El paciente cardiovascular puede disfrutar de tanta o más calidad de vida que antes de su enfermedad gracias al autocuidado Madrid, 27 de mayo de 2010.- Cuáles son los principales riesgos cardiovasculares y cómo evitarlos; a qué chequeos y con qué periodicidad es aconsejable someterse; y qué comer y qué tipo de deporte hacer para prevenir un infarto -y para cuidarse tras haberlo sufrido- fueron algunas de las cuestiones abordadas ayer por los autores del Libro de la salud cardiovascular del Hospital Clínico San Carlos y la Fundación BBVA, durante la mesa redonda organizada para presentar esta obra. En el acto intervinieron Carlos Macaya y Antonio López Farré, responsables, respectivamente, de la clínica y la investigación cardiovascular del Hospital Clínico San Carlos y principales autores del Libro de la salud cardiovascular, junto a los co autores Luis Azcona, del servicio de Cardiología, y Antonio FernándezOrtiz, jefe de la Unidad Coronaria del Instituto Cardiovascular también del mismo centro. “Los pacientes que toman con constancia la medicación, cuidan la dieta y hacen ejercicio son los que te dicen: ‘Doctor, me encuentro mejor que antes del infarto’”, señaló Azcona. El Libro de la salud cardiovascular del Hospital Clínico San Carlos y la Fundación BBVA está dirigido al público en general. Su objetivo es impulsar la prevención y ayudar al paciente y sus familiares a participar en la toma de decisiones clínicas y a cuidar su propia salud. En su elaboración han participado más de 90 expertos, que han combinado el máximo el rigor con un estilo atractivo y de muy fácil comprensión y una edición gráfica de alta calidad. Los autores responden a las más de 200 dudas más frecuentes en las consultas de Cardiología, e incluyen además un Decálogo de la salud cardiovascular con pautas de probada eficacia “Los principales hábitos cardiosaludables son cuidar la alimentación, prevenir el sobrepeso, evitar el tabaquismo, reducir en lo posible el estrés y realizar diariamente ejercicio moderado”. Esos hábitos inciden sobre la aterosclerosis, la obesidad, la hipertensión y la diabetes tipo 2, factores de riesgo principales en estas patologías. Con estas medidas, hasta el 80% de los casos de enfermedades cardiovasculares son evitables, confirman los autores de la obra. La obra está disponible para su libre consulta en la web de la Fundación BBVA (www.fbbva.es). MENOS MORTALIDAD EN LAS ÚLTIMAS DÉCADAS, MÁS INCIDENCIA EN LAS PRÓXIMAS Las enfermedades cardiovasculares (ECV) son trastornos del corazón y los vasos sanguíneos que incluyen patologías como la enfermedad coronaria (ataques al corazón), la cerebrovascular (ictus), la hipertensión (tensión alta), la insuficiencia cardiaca y la enfermedad cardiaca reumática, entre otras. En España son la primera causa de muerte en las mujeres y la segunda en los hombres. Aunque en las últimas décadas ha disminuido la mortalidad por ECV, para los próximos años se prevé un aumento progresivo e importante de su incidencia por el envejecimiento de la población; el aumento de la obesidad y el sedentarismo; y las mejoras en los tratamientos, que consiguen la cronificación de estas patologías. Como explicó ayer Macaya, “en España las ECV causan el 32,5% de las muertes, y aunque esta cifra ha disminuido de manera progresiva desde los años setenta, como hemos bajado el número de muertes pero no el de enfermos el problema adquiere una nueva dimensión. Los ingresos hospitalarios por ECV en España se han multiplicado por cinco en los últimos 25 años. Sabemos que en los próximos años el problema de las ECV y su impacto económico-social no dejará de aumentar”. López Farré, por su parte, habló del deporte sano: “El mejor ejercicio es el aeróbico y suave o moderado. Para calcularlo, hay que hallar las pulsaciones máximas restando al número 220 la edad; después, se cuentan las pulsaciones: ejercicio suave es el que las eleva al 55-60% de las máximas; moderado, 60-75% de las máximas”. El deporte reduce la obesidad y mejora el perfil lipídico; la circulación; la funcionalidad de la pared vascular; la presión arterial; y el control metabólico del diabético. Pero no es menos importante su efecto emocional: aumenta la autoestima y el bienestar y disminuye las tensiones y el estrés. Si desea más información, puede ponerse en contacto con el Departamento de Comunicación de la Fundación BBVA (91 374 52 10 y 94 487 46 27 o comunicacion@fbbva.es) o consultar en la web www.fbbva.es 2