Guerra de Independencia de las Trece Colonias. ANTECEDENTES. La lucha por la independencia de las trece colonias inglesas en Norteamérica fue la primera de las grandes revoluciones políticas que surgieron en el mundo occidental en contra de los abusos de los monarcas europeos. Desde el siglo XVII un buen numero de europeos, en su mayoría ingleses, que huían de las persecuciones religiosas ocurridas en Inglaterra durante la era de la dinastía Estuardo, o que simplemente se habían trasladado al nuevo continente en busca de nuevas oportunidades de desarrollo. Se formaron trece colonias en tres tipos de zonas socioeconómicas distintas, según las actividades que en ellas se realizaban: En el norte, donde las tierras eran pedregosas y poco fértiles, se desarrollo al principio una agricultura de granja basada en el cultivo de cereales y frutas, así como en el pastoreo de ganado menor. Hacia el siglo XVIII, las cuatro colonias norteñas de Nueva Inglaterra (Massachusetts, Connecticut, New Hampshire y Rhode Island) poseían un cierto desarrollo madera. En económico basado en la existencia de astilleros, industrias derivadas del pescado y un extenso comercio marítimo canalizado en Boston. Esto favoreció la formación de una clase de comerciantes prósperos, que fomento el surgimiento de ciudades que operaron como importantes centros comerciales y culturales, con influencia de las ideas ilustradas, en los que se fue concentrando el poder político. En las regiones del centro, donde el suelo era mas apropiado para la agricultura, se dio un gran auge de la producción que permitió a los colonos dedicarse al comercio exterior ----favorecido además por la cercanía de las costas----, gracias a lo cual dio comienzo una era de progreso constante que convirtió las ciudades de Nueva York y Filadelfia en centros de exportación de trigo y madera. En el aspecto social, las cuatro colonias del centro (Nueva Jersey, Nueva York, Delaware y Pennsylvania) presentaban mayor complejidad étnica, habitadas por holandeses, suecos y alemanes que superaban en conjunto al número de ingleses. En las colonias del sur (Virginia, Maryland, Georgia, Carolina del Norte y Carolina del Sur), que contaban con grandes extensiones de tierra, los propietarios pudieron establecer enormes plantaciones dedicadas al cultivo intensivo de tabaco, arroz, azúcar y algodón. De esta manera, llego a formarse en esta región una clase aristocrática semejante a la Gentry inglesa, pero que, ante la gran cantidad de trabajadores que exigían aquellos tipos de cultivo, se beneficio del tráfico de esclavos provenientes de África. CAUSAS: Aunque los colonos de Norteamérica reconocían que la monarquía inglesa tenía autoridad sobre ellos, el sistema de gobierno local que establecieron les estimulaba a sentirse con derecho a decidir su propio destino político. Las tierras de América eran consideradas por la Corona Inglesa como una fuente de materias primas y un mercado para productos manufacturados. Sin embargo hasta mediados del siglo XVIII Gran Bretaña no fue muy estricta en la aplicación de los principios mercantilistas, de modo que los colonos pudieron generar su propio crecimiento económico con cierta libertad respecto al dominio británico. En 1763 la derrota francesa en la Guerra de los Siete años cambió en dos sentidos la situación internacional y también el panorama del imperio colonial británico. Inglaterra enfrentaba la necesidad de organizar un imperio más extenso y debía resolver los problemas financieros ocasionados por la Guerra contra Francia, crearon para los británicos la necesidad de importar alimentos y ampliar los mercados para colocar sus manufacturas. Estas circunstancias impulsaron la creación de una serie de leyes diseñadas para aumentar los ingresos y fortalecer la administración colonial en América. La Currency Act de 1764 restringió la posibilidad de emitir papel moneda en las colonias y la Quartering Act de 1765, las obligaba a mantener un ejército británico de diez mil hombres. La Sugar Act (1764) y la Stamp Act (1765) fueron las medidas más polémicas del programa Greenville. Con la primera se canalizaba a través de Inglaterra la introducción de algunos productos en las colonias y se luchaba contra el contrabando; con la segunda se establecía un impuesto sobre la utilización del papel en actas oficiales. Los colonos reaccionario en contra de aquellas disposiciones y se quejaron por no estar representados en el Parlamento que había aprobado las leyes. Después de esta primera reacción, el gobierno británico impuso nuevas medidas como la reordenación colonial. Las nuevas medidas hicieron crecer el descontento de los colonos; pero una nueva orden del gobierno británico llevó el malestar al extremo, cuando se concedió a la Compañía de las Indias Orientales el privilegio de importar té a las colonias en una situación de ventaja sobre el resto de los comerciantes. El hecho fue interpretado como un medio más de represión política y en 1773, la reacción colonial estalló en lo que se conoce como Boston Tea Party ( la fiesta del té de Boston) cuando unos colonos de la ciudad de Boston, disfrazados de indios pieles rojas, asaltaron unos barcos británicos cargados con costales de té, que arrojaron al agua. En respuesta el gobierno inglés envió tropas a Norteamérica con el propósito de reprimir la sublevación y ordenó la confiscación de propiedades, algo que iba en contra del derecho inglés. Se establecieron además unas leyes intolerables para colocar a los colonos bajo un control más severo. Estas medidas aceleraron los acontecimientos. En 1774, los colonos decidieron reunirse en el Primer Congreso Constituyente que, sin proponer aún la independencia, se centró en el tema sobre la violación británica de los derechos constitucionales y exigió la derogación de las leyes intolerables. En el fondo lo más importante de aquel primer congreso fue la afirmación del poder colonial frente al Parlamento de Londres. El enfrentamiento armado era ya algo inminente. DESARROLLO: Los actos de guerra comenzaron el abril de 1775, cuando tropas norteamericanas desafiaron a fuerzas británicas en terrenos de Lexington y Concord. En mayo de ese mismo año se reunió el Segundo Congreso Continental, bajo el liderazgo de los colonos dispuestos a romper del todo con Gran Bretaña, para lo cual organizaron la estrategia de guerra y nombraron a George Washington comandante del ejército. El monarca inglés Jorge III en un esfuerzo por evitar la separación declaró en estado de rebelión a las colonias y ordenó reforzar los ataques contra los rebeldes. La guerra fue simultáneamente un conflicto civil, independentista e internacional: En primer lugar implicó la lucha interna entre los patriotas radicales que buscaban separarse de Gran Bretaña y leales que no estaban dispuestos a llevar la protesta de la independencia. En segundo lugar dio origen a la creación de un nuevo Estado. Por último propició la intervención de Francia y España a favor de los colonos y en contra de Gran Bretaña. En Mayo de 1776, el Tercer Congreso, en el que predominaron los radicales estableció por unanimidad que las colonias debían formar un Estado Independiente. El 4 de Julio de 1776, se firmó la Declaración de Independencia, elaborada por Thomas Jefferson en la que manifiesta la influencia de la ilustración. En los preámbulos del documento se utilizan conceptos de derecho natural para justificar racionalmente el hecho de la separación de un poder que se ejerce sin el consentimiento de los ciudadanos. A todas las antiguas colonias transformadas en Estados se otorgaron constituciones, a veces precedidas por una declaración de derechos en buena medida se siguió el modelo de régimen parlamentario británico. La primera constitución fue la del estado de Virginia (junio de 1776). Se basaba en los derechos fundamentales de libertad propiedad y garantías personales, al tiempo que establecía los cimientos de un nuevo régimen con separación de poderes y por elección popular. Sin embargo la heterogeneidad de las constituciones constituía un inconveniente, en tanto que Pennsylvania había creado una democrática, con sistema unicameral y una base electoral casi universal, Massachusetts casi reproducía el sistema británico en dos cámaras gobernador y exigencias de elevado ingreso para los electores. En 1777 eligieron crear una confederación que integrara los estados en una sola nación. Los artículos de la Confederación entraron en vigor en 1781, cuando fueron ratificados por todos los estados. Se trataba de una especie de alianza de defensa mutua, en la que cada estado mantenía su propio gobierno y enviaba una representación ante el Congreso de la Confederación. Este primer intento de gobierno fracasó en especial porque los estados mantenían casi todo el poder y al no existir un poder ejecutivo, no atendían las decisiones del Congreso y como este no tenía autoridad para fijar y cobrar impuestos su posición era débil y tenía problemas para costear incluso sus propios gastos. En mayo del 1787 fue convocada una reunión en Filadelfia con el objetivo de redactar una nueva constitución que en esta ocasión creo una forma de gobierno basada en el federalismo sistema en el que el poder político se distribuye entre los estados y gobierno nacional. Asimismo se estableció la división de poderes en tres de acuerdo con la propuesta de la ilustración. El poder legislativo integrado en un Congreso compuesto por dos cámaras la Cámara de Representantes con un numero de escaños proporcional a los habitantes y cuyos miembros serian elegidos por voto popular y el Senado con dos delegados por cada estado. El poder ejecutivo quedo establecido después de muchas discusiones, como un régimen presidencialista, depositado en una sola persona a quien se llamaría presidente, elegido en una doble votación, una popular directa y otra indirecta, de electores de todos los estados. CONSECUENCIAS. La aceptación de la Constitución de 1787 por los distintos estados fue lenta, pero un año después quedaba sancionada y la ciudad de Nueva York se convertía en capital provisional de la nueva nación. Se estableció una distinción entre los poderes del gobierno nacional y los de los estados. En 1789, la mayoría de los estados aprobó la Constitución bajo la condición de que fuera incorporada la Declaración de los Derechos (Bill of Right) que se expreso en las primeras diez enmiendas de la Constitución de los estados Unidos de America, que aun sigue vigente: En el verano de ese mismo año entro en funciones el primer gobierno con George Washington como presidente.