Importancia ecológica de los poliquetos Victoria Díaz Castañeda Departamento de Ecología, CICESE Correo electrónico: vidiaz@cicese.mx Los poliquetos están representados en diferentes hábitats, áreas geográficas y en todas las profundidades. Muestran una gran diversidad de estrategias reproductivas y ciclos de vida que les da una gran capacidad de adaptación. Su estudio es fundamental ya que la mayoría de las especies marinas son bénticas (viven en el fondo) y habitan sedimentos que cubren la mayoría del fondo oceánico. Los sedimentos, por lo tanto, constituyen el más grande ecosistema en nuestro planeta en términos de cobertura espacial. Son un grupo esencialmente marino y estuarino, muy pocos habitan en agua dulce y ambientes terrestres húmedos. Forman parte del pelagos (por lo general viven en el agua cuando son larvas), posteriormente forman parte del bentos. La mayoría tienen vida libre, algunos son parásitos y otros son comensales de erizos y pepinos de mar, crinoideos y crustáceos. En los sedimentos constituyen el mayor componente en términos de número de especies e individuos. En algunas zonas geográficas alcanzan diversidades sorprendentes; por ejemplo, en el estrecho de Bass (Australia) se encontraron 800 especies en sólo 10 metros cuadrados de sedimento. En arrecifes coralinos alcanzan densidades de 49 mil poliquetos por metro cuadrado. Debido a su abundancia, patrones de vida y formas de alimentación, los poliquetos juegan un papel muy importante ya que reciclan gran parte de la materia orgánica de la zona litoral. Además, modifican el fondo marino, la concentración de gases disueltos, la mezcla del agua intersticial, la consistencia del sedimento y la dinámica de los Colocación de placas para evaluar las incrustantes en contaminantes. Veracruz. Foto: V. Díaz-Castañeda. Estos animales son útiles para estudiar el efecto de los contaminantes en las comunidades marinas. Al ser sedentarios o tener relativamente poca movilidad permiten evaluar diversos grados de perturbación y contaminación del fondo. Algunas especies de las familias Capitellidae, Spionidae y Cirratulidae se reconocen como indicadores de contaminación orgánica. Ciertos poliquetos son de los primeros invertebrados en colonizar zonas perturbadas; funcionan como especies pioneras. Parte de su importancia radica en que ocupan varios niveles en las cadenas alimenticias. como presas o depredadores de diversos animales. Constituyen una fuente de alimento importante para diversas organismos que habitan el fondo y la masa de agua y presentan una elevada productividad. Los poliquetos depredadores alteran la composición y estructura de las comunidades de fondos blandos. Los sedimentívoros (se alimentan de sedimento) producen la bioturbación; es el caso de los cirratúlidos y maldánidos que transportan sedimento varios centímetros debajo de la superficie del fondo, cambiando las características físicas y químicas de los mismos. Otros poliquetos son responsables de la bioerosión de sustratos coralinos al perforarlos y destruirlos. Los sedimentívoros también construyen galerías y esta actividad oxigena el sedimento a mayor profundidad, permitiendo la sobrevivencia de otras especies. Algunos poliquetos son tubícolas y forman agregaciones densas que alteran el flujo del agua favoreciendo la sedimentación de partículas finas, y estimulando el reclutamiento de especies de poliquetos y otros invertebrados. Estas agregaciones de poliquetos suspensívoros (filtran el agua para alimentarse), como los sabélidos y serpúlidos, introducen una estructura más compleja al ambiente (heterogeneidad) y a su vez consumen una cantidad importante de larvas de otros animales. Entre las especies con mayor importancia económica por su pesquería o cultivo comercial, tenemos a Arenicola marina, Hediste diversicolor, Perinereis cultrifera, Neanthes arenaceodentata, Diopatra cuprea cuprea, Eunice aphroditois, Marphysa sanguinea, Lumbrinereis impatiens y Sabella spallanzani. El interés comercial se debe, principalmente, a que para la industria acuícola de peces y crustáceos, los poliquetos representan una fuente de nutrición balanceada, además de poseer ácidos grasos polisaturados indispensables para la maduración del camarón. En la industria pesquera y en la deportiva, los poliquetos se usan como carnada viva para descomponer residuos orgánicos domésticos o de maricultivos, y como animales de prueba en estudios toxicológicos. Es importante mencionar que la colecta comercial de poliquetos tiene implicaciones para el medio ambiente, ya que al escarbar para colectar los gusanos se causa un disturbio físico del sustrato que afecta a la comunidad béntica. Del mismo modo, el traslado y cultivo de algunos poliquetos puede ocasionar la introducción de especies exóticas. Poliquetos y contaminación Nuria Méndez Ubach Instituto de Ciencias del Mar y Limnología, UNAM Correo electrónico: nuri@ola.icmyl.unam.mx La contaminación marina es uno de los problemas más generalizados en el mundo. Uno de los contaminantes que más afecta a los organismos que viven en los fondos marinos es el exceso de materia orgánica que proviene de desechos domésticos, industrias y actividades de acuicultura de peces o camarones. La materia orgánica se va al fondo y se adhiere a los granos de arena o lodo y, en exceso, produce una disminución de oxígeno provocando la muerte por asfixia de muchos organismos. Algunas especies que se alimentan de la materia orgánica adherida al sedimento pueden sobrevivir en medios extremadamente contaminados, sitios donde otras especies mueren. A estas especies se les ha considerado como indicadoras de contaminación debido a que son dominantes y frecuentes en ambientes perturbados. Actualmente, muchos ecólogos analizan las perturbaciones marinas a través del seguimiento de las especies indicadoras. Capitella capitata, Foto: D. Anguas. Los organismos que viven en la arena o lodo son excelentes indicadores de contaminación orgánica, en especial los poliquetos, pues constituyen cerca del 40 por ciento del número de especies y de individuos. Los poliquetos indicadores que mejor reflejan los diferentes grados de contaminación orgánica son los capitélidos y algunos espiónidos debido a que proliferan en condiciones adversas en las que adulto. otras especies desaparecen. Y… ¡es entonces cuando los capitélidos entran en escena! Los capitélidos pertenecen a una familia de poliquetos muy común y abundante en el mundo. En México se conocen 31 especies de capitélidos para la costa del Pacífico y 33 para las costas del golfo y Caribe de México. No tienen antenas u otros apéndices por lo que parecen lombrices de tierra. Generalmente viven enterrados en la arena o el lodo de los que se alimentan asimilando la materia orgánica adherida a los granos. Así, contribuyen al reciclaje de materia orgánica del sedimento y a la eliminación de sustancias tóxicas en los fondos marinos. Casi todos los capitélidos presentan sexos separados. Después de la cópula, las hembras incuban los huevecillos fecundados entre el cuerpo y un tubo incubador formado con mucus y granos de arena o lodo. Inicialmente se producen las larvas trocóforas que son libres nadadoras y, posteriormente, las metatrocóforas, que pueden o no ser nadadoras. Las larvas pueden desarrollarse dentro del tubo incubador o terminar su desarrollo después del desove. Generalmente, las larvas abandonan el tubo y nadan en el agua hasta que encuentran un sedimento adecuado donde se convierten en juveniles y, posteriormente, en adultos. Un complejo cosmopolita de especies, Capitella capitata, es considerado mundialmente como excelente indicador de contaminación orgánica. Su dominancia y gran abundancia indican altos grados de perturbación por exceso de materia orgánica. Esto es debido a que su ciclo de vida es muy corto, se reproduce varias veces al año con la producción de muchas larvas en cada puesta y la mortalidad es alta. De esta manera, se adapta a las perturbaciones continuas (como las descargas de desechos) mediante reproducciones continuas. Capitella capitata puede producir diferentes tipos de larvas. Esta estrategia reproductora le permite Capitella capitata, a) larva trocófora, instalarse en áreas cercanas al lugar del b) metatrocófora, c) juvenil, d) adulto. desove, generalmente con altos contenidos Dibujos: N. Méndez. de materia orgánica o bien dispersarse a lugares más lejanos a través de las larvas nadadoras. Por este motivo, C. capitata asegura la supervivencia de la población en ambientes hostiles. Capitella capitata es la "reina de los indicadores marinos", de manera que los grados de contaminación se basan, en gran medida, en su abundancia comparada con la de otros poliquetos. Las zonas muy contaminadas se caracterizan por la presencia exclusiva de C. capitata y, lo que es peor, existen zonas donde ésta ni siquiera puede vivir. Es recomendable, por lo tanto, controlar los aportes excesivos de materia orgánica mediante el tratamiento eficiente de los desechos. Extraído de: http://www.jornada.unam.mx/2003/10/27/eco-polique.html