SITUACIÓN ACTUAL Y PERSPECTIVAS DE AMÉRICA LATINA SEGÚN ELITES INFLUYENTES DE LA REGIÓN Octubre de 2006 El análisis y las recomendaciones políticas de este documento no reflejan necesariamente las opiniones del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, de su Junta Ejecutiva ni de sus Estados Miembros. Se trata de un documento independiente preparado por encargo del PNUD. Este informe analiza una serie de Rondas de Consultas realizadas en Argentina, Brasil, México y EEUU a fines de 2005 y principios de 2006. Fue preparado en el marco del Proyecto Regional de Análisis Político y Escenarios Posibles (PAPEP Regional). Su objetivo es explorar la visión de algunas elites nacionales muy influyentes en la región sobre la situación actual de América Latina y sobre sus perspectivas futuras. Con ese fin aquí se resumen y comparan las visiones de las elites nacionales de los tres países mayores (Brasil, México y Argentina), y la de intelectuales y profesionales “latinoamericanistas” de los EEUU que de distintas maneras participan en el diseño de políticas hacia América Latina. Esta Ronda de Consultas incluyó ciento setenta y seis entrevistas. El Anexo que cierra el informe incluye los nombres de los entrevistados y resume las principales características de las consultas. 2 CONTENIDO PRINCIPALES CONCLUSIONES..............................................................................................4 1. 2. 3. 4. LA SITUACIÓN SOCIAL Y POLÍTICA DE LA REGIÓN ......................................................................4 LAS RELACIONES INTRA - HEMISFÉRICAS ...................................................................................5 HACIA EL FUTURO .....................................................................................................................6 LOS RESULTADOS DE LAS CONSULTAS Y LOS “SABERES ESTABLECIDOS”...................................7 1. SITUACIÓN SOCIAL Y POLÍTICA EN AMÉRICA LATINA.........................................10 1.1 LOS PROBLEMAS DE AMÉRICA LATINA ..................................................................................10 La persistencia de la pobreza..................................................................................................10 1.2 EL PROCESO DE CONSOLIDACIÓN DEMOCRÁTICA ...................................................................14 Las democracias consolidadas, y las todavía frágiles ............................................................14 Los países que enfrentan más problemas ................................................................................20 2. LAS RELACIONES INTRA- HEMISFÉRICAS..................................................................25 2.1 LAS RELACIONES ESTADOS UNIDOS – AMÉRICA LATINA .......................................................25 2.2 EL PAPEL DE LA OEA.............................................................................................................29 3. LOS PROBLEMAS DEL PRESENTE ..................................................................................32 3.1 EL CONSENSO DE WASHINGTON ............................................................................................32 3.2 EL NARCOTRÁFICO Y LA INMIGRACIÓN ..................................................................................34 4. HACIA EL FUTURO ..............................................................................................................36 4.1 LIDERAZGOS REGIONALES ......................................................................................................36 4.3 LAS PERSPECTIVAS DE LA INTEGRACIÓN HEMISFÉRICA ..........................................................39 MÉTODOS Y PROCEDIMIENTOS .........................................................................................42 ANEXO METODOLÓGICO......................................................................................................44 GUÍA DE LA ENTREVISTA.....................................................................................................45 LISTA DE ENTREVISTADOS DESAGREGADA POR PAÍSES ............................................51 3 PRINCIPALES CONCLUSIONES 1. La situación social y política de la región 1.1. Para las elites de los tres países latinoamericanos donde se llevaron a cabo las consultas, el principal problema de la región (el más mencionado en la primera mención espontánea por los consultados) es la pobreza en sentido amplio (pobreza, desigualdad, desempleo). Detrás de la pobreza sigue (en México y Brasil) el crecimiento económico, y luego los problemas político – institucionales (también en sentido amplio, incluyendo la cultura política). En Argentina aparece en segundo lugar lo político – institucional. Los consultados estadounidenses, en cambio, asignan casi el mismo peso a la pobreza y a lo político – institucional (con ventaja para el segundo factor). Esta es la principal diferencia en las respuestas de los cuatro países. Otra diferencia potencialmente significativa: Brasil es el único de los cuatro países donde el crecimiento económico recibe casi tantas menciones como la pobreza. 1.2. Chile es la democracia más consolidada de América Latina para tres de las cuatro elites (Argentina, México y los EEUU). En Brasil, en cambio, una mayoría relativa de los consultados (bastante menor que en los otros países) responde del mismo modo, pero las opiniones de los distintos subgrupos de entrevistados no son convergentes, y además casi tres de cada diez consultados opinan que el propio Brasil es la democracia más consolidada de la región. Sólo en México un grupo relativamente numeroso de entrevistados (un quinto) menciona en primer lugar, espontáneamente, a otro país (Costa Rica). 1.3. Para los consultados argentinos y estadounidenses, desde el punto de vista de la consolidación de la democracia los conflictos étnico – culturales son claramente oportunidades. Los consultados mexicanos, en cambio, tienden a verlos más bien como amenazas. Sin embargo, cuando se les pregunta sobre el caso de Chiapas, en particular, los entrevistados mexicanos lo ven más bien como una oportunidad. Al menos implícitamente, para enfrentar esta clase de problemas los consultados mexicanos parecen tener más confianza en sí mismos que en las demás elites de la región. 1.4. Las democracias más frágiles, menos consolidadas de la región, serían Bolivia y Venezuela. Aproximadamente un quinto de los entrevistados en cada uno de los cuatro países menciona a Bolivia, y otro tanto a Venezuela. Ningún otro caso recibe tantas menciones (pero en EEUU las opiniones de los distintos subgrupos no son convergentes, y se encuentran más menciones a otros casos, como Colombia y Ecuador). 1.5. Las causas de la inestabilidad política boliviana serían (para los consultados argentinos y estadounidenses) la exclusión y la pobreza indígenas, y luego la falta de justicia social. Para los mexicanos, en cambio, los principales problemas serían los conflictos por recursos económicos y las diferencias geográficas y culturales. 4 1.6. Los consultados en México y en los EEUU coinciden en señalar a Nicaragua como el país “que enfrenta más problemas” en América Central. 2. Las relaciones intra - hemisféricas 2.1. Los consultados argentinos piensan que los problemas que afectan las relaciones entre AL y la potencia dominante (EEUU) son generales, en lo esencial comunes a toda la región. En Brasil y México, en cambio, las opiniones de los distintos grupos de consultados no son convergentes. Pero en los dos países los empresarios, académicos y consultores asumen que son más bien problemas bilaterales. 2.2. Casi ocho de cada diez consultados estadounidenses juzgan desfavorablemente las políticas de los EEUU hacia AL, o bien por su falta de claridad y definición, o bien porque no encaran adecuadamente los problemas que deben enfrentar. 2.3. Los consultados en EEUU piensan que la OEA debería asumir un rol más activo que en el presente, y que debería intervenir más. Para los entrevistados mexicanos, en cambio, la OEA debe actuar con autonomía de los EEUU, e intervenir sólo cuando el país involucrado lo solicita. De las entrevistas mexicanas surge que “en principio” tal vez sería razonable que la OEA fuera más proactiva que en el presente. Pero la historia indicaría que en un colectivo (la OEA) con desequilibrios internos de poder tan severos (a favor de los EEUU), esa proactividad tiende a estar sesgada a favor de los intereses del poderoso. Aquí la historia pesaría más que los argumentos abstractos, y por lo tanto la OEA debería actuar con independencia de los EEUU, intervenir sólo cuando el país intervenido lo solicita, o, directamente, no intervenir. Las opiniones de los subgrupos de las elites argentinas no son convergentes, pero parecen bastante más cercanas a las de los mexicanos que a las de los estadounidenses. 2.4. Si la OEA efectivamente interviene, entonces su meta debería ser el fortalecimiento de las instituciones democráticas. Así piensan los consultados en México y en EEUU. 2.5. Los consultados en EEUU piensan que el tráfico de drogas tenderá a mantenerse estable, pero en los tres países latinos lo ven aumentando (en México, en particular, nueve de cada diez consultados opinan de esa manera). Casi nadie, en ninguno de los cuatro países, lo ve disminuyendo. 2.7. En los tres países donde se relevó información sobre el tema, grandes mayorías piensan que la inmigración ilegal hacia los EEUU seguirá aumentando en los próximos años (y en este caso es en EEUU donde nueve de cada diez entrevistados piensan de esa manera). 5 3. Hacia el futuro 3.1. Hacia el futuro AL tiene un líder, Brasil. Esta opinión es robusta (alrededor de dos de cada tres entrevistados) y compartida en los cuatro países. Curiosamente (teniendo en cuenta tamaño, población y situación “excéntrica” en la región) el país mencionado más frecuentemente después de Brasil es Chile, excepto en el propio Brasil (donde en segundo lugar aparece Venezuela). 3.2. Según los consultados argentinos y mexicanos, este liderazgo brasileño no es accidental; es un liderazgo buscado deliberadamente por Brasil. 3.3. Para los consultados en EEUU, México y Brasil, las mejores perspectivas de crecimiento económico en la región son las de Chile. Entre las elites argentinas no hay consenso en este punto; por otra parte, entre estos consultados argentinos Brasil recibe un número total de menciones (contando las tres primeras menciones) mayor que Chile, que “empata” con la propia Argentina. 3.4. Las relaciones entre los EEUU y AL seguirán como hasta ahora para los consultados brasileños y mexicanos; para los argentinos seguirán como hasta ahora o mejorarán (en proporciones similares), y para los consultados en EEUU mejorarán. 3.5. Para la mayoría de los consultados en México y en EEUU la integración hemisférica (desde Alaska a Tierra del Fuego) podría ser ventajosa para todos los países. Estas consecuencias favorables no están garantizadas; no son “automáticas”. Pero pueden alcanzar a todos; para eso es necesario ser proactivos. En los dos países esta opinión, sumada al juicio positivo sin matices (la integración es positiva para todos) es ampliamente mayoritaria. En Argentina y Brasil estos resultados son similares a los mexicanos, pero los juicios de los distintos subgrupos de las elites no son convergentes. 3.6. Independientemente de sus posibles consecuencias, ¿habrá integración hemisférica a corto o mediano plazo? Las opiniones de los consultados mexicanos están divididas en partes aproximadamente iguales entre los que creen que habrá integración a corto (hasta 4 años) o mediano plazo (entre 5 y 10 años), y los que opinan lo contrario. En EEUU y Argentina la mayoría de los consultados cree que en una década habrá integración hemisférica. Las mayorías más robustas se encuentran en EEUU, donde ocho de cada diez piensan de ese modo (en Argentina son siete de cada diez). En Brasil esta mayoría es algo menor (seis consultados de cada diez), pero en rigor no hay conjeturas plausibles sobre las “verdaderas” opiniones de las elites brasileñas, porque las opiniones de los distintos grupos consultados no son convergentes. 6 4. Los resultados de las consultas y los “saberes establecidos” 4.1. En balance, muchos de estos resultados coinciden con las expectativas y las ideas más aceptadas entre los latinoamericanistas. Pero en algunos casos no es así. Por ejemplo: en general se considera que las relaciones entre los EEUU y AL están ahora en su punto más bajo de los últimos años, y para muchos observadores, además, en este plano las cosas probablemente se deteriorarán aún más. Los resultados de estas entrevistas, sin embargo, muestran que para las elites consultadas esa caída se habría frenado, y se habría llegado a un “piso” a partir del cual la situación se mantendría estable (Brasil, México) o incluso podría mejorar (Argentina, EEUU). 4.2. Algo similar ocurre con la integración hemisférica; se discute mucho sobre sus eventuales beneficios. En el Mercosur, en particular, las opiniones políticamente más influyentes, y probablemente también el conjunto de las elites, la verían negativamente (aunque los resultados de las consultas argentinas y brasileñas no pueden confirmar ni rechazar esta idea, como se ve en 3.5.). En parte como consecuencia de esta imagen, se suele asumir que las probabilidades de concreción de la integración hemisférica a corto o mediano plazo son muy escasas. Los resultados de estas consultas muestran expectativas diferentes. En México las opiniones están muy divididas: la mitad de los consultados cree que en una década se concretará la integración hemisférica, y la otra mitad piensa lo contrario. En EEUU y Argentina la mayoría piensa que sí habrá integración hemisférica. Los consultados brasileños responden (en conjunto) aproximadamente como los argentinos, pero las opiniones de los distintos grupos de las elites brasileñas no son convergentes, de modo que no es posible generalizar. Juzgados con cautela, estos resultados, a pesar de sus limitaciones, no son consistentes con un pronóstico francamente negativo. 4.3. En los medios de comunicación, e incluso en la literatura más especializada (con excepciones), la situación chilena no parece al borde de abrir una etapa realmente nueva en la historia latinoamericana. Se suele elogiar su desempeño económico y la tasa de crecimiento de su PIB, pero se siguen señalando las herencias de su pasado autoritario, las desigualdades de la sociedad chilena, y los intentos de combatirlas (que muchos critican por insuficientes). La imagen resultante de estas entrevistas sugiere otra cosa. Para las cuatro elites consultadas (excepto para las argentinas, que “empatan” las perspectivas chilenas con las suyas propias, juzgadas muy favorablemente), durante los próximos años la economía chilena es la que tiene mejores perspectivas de crecimiento en toda la región. Esto se suma a un desempeño económico de largo plazo estelar (al menos medido con varas latinoamericanas). Análogamente, para las cuatro elites Chile sería la democracia consolidada de AL (con la excepción parcial de Brasil: allí el conjunto de todas las respuestas es también favorable a Chile, pero los juicios de los distintos grupos de las elites brasileñas no son convergentes). Entre las cuatro elites consultadas, por último, minorías no desdeñables mencionan a Chile (espontáneamente, en su primera respuesta a la pregunta sobre liderazgos regionales) como líder en AL. Como ya se observó, teniendo en cuenta el tamaño, la población, y la situación “excéntrica” de Chile en la región, este resultado es llamativo. 7 La suma de todos estos atributos asignados a la situación chilena apunta a una diferencia cualitativa, no a una simple suma de diferencias incrementales; esta sería la “excepcionalidad” chilena. En varias entrevistas esta “excepcionalidad” es señalada explícitamente, a veces con admiración, a veces con cierto fastidio. Esto último parece razonable. Las izquierdas latinoamericanas (especialmente en sus vertientes populistas y más radicales) desconfían de las continuidades con el Pinochetismo y de lo que podría llamarse el “realismo capitalista” chileno; para las derechas, a la inversa, no es tan sencillo terminar de reconciliarse con las raíces de izquierda o directamente socialistas de los gobiernos chilenos de la restauración democrática. Algunos entrevistados expresan esa “excepcionalidad” chilena con sencillez: para ellos, Chile sería el único país de la región con posibilidades reales de “despegue” en el futuro cercano. En las palabras de un consultado mexicano, “veo el crecimiento chileno (...) y veo que en diez años Chile ya es un país del primer mundo. Chile está a punto de dar el paso.” Si lo logra, esto sería una ruptura con las líneas de larga duración de la historia latinoamericana, ruptura que en la región tal vez sería recibida (por las razones ya mencionadas) con ambivalencias afectivas. Sería sin duda un salto cualitativo, pero ¿cómo se lo describiría? Podría ser el triunfo del “neoliberalismo” (o al menos del capitalismo), pero también el triunfo de la izquierda socialista o social demócrata, sui generis tal vez (al menos en AL), pero izquierda al fin. Y si no lo logra, también habría ambivalencias afectivas; ¿quiénes se alegrarían, realmente, de la nueva derrota? 4.4. En las opiniones y actitudes de las elites consultadas sobre estos temas no se observa una línea de corte principal norte/sur (i.e., EEUU versus los tres países latinos incluidos en el estudio, o EEUU y México versus Argentina y Brasil). Un resumen sumario de la discusión precedente muestra que, entre los catorce temas para los que se dispone de información sobre al menos tres de las cuatro elites consideradas, la elite “desviada” (cuyas opiniones difieren de las de las otras elites consultadas) es la de EEUU sólo en cuatro oportunidades. En seis temas el “desviado” es otro: México (tres casos), Argentina (dos casos) o Brasil (un caso); en dos situaciones no hay un único desviado, sino dos parejas, y en los dos restantes hay consenso sustantivo entre las cuatro elites. Aunque la lista de los temas explorados en estas consultas ciertamente no es exhaustiva, es lo bastante amplia y diversa, y abarca temas de importancia suficiente, como para sugerir que un corte único (o dominante) norte/sur parece poco probable. Al menos en estos temas las opiniones de las elites consultadas se entrecruzan de formas más complejas. Tampoco es cierto que la geografía (vista como distancia a los EEUU) sea destino absoluto. Entre los catorce temas indicados en el párrafo precedente, sólo en una oportunidad las elites mexicanas están más cerca de sus vecinos del norte que de argentinos y brasileños. En cinco casos, en cambio, los consultados mexicanos están más cerca de los latinos que de los EEUU, en tres casos afirman una opinión propia, diferente a la de los demás, y en los restantes casos o bien hay consenso, o bien las opiniones mexicanas coinciden con las de los consultados en EEUU y también con las de al menos otro de los países latinos. Vista como tamaño, sin embargo, la geografía sí parece influir. En varios temas se advierte que las elites brasileñas y mexicanas piensan los temas desde la lógica de países grandes, situación que las obliga a tener en cuenta muchos intereses y puntos de vista en sus propios países, 8 intereses que con alguna frecuencia serán necesariamente contradictorios (y entonces, por definición, los problemas se vuelven más complicados). Por ejemplo: las elites argentinas ven los problemas entre EEUU y AL como generales; en Brasil y México las opiniones entre los distintos grupos no son convergentes, pero en los dos países los empresarios, académicos y consultores asumen que son más bien problemas bilaterales. 9 1. SITUACIÓN SOCIAL Y POLÍTICA EN AMÉRICA LATINA 1.1 Los problemas de América Latina La persistencia de la pobreza El principal problema de la región (el más mencionado en la primera mención espontánea por los consultados de tres de los cuatro países) es la pobreza, en sentido amplio (pobreza, desigualdad, desempleo). En México es donde se percibe con más fuerza este problema, ya que casi la mitad de los consultados lo consideran el principal problema. Cuadro 1: Principales problemas de América Latina (porcentajes) Estados Unidos* México* Brasil* Argentina* 44 49 33 45 10 47 0 0 0 0 18 13 9 4 7 0 30 21 0 2 14 0 0 32 6 2 11 4 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 100 30 45 43 47 0 0 0 7 Total de consultas 30 45 43 54 Pobreza, desigualdad, desempleo Crecimiento económico Político institucionales Falta de proyecto Educación Otros Ns/ Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. La pobreza estaría asociada con problemas estructurales comunes a la región (el desempleo o las dificultades en el acceso a la educación). Uno de los consultados mexicanos señalaba la dificultad de establecer prioridades en el combate a la pobreza, aunque optaba por atacar primero el problema del desempleo: Extrapolando el problema de México para toda América Latina, me queda muy claro que son dos grandes problemas. Hay un problema fundamental que es un problema de empleo. La población necesita ingreso para lo más básico en términos de alimentos, de 10 vivienda, de salud. Para mi gusto, ése es el principal problema de la región. Hay un segundo problema que es el de la educación; yo no creo que se tenga que resolver la educación para luego tener empleo. No existe tiempo, la pirámide demográfica no lo permite. Necesitamos llevar pan, necesitamos llevar vestimenta, salud, a los principales centros que son las células de la familia. Ya después tendremos educación, pero primero el trabajo. (México) Varios entrevistados señalan que, más que la pobreza en sí, el problema más grave es la inequidad, porque aunque la región siga experimentando un período de crecimiento económico, eso no garantiza que los beneficios de la mayor riqueza a nivel de cada país se reflejen en una mejor calidad de vida para todos los habitantes. Todavía tenemos problemas muy serios en el campo de las desigualdades, porque aún las diferencias sociales y regionales son muy grandes. Y eso siempre es… una bomba no democrática, que tenemos que apagar porque si no puede explotar un día. (Brasil) Sin embargo, son los consultados brasileños quienes más frecuentemente consideran que uno de los problemas más serios de la región es la falta de crecimiento económico, y ponen a Chile como ejemplo a seguir. En Estados Unidos los problemas sociales y los institucionales preocupan casi por igual a los consultados. Cuatro de cada diez entrevistados (44%) identificaron a la pobreza como un problema central, pero el 47% mencionó problemas institucionales, que tienden a ser vistos como al menos en parte responsables de esa inequidad, porque no toman medidas efectivas para disminuirla. Algunos entrevistados vinculan explícitamente estas dos familias de problemas: Creo que uno de los problemas de la región es la inequidad en las poblaciones y parte del problema, creo, tiene que ver con los gobiernos. Pienso que los gobiernos no han sido muy efectivos en atender las necesidades de todos los segmentos de la población. (Estados Unidos) En Argentina también más de cuatro de cada diez (45%) entrevistados mencionan la pobreza como problema de la región, y si bien en este caso los problemas político institucionales son mencionados por el 32%, la idea de que ambos problemas se retroalimentan está subyacente en el razonamiento de varios entrevistados: El problema central de la región es social; si yo tomo la región como promedio el primer problema es el social, y el segundo es el institucional. ¿Por qué? porque vos notás que lo que América Latina no logra - con crecimiento económico - es mejorar los indicadores sociales. Entonces, no hay institucionalidad que resista en el largo plazo si el crecimiento económico no logra, en democracia, mejorar los indicadores sociales. (Argentina) 11 También algunos consultados en México vinculan la desigualdad con los problemas de gobernabilidad: Creo que un problema que sintetiza toda una gama de problemas es la desigualdad económica, social y política. Digamos que representa un obstáculo para la participación plena de los latinoamericanos en la vida pública, en los asuntos públicos de su país, porque la terrible desigualdad que tenemos es un freno a la gobernabilidad democrática. (México) Los problemas político - institucionales Los problemas político institucionales son más relevantes para los entrevistados en EEUU (los “observadores externos”) que para los demás entrevistados. En este punto el país del norte (con un 47% de menciones espontáneas) sería más crítico respecto de la calidad de los gobiernos en la región, sobre todo de la capacidad de los gobiernos para satisfacer las demandas de los ciudadanos y para mantener vigente el sistema legal y regulatorio: (…) Después de 20 años de democracia y reforma económica, las expectativas de la población no han sido satisfechas, no en todos pero en muchos países de la región. Eso al fin está debilitando a las instituciones democráticas. (Estados Unidos) Hay problemas en la calidad de la legislación, en la manera poco aceptable en que los sistemas legales están operando. Creo que una prioridad alta es el sistema regulatorio y la policía como parte central del sistema regulatorio. Y otras prioridades siguen siendo los sistemas electorales, los arreglos para gobernar. (Estados Unidos) (…) Algunas instituciones siempre han sido débiles: ahora están dándose más cuenta de eso, porque en el contexto de la democracia y de los nuevos programas sociales, las instituciones están demostrando claramente sus debilidades. (Estados Unidos) Los consultados argentinos también le dan peso a la problemática institucional. Tres de cada diez líderes argentinos (32%) también creen que los problemas institucionales están entre los más importantes; probablemente la experiencia reciente de su propio país incide en este juicio sobre el conjunto de la región. Evidentemente los problemas no son todos los mismos; hay países que tienen una base de institucionalidad, de predicción de lo que va a pasar en sus sistemas políticos, que aunque hayan tenido distintos resultados económicos, son países que uno los ve mejor. Uno ve la institucionalidad uruguaya, la institucionalidad chilena, y me parece que son países que tienen una base institucional más firme... Pero evidentemente cuando uno mira más en detalle a los otros países, uno ve que en Bolivia, por ejemplo, hay una inestabilidad enorme, Perú, Ecuador lo mismo, Venezuela está en una situación muy, 12 muy crítica. Colombia no, Colombia tiene una tradición más estable. En Centroamérica también, como que se ve inestabilidad. Y Brasil es tan complejo, pero me parece que en Brasil también las instituciones son más bien sólidas. (Argentina) En Brasil solo dos de cada diez entrevistados hicieron referencia a los problemas de orden político e institucional (21%). Para nosotros no existe democracia sin consolidación de las instituciones. Y la historia de las instituciones en Brasil es muy frágil, en especial la de los partidos políticos. En ese aspecto, creo que uno de los desafíos para el nuevo gobierno, que espero que sea del Presidente Lula, es la reforma política. (Brasil) El insuficiente crecimiento económico En tercer lugar en orden de importancia aparecen los problemas asociados al escaso crecimiento económico en la región, problemas a los que en Brasil se les atribuye mayor relevancia relativa y que, por el contrario, no aparecen en la ronda Argentina. En Brasil tres de cada diez entrevistados se refirieron a este problema: Hay ahora un problema en relación al crecimiento económico; los países emergentes se están - muy rápidamente- enganchando en un proceso de economía globalizada. Como región nos estamos quedando afuera de eso, y Brasil, que es una economía fuerte, por decisiones equivocadas estamos ahí viviendo la situación, pero sin una propuesta clara, estratégica, de cómo nos vamos a ubicar en esta nueva organización de la economía. (Brasil) En México los problemas de las economías latinoamericanas son mencionados por casi dos de cada diez consultados (18%). Uno de ellos señala que la urgencia del crecimiento económico (y de tomar medidas que lo favorezcan) no es comprendida por el conjunto de la población, y por ello las políticas que promueven ese crecimiento no cuentan con apoyo popular. Es una falta de visión de que estamos luchando todos para atraer capitales, para poder crecer más rápidamente, generar más ahorro, para crecer más. Por tanto, muchas de las políticas económicas - e incluso sociales- deben subordinarse a este objetivo de captura de capitales, generación de excedentes para invertir y captura de excedentes externos. Si bien los liderazgos tienen noción de esto, [la búsqueda de crecimiento económico] no tiene el lugar que debería tener en el propósito de mantener a América Latina creciendo. La población en su conjunto lo tiene muy distante en su mapa de maduración, en su lista de prioridades, eso lleva bastante educación. (México) En Estados Unidos los problemas económicos sólo son mencionados por uno de cada diez consultados (10%). Tienden a señalar que las reformas económicas que se han implementado en 13 los últimos 20 años no produjeron los resultados esperados, sobre todo porque no la región no creció lo suficiente y porque los gobiernos no lograron reducir la inequidad: (El primer problema que enfrenta América Latina) es establecer políticas económicas efectivas que produzcan crecimiento y reducción de la pobreza (…) Hay un sentimiento de frustración con el modelo (de economía de mercado), que no trajo tanto crecimiento como la gente esperaba, y en la mayoría de los casos no trajo tanta reducción de la desigualdad como la gente esperaba. Entonces la pregunta es: ¿puede América Latina encontrar en los próximos 10 o 20 años un lugar en la economía global que le funcione, que sea estable y produzca crecimiento? Es sobre todo una cuestión de encontrar políticas económicas efectivas y gobiernos capaces de diseñarlas e implementarlas, y el público tiene que aceptarlas. (Estados Unidos) 1.2 El proceso de consolidación democrática Las democracias consolidadas, y las todavía frágiles Los consultados coinciden en que hay más democracia en la región que 20 años atrás, aunque todos identifican diferencias entre países. Tampoco dudan de que el camino a transitar debería ser hacia más democracia. América Latina fue muy castigada - durante mucho tiempo - con procesos dictatoriales; esto naturalmente genera sus males porque no había práctica democrática, no había debate, no había discusión, no se enriquecía con la presencia de la sociedad civil. Yo creo que estamos en un proceso de crecimiento, de afianzamiento del sistema democrático, y no va a haber ningún mesías con vestimenta militar para resolver los problemas de cada uno de nuestros países. Los problemas los tenemos que resolver nosotros por el sistema más cerca de lo ideal y de lo mejor, que es el sistema democrático. (Argentina) Chile aparece como la democracia más consolidada de la región (Cuadro 2) según la opinión mayoritaria en los cuatro países, aunque ésta es más contundente en EEUU (60%), México (59%) y Argentina (56%) que en Brasil (42%). La democracia costarricense es valorada por los vecinos del norte, pero está menos presente como ejemplo en Argentina y Brasil. Todo el mundo elogia muchísimo a Chile. Me parece muy interesante, por ejemplo, que tenga esta posibilidad de una candidata, de una presidente mujer. Un país que viene de una dictadura como la de Pinochet, [en el] que todavía la Iglesia tiene tanta injerencia y que no ha logrado desde el punto de vista jurídico algunos avances, ha hecho una renovación e indudablemente creo que funciona casi como un país europeo, con una estructura de solidez económica. (Argentina) 14 Chile, seguro, está al tope de la lista. Diría que la razón por la cual Chile está adelante es porque no sólo tuvo una serie de elecciones democráticas y limpias sin problemas, sino que tuvo cambios de partido, de la izquierda y de la derecha. Así ha completado el ciclo, de muchas maneras, de la transición democrática. (Estados Unidos) Yo creo que de manera muy señalada sería Chile. (…) ha logrado despersonalizar el poder; no hay hombres poderosísimos como Menem o Chávez. Se ha hecho una estructura mucho más colegiada de las decisiones. (México) Cuadro 2: Democracias consolidadas en América Latina (porcentajes) Estados Unidos* 60 13 0 3 0 0 3 3 13 0 0 México* 58 20 4 2 2 7 0 0 2 0 2 Brasil** 42 0 31 0 0 0 3 0 11 3 11 Argentina* 56 5 12 5 7 0 0 0 5 0 10 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 100 30 44 36 41 0 1 7 13 Total de consultas 30 45 43 54 Chile Costa Rica Brasil Uruguay Argentina México Colombia Perú No las hay Otros Ns/Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. ** Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas muestran opiniones divididas, y por lo tanto, no hay conjeturas razonables sobre como piensa el conjunto de las elites nacionales consideradas. Si bien entre los brasileños el primer lugar lo ocupa Chile, son también los más optimistas respecto a la consolidación de su democracia, y mencionan a su propio país en segundo lugar (31%). 15 De Iberoamérica Chile es el único que está junto a España y Portugal, es una democracia de mercado consolidado, en razón de la economía de mercado, es moderno. Dentro de América del Sur, en términos de democracia de mercado, el segundo país es Brasil, pero no como democracia, porque el segundo en términos de democracia es Uruguay, pero el Uruguay está muy atrás en economía de mercado. (Brasil) Los norteamericanos, sin embargo, son los más críticos respecto de la consolidación democrática en la región: el 13% piensa que aún no hay democracias consolidadas, Eso todavía está en construcción ... sí hay varias democracias que creo que van en buen camino, como por ejemplo México, países como Brasil a pesar de los problemas, algunos países de Centroamérica, independientemente de los problemas que tengan las democracias. Creo que existe un ambiente en donde podemos decir que las posibilidades de que se logre alcanzar esa conciliación son más obvias que en otros países. Chile es otro país que puede llegar; incluso países pequeños como Panamá. Pero no existe ningún país con la democracia claramente consolidada. (Estados Unidos) Algunos consultados distinguen “democracia electoral” (que sí existiría en la región) de “democracias plenamente consolidadas”. En este sentido, las únicas democracias plenas serían las que, además proporcionar libertades cívicas, como el acceso al voto o el debido cumplimiento de los procesos electorales, pueden sostener condiciones mínimas de bienestar económico y social para sus poblaciones. Es un tema un poquito pantanoso. No soy experto. Creo que democracias electorales consolidadas prácticamente todas. Incluso en el caso Venezuela. A uno le puede parecer mejor o peor un resultado y dar una opinión, pero no hay una impugnación masiva como se hacía, ni hay la toma violenta del poder, pero no parece ser todo el sistema. Democracias de segunda etapa, si se puede decir “consolidadas”, puedo decir que muy pocas; quizás los que llevan la delantera - de los que conozco porque no conozco todos los países - sin duda pondría a Chile…. (México) Otro consultado destaca la necesidad de instituciones sólidas, que sean capaces de llevar adelante con éxito políticas necesarias pero impopulares. En particular, en su opinión, es muy difícil tomar medidas tendientes a disminuir las desigualdades si el gobierno no tiene un fuerte respaldo institucional. Se sabe que todo país con problemas muy graves necesita de gobiernos que tomen medidas impopulares. No es posible gobernar dejando a la población siempre satisfecha, si fuese así sería óptimo (...) La gente quiere un país sin inflación, con crecimiento, pero si fuese así sería muy fácil: se decreta la cosa y estaría todo resuelto. Pero el problema no se resuelve de esa manera. Entonces cuando un gobierno tiene que tomar medidas más 16 difíciles, más duras, porque es preciso corregir ciertas cosas, inclusive cortar privilegios, eso puede acabar desencadenando otro movimiento contrario al gobierno. Entonces, por eso, las democracias más consolidadas son aquellas que tienen instituciones más consolidadas. (Brasil) Las democracias más frágiles de la región, según los entrevistados de los cuatro países, serían Bolivia y Venezuela (Cuadro 3). En este punto existen diferencias de énfasis entre los subgrupos de México y Brasil, pero en todos los países aproximadamente dos de cada diez consultados mencionan espontáneamente a Venezuela y Bolivia. La fragilidad de la democracia venezolana está estrechamente relacionada a la figura del Presidente Chávez, catalogado como “carismático” o “autoritario”. Algunos cuestionan su injerencia personal en decisiones económicas y en los conflictos internos de Venezuela, y también su política exterior, en particular su involucramiento en la política interna de otros países de la región. Algunos de los argumentos expuestos por los consultados fueron los siguientes: Venezuela sigue siendo una situación muy especial. Yo no creo que se esté cayendo en la dictadura, en un régimen socialista de partido único, pero sí hay algo real y es la polarización, y todo lo que está haciendo Chávez, que no corresponde a una serie de normas y de prácticas de común entendimiento. (México) Como el barril de petróleo vale lo que vale, yo lo veo a Chávez financiando o comprando deuda de distintos países que tienen problemas económicos y eso hace que su influencia en la región sea cada vez mayor. Inclusive yo soy de los que creen que Chávez, además de esta carrera armamentista que está llevando a cabo comprando ahora submarinos, (...) constituye un factor de desestabilización muy grande. Soy de los que creen también que Chávez ha financiado algunos proyectos - sin ir más lejos en Bolivia - que desgraciadamente no apuntalaban a una democracia, a un régimen democrático. Todo lo contrario. (Argentina) Creo que no se puede evaluar la democracia en Venezuela con los parámetros clásicos, porque no se puede caracterizar al gobierno Chávez como una dictadura, él tiene legitimidad. Pero es verdad que tiene problemas con la libertad de prensa, tiene un conflicto permanente con la opinión pública. Entonces encuentro complicado aquello allí. Creo que Venezuela tal vez sea la expresión de transformaciones de la dictadura (…). Reconozco que no es una dictadura según los moldes clásicos. (Brasil) En el caso de Bolivia la fragilidad estaría dada por la existencia de una población empobrecida que no ha logrado beneficiarse de los recursos económicos con los que cuenta el país. Los bolivianos, especialmente las personas pobres, indígenas, rurales, no sienten ningún beneficio de las reformas de mercado de los últimos 20 años. Lo que ven es 17 corporaciones multinacionales "gringas" haciendo grandes inversiones para extraer los recursos naturales de Bolivia, muy parecido a lo que los imperialistas europeos han hecho por siglos. (…) En un sentido más amplio, Bolivia padece una crisis de identidad. ¿Quiere el país abrazar la economía global, o quiere evitar el desarrollo y permanecer escéptico sobre las reformas que son necesarias para integrar a Bolivia a la economía global?" (Estados Unidos) A los problemas que se originan en la pobreza y la inequidad social se les suma el clivaje regional, que puede conducir incluso a la partición del país. Tal vez Bolivia es la más frágil por aparición de fenómenos divisivos del Estado. Es el único país donde se está planteando una división del Estado. Las otras son democráticas pero no son fuertes, no van a volver a la guerra civil pero si les va a costar consolidarse. (Argentina) La ronda de entrevistas en Brasil, que se realizó después de las elecciones que llevaron al triunfo a Evo Morales, denota mayor optimismo respecto a la posible evolución de la situación de Bolivia. Varios consultados señalaron que, aunque los problemas seguían estando, la victoria cómoda de Morales en las urnas le otorgaba cierto margen de maniobra para tratar de dotar de cierta estabilidad al gobierno boliviano. Porque el problema de Bolivia no sería la falta de recursos naturales sino la incapacidad de los gobiernos anteriores de lograr que esa riqueza redundara en un mejor nivel de vida para el conjunto de la población. Ahora, por ejemplo, Bolivia "saiu da tela", pero hay cosas nuevas, aquellas ideas que ahora, con el gobierno electo en primera vuelta con 56% de los votos, entonces vamos a tener estabilidad. Creo que sería lindo decir que eso de hecho va a suceder, pero sé bien que la verdad histórica, la experiencia histórica, no apunta para ese lado. Creo que puede ser que Bolivia esté mejorando algunas cosas, pero lo histórico no apunta...; cómo se diría, la falta de instituciones vuelve al gobierno muy inestable (...) (Brasil) Bolivia proveyó materiales estratégicos para el mundo y nunca quedó nada para el pueblo (…) Entonces ahora están dispuestos a no permitir que eso suceda. Ese es el fundamento de la revolución boliviana. Si esa riqueza fuera repartida generando una sociedad más justa, más oportunidades, lo que implica una revolución social interna, entonces Bolivia puede convertirse en una especia de Arabia Saudita de América Latina. (Brasil) 18 Cuadro 3: Democracias frágiles en América Latina (porcentajes) Estados Unidos** 18 18 4 14 7 11 0 7 4 0 7 0 0 11 México* 22 22 16 9 7 7 4 4 2 2 0 0 0 4 Brasil* 28 28 3 3 0 17 0 0 0 0 7 0 3 11 Argentina* 34 26 11 8 5 5 0 0 0 0 0 0 0 11 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 100 28 45 29 38 2 0 14 16 Total de consultas 30 45 43 54 Bolivia Venezuela Perú Colombia Argentina Ecuador El Salvador Nicaragua Guatemala Honduras Paraguay Otras No hay Ns/Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. ** Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas muestran opiniones divididas, y por lo tanto, no hay conjeturas razonables sobre como piensa el conjunto de las elites nacionales consideradas. Perú, Colombia, Ecuador, Argentina y Paraguay son, en un segundo nivel de importancia, otros países considerados frágiles en términos de sus instituciones democráticas en el marco de la región latinoamericana. ... si pensamos en países como Perú, que se han desfondado en sus liderazgos, que son países tan pobres, con una carga económica y social ancestral, que sumada a la ruptura total de la esperanza con un personaje como Toledo... Es increíble la caída libre de una popularidad como esa, que llegó fuerte a la presidencia y fue capaz de, palmo a palmo, desencantar a toda la población. Un presidente con ese nivel de aceptación no sé como tiene cara de seguir gobernando. Esto quiere decir que hay una estructura social débil y hace que la democracia también sea débil. 19 El caso argentino es diferente porque ahí tienes una sociedad muy fuerte, ciudadanos muy politizados, gente que tuvo en su momento una actuación definitiva con los cacerolazos, las manifestaciones que echaron a un presidente. Vivió un proceso crítico que permitió el arribo de un personaje tan singular como Kirchner. (México) Creo que Argentina tiene una herencia muy fuerte, que es la cultura de su pueblo, un nivel cultura muy bueno, y una estructura económica basada fuertemente en los agro negocios, que le da una buena condición de reacción, para retomar su crecimiento, como ya se está comprobando con índices de PIB muy altos, mayores a los de otros países. (Brasil) Los países que enfrentan más problemas Se exploró en particular el tema de América Central, tratando de identificar cuáles países de la región enfrentan más problemas. Según los entrevistados mexicanos (31%) y norteamericanos (72%), Nicaragua es el país que enfrenta mayores problemas, aunque los mexicanos también están preocupados por la situación de Guatemala (28%) y Honduras (19%). Yo estoy muy familiarizado con Nicaragua y lo veo muy complicado. Está en la situación de un país bipolarizado: Partido Liberal Constitucional y el Frente Sandinista. Un país al que las circunstancias internacionales y las propias le ha impuesto vivir en una generación, la dictadura, la revolución, el gobierno revolucionario, la contrarrevolución, la intervención extranjera, la guerra civil, la democracia, la alternancia, el escisión al interior del partido de gobierno; entonces creo que a Nicaragua hay que ponerle el foco amarillo. En Guatemala siempre existe el riesgo de la tentación militar, no sé exactamente en este momento cómo se encuentra. (México) Diría que Nicaragua sigue siendo, incluso en términos centroamericanos, tan pobre. Y las raíces del poder democrático son relativamente superficiales. Creo que Nicaragua enfrenta algunos de los desafíos más gigantescos en cuanto a combatir la pobreza y encontrar un lugar en la globalización. (…) Creo que los problemas de Guatemala son básicamente los mismos, no tan profundos en lo económico, pero sí en los niveles de crimen y corrupción. (Estados Unidos) Los problemas no se limitan ni a lo histórico ni a lo económico. También tienen problemas en los aspectos más básicos de la democracia: los partidos no representan adecuadamente los intereses de sus electores, los gobiernos no son eficaces y las demandas de la población se acumulan. Nicaragua (…) es una pequeña sociedad con una elite política que ha estado conduciendo al país por generaciones (…) ahora toman la forma de un par de partidos 20 políticos, pero estos partidos no están muy interesados en la población, son bastante corruptos, no muy democráticos y están básicamente tratando de trabajar juntos de una manera poco saludable en vez de realmente competir democráticamente. (Estados Unidos) Guatemala, me parece que no acabó de resolver sus problemas aún con los acuerdos de paz. La gente que participó en la guerra civil está muy desilusionada, incluso muy desilusionada de sus liberados. Pero el nivel de empobrecimiento, la ausencia de capacidad de gobierno, me parece que es un país que tiene un sufrimiento muy complicado. (México) Cuadro 4: Países de América Central que enfrentan más problemas (porcentajes) Estados Unidos* 72 6 11 0 0 0 11 México* 31 28 19 9 3 3 6 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 18 32 12 13 Total de consultas 30 45 Nicaragua Guatemala Honduras El Salvador Costa Rica Ninguno Ns/Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. Nota: En Argentina esta pregunta no se incluyó en la guía por la extensión del cuestionario. 1.3 Los conflictos étnico - culturales La actitud hacia los conflictos étnicos no es homogénea entre los consultados de diferentes países. Aunque sólo se preguntó en tres de ellos (México, Argentina y Estados Unidos), el ordenamiento de las posiciones parece sugerir que, cuanto más grande la población indígena y más reciente el conflicto, mayor sería la propensión a considerarlos amenazas, mientras que, con una mirada más abstracta, los estadounidenses tienden a considerarlos como oportunidades para la democracia. En la ronda de México, los conflictos étnicos son considerados mayormente una 21 amenaza (39%) en relación a la consolidación de la democracia en los países de la región. En cambio, tanto en Estados Unidos como en Argentina la mayoría tiende a verlos como una oportunidad: seis de cada diez consultados (60%) en Estados Unidos y cuatro de cada diez (50%) en Argentina los ve desde una óptica positiva (Cuadro 5). Los que consideran que los conflictos son más bien una oportunidad señalan la importancia de que la democracia incluya a todos, también a los grupos minoritarios o hasta ahora relativamente marginados. Sin embargo, todos, incluso los optimistas, coinciden en que estos conflictos pueden tener desenlaces no deseables, en la medida en que el gobierno no logre incorporar a esos grupos rápidamente y convencerlos de que las reglas de la democracia son beneficiosas también para ellos. Son una oportunidad, claramente se trata de sistemas institucionales donde las cuestiones étnicas nunca estuvieron claramente contenidas; sistemas que han funcionado sin permitir que todo lo que es el mundo de la cultura indígena pudiera participar, a pesar de tener una mayoría en proporción de la población. El no haber tenido la capacidad de manejar eso es una de las razones que están en la base de la crisis de Ecuador…pero creo que es una oportunidad. Para mí, cada vez que aparece gente en el tablero político es saludable. (Argentina) Yo creo que si se gestionan bien son una oportunidad (…) hay que adaptar instituciones. Puede ser una oportunidad muy buena de diálogo, una oportunidad muy buena de búsqueda de consenso. Si, por el contrario, se asume como situaciones violentas y de enfrentamiento, es trágico. (Argentina) Representan sin duda una oportunidad; (...) representan ambos. Depende de cómo se canalizan esas energías políticas, y si son canalizadas constructivamente, y si las elites en esos países son flexibles y reconocen la importancia de esos grupos (...) Esos grupos no se van a ir, y necesitan tener un interés propio ("stake"). Tienen que ser parte interesada ("stake-holders") en este proceso. (Estados Unidos) Representan oportunidades de consolidar la democracia.(…) El problema de corto plazo es: ¿pueden las estructuras democráticas en América Latina ser suficientemente flexibles como para contemplar las aspiraciones de las minorías? (Estados Unidos) 22 Cuadro 5: En relación a la consolidación de la democracia, ¿los conflictos étnicos son oportunidades o son amenazas? (porcentajes) Estados Unidos* 7 60 33 México* 39 32 14 Argentina* 16 50 14 0 2 5 0 0 0 2 5 7 2 7 7 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 30 44 44 0 1 10 Total de consultas 30 45 54 Son una amenaza Son una oportunidad Son las dos cosas Ninguna de las dos cosas Depende del país Otros Ns/Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. La mayoría de los consultados en México tiende a subrayar el lado negativo de los conflictos étnicos, señalando que la violencia de los grupos étnicos se dirige contra todo el sistema democrático. Me preocupa cualquier reivindicación basada en el nacimiento, en el origen, en la idea de que un pueblo u otro puede prevalecer por su derecho divino, genético, de pertenencia. En ese sentido creo que son amenazantes para la democracia. Me parece que la democracia tiene que dar espacio a todas las minorías, pero la forma en la que se están desarrollando estos movimientos, tanto en México en Chiapas como en Bolivia con los indígenas y como en distintos lugares, no es democrático, no es verdadera democracia. (México) Varios consultados en México (antes de la victoria de Evo Morales) comparan el conflicto de Chiapas con los alzamientos en Bolivia, y encuentran similitudes. La principal sería que los grupos étnicos no buscan participar en un sistema regido por las normas de la convivencia democrática, pero tampoco tienen fuerza suficiente para derrocarlo. Yo creo que son una amenaza en la medida en que se conviertan en unos instrumentos que cuestionan al sistema político. Es decir, que se conviertan en zonas de marginalidad 23 en el sistema político y que además de mantenerse en la marginalidad, sean también instrumentos para combatir al gobierno. Lo observamos en el caso de Bolivia; lo que se advierte es una situación donde el peso político de esos grupos étnicos que no quieren aceptar su incorporación a la sociedad en su conjunto, que no tienen el poder suficiente para alcanzar el poder total de gobierno, pero que, sin embargo, impiden la capacidad de cualquier régimen a realizar tareas gubernamentales. Eso significa, obviamente, un problema gravísimo para las tareas gubernamentales. En el caso mexicano lo hemos podido observar desde 1994 con lo sucedido con el grupo zapatista levantado en armas, pero levantado en armas en un proyecto imposible, porque si bien le declaran la guerra al Estado mexicano al inicio de este fenómeno, pues no tiene ni los instrumentos, ni la capacidad, ni la legitimidad, para emprender una aventura que pueda tener éxito. (México) Algunos consideran que es hora de darles más voz en los asuntos que les conciernen, aunque sus valores sean diferentes, y en algunos casos opuestos, a los que prevalecen en el mundo desarrollado. Debemos tener una estrategia muy clara de común acuerdo con nuestros hermanos indígenas, no con la violencia, al contrario, creo que la violencia simplemente perjudica cualquier negociación. Sí me parece que debemos estrechar la comunicación con los pueblos indígenas sin violentar sus costumbres, aun cuando hay costumbres que con el paso de tiempo son difíciles de aceptar, el maltrato a las mujeres, la discriminación, es difícil de aceptar, pero me parece que lo importante es como logramos el diálogo. (México) Pero otros señalan que hay reclamos de los grupos étnicos que no se pueden contemplar, como la reivindicación de la propiedad de la tierra para los pueblos indígenas. Yo advierto, lo vivimos en México y nos representó el reclamo de Marcos en Chiapas, [es] un conjunto de demandas legítimas que nadie podría descalificar: la discriminación, la exclusión, la marginación; han sido elementos claves de la relación de mestizos con los pueblos indígenas, sin lugar a dudas. Pero junto a estos reclamos legítimos, surgen otro tipo de reclamos que no son necesariamente de los indígenas sino de los indigenistas, de los intelectuales del tema indígena con formación marxista, que han llevado al reclamo de estos derechos originales que implican el derecho sobre la propiedad de la tierra. (México) 24 2. LAS RELACIONES INTRA- HEMISFÉRICAS 2.1 Las relaciones Estados Unidos – América Latina Las elites de México, Brasil y Argentina tienen visiones diferentes respecto de las relaciones entre América Latina y Estados Unidos. Los dos países más grandes, México y Brasil, tienden a considerar que los problemas en la relación con el vecino del norte son de tipo bilateral, mientras que en Argentina la mayoría absoluta de los consultados opina que hay problemas comunes de toda la región con Estados Unidos. Para los consultados argentinos esos problemas comunes son responsabilidad principalmente de Estados Unidos, que se ha preocupado poco por la región, y en particular por promover la democracia y el desarrollo económico en América Latina. Esa falta de interés habría provocado la reacción adversa de la mayoría de los latinoamericanos. (…) el problema común en estas cosas está en la capacidad de Estados Unidos de generar conocimiento sobre esta zona. Pero nunca le interesó, nunca tuvo su foco puesto aquí, sólo ha logrado alianzas circunstanciales. (...) Los principales problemas son que nunca se preocupó de problemas generales, de poder salvar esa sensación de franca convivencia con los regímenes dictatoriales. La otra cuestión es que nunca ha habido una ayuda directa de los Estados Unidos francamente instalada para generar desarrollo, ha habido ayudas puntuales. (Argentina) Hay una animadversión muy grande a todo lo que venga de los Estados Unidos. Estados Unidos ha tenido una política, en ese sentido, o bastante errática o directamente de olvido, de no tener en cuenta a la región. Eso ha sido utilizado ideológicamente por muchos activistas también de extrema izquierda, que han demonizado a los Estados Unidos. Y algunas decisiones que se tomaron han ayudado a esa demonización. Así que ahí hay algunos problemas comunes. (Argentina) En Brasil y México los juicios son más matizados. Aunque una minoría dice que predominan los problemas comunes a toda la región, otros señalan que hay problemas generales y bilaterales, específicos a cada país, y varios hablan de grupos de países con problemas comunes en su relación con Estados Unidos. Algunos agrupan a esos países según sus gobiernos (los populistas y/o de izquierda y los demás), otros según su distancia con la frontera estadounidense (México, América Central y América del Sur), otros según su economía (más o menos abierta) o la prevalencia del narcotráfico (los productores de droga, los corredores para el narcotráfico, los demás países). Yo creo que hay, por la propia definición de gobiernos en América Latina, tratamientos diferenciales. No es lo mismo la relación con México, por más complicada que sea, que la 25 relación con Venezuela o con Argentina, por el tipo de perfil de gobernante. Sin embargo, evidentemente América Latina tiene un eje compartido; tendría que hacer un trato amplio en general con los EEUU. Lo han pensado con el acuerdo en materia comercial, y finalmente, lo que acabaron haciendo fue una conjunción de acuerdos binacionales para tratar de hacer el acuerdo regional conjunto. Yo diría que ese es el principal indicador de los tratos diferenciales y comunes con América Latina. (México) Diría que la relación con Estados Unidos es muy diferente según la geografía: México tiene una relación especial con Estados Unidos, con características propias, el corredor de América Central y Caribe tiene otro conjunto de características, los países andinos, con problemas de droga, tienen otro conjunto de problemas, y tal vez el Mercosur tiene una agenda un poco más homogénea entre sí, pero difiere un poco de los demás países de América Latina. (Brasil) Tal vez hay un poco de las dos cosas: cada nación tiene un perfil propio de comercio exterior, de intereses, de oportunidades, de niveles de industrialización, un perfil de producción muy peculiar; por otro lado, hay un problema de conjunto, porque generalmente la política americana es hecha en bloque. Entonces, puede haber en determinados momentos algunas iniciativas de carácter más bilateral, intentando abordar esas cuestiones. (Brasil) Los mexicanos son conscientes de su relación diferencial con Estados Unidos; en particular varios entrevistados mencionaron, a modo de ejemplo de problema bilateral, el que sufren en carne propia, compartir la frontera con Estados Unidos. Creo que habría de los dos órdenes, creo que hay algunos de carácter general de la región en su conjunto, pero otros, que tienen que ver con la especificidad bilateral para cada país. (…) La especificidad mexicana con 3800 kilómetros de frontera le da un contenido muy diferente a esta región, que se refleja sobre todo en el grado de dependencia que México tiene de la economía líder del mundo. Aquí se acentúa, el 85% de nuestro comercio exterior, el 85% del turismo procedente del extranjero llega de EEUU, 85% de la inversión extranjera directa, las llamadas de larga distancia el 80% son con EEUU, como un indicador de la cotidianeidad. Entonces creo que sí hay especificidades evidentes. (México) No me atrevería a decir que todos los países de América Latina tienen los mismos problemas con Estados Unidos. En el caso de México, la relación marca prácticamente todo; el flujo comercial de México con EEUU va creciendo, tenemos una frontera enorme y es una frontera que ahora, en términos bilaterales, tiene que ver mucho con las preocupaciones sobre la seguridad de los Estados Unidos. México tiene un flujo migratorio hacia los Estados Unidos que no lo tiene ningún país del mundo por la frontera. Ahora, con la firma del Tratado del Libre Comercio con Centroamérica, yo creo 26 que se van a estrechar muchísimo las relaciones entre los países de Centroamérica y los Estados Unidos. Los flujos migratorios de esos países también siguen creciendo y, además, pasan por territorio mexicano. Pero creo que los países de América Latina sobre todo los del Cono Sur- están en una situación diferente; su dependencia no es tan aguda, y me imagino que EEUU no los ve con la misma preocupación que a México, que estamos ahí en la frontera. (México) Cuadro 6: Problemas que afectan las relaciones EEUU- América Latina (porcentajes) México** 22 38 33 Brasil** 29 29 38 Argentina* 61 26 9 Ns/Nc/Otras respuestas 6 3 4 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 45 34 46 0 9 8 Total de consultas 45 43 54 Problemas generales Ambos Problemas bilaterales * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. ** Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas muestran opiniones divididas, y por lo tanto no hay conjeturas razonables sobre como piensa el conjunto de las elites nacionales consideradas. En la ronda de consultas en Estados Unidos, la mayoría de los juicios acerca de cómo es hoy la política exterior de Estados Unidos hacia América Latina no son positivos. Creo que en la última década hemos visto bastante énfasis en las relaciones comerciales y en expandirlas. Pero el hecho es que, después de que las elecciones se convirtieron en la manera predominante de elegir líderes en la región a comienzos de los ’90, Estados Unidos abandonó un montón de programas para promover la democracia en América Latina, redujo los gastos y mandó ese dinero a Europa del Este; y en este siglo, cambió ese dinero de Europa del Este y la antigua Unión Soviética para Oriente Medio. (Estados Unidos) 27 Cuadro 7. Evaluación de la política exterior de Estados Unidos hacia América Latina (porcentajes) Políticas no son claras Políticas no encaran los problemas adecuadamente Políticas son bilaterales, no regionales Políticas se están adaptando a América Latina Otras respuestas Estados Unidos** 40 37 10 3 10 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 30 0 Número de consultas 30 ** Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas muestran opiniones divididas, y por lo tanto no hay conjeturas razonables sobre como piensa el conjunto de las elites nacionales consideradas. Ante la pregunta: “la política exterior de los EEUU, ¿toma en cuenta adecuadamente [los problemas de la región], o debería cambiar?”, las respuestas de los consultados son moderadamente críticas. Esta visión crítica, aunque mesurada, domina las respuestas; el 77% de los entrevistados responden espontáneamente, en primer lugar, con una observación crítica. El principal defecto es que no hay una política adecuada o simplemente no hay una política definida hacia la región. Un entrevistado comentaba sarcásticamente que “primero de todo, quizás es una exageración decir que hay una política estadounidense hacia América Latina. Es otro período más de abandono (…).” Hacia el futuro, no hay consenso sobre cómo evolucionará la relación EEUU-América Latina en los próximos 5 años. Las expectativas de la mayoría de los consultados en Estados Unidos son positivas, en Argentina empatan los que esperan que mejoren y los que piensan que seguirán como hasta ahora, y en México y Brasil son mayoría los que sostienen que las cosas seguirán igual. 28 Cuadro 8: La evolución de las relaciones entre Estados Unidos y América Latina en los próximos 5 años (porcentajes) Estados Unidos* México* Brasil* Argentina* 60 36 31 43 20 47 63 43 20 16 5 9 0 2 2 4 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 100 30 45 43 53 0 0 0 1 Total de consultados 30 45 43 54 Es probable o seguro que mejoren Seguirán como hasta ahora Es probable o seguro que se deterioren Ns/Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. 2.2 El papel de la OEA Tampoco hay consenso entre los consultados de los diferentes países respecto a qué papel debería desempeñar la OEA frente a las democracias de la región. En EEUU casi siete de cada diez entrevistados creen que la OEA debería intervenir más de lo que hace actualmente. La mayoría de los mexicanos también querría que interviniera más, aunque algunos señalan que sólo si el país involucrado lo solicita. Los argentinos tienen opiniones más divididas, pero parecen bastante más cercanas a las de los mexicanos que a las de los estadounidenses. Uno de cada tres mexicanos y argentinos (y uno de cada cuatro estadounidenses) considera que lo fundamental es que la OEA actúe con más autonomía respecto a EEUU. En Brasil la pregunta se formuló sólo a una minoría de los consultados, lo que no permite cuantificar las respuestas. 29 Cuadro 9: Papel de la OEA frente a las democracias de sus Estados miembros (porcentajes) Estados Unidos* 67 3 24 0 3 3 México* 30 14 32 0 16 9 Argentina** 36 0 31 21 10 2 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 30 100 44 100 42 0 1 12 Total de consultas 30 45 54 Debería intervenir más Intervenir si el país solicita Actuar con autonomía de EEUU Tornarse menos inoperante Otros Ns/Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. ** Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas muestran opiniones divididas, y por lo tanto no hay conjeturas razonables sobre como piensa el conjunto de las elites nacionales consideradas. Muchos de los consultados que consideran que la OEA debería tener un rol más activo ponen como condición que se debería profesionalizar e independizar. El problema con la OEA es que (…) es percibida como un vehículo a través del cual EEUU puede tratar de influir en la región. Eso por un lado; por el otro, creo que como resultado, muchos países en el hemisferio ven a la OEA también como un vehículo a través del cual pueden instalar muchas de las reformas (…) Creo que la OEA probablemente se beneficiaría si se transformara en mucho más profesional desde el punto de vista del servicio civil (…). (Estados Unidos) Algunos entrevistados consideran que la falta de autonomía no es un problema exclusivo de la OEA sino que afecta a varios organismos internacionales. Si hay algo que caracteriza a la estrategia norteamericana es haber roto el valor de los organismos regionales o internacionales, y el haber subordinado a estos organismos a cumplir papeles afines a su estrategia. El papel de la OEA sería retomar discusiones plurales que permitieran ponerle límites a [esas] estrategias unilaterales que tienen menor legitimidad que antes (…). (Argentina) 30 El principal desafío sustantivo para la OEA sería el fortalecimiento institucional de las democracias en la región. Más de la mitad de los consultados en EEUU y México (53 y 65% respectivamente) así lo cree, aunque algunos consideran que no lo está atendiendo como debería: El rol apropiado de la OEA es defender, proteger, la gobernabilidad democrática. (Estados Unidos) Yo creo que ahí hay un asunto muy importante en el que la OEA no se ha involucrado correctamente y es el de la gobernabilidad. A mí lo que más me preocupa en la región es lo que yo llamaría el tema del “poder de la calle” o de “la plaza pública”. El poder de la turba le está ganando al poder de la urna (...) El hecho es que cada vez más en América Latina los gobiernos democráticamente electos caen por la presión de la manifestación callejera y esto es preocupante. (México) No puede actuar eficazmente en defensa de la democracia porque se cuestiona su autonomía respecto de los Estados Unidos. En la medida en que se pretenda por parte de la OEA tener una participación importante en procesos democráticos, tendrá que divorciarse de su imagen de agente de los quehaceres políticos estadounidenses, porque si no, no tendrá credibilidad. Es decir, no podemos desconocer los grandes problemas que se padecen en países latinoamericanos, léase Bolivia, Ecuador, Nicaragua, a título de ejemplo, en donde la participación inteligente, sensata, prudente, cuidadosa de parte de la OEA pudiese resultar útil en la medida en que hubiera esa desvinculación. (México) Si se independizara, las condiciones hoy serían más propicias que antes para que la OEA tuviera un papel más activo. Con la redemocratización de muchos países de la región, La OEA puede reasumir un papel de mucho mayor importancia del que ha desempeñado en los últimos años, exorcizando esos fantasmas que hicieron que la organización quedase un poco en la sombra, en la penumbra, y dejase ese papel más destacado que podría volver a cumplir. (Brasil) ¿Cuál es ese papel? Los consultados a los que se le formuló la pregunta coinciden en su mayoría en que el tema en el que más se debería involucrar la OEA es el del fortalecimiento institucional. Ningún otro problema aparece mencionado con fuerza comparable. 31 Cuadro 10: Temas sobre los que la OEA podría actuar con firmeza y ambición (porcentajes) Estados Unidos* 53 0 0 0 0 7 7 0 10 10 9 0 México* 65 8 5 5 3 3 3 3 0 0 7 0 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 30 0 100 40 5 Total de consultas 30 45 Fortalecimiento institucional Pobreza Gobernabilidad Educación Desarrollo DDHH Seguridad regional Narcotráfico Mediación de conflictos Corrupción Otras Ns/ Nc Nota: El cuestionario argentino no incluía esta pregunta. * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. ** Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas muestran opiniones divididas, y por lo tanto no hay conjeturas razonables sobre como piensa el conjunto de las elites nacionales consideradas. 3. LOS PROBLEMAS DEL PRESENTE 3.1 El Consenso de Washington “Muchos observadores latinoamericanos piensan que el llamado ‘Consenso de Washington’ tenía aspectos positivos, pero en conjunto no era (ni es) un camino adecuado para enfrentar los problemas de la región. En su opinión, ¿este juicio crítico es correcto?” Los consultados brasileños más bien coinciden con este juicio crítico (la mayoría opina que “no sirvió”, “fue insuficiente” o “fue una receta única para realidades diferentes”), los mexicanos están divididos y los estadounidenses tienden a considerar que, por lo menos teóricamente, el 32 Consenso estaba bien diseñado (algunos contestan que “sirvió, ahora debe continuarse”, mientras otros dicen que no tuvo los frutos esperados porque “falló la implementación”). Cuadro 11: Juicios sobre el Consenso de Washington (porcentajes) Estados Unidos* 17 37 México* 13 33 Brasil* 18 6 17 16 6 27 0 0 29 27 39 3 9 3 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 30 0 100 45 0 100 33 10 Total de consultas 30 45 43 Sirvió, debe seguir Falló la implementación Era una receta única para distintas realidades Modelo insuficiente con aciertos y errores No sirvió Ns/Nc/Otras respuestas Nota: El cuestionario argentino no incluía esta pregunta * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. ** Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas muestran opiniones divididas, y por lo tanto no hay conjeturas razonables sobre como piensa el conjunto de las elites nacionales consideradas. Los que señalan fallas en su implementación se refieren tanto a los problemas concretos que surgieron al intentar privatizar empresas estatales (“la desestatización en el caso de México que fue marcada por la corrupción”), como a los resultados, que no beneficiaron al conjunto de la sociedad. Los que consideran que el modelo fue un fracaso piensan que la apertura económica sólo benefició a un pequeño grupo, mientras la mayoría de la población empeoró su situación y muchos se ven forzados a emigrar. Yo tengo una opinión crítica sobre el Consenso de Washington: es un rotundo fracaso. Hagamos un análisis, la privatización de las empresas del sector público en México y en América latina, ¿que es lo que generaron?: un consistente grupo de millonarios, de multimillonarios en dólares (...) La fiebre privatizadora y globalizadora que aconsejó el Consenso de Washington entre otros consejos nos han conducido a ser un país que exporta personas y no productos, un país que carece de política industrial en particular y política económica en general. (México) Alguno incluso dice que el crecimiento de la izquierda en la región en los últimos años se debe a las frustraciones que se generaron por aplicar las directivas del Consenso: 33 Yo creo que el Consenso de Washington no consideró los estratos sociales, es cierto que son reglas básicas para estabilizar la economía, reducir la inflación, para mejorar el rol del Estado, pero el llamado Consenso de Washington no consideró el costo social de estas directivas (...) Esto ocasionó un equilibrio económico - en la mayoría de los paísesa un costo político y social que hoy vemos con la tendencia de izquierda, porque hay una frustración muy grande en la región, ya sea por la falta de crecimiento, por el desempleo, por todos los problemas sociales que vemos en la región como consecuencia del Consenso de Washington. (Brasil) 3.2 El narcotráfico y la inmigración El tráfico de drogas en la región está aumentando, de acuerdo a la opinión de la mayoría de los entrevistados en México (93%), Argentina (74%) y Brasil (70%). Los menos pesimistas son los estadounidenses: aunque sus opiniones están divididas, son más (53%) los que piensan que el flujo se mantendrá estable que los que creen que aumentará (40%). Cuadro 12: Evolución del tráfico de drogas en la región (porcentajes) Estados Unidos* 40 53 3 3 México* 93 7 0 0 Brasil* 70 23 2 5 Argentina* 74 15 2 9 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 100 30 45 43 54 0 0 0 0 Total de consultas 30 45 43 54 Aumenta Estable Disminuye Ns/Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. La gran mayoría de los consultados (el 96% en EEUU, el 90% en México y el 63% en Brasil) cree que la inmigración ilegal desde la región hacia los EEUU aumentará en los próximos años (Cuadro 13). 34 En primer lugar, tanto en EEUU como en México, los consultados enfatizan los “pull factors”, la atracción que ejerce la demanda de EEUU y las posibilidades de acceder a niveles de vida no accesibles en el país propio. Un consultado resume esa perspectiva de la siguiente forma: Al final del día podemos esperar que el flujo continúe mientras los latinoamericanos sientan que hay mucha más oportunidad, muchas más oportunidades, en Estados Unidos que en los países en los que viven. (Estados Unidos) Ni los estadounidenses ni los mexicanos consideran que la implementación de medidas más estrictas para frenar la inmigración ilegal vaya a tener el efecto buscado, porque los “push factors” (la falta de oportunidades que empuja a los emigrantes hacia afuera de sus países de origen) tienen más fuerza que los intentos de disuasión, y difícilmente se modifique la situación en el corto plazo. Yo veo que son procesos históricos y sociales que tienen una raíz tan profunda y tan sólida que las políticas preventivas apenas son aspirinas para el tema. Realmente no hay un dinamismo en los mercados del trabajo en Centroamérica y en México que sean una respuesta satisfactoria para resolver el exceso de mano de obra; no la hay. (Estados Unidos) Cuadro 13: Evolución de la inmigración ilegal desde América Latina hacia EEUU (porcentajes) Estados Unidos* México* Brasil* Aumentará Estable Disminuirá Otras Ns/Nc 96 0 0 0 4 90 0 5 3 3 63 23 7 0 7 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 28 39 43 2 6 0 Total de consultas 30 45 43 Nota: El cuestionario argentino no incluía esta pregunta * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. 35 4. HACIA EL FUTURO 4.1 Liderazgos regionales Hacia el futuro el liderazgo de América Latina sería de Brasil. Esta opinión es robusta (alrededor de dos de cada tres entrevistados) y compartida en los cuatro países. En segundo lugar, y algo inesperadamente, se menciona a Chile, un país mucho más pequeño y en una posición geográfica “excéntrica” en la región. Sólo los brasileños no colocan a Chile en segundo lugar, sino a Venezuela. También son los menos convencidos de su propio liderazgo. La razón fundamental del liderazgo futuro de Brasil es porque trabaja en ese sentido (un ejemplo citado es su promoción del Grupo de los 20 y su participación activa en la OMC). Brasil es el único “global player” que hay en América. (México) Brasil siempre se ha sentido como una potencia regional, un líder regional. Exporta a Europa y a Africa y cultiva a los países de habla portuguesa (…) Al mismo tiempo tiene dos barreras en su búsqueda de poder. Uno es que habla portugués y no español (…). Al mismo tiempo, siempre ha habido una cuestión de Estados Unidos y cómo nos manejamos con Brasil. (Estados Unidos) Chile es el país que ocupa el segundo lugar como líder regional, pero en ningún país supera el 21% que alcanza en México. Por más que tengas una maravillosa democracia Chile sigue siendo una país que tiene un mercado de 10 millones de habitantes; entonces yo sigo pensando que el liderazgo natural lo tiene Brasil y hay socios privilegiados - la Argentina forma parte de estos- . (Argentina) Luego siguen Venezuela y México, el primero buscando aumentar su influencia regional y el segundo más bien perdiendo posiciones. Me parece que hay otro intento en Venezuela, ideológico, de plantear un debate sobre un tipo de sociedad y al mismo tiempo con un respaldo económico de las reservas petroleras más grandes de la región. (Argentina) Algunos mexicanos señalan que su propio país disputa el liderazgo de la región con Brasil, pero México ha optado por acercarse a EEUU y así Brasil logró imponerse hacia el sur. 36 México yo creo que ha descuidado su relación con América Latina. Las economías más grandes han sido Brasil y México (…). La percepción, en general, de México es que Brasil le está ganando la partida en términos de liderazgo. Mucho se ha utilizado el tema de la crisis en Brasil, pero igualmente en términos de política de integración económica con América Latina, creo que está por encima. México ha descuidado mucho su relación con América latina. (México) Cuadro 14: Países latinoamericanos que están asumiendo liderazgo en la región (porcentajes) Estados Unidos* 67 13 7 7 0 7 0 0 México* 63 21 2 9 2 0 2 0 Brasil* 66 13 16 3 0 0 3 0 Argentina* 73 11 9 2 0 0 2 2 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 100 100 100 30 43 32 45 0 2 11 9 Total de consultas 30 45 43 54 Brasil Chile Venezuela México Bolivia Colombia Ninguno Ns/Nc * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. 4.2 Perspectivas de crecimiento económico Según la mayoría de los entrevistados, el país de la región con mejores perspectivas de crecimiento económico es Chile. Entre las elites argentinas las opiniones están divididas: de cada cinco entrevistados, uno sostiene que las mejores perspectivas las tiene su propio país, otro considera que está mejor posicionado Brasil y un tercero se inclina por Chile. A propósito de Chile, los comentarios apuntan a la consistencia de su trayectoria como indicador confiable de su evolución futura, aunque también describen varios problemas que aún no ha logrado superar, tanto en el plano social (otra vez el problema de la desigualdad) como en el económico (la falta de diversidad de sus exportaciones): 37 Evidentemente Chile; creo que ha logrado colocarse en una categoría aparte, no porque esté exento de problemas, los tiene y muy grandes: si uno va a Santiago sigue viendo a una sociedad fragmentada, pero sin embargo, uno ve que Chile ya logró definir y sustentar una política de estado, en donde más allá de quien esté en el poder, hay coordenadas que no se van a mover y responden a intereses no sólo de las elites sino de una mayoría de los chilenos. Eso creo que es el único [país] que lo ha logrado, Brasil lo ha logrado en términos de la política exterior. Chile ha llevado la definición de políticas de estado a otro lugar. (México) Claramente Chile, pero Chile tiene que salir de las materias primas y commodities y convertirse más en manufacturero y en una sociedad de la información (…) (Estados Unidos) (Chile) es un país que presenta mayor grado de estabilidad en el plano económico, no atraviesa crisis. Creo que tiene un potencial de crecimiento mayor. (Brasil) Los argentinos, aunque divididos respecto de cuál es el país que crecerá más en la región, tienden a coincidir en que Argentina será uno de los tres países de mayor crecimiento. Su optimismo se basa en que el país cuenta con muchos recursos y que el contexto internacional los favorecerá: Argentina va a seguir creciendo porque tiene las condiciones para seguir creciendo; tiene el auge del sector agropecuario que va a seguir creciendo (…). El desafío de Argentina es hacer más justo ese desarrollo. (…) Kirchner ha logrado la negociación posible con el norte, mantiene este nivel de desarrollo en esta franja, pero “déjenme sacar recursos de ahí para desarrollar esto otro”. Esta es la negociación posible hoy, y es la negociación que estamos intentando. Si se logra esto, Argentina se va a seguir desarrollando. (Argentina) 38 Cuadro 15: Países de la región con mejores perspectivas de crecimiento económico1 (porcentajes) Chile México Argentina Brasil Venezuela Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) Total de consultas Estados Unidos* 67 47 33 53 7 México* 77 39 30 59 7 Brasil* 77 17 73 70 29 Argentina* 59 17 56 71 15 30 44 38 41 0 1 5 13 30 45 43 54 1 Cada uno de los datos del Cuadro expresa el porcentaje de consultados de esa columna que dice que el país de esa fila es uno de los tres países latinoamericanos con mejores perspectivas de crecimiento económico. Sólo se indican los países con 10% o más de menciones totales. Los porcentajes no suman 100 (recogen las tres primeras respuestas de cada entrevistado). * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. 4.3 Las perspectivas de la integración hemisférica Para la mayoría de los consultados en México y en EEUU la integración hemisférica (desde Alaska a Tierra del Fuego) podría ser ventajosa para todos los países. Estas consecuencias favorables no están garantizadas, y sería necesario trabajar en ese sentido. En los dos países esta opinión, sumada al juicio positivo sin matices (la integración es positiva para todos), es ampliamente mayoritaria. En Argentina y Brasil estos resultados son similares a los mexicanos, pero los juicios de los distintos subgrupos de las elites no son convergentes. En general, en los cuatro países las elites tienden a pensar que la integración hemisférica es, en ciertas condiciones al menos, deseable. EEUU es el país más optimista al respecto: el 23% piensa que la integración sería ventajosa para todos y otro 70% cree que podría ser ventajosa, dependiendo de sus características específicas. Entre los argentinos y brasileños, alrededor de uno cada cuatro entrevistados estima que la integración sólo beneficiaría a algunos países, y uno de cada cinco que no sería ventajosa para ninguno. 39 Cuadro 16: Ventajas de la integración hemisférica (porcentajes) Estados Unidos* México* Sería ventajosa para todos los países Podría ser ventajosa para todos los países, pero no es seguro que lo sea Podría ser ventajosa para algunos países No sería ventajosa Ns/Nc Brasil* Argentina* 23 20 19 32 70 49 40 30 7 27 28 24 0 0 0 4 12 2 15 0 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 30 100 45 100 43 100 54 0 0 0 0 Total de consultas 30 45 43 54 * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. Al margen de sus eventuales ventajas, ¿cuán probable es que se concrete esa integración hemisférica en los próximos años? Los consultados en EEUU, los más optimistas sobre sus resultados, son también los más optimistas respecto a su concreción. Casi tres de cada cuatro consideran que es probable o seguro que se logre en los próximos 4 años, y el 80% piensa que habrá integración de aquí a 10 años. Entre los argentinos y los brasileños también la mayoría espera que el continente conseguirá la integración en el próximo decenio, pero en Brasil las opiniones de los diferentes grupos no son convergentes, por lo cual no se puede determinar si efectivamente es ése el juicio mayoritario. Los mexicanos son los más divididos al respecto: la mitad piensa que la integración se logrará y la otra mitad que no. 40 Cuadro 17: Probabilidad de logro de la integración regional (porcentajes) Estados Unidos* México* Brasil ** Argentina* Sí, en 0 a 4 años Sí, en 5 a 10 años No se logrará No opina 73 7 20 0 18 31 51 0 37 26 33 4 47 22 27 4 Total Total de preguntas formuladas (N) Total de preguntas no formuladas (N) 100 30 100 45 100 43 100 49 0 0 0 5 Total de consultas 30 45 43 54 * Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas sugieren (según se discute en el texto) que estas preguntas probablemente representan la opinión de la mayoría de las elites consideradas. **Las opiniones de los distintos subgrupos de las elites entrevistadas muestran opiniones divididas, y por lo tanto no hay conjeturas razonables sobre cómo piensa el conjunto de las elites nacionales consideradas. 41 MÉTODOS Y PROCEDIMIENTOS El objetivo de las consultas - Explorar la visión de algunas de las elites nacionales más influyentes de la región (las de los tres países mayores, Brasil, México y Argentina), y de las elites “latinoamericanistas” de los EEUU, sobre la situación actual de América Latina y sobre sus perspectivas futuras. Los consultados - Fueron entrevistadas ciento setenta y seis personalidades en los cuatro países. El Anexo Metodológico del final de este informe incluye la lista de consultados en cada país, la Guía usada para entrevistarlos, y algunos detalles de las entrevistas. Aunque las Guías tenían mucho en común, varias preguntas se formularon sólo en algunos países (y en ocasiones alguna pregunta que efectivamente estaba en la Guía no fue formulada). Cuando alguno o algunos de los países no son mencionados en los resultados resumidos más abajo es porque se carece de la información correspondiente. Las “muestras” - En los tres países latinos (México, Brasil, Argentina) los consultados pertenecen, en su gran mayoría, a las elites políticas (de todos los sectores y orientaciones) y empresarias. En los EEUU, en cambio, sería muy difícil entrevistar una muestra de amplitud similar de las principales elites nacionales (por el volumen de recursos que se necesitaría) y prácticamente irrelevante (vistos los objetivos del estudio). Por esta razón los consultados estadounidenses son académicos, asesores y consultores, todos ellos conocedores de la región e influyentes en el proceso de diseño de las políticas de los EEUU hacia América Latina. Aunque en aras de la brevedad en lo que sigue se hablará de “los consultados” o “las elites”, es necesario tener siempre presente que los consultados en los EEUU son parte de una sub-elite altamente especializada, de características muy diferentes a las de los consultados en los tres países latinos. Las cuatro muestras son intencionales; los consultados forman parte de las cúpulas superiores de las elites consideradas. Por lo tanto, además de ser muestras relativamente pequeñas, no son “estadísticamente representativas” de sus respectivos universos. Los resultados: aspectos cualitativos - En este resumen de las principales conclusiones se describen y analizan los juicios de los consultados. En particular, se examinan algunos de los contenidos y formas de los juicios más frecuentes (sobre los temas más importantes). Los resultados: aspectos cuantitativos – Los resultados obtenidos carecen de “representatividad estadística” (por las características de las muestras), y por lo tanto el análisis no puede emplear técnicas cuantitativas comunes en el análisis de encuestas. Esto no impide que algunos de los principales resultados sean resumidos en cifras. Algunos, pero no todos. Decir que la mayoría de los consultados de esta muestra piensa X es enteramente irrelevante si esa mayoría bien puede ser minoría en otra muestra y en el universo en cuestión (el conjunto de las elites de donde proviene esa muestra), que a estos efectos es los que realmente importa. Sin embargo, si, por ejemplo, la mayoría de los consultados de una de estas muestras piensa X; si otros elementos de juicio, independientes de las consultas, apuntan en la misma dirección; y si además también piensan X, separada y simultáneamente, la mayoría de: 42 • • • • los consultados que son partidarios del gobierno; los consultados que son partidarios de la oposición; los políticos entrevistados, y los empresarios consultados, entonces es bastante más probable que la mayoría del conjunto de las elites consideradas también piense X, por razones análogas a las que hacen que los resultados de un pequeño número de grupos focales pueden identificar grandes tendencias de opinión. La probabilidad de que esta convergencia de opiniones ocurra en esta muestra particular pero no en el universo no es nula (ni siquiera desdeñable), pero es relativamente modesta. En el texto que sigue sólo se afirma que “la mayoría de las elites” piensa de tal o cual modo cuando efectivamente se cumplen estas condiciones. 43 ANEXO METODOLÓGICO El presente informe es el resultado del análisis de ciento setenta y seis entrevistas realizadas (en distintas etapas) entre los meses de agosto 2005 - marzo de 2006 en México, Estados Unidos, Argentina y Brasil. Las entrevistas exploraron los juicios de los consultados sobre la coyuntura regional y sus perspectivas de futuro. Las personas entrevistadas son, todas ellas, figuras de primer plano en sus respectivos ámbitos de actividad (políticos, empresarios, religiosos, comunicadores, académicos, consultores). También se buscó que el conjunto de entrevistados tuviera ciertos equilibrios en materia de preferencias políticas. Las entrevistas fueron realizadas en México por Diego Achard y Gerado Noto, en Estados Unidos por Arantxa Guillén Montero, en Brasil por Gerardo Noto, Juan Enrique Vega y Plínio Pereira, y en Argentina por Diego Achard, Fernando Calderón, Gonzalo Kmaid y Gerardo Noto. Cada entrevista estaba dividida en dos secciones. La primera de ellas era de carácter abierto, sin alternativas prefijadas de respuesta, de modo tal que cada consultado enfocara los temas desde su propio punto de vista. El énfasis aquí era cualitativo, sin perjuicio de la posibilidad de clasificar y contar (“cuantificar”) los juicios de los consultados. La segunda (y más pequeña) sección de cada entrevista, en cambio, utilizó preguntas “cerradas” (con alternativas de respuesta predefinidas), del tipo de las empleadas habitualmente en los cuestionarios Delphi, con objetivos análogos: establecer, con alguna precisión, hacia dónde creen los consultados que evolucionarán algunos procesos y situaciones claves. La técnica de registro fue mixta; en su mayor parte las entrevistas se grabaron (previa solicitud de autorización al entrevistado), y en algún caso excepcional el entrevistador tomó notas durante la entrevista y las amplió luego en un “relato de la entrevista”, grabado inmediatamente después de realizada. Todos los registros (grabaciones de entrevistas y “relatos”) fueron luego transcriptos y analizados. 44 GUÍA DE LA ENTREVISTA A continuación se enumeran las preguntas comunes a todas las guías, y se intercalan entre ellas (sin numerar), en sus correspondientes lugares, las preguntas efectuadas sólo en algunos países. Preguntas abiertas (sin alternativas preestablecidas de respuesta) 1. A su juicio, ¿cuáles son los principales problemas de América Latina? ¿La política de los EEUU hacia América Latina toma en cuenta apropiadamente esos problemas, o debería cambiar en algunos aspectos? [ si debería cambiar ] ¿en cuáles aspectos? ¿por qué? (Pregunta específica para Estados Unidos) 2. ¿Hay problemas generales que afectan el conjunto de las relaciones entre América Latina y los EEUU, o los problemas son más bien bilaterales, específicos a los distintos países? [ si existen problemas que afectan al conjunto de la región ] ¿y de esos problemas generales, cuáles serían los más importantes? La política de Brasil hacia los Estados Unidos y hacia América Latina, en su opinión ¿toma en cuenta adecuadamente todos esos problemas o debería cambiar en algunos aspectos? (Pregunta específica para Brasil) [si debería cambiar] ¿en cuáles aspectos? ¿por qué? La política de México hacia los EEUU y hacia América Latina, en su opinión, ¿toma en cuenta adecuadamente todos esos problemas, o debería cambiar en algunos aspectos? [ si debería cambiar ] ¿en cuáles aspectos? ¿por qué? (Pregunta específica para México) 3. La OEA podría involucrarse más activamente en los problemas de la democracia en sus estados miembros, pero muchos países latinoamericanos temen que esto podría facilitar una intervención indebida en los asuntos internos de estados soberanos. A su juicio, ¿qué debería tratar de hacer la OEA? ¿Cómo valora en esta nueva etapa el rol de la OEA? (Pregunta específica para Argentina) 4. Entre los temas importantes para la región algunos son relativamente consensuales, y otros son polémicos y potencialmente conflictivos. ¿Cuáles diría Ud. que son los temas más importantes, aproximadamente consensuales, sobre los que la OEA podría actuar con firmeza y ambición? 45 5. Y a la inversa: ¿cuáles serían los temas más importantes sobre los que la OEA no podría actuar con firmeza y ambición, porque son polémicos y potencialmente conflictivos? 6. Luego de varios años de experiencia en materia de reformas, muchos observadores latinoamericanos piensan que el llamado “Consenso de Washington”, en sus términos originales, tenía aspectos positivos, pero en conjunto no era (ni es) un camino adecuado para enfrentar los problemas de la región. En su opinión, ¿este juicio crítico es correcto? [ en cualquiera de los dos casos, correcto o no ] ¿Por qué? 7. En América Latina, ¿cuáles son las democracias que hoy están claramente consolidadas? ¿Por qué? 8. ¿En qué países latinoamericanos la democracia es aún muy frágil? ¿Por qué? ¿Cuáles son los desafíos más importantes a la consolidación democrática en Brasil? ¿Por qué? (Pregunta específica para Brasil) 9. En varios países de la región hay fuertes tensiones étnico – culturales que ya están politizadas o se están politizando. Estos conflictos, en su opinión, ¿son una amenaza, o son oportunidades para consolidar la democracia? ¿Por qué? [ si no menciona explícitamente a México ] ¿qué se podría decir de México, y de Chiapas en particular? (Pregunta específica para México y Argentina) 10. ¿Cómo cree Ud. que evolucionarán los problemas de la inmigración ilegal desde América Latina (y desde México en particular) hacia los EEUU? 11. En América Central, en particular, ¿cuáles son, actualmente, los países que enfrentan más problemas? ¿Por qué? 12. ¿Y en América del Sur? 13. Bolivia ha experimentado una larga y compleja sucesión de crisis. ¿Cuáles serían sus causas, y qué enseñanzas podrían derivarse para el conjunto de la región? 14. ¿Cómo ve las perspectivas políticas y económicas de Argentina, luego de superada la fase más aguda de la crisis del default? 15. En América Latina, en su opinión, ¿hay países que están asumiendo liderazgos? [ si los hay ] ¿Cuáles serían, por qué? [ si no menciona a Brasil ] ¿y Brasil? ¿No ha intentado asumir un liderazgo regional, o lo ha intentado pero no lo ha logrado? 46 ¿Cómo juzga Ud., hoy, al MERCOSUR? ¿Cómo piensa que evolucionará en el futuro próximo? (Pregunta específica para Brasil) En la reciente Cumbre de Estados Americanos los países del MERCOSUR y Venezuela declararon que actualmente no están dadas las condiciones para avanzar en las negociaciones hacia el ALCA. ¿Ud. comparte ese juicio? (Pregunta específica para Brasil) 16. En los próximos cinco a diez años, ¿cuáles son los países de la región con mejores perspectivas de crecimiento económico? ¿Por qué? Preguntas con alternativas de respuesta preestablecidas: 17. Pensando en la problemática de la inmigración ilegal en la región, ¿Los problemas de la inmigración ilegal desde América Latina hacia los EEUU están aumentando, disminuyendo, o se mantendrán estables? (Pregunta cerrada sólo en Brasil) a. aumentarán b. se mantendrán estables c. disminuirán d. no opina 18. Pensando en la región en general, ¿los problemas vinculados al tráfico de drogas estarían aumentando, disminuyendo, o se mantendrían estables? a. b. c. aumentando estables disminuyendo d. no opina 19. Pensando en la integración hemisférica (desde Canadá hasta Argentina y Chile), no necesariamente a corto plazo, sino en un horizonte de diez años, ¿cuál de las siguientes ideas sobre sus eventuales ventajas está más cerca de su pensamiento? a. b. c. d. sería ventajosa para todos los países de la región podría ser ventajosa para todos los países de la región, pero no es seguro que lo sea podría ser ventajosa solamente para alguno o algunos de los países de la región en general, no sería ventajosa para los países de la región e. no opina 47 20. Independientemente de las virtudes y defectos de la integración hemisférica, ¿Ud. piensa que a corto plazo (cuatro años o menos) llegará a existir alguna clase de integración hemisférica? a. b. c. d. casi seguramente sí probablemente sí probablemente no casi seguramente no e. no opina 21. [ si la respuesta en 19. es (c.), (d.) o (e.), negativa o dudosa ] ¿Y en un plazo de cinco a diez años, llegará a existir? a. b. c. d. casi seguramente sí probablemente sí probablemente no casi seguramente no e. no corresponde [ en 20. es (a.) o (b.) ] f. no opina 22. En un horizonte de cinco años, ¿cuál es la mejor conjetura que puede hacerse sobre la evolución de las relaciones entre los EEUU y América Latina? a. b. c. d. e. casi seguramente mejorarán probablemente mejorarán seguirán como hasta ahora probablemente se deteriorarán casi seguramente se deteriorarán f. no opina Perfil del entrevistado (llenado por el entrevistador) Esta información fue registrada por los entrevistadores (consultando, cuando era necesario, con los expertos apropiados). Nombre del entrevistado:______________________________ Edad aproximada del entrevistado: ____________________ Lugar y fecha de la entrevista: ____________________________________ Ocupación principal del entrevistado:____________________________________ a. b. c. d. político / legislador político / funcionario académico / consultor otros (especificar) 48 Organización a la que pertenece: __________ Si la organización tiene inclinación o afiliación partidaria, especificarla: ________ Preferencia partidaria del entrevistado: (México) a. b. c. d. e. PAN (o aliado) PRI (o aliado) PRD (o aliado) otros independiente f. preferencia partidaria desconocida (Estados Unidos) a. b. c. republicano independiente demócrata d. Preferencia desconocida (Argentina) Preferencia político-partidaria del entrevistado. A estos efectos “peronista”, “peronismo”, son sinónimos de PJ; las “alianzas” se refieren a las elecciones legislativas de 2005: a. No peronista, aliado del Presidente b. c. d. Peronista Kirchnerista Peronista, no clasificable claramente frente al presidente Peronista no Kirchnerista e. f. No peronista, no clasificable claramente frente al presidente No peronista, no aliado del Presidente g. independiente h. preferencia partidaria desconocida (Brasil) Preferencia partidaria del entrevistado: a. b. c. d. e. f. g. Partido de los Trabajadores (PT) Partido Liberal Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) Partido Demócrata Trabalhista (PDT) Otro partido Independiente h. Preferencia desconocida 49 Inclinación político - ideológica del entrevistado (sólo si se trata de una “reputación generalmente aceptada”): a. b. c. d. e. izquierda centro - izquierda centro / “moderado” centro - derecha derecha f. inclinación desconocida Otras características del consultado que a juicio del entrevistador sean importantes para contextualizar sus respuestas. ______________________________________________________________________ 50 LISTA DE ENTREVISTADOS DESAGREGADA POR PAÍSES Argentina Acaputo, Carlos Alfonsín, Raúl Amadeo, Eduardo Ambrosetti, Ernesto Betnaza, Luis Bullrich, Patricia Camaño, Graciela Campos, Jaime Carrió, Lilita Cavallo, Domingo Ceballos, Jorge De Mendiguren, Ignacio Depetri, Edgardo Di Tella, Torcuato Escribano, Claudio Fontevecchia, Jorge Forn, Juan Manuel Fraga, Rosendo Giardinelli, Mempo González Estevez, Luis Heller, Carlos Iglesias, José Jaim, Guillermo Kirschbaum, Ricardo López Murphy, Ricardo Macri, Mauricio Mora y Araujo, Manuel Morales Sola, Joaquín Navarro, Fernando Nun, José Onaindia, José Miguel Ovsejevich, Luis Persico, Emilio Pittaluga, Gustavo Romer, Graciela Saguier, Julio Savanti, Víctor Vicente, Oscar Wainfeld, Mario 51 Zuleta, Enrique 52 Brasil 1 Álvarez, Cezar Amaral, Sergio Ant, Clara Arbix, Glauco Barboza, Rubern Barreto, Tadeu Bueno, Marcos Cella dal Chiavon, Eva Maria Coelho Fernandes, José Augusto Coelho, Luciana Coimbra, Marcos dos Reis, Joao Paulo Dupas, Gilberto Felicio, Jose Eduardo Fernandes, Ruben Cesar Fleury, Sonia Garcia, Marco Aurelio Gasparini, Helena Mara Goldman, Alberto Gregori, José Gushiken, Luiz Kruvinel, Teresa Kucinsky, Bernardo Lafer, Celso Lessa, Francisco Lins Da Silva, Carlos Eduardo Maninha, María José Martins, Franklyn Mirra de Paula e Sila, Evando Mitre, Antonio Moojen de Abreu e Silva, Carlos Enrique Oliva, Oswaldo Paes de Sousa, Romulo Pereira, Merval Pimentel, Jose Pio, Carlos Pla Trevas, Vicente Ranulfo Melo, Carlos Salerno, Mario 1 De estas cuarenta y cuatro entrevistas efectivamente realizadas sólo se analizaron cuarenta y tres, como consta en los cuadros del informe ya que en un caso el registro del audio tenía problemas insolubles. 53 Sato, Eiiti Vidal, Francisco Vigevani, Tulio Viola, Eduardo Zica, Luciano 54 Estados Unidos Anglin, Julie Arcos, Crescencio Bailey, John J. Barron, María Elena Botello, Luis Carothers, Thomas Cox, Pamela Dean, Brian Clay Griner, Steven H. Jacobson, Roberta S. Johnson, Stephen C. Johnston, T. David Kessler, Judd L. Lemargie, Marissa Lynch, Sarah Ann McClintock, Cynthia Mora, Frank O. Moss, Lorianne Woodrow Mudge, Katy O'Keefe, Thomas Andrew Palmieri, Francisco Patroni, Lawrence J. Pechard, Armand Phelps, Priscilla M. Roett, Riordan Sabatini, Christopher Shifter, Michael Tess, Caroline A. Tulchin, Joseph Vickers, George Walsh, John Zemko, John A. 55 México2 Aristegui, Carmen Blanco, Herminiko Borrego, Genaro Camacho, César Campa, Roberto Carrasco Altamirano, Diodoro Casan, Angel Casar, María Amparo Castañeda, Jorge Chavez Presa, Jorge Chico Pardo, Fernando Clariond Reyes, Eugenio Cordera Campos, Rolando Curzio, Leonardo Díaz, Socorro Durán, Víctor Manuel Fuentes, Rossana Gómez, Leopoldo Guerra Castellanos, Gabriel Gutiérrez Fernández, Gerónimo Henkel, Eduardo Heredia, Carlos Iruegas, Gustavo Jusidman, Clara Labastida, Julio López Buitron, Jaime Domingo Lozano, Javier Margain, Fernando Mazal, Mateo Muñoz Ledo, Porfirio Navarrete, Jorge Eduardo Núñez Esteva, Alberto Núñez Jimenez, Arturo Pando, Miguel Pérez Correa, Fernando Pérez Gay, José María Peschard, Jacqueline 2 De estas cuarenta y siete entrevistas efectivamente realizadas sólo se analizaron cuarenta y cinco, como consta en los cuadros del informe. En un caso el registro del audio tenía problemas insolubles; en el otro, por razones circunstanciales dos entrevistados contestaron conjuntamente la entrevista, y no fue posible evitarlo; el resultado fue analizado como una única entrevista. 56 Pozas Horcasitas, Ricardo Rebolledo Gout, Juan Reyes Heroles, Jesús Sepúlveda Amor, Bernardo Tellez Kuenzler, Luis Trevino Cantú, Javier Ugalde, Luis Carlos Valero, Ricardo Woldenberg, José Zabludovsky, Jaime 57