GRUPO DE POLÍTICA MONETARIA Comunicado Martes 13 de Marzo de 2007 _____________________________________________________________ ANGEL CABRERA, RODRIGO CERDA, TOMAS FLORES, LUIS FELIPE LAGOS, Y FRANCO PARISI. El grupo de Política Monetaria recomienda, por unanimidad, que el Banco Central mantenga la tasa de política en 5,00%. Nuestra recomendación respecto de los movimientos futuros de la tasa estarán determinados por el sesgo que presenten los datos relevantes, tales como: el crecimiento de la economía, los precios de los combustibles, los costos laborales, la ejecución del gasto fiscal y el comportamiento de los agregados financieros. Durante los últimos meses los indicadores de inflación se han ubicado en la parte baja del rango meta, en línea con lo estipulado por el Banco Central en su último comunicado. En efecto, el IPCX1 –indicador que excluye fundamentalmente tarifas reguladas, combustibles y perecibles- se ha desacelerado llegando al 2,6% en 12 meses, mientras que el IPCX crece a una tasa de 2,7%, en ese período, mostrando una aceleración en el último mes. Sin embargo, el IPC de febrero de -0,2% está sustancialmente influido por la variación del grupo Transporte que tuvo una incidencia de –0,463%, lo que implica que si los precios de dicho grupo no hubiesen variado, el IPC de febrero habría sido cercano a 0,3%, en lugar del –0,2% reportado. Esta caída en dicho grupo se produce por la baja en el precio promedio del pasaje de microbús y metro, -6,5% y –2,9% con respecto a enero. Dichas reducciones se explican por la puesta en marcha de Transantiago a partir del 10 de febrero, lo que implica el pago consolidado a lo largo de sucesivos transbordos. Por otra parte, si bien las expectativas de inflación reportadas en la encuesta del Banco Central aún se encuentran ancladas al 3%, algunos indicadores de diferenciales de tasas continúan apuntando levemente por debajo de ese nivel. La actividad económica ha observado una moderada aceleración, registrándose un IMACEC de 4,6% para enero, levemente superior a las expectativas reportadas en la encuesta del Banco Central, consecuencia del fortalecimiento de las exportaciones. No obstante, con respecto a las presiones inflacionarias asociadas a la actividad económica, es preciso recalcar que la incertidumbre respecto al producto potencial, no permite determinar de manera fehaciente la magnitud de la brecha de producto y sus efectos sobre la inflación. 1 En el mercado laboral, se ha apreciado un moderado nivel de generación de empleos, con un aumento de 1,7% en el número de ocupados para el trimestre noviembre-enero 2006, con respecto al mismo trimestre del año anterior, lo que debería traducirse en una suave desaceleración del ritmo de crecimiento del consumo durante los próximos meses. Efectivamente, el consumo privado mantiene un ritmo de crecimiento estable, de 7,6% de variación anual, en comparación al observado durante los 6 meses previos de 7,5%. En este mismo sentido, los indicadores de inversión han presentado un debilitamiento que se manifiesta en que las importaciones en volumen físico de bienes de capital registraron una fuerte contracción -11,9% en enero y en la venta de viviendas nuevas, se observó una caída de 4,6% a diciembre 2006. Los precios de los combustibles, que han sido parte de la explicación de la disminución de la inflación, han detenido su corrección a la baja observada en los últimos seis meses, y difícilmente continuarán con caídas tan marcadas como las observadas en los últimos meses. En el futuro no pueden descartarse nuevas alzas en el precio del petróleo que generarían alzas en la inflación y posibles efectos de segunda vuelta en la inflación subyacente. Con respecto al gasto fiscal, aún no se aclara la efectividad de su aplicación, el que proyecta un aumento significativo durante este año, que podría traducirse en presiones sobre las brechas de capacidad y la tasa de inflación. El escenario internacional ha continuado siendo favorable para la economía chilena, aún cuando se ha acentuado la volatilidad del precio de los activos y de los commodities. La economía mundial entraría en una fase de menor crecimiento, pero se haría menos probable una recesión en Estados Unidos. A la luz de estos antecedentes, el Grupo de Política Monetaria recomienda seguir con una política de cautela en el manejo de la tasa de política monetaria y mantener el nivel de la tasa de instancia en 5,00%, hasta que se diluciden los posibles efectos inflacionarios de los diversos factores de riesgo mencionados. Se hace presente, en todo caso, que las futuras recomendaciones en torno a la tasa deberán ser evaluadas en su mérito a la luz de la evolución de los datos internos y externos. En particular, estimamos de gran importancia continuar monitoreando el comportamiento de los precios de los combustibles y sus potenciales efectos de segunda vuelta, así como la ejecución del presupuesto fiscal, las condiciones financieras y el crecimiento de los costos laborales. 2