ÍNDICE PRIMER PREMIO Aves de paso José Manuel Fernández García . . . . 1 ACCÉSIT AL ESTUDIANTE UNED El sueño de las manzanas Ana María Martín . . . . . . . . . . . . . . 29 SELECCIONADOS PARA SU PUBLICACIÓN Narciso Alberto Caturla Viladot . . . . . . . . . . 47 Afición por los terrarios Janette Becerra Pulido . . . . . . . . . . . 65 Proyecto Matusalén Albert Franquesa Valcárcel . . . . . . . 87 Atisbos de personalidad Pablo Reali Cestaro . . . . . . . . . . . . . 115 Esbozo de una teoría entrópica Santiago Trancón Pérez. . . . . . . . . . 137 VII 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági Torrelavega, 12 de febrero de 1940 Q uerida Águeda: No me hagas reproches. Si tardo en responder a tus cartas es debido, en primer lugar, a que no llegan con la asiduidad que las envías; el muchacho que sube el correo viene de higos a brevas y eso cuando la lluvia no ha dejado el camino intransitable. Hoy, por ejemplo, te escribo en medio de una fuerte tormenta que amenaza con llevarse hasta los tejados de los establos. Por otra parte, este decaimiento que se me ha incrustado en el cerebro hace que no 31 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági ANA MARÍA MARTÍN sea capaz a veces ni de inventar algo para contarte. Tienes que saber que he pensado mucho en lo nuestro y he llegado a la conclusión de que no existe futuro para nosotros. Ésta no es la vida que deseo darle a una mujer. Por mi parte aguanto bien, ya sabes que, por muchos defectos que se me puedan achacar, no me tumban las incomodidades. Pero sacarte de tu casa, en la que vives amparada en el cariño de los tuyos, en la que disfrutas de un buen colchón, de calor en invierno y de comida todos los días, para traerte a esta rutina de privaciones, sería una canallada que jamás me perdonaría a mí mismo. Y yo no puedo regresar al pueblo. Aquí, en Torrelavega, no soy más que un jornalero que hace chapuzas pero, a fin de cuentas, nadie me conoce. Sin embargo, no soporto que allí, que de sobra saben 32 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági EL SUEÑO DE LAS MANZANAS cómo soy, me impidan ejercer mi profesión de maestro cuando mi único pecado ha sido trasmitir a los críos la inquietud por la sabiduría y nunca he causado un perjuicio a nadie. Pero no hay esperanza, las rencillas de la guerra durarán eternamente, bien lo sabes. Dentro del dolor que me causa hablarte con esta franqueza encuentro consuelo pensando que, sin lugar a dudas, el sabio destino tiene preparado para ti algo más digno que una vida de incertidumbres a mi lado. Es muy importante para mí que sepas que el recuerdo de la Nochebuena en tu casa acompaña mi soledad en estas tierras embarradas. El cariño de tus padres y, sobre todo, la generosidad de Julia, su delicadeza conmigo como si yo hubiera sido otro hermano más, me hizo sentirme durante unos días en ese hogar ambicionado que no he tenido 33 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági ANA MARÍA MARTÍN nunca. Su pasión por los libros, su esfuerzo por aprender a leer y escribir, es más que admirable. Y gracias a ella, en esta situación, tú y yo podemos estar comunicados a través de alguien de confianza. La imagino leyéndote mi carta y es como si también se la hubiese escrito a ella. No me vendrían mal unas palabras suyas para sobreponerme a una incertidumbre en la que estoy atrapado. Podría suceder que fuera de esta España, tan maltratada por los sicarios de la desvergüenza, existiera un horizonte. En Santander he entrado en contacto con otros camaradas represaliados. Estamos haciendo planes para cruzar la frontera, salir a Francia y alcanzar París. No sé por qué no termino de decidirme, es como si tuviera miedo a perder algo muy valioso. La dulzura de esa Nochebuena en tu casa. Como 34 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági EL SUEÑO DE LAS MANZANAS si uno, al cruzar la frontera, dejara junto a la patria abandonada el fogonazo de una íntima esperanza. Ya ves que estoy débil de ánimo y hecho un sentimental. Trasmite, por favor, mi cariño a los tuyos. Y para ti el más profundo agradecimiento por haberme querido. Adrián Valdealdea, 26 de febrero de 1940 Querido Adrián: Confío que al recibo de la presente hayas recapacitado y te encuentres más optimista. No tengo otro remedio que regañarte seriamente. Estás empeñado en verlo todo negro. La gente del pueblo no es mala, te lo demostró con creces cuando llegaste. Nadie te humilló a pesar de que todo el mundo sabía que te habías criado en el orfelinato y 35 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági ANA MARÍA MARTÍN que los estudios te los habían pagado las instituciones de caridad. Culpa tuya fue ser desagradecido y defender con ardor lo que todo el mundo sabía que se estaba hundiendo. No todos los locos como tú han salido bien parados de este infierno que, afortunadamente, ha terminado. Piensa que, a fin de cuentas, tú regresaste del frente. Por otra parte, ya sabes que don Amalio se lleva muy bien con mi padre. Han hablado de ti, don Amalio ha dicho que te aprecia, que no toma en cuenta tus errores pues comprende que vienes del abandono, de la ayuda social, pero es preciso que transcurra un tiempo de recapacitación, que cumplas tu penitencia. Si aguardas paciente y te muestras razonable, si te acercas a confesar y a comulgar, volverás a tu escuela antes de lo que piensas y todo quedará olvidado. Mientras tanto, no ha de faltarte trabajo, pues, 36 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági EL SUEÑO DE LAS MANZANAS bien sabes que mi padre necesita brazos y buenos capataces en sus tierras. Pero me enfado contigo, Adrián. Me enfado porque creo que no sabes disfrutar la suerte de estar vivo y libre. Y la suerte de tenerme. Soy la mujer que te quiere y que se enamoró de los valores de tu corazón, aun sabiendo que te hace trampas la cabeza. Conozco tu forma de ser y trato de ser comprensiva con las tonterías que has hecho, con la que estás haciendo ahora, y con esas tristezas que te atacan de vez en cuando. Sin embargo, compréndeme tú a mí, a veces me hartas demasiado y casi me arrepiento de haberte ayudado. Deberías hacer un esfuerzo por mí, no imaginas, encima de tener que defenderte ante la gente cabal, el aburrimiento que me causan tus melancolías. Ya es tiempo de que aceptes que han vencido los vencedores, y que eso no tiene vuelta de hoja. 37 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági ANA MARÍA MARTÍN Quiero que regreses cuanto antes y que defiendas lo tuyo, hay algún galancito que desde que sabe que no estás me mira con ojos codiciosos. De modo que déjate ya de tonterías, y no hagas más sacrificios para demostrar las incomodidades que eres capaz de soportar. Mis dos dedos de frente me tienen que dar para enderezarte y, sobre todo, ya te digo, para ponerte a salvo de tu propia cabeza. Quiero que nos casemos enseguida y que tengamos un hijo. Ya verás cómo, cuando goces de la responsabilidad de tu propia familia, se te quitarán todas esas nostalgias insensatas. Mis padres y Julia (que escribe a mi dictado con la cara muy seriecita) también te recuerdan a ti con todo el cariño. Ya le he dicho a ella que te añada unas letras para terminar de hacerte entrar en razones, por si las mías no fueran suficientes. Y yo bien 38 04_EL SUEÑO DE LAS MANZANAS_03_Wanda_6.qxd 21/05/2012 13:52 Pági EL SUEÑO DE LAS MANZANAS sabes que te quiero y que me causa malestar tu tristeza a pesar de que eres tan bobo, tan teatrero, que no mereces ni que te lo diga. Águeda. P.D. Adrián, mientras pasaba a limpio, a solas en mi habitación, la carta que te dirige Águeda, he sentido tu presencia con una fuerza que me ha dejado sin aliento. ¿Recuerdas aquella noche? ¿Recuerdas que los demás se fueron a la misa del Gallo y tú y yo nos quedamos junto al fuego con aquel librito que trajiste? Aquel poema, Quiero dormir el sueño de las manzanas, Alejarme del tumulto de los cementerios… ¿Cómo seguía? No he podido sacar de mí la impresión de ese momento, es el más hermoso de mi vida. Por eso te suplico, aunque te parezca que se 39