Texto guía de la intervención de Eduardo Costoya, representando al Colegio de Ingenieros, en el Simposio de TV Digital en el Salón del Congreso Pleno en Valparaíso el 6 de agosto de 2010.- El Colegio de Ingenieros es una institución gremial-profesional dedicada al progreso de la Ingeniería y a la ética de la profesión. Sin fines de lucro y sin conexiones o compromisos con la industria de la TV, fabricantes o representantes de normas. Al Colegio de Ingenieros le preocupa el espectro Radioeléctrico, un bien limitado, que en la TV es progresivamente escaso e insustituible. Todo lo que hoy se ha abordado en este Seminario no tiene aplicación alguna si no hay espectro. Se ha mencionado que hay abundancia de espectro pero los estudios realizados por el Colegio indican que puede haber situaciones críticas, especialmente durante el simulcasting con la convivencia de las tecnologías analógicas y digitales. Y se debe tener conciencia que quien tiene la facultad de otorgar espectro, en la práctica determina quien hace o no hace TV. En la actualidad la concesión de de TV es una sola, otorgada por el CNTV, e incluye ambas actividades: generar una programación y emitirla al aire mediante ondas radioeléctricas. El proyecto actual para hacer lo mismo requiere dos concesiones: La concesión para la generación de programación, que utiliza: cámaras, grabadoras, estudios, exteriores, etc. no utiliza ondas radioeléctricas en ninguna de esas instancias, sin embargo el proyecto lo define como RADIODIFUSIÓN TELEVISIVA, un error semántico similar a definir el transporte de pasajeros por bus como Transporte marítimo de buses a Rancagua. En un caso uno puede preguntar ¿Dónde está el mar? y en el otro ¿Dónde están las ondas radioeléctricas? Pero además de ser un error semántico contradice explícitamente las definiciones de las legislaciones nacionales e internacionales: 1) Ley General de telecomunicaciones 02.10.1982, hoy vigente 2) Plan General de uso del espectro radioeléctrico 06.03.2006 3) Cuadro de atribución de bandas de frecuencias 09.10.2007 4) Unión Internacional de Telecomunicaciones UIT 5) Organización para la Protección de la Propiedad Intelectual OMPI 6) Diccionario de la RAE 7) La definición de las Administraciones de Telecomunicaciones de todos los países. De aprobarse el Proyecto tal como está, Chile sería el único país del planeta en llamar “Radiodifusión” a lo que no lo es. Y no es solamente un error semántico, como veremos. Sin embargo ese no es el único error semántico en el Proyecto de Ley ni el más preocupante. A la emisión de ondas radioeléctricas al aire, las que ahora sí efectivamente son Radiodifusión Televisiva, la llama “SERVICIO INTERMEDIO”, contradiciendo decisivamente la definición de Servicio Intermedio, servicio que figura en la Ley de Telecomunicaciones pero con una definición y finalidad absolutamente distinta de la utilizada en el Proyecto. Por la limitación del tiempo no voy a leer las definiciones mencionadas pero estoy a disposición de quien quiera a proporcionarle, aquí y ahora, las presentaciones al respecto que hemos hecho a la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara. Al las que no se oyó…. Padre. ¿Estamos entonces en presencia de errores semánticos, o hay algo más? ¿Es dable pensar que una entidad, especialista en el tema y que redactó el Proyecto en el 2008, no conocía o no comprendía las definiciones de la Ley, de la UIT, de la OMPI, RAE, etc?..... Parece improbable. El Proyecto de Ley en su redacción original especifica que las concesiones, mal llamadas “Servicio Intermedio” o sea concesiones del limitado y progresivamente escaso espectro, serán otorgadas por el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, en la práctica SUBTEL, lo que desde ya es preocupante. Pero al revés de las concesiones de Generación de Programación, también mal llamadas Radiodifusión Televisiva, para las cuales se pone una cantidad de limitaciones en el artículo 15, siendo que son un bien ilimitado; el articulado 31A, que se refiere al espectro, es espartano en limitaciones o condiciones. No define la cantidad de concesiones que un mismo operador puede tener en la misma zona de cobertura – en la actual ley sólo una- ni límites en la extensión de éstas. Pero en la Ley de Telecomunicaciones el “Servicio Intermedio” real, el de verdad, es otorgado por el MTT, o sea SUBTEL, y no tiene ningún tipo de limitaciones en la cantidad que puede tener un mismo operador en la misma zona de cobertura ni limitaciones de esas zonas. El Senador Cantero, en su presentación de hoy, resaltaba que en la ley se cautelaba la no concentración de las concesiones, sin embargo sólo se está cautelando la concentración de la Generación de Programación, bienes no limitados y, por el contrario, facilitando la concentración en el bien escaso como lo es el espectro. Resumiendo. El Proyecto tal como está retira la facultad de otorgar concesiones de espectro desde el CNTV, un organismo de Estado, de rango constitucional, autónomo, con un directorio nombrado por el Presidente de la República con consulta al Senado, con el mandato que sea pluralista, además de tener el CNTV en el Proyecto la obligación de rendir anualmente cuentas a este Senado, y en cambio, entrega esa facultad a una entidad de Gobierno, sin ninguna de esas limitaciones u obligaciones, ni siquiera la de dar explicaciones. ¿Cuál es la solución? Muy fácil y sólo toma 20 segundos en un procesador de texto. Sustituir en el Proyecto la totalidad de los términos “Radiodifusión Televisiva” por lo que realmente son: “Generación de Programación” u otro término veraz y apropiado; y también sustituir la totalidad de los términos “Servicio Intermedio” por el correcto: “Radiodifusión Televisiva”. De ahí en adelante los legisladores podrán continuar en su labor de hacer una buena ley, pero basados en definiciones verdaderas que no induzcan a errores. Sólo así se podrá construir una Ley que tenga sentido y futuro. Nota 1.- Lo anterior es el texto guía de apoyo que tuve en mi laptop frente a mí durante mi presentación en el Bloque 4 del Seminario de TV Digital en el Salón Pleno del Congreso el 06.08.2010. Obviamente la exposición verbal real tuvo algunas diferencias, ya sea omisiones, sustituciones o adiciones a este texto. Se puede estimar que más del 90% fue literal. Nota 2.- Terminadas las presentaciones de cada uno de los cuatro panelistas en ese orden: Plass, Costoya, Moreno y Pandolfo; el Moderador: Pedro Huichalaf, hizo dos preguntas recibidas por Twitter o mail a los panelistas. (Consigno las preguntas y mis respuestas no literales, si no que de memoria) Pregunta 1.- a) Considerando la experiencia de Brasil y Argentina con el Middleware Ginga, ¿se aplicaría en Chile? b) ¿Es posible tener TV 3D con la norma ISDB-T? Mis respuestas a) Parafraseando al ex Senador Fernando Flores, me parece que el Ginga es “Un futuro que ya pasó”. La TV híbrida y la convergencia TV-Internet son los medios actuales y futuros para los servicios interactivos. b) La pregunta sobre 3D en ISDB-T es irrelevante ya que la norma que se adoptó en Chile es la norma brasilera SBTVD y no la japonesa ISDB-T y constituyen normas diferentes. Al principio en Brasil se mencionó que la norma brasilera era “Sistema Brasileiro de TV Digital (SBTVD), después se empezó a mencionar en Sudamérica que era “japonesa con las modificaciones de Brasil”, para terminar ahora con Japonesa ISDB-T a secas. No entiendo entonces a los amigos brasileros (estaban en la misma mesa) que son tan orgullosos – legítimamente – de sus logros, accedan que a su hijo le pongan el nombre del abuelo y no el del padre. Pregunta 2.- ¿Es posible adelantar el apagón analógico? ¿Será posible fabricar equipos en Chile? Mis respuestas c) El apagón analógico lo van a decidir los consumidores y no la regulación. Si las audiencias compran suficiente cantidad de receptores digitales para que sólo quede una minoría pequeña analógica, es posible adelantar el apagón analógico. Pero si eso no se da, no queda otra alternativa que postergarlo, como ha sucedido en varios países. d) Realmente no tengo información si existen las economías de escala como para una producción nacional. Ing. Eduardo Costoya Arrigoni 10 de agosto de 2010.-